triptico portal de belén de trevélez

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1. Colmado 2. Herrería 3. Habitación interior 4. Cocina antigua 5. Pensión 6. Plaza del Mercado 7. Taberna 8. Réplica fuente 9. Iglesia San Benito 10. Escena matanza 11. Carpintería 12. Alcoba 13. Cortijo 14. Costurera 15. Horno 16. Escena hilanderas 17. Escuela 18. Ermita de San Antonio 19. Ayuntamiento Interior 20. Era 21. Barrio alto 22. Horno 23. Nacimiento 24. Corral 25. Molino 26. Escena pescadores 27. Gallinero 28. Cuesta 29. Puente Río Grande 30. Fuente Barrio Alto 31. Muro Al entrar encontramos unas preciosas vistas de lo que, hemos pretendido, sería un Trevélez a pequeña escala, con sus tres barrios, sus dos ríos y el espectacular paisaje que componen sus montañas. Retrocediendo en el tiempo, hemos intentando recrear, con la mayor exactitud posible, algunas de las escenas que, seguramente, se vivían en tiempos pasados en nuestro pueblo. Comenzamos la visita con el recorrido por el barrio bajo, donde encontramos, siempre por la derecha, el colmado, la herrería y una habitación interior, en la cual, si miran por los ventanales, encontrarán un salón acorde a la época. En este punto podemos disfrutar de una perfecta recreación del puente del río grande, su poza y la gran piedra que se alza en el centro de ésta. Continuando encontramos un gallinero junto a la escena de una cocina que reproduciría a las de la época. Sobre el muro de la plaza se sitúa la pensión y ya se vislumbran algunos de los callejones que derivan en la plaza del mercado, con su turronero, espartero, puestos de especias y frutas. Junto a ésta se encuentra la taberna con unos detalles maravillosos del ocio de entonces. La fuente de piedra que linda con la iglesia de San Benito, dos preciosas copias de las actuales. Tras la iglesia, en el cauce del río encontramos la escena de los pescadores de la conocida trucha de Trevélez. Desviamos nuestra atención a lo que hemos querido que sea la mayor escena de todas: la matanza. Se plasma el proceso que se llevaba a cabo para conseguir nuestros famosos jamones y embutidos, que se curaban con el fantástico aire de nuestro entorno. La matanza congregaba mucha gente que trabajaba y disfrutaba de las “papas de matanza” que se cocinaban siempre en estas ocasiones. Disfrutando de la fisionomía de la cuesta, camino hacia el barrio medio observamos lo que sería la carpintería, junto con unas alcobas muy características de las de antaño. Pasando junto a varios bancales encontramos un cortijo en el que podemos contemplar una escena familiar y subiendo el desnivel propio de la arquitectura tradicional alpujarreña llegamos al barrio medio, donde podremos admirar a la costurera, el primer horno con cuidados detalles y la escena de las hilanderas. Pasando por una escuela de pupitres y pizarras encontramos la ermita de San Antonio, patrón de Trevélez. No podía faltar el ayuntamiento, el que a través de los cristales de sus ventanas ofrece una curiosa vista del salón de plenos y el mobiliario característico. Este barrio ofrece detalles reales de aquí, de singular belleza, que la gente podrá reconocer fácilmente como la era con su trillo.

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1. Colmado 2. Herrería 3. Habitación interior4. Cocina antigua5. Pensión6. Plaza del Mercado7. Taberna8. Réplica fuente9. Iglesia San Benito10. Escena matanza11. Carpintería 12. Alcoba13. Cortijo 14. Costurera15. Horno 16. Escena hilanderas17. Escuela

18. Ermita de San Antonio19. Ayuntamiento Interior20. Era21. Barrio alto22. Horno23. Nacimiento24. Corral25. Molino26. Escena pescadores27. Gallinero28. Cuesta29. Puente Río Grande30. Fuente Barrio Alto31. Muro

Al entrar encontramos unas preciosas vistas de lo que, hemos pretendido, sería un Trevélez a pequeña escala, con sus tres barrios, sus dos ríos y el espectacular paisaje que componen sus montañas.

Retrocediendo en el tiempo, hemos intentando recrear, con la mayor exactitud posible, algunas de las escenas que, seguramente, se vivían en tiempos pasados en nuestro pueblo.

Comenzamos la visita con el recorrido por el barrio bajo, donde encontramos, siempre por la derecha, el colmado, la herrería y una habitación interior, en la cual, si miran por los ventanales, encontrarán un salón acorde a la época. En este punto podemos disfrutar de una perfecta recreación del puente del río grande, su poza y la gran piedra que se alza en el centro de ésta.

Continuando encontramos un gallinero junto a la escena de una cocina que reproduciría a las de la época. Sobre el muro de la plaza se sitúa la pensión y ya se vislumbran algunos de los

callejones que derivan en la plaza del mercado, con su turronero, espartero, puestos de especias y frutas. Junto a ésta se encuentra la taberna con unos detalles maravillosos del ocio de entonces. La fuente de piedra que linda con la iglesia de San Benito, dos preciosas copias de las actuales. Tras la iglesia, en el cauce del río encontramos la escena de los pescadores de la conocida trucha de Trevélez. Desviamos nuestra atención a lo que hemos querido que sea la mayor escena de todas: la matanza. Se plasma el proceso que se llevaba a cabo para conseguir nuestros famosos jamones y embutidos, que se curaban con el fantástico aire de nuestro entorno. La matanza congregaba mucha gente que trabajaba y disfrutaba de las “papas de matanza” que se cocinaban siempre en estas ocasiones. Disfrutando de la fisionomía de la cuesta, camino hacia el barrio medio observamos lo que sería la carpintería, junto con unas alcobas muy características de las de antaño. Pasando junto a varios bancales encontramos un cortijo en el que podemos contemplar una escena familiar y subiendo el desnivel propio de la arquitectura tradicional alpujarreña llegamos al barrio medio, donde podremos admirar a la costurera, el primer horno con cuidados detalles y la escena de las hilanderas. Pasando por una escuela de pupitres y pizarras encontramos la ermita de San Antonio, patrón de Trevélez. No podía faltar el ayuntamiento, el que a través de los cristales de sus ventanas ofrece una curiosa vista del salón de plenos y el mobiliario característico. Este barrio ofrece detalles reales de aquí, de singular belleza, que la gente podrá reconocer fácilmente como la era con su trillo.

Continuamos con la subida para llegar al punto más alto del pueblo. Coronado por el Chorrillo y sus cumbres nevadas desciende el barrio alto, con sus casitas pequeñas y conservando, incluso hoy, el más puro estilo alpujarreño. Es en este punto donde hemos querido colocar la escena que da sentido al Belén, el NACIMIENTO. En un pesebre semiderruido encontramos la estampa del Niño Jesús, San José, María, la mula y al buey.

Para finalizar el recorrido les aconsejamos que se fijen en varios detalles en el margen del río, como un molino, un huerto con su arado o un corral.

Agradeciendo su visita, esperamos que hayan disfrutado de este Belén.

AGRADECIMIENTOS

• Ayuntamiento de Trevélez

• AMPA de Trevélez

• Asociación de Mujeres de Trevélez

• Asociación Los Tres Barrios de Trevélez

• Centro Guadalinfo de Trevélez.

• A todas las personas que de forma desinteresada han colaborado para la realización de este Belén y sin las cuales el mismo no habría sido posible.