Entendemos por población el conjunto de personas que habita un territorio.

En el año 2002, la población se cifraba en seis mil millones de habitantes, se distribuye de manera desigual: hay lugares muy poblados y otros, donde la población es prácticamente inexistente.

La característica más destacada de la población es su dinamismo. La población no es estática, sino que diversos factores como la natalidad, la mortalidad y las migraciones han hecho evolucionar la población a lo largo de la historia y han originado, aunque con oscilaciones su aumento.

Actualmente el problema de la superpoblación, presente durante décadas parece alejarse ya que el crecimiento de la población mundial tiende a estabilizarse.

Las migraciones son tan antiguas como la propia humanidad. Por lo tanto, las corrientes migratorias no son un fenómeno actual, aunque han adquirido una gran magnitud en nuestros días. Las migraciones actuales por motivos de trabajo son las más importantes.

Las variantes de la población de un lugar dependen de dos componentes: por un lado, el crecimiento natural de la población (nacimientos y defunciones) y, por otro, del movimiento migratorio (inmigración y emigración).

La dinámica que decide el movimiento natural de la población es sencilla: si los nacimientos son más numerosos que las defunciones, la población tiene un crecimiento natural o vegetativo positivo; en cambio, si las defunciones son más elevadas que los nacimientos, la población tiene un crecimiento natural o vegetativo.

La natalidad hace referencia al número de nacimientos que se producen en una población. Para medirla se utiliza la tasa bruta de natalidad (tbn) que indica el número de nacidos vivos partidos por el número de habitantes por mil.

La tasa de natalidad es muy diferente en unos y otros lugares del mundo. En los países desarrollados es muy baja: en América del Norte está en torno al 15 por mil y en Europa supera ligeramente el 10 por mil. Por el contrario, es muy elevada en los países subdesarrollados, siendo África el continente del planeta con la natalidad más alta, pues supera el cuarenta por mil.

Factores que influyen en la natalidad: la natalidad de un territorio depende de un conjunto de factores

El desarrollo económico: en los países más desarrollados los hijos son vistos como una carga económica (gastos en educación, cuidados médicos, alimentación, etc.) hasta edades elevadas. Por el contrario, en los países subdesarrollados los hijos trabajan desde edades tempranas y, además, se encargan de cuidar a los padres cuando llega la vejez

La cultura: en los países desarrollados se está retrasando paulatinamente (poco a poco) la edad del matrimonio y la edad a la que se tiene el primer hijo, lo que reduce las familias. En los países de otras culturas las mujeres se casan pronto, muchas veces antes de los 18 años

La estructura social: la emancipación de la mujer y su incorporación masiva al mundo laboral repercuten en un descenso en el número de hijos

Factores biológicos: la proporción de personas jóvenes condiciona la natalidad: si los jóvenes son numerosos, la natalidad es mayor que si predomina la población vieja

Factores políticos: hay países que practican políticas de control estricto de la natalidad (ejemplo: China) y otros que promueven mediante incentivos sociales y económicos el desarrollo de la natalidad.

Per què la natalitat es manté tan alta als països del tercer món?

La reducció de la natalitat reflecteix el millorament de les condicions de vida. A Àfrica, Àsia i l’Amèrica Llatina, aquesta evolució social i psicològica no s’ha produït encara per a la massa de la població: molts xiquets encara són treballadors, no van a la escola i participen en les faenes de camp; a les ciutats són ocasionalment enllustradors, venedors de diaris, de llepolies o de mercaderies menudes, missatgers, captaires, etc. Aquestes activitats més o menys regulars els permeten guanyar alguna cosa amb què viure miserablement; aquests modestos guanys són molt preuats pels pares, que a més en molts casos no tenen treball. Per a aquestes famílies tan pobres no existeix el problema de repartir els béns entre un nombre massa gran d’hereus; els fills tampoc són càrregues, sinó més aviat beneficis i quasi no tenen motius per a reduir-ne el nombre.

Y. LACOSTE, Geografia general, 1983

La mortalidad hace referencia al número de defunciones en una población. Para medirla se utiliza la tasa bruta de mortalidad (tbm)

Hasta el siglo XX la mortalidad era muy elevada, a causa de las enfermedades, el hambre y las guerras frecuentes. En el siglo XIX y primeros años del siglo XX la mortalidad descendió mucho en los países desarrollados, como consecuencia de las mejoras sanitarias (vacunas, higiene, etc.) y alimentarias. En la segunda parte del siglo XX estos avances se difundieron en los países subdesarrollados, con lo que la mortalidad descendió bruscamente.

Los factores que condicionan la mortalidad son: la edad de la población (es mayor en países envejecidos) y de factores sanitarios y alimentarios.

La tasa de mortalidad infantil es un buen indicador del nivel de desarrollo y de la situación sanitaria de un territorio. En los países ricos la mortalidad infantil es débil (7 por mil en Europa Occidental). Por el contrario, en algunos países africanos esta tasa puede superar el 90 por mil.

Gràfic de la mortalitat infantil segons el grau de desenvolupament

A lo largo de la historia la población mundial creció con lentitud hasta el siglo XIX. La causa era que al elevado número de nacimientos fue contrarrestado por una fuerte mortalidad, lo que provocaba que el crecimiento fuera débil.

A partir del siglo XIX, el ritmo de crecimiento demográfico se aceleró. La revolución industrial, unido a los avances médicos y científicos, inició en Europa Occidental un cambio profundo: es la llamada revolución demográfica (crecimiento brusco de la población debido al mantenimiento de una elevada natalidad y al descenso de la mortalidad).

A lo largo del siglo XX se produjo una gigantesca explosión demográfica. Tras la segunda guerra mundial (1939-1945) se inició una fase de crecimiento acelerado general (ya no sólo en Europa Occidental), que continúa en la actualidad. Así, en 1950 la población mundial era de dos millones de habitantes. En tan sólo 50 años esa cifra se ha triplicado, hasta alcanzar los seis millones de habitantes.

En esta explosión demográfica de los últimos cincuenta años, se produce un brusco y gran contraste entre los países desarrollados (donde la población está descendiendo) y los países subdesarrollados (la población está en constante crecimiento, ante el descenso de la mortalidad por las mejoras en la alimentación y la sanidad y al mantenimiento de altas tasas de natalidad).

Así, hoy en día, el crecimiento de la población de concentra en América del Sur, Asia y África, especialmente en este último continente, mientras que en América del Norte, Europa y Japón han detenido, en general, su crecimiento.

¿Cuándo comenzó el crecimiento acelerado de la población?.

¿Qué población estimada tendrá la tierra en el año 2050?.

¿Se prevé que la población siga aumentando o disminuyendo?

PREVISIÓ PER AL SEGLE XXI

SEGLES XIX I XXFINS AL SEGLE XIX

Mortalitatelevada

Natalitatelevada

ANTICRÈGIM

DEMOGRÀFIC

Lentcreixementdemogràfic

Natalitatelevada

Descens de la mortalitat

EXPLOSIÓ DEMOGRÀFICA

Acceleració delcreixementdemogràfic

Millores agràries

Avanços sanitaris

Majorhigiene

Baixa mortalitat

Descens de la

natalitat

RALENTITZACIÓDEL

CREIXEMENT

Envellimentde la població

mundial

Majorcreixement

del tercer món

El cuadro de abajo permite captar la evolución de la transición demográfica en nuestros días. Así, se han escogido 20 estados -con las tasas de natalidad y mortalidad correspondientes en el 2005- que ponen de manifiesto los diferentes ritmos existentes a la hora de completar las 5 fases del proceso.

Hay que señalar, sin embargo, que en la actualidad no hay ningún país que se encuentre todavía en la fase 1 porque, afortunadamente, las tasas de mortalidad próximas al 40 o 50‰ hace décadas que no se registran.

http://es.wikipedia.org/wiki/Antiguo_R%C3%A9gimen_demogr%C3%A1fico

VER APUNTES EN WORD

Gràfic sobre la transició demogràfica a Mèxic

Para que aumente la población es necesario que el número de nacimientos sea superior al de defunciones.

A lo largo de la Historia, la población ha crecido de forma lenta, ya que los nacimientos y las defunciones eran muy elevadas.

A partir del siglo XIX, esta situación cambió, produciéndose un gran cambio en la dinámica de la población al sufrir ésta un gran aumento a consecuencia de la reducción de la natalidad. ¿Dónde se produjo?: Se concentró este crecimiento en los países que sufrieron la Revolución Industrial, ya que las ventajas asociadas a este proceso (crecimiento económico, junto a avances en la higiene personal y la investigación y cuidados médicos) lo permitieron. Pero sólo en estos países.

A partir de la década de 1970 aparece un nuevo fenómeno: el brusco descenso de la natalidad en estos países, que provoca que las líneas de la natalidad y mortalidad vuelvan a juntarse y cuya consecuencia será en escaso crecimiento de la población en estos lugares

Pero, desde aproximadamente mitad del siglo XX, las ventajas derivadas de la industrialización se generalizan provocando un descenso de la mortalidad generalizado, pero que en los países en vías de desarrollo, todavía se mantienen altas las tasas de natalidad. Al generalizarse el descenso de la mortalidad, se produce un muy fuerte aumento de la población.

Características: Muy elevado crecimiento natural,

causado una muy elevada tasa de natalidad

La elevada tasa de natalidad se debe, en resumen a: la necesidad familiar de una pronta incorporación al trabajo, la elevada mortalidad infantil (a consecuencia de las deficiencias sanitarias y alimentarias), el no control de la natalidad por parte del Estado.

La esperanza de vida en estos países es la más baja del planeta, si bien, la introducción de medidas sanitarias poco a poco va permitiendo que la esperanza de vida vaya aumentando, pero muy poco a poco. Los factores que explican esta baja esperanza de vida son la malnutrición y la extensión de conflictos armados.

Los grupos de edad que predomina es la población joven, consecuencia de la alta natalidad y la menor esperanza de vida. (ver tabla adjunta)

Problemas

el crecimiento tan elevado de la población ocasiona que haya que repartir los recursos entre más cantidad de población, y precisamente recursos es de lo que adolecen estas zonas, así se agudizan problemas como el hambre o la extensión de enfermedades.

El alto predominio de población joven, junto al escaso desarrollo de los recursos, provoca que puedan existir empleos para todos, por lo que los puestos de trabajo son insuficientes y ello provoca el mantenimiento o extensión de la pobreza, junto a la necesidad de emigrar en busca de oportunidades de empleo.

Características:

El crecimiento vegetativo es muy débil, causado por: La incorporación de la mujer al mundo laboral, la difusión de los anticonceptivos, el retraso en la edad de tener el primer hijo, el gran gasto que supone un hijo o la menor influencia de la religión en la sociedad.

Así, uno de los principales problemas es su muy baja tasa de natalidad, que supone además el problema del reemplazo generacional.

Otra de sus características es su alta esperanza de vida, siendo éste grupo de población (a causa del descenso de la natalidad) el que últimamente va creciendo en mayor medida, provocando un nuevo problema: el envejecimiento de la población.

Nombre de fills per dona a Europa

L’edat d’entrada al col·lectiu de majors es pren, en la majoria dels països, coincidint amb l’edat de jubilació, si bé l’augment de la longevitat ha portat a considerar edats més altes, aleshores es parla de l’envelliment de l’envelliment. Així, en el cas d’Espanya es prenen els 65 anys, tenint en compte també la població amb 85 i més anys.

El procés d’envelliment de la població d’Espanya ha estat degut, en primer lloc, a la forta reducció de la fecunditat, que al nostre país s’inicia al final dels anys setanta, i actua com a segon factor la disminució de la mortalitat. Pel que fa a la migració, durant aquest període, no ha tingut una influència important en la població i la seua distribució per edats. En la població de majors de 64 anys, el nombre de dones supera sempre el d’homes. Hi ha factors que es podrien qualificar de cojunturals, com la Guerra Civil espanyola i l’emigració, incidint en aquest resultat, però és la sobremortalitat masculina, és a dir, la major mortalitat dels homes enfront de les dones, la que d’una forma continuada influeix en aquest. L’any 2000, Espanya se situa entre els sis països més envellits dels quinze que formen

la Unió Europea, darrere Itàlia, Suècia i Grècia. Si l’any 2000 es calculen 6,8 milions de persones amb 65 i més anys, l’any 2020 n’hi haurà 8,6 milions. L’any 2050 s’han obtingut 12,8 milions. En aquest cas, la participació de la població de majors de 65 anys, creixeria des del 17 per cent actual fins a superar el 31 per cent l’any 2050.

Margarita CANTALAPIEDRA, L’envelliment demogràfic a Espanya (Adaptació)