boletin 28 de abril 2013

4
Domingo 28 de Abril 2013-18 DOS Y MEDIA Al predicador inglés Charles Spurgeon le preguntó uno de sus amigos: "¿Cuántas personas se han entregado al Señor en tu último culto?" - "Dos y media", era la respuesta. El amigo le miró confundido, después dijo: "Ah, comprendo. ¿Quieres decir dos adultos y un niño?" - "No", respondió Spurgeon, "dos niños y un adulto. Los niños todavía tienen toda su vida por delante. Ellos entregaron su vida completa al Señor. Pero el adulto ya ha vivido la mitad de su vida sin el Señor. A él le quedaba solamente media vida para entregar." El niño que se convierte, podrá hacer todas las decisiones importantes de su vida con la ayuda del Señor: quiénes serán sus amigos, qué carrera estudiar, qué creer y qué no creer, con quién casarse, etc. - Los adultos, en cambio, ya se acostumbraron tanto a un estilo de vida sin el Señor, que raras veces llegan a la madurez espiritual. Spurgeon sabia muy bien esto. Aun siendo un niño muy pequeñito, a la edad que muchos otros niños se esforzaban por deletrear palabras de una sola sílaba, él ya leía con fluidez su más preciado tesoro: El libro “ El progreso del peregrino”. A esa corta edad, acostado en el suelo frente a la chimenea, leía a la luz de una débil vela. Durante los años que pasó con sus abuelos, también leyó con sumo interés, a esa tierna edad, El Libro de los Mártires de Fox. Devoró también Robinson Crusoe de Daniel Defoe, un libro puritano que pocos entendieron. Se convirtió en un ratón de biblioteca, estudiando las pesadas obras de los puritanos. Definitivamente era un niño precoz, al menos en lo relativo a la lectura. Spurgeon comentaba: “cuando era sólo un niño, yo podía discutir enredados problemas de teología controversial.” Muy probablemente Spurgeon aprendió muchas cosas acerca de la predicación viendo a su abuelo cuando preparaba los sermones. El abuelo siempre preparaba los sermones que predicaría el domingo sentado en la sala. Charles lo acompañaba invariablemente en esa habitación. El abuelo tenía el propósito de mantenerlo muy quieto allí. Pero, ¿cómo podrían mantenerlo tranquilo? James pensó haber encontrado una solución razonable. Lo ponía a leer una vieja copia de La Revista Evangélica. Sin embargo, esta actividad no tenía ningún efecto sedativo para Spurgeon. Incluso la inevitable foto de un misionero en algún remoto lugar, no atraía su atención. Entonces el abuelo encontró una forma efectiva de tranquilizar al niño. El abuelo le advirtió que no podría predicar bien si no podía preparar el sermón por causa del desasosiego del niño. ¡Funcionó! Funcionó porque el niño comenzó a preguntarse qué le pasaría a la gente que no conociera el camino al cielo. A Spurgeon le agradaba que le permitieran leer la Biblia cuando la familia se reunía para la oración. Gozaba plenamente esas horas. En una ocasión, mientras leía un pasaje de la Escritura del Libro de Apocalipsis que se refería al “pozo del abismo,” (Apocalipsis, capítulo 9), volteó a ver a su abuelo y le preguntó qué significaba eso. James no prestó atención a su pregunta, y le respondió: “vamos, vamos, niño, continúa.” Charles no iba a dejar que se le disuadiera con tanta ligereza. Cada día, cuando llegaba el momento de leer la Escritura, iba al mismo capítulo, Apocalipsis 9, y leía el mismo versículo que hacía mención del “pozo del abismo.” Y al leerlo hacía la misma pregunta: “¿qué significa eso? Pero el abuelo continuaba haciendo a un lado la pregunta. Charles trató de encontrar respuestas en su pequeña mente acerca de qué le pasaría a la gente que caía en un pozo que no tenía fondo. ¿Qué pasaría cuando llegaran al otro extremo del pozo? Continuamente hacía la misma pregunta a la hora de la adoración familiar. Finalmente el abuelo cedió, se rindió y respondió la pregunta de una manera que aterrorizó a Charles. El propio Charles comentó posteriormente: “Puedo recordar el horror que se apoderó de mi mente cuando mi abuelo me comentó lo que significaba para él, el ‘pozo del abismo.’ Hay un pozo profundo, y el alma cae y cae. ¡Oh, cuán rápidamente está cayendo! El último rayo de luz en la boca del pozo ha desaparecido, y el alma cae, y cae, y cae y cae. Y continúa cayendo más y más y más y más, por mil años. ¿Acaso ya se está acercando al fondo? ¿Va a detenerse algún día? No, no, no, el clamor responde: es un ‘pozo del abismo.’ Ya ha estado cayendo un millón de años. ¿Acaso está cerca del fondo? No, para nada. Es el ‘pozo del abismo.’ Se cae, y se cae, y se cae y el alma continúa cayendo perpetuamente a una profundidad cada vez mayor, cayendo eternamente en el ‘pozo del abismo’, siempre, siempre, siempre, pues es el pozo que no tiene fondo. Es una aflicción sin término, sin esperanza de que concluya alguna vez.” Estas experiencias formaron el corazón de Charles y lo llevaron a convertirse en “El Príncipe de los predicadores”. ¿Cómo contribuimos nosotros a formar las mentes y los corazones de los niños hoy en día?

Upload: sergio-paz

Post on 10-Mar-2016

217 views

Category:

Documents


3 download

DESCRIPTION

Boletin de la Iglesia Bautists Cristo Viene del 28 de Abril del 2013

TRANSCRIPT

Page 1: Boletin 28 de Abril 2013

Organizada el 24 de Julio de 1964 Registro SEGOB N° SGAR/13.661/97

Pampas 34, Col. Moderna Benito Juárez, C.P. 03510 México, DF Tel. 55907328 Pastor: Max Zuriel Vega Cel: 04455 228880787 [email protected]

IGLESIA BAUTISTA CRISTO VIENE DE MÉXICO A.R.

Domingo 28 de Abril 2013-18

JUEVES 19:00 Culto Oración DOMINGO 10:00 Culto Adoración 12:00 Esc. Dominical 13:00 Unión Jovenes 17:00 Culto Alabanza 17:00 Dpto. Infantil

/IglesiaBautistaCristoViene

DOS Y MEDIA Al predicador inglés Charles Spurgeon le preguntó uno de sus amigos: "¿Cuántas personas se han entregado al Señor en tu último culto?" - "Dos y media", era la respuesta. El amigo le miró confundido, después dijo: "Ah, comprendo. ¿Quieres decir dos adultos y un niño?" - "No", respondió Spurgeon, "dos niños y un adulto. Los niños todavía tienen toda su vida por delante. Ellos entregaron su vida completa al Señor. Pero el adulto ya ha vivido la mitad de su vida sin el Señor. A él le quedaba solamente media vida para entregar." El niño que se convierte, podrá hacer todas las decisiones importantes de su vida con la ayuda del Señor: quiénes serán sus amigos, qué carrera estudiar, qué creer y qué no creer, con quién casarse, etc. - Los adultos, en cambio, ya se acostumbraron tanto a un estilo de vida sin el Señor, que raras veces llegan a la madurez espiritual.

Spurgeon sabia muy bien esto. Aun siendo un niño muy pequeñito, a la edad que muchos otros niños se esforzaban por deletrear palabras de una sola sílaba, él ya leía con fluidez su más preciado tesoro: El libro “ El progreso del peregrino”. A esa corta edad, acostado en el suelo frente a la chimenea, leía a la luz de una débil vela. Durante los años que pasó con sus abuelos, también leyó con sumo interés, a esa tierna edad, El Libro de los Mártires de Fox. Devoró también Robinson Crusoe de Daniel Defoe, un libro puritano que pocos entendieron. Se convirtió en un ratón de biblioteca, estudiando las pesadas obras de los puritanos. Definitivamente era un niño precoz, al menos en lo relativo a la lectura. Spurgeon comentaba: “cuando era sólo un niño, yo podía discutir enredados problemas de teología controversial.”

Muy probablemente Spurgeon aprendió muchas cosas acerca de la predicación viendo a su abuelo cuando preparaba los sermones. El abuelo siempre preparaba los sermones que predicaría el domingo sentado en la sala. Charles lo acompañaba invariablemente en esa habitación. El abuelo tenía el propósito de mantenerlo muy quieto allí. Pero, ¿cómo podrían mantenerlo tranquilo? James pensó haber encontrado una solución razonable. Lo ponía a leer una vieja copia de La Revista Evangélica. Sin embargo, esta actividad no tenía ningún efecto sedativo para Spurgeon. Incluso la inevitable foto de un misionero en algún remoto lugar, no atraía su atención. Entonces el abuelo encontró una forma efectiva de tranquilizar al niño. El abuelo le advirtió que no podría predicar bien si no podía preparar el sermón por causa del desasosiego del niño. ¡Funcionó! Funcionó porque el niño comenzó a preguntarse qué le pasaría a la gente que no conociera el camino al cielo.

A Spurgeon le agradaba que le permitieran leer la Biblia cuando la familia se reunía para la oración. Gozaba plenamente esas horas. En una ocasión, mientras leía un pasaje de la Escritura del Libro de Apocalipsis que se refería al “pozo del abismo,” (Apocalipsis, capítulo 9), volteó a ver a su abuelo y le preguntó qué significaba eso. James no prestó atención a su pregunta, y le respondió: “vamos, vamos, niño, continúa.” Charles no iba a dejar que se le disuadiera con tanta ligereza. Cada día, cuando llegaba el momento de leer la Escritura, iba al mismo capítulo, Apocalipsis 9, y leía el mismo versículo que hacía mención del “pozo del abismo.” Y al leerlo hacía la misma pregunta: “¿qué significa eso? Pero el abuelo continuaba haciendo a un lado la pregunta. Charles trató de encontrar respuestas en su pequeña mente acerca de qué le pasaría a la gente que caía en un pozo que no tenía fondo. ¿Qué pasaría cuando llegaran al otro extremo del pozo? Continuamente hacía la misma pregunta a la hora de la adoración familiar. Finalmente el abuelo cedió, se rindió y respondió la pregunta de una manera que aterrorizó a Charles. El propio Charles comentó posteriormente: “Puedo recordar el horror que se apoderó de mi mente cuando mi abuelo me comentó lo que significaba para él, el ‘pozo del abismo.’ Hay un pozo profundo, y el alma cae y cae. ¡Oh, cuán rápidamente está cayendo! El último rayo de luz en la boca del pozo ha desaparecido, y el alma cae, y cae, y cae y cae. Y continúa cayendo más y más y más y más, por mil años. ¿Acaso ya se está acercando al fondo? ¿Va a detenerse algún día? No, no, no, el clamor responde: es un ‘pozo del abismo.’ Ya ha estado cayendo un millón de años. ¿Acaso está cerca del fondo? No, para nada. Es el ‘pozo del abismo.’ Se cae, y se cae, y se cae y el alma continúa cayendo perpetuamente a una profundidad cada vez mayor, cayendo eternamente en el ‘pozo del abismo’, siempre, siempre, siempre, pues es el pozo que no tiene fondo. Es una aflicción sin término, sin esperanza de que concluya alguna vez.” Estas experiencias formaron el corazón de Charles y lo llevaron a convertirse en “El Príncipe de los predicadores”.

¿Cómo contribuimos nosotros a formar las mentes y los corazones de los niños hoy en día?

¿Cómo saber que Dios obra para nuestro bien, en Su Amor?

(1era Parte) Dios puede obrar a favor de su pueblo por medio de los peores males. (Rom.8:28) El pecado nunca puede hacerle bien a nadie, pero en Su Providencia Dios puede hacer que un evento en el cual el pecado está presente traiga bien a su pueblo. Hay personas malas e incrédulas que logran con creces los antojos de su corazón. (Sal.73:7) Por lo que no podemos juzgar Su amor para con nosotros por el número de bendiciones que recibimos. La manera en que suceden y el efecto que tienen sobre nosotros es lo que nos indicará si son enviadas por Él y si son para nuestro bienestar: 1. Problemas y Tristeza. Podemos saber que son bendiciones cuando: a. Llegan en el tiempo correcto Para guardarnos del pecado o para restaurarnos de cuando hemos caído. Si es necesario, tengáis que ser afligidos... (1 Ped.1:6). b. Idóneas para nuestro Carácter. Nos quita el confort el cual nos ocupa mucho tiempo, y nos impide amar y deleitar nuestras almas en Dios. Como un médico mide exactamente la fuerza de la medicina para el enfermo. Con medida la castigarás en sus vástagos... de esta manera pues será purgada la iniquidad de Jacob. (Isa.27:8-9) c. Vuelven nuestros corazones contra el pecado y no contra Dios. Cuando los hombres malvados están en problemas, se vuelven contra Dios. …se quemaron con el grande calor, y blasfemaron el nombre de Dios (Apo.16:9). Pero los hombres buenos se condenan a sí mismos y dan gloria a Dios (Dan.9:7). d. Limpian el corazón, nos Purifican, y nos Humillan. Después de que han pasado a través de algún problema fuerte, ya no ven más atractivo ni encuentran más sabor en el mundo. Tristemente, estos buenos efectos no duran y esto es el porque Dios tiene que disciplinar a su pueblo una y otra vez. e. Incrementan nuestro amor a Dios. Si su gracia está en nuestros corazones, nos aferraremos Él cuando estemos en grandes problemas. Nos comportaremos como el salmista: Todo esto nos ha venido, y no nos hemos olvidado… Sal.44:17-19. f. Nos enseña el Mal del Pecado, la vanidad de la vida. Bienaventurado el hombre a quien tú, Jehová castigares, y en tu ley lo instruyeres. (Sal.94:12) El creyente nunca ve las cosas en forma más clara que cuando está bajo la disciplina de Dios. 2. Veamos los eventos que nos traen gozo y felicidad. Las circunstancias cómodas y felices no siempre significan que Dios ha dado esa bendición. El éxito o prosperidad que hacen que los hombres olviden a Dios, o que despiertan los deseos de la carne o el orgullo no pueden ser un medio de bendición. Pero el bienestar y las misericordias que nos humillan ante Dios comunicando un sentido de indignidad son sin lugar a dudas un medio de bendición. Jacob dijo: Menor soy que todas las misericordias y que toda la verdad que has usado para con tu siervo. Gen.32:10. Esas misericordias harán que deseemos alejarnos del pecado y nos darán un amor más grande hacia Dios, pero nunca darán satisfacción en sí mismas. Si somos capacitados para servir a Dios con más disposición a causa de nuestras bendiciones y si nos preocupamos más por las necesidades de otros, esa es una señal de que la bendición de Dios está en nuestro bienestar. Además, es cierto que si hemos obtenido alguna cosa buena como una respuesta a nuestras oraciones, entonces nos ha sido enviada del amor de Dios.

Page 2: Boletin 28 de Abril 2013

CALENDARIO DE LECTURAS Y ORACIÓN

Lunes 29

Sara Olay Dios siga cuidando a Támara. Gracias por la vida de

Mila. Dios sustente a toda la familia.

Cantad a Jehová, bendecid su nombre; Anunciad de día en día su salvación. (Salmo 96:2 RVR60)

Marcos 10:1-16, 2 Cor. 1:12-24 Salmo 96, 1 Samuel 3-5

Martes 30

Niños de la Iglesia Gracias a Dios por la vida de cada uno de ellos, que podamos educarlos en el conocimiento de Dios y que

no se aparten de su camino.

Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. (Marcos 10:14 RVR60)

Marcos 10:17-34, 2 Cor. 2 Salmo 97, 1 Samuel 6-8

Miércoles 1

Xóchitl Quezada Gracias a Dios por su cuidado en caídas que ha sufrido, porque dio salud a Cesar Herrera (sobrino). Provea un

trabajo para su hijo Jaime.

Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. (2 Cor. 3:17 RVR60)

Marcos 10:35-52, 2 Cor. 3 Salmo 98, 1 Samuel 9-10

Jueves 2

Sonia Del Angel Gracias a Dios por que la bendijo en su embarazo y la cuidó. Por la vida de Mizraim le dé sabiduría para

educarlo.

Y Saúl dijo: No morirá hoy ninguno, porque hoy Jehová ha dado salvación en Israel. (1 Samuel 11:13 RVR60)

Marcos 11:1-11, 2 Cor. 4 Salmo 99, 1 Samuel 11-13

Viernes 3

Hector Juárez Gracias a Dios por que ha dado salud a Yarenzy y sabiduría a Jimena en su escuela. Que Dios los siga bendiciendo.

Reconoced que Jehová es Dios; El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.

(Salmo 100:3 RVR60)

Marcos 11:12-26, 2 Cor. 5 Salmo 100, 1 Samuel 14

Sábado 4

Carmen Sarmiento Por la vida de su hermano, que se encuentra convaleciente, Dios ponga los medios para que sea trasladado y

dé fortaleza a su familia.

No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?

(2 Cor. 6:14 RVR60)

Marcos 11:27-33, 2 Cor. 6 Salmo 101, 1 Samuel 15-16

Oremos todos los días a las 8 pm: Lunes: Tamara, hija de Sara Olay

Martes: Paz Mundial (Corea del Norte, Venezuela, E.U.).

Miércoles: Escuela Bíblica de Vacaciones Jueves: Gobernantes de México.

Viernes: Educación en México (maestros de provincia y por la UNAM)

Sábado: Por la reunión de liderazgo del 18 de mayo.

5 Mayo Matutino

Alejandro Moreno Vespertino

Isaac Lescas

HOY Matutino

Niños de la IBCV Vespertino

Ricardo Rodríguez

MINISTERIO DE ORACIÓN

DIRECCIÓN DE CULTO

12 Mayo - Matutino: Jóvenes Vespertino: Ruth Hernández

Los invitamos al Culto Matutino de

oración el próximo Domingo a las 8:00 No falte.

CULTO DE ORACIÓN

RECIÉN LLEGADOS

Damos gracias a Dios por que bendijo a Sara Olay y a Sonia Del

Ángel con la llegada de sus bebés.

TEXTO LEMA ANIVERSARIO

Se invita a todos los hermanos que traigan una propuesta de versículo

lema para el XLIX y L Aniversarios de nuestra iglesia.

Mila Mizraim

CENA DEL SEÑOR

El próximo domingo por la tarde obedeceremos al Señor en esta

ordenanza. Asista.

Page 3: Boletin 28 de Abril 2013

CALENDARIO DE LECTURAS Y ORACIÓN

Lunes 29

Sara Olay Dios siga cuidando a Támara. Gracias por la vida de

Mila. Dios sustente a toda la familia.

Cantad a Jehová, bendecid su nombre; Anunciad de día en día su salvación. (Salmo 96:2 RVR60)

Marcos 10:1-16, 2 Cor. 1:12-24 Salmo 96, 1 Samuel 3-5

Martes 30

Niños de la Iglesia Gracias a Dios por la vida de cada uno de ellos, que podamos educarlos en el conocimiento de Dios y que

no se aparten de su camino.

Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. (Marcos 10:14 RVR60)

Marcos 10:17-34, 2 Cor. 2 Salmo 97, 1 Samuel 6-8

Miércoles 1

Xóchitl Quezada Gracias a Dios por su cuidado en caídas que ha sufrido, porque dio salud a Cesar Herrera (sobrino). Provea un

trabajo para su hijo Jaime.

Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. (2 Cor. 3:17 RVR60)

Marcos 10:35-52, 2 Cor. 3 Salmo 98, 1 Samuel 9-10

Jueves 2

Sonia Del Angel Gracias a Dios por que la bendijo en su embarazo y la cuidó. Por la vida de Mizraim le dé sabiduría para

educarlo.

Y Saúl dijo: No morirá hoy ninguno, porque hoy Jehová ha dado salvación en Israel. (1 Samuel 11:13 RVR60)

Marcos 11:1-11, 2 Cor. 4 Salmo 99, 1 Samuel 11-13

Viernes 3

Hector Juárez Gracias a Dios por que ha dado salud a Yarenzy y sabiduría a Jimena en su escuela. Que Dios los siga bendiciendo.

Reconoced que Jehová es Dios; El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.

(Salmo 100:3 RVR60)

Marcos 11:12-26, 2 Cor. 5 Salmo 100, 1 Samuel 14

Sábado 4

Carmen Sarmiento Por la vida de su hermano, que se encuentra convaleciente, Dios ponga los medios para que sea trasladado y

dé fortaleza a su familia.

No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?

(2 Cor. 6:14 RVR60)

Marcos 11:27-33, 2 Cor. 6 Salmo 101, 1 Samuel 15-16

Oremos todos los días a las 8 pm: Lunes: Tamara, hija de Sara Olay

Martes: Paz Mundial (Corea del Norte, Venezuela, E.U.).

Miércoles: Escuela Bíblica de Vacaciones Jueves: Gobernantes de México.

Viernes: Educación en México (maestros de provincia y por la UNAM)

Sábado: Por la reunión de liderazgo del 18 de mayo.

5 Mayo Matutino

Alejandro Moreno Vespertino

Isaac Lescas

HOY Matutino

Niños de la IBCV Vespertino

Ricardo Rodríguez

MINISTERIO DE ORACIÓN

DIRECCIÓN DE CULTO

12 Mayo - Matutino: Jóvenes Vespertino: Ruth Hernández

Los invitamos al Culto Matutino de

oración el próximo Domingo a las 8:00 No falte.

CULTO DE ORACIÓN

RECIÉN LLEGADOS

Damos gracias a Dios por que bendijo a Sara Olay y a Sonia Del

Ángel con la llegada de sus bebés.

TEXTO LEMA ANIVERSARIO

Se invita a todos los hermanos que traigan una propuesta de versículo

lema para el XLIX y L Aniversarios de nuestra iglesia.

Mila Mizraim

CENA DEL SEÑOR

El próximo domingo por la tarde obedeceremos al Señor en esta

ordenanza. Asista.

Page 4: Boletin 28 de Abril 2013

Organizada el 24 de Julio de 1964 Registro SEGOB N° SGAR/13.661/97

Pampas 34, Col. Moderna Benito Juárez, C.P. 03510 México, DF Tel. 55907328 Pastor: Max Zuriel Vega Cel: 04455 228880787 [email protected]

IGLESIA BAUTISTA CRISTO VIENE DE MÉXICO A.R.

Domingo 28 de Abril 2013-18

JUEVES 19:00 Culto Oración DOMINGO 10:00 Culto Adoración 12:00 Esc. Dominical 13:00 Unión Jovenes 17:00 Culto Alabanza 17:00 Dpto. Infantil

/IglesiaBautistaCristoViene

DOS Y MEDIA Al predicador inglés Charles Spurgeon le preguntó uno de sus amigos: "¿Cuántas personas se han entregado al Señor en tu último culto?" - "Dos y media", era la respuesta. El amigo le miró confundido, después dijo: "Ah, comprendo. ¿Quieres decir dos adultos y un niño?" - "No", respondió Spurgeon, "dos niños y un adulto. Los niños todavía tienen toda su vida por delante. Ellos entregaron su vida completa al Señor. Pero el adulto ya ha vivido la mitad de su vida sin el Señor. A él le quedaba solamente media vida para entregar." El niño que se convierte, podrá hacer todas las decisiones importantes de su vida con la ayuda del Señor: quiénes serán sus amigos, qué carrera estudiar, qué creer y qué no creer, con quién casarse, etc. - Los adultos, en cambio, ya se acostumbraron tanto a un estilo de vida sin el Señor, que raras veces llegan a la madurez espiritual.

Spurgeon sabia muy bien esto. Aun siendo un niño muy pequeñito, a la edad que muchos otros niños se esforzaban por deletrear palabras de una sola sílaba, él ya leía con fluidez su más preciado tesoro: El libro “ El progreso del peregrino”. A esa corta edad, acostado en el suelo frente a la chimenea, leía a la luz de una débil vela. Durante los años que pasó con sus abuelos, también leyó con sumo interés, a esa tierna edad, El Libro de los Mártires de Fox. Devoró también Robinson Crusoe de Daniel Defoe, un libro puritano que pocos entendieron. Se convirtió en un ratón de biblioteca, estudiando las pesadas obras de los puritanos. Definitivamente era un niño precoz, al menos en lo relativo a la lectura. Spurgeon comentaba: “cuando era sólo un niño, yo podía discutir enredados problemas de teología controversial.”

Muy probablemente Spurgeon aprendió muchas cosas acerca de la predicación viendo a su abuelo cuando preparaba los sermones. El abuelo siempre preparaba los sermones que predicaría el domingo sentado en la sala. Charles lo acompañaba invariablemente en esa habitación. El abuelo tenía el propósito de mantenerlo muy quieto allí. Pero, ¿cómo podrían mantenerlo tranquilo? James pensó haber encontrado una solución razonable. Lo ponía a leer una vieja copia de La Revista Evangélica. Sin embargo, esta actividad no tenía ningún efecto sedativo para Spurgeon. Incluso la inevitable foto de un misionero en algún remoto lugar, no atraía su atención. Entonces el abuelo encontró una forma efectiva de tranquilizar al niño. El abuelo le advirtió que no podría predicar bien si no podía preparar el sermón por causa del desasosiego del niño. ¡Funcionó! Funcionó porque el niño comenzó a preguntarse qué le pasaría a la gente que no conociera el camino al cielo.

A Spurgeon le agradaba que le permitieran leer la Biblia cuando la familia se reunía para la oración. Gozaba plenamente esas horas. En una ocasión, mientras leía un pasaje de la Escritura del Libro de Apocalipsis que se refería al “pozo del abismo,” (Apocalipsis, capítulo 9), volteó a ver a su abuelo y le preguntó qué significaba eso. James no prestó atención a su pregunta, y le respondió: “vamos, vamos, niño, continúa.” Charles no iba a dejar que se le disuadiera con tanta ligereza. Cada día, cuando llegaba el momento de leer la Escritura, iba al mismo capítulo, Apocalipsis 9, y leía el mismo versículo que hacía mención del “pozo del abismo.” Y al leerlo hacía la misma pregunta: “¿qué significa eso? Pero el abuelo continuaba haciendo a un lado la pregunta. Charles trató de encontrar respuestas en su pequeña mente acerca de qué le pasaría a la gente que caía en un pozo que no tenía fondo. ¿Qué pasaría cuando llegaran al otro extremo del pozo? Continuamente hacía la misma pregunta a la hora de la adoración familiar. Finalmente el abuelo cedió, se rindió y respondió la pregunta de una manera que aterrorizó a Charles. El propio Charles comentó posteriormente: “Puedo recordar el horror que se apoderó de mi mente cuando mi abuelo me comentó lo que significaba para él, el ‘pozo del abismo.’ Hay un pozo profundo, y el alma cae y cae. ¡Oh, cuán rápidamente está cayendo! El último rayo de luz en la boca del pozo ha desaparecido, y el alma cae, y cae, y cae y cae. Y continúa cayendo más y más y más y más, por mil años. ¿Acaso ya se está acercando al fondo? ¿Va a detenerse algún día? No, no, no, el clamor responde: es un ‘pozo del abismo.’ Ya ha estado cayendo un millón de años. ¿Acaso está cerca del fondo? No, para nada. Es el ‘pozo del abismo.’ Se cae, y se cae, y se cae y el alma continúa cayendo perpetuamente a una profundidad cada vez mayor, cayendo eternamente en el ‘pozo del abismo’, siempre, siempre, siempre, pues es el pozo que no tiene fondo. Es una aflicción sin término, sin esperanza de que concluya alguna vez.” Estas experiencias formaron el corazón de Charles y lo llevaron a convertirse en “El Príncipe de los predicadores”.

¿Cómo contribuimos nosotros a formar las mentes y los corazones de los niños hoy en día?

¿Cómo saber que Dios obra para nuestro bien, en Su Amor?

(1era Parte) Dios puede obrar a favor de su pueblo por medio de los peores males. (Rom.8:28) El pecado nunca puede hacerle bien a nadie, pero en Su Providencia Dios puede hacer que un evento en el cual el pecado está presente traiga bien a su pueblo. Hay personas malas e incrédulas que logran con creces los antojos de su corazón. (Sal.73:7) Por lo que no podemos juzgar Su amor para con nosotros por el número de bendiciones que recibimos. La manera en que suceden y el efecto que tienen sobre nosotros es lo que nos indicará si son enviadas por Él y si son para nuestro bienestar: 1. Problemas y Tristeza. Podemos saber que son bendiciones cuando: a. Llegan en el tiempo correcto Para guardarnos del pecado o para restaurarnos de cuando hemos caído. Si es necesario, tengáis que ser afligidos... (1 Ped.1:6). b. Idóneas para nuestro Carácter. Nos quita el confort el cual nos ocupa mucho tiempo, y nos impide amar y deleitar nuestras almas en Dios. Como un médico mide exactamente la fuerza de la medicina para el enfermo. Con medida la castigarás en sus vástagos... de esta manera pues será purgada la iniquidad de Jacob. (Isa.27:8-9) c. Vuelven nuestros corazones contra el pecado y no contra Dios. Cuando los hombres malvados están en problemas, se vuelven contra Dios. …se quemaron con el grande calor, y blasfemaron el nombre de Dios (Apo.16:9). Pero los hombres buenos se condenan a sí mismos y dan gloria a Dios (Dan.9:7). d. Limpian el corazón, nos Purifican, y nos Humillan. Después de que han pasado a través de algún problema fuerte, ya no ven más atractivo ni encuentran más sabor en el mundo. Tristemente, estos buenos efectos no duran y esto es el porque Dios tiene que disciplinar a su pueblo una y otra vez. e. Incrementan nuestro amor a Dios. Si su gracia está en nuestros corazones, nos aferraremos Él cuando estemos en grandes problemas. Nos comportaremos como el salmista: Todo esto nos ha venido, y no nos hemos olvidado… Sal.44:17-19. f. Nos enseña el Mal del Pecado, la vanidad de la vida. Bienaventurado el hombre a quien tú, Jehová castigares, y en tu ley lo instruyeres. (Sal.94:12) El creyente nunca ve las cosas en forma más clara que cuando está bajo la disciplina de Dios. 2. Veamos los eventos que nos traen gozo y felicidad. Las circunstancias cómodas y felices no siempre significan que Dios ha dado esa bendición. El éxito o prosperidad que hacen que los hombres olviden a Dios, o que despiertan los deseos de la carne o el orgullo no pueden ser un medio de bendición. Pero el bienestar y las misericordias que nos humillan ante Dios comunicando un sentido de indignidad son sin lugar a dudas un medio de bendición. Jacob dijo: Menor soy que todas las misericordias y que toda la verdad que has usado para con tu siervo. Gen.32:10. Esas misericordias harán que deseemos alejarnos del pecado y nos darán un amor más grande hacia Dios, pero nunca darán satisfacción en sí mismas. Si somos capacitados para servir a Dios con más disposición a causa de nuestras bendiciones y si nos preocupamos más por las necesidades de otros, esa es una señal de que la bendición de Dios está en nuestro bienestar. Además, es cierto que si hemos obtenido alguna cosa buena como una respuesta a nuestras oraciones, entonces nos ha sido enviada del amor de Dios.