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CURSO MIR ASTURIAS 1

Guía de orientación

Superando dificultades de rendimiento

Curso Intensivo MIR Asturias


Asistencia especializada para superar dificultades de Bajo Rendimiento

Contenido

DEBILIDADES: POSIBLES DIFICULTADES DE PARTIDA ......................................................................... 3

1. Base más limitada de conocimientos de partida/Estudiantes de última hora durante la carrera. ............................................................................................................................................ 3

2. No descansar para intentar sacar más horas de estudio ........................................................ 4

3. Dificultad para la planificación ............................................................................................... 5

4. Dificultad para la concentración ............................................................................................. 6

5. Desconfianza en el método del Curso o adaptación lenta al mismo. ..................................... 8

6. Poca utilización de los recursos informáticos que te ofrece la Academia .............................. 9

7. Dificultad para terminar los simulacros y/o muchos fallos en los test ................................... 9

8. Mejores resultados en Mires y Test que en Simulacros ....................................................... 10

9. Desmotivación ...................................................................................................................... 11

10. Maximización de lo negativo y minimización de lo positivo con respecto a ti mismo y a tu trabajo 12

11. Miedo al fracaso, a no poder con todo, a no “superar” la prueba MIR ........................... 12

FORTALEZAS EN LAS QUE APOYARTE ............................................................................................... 14

AMENAZAS A CONTROLAR ............................................................................................................... 14


LAS OPORTUNIDADES ASOCIADAS A TIEMPORS DIFÍCILES .............................................................. 15

DEBILIDADES: POSIBLES DIFICULTADES DE PARTIDA

1. Base más limitada de conocimientos de partida/Estudiantes de última hora durante la carrera.

Si este es tu caso, y percibes que tu red de relación de datos médicos de partida es menos consistente, no es el momento de lamentarse o culpabilizarse (si hubiera….) Cada uno parte de circunstancias diferentes, ni mejores ni peores, no hace falta evaluarlas ahora pues podemos ser muy injustos en ello. Mucho ánimo, ahora es el momento de trabajar con las herramientas que se poseen en el momento presente sin culpabilizarse ni abandonar la lucha.

CONSEJO

“Deberíamos utilizar el pasado como trampolín y no como sofá” H. McMillan

Oportunidad

Esfuérzate hasta el final centrándote en las pequeñas victorias de cada día.

Intenta centrarte en tu propio progreso, tomando como referencia tu netas de partida (en definitiva tus propias circunstancias personales), y ¡adelante!.

Recuerda que no puedes conducir bien hasta tu meta si lo haces mirando por el espejo retrovisor, mirando hacia atrás.

Orienta tu enfoque hacia todo lo que tienes que avanzar, tienes una oportunidad cada día por delante, concéntrate en ella.

CONSEJO

“No pierdo el ánimo, porque cada intento fallido que dejo atrás es un nuevo paso adelante”

Thomas Alva Edison


2. No descansar para intentar sacar más horas de estudio Si estás viendo que tus percentiles no son altos, puedes pensar que debes estudiar más horas y quitar tiempo a actividades fundamentales como la comida, el sueño y el deporte o momentos periódicos de descanso. Esto es un error, aunque te parezca lo contrario, pues repercute negativamente sobre el cansancio, quitándote capacidad de concentración y rendimiento. Además, corres el peligro de entrar en un círculo vicioso que desestabilice tanto tu ritmo de sueño como de vigilia; es decir, puedes comenzar a acostarte más tarde, levantarte más cansad@ por lo que ralentizarás más tu estudio y no te dará tiempo generándote más angustia, y así quizás de nuevo intentarás acostarte más tarde y/o levantarte más temprano y tu agotamiento y desánimo se irán acumulando. Desde un punto de vista práctico, cuando estás cansando es como si cuando tu mente necesitando descanso simplemente se lo tomara, se lo dieras tú o no, y se desconcentrara. Son los momentos en los que tienes que leer varias veces la misma frase para entenderla o cuando te desesperas porque vas demasiado lento o “pareces no enterarte de lo que estás leyendo”. Los coches de carreras también se meten en boxes para recargar energía/combustible. Es fundamental que no dejes de respetar tus tiempos de descanso para seguir rindiendo óptimamente.

CONSEJO

“No trabajes más duro, hazlo con más inteligencia” Ken Blanchard

La pieza clave

tu


Oportunidad

No es cuestión de sacar más tiempo (que no se puede), sino de rentabilizar mejor tú tiempo de estudio. Si no puedes abarcarlo todo intenta centrarte en lo fundamental.

Para ello establece prioridades (punto 3) y respétalas. Tienes herramientas que te dan información objetiva de lo que es más rentable para ti (repeMIR ®, expriMIR®), concentra tu energía en ellas

Si te has dejado temas o asignaturas importantes sin mirar, no amplíes tu horario de estudio para intentar recuperarlas (no se puede trabajar más de lo que recomendamos porque no aguantarás el ritmo a medio plazo). . Vive en “compartimentos estancos” y no te preocupes por lo que has dejado atrás o lo tendrás que estudiar en el futuro, concéntrate en el día de hoy. Si te has incorporado tarde al curso y te has dejado una asignatura importante sin mirar (por ejemplo Digestivo), no intentes llevar 2 asignaturas a la vez. Sustituye en tu calendario semanal una asignatura en la que vayas mejor (por ejemplo Ginecología), por otra MAS IMPORTANTE, en la que vayas peor y que no hayas mirado por haberte incorporado tarde en el Curso (Por ejemplo Digestivo o Preventiva)

3. Dificultad para la planificación Dedicar unos minutos cada día, al iniciar el estudio para organizar el tiempo que vas a dedicar a temas y actividades del día, es también clave para poder rentabilizar tu jornada de estudio. Te ayudará a priorizar y a enfocarte en lo más provechoso, y también te ayudará porque, en la medida que vas cubriendo objetivos más cortos, podrás ir tachándolos de tu lista y esto te hará sentir bien (energía extra para continuar la jornada) Si piensas que esto no es válido para ti, porque siempre que planificas no te da tiempo a cubrir tus objetivos, probablemente sea porque la planificación sea poco realista y/o que esté desorganizada. Observa primero cómo te encuentras, tanto física como anímicamente. Tu rendimiento no será el mismo en un “día bueno” que estés en plenitud de condiciones que en un “día malo” que no hayas dormido o tengas gripe. Y en función de ello, selecciona los temas más importantes y las preguntas vas a hacer. Es decir, “calidad” frente a “cantidad”. Planificar objetivos del día no es escribir una lista de intenciones, hay que renunciar a lo que “me

NUNCA duermas menos de 8 horas.

Es un carrera de “resistencia”,

no de “velocidad” Deporte al menos

un par de días a la semana


gustaría o debería”, en favor de lo que es realmente posible. Esta lista más realista sí te dará satisfacción y una medida de tu avance. Por ello empieza por lo más rentable y fundamental, aunque te resulte difícil, para que al menos tengas seguro que lo más importante está conseguido.

Oportunidad

Recuerda que la única forma de aprender es avanzar en diversidad de conocimientos y no tanto en profundidad, lo que quiere decir que es mejor saber un poquito de todo que mucho de una pequeña parte. Así que aprende a comenzar el día planificando el tiempo que dedicarás a cada tema (en función de su rentabilidad expriMIR®) y el tiempo que dedicarás a hacer el test.

4. Dificultad para la concentración En algunos alumnos esto está motivado por una pérdida de hábito y disciplina de estudio debida a un parón en el ritmo académico (año sabático, Erasmus, trabajo, años transcurridos desde que finalizaste la carrera,…).

Puede ser que te distraigas con facilidad y que tu entorno no facilite el estudio (teléfono encendido, ordenador conectado a redes sociales, mesa desordenada, paredes excesivamente “empapeladas” con esquemas o post‐it, mala iluminación).


Otras veces es la falta de base en algunas asignaturas lo que te hace más difícil la concentración. O simplemente el cansancio acumulado o la falta de motivación.

Oportunidad

Recuerda que los hábitos se adquieren y que igual que te acostumbraste previamente a vivir sin estudiar, puedes volver a coger el hábito de hacerlo. Necesitas al menos 3 semanas de una jornada regular de estudio para que puedas volver a establecer un nuevo patrón.

Aunque creas que es difícil volver a coger el ritmo, las resistencias acaban cediendo y volverás a conseguir una buena velocidad crucero en tu estudio Intenta que tu entorno sea lo más sobrio, elimina las distracciones y rodéate de las mínimas cosas necesarias.

Ayúdate y relaciona el momento de ponerte a estudiar una asignatura que no te gusta o en la que tienes poca base con alguna experiencia agradable de superación que hayas tenido en tu vida o imaginando su utilidad en el futuro.

Una buena herramienta para vencer las dificultades de concentración, es el método POMODORO (tienes un vídeo en tu zona multimedia/tutorías que lo explica).

Te ayudará mucho en estas primeras “batallas” y especialmente si estás baj@ de ánimo y energía. En pocas palabras, consiste en “cortar” el tiempo de estudio en fragmentos, con descansos de 5 min en medio. Los periodos de estudio pueden ser pequeños al principio (25‐30 min), y posteriormente ir alargándose según vas recuperando el “músculo del autocontrol”. La evitación en el estudio o las resistencias de concentración ceden antes ante una perspectiva de un esfuerzo corto que frente a toda una jornada de 11hs de estudio).

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CONSEJO

“Empieza haciendo lo necesario , luego aquello que sea posible y acabarás haciendo lo imposible”

S. Francisco de Asís Recuerda que siempre es positivo que vayas tachando en un papel los objetivos que escribes al principio del día, cada gesto de “ya está hecho” es un refuerzo positivo sencillo que te dará satisfacción. Cuando ganes una batalla, por favor, no te olvides de reconocértelo, es importante. Tu sistema aprenderá que tiene consecuencias positivas el esfuerzo y eso le ayudará a establecer el nuevo hábito. Se trata de invertir tendencia, el estudio tiene que tener una recompensa para ti, y no en enero, sino en el mismo día.

5. Desconfianza en el método del Curso o adaptación lenta al mismo.

Quizás tengas problemas para seguir el calendario: tanto la distribución por días de los temas de la asignatura, como el tiempo dedicado a hacer test. Las posibles causas de esto son:

• Es posible que cuando estudies, en vez de una lectura activa, (que temes no te permita memorizar), dediques demasiado tiempo a hacer resúmenes o esquemas de todo, a subrayar en exceso. Si es así, lo que está ocurriendo es que, sin darte cuenta, estás empleando casi todo el tiempo de estudio en preparar el libro para estudiar en otro momento que no llegará.Esto tiene una peligrosa consecuencia: No hacer preguntas de test porque pienses que no tiene sentido si no dominas la teoría. Por favor, no olvides que los test son la mejor manera de fijar conceptos porque favorecen una alta concentración y un importante trabajo de asociación que favorece la retención de información en la memoria.

• Otras veces la dificultad se produce cuando vas muy lento en los test, y no terminas de coger velocidad, porque quieres leer los comentarios de todas las preguntas con lo que no logras terminarlo. Y lo mismo ocurre en el simulacro, dejando preguntas sin leer o luchar por falta de tiempo, lo que te hace perder preguntas “ganadoras” que te quedaron sin leer por atascarte en preguntas “perdedoras”.

Oportunidad

Cuando estudies recuerda que el examen MIR no es un examen con preguntas de desarrollar que requerirían una gran memoria, sino un examen de preguntas de test y casos clínicos, en los que la información ofrecida facilita la evocación de un concepto que se ha leído o escuchado en la explicación del profesor.

Los test, especialmente los simulacros y MIRes, deben hacerse seguidos sin pararse a leer los comentarios para coger agilidad y entrenar en las mismas condiciones que el día del examen MIR. El sábado, aparte de la realización del simulacro y su corrección, puedes los comentarios de las preguntas fáciles o repeMIR que tu hayas fallado


6. Poca utilización de los recursos informáticos que te ofrece el Curso

¿Piensas que no tienes tiempo para consultar las herramientas de la página web y pasas la mayor parte del día frente al libro?. ¿Te cuesta consultar con los tutores por vergüenza o temor a que no puedan darte consejos válidos o alcanzables?

Oportunidad

Las herramientas repeMIR ®y expriMIR® te ayudarán a conocer aquellos temas más rentables y a repasar los conceptos MIR más repetidos y que has fallado o no contestado en exámenes previos.

Por favor, no dejes de pedir ayuda de los tutores, expertos que conocen bien todas estas herramientas y cuya función no es juzgarte como persona o estudiante, sino simplemente ofrecerte recursos, soluciones, explicaciones y apoyo incondicional

7. Dificultad para terminar los simulacros y/o muchos fallos en los test

El mejor entrenamiento del simulacro son los test de la semana. Esfuérzate en hacerlos en hora y media si son de 112 preguntas y en 2 horas y media si son MIRes. Los test de la semana son el mejor entrenamiento para el simulacro, por eso es importante hacer todas las preguntas seguidas, controlando el tiempo. Al principio de la preparación te resultará imposible acabarlos en ese tiempo, pero según te vayan sonando más las preguntas irás avanzando más. Recuerda: cuando se acaba el tiempo del test debes darle a “finalizar” el examen, y no dejar el examen incompleto con intención de retomarlo otro día. Cuanto más lento vayas realizando las preguntas de los simulacros, más necesidad tendrás de dedicar más tiempo a realizar test.

Oportunidad

• Recuerda distribuir cada simulacro en 4 bloques (45 preguntas de imágenes + otros 3 bloques de 60 preguntas cada uno) y dedicar a cada parte 1 hora. Así puedes controlar mejor el tiempo y la velocidad.

• No temas dejar las preguntas de imagen para el final. A pesar de ser las más largas y complejas, y las que más tiempo consumen, puntúan igual que el resto.

• Lee cada pregunta del simulacro comenzando por el texto que está justo al final de la redacción de la pregunta, lee luego las respuestas y busca en el enunciado las palabras claves para poder contestar.

• Si una pregunta te bloquea porque dudas mucho entre 2 y no eres capaz de decidirte, recuerda siempre que en el texto habrá alguna palabra clave que permite escoger la más correcta de las dos opciones en las que dudas. Si no la encuentras, contesta tu primera impresión

• Si fallas muchas preguntas…¡HAZ MÁS PREGUNTAS! (y el color verde comenzará a aparecer más a menudo que el rojo)


8. Mejores resultados en los MIRes y test, que en los Simulacros Esto es normal, y no un problema. Le pasa a todo el mundo. En los test de la semana sacas más puntuación porque estás estudiando esa asignatura, y en los MIRes, cada semana te sonarán un mayor número de preguntas, por haberlas visto previamente en los libros o en las clases. Por eso es normal sacar mayor puntuación en los exámenes de lunes a viernes que en los simulacros de los sábados. Pero si la discrepancia entre las puntuaciones de MIRes y Simulacros es muy grande (más de un 50% de diferencia), y contestas bien en casa, pero no en la situación de simulacro, pueden estar ocurriendo 3 cosas:

• Que sea un problema de ansiedad, que compita con el rendimiento (anticipación de ideas catastrofistas sobre el resultado el día previo, la mañana o durante la realización del simulacro, miedo, desconcentración, ganas de huir que se expresan en prisa por terminar..)

• Que, sin darte cuenta y en búsqueda de una mayor seguridad, realices algún cambio respecto a las técnicas que utilizas habitualmente al hacer los test o MIRes (“buscar tres pies al gato” y no confiar en tu primera impresión).

• Ambas cosas.

Oportunidad

Si la discrepancia entre las puntuaciones de MIRes y Simulacros es muy grande (más de un 50% de diferencia):

• Prueba a realizar un simulacro en casa (¡sólo una vez!) y sin corregirlo ni ver resultados, y vuelve a hacerlo en la Sede. Despues corrige las dos plantillas y mira si has sacado más netas en casa que en la sede. De esta forma comprobarás si efectivamente te condicionas para no concentrarte, sintiendo la experiencia del simulacro en la Sede como una amenaza.

• Obsérvate y examina qué haces de forma diferente a la hora de responder preguntas test/MIRes y las de los simulacros (si dudas más en el simulacro en el momento de decidirte por una respuesta, si lees todas las respuestas, si miras cómo van los de al lado, si te has pegado un “atragantón” de estudio la mañana del sábado, si no realizas ningún descanso en las 4 horas), etc. Si identificas alguna de estas cosas diferentes y contraproducentes para tus resultados, corrígelas y verás el cambio positivo que se produce en el siguiente simulacro que hagas.

• Substituye los pensamientos negativos por mensajes positivos antes (estoy preparado, lo puedo hacer, voy con ganas y a rendir bien) y durante el simulacro (venga, adelante, bien, a por la siguiente, ya estoy concentrado)

• Si el problema persiste, consulta con el servicio de apoyo Psicológico, donde recibirás ayuda, ejercicios y apoyo, para superar este problema


9. Desmotivación La motivación (DARLE UN MOTIVO A LA ACCIÓN) es una atracción hacia un objetivo que supone una acción por tu parte teniendo en cuenta que debes aceptar que la consecución de ese objetivo requerirá esfuerzo. Es importante no caer en otro posible círculo vicioso, el de la desmotivación: Observa si sistemáticamente terminas la jornada con una mala sensación por no haber cumplido, por no llegar... Esta pequeña frustración se graba y la mañana siguiente se empieza con menos energía. Así, sucesivamente, vamos acumulando estas experiencias internas negativas y podemos acabar perdiendo la esperanza y la ilusión, por lo que estudiar se hace mucho más duro y necesitamos más energía, más esfuerzo que nos lleva al cansancio. Tu sistema de defensa puede reaccionar ante esta circunstancia abandonando la idea de conseguirlo ese año, entrando en un duelo anticipado y una situación difícil en la que continuar a tope es difícil y abandonar prácticamente imposible pues te llevaría a una situación de alivio momentáneo seguido de una angustiosa derrota que, en todo caso, es innecesaria. Hay que luchar, es lo que te dejará más tranquil@. Lo primero invertir la tendencia, empezando a trabajar en la acumulación de experiencias internas positivas: pequeños objetivos y cumplirlos, reforzándote siempre por ello. Lo más valioso para ti es tu propia opinión de ti mismo, tus propios pensamientos acerca de quién eres y cómo lo estás haciendo. Es verdad que tienes más oportunidades de hacer el MIR, y que esta no será la única, pero una vez reconocido esto, hay que ir a por todas en la presente convocatoria. Por favor, pon atención a esos pensamientos furtivos que te dicen “que no sabes”, que se fijan solamente en lo que te ha quedado sin hacer y dejan pasar inadvertido el trabajo realizado; que se concentran sólo en aquello en lo que te has equivocado y no en lo que has hecho bien. Esto puede ir generando, en algún momento, consecuencias como:

• Baja autoestima, poca confianza en ti mismo • Ansiedad/miedo y bloqueos • Sensibilidad a flor de piel y sensaciones de soledad • Momentos depresivos o ansiógenos (cuando intentas afrontar las situaciones de manera

negativa) • Comparaciones negativas con los compañeros (con sobregeneralizaciones del tipo “todos

pueden y yo no”, que además de nocivas, son absolutamente falsas) Probablemente no vayas tan mal, porque todo tiene una visión subjetiva según con quien te compares.

falta de confianza en tí mismo


CONSEJO

“Es la ley de la vida que cada vez que se nos cierra una puerta se nos abre otra. Lo malo es que con frecuencia miramos con demasiado hinco hacia el pasado y añoramos la puerta cerrada con tanto afán que no vemos la que se acaba de abrir”

A. SCHWEITZER

Oportunidad

• Incorpora pensamientos de apoyo a ti mismo, fíjate en los pequeños detalles que cada día pasan inadvertidos, tus pequeñas victorias que acabarán convirtiéndose, no lo dudes, en grandes logros.

• Busca siempre un objetivo y un motivo para todo lo que hagas, piensa en que en un futuro muy próximo estarás ejerciendo la medicina, tu gran anhelo, y que este es un trámite que merece la pena aprovechar.

• Trabaja activamente en desarrollar habilidades de auto refuerzo, ponte mensajes positivos cerca, fotografías que te recuerden todas las cosas buenas y te inspiren, las listas realizadas de objetivos tachados como hechos.

• Trabaja en la idea “quiero y puedo”. Practícala para que coja fuerza. Recupera tu “corazón” y ponlo a trabajar a tu favor. Ayúdate y apóyate como harías con tu mejor amigo. Ya eres médico, si has llegado hasta aquí, es que tienes todo lo que necesitas para dar el siguiente paso. ¡¡Animo!! y a por ello. Si quieres…, puedes.

10. Maximización de lo negativo y minimización de lo positivo con respecto a ti mismo y a tu trabajo

Como decíamos en el punto anterior, recupera la captación diaria de tus logros en vez de magnificar tus fallos. Intenta hacer cada día una lista antes de terminar la jornada, aunque sea solo mentalmente, de situaciones o comentarios positivos que has vivido ese día. ¿No encuentras ninguno? ¿Qué hay de las horas de estudio, de los conceptos aprendidos, de las preguntas acertadas, de los comentarios del profesor asimilados, y de otras virtudes tuyas como la conversación con un amigo, el apoyo a un compañero, la sonrisa regalada?

11. Miedo al fracaso, a no poder con todo, a no “superar” la prueba MIR

Siempre existe una incertidumbre que hemos de tolerar y con la que hemos de aprender a convivir para que no acabe convirtiéndose en una obsesión y una presión excesiva que nos distraiga y dificulte nuestro rendimiento. Un buen ejercicio como punto de partida sería eliminar la palabra “fracaso” de tu vocabulario ya que sólo con pensarla se provoca una activación emocional muy negativa. Hablar de fracaso significa una derrota anticipada que no te deja vislumbrar alternativas o cambios que puedan ayudarte mucho en un momento de dificultad. ¿Qué hacer cuando nos caemos? Tropezamos y si, caemos, pero nos levantamos, nos sacudimos el polvo de nuestros miedos, analizamos por qué ha ocurrido para que no se repita y seguimos adelante con mayor madurez y fortaleza.


CONSEJO

“Nuestra mayor gloria no se basa en no haber fracasado nunca, sino en habernos levantado cada vez que caímos”

Confucio En este camino de constante superación, no te inquietes si llegas a experimentar “algo de miedo”, siéntelo como un amigo que te habla desde un deseo saludable de llegar a conseguir tu meta.

Oportunidad

¿Cómo puedes reducir tu miedo y continuar con ganas de seguir avanzando? Entendiendo y analizando la situación que lo produce de forma realista y pensando en ello con claridad.

Hazte preguntas simples: ¿Qué ha pasado? ¿Cómo puedo solucionarlo?, ¿Qué PENSAMIENTOS tengo en este momento?, ¿En qué podría pensar o hacer que me ayudara?, ¿Con quién puedo consultarlo?. Ten en cuenta que mientras te dediques a enfocar tu energía y tu acción sobre aquello que depende de ti, estarás alimentando tu poder sobre tu vida, consiguiendo así la sensación de tener mayor control sobre ella y por ello, mucha más seguridad en ti mismo.

Recuerda que si se suma “deseo intenso de conseguir/mantener algo preciado + alta necesidad de seguridad= Miedo”. Tolera a este compañero comprendiendo lo que es, ya que te ayudará a no bajar la guardia, a mantenerte alerta y con la activación necesaria para que tu esfuerzo sea productivo.

Debes por tanto, sustituir el “no puedo” por voy a poner todo de mi parte y a intentarlo. Esto depende absolutamente de ti. Utiliza expresiones como:

• “no estoy en mi mejor momento pero voy a intentarlo”,

• “en otras ocasiones he podido, si lo intento quizás lo logre y me sentiré mejor”,

• “desearía que fuese más fácil pero a veces lo que me conviene es difícil de lograr”

• “podré superarlo, es un nuevo reto en mi vida, al principio lo pasaré mal, pero ya me las arreglaré”,

• “si me relajo veré las cosas de otro modo y encontraré alternativas”…

Aimee Mullins modelo y atleta


CONSEJO

“Algunos hombres observan el mundo y se preguntan: ¿por qué?. Otros hombres observan el mundo y se preguntan: ¿por qué no?”

George B. Shaw

CONSEJO

“Más hace el que quiere que el que puede” Proverbio Japonés

FORTALEZAS EN LAS QUE APOYARTE

1. Búsqueda de apoyos cuando te encuentras mal, confianza en tu familia, amigos, compañeros.

2. Mayor flexibilidad a la hora de valorar opciones de elección de especialidad lo cual puede evitar una presión generada por tus objetivos que te esté perjudicando.

3. Benevolencia respecto a tu nivel de autoexigencia.

4. Muchas ganas de mejorar, perseverancia.

5. Disfrute de pequeños‐grandes éxitos en el número de netas.

6. Amig@ y compañer@: así como es posible que seas bastante crític@ contig@ mism@, en cambio sueles ser un gran apoyo cuando alguien a tu alrededor lo está pasando mal.

7. Cuando logras seguir el método y concentrarte, tu capacidad de aprendizaje y memoria suelen ser buenas logrando mejorar el resultado de los test. Toma conciencia de esto, y trabaja para recuperar estas experiencias positivas.

8. Cuando logras gestionar los recursos y utilizas las herramientas web, repeMIR ® y expriMIR®, conseguirás mejorar en poco tiempo tus resultados.

9. Interés sincero por saber y aprender que favorecen el sacrifico y el tesón.

10. Sueles estar acostumbrado a utilizar trucos o técnicas para estudiar, memorizar y recordar que favorecen la retención de datos.

AMENAZAS A CONTROLAR

1. Miedo a interpretar tu curva de resultados, no visualizas tus informes por miedo/vergüenza a no mejorar, sin darte cuenta de que precisamente esa información te ayudará a darte cuenta de cuáles son tus fallos y en qué tienes que mejorar o hacer más hincapié.

2. Visión de la realización de preguntas, test, MIRes o simulacros, únicamente como mera evaluación de lo que sabes lo que te pone muy nervioso, anticipando que te va a salir mal, y no como forma de estudio, repaso, aprendizaje y depuración de la técnica del examen.

3. Resistencia a la planificación y adquisición de un hábito de estudio.

4. Al no priorizar, intentar abarcar todo e ir acumulando materia y sensación de insatisfacción. Dejar de hacer preguntas y asistir a clase únicamente con el objetivo de seguir leyendo el máximo tiempo posible,

5. Baja tolerancia a la frustración y miedo al fracaso, que pueden hacer que cada fallo se viva como un todo y no como una parte.


6. Excesivos miedos, dudas e indecisiones, lo que además de hacerte sentirse mal te lleva a perder mucho tiempo: miedo de ti mismo (“no soy capaz”), al futuro, a equivocarte; miedo a la toma de decisiones (Si no termino y voy a clase, no me entero, y si no voy, me siento culpable ¿Qué hago?).

7. Evitación/Agotamiento: Si te encuentras agotad@, no esperes a bloquearte. Tómate un respiro y descansa.

LAS OPORTUNIDADES ASOCIADAS A TIEMPOS DIFÍCILES

1. Interpretar los errores como una oportunidad de aprendizaje y un momento enriquecedor.

2. Compartir momentos de estudio con algún compañero e intercambiar conocimientos o corregir preguntas juntos puede ayudaros a retener mejor la información.

3. Apóyate en la Academia, en los recursos que te ofrece y en todos los que formamos parte de ella: estamos aquí para ayudarte.

4. Fíate de las herramientas que hemos creado para rentabilizar tu estudio y maximizar el tiempo: repeMIR®, expriMIR®, arriesga MIR®, gpsMIR®.

5. Aprovecha la preparación del examen MIR para rellenar las lagunas en tu formación.

CONSEJO

“Los anhelos son los presentimientos de facultades que residen en nosotros, los signos precursores de lo que un día estaremos en condiciones de llevar a cabo”

Johan Wolfgang Goethe

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