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analisis de la escuelaTRANSCRIPT
Universidad de Buenos AiresFacultad de Psicología
Informática, Educación y Sociedad
Cátedra Única: Neri, Carlos Mario
“La escuela: vicisitudes de una
máquina vieja”
Profesor: Maximiliano Cambiasso.
Alumna : Rosa Lis Dri.
L.U.: 33960943/0
Comisión de Trabajos Prácticos : 2
Primer Cuatrimestre 2014
“La escuela: vicisitudes de una máquina vieja”
Resumen / Abstract
Este trabajo pretende hacer un acercamiento crítico respecto a la relación entre
la institución escolar (la máquina vieja) y la figura del alumno. A partir de las
formulaciones de distintos autores, se logra hacer una articulación sobre esta
problemática, caracterizando el modelo industrialista de la educación -que
actualmente se sigue sosteniendo-, y la disonancia de éste con la singularidad
psíquica del educando.
Palabras claves: Dispositivo escolar- Singularidad- Educando- Conocimiento
Introducción
En el siguiente trabajo se procurará pensar y problematizar algunos aspectos
de la educación actual. Respecto a este tema, entre las múltiples perspectivas
que se prestan para el análisis, se puede puntualizar que el dispositivo escolar
muestra signos de agotamiento, un dispositivo escolar basado en un modelo
tradicional (Taylorista-Fordista) que comienza a revelar fisuras. Por otro lado, la
figura del “alumno” que siendo un “nativo digital” en esta era de la
hiperconectividad, explicita más aun la disonancia con la institución educativa.
Dado este defasaje entre el par escuela-alumno y viceversa, surge como
interrogante:
¿El modelo industrialista de educación actúa como límite en la construcción de
conocimiento?
Se tomará como eje, el texto de Benvenaste (1999), sobre educación, a la vez
se tomaran puntos de referencia y articulación con el texto de Abramovich
(2012) y unos fragmentos inéditos del proyecto de tesis doctoral de Neri
(2012).
Objetivos
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Lograr alcanzar un análisis sobre los problemas del sistema educativo actual,
como signos de su quiebra, en relación a la desadaptación de éste con la
singularidad psíquica del educando.
Desarrollo
El sistema educativo actual se caracteriza por continuar basándose en un
modelo acorde a la sociedad industrial (Taylorista-Fordista). Éste se
caracterizaba tanto por la producción en serie, la división del trabajo, como por
el disciplinamiento de los cuerpos. El tiempo y el espacio estaban medidos y
controlados. La institución educativa se ve reflejada por la caracterización de
esta estructura. “La escuela presenta un programa anual, un tiempo uniforme,
una división en áreas y un control de calidad. Elementos pertenecientes a
cualquier organización industrial.” (Neri, 2012, p. 3). En la escuela, todo tiene
un horario, un lugar y un cómo hacerse. La escuela es la poseedora del saber,
es el banco de conocimientos y los alumnos (los carentes y privados de luz),
son la “tabula rasa” en donde se depositan los contenidos.
Algo muy interesante plantea Benvenaste (1999) diciendo que la institución
educativa no tiene en cuenta la singularidad psíquica, lo propio y distintivo de
cada educando en el proceso de su formación. Y esta incapacidad de no tener
en cuenta la singularidad, lleva a la invisibilización de la subjetividad. Es en la
expresión de todas las singularidades que puede conocerse la subjetividad
histórica, lo propio de una época, en este caso, las particulares maneras de
aprender que tienen las personas a lo largo del tiempo.
Repitiendo una y otra vez ciertas prácticas estandarizadas como por ejemplo,
que los alumnos se sienten en hileras, que la atención de los mismos se
concentre unidireccionalmente hacia la figura del docente, la implementación
de la evaluación como técnica eminentemente memorística, la calificación
numérica del alumno, la descontextualización de los contenidos, etc., sostienen
un dispositivo escolar que mas que posibilitar y potenciar la creatividad,
flexibilidad, el juicio crítico y las aptitudes propias de las personas, continua
reproduciendo un modo de educar para normalizar y homogeneizar a los
sujetos. (Abramovich, 2012). Es decir, el formato de la escuela no procura en
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producir experiencia, encuentro, construcción colectiva de conocimiento, tan
solo se esfuerza por controlar y predecir, replicar, repetir y transferir.
Signos disonantes entre este par escuela-alumno, es la continua aparición y,
cada vez más, de patologías ligadas al dispositivo escolar. El problema está en
que es el propio sistema educativo el que no se cuestiona si quizás lo
patológico o disfuncional es el mismo dispositivo escolar que no adapta sus
tiempos y esquemas a las necesidades singulares de cada aprendiente
contemporáneo. Es como menciona Neri (2012, p. 4): “En muchas ocasiones
los denominados trastornos del aprendizaje no son más que manifestaciones
de la singularidad del alumno y de su tiempo de comprensión ante una tarea. Si
consideramos el aprendizaje como un proceso, éste no se limita al tiempo
uniforme de la cursada y los exámenes que se suceden en una cronología no
siempre coinciden con los tiempos singulares.” Es indispensable tener presente
la idea de aprendizaje como un proceso subjetivo que se construye
colectivamente y no en soledad, como así también los modos de aprender
ligados a los “cerebros” del hoy.
Es posible plantear este aprendizaje en un contexto que intente superar el
modelo educativo tradicional taylorista-fordista, ¿Cómo hacerlo? Promoviendo
un sujeto del conocimiento. Para Benvenaste (1999, p. 15), “el desarrollo del
educando como sujeto del conocimiento, dicho desde nuestra concepción
"sujeto de la actitud científica", implica un proceso integral que resignifica la
dimensión enseñanza-aprendizaje.” Para esto es importante destacar lo
fundamental de los aspectos psico-epistémicos, que son las condiciones
subjetivas que permiten la constitución de la actitud científica. La noción de
estrategia de pensamiento es la clave para poder entender la singularidad
psíquica del educando. Esta estrategia, es la forma de “razonar” que tiene un
sujeto condicionada por “la significación que le suscita cierto tema y los medios
empleados para su acceso, así como por el contexto intersubjetivo en que se
halla inserto.” (Benvenaste, 1999, p. 16). La construcción de conocimiento se
produce en contexto y en el encuentro intersubjetivo. Esto es posible en la
medida que el dispositivo escolar promueva los espacios necesarios para
vivenciar experiencias de construcción y potenciación de capacidades
compartidas. Es en lo social, en lo grupal, en el encuentro con los otros donde
se produce el conocimiento. En estos términos, un sujeto del conocimiento, es
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aquel que puede hacerse responsable también de su propio proceso de
aprender, esto implica, preguntarse, pensar críticamente y contrastar ideas y la
escuela, como ese espacio donde se posibilitan y potencian estas capacidades.
Quizás un modo de plantearlo esta en irrumpir la estructura lineal y uniforme
del aula, por ejemplo, cuestionando la disposición de ese espacio desde el -
sentados todos en hilera mirando al frente, al pizarrón, callados y escuchando a
la docente-, para pasar a sentarse en grupo habilitando un encuentro de
producción de conocimientos colectivo.
Esta disponibilidad del espacio es la que potencia la creatividad, la curiosidad,
la diversidad. Una situación mucho más cercana a la vida extra-escolar. Tal
vez, en definitiva, a la vida en general.
Conclusiones
Dado lo analizado, tal vez se haga imperioso comenzar, respecto a la crisis del
sistema educativo, no formulando preguntas sobre los problemas que éste
presenta, sino cuestionar de base todo el aparato de la educación formal. Esto
implica modificar el ángulo desde el cual percibir y pensar lo que el sistema
educativo nos ofrece como disfuncional. Por ejemplo, en lugar de plantear,
¿Qué estrategias usar para que los alumnos presten atención?, más bien se
debería cuestionar, ¿Cómo funciona la atención hoy en los alumnos y qué
grado de adaptación tiene el dispositivo áulico a dicha particularidad?
Tal vez esta segunda pregunta, la más movilizadora y con potencial
reestructurante, no se formula porque de hacerlo algo tendría que cambiar.
Bibliografía
Abramovich, E. (2012). Un borrador de apunte sobre la educación
“Normal”. Recuperado el 18 de Junio de 2014, de casilla de correo
electrónico.
Benbenaste, N, (1999) Modelo educativo para el desarrollo de la
democracia. Para que el desarrollo de la democracia pueda incidir sobre
5
el desarrollo del mercado. Educación del mercado a la democracia. La
posibilidad histórica de la Alianza. Buenos Aires: Eudeba.
Neri, C. (2012). Fragmentos inéditos del proyecto de tesis doctoral de
Carlos Neri. Ficha de cátedra. Recuperado el 18 de Junio de 2014, de
https://www.dropbox.com/s/6kdy4g0o5q4lf7a/RESUMEN_EDUCA.pdf
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