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d. UFPr.

APUNTES PARA EL ESTUDIO DELFEDERALISMO EN LA REVOLUCION RIOPLATENSE

(1810-1820)"

ANA FREGA

A Inés y Miguelquienes dan sentido

a mi trabajo

EI objetivo de ia ponencia es presentar algunas líneas deinvestigación en torno ai federalismo en Ia Revolución dei Río de Ia Plata(1810-1820), en el marco dei estudio de los procesos de construcción deestados e identidades políticas en Ia región.

La crisis revolucionaria iniciada en el Plata hacia el ano 1810 seconstituyó en una verdadera fragua de provincias. EI Alto Perú y elParaguay escindidos dei antiguo virreinato y Ias intendencias subdivididasuna y otra vez rnarcaron Ias distintas modalidades de interpretar elprincipio de "retroversión de Ia soberanía". Si era ai conjunto representadopor Buenos Aires como "ciudad-metrópoli", o aios pueblos como unidadeslocales, se fue definiendo en una lucha donde más de una vez seconfundieron Ia descentralización con Ia fragmentación.

Afloraron Ias tendencias ai autogobierno en Ias ciudades queintegraban Ias antiguas intendencias. En cada una se montaroninstituciones de carácter estatal, 10 cual no parecía contradictorio con elmantenimiento de lazos de unión con Ias demás o incluso, con Iaaceptación de Ia conducción revolucionaria desde Buenos Aires. EI

*Trabajo presentado ai Seminario Internacional "Pensar a RevoluçãoFederalista", organizado por Ia Fundação Universidade do Rio Grande, Dep. deBiblioteconomia e História. Rio Grande, 1 ai 5 de octubre de 1993.

** 'Centro Latinoamericano de Economía Humana (CLAEH) y Facultad de

Humanidades y Ciencias de Ia Educación, Universidad de Ia República. Montevideo,Uruguay.

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"autonomismo" se limitaba a Ia reserva de ciertos "poderes especialés",Ia ausencia de intervenciones por parte de otros poderes de nivel :provincial y Ia afirmación dei derecho a participar en Ias decisionesgenerales y en todas aquellas que pudieran afectar ai conjunto.'

La experiencia norteamericana conocida tempranamente en elPlata podía ofrecer instrumentos para orientar Ia construcción dei nuevoorden político. De esta forma, y muchas veces con sentidos y objetivosdiferentes de los seguidos por Ias antiguas colonias inglesas, diversasvoces invocaron Ia necesidad de constituir un "sistema federal".

A continuación se presentarán Ias principales referencias aiprincipio de Ia "soberanía particular de los pueblos", verdadera base deIa búsqueda de fórmulas federales.

A partir de ello, se planteará el tema de Ia construcción de unestado supraprovincial, en el cruce de Ias relaciones entre identidadeslocales y lazos de unión interprovinciales.

Cabe seüalar, finalmente, que esta ponencia no pretende másque abrir una línea de reflexión en torno ai difícil proceso deconstrucción de un "nuevo orden" en el Río de Ia Plata, a partir de Iacrisis revolucionaria. Futuras investigaciones se encargarán de mostrarIa pertinencia de este esfuerzo.

1 - SOBERANIA PARTICULAR DE LOS PUEBLOS:l,DESCENTRALlZACION O FRAGMENTACION?

Es interesante constatar que Ias regiones donde arraigaron conmás fuerza ideas de índole federal sufrieron durante Ia revolución undoble proceso de ruptura: con Ia autoridad espaüola - ai igual que Iasdemás dei Virreinato - y con Ia autoridad de Buenos Aires, a cuyaintendencia estaban subordinadas. Para nuestro trabajo importaespecialmente esto' último, es decir, que se constituyeran comoprovincias a partir de Ia revolución rioplatense.

En ese sentido, Ias indagaciones deben orientarse hacia elestudio de Ias nuevos sujetos soberanos que aparecen a partir de Iarevolución, sus formas de representación y Ia evolución de susidentidades políticas.

En su "interpretación dinámica" dei federalismo artiguista, elhistoriador uruguayo Eugenio Petit Mufioz da cuenta de una serie de

1Véase Carlos REAL DE AZUA, Los orígenes de Ia nacionalidad uruguaya.Monlevideo, Arca/Ediciones dei Nuevo Mundo, 1990, pp. 249-250,

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.etapas en el proceso de constitución dei nuevo orden político: i. elretorno de Ia soberanía aios pueblos; ii. Ia constitución de gobiernosprovinciales; iii. Ias pactos confederativos y, iv. el estado federal."

A este análisis basado en Ia exégesis de los textos artiguistas,debe incorporársele el estudio de cómo se fue gestando el procesodesde Ia perspectiva de "Ias pueblos".

Según el historiador argentino José Carlos Chiaramonte, elaccionar de Ias mercaderes conectando (no unificando) los distintosmercados locales, constituye una de Ias bases de Ias provincias, entanto ese tipo de relaciones comerciales no podría dar lugar acircunscripciones territoriales de gran tarnaüo. Una provincia sería

una ciudad y el área rural cercene que domina.Esto es, una ciudad de cierta importancia porsu pasado colonial como centro comercial opolítico, o ambas cosas a Ia vez; una ciudad deconcentración, aunque sea mínima, deelementos sociales capaces de afrontar unaadministración; con vinculaciones con Iacempeõe que por tradicionales a Ia vez queestrechas - dentro de Ias dificultades que Iasdistancias imponían en Ia época tanto aicomercio como a Ias relaciones políticas -permitían su control por el centro de residenciade Ia autoridad politice?

Como a su vez Ias patrones de inversión de esos comerciantesse caracterizaron por Ia diversificación de actividades (comercio deimportación-exportación, venta ai menudeo, préstamo a interés,adquisición de casas para renta y, muy especialmente, Ia explotaciónganadera), a Ia competencia por mercados se sumó aquella por Iaapropiación de tierras y ganados.

La crisis revolucionaria, entonces, trascendió los reclamos deIa élite dirigente criolla que en 1810 organizó Ia Junta en Buenos Aires.Abrió un espacio para Ia dilucidación de los conflictos coloniales (porapropiación de tierras, por diferenciaciones étnicas, por jurisdicciones

2Véase Eugenio PETIT MUNOZ, Artigas y su ideerio a través de seis seriesdocumentales. Montevideo, Facultad de Humanidades y Ciencias, 1956.

3José Carlos CHIARAMONTE, Mercaderes dei Litoral. Buenos Aires, Fondode Cultura -Econômica, 1991, pp. 27-29.

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políticas, etc.), siendo a Ia vez una guerra de independencia y unarevolución política y social. En este último aspecto, correspondió aiartiguismo recoger los reclamos de los pueblos dei Litoral encontraposición ai proyecto centralista de Buenos Aires, así como aiinterior de cada provincia, defendió Ia posición de "Ios más infelices"frente a Ias élites dirigentes locales."

La presentación de Ias grandes líneas de los procesos políticosseguidos en Ias futuras provincias Oriental y de Corrientes ilustrarámejor los aspectos que habría que desarollar en una revisión de IaRevolución Rioplatense desde Ia perspectiva de Ias pueblos.

En el caso de Ia Banda Oriental, Ia pretensión de constituir unaprovincia se dia desde muy ternprano". EI hecho de que Montevideo,única ciudad que podía ejercer Ia hegemonía sobre Ias demás de estabanda, se mantuviera fiel a Espana, permitió que los antiguos derechosde Ias pueblos afloraran con más fuerza. Obligados en un primermomento a reconocer Ia autoridad montevideana, rápidamente seplegaron a Ia "admirable alarrna'". La mutación revolucionaria radicabaen que esos pueblos, en realidad, estaban ejerciendo poderes nuevos.Como seüala el historiador argentino Tulio Halperin, "instalar un centrode poder político en Ia campafia oriental no era un puro desplazamientogeográfico; era a Ia vez un desplazamiento de Ia base social dei poderpolítico"."

Ahora bien, .!,qué se entendía por "pueblos"?; .!,cuáles eran losórganos depositarios de su soberanía? Sobre el primer punto, Iadocumentación refiere a Ias villas, .pueblos y lugares, tuvieran o nocabildo. Se aprecia, además, cierta tendencia a agruparlos respetandoIas jerarquías establecidas durante Ia administración espaüola. En

4Véase Manfred KOSSOK, "La sal de Ia Revolución", en Historia y sociedad,n. 13, México, 1977, pp. 22-46. La expresión "Ios más infelices serán los más privilegiados"corresponde ai Reglamento Provisorio para el fomento de Ia Camparia y seguridad de sus

Hacendados, dado en Purificación el 10/9/1815. (COMISION NACIONAL ARCHIVOARTIGAS, Archivo Artigas. Tomo XXI. Montevideo, 1987, pp. 93-98).

sEI intento de formar una Junta independiente - siguiendo el ejemploparaguayo - que formularon los jefes dei ejército oriental en el Ayuí, es una clara muestrade ello. (Véase Agustín BERAZA. EI pueblo reunido y armado. Montevideo, Ediciones deIa Banda Oriental, 1967, pp. 145-156).

6De esta forma describió Artigas el levantamiento oriental de 1811, en notaque enviara a Ia Junta de Paraguay el 7 de diciembre de 1811, solicitando auxilio ypertrechos en Ia lucha contra esparioles y portugueses. Véase COMISION NACIONALARCHIVO ARTIGAS, Archivo Artigas. Tomo VI. Montevideo, 1965, pp. 73-82.

7Tulio HALPERIN DONGHI, »Revoluctàn y guerra. Formación de una é/itedirigente en Ia Argentina criolle. 2a. ed. México, Siglo XXI, 1979, p. 280.

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cuanto a Ia segunda pregunta, los cabildos serían "Ios verdaderosórganos de los pueblos", a estar por 10 dicho en el proyecto deConstitución para Ia Provincia Oriental (1813?). Allí se proponía, a suvez, que sus miembros fueran electos en "pública plaza y en voz alta porcada habitante que tenga derecho a votar en todo el distrito que abracecada jurisdiccíón'". En definitiva, en los comienzos de Ia organizaciónpolítica luego de Ia caída dei régimen espanol, Ia soberanía y Iarepresentación correspondieron ai ámbito municipal.

La constitución de Ia provincia sería resultado de Ia "unión" delos pueblos, bajo Ia conducción de Artigas. EI Congreso de Abril de 1813se presentaba como Ia ocasión para sellarla. EI acta dei día 5 fijó que"en consecuencia de dicha Confederación, se dejará a esta Banda en Iaplena libertad que ha adquirido como Provincia compuesta de puebloslibres", Sin embargo, el proceso sería mucho más complejo, pues nobastaba con proclamar un gobierno provincial; había que construi rio.

EI estudio de Ia conformación de Ia Provincia Oriental, porconsiguiente, debe encararse atendiendo especialmente a cómo sepercibió y ejerció ese nuevo poder desde los cabildos. En este sentidoresulta interesante transcribir un fragmento dei oficio que el Cabildo deMaldonado enviara a Otorgués dando cuenta de Ia destitución de suComandante militar ante los reclamos de un conjunto de vecinos.

[. ..] quedando de (esta) suerte, el Pueblo IIenode gozo y álegria - informaba el Cabildo _ p.'ver fuera de empleos áun hombre que no sabiadesempenarias, y p,' haver usado p,' primeravez dela livertad q.e le hen dispensado áfuerzade fatigas, Ias Valientes Orientales susErmanos [. ..] 9

Se autopercibían como portadores de un nuevo poder, y esteera fruto de Ia Revolución.

Por supuesto que el análisis debe ir de 10 institucional a 10social, esto es, estudiar quiénes actuaban en los cabi!dos, a quiénes senombraba apoderados, cómo se fueron tejiendo los vínculos entre losnúcleos dirigentes y los caudillos, todo 10 cual nos conduce a un

8COMISION NACIONAL ARCHIVO ARTIGAS, Archivo Artigas. Tomo XII.Montevideo, 1974. pp, 277-290.

9lbídem, Tomo XXIII, Montevideo, 1990, pp. 180-182 (Oficio fechado el 17-6-1815).

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abordaje desde 10 local.EI Cabildo de Soriano, por ejemplo, defendió sus posturas

autonómicas frente a cualquier centralización dei poder (bonaerense,montevideana, artiguista), a Ia par que reivindicó el ejercicio dei controlde su jurisdicción. Tres episodios pueden ilustrar mejor nuestrosplanteos. En el mismo acto en que solicitó a Artigas Ia aprobación de Ianueva elección de cabildantes en 1813, el cabildo preguntaba acerca desu facultad para nombrar alcaldes y jueces pedáneos en su jurisdicción.AI ratificar a Francisco Bruno de Rivarola como su representante ante IaAsamblea Constituyente reunida en Buenos Aires, se le otorgaroninstrucciones especiales. Si bien estaban inspiradas en el texto aprobadoen el Congreso, se habían suprimido algunos artículos e incorporadootros; entre estos últimos, uno que enfatizaba que "ai pueblo le seráreservado sancionar Ia constitución general de Ias Provincias Unldas't'".Por último, cabe seí'íalar que el representante por Soriano ai Congresode Capilla Maciel, Juan Francisco Fernández, fue uno de los más firmesopositores ai pasaje por el alojamiento de Artigas a retirar Ias actas deiCongreso de Abril."

EI proceso de constitución de Ias provincias de Entre. Ríos yCorri entes es otro ejemplo de Ia fuerza que Ias soberanías particularesde los pueblos cobraron a partir de Ia revolución.

En los primeros meses de 1814 se produjo Ia expansión deiartiguismo en el Litoral, obteniendo rápidamente Ia adhesión de lospueblos. En una comunicación a Corrientes el propio Artigas definía asísus propósitos:

Todos los pueblos situ[a]dos á 10 largo de'Uruguai y Paraná están pajo un mismo pie dereforma,[. ..J y luego q.e se fixe en todo el territ. oel plan de su seguridad, se verificará Iaorganización gral, consultando cada una de Iasprovincias todas sus ventajas peculiares yrespectivas, y quedarán todas en perfecta unionentre si mismas; no en aq.a union mezquina q.e

10Claro que será necesario tratar de esclarecer qué significado le estabandando a Ia palabra "pueblo" (perteneciente a Soriano o a Ia Provincia Oriental). VéaseAriosto GONZALEZ. Las primeras fórmulas constitucionales en los países dei Plata (1810-1814). Nueva edición aumentada. Montevideo, Barreiro y Ramos, 1962, p. 319.

11COMISION NACIONAL ARCHIVO ARTIGAS, Archivo Artigas. Tomo XI,ob. cit., pp. 237-238 (Nota de Artigas ai Cabildo de Soriano, Delante de Montevideo, 11-12-1813).

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obliga á cada pueblo a desprenderse de unaparte de su confianza en cambio de unaobediencia servil, sino' en aq.a unión q.e nacedeI interés mismo, sin perjuicio de los derechosde los pueblos y de su libre y entero exerctcioF

Sin embargo, el proceso iba a ser mucho más complejo. No setrataba solamente de vencer Ias fuerzas dei centralismo bonaerense. Laadhesión a Ia revolución desató diversas expectativas en los pueblos,vinculadas a los problemas de tierras, los derechos de los indios y Iasluchas internas por el control "provincial". La situación alcanzó su puntoálgido cuando el Cabildo de Corrientes decidió suspender Ia reunión deiConqreso. Diversas villas y pueblos de indios enviarori amenazantesnotas exigiendo Ia realización dei Congreso y, en algún caso, que estese hiciera fuera de Ia ciudad de Corrientes a fin de garantizar Ia libreexpresión de opiniones,

Los pueblos reclamaban Ia asunción de derechos políticos, ycuestionaban por tanto que Ia élite dirigente correntina pretendieraasumir por elloslas decisiones de su "constitución social", En estostérminos 10 manifestaban los vecinos dei partido de Caacatí ai TenienteGobernador y Presidente dei Cabildo correntino:

I

II

[..-l conbciendo por ella [se refiere a una notaque les acercó un enviado artiguista] otrainculpable inaccion nacida de los precissosconocimientos que se ha negado esse Gov.no

comunicamos; y supuesto que tenemos accionlibre de acompaflar ntros Votos, y estrechar áese Gov.no para q.e liamando los Diputados delos Partidos, se berifique el Congreso Gral paraIa consolidación de nuestra causa; y en casode negarse Vm á este cumplimiento nos daraoportuno abiso, para elebar nuestra queja aIProtector de nuestra causa, 13

En resumen, en diversas zonas dei Virreinato Ia revolución

12COMISION NACIONAL ARCHIVO ARTIGAS, Archivo Artigas. Tomo XIX,Montevideo, 1981, pp. 12-14 (Nota de José Artigas ai Cabildo de Corrientes, fechada el29/03/1814).

13lbídem, pp. 50-51 (Nota fechada el 25/04/1814).

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desatá localismos Y antiguas disputas coloniales. EI artiguismo, aiplantear como "dogma de Ia revolucián" el respeto a Ia soberania de lospueblos, recogiá un clamor surgido de Ias diversas áreas rurales, notanto contra "as autoridades espaüolas en general, sino especialmentecontra aquellas instituciones y grupos sociales que pretendían centralizarel poder provincial.

La apelación a ideas federales en el marco de esos procesosde construcción provincial, entonces, da cuenta dei proceso deruralización dei poder y de competencia entre aquellos grupos socialesque aspiraban a consolidar su hegemonía regional.

En forma esquemática podría seüalarse que los núcleosdirigentes provinciales reprodujeron ai interior dei espacio quedominaban - o pretendían hacerlo - Ias tensiones entre Buenos Aires yIas provincias. Claro que aquí ellos se volcaban por el centralismo, y enalgunas instancias también el artiguismo tuvo que contener "Ia disoluciónde Ia provincia, obligandolos siempre [a los pueblos] a conservarsedependientes de Ias autoridades constituidas en esa ciudad."!"

2 - LOS FRENOS A LA CONSTRUCCION DE UN ESTADOSUPRAPROVINCIAL

EI . vacío de poder abierto por Ia cnsis de Ia monarquíaespaüola desatá, como vimos, Ia emergencia de nuevos sujetossoberaros reclamando el autogobierno de cada provincia-región. Si bieneso no se presentaba como un obstáculo para mantener lazos con Iasotras regiones, 10 que si resulta claro era que no se percibía comoneceserie Ia uniór..

Tal como seüala Chiaramonte, hacia 1810 se aprecian en elterritorio virreinal diferentes identidades políticas. La englobante de 10criollo o americano, Ia particular de cada provincia (algunas, comovimos, también en construcción, por 10 que en realidad se trataba deidentidades de paraje o "pago"), y una muy difusa, planteada desde Iadirección bonaerense, en torno a un estado platense, que asumiera elcontrol dei espacio dei Virreinato dei Río de Ia Plata."

14lbidem, pp. 54-57 (Nota de Artigas ai Cabildo de Corrientes fechada el28/4/1814 reiterando Ia necesidad de convocar ai Congreso y dando cuenta de Iascontestaciones que ha enviado aios pueblos).

15José C. CHIARAMONTE, :'Formas de identidad política en el Rio de IaPlata luego de 1810", en Boletín dei Instituto de Historia Argentina y Americana "Dr. EmílioRavignani", Tercera Serie, n. 1. Buenos Aires, 1989, pp. 71-92.

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Quienes podían plantear con mayor fuerza Ia idea de un estadosupraprovincial que englobara todas Ias provincias, eran los dirigentesde Buenos Aires y el artiguismo. Buenos Aires y Montevideo, puertosde ultramar, canales de intermediación de Ia producción local y Iasmanufacturas europeas, necesitaban un espacio territorial mayor. Pero,contradictoriamente, también presentaban Ias mayores posibilidades deviabilidad en caso de encararse una salida independiente."

EI gobierno de Buenos Aires conocía que su proyecto deconstrucción estatal era antagónico ai artiguista. También apreciaba queArtigas recogía efectivamente concepciones arraigadas en los pueblosy constituía el mayor peligro para instaurar el "orden" portefio. En unacontestación a un grupo de oficiales que, derrotados por los artiguistas,increpaba a Buenos Aires sobre el sentido de luchar contra "nuestrashermanas tropas Ias Orientales", sefialaba el Director Supremo Gervasiode Posadas:

Buenos Ar- S ó como debería con propiedaddecirse el Gov.no Sup.' establecido en BuenosAr- S y q.e podría residir si conviniera aI bien deIEstado en Cordova, en algun Pueblo de IaVanda Oriental, ó en media de Ias campafíasen un Bosque no han tratado jamás de subyugara Pueblo alguno sino de ponerlos en uníon p.aobrar de acuerdo contra los enemigos de Iagran causa de su Iibertad é independencia, yreserbar p. a después de libres y pacificados Iaelección de forma de Gov.no q.e deba ser elresultado de Ias atentas meditacio. S y prolijasdeclsion.' de una A. G. Constituyenre. Esta esIa que ha de formar Ia Constitucion, y IaConstitu. n nos ha de dar Ias formas de Gov.no

que nos convenga adoptar, sin q.e ni losOrient. S ni Occident. S ni viviente alguno puedanalcanzar si sera Monarquica, Federado,Aristocratico, Democratico, Oligarquico,Oligartico, Moderado, etc.

1I

1~al el resultado de Ia Provincia Oriental en 1828, a partir de Ia ConvenciónPreliminar de Paz entre Ias Provincias Unidas y el Imperio de Brasil. Asimismo, caberecordar que Ia aprobación de Ia Constitución argentina en 1853 no contó con Iaparticipación de Buenos Aires hasta 1860.

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Nada de esto se oculta a D.n Jose Arfigas,como no se les ocunen, q.e él no es losPueblos Orientales, sino un Coron' aI serviciode Ia Patria, y pagado con los fondos .deIEstado. 1117

Es interesante constatar que el Director Supremo en suargumentación debía sefíalar que nunca había pretendido desconocerlos derechos de los pueblos. Por oposición, 10 que surge es unargumento conservador, que busca comprimir en su visión de Iaconstrucción de un nuevo orden, los planteos de los pueblos. Losintereses particulares (de cada provincia-región) no debían sobreponerseai todo, en tanto quien respondía ai interés general era el SupremoGobierno y no los pueblos. EI camino para estos debía ser aguardar elfin de Ia lucha para, en un cauce ya institucionalizado, plantear susaspiraciones. La soberanía particular de los pueblos, tal como eraplanteada por el artiguismo, era vista en Buenos Aires como sinónimode anarquía, disolución y contrarrevolución.

EI alcance dei artiguismo en 1815, donde con el apoyo de .lasprovincias dei Litoral (Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Santa Fe) yCórdoba aisló momentáneamente a Buenos Aires dei Interior, mostró unposible camino de unificación alternativa.

Un motín en el ejército y el desplazamiento dei DirectorSupremo Carlos María de Alvear dieron cuenta en ese afio tanto de Iaexistencia de un incipiente partido federal en Buenos Aires como deiefectivo alcance de Ia tendencia artiguista en Ia revolución rioplatense.

La propuesta artiguista suponía Ia celebración de un Congresocon Ias provincias a fin de fijar Ias alianzas ofensivo-defensivas quedieran paso a Ia Confederación. En Ias tratativas iniciadas con BuenosAires a raíz de dicho pronunciamiento antidirectorial, José Artigasproponía:

Arf. 1. [. ..] La Banda oriental deI Uruguay estáen el pleno goce de toda su liberfad yderechos; pero queda sujeta desde ahora a Iaconstitución que organice el congreso generaldeI estado legalmente reunido teniendo porbase Ia liberfad. [. ..]

17COMISION NACIONAL ARCHIVO ARTIGAS, Archivo Artigas. Tomo XIV,pp. 127-129 (Nota fechada en Buenos Aires, 7/3/1814).

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Art. 13. Las provincias y los puebloscomprendidos desde Ia margen oriental deIParaná hasta Ia occidental quedan en Ia formainclusa en el ert. 1 de este Tratado, comoigualmente Ias provincias de Santa Fe y Córdobahasta que voluntariamente no gusten separarsede Ia protección dela Provincie Oriental deIUruguay y dirección deI Jefe de los Orientales. 18

la contrapropuesta de los enviados de Buenos Aires selimitaba a reconocer Ia independencia de Ia Banda Oriental y dejar a Iasprovincias de Entre Ríos y Corrientes en libertadde ponerse bajo Iaprotección dei gobierno que desearan. En estos términos, 'Iasnegociaciones fracasaron y recomenzó Ia lucha armada.

Ahora bien, el apoyo que Ias provincias daban a Artigas en sulucha contra Ia dirección unitaria de Buenos Aires no era sinónimo deapoyo ai proyecto político que impulsaba. Por Ias razones apuntadasarriba era más factible que Ia adhesión de Ias provincias fuera más biencomo oposici6n a Ia hegemonía de Buenos Aires que como apoyo a Iaformación de un estado federal en el Plata. No debe olvidarse que 10mismo ocurría con el sector dirigente urbano de Ia Provincia Oriental,que ya había dado muestras (y ante Ia invasión portuguesa en 1816 Iasseguirá dando), de tener escasa vocación federal cuando 10 que estabaen riesgo era el control dei espacio provincial.

Como sefiala Miron Burgin,

Ia autonomía era Ia defensa de Ias provinciascontra futuras intrusiones en el statu quoeconómico. [. ..] EI apoyo de una provincia a Iaforma federal o unitaria de organizaciónnacional dependía más bien deI grado deconfianza que pudiera depositar en que Iapolítica deI gobiemo central diera satisfaccióna sus necesidades locales, que en los grandesprincipios filosóficos de una u otra kieoloale.:"

18Citado en Oscar BRUSCHERA, Artigas.2a. ed. Montevideo, Marcha, 1971,pp. 135-137. (Proyecto dei Tratado de Paz y Amistad entre José Artigas y loscomisionado~ Blas José Pico y Bruno Francisco de Rivarola. Cuartel General, Paysandú,16/6/1815.) ,

19Miron BURGIN, Aspectos económicos deI federalismo argentino. 3a.reimpr. Buenos Aires, Ediciones Solar, 1982, p. 186.

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Palabras como pacto, alianza ofensivo-defensiva, confede-ración, federación, constitución social, tiüeron Ias proclamas, los oficios,Ias declaraciones. Pero en cada provincia esos términos tenían "supropio sentido". Para los grupos sociales que dominabam Ia escenalocal, el reconocimiento y adhesión ai Protectorado artiguista no iba másaliá de su interés por asegurarse una mayor libertad de acción. Yjustamente cuando ese apoyo resultaba muy oneroso, se cambiaban Iasalianzas "externas" y se pactaba con Buenos Aires.

En este contexto se explica por ejemplo, que a comienzos de1815 Corri entes solicitara autorización para comerciar con BuenosAlres." O que en diciembre de 1816 los comisionados dei Cabildomontevideano pactaran con el Director Supremo Martín de PueyrredónIa unión a Ias Provincias Unidas ante Ia invasión portuguesa (intentofallido que en enero dei ano siguiente se transformaría en adhesión aiosejércitos de Lecor)": O, finalmente, que los ejércitos vencedores deCepeda, ai mando de los gobernadores de Santa Fe, Estanislao Lópezy de Entre Ríos, Francisco Ramírez, desconocieran el Protectoradoartiguista en Ias cláusulas que acordaron con el gobernador de BuenosAires en febrero de 1820 (Pacto dei Pilar). 22

Las bases para Ia formación de un estado supra provincial eranmuy débiles. La tarea prioritaria para los núcleos dirigentes urbanosparecía residir en el control dei espacio local, disputado por esos nuevospoderes en posesión de los comandantés de milicias rurales.

20En su dura nota de respuestâ ai Intendenle de Ia Provincia de Corrienles,José de Silva, Artigas selialaba: "No se me oculta q." el Comercio es Ia base de Ia felicidadde 105 Pueblos: pero tampoco ignoro q." el comercio con un Pueblo enemigo no acarreasino desventajas, y por 10mismo me es muy estralio, q." habiendose declarado Buenos Ay.scontra todos 105 Pueblos, quiera Corrientes continuar sus relaciones mercantiles. [...] LosAmericanos sorr dignos p.' cierto de mejor suerte, y 105sacrificios de cinco alios se habrianmultiplicado inutilm." si ai fin no se hallen dignos de mantener el esplendor de sus familias,y conservar el Gov.??economico de sus Pueblos. Yo todo 10espero de Vs. y de 105buenosPatricios q." penetrados de mis ideas [...] no miren con indiferencia un asumpto en el q.'está cifrada Ia felicidad gral. Por 10tanto, 10especifico á VS. p.' q." como cabeza dei Puebloinfluya en 105 miembros políticos". (COMISION NACIONAL ARCHIVO ARTIGAS, ArchivoArtigas , Tomo XX. Montevideo, 1981, pp. 164-166).

21EI Acta firmada el 8/12/1816 por 105comisionados Juan J. Durán y JuanFrancisco Giró establecia: "Que el territorio de Ia Banda Oriental dei Rio de Ia Plata juraráobediencia ai Soberano Congreso y ai Supremo Director dei Estado en Ia misma forma queIas demás provincias". (Citado por Eduardo AZCUY AMEGHINO, História de Artigas y Iaindependencia argentina. Montevideo, Ediciones de Ia Banda Oriental, 1993, p. 140).

22EI objetivo de Ia ofensiva contra Buenos Aires era que esta provincia seincorporara a Ia Liga Federal y brindara su apoyo en Ia lucha contra 105 portugueses queestaban invadiendo Ia Provincia Oriental.

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Si bien para los protagonistas el desenlace de Ia revolución eraincierto, una lectura desde el presente nos muestra los poderosos frenosa Ia implantación dei "sistema" artiguista. A sus enemigos "externos",que lograron una correlación de fuerzas favorable ai aunarse losintereses unitarios bonaerenses, con Ias aspiraciones de poder local deIas élites provinciales (incluida Ia Oriental) y Ias necesidadesexpansionistas de Portugal, se sumaban Ias limitaciones dei propioproyecto. Fundamentalmente Ia que surge de tomar como impulsorevolucionario Ia soberanía particular de Ias pueblos, 10 cual eraobjetivamente contradictorio con Ia construcción de una direccióncehtralizada, indispensable para Ia concreción de ese modelo derevolución. La Confederación no lIegó a realizarse. La Liga Federal nosupuso más quealianzas coyunturales intermediadas por el "Protectorde los Pueblos Libres".

A un enfoque centrado en los proyectos de formación de unestado supraprovincial, es necesario incorporarle un estudio deiprotagonismo de los pueblos, con sus tensiones y sus contradicciones.

EI desarrollode un enfoque desde "10 local" proyectará susalcances por encima dei ámbito regional para contribuir a Ia construcciónde una Historia efecfivamenfe global, que enriquezca nuestracomprensión de los alcances dei federalismo en Ia RevoluciónRioplatense.

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