Semana 24 del año 2019 CASA de Dios.

“¡Vamos por más!” 3030 Dickerson Pike. Nashville, TN 37207. (615)262-2511

Escucha tu Radio Vida 1130 AM, 1210 AM, 910 AM y 90.3 FM (Guatemala) ó www.radiovida1130.com. Comunícate (615)227-1130

Pastor Noel Duarte

¡No competimos, compartimos! Como hijos de Dios (Jn. 1:12), nosotros no debemos competir, sino compartir con quienes nos rodean. Pero ¿Cómo logramos erradicar de nosotros el espíritu de competencia? Separando nuestro espíritu de nuestra alma. La Palabra de Dios os dice en Gálatas 5:17 “porque el deseo de la carne es contra el Espíritu y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisierais.” Hay cosas que, por diseño de Dios, no pueden estar unidas. Si vemos en Génesis 1, Dios separó la luz de las tinieblas y las aguas de la tierra seca. Al formar al hombre, lo creo tripartito: espíritu, alma y cuerpo; pero aunque somos uno, las tres partes deben estar bien separadas. Dios nos lo enseña perfectamente cuando le dice al hombre: de todo árbol del huerto puedes comer (alimentar al cuerpo), incluyendo el árbol de la vida (la misma presencia de Dios, alimento para el espíritu); pero del árbol de la ciencia del bien y del mal (alimentar al alma) no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás. (Gn. 2:16-17). Aquí vemos cuan importante es para Dios que el hombre alimentara su cuerpo y su espíritu, pero no así su alma. Porque se deja llevar por las emociones, las cuales son fluctuantes; en cambio, nuestro espíritu actúa por convicción. Para compartir, en lugar de competir, es necesario que separemos el alma del espíritu porque el alma busca el competir, para recibir la gloria; mientras que el espíritu busca compartir para que quien nos rodea sea bendecido y edificado. ¡NO COMPETIMOS, COMPARTIMOS! ¡Vamos por más!

Editado por: Pra. Rossy Lara

Semana 24 del año 2019 CASA de Dios.

“¡Vamos por más!” 3030 Dickerson Pike. Nashville, TN 37207. (615)262-2511

Escucha tu Radio Vida 1130 AM, 1210 AM, 910 AM y 90.3 FM (Guatemala) ó www.radiovida1130.com. Comunícate (615)227-1130

Pastor Noel Duarte

¡No competimos, compartimos! Como hijos de Dios (Jn. 1:12), nosotros no debemos competir, sino compartir con quienes nos rodean. Pero ¿Cómo logramos erradicar de nosotros el espíritu de competencia? Separando nuestro espíritu de nuestra alma. La Palabra de Dios os dice en Gálatas 5:17 “porque el deseo de la carne es contra el Espíritu y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisierais.” Hay cosas que, por diseño de Dios, no pueden estar unidas. Si vemos en Génesis 1, Dios separó la luz de las tinieblas y las aguas de la tierra seca. Al formar al hombre, lo creo tripartito: espíritu, alma y cuerpo; pero aunque somos uno, las tres partes deben estar bien separadas. Dios nos lo enseña perfectamente cuando le dice al hombre: de todo árbol del huerto puedes comer (alimentar al cuerpo), incluyendo el árbol de la vida (la misma presencia de Dios, alimento para el espíritu); pero del árbol de la ciencia del bien y del mal (alimentar al alma) no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás. (Gn. 2:16-17). Aquí vemos cuan importante es para Dios que el hombre alimentara su cuerpo y su espíritu, pero no así su alma. Porque se deja llevar por las emociones, las cuales son fluctuantes; en cambio, nuestro espíritu actúa por convicción. Para compartir, en lugar de competir, es necesario que separemos el alma del espíritu porque el alma busca el competir, para recibir la gloria; mientras que el espíritu busca compartir para que quien nos rodea sea bendecido y edificado. ¡NO COMPETIMOS, COMPARTIMOS! ¡Vamos por más!

Editado por: Pra. Rossy Lara

We do not compete, we share! As children of God (John 1:12), we must not compete, but share with those around us. But how do we eradicate the spirit of competition from us? Separating our spirit from our soul.

The Word of God tells you in Galatians 5:17 “because the desire of the flesh is against the Spirit and the desire of the Spirit is against the flesh; and these are opposed to each other, so that you do not do what you would like.” There are things that, by God's design, cannot be united. If we look at Genesis 1, God separated the light from the darkness and the waters from the dry land. In forming man, I believe it tripartite: spirit, soul and body; but although we are one, the three parts must be well separated. God teaches us perfectly when he says to man: from every tree of the garden you can eat (feed the body), including the tree of life (the very presence of God, food for the spirit); but from the tree of the knowledge of good and evil (feeding the soul) you will not eat; for in the day that you eat of it, you will surely die (Gen. 2:16-17). Here we see how important it is for God for man to feed his body and spirit, but not his soul. Because it is carried away by emotions, which are fluctuating; instead, our spirit acts out of conviction.

To share, instead of competing, it is necessary that we separate the soul from the spirit because the soul seeks to compete, to receive the glory; while the spirit seeks to share so that those around us may be blessed and edified. WE DO NOT COMPETE, WE SHARE! Let's go for more!

Pastor Noel Duarte

Week 24 of the year 2019 HOUSE OF GOD.

“Go Beyond” 3030 Dickerson Pike. Nashville, TN 37207. (615)262-2511

Listen to your Radio Vida 1130 AM, 1210 AM, 910 AM y 90.3 FM (Guatemala) or www.radiovida1130.com. Call us at (615)227-1130

Translated by: Pr. Josue Rodriguez

We do not compete, we share! As children of God (John 1:12), we must not compete, but share with those around us. But how do we eradicate the spirit of competition from us? Separating our spirit from our soul.

The Word of God tells you in Galatians 5:17 “because the desire of the flesh is against the Spirit and the desire of the Spirit is against the flesh; and these are opposed to each other, so that you do not do what you would like.” There are things that, by God's design, cannot be united. If we look at Genesis 1, God separated the light from the darkness and the waters from the dry land. In forming man, I believe it tripartite: spirit, soul and body; but although we are one, the three parts must be well separated. God teaches us perfectly when he says to man: from every tree of the garden you can eat (feed the body), including the tree of life (the very presence of God, food for the spirit); but from the tree of the knowledge of good and evil (feeding the soul) you will not eat; for in the day that you eat of it, you will surely die (Gen. 2:16-17). Here we see how important it is for God for man to feed his body and spirit, but not his soul. Because it is carried away by emotions, which are fluctuating; instead, our spirit acts out of conviction.

To share, instead of competing, it is necessary that we separate the soul from the spirit because the soul seeks to compete, to receive the glory; while the spirit seeks to share so that those around us may be blessed and edified. WE DO NOT COMPETE, WE SHARE! Let's go for more!

Pastor Noel Duarte

Week 24 of the year 2019 HOUSE OF GOD.

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Listen to your Radio Vida 1130 AM, 1210 AM, 910 AM y 90.3 FM (Guatemala) or www.radiovida1130.com. Call us at (615)227-1130

Translated by: Pr. Josue Rodriguez