57REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
DESARROLLO COMUNITARIO Y CALIDAD DE VIDA1
Ana Teresa López de LlergoLuz María Cruz de Galindo
RESUMENEste escrito relaciona el proceso de desarrollo de una co-
munidad con las distintas categorías que expresan la calidad
de vida. Considera al desarrollo comunitario como un proce-
so que beneficia a cada miembro de la comunidad y la comu-
nidad en su conjunto. Esto es posible siempre y cuando se
respete su característica fundamental: la participación activa
de los destinatarios que se convierten, así, en actores de su
propia mejora. Pero tal desarrollo requiere de un marco
conceptual que proporcionará la dirección del proceso y sus
metas a corto, mediano y largo plazo. La finalidad última del
proceso es el logro de una calidad de vida que no se refiera
únicamente a aspectos económicos sino que considere la
integralidad del ser humano.
1. DEFINICIÓN DE CONCEPTOS: COMUNIDAD,DESARROLLO, DESARROLLO COMUNITARIO,ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL Y CALIDAD DE VIDA
1.1. COMUNIDADLa palabra comunidad denota la cualidad de común, o
bien la posesión compartida de algo (propósito, espacio terri-
torial, etcétera). Hay variadísimos tipos de comunidades según
se clasifiquen por tamaño, ubicación, manera de satisfacer sus
1 Ponencia presentada en la tercera edición de la Universidad InternacionalCiencia y Vida, Conciencia Cívica y Vida Digna para Todos, México, D.F. del23 al 27 de agosto de 2000.
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requerimientos, comunicaciones... Pero todas ellas –para
serlo– han de poseer ciertas características2:
• Disponer de un área geográfica definida.
• Que entre sus miembros existan lazos de parentesco.
• Compartir los mismos intereses.
• Tener antecedentes comunes y participar de una misma
tradición histórica.
• Que cada uno considere los problemas de la comunidad
como propios: sentido de pertenencia al grupo.
• Relaciones cara a cara entre los miembros de la comunidad.
• Ser tributarios de un cuerpo de instituciones y servicios.
La interacción se da dentro de las comunidades y por las
interrelaciones de unas con otras. Esto origina, en cada caso,
una estructura sociocultural y un modo concreto de satisfacer
todo tipo de necesidades.
Las unidades sociales se clasifican en grupos primarios o
básicos —familia, amigos, compañeros— y secundarios
—barrio, escuela, parroquia, club—. Ambos tienen como te-
lón de fondo la sociedad global. La persona vive dentro de los
grupos primarios, y completa su socialización participando en
los secundarios. La comunidad es un grupo secundario. Frente
a la sociedad fría e impersonal, la comunidad está formada
por instituciones e individuos con los cuales nos relacionamos
—directa y afectivamente— y compartimos valores dentro de
un espacio vital común en el que participamos de ciertas
vivencias colectivas.
Ahí se aglutinan intereses y emociones que conforman el
sentimiento comunitario y favorecen la cohesión social. La
comunidad es —para las personas y los grupos— una impor-
tante unidad de vida y de relación, que complementa nuestra
identidad personal, nos da identidad social y nos proporciona
servicios y, con ello, seguridad3.
2 ESCALANTE F. Rosendo et.al., Investigación, Organización y Desarrollo dela Comunidad, p.34.3 Cfr. QUINTANA CABANAS, José María. Los Ámbitos Profesionales de laAnimación, p.69 y ss.
59REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
Comunidad es una agrupación o conjunto de personas que habi-
tan un espacio geográfico delimitado y delimitable, cuyos miem-
bros tienen conciencia de pertenencia o de identificación con
algún símbolo local y que interaccionan entre sí más intensamente
que en otro contexto, operando en redes de comunicación,
intereses y apoyo mutuo, con el propósito de alcanzar determi-
nados objetivos, satisfacer necesidades, resolver problemas o
desempeñar funciones sociales relevantes a nivel local4.
Una de las comunidades más interesantes es el municipio,
pues constituye un conjunto organizado de servicios y tiene
representatividad y libertad de acción. Su estructura social no
es horizontalmente plana, hay una dimensión vertical —la
estratificación social— que diferencia a sus miembros en
términos de superioridad, inferioridad e igualdad5. Esta
valoración coloca a las personas en distintas capas o estratos
y es una de las oportunidades para ejercer el liderazgo.
1.2. DESARROLLOEn sentido lato, desarrollo significa crecimiento, progreso, in-
cremento con incidencia en lo personal y comunitario. Se trata
de un desarrollo armónico si un nivel complementa al otro, y es
muy importante vincular ambos. La historia ha demostrado que
esta posición no es fácil —especialmente en la práctica—, pues
se tiende a enaltecer los derechos individuales o a negarlos por
completo para fortalecer al grupo. En el primer caso se propicia
el individualismo; en el segundo, el colectivismo.
Cuando el desarrollo se refiere a los hechos sociales6,
hablamos de un movimiento que alude no sólo al aspecto
económico, sino a todo lo relacionado con los ámbitos de la
cultura, materiales, afectivos y espirituales. En el plano material
4 ANDER-EGG, Ezequiel. Metodología y Práctica del Desarrollo Comunitario.¿Qué es el Desarrollo de la Comunidad?, Vol. 1, p.33, 34.5 Cfr. ESCALANTE-MIÑANO. Op. cit., p.66.6 Cfr. Idem, p. 69, 70.
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significa soporte técnico, civilización y desenvolvimiento eco-
nómico, para elevar el nivel de vida de los distintos sectores
que la componen. En lo espiritual implica movilidad cultural,
desenvolvimiento de la organización social y ampliación de
los horizontes científicos, filosóficos y artísticos.
1.3. DESARROLLO COMUNITARIOEn 1956, un grupo de expertos de las Naciones Unidas, en
la considerada Carta Magna del Desarrollo de la Comunidad,
nos señala que tal desarrollo se relaciona con: «aquellos
procesos en cuya virtud los esfuerzos de una población se
suman a los de su gobierno para mejorar las condiciones
económicas, sociales y culturales de las comunidades, integrar
éstas a la vida del país y permitirles contribuir plenamente al
progreso nacional»7.
Carolina Ware (1954) habla de «un proceso para suscitar
grupos funcionales de ciudadanos capaces de ser agentes ac-
tivos y responsables de su propio progreso, usando para ello
como medios, la investigación en común de los problemas lo-
cales, el planeamiento y la ejecución por sí mismos de las so-
luciones que antes convinieron, y la coordinación voluntaria
con los demás grupos y con las autoridades oficiales, de
modo que se obtenga el bienestar total de la comunidad»8.
Sobre la base de las definiciones anteriores y los cambios
que a lo largo del tiempo se han dado en esta forma de inter-
vención social, podemos afirmar que el desarrollo comunitario
es un proceso que suma los esfuerzos de los pobladores de
una región, de los grupos intermedios —escuelas, empre-
sas, clubs, etcétera— y del gobierno, para mejorar las
condiciones económicas, sociales y culturales de las
comunidades, mediante el diagnóstico, plan, ejecución y
evaluación de programas y proyectos para este fin.
7 Cfr. ANDER-EGG, E., Reflexiones en torno a los Métodos del Trabajo Social, p.47. 8 ANDER-EGG, E. Idem, p.48.
61REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
En los años noventa9 ya no se habla del papel del desarrollo
de la comunidad en la planificación y ejecución del desarrollo
nacional, pues cuando los programas se orientan a poblaciones
de menos ingresos o marginadas, la preocupación central es
promover estrategias de supervivencia, más que hacer una
contribución al progreso nacional. Actualmente las pretensio-
nes son más modestas y realistas: ver en qué forma, cómo y
con qué proyectos específicos articular esta metodología en la
acción local. El desarrollo comunitario se visualiza hoy como
una manera de sensibilizar y motivar a las personas para que
participen en la solución de sus problemas, y como forma de
devolver parcelas de la gestión pública al ámbito de la
sociedad civil.
Es por tanto un movimiento mundial10 con características
especiales para cada país. Como proceso tiende al mejora-
miento colectivo de la comunidad, a través de la promoción
individual y solidaria de sus integrantes para un fin común;
como técnica, se sustenta en las ciencias sociales: Economía,
Demografía, Sociología, Antropología, Historia, Psicología y,
fundamentalmente, en el conocimiento del proceso educativo.
Su acción es multifacética y se expresa en programas cuya
finalidad es lograr mejoras concretas. Más que una acción
sobre la comunidad, es una acción de la comunidad. Se trata
de esfuerzos y acciones de base organizadas con la iniciativa
y dirección de los mismos involucrados, aunque para su
despegue se necesiten agentes externos, y durante su ejercicio,
asistencia técnica.
Cuando esta actividad se sustenta en el proceso educativo,
provoca la toma de conciencia del ineludible papel que se ha
de desempeñar, apoyándose en las potencialidades latentes
de individuos, grupos y comunidades. Así, la educación pue-
de ayudar a satisfacer necesidades cotidianas de la comunidad
y favorecer su desarrollo, a través de un aumento cualitativo
9 Cfr. Idem, Metodología y Práctica del Desarrollo de la Comunidad, p.118, 119.10 Cfr. ESCALANTE, F. Op. cit., p.78, 79.
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y cuantitativo de conocimientos teórico-prácticos que permi-
tan a los integrantes del grupo social mejorar sus condiciones
de vida. La finalidad será lograr modos de participación que
culminen en una organización autogestionaria donde, en el
ámbito local y de organizaciones, las personas sean responsables
de su proceso de mejora.
La parte operativa —métodos y técnicas de actuación— ha
de contar con recursos pedagógicos y didácticos para provo-
car y estimular el cambio individual y sociocultural. La idea es
fortalecer el sentimiento comunitario y capacitar a cada cual
para el esfuerzo cooperativo, con el fin de superar limitacio-
nes —personales y sociales— y actualizar posibilidades. Por
eso, la actitud con que se llevan a cabo los proyectos y la
forma de emprender el trabajo, son más importantes que el
contenido material de los mismos.
Existen dos elementos esenciales en esta práctica social:
1. La participación activa y solidaria de la población para
mejorar su calidad de vida.
2. La intervención de instituciones gubernamentales, no
gubernamentales y voluntarias, para suministrar ayudas de
todo tipo que aumenten la eficacia y capitalicen el esfuerzo
y el trabajo de los integrantes de la comunidad.
Sin embargo, es importante evitar dos suposiciones
erróneas11:
• Que las comunidades son realidades homogéneas con
intereses compartidos por todos sus miembros.
• Que todas las personas quieren mejorar su comunidad y
porporcionan los medios para ello.
En un mismo ámbito territorial, pese al sentido de identi-
dad y pertenencia, hay diversidad de actores —individuos,
grupos, organizaciones y redes— que se expresan en una
gran variedad de modos de actuar y de intereses contrapuestos.
En el trasfondo de todo ello subyacen las clases sociales.
11 Cfr. ANDER-EGG, E.Metodología y Práctica del Desarrollo de la Comunidad, p.99.
63REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
«Consenso y conflicto, cooperación y disociación se dan indefec-
tiblemente a lo largo de los procesos de acción comunitaria»12.
La participación será una realidad si se neutralizan las fuerzas
negativas, prevalece lo común y hay grupos —institucionales,
naturales, formales, informales, etcétera— a los que todos tengan
acceso, pues el trabajo comunitario es trabajo con grupos
que están unidos por objetivos comunes13. Cada grupo ha de
ser una unidad de trabajo con tareas concretas, pero abierto a
la acción comunitaria. Para ello hace falta un plan —apoyado
en un marco teórico referencial14 y en la investigación diag-
nóstica— que coordine y programe las distintas actividades
con el fin de lograr las metas propuestas. Así será posible ver-
tebrar a todos los grupos, con la ayuda de los líderes socia-
les, y producir un movimiento coordinado y total. Para elabo-
rar el plan —y los programas correspondientes— el punto de
partida es conocer lo mejor posible a la comunidad en la que
se pretende intervenir15. Se trata de un conocimiento que
lleva a la acción y se retroalimenta de ella. Por eso es necesario
vincular el marco teórico, la metodología y la actividad
práctica. Vale la pena insistir en algunos puntos básicos16
para que este proceso deje huella. Aunque se propusieron a
mediados del siglo XX, creemos que no han perdido actualidad:
• Las comunidades pueden desarrollar la capacidad para
resolver sus problemas.
• Las personas quieren y pueden cambiar.
• La gente debe participar en los cambios que se realizan en
sus comunidades.
12 ANDER-EGG, E. Idem, p.100, 101.13 Cfr. KISNERMAN, Natalio. La Comunidad, p.75.14 El marco teórico delimita conceptos y señala los ámbitos de la praxismetodológica.15 Es muy recomendable que los primeros proyectos busquen satisfacer losdeseos expresados de la población. Hay que distinguir también entre lasllamadas necesidades sentidas y las reales.16 Cfr. MURRAY G. Ross. Community Organization. Theory, Principles and Practi-ces, en ANDER-EGG, E. Metodología y Práctica del Desarrollo Comunitario, p.57.
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• El autodesarrollo de una comunidad tiene un significado
diferente al de los cambios impuestos.
• Para un buen trabajo comunitario hay que hacer un
abordaje holístico de los problemas; los abordajes
fragmentarios son poco eficaces.
• La democracia requiere participación y acciones de coope-
ración en los asuntos de la comunidad; las personas deben
prepararse para hacer esto posible.
• Las comunidades y los individuos necesitan ayuda externa
para afrontar la solución de sus problemas y necesidades.
Lo importante es que la responsabilidad personal se con-
vierta en responsabilidad social, sin perder aquélla, y se ex-
prese tangiblemente en la calidad de vida. Así, la promoción
del desarrollo se llevará a cabo en un clima de respeto a los
valores y a las tradiciones del contexto cultural de cada
nación, y sin violentar su legítima soberanía.
1.4. ANIMACIÓN El término —sinónimo de vitalización— viene de la pala-
bra anima que significa vida. La realidad de la animación es
esencial en el ser humano y ha de proyectarse en lo social.
Los ámbitos de la animación se clasifican según17:
1. Los destinatarios o grupos sociales a los que se dirige:
niños, jóvenes, adultos, campesinos, etcétera.
2. Los territorios o lugares donde se pretende introducir: barrios,
municipios, asociaciones voluntarias, escuelas, centros cívicos.
3. Los hábitats humanos o territorios diferenciales: medio
rural, urbano, lugares de vacaciones...
4. Las actividades: artísticas, culturales, sociales, políticas.
5. Los objetivos que la actividad animadora pretende fomen-
tar: promoción cultural, desarrollo social y económico, cul-
tivo de las tradiciones, cambio social, expresión personal,
creatividad artística.
17 Cfr. QUINTANA CABANAS, José María. Op. cit, p.11.
65REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
Por ejemplo, puede hablarse de una animación dirigida a
todas las personas —independientemente de su sexo, edad,
formación académica— ubicadas en un municipio del medio
rural, para promover actividades que favorezcan el desarrollo
socioeconómico y cultural de la comunidad en cuestión.
No se trata de que los proyectos de animación sean espec-
taculares. Lo importante es mejorar la vida cotidiana a partir
de lo que es posible. En todos los casos, el animador tiene
más movilidad para la acción comunitaria cuando logra armo-
nizar y coordinar los intereses particulares y colectivos, la
identidad individual y los procesos sociales, el altruismo y el
egoísmo que coexisten en una misma persona o grupo. Para
ello, ha de buscar la colaboración de ciudadanos sensibles,
conscientes, responsables y dispuestos a dedicar parte de su
tiempo a prestar un servicio comunitario18.
1.5. ANIMACIÓN SOCIOCULTURALEs un conjunto de técnicas sociales que, basándose en una
pedagogía participativa, promueve actividades voluntarias
—de tipo sociocultural— en el seno de un grupo o comunidad,
para favorecer su desarrollo y una mejora en su calidad de vida 19.
Es una actividad relacionada con una serie de prácticas desti-
nadas a generar estilos de participación sociocultural en el
mayor número posible de personas. Surge como un procedi-
miento adecuado para sensibilizar e impulsar hacia las tareas
de educación, y defender la identidad personal y colectiva.
Con ella se pretende que los integrantes de la comunidad rea-
licen actividades que favorezcan su proceso de educación
continua. Lo importante, más que la actividad en sí, es la
intencionalidad y la actitud de los participantes.
18 El éxito del animador dependerá de la capacidad de establecer y guardaruna distancia óptima entre él y la comunidad: involucrarse sin perder laperspectiva.19 Cfr. ANDER-EGG, E. Metodología y Práctica de la Animación Socio-cultural, p.91.
66
1.6. CALIDAD DE VIDA
Cada comunidad presenta un grado de desarrollo20 que no
es estático. Dentro de ella se originan múltiples cambios que
han de identificarse y estudiarse —con instrumentos metodo-
lógicos oportunos— para dirigirlos y organizarlos según un
plan cuya finalidad no sea el mero bienestar social (progra-
mas, prestaciones y servicios para proveer los satisfactores
básicos), sino el logro de una mejor calidad de vida.
El término calidad de vida se pone de moda en los años se-
senta, como respuesta al deterioro económico y ambiental, efecto
no deseado de la industrialización. Se refiere no sólo a un estándar
económico, sino a la existencia de condiciones y posibilidades
reales para el desarrollo de toda persona, de toda la persona y
de todas las personas 21. En este punto es necesario evitar posturas
demagógicas que propongan un utópico modelo de desarrollo
lineal, o tener como meta alcanzar determinados índices
económicos de bienestar que ya otros han logrado...
Desde tal óptica el desarrollo comunitario tendría muy poco que
hacer, ya que (…) se trataría de una perspectiva fundamental-
mente exógena, asistencial, de mera financiación de un retraso
(denominado subdesarrollo) con la mirada puesta en unas metas
u objetivos (elevar la renta per capita) que tienen con frecuencia
poco que ver con la situación social, política y económica en que
vive una determinada comunidad y de la cual se deriva la
mayoría de las veces esa situación de retraso22.
Calidad de vida es un modelo alternativo de sociedad en
el que se da prioridad a la satisfacción de las auténticas necesidades
humanas, antes que a las exigencias de una economía floreciente.
20 El desarrollo se relaciona con el nivel de ingreso, los sistemas de produc-ción, la organización y movilidad social, los servicios públicos, los modos deconvivencia y de comunicación, etcétera.21 ANDER-EGG, E. Introducción al Trabajo Social, p.92.22 REQUEJO OSORIO, Agustín. Desarrollo Comunitario y Educación, enIniciativas Sociales en Educación Informal, p.351.
67REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
Tal modelo configura un tipo de ciudadano capaz de pensar glo-
balmente y actuar localmente23, gracias a su desarrollo espiritual
—expresado en un alto grado de cultura, efectividad en la orga-
nización social y amplitud de horizontes—, todo esto vinculado
al desarrollo material que implica un nivel de vida con soporte
técnico, notoria civilización y recursos económicos suficientes24.
Antes de referirnos a las categorías que expresan la calidad
de vida, presentamos un esquema que sintetiza los contenidos
fundamentales de lo expuesto hasta aquí:
ESQUEMA 1Calidad de vida personaly comunitaria(finalidad concreta).Se apoya en la dignidad humana.
Animación sociocultural (un medio: consiste en un proceso). Se apoya en la actividad y sociabilidad humanas.
Desarrollo comunitario(objetivo general: consiste en un plan). Se apoya en la sociabilidad.
Animación (característica esencial).Se apoya en la capacidad de actuar.
23 Se trata de dar más importancia a lo local y de insistir en que las propuestasde las políticas sociales atiendan a las necesidades y problemas de lossectores populares.24 Cfr. ANDER-EGG, E. Introducción al Trabajo Social, p.91 a 95.
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2. PRINCIPALES CATEGORÍAS 25 DE LA CALIDAD DE VIDAEs un hecho que, pese el razonable deseo de utilizar una
metodología cada vez más objetiva para medir y comparar el
desarrollo humano, las categorías de excelencia no siempre
son equiparables. No existe un camino trazado por el cual los
distintos grupos humanos hayan de circular —antes o
después, más rápido o más lento— para desarrollarse. Por
eso, las comparaciones más justas y reveladoras han de hacerse
por defecto: a mayor disfunción social, menor salud26.
Además, en el trasfondo de todos los indicadores están la-
tentes las necesidades de ser y de poseer, así como los satis-
factores que las cubren27. De esta manera, la permanencia y
subsistencia —necesidades de ser— se satisfacen con la ali-
mentación, vestido y vivienda; las de poseer, concretamente,
protección, afecto, entendimiento, participación y ocio, se
cubren, entre otros satisfactores, con la salud —individual y
social—, la educación y la investigación.
Adoptaremos algunas categorías28 para obtener indicios de
la salud social, entendida como la gradación de los estados de
felicidad colectiva o excelencia grupal en ámbitos sociales
—familia, asociaciones, comunidad, etcétera— donde más
fácilmente pueden optimizarse y minimizarse los conflictos 29.
Ciertas medidas investigan el defecto30, para calibrar la
cantidad y calidad de desviaciones percibidas como tales por
el entorno social31.
25 Las categorías se refieren tanto a realizaciones materiales como a cambiosde actitud.26 Cfr. PÉREZ ADÁN, José. La Salud Social, p.32.27 Cfr. COLOMER, Antonio (Coord.) Sociedad Solidaria y Desarrollo Alternativo,en LÓPEZ DE LLERGO, Ana Teresa, Valores, Valoraciones y Virtudes, p.139.28 Cfr. PÉREZ ADÁN, J. Op. cit, p.17 y 118 y ss.29 Cfr. Idem, p.14 y 15.30 Deben revisarse las conductas disfuncionales y desincentivarse, incluso conmedidas coercitivas.31 En Sociología, el estudio de la desviación ha de considerar conceptoscomo el de civilidad o derechos sociales.
69REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
1°. Equidad generacional: mide los índices de solidaridad en-
tre generaciones a través del examen de baremos de calidad de
vida y soporte afectivo próximo en la primera y tercera edad.
Señala la disfuncionalidad según el número de personas mayo-
res de 65 años que viven solas, y la equidad, de acuerdo con la
dedicación personalizada en número de horas, y de convivencia
que recibe cada menor de 15 años de sus padres y abuelos.
2°. Desigualdad: mide por un lado, los grados de bienes-
tar estandarizable y, por otro, los grados de seguridad proyec-
tados también en el futuro, a través de la esperanza de vida.
Se refiere a la esperanza de vida al nacer y a la esperanza de
vida total, así como al costo social familiar para la alimentación,
vivienda, infraestructura social, educación y sanidad.
3°. Deuda filial diacrónica: mide las acciones sociales de
efectos diferidos catalogados como perjudiciales (la cuantifica-
ción de la deuda ambiental). Aquí se suman: la conciencia
ecológica que se obtiene como dato disfuncional (negativo)
con la media de consumo de energía no renovable, per cápita
anual; más la media de desecho de acumulación dañina, per
cápita anual. Esto se suma al ahorro e inversión social fami-
liar, que propicia la creación de patrimonio, de dote y de se-
guros transmisibles donde los haya. El indicador nos da idea
de la razón social y del espíritu de comunidad que prevalece.
4°. Conciencia cívica: aquí se miden tres pautas sociales, la
corresponsabilidad fiscal y la prestación social, por un lado;
por otro, el respeto mutuo medible por defecto en el índice
de criminalidad (delitos legalmente considerados), y por ulti-
mo, la participación formal e informal en todos los ámbitos
sociales. Hablamos de participación económica que se expre-
sa en el dato disfuncional de la concentración de propiedad,
y de participación sociopolítica según el número de horas no
remuneradas dedicadas a actividades solidarias.
5°. Pluralidad: se mide por la presencia de asociaciones
representativas, y por la capacidad de libre adscripción y
circulación entre comunidades y sociedades intermedias, así
70
como la permeabilidad de las barreras sociopolíticas. Se suma
la movilidad social (variación de estatus de tres generaciones
en la misma familia) y la diversidad. Esta última comprende
tres variables: diversidad genérica (tareas domésticas realizadas
por varones), diversidad espacial (porcentaje de población
rural) y diversidad de origen (población foránea).
Si relacionamos las categorías propuestas por José Pérez
Adán con los conceptos definidos en esta investigación, ten-
dremos el esquema siguiente, elaborado por nosotros para
fines didácticos:
ESQUEMA 2
CATEGORÍAS ASPECTOS QUE BENEFICIOS QUE LAS CONFORMAN PUEDEN CONSEGUIRSE
Equidad Solidaridad Promoción de generacional intergeneracional: la calidad de vida
cuidado de los por medio deancianos y los niños. la familia soberana.
Desigualdad Bienestar presente. Promoción delEsperanza de desarrollo comunitariobuen futuro. al crear condiciones
que beneficien a todos, incluyendo a los no nacidos.
Deuda filial Cuidado del Promoción –a través diacrónica ambiente físico de la animación
y espiritual. sociocultural– de un entorno adecuado y ricoen cultura y tradiciones.
Conciencia cívica Corresponsabilidad Cristalización de lafiscal y prestaciones calidad de vidasociales. plena en el yoRespeto mutuo. individual.Participación formal e informal en todos los ámbitos.
71REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
Pluralidad Asociaciones Cristalización de laintermedias calidad de vida en representativas. el yo colectivo.Libre adscripción y circulación en las asociaciones.Permeabilidad para acceder a otros estatussocioeconómicos.
Ya hemos analizado los aspectos que conforman las cate-
gorías; ahora explicaremos los síntomas de salud social que se
expresan en beneficios individuales y colectivos, cuando el
balance de las categorías es favorable.
En relación con la equidad generacional, los cimientos de
la calidad de vida se dan gracias a la familia soberana, porque
ahí es real la diacronía entre ancianos y niños; se ofrece segu-
ridad actual a los miembros del grupo, y cobertura permanen-
te de las demandas afectivas. Todo ello favorece la civilidad
en los distintos ámbitos sociales.
En cuanto a la desigualdad32, la salud social se expresa en
el bienestar del colectivo humano porque para todos hay
alimentos, vivienda, infraestructura adecuada, educación y
servicios sanitarios. Además, tales satisfactores se proyectan
en el tiempo, pues existen los suficientes recursos —materiales
y humanos— para generarlos. Esto hace viable el desarrollo
comunitario.
La deuda filial diacrónica consiste en el compromiso del
cuidado del ambiente físico y espiritual para ofrecer un lugar
adecuado y rico en cultura y tradiciones, donde la animación
32 El factor condicionante más claro de desigualdad es la esperanza de vida,pero ha de contarse desde el inicio de la vida y no sólo desde el nacimiento.El peligro que amenaza la sustracción del tiempo prenatal del control sociales la aparición de una práctica médica fascista. Cfr. PÉREZ Adán, J. Op. cit,p.29 y 30.
72
sociocultural verdaderamente promueva el desarrollo. Los be-
neficios tangibles son la capacidad de ahorro e inversión eco-
nómica, y un entorno ecológico adecuado; los intangibles son
múltiples, como la preocupación por descubrir formas para
cuidar el ambiente, evitar la corrupción, pornografía, etcétera.
La conciencia cívica cristaliza el más alto nivel de desarro-
llo comunitario reflejado en la calidad de vida de ciudadanos
virtuosos con deseos de incorporar voluntariamente, a su que-
hacer cotidiano, actividades solidarias y desinteresadas. Esto
manifiesta la riqueza y plenitud del yo individual.
La pluralidad requiere de variadas asociaciones representati-
vas intermedias, y de flexibilidad para adscribirse a unas u otras,
de acuerdo con las cambiantes circunstancias de las personas.
Tales asociaciones han de33:
• Postular una cultura y una ética de solidaridad.
• Actuar en un plano democrático, tanto en la formulación
de sus objetivos como en la distribución de las responsa-
bilidades directivas.
• Hacer vivir una actitud de gratuidad a través del volunta-
riado y de las finalidades no lucrativas.
• Promover la capacidad de proyectarse para conseguir un
fin asumido como válido y mejorar a la comunidad,
mediante la acción directa, el control y la evaluación.
• Contrarrestar la politización, corrupción y apatía.
• Favorecer la obtención de recursos.
• Propiciar la participación de todos.
Para todo ello se requieren tres niveles de ciudadanos ac-
tivos: voluntarios, técnicos y expertos. Los principales criterios
de selección de voluntarios son la experiencia y competencia
profesionales, las cualidades humanas, el respeto a los demás
y la capacidad de convivir con otros. Así, la comunidad será
enriquecedora por las oportunidades que ofrece, y será tangible
y real la posibilidad de acceder a mejores formas de calidad
de vida. Esto dará plenitud al yo colectivo.
33 Cfr. QUINTANA CABANAS, José María. Op. cit, p.82.
73REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
En el esquema 3 presentamos algunas propuestas para que
el desarrollo comunitario incida en la calidad de vida
individual y grupal.
ESQUEMA 3
CATEGORÍAS PROPUESTAS
Equidad • Fortalecer –en el seno familiar–
generacional la identidad personal y social para
forjar ciudadanos seguros y solidarios.
Desigualdad • Promover una sociedad más humana
y civilizada, mediante la formación
de comunidades de ciudadanos
responsables, preocupados por el
bienestar social y atentos a resolver
problemas colectivos –presentes y
futuros– de un modo solidario. Han
de ser defensores de la vida humana
(vs. aborto y eutanasia).
Deuda filial • Superar las acciones ecológicas es-
diacrónica porádicas e inconexas, y promover
aquellas que benefician a todos en el
presente y el futuro34.
• Potenciar el cooperativismo, las
campañas informativas y las actividades
culturales. Favorecer la formación y
cohesión de grupos, la raigambre de
las personas con su medio, la afirma-
ción de la identidad cultural, la autosu-
ficiencia (por ejemplo, capacidad de
ahorro) en los principales ámbitos
de la vida, la motivación y el estímulo.
34 En un plan ecológico hay que promover el uso racional de los recursos de la co-munidad y la cooperación de todos. Tal cooperación debe ser estimulada y coordi-nada por el gobierno, pero no hay que esperar todo del Estado. Lo conveniente espreparar a la comunidad para organizarse y para aceptar las nuevas soluciones.
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Conciencia • Promover, mediante la participación
cívica ciudadana, la existencia de una política
social –incentivos fiscales, prestaciones,
etcétera– para mejorar la calidad de vida.
• Fomentar la actividad local sin
descuidar lo global.
• Evitar todas las formas de autorita-
rismo, paternalismo y manipulación.
• Transformar, desde abajo, la sociedad
política y desarrollar nuevos estilos de
vida, mediante la mayor participación
de la sociedad civil.
•Desincentivar coercitivamente con-
ductas antisociales (criminalidad,
etcétera).
• Impulsar la autosuficiencia a partir
de los recursos propios –personales
y comunitarios– bien explotados e
inteligentemente aprovechados.
(desarrollo endógeno vs. exógeno).
Pluralidad • Considerar factores estructurales y
socioculturales.
• Aprovechar símbolos, tradiciones,
folkore, efemérides, etcétera.
• Evitar la emulación indiscriminada
de patrones extranjeros y de índices
económicos que otros han logrado.
• Fomentar asociaciones –con estruc-
tura, continuidad, fines conscientes y
concretos– que encaucen la tendencia
natural de las personas a reunirse. Si
es posible, obtener un reconocimiento
jurídico.
75REVISTA PANAMERICANA DE PEDAGOGÍA
• Identificar y formar a los líderes, y
conocer su radio de influencia.
• Promover la participación ciudadana
en las formas de gobierno local, así
los cambios no serán bruscos sino
progresivos y reglamentados.
• Favorecer la participación de
mujeres y jóvenes. (amplía la base,
garantiza el progreso).
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