atreviéndonos nro 5 (mayo-junio 2015)
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Publicación del Centro Cultural y Biblioteca Popular Casa de Pueblo Emilio Lamarca 2502 - Villa del Parque - Ciudad de Buenos Aires - ArgentinaTRANSCRIPT
Clases y Talleres a soñar un mundo mejor y a luchar por él
ATREVIÉNDONOS
Publicación del Centro Cultural y Biblioteca Popular
Casa del Pueblo
El mundo al revés nos enseña a padecer la
realidad en lugar de cambiarla, a olvidar el pasado
en lugar de escucharlo y a aceptar el futuro en
lugar de imaginarlo.
S u m a r i o:
Las nuevas formas de control social
1º de mayo, día de protesta universal
Sobre la muerte del fiscal Nisman
Votar o no votar, no es la cuestión Encuentro folclórico en la Casa del Pueblo
Fundadores del Club Chacarita Juniors
Cursos - Talleres
EDUARDO GALEANO 1940 - 2015
El Centro Cultural Casa del Pueblo es un espacio de construcción política y cultural independiente, horizontal, colectivo y democrático en la búsqueda de aunar ideas y actividades con el objetivo de un cambio social que nos dignifique como seres humanos.
CASA DEL PUEBLO|CENTRO CULTURAL + BIBLIOTECA POPULAR
Emilio Lamarca 2502 (esq. Marcos Sastre) - Villa del Parque — Ciudad de Bs. As.
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M ay o | J u n i o 2 0 1 5
Año 1 Número 5 Precio solidario a voluntad
Sábados de 10 a 11,30 hs
Taller de Radio
GUITARRA Viernes de 18 a 19
TANGO Jueves de 19 a 20,30
FOTOGRAFIA Consultar x mail
Sábados de 11,30 a 13,00 hs Taller de Escritura
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Sociedad Fundadores
E l Primero de Mayo de 1906 un grupo de amigos fundaba el Club Atlético Chacarita Juniors en el local de la 17° sección del Partido Socialista, ubicado en la esquina de Dorrego y Giribone ( hoy Avenida Córdoba ). Su nombre
no trae muchos secretos, ya que Chacarita es por el barrio y Juniors en alusión a la juventud que era la que le había dado vida a el club. Sus colores, el rojo, el blanco y el negro, también tiene su orígen. Se escogió el rojo por el socialismo, al cual estaban vinculados todos los miembros fundadores. El blanco se eligió por la pureza de los ideales y el negro por la cercanía del cementerio. Un día después de la fundación, quedó registrado el nombre de Chacarita Juniors y se conformó la primera comisión directiva, dirigida por Máximo Lema, el primer presidente de la historia del club. El primer partido de la historia de Chacarita fue contra el Club Atlético Victoria. Se jugaron tres cotejos contra ese club .Los dos primeros partidos finalizaron empatados en cero, pero el tercero fue para Chacarita 3 a 2. Ese primer equipo estuvo integrado por todos los miembros fundadores. Ese equipo alistó a estos once: Jose Lema; Manuel Lema y Arístides Roncheri; Antonio Fernández, Alfredo Lema y Andrés Ducase; Alfredo Palacios, Miguel Pereyra, Máximo Lema, Eduardo Ducase y Manuel Hernández. En 1925 jugó por primera vez en Primera División y su actuación fue destacada, ocupando el cuarto puesto en la tabla general. Disputó 60 temporadas en Primera División, adjudicándose el Campeonato Metropolitano de 1969. Ganó la zona A del torneo y tras vencer en semifinales a Racing Club por 1 a 0, se consagró campeón el 6 de julio tras ganarle la final a River Plate en el estadio de Racing por 4 a 1 con dos goles de Horacio Ricardo Neumann ( minuto 12 y tras el empate de Trebucq, el segundo a los 37 minutos ), uno de Ángel Alberto Marcos ( minuto 47) y el otro de Franco Frassoldati ( minuto 56)
En aquel lejano 1906 era muy difícil conseguir un terreno para instalar un campo de juego. Entre las avenidas Federico Lacroze y Álvarez Thomas existía un terreno baldío al que la comisión directiva comenzó a tener en cuenta. En Abril de 1907 los muchachos alambraron el predio y construyeron una casilla
humilde, quedando registrada así la primera cancha de la historia del club. Lamentablemente, esos terrenos serían utilizados por la municipalidad para abrir una calle. Es por eso que una mañana, una camioneta de la policía llegó al lugar y desarmó las instalaciones. Por apenas días Chacarita Juniors tuvo su primer estadio en Federico Lacroze y Álvarez Thomas. En 1925, en la manzana de Humboldt, Murillo, Padilla y Darwin se comenzó a construir la primera cancha oficial de Chacarita de su historia. Las obras demandaron dos años y fueron los propios jugadores, junto con dirigentes y simpatizantes los que colaboraron en la construcción del estadio, ya que la economía del club era por demás deficiente. La misma se inauguró en 1927. Con el paso del tiempo Chacarita se afianzaba cada vez más en Primera y el estadio iba quedando chico. Es por eso que los
dirigentes coincidieron en conseguir una cancha con mayor capacidad. Esa cancha llegó. En Humboldt 300, entre Murillo, Padilla, y las vías del ferrocarril, Chacarita tuvo su segunda cancha, que tenía una capacidad para 40 mil personas. La misma se inauguró en 1932, con más de 25 mil personas presentes, en una fiesta que concluyó con un amistoso ante Nacional de Uruguay, que el local ganó por 3 a 0. En 1942 Chacarita fue desterrado del barrio de Villa Crespo y se mudó a San Martín. El inconveniente fue que los terrenos en donde se encontraba la cancha eran rentados, junto con los terrenos del rival de siempre Atlanta. A
finales de 1943, Chacarita estaba atrasado unos seis meses con el pago mensual del alquiler. La comisión de Atlanta, al enterarse de esta situación y apoyada por una familia de mucho dinero, ofreció mucha plata para quedarse con el predio que Chacarita no pudo igualar y fue desalojado. Es por eso que en la actualidad, ahí se encuentra el estadio de Atlanta, porque se expandió el que tenían anteriormente. El último encuentro jugado en ese estadio fue el 16 de diciembre de 1944 entre Colegiales y Temperley. El 8 de julio de 1945, luego de 141 días de ardua labor, quedó inaugurado el estadio del club en San Martín con una gran fiesta a la que asistieron unas 30 mil personas y que finalizó con un amistoso entre los dueños de casa y Nacional, que ganó el local 1 a 0. Era un estadio con tablones y una platea lateral de cemento. Éste fue utilizado hasta el 21 de octubre de 2005, día en el que se enfrentó a Tigre, ganado con un categórico 3 a 0. Tuvieron que pasar más de cinco años y tres meses para que Chacarita y su gente volvieran a ser locales; fue el 30 de enero de 2011 cuando se reinauguró parcialmente el estadio con un empate ante Argentinos Juniors 0 a 0 .
V arios países a los que comúnmente se identifica como sociedades democráticas y avanzadas no tienen un documento de control de la identidad de sus ciudadanos como es el caso en Argentina
del Documento Nacional de Identidad (DNI) creado por la dictadura de Onganía en 1968 mediante la Ley 24193. Australia, Canadá, Dinamarca, Irlanda, Japón, Estados Unidos, el Reino Unido son algunos de ellos. En estos dos últimos se han incrementado en años recientes las presiones para reglamentar un documento de control de identidad de la mano de las políticas antiterroristas. Mientras, organizaciones de la sociedad civil basadas en sus tradiciones anglosajonas que defienden la privacidad ante el Estado han podido hasta el momento contrarrestar su implementación mediante campañas que se centran en concientizar que menos libertad no implica más seguridad. Esa conciencia no encuentra demasiados adeptos en nuestro país, que al contrario, acepta pasivamente los nuevos DNI y pasaportes que contienen datos biométricos como las huellas digitales y los rostros digitalizados que robustecen las bases de datos del Registro Nacional de las Personas (RENAPER). En paralelo el Poder Ejecutivo mediante un decreto de fines de 2011 ordena la creación del Sistema Federal de Identificación Biométrica (SIBIOS), un programa de centralización de datos que avanza en la integración de una base de información biométrica de todos los argentinos a la cual tendrá acceso distintos organismos gubernamentales y las fuerzas de seguridad (policía federal, gendarmería, etc.) incluyendo las fuerzas policiales y otras entidades provinciales a través de acuerdos con el Estado Nacional.
El control estatal de la identidad tiene serias consecuencias
sobre aquellos que quieran disentir políticamente con el poder. Citamos a Beatriz Busaniche, de la Fundación Vía Libre quien lo explica muy claramente: “En nombre de la seguridad pública, Argentina ha impulsado políticas de vigilancia masiva incluyendo un monitoreo generalizado de los espacios públicos. La privacidad es particularmente esencial en un país que a lo largo de su historia ha tenido importantes movimientos sociales y políticos que han ganado las calles para hacer oír su voz. Es de enorme importancia que los activistas puedan permanecer anónimos en las manifestaciones públicas, en particular cuando están en desacuerdo con el gobierno. De esta manera, SIBIOS no sólo amenaza la privacidad de los ciudadanos y el derecho a la protección de sus datos
personales, sino que también involucra una seria amenaza a los derechos civiles y políticos”(2).
El potencial de abuso de aparato del Estado y sus agencias de seguridad y fuerzas represivas, los circunstanciales gobiernos y sus socios económicos avanza sin la menor reacción de la sociedad civil. No está en la agenda de debate de ninguna de las fuerzas políticas, ni de los intelectuales comprometidos, ni mucho menos de los medios de comunicación que emiten en su programación imágenes tomadas de cámaras de seguridad instaladas por distintas administraciones públicas y por particulares sin el menor control de la
privacidad. La vigilancia se institucionaliza y se hace habitual, tolerable; su aceptación se naturaliza hasta que llegará el momento que la amenaza a la libertad y la privacidad sea un rasgo más de la implantación de un estado totalitario. (1) Victor Serge – Lo que todo revolucionario debe saber sobre la represión. (2) Beatriz Busaniche en http://www.vialibre.org.ar/2012/01/10/biometria-en-argentina-la-vigilancia-masiva-como-politica-de-estado/ (3). Michel Foucault, "Vigilar y castigar”
El popular programa “Gran Hermano” y todas sus zagas de realitys shows, naturalizaron la posibilidad de que cámaras y micrófonos se entrometan en la intimidad de las personas. Las cámaras de seguridad, que los propagadores de la inseguridad tanto auspician, ya se encuentran esparcidas por muchas de las ciudades y municipios de nuestro país. Los ciudadanos bien pensantes las reclaman junto con mayor presencia policial en las calles. Entre tanto el Estado implementa el Sistema Federal de Identificación Biométrica (SIBIOS) que permitirá la identificación y (combinado con las camaritas, el Sistema Único Boleto Electrónico (SUBE), tarjetas de crédito, y otras bases de datos públicas y privadas)- el rastreo de los 40 millones de argentinos con la posibilidad de “seguir al individuo, de conocer sus actividades y sus movimientos, sus contactos, y luego de penetrar sus intenciones (1)”. Así, las profecías de George Orwel en su libro “1984” se instalan aceleradamente en la realidad cotidiana de una sociedad controlada.
“En la disciplina, son los
sometidos los que tienen que
ser vistos. Su iluminación
garantiza el dominio del
poder que se ejerce sobre
ellos. El hecho de ser visto sin
cesar, de poder ser visto
constantemente, es lo que
mantiene en su
sometimiento al individuo
disciplinario.“(3)
Esta es la terrcera entrega sobre historias de clubes de fútbol que en sus orígenes estaban vinculados al ideario del movimiento obrero. Después de Argentinos Jrs. y Colegiales le toca el turno a Chacarita Juniors.
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Mundo
El primero de mayo nació de la justa demanda de los obreros de todo el mundo para obtener una conquista laboral: la jornada de trabajo de 8 horas.
E sta conmemoración tiene el sentido histórico de la reivindicación de la clase trabajadora como tal, frente a la clase poseedora de los medios de producción y de cambio.
Han pasado 129 años desde los hechos en que la aspiración y la lucha de los trabajadores grabaron la histórica fecha en el corazón del movimiento obrero mundial.
El crimen de Chicago fue cometido a conciencia por jueces que no juzgaban los supuestos crímenes de los acusados sino su ideología, sus principios y sobre todo los ideales de emancipación de la clase trabajadora haciendo pagar a cinco obreros con su vida y a tres con la cárcel un delito inexistente. El sacrificio de aquellos trabajadores aún no ha sido vindicado,
Largo ha sido el recorrido del movimiento obrero mundial desde aquel 1ro de mayo de 1886 hasta nuestros días, muchas han sido las experiencias que han ensayado los trabajadores en su camino de emancipación y liberación de la explotación del hombre por el hombre mismo.
Derribados los muros de las apologías al dogmatismo, el burocratismo y el autoritarismo así como el mito del fin de la historia, el triunfo inmodificable del neoliberalismo y la globalización capitalista; los oprimidos del mundo tenemos la responsabilidad - mientras continuamos diariamente con nuestras luchas diarias y parciales- de retomar y recrear las herramientas para la construcción de una nueva estrategia política que alimente un proyecto social más identificado con los sueños del hombre que busca respuestas al mejoramiento de la vida material, cultural y espiritual de la humanidad.
En Argentina, las condiciones de superexplotación están momentáneamente salvaguardadas gracias a la acción conjunta de tres actores: la burocracia sindical, casta corrupta y mafiosa, enriquecida a través de los negociados con las patronales, los desmanejos en las obras sociales y con los diversos subsidios del estado; con sus matones a sueldo, encargada de la persecución de los delegados combativos. Dejando por sobreentendido el papel histórico de las patronales, el cerco se cierra con el rol del Estado, promotor a través del Poder Judicial del desafuero gremial y procesamiento de los activistas que resisten la cooptación, la represión y la falta de libertad sindical. A pesar de esta formidable maquinaria intimidatoria, la Ética y la Dignidad van abriéndose paso con los cuerpos de delegados no rentados elegidos democráticamente, sin jerarquías, con horizontalidad y revocabilidad de los mandatos, tomando las decisiones en asambleas, recuperando la conciencia de Clase, y coordinando las luchas contra la tercerización y la precarización, con total independencia de las patronales, los partidos políticos y el Estado. Sólo así, profundizando este rumbo, se garantizará un futuro de dignidad para las futuras generaciones de trabajadores.
Desde nuestra modesta Casa del Pueblo intentamos sembrar un granito de arena en la concientización de esta
necesidad de replanteo y creación política aprovechando esta cara fecha histórica en la que saludamos a todos los
luchadores de ayer, de hoy y de siempre.
L a idea de «música típicamente argentina» suele estar asociada con el tango. Pero hace muy pocos años, los grandes públicos del mundo se fueron enterando que el tango no tiene la exclusividad de la representación
en materia de música argentina; que hay otro tipo de composiciones originadas en este país muy diferentes al tango en su estructura formal, en su contenido poético y en el modo de interpretarse, que también expresa al espíritu argentino: el folclore. Reunidos en la plaza del pueblo, en un rancho, en algún patio, gente mayor, niños, matrimonios, jóvenes, familias. Congregados para pasar la tarde compartiendo historias y canciones, vidalas, zambas, versos, cuentos del campo, referencias históricas. No hay espectáculo, es un rito, una ceremonia. El viejo arte de cantar con sencillez las cosas que suceden, de bailar con limpieza, sin teatro . Tradición criolla, tertulia rural. El encuentro folclórico, luego conocido como “peña”, que fue mutando con el correr de los años, las modas y las gentes. Asi era, quizás, allá por los años 40´o 50´. Así sucede en algunos pueblos del interior de nuestro país. Así trataremos de juntarnos en nuestra Casa en este mayo que se avecina, con el fueguito esperando el fresco otoño que ya asoma.
Un rio. El más largo de este territorio. Un viaje a través de su curso, un recorrido por sus colores, sus paisajes, sus relatos, sus cantares, personajes. Un relato que nos irá llevando de canción en canción, de esas olvidadas, también desconocidas, o aquellas que recordás y hace mucho que no escuchas. Este mayo te invitamos a compartir una noche distinta, al encuentro con la voz, el decir, el silencio, el conocer, el descubrir, el danzar nuestra música más interna. Gatos, zambas, chacareras, vidalas, cuecas nos acompañaran en su sonido más natural, rústico y puro.
Los esperamos el 9 de mayo, 21hs al Encuentro Folclórico con “La Correntada” y cerramos la noche
con guitarreada y baile!!
Trae tu pañuelo, la garganta caliente, sacale el polvo a esa guitarra escondida y ovlidada y afila las
alpargatas!
La Correntada son: Javier Saleh (relato, textos), Melisa Mulek (guitarra y
voz), Hernán Leiva (guitarra y voz y Pablo Gonzalez (bombo y coros)
Canciones tradicionales, leyendas, historias y
personajes se entremezclan en esta propuesta.
Y a transitando el primer cuarto del afamado 2015,
con varias elecciones a cuestas, vuelven a resonar
frases y dichos que nos recuerdan lo importante de
concurrir a las urnas. “Fiesta de la Democracia”
titularán los diarios.
Cada dos años nos acercamos a depositar nuestro voto, voto
de confianza, voto bronca, Voto Obligatorio. ¿Qué votamos?
¿A quién votamos? ¿Para qué votamos? ¿Qué significado le
damos al voto? ¿Es solamente un acto administrativo? ¿Una
obligación cívica? ¿Un ejemplo de ciudadanía, quizá de
pertenencia a un Estado?
Después de votar ¿Qué sucede? ¿Volvemos a nuestras casas
satisfechos con la frente en alto por haber cumplido? ¿Sigue
la vida como si nada? ¿Somos mejores ciudadanos?
Cada acto electoral supone la mayor expresión posible de la
Democracia, la elección de nuestros representantes, que
encarnando el poder popular estarán a cargo de la
administración de los recursos, bienes y patrimonio del
Estado. Es decir nuestros. Al fin de cuentas la elección de
nuestros representantes supone la acción de delegar en un
conjunto diminuto de personas la toma de decisiones sobre
lo que será el presente y futuro de nuestra vida.
No está demás preguntarse ni preguntarte (lo que finalmente
pretende este artículo), si la democracia así planteada, si esta
manera vertical, burocrática y desigual de relacionarnos,
merece un cambio. Si la base de la democracia es el poder
popular, la suma de cada uno de nosotros, ¿Por qué permitir
que sean otros quiénes decidan? ¿Por qué delegar las
soluciones en unos pocos cuando somos todos nosotros
quienes tenemos los problemas? ¿Por qué nos relacionamos
jerárquicamente, en lugar de mirarnos a la cara?
Vínculos solidarios, gestos fraternales, tratos horizontales es
la respuesta más efectivas para contrarrestar un orden que
nos supone espectadores en lugar de actores.
Trabajadores
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Sociedad
Mucho se ha escrito en torno a la muerte del fiscal Alberto Nisman y del impacto político que ha suscitado la llamada “
Marcha del 18 F” -“Marcha del Silencio” - convocada por un grupo de fiscales de la Nación, profusamente fogoneada
por el conglomerado de medios opositores al gobierno liderado por el Grupo Clarín y caracterizada por el oficialismo
como marcha opositora y de la que se “colgó” todo el arco opositor -salvo la izquierda y sus referentes- que reunió a
una fauna variopinta desde Mauricio Macri a Luis Barrionuevo , desde Elisa Carrió a Cecilia Pando , Francisco De Narváez,
Gerardo “ Momo” Venegas , Patricia Bullrich, Julio Cobos, Fernando Solanas y otros “notables” de la escena política
vernácula.
Más allá de que respetamos el derecho de marchar o adherir a una determinada convocatoria, resulta patético cotejar el
grado de cinismo y de hipocresía derivado de las proclamas que se esgrimieron, no sólo las provenientes de los fiscales y
dirigentes políticos que convocaron a marchar por la “ justicia “ sino también las escuchadas de una porción mayoritaria
de los participantes de la multitudinaria marcha, movilizados con la inocultable intención de acelerar el desgaste del
gobierno más que por honrar la memoria de un fiscal y atravesados por un visceral odio de clase.
Ni los autodenominados opositores ni los
integrantes del oficialismo resisten la prueba del
archivo:
Raúl Plee y Germán Moldes , dos de los fiscales
convocantes , hablan de justicia. Justamente
ellos, acusados de encubridores de la causa
A.M.I.A por los organizaciones que nuclean a las
familiares de las víctimas : A.P.E.M.I.A y Memoria
Activa . . . Raúl Plee, junto a Juan Martín Ramos
Victorica (otro de los presentes el pasado 18 de
febrero) acusados de silenciar las denuncias por
torturas de los prisioneros del ataque al cuartel
de La Tablada en 1989 . . .
Carlos Stornelli , otro de los fiscales convocantes,
ex ministro de seguridad de Scioli,
posteriormente jefe de seguridad de Boca Juniors y en la actualidad afín al macrismo. Justamente él habla de justicia,
investigado por sus sólidos vínculos con la barra brava, amigo de venerables personajes como Rafael Di Zeo .
Ricardo Sáenz, también habla de justicia; acusado por aparecer en escuchas telefónicas en intercambios de favores
con el comisario Marcelo Emilio Pecorelli por tráfico de influencias , negociaciones incompatibles con la función
pública, enriquecimiento ilícito y violación de sus deberes funcionales.
Mauricio Macri habla de justicia, estando procesado por organizar una red de espionaje a opositores desde el
gobierno de la ciudad.
Y el gobierno nacional, atribulado por la ofensiva de un sector de la justicia y los servicios de inteligencia; en realidad
habría que hablar de corporación judicial con la que el mismísimo gobierno convivió durante casi todo su mandato: de
hecho Alberto Nisman trabajó durante años para el kirchnerismo; el mismo Nisman, quién al igual que el resto de los
fiscales, jamás denunció la trama siniestra de los servicios de espionaje y que sólo después del acuerdo de Argentina
con Irán cambió súbitamente de bando. Y sin dejar de mencionar que este gobierno se valió de los servicios de
inteligencia para espionaje de trabajadores, estudiantes y distintas organizaciones sociales.
Retomando los móviles de la marcha, compartimos el pedido de verdad y de justicia de miles de argentinos. Pero no
tenemos absolutamente nada que compartir con todos aquellos que se referencian en esta justicia de clase, que se rasgan
las vestiduras por la muerte de un fiscal pero no muestran la misma enjundia republicana para movilizarse frente al
asesinato de Luciano Arruga -por citar un ejemplo- y de tantos jóvenes de las barriadas populares que caen asesinados a
manos de las fuerzas de seguridad. Ni tampoco los vimos mostrarse compungidos por la represión de la que son
recurrentemente víctimas los trabajadores que reclaman en defensa de sus derechos más elementales, ni por las muertes
de niños por desnutrición.
Y lo decimos claramente: la verdadera justicia vendrá de la mano de la concreción de una sociedad de libres e iguales.
Inútil es esperanzarse en parches o reformas como instancias superadoras de un cuerpo como lo fue y será el Estado (y
sus instituciones corrompidas hasta la médula ) defensor y garante de los intereses de una clase social dominante: la
burguesía.
Por lo expuesto, en lugar de insistir en fórmulas repetidas y utilizadas hasta el hartazgo cuyos resultados conocemos y
padecemos, convocamos a los compañeros a acompañar al pueblo trabajador en la toma progresiva de conciencia a
través de la identificación sin rodeos de las causas de su sometimiento para lograr erradicarlas, avanzando en el
empoderamiento colectivo, para que sea la propia sociedad autoorganizada desde las bases y emancipada del Estado y
sus organismos represivos la que se dé en conjunto la auténtica y verdadera justicia.
Camino muy duro y árido pero hasta ahora no ha podido probarse su inviabilidad. Por el contrario, la historia ha sido
aleccionadora en cuanto al fracaso de todas las otras alternativas planteadas hasta la fecha.
Todo por hacer.
Sociedad
Nuestra justicia y la justicia “de ellos”.
Como muy bien lo historió el periodista Herman Schiller en su programa “Leña al fuego” : “ a instancias
de Juan Domingo Perón, fue creado en su primer gobierno “ Control de Estado “, un organismo
represivo de inteligencia cuyo objetivo era neutralizar los bolsones opositores y combativos que aún
quedaban entre los trabajadores. Su primer jefe fue un militar de extrema derecha llamado Guillermo
Solveyra Casares y en seguida vinieron otros como el coronel Jorge Osinde, que alrededor de un cuarto
de siglo después sería uno de los organizadores de la masacre de Ezeiza. Esa flamante repartición
“ Control de Estado “ tiempo después se transformó en una sigla de triste fama S.I.D.E. (Servicio de
Informaciones del Estado). Y entre sus asesores más destacados estuvo un nazi llamado Von Gromann,
que obviamente llegó a estas tierras amparado por el gobierno peronista
En los días de la llamada "Revolución Libertadora” su jefe, el general Quaranta, mandó a asesinar a un abogado del diario "La Razón" y ex presidente de la Sociedad Hebraica Argentina, Marcos Satanwosky, La SIDE, efectivamente, además de cobijar delincuentes y asesinos de la peor especie, maneja cifras siderales.
Su destino histórico, como el de la policía es ser disuelto. El debate social será en definitiva el que deba
decidir qué hacer con estos organismos que han teñido de sangre y luto al pueblo argentino. “