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DERECHO AGRARIO CONTEMPORÁNEORESEÑAS

El campo mexicano se ha trans-formado, y dicho cambio trajo unnuevo Derecho Agrario que inclu-ye otras normas, distintas a lasque regularon la redistribución dela tierra durante casi 80 años.Esto no quiere decir que no exis-tieran leyes sino más bien noestaban concatenadas como aho-ra. En particular, nuestro país secaracteriza por una enorme can-tidad de leyes, quizás es así por-

que se trata de normar nuestracomplejidad.

La tierra, el pedazo de paísal que todos tenemos derecho,por el sólo hecho de ser mexica-no, tiene distintos significados,para algunos es la madre de lanación y es sagrada, para otroses una mercancía. Pero en todocaso, la reglamentación medianteel Derecho Positivo da la pautapara su aprovechamiento. Lo an-

Derecho Agrario Contemporá-

neo. Hacia una nueva ruralidad

en México. Gallardo Zúñiga,Rubén, Porrúa, 2007, 384 pp.

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RESEÑAS

terior es una idea que subyaceen la obra del magistrado RubénGallardo, quien se dio a la tareade elaborar un texto, en principiopara universitarios, pero despuésde consultarlo, se puede afirmarque está destinado para todopúblico, en especial para aque-llos que mantienen una relacióndirecta o indirecta con la tierra.

De todos los textos existen-tes, este es de los pocos quetratan nuevos conceptos y exten-sa variedad de temas, entre ellossobresale la relación estrechaentre lo agrario y lo rural; aborday mantiene los conocimientos clá-sicos sobre la propiedad en losperiodos prehispánico, colonial yse extiende con los preceptossurgidos tras la Revolución mexi-cana, analiza la institucionalidadagraria y el conjunto de accionesque conformaron la estructura dela tenencia de la tierra.

De forma sucinta, pero consuficiente rigor y claridad, se ex-ponen los antecedentes sobre elrégimen de propiedad contempo-ráneo, no sólo para comprender-lo sino para reafirmar la impor-tancia y el papel de la tierra enla transformación del hombre nó-

mada en sedentario, en elbinomio tierra-hombre como lollama el autor.

En ese proceso, de largoaliento, el Derecho ha protegidoy regulado tanto la posesióncomo el disfrute de la tierra. Loque permite entender por qué elautor establece una definiciónglobal y general: el derecho agra-rio son las normas jurídicas, ladoctrina y la jurisprudencia queen su conjunto regulan la propie-dad de la tierra, la producción ycomercialización. Además, la re-forma de 1992 establece la posi-bilidad al cambio de régimen depropiedad y aplicación de normasdel derecho común, por lo queactualmente el derecho agrariollega a ser considerado de carác-ter mixto.

Dentro del Derecho AgrarioContemporáneo se encuentra unconjunto de instituciones de laadministración pública federalque conforman lo que se conocecomo el Sector Agrario, el autorsugiere que el desarrollo del países posible si se cuenta con insti-tuciones fuertes, capaces y am-pliamente aceptadas por sus in-terlocutores, los sujetos agrarios.

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DERECHO AGRARIO CONTEMPORÁNEO

Lo anterior es posible y visible.Durante ochenta años, distintasinstituciones fueron creadas ydesplazadas por otras, sin em-bargo, a partir de 1992 surgióuna nueva institucionalidad quese encuentra extensamente dis-tribuida por todo el país y admi-nistrativamente coordinada y di-rigida por la Secretaría de laReforma Agraria. Destaca lacreación de dos entes guberna-mentales encargados de laprocuración y administración dejusticia: la Procuraduría Agrariay los Tribunales Agrarios, am-bos con rango constitucional, laprimera con carácter deOmbudsman agrario y los segun-dos como la autoridad sustituta,dotados de plena jurisdicción yautonomía.

El enfoque jurídico es ne-cesario para entender y proponeracciones en el medio rural, sinexagerar, se puede decir que hoymás que nunca, el Derecho estáde moda. En esta obra se enun-cian las principales leyes, desde1513 hasta nuestros días, el re-paso es necesario, tal como afir-ma el autor, si uno quiere com-prender algunas de las causas

que dieron origen a la legislaciónpropiamente agraria, más aún, siuno u otro quiere intentar explicarlos cambios que sufrió el marcolegal que reguló el reparto agra-rio. El análisis del antecedentejurídico y de las leyes vigentes,descubre nítidamente el vínculoentre lo agrario y lo agrícola enlo rural. Hasta ahora pocos rela-cionan las leyes de las dos esfe-ras. Fue necesario establecer larelación del Derecho Agrario conel privado, con otras ramas delDerecho Social y con la políticaagropecuaria.

En el mismo sentido, otroelemento de valor jurídico en elDerecho Agrario contemporáneoes la fe pública. El acceso y so-licitud de fedatarios, entre elloslos notarios, permite salvaguardarlos derechos y el patrimonio.Como cita el autor, es mediantela intervención del fedatario quese otorga certeza jurídica a losactos que se producen en lasrelaciones entre personas; lo an-terior es importante que se estu-die, si consideramos que se vie-ne la época de la agricultura decontrato y con ello la multiplica-ción de los contratos agrarios. En

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RESEÑAS

particular, para este punto, el tex-to ofrece a manera de ejemplo laexperiencia de algunos países(Bolivia, Brasil, Francia, España,y Estados Unidos), que pudieraser considerada por el nuestro.

En los últimos capítulos seincluye una interesante radiogra-fía sobre las organizaciones cam-pesinas a fin de tener una ideade quiénes son algunos de losinterlocutores de las institucionesdel Sector Agrario; finalmente elautor enuncia una de sus ideascentrales, desde su particularpunto de vista:

…incorporar al derechoagrario contemporáneo lostemas que tienen una impor-tancia creciente a partir de lareforma constitucional y delos cambios en la estructuraagraria, tales como la auto-nomía ejidal, el medio am-biente, la organización parala producción y la conversiónde la propiedad social al ré-gimen privado mediante laadopción del dominio pleno.

Manuel Morales JuradoDGEP/PA