daniel samper ospina: la caricatura hecha texto angélica
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Daniel Samper Ospina: la caricatura hecha texto
Angélica María Casallas Perea
Trabajo de grado para optar por el título de Comunicadora
Social
Campo profesional: Periodismo
Director: Federico García Naranjo
Pontificia Universidad Javeriana
Facultad de Comunicación y Lenguaje
Carrera Comunicación Social
Bogotá
2011
"La Universidad no se hace responsable por los conceptos emitidos
por sus alumnos en sus tesis de grado. Sólo velará porque no se
publique nada contrario al dogma y a la moral católica, y porque las
tesis no contengan ataques o polémicas puramente personales.
Antes bien, se vea en ellas el anhelo de buscar la verdad y la
justicia".
[ARTÍCULO 23, REGLAMENTO ACADÉMICO DE LA PONTIFICIA UNIVERSIDAD
JAVERIANA]
Bogotá D.C, mayo 30 de 2011 Doctor JOSE VICENTE ARIZMENDI Decano Académico Facultad de Comunicación y Lenguaje Pontificia Universidad Javeriana Bogotá Señor Decano: Por medio de esta carta me permito presentar mi trabajo de grado, titulado Daniel Samper Ospina: la caricatura hecha texto, en el cual se hace un análisis de la opinión política nacional basada en el humor y las perspectivas de este columnista. La tesis fue hecha bajo la dirección del profesor Federico García Naranjo y la presento como requisito para obtener el título de Comunicadora Social con énfasis en periodismo Agradeceré su atención. Atentamente, Angélica María Casallas Perea C.C 1.019.029.460 de Bogotá D.C
Bogotá D.C, mayo 30 de 2011 Doctor JOSE VICENTE ARIZMENDI Decano Académico Facultad de Comunicación y Lenguaje Pontificia Universidad Javeriana Bogotá Señor Decano: Por medio de esta carta me permito presentar el trabajo de grado titulado Daniel Samper Ospina: la caricatura hecha texto, realizado bajo mi dirección por la estudiante Angélica María Casallas Perea para obtener el título de Comunicadora Social con énfasis en Periodismo. En él se hace un análisis de la opinión política nacional basada en el humor y las perspectivas de este columnista, como un aporte al periodismo, la opinión y la Universidad. Agradezceré su atención. Atentamente, Federico García Naranjo CC. 80.502.690 de Usaquén.
FORMATO RESUMEN DEL TRABAJO DE GRADO CARRERARA DE COMUNICACIÓN SOCIAL
Este formato tiene por objeto recoger la información pertinente sobre los Trabajos de Grado que se presentan para sustentación, con el fin de contar con un material de consulta para profesores y estudiantes. Es indispensable que el Resumen contemple el mayor número de datos posibles en forma clara y concisa.
FICHA TÉCNICA DEL TRABAJO Autor (es): Nombres y Apellidos completos en orden alfabético)
Nombre(s): Angélica
María
Apellido(s): Casallas
Perea
Nombre(s): Apellido(s):
Nombre(s): Apellido(s):
Nombre(s): Apellido(s):
Campo profesional: Periodismo Asesor del Trabajo Federico García Naranjo Título del Trabajo de Grado: Daniel Samper Ospina: la caricatura hecha texto Tema central: Análisis de la columna de humor político de Daniel Samper Ospina en la revista Semana.
Subtemas afines: Humor, Sátira, Periodismo de Opinión
Fecha de
presentación:
Mes: Mayo Año: 2011 Páginas:
II. RESEÑA DEL TRABAJO DE GRADO
1. Objetivo o propósito central del
trabajo:
El trabajo de grado tiene como objetivo hacer un análisis de la columna escrita por Daniel Samper Ospina en la Revista Semana por medio del análisis de los recursos narrativos más frecuentes, la estructura, los tropos y los temas frecuentes. Además, hacer una exposición de la importancia del humor y lo cómico a través de la historia y mostrar los antecedentes colombianos del periodismo de opinión basado en el humor, además de los modelos satíricos que influenciaron a Samper Ospina.
2. Contenido (Transcriba el título de cada uno de los capítulos del Trabajo)
1. La risa y lo cómico como expresión de lo humano
2. Periodismo, opinión y humor
3. Daniel Samper Ospina. El columnista y la columna
3. Autores principales (Breve descripción de los principales autores
referenciados)
Henri Bergson: Filósofo francés nacido en París, miembro de la Academia de Francia en 1914 y ganador del Premio Nobel de Literatura en 1927. Escribió La Risa, un ensayo basado en su apreciación acerca de esta expresión humana y los antecedentes históricos de su estudio. Sigmund Freud: Médico y psicólogo europeo padre del psicoanálisis y uno de los pensadores más importantes del siglo. Escribió más de 100 publicaciones entre las que se encuentran: Sicopatología de la vida cotidiana, La interpretación de los sueños y el Chiste y surelación con lo inconsciente. Maryluz Vallejo Mejía: Periodista de la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín y actual profesora de la Universidad Javeriana en Bogotá. Reportera y editora cultura del periódico El Mundo durante seis años, es la autora del libro La crítica literaria como género periodístico, de la antología La crónica en Colombia y A plomo herido. Una crónica del periodismo en Colombia. Actualmente es directora de la revista Directo Bogotá de la Universidad Javeriana. Daniel Samper Pizano: cuentista, periodista y novelista colombiano considerado el padre del periodismo investigativo en Colombia. Abogado de la universidad Javeriana y columnista de El Tiempo y Carruse. Ha escrito 25 libros entre compilados de sus columnas, antologías periodísticas y relatos de humor. Es el padre de Daniel Samper Ospina Lucas Caballero Calderón: Columnista de El Tiempo y El Espectador, y uno de los satíricos más importantes en la historia del país. Conocido por el seudónimo Klim, publicó varias recopilaciones con lo mejor de sus columnas.
4. Conceptos clave
Humor Risa Periodismo de opinión Sátira política
5. Proceso metodológico.
Este trabajo teórico y de análisis basado en la columna de Daniel Samper Ospina para la Revista Semana. Fueron leídas un total de 147 columnas de las cuales fueron elegidas 15 para hallar los recursos más importantes del estilo de Samper Ospina. Antes de entrar en su columna, hay un resumen de los principales conceptos del trabajo de grado y una exposición de los estudios y antecedentes en materia del humor, la sátira, el periodismo y la opinión.
6. Reseña del Trabajo
Este trabajo de grado contiene un análisis de la columna de Daniel Samper Ospina en la Revista Semana y contiene una investigación acerca del significado del humor, lo cómico y la sátira a través de la historia y el punto de vista de varios autores importantes. El análisis está basado en el hallazgo de categorías como figuras literarias, tropos, recursos implementados por el columnista, ingenio, filias y fobias y propuestas propias como apodos y terminología particular. Así mismo, evidencia el proceso de cambios por el que atraviesa Colombia año tras año, mes a mes, día a día y su repercusión en el discurso de un columnista satírico como Samper. Además, evidencia los cambios en la opinión pública y las dinámicas informativas de Colombia teniendo en cuenta la periodicidad de la columna (cada 8 días) y los hechos que la marcan. Además, brinda un contexto del país desde mediados del año 2008 hasta principios del 2011 para entender los temas y conceptos de los que se burla Samper en su columna.
A mi mamá, el motor de mi vida por darme todo lo que tengo en la vida, por su
dedicación, por se la mejor madre del mundo. Porque ella más que nadie merece la
dedicatoria de esta y todas las cosas trascendentales que ocurran en mi vida
A mi papá por su comprensión y porque de él heredé la chispa del humor
A Federico García por su magnífica asesoría y acompañamiento en este trabajo de
grado y por ponerme un paso más cerquita del sueño periodístico que he tenido
desde siempre
A Daniel Samper Ospina por ser la inspiración de este trabajo de grado y por tantos
momentos de risas, sonrisas y diversión con su columna. Por abrirme las puertas de
su oficina, de su vida y de su obra para plasmarlo en estás páginas
A Juan Pablo, porque llegó en el momento más indicado
INDICE
1. Introducción …………………………………………………………………….……… 10
2. El humor y lo cómico ……………………………………………………………..… 12
2.1 Principales teorías del humor y lo cómico …………………..……. 13
2.2 La Comedia Griega ………………………………………………………….. 17
2.3 Una visión particular de la risa …………………………….…………. 19
2.4 El humor y sus derivados ……………………………………….………… 22
2.5 La Sátira ………………………………………………………………………… 24
3. Periodismo, opinión y humor ……………………………………………….…… 26
3.1 Periodismo e información ……………………………………………….. 26
3.2 La opinión y sus recursos ……………………………………….………… 29
3.3 Colombia y el humor a través de la historia ……………………… 32
3.4 Klim, el modelo de modelos ………………………………………..……. 37
3.5 Daniel Samper Pizano: el papá del humor …………………..….… 43
4. Daniel Samper Ospina: el columnista y la columna ………….……….… 49
4.1 ―El humor te da un carné de impunidad‖ …………………...…….... 50
4.2 El país del que se burla Samper Ospina …………………..…………. 53
4.3 El discurso de Samper Ospina ……………………………………......... .61
5. Conclusiones ………………………………………………………………….……..….. 95
6. Bibliografía …………………………………………………………….…………....…… 98
10
INTRODUCCIÒN
Reírse de las desgracias o situaciones poco alentadoras que ocurren día a día en
Colombia no representa ningún problema para Daniel Samper Ospina, el columnista
más agudo y mordaz que se lee hoy por hoy en Colombia. De su pluma pueden brotar
las sátiras, ironías y burlas más crueles, o las críticas y reflexiones más profundas.
Samper Ospina ha logrado que muchas personas comiencen a leer la Revista Semana
desde la última página y no desde la primera, y sin duda es uno de los periodistas de
opinión más leídos de nuestro país.
Este trabajo de grado tiene como objetivo analizar el humor como una de las
expresiones propias y únicas del ser humano —además de otras características—, y
hacer un recorrido por los principales estudios que se han hecho de la risa y lo cómico
a partir de autores importantes y representativos para la historia de la filosofía, la
política, la literatura y el periodismo.
Antes de ser concebida, esta tesis pretendía retomar la historia del humor en
Colombia y hacer un listado de los principales antecedentes de Samper Ospina en el
humor político colombiano, sin embargo, estos ya estaban registrados en varias
investigaciones y en libros como A Plomo Herido, en el que Maryluz Vallejo Mejía
entregó una completa historia del periodismo colombiano. A medida que se fue
estructurando, el trabajo dio un giro hacia los modelos más parecidos a Daniel
Samper para pasar a listar varios de los humoristas y sátiros más representativos del
país a través de la historia.
Para entrar al análisis del discurso de Daniel Samper Ospina lo primero que se debe
tener en cuenta es la definición de los conceptos de la risa, el humor, lo cómico y la
sátira desde la perspectiva y el estudio de autores como Kant, Aristóteles, Platón,
Hegel, Hobbes y Darwin, entre otros. Pasando por la comedia griega, la concepción
freudiana del chiste y los postulados sobre la risa de Henri Bergson, hay una clara
delimitación de los conceptos más importantes del trabajo de grado y de los
elementos necesarios para entrar al mundo de Daniel Samper y su discurso
humorístico, pues, sin entender la importancia y utilidad del humor sería
prácticamente inoficioso leer y comprender la seriedad que implica y lo que se
esconde detrás de una sátira de carácter político o social.
11
Posteriormente, se expone la importancia del periodismo y del periodismo de
opinión, específicamente, a través de la historia del mundo. Más que la necesidad de
información y de registro de los hechos más importantes de la cotidianidad del
planeta, se evidenciará la función reflexiva de la opinión y su carácter de análisis, el
cual, no es más que la muestra principal para demostrar que el único compromiso
que adquiere el periodismo es con sus ciudadanos. ¿Por qué la principal? Por el hecho
de tomar la información o los sucesos y hacer un análisis o una reflexión —que es en
últimas lo que hace el periodismo de opinión, además de ser formador de opinión
pública— desde uno o varios puntos de vista , y no sólo informar sin aclarar por qué
es importante la difusión un hecho determinado.
Después de conocer los antecedentes y funciones del género y explicar el carácter
puramente técnico de una columna de opinión, hay una completa lista de lo que ha
sido el humor y la sátira —desde el periodismo— en nuestro país. Desde las primeras
publicaciones que molestaban a la Iglesia y a los miembros del poder y que fueron
piezas importantes en la historia de la nación, hasta los modelos más recientes de
Samper Ospina en el humor escrito, pues de nombrar y analizar a cada uno de los
exponentes de la sátira en Colombia tendríamos que hacer, prácticamente, otra tesis
de grado entera.
Finalmente, en el capitulo tres nos topamos con Daniel Samper Ospina. Después de
conocer un poco sobre su vida personal y su historia en el periodismo y las letras nos
dedicaremos a analizar su discurso tomando como modelo 15 columnas escritas por
Samper en distintos momentos claves del contexto y la historia del en la revista
Semana. Obviamente, para lograr una reacción efectiva en el lector —en pocas
palabras, para que quien lea las columnas o el análisis, se ría— hay un contexto de esa
Colombia de la que se Burla Daniel en sus columnas, además de un contexto
particular de cada texto.
En ese análisis quedarán en evidencia los recursos, figuras literarias o tropos que
utiliza Samper para articular sus sátiras y la manera en que estas determinan su
discurso. Se tomarán como referencia las frases o párrafos más dicientes de las
columnas y se buscará aquello que se esconde detrás de las ironías, las metáforas o
los chistes sobre este país del que nosotros también nos burlamos a diario.
12
CAPITULO UNO
La risa y lo cómico como expresión de lo humano
El ser humano es un miembro del reino animal, mamífero de orden primate,
perteneciente al género Homo y la especie Sapiens Sapiens. De la familia de los
homínidos a la que también pertenecen sus parientes cercanos los orangutanes,
gorilas, chimpancés y bonobos1.
Decir parientes cercanos resulta un poco inapropiado. Tal vez el parentesco más
cercano para nombrarlos es el de primos hermanos de los humanos, ya que, por
ejemplo, con el chimpancé compartimos el 95% del genoma2.
Sin embargo, son los seres humanos los únicos animales sobre la Tierra con un
cerebro altamente desarrollado para pensar, comunicarse, inventar y reír. Sí, reír, a
pesar de que varios estudios recientes han sugerido que los animales responden a
ciertos estímulos con algo que, asociado al hombre, podría ser la risa.
La diferencia que hay entre los perros, ratas y chimpancés a quienes después de
hacerles cosquillas emitieron sonidos que podrían parecer carcajadas3, y los
humanos, es que las ratas no se ―reirían‖ si leen un chiste escrito en un papel o
después de haberse comunicado por medio del lenguaje articulado porque es obvio
que no cuentan con esas habilidades.
La risa, como reacción a un estímulo no propiamente físico es un acto meramente
humano. El cerebro desarrollado nos permite observar y entender las cosas o
situaciones que son captadas a nuestro alrededor, produciendo diferentes
sensaciones entre las cuales la acción de reír es una de las más comunes.
Charles Darwin también se refiere a los movimientos similares a la risa que se pueden
observar en los primates en su libro The Expresión of the Emotions in Man and 1 “Hominidae” (2011) [en línea], disponible en: http://es.wikipedia.org/wiki/Hominidae, recuperado: 17 de
febrero de 2011. 2 Íbid.
3 Panksepp, Jaak (2005, abril), “Beyond a Joke: From Animal Laughter to Human Joy?”, en Science Magazine
[en línea], vol. 308, núm. 5718, disponible en http://www.sciencemag.org/content/308/5718/62.summary,
recuperado: 17 de febrero de 2011.
13
Animals, sin embargo, se detiene a analizar los rasgos de la risa humana y los
sentimientos que la impulsan. El científico inglés que dedico su vida a estudiar la
naturaleza y el origen de la especie humana, analiza la risa como un conjunto de
sonidos y gestos que son una expresión de placer. Es claro que los sonidos de las
carcajadas o de la risa son comparables con otros que son causados por el placer y se
representan en aspiraciones entrecortadas y prolongadas inspiraciones. Charles
Darwin también analiza la gesticulación de la risa humana y explica que la forma en
que tradicionalmente se abre la boca y se aspira debe ser la adecuada para que el
sonido se produzca correctamente. De hecho, Darwin se detiene también en explicar
la función de las comisuras de la boca, importantes debido a que la boca humana no
se puede abrir lo suficiente de manera vertical, por lo que necesita una manera para
poder hacerlo horizontalmente.
De acuerdo con esa acción a la que los estudios y teorías han llamado ‗lo risible‘ o
hilarante; lo cómico, es decir, lo que convierte las acciones o eventos en algo risible,
ha sido uno de los objetos de estudio más frecuentes en la historia de los grandes
escritores e investigadores y su análisis es determinante para entender la importancia
de un columnista como Daniel Samper Ospina, quien por medio del humor y
también hace una carga importante de crítica al poder nacional, siendo una de las
maneras más acogidas por los lectores colombianos.
Principales teorías del humor y lo cómico
La risa se ha estudiado a partir de diversas teorías propuestas por los grandes
escritores de la historia. Según Platón, es una reacción producida por un sentimiento
que hace participar simultáneamente el placer y el sufrimiento pues, en efecto, reír
ante las desgracias de un amigo es también regocijarse ante su sufrimiento, lo cual,
implica algo de malicia4. De acuerdo con su análisis, la malicia es algo imprescindible
a la hora de calificar un evento o asunto como risible.
Sin embargo, Aristóteles difiere del hecho de que la malicia esté presente en la
mayoría de las circunstancias de lo risible pues desde su punto de vista es algo poco
ético. Los defectos o la propia fealdad resultan ser cómicos en ciertas situaciones, lo
4 Platón, “Resumen histórico de las teorías vinculadas a la risa” en Piddington, P. (comps.), Psicología de la
Risa. Buenos Aires. Ed. La Pleyada, pp. 127.
14
cual, no determina que haya dolor o malicia a la hora de reír. Desde ese punto de
vista, estético, la risa es una reacción acorde con el hecho de observar algo llamativo o
diferente a lo habitual.5Aristóteles, admite el hecho de que las bromas o los chistes
permiten que las personas experimenten placer debido a que son un factor que aísla
un poco la seriedad del diario vivir, sin embargo, no se fía mucho de aquellos que
abusan de lo cómico.
El considerado padre de la filosofía moderna, Descartes, habló del humor y de la risa
en la modernidad, considerando a la malicia como un elemento determinante. Según
su análisis, hay momentos de alegría producidos por el mal que recae en alguien que
lo merece, a pesar de que ese mal pueda hacernos sentir apenados en otras
circunstancias. De hecho, Descartes reconoce que la ridiculización es útil siempre y
cuando sea un recurso correctamente utilizado para hacer una burla satisfactoria de
algún hecho o personaje y llega a considerar una cualidad cuando quien hace una
burla o quiere poner en ridículo a alguien, lo hace con la única intención de mostrar
su buen humor, sin necesidad de caer en el egocentrismo de quién ríe de sus propios
chistes. 6 Es precisamente la ridiculización, uno de los elementos clave al momento
de hacer un análisis sobre el discurso de Daniel Samper Ospina en su columna
semanal.
Sea cual sea el acto que genera una reacción de risa, está claro que debe ser
inesperado y sorpresivo. En ese sentido, el filósofo inglés Thomas Hobbes, aparte de
ser heredar a la política de occidente gran parte de lo que es hoy la política en
occidente, se refiere a la risa en Human Nature desde un punto de vista psicológico,
poco común hasta ese momento en los escritores modernos. La risa dice Hobbes es
una expresión exterior de la alegría, producida no solamente por un chiste o una
burla. La risa es un sentimiento ligado, de cierta manera, al poder y la dominación.
Este factor, tradicionalmente ligado a la política, y del cual se discutirá durante gran
parte de este trabajo de grado, se hace evidente cuando la risa recae sobre otro
hombre, pues es un hombre ―sobre el que se triunfa‖7.
Incluso Charles Darwin también habla sobre el tema de la dominación a partir de la
risa y asegura que reír de otra persona es una muestra de desprecio. En caso de que la
5 Aristóteles, Ibíd, pp. 128
6 Descartes, Ibid, pp. 135
7 Hobbes, Ibid. Pp. 135
15
risa sea producida como expresión posterior a una ofensa también sirve para
―mostrar a la persona ofensora que sólo provoca diversión‖8
Aunque la risa pueda llegar a ser una representación de dominación en determinados
momentos, es también una representación artística y placentera. Tal es la
consideración del filósofo Immanuel Kant quien compara los sentimientos
producidos por la música con los de lo cómico. Incluso, el filósofo alemán que con sus
estudios sobre el empirismo ─ teoría que hace énfasis en la experiencia como
elemento determinante en la formación y obtención del conocimiento─ y el
racionalismo marcó una época de oro en el pensamiento europeo de La Ilustración, lo
cómico y la música producen sentimientos de placer al generar estímulos similares en
las dos circunstancias. De hecho, Kant va más allá de los análisis filosóficos o
psicológicos y afirma que incluso el acto de reír trae beneficios a la salud pues
―sentimos el efecto de ese aflojamiento en el cuerpo, por la oscilación de los órganos
que promueve la restauración del equilibrio y tiene una favorable influencia sobre la
salud‖.9 Sus consideraciones concuerdan con estudios y análisis actuales en los que la
risa es parte fundamental de tratamientos médicos o de terapias para el apoyo de
enfermos crónicos o terminales.
El humor y lo risible, que podrían ser elementos pocos serios, son considerados por el
filósofo alemán Georg Wilhem Friederich Hegel como un signo de ingenio del que lo
expresa. Haciendo una distinción entre lo ridículo, que resulta algo opuesto al
ingenio, y lo cómico, la risa es ―una expresión de sagacidad autosatisfecha‖10,
argumento un tanto comparable con el análisis hobbesiano sobre la dominación y el
poder ejercido sobre quien recae una burla. Hegel también apunta a la risa producida
por el contraste entre lo real (la esencia) de un objeto y su apariencia o
representación, lo que podría resultar ridículo en cierto sentido.
Esa risa causada por la confusión o malentendido entre la apariencia de un objeto y la
realidad es también una de las explicaciones de lo risible que entrega Arthur
Shopenhauer. El filósofo alemán basó su estudio sobre la risa precisamente desde el
punto de vista anterior, en el que la representación y la apariencia juegan un papel
determinante. ―La causa de la risa en cada caso reside, simplemente, en la súbita
8 Darwin, Ibid, pp. 155.
9 Kant, Ibid, pp. 143.
10 Hegel, Ibid, pp. 144.
16
percepción de la incongruencia entre un concepto y los objetos reales que fueron
pensados a través de él en alguna relación, y la risa misma, es justamente la expresión
de ésta incongruencia (…) toda risa surge por una paradoja y por lo tanto, por
inesperada inclusión, sea ésta expresada en palabras o en actos‖11 En ese sentido, lo
risible es determinado, desde el punto de vista de Shopenhauer a partir de dos
elementos: el ingenio y el desatino, basados los dos en las representaciones reales y
disparatadas de los objetos o situaciones.
Hablando, por ejemplo, de un tema tan complejo como la política, resultaría
impropio o poco razonable mezclarlo con el humor de la manera que lo hace un
columnista como Daniel Samper Ospina, en este caso. Según el mismo Shopenhauer
la seriedad es lo opuesto a la risa, sin embargo, la transición de la seriedad a la risa es
fácil, debido a que entre más seriedad tenga un hombre, mayor será su capacidad de
reír pues ―el hombre serio está convencido que él piensa las cosas tal como son‖, de
ese modo es mucho mas fácil que una burla de la realidad sea más placentera para
quien la conoce a fondo que para quien la ignora.
Uno de los principales aportes a los estudios de la risa y lo cómico lo hizo el padre del
psicoanálisis y uno de los más importantes intelectuales del siglo XX, Sigmund Freud,
quién habló del humor a partir del análisis del chiste y otras manifestaciones cómicas
tradicionales.
Para Freud, el humor se trata de convertir una mala sensación o situación, en un
sentimiento placentero siempre y cuando no esté involucrado ningún afecto de por
medio, de ese modo, se puede dar rienda suelta a sentimientos de hostilidad o malicia
que en otras circunstancias no serían evidentes o habría tendencia a inhibir.
Freud en El Chiste y su relación con el Inconsciente explica que el mismo está
dividido en dos tipos con intenciones diferentes: el chiste con tendencia, con un
propósito claramente determinado, y el inofensivo, que es simplemente una prueba
de ingenio y no tiene un propósito en particular‖12 A su vez, el chiste como elemento
de lo cómico y lo risible, está compuesto por lo que llama el ―ingenio verbal‖ y el
―ingenio pensado‖ y sostiene que es una justificación para volver al estado infantil en
11
Shopenhauer, Ibid, pp. 146. 12
Freud, Sigmund. El chiste y su relación con lo inconsciente. Madrid: Alianza Editorial, 1969.
17
el que jugábamos con las palabras y con la razón. El ingenio busca obtener placer en
el ‗sinsentido‘ utilizando cualquier recurso para convertirlo en algo potencialmente
risible por medio de la caricatura, la exageración, la parodia o usando un disfraz. En
todo caso, el uso ingenioso de algún medio de los enumerados anteriormente
resultará en un evento cómico y eventualmente en una expresión de risa.
La Comedia Griega
Tal vez uno de los primeros acercamientos de la comedia a la política fue el de la
comedia griega, la cual, como género dramático, era un importante componente de la
sociedad junto con la tragedia.
La cotidianidad y la vida de la polis griega eran los temas principales, tanto de las
comedias, como de las tragedias. Las primeras eran obras tan extensas y complejas
como las segundas, de hecho ―igualan o superan en extensión a las tragedias:
transmiten, con la risa, un mensaje de enorme seriedad; alternan lo grotesco y
chabacano con efusiones del mayor lirismo y tienen una estructura formal
complicadísima‖.13
En la comedia griega de la antigüedad empezaba a ser evidente una clara ruptura a la
solemnidad de lo divino y lo político, convirtiéndose en un primer acercamiento a lo
que hoy en día a traspasado al todos los campos en los que no es usual que haya burla
o comicidad.
Frente a la tragedia, la comedia debía presentar un contexto claro a su audiencia y
hacer una muestra evidente de sus antecedentes para que se sepa con exactitud el
tema sobre el que se trata y sobre todo, el tema que se critica, porque es precisamente
la comedia griega de la antigüedad uno de los primeros acercamientos a la crítica y
rebeldía política destacada en siglos y momentos posteriores, pues lo cómico, además
de contemplar un alto contenido psicológico o moral, también responde a un elevado
componente social, lo que es en ultimas el principal alimento de lo hilarante.
Así fue como en la antigua Grecia los hombres comunes, sin ningún tipo de rango
dentro de la élite podían sobrepasar sus límites y burlarse de sus amos, sus dioses, los
políticos, los personajes influyentes y los mismos ciudadanos comunes. Mientras la
13
Gil Fernández, L. (1995), “Introducción”, en Aristófanes, Comedias. España, Gredos, 1995, pp. 10.
18
tragedia se ocupaba de representar los males de la sociedad, las situaciones dolorosas
o los problemas más comunes de los habitantes de las polis, la comedia se encargaba
(y aún hoy se encarga) de descargar las tensiones del pueblo por medio de la risa y
permite al pueblo distensionarse y romper con la dureza de sus propias
desgracias.‖Con la risa se descargan tensiones, operándose, gracias a ella, en el
individuo y en el cuerpo social una purga de pasiones como el resentimiento, una
catarsis cómica, en suma, paralela a la catarsis trágica, objeto quizá de la atención de
Aristóteles en su tratado perdido sobre la comedia.‖14
Sin embargo, así como lo cómico y la risa son una especie de salida de la realidad,
también es un acuerdo establecido entre el público y el humorista, adoptando los
valores propuestos por el cómico y entendiendo sus juicios, pues de no ser así la obra
sería prácticamente irrelevante y no tendría el éxito esperado o por lo menos, la
calidad pare generar expresiones de risa. El comediante debe entregar un contexto
propicio para que el público (o en el caso de Samper Ospina, el lector) comprenda
completamente las críticas, sátiras o burlas de la obra.
En la comedia griega ya empezaban a ser evidentes recursos utilizados actualmente
tales como la parodia y la exageración, elementos que son, en últimas, componentes
principales en la obra a analizar en este trabajo de grado.
La cultura griega de la antigüedad es clave para entender el valor social de la comedia
a través de la historia y la capacidad que tiene de ser digerida por todos los sectores
de la sociedad, desde el más importante hasta el de menor rango. La comedia utiliza
la crítica como un medio efectivo para traspasar las fronteras de lo serio y expone las
vergüenzas de una comunidad y en especial de sus principales integrantes ante sus
propios miembros, hablando de la manera más ácida, tal y como el mismo pueblo
quisiera dirigirse a ellos. El hecho de hacer crítica social por medio de la comedia y el
humor también permite transmitir cualquier tipo de mensaje sin necesidad de pensar
en las implicaciones o consecuencias.
Incluso a través de la historia se ha reconocido a la comedia como uno de los grandes
factores revolucionarios teniendo en cuenta su valoración de la sociedad y sus
componentes. Aristófanes, por ejemplo, el gran exponente de la comedia griega, ya
14
Íbid, pp. 12.
19
mencionaba en sus obras temas que fueron cruciales en el siglo anterior y la
actualidad y esos acontecimientos han llevado incluso a una nueva valoración de sus
comedias. ―Las críticas al poder establecido del movimiento estudiantil del 68, el
clamor por la paz en un mundo peligrosamente dividido en bloques militares, la
revolución sexual y las reivindicaciones feministas, han contribuido, por el contrario,
a la reivindicación de las piezas aristofánicas, que solían mantenerse en pudibundo
olvido. A ello se ha sumado, como consecuencia de la nivelación de las diferencias
entre los sexos y las clases sociales, la supresión de los tabúes lingüísticos, que han
dado mayores posibilidades de versión al cómico. Aristófanes se ha puesto así en
candelero y ha adquirido un insólito aire de modernidad. Se puede decir, sin
exagerar, que es, entre los antiguos, el autor de moda.‖ 15
Una visión particular de la risa
Henri Bergson analiza también las principales características de la comedia clásica y
el teatro contemporáneo. La repetición, la inversión y la interferencia de las
series hacen parte de los elementos más representativos de la comedia, sin embargo,
es evidente que esos elementos se hacen presentes aún en la actualidad, siendo
primordialmente recursos importantes a la hora de concebir una obra de carácter
cómico. Esos recursos también forman parte de lo que en la comedia se conoce como
la farsa que no es más que un mundo posible creado a partir de algo real inmerso en
la sociedad.
La columna sobre la que se sostiene la teoría de de la risa de Bergson es la de lo
propio y únicamente humano y como tal, está atravesado por los sentimientos. De
hecho, el autor asegura que el peor enemigo de la risa es la emoción, debido a que
resulta de cierta manera imposible evitar la risa ante las desgracias de un semejante,
máxime cuando sentimos cariño por él. En esa medida, lo cómico en incluso la burla
permite que los dramas de la vida no sean tan duros como sí lo serían en otras
situaciones. El humor y la comedia se convierten entonces en una necesidad social
para aliviar las imperfecciones de la realidad. Ese alivio proviene gracias a la risa. De
acuerdo con eso y como él mismo lo dice, ―para producir todo su efecto, lo cómico
exige algo así como una momentánea anestesia del corazón, para dirigirse a la
15
Ibíd, pp. 57.
20
inteligencia pura‖16 Es en ese sentido que lo cómico y la risa son una expresión
producida mucha veces ―en contra de la voluntad de otro‖.
Bergson, es enfático en demostrar que la risa o la burla es una expresión que se
genera en contra de la voluntad propia o de otro. En ese caso, es pertinente analizar el
ejemplo de una caída o un accidente sufrido por una persona. De no ser involuntaria
la situación que impulsa lo cómico muy seguramente la risa no sería la reacción que
la concluye.
Otro aspecto importante para analizar el estudio de Bergson sobre la risa es el hecho
de ponerla el contexto determinado en el que se produce. Para el filósofo francés,
ganador del Premio Nobel de Literatura en 1927, ―la risa debe responder a ciertas
exigencias de la vida común y tener una significación social‖17 En ese sentido, cierta
situación, obra, texto o cualquier elemento que resulte cómico deberá su
característica de risible al significado que tenga en una sociedad. Seguramente lo que
para una comunidad resulte cómico, para otra pueda que no lo sea y que incluso se
asocie a lo ofensivo.
Bergson hace referencia al humor expresado por las palabras y al humor concebido a
partir del lenguaje y recalca que existe una diferencia importante entre los dos. El
humor que deviene a partir de la palabra es capaz de romper las fronteras de los
idiomas, aunque debido a la diversidad cultural pueda perder un poco de significado;
sin embargo, el humor que se crea a partir del lenguaje está basado en la
construcción de la frase, la selección de las palabras, el contexto en que se produce y
la cultura que lo determina.
Henri Bergson, también centra su análisis en lo risible que resultan ser ciertos objetos
inertes que al ser asociados con gestos o formas humanas llegan a ser cómicos.
Solamente el hombre al asociar dichos objetos con sus propias expresiones termina
en una expresión de risa. En el caso del caricaturista o del humorista, es la
caracterización de esos elementos y su asociación con expresiones humanas, lo que
genere risa en ciertas situaciones. Todo, debido a que la comedia está basada en las
situaciones que imitan la vida real.
16
Bergson, H. (1959), La Risa, Buenos Aires, TOR, pp. 12 17
Ibíd, pp. 14.
21
Esos elementos en la caricatura resultan cómicos debido a que el caricaturista los
expone ante la sociedad de una manera diferente a la que percibimos a diario,
logrando plasmar incluso los objetos menos pensados de nuestro entorno y darles un
significado determinado a los ojos de los demás. No sólo la atribución de actitudes
humanas sino la exageración de los defectos o incluso cualidades, son los recursos
más utilizados en la caricatura, poniendo como precedente lo que a simple vista no se
observa de algo o de alguien e incluso lo que los propios lectores o público quisiera
enfatizar acerca de esos personajes, pues ―agravando la fealdad, llevándola hasta la
deformidad, veremos como de lo deforme se pasa a lo ridículo‖. En ese sentido los
textos de Daniel Samper Ospina son una perfecta caricatura escrita de lo que sucede
con la política colombiana.
La relevancia que tiene el autor de una comedia o en el caso de Samper Ospina de
una sátira, también es importante debido a que no todos los chistes o bromas
producen la misma expresión en el público, en este caso la risa, aunque en ese sentido
Bergson es enfático al decir que ―sería conveniente establecer una distinción
importante entre lo cómico y lo ingenioso‖ y agrega: ―estoy por creer que una palabra
resulta cómica cuando nos reímos de quien la dice, e ingeniosa cuando nos reímos de
un tercero o de nosotros mismos. Pero lo más común es que no nos sea posible
distinguir si la palabra es cómica o ingeniosa, resultando sencillamente risible‖. 18
De hecho, Bergson es consciente que cualquier episodio, por más doloroso que
resulte, puede llegar a ser cómico de la manera en que nos sea presentada por el
autor, en cierto modo el autor debe insensibilizar al público para hacer de cualquier
situación algo risible.
El humor no se logra únicamente por medio de bromas o chistes o simplemente por
el uso del lenguaje o las palabras de una manera determinada. Hay varios elementos
que se pueden conjugar para lograr un efecto cómico o crear toda una comedia
basada en sus características y algunos de ellos fueron nombrados por Henri Bergson
en su estudio sobre la risa.
18
Ibíd. pp. 85
22
La exageración es un recurso importante para lograr que algún aspecto de la
realidad sea cómico. Algo que se exagera es algo que, aparte de ser agrandado, es
reiterado y genera risa. La exageración hace que algo no propiamente cómico termine
siendo risible. Por otra parte, lo cómico puede crearse a partir de la expresión de,
exactamente, lo contrario de aquello que se quiere decir. A este recurso se le llama
ironía y pretende ridiculizar la realidad o simplemente crear una paralela para
volverla risible.
El Humor y sus derivados
No existe una definición puntual del humor como acción o como estado. Incluso la
definición de la Real Academia Española contempla varios conceptos que envuelven
el humor: ―genio, índole, condición, especialmente cuando se manifiesta
exteriormente; jovialidad, agudeza; disposición en que alguien se halla para hacer
algo; estado afectivo que se mantiene por algún tiempo…‖19
Teniendo en cuenta la diferencia que hay con la alegría, por ejemplo, que es un
sentimiento que puede producir risas y sonrisas pero no siempre a partir de una burla
una comedia o una sátira, es importante aclarar que el humor no siempre está
asociado lo cómico, sino, por el contrario, es un estado de regocijo espiritual en su
más pura manifestación y no implica malicia (de la manera en que Bergson la
menciona), aunque es común que haga presencia.
El humor como tal, encierra los elementos que lo hacen propiamente humano y las
formas en que se manifiesta. El interés por su estudio se remonta a la antigüedad no
sólo desde el punto de vista de lo cómico y la risa sino, también, del estado de ánimo.
Osvaldo Castilla Correa, profesor de psiquiatría de la Universidad Tecnológica de
Pereira hizo un estudio breve pero muy consistente sobre los conceptos clave que
reúne el humor y sus derivados. Sobre el mismo empezó por explicar que en el siglo
IV a.C, Hipócrates se refirió a los humores como descripción a los temperamentos
sanguíneo, flemático, melancólico y bilioso, que hacían parte de los humoreg,
19
Disponible en: http://buscon.rae.es7draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=humor Recuperado: abril 2
de 2011
23
relacionados con los climas de la Tierra: sangre (caliente), flema o atrabilis (seco),
bilis negra o melancolía (frío) y bilis amarilla o pituitaria (húmedo). 20
Aristóteles habló de la Bilis Negra como un elemento que predispone a las personas
anímicamente de manera que actúan y se comportan de una manera particular. El
filósofo asumía el humor y lo cómico como algo predispuesto en las personas, algo
natural con lo que se nace y del que se hace uso según las situaciones cotidianas de la
vida. De hecho, y teniendo en cuenta lo referente a los climas de la Tierra, Aristóteles
planteó que las personas con bilis negra fría y abundante pueden llegar a ser
estúpidas, perezosas y poco agraciadas, mientras que las que tienen bilis negra
caliente, son extravagantes y de buenos dotes.
Teniendo en cuenta el humor desde el objeto de este trabajo de grado, William Devis
de la revista británica de humor Punch, define el humor de una manera muy parecida
a la de Bergson, como ―la sensación que hace que te rías de aquello que te irritaría si
te pasa a ti‖ 21 y tiene como propósito justificar una reacción de risa ante las desgracia
de los demás. Supone que su propósito es justificar el ―yo‖. El humor desde ese punto
de vista es un escudo ante las desgracias del mundo y una manera de disfrutar, en
cierta medida y hasta cierto punto, de lo que le pasa al otro sin llegar a la apatía. Es
evidente que en el caso de un periodista - humorista como Daniel Samper Ospina, la
burla del otro y de las situaciones cotidianas del país y la política se convierte en una
justificación y una manera efectiva de hacer crítica ante un público que seguramente
disfrutaría haciéndolo de la misma manera si tuviera voz propia.
En ese sentido y teniendo en cuenta la labor que hace Samper Ospina desde el
periodismo de opinión más cercano a la política, es pertinente nombrar a Eduardo
Siltman quien, paradójicamente, habla del humor desde el punto de vista del
malhumorado. Lo que Siltman dice en su libro El Humor Negro, es que ―en realidad
el humorismo es malhumorado, un incursor de los mismos territorios que
ambicionan la úlcera, la demencia y el suicidio‖. Es el caso de la sátira política o la
caricatura en el que hay una intención reflexiva y de oposición, con lo que el humor
en ese caso no es ningún chiste, que aunque produce risa, también implica que quien
lo manifiesta haya tenido una experiencia anterior no muy buena, de rabia o de dolor
20
Castilla Correa, O. (1997) “Psiquiatría y humor: humorismo, comicidad, chiste y psiquiatría”, en Revista
Colombia Psiquiatría, Vot. XXVI, núm 3, 1994, pp. 201-207. 21
Citado en Luján, Néstor. El Humorismo. Barcelona: Salvat, 1973. pp. 19
24
ante alguna situación. Son acontecimientos que no son cómicos ni humorísticos en sí,
sino que se concibieron como actos no muy agradables o poco agraciados.
El caso del chiste es similar y pretende también hacer un tipo de reflexión frente a
algo. Según Sigmund Freud, quien realizó un estudio sobre este elemento en El chiste
y su relación con lo inconsciente, con el chiste se puede contar cualquier aspecto de la
vida por más delicado que resulte sin que la sociedad lo repruebe. El chiste tiene una
composición determinada en cuanto al lenguaje y la semántica, tiene en muchos
casos un doble sentido y parte de la observación y el análisis de la realidad. Es capaz
de tratar cualquier tema referente a la sociedad y la realidad por más sagrado o
repulsivo que resulte y resulta una forma eficaz de hacer críticas y reflexiones. El
chiste admite la crueldad y la malicia, pero también admite la ternura y la
simplicidad, por lo que es adaptable a cualquier situación y persona. El humor, en
cierto sentido, se adapta al hombre pero el hombre se adapta también, gracias al
humor.
Lo cómico, por su parte, es una expresión del humor que tiene una intención
determinada. Lo cómico divierte y hace reír también. Es elaborado por el hombre a
partir del humor que es un estado más natural y una de las principales características
de la propia naturaleza humano.
Lo chistoso, se convierte en risa por medio de la ridiculez y la burla. Es una condición
que produce risa debido a la elaboración de sus argumentos y a lo que implican.
La Sátira
La sátira es un género que, aunque literario, está presente en la mayoría de
manifestaciones artísticas y culturales. Es una forma de expresión que emplea el
humor, la exageración y la ridiculización para atacar la realidad de manera
contundente y para criticar algún elemento de la sociedad o la realidad sin necesidad
de hacerlo con palabras directas o a manera de ‗regaño‘ o reclamo, por lo que a pesar
del uso de los recursos cómicos y del humor, tiene un trasfondo complejo y parte de
una observación y crítica de la realidad.
25
Cómo término, proviene del latín satura. Diomedes, por ejemplo, relacionó la palabra
satura con el adjetivo, también del latín, satur que significa lleno o harto, aunque en
sus inicios fue un género en el que no existía el drama y más bien una mezcla de
varios temas. Se alimenta de la ironía para ridiculizar o mofarse de sus objetivos y
pretende mostrar una realidad posible desde un punto de vista que puede parecer
imposible por medio del uso de varias figuras literarias como la hipérbole, el símil o
la simple burla y ridiculización de algo. 22
Aunque no hay concordancia en si la sátira ha estado presente desde la literatura
griega o fue en Roma, la historia ha convertido a Aristófanes en su protagonista,
aunque el género era ampliamente popular en la sociedad griega y romana, por
supuesto, la misma en la que Lucilio, Horacio y Persio fueron sus principales
exponentes y quienes, de cierto modo, definieron lo que hoy se conoce como el género
literario en sí, que se convirtió rápidamente en una forma de protesta en la que el
pueblo sentía que tenía voz propia para criticar a la elite o burlarse de la alta sociedad
y las costumbres de la manera en que siempre habían querido hacerlo.
A través del tiempo se hizo común que los escritores, literatos y periodistas usaran la
sátira como elemento contundente a la hora de concebir sus escritos y con
exponentes como Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita en España, o Jonathan Swift en
Inglaterra el género se hizo popular y fue ampliamente difundido.
22
Balasch M, Dolc M. (1991) Sátiras [introducción]. Madrid. Biblioteca Clásica Gredos. 1991
26
CAPITULO DOS
Periodismo, opinión y humor
Periodismo e información
La Real Academia Española define el periodismo como la ―captación y tratamiento
escrito, oral, visual, gráfico, de la información en cualquiera de sus formas y
variedades‖23 y varias definiciones más apuntan a las labores que tiene a su cargo.
―Entendemos por periodismo una parte de la comunicación humana destinada a la
transmisión de noticias y cuyas características esenciales son: actualidad,
universalidad (geográfica, temática y social) periodicidad y acceso público‖24. Queda
claro que se encarga de seleccionar y mostrar lo que le interesa al mundo sobre el
propio mundo. ―Es aquella actividad consistente en recabar informaciones,
seleccionarlas, procesarlas, recogerlas en un soporte y ofrecerlas, todo aquello de
modo periódico a un postor o público‖.25 Es decir, a todo aquel que esté interesado en
conocer lo que por medio de él se difunde.
A través de la historia, los hombres han necesitado del periodismo para mantenerse
al tanto de los hechos que suceden diariamente en el planeta. De hecho, la palabra
periodismo se deriva del hecho de conocer periódicamente lo que sucede en el
mundo, más específicamente de la existencia de publicaciones periódicas. Gracias a él
se escribe la historia y se debate sobre los temas de interés del poder y los
ciudadanos.
En la antigüedad, las comunidades se enteraban de los sucesos por medio de la
oralidad, incluso, había personas dedicadas a investigar ciertas personalidades y
23
Disponible en http://buscon.rae.es/DraeI/SrvltComsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=periodismo Recuperado:
Abril 14 2011. 24
Rivadeneira, R. Periodismo, la teoría general de los sistemas y la ciencia de la comunicación. México. Trillas.
1977. pp. 34. 25
Barrera, C. Historia del periodismo universal. Ariel. S. A. 2004. pp. 26.
27
trabajar para ellas manteniéndolos informados de todo lo que ocurriera en los puntos
estratégicos de los territorios de su interés. Se consideran expresiones noticiosas, por
ejemplo, las reseñas que Alejandro Magno hacía sobre sus travesías y victorias, los
murales del Impero Romano, las cartas de Cicerón y las actas del senado romano, que
llegaban a manos del público o de agentes especializados en su conocimiento.
También había expresiones periodísticas o mejor, informativas y de seguimiento en
los mercados de Atenas en la antigua Grecia. 26
A comienzos del siglo XVII, en Inglaterra y Estados Unidos las personas dialogaban
sobre sus aventuras y sobre lo que acontecía en cada uno de sus viajes, cuando se
reunían en los establecimientos públicos. Así fue como se crearon los primeros
periódicos, los cuales recopilaban la información que allí se compartía y la que
generaba bastante interés en las gentes. Los miembros de la política inglesa
empezaron a darse cuenta del interés de los ciudadanos por conocer lo que decían los
periódicos y por mantenerse informado con los hechos que allí se relataban, por lo
que se empezó a hablar por primera vez de la opinión pública. 27 Sin embargo, desde
mucho antes en el planeta ya habían formas de gobierno en la que había era evidente
el poder que tenían muchos con respecto a los ciudadanos de un territorio. Incluso, la
historia de la crucifixión de Jesucristo culpa a la opinión de las gentes, que
prefirieron a Barrabás antes que a Jesús, del calvario y muerte que sufrió el Señor.
Pilatos, se lavó las manos frente a la decisión del pueblo de matar a Jesús y liberar a
Barrabás, el rebelde más famoso de aquel lugar del Imperio Romano. Como esa,
muchas historias se difundieron gracias a la tradición oral y la información no fue la
excepción. Antes que informados, los miembros de una comunidad se creaban una
opinión acerca de la forma de gobierno del quienes estaban a cargo de poder, de
manera que llegaba el punto en que eran escuchados. A diferencia de la información y
―aún sin pruebas escritas, cualquiera puede deducir que, donde hay política —al
menos con las formas que las conocemos hoy—, y mucho más si es el sistema
democrático, debe haber opinión pública‖28
26
Barrera, C. Historia del periodismo universal. Barcelona: Ariel, S.A, 2004. pp. 26. 27
Kovach B. y Rosenstiel T. (2003). Los Elementos del Periodismo, Diéguez A. (trad.), Bogotá, Ediciones El
País, pp. 30 28
Mendoza C. (1989), Opinión Pública y Periodismo de Opinión, San Juan (Argentina). Universidad Nacional
de San Juan. Facultad de Ciencias Sociales. Departamento de Ciencias de la Comunicación, pp. 14.
28
Teniendo en cuenta que la opinión pública y las críticas no eran muy bien recibidas
por los gobiernos, se empezó a gestar un ambiente no muy agradable en el que la
opinión no siempre era un elemento efectivo para generar nuevos ideales.
En el siglo XVII nacieron los primeros periódicos impresos en los cafés de Inglaterra,
los cuales, se dedicaron a la investigación. La publicación The Spie declaró que se
propondrían a ―descubrir las trampas habituales en el gran juego del reino‖. 29
Tiempo después, hacia 1700, en Inglaterra se gestaba un descontento generalizado
hacia la corona que trascendió incluso hasta el continente americano, por lo que dos
periodistas londinenses que firmaban con el seudónimo ‗Catón‘, transmitieron la
idea de que la verdad es el único camino para defenderse de las calumnias. Estos
argumentos servirían posteriormente para comenzar el discurso de la libertad de
prensa en Estados Unidos.
En todo el país se creó un ambiente de libertad informativa que fue consignada en
varias declaraciones y constituciones de estados como Virginia o Massachussets. A
pesar de que Benjamín Franklin y James Madison no tomaron en cuenta las premisas
de una libertad de expresión, el pueblo sería el encargado de exigirla en la
Constitución de sus estados. ―La prensa libre se convirtió así en la primera exigencia
del pueblo a su gobierno‖. 30
El periodismo desde entonces se convirtió en un claro vigilante del poder y un
elemento a favor y entregado enteramente a los ciudadanos, quienes necesitan de la
información para su cotidianidad, pues es innegable que la comunicación y el
periodismo es un factor clave en la realidad del mundo entero y en la forma como las
personas perciben el mundo y los territorios en los que habitan. ―Conocer lo que no
conocemos nos proporciona seguridad, nos permite planificar nuestra vida. Desde
este punto de vista, el intercambio de información se convierte en la base a partir de
la cual se crea comunidad, se conforman las relaciones humanas‖. 31
El periodismo le debe lealtad a los ciudadanos y, sin duda, los ciudadanos necesitan
del periodismo para vivir y mantenerse al tanto de lo que ocurre en el mundo. En un
29
Citado en Kovach B. y Rosenstiel T. (2003). Los Elementos del Periodismo, Diéguez A. (trad.), Bogotá,
Ediciones El País. pp. 30. 30
Kovach B. y Rosenstiel T. (2003). Los Elementos del Periodismo, Diéguez A. (trad.), Bogotá, Ediciones El
País. pp. 31. 31
Ibíd. pp. 29.
29
trabajo común, la obligación de los empleados es obedecer a sus jefes y a la cultura
organizacional de una empresa. En el periodismo, la obligación se adquiere con el
público pues ellos, depositan toda la confianza en él para sus intereses informativos.
―Es un pacto tácito con el lector, oyente o espectador que le dice que las críticas
cinematográficas, por ejemplo, son sinceras, que las reseñas de restaurantes no se
dejan influenciar por los anunciantes, que las noticias no responden a intereses
particulares ni son sesgadas‖. 32
A pesar de que son las empresas periodísticas las que pagan a los reporteros o
periodistas por seleccionar y transmitir la información, es gracias al público que lee,
escucha o prende el televisor, que pueden ejercer su profesión y recibir aquel pago.
A parte de la lealtad y obligaciones con los ciudadanos, el periodismo cumple la
función de ser vigilante del poder y quienes lo conforman. Esta función debe
cumplirse con el objetivo de ―dar a conocer las consecuencias de la acción del poder y
lograr que sean comprensibles. Esto lógicamente, implica que la prensa sepa
reconocer dónde actúa el poder de manera eficaz y dónde no lo hace‖.33 De ese modo
hay un cierto tipo de auditoría permanente hecha desde los medios pero por el propio
público conformado por los ciudadanos, a la elite y los gobiernos. Tradicionalmente
es el periodismo de investigación el encargado de sacar a la luz pública todo aquello
que no esté acorde con los intereses del pueblo en cuanto al bienestar de un territorio,
y de mostrarlo desde muchas perspectivas para hacerlo comprensible, sin embargo, el
periodismo de opinión cumple una tarea importantísima con el hecho de explicar y
ofrecer un punto de vista al lector, en este caso, para que aquellos hechos
transmitidos sean confrontados y entendidos de mejor manera.
La opinión y sus recursos
Kant define la opinión como ―un estado del espíritu, consistente en pensar que una
aserción es verdadera, pero admitiendo la posibilidad de equivocarse por tener uno
conciencia de que la aserción no se apoya en suficientes elementos objetivos y
subjetivos‖.34 Y es que los argumentos que sostienen una opinión están determinados
por las experiencias personales, los sentimientos y los gustos o fobias hacia ciertos
temas, a pesar de que hay un uso evidente de información.
32
Ibíd, pp. 73. 33
Ibíd. Pp. 58. 34
Citado en Mendoza, C. (1989), Opinión Pública y Periodismo de Opinión, San Juan (Argentina). Universidad
Nacional de San Juan. Facultad de Ciencias Sociales. Departamento de Ciencias de la Comunicación. pp. 23.
30
Según Leon Gross, las columnas de opinión resultan gracias a la combinación de la
expositio, la argumentatio y la narratio, presente en menor medida a lo largo de su
construcción a pesar de que existen columnas completamente narrativas con alguna
moraleja u opinión implícita en sus renglones35, como es el caso de Samper Ospina,
de cuyas columnas se pueden deducir opiniones, gustos, pasiones, filias o críticas por
medio de la narración de pequeñas historias inventadas o creadas con un propósito
específico además de hacer simple sátira.
En su obra Curso de redacción, Gonzalo Martín Vivaldi expone dos maneras en las
que el género del artículo de opinión se manifiesta, puede ser un comentario de
interpretación y de análisis o una creación literaria personal que cuenta con tres
modalidades manifestadas en el periodismo español: comentario de política
internacional, comentario de política interior y comentario de política municipal. En
ese sentido, el artículo de opinión comprende muchos más aspectos que la
información no acapararía en toda su extensión. Incluso, los estilos y formas de
exposición de las ideas son tan variados como los temas a tratar:
Artículos de crítica cultural
Ensayo: divulgación científica o doctrinal
Artículo Costumbrista
Artículo de humor
Artículo retrospectivo
Columnas personales36
Incluso, se pueden enumerar una serie de características propuestas para
comprender la disposición de un artículo de opinión y la construcción del discurso.
En primera instancia está la pregunta de ¿qué decir?, acompañada de las pruebas y
razones que se expondrán a lo largo del artículo, lo cual se denomina inventio, la
manera como se ordenan éstas razones es la dispositio, la cual, está mediada
posteriormente por la manera en que esos argumentos y razones son expuestos de
manera verbal, lo que hace parte de la elocutio.37
35
León Gross, T. 81996), El artículo de opinión: introducción a la historia y teoría del articulismo español,
España, Ariel. pp. 156. 36
Martín Vivaldi, G. (1986), Curso de redacción, 20° edición, Madrid, Paraninfo, pp. 168. 37
Santamaría, L y Cassals M.J. (2000), La opinión periodística, Madrid, Grijelmo, pp. 135.
31
En ese sentido y teniendo en cuenta que todo es una construcción personal, en el
periodismo de opinión el periodista crea un tipo de marca personal en la que el
público confía o no. Además, se debe tener en cuenta que, a diferencia de la
información, en la que la publicación o transmisión toma responsabilidad sobre lo
dicho, en este caso es el columnista quien asume la responsabilidad de sus
argumentos, análisis y exposiciones.
En cuanto a los aspectos técnicos de una columna, a diferencia del ya mencionado
comentario, que de todas maneras entra a formar parte de los artículos de opinión,
una columna se caracteriza por su regularidad, de acuerdo con la circulación de la
determinada publicación en que se halle. ―No es frecuente que la columna se dedique
a cualquier tema, por el contrario, cada columna se ocupa de asuntos determinados y
muchas de ellas se caracterizan por una ajustada especialización‖38. La
especialización no es del todo temática pues además de ella hay un estilo propio, tal
como Daniel Samper lo ha hecho desde el principio de su columna usando un toque
de humor y sátira para ridiculizar a cada personaje que semana a semana es noticia
en el país con una impresionante agilidad en pluma y pensamiento para ofrecer cada
ocho días una parodia nueva sobre la realidad colombiana en la política o la
cotidianidad.
De hecho, en La opinión periodística se habla de utilizar un estilo agudo y claro que
evite el aburrimiento, pues este, impide la lectura y comprensión del mismo como
una característica fundamental a la hora de concebir un artículo de opinión. 39
Además de afirmar ―el ideal del artículo periodístico —el artículo periodístico ideal—
es el literario-poético–filosófico—humorístico, que nos dará una amena lección de
cualquier cosa, con grato estilo, profundidad de pensamiento, aliento poético y unas
gotas de humor, de buen humor‖40
―La columna debe su nombre, precisamente, al hecho de aparecer siempre en una
determinada columna —o en dos o en tres— y siempre en el mismo lugar, de la
misma página […] por otra parte, hay que reconocer que no son los diarios los que
38
Mendoza C. (1989), Opinión Pública y Periodismo de Opinión, San Juan (Argentina). Universidad Nacional
de San Juan. Facultad de Ciencias Sociales. Departamento de Ciencias de la Comunicación., pp. 213. 39
Op Cit, pp. 128. 40
Ibíd., pp. 168.
32
más publican columnas especializadas, tampoco son los que más emplean
colaboradores. En cambio, las revistas emplean más frecuentemente este tipo de
artículos y son, por eso, las que más colaboradores tienen‖.41 Para el caso de este
análisis sobre la columna de Samper Ospina, es clave enumerar estas características
debido a la periodicidad de sus entregas y la ubicación de su escrito en la última
página de la revista Semana, generando un hábito entre sus lectores quienes afirman
que empiezan a leer la revista desde la última página y no desde el principio.
Colombia y el humor a través de la historia
Colombia es un país que históricamente se ha destacado por su alegría y manera de
disfrutar la vida. Hemos sido nombrados incluso como el segundo país más feliz del
mundo por el Happy Planet Index, un indicador especializado en medir la felicidad
de los ciudadanos de cada país del mundo según la expectativa de vida, la satisfacción
y las costumbres (ver tabla 1). A pesar de la cantidad de problemas que enfrenta el
país a diario, los colombianos somos felices. La alegría, que tiene una diferencia
substancial con el humor y lo cómico, es expresada muchas veces con chistes, burlas,
sátiras e ironías. En el país son famosos los chistes, las comedias y las parodias como
una manera de escapar de la realidad. Hay burlas sobre las regiones, sobre las
costumbres, sobre la religión, sobre las situaciones dolorosas. En fin, hay espacio
para la burla sobre cualquier aspecto de la realidad.
41
Op Cit, pp. 215.
33
Tabla 1. Happy Planet Index, clasificación mundial 2009
34
En Colombia, el humor y la sátira se hicieron presentes en la prensa y el periodismo
por primera vez en La Bagatela, el periódico fundado por Antonio Nariño en 1811
durante el mandato en el estado de Cundinamarca de Jorge Tadeo Lozano. Los
intereses particulares de Lozano, frente a los del pueblo, fueron la razón para que se
concibiera esta publicación dirigida al pueblo de Santa Fe en la Nueva Granada. El
uso de la sátira y la ironía se convirtió en un arma contundente contra el gobierno
central y trascendió de manera efectiva en los ideales del pueblo. Fueron los
‗primeros pinitos‘ del humor político en el periodismo, hecho directamente para la
prensa con el objetivo de burlarse contundentemente del poder y la elite del
momento.
Casi siempre desde la clandestinidad, los satíricos se encargaron de alimentar los
gustos del pueblo a pesar de que ―la elite los miraba con desprecio y se resistía a
publicar avisos, lo que significaba la agonía económica‖42 como lo hiciera Joaquín
Pablo Posada en la publicación El Alacrán. La caricatura también había cobrado
fuerza entre el público y las publicaciones se dedicaban también a difundirlas pues
estas son sin duda una de las derivaciones más complejas y tradicionales de la sátira
política. Así fue como el general Alberto Urdaneta fundó el periódico satírico El
Mochuelo, por el que tiempo después sería llevado a prisión debido al malestar que
sus ilustraciones causaban en el gobierno de la época, justo al terminar la guerra de
1876. En la cárcel se dedicó a hacer tantas caricaturas políticas que al salir había
completado todo un álbum. Sin duda, Urdaneta fue un modelo para el gran
caricaturista Alfredo Greñas, fundador de periódicos satíricos tan representativos
como El Zancudo, El Mago y El barbero, publicaciones concebidas en la última
década del siglo XX. ―Se preciaban los satíricos de manejar un estilo sencillo y ameno
para llegar al corazón del pueblo, por lo que el éxito de sus periódicos estaba en las
secciones de coplas populares, versos, sueltos, y caricaturas‖43
En 1897 apareció Mefistófeles, un impreso semanario dirigido por Alfredo A. Borda
en el que las caricaturas en contra de la creciente regeneración eran el menú
principal. En esta publicación empezaron a ser evidentes las burlas sobre los aspectos
comunes y cotidianos de la realidad del país en aquella época, sobre las mujeres, los
militares y los literatos, entre otros. De este estilo también fue El Carnaval,
42
Vallejo, M. A Plomo Herido. Bogotá. Planeta, 2006. pp. 82. 43
Ibid, 82.
35
concebido en 1899 por Clímaco Soto Borda en el que las coplas y las caricaturas
ofrecían un buen repertorio de críticas al gobierno así como Don Quijote, dirigido por
E. Munévar Molina, el cual sentó un precedente en cuanto a la sátira política y el
humor, siendo pioneros en, por ejemplo, inventar frases irónicas sobre personajes de
la política en una sección determinada. En esta publicación se destacó el caricaturista
Lumot y se notaba una dura crítica hacia la Iglesia.
En 1910 comenzó a circular el Gil Blas, bajo la dirección de Benjamín Palacio Uribe.
La burla en contra de las publicaciones liberales y las conservadoras católicas,
especialmente de El Diario Nacional, La Sociedad, El Día o El Nuevo Tiempo
estaban a la orden del día en cada una de sus ediciones y proclamaba de manera
satírica en forma de sueltos, las maneras más eficaces de hacer periodismo de
acuerdo con el gobierno y la Iglesia Católica. El Gil Blas tuvo tanta repercusión por su
estilo y temática como enemigos. Tras la muerte del jefe liberal Rafael Uribe Uribe se
llegó a decir que incluso la publicación a la que llamaron ―pasquín‖ habría incitado a
las gentes en su contra, actuando como fichas de dos partidos políticos.
A pesar de que la gran mayoría de prensa satírica era de ideas liberales, en 1911 José
María de Guzmán fundó en Bogotá el Sansón Carrasco, de ideas conservadoras. Éste
semanario contaba en sus huestes con el caricaturista Lápiz, Pepe Gómez y a pesar de
que en su primer editorial no declaró filiación con algún partido, se marcaría
posteriormente un claro gusto por el Partido Conservador por medio de las
caricaturas en contra de Rafael Uribe Uribe y otros miembros del liberalismo. Las
coplas y los versos que se burlaban de los estandartes del liberalismo no hacían
mucho juego con los elogios que se publicaban a favor de Carlos E. Restrepo. Como el
Gil Blas, También dedico varias páginas de sus 50 números, a la burla de otras
publicaciones periódicas como El Tiempo o El Republicano. En el mismo año,
apareció también el semanario Comentarios.
En 1917, Lápiz se unió como director artístico de Bogotá Cómico, dirigido por Víctor
Martínez Rivas, una publicación que se describió independiente en su primer
editorial aunque en sus páginas lo logró demostrarlo del todo pues se despachaba en
críticas hacia Marco Fidel Suárez y sus políticas de gobierno. En 1920 apareció
Semana Cómica como continuación de Bogotá Cómico con los 2 directores aún bajo
36
supervisión y una tanta magistral de caricaturas a cargo del propio Lápiz, Pepe
Gómez.
También apareció La Guillotina en 1923, una revista de humor político-social
bastante crítica del gobierno de Enrique Olaya Herrera y contra El Tiempo, porque,
decía en uno de sus números, ―da o quita reputaciones, saca delincuentes, del
presidio y lleva inocentes a las celdas. Mueve la esplendidez de los banqueros, hace
cerrar los bancos o rodea de crédito a casas desprestigiadas (…). Ha hecho alarde de
católico y anticatólico,; de conservador y de liberal. Grita a veces a favor de la moral y
comete, a continuación, delitos que bien pudieran acarrear la tacha de la sociedad‖44.
Llegó a tener una segunda etapa en la que se llamó La Nueva Guillotina que más
adelante sería reemplazada por Anacleto, una revista en la que también fueron
publicadas caricaturas hechas con la pluma de Pepe Gómez quien ya no firmaba
como Lápiz sino como Mickey Mouse, quién murió trabajando para la revista.
Después de la circulación de Anacleto, no hubo otra publicación satírica muy
significativa en el país, aunque se abrirían espacios para que las plumas más
punzantes e irónicas compartieran sus críticas y pensamientos de forma que el
público no perdiera contacto con la burla.
Hablando de esos personajes cuyas vidas fueron una verdadera sátira, el humor
político trascendió y terminó en manos de varios exponentes que durante años se
dedicaron a su difusión en los medios de comunicación del país. Es el caso de
Humberto Martínez Salcedo, humorista e imitador de grandes ligas en los medios
nacionales y que hizo presencia en la radio y la televisión por más de 40 años. Fundó
en la radio El duende, La tapa y El corcho, en los cuales criticaba duramente a la élite
política nacional y la oligarquía, llamándolos ‗lagartos‘. Tiempo después apareció el
célebre y conocido personaje de su creación, el Maistro Salustiano Tapias, un
campesino que representaba los intereses del pueblo y las gentes más necesitadas que
llego al elenco de sábados Felices hasta su muerte en 1973, después de aparecer en un
comercial de televisión para la marca de pinturas Pintuco, siendo el creador de
personajes como la recordada boba Pía, interpretada por la actriz Jacqueline
Henríquez. Martínez Salcedo llegó a la cima con el Maestro Taverita en la serie
cómica de televisión Don Chinche. Después de toda una vida dedicada al humor y la
44
Citado en Vallejo M. A Plomo Herido. Bogotá. Planeta, 2006, pp. 87.
37
reflexión por medio de la comedia el Maistro Salustiano sigue siendo recordado por
los principales exponentes del humor político en la actualidad45.
Pero fue Carlos Emilio Campos, ‗Campitos‘, quien dedico su vida a la sátira política de
grandes dimensiones por medio de obras que más que reír, hacían llorar al público.
Las comedias que Campitos preparada mostraban la realidad del país en los años 50
como una comedia en la que se mezclaban los ideales del pueblo con las críticas de los
ciudadanos al gobierno. También imitaba personajes, a los más representativos de la
coyuntura política de la época y preparó junto con Luis Enrique Osorio, famoso
dramaturgo y periodista, varias obras satíricas sobre el gobierno nacional e incluso
sobre varios de América Latina. Campitos fue tan exitoso en el campo del humor
político que fundó la Compañía de Comedias y Revistas Musicales Campitos, que
llevó al país las obras más importantes de su autoría y parodió miles de situaciones
políticas. Estuvo también a la Radiodifusora Nacional y fue determinante para crear
una nueva ola de la dramaturgia en los medios de comunicación. Ellos como pioneros
del humor político han sido grandes influencias para posteriores representantes del
género en nuestro país46.
Los herederos de este nuevo género que se tomó a los medios de comunicación
fueron apareciendo gradualmente en la radio, la prensa y la televisión hasta
consolidarse como influencia de cada uno de los exponentes del estilo.
Klim, el modelo de modelos
Lucas Caballero Calderón, conocido con el seudónimo Klim, nació en Bogotá, aunque
más bien por accidente, el 6 de marzo de 1913. Y es que fue accidental pues se
consideró toda su vida tan santandereano como las hormigas culonas. Hijo del
general y patriarca liberal Lucas Caballero Barrera y hermano de Eduardo Caballero
Calderón, uno de los ensayistas y novelistas más reconocidos del país y quien, por su
parte, se consideraba boyacence de alma, vida y corazón.
45
Cubillos, N. (2010, octubre), “El Maistro Salustiano Tapias”, en Directo Bogotá, núm. 31, octubre-diciembre,
2010, pp. 11. 46
Rodríguez, N (2010, octubre) Campitos, el comediante trashumante”, en Directo Bogotá. núm. 31, octubre-
diciembre, 2010. pp. 18.
38
Klim estudió en el Gimnasio Moderno y se graduó para ingresar posteriormente a
estudiar ciencias políticas en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá aunque
solamente estudió 3 años pues decidió viajar a Suiza a terminar sus estudios. Su
familia era acomodada y de prestigio, y su padre era tío de Cecilia Caballero de López,
esposa del ex presidente de la república Alfonso López Michelsen quien fuera su
compañero también en el Gimnasio Moderno.
Se casó a los 33 años con Isabel Reyes Sierra, nieta del millonario Pepe Sierra. A
pesar de que la familia de Caballero contaba con grandes comodidades, haciendas y
terrenos, el matrimonio no fue bien visto por la familia de Isabel y fue desheredada
por sus padres, aunque para esa época ya estaba consolidado como columnista en El
Siglo y El Espectador Vespertino utilizando el seudónimo Lukas aunque en El
Tiempo ya escribía como Klim. Su primera publicación fue Epistolario de un joven
pobre en 197 y la primera vez que recopiló varias caracterizaciones de personajes
influyentes de la política nacional fue en Figuras Políticas, aunque varios de esos
escritos ya habían sido publicados en Sábado. Además de los diarios mencionados
anteriormente fue también columnista de Cromos y fundador del Radio periódico
Contrapunto.
Su pluma era tan ácida y mordaz como las situaciones que debió soportar en la época
de La Violencia, las mismas que le hicieron moderar su temperamento y convertirlo
en un hombre reservado y apartado del mundo a pesar de su indiscutible sentido del
humor. Tal vez a causa de la censura que se experimentaba en el gobierno de Gustabo
Rojas Pinilla, desarrolló una gran capacidad para utilizar los recursos del lenguaje
como método eficaz para ser amparado y aún así criticar de la manera más aguda a
los protagonistas de la política. Este fue su mejor momento. Klim, definitivamente, ha
sido uno de los más grandes exponentes de la sátira y el humor en las columnas, y
modelo para quienes posteriormente se dedicaron a seguir sus pasos. Así como lo
hizo Daniel Samper Ospina quien cuando piensa en sus influencias no duda un
segundo en nombrarlo como una de las principales.
Claro está que el aislamiento convertido en encierro que vivó durante tanto tiempo lo
transformaron en un erudito de la actualidad nacional y en uno de los hombres más
informados de Colombia. Sus comentarios se volvieron habituales en la sociedad
colombiana que los adopto como discurso público y digerido por las mayorías. ―Los
39
gobiernos de Pastrana y López han estado signados por el comentario de Klim, por
los apodos con que bautiza a los personajes, por su campaña contra quienes
considera ineptos o corruptos. Además, Klim ha sido, en cierto sentido, el primer
columnista en utilizar los nuevos valores folclóricos que crean los medios de
comunicación, particularmente la televisión, para establecer un contacto más amplio
con sus lectores‖47.
El 11 de octubre de 1947 en la Revista Semana, la misma que 64 años después publica
los textos de Samper Ospina, plasmaba en una de sus páginas que Klim ―cultiva por
instinto un género monopolístico en nuestro medio, que es el humor. Niño
consentido de casa ilustre; metódico, cultivador de la irresponsabilidad reglamentaria
de literato bohemio; revolucionario en ideas políticas y sociales y por ello venido en
contacto con las gentes pobres, oscuras y asediadas por la tragedia y, por último, o en
primer lugar artista de extrema sensibilidad intelectual, al pasar, varias veces al día,
de uno a otro aspecto de la vida circunstante, ve con ojos nuevos la dramática
comicidad de las diversas situaciones sociales‖48 además de calificarlo como ―una de
las mentalidades más interesantes que hayan surgido en la vida intelectual
colombiana‖.
Klim se burlaba del gobierno, de la política, de lo cotidiano, de los saqueos del nueve
de abril, de Colombia, de Bogotá, de lo que significaba un país como Colombia en su
época. De la mujer y del hombre. De todo, si le era posible. Curiosamente, también un
político influyente resultó ser parte de su familia, uno tan influyente que llegó a la
presidencia mientras Caballero era columnista activo y mordaz, sin ningún problema
para criticar a quien fuera sin importar si era cercano o no.
Y es que hay temas que han sido recurrentes a través de la historia, temas que
alimentaron las páginas escritas por Klim y las escritas por Samper Ospina años
después. Temas que no han salido de la agenda pública y que, tal parece, no saldrán
en mucho tiempo. Para la muestra un botón: la siguiente columna fue publicada por
Caballero Calderón el 6 de octubre de 1978.
¿Por fin el Metro?
47
Citado en Samper, D. (comp.), (2002) “Me gusta que todos se acuesten con todos, entrevista a Lucas
Caballero”. En Antología de grandes entrevistas colombianas. Bogotá, Aguilar, p. 310. 48
Ibíd., P. 308.
40
Todo induce a creer que esta vez sí se está pensando seriamente en el metro para
Bogotá. Es decir, que no se trata, como en ocasiones anteriores, de un simple tema
ocasional para alcaldes recién posesionados.
Eso no fue lo que pasó, como todos lo recuerdan, con Bruno Bernardo. Bruno
Bernardo hizo de entrada toda suerte de declaraciones cantinflescas sobre este tipo
de transporte, sin saber en qué consiste, porque en Caparrapí, de donde él es
oriundo, toda la movilización se hace en alpargate y en burro. Bruno Bernardo,
pues, como era obvio, no salió con nada. Le pareció más fácil impedir que las
parejas se hicieran el amor en los moteles, como si toda la ciudadanía estuviera
sometida también a su santa regla. A su santa regla cartuja se comprende. Pero esto
ya es historia antigua.
Hoy el alcalde es Durán Dussán, un político y electorero de fortuna, más
aterrizado que Bruno Bernardo, pero mucho menos agradable. Es fachendoso y ha
dicho que está dispuesto a cabalgar en todos los problemas de la ciudad y a
dominarlos, para lo cual, pienso yo, van a serle de mucha utilidad sus experiencias
como mayordomo y chalán en su próspero hato de Matupa. Durán dice, además,
que él desea hacer algo grande por su ciudad natal que es, aunque no se le note,
Bogotá. Cuando Durán habla de esto forma un lío. La versión suya para la prensa es
la de que él nació aquí, pero que siendo muy niño lo llevaron a educar a Neiva y que
más tarde, para hacer dinero y política, se trasladó al llano. Los llaneros admiten
que Durán está vinculado a esa región, pero comentan que no saben exactamente
cómo ocurrió y que en todo caso a ellos no pueden culparlos de nada. Los opitas,
por su parte, declaran que Durán vivió en Neiva pero que su educación, si la tiene,
debió adquirirla en otra parte. Y Bogotá tiene ya demasiados problemas como para
que le preocupe el de haber sido también la cuna de Durán.
En todo caso, hay que reconocer que Durán se muestra sinceramente interesado en
la construcción del metro. Parece confirmarlo así el hecho de que ha estado
recorriendo en un autoferro, puesto a órdenes suyas por la señora directora de los
Ferrocarriles Nacionales, los tramos de la carrilera que pueden utilizarse,
verbigracia el trayecto que une a Bogotá con Bosa. La TV, llamada por Durán para
publicitarse y perennizar el momento, nos lo ha mostrado en todos los noticieros
habidos y por haber comentando con la ilustre dama la belleza desolada de los
alrededores de Soacha, que digo, de Bosa. La trepidación peculiar del vehículo le
sacudía graciosamente los abundantes cachetes, como dos moldes de gelatina
41
Royal, mientras el autoferro avanzaba y se iba rezagando el paisaje. Y claro, en el
sitio destinado a los equipajes, no se sabe si como invitado de honor o como
colocado especial, asomaba la cabeza de nuestro máximo experto y teorizante en
transportes, Fernando Restrepo Maldonado. Tengo la esperanza, como bogotano,
de que Durán no se conforme con esto. Y que del metro no solo nos quede a los
bogotanos, grabado en video-tape, el recuerdo de esta folclórica escena de Sabana,
autoferro y trepidantes cachetes.
Quiero ser sincero. Yo no conozco personalmente a Durán Dussán ni falta que me
hace. Pero tengo de él una idea nada buena. Como funcionario, porque hizo como
tan un funesto Ministerio de Educación, y el concepto no es mío sino de los
estudiantes y maestros. Esa vez Durán se limitó a pasar por ese despacho
repartiendo alegremente carnets de periodismo entre quienes no eran periodistas,
sino validos y recomendados por el gobierno. Y como persona, porque fue el
mandadero del presidente de entonces, interesado en distraer la atención nacional
de sus pingües negocios, para ir al Senado a infamar torpemente la memoria de
gente ya muerta y muy cercana a mi afecto. Puedo estar equivocado, pero un papel
así me parece sencillamente repugnante, impropio de señores y de personas
decentes. Esto, desde luego, no es obstáculo para hacer la obra del metro.
El cual es tan indispensable para la ciudad que lo importante es que se haga, no la
persona encargada de hacerlo. Demás, dentro del mundo del transporte bogotano,
parece ser que nunca está de más cierta dosis de patanería. 49
33 años después, el tema del metro sigue dando de qué hablar en Bogotá y sigue
siendo una promesa inconclusa de todos los alcaldes, promesa de la que ha sido
testigo la pluma aguda de Daniel Samper Ospina.
En una entrevista que le hizo Daniel Samper Pizano —padre de Samper Ospina y toda
una institución en el periodismo colombiano y el humor— a Lucas Caballero
Calderón, publicada en 1976 en la revista Bárbara-Bárbara, de fugaz circulación,
Klim exponía varios de los recursos más usados en sus columnas, el gusto por el
humor y el por qué de su uso, así como su percepción de la Colombia de aquellos
tiempos y la situación de corrupción del país, constante en todos los momentos de la
historia.
49
En Caballero, L. Klim, 45 años de humor. (1983) Bogotà, El Áncora, pp. 158.
42
―—Uno de sus recursos para ridiculizar a la gente que está en los primeros planos
es, evidentemente, el de aplicarles apodos…
—Yo no pongo apodos por poner apodos. Son apenas nombres que emanan de las
circunstancias del personaje y que de pronto pegan.‖ 50
―—No hay duda de que usted es la persona que mejor aplica en Colombia el humor
como arma política…
—Un país que pierde el sentido del humor, está perdido. Los escritores y columnistas
de izquierda, por ejemplo, no tienen sentido del humor y por eso no podrán escribir
bien mientras no acepten esta verdad. El humor es una de las pocas cosas que
establecen una comunicación universal.‖51
―— ¿Qué es lo que más le aterra del país?
—La insensibilidad de la gente ante la inmoralidad. A nadie le importa ya que se
cometan secuestros, desfalcos, que se transporte coca en el buque insignia de la
Armada Nacional. Y cuando digo que no le importa a nadie, estoy incluyendo al
gobierno.‖52
―— ¿A qué le atribuye usted la corrupción que ha invadido todos los huecos
institucionales del país?
— Es difícil establecerlo, pero primero que todo hay que señalar que la corrupción
viene de arriba. No digo que la estén haciendo los presidentes, pero arriba se
considera que cuando uno ataca la corrupción en alguna institución básica, es porque
está atacando la institución misma. Y como too el mundo se protege detrás de una
institución sea el clero, el Ejército o la casta de gobierno, ya resulta muy difícil
denunciar o criticar la corruptela.‖53
Sin duda, la percepción de Klim sobre la situación del país se evidencia en su discurso
y en las columnas. El humor es un tipo de fuga y de impunidad para criticar sin
remordimientos aquellos problemas de los que nos quejamos a diario. Además, su
visión es perfectamente aplicable en estos momentos de acuerdo con los contextos de
dos épocas distintas pero con sucesos casi iguales. Lo único que cambia, en varios de
50
Op Cit, pp. 314 51
Citado en Samper, D. (comp.), (2002) “Me gusta que todos se acuesten con todos, entrevista a Lucas
Caballero”. En Antología de grandes entrevistas colombianas. Bogotá, Aguilar, pp. 314 52
Ibíd., pp.324 53
Ibíd, pp. 324-325
43
esos sucesos son los personajes. Como el propio Samper Ospina respondió en la
entrevista hecha para este trabajo de grado ―parece que en Colombia pasaran más
cosas pero siempre pasan las mismas‖.
Sin embargo, Samper no ha tenido que lidiar con la censura, como si tuvo que hacerlo
Klim en El Tiempo. En marzo de 1976 las directivas del periódico consideraron que su
columna iba en contra de la ideología del diario y que los estaba perjudicando, por lo
que decidió retirarse aunque un mes más tarde estuviera trabajando nuevamente,
esta vez para El Espectador.
No hay duda de que Klim es modelo de modelos para los satíricos colombianos que lo
leyeron, lo disfrutaron o lo sufrieron. Su desparpajo y su pluma hicieron las delicias y
las pesadillas en todo el país y en todos los ámbitos. Con su obra hay varios libros que
recopilan sus columnas a través del tiempo y de las diferentes publicaciones en las
que participó. Columnas agrias, amargas, pasadas pero que producen risa aún en
estos tiempos.
Daniel Samper Pizano: papá del humor
―Danielito, entre paréntesis, es quizá el periodista más brillante que han dado las
nuevas generaciones. Enrique Santos Calderón tiene también excelentes condiciones
y sabe escribir, pese a ser sobrino de Hersán, pero no utiliza como Danielito el
recurso formidable del humor o carece de él. Danielito es, como se dice ahora, un
periodista de profundidad y en este campo ha hecho cosas memorables […] Danielito
ha escrito además, como se verá en este libro que prologo, críticas dilascerantes sobre
nuestro divertido floclore electoral, zumbas estupendas sobre el clientelismo y su
opulento padre, y notas de un humor exquisito sobre una noticia cualquiera
transmitida de pronto por la United Press.‖54 Así describió Lucas Caballero Calderon,
Klim, a su gran amigo, colega y también satírico Daniel Samper Pizano, uno de los
periodistas más importantes de Colombia en los últimos tiempos. Y es que además de
ser el padre de Samper Ospina, es también el padre del periodismo investigativo en
Colombia.
54
Caballero, L. (1980), “Daniel Samper Pizano visto por Klim” [prólogo], en Samper, D. A mí que me
esculquen, Bogotá, Pluma, pp. 9.
44
Daniel Samper nació en Bogotá el 8 de junio de 1945. Estudió en el Gimnasio
Moderno y se graduó como abogado en la Pontificia Universidad Javeriana de
Bogotá. Su vida en el periodismo inició en 1964 cuando ingresó al periódico El
Tiempo escribiendo para la sección universitaria que un año más tarde sería
clausurada. Sin embargo, su historia en el diario no terminaría ahí pues más adelante
y gracias a su talento llegó a ser asistente del director y director de la sección Bogotá
y de páginas departamentales aunque su etapa más exitosa llegó cuando se hizo
director de la Unidad Investigativa del periódico, lo que lo convirtió en el periodista
colombiano investigativo más influyente debido a sus grandes trabajos de
investigación, algunos con primicias y escándalos de fondo.
En 1970 inició su historia como columnista con el espacio ‗Reloj‘, también en El
Tiempo en el que escribía a diario sobre la actualidad nacional aunque no en modo
satírico. Tiempo después su columna pasó a llamarse ‗Cambalache‘ y se consolidó
como un espacio de humor aunque muy sutil, como el propio Samper Ospina dice,
comparado con el trabajo que desempeñaba Klim.
El arequipe y el postre de natas son dos de sus más grandes debilidades pues, tal vez,
la mayor, es su equipo del alma Independiente Santa Fe. Quizá por eso su columna en
la revista Carrusel también de la Casa Editorial El Tiempo se llama Postre de Notas y
es un reflejo humorístico de la cotidianidad del país y sus costumbres.
Samper es master en periodismo de la Universidad de Kansas y obtuvo el Nieman
Fellow de la Universidad de Harvard. A lo largo de su historia en el oficio ha
publicado 29 libros entre antologías del periodismo colombiano y recopilaciones de
las columnas de El Tiempo y Carrusel, aunque definitivamente lleva las letras en la
sangre, tal como lo expuso Klim en el prólogo de A mí que me esculquen en 1980.
―Danielito tiene de donde ser escritor. Lo lleva en la sangre. Tíos bisabuelos suyos, si
no me equivoco, son don Miguel y don José María Samper,, ambos escritores y
políticos de renombre, y el primero de ellos conocido como el Gran Ciudadano. La
esposa de uno de los dos, no recuerdo de cual, fue doña Soledad Acosta de Samper,
escritora notable también, y quién murió a avanzada edad después de una
prolongada viudez. Danielito, que la llama Mamá Solita, sostiene, basado en esta
circunstancia, que ella es la verdadera protagonista de Cien Años de Soledad. Y
45
suabuelo paterno, Daniel Samper Ortega, fue escritor, dramaturgo y novelista. Creo
recordar que escribió, en esta última condición, una obra de ambiente sabanero
titulada En el cerezal, gracias, pienso yo, a que todavía no habían nacido sus nietos
Ernesto y Danielito, que son terriblemente aficionados a subirse a los árboles […] El
heredó (Daniel) pues, de sus mayores,, el dominio fácil del idioma, pero los supera a
todos en la alegría de la prosa, salpicada de humor, un matiz que reñía con el estilo
trascendental y solemne de la época en que ellos vivieron‖. 55
Con las antologías no solamente se ha dedicado a seleccionar las mejores crónicas,
reportajes, entrevistas y notas ligeras —un género bautizado por él y Maryluz Vallejo
Mejía, con quien prologó y seleccionó la obra— sino también a prologar y hacer un
completo contexto sobre cada uno de esos géneros para que fueran útiles a los
estudiantes e interesados en el periodismo, como él mismo lo aseguró.
Su estilo es satírico e irónico, pero sin duda, rolo. Cachaco hasta la médula. Como la
sátira de Caballero y de otros pioneros del humor en el país, Daniel tiene esa
capacidad mágica para burlarse hasta de su idiosincrasia y sus costumbres, para crear
mundos completamente posibles pero inventados, mundos y situaciones paralelas a
la realidad que inevitablemente producen risa.
La pluma de Samper Pizano no solamente traza sus líneas sobre temas políticos
debido a que Colombia es un país aprovechable para todo tipo de burlas, burlas que
perduran en el tiempo y que son aplicables en cualquier época. Además, los escritos
sobre la vida diaria de los colombianos, sobre las tradiciones y los elementos de
nuestra cultura, han hecho de Samper Pizano una verdadera diversión para quienes
sagradamente lo leen en cada publicación.
Si hablamos de un ejemplo que resuma lo anterior, qué mejor que plasmar una nota
burlesca y aguda, una nota que puede aparecer impresa mañana o cualquier día del
2011 en las páginas de Carrusel pues en 1977, cuando la entregó al público o ahora,
34 años después y como ha quedado evidenciado a lo largo de la exposición de los
antecedentes del humor en Colombia, siguen pasando las mismas cosas.
55
Ibíd., pp. 8
46
Los que no salimos
Es tan grande la incongruencia cachaca que, justamente cuando Bogotá se
vuelve por espacio de pocas semanas, una ciudad agradable, buena parte de sus
habitantes resuelven irse. Pocos son los que han descubierto que las mejores
vacaciones se las dan quienes se niegan a tomarlas en diciembre y enero y
prefieren quedarse trabajando en la ciudad semivacía. Bogotá en época post-
navideña es una cosa muy distinta a esa urbe congestionada, neurasténica e
insegura de los demás meses. El 25 de diciembre amanece pacífica, adorable,
holgada. Abundan de tal manera los carros de servicio público que cualquier
peatón que alce el brazo para peinarse, escuchará el frenazo de cuatro o cinco
taxis engañados que aspiran a transportarlo. Los buses van vacíos. Para entrar a
cine no es preciso hacer cola. Ni aguardar en las pizzerías a que resuelva
levantarse la familia que lleva 20 minutos haciendo sobremesa. Se apodera de los
sitios de trabajo una deliciosa laxitud muy cercana a la pereza. El jefe no se atreve
a exigir mayores sacrificios a ese grupo de empleados a quienes considera de por
sí heroicos por encontrarse en una oficina y no en la orilla del mar, como los
demás. El mismo se sabe un poco mártir y opta por la fórmula de dejar hacer y el
dejar pasar. Y el dejar salir más temprano, y el dejar llegar más tarde y el dejar
charlar con los compañeros de aparente infortunio.
Después del 25, los almacenes, resueltos a salir pronto de las mercancías que no
lograron vender en navidad, realizan grandes rebajas, sólo aprovechadas por los
ciudadanos que no toman vacaciones. Son los días en que uno entra a los
almacenes de discos, simplemente a oír, no a comprar, desprendidos tanto el
comprador como el vendedor de esa asquerosa sed comercial que precede a la
navidad. Por lo general hace sol. Alguien allá arriba se convierte en cómplice de la
molicie y se esmera en arreglar un poco la meteorología. Comienza a convertirse
en un plan digno de la consideración el de salir a las cinco a pasear por la séptima
comiendo helado. Siempre espera a la vuelta de la cuadra una buena vespertina
porque el 25 inauguran varias de las mejores películas del año.
Si no fuera por la ausencia del fútbol, podría pensarse que el Bogotá de
diciembre y enero es un lugar muy cercano al paraíso. Entretanto, ¿qué ocurre
con los cachacos que han abandonado la ciudad y se han dirigido a los
veraneaderos de moda?
Allí están —en las piscinas de Melgar, en las playas de Santa Marta, en las
arenas de Cartagena— rodeados de millones de seres iguales a ellos. La piel
47
desteñida, como un vaso de kumis; la barriga flácida sembrada de mordiscos de
pulga; y con un traje de baño que desde lejos se adivina comprado en la Avenida
Jiménez, los cachacos se enfrentan a esa madre terrible que es la naturaleza.
Entran al mar tímidamente, con una mezcla de temor y pena y, cuando el agua les
enfría las rodillas dan un saltico grotesco y se dejan caer, despanzurrados, sobre
una ola que viene u que los revolcará sin misericordia, porque el cachaco ignora
la ciencia de dominar las olas. Tosiendo agua, con un sabor vomitivo de sal
marina en la garganta, los ojos enrojecidos y sin reponerse del susto, el bogotano
se pone en pie nuevamente tratando de aparentar que está dichoso.
Luego, con el paso de unos pocos días, ya no le provocarán sorpresas tan
desagradables las olas, pero ahora estará quemado como un camarón. No hay
loción en el mundo que consiga ―enmorenecer‖ a un bogotano. Serán asuntos de
la altura o de la dosis de ajiaco en el torrente sanguíneo, pero lo cierto es que el
bogotano quema rojo y se despelleja. Y le duele. Y la nariz se le pone como un
stop de camión. Y se le ponen pegajosos los párpados.
Cuando finalmente tras el horizonte marino se oculta el sol, el enemigo, la
naturaleza envía un nuevo ataque contra el bogotano. Esta vez son el zancudo, el
mosquito, el cangrejo extraviado en la playa, la lagartija, la mariposa negra, el
sapo, el jején, el alacrán, la culebra nocturna, el murciélago, el chimbilá, el
vampiro. El bogotano se despoja del pantalón de baño floreado, donde siempre
queda cerca de la media arroba de arena, se ducha y se viste para ir a comer bajo
la luna en algún restaurante del lugar. Lo malo es que la misma idea atraviesa la
mente de los otros miles de congéneres que veranean, como él, al pie del mar.
Así, los restaurantes del puerto viven taqueados, la comida es mala y no alcanza,
el servicio es demorado, la cuenta es alta y —sin embargo— ninguno se atreve a
declarar que está comiendo peor que en casa.
Después de veinte días en la misma situación, con playas llenas de cachacos,
calles llenas de cachacos, y restaurantes llenos de cachacos, se le acaba la plata al
bogotano. Regresa entonces a Bogotá, con señora, suegra e hijos, en un avión
infestado de cachacos. Y aquí encuentra una ciudad que sólo entonces vuelve a
tomar el neurótico ritmo de siempre. En ese momento, los bogotanos que no
salimos en diciembre, sabemos que la vacación ha terminado. 56
56
En Samper, D. A mí que me esculquen (1980). Bogotá, Pluma, pp. 9.
48
Ahora Daniel Samper Pizano está radicado en Madrid, España, en donde se
desempeñó como director de la revista Cambio 16 además de colaborar con algunas
publicaciones de allá y de aquí como la Revista SoHo, dirigida por su hijo, en la que
ocasionalmente escribe algunos artículos cargados por supuesto, de ironía y humor.
El 15 de agosto de 1974, Daniel Samper Pizano y su esposa, Cecilia Ospina Cuellar
fueron testigos de la llegada al mundo de su tercer hijo y el único varón, Daniel, un
niño travieso, hijo de la literatura, del periodismo y de una tradición que viene
mucho más allá de su padre.
49
CAPITULO TRES
Daniel Samper Ospina
El columnista y la columna
Ese 15 de agosto de 1974 fue Bogotá la tierra que vio nacer a Daniel Samper Ospina.
El tercer y único hermano de Juanita y María Angélica Samper, un monito de ojos
claros, travieso, con las letras, el periodismo y la escritura recorriéndole el torrente
sanguíneo. Creció en el barrio Niza en el que jugaba fútbol hasta el anochecer cuando
debía regresar a casa porque la oscuridad no dejaba ver el balón, el mismo balón que
veía correr domingo tras domingo en la grama del Estadio ‗El Campín‘ cuando junto
con su padre iba a ver al Independiente Santa Fe, su equipo del alma y una de las
más grandes pasiones de su vida.
Estudió en el Gimnasio Moderno y se graduó para entrar a estudiar literatura en la
Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, aunque ingresó también a la
Universidad de Harvard en donde cursó programas de Literatura del Barroco
Español y Literatura Latinoamericana del Siglo XX. Allí ya ponía en práctica la vena
de las letras heredada no sólo de Samper Pizano pues los Samper son una familia de
escritores y políticos, claro, como quedó evidenciado páginas atrás.
En el año 2001, Samper Ospina fue fichado para dirigir una de las publicaciones más
importantes del país: la famosa Revista SoHo. Un magacín que él mismo consolido
como un espacio en el que no solamente hay fotos de mujeres hermosas para deleite
del gusto masculino, sino también, una narrativa periodística interesante que le
apuesta a la crónicas y los reportajes serios, a los artículos con contenido más allá de
una simple estética plasmada en el papel. Sin duda, el éxito editorial y comercial de
SoHo es obra de Daniel Samper, toda una marca registrada en el periodismo
50
nacional y específicamente en Publicaciones Semana, la empresa responsable de que
salgan a circulación las revistas Semana, Dinero, Plan B, Fucsia, Arcadia, Cocina y
Jet Set, ésta última, la que registró el primer momento de Samper Ospina como
columnista de humor cuando en 2004 empezó a escribir, o mejor, a burlarse de la
cotidianidad colombiana y las páginas sociales, las mismas que al final de esa revista
muestra las caras sonrientes de los invitados frecuentes a los eventos más
importantes del ámbito social.
La columna era una radiografía de las costumbres del colombiano más humilde
hasta el millonario que más figura en las páginas sociales. En ella, Daniel confesó su
odio a los cócteles, a las corridas de toros, a la lagartería y la nueva era cargada de
libros de superación personal, yoga y buena energía.
Daniel es un hombre reservado, tal como se describió y se confesó en los textos de
Jet Set, un hombre al que no le interesa figurar con una copa de vino en la mano ni
saludar con una falsa sonrisa a los invitados del VIP en un almuerzo campestre o
algo parecido. El mismo hombre que desde el año 2008 entrega en la última página
de la revista Semana las risas que la política colombiana no produce en la
normalidad de su dinámica.
En 2010, varias de esas columnas escritas para Jet Set y otro tanto escritas para
Semana fueron recopiladas en un libro al que llamó El Club de los Lagartos, cuya
portada protagonizan los personajes que son blanco principal de sus burlas
ilustrados con las características que les otorga el propio Samper en sus textos. El
libro ha sido un completo éxito en ventas y ha consolidado a Daniel Samper Ospina
como el periodista de humor más importante del país en la actualidad.
Escribir para Semana da mucho vértigo al principio. Es como pasar de jugar en el
‗campincito‘ a jugar en el Santiago Bernabéu y si además esta columna con la
irreverencia que es un elemento que polariza, divide y produce quejas era algo muy
duro al principio. Fue por este motivo que Daniel Coronell me dio el consejo más
importante que me ha dado un columnista: que los lectores tienen que seguirlo a
uno, no uno a los lectores‖.
“El humor te da un carné de impunidad”
51
Conversar con Daniel es conocer a una persona mucho más allá de sus burlas. En
principio, confiesa que escribir para la revista Semana es una gran responsabilidad y
un compromiso serio, pues venir de una publicación social a una de análisis político
es sin duda atravesar un gran reto. De hecho asegura que en un principio fue
complicado entrar en sintonía con los temas políticos y afrontar una periodicidad
distinta pues ahora sólo contaba con 15 días para escribir la columna. En palabras de
él ―tu escribes una columna, la mandas y ya tienes que estar pensando en la siguiente
y además, buscar un ángulo humorístico diferente para contarlo‖, aunque sin duda,
―las horas de vuelo ayudan y escribir se convierte en una gimnasia‖.
Debido a que en Colombia ―pasan las mismas tres cosas‖, Daniel se vale de distintos
recursos para no convertirse en un columnista repetitivo y sin gracia. Para ello trata
de que algunos personajes no sean simples representantes de los hechos del país sino
que se conviertan en personajes o protagonista de la columna, que evolucionan, que
se enfrentan a distintas situaciones o que conserven su estilo o características
durante toda la columna. ―Son líneas temáticas que van desarrollándose. La columna
a veces parece una serie de televisión en la que las historia y los personajes
evolucionan‖. El uso de la primera persona o el mismo hecho de mezclarse en sus
historias le imprime un toque de originalidad y se convierte en un recurso eficaz para
evitar lo repetitivo. ―Por ejemplo, para no volver a hablar de Samuel Moreno me
inventé que me lanzo a la alcaldía y eso me permite hacer la misma sátira pero desde
un ángulo mucho más refrescante‖.
Aunque es sátira política, en sus textos no solamente participan los políticos.
―Gracias a acudir a personajes que no sólo hacen parte de la política sino de la
‗zoología‘ nacional o la farándula, la columna a adquirido una personalidad
definida‖.
Llamarle a Colombia la ‗Platanera Tropical‘ y burlarse de prácticamente todo lo que
para el resto de compatriotas haría parte del orgullo patrio no le genera ningún
malestar ni remordimiento. De hecho, Samper cree que ese nacionalismo hace parte
de las herencias del gobierno de Uribe y que es un elemento que, a través de la
historia, ha tenido un objetivo completamente determinado. ―Si uno quiere vendarle
los ojos a los ciudadanos una de las maneras más prácticas para hacerlo es exacerbar
52
el sentimiento patriótico o nacionalista. Lo hizo Hitler, lo está haciendo Chávez —el
presidente de Venezuela—. Es una manera de aniquilar la capacidad de crítica y una
anestesia que frena la reflexión, por eso me gusta desafiar y provocar ese
nacionalismo‖.
Para invitar entonces a reflexionar a través del humor, Daniel trata de no censurarse
nunca mientras escribe. ―Escribir en absoluta libertad es casi una responsabilidad, y
lo sé, porque mientras escribo no me importa si me voy a encontrar con la persona
que estoy criticando, si es una pesadez o no lo que estoy diciendo. Si me causa risa,
auténticamente, lo pongo, y por eso la columna tiene un ingrediente de incorrección
política que es, sin duda, hijo de esta época en que vivimos‖. Incluso los chistes o
burlas de los defectos físicos de varios personajes no le preocupan pues trata de
asociarlos con alguna de sus características morales o éticas aunque ―si simplemente
hace reír, está bien ponerlos, no pasa nada‖.
Claro, está bien que no le importe porque le tendrán sin cuidado las amenazas que
algunos personajes, blanco de sus críticas, le puedan hacer. ―No me ha pasado nada
desagradable pero si le han dicho a gente que conozco que si me ven me van a tirar
un vaso de agua. De hecho ésta columna es un seguro para que no me inviten a
muchos eventos sociales que no me gustan, además, soy un cobarde. Soy un macho
para escribir la columna frente al computador pero para asumirla en la calle soy
malísimo y me aburre mucho‖. Claro que no todos le hacen mala cara, otros
simplemente no lo determinan y hay algunos pocos que de hecho le preguntan por su
protagonismo en la columna y le preguntan por qué no le ha vuelto a dar palo.
No es fácil ser columnista de humor con en Colombia un apellido como Samper y
siendo hijo de uno de los columnistas de humor más representativos y recordados
del país, sin embargo, Daniel es consciente que la gente tiene siempre una tendencia
a la comparación y deja claro que no le afecta. ―Esas son cosas que no se pueden
evitar, es decir, es tu realidad y punto. Yo nunca me senté a ver cómo escribía de una
manera diferente a mi papá o a pensar si me dedicaba a la odontología para no
terminar bajo la sombra de él. Lo hice instintivamente, pero nunca escrito en contra
de su estilo ni a su sombra, tratando de parecerme. He sido yo instintivamente el que
escribe lo que va saliendo. En todo caso sí creo que el humor que hacemos es
diferente pues el de él es mucho más ameno y el mío mucho más fuerte y áspero‖.
53
Y es que además de ser hijo de alguien que es toda una institución en el periodismo
colombiano, es sobrino de uno de los ex presidentes más polémicos por lo que
afrontó durante su mandato. ―Lo peor que le puede pasar a un periodista es tener un
familiar que sea político. No hay nada más incomodo para ejercer su oficio. Yo estoy
en la encrucijada de cuando me meto con Ernesto Samper para él siempre va a ser
muy hiriente y para sus críticos y los míos siempre será insuficiente. Por eso siempre
trato de nombrarlo cuando auténticamente me nazca hacerlo, cuando se me venga
un chiste a la mente, cuando venga al caso, cuando sea necesario. Incluso me he
abstenido deliberadamente de defenderlo cuando he creído que lo ameritaba o que
necesitaba ciertas palabras amables para evitar los guiños‖.
Daniel sabe que su columna va más allá de una simple burla y que genera pasiones o
resentimientos, pero tiene claro que prefiere escribir sobre la política desde el
humor. ―Es difícil pelear con un caricaturista. Yo acudo permanentemente a la
ficción y al doble sentido. Además el humor te da un carné de impunidad frente a lo
que quieras expresar‖.
El país del que se burla Samper Ospina
Colombia es un país que históricamente se ha visto afectado por un conflicto armado
interno que parece no tener solución. Teniendo en cuenta que Daniel Samper
empezó su columna en Semana a partir del año 2008, es importante y necesario
hacer un contexto sobre el país del que se burla cada ocho días en la revista y que
expone a través de sus columnas, de modo que quien las lea se ría, claro, y entienda
por qué fueron escritas.
La primera columna registrada en Semana con la firma de Samper Ospina salió a
circulación el 23 de junio de 2008 mientras Álvaro Uribe Vélez cumplía su sexto año
en el poder, el segundo después de haber sido reelegido a la presidencia en el 2006.
Se discutía sobre la adjudicación del tercer canal de televisión —hecho que aún está
en la agenda pública—, se extraditaron 14 paramilitares vinculados al proceso de
Justicia y Paz que cobijó la desmovilización paramilitar que empezó en el 2003 y
además, se libraba un conflicto con la guerrilla pues aún tenían en su poder a Ingrid
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Betancourt y otros secuestrados importantes tanto para el gobierno como para los
insurgentes.
La popularidad de la que gozaba el presidente Uribe era muy alta. La gente le
agradecía el hecho de sentirse en un país más seguro debido al gran despliegue que
se le dio al conflicto con la guerrilla y la cantidad de militares y policías destinados a
cuidar de los colombianos. Su programa de gobierno fue la ‗Seguridad Democrática‘,
la cual, defendió durante sus 8 años de mandato y la que sin duda fue tomada como
modelo de las posteriores candidaturas a la presidencia. Uribe se convirtió, o mejor,
se autodenominó como un estandarte de la patria y uno de los mayores patriotas de
la historia. Hay personas que incluso lo llaman el segundo libertador de Colombia,
por lo que son evidentes las pasiones que genera el ex mandatario. El discurso del
―terrorismo y los bandidos‖ fue apropiado por la mayoría de colombianos que
confiaban —y aún lo hacen— ciegamente en él. Uribe es solemne, sin duda, e impuso
un patriotismo basado en su programa de gobierno. Sus detractores lo acusan de
paramilitar, terrateniente y hasta de tener vínculos con el narcotráfico, entre otras
cosas. En Colombia el tema de Álvaro Uribe parecía ser o blanco o negro pues
quienes lo apoyan no tienen ninguna duda de su transparencia. El país llegó a un
momento en el que si no se era uribista, entonces se era ‗mamerto‘ o terrorista; o lo
contrario, si se era uribista entonces se apoyaba a los paramilitares, la guerra y la
corrupción. La polarización la creaba el mismo presidente con sus discursos
nacionalistas que parecían expresar que apoyarlo era de patriotas y no hacerlo era de
bandidos. En Colombia se hablaba de guerra y se buscaba la destrucción de la
guerrila por cualquier medio.
Fue precisamente en el 2008 cuando ocurrió un hecho que marcó los posteriores: el
bombardeo y baja de alias ‗Raul Reyes‘, miembro del secretariado de las Farc y uno
de los rebeldes de más alto rango dentro de esa organización. Desde el aire y en
territorio ecuatoriano se bombardeó el campamento en el que se refugiaba ‗Reyes‘,
hecho que se desató una crisis diplomática del país con varios vecinos, no sólo
Ecuador sino también Bolivia y Venezuela, representado en el gobierno de Hugo
Chávez quien incluso llegó a mencionar una guerra con Colombia.
Lo que siguió fue un conflicto diplomático que parecía no tener solución. Rafael
Correa, presidente de Ecuador y Hugo Chávez, mandatario venezolano, mantenían
55
una guerra verbal con el presidente Uribe lo que repercutió tanto en la diplomacia
como en el comercio y la economía. Chávez ordenó la puesta de tropas venezolanas
en la frontera con nuestro país y el rompimiento de las relaciones comerciales,
situación que provocó caos en los territorios fronterizos y que sin duda desestabilizó
la economía nacional, al punto de perder millones de dólares en importantes
negocios. El conflicto, más allá de una crisis de gobiernos, se convirtió en una guerra
de egos en la que Chávez y Uribe se lanzaban discursos en contra si llegar a ningún
acuerdo concreto. A pesar de que Colombia ofreció excusas a Ecuador la situación no
parecía tener final.
El 2 de julio, otro suceso trascendental en la historia del país ocurrió en las selvas de
Colombia cuando el Ejército Nacional liberó a 15 secuestrados que hasta ese
momento estuvieron en manos de la guerrilla de las Farc, entre ellos la ex candidata
presidencial Ingrid Betancourt; los 3 contratistas norteamericanos Keith Stansell,
Marc Gonsalves y Thomas Howes junto con 7 miembros del ejército y 2 de la Policía
Nacional. La ‗Operación Jaque‘ hasta ese momento parecía el resultado de un
cuidadoso y perfecto plan de las Fuerzas Militares para rescatar a los rehenes con
vida. La ex candidata, símbolo del secuestro en Colombia agradeció la gestión del
presidente y de Juan Manuel Santos quien para entonces era el Ministro de Defensa
de Uribe y quien comandó la operación como cabeza máxima del cuerpo militar de la
nación.
Se acabó el 2008 con la diplomacia en problemas y la confianza en Álvaro Uribe y
Juan Manuel Santos por las nubes, debido a los éxitos militares en contra de la
guerrilla, sin nombrar la sorpresiva muerte de Pedro Antonio Marín alias ‗Manuel
Marulanda Vélez‘ o ‗Tirofijo‘ a causa de un paro cardiaco. Muertos ‗Reyes‘ y ‗Tirofijo‘,
las Farc nombraron a alias ‗Alfonso Cano‘ como jefe máximo de la organización
guerrillera, aunque aún operaba Victor Julio Suárez alias el ‗Mono Jojoy‘, uno de los
insurgentes más sanguinarios de las Farc y, al parecer, el responsable de los
secuestros más sonados.
Llegó el 2009 y con él sonado escándalo de las ‗chuzadas del DAS‘. La revelación de
que el Departamento Administrativo de Seguridad interceptaba ilegalmente los
teléfonos de magistrados de las altas cortes, periodistas y miembros de la oposición
del gobierno de Uribe, desató un desconcierto en el país pues todo señalaba que el
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propio presidente era el responsable de dar las órdenes para que las interceptaciones
fueran realizadas. Además, los afectados sentaron su voz de protesta e incluso se
conocieron varios planes del propio DAS para hacer campañas de desprestigio en
contra de quienes hicieran oposición al uribismo. Por este hecho fue destituida la
directora de la entidad, María del Pilar Hurtado y están siendo investigados varios
funcionarios de alto, medio y bajo rango.
Y es que de los escándalos no se salvaron ni los hijos del presidente, Tomás y
Jerónimo Uribe, quienes figuraban como propietarios de un terreno en el municipio
de Mosquera que al parecer, según investigaciones del también columnista de
Semana Daniel Coronell, terminó favorecido debido a la creación de una zona
franca, lo que hizo que su valor creciera considerablemente. Todo se hizo
presuntamente gracias a la gestión de varios subalternos del presidente Uribe,
funcionarios que dependen directamente de las órdenes del primer mandatario.
Tiempo después también se conoció otra información que involucró a los hijos de
Uribe. Se trataba de la empresa Residuos Ecoeficiencia, dedicada al manejo y
tratamiento de las basuras de Bogotá, la misma que presuntamente quería adueñarse
de ese negocio y capitalizarlo en toda la ciudad.
En el año 2009 se conocieron las irregularidades del programa Agro Ingreso Seguro,
AIS, encabezado y diseñado por el Ministro de Agricultura en ese entonces, Andrés
Felipe Arias cuyo objetivo era favorecer a los campesinos o dueños de la tierra con
subsidios para el sostenimiento y crecimiento de los campos de Colombia. Todo
parecía ir bien hasta que se conocieron los presuntos beneficios que habrían sido
otorgados a narcotraficantes, personalidades de la farándula, familias adineradas del
Valle del Cauca y grandes terratenientes de la costa atlántica con cifras astronómicas
que debieron ser entregadas a quienes de verdad lo necesitaban, a quienes trabajan
el campo colombiano con esmero. Arias renunció al ministerio para lanzar su
precandidatura a la presidencia por el Partido Conservador y es investigado aún por
el escándalo de AIS, por lo que su imagen resultó considerablemente afectada. Arias
se ha mostrado y autoproclamado la persona más parecida al presidente Uribe a
quien considera modelo de modelos. Incluso ha llegado a parecerse físicamente al
ahora ex mandatario y a imitarlo en varios aspectos, tanto así que llegó a ser
conocido con el apodo ‗Uribito‘.
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En el 2009 también se esperaba la respuesta del senado sobre el referendo que
buscaba la posibilidad de acceder a una tercera reelección presidencial. A un año de
las elecciones para presidente el debate no se hizo esperar. El principal argumento
de la oposición e incluso de parte de la coalición uribista era el prejuicio que sin duda
caería sobre las instituciones. Ya en el transcurso del año se conocían los candidatos
y precandidatos a la presidencia y personajes como Juan Manuel Santos y Andrés
Felipe Arias esperaban el resultado del referendo para lanzar oficialmente sus
candidaturas.
Llegó el 2010, el año de las elecciones presidenciales. Finalmente en marzo se
conoció que el senado no aprobó el referendo reeleccionista que buscaba la
posibilidad de un tercer periodo para el primer mandatario. Con la respuesta dada
las candidaturas no se hicieron esperar. Juan Manuel Santos sería el candidato del
Partido de la U, el partido del presidente y de las mayorías parlamentarias. Andrés
Felipe Arias y Noemí Sanín serían precandidatos del Partido Conservador y de una
consulta popular saldría el candidato único del partido, como tanbién lo hizo el
Partido Verde, con las precandidaturas de Antanas Mockus, Enrique Peñalosa y Luis
Eduardo Garzón. Por el Partido Liberal aspiraba Rafael Pardo, por Cambio Radical
German Vargas Lleras, por Compromiso Ciudadano por Colombia, Sergio Fajardo y
por el Polo Democrático Alternativo, el partido de izquierda, aspiraban a consulta
Carlos Gaviria y Gustavo Petro.
Las consultas arrojaron como candidatos a Noemí Sanín por el Partido Conservador,
Antanas Mockus por el Partido Verde y a Gustavo Petro por el Polo Democrático,
sumados los candidatos únicos de los otros partidos ya mencionados. Las encuestas
arrojaban en los primeros días de campaña un triunfo contundente de Juan Manuel
Santos, seguido por Noemí Sanín y Antanas Mockus quienes estaban muy por debajo
de los porcentajes que marcaba Santos. Vargas Lleras, Petro, Sergio Fajardo y Rafael
Pardo se ubicaban en ese orden con porcentajes realmente bajos.
El rumbo de las elecciones parecía tener una definición clara y concreta, aunque la
popularidad de Santos no se mantendría en la misma escala durante toda la
campaña. Siendo Compromiso Ciudadano por Colombia, el movimiento del ex
alcalde de Medellín Sergio Fajardo, un partido sin reconocimiento político, Fajardo
decidió unirse como formula vicepresidencial de Antanas Mockus, un fenómeno que
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venía creciendo a pasos agigantados. Sin duda está unión generó grandes
expectativas y la intención de voto por el Partido Verde creció considerablemente.
Quienes hacían campaña activa por Mockus, más que el propio partido, eran los
jóvenes que se comprometieron verdaderamente con la propuesta del candidato que
se constituía en la ―Legalidad Democrática‖. Así conformaron la llamada ‗Ola Verde‘
que crecía cada vez más con el paso del tiempo y las estrategias basadas en el uso de
redes sociales y convocatorias populares a través de Internet. Era una campaña
hecha por la gente más que por la publicidad. Mientras tanto, la campaña de Juan
Manuel Santos no parecía tener mucho éxito y no trascendía más allá de quienes le
darían su voto por ser el candidato del presidente. Fue así como decidieron darle un
nuevo aire a la campaña y rediseñar la imagen de la misma por medio de varias
estrategias con la contratación del asesor de campañas venezolano J.J Rendón.
La campaña era dinámica, llena de debates y controversias. Que si Mockus tiene
Parkinson, que si Santos contrató a J.J Rendón —un experto en campañas políticas y
a quien se le conoce por su habilidad para las campañas de desprestigio— para
hacerle campaña negra a Mockus. Mientras tanto los demás candidatos parecían
disputarse el tercer lugar en intención de voto, intención que cambió
considerablemente con el pasar del tiempo.
Finalmente Santos ganó las elecciones en segunda vuelta con un margen de
diferencia de 5‘440.968 votos frente a Antanas Mockus y consolidó desde el primer
momento un gobierno que llamó de ―Unidad Nacional‖, sorprendiendo gratamente a
quienes consideraban que, de conseguir el triunfo, habría una guerra con Venezuela,
una intensificación del conflicto con la guerrilla y un gobierno prácticamente igual al
de Uribe, entre otras cosas. Santos llegó a la presidencia y desde el principio se
mostró como un gobernante comprometido con cumplir las propuestas de su
campaña. Reestableció las relaciones con Venezuela y otros países vecinos, nombró
un gabinete de ministros que fue aplaudido y muy aceptado por la opinión pública y
llegó incluso a desarmar a sus más grandes críticos, convirtiendo en oposición a las
lumbres más representativas del uribismo, entre ellas el propio José Obdulio
Gaviria, uno de los estandartes del uribismo y principal defensor de Álvaro Uribe, de
quien fue asesor en su primer mandato.
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Un mes después de la posesión de Juan Manuel Santos en la presidencia ocurrió uno
de los golpes más contundentes a la guerrilla de las Farc. En la llamada Operación
Sodoma, ejecutada por la Fuerza de Tarea Conjunta Omera de las Fuerzas Militares
fue abatido el Víctor Julio Suárez Rojas alias el ‗Mono Jojoy‘, uno de los
comandantes más fuertes de esa organización insurgente y prácticamente el
miembro más importante del secretariado de las Farc. El ‗mono Jojoy‘ también era
conocido como el guerrillero más sanguinario y el responsable de los secuestros más
sonados. En un sector del departamento del Meta conocido como La Escalera, fue
bombardeado desde el aire el campamento en el que se encontraba el jefe guerrillero.
Sin duda ese ha sido uno de los golpes más duros en contra de esa guerrilla cuyo
máximo comandante es alias ‗Alfonso Cano‘.
Con el 2011 se desató un escándalo de grandes proporciones que sacudió la Alcaldía
de Bogotá encabezada por Samuel Moreno. Salió a la luz una serie de contrataciones
irregulares en el distrito entregadas a un grupo de intermediarios, el Grupo Nule,
conformado por tres hermanos que, al parecer, se encargaban de todas las obras que
se hicieran en Bogotá, entre ellas, el contrato para hacer la fase de TransMilenio por
la calle 26, una de las avenidas más importantes de la capital. Se descubrió que les
habían sido entregados unos 62 mil millones de pesos para la realización de las
obras, las mismas que a la fecha están sin terminar. Los Nule están ahora en la cárcel
y por omisión, fue suspendido por la Procuraduría el alcalde Samuel Moreno quien
está siendo investigado por este hecho que fue llamado ―Carrusel de la Contratación‖
y por falta de gestión como alcalde de la Capital. Moreno, elegido alcalde el 6 de julio
de 2007 por el Polo Democrático Alternativo, tiene hasta el momento la
impopularidad más alta en la historia de los gobernantes capitalinos con un 76 por
ciento de desaprobación. Sin duda el Polo Democrático, el partido de oposición que
gobernó en Bogotá desde el 2004 con Luis Eduardo Garzón se vio seriamente
afectado en su percepción y su popularidad también es una de las más bajas.
Por esta razón las elecciones a la Alcaldía, que ya se aproximan, están más
disputadas que nunca. Ya se sabe de la candidatura de Enrique Peñalosa por el
Partido Verde, la de la ex senadora y representante a la cámara por Bogotá, Gina
Parody y la del también ex representante a la cámara por Bogotá, David Luna. Hasta
el momento el más opcionado parece ser el candidato del Partido Verde aunque en
los últimos días el ex presidente Alvaro Uribe aseguró que lo apoyará, lo cual, no
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tuvo mucha acogida en los miembros del Partido, incluyendo a Antanas Mockus y
una multitud de seguidores que han señalado que si el Partido se une al uribismo no
le darán su voto.
Como el propio Samper Ospina dice, por muchos hechos que hayan ocurrido en el
país, estos no son más que los escándalos del gobierno de Uribe, el conflicto con la
guerrilla y el buen gobierno de Santos y el ‖Carrusel de la Contratación‖ en Bogotá.
A continuación se analizará el discurso de Daniel Samper partiendo de varias
columnas que parten de un contexto determinado.
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El discurso de Samper Ospina
Para analizar el discurso de Samper Ospina en su columna de Semana sería aburrido
y además, equivocado, aplicar las categorías comunes de argumentación de las
columnas de opinión o buscar falacias en sus argumentos pues el humor no se rige
bajo esos lineamientos tradicionales del periodismo de opinión. No se hará énfasis en
los apuntes del columnista o en sus mejores chistes pues para ello es mejor leer
semanalmente su columna o todas las que se han escrito hasta el momento (las cuales
se encuentran como anexo a este trabajo de grado en un archivo digital), sin embargo
es necesario establecer varias categorías para que, a partir de ellas, se puedan
evidenciar varios puntos específicos. Estas categorías son:
Contexto particular de la columna
Figuras literarias o tropos
Terminología, apodos y relaciones
Filias y fobias
En total y hasta el domingo 21 de mayo de 2011 Daniel Samper ha escrito un total de
147 columnas para la revista Semana como se registró en la tabla de excel, adjunta a
este trabajo, la cual contiene los conceptos clave de cada una, los personajes
protagonistas y un breve resumen columna por columna, sin embargo, las categorías
de análisis serán aplicadas a una muestra de 15 columnas escogidas de acuerdo con
hechos relevantes en el contexto nacional, la forma de escritura, los recursos
utilizados y porque evidencian las pasiones y odios del columnista. No fueron
elegidas de manera cronológica —es decir en un espacio de tiempo delimitado— pero
están dispuestas desde la más antigua hasta la más reciente.
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“Operación „Jaque‟: la película”
Julio 14 de 2008
Después del éxito y cubrimiento mediático de la Operación Jaque en la cual fue
liberada la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt junto con tres contratistas
estadounidenses, siete miembros del ejército y dos de la Policía Nacional el país
estaba prácticamente en las nubes celebrando el éxito de las Fuerzas Militares. Según
la opinión pública y los sucesos narrados, fue una operación perfecta, ejecutada el 2
julio de 2008. Doce días después, el 14 de julio, Daniel escribió la columna basada en
la costumbre repetitiva de hacerle una película a cuanto suceso famoso y bien
ejecutado ocurra en la que describe las tendencias del cine nacional, los actores que
siempre aparecen en las películas y los políticos que tendrían personaje dentro del
filme.
Como en toda columna, las figuras literarias son un recurso constante. Veamos un
ejemplo evidente de hipérbole. Cuando Daniel escribe ―[…] quiero hacer un llamado a
la calma y solicitar a las autoridades pertinentes, o a quien haya lugar, que no
permitan que de esta euforia salga una película colombiana al respecto, como
lamento que va a ocurrir‖ esta, sin duda es una exageración en la medida que le pide a
las mismísimas autoridades que prohíban hacer la película cuando lo más normal
sería expresar su desacuerdo ante la opinión pública.
Pasemos a la analogía, evidente y muy frecuente en todas las columnas de Samper
Ospina. ―{…] en caso de que no decida filmarla Víctor Gaviria, que la haría
directamente con ‗Gafas y ‗César‘de actores reales, siempre y cuando se comprometan
a decir la palabra gonorrea varias veces en cada escena‖. En efecto, es usual que
Víctor Gaviria trabaje con actores naturales en sus películas, como en el caso de La
Vendedora de Rosas uno de los filmes más famosos del director, por lo que contar
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con ‗Gafas‘ y ‗César‘ —los guerrilleros que fueron capturados tras el éxito de la
Operación Jaque— no sería descabellado. De hecho, es común que los actores
naturales venidos de las comunas tengan ese tipo de apodos y usen la palabra
―gonorrea‖, muy común en ese ámbito y usada repetición tras repetición en La
Vendedora de Rosas.
Otro ejemplo de analogía es el que se presenta en el siguiente caso: ―Yo sé que para
bajar costos en Colombia no filmarían dentro de un helicóptero real, sino en la cabina
del avión destartalado que yace en el museo de los niños; que adecuarían la Plaza de
Villa de Leyva como si fuera la Alcaldía de París; que las escenas de guerra se harían
en el parque Jaime Duque, y que incluso aprovecharían la réplica de yeso del Taj
Mahal, deslumbrados por su tamaño aunque no tenga nada que ver con la selva […]‖
Sin duda lo que quiere evocar Daniel con estas comparaciones es la similitud que hay
con los lugares nombrados aunque ridiculizando los nacionales y llevándolos a su
mínima expresión.
En el siguiente ejemplo se observa una metáfora: ―Para interpretar a Juan Manuel
Santos, ¿traerían a Chuky, el muñeco diabólico?‖. Hay una identificación del que,
para la época, era el Ministro de Defensa con el famoso personaje de las películas de
terror, Chuky. Es curioso que posteriormente, durante la campaña de Santos a la
presidencia, sus detractores constantemente lo llamaban Chuky, apodo que incluso
alcanzó a llegar a oídos del ahora primer mandatario.
Finalmente el símil se hace presente en la frase que cierra la columna. ―Pero en medio
de esta euforia he perdido las esperanzas, y sé que la harán; y que después vendrá
Operación jaque dos: el retorno. Y que, como van las cosas, también habrá una
tercera parte, pero de Uribe‖. Es precisamente la frase que hace referencia a Álvaro
Uribe la que contempla el símil, comparando los periodos del ex presidente con una
película de diferentes partes que para el momento, parecía tener una tercera muy
cerca.
En cuanto a los términos propios, en esta columna no se hace evidente ninguno en
especial pero si hay relación de personajes con apodos que posteriormente serían
tomados como modelo para la opinión pública. Es el caso de Juan Manuel Santos y
Chuky, el muñeco diabólico, y de Andrés Felipe Arias a quien relaciona con Álvaro
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Uribe en el siguiente comentario: ―[…] a Andrés Felipe Arias clamando para que lo
dejen hacer de Uribe: porque él siempre quiere hacer de Uribe‖. Hay una relación
evidente de Arias y el apodo con el que es conocido: Uribito.
En la columna hay una crítica innegable al cine colombiano y la calidad de su
producción, por lo que se podría clasificar como una fobia, así como la expresada en
su opinión sobre Juan Manuel Santos, Andrés Felipe Arias y Álvaro Uribe. No se
expresa ningún gusto particular o una opinión favorable acerca de algún tema
específico.
“El oso de ser colombiano (segunda parte)”
Enero 19 de 2009
Para entender el contexto de esta columna es necesario partir de la siguiente
caricatura de Mike Peters publicada el 2 de enero de 2009 en un diario de Estados
Unidos.
Cuadro 1:
Mother Goose: —Mmm, un café colombiano fresco para esta mañana
Ralph: —¿sabes que en Colombia hay un gran movimiento de crimen organizado?
Cuadro 2:
Ralph: —o sea, cuando dicen que hay un pedacito de Juan Valdez en cada tarro de
café, tal vez no sea un chiste
Cuadro 3:
Grimm: — ¿por qué estás bebiendo té?
Mother Goose: —No preguntes
Inmediatamente después de conocerse la caricatura en el país se formó un escándalo
y se especuló acerca de una posible demanda de la Federación Nacional de Cafeteros
al caricaturista por ofender la dignidad nacional, por lo que Daniel escribió la
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columna El patriótico oso de ser colombiano en la que se burla de la manera
―penosamente provinciana‖ en que el gobierno colombiano reaccionó ante una simple
ilustración. Días después, la organización y el gobierno decidieron cancelar la opción
de demandar y prefirieron invitar al caricaturista a Colombia para que conociera la
situación del país. Es así como Samper escribe la segunda parte de esta diatriba
contra el patriotismo colombiano en la que recrea lo que le pasaría si viene a
Colombia y las situaciones a las que se enfrentaría.
Son varias las figuras o tropos utilizados para estructurar la columna. En primer lugar
aparece una ironía en la siguiente frase: ―Iba a escribir sobre algo que me hiciera
sentir orgulloso de ser colombiano, como la última película de Dago García o ser
compatriota de Marlon Becerra […]‖. Teniendo en cuenta que la ironía busca dar a
entender exactamente lo contrario de lo que se dice, es evidente que Daniel no se
siente para nada orgulloso de ser compatriota de estos dos personajes a los que en
otras columnas critica tajantemente.
Un ejemplo claro de autentica hipérbole o exageración es el siguiente párrafo en el
que Samper describe lo que le podría pasar al caricaturista si se atreve a venir a
Colombia: ―El pobre caricaturista no merece el flagelo mayor de traerlo a nuestra
platanera a que le dé paludismo, las fuerzas vivas del Quindío le brinden un coctel de
bienvenida y las autoridades nacionales lo someten a un aluvión de atenciones
provincianas, acartonadas y tenebrosamente solemnes que empezarán con la entrega
de las llaves de la ciudad y continuarán con una serie de discursos de los políticos
locales […]‖. La exageración esta presente desde que supone que si viene a Colombia
el personaje se enfermará —de una enfermedad típica de las zonas selváticas, por
decir lo más— y le tocará atravesar por un sinnúmero de flagelos descritos. Hay
también exageración en el modo de articulación del lenguaje y el uso de frases como
―atenciones provincianas, acartonadas y tenebrosamente solemnes‖.
Otra de las figuras presentes en la columna es el símil, evidente en una frase como
―[…] no nos digamos mentiras: número de Diners sin Juan Manuel Santos en la
portada es como Kokoriko sin Colombiana‖. Para qué decir más si la comparación es
evidente, además de hacerla utilizando un elemento tradicional de la cultura
gastronómica nacional para darle ese toque colombiano pero a la vez, antipatriota a la
columna.
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También se hace presenta la metáfora en la columna, cuando Samper Ospina hace
comparaciones del siguiente tipo: ―[…] cuando se encuentre a Horacio Serpa a quien
saludará aterrado creyendo que es Juan Valdez y pensando que se ha envejecido
repentinamente‖ la figura se infiere de la comparación entre Serpa y el icono del café
colombiano.
La columna es una crítica a los protocolos acostumbrados por los que son sometidos
los visitantes ilustres de nuestro país, como la presentación de la Señorita Colombia,
la entrega de las llaves de cuanta ciudad visita y la compañía constante de la primera
dama de turno. En cuanto a los términos utilizados, Daniel se refiere por primera vez
en la columna a Colombia como la ‗platanera‘ y se refiere al alcalde Samuel Moreno
como un ‗farolero‘, además de llamar lambones a los ministros que nadan con Uribe
en el río.
Es evidente que en esta columna Samper Ospina muestra su posición crítica contra el
patriotismo solemne que se creo en el gobierno de Uribe. Demuestra fobia a los
consejos comunales y las costumbres provincianas del ex mandatario como nadar en
ríos de pueblo o regañar funcionarios en los consejos. Además de eso, hay una crítica
implícita a la falta de contenido de las revistas Caras, Jet Set y Diners al mencionar
que siempre salen las mismas personas en portada o las páginas sociales.
“¿Puede usted reemplazar a Uribe?”
Febrero 2 de 2009
No es mucho el contexto que se necesita para explicar por qué Daniel escribió esta,
que más que una columna, es un test con una lista de preguntas que son una
descripción de Álvaro Uribe como persona y como mandatario. Samper enumera en
una serie de preguntas, las principales características del ex presidente, así como sus
palabras más comunes, su pensamiento, sus acciones y las personas que lo rodean.
No hay muchos recursos más que las propias preguntas para articular la columna,
aunque hay dos analogías evidentes reflejadas en los siguientes puntos del test:
―Sumándome a esfuerzo que humoristas de la talla de Rodrigo Rivera y Tola y
Maruja‖ es clara la analogía que se hace entre Rodrigo Rivera, sus actitudes y
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declaraciones con creaciones humorísticas. A continuación se ejemplifica la analogía
en una de las preguntas del test: ―¿en materia de libros de filosofía, no leería a Kant ni
a Shopenhauer, sino a José Obdulio Gaviria?‖ La analogía se evidencia cuando se
compara a José Obdulio —de manera irónica, claro— con filósofos tan importantes
como esos dos. Además, resulta una analogía pues es pertinente recordar que José
Obdulio Gaviria fue asesor presidencial del gobierno Uribe y es el artífice detrás de
varias de las más importantes ideas del uribismo. Gaviria se caracteriza por defender
a capa y espada los postulados del ex mandatario a quien considera un salvador de la
patria, desde una columna publicada en el diario El Tiempo por lo que la conexión
que hace Samper con la filosofía puede partir de sus escritos.
Otra analogía con tintes de metáfora es la siguiente: ―¿le gustaría tener un ministro
chiquito y faldero, casi un french poodle, que lo imitara en todo?‖ En primer lugar el
hecho de que no nombre directamente a Andrés Felipe Arias –el ministro al que hace
alusión— representa una antonomasia, pues se habla del ―ministro chiquito y faldero‖
en vez de llamarlo por su nombre propio. Además, se compara a Arias con un perrito
faldero debido a su actitud servil y extremadamente fiel con el ex presidente Uribe.
También, por supuesto, se compara a Arias con un perro french poodle, raza
caracterizada por su lealtad y sumisión con los amos.
La ironía está presente en los tres resultados que arroja el test. En ellos se evidencian
los estereotipos que se crearon a partir del uribismo y se utiliza el recurso de
asociación en cada uno de los niveles de la siguiente manera:
―Si respondió afirmativamente a 10 preguntas: no nos digamos mentiras: usted es un
terrorista de La Far —en ese tono hablaba Uribe—. Con suerte puede reemplazar a
Manuel Marulanda, pero no a Uribe‖. Una de las características más frecuentes del
uribismo es el hecho de decirle terrorista o amigo de las Farc a los miembros de la
oposición o a quienes simplemente no estaban de acuerdo con varias políticas del ex
mandatario.
―Si respondió afirmativamente de 20 a 30 preguntas: su puntuación le da derecho a
tomar un curso remedial dictado por el doctor Rivera en el Panaca que queda cerca
de Pereira. Felicitaciones. Sin embargo, aún le falta bajarle a la aristocracia, dejar de
ser un camaleón y no parecerse tanto al muñeco Chuky que sale en las películas de
terror‖. Aquí se asocia el transfuguismo político de Juan Manuel Santos a quien,
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recordemos, Daniel asocia a Chuky, el muñeco diabólico. Aparece también la
metáfora cuando se compara a Santos con un camaleón.
―Si respondió afirmativamente a todas las preguntas: Andrés Felipe: sé que eres tú.
¿Qué diablos haces leyendo esta columna? Vete a trabajar: todavía hay mucha tierra
que les puedes quitar a los desplazados para dársela a los empresarios. Empezaste tu
campaña burlando las leyes que te prohíben intervenir en política como ministro, y
eso marca un atractivo estilo de continuidad. Sin embargo, el aviso de la
metamorfosis en que la cara de Uribe se convertía en tu propia cara me pareció algo
degenerativo: tenía un aire al viejo comercial de La droga destruye tu cerebro”. La
asociación de Andres Felipe Arias con absolutamente todas las características de
Uribe era infaltable. Sin duda, hay ironía cuando Samper invita a Arias a seguirle
quitando las tierras a los campesinos para entregarla a los empresarios y además se
observa un símil en esa última frase en la que se compara el aviso de la metamorfosis
con un comercial de consumo de drogas. Incluso el hecho de creer que entre todos los
lectores que leen su columna que puedan tener la mayoría de características de
Álvaro Uribe, el único que las tiene todas es Arias, por lo cual hay una exageración, lo
cual, hace pensar el la hipérbole.
En cuanto a terminología y apodos que encontramos en la columna vuelve a aparecer
Chuky, evocando a Juan Manuel Santos, lo cual, evidencia una fobia, así como la
forma en que se expresa Uribe, su tono paisa señorial, José Obdulio Gaviria, Ernesto
Yamhure —del que se burla al decir que Uribe es capaz de leerlo sin sentir arcadas—,
Fernando Londoño —cuando dice que nadie más que Uribe es capaz de leer una
columna completa de su autoría— y por su puesto, Andres Felipe Arias.
“Me lanzo por el Partido Conservador”
Abril 13 de 2009
En esta columna que circuló el 13 e abril de 2009 Daniel utiliza uno de sus recursos
favoritos: lanzarse como candidato a alguna de las elecciones de turno. En esta
oportunidad se contempla como candidato a la consulta presidencial por el Partido
Conservador, consulta en la que para esa fecha sonaban José Galat, Carlos Holguín
Sardi, Fernando Araújo, Sabas Pretelt de la Vega y Andrés Felipe Arias.
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Empecemos a enumerar las figuras y recursos presentes en esta columna. En primera
medida y como en la mayoría de sus textos, aparece la analogía. ―[…] me mando
aunque haya candidatos tan sólidos como el doctor Holguín Sardi, muy fuerte en
poblaciones como la isla de Roncador y Quitasueño, donde debería montar su sede
nacional‖. Daniel hace una asociación de la somnolencia de Carlos Holguín jugando
con los nombres de estas dos islas, o mejor cayos, cercanas a San Andrés y
Providencia.
Por supuesto también aparece nuevamente la ironía como uno de sus principales
recursos, tal como se evidencia en la siguiente frase: ―ya me acostumbré, sin
embargo, y ahora imito, la sensibilidad social de el ‗Pincher‘ Arias: tengo un
programa para que cada pobre se realice como mano de obra barata […]‖ teniendo en
cuenta las dimensiones del escándalo de Agro Ingreso Seguro, es obvio que Daniel
pretende criticar la falta de sensibilidad de Arias y el daño que los malos manejos del
proyecto, causaron en los campesinos colombianos.
Después de recrear una conversación de los miembros del partido en la que alguno
propone jugar a cambiarle el nombre se observa la siguiente frase: ―—Sí, sí: me pido
ponerme Álvaro, —dijo adivinen quién—―, una intervención más abajo habla
nuevamente este personaje cuando dialogan sobre los mayordomos de las fincas: ―—
Eso, eso: yo quiero tener un mayordomo y una finca que se llame el ubérrimo —dijo
imagínense cuál de todos—―. El recurso de la repetición, no propiamente anáfora,
hace un énfasis en la intención de Daniel de mostrar nuevamente al candidato que
quiere imitar a Uribe en todo sentido. ¿Quién es?, adivinen.
Con esta columna es clara la fobia de Daniel hacia el Partido Conservador y sus
militantes, especialmente los posibles candidatos a la consulta presidencial. El texto
entero es una crítica al partido. Aún no encontramos alguna filia o mínima defensa a
algún personaje, elemento o situación.
“Palabras de consuelo a la hija de Michael Jackson”
Julio 13 de 2009
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El 25 de junio de 2009 falleció en Estados Unidos el ‗Rey del Pop‘ Michael Jackson.
Su muerte paralizó el mundo y los medios de comunicación no pararon de difundir la
historia de uno de los más grandes artistas en la historia de la música. El 7 de julio,
día en que se llevó a cabo su funeral, Paris, su hija, conmovió al mundo cuando en
medio de unas palabras dedicadas a su padre rompió en llanto frente a las cámaras,
hecho que Daniel aprovechó en esta columna escrita a modo de Carta, para
enumerarle a la pequeña una serie de razones por la que debería sentirse bien,
especialmente, porque su padre no murió en Colombia.
El hecho de escribir a modo de epístola es un ya recurso diferente y particular para
articular la sátira y la crítica que contiene esta columna. Empecemos con un ejemplo
de exageración presente en el primer párrafo del texto. Después de que Daniel
confiesa el impacto que le causaron el ―desmesurado entierro‖ de Jackson y una
camisa que usó Gaviria en Valledupar, el recurso se hace evidente cuando se lee ―[…]
una foto que publicó la Revista Caras hace un par de meses en la que aparecía el ex
presidente Gaviria vestido con una camisa de alta costura, brillante y tenebrosa,
durante una parranda en Valledupar. La pongo en la versión de Internet de esta
columna por si quieres verla. Me temo que estamos ante algo mucho más grave que lo
de La Catedral‖ La exageración parte en primera medida de términos como ―brillante
y tenebrosa‖ para describir un elemento tan simple como una camisa, además de
comparar este hecho con algo tan grave como el escándalo de La Catedral, la cárcel
ultra moderna y llena de comodidades en la que Pablo Escobar pagó parte de una
condena y en la que, según varias fuentes, se alojaron y visitaron varias
personalidades de la farándula, la política y el deporte nacional.
Continuando con la famosa camisa del ex mandatario, Samper sigue usando el
recurso de la exageración y la analogía de un hecho con el otro, para criticar el gusto
del dirigente: ―¿por qué digo todo esto? Porque se me ocurrió pensar que si el
entierro de tu padre hubiera sucedido en Colombia, el presidente Gaviria se habría
dado la licencia de asistir a la velación con esa camisa, en un gesto que
comprometería la estabilidad de la nación‖. Y es que el humor se vale de esos
recursos y permite eso: llevar al extremo el hecho de que una camisa pueda
desestabilizar un país entero.
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Veamos un ejemplo de símil reflejado en la siguiente frase que aparece después de
que Samper compara lo que ocurrió en el funeral del Rey del Pop, con el del maestro
vallenato Rafael Escalona: ―Aquella vez los candidatos se volvieron costeños de
repente. Marta Lucía Ramírez daba declaraciones como si fuera la Maye —el gran
amor de Escalona—―. No solamente hay una comparación de los dos funerales sino
también del modo en que los invitados terminaron hablando en el acento propio de la
costa por el simple hecho de asistir.
Acto seguido, Daniel consuela a Paris recreando lo que habría pasado en Colombia si
hubiera acogido el entierro de Jackson, hablándole de manera directa y utilizando
metáforas como ―[…] así es la gente. Y cuando no es oportunista es morbosa, le
encanta comentar detalles escabrosos, como que a tu papá lo enterraron sin cerebro.
Date por bien servida: de haber sabido que no tenía cerebro, en Colombia, en lugar de
enterrarlo, lo habrían lanzado a la presidencia por el Partido Conservador o estaría
presentando un programa concurso, como Jota Mario Valencia‖. Cruel pero chistoso,
muy chistoso, Samper compara a los candidatos presidenciales del Partido
Conservador con personas sin cerebro. La magia del humor.
En esta columna nuevamente se evidencia la fobia de Daniel hacia el Partido
Conservador y sus precandidatos. Aparece Andrés Felipe Arias a quien, según
Samper, Michael corretearía junto con otros niños; y se critica duramente el modo
lagarto en que se procede en Colombia con los personajes famosos, por más de que ya
estén muertos. Sin nombrar, por supuesto, el repudio que le produce la camisa loba
de César Gaviria.
En cuanto a términos y relaciones nuevamente se refiere a Colombia, esta vez, como
la ―platanera tropical‖. La columna termina con una sugerencia de Samper a Gaviria
en la que se evidencia su poco, o mejor nulo, gusto por Álvaro Uribe: ―tengo
entendido que piensa regalarle la suya —su camisa— al presidente Uribe, con la
esperanza de que se la ponga y ahí si se le dañe la reelección‖. No hay evidencia
alguna de gustos o acuerdos con situaciones, elementos o personajes.
“Comprando finca en tiempos uribistas”
Octubre 5 de 2009
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Con el escándalo en Agro Ingreso Seguro en su punto máximo, Daniel describe de
manera irónica la odisea en la que se convirtió adquirir un pedazo de tierra durante el
gobierno de Uribe. Esta columna esta cargada de figuras y recursos literarios que la
convierten en una verdadera caricatura de los protagonistas de esa turbia historia.
Para empezar una hipérbole nos recibe. ―quise comprarme una finca a sabiendas de
que en Colombia un pedazo de tierra vale un ojo de la cara‖, que mejor ejemplo que
uno de los que escriben en los tableros del colegio para explicar el trasfondo de esta
figura literaria que Daniel acompaña con la siguiente metáfora que acompaña
perfectamente la frase anterior: ―[…] pero salvo el suyo y el de Adriana Eslava, hay
pocos casos de gente que haya podido comprar algo en el campo‖. ¿Y por qué Adriana
Eslava sí pudo comprar tierras? Sencillo, porque la presentadora sufrió un accidente
en el que perdió uno de sus ojos- Desde aquel entonces utiliza un parche para ocultar
su defecto. Una analogía metafórica despiadada pero que, de todas maneras, aterriza
aquella exageración sobre el costo de las tierras en el país.
Aquí hay un ejemplo en el que el mismo Samper explica la figura que utiliza para
burlarse de los personajes de la siguiente frase: ―[…] Aproveché que tengo grandes
amigos en el uribismo para intrigar por unas hectáreas a buen precio. Digo grandes
en un sentido metafórico, porque mis mejores amigos son ‗Pachito‘ Santos y el
‗Pincher‘ Arias que son los más bajitos‖. El hecho de nombrarla le imprime ese toque
de burla y humor para hablar no sólo de la estatura del ex vicepresidente y el ex
ministro, sino de su bajeza moral.
A continuación y de manera irónica, Samper aprovecha para nombrar a dos de las
personalidades de la farándula que se vieron implicadas en la entrega de subsidios de
AIS: ―Llamé a Arias, pues, para que me asesorara. Siempre me han gustado sus
modelos agrarios: modelos como Valerie Domínguez o Ana María Dávila, a quienes el
ex ministro quería darles plata: ah, ‗pincher‘, chiquito pero coqueto y sinverguenza‖.
Es obvio que lo que menos espera Daniel es recibir instrucción de una persona como
Andrés Felipe Arias, sin embargo, es una excusa perfecta para tratarlo nuevamente de
―chiquito‖, además para nombrar Domínguez, a la ex señorita Colombia que recibió
un subsidio con la intermediación de Juan Manuel Dávila, su novio y hermano de
Ana María.
73
Samper continúa usando la ironía para referirse a su personaje favorito, el ‗Pincher‘, y
aprovecha para hacer una crítica contundente a la manera en que el gobierno ha
manejado el tema de la pobreza en nuestro país, que cada día crece más, en contraste
con los auxilios otorgados a quienes menos lo necesitan. ―Claro que si, lo entiendo (a
Andrés Felipe Arias). Y lo apoyo. Porque yo creo que la mejor manera de promover la
riqueza es ayudar a los ricos: darles incentivos, favorecerlos. En mi gobierno, por eso,
crearé un Sisbén para la clase alta; un sistema para que las familias pudientes hagan
fila y reclamen una acción del Country (uno de los clubes campestres más
importantes y tradicionales de Bogotá), una aplicación de bótox y un bono para jugar
golf con José Gabriel Ortiz una vez al año‖. Una prueba más de que el humor es cosa
seria, y mucho más cuando es un medio efectivo para sentar una necesaria voz de
protesta.
Continuando con la carga irónica de esta columna, es destacable la cantidad de
hechos y problemas que describe Daniel en un corto párrafo que a manera de burla
refleja el via crucis por el que pasan miles de colombianos que lo perdieron todo y que
además no cuentan con la ayuda del Estado. ―[…] cuando alguien sugiere que la
política agraria de Uribe es feudalista, reviro de inmediato. Quizá no tenfa derecho a
ser propietario de las parcelas, pero el campesino en la era uribista es mucho más que
un jornalero y se puede realizar de muchas maneras: puede volverse desplazado,
incluso de Carimagua (una hacienda en el Meta que iba a ser entregada a varias
familias de desplazados pero que el Ministro Arias concedió a empresas privadas para
la explotación de cultivos de palma), si cuenta con la ayuda del ‗Pincher‘; o
convertirse en Falso Positivo, que es una fórmula polémica pero efectiva para
disminuir la pobreza‖. Es pertinente recordar que el problema de los falsos positivos
consiste en una serie de asesinatos a civiles que fueron reportados como guerrilleros.
Las personas que sindicaron como insurgentes dados de baja en combate resultaron
ser humildes campesinos o desaparecidos previamente reportados cuyos cadáveres
aparecieron repartidos en varias ciudades del país con uniformes de la guerrilla. El
plan fue ejecutado por miembros de las Fuerzas Militares mientras Juan Manuel
Santos se desempañaba como Ministro de Defensa.
Ya en esta columna Daniel Samper llama a Andrés Felipe Arias el ‗Pincher‘, apodo
referido a la raza canina que se caracteriza por su pequeño tamaño. El propio Daniel
74
explica su apodo con una analogía. ―[…] El ‗Pincher‘ en cambio, es necio y sucio, y no
puede ver un pedazo de tierra porque termina untado‖.
Columna tras columna se reafirma el disgusto que Uribito, el ‗Pincher‘, o mejor,
Andrés Felipe Arias le produce a Samper Ospina. Si, hace parte de sus fobias. Aún no
se evidencian filias ni gustos particulares.
“Una columna constructiva”
Octubre 26 de 2009
Esta es una de las columnas en la que Samper sostiene una conversación con su ‗tía
uribista‘, un personaje ficticio que recrea el típico colombiano que, más que uribista,
es furibista pues sería capaz de defender con su propia vida los ideales y principios de
los que tanto hablaba el ex mandatario. La ‗tía uribista‘ tiene todas las características
de aquellos que tildaban de terrorista y amigo de las Farc a toda persona que no
creyera en las palabras del ex presidente, las mismas que ahora reviran por el
mandato poco cercano a Uribe de Juan Manuel Santos.
En esta columna que es más bien una verdadera caricatura escrita, la ‗tía uribista‘ le
hace caer en cuenta a Daniel que a lo largo de sus textos no ha hecho más que
despotricar del uribismo y mostrar sus fobias, pero jamás se ha detenido a alabar lo
bueno. El escrito es una completa ironía en la que Samper trata de encontrar el lado
positivo de los personajes que tanto critica. Veamos los recursos que utiliza para ello.
En primer lugar, la tía le reclama por la cantidad de chistes ordinarios y
comparaciones salidas de tono, a lo que Daniel le responde de manera irónica. ―[…] le
haz dicho marrano al doctor Turbay; lora a Marta Lucía Ramírez; loba a Dilian
Francisca; lagarto a Roy Barreras… ¡no te parece que hace rato te pasaste? —Puede
ser —reconocí con gallardía—: quizás no era necesario ofender a tantos animales‖.
Párrafos más abajo Daniel trata de justificarse con su tía, diciéndole que él también se
convirtió al uribismo, o mejor, al furibismo. ―[…] Puedo mostrarle la cicatriz en el
cráneo y dejar que toques el pedazo que quedó todo blandito. Y es verdad: hace ya un
tiempo tomé impulso, me hice la cirugía, y heme acá. Situado al fin del lado de los
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buenos, yo que antes no tenía amigos‖. Nuevamente la exageración se hace presente
al mostrar que la única manera de que entren los ideales uribistas a su mente sea por
medio de una cirugía.
El párrafo que le sigue es una gran metáfora burlesca que compara a uno de los
personajes más criticados por Daniel, Julio César Turbay —el hijo del ex presidente—
con un animal muy particular. ―[…] las palabras de mi tía me llevaron a una reflexión.
¿y si de verdad he ofendido a alguien sin darme cuenta?, me pregunté. Eso explicaría
que Junior Turbay no me haya saludado la última vez que nos encontramos en el
Palacio del Colesterol. Sea el momento de ofrecerle excusas y expresarle que si alguna
vez lo relacioné con un cerdo, aclaro que, primero, no fue con uno de cualquier raza,
sino con el excelso cerdo ibérico; y segundo, que sólo lo hice porque supe que ese
sofisticado animal español gusta de alimentarse con bellotas, es decir, con mujeres
muy bellas, se entiende‖. Además de jugar con el lenguaje y las palabras, que, aunque
con otro significado, aplicadas literalmente van perfectamente con el contexto,
ejemplo de las bellotas que sirven como alimento para el cerdo ibérico o ‗de pata
negra‘, hay una ironía evidente cuando Samper intenta excusarse con Turbay pues es
obvio que es lo que menos le interesa.
Lo que sigue son una serie de recomendaciones ―que tejan sociedad, que construyan
país, para que de las entrañas de la patria sigan brotando frutos preciosos como el
mondongo, Armandito Benedetti y Jota Mario Valencia‖. Una analogía entre dos
personajes tan particulares y que generan opiniones tan divididas en nuestro país,
con un alimento tan exótico y tan colombiano.
En esta columna no hay hallazgos de términos nuevos o apodos que Samper
proponga para los personajes que aparecen, aunque si se evidencia la poca simpatía
que le generan personas como el columnista de páginas sociales ‗Poncho‘ Rentería, la
senadora del Partido de la U, Dilian Francisca Toro, y el ex senador —ahora
presidente del Senado— Armando Benedetti. Todos ellos consolidados como
verdaderas fobias para su paladar. Y volvemos a lo mismo. Nada de gustos, nada de
benevolencias y nada de buenos comentarios. Aún no afloran las filias.
“Presidente Uribe: reconstruya usted a Haití”
Enero 25 de 2010
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El 12 de enero de 2010, Haití vivó una de las tragedias más nefastas, no sólo de su
historia, sino la del mundo entero. Un terremoto de 7.0 grados en la Escala de Richter
sacudió el país más pobre del continente, dejando 316.000 muertos, 350.000 heridos
y casi 1.500.000 personas damnificadas que lo perdieron todo y quedaron,
literalmente en la calle.
El hecho conmovió al mundo entero y las fuerzas de gran parte de los países del
mundo se unieron para apoyar a la isla con socorristas, dinero y planes de
reconstrucción. Sin duda, el hecho no admitía burlas. Sin embargo, Daniel Samper
aprovechando el momento que vivía el país, próximo a despedir al presidente Uribe,
hizo una columna en la que invita al ex mandatario a marcharse a la nación isleña y
reconstruirla, como según el uribismo y su propio discurso, lo hizo con Colombia.
El texto empieza con una ironía en la que Samper expresa su disgusto con quienes
critican al ex mandatario. ―Contrario a lo que piensan algunos desconsiderados que lo
tildaron de populista por su noble intención de visitar Haití, yo no sólo estoy de
acuerdo con que el presidente Uribe viaje a ese país, sino que creo que debe instalarse
allí por varios años‖. Claro, nos imaginamos el disgusto que le debe producir a Daniel
el hecho de que Uribe se vaya del país.
Siguiendo con la ironía, el recurso que definitivamente prima en la columna de
Samper, y el cual, recordemos, se trata de hacer entender exactamente lo contrario de
lo expresado, se nombran una serie de hechos que marcaron el gobierno de Uribe con
esa invitación para que el ex mandatario reconstruya Haití. ―Si el propósito verdadero
es hacer de Haití ya no digamos un pueblo que supere un terremoto, sino un país
moderno, que ingrese al Primer Mundo y que respete las leyes y la Constitución, no
podemos ser mezquinos: debemos desprendernos del presidente Uribe y compartirlo
con ellos‖. Uribe no respetó la Constitución, la misma en la que no se contemplaba la
reelección inmediata de presidentes y su tendencia era saltarse las leyes para su
propio favorecimiento o el de sus allegados. Claro que no es muy irónico que Daniel
quiera mandar a Uribe a Haití.
La columna recrea perfectamente el discurso de aquellos uribistas que aseguran que
el ex mandatario es el segundo libertador de la Patria y que gracias a él nuestro país
77
salió del terrible abismo en el que se hundía. Es así como recurre a metáforas como la
siguiente para darle gusto a esos personajes: ―[…] aplíquele a ese sufrido pueblo la
misma receta milagrosa con que cocinó nuestro despliegue definitivo‖.
Pero sigamos con la manera irónica en que Samper despacha a Uribe a Haití. Bueno,
ni tan irónica porque no hay duda de que sí quiere verlo lejos. La carga de doble
sentido está presente en las razones que tiene para invitarlo a que viaje y la necesidad
de encimarles también al ex ministro de defensa. ―Quedaremos a la deriva, es cierto;
y nadie podrá reemplazarlo. ¿Juan Manuel Santos, acaso? No, presidente: nos
sacrificamos de nuevo: es mejor que se lo lleve con usted, para que ayude a recuperar
la seguridad de la isla. Ellos lo necesitan más que nosotros. Acá ya todo está bien en
ese aspecto‖.
La columna se cierra con una metáfora de aquellas que sirven para ilustrar la
definición de esta figura literaria: ―[…] comprendemos con estoicismo que la luz de su
faro (el de Uribe) debe alumbrar otras aguas, más ahora cuando el agua está tan
cara‖.
No es difícil entonces hallar las fobias de Daniel en esta columna, aunque es
imposible encontrar filias. La columna es una invitación constante a que Álvaro Uribe
prácticamente deje en paz al país y se nombrar varios personajes que no son
propiamente del gusto de Samper como el ‗Pincher‘ Arias, claro; los hijos de Uribe
Tomás y Jerónimo a quienes invita para que viajen con su padre y varios uribistas
como Juan Manuel Santos, por supuesto y César Mauricio Velásquez, para la fecha el
jefe de prensa del Palacio de Nariño, a quien invita a evangelizar la población haitiana
—pues Daniel siempre asuró que tenía punta de cura—.
“Mockus es posible”
Abril 5 de 2010
Entramos ahora a analizar una columna en la hay alta carga de crítica pero Daniel
confiesa su gusto por Mockus para las elecciones a la presidenciales. Para el 5 de abril
de 2010, día en que circuló esta columna en Semana, Antanas Mockus ya era el
candidato único del Partido Verde y se empezaba a consolidar como una fuerza
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diferente en medio del camino a la presidencia con su propuesta basada en la
legalidad y el cumplimiento de la norma por encima de todo.
Mockus, dos veces alcalde de Bogotá, se había caracterizado por ser un personaje
excéntrico y muy recordado por episodios como aquel en el que siendo rector de la
Universidad Nacional de Colombia y frente a un auditorio repleto de estudiantes que
lo chiflaban y no le permitían hablar, se bajo el pantalón y les mostró las nalgas para
adquirir toda su atención. Aunque también está en la memoria de los colombianos el
día de su matrimonio, el cual, se llevó a cabo en un circo y al que llegó con su novia
montado en un elefante. O también aquel día en el que le tiró encima un chorro de
agua a Horacio Serpa durante una campaña electoral a la presidencia asegurando que
esa debería ser la nueva forma de violencia en Colombia. O cuando se disfrazó de
súper héroe y se llamó a sí mismo ‗Super Cívico‘ para que los bogotanos
interiorizaran la cultura ciudadana como un elemento importante para el progreso de
la ciudad.
Por eso y varios actos más Antanas Mockus ha sido varias veces tildado de loco y sus
detractores se han valido de eso para desprestigiar sus ideas programáticas o las
propuestas para ganar la presidencia. En medio de esos comentarios Daniel escribe
esta columna para declarar su apoyo al profesor y defender sus actuaciones.
El texto comienza con un símil que nos involucra de una vez con la intención de
Samper: ―Parto de una base: mis conocimientos sobre política son tan elementales
que por poco termino trabajando para la campaña de Andrés Felipe Arias‖. Ya
aparece uno de los personajes favoritos de Daniel a quien su precandidatura a la
presidencia, perdida frente a Noemí Sanín, le costó la poca preparación que tuvo.
Continuando con la manera irónica de tratar y referirse a Arias, Daniel compara la
actitud del ex ministro con Uribe y por medio del siguiente párrafo nos muestra el
grado de lealtad que le profesa al ex mandatario. ―[…] yo mismo presencié que en
algunas reuniones el presidente subía sobre sus rodillas a Andrés Felipe y con cariño
y paciencia le espulgaba la cabeza mientras el consejo avanzaba. Y no lo digo como
una crítica. De las pocas cosas que me caen bien de Uribe es que le gustan los
animales. De eso puede dar fe su gabinete‖. En pocas palabras, Arias es un animal,
pulgoso pero muy leal al que Uribe consiente porque siente agrado en general por los
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animales, cosa que es muy cierta pues el mandatario siempre mostró su pasión por
ellos, en especial, por los caballos.
Más adelante Daniel hace de publicista y propone un estilo nuevo para que los
candidatos tengan éxito en sus campañas. ―[…] si fuera publicista haría exactamente
lo contrario. Agarraría un nuevo champú y lo haría repetir en todos los medios de
comunicación la frase yo soy el padrino de la seguridad democrática. Luego lo
llevaría a barrios pobres a que regalara tejas y lo pondría a debatir con Noemí Sanín
en público, porque cualquiera le gana un debate a Noemí‖. Es evidente que la
intención de Daniel es dejar en claro que todos los candidatos a la presidencia
pretenden ganar las elecciones partiendo del mismo discurso sobre los logros de
Uribe y autodenominándose los herederos de sus ideales.
En cuanto al tema de la supuesta locura de Antanas Mockus, empieza la defensa de
Daniel utilizando una comparación casi metafórica para dar cuenta de que el profesor
no es tan loco como lo pintan: ―No nos pongamos tan puristas. El presidente actual se
viste como un personaje de Tomas Carrasquilla, toma café subido en caballos de
paso, amenaza con irse a los puños en las cumbres internacionales y se tira en
plancha en cuanto río ve: ¿y ahora resulta que el loco es Mockus?‖. Sobra recordar
que Carrasquilla escribió sus historias hace poco más de 80 años por lo que la
vestimenta de sus personajes ha de ser muy particular.
Ser sobrino del ex presidente Ernesto Samper convierte a Daniel Samper en un
columnista que ha vivido en medio de un ambiente político cercano, aunque le ha
valido también la persistencia de sus lectores para que lo critique de la misma
manera en que hace con otros personajes. Es esta una de las columnas en las que
Daniel nombra a su tío por medio de una efectiva y muy creativa metáfora en la que
relaciona el matrimonio de Mockus con los problemas que su tío tuvo en la
presidencia. ―Ante este panorama, Mockus me parece la opción más equilibrada. Es
cierto que se casó sobre un elefante, lo cual fue interpretado por algunos como un
guiño a Samper […]‖. Es pertinente recordar que el elefante al que se refiere Daniel es
aquel que sacaron un grupo de estudiantes en una marcha para pedir la renuncia de
Samper a la presidencia de la república en mayo de 1996. La carroza disfrazada de
paquidermo fue hecha a partir de las palabras expresadas por el cardenal Pedro
Pubiano después de que el ex mandatario dijera que los problemas indicios de
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relaciones con el narcotráfico habían ocurrido a sus espaldas. El sacerdote aseguró de
manera sarcástica que pensar en eso es como si un elefante entrara por la puerta de
una casa y los dueños no se enteran.
Para finalizar, Daniel Samper hace énfasis en el cambio que propone Antanas con su
estrategia y prácticamente invita a una reflexión: ―Ojalá siga subiendo Mockus en las
encuestas. Los pueblos crecen a través de cambios como los que él inspira, aunque a
veces ese tipo de procesos, tardan bastante en madurar, al igual que el ‗Pincher‘
Arias‖. La comparación entre lo inmaduro que es Arias y la madurez que puede
alcanzar el país con Mockus al frente terminan como la moraleja de una fábula.
Por fin tenemos filias. Sin duda Daniel confía en Antanas Mockus y quiere que sea el
próximo presidente de Colombia. El título ya nos sitúa en una columna diferente con
un tinte esperanzador y en el que se evidencia su inclinación política. De las fobias,
adivinen… El ‗Pincher‘, Noemí Sanín, Juan Manuel Santos y el Procurador Alejandro
Ordóñez a quien llama el ‗procurador facho‘ endosándole características de nazi.
“Primera alocución presidencial de Juan Manuel Santos”
Mayo 3 de 2010
Nos enfrentamos ahora a una verdadera caricatura hecha completamente en
consonantes y vocales articuladas en forma de palabras. No hay dibujos, pero el lector
se hace una imagen viva de lo que describe Samper Ospina, por eso, antes que
describir o encontrar las figuras o recursos utilizados trazaremos las imágenes
mentales de esta gran caricatura.
Faltaba un mes para la primera vuelta de las elecciones presidenciales y según las
encuestas, a pesar del repunte de Mockus, Santos sería el presidente aunque con poco
margen de diferencia. Es así como Samper decide recrear lo que sería la primera
alocución de Santos como presidente de Colombia.
―(Suena el himno nacional. Rodeado de su equipo de trabajo, el presidente de la
República, doctor Juan Manuel Santos se dirige al país)‖. Estamos en situación.
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A continuación, Daniel nos pinta a Arias adivinen como: ―El ministro de gobierno,
Andrés Felipe Arias, ha ayudado a que estos trámites hayan sido expeditos —los
trámites de extradición de Álvaro Uribe— (la cámara muestra al ministro Arias, que
tiene los párpados llenos de bótox). Hago un reconocimiento a su labor. (Arias sonríe;
orgulloso restriega su lomo contra las pantorrillas del jefe de Estado, y este le soba la
espalda y le tira una ración presupuestal)‖. ¿Y por qué el énfasis en el bótox del
ministro? Bien, el recurso aquí es hacer ver que más que a Uribe, Arias quiere imitar
y serle absolutamente fiel al mandatario de turno.
Después de nombrar a quienes harían parte del gabinete ministerial de Santos,
Daniel nos muestra la siguiente imagen: ―Me rodean funcionarios jóvenes como
Lucero Cortés, ministra de cultura. (La cámara toma ahora a Lucero Cortés que se
ataca a llorar, emocionada; llama a una tuna, le pone una capa al doctor Santos,
aplaude, da brincos y vuelve de nuevo a la calma)‖. Exagerado, si, pero no muy lejos
de la realidad y del show que daría posteriormente Cortés en la verdadera posesión de
Santos.
A continuación hay muchos más personajes que adornan el cuadro. Los nombra Juan
Manuel durante su discurso. ―[…] los doctores Guerra Tulena, Jorge Aurelio Irragorri,
y el mismo José Obdulio estarán conmigo en Palacio, como gendarmes swl juego
limpio y de los recursos públicos, apoyados por el nuevo zar anticorrupción, doctor
Name Terán‖. Todos ellos involucrados en escándalos de corrupción y robo a los
recursos de la nación, en especial Name, uno de los personajes más importantes del
Partido de la U y de los más asociados a la palabra corrupción.
El discurso de Santos continúa mientras Álvaro Uribe ya vuela camino a Estados
Unidos, extraditado. ―Compatriotas: bienvenidos a una nueva era. El sátrapa se ha
ido. Y ustedes lo han visto en exclusiva por Planetavisión. Y recuerden: no sean
imbéciles. Cambien de opinión pero nunca de canal. Buenas noches‖. Tres líneas
cargadas de ironía y conexiones evidentes con hechos que aún se discuten: la
posibilidad de extraditar a Uribe por varios hechos en los que estaría implicado, el
transfuguismo político que siempre había caracterizado a Juan Manuel Santos, el ya
casi hecho de que el tercer canal privado de televisión sería adjudicado al Grupo
Planeta, el mismo que tiene bajo su poder la Casa Editorial El Tiempo y el diario de
su mismo nombre, propiedad de los Santos.
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¿Y cómo termina el cuento? ―(Todos aplauden, suena el himno nacional. […] El
estilista Emiro le pone una inyección al presidente en los párpados. El ministro
Abadía pregunta al doctor Giraldo si sabe de su esclava de oro, desaparecida durante
la alocución. Fin de la emisión)‖. Al parecer en medio de políticos hay que cuidar los
objetos personales.
En cuanto a terminología y apodos sale a relucir el sátrapa que le chantó a Álvaro
Uribe y ni qué hablar de las fobias (porque no hay filias) representadas en el propio
ex mandatario, en el ‗Pincher‘ Arias, Santos, la actriz y ahora senadora Lucero Cortés
y prácticamente la mayoría de miembros del Partido de la U. Fin del análisis.
“La angustia de ir por Mockus”
Mayo 24 de 2010
Faltaban 6 días para la primera vuelta de las elecciones presidenciales y quienes
apoyábamos a Antanas Mockus éramos un mar de nervios —como verán, estoy
aprendiendo muy rápido y en esa frase utilicé una hipérbole para exagerar el
sentimiento que nos producía el profesor mientras trataba de hablar en los debates—.
El panorama electoral era claro. Ya se sabía que la presidencia quedaría en manos de
Mockus o de Santos y la ola de debates ya estaba próxima a terminar, esos espacios
concebidos para enfrentar las ideas de los candidatos en aras a que los medios
cumplan el compromiso que tienen con los ciudadanos y les brinden la posibilidad de
elegir la mejor opción de acuerdo a la diversidad de opiniones.
Volviendo a los nervios que producía apoyar a Mockus, es pertinente explicar que la
razón de aquella sensación era producto de la profundidad que el profesor trataba de
ponerle a cada una de sus intervenciones y la cantidad de términos especializados con
los que hablaba, sin nombrar las veces que se quedaba en silencio o decía con toda
sinceridad que no podía responder a esa pregunta por falta de conocimiento.
A pesar de todo, la campaña verde seguía haciéndose basada en la legalidad, el
respeto por la vida, las leyes y los recursos públicos. Los jóvenes y seguidores del
Partido queríamos ser verdaderos modelos de esos principios que defendíamos para
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que la gente se contagiara y cambiara su manera de pensar tal como Daniel lo
describe en esta columna.
Después de hablar de los defectos —físicos e ideológicos— de los otros candidatos, de
Noemí, Petro y Santos, Samper Ospina confiesa una de sus recientes preocupaciones.
―[…] por culpa de Mockus me estoy desconociendo. Hago cosas que jamás haría. Me
he vuelto cursi. Y ya no sé que esperar de mi‖. Exageración evidente teniendo en
cuenta que la actitud que le produce el apoyo a Antanas no es mala, por lo que sobra
la preocupación de lo que espera de sí mismo.
A continuación Daniel nos aproxima a lo que es un debate en Colombia por medio de
una analogía. ―Los debates, por ejemplo: ¿en qué otro país del mundo hacen dos
debates el mismo día, en uno de los cuales una muñeca de la Fábrica Nacional de
Muñecos con una voz más aguda que la de Noemí?‖. No sabría decir a cual de las
presentadoras nacionales que comparten esas características se refiere Samper en
esta pregunta, pero seguramente cualquiera de las que haya elegido como ejemplo es
tan postiza y artificial como un muñeco.
Párrafos más adelante Daniel describe al pie de la letra qué pasaba cuando el profesor
hacía sus intervenciones en los debates. Exagerando, claro, y utilizando nuevamente
la pregunta y la ironía para ilustrar su ya mencionada preocupación. ―¿desde cuándo
animo a dos profesores de matemáticas (Antanas Mockus y su fórmula
vicepresidencial, Sergio Fajardo), miembros del maldito gremio que amargó todos
mis días en el bachillerato? —sobra decir que la misma pregunta me hacía yo,
haciendo énfasis en que lo que más me hacía orgullosa de apoyarlos era precisamente
el hecho de que son educadores— Estoy a punto de colapsar. Necesito desahogarme.
Desde hace un mes mi vida se convirtió en rogar para que Mockus no se demore más
de siete segundos entre una palabra y la otra. Cada vez que da declaraciones
experimento una angustia similar a la que padezco cuando juega el Santa Fe. Por
hacer fuerza he envejecido mucho. Ya no me quedan dientes porque bruxo, bruxo
como nunca para que el profesor no pise cáscaras; para que al hablar no se trabe, al
menos no tanto como Santos en su juventud‖. Es obvio que la preocupación de Daniel
no llega al punto de envejecer, contraer arrugar y quedar sin dientes, pero la
repetición, que formalmente es una anáfora le da énfasis al hecho de bruxar (apretar
los dientes con mucha fuerza), acción común cuando hay sentimientos de
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nerviosismo. En cuanto a que no se trabe, es claro que además de referirse a que el
profesor logre hablar de corrido, también es una mención a Juan Manuel Santos,
quién días atrás había confesado que en su juventud fumó Marihuana.
Para finalizar, Daniel cierra con un comentario casi reflexivo sobre el cambio de
actitud que Antanas Mockus le generó utilizando nuevamente la exageración como
recurso principal. ―[…] hace unos días me paró un policía y en vez de tratar de caerle
bien para neutralizar la multa, reconocí mi error, le pedí excusas y lo tuve media hora
comentándole la importancia de cumplir la ley‖.
En esta columna aparece un apodo nuevo al que no debe restársele importancia.
Después de que en una reunión, el candidato Gustavo Petro dijera que no podía
continuar debido a un dolor testicular, Daniel bautizó al testículo enfermo con el
nombre de Venus Albeiro, el mismo del representante a la cámara por el Polo
Democrático Alternativo, el mismo partido del candidato.
En cuanto a las filias no hay ni qué decirlo. Antanas Mockus y el Partido Verde
producen grandes y muy buenos sentimientos en Daniel Samper, por lo menos por
esas fechas.
“Así es difícil hacer oposición”
Agosto 16 de 2010
No habían pasado ni 10 días después de la posesión de Juan Manuel Santos como
presidente de la república, —habiéndole ganado a Mockus con un margen importante
de votos— cuando Daniel ya lo estaba alabando y aplaudiendo los logos que en tan
poco tiempo había conseguido.
Esta columna no es simplemente un texto o una caricatura más entregada por Daniel,
es un reflejo de lo que pasó con gran parte de la opinión y los columnistas después de
que Santos llegó al poder con una percepción negativa por parte de la oposición al
uribismo. Mientras todos creíamos que Santos iba a ser el segundo tomo de Uribe,
bueno, el tercero, él mismo se encargó de cambiar su imagen y solucionar en una
semana varios de los grandes problemas que nos había dejado Uribe tras su mandato.
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Todo empieza con una pequeña descripción, usando una metáfora, de la ceremonia
de posesión. ―[…] si me hubieran dicho que me sentara al lado del presidente Lobo,
por poner un ejemplo, en lugar de buscar al mandatario de Honduras, me habría
acomodado junto a César Gaviria‖. Además de aprovechar el apellido del presidente
Porfirio Lobo, lo asocia con el adjetivo que se refiere a lo ordinario. Recordemos
aquella columna en la que Daniel temía por la soberanía nacional después de que
Gaviria se puso una camisa brillante durante un evento en Valledupar.
Más adelante, Daniel describe el poema con el que Álvaro Uribe se despidió del país
en su última alocución como presidente. Aprovechando la lírica y las figuras de la
poesía, Samper aprovecha para jugar con las palabras y articular el siguiente párrafo,
apropósito del escándalo de las chuzadas: ―[…] el ex presidente Uribe elaboró un
recorrido lírico elogiando las bellezas de cada departamento colombiano: Meta y sus
centauros, Orinoco y sus cuencas, Tolima y su Cafalandia. El único departamento que
no mencionó fue el Departamento Administrativo de Seguridad, DAS, que
paradójicamente fue el que más amó‖.
Líneas más adelante Daniel confiesa su sentimiento más reciente. ―Debo reconocer
que el presidente Santos me está preocupando: nombra buenos ministros, toma
medidas sensatas. Y así es muy difícil hacer oposición‖. Sin duda el recurso de la
exageración es más que evidente pues, no sobra decir, que esos asuntos lejos de
producir preocupación producen alegría y regocijo.
Nuevamente exagerando y asociando la poesía, los versos y la rima con el futuro de
Uribe, Samper describe lo llama grandes desafíos para el gobierno de Santos. ―Uno de
ellos es impedir que, ahora que tiene más tiempo libre, el ex presidente Uribe siga
escribiendo poesías. Porque se puede dar: puede pasar que escriba sonetos dedicados
a pueblos que no citó en su anterior efluvio lírico, como Apulo, que rima con la parte
por la que Santos le está cayendo en este momento‖. Creo que no hace falta decir que
es una parte del cuerpo.
La columna finaliza con una terrible descripción metafórica—y sepan que estoy
usando como recurso la ironía— de lo que podría estar pasando con Álvaro Uribe
después de comprobar que Santos no siguió sus pasos. ―Va a ser raro verlo caminar
por las calles mientras alza una gallina, se acomoda sus tres huevos y recita poesías
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costumbristas ya loco del todo. Pobre. No debe ser fácil dejar el poder. Entrar al club
de los ex mandatarios debe ser deprimente. Requiere adaptación. Aójala lo ayude el
presidente Lobo‖.
Ya en esta columna Juan Manuel Santos no es una fobia para Samper. Su imagen se
esta arreglando y su opinión de él, cambiando. La que si no se acaba es la fobia por
Álvaro Uribe y los escándalos de su gobierno.
“Carta de excusas al Príncipe Felipe”
Agosto 23 de 2010
Nuevamente Daniel entrega una columna escrita a modo de carta. Esta vez, dirigida
al Príncipe de Asturias, don Felipe de Borbón. La epístola es una excusa pública que
Daniel escribe en nombre de los colombianos después del show que protagonizó
Lucero Cortés en la ceremonia de posesión de Juan Manuel Santos como presidente
de la República cuando, en medio del protocolo y la caminata del Príncipe a la Plaza
de Bolívar, le pidió y se tomó una foto con él.
La columna esta escrita en español, español de España, y tiene una descripción de
esas penas, situaciones y personajes que hacen que Samper no se sienta tan orgulloso
de ser colombiano. Cada frase es una exageración de lo que sucede en Colombia
llevado al extremo de creer que el Príncipe, primero, se va a acordar del episodio
penoso de la foto, y segundo, va a fijarse en cada detalle de lo que convierte a nuestra
nación en una muy particular.
Leámosle entonces la correspondencia a don Felipe. Daniel le habla al Príncipe con
todo el protocolo del caso, utilizando las mayúsculas y los apelativos con los que se le
debe llamar. ―Excelentísimo Señor Príncipe. Impúlsame a escribir esta carta el
bochornoso incidente del que Vuestra Merced fue testigo durante la posesión del
doctor Santos como presidente de esta platanera tropical donde se dan silvestres los
cubios, la malaria y los locutores deportivos‖.
Después es cuando viene la sobredimensión del asunto de Lucero Cortés. ―[…] no
podía permitir que pasara un solo instante más sin expresarle, su Alteza Querida, con
todo el respeto del caso, que por favor no vaya a creer que todos los colombianos
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somos como Lucero Cortés. No se lleve esa impresión, se lo suplico. Acá también hay
gente que le teme al ridículo‖. Si bien la situación fue bochornosa y según los medios
llegó a molestar a doña Letizia, no es una actitud que deje mal a un país entero frente
al Príncipe.
Párrafos más adelante Daniel utiliza la pregunta y la ironía para poner en el
panorama una de las tradiciones que han venido cobrando fuerza en el país durante
los últimos años: ―¿Se da allá en España, este fenómeno de que las actrices de
telenovela terminen de congresistas? Acá es tradición democrática‖.
Continuando con la exageración y la pregunta como recurso irónico para expresar
una opinión, llegamos al siguiente párrafo: ―Hace unos años, Vuestra Merced recibió
al ex presidente Uribe en una elegante recepción a la que nuestro ex mandatario
asistió con un frac que apenas le cubría las tetillas. ¿Es viable un país cuyo presidente
se viste con un esmoquin hecho como para jugar basket, como para hacer
striptease?”. Afortunadamente la viabilidad de una nación no se mide por la forma de
vestir de sus mandatarios. De ser así Venezuela no tendría esperanzas y Uruguay
seguramente ya se habría unido como departamento o provincia del algún país del
sur de nuestro continente.
Veamos un ejemplo de hipérbole para evidenciar lo lambón que fue Benedetti, el
presidente del Senado, con el ex presidente Uribe: ―[…] Armandito es un accidente
que puede tener cualquier nación. Hijo de la bella Curramba, es cierto que se veía
particularmente gracioso hablando de vosotros y señalando el reguero de pobres que
dejó el gobierno de Uribe, cuya mano el senador lamió durante ocho años y ante
cuyas carnitas se restregaba como una mansa mascota‖.
Y aún quedan líneas para exagerar. ―Si quiera se fue pronto, Majestad, y no alcanzó a
darse cuenta de que el Colombia, en una semana, pasan más cosas que en toda la
historia de Noruega‖. Si bien la historia de Noruega no es tan particular como la
nuestra, seguramente tienen mucha más historia que la de una semana.
El cierre es metafórico y hace una analogía entre varios congresistas y las 600
especies de anfibios que tiene Colombia, número que sin duda es motivo de orgullo.
Ahí es cuando Daniel le explica al príncipe los sitios en los que varios de estos
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animales se arrastran ―[…] legislan, como Roy Barreras; dirigen las Fuerzas Militares,
como Rodrigo Rivera; o se toman fotos con los príncipes sin sentir pena de exponer
tanta bajeza ante Su Alteza‖.
En cuanto a los términos utilizados, aparece nuevamente el de ―platanera tropical‖
para referirse a Colombia. Se refiere como ―silvestres‖ cuando habla de los locutores
deportivos y le dice lagartos al senador Barreras, el ministro Rivera y Lucero Cortés,
quien columna tras columna se consolida como una de sus grandes fobias. ¿será
capaz de arrebatarle el primer lugar al ‗Pincher‘?
“Al cuerno con las fiestas bravas”
Febrero 14 de 2011
Días antes de que esta columna circulara se conoció un terrible video en el que unos
policías masacraban cobarde y despiadadamente a una perrita que mataron a
palazos. La grabación desató la indignación de todo el país y revivió la discusión
sobre una legislación efectiva que castigue a quienes maltraten animales. Sin
embargo, muchos de aquellos que tanto sintieron sensibilidad con el caso de la
perrita, son los que se ven sonrientes en las páginas sociales de las revistas mientras
asisten a una corrida de toros. Es así como Samper Ospina escribe esta columna
criticando precisamente a esos hipócritas que gritan Olé y se atreven a criticar la
muerte violenta de un animal.
―Parto de una confesión: así se trate de Armandito Benedetti, me duele todo lo que
hagan en contra de los animales. Todo‖. Con la comparación del presidente del
Senado con un animal, empieza esta columna dedicada completamente a la crítica de
aquellos que disfrutan del maltrato de un animal indefenso. De la comparación no es
víctima solamente el senador Benedetti: ―Siempre me han gustado los animales, pero
en su hábitat natural: en la selva, en el bosque, en el gabinete de Uribe‖.
Después de confesar irónicamente su descontento por no salir nunca en las páginas
sociales de las revistas, Daniel utiliza nuevamente su recurso más frecuente: la ironía.
―Ah —soñaba despierto—, cómo será estar allá con todos ellos. Cómo será convencer a
mi mujer que se ponga las gafas oscuras a modo de balaca y se integre con todas esas
señoras de la alta sociedad que se ven tan amables […]‖. Es evidente que una de las
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cosas que menos le importa a Samper es salir en las sociales o codearse con las
damicelas de la alta que van a las corridas, solamente para sonreír en aquellas fotos.
Más adelante, y creería que de manera directa, Daniel explica la metamorfosis que
sufren los taurinos criollos cuando pasan por las puertas de la Santamaría. ―[…] de un
momento a otro hablaban con el ceceo español, prendían un puro y decían, con el
ceño fruncido y mucha sabiduría, ahí, ahí, cuando en el momento de la estocada
final, el toro tenía las patas delanteras en el mismo nivel‖. El único recurso que se
evidencia en este párrafo es el de mezclarse en aquella atmósfera y recrear una visita
suya a una fecha de la temporada taurina bogotana.
Aparece también en aquellas líneas una metáfora. ―Cuando anunciaron que iba a salir
la primera bestia, pensé que se trataba de Samuel‖. La comparación de Samuel con
una bestia —así se les llama a los brutos— cala perfectamente en medio de la
descripción de una corrida de toros. Hemos hallado una asociación o un apodo.
Para finalizar, volvemos a las pregunta, una de las tácticas preferidas de Samper para
invitar a la reflexión y jugar con la ironía. ―¿con que esa es la famosa fiesta brava?
¿Un poco de arribistas que aplauden ante el dolor de un animal inocente? ¿Qué
diferencia hay entre gozar con una faena o con la muerte a palazos de una perra?‖.
Debo decir que no podría estar más de acuerdo con el cuestionamiento que propone
Daniel y aprovecho para responderle las tres preguntas: Sí, esa es la famosa fiesta
brava, o mejor, la fiesta cruel. Sí, los asistentes son generalmente los miembros de la
alta sociedad bogotana que desahogan sus vacíos y desgracias con la muerte de un
animal inocente. No, no hay ninguna diferencia entre torturar un animal a palazos y
torturar uno con banderillas y espadas frente a una multitud primitiva que aplaude a
un prospecto de ser humano por el hecho de matar.
De hecho el propio Daniel responde a esas preguntas en el final de esta magistral
columna. ―las corridas de la Santamaría son idénticas a la sociedad colombiana.
Están llenas de carteles. Por todos lados hay capotes, esto es, capos muy grandes
[…]‖. Nuevamente el juego literal de las palabras con otros significados le da un
doble sentido al cierre del texto.
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La columna es una verdadera diatriba en contra de las corridas de toros, por lo que
resta decir que es una verdadera fobia de Daniel.
“Me lanzo a la Alcaldía”
Marzo 26 de 2011
―Carlos Vicente de Roux advirtió en decla-raciones recientes que un sector del Polo
quería postular a Samper como candidato a la Alcaldía de Bogotá‖ ¿Para qué más
contexto que el que entrega el propio Daniel al inicio de la columna?
Es así como Samper Ospina aprovecha para darle gusto a sus detractores y a quienes
lo critican por no hablar de su tío político. ―Dudo que se trate de mi tío Ernesto, a
quien en la familia todos estamos convenciendo de que monte una cafetería para que
no moleste más. Ya empezó con algo llamado Café País, unas reuniones en las que
hay servicio de greca para que la gente no se duerma y mi tío negocia liberales y otro
tipo de postres‖. Empezamos a observar figuras como la metáfora evidente en la
negociación de liberales, personajes del Partido en el que Ernesto Samper es toda una
institución. ―A mi papá no lo veo de candidato: cualquiera puede ver que le falta pelo
para el moño‖. Magnifica analogía entre el popular dicho y la calvicie de Daniel
Samper Pizano.
Como en las elecciones presidenciales, Samper Ospina utiliza el recurso de la
candidatura ficticia para entrar cómodamente a hablar de las elecciones, esta vez, a la
alcaldía de Bogotá. ―[…] entiendo que ese llamado es para mí y me permito aceptarlo:
acepto gustoso esa postulación a la Alcaldía. Cuenten conmigo, amigos del Polo.
Desde hoy mismo dejo de bañarme para ceñirme a los estatutos‖. En columnas
anteriores —que no fueron tomadas en la muestra— Daniel asegura que uno de los
requisitos para se izquierdista es tomar vino caliente, escuchar música protesta y
dejarse de bañar, entre otras cosas.
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Después de criticar a los candidatos David Luna, Gina Parody y William Vinasco por
no considerarlos verdadera competencia, los invita a que se unan y derroten el
margen de error. Sin embargo, confiesa que si hay un candidato que le preocupa. ―El
único candidato que de verdad me asusta es Peñalosa, ahora que el Partido Verde
acepta coqueteos con los uribistas. En la sede verde ya hay simpatizantes de La U que
se aprenden algunas arengas: "Recursos públicos, recursos sagrados", grita Hipólito
Moreno; "la vida es sagrada", modula el general Rito Alejo del Río‖. La analogía parte
de poner a un personaje como Hipólito Moreno, vinculado a escándalos de
corrupción, defendiendo los recursos de la capital; y a Rito Alejo del Rio, el general
acusado de ayudar a los paramilitares en la ejecución de varias masacres, a defender
la vida.
A pesar del susto que genera Peñalosa en Samper Ospina él sigue tranquilo,
irónicamente tranquilo, pues su propuesta esta basada en continuar con las políticas
del alcalde Samuel Moreno, quien con una administración logró convertir a Bogotá
en un destino arqueológico y dejarla como Japón —después del tsunami del 11 de
marzo de 2011—. ―Sé que está de moda criticar a los Moreno, pero no seré yo quien lo
haga. Hay labores del alcalde que aplaudo sinceramente. En menos de cuatro años
convirtió a la ciudad en el Japón de Latinoamérica. Y como funcionario público ha
demostrado que es un miembro de familia ejemplar‖. El tsunami de 9.0 grados en la
escala de Richter dejó a Japón en ruinas, tal como Samuel y los Nule hicieron con las
calles de Bogotá.
Utilizando el lenguaje coloquial de la izquierda o de los ‗mamertos‘ como llama
Daniel a los militantes del Polo, le habla directamente a las masas electorales.
―Amigos del Polo (y de otros barrios también): estoy con ustedes. Llegó la hora del
Mustang suelto; del canelazo al gratín […]. Juro no traicionar el legado que recibo y
lograr que, con el apoyo de todos los ciudadanos, al final de mi administración al
menos una de mis hermanas esté millonaria‖. El juramento con el que Samper cierra
la columna se refiere al proceso que se adelanta contra el hermano del alcalde, el
senador Iván Moreno, quién por el ‗Carrusel de la contratación‘ al parecer obtuvo
ganancias exorbitantes a costa de los recursos de la capital. En su caso particular,
Daniel no tiene hermanos varones, por lo que su promesa la dedica a sus hermanas.
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Esta columna es una crítica dura a la alcaldía de Moreno y al propio alcalde, otra de
las fobias de Samper aunque todavía no hace parte de las fobias de ligas mayores. El
texto está escrito en un lenguaje muy coloquial y cercano al que hablan los miembros
del Polo y en general las personas de izquierda, aunque Moreno no les haya resultado
propiamente el estandarte de la izquierda colombiana.
“Mis revelaciones sobre los Nule”
Abril 9 de 2011
El escándalo del ‗Carrusel de la contratación‘ en Bogotá no dejó títere con cabeza —
nuevamente pongo en práctica mis conocimientos recientes y utilizo una metáfora
para explicar la grave situación que enfrentan los implicados— Los hermanos Nule,
propietarios del consorcio que, según las investigaciones, intermediaba en todos los
contratos de la capital, están en ahora en la cárcel. Por esos días, los medios
empezaron a revelar una serie de correos electrónicos entre los hermanos, en los
cuales supuestamente se hallaron pruebas que los implican aún más en el desfalco a
la ciudad, sin embargo, Daniel Samper consiguió uno muy particular:
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¿Existe mayor ‗papayaso‘ para un columnista de humor que un correo como este? No
creo. Pero empecemos a analizar la manera en que Samper Ospina se refiere a
semejante adquisición.
En primera medida nos advierte que su columna será una completa ironía en defensa
de los filosóficos hermanos. ―Conseguí valiosos documentos con nuevas revelaciones
sobre los Nule, pero, a diferencia de lo que harían los resentidos periodistas
colombianos, los usaré para reivindicar a estos pobres ejecutivos contra los que la
sociedad se ha ensañado‖.
Después de describir —en la edición impresa— el contenido del mail, Samper se
propone una tarea: ―Alguien tiene que demostrar que el contratista criollo tiene un
lado tierno. Y yo asumo la misión‖.
Párrafos más adelante, Daniel compara a Guido Nule, el autor de la carta, con un
verdadero representante de la filosofía que ha desperdiciado su vida en una profesión
que no le corresponde, como ha pasado con varios personajes más de nuestra cultura.
―Colombia no sabe ubicar a sus filósofos: a Pambelé lo hizo boxeador; a José Obdulio,
asesor del DAS. No es culpa de Guido que lo hayan puesto a construir avenidas. Si a
Kierkegaard le hubieran asignado la Ruta del Sol, él también habría fracasado‖.
Todos ellos, modelos de escritura y filosofía pura, terminaron desperdiciados, como
los Nule, en oficios que no les correspondían. Y solamente Daniel se dio cuenta del
error, todo a pesar de que, como él mismo lo dice ―lograron amasar una fortuna por
culpa de la cual, maldita sea, dejaron de lado sus sueños‖. Sobra decir que seguimos
estando al frente de una ironía en todo el sentido del término.
Antes de terminar con la burla –que la Virgen María lo perdone, o que lo perdone la
tía Graciela, da igual— Samper habla de los cargos que se les imputa a los Nule y
continua con su irónica defensa, esta vez, cargada de metáforas y asociaciones. ―Es
imputante la forma como los trata la Fiscalía. Los acusan de concierto para delinquir,
de falsedad ideológica. Si a Roy Barreras, que ha militado en tres partidos, no lo han
acusado de falsedad ideológica, a nadie, óigase bien, a nadie pueden achacarle
semejante delito. Y hablar de concierto es exagerado: son apenas un trío. Pensemos,
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por mucho, en una serenata para delinquir‖. Nuevamente observamos un juego con el
lenguaje y la literalidad de las palabras en la relación del ‗concierto‘ con la ‗serenata'.
Antes de terminar, Daniel nos entrega, tal vez, una de las frases más directas de toda
su columna, y me refiero a total de sus textos: ―Aporto, pues, estos mensajes en
defensa de los Nule, para que no se diga que Uribe y Samuel les entregaron todo no
solo a unos corruptos, sino a unos completos idiotas‖. No hay manera de ser irónicos
después de leer semejante correo. No hay manera de no pensar que lejos de ser unos
estafadores y unos corruptos, los Nule no son más que unos idiotas.
El cierre es contundente. Una hipérbole que expresa lo que significaron los Nule en la
capital. Daniel espera que Guido Nule escriba sus memorias mientras esté recluido en
la cárcel pues ―ese libro valdría oro. Sería la única obra completa de los Nule‖.
En esta columna nace un nuevo término que quedará para la posterioridad de la
columna samperista. La tía Graciela reemplazó a partir de ese día a la Virgen María y
los Nule empezaron a consolidarse como una fobia para Daniel Samper, aunque
queda en evidencia su disgusto por Samuel Moreno y, por supuesto, por Álvaro Uribe
a quien no ha dejado descansar.
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CONCLUSIONES
Más allá de que el humor sirva para la burla es evidente que invita también a la
reflexión. Con el análisis de la columna de Daniel Samper Ospina queda claro que
más allá de escribir chistes o hacer reír, la función de un columnista es invitar a la
crítica.
El humor es entonces un espejo de la realidad pues invierte la imagen proyectada
pero no deja de ser la misma de lo que tiene al frente. Es un recurso que para Samper
otorga cierta impunidad pero que también deja en evidencia de la manera más cruel y
ácida los errores de los impunes de verdad.
Es increíble observar cómo a través de las columnas de Samper queda registrada la
historia del país del que se burla y los hechos más importantes, a los que
verdaderamente merece sacarle un chiste. Samper estima que su columna podría ser
una serie de televisión y es que definitivamente lo es, de allí que haya unos hallazgos
evidentes.
El hecho de utilizar la ironía como recurso principal de sus textos. El uso de la
metáfora y la hipérbole como figuras literarias más frecuentes en sus escritos. La
repetición de personajes y su protagonismo a lo largo de las columnas,
convirtiéndolos en parte de la misma y no dejándolos como casos aislados que se
nombran simplemente cuando les pasa algo.
La utilización de distintos recursos para escribir las columnas y no hacerlas
simplemente con muchas burlas o chistes listados de principio a fin. ¿Cómo?
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Escribiendo cartas dirigidas a personajes específicos, o diatribas disfrazadas de
elogios, o inventar mundos paralelos —aunque posibles— para recrear o expresar lo
que se vive diariamente en Colombia.
Es importante también subrayar el hecho de que Daniel Samper es propiamente un
recurso para la columna. Él mismo se hace protagonista, se mete en las historias,
dialoga con los personajes y les invita a la reflexión. Él se lanza a la alcaldía, va a la
plaza de toros, va a una frijolada de doña Olga Duque, dialoga con Jose Obdulio, con
el ‗Pincher‘ o simplemente relata una de sus pesadillas nocturnas sobre la política.
De esos recursos también hacen parte los personajes ficticios —caso de la ‗tía
uribista— o el uso de apodos y la otorgación de características completamente
definidos a personajes reales o inventados.
Daniel Samper es ahora el columnista de sátira —y me refiero a columnistas de
prensa escrita— más importante y leído, así como el que más divide y crea
resentimientos o pasiones. Es un defensor del humor, de la sátira y de su estilo y yo
una defensora de su pluma pues seamos sinceros: Sin columnistas como Samper
Ospina, la crítica política no sería lo mismo. Las páginas de la revista Semana
tendrían al final una publicidad de cerveza fina o de cigarrillos para poder acompañar
la lectura de las tristes desgracias que están plasmadas en sus páginas.
No se puede negar que las verdades escritas por Samper son las que quisiéramos
decirles, o mejor, gritarles en la cara a cada uno de los personajes de la política y la
farándula que han sido víctimas de su pluma.
Por eso lo digo, lo proclamo: necesitamos más columnistas de ese tipo, capaces de
hacernos reír de los dirigentes que nosotros mismo elegimos. Con la audacia y el
talento para caricaturizar con letras los personajes de los que también despotricamos
sin piedad en nuestra cotidianidad.
Y no sólo hablo de los que como yo, también comienzan la Revista Semana de atrás
para adelante. Hablo del público que lo critica mientras se ríe de sus columnas,
aunque, por supuesto, debo hacer una gran excepción con el público uribista que no
lo necesita de Daniel, pues cuenta con un extenso grupo de comediantes de la talla de
José Obdulio, Alfredo Rangel y Fernando Londoño, capaces de hacer caricaturas tan
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perfectas del ex presidente como las que Samper Ospina hace de Angelino o de
Andrés Felipe Arias.
Es de esperar que la capacidad para burlarse de sí mismo la haya desarrollado a
partir de su sufrimiento como hincha santafereño y lo entiendo. Los bogotanos ya
hemos desarrollado, gracias a nuestros equipos, esa capacidad para reírnos de
nuestras tristezas y creo que es por ese motivo que en otras regiones lo detestan, pues
no creen que la burla de sí mismo y de los problemas propios sea un valor. ¿Lo
consideran un irrespeto igual o peor a que Uribe hubiera sido presidente?
Y por eso, amigos lectores, es que lo necesitamos. Para que Angelino lo lea y se ponga
a dieta o se haga una cirugía maxilofacial. Para que Mockus logre hablar de corrido,
Benedetti corrija su lenguaje y Valerie Domínguez devuelva la plata de Agro Ingreso
Seguro. Para que Lucero Cortéz salga en televisión, pero desde algún estudio de una
telenovela. Para que sin temor ni peligro de demanda, los lagartos de esta ―platanera
tropical‖ se regresen a la selva que jamás debieron abandonar.
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