una teorización de la conciencia

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teorización de la conciencia

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Una teorizacin de la concienciaEn este captulo, presento la hiptesis del espacio de trabajo neuronal global, fruto de la tarea que mi laboratorio llev adelante a lo largo de quince aos para comprender la conciencia. La propuesta es sencilla; la conciencia es informacin compartida por todo el cerebro.El cerebro humano desarrollo redes de larga distancia eficientes, en especial en la corteza pre frontal, para seleccionar informacin relevante y diseminarla por el cerebro. La conciencia es un dispositivo evolucionado que nos permite prestar atencin a una porcin de informacin y mantenerla activa dentro de este sistema de transmisin. Una vez que la informacin es consciente, puede conducrsela con flexibilidad hacia otras reas de acuerdo con nuestras metas actuales. Por eso podemos nombrarla, evaluarla, memorizarla o usarla para planificar el futuro. Las simulaciones computarizadas de las redes neurales muestran que la hiptesis de un espacio de trabajo neuronal global genera precisamente esas marcas que vemos en los registros cerebrales experimentales. Tambin pueden explicar por qu gran cantidad de conocimiento permanece inaccesible a nuestra conciencia. El descubrimiento de las marcas de la conciencia es un avance muy importante, pero estas ondas cerebrales y estos disparos neuronales todava no explican que es la conciencia o por qu ocurre.Porque la descarga tarda, la ignicin global y la sincrona a escala cerebral crean un estado mental subjetivo?Como es que estos eventos cerebrales, por complejos que sean , provocan una experiencia mentalPorque la descarga de las neuronas en el rea V4 provoca una percepcin de color, y la de las neuronas del rea v5 una sensacin de movimiento Si bien la neurociencia detecto muchas correspondencias empricas entre la actividad cerebral y la vida mental, el abismo conceptual entre el cerebro y la mente parece mas amplio que nunca.Sin una teora explicita, la bsqueda contempornea de los correlatos neurales de la conciencia puede parecer tan intil como la antigua propuesta de Descartes de que la glndula pineal es el asiento del alma. Esta hiptesis parece deficiente por que ratifica esa misma divisin que segn se supone, una teora de la conciencia debe resolver: la idea intuitiva de que lo neural y lo mental pertenecen a reinos completamente diferentes. La mera observacin de una relacin sistemtica entre esos dos mbitos no es suficiente. Se requiere un marco terico abarcativo, un conjunto de leyes de enlace que expliquen en detalle cmo se vinculan los eventos mentales con los patrones de actividad cerebral.Los enigmas que desconciertan a los neurocientificos contemporneos no son tan diferentes de los resueltos en los siglos x1x y xx por los fsicos, quienes se preguntaban como las propiedades macroscpicas de la materia comn se originaban en un mero conjunto de tomos. de dnde proviene la solidez de una mesa si consiste casi solo en un vacio, poblado por unos pocos tomos de carbono, oxigeno e hidrogeno Que es un lquido Que es un slido un cristal Un gas Una llama Como es que sus formas y otros rasgos tangibles son la consecuencia de un tejido suelto de tomosPara responder a estas preguntas haca falta una diseccin aguda de los componentes de la materia, pero este anlisis ascendente no era suficiente: se requera una teora matemtica sinttica. La famosa teora cintica de los gases, postulada por primera vez por .., explico cmo las variables macroscpicas de la presin y la temperatura surgan del movimiento de los tomos en un gas. Fue el primero de muchos modelos matemticos de la materia, una cadena reduccionista que hoy en da explica sustancias tan diversas como nuestros pegamentos y pompas de jabn , el agua que bulle en nuestras cafeteras y el plasma que se encuentra en el lejano sol.

En nuestros das hace falta una labor terica para colmar la brecha entre la mente y el cerebro. Nunca ningn experimento demostrara como los miles de millones de neuronas del cerebro humano disparan en el momento de la percepcin consciente. Slo la teora matemtica puede explicar cmo lo mental se reduce a lo neural. LA neurociencia necesita una serie de leyes de enlace, anlogas a la teora de los gases de maxwell boltzmann, que conecte un mbito con el otro. Esta no es tarea fcil: la materia condensada del cerebro humano tal vez sea el objeto ms complejo sobre la faz de la tierra. A diferencia de la estructura simple de un gas, un modelo del cerebro requerir muchos niveles anidados de explicacin. Al igual que la complicada disposicin de unas muecas rusas, la cognicin es resultado de una organizacin sofisticada de rutinas mentales o procesadores, cada uno implementado por circuitos distribuidos a lo largo del cerebro, construidos a su vez por docenas de tipos de clulas. Incluso una sola neurona, con sus decenas de miles de sinapsis, es un universo de molculas en movimiento que durante siglos proporcionaran trabajo a quienes deseen proponer modelos de su funcionamiento.A pesar de estas dificultades, en los ltimos quince aos mis colegas jean Pierre changeux, Lionel naccache y yo comenzamos a colmar la brecha. Esbozamos una teora especfica de la conciencia, el espacio de trabajo neuronal global, que constituye la sntesis condensada de sesenta aos de modelado psicolgico. En este captulo espero lograr convencerlos de que , aunque todava estamos muy lejos de contar con leyes matemticas precisas, ahora poseemos ciertos rudimentos de la naturaleza de la conciencia, de qu manera aparece como resultado de actividad cerebral coordinada, y por que exhibe las marcas que vemos en nuestros experimentos.