con la familia marianista - … · 71 adultos y 27 niños ... aunque estáis repartidos por los...
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Octubre 2011
Información para las FFMM
A lo largo de toda su vida de
Fundador, el Padre Chami-
nade no cesará de formar en
la oración a todos los que le
son confiados, desde las
Congregaciones de laicos a
partir de 1800, hasta el final
de su vida. La oración jamás
está separada de la vida, y
buscará incansablemente
dar métodos que conduzcan
a esta unidad.
¡Ya somos 98 preinscritos! 71 adultos y 27 niños
Nos encontraremos en Lliria para compartir nuestras experiencias y profundizar
en nuestro compromiso definitivo en Fraternidades
TITULARES
Con la FAMILIA:
HOMBRE Y MAESTRO DE ORACION ־
III ENCUENTRO DE CONSAGRADOS ־
DEFINITIVOS
ORACION MUNIDAL DE LA FAMILIA ־
MARIANISTA EN ESPAÑA
Con la PROVINCIA:
PEREGRINACIÓN MARIANISTA AL ־
ENCUENTRO EUROPEO DE JOVENES
EN BERLIN.
VIAJE A LOS ORIGENES DE LA ־
FAMILIA MARIANISTA.
Con las ZONAS:
Gran Fraternidad en Vitoria ־
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HOMBRE DE ORACIÓN Y MAESTRO DE ORACIÓN
CON LA FAMILIA MARIANISTA:
III ENCUENTRO DE CONSAGRADOS DEFINITIVOS
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Era la primera vez que la Familia marianista celebraba con tanta
solemnidad y emoción en la preciosa iglesia de San Gil. Siem-pre hablamos de Chaminade y el Pilar, pero era justo dedicar un
día a celebrar donde él celebró, donde ejerció como sacerdote,
junto con su hermano Luis, en el barrio donde según todos los in-
dicios vivieron.
Allí estuvimos en la noche del 8, en la víspera del domingo, cele-
brando con la comunidad parroquial, seglares, fraternos, religio-
sas y religiosos marianistas. El párroco don Mario nos ofreció ca-
riñosamente presidir la Eucaristía. Y así vivimos la primera parte
de la Jornada mundial. El Evangelio de este domingo nos hablaba
de la parábola del banquete de bodas. Fue una ocasión para hablar de Cristo, de María (alusión a Caná y las palabras de Ella pidiendo el vino nue-
vo), de Chaminade soñando con una Francia y una sociedad que no se cerrara a la boda
de Cristo con su Iglesia, al banquete de Dios con la Humanidad, este Mundo tan necesi-
tado de justicia y fe, de solidaridad y otras políticas económicas y sociales; de libertad y
paz.
En esta Eucaristía estuvisteis todos presentes, aunque estáis repartidos por los cinco
continentes, por cientos de ciudades y pueblos en misión permanente.Tuvimos la alegr-
ía de coincidir con la peregrinación de la parroquia marianista de Jerez, que mar-
chaba hacia Burdeos. Allí estuvieron en San Gil con todos nosotros. Y también fue muy
significativa la presencia del P.Cecilio de Lora, que concelebró con nosotros, misione-
ro tantos años en Colombia y ahora en Ecuador, que representaba muy bien a toda la
Familia de América.
Y luego, fuimos andando, peregrinando, en ese corto espacio de tiempo que hay de San
Gil a la basílica de Nuestra Señora del Pilar. Como Zaragoza ya está ardiendo en fies-ta, la llegada a la plaza era esa noche casi misión imposible. Era inminente la hora del
"Pregón" de las fiestas, el balcón del Ayuntamiento estaba ya iluminado y la plaza a re-
bosar. Pero nosotros quisimos entrar a la Santa Capilla. La sorpresa que nos aguarda-
ba era ¡que María del Pilar llevaba el manto con la cruz marianista! Es que los pere-grinos de la parroquia de Jerez habían celebrado por la mañana la Eucaristía y habían
pedido que la Virgen llevara nuestro manto... Y Ella lo llevaba puesto todavía. Allí estu-
vimos delante de María con su Jesús en brazos, sobre la columna, orando por toda la Fa-
milia y por Zaragoza entera que se prepara para el gran día del próximo miércoles. En-
cendimos DIEZ VELAS junto al pilar: una por cada continente donde estamos y otras
cinco representando a las 4 ramas (CLM-AM-FMI-SM) y la última que representa a todos
los de la Familia que no se agrupan en ninguna rama: afiliados, amigos, familias, pro-fesores, alumnos, parroquianos, etc
ORACION MUNDIAL DE LA FAMILIA MARIANISTA EN ESPAÑA
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Las raíces son lo más importante de los árboles, pues, son principal sustento para continuar con vi-
da. En nuestra vida de fe tener bien fundamentadas nuestras raíces es algo muy importante para
continuar seguir creciendo y dando fruto. Eso es lo que hicimos un nutrido grupo de fraternos de
Valencia con algunos de otras zonas cuando visitamos este verano los lugares de nuestro origen.
Aquellas ciudades donde fue creciendo Guillermo José Chaminade y donde se fue fraguando lo que
hoy es la Familia Marianista.
Cuando el día, 5 de agosto de 2011, a las siete de la mañana, con una puntualidad desconocida en
fraternidades, un grupo de algo menos de un centenar de fraternos salíamos desde el Colegio de El
Pilar de Valencia destino Burdeos, se hacía realidad el sueño de muchos fraternos que muchas oca-
siones en nuestras reuniones decíamos ¿por qué vamos a Burdeos?. Incluso, en alguna fraternidad
ya se había planteado un viaje similar. Ese día el sueño se hizo realidad y algunos cuantos tuvimos la
oportunidad de vivirlo. Y empezamos a vivirlo, como no podía ser de otra forma, al medio día de ese
viernes, 5 de agosto, en la Basílica del Pilar en Zaragoza, que se había puesto el manto marianista en
nuestro honor, para celebrar la eucaristía en la que recordábamos aquel momento solemne en el
que la Virgen inspiró a Guillermo José a crear la Familia Marianista, un proyecto misionero en la
Francia revolucionaria para recristianizar aquella sociedad que buscaba un fundamento a su vida al
igual que mucha gente lo busca hoy, y donde cada uno de nosotros somos los obreros del Padre
Chaminade. En Zaragoza pudimos saborear los momentos de soledad de aquel sacerdote francés
exiliado por persecución político, y como bajo el manto de la Virgen encontró amparo y fuerza para
esperar y volver a caminar, poniendo en marcha lo que hoy somos.
De ahí, nos desplazamos hasta Donosti, donde hicimos noche, como lo hizo también en su momento
el fundador, y nos distrajimos como turistas por ciudad vasca degustando sus típicos pinchos. Al día
siguiente, sábado 6, como si nos hubiéramos llevado el sol del mediterráneo, disfrutamos de un día
de sol y playa en la Concha de San Sebastián, llena de gente gozando de un sol reluciente. Esa ma-
ñana, siguiendo nuestro estilo de libertad cada uno disfrutó como quiso: unos bañándose en la playa
de la Concha, otros subiendo con funicular al conocido Monte Igueldo y visitando el Peine de los
Vientos, y otros paseando por la ciudad. Con la Oración de las Tres, todos reunidos de nuevo en la
puerta del Colegio de San Sebastián, y con puntualidad absoluta, marchamos ya camino de nuestro
objetivo: Burdeaux, aunque nuestro alojamiento sería la pequeña localidad, Martillac, a unos kilóme-
tros de la ciudad, allí, residiríamos durante una semana, entre un pequeño y recién inaugurado
hotel, y un viejo chateau que navega entre los viñedos de la famosa "zona de las graveras" y conoci-
do como "la Solitude", una casa de retiros, perteneciente a las monjas de Loreto, en donde descan-
san los restos de su fundador. Las hermanas del Loreto serían quienes nos alimentaría, con sus sa-
brosos picnic diarios para la hora de la comida, y sus cenas, a las 19 horas, regadas eso sí con un
sabroso vino de la tierra.
Ya instalados, el domingo día 7, nos desplazamos hacia los lugares natales de Guillermo José, Peri-
gueux y Mussidan. Por la mañana, visitamos Perigueux, su lugar natal, donde participamos de la eucaristía dominical en la misma Catedral, en donde hay un retablo de nuestro fundador. Tras la
misma, recorrimos la localidad, pasamos por su casa natalicia, donde hoy reside una molesta familia
francesa, y donde pudimos imaginar la vida del pequeño Guillermo José. A las orillas del río, almor-
zamos, y recobramos fuerzas. Por la tarde, nos desplazamos hacia Mussidan, visitamos la iglesia en
VIAJE A LOS ORIGENES DE LA FAMILIA MARIANISTA
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donde ejerció de sacerdote en sus primeros años antes de la revolución, y el Colegio de San Carlos,
hoy sede municipal de la población, y en el que el pequeño Guillermo José, primero estudió y luego
dirigió, junto a sus hermanos. Allí, tratamos de profundizar en los misterios del fundador y como fue
fraguando la idea de poner en marcha nuestra Familia Marianista, profundizando en detalles de su
vida paseando por las calles por las que él paseo durante los primeros años de su vida. Sus prime-
ras carreras de niño, sus pillerías de adolescente y sus primeros años como sacerdote. Al atardecer
regresamos a Martillac para la temprana cena y convivir un rato hasta la hora de acostarse.
El lunes, 8 de agosto, día de convivencia y libertad, mientras un grupo se quedaba en Burdeaux pa-
ra conocer mejor la ciudad, otros optaron por visitar Saint-Emilion, una pequeña localidad vitícola que vive del turismo, rodeada de impresionantes chateau, que se pudieron visitar, así como degus-
tar los tradicionales vinos de Burdeaux. La jornada de ocio como siempre acabó con la temprana
cena en "la Solitude".
El martes, 9 de agosto, centramos la peregrinacion en Adela de Tranquelléon. Visitamos Agen, donde celebramos la eucaristía con las hermanas en la capilla del Colegio de las Marianistas, que
fundó personalmente Adela, y donde ella vivió, bajando por una escalera que queda de su época.
Visitamos a continuación la catedral de Agen, y comimos en el colegio, donde las hermanas, nos
agasajaron con café y dulces para postre de la comida. Por la tarde, partimos rumbo a Tranquelléon.
Allí, visitamos el castillo, donde nació Adela, que aún conservan sus descendientes directos. Reco-
rrimos sus estancias, entre ellas, la capilla privada, los salones, la cocina y las caballerizas.
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El miércoles, 10 de agosto, segunda jornada de ocio, nos dirigimos a un lugar de la costa oeste
francesa, la villa de Arcachón, una zona residencial turística francesa con impresionantes mansio-nes y una playa limpísima en donde la gente, especialmente, los más jóvenes, disfrutaron de la
playa y se pudieron bañar, mientras algunos se disfrutaron de sus ostras. Por la tarde, todos coinci-
dimos en la gran duna de Arcachón que, desde su parte más alta se observa toda la bahía de la vi-
lla, y donde pudimos disfrutar como niños siguiendo el mensaje del evangelio “ser como niños”.
Ya en Martillac, y cenados, un grupo visitamos Burdeaux de noche pudiendo ver la vida nocturna
de la ciudad, como el edificio de la bolsa se reflejaba en la lámina de agua, en la que los habitantes
de la localidad pasean descalzos.
Y llegó, el jueves, 11 de agosto, momento culminante del viaje, Burdeaux, y sobre todo, la visita a
la Madeleine, el centro de nuestro origen, allí empezaron las primeras congregaciones, y allí ce-lebramos la eucaristía, posiblemente, la más emotiva de todo el viaje, y donde Guillermo José, se
nos dirigió a cada uno de nosotros como tanto domingos por la tarde se había dirigido a aquellos
jóvenes post-revolucionarios que se agrupaban para escuchar palabras de esperanza. Y allí, nos
decía ir, dar testimonio con vuestras obras y hacer cristianos. Allí, coincidimos con un grupo de
religiosos que habían recorrido una ruta parecida caminando y reflexionando. En la Madeleine,
visitamos la habitación donde vivió el fundador, y que tiene algunos objetos personales suyos. En
Burdeaux visitamos los lugares más vinculados a Guillermo José. Por la noche, concluimos con una
gran actividad de convivencia preparada por los más jóvenes.
Realmente, fue un viaje que nos renovó por dentro, donde aprendimos a vivir y respetarnos, dis-frutando de la sonrisa inocente de los más jóvenes de los que aprendimos mucho. Desde aquí, dar las gracias a todos los que participantes, especialmente, al equipo organizador.
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El pasado 22 de octubre, nos juntamos en el txoko para celebrar nuestro mensual encuen-
tro de Gran Fraternidad.
Algunos religiosos y fraternos tuvimos la suerte de contar con la presencia de Henar de
Acción Marianista.
Dentro de una oración con la palabra, pudimos escuchar el testimonio de Henar sobre to-
do el trabajo pasado y futuro que desde Acción Marianista están realizando.
La palabra que nos convocó fue la parábola del Buen Samaritano. También la compartimos
con los más pequeños, que para terminar nos hicieron un "teatrillo", nos cantaron una can-
ción y nos enseñaron cómo tenemos que aprender a mirar a las personas que nos rodean,
especialmente a las que más lo necesitan, no sólo con los ojos, si no también con el co-
razón. (de ahí la foto....) Terminamos el encuentro con una chocolatada, al más puro estilo
fraterno.
Agradecer una vez más a Henar su presencia y experiencia dentro de Acción Marianista.
Gran Fraternidad en Vitoria
CON LAS ZONAS: