El bien común, espacio público y político

Prof. Lic. Juan F. Herreros Rodríguez.

 1.  El Bien Común

El concepto de “bien”, en general, implica una relación de convivencia y, por lo mismo, de deseo: aquello que se apetece, porque existe afinidad entre sujeto y objeto. “Bien, es aquello que todos desean”, decía Aristóteles.

El bien común no es simplemente el bien público, ni la propiedad colectiva de determinados bienes, sino aquel bien que trasciende los bienes particulares (Platón) y que las sociedades organizadas se comprometen a garantizar a sus ciudadanos para su bienestar y felicidad (Aristóteles).

ASPECTOS DEL BIEN COMUN

Cuatro aspectos son importantes al considerar el bien común:

a)      Se trata de un bien social humano;

b)      Superior al bien de los individuos particulares;

c)      Que cohesiona a la comunidad social;

d)    Y que la proyecta creativamente hacia el futuro.

Las sociedad es como los hombres y los animales, desean el bien y rechazan lo malo, aquello que no les conviene. La diferencia entre el hombre y los animales está en que aquél, por su inteligencia, puede ver más lejos que éstos, y detectar que algo, aparentemente malo es, por el contrario, conveniente. La captación del “bien común”, por vivir en sociedad, implica ya un desarrollo humano sofisticado, en que, más allá del propio inmediato, se logra ver la conveniencia o inconveniencia de algo para el conjunto de la sociedad.

EL BIEN COMÚN DEPENDE DE LA COMUNIDAD Y LA

ORGANIZACIÓN. Por lo tanto, el bien común varía según la finalidad propia de

la organización o comunidad, por lo que este concepto dice también guarda relación a una finalidad o “función” de la organización social. Muy bien lo expresa Walter Brugger, al considerar que el bien común consiste en una “misión peculiar por la cual existe” cada sociedad.

“Dicha misión –explica- debe consistir, evidentemente, en un bien (o conjunto de bienes) que ha de conseguirse mediante la actividad del ente colectivo, y de manera que no solo reporte beneficios a éste en cuanto tal, sino que en último término beneficie a sus miembros”.

“El bien común –concluye Brugger- es un estado o situación social que, por encima de todo, garantiza a cada uno el lugar que le corresponde en la comunidad”. El bien común de una determinada sociedad u organización dependerá, pues, de las tareas o finalidad que esa sociedad u organización se hayan propuesto.

LA VISIÓN DEL BIEN COMÚN DE LA IGLESIA

CATÓLICA Para la Iglesia Católica,

el bien común es “el conjunto de condiciones de la vida social que posibilitan, tanto a los grupos como a sus miembros, el logro más pleno y más fácil de la propia perfección”.

Y más en detalle: “Conviene, pues, que se facilite al hombre todo aquello que le es necesario para llevar una vida verdaderamente humana, como son el alimento, el vestido, la vivienda, el derecho a elegir libremente el estado de vida y a fundar una familia, a la educación, al trabajo, a la buena fama, al respeto, a una adecuada información, a obrar conforme a la recta norma de su conciencia,

a la protección de la vida privada y a la justa libertad también en materia religiosa”.

2. El espacio público

Ernest Manhein (1923) en su libro opinión pública utilizó el término “ Status público”, se refiere al ámbito particular de estatus sociológico, donde hace una distinción entre espacio público y espacio social, teniendo para ello un ámbito específico en la opinión pública.

Habermas sustituye la expresión en Alemán de offentliche meinung (opinión pública) por la offentlichkeit (espacio público).

Otto Bauhmaeur ayuda a comprender con mayor detalle la configuración de tal espacio, señalando que se omite muy a menudo el hecho que la opinión pública esta sujeta a la transformación constante. Los inputs( información de entrada) son las opiniones publicadas.

Esto sigue un hilo conductor y ceda una disputa entre las opiniones existentes hasta la transformación del clima de opinión donde surgen las opiniones prevalecientes y es de ahí de donde surgen los outputs la información de salida que retroalimenta todo el sistema.

INPUT OUT

PUT

.

TRANSFORMACIÓN DEL CLIMA DE OPINIÓN

Herbert Blummer: “la opinión se forma y se expresa a través de los canales del funcionamiento social. Por lo tanto no consiste en un fenómeno segregable de la propia estructura social. Richard Senett en su libro el declive del hombre público detecta características definitorios del ámbito público, como un territorio o geografía diferente del espacio genérico, donde lo público aparece como opuesto a lo privado en un sentido Psico-social, pues en su sentido jurídico sería lo opuesto a lo íntimo.

El espacio público no esta del todo confundido con el espacio social en general y su elemento de diferenciación lo constituye la audiencia ¿Cómo generar una determinada credibilidad consideración o interés hacia la propia persona en un medio de extraños?. El cambio de ámbito de las audiencias contemporáneas es de otra índole precisamente por lo global, se tiene como medidor a la publicidad, pues lo que se muestra en público tiene una audiencia de millones.

El espacio público es un ámbito peculiar de lo social que no sólo se da ante un grupo de extraños más o menos numerosos, si no que tal presentación puede ser mostrada a toda la sociedad en su conjunto, con la posibilidad que lo representado sea motivo de atención global y ello pueda generar atenciones o comentarios múltiples de cualquier sujeto individual o colectivo de esa sociedad.

Esto es lo que llamamos notoriedad pública que justamente alcanzan las celebridades del deporte y el espectáculo sin ser consideradas por ello personas públicas como si lo son los políticos y los protagonistas de temas de interés público.

Siempre ha existido un ámbito o anillo intermedio, ajeno a lo privado, dentro de lo social, pero no confundible directamente con este último. La actuación social de la persona tiene una dimensión interna (privada o interpersonal) y otra externa (relación social indeterminada) y es en este anillo intermediario donde el espacio público o esfera pública se manifiesta y da origen a otro espacio que es el político.

Espacio Público Espacio

Privado

Espacio social

3. El espacio político Las alocuciones de una conferencia de prensa, la

transmisión en cadena el parlamento, el acto político marcaban el rumbo de los acontecimientos. Este espacio público político y lo que es el discurso político se esta perdiendo en sus términos tradicionales tal como estamos habituados a considerarlo, se manifiesta cada vez menos, salvo en el caso de los anuncios significativos.

La personalización de la política

Nos habituamos más bien a ver diariamente a candidatos y funcionarios en el ruedo televisivo, en paneles y mesas de debate donde parecen equiparse, las investiduras a veces con las del periodista/ conductor.

En la acechanza sobre sus mínimos gestos palabras, crispaciones del cuerpo, en la búsqueda de la verdad, es aquí donde pueda establecerse el nexo más estrecho entre la privacidad, la intimidad, lo público y lo político podría homologarse a lo que conduce a la personalización de la política. A la imposición publicitaria de la imagen del candidato o funcionario en su “carisma”, sus dotes personales su cuerpo como espacio reactivo y sensible al ojo de la cámara.

Esta problemática,es indisociable de la creciente relevancia que la vida privada asume en el espacio público político. La insistencia de la biografía, el anecdotario,el relato autorreferencial, la vida familiar, como por otra parte la persecución de la cámara sobre el desliz, el afloramiento del ceremonial, la escena íntima, van más allá de un mero voyeurismo.

Se trata de un debate que trata del debilitamiento de lo programático, la difuminación de las identidades políticas tradicionales y de la búsqueda del bien común . Tanto de los partidos como de los candidatos que traspasan su celebridad a un nuevo campo, a la crisis de representación y de lo representable, a las formas actuales de relación entre gobernantes y gobernados.