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Durante los quince años de Revolución Bolivariana, el sistema educativo, en to-dos sus niveles y subsistemas, ha avan-

zado hacia la conquista de grandes logros. La inclusión, como criterio fundamental de la ca-lidad, ha sido uno de los más significativos, así como garantizar las condiciones de permanen-cia y prosecución de estudios en nuestro país. La democratización del uso pedagógico de las tecnologías de la información y la comunica-ción para el desarrollo humano, el estudio y la investigación a través de las Canaimas, Infocen-tros y la entrega gratuita de los libros de la Co-lección Bicentenario, son victorias irre-futables del pueblo.

Pero, quizás, el más importante triunfo, ha sido el nacimiento de un auténtico sistema, el Siste-ma de Educación Pública Bolivariana; porque como dijera el Presidente Chávez “aquí no ha-bía en verdad un sistema educativo ¡no!”. Sin embargo la Revolución llegó a garantizar el derecho a la educación, y transformó un mo-delo que había sido desmontado con especial perversidad y cuyo destino eminente era la pri-vatización

La desinversión en materia educativa fue tan descarada que no dejaba duda de la espanto-sa intención de los artífices que la impulsaban. Altísimos índices de deserción escolar, infraes-tructuras abandonadas, reducción presupues-taria, huelgas constantes de maestros y pro-fesores, huelgas de obreros, pagos tardíos de vacaciones y aguinaldos a los trabajadores y trabajadoras, cobro de matrícula escolar, proli-feración de colegios privados y liceos parasis-temas, y un largo etcétera que quedará para la historia. Medidas claramente neoliberales que lesionaron duramente la vida de las familias venezolanas y el potencial productivo del país.

Los gobiernos que desatendieron la educación en nuestro país, que excluyeron al cincuenta por ciento de nuestros niños y niñas, tienen una gran cuota de responsabilidad sobre la in-seguridad que aún hoy padecemos. Aquellos niños y niñas que desatendieron con inten-ción plena y que arrojaron a la vida violenta, a la desnutrición, a las drogas, a la prostitución, al trabajo temprano, son en gran medida los jóvenes y adultos que hoy habitan las cárceles de Venezuela o que forman parte de ese difícil 50% de compatriotas en condición de pobre-za extrema que hemos estado atendiendo con planes especiales.

Recibimos la educación en el suelo, toda la Pa-tria estaba en el suelo, pero desde hace quince años los problemas del pueblo son la prioridad, son los más importantes, y de allí el inmen-so esfuerzo que se ha hecho para rescatar la

educación, la salud, la alimentación y todos los derechos fundamentales del pueblo. Nuestros niñas y niñas no conocerán el hambre, el mal-trato o la cárcel; vivirán sonriendo, soñando, haciendo una patria buena y hermosa.

La realidad, y los indicadores así lo demues-tran, es que desde hace quince años, cuando fue rescatado de la acechante privatización, el sistema de educación pública de Venezuela ha mejorado progresivamente y se ha puesto al servicio de la Patria para contribuir en la cons-trucción de la Venezuela Potencia. Esto, gracias a la inmensa voluntad y a las acertadas políticas de un gobierno comprometido con la prospe-ridad del país, convencido de que Venezuela cuenta con la mejor generación de la historia y consciente de sus obligaciones con la socie-dad. La Educación es responsabilidad básica de todo Estado democrático, porque es un dere-cho humano fundamental.

El Estado Bolivariano ha garantizado y conti-nuará garantizando la gratuidad de la educa-ción. La revolución reivindicó el carácter públi-co y universal del ejercicio de este derecho, ex-pandió la cobertura territorial de la educación e incluyó a quienes sufrían la condena de la exclusión por el hecho de encontrarse en situa-ción de pobreza.

En Venezuela se derrotó el analfabetismo, gracias a la implementación de la Misión Ro-binson, uno de los programas más nobles y hermosos que esta tierra ha recibido. Fueron creadas las Escuelas Bolivarianas, rescatando y honrando el ideario de nuestro más gigan-te padre libertador, Simón Bolívar. Se puso en marcha con prioridad absoluta, el programa de Alimentación Escolar, y más recientemente fue creada la Corporación Venezolana para la Alimentación Escolar, estructura encargada de optimizar los procesos de comercialización, distribución, procesamiento y producción de alimentos, así como de establecer una nueva cultura alimenticia en nuestra población esco-lar. Todo esto, con el objetivo de garantizar a las familias medios estables para ejercer y disfrutar de otros derechos como el de la alimentación, la salud y el trabajo.

El docente y la docente, ciudadanos y ciudada-nas con espíritu y sensibilidad especial, que han decidido aportar en la labor más maravillosa de la sociedad, han sido protegidos durante todos estos años, se les ha mejorado sustancialmente sus condiciones laborales y se continúa traba-jando para avanzar en esta materia en tanto la deuda social es inmensa.

Nuestra educación ha dado pasos agiganta-dos en la búsqueda de un modelo propio, en

Presentación

En enero del 2014, el Presidente Nicolás Maduro ordenó la realización de una amplia y plural Consulta Nacional por la Calidad Educativa, por lo cual el Ministerio del Poder Popular para la Educación, bajo la dirección del Ministro Héctor Rodríguez, adelantó, entre abril y julio, más de 46 mil eventos de distintas magnitudes que permitieron recoger la opinión del pueblo venezolano sobre cómo mejorar la calidad de la educación. La Consulta constituyó un hecho político-pedagógico que logró movilizar a la sociedad venezolana para expresar libre y democráticamente su opinión. Nos permitió tener una fotografía actual de la educación, reconociendo los avances alcanzados y los desafíos pendientes. La amplia base de información recopilada permitirá seguir desarrollando investigaciones y políticas públicas. Entendemos estos resultados como un mandato para la formulación de políticas públicas en todos los ámbitos, niveles y modalidades de la educación.

acabar con tanta transculturización, en el abandono de modelos foráneos que intentaron y continúan intentando acabar con nuestras raíces. Lo planteaba el maestro Simón Rodríguez como parte de sus ideas pedagógicas “o inven-tamos o erramos” o le damos un voto al ingenio propio o nos conformamos con imitar lo que otros quieren que imitemos. Se trata de reconocer el ahora histórico para generar propuestas renovadas, establecer nuevas relaciones, nuevas condiciones y potencialidades. En este respecto avanzamos sin dudar de nuestras capacidades como país, conscientes de que el reto se nos presenta a diario con diferentes rostros, y de la necesidad de “ser cultos para ser libres” como dijo Martí.

La Venezuela que se expresa hoy en el modelo de educación pública es la ver-dadera, es la independiente, la digna, con alta moral y espíritu libertario, es la Venezuela productiva, enamorada de la integración y de la mirada inocente de los niños y niñas, con moral y luces, con conciencia de patria, soberana, justa. El sistema que ha nacido reconoce la grandeza y fundamenta su acción en el hombre más grande de Nuestra América, Simón Bolívar, y se apega al mandato del pueblo soberano.

Nuestra educación ha sido fundamental en la restitución del ejercicio social. Millones de venezolanos y venezolanas ejercen con plenas garantías todos sus derechos civiles, políticos, sociales, económicos y culturales, tal como lo manda la Constitución. El sistema educativo público, gratuito y obligatorio ha sido primordial para la reconfiguración de la ciudadanía, pasando de aquella concepción de la ciudadanía del individuo competidor del neoliberalismo, a una ciudadanía profundamente democrática arraigada en la construcción del Poder Popular.

Sin dudas, la educación que teníamos, o más bien que no teníamos, ha que-dado en el pasado. Sin embargo, tenemos plena conciencia de que aún nos quedan por delante grandes retos que debemos superar, y en los que trabaja-remos incansablemente. Nos corresponden tiempos de profundización para mejorar y fortalecer la educa¬ción inclusiva y de calidad para todas y todos.

Es precisamente esta postura autocrítica y responsa¬ble lo que motivó al Presi-dente de la República, Nicolás Maduro Moros, a asignarnos la maravillosa tarea de hacer una amplia y plural consulta nacional, con el objetivo cla¬ro de gene-rar las bases y condiciones de desarrollo de la educación que harán posible la Venezuela Potencia.

Durante un período de cinco meses, nos encontra¬mos con una gran diversi-dad de grupos, sectores y orga¬nizaciones que de manera democrática mani-festaron sus opiniones respecto a la educación. Toda la experiencia se convirtió en una gran suma de voluntades, en una gran expresión de confianza a favor de la educación.

El desarrollo y feliz término de la consulta es una muestra más del espíritu de-mocrático del Estado venezo¬lano. Nos encontramos en un espacio y en un debate co¬mún, las familias, las comunidades, el Poder Popular, mo¬vimien-tos sociales, las universidades, las y los docentes, las y los estudiantes, los tra-bajadores y trabajadoras, cada uno con sus posturas, sus aportes, sus críticas y la pasión que indudablemente genera el tema de la educación. Nos encontra-mos con nuestros saberes, con nuestras expe¬riencias, todos con el objetivo de forjar la educación de la Venezuela patriota, de la Venezuela potencia.

Somos afortunados, estamos haciendo historia,

“La revolución ha convertidoa toda la patria en una escuela”

Hugo Chávez

Héctor Rodríguez CastroMinistro del Poder Popular para la Educación

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La metodología

Modalidades de participación

Estrategia escolar y sectorial

Estrategia de participación por encuestas

Estrategia de estudios específicos

Sectores consultados Los temas consultados fueron:

La Consulta por la Calidad Educativa colocó en el de-bate público 11 ejes temáticos que fueron ampliamen-te discutidos en numerosos talleres mediante pregun-tas abiertas, dibujos infantiles, mesas técnicas, grupos focales, encuestas cerradas, foros universitarios, con-gresos pedagógicos, entrevistas a profundidad con expertos nacionales e internacionales, sesiones de debate con reconocidos especialistas de educación de distintas tendencias políticas, asambleas con sectores específicos, actividades de calle para movilizar la opi-nión pública y 30 investigaciones especializadas sobre temas de particular interés que requerían estudios a profundidad.

Los equipos de sistematización recogieron las opinio-nes de los consultados por eje temático, consideran-do el nivel de reiteración y la importancia de las pro-puestas en formatos unificados para luego elaborar los reportes sectoriales y los informes integrados que dieron paso a la definición de los principales acuerdos nacionales sobre la calidad educativa.

ESCOLAR, que involucró a todos los actores que hacen vida en las escuelas y liceos.

SECTORIAL, que involucró la participación directa de los diversos sectores sociales del país a través de preguntas abiertas debatidas en mesas de trabajo.

ESTUDIOS sobre temas específicos que permitieron complementar la mirada nacional sobre la educación.

ENCUESTAS cerradas dirigidas a la población en general.

Esta estrategia constituyó la de mayor alcance, logrando la parti-cipación de 6.760.129 personas. Su propósito fue recoger, de ma-nera directa, el sentir y la opinión de los diversos sectores, en espe-cial los directamente relacionados con la educación como los y las es-tudiantes y docentes. Se realizaron eventos de consulta con 46 secto-res y temáticas diferentes, a través de metodologías como mesas de trabajo, congresos pedagógicos, mesas técnicas y grupos focales.

En esta estrategia participaron 436.528 personas a través de dos vías: web y bu-zones. En la primera se accedía a distancia ingresando al www.consultacalidadeduca-tiva.gob.ve, y en la segunda depositando el formulario en buzones ubicados en los espacios públicos dispuestos para tal fin, los cuales fueron distribuidos por el volun-tariado. Los cuestionarios contenían tres preguntas cerradas con varias opciones de respuestas excluyentes que exploraban las acciones más importantes destinadas a mejorar la calidad de la educación, el papel de las familias y la duración de la jornada educativa.

Se realizaron estudios específicos sobre temas claves asociados a la educación básica, que permitieron complementar la mirada del país sobre la situación actual de la educación. Se trató de 30 estu-dios que se valieron de metodologías diversas: 33% (10 estudios) fueron netamente documentales; 17% (5 estudios) requirieron levantamiento de información en campo con métodos cuantita-tivos; y 50% (15 estudios) supusieron trabajo de campo haciendo uso de métodos cualitativos. En los estudios de campo participa-ron 36.832 personas, brindando aportes, informaciones y datos que permitieron caracterizar la educación básica en el país.

Cada una de estas estrategias cuenta con un informe de sistemati-zación en el que se presentan los datos, informaciones, opiniones, perspectivas de los actores consultados o hechos puntuales estu-diados con mayor detalle.

Objetivos y características de la educación básica.Perfil integral de las y los egresados.Ejes integradores y áreas de conocimiento.La organización y la cultura escolar.Las prácticas de supervisión y seguimiento.La formación y la carrera docente.La vinculación de los centros educativos con la comunidad.La participación de las familias, la comunidad y los estudiantes en la gestión escolar.Educación y trabajo en lógica de educación permanente.La infraestructura y equipamiento escolar.El desempeño institucional y las buenas prácticas educativas.

Estudiantes, docentes, familias, consejos educati-vos, cultores, deportistas, organizaciones ambienta-listas, grupos campesinos, comunas y movimientos sociales, autores de la Colección Bicentenario, con-fesiones religiosas, universidades e intelectuales de la educación, consejeros y consejeras de la consulta, movimiento de cultura de paz, defensorías educa-tivas, escuelas técnicas, educación especial, educa-ción inicial, grupos vinculados al mantenimiento, la estética y el cuido de instalaciones, grupos relacio-nados con las telecomunicaciones, historiadores, escuelas de gestión privada, gremios, adolescentes embarazadas, movimientos de diversidad sexual, jóvenes en conflicto con la ley, jóvenes en situación de consumo, alcaldías y gobernaciones, institucio-nes del Estado, misiones educativas, organizaciones de mujeres, pescadores y pescadoras, pueblos indí-genas, personas privadas de libertad, profesionales de la orientación y grupos afrovenezolanos.

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LA INCLUSIÓN COMO POLÍTICA EDUCATIVA:

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Todos los sectores consultados va-loran positivamente la educación pública, gratuita, obligatoria, de calidad, democrática, laica, inte-gral, permanente, con pertinencia social y respetuosa de la pluralidad de pensamiento. Se reconoce la es-cuela como una institución nece-saria e insustituible y se valora po-sitivamente la política de inclusión educativa del Gobierno Bolivaria-no, por lo que se exige sostenerla y expandirla ampliamente. “Queremos que la educación siga siendo gratuita, obligatoria e inclusi-va para que no se quede ningún niño, niña y adolescente sin estudiar, y que la escuela les brinde las herramientas suficientes para asumir los retos que plantea la vida”. (Familias).

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Todos los sectores consultados manifestaron la importancia que tiene la escuela para ofrecer segu-ridad afectiva a los niños, niñas y adolescentes. Los maestros, maes-tras y el personal escolar deben ser testimonios de vida, convirtiéndo-se en referentes positivos para el estudiantado, logrando fomentar el interés por la pregunta, la in-vestigación, el conocimiento y el aprendizaje para la vida y el ejerci-cio de la ciudadanía. “Queremos que nuestras clases sean dinámicas y participativas, con mu-chas actividades fuera del salón; que no sea solo dictar o copiar”. (Estudiantes)

“La Educación debe contribuir a la for-mación integral de las niñas, niños y adolescentes en los principios y valores fundamentales, desde una pedagogía del amor y orientada por la ética, ac-titud, compromiso y responsabilidad en el desempeño docente para la consolidación de la sociedad justa y equitativa en respeto a la diversidad humana”. (Docentes)

UNA PEDAGOGÍA DEL AMOR, EL EJEMPLO Y LA CURIOSIDAD:

LA FORMACIÓN DE LOS MAESTROS Y MAESTRAS:

LAS ESCUELAS COMO TERRITORIOS DEMOCRÁTICOS Y DE PAZ:

UN SISTEMA QUE PROTEJA Y ORIENTE A LOS NIÑOS, NIÑAS Y JÓVENES:

Hubo consenso nacional sobre la necesidad de mejorar la formación docente. Se pide que los maestros y maestras tengan dominio con-ceptual de todos los contenidos, siendo capaces de estimular pro-cesos de pensamiento crítico; que conozcan el acontecer nacional e internacional; que fomenten la identidad nacional; que apliquen métodos de enseñanza innovado-res; que manejen las nuevas tec-nologías; que estimulen un apren-dizaje creativo, contextualizado, vinculado con la familia y la co-munidad. También se piden reglas claras y justas en los procesos de ingreso y ascenso a la docencia, así como estímulos y justa valoración social de la profesión.

“Queremos que las familias y toda la sociedad reconozcan y valoren nues-tro trabajo y compromiso con la edu-cación de nuestro pueblo”. (Docentes)

“No cualquier persona puede ser do-cente, ya que ello pasa por amar a las niños, niñas y adolescentes; por com-prender e involucrarse con su entorno familiar y comunitario; por entender al estudiante más allá del pupitre y como un ser humano con intereses, inquie-tudes y necesidades que la escuela de-bería abordar”. (Docentes).

Todos los sectores manifiestan que los centros educativos deben ser lugares seguros y profundamente democráticos donde no existan prácticas de acoso, discriminación, castigos, maltratos verbales o psi-cológicos ni hechos de violencia o ejercicios autoritarios. Se pide un ambiente donde las normas de convivencia estén claras, se res-pete la autoridad, la gestión sea transparente y el ejercicio de la ciudadanía sea rutinario para lo-grar una actitud positiva hacia el estudio, la solidaridad, el fomento de la interculturalidad y el respeto a la diferencia.

“Queremos la integración de todos los padres, madres, representantes y la comunidad en general para que el niño y la niña aprendan a compartir en convivencia”. (Familias).

Se valora positivamente y se so-licita sostener en el tiempo las políticas de inclusión: las becas escolares, el programa de salud y alimentación escolar, la demo-cratización de los recursos para el aprendizaje como las Canaimitas, las tabletas, la Colección Bicente-nario, los Centros de Informática o las bibliotecas escolares. Se de-manda la creación de un programa de orientación para acompañar a los estudiantes en el paso de un nivel educativo a otro, así como la extensión del horario escolar con actividades científicas, de promo-ción cultural y deportiva.

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UNA RELACIÓN PEDAGÓGICA ENTRE LA ESCUELA, LA FAMILIA Y LA COMUNIDAD:

UNA MEJOR EDUCACIÓN MEDIA GENERAL Y MEDIA TÉCNICA:

EDIFICACIONES ESCOLARES PEDAGÓGICAS Y PERTINENTES:

EVALUAR LA CALIDAD EDUCATIVA:

REINSTITUCIONA-LIZAR EL MPPE:

Se solicita que las familias asuman mayor protagonismo en los Con-sejos Educativos, que participen en los programas de formación y estrechen la relación con las maes-tras y maestros de sus hijos e hijas. También se solicita que los proyec-tos educativos integrales comuni-tarios sean experiencias pedagó-gicas que respondan a los proble-mas locales, y que se propicie el intercambio de saberes. Jóvenes y adultos deben tener oportuni-dades para seguir estudiando y aprendiendo durante toda la vida. “La escuela debe convertirse en centro de atracción de todos los miembros de una comunidad, donde la familia pueda ingresar para afianzar lo que hacen los niños y niñas y los valores que le enseñan en la escuela”. (Familias)

“Queremos que nuestros padres y ma-dres participen y nos acompañen en espacios d formación, en actividades recreativas y culturales que se desarro-llen en la escuela”. (Estudiantes)

Todos los sectores hicieron énfa-sis en la necesidad de diseñar un currículo nacional armónico que atienda a los desafíos actuales en el marco de la Constitución Boli-variana y la Ley Orgánica de Edu-cación. Se solicita que de manera inmediata se realice una actualiza-ción de los programas y dinámicas de la Educación Media y Media Téc-nica. Los alumnos solicitan no te-ner horas ociosas por ausencia de profesores; que las y los profesores diseñen estrategias y actividades grupales que les sean interesantes, significativas y vinculadas con los problemas cotidianos de su entor-no inmediato; que los formen para la sexualidad responsable, la lectu-ra crítica de los medios y el amor a la Patria; y que los orienten de ma-nera amorosa y solidaria en las de-cisiones vitales que deban tomar.

“Quiero aprender, hacer mi pro-yecto de vida, que nos enseñen a ser inteligentes; aprender a pensar mejor, que me enseñen lo que es bueno y lo que es malo, que me enseñen mi verdadera historia”. (Estudiantes)

“Es importante empezar a educar para la independencia, el trabajo liberador y la vida desde la Educación Inicial, ac-tualizando las especialidades según la necesidad y potencialidad de cada es-tudiante y de su comunidad, haciendo revisión de los contenidos según el rit-mo y capacidad de cada estudiante” .(Familias)

“Las maestras debemos desarrollar co-nocimientos, habilidades y destrezas para relacionar los contenidos del cu-rrículo con la vida, de tal manera que las y los estudiantes construyan sus aprendizajes desde la cotidianidad, para que, desde allí, se transforme”.(Docentes)

“Debemos vincular la teoría con la práctica, haciendo útil los conoci-mientos al servicio del desarrollo per-sonal y colectivo” .(Docentes)

Existe un consenso general en señalar que hay que hacer el máximo esfuerzo para tener escuelas y liceos por expan-didos por todo el país. Y que contemos con edificaciones bonitas, sencillas, seguras, de fácil acceso, con ambien-tes de aprendizaje de usos múltiples, ventilados e iluminados, así como áreas verdes para el juego colectivo, la recreación y la producción. También se solicitan laboratorios equipados de diverso tipo, salones audiovisuales, auditorios y talleres. Edificaciones de fácil mantenimiento, limpias y amiga-bles. Todos los consultados piden que se fomente una cultura del manteni-miento, el cuidado y el reciclaje como valores sociales.

“Quiero una escuela alegre con muchas flores, con muchas luces, con muchos salones pintados de colores como el arcoíris, cancha y un salón de películas, que tenga una bandera grande, baños limpios y muchos árboles”.(Estudiantes)

Existe gran coincidencia en señalar que la educación debe someterse a procesos de evaluación de manera sistemática y continua, considerando los contextos particulares. Se solicita el fortalecimiento de los mecanismos de supervisión educativa como un pro-ceso pedagógico riguroso de acom-pañamiento que sirva para evaluar las prácticas educativas con criterios e indicadores de calidad integral, a través de los cuales se consideren las características de los diferentes niveles y modalidades del sistema educativo. Se demanda que los supervisores y supervisoras sean personas prepa-radas, comprometidas y ejerzan esta función con ética y responsabilidad. Existe consenso en la necesidad de desarrollar un sistema de evaluación de la calidad educativa que atienda a las necesidades, desafíos y prácticas nacionales.

Es unánime el deseo de que el Mi-nisterio del Poder Popular para la Educación sea un organismo efi-ciente, transparente, con capaci-dad de dar respuestas a sus usua-rios y usuarias, con una estructura organizativa sencilla, expandida territorialmente, desburocratizada y cuyos procesos estén automati-zados. Se solicita la constitución de circuitos escolares que agrupen a las instituciones educativas que estén próximas en su ubicación territorial para desarrollar orgáni-camente una red de trabajo man-comunado.

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I. Garantizar educación de calidad para todas y todos, sin ningún tipo de exclusiones. Es tarea prioritaria elevar la cobertura en Educación Inicial y Media, así como brindar especial atención a las poblaciones en condiciones de pobreza extrema, alejadas de los centros urbanos, adul-tos y adultas, indígenas y con necesidades educativas especiales.

II. Desarrollar una pedagogía del amor, el ejemplo y la curiosi-dad, que sea rigurosa y solidaria y forme en y para el amor a la Patria. Una educación para la interpretación, comprensión y transformación del mundo en que vivimos, aprendiendo en el hacer reflexivo desde va-lores que reivindiquen el ser humano y la vida en el planeta.

III. Fortalecer el papel de los maestros y las maestras como actores fundamentales de la calidad educativa, mediante la reinstitucionalización de la carrera docente, el mejoramiento de las condiciones de trabajo, el fomento de su valoración social y la garantía de una formación inicial y permanente centrada en el quehacer peda-gógico como acción inteligente y sensible.

IV. Promover un clima escolar caracterizado por la convivencia, la seguridad, la comunicación, la participación, el trabajo cooperativo y la solidaridad, dirigidos a fortalecer la acción pedagógica de los centros educativos. Es indispensable fomentar la organización y la participación protagónica de las y los estudiantes en todas las dimensiones de la vida escolar.

V. Garantizar un sistema de protección estudiantil que pro-porcione materiales educativos, orientación, acompañamiento, apoyo académico, así como un sistema de becas y servicios estudianti-les que fortalezcan la atención integral a las y los estudiantes. Un tema indispensable es la educación para la sexualidad responsable y placen-tera.

VI. Lograr una estrecha relación entre las familias, la escuela y la comunidad, en función de garantizar la atención, el cuidado y la educación de sus hijos e hijas y una gestión escolar participativa, eficaz y transparente. Abrir la escuela a la diversidad, la interculturalidad y la generación de aprendizajes desde las características propias de cada localidad.

VII. Desarrollar un currículo nacional integrado y actualizado, y en especial renovar los programas, estrategias y dinámicas pedagógicas de la Educación Media general y Media Técnica, considerando especial-mente la vinculación entre educación y trabajo, y la interrelación entre la Educación Media y Educación Universitaria.

VIII. Garantizar edificaciones educativas sencillas, amiga-bles, seguras, debidamente equipadas y mantenidas, en consonan-cia con el modelo educativo que aspira nuestro país.

IX. Desarrollar un sistema de evaluación de la calidad educati-va comprehensivo y periódico, así como una estructura de super-visión que brinde acompañamiento continuo a todas las instituciones educativas.

X. Reconfigurar la organización y funcionamiento del Ministe-rio del Poder Popular para la Educación, en función de lograr una gestión, participativa, eficaz y transparente.

El Gobierno Bolivariano agradece al Pueblo de Venezuela la amplia, decidida

y festiva participación en la Consulta, demostrando una vez más nuestra vocación

democrática. Con los aportes, críticas y estudios a profundidad que se hicieron de manera transparente y bajo la premisa de “mandar obedeciendo”, el Gobierno asume nuevas

banderas de lucha para cumplir el mandato popular de seguir construyendo una política

pública que siga propiciando la inclusión, mejore las prácticas educativas y logre que los centros de Educación Inicial, las escuelas y los

liceos se conviertan en una referencia de calidad pedagógica.

Invitamos a todos los maestros y maestras, a la familia venezolana, las y los estudiantes, las

comunidades y los diferentes sectores de la vida nacional a acompañarnos en esta importante

tarea. Trabajemos juntos para seguir impulsando una política por la calidad

educativa y por la reinstitucionalización necesaria para lograr que la educación pública

sea mejor cada día y sirva a los intereses de la Nación.

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DIEZ BANDERAS, UNA LUCHA POR LA CALIDAD EDUCATIVA

El Gobierno Bolivariano asume la responsabilidad de trabajar para seguir fortaleciendo la Educación Pública Bolivariana. Invitamos a todo el Pueblo de Venezuela, especialmente a los y las estudiantes, docentes y familias de la Patria, a sumarse y asumir un compromiso de lucha por la Calidad Educativa.