simbolismo cosmologico de la arquitectura sagrada

23
1 El espacio sagrado Primera parte: el simbolismo cosmológico de la arquitectura sagrada. María Cecilia Tomasini. En la antigüedad la arquitectura y el urbanismo tuvieron una función simbólica destacada. En muchas culturas arcaicas la construcción del espacio sagrado aspiraba a reproducir el mito de creación del mundo. 1 Por lo tanto el templo y la ciudad eran en sí mismos símbolos cosmológicos o representaciones del mundo (Imago mundi). 2 En la mitología universal, la creación del mundo es generalmente entendida como la imposición de un orden sobre el caos preexistente. 3 Podría afirmarse, incluso, que una gran parte de los mitos de creación son mitos de ordenación del caos, de separación de lo indiferenciado, o de formación de lo informe. Vale la pena mencionar, además, que muchos mitos cosmogónicos vinculan explícitamente el edificio sagrado o la ciudad sagrada con el origen de los tiempos y con el acto creador de las divinidades. Así por ejemplo la cosmogonía egipcia de Heliópolis relata que, en un principio, existía un océano en la oscuridad y el caos. Atum, Señor de Heliópolis, creador del universo y dios sol, se posó en un montículo emergente de este océano. Este montículo primordial tomó la forma de una pirámide. 4 La pirámide egipcia simboliza, entonces, la montaña primordial que emerge de las aguas; es decir que la pirámide es el orden que surge del caos. 5 (Figura 1) Figura 1: Pirámides de Keops, Kefren y Micerinos. FECHA. En la tradición brahmanica asociada a la arquitectura sagrada de la India, existe un mito de creación del universo, que es asimismo un mito de ordenación del caos. El mito del Vastu Purusha relata que una cosa informe y sin nombre llenaba Cielo y 1 Cf. M. Eliade, Lo sagrado y lo profano, Cap. 1; y J. Hani; El simbolismo del templo cristiano, Cap. 4 y 7. 2 Cf. J. Hani, Op. cit., Cap. 1. 3 Cf. M. Eliade, Ibid., Cap. 1. Véase también M. R. Wright, Cosmology in Antiquity, Cap. 5. 4 Textos de las Pirámides, Siglos XXVII- XXII a.C. Cf. G. Hart, Mitos Egipcios. 5 Las pirámides egipcias no son templos sino tumbas, pero simbólicamente comparten las características de los templos.

Upload: albagmorgade

Post on 19-Nov-2015

38 views

Category:

Documents


7 download

DESCRIPTION

Documento donde se resume el simbolismo cosmológico de la Arquitectura Sagrada (Civilizaciones Antiguas).

TRANSCRIPT

  • 1

    El espacio sagrado Primera parte: el simbolismo cosmolgico de la arquitectura sagrada.

    Mara Cecilia Tomasini. En la antigedad la arquitectura y el urbanismo tuvieron una funcin simblica destacada. En muchas culturas arcaicas la construccin del espacio sagrado aspiraba a reproducir el mito de creacin del mundo.1 Por lo tanto el templo y la ciudad eran en s mismos smbolos cosmolgicos o representaciones del mundo (Imago mundi).2 En la mitologa universal, la creacin del mundo es generalmente entendida como la imposicin de un orden sobre el caos preexistente.3 Podra afirmarse, incluso, que una gran parte de los mitos de creacin son mitos de ordenacin del caos, de separacin de lo indiferenciado, o de formacin de lo informe. Vale la pena mencionar, adems, que muchos mitos cosmognicos vinculan explcitamente el edificio sagrado o la ciudad sagrada con el origen de los tiempos y con el acto creador de las divinidades. As por ejemplo la cosmogona egipcia de Helipolis relata que, en un principio, exista un ocano en la oscuridad y el caos. Atum, Seor de Helipolis, creador del universo y dios sol, se pos en un montculo emergente de este ocano. Este montculo primordial tom la forma de una pirmide.4 La pirmide egipcia simboliza, entonces, la montaa primordial que emerge de las aguas; es decir que la pirmide es el orden que surge del caos.5 (Figura 1)

    Figura 1: Pirmides de Keops, Kefren y

    Micerinos. FECHA. En la tradicin brahmanica asociada a la arquitectura sagrada de la India, existe un mito de creacin del universo, que es asimismo un mito de ordenacin del caos. El mito del Vastu Purusha relata que una cosa informe y sin nombre llenaba Cielo y 1 Cf. M. Eliade, Lo sagrado y lo profano, Cap. 1; y J. Hani; El simbolismo del templo cristiano, Cap. 4 y 7. 2 Cf. J. Hani, Op. cit., Cap. 1. 3 Cf. M. Eliade, Ibid., Cap. 1. Vase tambin M. R. Wright, Cosmology in Antiquity, Cap. 5. 4 Textos de las Pirmides, Siglos XXVII- XXII a.C. Cf. G. Hart, Mitos Egipcios. 5 Las pirmides egipcias no son templos sino tumbas, pero simblicamente comparten las caractersticas de los templos.

  • 2

    Tierra. Los dioses le comprimieron contra la Tierra, de cara al suelo.6 Luego Brahma orden a los dioses que la ocuparan y la llamaran Vastu Purusha. Entonces Vastu Purusha es "...la forma en que existe el ser ordenado, el mundo sensible..." 7 desde que los dioses lo dispusieron as. La mandala, principio estructurador de todo templo o ciudad hind, simboliza la forma en la que el Purusha catico se encuentra encerrado, o la forma en que el caos ha sido ordenado.8 (Figuras 2 y 3)

    Figura 2: Vastu Purusha Mandala.

    Figura 3: Mandalas budistas.

    6 Cf. V. Ions, Indian Mythology. En algunos himnos vdicos Purusha se describe como la persona csmica, cuya divisin y sacrificio da origen tanto a las diferentes clases sociales como a los astros y a los fenmenos atmosfricos. Rig Veda, Himno a la Persona Csmica. Cf. C. Whittaker, An Introduction to Oriental Mythology. 7 Cf. A. Volwahsen, Arquitectura de la India, pg. 43. 8 Ibd. Ver tambin F. Revilla, Diccionario de Iconografa y Simbologa.

  • 3

    Figura 3: mandalas Sri Yantra. En la Epopeya de la Creacin mesopotmica, Marduk, luego de vencer a Tiamat y a su ejrcito de monstruos9, crea el cielo y la tierra, construye el templo de Esharra, y organiza el universo, nombrando los meses del ao y otorgndole tres estrellas a cada uno de ellos.10 Por otro lado, en la mitologa nrdica, el poema dico Vlusp, o "La Profeca de la Vidente", describe el estado ms primitivo del universo como un estado en el que no haba ms que un gran vaco;11 los dioses hacen emerger las tierras de este vaco; luego organizan los cielos, determinan las horas del da y la noche y dividen el tiempo en aos, procediendo entonces a la construccin de los templos.12 En algunas cosmogonas las fuerzas del caos aparecen bajo la forma de genios o divinidades de la noche o de la oscuridad. La lucha entre el caos y el orden se simboliza como la anttesis entre la luz y la oscuridad; o, lo que es lo mismo, entre el da y la noche. La creacin, triunfo del orden sobre el caos, se consuma con la aparicin del sol y el origen de los tiempos es descrito como un primer amanecer. Por este motivo, los eclipses solares, que constituyen una alteracin del orden diurno, son vistos como la imposicin de las fuerzas del caos sobre las del orden, siendo as particularmente temidos.13 Esta anttesis entre el orden creador, bajo apariencia diurna o solar, y el caos destructor, bajo la forma de la oscuridad o de la noche, es frecuente en las cosmogonas mesoamericanas. En el Pop Wuj, o Libro del Tiempo de los mayas ki- chs, se relata cmo era esperado con ansias por el pueblo el primer amanecer, el cual fue precedido de

    9 Los monstruos y los dioses de la oscuridad son personificaciones del caos en los mitos cosmolgicos. Cf. M. Eliade, Op. cit., Cap. 1; H. Mc Call, Mitos Mesopotmicos; y K. Taube, Mitos Aztecas y Mayas. 10 La Epopeya de la Creacin aparece en siete tablillas encontradas en las ruinas de Nnive, Asur, Kish, y Sultantepe. Las tablillas estn datadas entre los siglos XX y VII a.C. La Epopeya de la Creacin se refiere al origen del mundo y la construccin de Babilonia por los dioses, bajo la proteccin del rey de los dioses, Marduk. Cf. H. Mc Call, Op. cit. 11 En los mitos el vaco no significa inexistencia. El "vaco" mitolgico no es igual al vaco de la fsica, sino que significa desorganizacin. Cf. P. Grimal, Los mitos griegos. 12 Codex Regius, Siglo XIII. Cf. R. I. Page, Mitos Nrdicos. El autor aclara que los dioses poseen regin, palabra "que significa algo as como poderes organizadores". 13 Cf. K. Taube, Op. cit. Ver tambin M. R. Wright, Op. cit., Cap. 5.

  • 4

    un milenario "Perodo de Oscuridad".14 En este libro, la creacin de los seres es referida como una construccin: "Luego [los dioses] tomaron en cuenta la construccin y formacin de nuestra primera madre y padre".15 Para los pueblos de la Antigedad existi una relacin fundamental entre la construccin o la delimitacin del espacio sagrado y el concepto cosmolgico de orden. La edificacin del monumento sagrado constitua un complejo ritual que se iniciaba con la eleccin del rea a consagrar. Segn M. Eliade16 para el hombre religioso el espacio no es algo homogneo, puesto que existe una desigualdad esencial entre el espacio sagrado y el espacio profano. El espacio sagrado se encuentra imbuido de significado religioso y es, por lo tanto, un espacio diferenciado del resto del mundo. Slo el espacio sagrado puede ser dedicado a la divinidad. Por el contrario, el resto del mundo, o espacio profano, es el espacio indiferenciado en el cual se desarrolla lo cotidiano y lo humano. El reconocimiento de un espacio sagrado conlleva, como acto fundamental, su delimitacin respecto del resto del mundo. Pero la delimitacin o imposicin de un lmite es la forma ms elemental de ordenacin. Por lo tanto, el reconocimiento y demarcacin de un espacio sagrado es, en s mismo, un acto de ordenacin. Dado que, mticamente, la creacin o fundacin del mundo es un acto de ordenacin, M. Eliade resume lo antedicho expresando que "...la experiencia religiosa de la no homogeneidad del espacio constituye una experiencia primordial, equiparable a una fundacin del mundo...".17 La construccin de todo espacio sagrado se inicia con un ritual fundacional que es, esencialmente, un ritual de ordenacin tendiente a separar el lugar sagrado del resto profano del mundo. El primer paso de este ritual es el reconocimiento de un punto, un centro en el cual el hombre religioso percibe la manifestacin de la divinidad. El hombre religioso entiende este punto o Centro Sagrado como el lugar donde la realidad trascendente se hace presente, y donde lo terrenal y lo divino entran en contacto.18 En el Centro Sagrado cierta porcin del espacio se reconoce como sacralizada y se diferencia del resto del mundo. Este punto es concebido como un omphalos19 o centro del mundo (figura 4), y desde all comienza a organizarse el santuario o la ciudad santa. Por esta razn todas las ciudades santas, as como todos los templos, se consideran situados, simblicamente, en el centro del mundo.20 La regin ordenada en torno al Centro Sagrado es un microcosmos, que aspira a reproducir el orden impuesto por las divinidades en el acto de la creacin. El resto del mundo, el espacio exterior no consagrado, es el espacio profano, catico en tanto que no reproduce el orden csmico.

    14 Cf. A. I. Chvez, "Pop Wuj. Libro del Tiempo. Poema mito- histrico ki- ch". El Pop Wuj habra sido redactado hacia el ao 1550, en lengua ki- ch. 15 Pop Wuj, Captulo titulado "Este es el principio de la creacin de la gente, cuando se busc la naturaleza de su cuerpo". En A. I. Chvez, Op. cit., pg. 110. 16 Cf. M. Eliade, Op. cit. 17 M. Eliade, Op. cit., pg. 21. 18 Cf. Ibid., Cap. I. Tambin S. Sebastin, Mensaje simblico del arte medieval, Cap. I. 19 Cf. J. Hani, Op. cit., Cap. 3. 20 Ibid.

  • 5

    Figura 4: Omphalos del templo de Apolo en Delfos.

    Puesto que el hombre religioso percibe el Centro Sagrado como el lugar donde se ha revelado lo trascendente, intuye que en ese punto se ha abierto un canal que lo comunica con lo sobrenatural. Simblicamente, entonces, el Centro Sagrado se entiende como atravesado por un Axis Mundi vertical que une los tres niveles csmicos: cielo, tierra e inframundo.21 Este Axis Mundi suele ser representado mediante un rbol, una montaa, o un pilar. El rbol entierra sus races en el subsuelo, y se alza hacia las regiones celestes. El pilar perfora en su base la superficie de la tierra y se eleva hacia las alturas. La montaa se posa en lo terrenal, y "toca" los cielos. Por lo tanto, todos estos smbolos csmicos expresan el vnculo entre los niveles inferiores y los celestiales. En particular, los templos son rplicas de la montaa csmica: sus cimientos se hunden en las regiones subterrneas o inframundo, y ascienden desde el suelo a las regiones superiores. Con su impulso ascendente, los templos simbolizan el esfuerzo del hombre por encontrarse con lo sagrado. Segn M. Eliade "...el templo constituye... una abertura hacia lo alto y asegura la comunicacin con el mundo de los dioses...".22 En todas las grandes culturas arcaicas se reproduce el simbolismo del centro y del Axis Mundi representado como montaa sagrada. Por ejemplo, los ziggurats mesopotmicos (figura 5) fueron concebidos como montaas csmicas.23 Los nombres de algunos de ellos as lo indican. Es el caso de ziggurat de Enlil, que fue llamado "Casa de la Montaa" o "Lazo entre el cielo y la tierra".24 Segn H. Frankfort "...los

    21 Cf. M. Eliade, Op. cit., Cap. I. 22 Cf. M. Eliade, Op. cit., pg. 25. 23La palabra ziggurat significa "lugar entre el cielo y la tierra". M. Eliade, Op. cit., pg. 35. Del mismo autor, Cosmologa y Alquimia Babilnicas, Cap. 1. 24 Cf. H. Frankfort, Arte y Arquitectura del Oriente Antiguo, pg. 22.

  • 6

    sumerios, al erigir... sus ziggurats, creaban las condiciones que hacan posible la comunicacin con lo divino...".25

    Figura 5: Ziggurat de Ur. Tambin en la Antigua India se repite este simbolismo.26 Efectivamente, dice M. Bussagli que "...los motivos del eje del mundo y del centro del universo aparecen muy frecuentemente en las creaciones arquitectnicas asiticas, modulndose en formas diversas segn la poca y las corrientes religiosas...".27 De esta manera la stupa28 budista o jainista alude a la montaa csmica y al eje del universo.29 Algunas stupas poseen, incluso, una terraza denominada harmika que "representa el punto de interseccin entre lo humano y lo divino".30 (Figura 6). Del mismo modo, los templos medievales de la India, que obedecen a la forma piramidal, son rplicas de la montaa csmica, eje central del universo y morada de la divinidad.31 (Figura 7). El complejo simbolismo de la construccin sagrada de la India se encuentra compilado en los antiguos textos de tradicin budista e hinduista.32 Al respecto dice Bussagli: "A juzgar por los tratados... el motivo de base de las construcciones arquitectnicas indias es la reproduccin del centro... cada templo o palacio era un axis mundi, un centro sagrado en el que el mundo celeste, el terrestre y an el inferior, se encontraban...".33

    25 Ibid.. 26 El simbolismo del templo y la stupa de la India, as como de sus derivaciones en el sudeste asitico, procede de la Mesopotamia. Cf. R. Huyghe, El Arte y el Hombre; Tomo I, Cap. VII; Tomo II, Cap. X. 27 Cf. M. Bussagli, Arquitectura Oriental, Tomo I, pg. 13. 28 La stupa es una construccin sagrada sin espacio interior, de cubierta semiesfrica, original de la India. La construccin de stupas en piedra se inicia con la dinasta budista Maurya, en el siglo II a. C. 29 Cf. M. Bussagli, Op. cit.; y R. C. Craven, Indian Art. 30 M. Bussagli, Op. cit., pg. 27. 31 Cf. R. Huyghe, Op. cit.; Tomo I, Cap. VII; Tomo II, Cap. X. 32 Uno de estos textos, el Shilpa Prakasha, fue compuesto en el siglo XI por un arquitecto llamado Ramacandra Bhattaraka. Cf. A. Volwahsen, Op. cit., pg. 56. El complejo simbolismo cosmolgico del templo oriental se encuentra documentado tambin en el tmpano del templo Khmer de Banteay Srei, del siglo X, y en numerosas inscripciones lapidarias. Cf. R. Huyghe, Op. cit.; Tomo I, Cap. VII; Tomo II, Cap. X. 33 M. Bussagli, Op. cit., pg. 58.

  • 7

    Figura 6: Stupa de Sanchi.

    Figura 7: Templo en Khajuraho, India.

    En Camboya el esquema simblico del templo indio, tal como es prescrito por los textos, se realiza con sumo rigor. La cultura Khmer, que floreci entre los siglos VI y XIV de nuestra era en la cuenca del ro Mekong, tuvo su capital en la fascinante ciudad sagrada de Angkor. En el centro de la ciudad se situaba el templo, en forma de pirmide escalonada.34 Este era considerado como una imagen de la montaa csmica,

    34 Segn R. Huyghe el simbolismo de la pirmide escalonada del sudeste asitico se habra trasmitido, a travs de la India, desde los pueblos mesopotmicos. Dice este autor, refirindose a los monumentos Khmer: "...la arquitectura Khmer es la que... explora de manera ms explcita la cosmologa que la India haba tomado de Babilonia: de ah las relaciones que no pueden dejar de establecerse entre el templo montaa khmer y el zigurat de Mesopotamia, presentndose ambos con el aspecto de una pirmide escalonada y dando varia seales de semejanza simblica entre ellos, hasta poseer uno y otro una parte que se hunde en el suelo o que al menos est disimulada por un artificio de la obra...". Op. cit., Tomo II, pg. 126.

  • 8

    el Monte Meru, santuario del dios Shiva, centro y axis del universo.35 El palacio era tambin una imagen de la montaa csmica. All viva el rey en comunidad con los dioses, siendo l mismo una divinidad. El orden cosmolgico se repeta entonces en el palacio y en el templo siendo, asimismo, modelo para la organizacin administrativa del reino.36 Tambin en Java el simbolismo cosmolgico del templo, originario de la India, se aplic con estricto rigor. En el centro de la isla se encuentra la Gran Stupa de Borobudur37 [c. 800 d.C.], gigantesco monumento del budismo mahayana construido sobre una colina. Segn M. Bussagli "...la eleccin del lugar, as como la forma del edificio, es simblica, y alude al monte Meru, montaa situada en el centro del universo, en ese complejo simbolismo de la montaa y del centro...".38 La stupa de Borobudur est dividida en tres partes que se corresponden con los tres niveles csmicos del mundo: los cimientos, decorados con escenas infernales, se asocian con el inframundo; las terrazas cuadrangulares aluden a lo terrenal; y las terrazas circulares, en la parte superior, representan los cielos. (Figuras 8 y 9). Borobudur representa la montaa sagrada, el Axis Mundi, lugar de encuentro entre lo humano y lo sobrenatural.39

    Figura 8: Gran Stupa de Borobudur en Java.

    35 Cf. R. Huyghe, Op. cit., Tomo II. Tambin M. Bussagli, Op. cit.; y S. E. Lee, A History of Far Eastern Art, Cap. 11. 36 Cf. P. Rawson, The Art of southeast Asia; y R. Huyghe, Op. cit., Tomo II. 37 Construida durante la dominacin de la dinasta budista de los Sailendra, siglos VII a X d. C. 38 M. Bussagli, Op. cit., pg. 158. 39 Ibid. A la luz del budismo mahayana, la montaa csmica de Borobudur se ha interpretado como "la montaa de la acumulacin de virtudes" en las etapas de ascensin de Buda hacia la Iluminacin. La circunvalacin ascendente que realiza el peregrino en Borobudur reproduce, entonces, la elevacin espiritual de Buda. Cf. R. Soekmono, Borobudur. Una joya del patrimonio humano; en Correo de la Unesco, febrero 1983. Vase tambin S. Lee, Op. cit; y P. Rawson, The Art of Southeast Asia.

  • 9

    Figura 9: Planta de la Gran Stupa de Borobudur. La forma de la planta del edificio sagrado obedece a una mandala.

    En cuanto a la arquitectura sagrada del Antiguo Egipto, ya hemos visto que en la cosmogona de Helipolis la pirmide es la imagen de la montaa primordial que emerge del caos. El simbolismo ascensional de la pirmide egipcia es muy evidente. Segn C. Dukelsky estas construcciones "...representaban la posibilidad de ascender al cielo, de conectar lo terrenal con lo celestial...".40 La forma piramidal se asociaba a los rayos solares que caen oblicuamente sobre la tierra y que el faran usaba como rampa para ascender al cielo.41 Tambin los templos egipcios obedecieron a este simbolismo csmico. Por ejemplo, el templo funerario de Hatshepsut, en Deir- el- Bahari, se encuentra a tal punto armonizado con las colinas en las cuales se emplaza que "...desde algunos ngulos no se distingue bien donde acaba la montaa y donde empieza el templo...".42 La armonizacin con el entorno montaoso responde, segn J. L. Cenival, al deseo de asimilar la construccin con la montaa csmica. En efecto, afirma este autor que el templo de Deir- el- Bahari es "una fraccin disciplinada de la misma montaa de ese lugar sagrado".43 Anlogo comentario merece el templo de Ramss II, integrado a la montaa de Abu Simbel. En palabras de este historiador, en el Antiguo Egipto "...es manifiesta la intencin de integrar los templos a la roca y hacer de ellos una parte de dicha roca. De esta manera la montaa forma... parte de los templos a los que confiere su fuerza y su carcter sagrado..."44. Las construcciones rituales de las civilizaciones precolombinas tambin se ajustan a este simbolismo. Refirindose a la arquitectura maya dice J. Sharer que "...sus grandes templos eran considerados como manifestaciones de witz o la montaa

    40 C. Dukelsky, Influencia de las creencias religiosas en el arte egipcio. En Opfyl, Bs. As., 1994. 41 Textos de las Pirmides. Cf. Ibid. y Cf. J. L. Cenival, Egipto. 42 J. L. Cenival, Op. cit., pg. 88. 43 Ibid.. 44 Ibid., pg. 89.

  • 10

    sagrada...".45 En estos sacros espacios los sacerdotes y gobernantes se sentan comunicados con los dioses.46 En cuanto a las civilizaciones de los Andes, cabe mencionar, entre otros, el centro ceremonial de Tiwanaku, situado en los alrededores del lago Titicaca.47 Este centro era lugar de observacin del ciclo solar "y como tal, era el centro del cosmos" 48 u omphalos. El nombre de este centro ceremonial en lengua Aymar49 Taypicala es sumamente ilustrativo puesto que significa "la piedra en el centro".50 La ciudad sagrada de Machu Picchu, emplazada en un lugar inaccesible, oculta y casi formando parte de los mismos Andes, fue un enorme santuario dedicado al culto solar, segn lo indica la orientacin de sus principales edificios.51 (Figura 10). L. Valcrcel la describe como un "lugar sacralizado"52, imagen de la montaa sagrada y centro del mundo. Este autor concluye su monografa sobre el santuario con las siguientes palabras: "Por qu no creer que el creador de Machupicchu erigi su magna obra como un conjuro contra lo ignoto de las tierras selvticas, como el rito de una nueva creacin que transformara el caos en cosmos? Se cumplan los postulados universales del Imago Mundi, de la Montaa Sagrada, puntal del cielo, del centro u omphalos del que parte todo poder creativo. Machupicchu posee, pues, todos los caracteres del ncleo supremo de todas la hierofanas de la regin Tamp".53

    Figura 10: Machu Pichu.

    45 R. J. Sharer, The Ancient Maya, pg. 524. 46 Ibid.. 47 El centro ceremonial de Tiwanaku o Tiahuanaco habra funcionado aproximadamente entre los siglos V a.C. y V d.C. Cf. G. Kubler, Arte y Arquitectura en la Amrica Precolombina. 48 Ibid., pg. 465. 49 Aymar es la lengua nativa del lugar. 50 G. Kubler, Op. cit., pg. 465. El resaltado es mo. Vase tambin R. Stone Miller, Art of the Andes. 51 L. Valcrcel, Machu Picchu, el ms famoso monumento arqueolgico del Per. 52 Ibid., pg. 57. 53 Ibid., pg. 98.

  • 11

    El ritual de orientacin.

    El ritual de orientacin se realizaba de manera similar en diferentes culturas. Se iniciaba sealando el Centro Sagrado mediante un obelisco o gnomon. Alrededor del centro se trazaba un crculo, cuyo radio era el doble de la altura del gnomon. A medida que el sol realizaba su recorrido diurno en el cielo, la sombra del gnomon apuntaba en diferentes direcciones, reflejando el movimiento solar. El extremo de la sombra del gnomon tocaba el crculo dos veces en el da: una por la maana y otra por la tarde. Estos dos puntos sealaban la lnea este- oeste. Su perpendicular determinaba la direccin norte- sur.54 De esta manera quedaban sealados los cuatro puntos cardinales. Las dos direcciones cardinales estn determinadas por el movimiento diurno y anual del sol. Como es sabido, la direccin este- oeste est dada por la marcha diaria del sol en el cielo. La direccin norte- sur tambin est escrita en el cielo. Efectivamente, a lo largo del ao el sol no sale ni se pone siempre en el mismo punto del horizonte, sino que realiza un recorrido en direccin norte- sur- norte, cuyos puntos culminantes se alcanzan en las fechas correspondientes a los dos solsticios. La mxima distancia hacia el norte se alcanza en el solsticio de verano en el hemisferio norte, cerca del 21 de junio; y la mxima distancia hacia el sur, en el solsticio de verano en el hemisferio sur, cerca del 21 de diciembre. (Figura 11).

    Figura 11: a lo largo del ao el sol realiza un recorrido en direccin norte- sur- norte entre dos puntos extremos correspondientes a los dos solsticios. Este dibujo representa la situacin en el Hemisferio Norte.

    La orientacin cardinal reproduce, en la tierra, el orden de la marcha de los cielos. Por lo tanto la orientacin cardinal relaciona simblicamente el Centro Sagrado con el ritmo celeste. En las culturas arcaicas la regularidad de los astros era considerada como un signo del poder ordenador de la deidad, y como una seal del predominio de las fuerzas del orden sobre las del caos. Por lo tanto, al reproducir el orden celeste, la orientacin cardinal aspira a reproducir, sobre la faz de la tierra, la obra 54 Las direcciones cardinales podan trazarse de diversas maneras. Uno de estos procedimientos se encuentra detallado en Los diez libros de Arquitectura de Vitruvio, Libro I, Cap. VI. Vase tambin J. A. Belmonte Aviles, Astronoma y arquitectura: el papel de los astros en la cultura y el arte del Egipto antiguo; A. Volwahsen, Op. cit., Cap. 2; y J. Hani, Op. cit., Cap. 3

  • 12

    organizadora de las divinidades. En este sentido el ritual de orientacin es, tal como lo ha definido M. Eliade, una "cosmizacin".55 A partir de la organizacin cardinal, el espacio sagrado se asimila al orden celestial. En otras palabras, el ritual de orientacin transforma el espacio consagrado en una Imago Mundi.56 Todo templo y toda ciudad sagrada orientados ritualmente son, entonces, una Imago Mundi; es decir, una representacin del cosmos y una imagen del orden trascendente. Por otra parte, desde el momento en que se impone la organizacin cardinal, las cuatro direcciones del universo se proyectan, desde el Centro Sagrado, hacia el resto del mundo. Es decir que, por medio de este ritual el Centro Sagrado se constituye en Centro del Mundo u omphalos. Por esta razn la gran mayora de las construcciones sagradas ancestrales se organizan cosmolgicamente, segn las cuatro direcciones del mundo. En palabras de M. Eliade la orientacin cardinal es ",,,una idea arcaica muy difundida: a partir de un centro se proyectan los cuatro horizontes en las cuatro direcciones cardinales...".57 Las construcciones ms antiguas que se conocen estn orientadas cardinalmente. Stonehenge y la mayora de los crculos megalticos de Europa se orientan hacia el orto del solsticio de verano58 en el hemisferio norte.59 (Figuras 12 y 13) Del mismo modo muchos templos y muchas ciudades de la regin mesopotmica estn construidos de tal manera que sus ngulos se orientan hacia los puntos cardinales. Es el caso del templo de Tepe Gawra, del templo de Abu Shahrein, y del Templo Blanco en Warka, todos levantados en el perodo protohistrico, entre el 3500 y 3000 a.C. aproximadamente.60 Durante el Imperio Asirio [c. 1350- 1000 a.C.] se continu con este uso, como se observa, por ejemplo, en las ruinas del templo de Ishtar de Tukulti- Nimurta I, en Asur.61 La ciudad imperial de Jorsabad, erigida hacia el ao 706 a.C., durante el apogeo del Imperio Neoasirio62 [siglos X al VII a.C.], se ajustaba aproximadamente a un cuadrado amurallado, cuyos ngulos se orientaban tambin cardinalmente.63 Posteriormente la ciudad aquemnida de Perspolis, construida hacia el 518 a.C., sigui obedeciendo la misma orientacin.64

    55 M. Eliade, Op. cit., pg. 29 y pg. 43.. 56 Ibid., pg. 36. 57 Ibid., pg. 39. 58 El orto es el punto de salida del sol. Est situado en el Este, pero vara ligeramente su posicin sobre el horizonte a lo largo del ao, inclinndose hacia el Norte en junio y hacia el Sur en diciembre. El orto solar presenta su mayor desviacin hacia el Norte cerca del 21 de junio [solsticio de invierno en el Hemisferio Sur, y de verano en el Hemisferio Norte], y su mxima desviacin hacia el Sur cerca del 21 de diciembre [solsticio de verano en el Hemisferio Sur y de invierno en el Hemisferio Norte]. Esta desviacin se debe a la inclinacin existente entre el eje de la tierra [o, de manera equivalente, entre el ecuador celeste] y la eclptica [trayectoria aparente del sol]. Vase C. Payne Gaposchkin, Op. cit. 59 Cf. H. G. Wells, Esquema de la Historia Universal. Tomo I, Cap. XVIII: Dioses y Astros. Sacerdotes y Reyes. 60 Cf. H. Frankfort, Op. cit. 61 Ibid. 62 Cf. M. Liverani, El Antiguo Oriente. Historia, sociedad y economa. 63 Cf. H. Frankfort, Op. cit. 64 Ibid.

  • 13

    Figuras 12 y 13: El centro ceremonial de Stonehenge. A la izquierda se observa la situacin actual del yacimiento arqueolgico. A la derecha, una reconstruccin en la que se indica la orientacin del centro hacia el solsticio de verano en el hemisferio norte: al amanecer del da 21 de junio un rayo de sol incida sobre una piedra ubicada en el centro del recinto.

    Tambin las construcciones sagradas del Antiguo Egipto se orientaron de acuerdo a los astros. Por ejemplo, las pirmides de Gizeh65 y la esfinge [c. 2550 a.C.] estn orientadas de Este a Oeste.66 Durante el Imperio Nuevo, que se extendi aproximadamente entre los siglos XVI y XII a.C., los templos se orientaban hacia el sol naciente, "energa bsica del cosmos egipcio".67 El plono de los templos simbolizaba el horizonte, sobre el cual se alzaba el sol diariamente.68 La orientacin era tan precisa que el da del solsticio de verano69, y slo ese da, los primeros rayos solares ingresaban directamente entre las columnas, iluminando de lleno el altar del dios en el interior del santuario: "La estructura angosta, sombra, de los templos antiguos parece calculada expresamente para tal efecto".70 Segn N. Schulz el propio paisaje de Egipto manifiesta un "orden natural eterno"71 y este paisaje "... facilit la abstraccin y simbolizacin de conceptos existenciales fundamentales...".72 En efecto, el recorrido del Nilo aproximadamente de Sur a Norte y el recorrido diario del sol de este a oeste indican naturalmente las direcciones cardinales. Estas direcciones naturales determinaron, posiblemente, la ortogonalidad omnipresente en los monumentos egipcios. La arquitectura monumental egipcia represent, as, la concrecin del ideal de orden eterno simbolizando el cosmos organizado. 65 Las pirmides de Ghiz tienen sus lados orientados hacia los cuatro puntos cardinales, a diferencia de las ziggurats mesopotmicos en los cuales, por lo general, son los vrtices los que sealan las cuatro direcciones. 66 Cf. N. Schulz, El significado en la Arquitectura Occidental, Vol. I ; y C. Dukelsky, Op. cit. 67 Cf. N. Schulz, Op. cit., Vol. I, pg. 36. 68Cf. J. L. Cenival, Op. cit. 69 En el Hemisferio Norte. 70 H. G. Wells, Op. cit., pg. 179. La orientacin astronmica de los templos egipcios es un complejo tema de estudio. Los templos tienen orientaciones muy diversas. Algunos de ellos se orientan hacia los solsticios o hacia los equinoccios, mientras que otros podran estar orientados hacia diferentes constelaciones o hacia los astros ms brillantes del cielo nocturno. Sobre la orientacin astronmica de los templos egipcios vase J. A. Belmonte Avils, Op. cit. 71 N. Schulz, Op. cit., Vol. I, pg. 4. 72 Ibid., pg. 8.

  • 14

    En la arquitectura religiosa de Asia budista e hinduista el motivo dominante es tambin la representacin del cosmos.73 Ya se ha mencionado que la stupa budista es imagen de la Montaa Csmica y es tambin centro y eje del universo. Sin embargo, el simbolismo de esta construccin sagrada es mltiple puesto que evoca el cosmos ordenado. Su forma semiesfrica, apoyada en muchos casos sobre una plataforma cuadrangular, alude a la semiesfera celeste que cubre la Tierra.74 (Figura 6). Uno de los mayores monumentos budistas de la India, la stupa de Sanchi75 [siglos I a.C.- I d.C.] est rodeada por un corredor circular al cual se accede mediante cuatro puertas o toranas orientadas hacia los cuatro puntos cardinales. (Figura 14). Los peregrinos ingresan al espacio sagrado a travs de la torana de oriente, y realizan un recorrido alrededor de la stupa en el sentido de las agujas del reloj.76 Este ritual de circunvalacin tiene su origen en antiguos cultos solares77 puesto que la direccin del recorrido vincula el movimiento del peregrino con el movimiento del sol en direccin este- sur- oeste situndolo "en armona con el cosmos".78 Toda stupa budista es, en esencia, una enorme mandala79 tridimensional y como tal es un diagrama sagrado del cosmos que conduce al peregrino desde el mundo profano hacia el mundo trascendente.80

    Figura 14: una de las cuatro tornas de la stupa budista de Sanchi.

    En rigor, la planta de todo templo hinduista o tntrico, de toda stupa budista y de toda ciudad sagrada es una mandala, tal como puede apreciarse al contemplar la planta

    73 Cf. M. Bussagli, Op. cit. 74 Ibid.. Cf. tambin A. Volwahsen, Op. cit. Se ver ms adelante que, para muchas culturas, el crculo y la esfera simbolizan lo celeste, mientras que el cuadrado es imagen de lo terrenal. 75 Cf. R. C. Craven, Op. cit. La stupa de Sanchi fue construida durante el reinado de Ashoka, en el siglo III a.C., y reconstruida entre los siglo I a.C. y I d.C., durante la dominacin Andhra. 76 Cf. Ibid. y Cf. A. Volwahsen, Op. cit. 77 Cf. A. Volwahsen, Op. cit. 78 R. C. Craven, Op. cit., pg. 71. En el Hemisferio Norte el recorrido aparente diario del sol sigue una trayectoria en direccin este- oeste que se inclina hacia el sur. 79 El mandala [o la mandala] es un complejo diagrama geomtrico asociado a la tradicin vdica, pero presente tanto en el hinduismo y jainismo, como en el budismo y en los ritos tntricos. Literalmente, mandala significa crculo, aunque su forma real no siempre obedece a esta geometra. En general, se lo representa como una estructura concntrica que sugiere el pasaje de estado en estado, desde lo material a lo espiritual. Es smbolo csmico e instrumento para la meditacin. Por ser instrumento, en ocasiones se lo denomina tambin yantra, palabra que designa un dispositivo empleado en astronoma. Cf. P. Rawson, El arte del tantra, Cap. 5; A. Volwahsen, Op. cit.; J. D. Barrow, La Trama Oculta del Universo, Cap. 2. 80 Las pagodas chinas no son ms que "stupas verticalizadas" y, como tales, imgenes del mundo. La gigantesca stupa de Borobudur en Java, cuyo significado ya ha sido explicado, es tambin una representacin simblica del universo. Cf. M. Bussagli, Op. cit; S. Lee, Op. cit; y R. C. Craven, Op. cit.

  • 15

    de la gigantesca stupa de Borobudur en la figura 9. En las antiguas civilizaciones del lejano Oriente la fundacin de una nueva ciudad implicaba un complejo ritual durante el cual se orientaba cardinalmente de la mandala.81 El trazado de las ciudades responda al cuadrado, smbolo del mundo ordenado.82 Las calles se orientaban de norte a sur y de este a oeste, y dos grandes "vas reales", coincidentes con las medianas de la mandala, atravesaban la ciudad sealando el centro. Estas vas reales se prolongaban hacia las afueras del poblado a travs de cuatro puertas situadas en los cuatro puntos cardinales. La orientacin ritual y la disposicin de la ciudad segn el sagrado diagrama de la mandala tenan por finalidad establecer la armona entre la nueva poblacin y la Norma Csmica.83 El principio de la mandala orientada tambin rega la edificacin de los templos.84 En particular, en la India el arte de construir creaba "correspondencias mgicas"85 entre el universo y su imagen microcsmica, el templo. El trazado de estos edificios se realizaba resolviendo un conjunto de ecuaciones matemticas cuyo objetivo era situar el templo en perfecta concordancia con el espacio, con el tiempo y con los astros. La orientacin cardinal estaba contemplada dentro de estos clculos. Para el sthapati o sacerdote arquitecto dichas ecuaciones posean el valor de leyes csmicas a partir de las cuales pretenda establecer una relacin favorable entre la construccin sacra y las fuerzas del cosmos.86 El simbolismo csmico de la construccin sagrada es particularmente rigurosos en Camboya. Los templos de la civilizacin Khmer estn estrictamente centrados y orientados segn los cuatro puntos cardinales, con la fachada y la puerta principal mirando hacia Oriente, "fuente de la vida".87 Presentan una estructura cuadrangular y concntrica, con cuatro escaleras en los cuatro puntos cardinales, que responde a la mandala y simboliza la configuracin del mundo.88 (Figuras 15 y 16). Los templos Khmer exhiben, adems, una disposicin astronmica y astrolgica que los sita en comunin con el universo.89 Uno de los ejemplos ms impresionantes del simbolismo

    81 Cf. A. Volwahsen, Op. cit. 82 Cf. M Bussagli, Op. cit. 83 Cf. A. Volwahsen, Op. cit. 84 La arquitectura templaria hinduista ofrece asombrosos ejemplos de ordenacin csmica. el magnfico templo de Kailasanatha en Ellora [2da. mitad del siglo VIII] fue completamente excavado en la ladera de una montaa, siguiendo la estricta orientacin este- oeste. Otro ejemplo fascinante de la manera en que el hinduismo concret la orientacin cardinal es el conjunto de templos de Mamahallapuram, floreciente centro de peregrinaje durante los siglos VII y VIII d.C. En este lugar las formaciones granticas naturalmente orientadas en direccin norte- sur fueron aprovechadas para esculpir cinco maravillosos templos: los pandava- raths, o templos en forma de carro, que simbolizan el vehculo del dios. Cf. S. Lee, Op. cit y R. C. Craven, Op. cit. 85 R. Huyghe, Op. cit., Tomo II, pg. 126. 86 Cf. A. Volwahsen, Op. cit. Vase tambin M. C. Tomasini, El nmero y lo sagrado en el arte, Primera Parte. 87 M. Bussagli, Op. cit., pg. 169. 88 El simbolismo csmico de la construccin sagrada de Camboya se encuentra expresado en las inscripciones lapidarias de los propios templos. R. Huyghe, Op. cit., Tomo II, Cap. X. 89 El templo de Preah Ko y el santuario de Bakong, ambos construidos durante el reinado de Indravarman, en la segunda mitad del siglo IX, obedecen al modelo descrito. El uso de las cuatro escaleras con portales al pie de cada una de ellas se hizo extensivo, posteriormente, a otros templos Khmer. El complejo templario de Bakheng, erigido durante el reinado de Yashovarman, hijo y sucesor de Indravarman, guarda estrechas similitudes con la gran stupa de Borobudur ya que, como sta, adhiere a un esquema cuadrangular y escalonado, orientado cardinalmente. Tal como Borobudur, Bakheng constituye una representacin simblica del universo, cuyo significado csmico ha sido profundamente analizado. El nmero de torres que posee se ha vinculado tanto a conceptos astrolgicos y astronmicos como a ciertos nmero msticos del hinduismo. Debido a esta rica simbologa numrica, el monumento ha sido

  • 16

    csmico en la arquitectura Khmer es la ciudad sagrada de Angkor Thom [fines del siglo XII- principios del siglo XIII], recinto amurallado con cuatro enormes puertas en los puntos cardinales.90 En cada una de las puertas se esculpi un gigantesco rostro. (Figura 18). En el centro de Angkor Thom se levanta el templo- montaa, identificado con el Monte Meru, lugar de la creacin en la cosmologa hind. Este templo se conoce con el nombre de Bayon. (figura 17). Sobre las torres del Bayon se esculpieron otros cuatro rostros descomunales que miran hacia los cuatro puntos cardinales. (Figura 19). Los rostros del Bayon y los de las portadas simbolizan la mirada de Buda abarcando los cuatro cuartos del universo. Aluden, asimismo, al poder divino del rey extendindose en las cuatro direcciones del mundo.91

    Figuras 15 y 16: A la izquierda: planta del templo montaa de Bakheng, cuya construccin se inici en el ao 893. A la derecha: planta de Bakong, cuya construccin se inici en el ao 881; es el ms antiguo de los templos montaa que an se encuentra en pie.

    considerado por P. Rawson como "...una imagen compendiada de la estructura del cosmos, en cuyo centro reside el poder divino del dios...". Cf. P. Rawson, The Art of Southeast Asia, pg. 55. Otros templos como Pre Rup (c. 961), Ta Keo (c. 1000) y Baphuon (c. 1050) tambin estn orientados hacia el este presentando las consabidas escalinatas con portales en los cuatro puntos cardinales. Sin embargo, a diferencia de otros santuarios Khmer, el templo- montaa de Angkor Vat, construido por Suryavarman en el siglo XII, est orientado hacia Occidente, lugar de la muerte. Debido a esta peculiar orientacin, Angkor Vat ha sido entendido como una imagen de las montaas del cielo, paraso reservado a los hombres de buenas acciones despus de su muerte, segn la mitologa Khmer. El templo- montaa de Angkor Vat, imagen del cielo, es entonces un santuario mortuorio construido por Suryavarman para s mismo. CF. P. Rawson, The Art of Southeast Asia, Cap. 2 y 3. 90 El complejo fue construido por Jayavarman VII. 91 Hasta el siglo XII la religin de los reyes Khmer fue el hinduismo. La divinidad de la realeza encontraba su origen trascendente en los dioses del panten hind. En el siglo XII el rey Jayavarman VII adopt el budismo mahayana. Pero el budismo profesado desde entonces por la realeza Khmer difera mucho del budismo original, puesto que Buda era venerado como Seor del Universo, prototipo y modelo del rey. La doctrina budista fue interpretada tendenciosamente con la finalidad de justificar el origen divino del rey en Buda. Cf. P. Rawson, Op. cit.; M. Bussagli, Op. cit. y S. Lee, Op. cit.

  • 17

    Figura 17: planta de Bayon; c. 1200. El templo montaa de Jayavarman simboliza el Monte Meru.

    Figuras 18 y 19: A la izquierda: portal del Angkor Thom, orientada hacia los puntos cardinales, en las que se esculpi el rostro de Buda. A la derecha: en el interior de Angkor Thom se encuentra el Bayon, en cuyas torres se esculpieron rostros mirando hacia los cuatro puntos cardinales.

    Al igual que en otras culturas arcaicas, en Amrica Precolombina el simbolismo cosmolgico fue el concepto rector de la arquitectura sagrada. El centro ritual de Teotihuacan [regin central de Mxico, c. 100 a.C.- 750 d.C.] est organizado con extrema regularidad y en relacin estrecha con los ciclos solares. (Figura 20) Esta relacin se expresa, sobre todo, en la orientacin de la pirmide mayor la Pirmide del

  • 18

    Sol cuyo eje coincide con la puesta del sol del solsticio de verano.92 El resto de los edificios se disponen a lo largo de la Avenida de la Muerte, camino que corre en direccin norte- sur y en cuyo extremo norte se ubica la Pirmide de la Luna.93 La orientacin comn a los monumentos "...se rige... por relaciones csmicas, y la disposicin espacial refleja el ritmo del universo...".94

    Figura 20: centro ceremonial de Teotihuacan. En la antigua civilizacin Maya cada ciudad era concebida como una representacin simblica del universo. As, por ejemplo, la disposicin de ciertas construcciones95 en Tikal [c. 250- 600 d.C.] simboliza el ciclo solar implcito en las cuatro direcciones cardinales.96 Al mismo tiempo, los tres niveles del universo maya cielo, tierra e inframundo se encuentran representados por estas mismas estructuras.97

    92 En el Hemisferio Norte. 93 Cf. G. Kubler, Op. cit y M. E. Miller, The Art of Mesoamerica. From Olmec to Aztec, Cap. 4. La orientacin de los edificios sagrados no necesariamente debe obedecer ritmos solares. Segn E. Pasztory la alineacin de Teotihuacan podra estar relacionada con algn acontecimiento astronmico anual, como por ejemplo la primera aparicin de las Plyades en el cielo teotihuacano, o el punto donde esta constelacin desaparece. Ver E. Pasztory, El mundo natural como metfora cvica en Teotihuacan. 94 G. Kubler, Op. cit., pg. 57. Los resaltados son mos. El centro religioso de Monte Albn, en la regin sur de Mxico (c. 400- 900 d.C.) no presenta una orientacin tan rigurosa, an cuando se alinea tambin en direccin norte- sur. Sin embargo el deseo de comunin entre el centro ritual y el universo se manifiesta en las estructuras edilicias, que parecen hacer eco de la topografa que las rodea, repitiendo la secuencia de elevaciones y depresiones de las cadenas montaosas adyacentes. Al respecto dice M. E. Miller: "...tan precisamente se repite el ritmo de las montaas orientales que la acrpolis de Monte Albn se convierte en un microcosmos, rplica del valle circundante de Oaxaca central...". Op. cit., pg. 84. 95 Grupo TPG 4E-4 [Pirmides gemelas 4E-4]. Cf. R. J. Sharer, Op. cit. 96 En la cosmologa maya el nmero cuatro, que representaba las cuatro direcciones cardinales, era un nmero sagrado. El este era la direccin del sol renacido, emergiendo de Xibalba, el submundo, cada maana. El zenit se asimilaba al norte y representaba al sol en su mxima plenitud. El oeste era la direccin del sol moribundo, retornando a Xibalba, el dominio de la muerte. Y el nadir, equiparado con el sur, simbolizaba el sol muerto a medianoche, peleando con los seores de Xibalba para renacer en la maana. Cf. R. J. Sharer, Op. cit. 97 Las pirmides gemelas situadas el este y al oeste, sealando la salida y la puesta del sol, representan el plano de lo terrenal; una edificacin de nueve niveles ubicada en el sur representa los nueve niveles del

  • 19

    Otro ejemplo interesante se encuentra en la ciudad maya de Uaxactum98, donde existe un conjunto de cuatro templos alineados segn el recorrido anual del sol. Mirando hacia ellos desde las escaleras de la pirmide ubicada al oeste, se observa el orto del solsticio de verano sobre el templo del norte; el orto del solsticio de invierno sobre el templo del sur; y el orto de los equinoccios de primavera y de otoo sobre el templo del este.99 (Figura 21). Estas distribuciones conforman verdaderos "cosmogramas"100 puesto que obedecen relaciones celestes y constituyen un perfecto reflejo del orden del cosmos. Tambin los famosos monumentos de Chichen Itz101 [fines del primer milenio d.C.] se encuentran orientados de tal manera que permiten la observacin de los astros.102 Como es sabido, la pirmide denominada El Castillo est orientada de tal manera que en los dos equinoccios [aproximadamente el 21 de marzo y el 21 de septiembre] la sombra de sus nueve niveles escalonados se proyecta sobre la escalinata norte sugiriendo una serpiente animal sagrado en la mitologa maya deslizndose hacia la base.103 (Figura 22). En sntesis, las culturas arcaicas has orientado sus construcciones sagradas en concordancia con los astros. La orientacin ritual buscaba armonizar el espacio consagrado con el universo, disponiendo los elementos de la arquitectura sagrada en relacin con los movimientos solares. Simblicamente el hombre religioso encontraba, en la orientacin ritual, un eco del orden divino implcito en los cielos y una proyeccin terrenal del orden celeste.

    Figura 22: Pirmide de Kukulkan, Chichen Itza.

    inframundo; y un recinto amurallado y abierto al cielo, ubicado el norte, representa los dominios celestiales. Cf. R. J. Sharer, Op. cit. 98 Grupo E de Uaxactum. Cf. Ibid. Tanto Uaxactum como Tikal corresponden al perodo Clsico Temprano de la cultura Maya. 99 Cf. G. Kubler, Op. cit Los solsticios mencionados corresponden al Hemisferio Norte. 100 R. J. Sharer, Op. cit., pg. 524. 101 Chichen Itz corresponde al perodo Post Clsico de la cultura Maya. 102 El edificio denominado El Caracol se reconoce actualmente como un centro sagrado de observacin de los movimientos del planeta Venus, cuyos ciclos temporales fueron de enorme importancia en el calendario maya. Cf. M. E. Miller, Op. cit.; y R. J. Sharer, Op. cit. Vase tambin M. C. Tomasini, Astronomia, geometra y orden: el simbolismo cosmolgico en la arquitectura precolombina. 103 Cf. M. E. Miller, Op. cit.

  • 20

    Figura 21: Uxanctum. Un observador ubicado en la pirmide E VII ver salir el sol en la pirmide E I el da del solsticio de junio y en la pirmide E III el da del solsticio de diciembre; mientras que lo ver asomar en la pirmide E II en los das de equinoccio.

    ***

  • 21

    Bibliografa - Barja de Quiroga, Y. (dir.): "Vitruvio Polion. Los Diez Libros de Arquitectura". Ed. Akal, Fuentes de Arte, Madrid, 1992. - Barrow, J. D.: "La trama oculta del universo". Ed. Crtica. Serie Drakontos. Barcelona, 1996. - Belmonte, J. A.; Astronoma y arquitectura: el papel de los astros en la cultura y el arte del Egipto antiguo. En M. A. Molinero y D. Sola (ed.), Arte y Sociedad del Egipto Antiguo, Encuentro, 2000. - Bussagli, M.: "Arquitectura Oriental", Tomo I. Historia Universal de la Arquitectura. Ed. Aguilar, Madrid, 1989. - Calvo, S. A.: "Estudios acerca de la construccin, arquitectura y planeamiento incas". Cap. II. I: "El urbanismo inca". Cmara Peruana de la Construccin, Lima, 1987. - Cenival, J. L.: "Egipto". Ed. Garriga, Barcelona, 1965. - Craven, R. C.: "Indian Art". Ed. Thames and Hudson, London, 1995. - Chvez, A.: "Pop Wuj. Libro del Tiempo. Poema mito- histrico ki- ch." (Traducido del texto original por Adrin I. Chvez). Biblioteca de Cultura Popular, Ediciones del Sol, Bs. As., 1987. - Childe, G.: "Los orgenes de la civilizacin". F. C: E., Bs. As., 1992. - Dukelsky, C.: "Influencia de las creencias religiosas en el arte egipcio". Bs. As., Opfyl, 1994. - Eliade, M.: "Cosmologa y Alquimia Babilnicas". Ed. Paids, Bs. As., 1993. - Eliade, M.: "Lo sagrado y lo profano". Ed. Paids, Bs. As., 1998. - Frankfort, H.: "Arte y Arquitectura del Oriente Antiguo". Ed. Ctedra, Madrid, 1992. - Frankfort, H.: El pensamiento prefilosfico. Vol. I: Egipto y Mesopotamia. F. C. E. - Grimal, P.: "Los mitos griegos". COMPLETAR. - Hani, J.: "El simbolismo del Templo Cristiano". Jos J. Olaeta, Ed. Sophia Perennis. Barcelona, 2000. - Hart, G.: "Mitos Egipcios". Ed. Akal, Madrid, 1994. - Huyghe, R. (coord.): "El Arte y el Hombre". Ed. Planeta, Barcelona, 1973.

  • 22

    - Ions, V.: "Indian Mythology". Chancellor Press, London, 1997. - Kolata, A. y Ponce Sangines, C.: "Tiwanaku. La ciudad de en medio". En "La Antigua Amrica. El Arte de los Parajes Sagrados". The Art Institute of Chicago/ Grupo Azabache. Mxico, 1993. - Kubler, G.: "Arte y Arquitectura en la Amrica Precolonial". Ed. Ctedra, Madrid, 1986. - Lee, S. E.: "A History of Far Eastern Art". Harry N. Abrams, Inc. Publishers. New York, 1994. - Liverani, M.: "El Antiguo Oriente. Historia, sociedad y economa". Ed. Crtica, Grijalbo- Mondadori, Barcelona, 1995. - Mc Call, H.: "Mitos Mesopotmicos". Ed. Akal, Madrid, 1994. - Miller, M. E.: "The Art of Mesoamerica. From Olmec to Aztec". Thames and Hudson, London, 1996. - Page, R. I.: "Mitos Nrdicos". Ed. Akal, Madrid, 1992. - Pasztory, E.: "El mundo natural como metfora cvica en Teotihuacan". En "La Antigua Amrica. El Arte de los Parajes Sagrados". The Art Institute of Chicago/ Grupo Azabache. Mxico. 1993. - Payne Gaposchkin, C.: "Introduccin a la Astronoma". Eudeba, Bs. As., 1964. - Puech, H. C.: Historia de las religiones. Vol. II y Vol. III. Ed. Siglo XXI, 1986. - Rawson, P.: "El arte del Tantra". Ed. Destino, Thames and Hudson. Barcelona, 1992. - Rawson, P.: "The Art of Southeast Asia". Thames and Hudson, London, 1995. - Revilla, F.: "Diccionario de Iconografa y Simbologa". Ed. Ctedra, Madrid, 1995. - Schulz, C. N.: "El significado en la Arquitectura Occidental". Varios Volmenes. Ed. Summa, Bs. As., 1979. - Sharer, R. J.: "The Ancient Maya". Stanford University Press, Stanford, California, 1994. - Soekmono, R.: "Borobudur. Una joya del patrimonio humano". En Correo de la Unesco, febrero 1983. - Stone Miller, R.: "Art of the Andes. From Chavin to Inca". Ed. Thames and Hudson, London, 1995. - Taube, K.: "Mitos Aztecas y Mayas". Ed. Akal, Madrid, 1996.

  • 23

    - Tomasini, M. C.: "Astronoma, geometra y orden: el simbolismo cosmolgico en la arquitectura precolombina". Ciencia y Tecnologa, Nmero 7, ao 2007. Universidad de Palermo, Facultad de Ingeniera. - Tomasini, M. C.: "El nmero y lo agrado en el arte ". Ciencia y Tecnologa, Nmero 3, ao 2003. Universidad de Palermo, Facultad de Ingeniera. - Valcrcel, L.: "Machu Picchu, el ms famoso monumento arqueolgico del Per". EUDEBA, Bs. As., 1978. - Volwahsen, Andreas: "Arquitectura de la India". Coleccin Arquitectura Universal. Ed. Garriga, Barcelona, 1971. - Whittaker, C.: "An Introduction to Oriental Mythology". Chartel Books, N. J., 1989. - Wright, M. R.: "Cosmology in Antiquity". Routledge Ed., Sciences in Antiquity series, London, 1995.

    ***