COMO ESTAR SEGURO QUE CRISTO VINO A MI Y VIVE EN MI

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COMO ESTAR SEGURO QUE CRISTO VINO A MI Y VIVE EN MI

Objetivo: Que el nuevo cristiano exprese la seguridad de que Cristo est presente en su vida, la seguridad del perdn de los pecados, de la vida eterna y que lo manifieste dando gracias.

Cmo podemos estar seguros de que Cristo entr en nuestra vida?

I. Apoc. 3, 20

1. Qu debemos hacer para que Cristo entre a nuestra vida? (Respuesta: Abrirle la puerta, invitarlo a entrar)

2. Invitaste a Jesucristo a entrar en tu vida?

(Deja que ellos contesten)

3. Si invitaste a Jesucristo a entrar a tu vida Dnde est ahora? (R. En m) Lee Jn. 15, 4)

4. Cmo sabes que Jesucristo est en ti? (R: Porque El lo dijo)

5. Crees que El te engaara? (R. No)

6. Por qu no? (R. Porque es fiel)

7. Es su voluntad entrar en la vida del que lo invita? (R.Si)

Comentario: La puerta es la totalidad de la persona: Voluntad, inteligencia, emociones. El no va a forzar. La puerta slo se abre por dentro, por voluntad propia. El nico requisito para que El entre es que le abras la puerta y lo invites a entrar. El no dice: Prtate bien, haz tal cual cosa. El slo pide que escuches su voz y lo dejes entrar. Cenar significa tener comunin, amistad, compaerismo.

II. 1 Jn. 5, 11-15

1. Dnde est la vida eterna? (R. En Jesucristo)

2. Si una persona tiene a Jesucristo, qu ms tiene? (R: Vida Eterna)

3. Tienes vida eterna? (R. S) Por qu? (R. Porque Cristo est en m)

4. En qu consiste tu confianza en Dios? (R. En que Dios nos oye)

Comentario: La seguridad que tenemos se basa en su Palabra, no en lo que sentimos. Somos seres emocionales, pero aqu lo importante es la fe en la Palabra de Dios.

III. Cuatro cosas que sucedieron en ti al aceptar a Cristo:

1. El est presente en ti. Apoc. 3,20 Col. 1,27

a) A qu se refiere la puerta? (R. La voluntad, la vida)

b) Qu promete Jesucristo? (R. Entrar)

c) Qu nos corresponde? (R. Abrirle)

d) Qu le toca a Jesucristo? (R. Entrar)

2. Perdn Col. 1, 13-14 1 Jn. 1, 8-9

a) Cuntos de tus pecados fueron perdonados en la cruz? (R. Todos, los presentes, pasados y futuros.

b) Si Dios te ha perdonado, por qu a veces tienes sentimientos de culpabilidad? (R. Porque no los he confesado)

c) Qu debo hacer con los pecados que no he confesado? (R. Confesarlos) 2 Crnicas 7, 14 Es decir, tienes que ser muy sincero y decirle a Dios uno por uno tus pecados y pedirle perdn con humildad por cada uno de ellos.

3. Poder. Juan 1, 12

a) Qu personas nacen de nuevo nacen espiritualmente para llegar a ser hijos de Dios? (R. Los que reciben a Cristo)

b) Cuando aceptaste a Jesucristo Qu llegaste a ser? (R. Hijo de Dios)

Comentario: Un carpintero hace mesas, son obra suya, pero estas mesas no participan de su vida. Nosotros fuimos hechos por Dios, somos creaturas de Dios pero solamente llegamos a ser hijos de Dios cuando recibimos a Cristo, cuando participamos de la misma vida del Hijo de Dios.

4. El propsito el plan de Dios para nosotros.

Jn. 10, 10 2 Cor. 5, 17 1 Tes. 5, 18

a) Cul es el propsito de Dios para nuestra vida? (R. que tengamos vida abundante, vida eterna)

b) Qu ha hecho Dios con nosotros al haber aceptado a Cristo? (R. Nos ha hecho nuevas personas, hijos suyos)

c) Tiene Dios conocimiento de todo lo que nos sucede? (R. S)

d) Cul debe ser nuestra actitud ante las distintas circunstancias en nuestras vidas? (R. Dar gracias, ser agradecidos, tener confianza) Rom. 8, 28

Resumen: Estamos seguros de que Cristo est en nuestra vida porque se lo pedimos confiando en la fidelidad de Dios y en su Palabra, no en lo que sentimos.

Lo que sucedi al recibir a Cristo:

1. Su presencia est en nosotros.

2. Nuestros pecados han sido perdonados.

3. Somos hijos de Dios.

4. Estamos dentro del propsito voluntad de Dios.

5. El Espritu Santo nos gua y santifica.

Tener un tiempo de oracin dando gracias, confiando en que Dios nos oye.

LA ORACIN

Objetivo: Que los hermanos se motiven para orar y conozcan las actitudes que deben tener en la oracin personal.

I. Qu es orar?

Hch. 4, 24-30- Oracin de los Apstoles en la persecucin

Sal. 9, 1-2- Oracin de gratitud

Sal. 71, 17-24- Oracin de un anciano

I Reyes 18, 36-37- Oracin de Elas

Jn. 17- Oracin de Jess

1. De acuerdo a los pasajes ledos, Qu es orar? (R. Es entrar en comunicacin con Dios dialogando de una manera viva y personal)

2. Qu rasgos comunes hay en la oracin de estos hombres? (R. que oran en cualquier situacin y en todo momento)

II. Quin debe orar?

1. Mt. 21, 20-22- Los discpulos

2. Jn. 15, 5-7- Los que pertenecen a Cristo

3. De acuerdo a las citas anteriores y a la 1 Jn. 5, 14-15 Cmo debemos orar? (R. Segn su voluntad y confiando en Dios)

III. Actitudes que pueden ayudar en la oracin:

1. Debe ser sencilla.- Hablar con el Seor como hablamos con nuestros seres mas queridos, o sea nuestros familiares, busquemos una relacin familiar con el Seor. Lc. 11,9

2. Espontnea.- Podemos en cualquier momento orar y en todo lugar; por telfono, en la calle, en la tienda, etc. Jn. 15, 7

3. Pausada Jess tiene ms deseos de hablarnos que nosotros de hablar con El. Dios nos comunica sus pensamientos y planes, por medio de su Palabra, pensamientos y signos. Lc. 17, 21

4. Sincera Hay que acercarse simplemente al Seor como los nios pequeos y pedir con naturalidad como piden ellos, sinceramente y con toda humildad. Mc. 10, 15.

5. Inspirada en la Palabra de Dios. Nuestra oracin es ms slida cuando est basada en la Palabra de Dios. II Tim 3, 16

6. Debe tener una hora fija. El horario es ms importante que cualquier otra actividad en nuestra vida diaria. Por esto es ms necesario fijar un tiempo para nuestra oracin personal diaria. Hch. 3, 1

7. Debe ser personal. Entrar a solas y en privado con el Seor.

Mt. 6, 6

8. Guiada por el Espritu Santo. Estar abiertos a la sabidura e inspiracin del Espritu Santo. Rom. 8, 26-28 I Cor. 12, 3

9. Centrada en Dios. Mi oracin es para darle gloria y alabanza a Dios. Mt. 6, 33.

COMO ORAR

Objetivo: Que las personas aprendan a orar de manera sencilla y ayudarles a buscar un tiempo especfico y cmo usarlo en la oracin personal.

El ser cristiano implica una relacin personal e ntima con el Dios vivo, esta oracin nos permite tener un tiempo a solas con nuestro Seor. Y es necesario tener y mantener esta oracin por medio de la comunicacin.

Daniel se comunica diariamente con Dios- Dn. 6, 11

Jess pas tiempo a solas con su Padre- Lc. 6, 12

Acercarnos a El- St. 4, 8

DINAMICA DE ORACIN PERSONAL:

Primer Paso 5 minutos

Preparacin

a) Corazn limpio- Sal. 24, 3-6

b) Obediencia- Jn. 14, 21-23

c) Reconocer al Espritu Santo como maestro y gua

- Jn. 14, 26 Rom. 8, 26

Segundo Paso 10 minutos

Alabanza, Accin de gracias, utilizando los salmos. Salmo 100,

Apoc. 4, 11; Sal. 143, 5-8; Fil. 4, 6.

Tercer Paso 25 minutos

Lectura de la Palabra. Mt. 4, 4; Deut. 8, 3; Josu 1, 8.

a) Escoge un libro de la Biblia leyendo un captulo cada da.

b) Leer el captulo.

c) Leer por segunda vez, subrayando palabras y versculos claves.

d) Meditar y aplicarlo a su propia vida.

e) Anotar lo que Dios le hable.

f) Memorizar.

Cuarto Paso 20 minutos

Oracin: 15 minutos de intercesin I Tim 2, 1

5 minutos de peticiones. Jn. 16, 23-24; Mt. 5, 44; Sal. 132, 4-5.

ALABANZA

I.Qu significa el alabar?

Elogiar, celebrar con palabras, glorificar, halagar.

Sal. 72, 18-19

1. El objetivo de la alabanza: Bendito sea Yahveh, Dios

2. El motivo de la alabanza: Hacer maravillas

3. La duracin de la alabanza: Para siempre

4. La extensin de la alabanza: Toda la Tierra

5. El eco de la alabanza: Amn, Amn.

II. Por qu debemos alabar a Dios?

Por su majestad

Por su consuelo

Por su magnificencia

Por su gloria

Por su grandeza

Por su poder

Por su sabidura

Por su misericordia

Por su perdn

Por su proteccin

Por su consuelo

Por su bondad

Por su santidad

Por su justicia

Por su verdad

Por su fidelidad

Por su salvacin

Por su gracia

Por ser libertador

III.Cmo ofrecer nuestra alabanza a Dios?

De todo corazn

Con el alma

Con cnticos de alegra

Con acciones de gracias

Con salmos y cnticos

Durante toda la vida

Con cantos

Con instrumentos de msica

En la asamblea

Cada da

Todo el da

Eternamente

IV. Obstculos en la alabanza

Hay una gran lucha y conflicto interior que salen a la superficie en el momento que empezamos a participar en la alabanza.

1. Satans: Interfiere atacando e impidiendo la alabanza

Pero Satans est sujeto a nuestras manos

Rom. 16, 20; Lc. 9, 9,1; Mc. 16, 17.

2. El pecado: nos impide penetrar ante Dios. Debemos arrepentirnos y ser purificados. 1 Jn. 1, 9.

3. La culpabilidad: Sentirnos culpables de cosas (pecados), esto nos distrae y nos autocondena. Estemos seguros y convencidos del poder de Dios, El ya nos ha perdonado.

4. El temor: puede obstruir el razonamiento sano, anestesiar los sentidos y hacernos sentir inseguros. Dios nos ha liberado.

1 Jn. 4, 18 Nos ha dado su amor

5. El egosmo: la actitud que tenemos hacia nosotros mismos, nuestra propia imagen, somos soberbios, orgullosos y slo vemos por nosotros mismos. Mi corazn en la alabanza tiene que ser del Seor, y mi mente tiene que estar centrada en Dios.

6.Concepto equivocado de Dios: lo vemos como algo muy lejano, tirnico. Dios est tan interesado que ha dado a su nico hijo para que yo obtenga la salvacin.

V. Mtodos para la alabanza:

a)Usando la boca:

Sal. 98, 1; Sal. 130, 2; Sal. 98, 4; Sal. 71, 8; Apoc. 19, 1; Apoc. 7, 10.

b)Usando las manos:

AlzndolasSal. 119, 48; Sal 134, 2; Sal 141, 2.

AplaudiendoSal. 47, 1; Sal. 98, 8 d

Tocando instrumentos musicalesSal. 33, 2; Sal. 57, 9; Sal. 147, 7; Sal. 150.

c)Posicin movimiento del cuerpo:

DanzaSal. 149, 3; Sal. 150, 4; II Samuel 6, 14.

Andando y saltando: Hch. 3, 8; II Samuel 6, 16.

Parados: Sal. 134, 1; Sal. 135, 2.

Inclinados y arrodillados: Sal. 95, 6; Sal. 99, 9; Ef. 3, 14.

(Se puede hacer un ejercicio de alabanza con los mtodos)

Leer y meditar: Apoc. 7, 9-12

4, 8-11

5, 12-14.

ORACIN DEL TABERNCULO

1. Cul es el propsito de la oracin?

Es entrar en una plena comunicacin con Dios.

2. Dios nos da un modelo de oracin en su Palabra: El Tabernculo

a) Algunos nombres que reciben son:

Tienda del Encuentro, Morada, Santuario, Templo.

3. El Tabernculo.

a) Historia Breve: Fue el lugar donde Dios se encontraba con el hombre. Ex. 33, 7-11; Ex. 25-26; Normas de la construccin. En el tiempo del Exodo esta tienda era movible y de materiales ligeros. Construccin del Templo de Salomn 2 Cro. 1, 18.

b) Signos del Tabernculo

En este templo vemos una prefigura de Cristo.

1. La puerta: Cristo Jn. 10, 7-9

2. El altar: Sacrificio de Cristo (cordero) Jn. 1, 29; Heb. 9,14

3. La piscina: Espritu Santo Jn 3, 5-6

4. Mesa de los panes: Cristo pan de vida Jn. 6, 48-51

5. El Candelabro: Cristo luz del mundo Jn. 8, 12; Jn. 12, 46

6. Altar del incienso: Smbolo de adoracin Rom. 12, 1; Apoc. 8, 3-4

7. Santo de los santos: Cristo Nueva Alianza Heb. 8, 8-10 (El arca de la Alianza) (Comunin con el Padre) Jn. 4, 23-24. En el arca se encontraban las tablas de la ley, el man y la vara de Aarn.

c) Aplicacin prctica:

1. Reconociendo a Cristo como Seor, orar invocando a Jess que es la puerta, entrando en alabanza. Renovando nuestra consagracin.

2. Reconocemos nuestros pecados y reconocemos el sacrificio de Cristo por nuestra vida. Debemos experimentar el perdn de Dios y que la sangre de Cristo cae sobre todas nuestras reas de pecado y nos sana, nos libera y nos santifica.

3. Pedir la uncin del Espritu Santo. Debemos experimentar la presencia del Espritu que nos permite entrar en la presencia de Dios.

4. Entramos en lugar santo, reconocemos a Cristo como nuestro alimento. Si es posible tomar la Eucarista, hacerlo. Leer la Palabra de Dios y nutrirnos de ella, pedir revelacin de su Palabra.

5. Jess es la luz de nuestra vida, es un smbolo del fuego del Espritu. Que Dios nos descubra su voluntad, sabidura, ciencia, su obra y su verdad.

6. Adoracin a Dios, una oracin ms profunda, una oblacin, como una nube que se levanta, siendo consumidos por el Espritu Santo, una entrega total a Dios, plena y confiada. Debemos abrirnos a la accin del Espritu, orando en lenguas. Buscar encontrarnos con la Santsima Trinidad, alabando a Dios Trino y Uno.

7. Entrar en una contemplacin total, estando en la presencia de Dios, en donde podemos adorar, contemplar, alabar, sentir el calor y el amor de Dios. Tratemos de escuchar la voz de Dios. Aqu podemos repetir esta oracin: Te amo Padre, por Cristo, en el Espritu.

TIEMPO Y HORARIO

I. LA IMPORTANCIA DE ORGANIZAR NUESTRO TIEMPO

La palabra de Dios en Ef. 5, 15-17 nos dice: As pues, mirad atentamente como vivs, que no sea como imprudentes, aprovechando bien el tiempo presente, porque los das son malos. Por tanto, no seis insensatos sino comprended cul es la voluntad de Dios.

Dios quiere poner orden en todas las reas de nuestra vida y una de ellas es la administracin de nuestro tiempo. Debemos aprender a ordenar nuestra vida de tal manera que en todo hagamos la voluntad de Dios.

Para esto hay que tomar en cuenta dos cosas:

1. Eliminar de nuestra vida aquellas actividades que no nos conducen a glorificar a Dios, por ejemplo, ver programas de televisin que no nos edifican, ir a divertirnos con personas que no aman al Seor y no desean buscarlo, etc.

2. Establecer prioridades. Hay que distinguir entre lo que es urgente y lo que es importante. Nuestro problema puede ser que por hacer lo urgente dejemos de hacer lo importante. Si un cristiano no toma tiempo para hacer oracin y recibir direccin de Dios, se convertir en un esclavo de lo urgente. Podr trabajar de da y de noche y hacer muchas cosas que parecen significativas para l y para otros, pero no realizar la tarea que Dios tiene para l: Mt. 7, 21-23 No todo el que me dice Seor, Seor, entrar en el Reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre.

Cmo escapar de la tirana de lo urgente? La respuesta la encontramos en la vida de Jess. Jess no dej que la prisa lo dominara, ni le impidiera escuchar la voluntad de su padre. El secreto de la vida de Jess est en Mc. 1, 35: De madrugada cuando todava estaba oscuro, Jess se levant y sali para ir a orar. Jess esper la instruccin de su Padre y la fuerza para realizarla cada da. De esta manera desviaba lo urgente y slo cumpla con lo importante, que en otras palabras diramos, slo haca la voluntad de su Padre.

II. COMO ORGANIZAR NUESTRO TIEMPO

Vamos a ver ahora una manera prctica de organizar nuestro tiempo: Identifica descubre tus prioridades. Para esto, elabora una lista con los nombres de las personas con quienes debes relacionarte: Dios, esporo esposa, hijos, padres, hermanos, hermanas, asesor (a), hermanos hermanas de grupo, clula, etc. Todo esto segn tu situacin de vida.

Haz una lista de tus actividades tomando en cuenta el siguiente orden:

1. Relacin con Dios:

a) Oracin personal

b) Lectura de la Palabra

c) Vida sacramental

d) Lecturas espirituales

e) Asistencia a los grupos

2. Relacin familiar:

a) Dilogo con esposo esposa e hijos

b) Oracin familiar

c) Convivencias familiares

3. Compromisos con el grupo Comunidad:

a) Asistencia a asambleas

b) Asistencia a la clula grupo gape

c) Relaciones con Asesor y hermanos de grupo

4. Compromisos de trabajo estudio

Mencionar actividades en el trabajo, en la escuela en el trabajo de la casa.

5. Diversiones y descanso

Vaciar en un horario semanal todas estas actividades poniendo mayor inters en las que se mencionaron primero en la lista anterior.

En oracin delante del Seor, entrgale tu horario y pdele que te ayude a tener un horario ordenado y equilibrado, revsalo con frecuencia para quitar poner lo que sea necesario de tal manera que se vaya perfeccionando. El Seor te ayudar. El es un Dios de orden y slo llevando una vida ordenada podramos tener paz.

Consulta con tu pastor asesor y pdele ayuda y orientacin para hacer tu horario. (En la Librera Renovacin puedes adquirir una ficha para hacer tu horario semanal).

Se sugiere que despus de dar esta enseanza se entreguen las fichas del horario semanal, se expliquen y ah mismo las llenen. Despus cada uno ir haciendo los reajustes que sean necesarios.

LOS DIEZ MANDAMIENTOS

Los Diez Mandamientos se nos exponen en la Biblia en dos pasajes: Ex. 20, 1-17; Deut. 5, 2-21

Estos Diez Mandamientos que Dios dio a su pueblo en el Monte Sina por medio de Moiss, expresan las clusulas de la Alianza Pacto. La Alianza con Dios se vive obedeciendo los Mandamientos. Por su parte, el Seor promete bendecir, proteger y hacer prosperar a su pueblo si es fiel a la alianza.

Jesucristo vino a establecer la nueva y eterna alianza entre Dios y su nuevo pueblo (la Iglesia); esta Nueva Alianza qued sellada para siempre con el sacrificio de Cristo. Jess no aboli los Diez Mandamientos, sino que los perfeccion.

Los primeros tres Mandamientos hablan de nuestra relacin con Dios; los otro siete de nuestra relacin con el prjimo.

1. AMARAS A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS

Amars al Seor tu Dios con todo tu corazn, con toda tu alma y con todas tus fuerzas (Mt. 22, 36-39), es decir con tu espritu, mente y cuerpo.

Este es el ms importante de todos los Mandamientos. Debemos rendirle a Dios todo honor y toda gloria. Demostramos que amamos a Dios si le obedecemos.

Es un hecho que nos vamos asemejando a aquello que adoramos, a lo que damos culto: Si adoramos el dinero, nos metalizamos; si adoramos el placer, nos hacemos hedonistas, blandengues, etc. Si adoramos a Dios, nos vamos divinizando, espiritualizando, hasta hacernos cada vez ms semejantes a El. Dios debe ocupar el primer lugar en nuestra vida; todo lo dems debe quedar subordinado a El.

El primer mandamiento a la vez que nos manda amar a Dios, nos prohbe la idolatra, la supersticin, el ocultismo, las falsas religiones, etc.

2. NO JURAR EL NOMBRE DE DIOS EN VANO

Quiere decir respetar el nombre de Dios, no utilizarlo para nuestros fines personales, egostas, no usar el nombre de Dios para manipular para engaar (Mt. 5, 33-37). El Seor nos pedir cuenta de nuestras palabras. Dios y todo lo relacionado con El merece respeto y honor.

3. SANTIFICARAS EL DIA DEL SEOR

En el Antiguo Testamento, el da del Seor era el sbado. Para nosotros los cristianos el da del Seor es el domingo, es el da en que Cristo resucit, venci sobre el pecado, la muerte y el diablo. Es el da de nuestra salvacin. Es tambin el da de la venida del Espritu Santo. El domingo es el comienzo de la nueva creacin. Este es un da de fiesta y de descanso. Es un da dedicado especialmente a Dios. Debemos escuchar su Palabra, celebrar la Eucarista y convivir con nuestros hermanos en la fe. En este da est prohibido realizar trabajos y actividades que no son necesarias, que nos distraen de rendirle culto a Dios.

4. HONRARAS A TU PADRE Y A TU MADRE

Dios nos ha dado en la tierra dos autoridades a las cuales debemos sujetarnos: son nuestros padres.

Este Mandamiento nos manda amarlos, respetarlos, obedecerlos y ayudarlos; aunque tengan defectos debemos darles su lugar, ya que se han esforzado por darnos lo mejor de ellos. Dios promete bendecir y hacer prosperar a quienes honran a sus padres. Eclo. 3, 1-16; Col. 3, 20-21.

5. NO MATARAS

Jess lo expresa en el evangelio diciendo: No hagas a los dems lo que no quieras que te hagan. Trata a los dems como t mismo quisieras ser tratado.

Este Mandamiento prohbe todo dao fsico, moral espiritual a nuestros semejantes a nosotros mismos. Nadie tiene derecho a quitar la vida a los dems a si mismo. Slo Dios tiene este derecho.

Por este Mandamiento se prohbe tambin el aborto, la drogadiccin, el alcoholismo, los vivios y todo lo que dae la salud fsica mental. Mt. 5, 21; Ef. 4, 26.

6. NO FORNICARAS

En este Mandamiento el Seor manda que se eviten las relaciones sexuales fuera del matrimonio; que se respete el cuerpo, ya que somos templos del Espritu Santo. Se debe evitar todo tipo de impureza, de pensamiento, palabra y obra. El uso del sexo slo es lcito dentro del matrimonio 1Cor. 6, 12-20; 1 Tes. 4, 1-8; Mt. 5, 27-32. Los hombres y mujeres debemos valorar la virtud de la castidad y vivirla lo ms posible. Esto nos fortalece y dignifica.

7. NO HURTARAS

El robo es algo que va contra el plan de Dios y contra los derechos de mi prjimo. El robar lleva a situaciones cada vez ms pecaminosas como la corrupcin, la avaricia, la injusticia, el materialismo, etc. Tambin podemos robarle a Dios cuando no reconocemos los derechos que El tiene sobre nuestra vida, tiempo, dinero, etc. Ef. 4, 28; Lc. 3, 10-14; 1 Tim. 6, 7-10; Mt. 3, 8-12.

8. NO LEVANTAR FALSO TESTIMONIO

El Seor nos ordena evitar la mentira y la calumnia; no debemos engaar inventar cosas que no sean ciertas. Mentir es vivir en la oscuridad y los que pertenecemos a Cristo ya debemos vivir en la luz (verdad).

Hablar mal de la gente, difamando e inventando chismes que daan a nuestro prjimo es pecado; por lo tanto, es necesario evitar la murmuracin, la crtica destructiva, la falsedad. Nuestra actitud debe ser de amor, de apoyar y fortalecer a nuestros hermanos. Jn. 8, 44; Col. 3, 8-9; Mt. 12, 36-37.

9. NO DESEAR A LA MUJER DE TU PROJIMO

Este Mandamiento prohbe mirar con deseo a la mujer, el fomentar deseos e imaginaciones que nos lleven a la lujuria. Debemos de ver al prjimo como a una persona y no como un objeto sexual.

Necesitamos pedirle a Dios que purifique y renueve nuestra mente. Necesitamos disciplinar nuestros pensamientos. Mt. 5, 27-30; Rom. 12, 1-2.

10. NO CODICIARAS LAS COSAS AJENAS

Significa no estar deseoso de tener riquezas poseer bienes materiales. No hacer del dinero un dolo. No debemos dejarnos dominar por la avaricia, la envidia el egosmo. Si tenemos, debemos de estar dispuestos a compartir con quien no tiene.

Debemos estar cada vez ms conscientes de que nuestra verdadera riqueza es Dios mismo. Lc. 12, 22-34; 1 Tim. 6, 6-10.

CONCLUSIN:

El Seor nos ha dado estos Mandamientos no con el fin de oprimirnos restringirnos, sino para que podamos vivir una vida ordenada y feliz. El Seor quiere protegernos, quiere lo mejor para nosotros; quiere que lleguemos a la meta. Estos Mandamientos son una manifestacin del amor de Dios para su pueblo. Los Mandamientos forman parte esencial de la alianza entre Dios y cada uno de nosotros.

LOS SACRAMENTOS

1 Jn. 1, 1-2

Cristo, sacramento del Padre. La iglesia, sacramento de Cristo (los sacramentos de la Iglesia).

Sacramento Misterio: Es un signo visible a travs del cual Dios se comunica. Puede ser palabras, gestos, objetos, personas.

En nuestra vida diaria, encontramos muchos signos que representan otras realidades. Por ejemplo, un matrimonio firma un documento para adoptar un nio. Esta firma representa la voluntad de aadir otra persona a la familia. An cuando la pareja no sienta nada despus de firmar, el hecho es que ha sucedido un cambio en su vida.

De la misma manera los sacramentos, despus de recibirlos, puede ser que la persona no se sienta ni se vea diferente pero un cambio ha sucedido. Si es el Bautismo, Dios ha aadido una persona ms a su familia.

Jess y los Sacramentos: Jess es el sacramento signo a travs del cual Dios comunica la plenitud de su vida. Col. 2, 9-10; Jn. 1, 16; Col. 1, 19-20.

Jess es la fuente de todos los sacramentos signos. El hizo uso de objetos, ademanes, personas, palabras para manifestar el amor y el poder de Dios:

Bautizando por Juan en el Jordn. Agua, paloma, voz.

Cambi el agua en vino.

Us lodo y saliva para sanar al ciego.

El pan y el vino: Esto es mi cuerpo......

Jess prepar a sus apstoles para que fueran signos vivos que continuaran su ministerio:

Los apstoles ungan a los enfermos. Mc. 6, 13

Imponan las manos y oraban sobre la gente para que recibieran el Espritu Santo Hech. 8, 14-17; 19, 5-6.

Imponan las manos y oraban para encomendar a alguien un servicio una misin especial. Hech. 6, 3-6; 13, 1-3.

Ellos bautizaban Mt. 28, 19.

Ellos perdonaban pecados con autoridad Mt. 16, 19; 18, 18; Jn 20, 23.

Ellos enseaban que el matrimonio cristiano es un misterio (sacramento) que representa la unin entre Cristo y la Iglesia. Ef. 5, 22-33

Ellos celebraban la eucarista, fraccin del pan, segn el mandato de Jess. Lc. 22, 19.

La Iglesia cree y ensea que Jess confi estos sacramentos a los apstoles y a sus sucesores - a la Iglesia con acciones de Cristo mismo. Es Jess quien bautiza. Es Jess quien se ofrece a si mismo al Padre en la Eucarista. Es Jess quien perdona en el sacramento de la reconciliacin.

Bautismo: Mt. 28, 19

Comienzan a practicar este mandato el mismo da de Pentecosts. Hech. 2, 38.

Por el bautismo, reciben perdn, el don del Espritu Santo y quedan incorporados a la Iglesia. 1 Cor. 12, 12-13 Rom. 6, 3-4

El Nuevo Testamento no habla claramente del bautismo de nios pero lo supone. Hech. 16, 15, 33; 18, 8 Se bautizaron con toda la familia, se supone que tambin los nios.

En ninguna parte de la Biblia se prohbe el bautismo de nios. Desde los primeros siglos, la Iglesia consider que la fe de los padres y de la Comunidad Cristiana eran suficientes para bautizar al nio mientras madura para que l mismo haga un acto personal de fe y aceptacin compromiso.

Jess mismo se apoy en la fe de los padres para actuar:

Resurreccin de la hija de Jairo Mc. 5, 22-23; 35-43.

Expuls al demonio del muchacho Mc. 9, 17-27.

Eucarista: Eucarista significa accin de gracias. Esta celebracin se basa en lo que hizo Jess en el mandato Haced esto..... Lc. 22, 19.

Los cristianos de los primeros siglos tomaron las palabras de Cristo en sentido literal. 1 Cor. 11.

Los escritores de los primeros siglos: Sn. Ignacio de Antioquia, Sn. Justino mrtir, Sn. Ireneo de Lyon y muchos otros. La Iglesia siempre ha hablado de la presencia real de Cristo en la Eucarista. Esto slo se acepta en fe.

Los telogos medievales usaron la palabra transubstanciacin. La esencia del pan y vino se transforman en la presencia de Jess. Los accidentes (olor, color, sabor, tamao) permanecen igual.

Por lo tanto, la Iglesia manda que se tenga gran reverencia hacia el pan y el vino una vez que se ha pronunciado la palabra de Dios sobre ellos. Reverencia a todo lo relacionado con la Eucarista por la presencia real de Cristo.

La Iglesia ensea desde el principio que slo los obispos sucesores de los apstoles y aquellos que son autorizados por ellos pueden presidir celebrar la Eucarista.

Tambin ensea que la Eucarista es una representacin del sacrificio de Cristo. Se hace presente actual ante nosotros el nico e irrepetible sacrificio. Cada vez que comis de este pan y bebis de este cliz proclamis la muerte del Seor hasta que venga 1 Cor. 10, 16-17.

La Iglesia ensea que debido a las divisiones y a la distinta manera de creer, los catlicos no deben participar en la Eucarista de otros cristianos a no ser que crean igual que nosotros.

Reconciliacin Penitencia: Mucha gente se escandaliz de que Jess perdonara los pecados. Jess dio esta misma autoridad a los apstoles. Mt. 16, 19; Mt. 18, 18 Todo lo que atis desatis....

Jn. 20, 22-23 Recibid el Espritu Santo. A quienes perdonis los pecados, les sern perdonados.

En el Nuevo Testamento, todos los cristianos pueden y deben perdonar los pecados unos a otros pero Jess dio a los apstoles el poder de atar y desatar, perdonar los pecados en nombre de Dios.

En los primeros siglos eran los Obispos los que ejercan esta autoridad de perdonar pecados graves.

La prctica de absolver perdonar en nombre de Dios era para los que cometan pecados realmente serios despus de su bautismo, el perdn era acompaado de una dura penitencia pblica. Ordinariamente slo una vez en la vida se poda recibir la absolucin. Si alguien volva a pecar se le admita ya solo como penitente permanente.

En los siglos VI y VII entre los monjes se comenz a extender la confesin privada an de pecados no serios como una devocin y una forma de direccin espiritual. Esto se populariz despus en toda la Iglesia.

Cuando el sacerdote autorizado por el Obispo da la absolucin no solo representa a Cristo, sino tambin a la Iglesia. La reconciliacin es con Cristo, con la Comunidad Cristiana ya que la Iglesia es afectada directa indirectamente por el pecado.

Confirmacin: Aunque el Espritu Santo ya ha venido a la persona desde que crey y fue bautizada (Hech. 2, 38), sin embargo, el libro de Hechos tambin habla de imponer las manos orando para que reciban el Espritu Santo. Pedro y Juan fueron a Samaria Hech. 8, 15-17. Pablo en Efeso Hech 19, 6.

Desde los primeros siglos la Iglesia reconoce que normalmente y oficialmente se recibe el Espritu Santo por la oracin de imposicin de manos de un apstol de sus sucesores.

En siglos posteriores, se aadi el uso de aceite en este sacramento.

Este sacramento es necesario porque solo el Espritu Santo es el que da la fortaleza y capacidad para servir y llevar adelante la misin, el dar testimonio as como capacit a Jess y a los apstoles.

Sin embargo, es triste comprobar que la mayora de los cristianos no tienen la suficiente fe para experimentar esta plenitud del Espritu Santo en la confirmacin.

Nosotros sabemos que la accin del Espritu Santo no se restringe slo al momento de recibir los sacramentos Hech. 10, 44-48.

Uncin de los enfermos: Jess sanaba enfermos. Y dio poder a los apstoles de hacer los mismo. Mc. 6, 13. Sant. 5, 14-16.

El sentido del sacramento es orar por la salud espiritual y fsica.

El Ministro ordinario para administrar este sacramento es el presbtero. Pero todo catlico puede y debe orar con fe pidiendo a Dios la salud. Es recomendable que se ore en grupo.

Orden Sacerdotal: Jess escogi y prepar a 12. Los apstoles escogan, preparaban y designaban ancianos, diconos, presbteros, obispos. Los apstoles oraban e imponan las manos sobre ellos. Hech. 6, 6. Los primeros diconos.

2 Tim. 1, 6 Aviva el don que recibiste por imposicin de mis manos.... Obispos, presbteros, diconos, oficialmente forman la jerarqua de la Iglesia.

Otros ministerios necesarios: Evangelistas, pastores, maestros, administradores, (catequistas) profetas, los que ayudan, los que exhortan, los que hacen obras de caridad, los que dan hospitalidad, lectores, cantores, porteros, exorcistas, etc.

Matrimonio: Ya desde el A.T. exista el matrimonio. Jess lo eleva a una nueva dignidad. Mt. 19, 6 Unidad, indisoluble.

Ef. 5, 22-33 En signo de la unin de Cristo y la Iglesia, signo de amor de entrega y sacrificio.

Son uno en Cristo.

Los sacramentos son dones. A travs de ellos, Dios nos da su vida, poder, amor, nos santifica. No son ritos mgicos. Se deben recibir con fe expectante. No son el nico medio a travs del cual Dios acta. Hay otros medios: oracin, comunidad, palabra, fraternidad. Pero los sacramentos son los medios ordinarios, objetivos sealados claramente en la Palabra de Dios y en la tradicin de la Iglesia. Debemos aprovecharlos. Darle gracias a Dios por ellos.

EL CREDO O SIMBOLO DE LOS APOSTOLES

Es el Evangelio abreviado o resumen de las verdades principales de nuestra fe Cristiana.

El credo contiene doce verdades principales y por lo tanto est dividido en doce artculos o partes diferentes para facilitar su estudio y grabarlo mejor en el corazn. Tambin puede dividirse en cuatro partes segn que las verdades se refieran al Padre, al Hijo, al Espritu Santo o a las postrimeras del hombre. Esta sntesis de nuestra fe tal como lo recitamos los domingos en la Misa fue redactada y decretada oficialmente para toda la Iglesia en el Concilio de Nicea el ao 325.

Primer Artculo

"Creo en un slo Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible e invisible".

La expresin creo en Dios significa no slo que creemos que hay un Dios, sino que tambin ponemos en El toda nuestra confianza. Es decir, hacemos al mismo tiempo un acto de fe, de adhesin y de esperanza. Es por esto que decimos creo en Jesucristo y creo en el Espritu Santo .Decimos creo en Dios Padre porque en Dios hay una primera persona que se llama Padre.

El misterio ms grande de nuestra fe es: el de la Santsima Trinidad, es decir, el misterio de un slo Dios en tres personas que son: el Padre, el Hijo y el Espritu Santo. En Dios hay tres personas y una sola naturaleza, lo cual quiere decir que cada una de las tres divinas personas es Dios, pero no son ms que un slo y mismo Dios en perfecta unidad y trinidad.

Dios Padre es Todopoderoso porque hace todo cuanto quiere, como quiere y cuando quiere. Una de las perfecciones de Dios que ms se percibe en la obra de creacin en su omnipotencia. Hay slo dos cosas que son incompatibles con la omnipotencia de Dios: el pecado (imperfeccin) y lo que encierra contradiccin (hacer que la luz sea a la vez tinieblas).

Dios Padre es Creador porque hizo de la nada el cielo, la tierra y todo cuanto existe en ellos. Crear es sacar de la ,nada lo que no existe, exige un poder infinito, que no es propio de ningn ser creado. Esto no quiere decir que Dios creo todo tal como lo conocemos ahora; Dios solo cre los primeros principios vitales y les dio poder para mejorarse y para progresar.

Dios no slo cre al mundo con su voluntad omnipotente, sino que tambin lo conserva con su poder y lo gobierna con su providencia.

Las creaturas mas perfectas son los ngeles y los hombres. Los ngeles son espritus puros que Dios cre para que participaran de su felicidad. Dios cre a los ngeles en estado de santidad, pero muchos se rebelaron queriendo igualar se a El. Los angees fieles fueron confirmados en gracia, es decir, puestos en la imposibilidad de pecar y su felicidad fue asegurada para siempre. Su principal ocupacin es adorar a Dios y ejecutar sus rdenes. Los ngeles que se rebelaron contra Dios por soberbia, fueron arrojados al infierno.

El hombre, compuesto de alma y cuerpo, es un ser intermedio entre el ngel y el mundo material. El alma del hombre es espiritual, libre e inmortal, creada a imagen de Dios y destinada a estar unida a un cuerpo. Nuestra alma es imagen de Dios porque es capaz, como El, de conocer, amar y determinarse libremente. Dios cre directamente el alma de los primeros seres humanos, colocndola en cuerpos que ya haban alcanzado el grado de madurez y de perfeccin esperado por El. De aqu podemos deducir que todos los hombres descendemos de los primeros humanos que Dios hizo al infundir les el alma inmortal y racional.

Dios cre a los primeros seres humanos en estado de inocencia y de justicia original, de manera que podan disfrutar ampliamente de todo lo bueno y hermoso que hay en la creacin. Pero no se conservaron en este estado porque, inducidos por el diablo se rebelaron contra Dios; al sentirse dueos y reyes de la creacin quisieron igualarse en poder y dignidad a Dios.

Lo anterior trajo como consecuencia que toda la humanidad perdi la comunin espiritual con Dios. La humanidad qued en una situacin cada que llamamos pecado original, cuyas consecuencias son las grandes limitaciones que tenemos en nuestra naturaleza y en nuestras relaciones con el medio en que vivimos;

Despus de la cada Dios prometi enviar a un Redentor. Alguien capaz de vencer sobre el poder de Satans, sobre el pecado y la muerte.

Segundo Artculo

"Creo en un solo Seor Jesucristo, Hijo nico de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos, Dios de Dios, luz de luz, Dios verdadero de Dios verdadero, no creado, consubstancial al Padre: por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres y por nuestra salvacin, baj del cielo".

El Redentor que Dios dio a los hombres es su propio Hijo, la segunda persona de la Santsima Trinidad. Jesucristo es el Eterno Hijo de Dios que se hizo hombre, es Dios verdadero como el Padre y el Espritu Santo. Jess es nuestro Seor porque le pertenecemos, no slo por habernos creado, sino tambin por habernos redimido.

Tercer Artculo

"Y por obra del Espritu Santo se encarn de la Virgen Mara y se hizo hombre".

El tercer artculo nos ensea el misterio de la Encarnacin, el misterio del Hijo de Dios hecho hombre. El Hijo de Dios se hizo hombre tomando un cuerpo y un alma semejante a los nuestros, en el seno de la Santsima Virgen Mara por obra del Espritu Santo. El Hijo de Dios se hizo hombre para reparar el dao que caus el pecado del hombre. Por medio del pecado, el hombre haba cometido, una ofensa infinita contra Dios. Por lo tanto la reparacin de la ofensa tena que ser infinita y, como ninguna criatura poda hacer esto, Dios nos dio al Salvador que es su propio Hijo.

En Jess hay dos naturalezas: la humana y la divina. Jess es igual al Padre en cuanto Dios, pero como hombre es inferior al Padre. Tambin es de fe que hay dos voluntades y dos entendimientos en Jesucristo, uno divino y otro humano. Sin embargo, en Jess hay una sola persona que es la del Hijo de Dios.

Cuarto Artculo

Y por nuestra causa fue crucificado bajo el poder de Poncio Pilato, padeci y fue sepultado."

Ensea el misterio de la redencin, es decir el misterio de Jesucristo muerto en la cruz para redimirnos. Redencin significa ser liberados, rescatados, comprados. Cristo nos redimi ofrecindose El mismo como sacrificio perfecto.

El pecado nos haba colocado bajo el poder del diablo y para ser libres de esta servidumbre, se requera un rescate. Jess en cuanto hombre acept la condenacin y la muerte como castigo por nuestros pecados, as satisfizo plenamente la justicia de Dios y despoj a Satans de todos sus derechos sobre el ser humano.

La ofensa del hombre a Dios es una ofensa infinita que exige una reparacin infinita que el hombre no puede dar. Jess en cuanto Dios comunic a sus sufrimientos un mrito infinito, suficiente para pagar la deuda de todo el gnero humano.

Los principales tormentos que sufri Jess en el tiempo en que Poncio Pilato era gobernador de Judea fueron la agona del huerto de los Olivos, la flagelacin, la coronacin de espinas y finalmente fue clavado de pies y manos en la cruz.

La crucifixin era el suplicio mas doloroso reservado para los peores criminales. Jess escogi morir as por amor a nosotros. Jess muri el Viernes Santo a las tres de la tarde. Despus su cuerpo fue descavado de la cruz, entregado a la Santsima Virgen y depositado en un sepulcro propiedad de Jos de Arimatea.

Quinto Artculo

"Y resucit al tercer da segn las Escrituras" (o segn estaba predicho)

Jess resucit el da de Pascua, el tercer da despus de su muerte. La palabra Pascua, en hebreo quiere decir paso, pasar de una situacin a otra.

Para los cristianos la pascua significa el paso de Jess de la muerte a la vida.

La resurreccin de Jess est bien comprobada; si Jess no hubiese resucitado, nuestra fe carecera de objeto y de fundamento y no se hubiera podido establecer la Iglesia. Jess sali del sepulcro glorioso, es decir, su cuerpo estaba dotado de las cualidades que van a tener los cuerpos de los bienaventurados despus de la resurreccin general que son: claridad, impasibilidad, agilidad, sutileza e inmortalidad.

Despus de que Jess resucito todava permaneci durante cuarenta das en la tierra para confirmar a los Apstoles en la fe para instruirlos y para completar la institucin de los sacramentos.

Sexto Artculo

"Y subi al cielo, y est sentado a la derecha del Padre".

Cuarenta das despus de su resurreccin, Jess ascendi gloriosamente a los cielos, acompaado de todos los justos del Antiguo Testamento a quienes haba libertado del Limbo o seno de Abraham. Y est sentado a la diestra de Dios Padre Todopoderoso. " Esta es una manera de hablar adaptada a nuestra condicin humana. Estrictamente hablando el Padre es totalmente espritu, por lo tanto, ni est sentado ni necesita trono, ni tiene derecha o izquierda, pero este lenguaje nos ayuda a entender las realidades de que estamos hablando (que no podemos ni imaginar). Jess subi al cielo por tres motivos:

1.Para gozar, es decir que est en el cielo donde goza de igual gloria y poder que el Padre, la gloria que haba merecido por sus trabajos y sufrimientos.

2. Para preparamos una morada en el cielo.

3. Para enviamos el Espritu Santo.

A estos tres motivos manifestados por Jess, hay que aadir otros que seala la Sagrada Escritura; subi al cielo para desempear el oficio de abogado nuestro ante el Padre y oficio de sumo y eterno sacerdote en la liturgia celestial.

Sptimo Artculo

"Y de nuevo vendr con gloria para juzgar a vivos y muertos y su reino no tendr fin"

Para cada uno de nosotros el mundo se acaba en el momento de la muerte pero va a llegar un da en que se acabe para todos. Nadie sabe cuando suceder esto, pero es entonces cuando va a venir Jess con todo el esplendor de su gloria y majestad a juzgar a todos los hombres, es decir, a dar a cada uno segn sus obras.

Todos vamos a ser juzgados dos veces, el primer juicio ser en la hora de la muerte; este es el juicio particular. El segundo juicio se llama universal porque va a ser para todos los hombres. La sentencia del juicio universal ! ser la confirmacin de la del juicio particular.

Octavo Artculo

"Creo en el Espritu Santo, Seor y dador de vida. que procede del Padre y del Hijo que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoracin Y gloria, y que habl por los profetas".

Las palabras "creo en el Espritu Santo", significan que debemos creer que el Espritu Santo es Dios como el Padre y el Hijo.

El Espritu Santo se encuentra en todas partes porque es Dios, pero de un modo particular est en el cielo y en las almas de los justos que por esta razn son llamados templos

del Espritu Santo.

El Espritu Santo se ha mostrado en forma visible en distintas ocasiones; como paloma en el bautismo de Jess; como una nube luminosa en la transfiguracin y el da de Pentecosts como lenguas de fuego que posaron sobre la cabeza de cada uno de los apstoles y de la virgen Mara. El da de Pentecosts el Espritu Santo transform espiritualmente a los Apstoles dndoles sabidura, purificndolos del pecado, confirmndolos en gracia y dndoles nimo y valor para emprender la evangelizacin del Mundo.

El Espritu Santo viene a nosotros mediante la oracin y los sacramentos. Para atraer al Espritu Santo a nuestras almas debemos invocarlo frecuentemente y ser fieles a sus inspiraciones. Los dones del Espritu Santo son indispensables para la edificacin de la Iglesia.

Los ms particularmente asistidos por el Espritu Santo son el Papa y los Obispos para el gobierno de la Iglesia.

Noveno Artculo

"Creo en la Iglesia, que es una, santa, catlica y apostlica"

Estas palabras del noveno artculo del Credo significan que debemos creer lo que la Iglesia nos ensea y hacer lo que nos manda.

La Iglesia Catlica es la congregacin o reunin de los fieles cristianos que creen y profesan en toda su pureza la doctrina de Jess y reconocen la autoridad de sus legtimos pastores que son el Papa y los Obispos. El Papa es el vicario de Jess aqu en la tierra, el sucesor de San Pedro y el jefe visible de la Iglesia, cuya cabeza invisible es Jesucristo. Los Obispos son los sucesores de los Apstoles. Los Obispos en comunin con el Papa son los principales pastores de la iglesia. Los prrocos, los sacerdotes y los dems ministros ejercen sus funciones bajo la autoridad de sus respectivos Obispos. Los distintos ministerios son esenciales para un desarrollo ordenado y vigoroso de la Iglesia.

La Iglesia nos ensea las verdades que el mismo Jess ense a sus Apstoles. Estas verdades las encontramos en las Sagradas Escrituras, en la Tradicin y en el Magisterio, y estn compendiadas en el Credo o Smbolo de los Apstoles.

Los catlicos no debemos interpretar las Sagradas Escrituras cada uno a su modo, sino que tenemos que atenernos a la enseanza de la Iglesia que Dios estableci para instruirnos y explicarnos el verdadero sentido de la Biblia. La Iglesia no puede equivocarse en su enseanza porque Jess le prometi su asistencia hasta el fin de los siglos; por esto, es infalible.

No hay ms que una Iglesia verdadera y esta es la que Jess estableci. Jess fund su Iglesia con estas cuatro caractersticas: es una, santa, catlica y apostlica.

Es una porque tiene una sola fe y una sola autoridad que la gobierna.

Es santa porque su fundador es el Santo de los santos y porque su doctrina produce continuamente frutos de santidad entre sus fieles.

Es catlica o universal porque su doctrina y su culto son para todos los hombres y para todos los tiempos.

Es apostlica porque existe desde los apstoles, est gobernada por sus sucesores y porque cree y ensea la doctrina que ellos predicaron.

Los bienes espirituales de la Iglesia son comunes a todos los santos, es. decir, a todos los fieles, estos bienes espirituales de la Iglesia son los mritos de Jesucristo, de la Santsima Virgen y de los Santos, los Sacramentos, el Santo sacrificio de la Misa, las Oraciones y las buenas obras de todos sus hijos.

La comunin de los santos quiere decir que todos los fieles, como miembros de un solo cuerpo, compartimos mutuamente los bienes espirituales y estamos unidos espiritualmente a nuestros hermanos que ya estn gozando en el cielo y a los que se encuentran an en un proceso de purificacin antes de entrar a la gloria.

Artculo Dcimo

"Confieso que hay un solo bautismo para el perdn de los pecados".

Dios comunic a la iglesia el poder de perdonar todos los pecados Jn. 20, 23 "Jess sopl sobre ellos y les dijo reciban el Espritu, a quienes perdonis los pecados les sern perdonados".

Los medios principales que la Iglesia tiene para perdonar los pecados son los sacramentos del bautismo y la reconciliacin. Decimos principalmente porque en muchos casos los pecados pueden ser perdonados por el sacramento de la uncin de los enfermos o por un verdadero acto de contricin.

Artculo Undcimo

"Espero la resurreccin de los muertos"

Al fin del mundo todos los muertos van a resucitar. Va a haber una resurreccin general para que el cuerpo que particip de la virtud o del delito durante la vida tambin participe del premio o del castigo en la eternidad. Los justos van a estar totalmente exentos de los defectos naturales y como en la edad perfecta; los rprobos van a aparecer corruptibles y sujetos a dolor. La resurreccin ser instantnea 1 Cor. 15, 52.

Artculo Doceavo

"Creo en la vida del mundo futuro"

Es decir la vida eterna que habr despus del juicio final. ya sea eterna mente feliz en el cielo o eternamente infeliz en el infierno.

"Yo soy la Resurreccin y la Vida, dice Jess, el que crea en m no morir jams, vivir para siempre" Jn. 11 ,25

"Yo he venido para que tengan vida y vida en abundancia" Jn. 10, 10

.

HISTORIA DE LA SALVACION

La mayor parte de los catlicos no tienen una visin clara de la historia de la salvacin y del lugar donde estamos situados actualmente.

Es importante saber cul es el plan de Dios: de donde venimos, donde estamos, hacia donde vamos. Es tambin importante captar y vivir la realidad de que somos el pueblo de Dios. El plan de Dios se realiza no tanto con individuos aislados, sino con la gente que fama parte de su pueblo. La sa1vacin tiene un sentido histrico, y comunitario.

Dios es eterno, sin principio ni fin. Es infinito, es Santo, es Espritu, es Luz, es Amor, es Plenitud. Es el origen y la meta de todo cuanto existe. Dios es Creador.

En un pasado sin fecha conocida:

Dios cre el mundo en que habitamos.

Cre al ser humano a su imagen y semejanza con capacidad para participar de la vida de Dios.

El hombre se separ de Dios, qued privado de la vida espiritual, qued sujeto al diablo, al pecado, a la muerte. El hombre sin la vida del Espritu es un ser puramente carnal La humanidad qued en una situacin cada (Gn. captulos 1,2 y 3).

Dios por su gran bondad promete un Salvador (Gn. 3,15).

La humanidad se olvida ms y mas del verdadero Dios, inventa falsos dioses (dolos) y les rinde culto. El hombre se centra en si mismo, hace del hombre un Dios, se apega a las creaturas, se pervierte, se envilece (Rm. 1, 18-32).

Pasado sin fecha conocida:

El diluvio. No, la alianza con No (Gn. 6, 5-9; 28)

La torre de Babel y la dispersin (Gn. 11, 1-9)

2000 A.C.

Abraham. Responde al llamado de Dios, Dios le promete una tierra, un pueblo, una bendicin (Gn. 12-24). Alianza de Dios con Abraham (Gn. 15). Isaac es el hijo a travs del cual viene la bendicin.

Jacob (Israel). Los 12 hijos de Jacob. Jos vendido por sus hermanos, etc. Es una figura de Cristo (Gn. 37-47).

Jud. Es el cuarto hijo de Jacob, con su descendencia se forma la tribu de Jud de la cual vendr el Mesas. 400 aos en Egipto, al final son esclavizados por el faran.

1250 A.C.

Moiss. Exodo, la Pascua, la liberacin, el paso a travs del Mar Rojo, la Alianza en el Sina, los Diez Mandamientos. 40 de peregrinacin por el desierto alimentados con el Man. El Tabernculo. La importancia de obedecer y ser fieles a Dios.

Levtico. El pueblo aprende a acercarse a Dios por medio de los sacrificios. Dios es santo. El pecado nos separa de El (Cristo ser el sacrificio perfecto, por El podemos llegar confiadamente a Dios).

Nmeros. Es un libro que nos habla de combate, de organizacin, como pueblo de Dios hemos de estar conscientes. Cristo es nuestro jefe y conductor. Cada uno tiene un lugar importante en este ejrcito.

Deuteronomio. Libro que insiste en la fidelidad en la alianza con Dios, debemos prepararnos para tomar posesin de la tierra prometida. Recibir la sabidura y la fortaleza que slo Dios puede dar.

Josu. Paso del Jordn, conquista de la Tierra Prometida.

Jueces. Otoniel, Ehud, Samgar, Dbora, Barak, Geden, Jeft, Sansn, Samuel.

poca de Reyes

Sal. Un rey segn el corazn de los hombres, no se mantuvo fiel. Jonatn, su hijo, amigo de David.

1000 A.C.

David. Un rey segn el corazn de Dios. Se mantuvo fiel, promueve el culto y la alabanza a Dios. Los Salmos. Recibe la promesa de que un descendiente suyo reinar para siempre. El reino de Israel se consolida y se engrandece.

Salomn. Gran sabidura y riqueza, construccin del templo de Jerusaln, la riqueza y las mujeres lo apartaron de Dios.

Despus de Salomn, se divide el Reino: Norte Israel, Sur Jud, Roboam en el Sur, Jeroboam en el Norte.

En el Norte, hubo 19 reyes hasta la derrota y dispersin por los Asirios.

700 A.C.

En el Sur hubo 20 hasta la deportacin a Babilonia.

Los reyes fieles a Dios (de la tribu de Jud) fueron ocho pero slo dos merecen ser plenamente reconocidos: Ezequias y Josas.

Cuando los reyes eran fieles, el pueblo prosperaba y se fortaleca. Se cumplan las promesas (Deut. 28); cuando se apartaban de Dios, se debilitaban, se dividan, eran vencidos.

De 1000 A.C. hasta 400 A.C.

Los Profetas. Hombres movidos por el Espritu, son los que avivan la fe y esperanza en el pueblo, mantienen la fidelidad a Dios, le recuerdan la alianza y las promesas.

Profetas: Elas, Eliseo, Isaas, Jeremas, Daniel, Ezequiel, Oseas, Ams, Miqueas, Sofonas, Nahum, Habacuc, Ageo, Zacaras, Malaquas, Abdas, Joel, Jons.

450 A.C.

Retorno del desierto. Despus del destierro de Babilonia, un resto de los fieles a Dios retornan a Jud y emprenden la reconstruccin de la ciudad, del templo y de la muralla.

Esdras. Sacerdote y escriba celoso por la Alianza, la ley y el culto.

Zorobabel. Reconstruccin del templo.

Nehemas. Reconstructor de la muralla, modelo de lder espiritual y hombre de carcter. El pueblo de Dios se renueva y se consolida bajo su direccin. Comienza la poca de la sinagoga, estricto monotesmo, apego a la ley escrita.

150 A.C.

Los Macabeos. Hombres valerosos, guerreros que luchan por la alianza y por la integridad de la fe en Dios frente al paganismo, es tiempo de herosmo.

Los pobres de Yahveh, resto fiel. Los que confan totalmente en Dios.

Mara, Jos, Juan Bautista.

En la plenitud de los tiempos. JESUCRISTO, hijo de Dios, Verbo Encarnado, Dios con Nosotros, Mesas, Nuevo Adn, Verdadero Moiss, Salvador, Seor, Redentor.

Con El comienza la Iglesia, el nuevo pueblo de Dios.

LA ALIANZA

Significa: Pacto, compromiso de fidelidad.

Establece una relacin personal: definida implica responsabilidades mutuas, mutuo compromiso, mutua entrega.

Alianza entre Dios y la comunidad. Es un compromiso solemne, pblico, recproco entre Dios y un grupo de personas iniciado por Dios mismo en forma de llamado y el pueblo acepta y ratifica (Ex. 19, 3-7; 24, 3-8).

En el Antiguo Testamento, las Alianzas establecan vnculos a veces ms fuertes que los de la familia y se tomaban muy en serio.

Dios se caracteriza como el Dios de la Alianza que llama a la Alianza, que guarda la Alianza con No, Abraham, Moiss, el pueblo.

I. Propsito de la Alianza:

a) Da orden y estabilidad a nuestra relacin con Dios y con el pueblo de Dios. Da claridad y responsabilidad. Nos libera del desorden, confusin, ansiedad e inseguridad.

b) Establece claramente las formas de amarse y servir segn los criterios del Reino.

c) Define un pueblo para Dios, define la fraternidad en Cristo. Cada persona se identifica como hermano con un compromiso definido.

Implica compromiso y amor:

a) Compromiso: promesa conjunta. Es confiarnos, vincularnos, consagrarnos a Dios y unos con otros.

b) Responder a la alianza trae las bendiciones y las promesas de Dios a un pueblo dedicado a El.

c) La esencia de la alianza es el amor gape que implica verdad, sinceridad, lealtad, cario, sacrificio. Salmo 89.

II. La Nueva Alianza y la Restauracin de la Iglesia.

La primera Comunidad Cristiana surgi como respuesta a la alianza nueva y eterna sellada en la sangre de Cristo.

Por qu la alianza hoy?

El Cristianismo se encuentra hoy como el pueblo de Israel en tiempos de Nehemas: confuso, disperso, debilitado.

La Iglesia en general ha perdido el sentido de la alianza.

Por eso es un tiempo de restauracin.

Dios quiere establecer la alianza.

El quiere un pueblo unido, fuerte, consagrado.

En la comunidad la alianza sirve para formar una nueva sociedad, una nueva cultura, el reino de Dios.

Obstculos: Satans, mundo, carne, incredulidad, temor, egosmo, individualismo.

Las relaciones en la comunidad se basan en el compromiso de fidelidad, de servicio, de amor, no tanto en leyes, doctrinas, teoras, sentimientos y emociones.

III. La Alianza nos compromete a:

a) Estar disponibles, se puede contar conmigo.

b) Responder al llamado de Dios.

c) Desear activamente crecer y ser formado como discpulo de Jess en la oracin, Palabra de Dios, obediencia, reconociendo a Jess como Seor diariamente en todo.

d) Crecer en vida de comunidad, aprender a pensar en los otros, no slo yo. Compartir relaciones en orden.

e) Vivir en la luz, dispuesto a morir cada da al hombre viejo.

IV. La Alianza compromete a:

a) Cultivar la relacin con el Seor diariamente.

b) Asistir a las reuniones de la Comunidad.

c) Recibir fielmente la enseanza de la Comunidad. Cursos de formacin.

d) Estar dispuesto a prestar servicios y ayuda.

V. Aceptar la Alianza implica:

a) Aceptar a estos hermanos con los que me comprometo.

b) Aceptar la estructura pastoral de la Comunidad.

c) Sujetarnos a la gua general de la Comunidad y a la gua especfica del responsable pastoral inmediato.

d) Responsabilizarnos de las necesidades materiales de la Comunidad. Disposicin a compartir en todos los sentidos, superar egosmo. El compartir es contrario al acaparar tanto en lo espiritual como en lo material.

DAD GLORIA AL SEOR!

AHORA Y POR SIEMPRE!