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  • Declaradas de inters cultural por el Ministerio de Cultura de la Presidencia de la Nacin, Resolucin N 2557/12

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    MEMORIAS DE LAS JORNADAS DE REFLEXIN ACERCA DE LOS PAISAJES CULTURALES DE

    ARGENTINA Y CHILE, EN ESPECIAL LOS SITUADOS EN LA REGIN PATAGNICA

    13 AL 15 DE JUNIO DE 2012 - RO GALLEGOS - SANTA CRUZ ARGENTINA

    Lic. Viviana Navarro - Dra. Silvana Espinosa (compiladoras)

  • Declaradas de inters cultural por el Ministerio de Cultura de la Presidencia de la Nacin, Resolucin N 2557/12

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    Paisajes culturales: Memorias de las Jornadas de reflexin acerca de los paisajes culturales de Argentina y Chile, en especial los situados en la regin Patagnica, Ro Gallegos, 13 al 15 de junio de 2012 / Compilado por Viviana Navarro y Silvana Espinosa. - 1a ed. - Ro Gallegos: Universidad Nacional de la Patagonia Austral, 2012.

    CD-ROM.

    ISBN 978-987-1242-71-9

    1. Patrimonio Cultural. 2. Turismo. 3. Patrimonio. I. Navarro, Viviana, comp. II. Espinosa, Silvana, comp.

    CDD 363.69

    Fecha de catalogacin: 11/09/2012

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    Indice ndice... 3 Prlogo 5 Las jornadas.. 6 Conclusiones. 10 Disertantes Invitados 13 DISERTACIONES

    Del paisaje natural al cultural, una historia de 4 siglos. Consideraciones sobre Buenos Aires, Paisaje Cultural Evolutivo. Arq. Carlos Moreno.

    18 El paisaje cultural: hacia una integridad sostenida en la gestin del patrimonio. Lic.

    Roberto Molinari APN.

    35 Arquitectura rural menor: un rasgo distinto para comprender el paisaje cultural en la

    estepa austral. Dr. Mateo Martinic Beros UMAG

    44 La proteccin del territorio como paisaje cultural: el caso de la Quebrada de

    Humahuaca en Jujuy. Olga Paterlini de Koch - Universidad Nacional de Tucumn...

    48 Patrimonio intangible. De la compleja diversidad cultural a la unidad metodolgica.

    Mabel Ladaga..

    72 Los paisajes culturales en Chile y sus desafos. ngel Cabeza M., Carlos Weber B.,

    Mireya Danilo B. Universidad de Magallanes.

    76 Paisaje cultural y turismo: tendencias y desafos. Lic. Viviana Navarro (UNPA-UARG).. 87

    PONENCIAS N 1 - La construccin de un paisaje cultural: el aporte del Convento de San Carlos en

    San Lorenzo. Dr. Arq. Roberto De Gregorio; Dra. Arq. Anala Brarda...

    94 N 2 - Territorio Mapuche Lleulleuche: naturaleza territorial y conflicto con el estado

    chileno. Sebastin Llantn Rivas; Jimena Hevia Riera

    107 N 3 - Rastreando huellas: la dinmica del paisaje en La Paciencia, Tierra del Fuego.

    Macarena Paz Fernndez Gnova.

    133 N 4 - La impronta de la migracin chilena durante el siglo XX en el paisaje urbano de

    la ciudad de Ro Gallegos. Los barrios Belgrano y Nuestra Seora del Carmen como paisaje cultural urbano. Cristian Ampuero; Mnica Norambuena; Martn Segovia

    162 N 5 - Identidad y territorialidad en un paisaje ritualizado. Las sierras de Lihu Calel,

    La Pampa, Argentina. Mnica Alejandra Bern; Rafael Pedro Curtoni.

    180 N 6 - El litoral atlntico fueguino como paisaje arqueolgico. Vzquez Martn; Myrian

    lvarez; Ramiro Barberena; Karen Borrazzo; Luis A. Borrero; Jimena Ora; Monica Salemme; Fernando Santiago..

    195 N 7 - Paisajes con araucarias en Sudamrica: construcciones culturales pre-

    colombinas y del presente para produccin de alimento. Maurcio Sedrez Dos Reis;

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    Ana Ladio. 224 N 8 - El uso de la piedra en el paisaje cultural de Somoncur. Dbora Finkelstein;

    Mara Marta Novella

    245 N 9 - Patrimonio arqueolgico rupestre y turismo. Mag. Mnica Beatrz Gels... 262 N 10 - Para m esto es patrimonio: construccin discursiva del paisaje cultural en

    la Quebrada de Humahuaca, Provincia de Jujuy. Vanesa Civila Orellana

    289 N 11 - La percepcin en las sensaciones de vaco. Aporte de Victoria Hammar y

    Andriana Opacak a la comprension del paisaje patagnico austral. Graciela Ciselli; Daniela Ciancia; Aldo Enrici..

    300 N 12 - La transformacin del paisaje a travs de una actividad antrpica

    descontrolada y sus efectos sobre el componente social involucrado en la ciudad de Mercedes, Corrientes. Prof. Carlos Baldassarre..

    316 N 13 - Polticas pblicas para fomentar la recreacin rural en las estancias

    magallnicas. Caso: corredor patrimonial entre los mares de Otway y Skyring, Provincia de Magallanes, Regin de Magallanes y Antrtica Chilena. Patricia Jimnez.

    339 N 14 - Identificacin del patrimonio cultural y natural y su puesta en valor para el uso

    recreativo y turstico. Mara Collueque; Laura Quintana; Luis Asencio.

    366 N 15 - El Parque Saavedra como paisaje cultural protegido. Graciela Ciselli.. 392 N 16 - Aportes para la elaboracin de un proyecto de integracin de las propuestas

    tursticas de patrimonio cultural del Noreste de Santa Cruz. Los paisajes culturales como soporte. Alicia Rene Tagliorette; Patricia Sampaoli; Ana Mara Ibarroule; Elio Reynoso; Anglica Castro

    409 N 17 - Aproximaciones al territorio pampeano-patagnico a travs de las nociones de

    paisaje cultural y paisaje patrimonial. Laura Ayln Enrique..

    421 POSTERS

    La ruta de los campamentos petroleros en Comodoro Rivadavia. Arq. Liliana Carnevale

    444 Paisaje cultural urbano de Ro Turbio en el Siglo XX, Patagonia Austral Argentina.

    Prof. Mnica Norambuena; Prof. Mara Eugenia Muoz Sesnic; Lic. Alicia Cceres.

    445 Paisaje cultural urbano y tipologas de viviendas en Ro Turbio entre 1942 y 1969.

    Prof. Daniela Ciancia; Dr. Aldo Enrici; Mg. Graciela Ciselli.

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    GALERA FOTOGRFICA.. 447

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    PRLOGO

    Los temas del Patrimonio Cultural han suscitado un inters creciente en los ltimos aos, surgiendo nuevos organismos de proteccin, ONGs especficas y grupos de vecinos interesados en el tema. La justicia ha reconocido recientemente mediante fallos histricos este derecho a conservar nuestro patrimonio, nuestra memoria e identidad.

    UNESCO, como mximo organismo de proteccin a nivel mundial, permanentemente se rene para elaborar nuevas Cartas, Documentos y tambin nuevas categoras del Patrimonio Cultural, que surgen de la prctica de esta actividad de conservacin.

    Esfuerzos se han realizado desde todos los mbitos para avanzar en la conciencia ciudadana y poltica en este tema, que podemos considerar como un nuevo derecho.

    El ICOMOS (Consejo Internacional de Monumentos y Sitios) es la principal organizacin no gubernamental internacional que agrupa a expertos, profesionales e instituciones que trabajan por la conservacin, proteccin y valoracin de los monumentos, conjuntos de edificios y sitios de inters histrico y cultural.

    Con el fin de contribuir a un mejor reconocimiento y proteccin de las dimensiones culturales y simblicas de los paisajes o fenmenos que se describen como naturales ignorando la importancia de sus componentes culturales, tanto tangibles como intangibles, ICOMOS ha sugerido que se examine el concepto de sitios, una de sus principales preocupaciones. Lo define como sigue: Todas las reas topogrficas y paisajes, las obras del hombre o las obras combinados entre el hombre y la naturaleza, incluyendo parques histricos y jardines, que posean valor desde el punto de vista arqueolgico, histrico, esttico, etnolgico antropolgico. La Convencin de Patrimonio Mundial habla de: obras del hombre o las obras combinadas del hombre y la naturaleza, y las reas, incluidos los sitios arqueolgicos, que sean de un valor universal sobresaliente desde el punto de vista histrico, esttico, etnolgico antropolgico.

    Los paisajes culturales constituyen obras combinadas del hombre y la naturaleza. Son ilustrativos de la evolucin de la sociedad y de los asentamientos humanos en el tiempo, bajo la influencia de condicionantes y oportunidades fsicas derivadas de su entorno natural y de las sucesivas fuerzas sociales, econmicas y culturales, tanto externas como internas.

    Podemos considerar como antecedente a estas Jornadas:

    - los Congresos de Arquitectura Patagnica que se realizaron cada dos aos desde 1984 a 2002, alternativamente en la Patagonia Argentina y Chilena;

    - las I Jornadas Regionales de Patrimonio Cultural realizadas en Ro Gallegos en 2006;

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    - el Taller Internacional de UNESCO para el manejo de Cueva de las Manos, Patrimonio de la Humanidad, realizado en 2005;

    - las Jornadas de Patrimonio y Turismo (UNPA-UARG), desarrolladas en Junio de 2010.

    LAS JORNADAS

    La Universidad Nacional de la Patagonia Austral Unidad Acadmica Ro Gallegos (UNPA-UARG), el Comit Argentino del ICOMOS y la Universidad de Magallanes (UMAG) organizaron conjuntamente estas Jornadas dedicadas a reflexionar acerca de los paisajes culturales en Argentina y Chile, y en especial en la regin patagnica. Este evento tuvo lugar en la ciudad de Ro Gallegos, provincia de Santa Cruz, durante los das 13, 14 y 15 de Junio de 2012.

    Se plantearon como objetivos:

    - Contribuir a la reflexin acerca de los nuevos criterios de valoracin del patrimonio cultural referido a los paisajes culturales: urbanos, rurales, industriales y naturales.

    - Debatir acerca de la relacin entre paisaje natural y cultural: entendiendo que ambos son paisajes culturales.

    - Generar un espacio de referencia de los diferentes sectores profesionales implicados en los mltiples mbitos de la investigacin, difusin y gestin del patrimonio

    - Analizar el papel de las organizaciones no gubernamentales, de los mbitos acadmicos y del sector pblico en la gestin integral del patrimonio cultural.

    - Contribuir a un mejor reconocimiento y proteccin de las dimensiones culturales y simblicas de los paisajes o fenmenos que se describen como naturales ignorando la importancia de sus componentes culturales, tanto tangibles como intangibles.

    - Lograr el intercambio de informacin y conocimiento sobre la importancia de la gestin y conservacin del patrimonio de representantes de distintos estamentos de la sociedad.

    - Valorar la diversidad de paisajes culturales.

    - Incentivar la proteccin y conservacin del Patrimonio Cultural.

    - Crear conciencia de identidad cultural.

    Se establecieron los siguientes Ejes Temticos:

    A) Identificacin de paisajes culturales. Proteccin, conservacin, difusin e interpretacin

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    B) Rol de los organismos pblicos y de las organizaciones no gubernamentales. Enfoque multidisciplinario en la gestin de los paisajes culturales

    C) Paisajes culturales y patrimonio inmaterial. Turismo cultural en sitios del Patrimonio.

    El Comit Organizador estuvo conformado por:

    Lic. Viviana Navarro UNPA-UARG

    Arq. Silvia Mirelman ICOMOS

    Arq. Alfredo Irribarra Amarales UMAG

    Dra. Silvana Espinosa Secretara de Estado de Cultura

    Lic. Alejandra Alvarez UNPA-UARG

    Lic. Lucio Llanacapn Secretara de Estado de Turismo UNPA-UARG

    Lic. Victoria Hammar - Secretara de Estado de Cultura UNPA-UARG

    Dr. Nelson Aguilera - UMAG

    El Comit Evaluador conformado por:

    Dra. Silvana Espinosa Secretara de Estado de Cultura

    Lic. Lucio Llanacapn Secretara de Estado de Turismo UNPA-UARG

    Lic. Victoria Hammar - Secretara de Estado de Cultura UNPA-UARG

    Arq. Alfredo Irribarra Amarales UMAG

    Arq. Liliana Carnevale - ICOMOS

    Asistieron alrededor de 130 personas entre los que se cuentan expertos, profesionales de larga trayectoria, profesionales jvenes, estudiantes, representantes del sector pblico e interesados en general.

    Las Jornadas tuvieron en su acto de apertura la presencia del Sr. Decano la UARG, Dr. Alejandro Snico; del Presidente del ICOMOS Argentina, Rubn Eduardo Vera; en representacin de la UMAG el Antroplogo Nelson Aguilera y la Arq. Silvia Mirelman, Delegada de la Regin Comahue-Patagonia del ICOMOS.

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    De izquierda a derecha: Rubn Vera (Icomos), Dr. Nelson Aguilera (UMAG), Dr. Alejandro Snico (UARG) y Arq. Silvia Mirelman (Icomos Patagonia). Foto: HDV Productora

    El primer da de actividades se desarroll en las Instalaciones del Saln Auditorio Luis Villarreal del Complejo Cultural Santa Cruz y los dos das restantes en el Campus Universitario de la UNPA-UARG.

    Como colaboradores participaron las siguientes Organizaciones e Instituciones:

    - Secretara de Estado de Cultura de la Provincia de Santa Cruz - Secretara de Estado de Turismo de la Provincia de Santa Cruz - Muncicipalidad de Ro Gallegos, a travs de la Direccin de Cultura y Direccin de

    Turismo. - El Consejo Profesional de Arquitectura, Ingeniera y Agrimensura de

    la Provincia de Santa Cruz (CPAIA) - La Asociacion de Empresarios Hoteleros, Gastronmicos y afines de Ro Gallegos. - La Secretara de Cultura de la Presidencia de la Nacin

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    CONCLUSIONES

    Durante las Jornadas se realizaron dos talleres donde se discutieron las siguientes temticas:

    - Gestion y legislacin - Comunicacin e interpretacin del paisaje cultural

    Como cierre de la actividad se realiz un Plenario General donde se debati sobre los tres ejes temticos establecidos para el desarrollo de las Jornadas.

    A continuacin se transcriben las conclusiones y sugerencias surgidas de estos debates:

    1. El Patrimonio no es una cosa en s misma sino herramienta para construir calidad de vida y dar identidad a nuestro pueblo.

    2. Es imprescindible romper la disociacin entre patrimonio tangible e intangible y entre lo cultural y lo natural.

    3. Hay que reconocer la importancia de considerar la gestin de los Paisajes Culturales como un proceso que incluye: su estudio, conservacin, uso y participacin pblica, interpretacin y adecuado manejo del cambio, el cual permita su desarrollo y evolucin del paisaje sin alterar los atributos que le confieren valor patrimonial.

    La gestin de los Paisajes Culturales requiere de la participacin comunitaria en todas las etapas del proceso, en tanto las poblaciones o grupos sociales forman parte del paisaje y poseen percepciones, visiones y conocimientos sobre sus componentes y dinmica, tanto como el desarrollo de la conservacin de estos espacios protegidos debe tener en cuenta el mantenimiento y/o mejoramiento de calidad de vida de las comunidades.

    Se percibe cierto temor manifiesto sobre el no respeto de crecimiento o desarrollo orgnico y dinmico que toda sociedad tiene incurriendo en un exceso de planificacin por parte de los acadmicos, gestores pblicos y grandes proyectos de inversin, perdiendo de vista la mirada del protagonista -es decir el poblador local- lo que llamaramos la mirada desde adentro. Para evitar la generacin y/o aparicin de sectores culturales marginados a su vez poseedores de las tradiciones locales, no contemplados en estas planificaciones y que ven desde afuera el desarrollo socioeconmico, es imprescindible observar, comprender e incluir en los planes la naturaleza dinmica de las sociedades.

    4. Se ha visto la necesidad de continuar la discusin sobre el concepto de autenticidad.

    Segn las Directrices Prcticas para la aplicacin de la Convencin del Patrimonio Mundial,

    La capacidad de comprender el valor atribuido al patrimonio depende del grado de credibilidad o de veracidad que se conceda a las fuentes de informacin sobre este valor. Conocer y entender

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    estas fuentes de informacin, en lo que respecta a las caractersticas originales y posteriores del patrimonio cultural, y su signifi cado, son los requisitos bsicos para evaluar todos los aspectos de la autenticidad. (Punto 80)

    Segn el tipo de patrimonio cultural y su contexto cultural, puede estimarse que un bien rene las condiciones de autenticidad si su valor cultural (tal como se reconoce en los criterios de la propuesta de inscripcin) se expresa de forma fehaciente y creble a travs de diversos atributos, como:

    forma y diseo; materiales y substancia; uso y funcin; tradiciones, tcnicas y sistemas de gestin; localizacin y entorno; lengua y otras formas de patrimonio inmaterial; espritu y sensibilidad; y otros factores internos y externos (punto 82)

    En los vocablos y en la denominacin de las artesanas, es necesario tomar en cuenta el proceso, la dinmica de los procesos.

    Hay una tendencia de los habitantes de las grandes ciudades a migrar hacia pueblos ms pequeos, llevando consigo un pequeo capital, experiencia, tcnicas, etc. Generando una nueva mirada de lo autntico. Puede esto colaborar con la prdida/alteracin de los atributos patrimoniales que se busca proteger y conservar?

    5. Las llamadas 5 C son las palabras claves de los objetivos estratgicos del Comit de Patrimonio Mundial de UNESCO. Las cuatro primeras (credibilidad, conservacin, capacidades y comunicacin) fueron adoptadas en el ao 2002 en el marco del documento llamado "Declaracin de Budapest", emitido en ocasin del 30 aniversario del Comit de Patrimonio Mundial. La quinta C (comunidades) fue agregada en 2007 a partir de una propuesta hecha por el Estado Parte de Nueva Zelanda

    Surge la necesidad de continuar trabajando sobre las 5 C: credibilidad, conservacin, capacidades, comunicacin y comunidades. Promover el estudio en todos los niveles educativos, buscando organizar, armar y trabajar en red de comunicacin.

    A su vez se proponen: conocimiento (6 C); confianza y cooperacin (7 y 8 C); conciencia (9 C) resultado de todas las anteriores.

    6. Las comunidades deben validar las propuestas externas de Declaracin de Paisaje Cultural. Disponer de informacin vlida, precisa y diversas herramientas de conocimiento para tomar decisiones sobre su patrimonio a fin de protegerlo y afianzar la identidad propia.

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    Adems hay que tener en cuenta la opinin y el anlisis de la comunidad sobre su experiencia ante visitas regulares (sentimientos de valoracin positiva/negativa, inclusin/exclusin, entre otros) al momento de legislar a nivel local y/o municipal.

    7. Se observa como necesidad prioritaria la generacin de legislacin inherente al abordaje de los Paisajes Culturales estableciendo principios, criterios, mtodos como corpus de trabajo, reglamentacin que faciliten la aplicacin del concepto.

    8. Hay que promover el reconocimiento de espacios culturales de las comunidades por parte del Estado y proceder a su delimitacin territorial, en pos de la inclusin social, la gestin, el manejo y la utilizacin comunitaria; instando al compromiso de funcionarios y autoridades con polticas pblicas relacionadas con la toma de decisiones sustentables. Se propone alentar propuestas de proyectos y programas rentables econmicamente (a escala local y regional), analizando la compatibilidad entre Paisaje Cultual y valor econmico.

    9. Promover la realizacin de Estudios binacionales y transfronterizos tendientes al desarrollo de los Paisajes Culturales y el anlisis de casos particulares y especficos, haciendo uso de recursos financieros y/o de mecanismos para la obtencin de financiamiento para estos estudios; promoviendo planes de manejo y la capacitacin del personal afectado en aquellos casos que se difundan bienes del Patrimonio Cultural.

    10. Trabajar de manera interdisciplinaria resulta ms beneficioso que la multidisciplinaridad. En tanto el paisaje se caracteriza ms que por la suma de las partes por su interrelacin de componentes diversos. Es neceario Incorporar todos los sentidosen su anlisis. Resulta imprescindible saber escuchar a las otras disciplinas, dejando de lado los egosmos.

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    DISERTANTES INVITADOS

    ALFREDO CONTI

    Arquitecto (UNLP), Conservador de Edificios (UBA). Vicepresidente del Comit Ejecutivo Internacional de ICOMOS para el trienio 2011-2014. Doctorando en la Universidad Nacional de La Plata. Entre 1978 y 1991 se desempe en la Direccin de Planeamiento Urbano de la Municipalidad de La Plata, en temas vinculados con el patrimonio arquitectnico y urbanstico. Entre 2004 y 2006 fue Director de Preservacin de Patrimonio de la Municipalidad de La Plata. Desde 1998 es Investigador de la Comisin de Investigaciones Cientficas de la Provincia de Buenos Aires, donde ocupa el Cargo de Subdirector del Laboratorio de Investigaciones del Territorio y el Ambiente. En ICOMOS Argentina fue Secretario General (1996-1999), Vicepresidente Regional (1999-2002), Vicepresidente (2002-2006) y Presidente desde 2007. Desde 2000 acta como experto de ICOMOS para la evaluacin y seguimiento de sitios Patrimonio Mundial en Amrica Latina y el Caribe. Entre 2002 y 2007 represent a ICOMOS en el informe sobre aplicacin de la Convencin de Patrimonio Mundial en Amrica Latina y el Caribe. Desde 2008 integra el Comit Ejecutivo internacional de ICOMOS. Consultor de UNESCO en proyectos vinculados con el patrimonio cultural. Colabora en proyectos sobre ciudades histricas del Centro de Patrimonio Mundial, UNESCO, y del Getty Conservation Institute. Profesor en la Licenciatura en Turismo de la Universidad Nacional de La Plata y de la Maestra en Gestin del Patrimonio de la Universidad Nacional de Mar del Plata. Profesor invitado en universidades de Argentina, Amrica y Europa. Director Acadmico del Posgrado en Patrimonio y turismo sostenible, Ctedra UNESCO de Turismo Cultural, Buenos Aires. Proyectos, obras u otro tipo de trabajo actuales: Proyectos de investigacin y desarrollo: Uso turstico del patrimonio cultural y natural; Patrimonio del siglo XX en la provincia de Buenos Aires.

    CARLOS MORENO

    Arquitecto, graduado en la Universidad Nacional de Buenos Aires. Profesor de Metodologa de la Organizacin del Posgrado de Preservacin FADU-UBA. Profesor Curso de Conservacin, Preservacin y Restauracin de Monumentos y Sitios - Posgrado UCA Santa F. Profesor Posgrado de Preservacin Universidad Nacional de Mar del Plata. Profesor Posgrado Preservacin CICOP. Miembro del Comit Argentino del lCOMOS Asesor Patrimonio Arquitectnico Secretara de Cultura de la Nacin y del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y Vocal de la Comisin Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Histricos. Miembro de la Academia de Estudios Histricos de la Ciudad de Buenos Aires, del Instituto

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    de Estudios Histricos de la Manzana de las Luces y Miembro de Nmero del Instituto Belgraniano (1991-95) y (2001). Realiza numerosas actividades orientadas hacia la Preservacin del Patrimonio y es Asesor en los estudios sobre autenticidad de las Estancias Jesuticas de Crdoba y Quebrada de Humahuaca y Buenos Aires Paisaje Cultural. Ha dictado cursos, seminarios y conferencias, en ciudades del interior del pas y en distintas Universidades. Ha desarrollado planes de difusin del Patrimonio en Instituciones y Escuelas, y realizado innumerables lecturas, y reconocimientos de sitios rurales y urbanos.

    Es autor de una cantidad de publicaciones entre las que se destacan: Un Pasado un Futuro (1988), La casa y sus cosas (1994), De las viejas tapias y ladrillos (1995), Yendo, viniendo y poblando (1996), Patrimonio Rural Bonaerense (1992-98), Las cosas de la ciudad (1997), Del Mercado a la Pulpera (2004), Depsitos Almacenes y Tiendas (2005), El hombre, el trabajo y los recursos (2006), Nuestras Plazas de Mayo con Leticia Maronese (2007), Luces para la Memoria, tres siglos en la manzana, con Luca Glvez (2008). Colaborador, entre otros, con el diario La Nacin en varios Fascculos sobre la serie Siglo XX (1997), La Manzana de las Luces: Cmo y Quines la Construyeron y en la revista Vivienda dirige el captulo sobre Tecnologa Regional Argentina. Apuntes para los Tiempos del Nacimiento de la Patria (2009), Exposicin de Imgenes sobre el Hombre y el Trabajo (2011), Historia y Arte Pabellon de Bellas Artes UCA Mayo, Museo Pampeano Chascomus, UCCordoba Cabildo (2011), El Trabajo y los Trabajadores, en los tiempos antiguos, en edicin (2011), Cuatro CD temticos destinados a nivel docente. Inst. Inv. Hist de la Manzana de las Luces (2011).

    Designado Personalidad Destacada de la Cultura por ley de la Legislatura de la Pcia. BS. AS. (2008), Representante argentino en el ITINERARIO JESUITICO (Mercosur) Secretaria de Cultura de la Nacin (2011), Asesor equipo de investigacin Influencia Hispano-Guaran en el curso inferior del rio Uruguay: TESAL -CONICET (2011), Designado Personalidad destacada de la cultura por la Legislatura de la Ciudad Autnoma de Buenos Aires (2011)

    JORGE NSTOR BOZZANO Arquitecto, UBA. Licenciado Eugenista Humanlogo, UMSA. Estudios

    de Postgrado en Scuola Donna Regina, Universit degli Studi di Napoli Federico II. Especialidad: Conservacin del Patrimonio. Profesor en las Universidades de Buenos Aires, de Belgrano y Catlica de La Plata. Profesor en Cursos de Postgrado en las Universidad Nacional de Mar del Plata y Universidad Catlica de Salta. Director Acadmico del CICOP. Director de Unidad de Investigacin: Historia y Patrimonio, de la UCALP. Evaluador de la CONEAU. Vocal de la Comisin Nacional de Museos Monumentos y Lugares Histricos. Delegado por la CNMMLH ante el Comit Argentino de Patrimonio Mundial. Trabajos profesionales como proyectista o asesor en diversas obras, entre las cuales, Manzana de las Luces, Congreso de la Nacin, Catedral de La Plata, Estacin Retiro, Catedral de San Isidro. Ha dictado conferencias, cursos y seminarios en Centros de Estudios e Instituciones de diversas provincias, as como en

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    Espaa, Italia y Latinoamrica. Es autor de artculos y libros relacionados a la arquitectura, y a la restauracin y conservacin del patrimonio cultural, tanto de Argentina como del Exterior.

    ROBERTO MOLINARI

    Licenciado en Ciencias Antropolgicas (UBA). Coordinador del Programa Manejo de Recursos Culturales de la Direccin Nacional de Conservacin de reas Protegidas, Administracin de Parques Nacionales. Representante ante el Comit Argentino del Patrimonio Mundial (UNESCO). Profesor del Seminario Gestin del Patrimonio Cultural: una mirada desde la prctica. Carrera de Ciencias Antropolgicas, Facultad de Filosofa y Letras, UBA. Experto asistente para el proceso de incorporacin a la Lista Indicativa del Patrimonio Mundial, del sitio Reserva Natural Provincial Pehuen Co Monte Hermoso. reas Protegidas de la Provincia de Buenos Aires (OPDS). Abril a Septiembre de 2010. Coordinador del Plan de Conservacin del Programa Qhapaq an Argentina, propuesta de candidatura para el Patrimonio Mundial de UNESCO, en Comit Tcnico Nacional Qhapaq an. Secretara de Cultura de la Nacin e Instituto Nacional de Antropologa. Desde Febrero 2010. Coordinador de Patrimonio Cultural y de Convenios y Categoras Internacionales de Conservacin en la Administracin de Parques Nacionales. Desde Abril de 2009 hasta la fecha. Director Nacional de Conservacin de reas Protegidas de la Administracin de Parques Nacionales. Desde Noviembre 2003 hasta Marzo de 2009. Coordinador Adjunto Comit Argentino UICN, a partir de Marzo de 2009.

    MATEO MARTINIC BEROS

    Licenciado en Derecho, Abogado e historiador chileno, se ha dedicado a investigar y difundir la historia, la geografa y el patrimonio cultural y natural de la Regin de Magallanes y de la Antrtica Chilena. Intendente de Magallanes (1964-1970). Creo el Instituto de la Patagonia (1969), el Museo del Recuerdo, la Revista Magallania (2003), ex Serie Ciencias Humanas de los Anales del Instituto de la Patagonia (1970), y el Centro de Estudios del Hombre Austral. Profesor Emrito de la Universidad de Magallanes, de la que es Doctor Honoris Causa (2001). Premio Nacional de Historia 2000. Premio Bicentenario2006. Es Miembro Correspondiente de la Academia Chilena de la Historia del Instituto de Chile (1982); Miembro Honorario del Colegio Nacional de Arquitectos de Chile (1985); Miembro Correspondiente del Real Instituto de Estudios Asturianos (1986); Socio Honorario de la Sociedad Chilena de Historia y Geografa (1992); Miembro del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios, Comit Chileno (ICOMOS-Chile) (1997); Miembro de Mrito de la Academia Portuguesa da Historia (1998); Socio de Honor de la Corporacin del Patrimonio Martimo de Chile (2007); Miembro Honorario de la Academia de Historia Naval y Martima de Chile (2007), y Director del Captulo Regional de Magallanes de la Corporacin del Patrimonio Cultural de Chile (2007). Es asimismo

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    integrante del Consejo Regional de la Cultura y las Artes de Magallanes y Antrtica Chilena (perodo 2012-2016). Sus publicaciones superan los cinco centenares, destacando Historia de la Regin Magallnica, editada originalmente en 1992 y reeditada en 2006 por la Universidad de Magallanes.

    OLGA PATERLINI

    Profesora Titular de Historia de la Arquitectura de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Tucumn. Dirige Proyectos de investigacin financiados por la UNT y por el Ministerio de Ciencia y Tecnologa de la Nacin. Dirigi el proyecto de Puesta en Valor del rea de Valor Patrimonial de San Miguel de Tucumn y particip en el equipo que hizo el de la Ciudad de Salta. Ha sido consultora del BID en temas vinculados al patrimonio y el desarrollo; sus investigaciones estn centradas en la produccin ambiental de la agro-industria azucarera, la preservacin de los centros y pueblos histricos y los paisajes culturales, con centro en la Regin del NOA. Ha publicado y dictado seminarios en el pas y en el extranjero.

    CARLOS FERNNDEZ BALBOA Licenciado en Museologia por la Universidad del Museo Social

    Argentino. Master en Educacin Ambiental por la Universidad de Malaga en Espaa. Trabaja en la realizacin de Museos y Centros de Visitantes a travs de la consultora Exhibir. Ha asesorado y producido materiales de comunicacin y educacin para distintas instituciones entre las que se cuenta la Fundacin Vida Silvestre Argentina (FVSA), el Centro Internacional para la Conservacin del Patrimonio.(CICOP) y la Administracin de Parques Nacionales (APN). Es docente de la Escuela Nacional de Museologia Historica, dependiente de la Comisin Nacional de Museos y Sitios Historicos de la Nacin y Asesor de Turismo cultural del Ministerio de Turismo de la Nacin. Ha publicado veintitres libros y ms de un centenar de articulos referidos a la divulgacin, interpretacin y comunicacion del patrimonio en forma integral.

    MABEL LADAGA

    Fue becaria y tcnica del Fondo Nacional de las Artes, de la OEA en Espaa, y de la Unesco en la ex Yugoslavia. Discpula de A.R Cortzar, se especializ en Antropologa y Folklore aplicado. Relev artesanos y cre el Mercado artesanal en La Pampa. En Buenos Aires cre la Direccin de Patrimonio y Folklore y el Mercado Artesanal siendo la primera directora. Docente de Folklore ciencia, Folklore Aplicado y de historia de la Cultura

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    Popular. Actualmente: Escribe y publica sobre el tema y Dicta cursos en el pas y el exterior. Representante en Argentina de Aideca Fundacin Iberoamericana para el desarrollo artesanal.

    NGEL CABEZA MONTEIRA Arquelogo Universidad de Chile y candidato a Doctor en

    Arquitectura y Patrimonio de la Universidad de Sevilla. Profesor de la Universidad Central desde 1989 y ha dictado cursos y conferencias sobre patrimonio en diversas universidades chilenas y extranjeras. Trabaj 12 aos en los parques nacionales de Chile y fue por 12 aos secretario ejecutivo del Consejo de Monumentos Nacionales. Fue representante de Chile ante el Comit de Patrimonio Mundial de UNESCO y coordin los expedientes de Sitios de Patrimonio Mundial de Chile. Entre 2009 y 2011 trabajo en el programa BID de patrimonio del MOP. Ha recibido varias distinciones como la Medalla Inca Garcilaso de la Vega del Instituto Nacional de Cultura del Per (2005) y el Premio Conservacin de Monumentos Nacionales de Chile (2009). Miembro de honor del Colegio de Arquitectos de Chile e integrante de varias organizaciones profesionales y ciudadanas. Autor de libros y artculos. Actualmente es vicepresidente del Comit Cientfico de Patrimonio Inmaterial de ICOMOS para Amrica participando como evaluador de varios sitios propuestos a Patrimonio Mundial.

    VIVIANA NAVARRO

    Licenciada en Turismo, Universidad Nacional del Comahue. Posgrado en Alta Direccin en Turismo Rural, UBA. Maestranda de la Maestra en Desarrollo y Gestin de Destinos Tursticos, Universidad de Quilmes. Profesora Adjunta Ordinaria del rea Turismo e investigadora. Responsable de las Asignaturas Introduccin al turismo, Patrimonio turstico: Circuitos 1 y Servicios Tursticos. Directora del Programa de Formacin de Grado, Carreras de turismo, UNPA-UARG. Asesora en temticas tursticas. Docente en ISES- Ro Gallegos (1997-2011). Consultora Consejo Federal de Inversiones Secretara de la Produccin Santa Cruz (1997-2000).

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    DISERTACIONES

    DEL PAISAJE NATURAL AL CULTURAL, UNA HISTORIA DE 4 SIGLOS. CONSIDERACIONES SOBRE BUENOS AIRES

    PAISAJE CULTURAL EVOLUTIVO.

    ARQ. CARLOS MORENO.

    1) Importancia social, educativa y recreativa. La ciudad de Buenos Aires y su rea metropolitana (AMBA) cuyo centro es la interseccin del paralelo 34 40' con el meridiano 58 30" abarca una superficie de 16.600 km2 y se encuentra localizada en la ecoregin de la pampa, en las subregin de la pampa ondulada, uno de los territorios agro productivos ms ricos del mundo. El parque Natural y Zona de Reserva Ecolgica Costanera Sur es la nica reserva natural, - espacio de uso diferenciado de la ciudad de Buenos Aires como rea protegida- que conserva una muestra representativa del ambiente natural donde se emplazo la ciudad. La escasez de espacios verdes en la ciudad (en promedio inferior a 3m2 por habitante cuando la ONU recomienda 10m2) convierte a las 350 ha de la Reserva en un aporte sustancial e insustituible para sumar calidad de vida a los habitantes de Buenos Aires. Esta zona de conservacin es nica en el contexto de las reas urbanas de Latinoamrica en lo que respecta a su cercana al mayor centro urbano de Argentina, y a su rol como sitio fundamental para el desarrollo de la educacin ambiental de la sociedad. A su valor educativo y turstico le suma las actividades de recreacin y deportivas; ya que se realizan prcticas de aerobismo, expresin corporal, gimnasia, ciclismo, paseos recreativos, paseos para avistar aves y actividades culturales.

    2) Importancia como sitio de valor de biodiversidad. En el Parque Natural y Zona de Reserva Ecolgica Costanera Sur se conserva cerca del 50% de la biodiversidad presente en la ciudad de Buenos Aires. La Reserva presenta una gran cantidad de ambientes de origen artificial, como los baados, lagunas, pastizales, matorrales y bosques, adems de las playas del Ro de la Plata. Los cuerpos de agua y los baados son los ambientes ms representativos y ricos por la diversidad biolgica que sustentan. El rea fue colonizada por diversas comunidades vegetales a partir de semillas presentes en el terreno, diseminadas por el viento o transportadas principalmente por las aves. Estas comunidades vegetales favorecieron el establecimiento de poblaciones animales al proporcionarles a los mismos refugio y alimento. A su vez gran parte de esta biodiversidad se manifiesta en la especies de aves (de las 269 citadas para el rea, 34 son migratorias) que utilizan este espacio ya sea como zona de nidificacin o como espacio de estacin y alimento durante su viaje hacia su destino final. Esta serie de caractersticas que revelan una asombrosa biodiversidad llev a que el 22 de marzo del 2005 el PNyZRECS haya sido considerado "Sitio Ramsar" de acuerdo a la Convencin Relativa a los Humedales de Importancia Internacional especialmente como Hbitat

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    de Aves Acuticas, (Ramsar, Irn, 2.2.1971) convirtindola en la nica reserva urbana de Argentina con una categora internacional de proteccin.

    3) Importancia como muestra representativa de un patrimonio natural intangible: "El ambiente pampeano": El ambiente sobre el que se instal el rea a declarar como "Paisaje Cultural de la humanidad", y toda la zona de desarrollo urbano de la ciudad de Buenos Aires se encuentra en lo que -desde el punto de vista fitogeogrfico- se denomina pampa o pampa ondulada.

    A pesar que podemos considerar a la Reserva Ecolgica Costanera Sur como un neoecosistema, es decir un ambiente formado recientemente, de origen antrpico, donde interactan especies nativas y exticas y donde la arquitectura de la vegetacin es atpica (Morello J. et all 2003). Pese a esta caracterologa, podemos afirmar que "el paisaje" es pampeano y desde el punto de vista pedaggico corresponde a esa imagen colectiva que se tiene sobre la pampa.

    Buenos Aires: Autenticidad del paisaje cultural evolutivo Dado lo dinmico de los paisajes culturales urbanos, el proceso para garantizar y determinar

    la autenticidad e integridad debe ser flexible y estar en constante revisin, para asumir su cualidad evolutiva y la interaccin biunvoca entre la ciudad y los componentes naturales de su paisaje.

    Aquella que describiera el naturalista argentino Guillermo Enrique Hudson en "Un Naturalista en el Plata" y del que- a modo de testimonio- reproducimos algunos prrafos:

    A travs de ellas, las tradiciones se mantienen a medida que van evolucionando en respuesta a las exigencias sociales. Conserva la memoria y sus expresiones culturales y naturales rebasan lo meramente material, enriquecida por sus valores inmateriales y el mensaje, tem que resalta la Carta de Brasilia de 1995.

    Algunos cambios fsicos, lejos de disminuir significados, le otorgan nuevos valores. Por lo tanto, esos cambios materiales deberan ser aceptados como parte de la evolucin constante.

    En la zona definida para la Declaratoria se incluyen obras correspondientes a los siglos XVIII al XXI y un conjunto relevante de ellas configuran una expresin calificada de la arquitectura continental de los siglos XIX y XX. Es posible leer en esta arquitectura las distintas influencias de los modelos decimonnicos desde el academicismo al eclecticismo y encontrar ejemplos sobresalientes de la arquitectura neocolonial, racionalista, art deco y del movimiento moderno. En general se trata de obras de gran calidad de construccin y que responden a muy variadas tipologas. La ciudad es en cierta manera un museo de arquitectura donde es posible leer los cambios de gusto y sensibilidad de sus comunidades y a la vez entender los valores simblicos, histricos, culturales y econmicos que estas arquitecturas reflejan. Por ello la autenticidad de las mismas las convierte en testimonio de las identidades histricas acumuladas.

    Buenos Aires tiene una relacin peculiar con el Ro de la Plata, que se ha ido conformando histricamente a travs de la progresiva urbanizacin de terrenos formados a partir de la

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    sedimentacin costera. Esto ha generado un paisaje frente a un ro de una sola orilla, en el cual pueden observarse las diferentes etapas de urbanizacin segn su distancia a la costa histrica.

    Buenos Aires tiene un amplio desarrollo de jardines histricos, que incluye un extenso parque de estilo francs, un jardn botnico, un jardn zoolgico, un jardn andaluz, un jardn japons, que reflejan el mestizaje cultural que caracteriza la integridad y autenticidad de la ciudad.

    Vale la pena tener en cuenta, adems, que el aporte de la casi totalidad de las grandes ciudades del mundo a la conservacin de la diversidad biolgica puede considerarse insignificante si se tiene en cuenta que el grado de antropizacin que produce la urbanizacin se manifiesta en la desaparicin de la mayora de las especies propias de la zona frente al avance del hombre como especie dominante. Sin embargo, la existencia dentro de la Ciudad de Buenos Aires de una reserva ecolgica con las caractersticas de la Reserva Ecolgica Costanera Sur proporciona un carcter diferente y excepcional a esta ciudad en cuanto a la posibilidad concreta de contribuir a la conservacin de la biodiversidad. Un anlisis de los ambientes caractersticos de la Reserva muestra el carcter significativo del aporte de la Ciudad de Buenos Aires a la conservacin in situ de la diversidad biolgica.

    En la Ciudad de Buenos Aires el rea de conservacin incluye la costa del Ro de la Plata y la totalidad de las formaciones naturales costeras: lagunas, pastizales y bosques. Por otra parte, el tamao de las reas protegidas es suficiente como para asegurar su sustentabilidad natural.

    Como paisaje cultural urbano, tal cual expresa la "Declaracin de San Antonio", Texas, de 1996, el proceso de identificar y proteger los valores sociales y de autenticidad es complejo, porque a menudo envuelve a muchos grupos con intereses diversos.

    El manejo de sitios patrimonio de la humanidad, los autores establecen una serie de principios de intencin orientados a mantener la autenticidad de los bienes segn los cuatro aspectos establecidos en las Directrices: materiales, mano de obra, diseo e implantacin. Estos principios estn dirigidos particularmente a monumentos o grupos edilicios, pero resulta evidente que pueden no ser suficientes al tratar con categoras patrimoniales de escalas mayores donde aparece una relacin dinmica que se resume en la percepcin.

    La nocin de integridad est planteada en las Directrices para su aplicacin en el caso de bienes naturales, aunque puede extrapolarse para su utilizacin en el caso de los sitios culturales, cosa que ya ha sido propuesta en algunas reuniones de expertos. En una de sus acepciones, se refiere a que los sitios debern incluir la totalidad o la mayora de los elementos conexos e interdependientes en sus relaciones naturales..." (UNESCO, 1999), lo que podra ser aplicado a casos de categoras como reas urbanas o paisajes culturales. La aplicacin de la idea de integridad, ms que la de autenticidad, podra facilitar la evaluacin de sitios, reas o territorios en los que los factores de cambio pueden llevar a modificaciones que no alteren la sustancia que otorga a estos bienes su particular carcter y su valor testimonial

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    A fin de conservar su integridad se ha desarrollado un amplio plan de concientizacin y en consecuencia por rectores an en proceso de desarrollo e integracin se proponen diversos planes de gestin (con mayor intensidad que en otras reas no comprendidas)

    De acuerdo con los principios de la Convencin del Patrimonio Mundial, el objetivo principal del manejo de los bienes culturales es garantizar que los valores por los cuales se ha inscripto se mantengan y sean presentados siempre apropiadamente al pblico en general.

    EL NUEVO PAISAJE DE LA MODERNIDAD. La ciudad como expresin y condensador de una sociedad, cambia y crece en funcin de ella. LA CIUDAD ES UN ESPACIO DINAMICO QUE VIVE Y CRECE, tambin muere cuando pierde su RAZON DE SER. En el periodo republicano en la segunda mitad del siglo XIX, Argentina como tantos otros pases americanos se integra a un creciente mercado mundial. Se exportan materias primas y se importan manufacturas, costumbres, y modelos DE CMO SE DEBE SER. El positivismo y la idea de PROGRESO INFINITO reformulan la sociedad y una nueva imagen de ciudad es la consecuencia. Los dirigentes tratan se superar un pasado que les pesa, CORTAN la trama urbana, MAQUILLAN viejos edificios o construyen muchos EDIFICIOS MONUMENTALES. Este periodo es de gran transformacin.

    LO POPULAR RESIGNIFICADO POR LA CENTRALIDAD. Un PROCESO DE INTERACCION se produce entre la centralidad con los barrios. El mismo surge de la accin de gobierno o de las instituciones que tratan de CONDUCIR a los ciudadanos, encuadrndolos con modelos centrales que estn considerados los que deben ser. Los MEDIOS son las regulaciones urbanas, la educacin, los modelos externos que se afirman por medio de las comunicaciones de masa, desplazando a los locales. UNA MODO DE UNIFICACION CULTURAL QUE FACILITA EL MANEJO. Pero que DEBILITAN LA AUTENTICIDAD MANIFESTACIONES CULTURALES. Otras veces desde la Centralidad trata de RESIGNIFICAR algunas de las COSAS DE LA CULTURA POPULAR que muchas veces corren el peligro de ser caricaturas de su origen.

    La autenticidad e integridad de Buenos Aires est directamente vinculada a su identidad cultural y radica en la garanta de identificacin y jerarquizacin de sus verdaderos valores en constante evolucin. Si bien la ciudad no se ha mantenido en la misma condicin del momento de su creacin debido a su naturaleza dinmica, por el contrario ha ido evolucionando, conservando su carcter, su ambiente y sus esencias.

    Como sitio dinmico es producto de muchos autores a lo largo del tiempo, cuya creacin contina hoy. Esta adaptacin constante a las necesidades humanas contribuye activamente a mantener la vida pasada, presente y futura de la comunidad. A travs de ellas, las tradiciones se mantienen a medida que van evolucionando en respuesta a las exigencias sociales, en un todo de acuerdo con los postulados expresados en la carta de Nairobi de 1976. Conserva la memoria, y sus expresiones culturales y naturales rebasan lo meramente material, enriquecida por sus valores inmateriales y el mensaje, tem que resalta la Carta de Brasilia de 1995.

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    Algunos cambios fsicos, lejos de disminuir significados, le otorgan nuevos valores. Por lo tanto, esos cambios materiales deberan ser aceptados como parte de la evolucin constante.

    En la Ciudad de Buenos Aires el rea propuesta incluye la costa del Ro de la Plata y la totalidad de las formaciones naturales costeras: lagunas, pastizales y bosques.

    Como paisaje cultural urbano, tal cual expresa la "Declaracin de San Antonio", Texas, de 1996, el proceso de identificar y proteger los valores sociales y de autenticidad es complejo, porque a menudo envuelve a muchos grupos con intereses diversos.

    Dado lo dinmico de los paisajes culturales urbanos, el proceso para garantizar y determinar la autenticidad e integridad debe ser flexible y estar en constante revisin, para asumir su cualidad evolutiva y la interaccin biunvoca entre la ciudad y los componentes naturales de su paisaje.

    La idea de patrimonio cultural ha sido asociada durante muchos aos a las obras que expresan la excelencia de la labor humana y por tanto se han valorizado algunas y olvidado otras, las ms. Creemos que la idea de autenticidad est en las cosas que conforman el patrimonio cultural de un pueblo teniendo una lectura equilibrada, que exprese e integre a las diferentes modalidades del accionar del hombre frente a su circunstancia histrica. La falta de autenticidad es el resultado de lecturas incompletas al haberse rescatado las partes paradigmticas olvidando el resto, sin lo cual pierde su sentido. No se debe olvidar el concepto de que todas las cosas que funcionaron lo fueron dentro de un sistema integrado.

    La relacin de la gente con las cosas es a travs de la percepcin y luego el uso desde un borde y una pampa sin horizontes definibles que expresan la singularidad regional y la escala americana.

    La ciudad por su propia naturaleza ES DINAMICA en su desarrollo de cada poca han sobrevivido algunos referentes algunos por la naturaleza de su construccin y la vigencia de su MENSAJE ESPIRITUAL. En ello es fundamental LA UBICACIN RELATIVA con respecto a las reas ms dinmicas. Por otro lado tenemos las AUSENCIAS MATERIALES que terminan sobreviviendo a travs del PATRIMONIO INTANGIBLE.

    EN LA CIUDAD MODERNA SE GENERA UN CONFLICTO ENTRE LA MEMORIA Y EL DESARROLLO, pero es un conflicto que puede ser superado con el EQUILIBRIO ENTRE LAS DIFERENTES PARTES. La memoria de la comunidad ES UN VALOR QUE CALIFICA. EL PATRIMONIO CULTURAL NO ES EL AYER SINO QUE ES MEMORIA HOY. Races fundamentales para crecer con identidad.

    EL RESPETO DEBIDO A TODAS LAS CULTURAS REQUIERE QUE EL PATRIMONIO CULTURAL SEA CONSIDERADO DENTRO DEL CONTEXTO CULTURAL A LA QUE PERTENECE.

    LA INTEGRIDAD Y SU CONSERVACION ESTAN EN PROCESO DE DESARROLLO, se ha hecho un relevamiento de las reas patrimoniales y se implementaron medidas de proteccin. Se ha

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    desarrollado un plan de concientizacin entre los vecinos. Como una ciudad viva en PROCESO EVOLUTIVO debe integrar MEMORIA y PROGRESO por medio de una planificacin integrada.

    El bien es un sector de una ciudad que se encuentra viva, vigente y activa, pero a la vez representa un rea de fuerte contenido histrico.

    Adems de ser testimonio y expresin de un periodo especifico de la historia mundial -el advenimiento de la era industrial y con los intercambios comerciales globales asociados a ella- Valparaso es tambin una pieza nica en cuanto a entregamos un legado de soluciones creativas que caracterizaron a la revolucin industrial y a la divisin de roles en el comercio internacional.

    - Carcter distintivo: el carcter distintivo de Valparaso est dado por el modo en que el intenso intercambio cultural y econmico, propio de los puertos de la era industrial. fue capaz de crear un conjunto armnico entre una cultura emergente y un paisaje excepcional, adoptando las corrientes ms vanguardistas de su tiempo y las tecnologas ms avanzadas, para construir una nueva urbanidad, basada en la mezcla de influencias, las cuales fueron recogidas con una actitud Liberal y progresista, con miras a dar a la ciudadana bienestar y prosperidad. Este carcter invadi todos los componentes de la vida local y an hoy marca la vida de la ciudad.

    - Componentes: los diversos elementos que constituyen el bien se encuentran plenamente vigentes. Pocas son las alteraciones sustanciales que ha sufrido, no obstante las dificultades econmicas que ha debido enfrentar Valparaso, y que en definitiva se han traducido en menor impacto que otras ciudades puertos en situacin de rezago econmico relativo. Por ejemplo, como consecuencia de la apertura del Canal de Panam primero y como parte del proceso de desactivacin de industrias nacionales despus.

    Importantes componentes urbanos permanecen intactos y en pleno uso. No son pocos los edificios, los bares, los locales comerciales, las actividades artesanales, que continan intactos y vigentes y que no han recibido mayor transformacin, salvo las propias del mantenimiento bsico. Por cierto, la actividad portuaria, que fue el fundamento de la creacin y desarrollo de esta ciudad, contina plenamente vigente. Como parte de esta actividad, un conjunto de elementos de patrimonio industrial se encuentra en pie y en uso.

    Para entender la autenticidad resulta indispensable entender la naturaleza dinmica de los valores culturales y que por ello hay que evitar criterios inflexibles o estticos.

    Como expresa G. Gasparini: "Todo centro histrico, toda ciudad sufri, sufre y sufrir deterioros y cambios. Es inevitable, porque se trata de la vida a lo largo del tiempo".

    Pero hay muchos bienes que si bien fueron mutilados, alrededor y fragmentados, siguen manteniendo autenticidad, y las nuevas actividades y usos no han alterado el mensaje histrico valioso Que transmiten.

    Como dijo Herb Stovel: una determinada autenticidad debe anticipar e integrar (...) la identificacin del espritu esencial del lugar".

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    Como lo expresa la Carta de Brasilia (1995): Conservar el mensaje original implica tambin conservar la interaccin del bien y sus nuevas circunstancias...

    Atestiguar un intercambio de influencias considerable durante un perodo concreto o en un rea cultural del mundo determinada, en los mbitos de la arquitectura o la tecnologa, las artes monumentales, la planificacin urbana, la creacin de paisajes.

    Ellas, fruto del proceso de integracin al mercado mundial, a la asociacin con el gusto francs impulsado por la cole des Beaux Arts y al prestigio urbano de Pars que actuaba como modelo, se potencia con las transferencias tecnolgicas britnicas, y profesionales de diversas partes de Europa.

    Criterio ii

    Atestiguar un intercambio de influencias considerable durante un perodo concreto o en un rea cultural del mundo determinada, en los mbitos de la arquitectura o la tecnologa, las artes monumentales, la planificacin urbana, la creacin de paisajes.

    El emplazamiento de la ciudad de Buenos Aires cuenta con una caracterstica peculiar de su paisaje en el hecho de posibilitar una doble percepcin de lo infinito: en lo terrestre con la pampa y en lo acutico con el Ro de la Plata. Sobre esa matriz natural se ados una matriz cultural, expresada en el diseo urbano en cuadrcula, que reforz dicha percepcin y posibilit un paisaje cultural peculiar. Tal como lo enuncia Ezequiel Martnez Estrada A Buenos Aires se lo interpreta con los ojos porque ha sido construido para ser visto.

    01- EL PAISAJE CULTURAL DE BUENOS AIRES ES EL RESULTADO DE LA INTERACCIN CON EUROPA Y EN MENOR MEDIDA EEUU

    Desde el puerto salan los productos de la PAMPA, (antes de las ricas minas del Potos, en el Alto Per) y llegaban las manufacturas europeas, los modelos y modos culturales, y fundamentalmente la gente, con quienes POBLAR.

    02.- Las mayores manifestaciones de esas formas culturales se condensan en el CENTRO, (LUGAR DEL PODER ECONOMICO-ADMINISTRATIVO-CULTURAL) y luego en una intensidad decreciente se repican hacia el interior de la ciudad. BUENOS AIRES: Como toda ciudad tiene un funcionamiento ORGANICO, con un CORAZON (centro), CUERPO (Barrios), y BORDE (orilla) en su contacto con la campaa. CADA UNO DE ELLOS INTERACTUAN ENTRE SI Y SI FALTA ALGUNO EL SISTEMA NO FUNCIONA el patrimonio cultural representa esta complejidad que a su vez es evolutiva.

    03.- LOS COMPONENTES QUE EXPRESAN EL VALOR UNIVERSAL EXCEPCIONAL permanecen y son el soporte fsico y cultural del rea propuesta. En ella se formaron los VALORES PATRIMONIALES que expresan la interaccin entre la GEOGRAFIA y la ACCION DEL HOMBRE

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    PARA TRANSFORMARLA EN RECURSO VITAL. El rea es la representativa del resto del rea Metropolitana.

    04.- BUENOS AIRES, ES UN PUNTO DE TRANSFERENCIA entre la lejana Europa (EL RIO-OCEANO) y el aqu (LA PAMPA) Y se corresponde con otros puertos en Europa de donde se realizaba la FUNCION INVERSA.

    05.- El. SOPORTE FISICO se basa en dos geografas de naturaleza opuesta: el RIO y la PAMPA. El PUNTO DE CONTACTO entre ambos se produce en la BARRANCA (de gran extensin y mediana altura). En los ALTOS se desarrollo la poblacin y en los bajos los CONTACTOS CON EL RIO. La barranca aparece como el eje del paisaje (la iconografa histrica la destaca siendo la primer IMAGEN QUE SE PERCIBIA, LLEGANDO. Desde mediados del siglo XIX se trato de equilibrar el sistema urbano por medio de RELLENOS. Resultando un ESPACIO DE OPORTUNIDAD que permite nuevos desarrollos en las cercanas del centro histrico y luego sobre la orilla con los parques del XIX Y las urbanizaciones del. XX.

    La ciudad es un complejo sistema de respuestas de un grupo social a una circunstancia vital determinada, y no es slo su materializacin arquitectnica, con los espacios privados y pblicos, sino que es la intensa interaccin que se establece entre la gente, lo que le da su razn de ser y permanencia.

    La ciudad, tal como la define G. Argan es "consecuencia de la naturaleza y la historia". Por un lado, la naturaleza de su geografa y el esfuerzo de muchas generaciones interactuando sobre ella han conformado un PATRIMONIO SINGULAR EXPRESADO EN UN PAISAJE CULTURAL. Este es el resultado de la suma de esfuerzos de sus habitantes, siendo el patrimonio tangible e intangible consecuencia de ese esfuerzo de trabajo e ingenio acumulado.

    Desde su centro de mayor intensidad hasta sus bordes el PAISAJE CULTURAL aparece como una sntesis de este proceso.

    Fragmentacin de los sistemas

    En otras ocasiones la falta de autenticidad es el resultado de lecturas incompletas al haberse rescatado las partes paradigmticas olvidando el resto, sin lo cual pierde su sentido. No se debe olvidar el concepto de que todas las cosas que funcionaron lo fueron dentro de un sistema integrado.

    EL DESARROLLO A LO LARGO DEL BORDE SE CONSOLIDA EN AREAS DE FUNCIONALIDAD DEFINIDA, QUE FUNCIONAN COMO UN TODO INTEGRADO, INTERACTUANDO ENTRE SI. Se pueden definir espacios con caracteres singulares y relativamente consolidados:

    1. UN AREA CENTRAL que coincide con el centro histrico con su centro en la Plaza Mayor. Las formas estn definidas por estrechas calles fundacionales y las fachadas que definen el

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    espacio, un punto de mayor protagonismo lo encontramos en el encuentro de calles y las esquinas de las lneas de fachada.

    2. LOS BARRIOS cuya funcionalidad mayor es la de habitacin y los servicios complementarios. En el rea se encuentran los barrios ms antiguos que terminan de consolidarse a comienzos del siglo XX. Se extiende hacia el sur, el proceso de conurbacin a fines de XIX lo integra en continuo con la Boca. En ella encontramos fundamentalmente viviendas de diferentes tipos y calidades materiales segn las clases sociales que la habitan. Casas de renta con varios pisos para las clases medias, casas chorizo uni o polifamiliares para las clases intermedias hasta CONVENTILLOS donde los inmigrantes venidos de muchas y diferentes partes del mundo pudieron convivir en la precariedad que les daba la posibilidad econmica. Muchas veces la idea de superacin que tendr forma, al desarrollarse la infraestructura de transporte (desde 1857 el ferrocarril y 1870 con el tranva) esto permiti incorporar nuevas tierras para la vivienda con el loteo de las chacras y quintas y la construccin de casas de chorizo. Una forma flexible y modular de simple tecnologa que albergo a gran parte de la creciente poblacin. En la zona de la Boca con terrenos bajos y poco consistentes, se desarrollo un tipo de vivienda relativamente liviana que dio singularidad al rea.

    3. EL PUERTO. rea de la actividad fundamental, el lugar de las transferencias Entre el mar y la tierra firme. Sus formas se desarrollan segn las posibilidades tecnolgicas para la funcin. Sus formas ms definidas se construyen en los aos ochenta cuando se construye el PUERTO MADERO una forma que nos muestra la transferencia cultural europea sin mayor comprensin de la circunstancia local. A poco de su construccin perdi funcionalidad para acompaar el crecimiento di comercio y fue necesario construir el Puerto Nuevo. Por otro lado ya desde 1870 se empieza a poner en valor un rea de transferencia, la del Riachuelo a partir de los estudios del Ingeniero Huergo y las posibilidades de dragado que las nuevas tecnologas basadas en el vapor. Los trabajos de los puertos, transforman el borde, que pierde su paisaje relativamente natural para transformarse en un definido PAISAJE CULTURAL con sus diques, depsitos, gras, silos barcos alineados, instalaciones ferroviarias, etc. Una forma que es directa consecuencia de las tecnologas del hierro y la energa del vapor. Dragados, rellenos y excavaciones transformaron el borde e hicieron funcional el punto de transferencia. Sobre los bordes tambin forman un paisaje definido las usinas para las nuevas formas de la energa como la ELECTRICIDAD. Las usinas elctricas en su macro escala con sus naves y chimeneas o sus depsitos de combustible definen una parte del paisaje.

    4. LAS AREAS VERDES. Hacia la zona norte de la ciudad, sobre las antiguas chacras de PAN llevar, y con eje en el camino real que llevaba a las tierras de ARRIBA, se consolida un paisaje vinculado con el verde los espacios abiertos. Primero con las plantaciones de rboles y sementeras de las chacras siguiendo las formas de las estrechas divisiones de la tierra. Luego en el siglo XIX con los nuevos hbitos de vida la posibilidad de uso de muchas quintas como espacio complementario para el descanso y el ocio, que extender hasta las islas del Delta. Desde los aos treinta Dn. Juan M. de Rosas construye en las cercanas del arroyo Maldonado,

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    un gran espacio transformando terrenos bajos en un parque con su casern. Luego en 1870 transforman esos espacios en un parque pblico con la formas de los jardines francesas (un paralelo a las modelos de la arquitectura y urbanismo que por esos aos incorpora la ciudad). El rea en aos sucesivos incorpora nuevas formas culturales en respuesta al conocimiento cientfico y las nuevas formas de educacin, el JARDIN ZOOLOGICO, el JARDIN BOTANICO, el PLANETARIO. En otras expresiones en orden a la cultura cosmopolita de la ciudad se incorporan sectores caracteres singulares como el JARDIN ANDALUZ (1929) donado por la ciudad de Sevilla, o el JARDIN JAPONES que en 105 aos ochenta don la comunidad japonesa.

    5. RESERVA ECOLOGICA: La reserva ecolgica de la Costanera Sur se desarroll sobre un relleno artificial, que en principio estaba destinada a un emprendimiento inmobiliario. Las fuerzas de la naturaleza en el sistema ecolgico que se forma desde el ro Paran, que acta como VEHICULO desde regiones aguas arriba, que tienen sistemas ecolgicos diferentes. El sistema en la reserva est en, proceso de DESARROLLO y CONSOLIDACION y por tanto se encuadra en el "contener los hbitats naturales ms representativos y ms importantes para la conservacin IN SITU DE LA DIVERSIDAD BIOLOGICA comprendiendo aquellos en los que sobreviven especies amenazadas que tienen un VALOR UNIVERSAL EXCEPCIONAL desde el punto de vista de la ciencia o de la conservacin" art. 44 iv

    UN ELEMENTO MUY VALIOSO ES LA CERCANIA DEL LA RESERVA ECOLOGICA DE COSTANERA SUR, CON UNA POBLACION DEL AREA METROPOLITANA DE TRECE MILLONES DE PERSONAS.

    La ciudad de Buenos Aires se destaca en haber logrado un equilibrio frente a la presin inmobiliaria sobre tan valiosas tierras. Ello fue posible por el desarrollo cultural y la sensibilidad de su gente que han incorporado valores fundamentales como EL RESPETO A LA DIVERSIDAD, algo fundamental en la bsqueda del EQUILIBRIO CULTURAL.

    La evolucin del patrimonio y la autenticidad

    Periodo de las comunidades indgenas

    Quedan testimonios de baja intensidad. Estudios arqueolgicos.

    La percepcin es el paisaje natural con una culturalizacin de muy baja intensidad, de este quedan algunos sectores aislados en la Reserva de Punta Lara y se est recomponiendo relativamente en la Reserva Ecolgica. Hacia tierra adentro la imagen de una PAMPA SIN HORIZONTE DEFINIBLE ha desaparecido por la incorporacin de rboles antes desconocidos (montes de Eucaliptus etc.)

    Periodo de la conquista y colonizacin, gobernacin

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    1) IMPLANTACION: Se conserva la traza original de Dn Pedro de Mendoza (c1580). Se ha modificado la relacin con el ro. (Causas naturales y culturales). 2) DISEO: Las viviendas, iglesias, conventos y cabildo tienen las simples formas que permiten los escasos recursos locales. 3) MATERIALIDAD: Muros de tapia de tierra, estructuras de par y nudillo de maderas tradas del Paraguay cubiertas de paja, en algn caso de tejas, aberturas de cuero o madera, no se usan casi herrajes, lo comn es el quicio. Uso del hierro excepcional, (reja del cabildo 1610) sin mayores terminaciones superficiales. Los encalados son deseables pero escasos. 4) MANO DE OBRA: Sin mayor calificacin. Construccin con tcnicas vernculas tradas de Espaa. Mano de obra esclava e indgena, (indios Quilmes y Tapes trados por los jesuitas desde las misiones del Paraguay).

    La percepcin aun conserva la baja intensidad de imgenes culturales. El poblado incorpora una relativa forma regular apoyada en la traza. Se definen algunos caminos hacia el interior, especialmente en funcin de los vados para sortear el Riachuelo, hacia el norte siguiendo la lnea del alto, y hacia el oeste la de menor distancia. En el perfil de la poblacin se levantan algunas torres de relativa altura. Aparece el color blanco sobre alguna de las construcciones. Lo vegetal solo aparece en el interior de los solares.

    La ciudad entre 1700-1776.

    El periodo corresponde a la CONSOLIDACION FUNCIONAL del puerto con las rutas hacia el interior, como PUNTO DE TRANSFERENCIA.

    1) IMPLANTACION: La traza fundacional es el soporte fsico del crecimiento de la ciudad. Se van ocupando los solares, algunos de los cuales especialmente en las cercanas de la Plaza Mayor se van dividiendo en funcin de ventas o herencias fragmentadas. 2) DISEO: Desde fines del siglo XVII, con la construccin de la iglesia de San Ignacio, la Compaa de Jess trajo de Europa especialmente de Italia, arquitectos y artesanos que conocen de formas ms complejas de construccin .Se difunden la construccin de bvedas y cpulas de mampostera. Para ello hizo falta de ladrillos cocidos arena y cales. Las nuevas formas de cubrir el espacio permiti iglesias con naves de mayor luz (12 o ms metros frente a los seis o poco ms que permitan las cerchas de par y nudillo tradicionales. Tambin fue posible levantar altas torres que perfilan una nueva imagen de la ciudad. 3) MATERIALIDAD: Ya en el siglo XVII el Cabildo frente a la escasez de combustibles en la regin, impulsa la plantacin de durazneros. Recin a principios del siglo XVIII se supero el problema y a poco vemos aparecer gran cantidad de hornos de ladrillos y tejas. En los morteros se usan arenas de extraccin dificultosa en los bajos del ro, otro agregado era el polvo de ladrillos que se mola en una cancha con el pisoteo de caballos. La cal de relativa calidad se produca a partir de conchilla en Magdalena y la Calera de los Franciscanos (Belgrano) y la de mejor calidad y ms cara de Crdoba. En las partes menos solicitadas se contina usando el mortero de barro para muros y revoques interiores. Se usa poco hierro, siendo el material ms

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    usado para los vnculos el cuero (soguillas de cuero crudo). Las maderas se siguen trayendo de los bosques del Paraguay especialmente de las misiones, se las traa en jangadas por el ro Paran. 4) MANO DE OBRA: las obras de cierta envergadura son realizadas por profesionales, y en la primera mitad del siglo se destacan los hermanos jesuitas Bianchi y Primoli. Se cuenta con artesanos calificados (carpinteros, ebanistas, alarifes, plateros, etc.) en directa relacin a la demanda de una poblacin creciente y ms refinada. La Compaa de Jess trae muchos operarios calificados desde sus reducciones en el Paraguay. Las posibilidades especialmente en los componentes de valor esttico se enriqueca con las piezas que se traan desde el Alto Per o las reducciones.

    Percepcin: Se consolida el paisaje cultural en contraste con la campaa, apenas modificada. En la iconografa de poca se perfila una imagen con fuerte acento en las cpulas y torres de las iglesias, desde mediados de siglo tambin aparece la torre del cabildo. La ciudad de poca extensin a poco se convierte en la campaa, donde se han consolidado chacras de Pan Llevar, al norte y oeste y estancias al sur y en la cuenca de algunos ros. En 1759 se levanta en la Plaza Mayor una escenografa de gran dimensin construida con materiales efmeros (Se la pinta de azul y blanco incorporando una nueva imagen en la blanca ciudad. Fachadas encaladas y remates del rojo de las tejas y la faxa de almagre en la parte baja. Un nuevo olor se incorpora segn los vientos: el de los hornos de ladrillos. El verde sigue siendo parte del espacio privado.

    Virreinato (1776-1810) 1) IMPLANTACION: Como consecuencia de ser Buenos Aires cabeza del virreinato y por el crecimiento de la actividad econmica aumenta la poblacin y por tanto la extensin de la ciudad y la construccin de viviendas, iglesias y otros edificios como una plaza de toros con capacidad para 10000 personas sentadas para una ciudad de 40000 habitantes (1810). Organizacin de barrios, 2) DISEO: a partir de la construccin de la iglesia de San Ignacio (c1690) . La necesidad de equilibrar las fuerzas horizontales de las bvedas induce a la construccin de grandes contrafuertes o profundas capillas laterales. Las viviendas crecen y se complejiza su organizacin alrededor de patios con sus distintas funciones. Desde 1785 se impone la construccin sobre la lnea de fachada. Aparecen las primeras construcciones de alto. Con los bajos destinados al comercio. Se consolidan las recovas en el cabildo y el primer edificio comercial: la recova vieja (1803). A imagen de algunas ciudades espaolas y americanas se construyen edificios en firme para la plaza de toros y se organiza un paseo en el borde. 3) MATERIALIDAD: desde fines del siglo XVII se difunde la mampostera de ladrillos asentados en mortero de cal, las bvedas y cpulas como cubierta de mayores luces. Las terminaciones son con revoques de barro en los interiores y mortero de cal en los exteriores y terminaciones, los pisos empiezan a ser cubiertos con baldosas cermicas sin compactar. Los muros se encalan. Desde 1780 las cubiertas de las viviendas se construyen con el sistema de azotea con vigas de madera alfajas, tejuelas en dos o tres rdenes con terminacin de baldosas de techo.

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    Las aberturas tienen marco y herrajes de hierro forjado, se usan hojas de madera con tableros y postigos. Los papeles aceitados o las berenguelas en alguna iglesia se reemplazan con vidrios de pequeas dimensiones. Se usan cielorrasos de tela. Desde 1790 empapelados. 4) MANO DE OBRA: Se usa mano de obra esclava, En la ciudad trabajan muchos artesanos de origen europeo o americano. Se consolida la direccin calificada de ingenieros militares y arquitectos europeos.

    Percepcin: La mayor actividad comercial se refleja en la extensin de la ciudad y la intensa actividad en el borde, con el desembarco de hombres y mercaderas ,plazas de carga de carretas, depsitos en las cercanas, la aduana , la actividad comercial con su bullicio y colorido son los elementos protagnicos del paisaje urbano. Los edificios especializados (Procuradura) reemplazan a las anteriores vivienda- depsito. Tentativas de construir un puerto, La ciudad sigue siendo blanca, desde 1780 van se deja de usar el techo de tejas y aparece una nueva imagen con las azoteas y pretiles. El verde sigue en el espacio privado que cada vez tiene menos espacio por la divisin de los solares originales. Los olores y la contaminacin que se originan en el mercado obligan a algunas regulaciones. Aparece una nueva imagen, la noche con las calles alumbradas con dbiles faroles.

    Perodo de la independencia y las guerras civiles 1810-1850. Apertura del comercio, proteccionismo relativo, bloqueos.

    1) IMPLANTACION: La ciudad crece desde los 40.000 habitantes en 1810, hasta ms de 70.000 en 1850. Este crecimiento que casi duplica la poblacin necesito de infraestructura, viviendas y servicios proporcionales. Se densificaron las reas centrales, extendindose a lo largo de los caminos (Provincias de Arriba), Rivadavia hacia el Riachuelo y la Boca, calle Defensa al Paso de Burgos (Puente Alsina) hacia Santa Fe, hacia Los Santos Lugares de Jerusaln, San Martin. En 1811 se construyen siete puentes para facilitar el trnsito al puerto de la Ensenada. Se pavimentan algunas calles centrales, Iluminacin con faroles de vela de sebo. Se recoge la basura desde 1805. Se organizan los mercados (1821) y los puntos de transferencia de las mercaderas para el comercio interior, playas para carretas. Se organiza un servicio de vigilancia con serenos. Con el desarrollo de la industria del saladero, la ciudad incorpora un nuevo perfil con las altas chimeneas de las graseras (1830), o desde 1845 cuando en las cercanas del convento de San Francisco se construye el Molino de San Francisco con sus cinco pisos, altas chimeneas y motores a vapor (1845). 2) DISEO: con la incorporacin de inmigrantes no espaoles, se traen nuevas formas que modifican las locales, entre ellas las constructivas. La arquitectura incorpora los estilos neoclsico (Pirmide de Mayo 1811, fachada de la Catedral 1821, Arco de triunfo de la entrada al fuerte 1821, Sala de Representantes, Iglesia Escocesa etc.) y el neogtico menos difundido (capilla del cementerio de los disidentes, casa del Gral. ngel Pacheco 1848, etc.). Las luchas y convulsiones de la poca, dejan pocos periodos de paz que faciliten una mayor calidad en la arquitectura Los resultados son de construcciones relativamente simples, adecuadas a un periodo de cambio. Las viviendas sufren pocos cambios con excepcin de casos muy relacionados con los nuevos valores europeos como la casa de Mariquita Snchez de Thompson

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    o la avanzada casa del Gral. ngel Pacheco (1848). Se incorporan algunas componentes para el mayor confort, como las cocinas a la moderna o con cocinas econmicas de hierro (fabrica de cocinas en 1837), braseros o un sistema elemental de distribucin de agua en la casa de Mariquita. Hacia el fin del perodo se complejiza la estructura funcional de las viviendas (gabinetes, salas de costura, antecocinas, escaleras seoriales, se simplifican los antiguos portales coloniales aparecen los dinteles rectos en lugar de los arcos escarzanos. En las formas constructivas se afirma la cubierta plana de azotea incorporando una nueva superficie a la vivienda. Se extiende en las reas centrales: la vivienda en los altos y los comercios en los bajos. Las caballerizas cuando estn en relacin a la vivienda tienen entrada por los fondos. 3) MATERIALIDAD: Se importan maderas blandas (pino, pinotea, etc.) de los pases Blticos y Norteamrica. Se usan rejas y verjas de diseo Neogtico o Neoclsico de origen ingls (catlogos). Se difunden el uso de cielorrasos (telas de brin tensados), cornisas de madera, contramarcos. Hasta mediados de siglo siguen en uso los herrajes forjados de forma neoclsica clavados. En 1845 se tienen referencias de columnas de hierro fundido, chapas de zinc (1847. Mac Cann) cermicas de confeccin artesanal, baldosas (21.9/219), ladrillos (34-17-5-5) caos con enchufe simple, etc. Por otro lado, las cermicas de material seleccionado importadas (Pas de Calais), baldosas de piso de material seleccionado y prensadas con marcas de fbrica. 4) MANO DE OBRA: Es una poca de transicin con la incorporacin de artesanos extranjeros. La construccin sigue siendo simple. Las obras importantes estn proyectadas por arquitectos e ingenieros especializados (Catelin Senillosa - Adams Zuchi Benoit, etc.) y se extienden los talleres para la fabricacin de componente y los artesanos que manejan las nuevas modas (pintores, decoradores, empapeladores, etc.

    Percepcin: El perfil de la ciudad ve surgir muchas construcciones especialmente para la actividad comercial, sobre el Paseo de Julio, desde 1821 con la internacin del mercado, en la Ranchera de los Jesuitas. , a su alrededor se consolidan locales, depsitos, fondas etc. Sobre la Plaza de Mayo se construyen la Recova Nueva (1819) y en 1830 los Altos del Crisol. Estos edificios incorporan nuevas formas del color, al acentuar el contrapunto de fondo y ornato. Con las nuevas ideologas de la Revolucin de Mayo se trata de dar una nueva imagen y el color es un componente fundamental, los edificios importantes que se construyen o completan , lo son con colores contrastados o con los ocres desaturados ( fachada de la Catedral, Arco de entrada en el Fuerte, Iglesia Escocesa etc.) El primer monumento, la Pirmide de Mayo recibe distintos colores segn las ideologas de cada momento: celestes o rosados. En poca del gobierno de Dn. Juan M. de Rosas se extiende el uso del color punz como muestra de adhesin y esto se ve claramente en el interior, en los colores de puertas, ventanas y tambin edificios. Los olores de la ciudad incorporan los muy desagradables que provienen de los cercanos saladeros en barracas, estos van asociando la actividad y la contaminacin .Desde 1805 se recogen las basuras, tambin se las usa para rellenar los pozos de las calles produciendo olores cuando fermentan. La mayor densidad genera por los pozos negros y residuos un aroma desagradable especialmente en verano. Un nuevo olor lo producen las graseras y el molino a vapor de San Francisco, a fin de dispersar los humos se

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    levantan las primeras chimeneas que se destacan en el perfil de la ciudad. El verde sigue en el espacio privado, se incorporan nuevas especies y formas en los jardines (Casern de Palermo).

    Desde 1850 hasta 1880

    Con la incorporacin a pleno de la produccin argentina especialmente las reas de la pampa de economa agropecuaria hay una importante importacin de mercaderas extranjeras.

    1) IMPLANTACION: La ciudad se extiende apoyada en el sistema de transporte ferrocarril (1857), y lneas de tranvas a caballo (1865/1870)- con lo cual se pueden incorporar caseros y pueblos cercanos. La ciudad a partir de 1857 tiene servicio de gas de alumbrado, sistema sanitario (agua y cloacal, 1870), empedrados, puentes y mejoramiento en el puerto, Aduana y muelle de Taylor (1857), muelle de pasajeros complementado con depsitos y sistema de carga. 2) DISEO: Se incorporan fuertemente los modelos de la arquitectura del Renacimiento italiano difundidos por los inmigrantes de ese origen. En las reas suburbanas aparece la arquitectura pintoresca con techos de fuertes pendientes basados en un mayor conocimiento estructural. Se construyen edificios de varios pisos. Se incorporan los servicios centrales conectados a la red domiciliaria (gas, agua y desages). 3) MATERIALES: El componente que transforma los sistemas constructivos es la columna de fundicin y como complemento las vigas de hierro compuestas roblonadas. Tambin se usan cerchas de gran de hierro, entre ellas la viga o las vigas de retcula en los puentes. Las estructuras se basan en el conocimiento cientfico. Hasta fin del perodo se sigue usando la viga de maderas con alfajas y tejuelas en varios rdenes. Se difunde como otras tecnologas la chapa ondulada en reemplazo de las de ripia o paja y la teja francesa (c. 1860) en las cubiertas de mayor calidad. 4) MANO DE OBRA: La incorporacin de una fuerte corriente inmigratoria europea, muchos de ellos artesanos especializados, permite disponer de abundante mano de obra calificada. Es fundamental la de origen italiano, incluso con algunas especialidades regionales como los estucadores venecianos. En la organizacin de las construcciones se destacan los constructores italianos y en el diseo y direccin arquitectos como Canale, Buschiazzo, Tamburini, etc. En los edificios pblicos el Departamento de Ingenieros de la Provincia de Buenos Aires. Entre los profesionales argentinos Prilidiano Pueyrredn quien se haba formado en la Escuela Politcnica de Pars o Bunge en Alemania.

    Percepcin: el perfil de cpulas y torres va quedando sumergido por las nuevas intensidades de la ciudad: la actividad comercial. Se construyen varios muelles de carga y pasajeros, se levanta el imponente edificio de la Aduana como un smbolo de la razn de ser de la ciudad. La organizacin de los gobiernos provincial y nacional que disponen de crecientes recursos permite la construccin de grandes edificios especializados, escuelas, hospitales, administracin etc. , Nuevas formas de la arquitectura, nuevos materiales y nuevos colores. Se extiende el uso de los colores en contrapunto tectnico entre fondo y ornato. En los edificios destinados a la produccin, el trabajo o los depsitos no hay mayor intencin decorativa, y el ladrillo visto es la dominante. El uso de arboles

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    aparece aunque con timidez en la plaza de Mayo con el diseo de Prilidiano Pueyrredn de una plaza a la Francesa. El ESPACIO PBLICO SE DISCIPLINA la plaza deja de ser el espacio multiuso donde el hombre era el protagonista y es reemplazado por otro con canteros, rboles, un cerco para que no entren los caballos, canteros con pasto, ornato, bancos para sentarse y luego con el agua corriente: fuentes con surtidores de agua. Las calles tienen una nueva actividad la incorporacin de mnibus y tranvas a caballo. El alumbrado con lmparas de gas estiran la posibilidad del tiempo y la actividad. La noche va dejando de ser tiniebla. Con los nuevos conocimientos sobre la higiene y la salud se trata de controlar muchas formas de contaminacin. Prohibicin de los saladeros y mataderos en las cercanas. Vaciadero de las basuras alejadas. Olores relativamente controlados. Se extiende los de los humos y aparecen cada vez con mayor intensidad los ruidos mecnicos de las maquinas. El ferrocarril en rpida expansin modifica espacios y posibilidades.

    Desde 1880 a 1914

    1) IMPLANTACION: La ciudad crece hasta incorporar algunos de los partidos vecinos y luego de su federalizacin acenta su carcter simblico. Teniendo como referencia a Pars se realizan varios proyectos para modernizar su trazado. En primer lugar la Avenida de Mayo y en complemento unas diagonales que rematan en edificios significativos. La ciudad incorpora grandes palacios civiles localizados en la zona Norte dejando como reas de vivienda popular las de la zona sur y oeste. El loteo de las antiguas quintas y chacras de Pan Llevar permite la expansin de barrios conectados con 70 lneas de tranvas, mnibus o ferrocarril. 2) DISEO: La construccin basada en las nuevas tecnologas supera los lmites tradicionales. Basados en el ascensor (hidrulico, 1878) y la estructura de hierro rpidamente se elevan edificios que superan los 14 pisos con las Galeras Gemes (1914). Se acenta la diferencia entre las construcciones del rea central con su poder econmico y los barrios con recursos limitados. Los diseos de arquitectura son de amplia variedad destacando hasta los 90 el sobrio renacimiento italiano y luego la arquitectura acadmica. Desde comienzos de siglo se ven algunos ejemplos de influencia Art Noveau pero que muchas veces son solamente un tratamiento de fachada. Las formas de la construccin pasan de ser abiertas con patio a partidos compactos basados en la posibilidad de la luz elctrica (1886). Los servicios sanitarios se incorporan en las cercanas de los locales principales a partir del water closet y el agua corriente. 3) MATERIALES: A partir de 1880 se construyen estructuras de hierro normalizadas con distintos tipos de perfil. Para los cerramientos horizontales se usan bovedillas de ladrillo. Los remates se construyen con mansardas de pizarra y zinc con muchos elementos ornamentales. Se difunden los asesores elctricos primero con motores de corriente continua luego alterna. Para elevar el agua se usan bombas elctricas. En las aberturas se incorpora elementos de ventilacin como las banderolas. Los espacios centrales se cubren con grandes claraboyas. Las terminaciones superficiales usan para exteriores la piedra Pars a veces coloreadas y con esgrafiados. En las reas de menor capacidad de resistencia de los suelos (La Boca) se usaron sistemas constructivos livianos basados en estructuras de madera aserrada forradas con tablas y a partir de 1890 con chapas onduladas, todo coloreado con tonos simples. Otro material que tuvo

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    gran influencia en la construccin fue primero la tierra romana en las ltimas dcadas del siglo XIX. Primero se lo us en la construccin de baldosas calcreas para refuerzo de bases y partes vulnerables de muros y revoques. En 1906 se lo utiliza como parte de la estructura de hormign armado diseada por el Arq. Le Monier en el Yacht Club de Buenos Aires. En 1911 el Arq. hngaro Kronfuss us estructura de hormign armado portante en el Hotel de Inmigrantes. En 1919 el Arq. Palanti lo utiliza para la estructura de hormign armado del rascacielos ms alto de Buenos Aires (80 m.) el Pasaje Barolo. 4) MANO DE OBRA: Se acenta la calidad de la mano de obra para soluciones tcnicamente cada vez ms complejas. Esto va acompaado del aprendizaje de la mano de obra local. Se organizan escuelas tcnicas (1899) para la preparacin de tcnicos. Desde 1870 se organiz en la Facultad de Ciencias Exactas la Escuela de Ingeniera, de la cual surgieron muchos de los profesionales nacionales entre los que se destac el Ing. Luis A. Huergo. Un elemento importante en el desarrollo de los modos y organizacin de las obras fue el aporte de las empresas europeas contratados para las grandes obras nacionales.

    Percepcin: La ciudad tiene un nuevo perfil especialmente con las posibilidades del hierro y el ascensor sobre la Avenida de Mayo se construyen edificios que aunque NORMALIZADOS en sus fachadas, TIENEN IDENTIDAD EN LA DIVERSIDAD tratando de dar una nueva imagen de ciudad MODERNA con referencia en Pars. La ciudad se llena de proyectos en funcin de la modernidad del momento. Se demuelen viejos edificios, se abren diagonales incorporando un nuevo marco escnico que remataran en edificios paradigmticos. La percepcin del centro de la ciudad se modifica adquiriendo una ESCALA MONUMENTAL que va perdiendo intensidad cuando se aleja de las grandes avenidas. Los olores dominantes han perdido cualquier referencia al campo, dando lugar al intenso trnsito y su contaminacin. Casi no hay olores referenciales en la ciudad estos aparecen en los bordes: el puerto o el riachuelo, la Reserva ecolgica o el rea de los parques.

    La idea de patrimonio cultural ha sido asociada durante muchos aos a las obras que expresan la excelencia de la labor humana y por tanto se han valorizado algunas y olvidado otras, las ms. Creemos que la idea de autenticidad est en las cosas que conforman el patrimonio cultural de un pueblo teniendo una lectura equilibrada, que exprese e integre a las diferentes modalidades del accionar del hombre frente a su circunstancia histrica.

    En otras ocasiones la falta de autenticidad es el resulta