actinobacilosis

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Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (U.A.E.H.) Instituto de Ciencias Agropecuarias (I.C.Ap.) Área Académica de Medicina Veterinaria y Zootecnia (A.A.M.V.Z) Materia: Clínica aplicada de ovinos y caprinos Catedrático: Dra. Nallely Pérez Rivero Nombre del Trabajo: Actinobacilosis ovina Alumno: Jesús Ortíz Torres

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Describe la afección en ovinos por Actinubacillus lignieresii SignostratamientoEtiología

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Page 1: Actinobacilosis

Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo

(U.A.E.H.)

Instituto de Ciencias Agropecuarias

(I.C.Ap.)

Área Académica de Medicina Veterinaria y Zootecnia

(A.A.M.V.Z)

Materia: Clínica aplicada de ovinos y caprinos

Catedrático: Dra. Nallely Pérez Rivero

Nombre del Trabajo: Actinobacilosis ovina

Alumno: Jesús Ortíz Torres

Page 2: Actinobacilosis

Introducción

Muchos productores de ganado han visto ganado con este problema en los

últimos años y son familiarizados con la enfermedad. Por lo general ocurre de

forma esporádica y rara vez se presenta como un brote en el ganado. Es un

problema relativamente fácil de tratar con éxito; sin embargo, si es mal

diagnosticada o tratada inadecuadamente puede convertirse en una situación

mucho más difícil.

La causa de la actinobacilosis (también llamada lengua de madera), es causada

por una bacteria llamada Actinobacillus lignieresii. Esta es una especie común de

bacteria que se puede encontrar de manera normal en la boca y el rumen de las

ovejas así como en las mucosas del tracto superior respiratorio. Los rumiantes de

cualquier edad pueden llegar a ser infectados aunque es más común en animales

de más de un año de edad (UCD Vet views, 2009) (The Genus Actinobacillus, 2012).

Presentación de la enfermedad

La enfermedad ovina se observan en la mayoría de los países que crían ovejas.

Por lo general sólo aparecen casos aislados, pero en algunos rebaños se ha

llegado a encontrar un índice de morbilidad de hasta un 25%.

En la oveja la diferente forma de tomar el alimento hacen que las lesiones

predominen en labios y mejillas, con extensión ocasional a la mucosa de los

cornetes y a los tejidos blandos de la cabeza y cuello. En las ovejas no es

afectada la lengua. Las lesiones de hasta 8 cm de diámetro, se presentan en el

maxilar inferior, la cara y la nariz o en los pliegues dérmicos entre el maxilar

inferior y el esternón. Pueden ser superficiales o profundas y por lo general se

extienden a nódulos linfáticos craneales o cervicales. A través de varias pequeñas

aberturas las heridas supuran un pus viscoso y de un color amarillo viscoso que

contiene gránulos. Las lesiones muy extensas provocan la formación de una gran

cantidad de tejido fibrinoso que puede impedir físicamente la prensión o la

respiración. Los animales afectados pueden tener dificultades para comer y

Page 3: Actinobacilosis

pueden morir de inanición. Actinobacillus lignieresii puede producir

ocasionalmente mastitis (Radostits & Blood, 2002).

Tratamiento

Esta forma de actinobacilosis se encuentra en todo el mundo, pero es esporádica

y por lo tanto difícil de prevenir. Los brotes en el rebaño son posibles y

generalmente están asociados con el consumo de alimentos gruesos, abrasivos

que fomenten la formación de las lesiones en la boca. Yoduro de sodio es el

tratamiento de elección en actinobacilosis en rumiantes. Yoduro de sodio IV (70

mg / kg de una solución de 10% -20%) se administra una vez y luego repite 1 o 2

veces a intervalos de 7 a 10 días. Si los signos clínicos de toxicidad de yodo se

desarrollan (incluyendo la caspa, diarrea, anorexia, tos y lagrimeo excesivo), la

administración de yodo debe interrumpirse. La mejoría clínica se ve a menudo

dentro de las 48 horas de la terapia. Agentes antibacterianos sistémicos, tales

como, penicilina, ampicilina, florfenicol, y tetraciclinas pueden ser eficaces y se

recomienda principalmente en casos graves de actinobacilosis o en casos

refractarios a la terapia de yoduro de sodio (Merck Manuals, 2013).

Prevención y control

Los animales con lesiones abiertas deben aislarse, el alimento rugoso o pastos

que pueden producir daños en la mucosa, además de un tratamiento oportuno de

los animales infectados así como evitar la contaminación de los pastos y áreas de

alimento (Quinn, Markey, Carter, Donnelly, & Mead, 2011).

Page 4: Actinobacilosis

BibliografíaMerck Manuals. (01 de Noviembre de 2013). Recuperado el 07 de Agosto de 2015, de

http://www.merckvetmanual.com/mvm/generalized_conditions/actinobacillosis/overview_of_actinobacillosis.html

Quinn, P., Markey, B., Carter, M., Donnelly, W., & Mead, F. L. (2011). Microbiología y enfermedades infeciosas veterinarias. Madrid, España: Acribia, S.A. Zaragoza.

Radostits, O. M., & Blood, D. C. (2002). Medicina Veterinaria tratado de las enfermedades del ganado bovino, ovino, porcino, equino, caprino y equino. Madrid, España: McGraw-Hill-interamaericana.

The Genus Actinobacillus. (20 de Septiembre de 2012). Recuperado el 07 de Agosto de 2015, de http://link.springer.com/chapter/10.1007/978-1-4757-2191-1_20#page-2

UCD Vet views. (Junio de 2009). Recuperado el 07 de Agosto de 2015, de http://www.vetmed.ucdavis.edu/vetext/local-assets/pdfs/pdfs_beef/cca0906-woody-tongue.pdf