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Derechos de Autor © 2015 Christ Fellowship, McKinney, Texas 75070.
Publicado en inglés bajo el título:
REVOLUTIONS
Por Christ Fellowship
© 2015 McKinney, Texas 75070
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Nuestro Equipo de Guías de EstudioLisa Scheffler- Autor
Bruce Miller - Editor General
Especial agradecimiento a William B. McFadden por su tiempo y talentos para revisar este estudio.
Jaime González - Editor General
Equipo de TraducciónPatricia Cevallos
Hortensia Van Hoosier
Lilia Santafe – Editora
Gabriela Garavito - Editora
¿Preguntas? ¿Comentarios?Si el uso de esta guía te lleva a tener preguntas acerca de la Biblia o teología, envíanos un e-mail a:
Todo comentario es bienvenido. Contestaremos tus preguntas tan pronto nuestra carga de trabajo nos lo permita.
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Semana 3 | Revolución del Espíritu Hechos 2:1–41Lisa Scheffler, autor
“Dios quiere mucho más que simples acciones, El quiere que nos pongamos en acción. El amor de Dios debería revolucionar nuestras vidas. La gracia de Jesús, por su propia naturaleza, nos impulsa hacia su mundo como agentes de su Reino.”1 – Joshua Ryan Butler
La revolución comenzó cuando Jesús caminó por las calles polvorientas de Galilea y llamaba a la gente que le siguiera. Les sorprendió cuando Jesús fue arrestado y crucificado. Pero aún esos horrores eran parte del plan de Dios. Su resurrección y ascensión al cielo demostró la verdad del mensaje y la validez de sus aseveraciones. Jesús, el hijo del hombre, ahora reina como rey. Su reino está aquí.
A través de nuestro estudio de Hechos, aprendemos que la revolución de la que formamos parte no es conspirando para derrocar gobiernos o traer cambio social por coerción. Por lo contrario, es un movimiento basado en el amor que proclama el mensaje de amor del Rey y cambia al mundo una vida a la vez. El poder del Espíritu Santo, va desde el Nuevo nacimiento y transforma los corazones. Somos revolucionarios de adentro hacia afuera. La misión que Cristo dio a los discípulos hace siglos, se vuelve nuestra cuando ponemos nuestra fe en Él.
Esta semana vamos a regresar a Hechos y ser testigos de la llegada de la promesa del Espíritu Santo. Los discípulos de Cristo recibieron “poder de lo alto” (Lucas 24:49) y comenzó su misión.
Día 1 | Lee y Reacciona En nuestro estudio de Hechos hemos visto a los discípulos después de la muerte y resurrección de Jesús. Antes de regresar al Padre, Jesús pasa un tiempo con sus discípulos, ayudándolos a entender su muerte y resurrección a la luz de las Escrituras. Antes de ascender, Jesús les da una promesa y una misión: “Pero, cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.” (Hechos 1:8). En Hechos 2, llega el Espíritu Santo.
Yo he visto algunas películas con buenas versiones de la escena que vamos a leer esta semana, pero ninguna le hace justicia a lo que me imagino. A medida que leas el pasaje de esta semana, visualiza la escena que se desarrolla. ¿Qué miras y qué escuchas? ¿Qué reacción crees tienen los discípulos? ¿Y otros testigos? Imagínate
1 N Joshua Ryan Butler, The Pursuing God, (Nashville, TN. Thomas Nelson, 2016), 74.
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tu propia película.
Hechos 2:1–15El Espíritu Santo desciende en Pentecostés
Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar. 2 De repente, vino del cielo un ruido como el de una violenta ráfaga de viento y llenó toda la casa donde estaban reunidos. 3 Se les aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos. 4 Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.5 Estaban de visita en Jerusalén judíos piadosos, procedentes de todas las naciones de la tierra. 6 Al oír aquel bullicio, se agolparon y quedaron todos pasmados porque cada uno los escuchaba hablar en su propio idioma. 7 Desconcertados y maravillados, decían: « ¿No son galileos todos estos que están hablando? 8 ¿Cómo es que cada uno de nosotros los oye hablar en su lengua materna? 9 Partos, medos y elamitas; habitantes de Mesopotamia, de Judea y de Capadocia, del Ponto y de Asia, 10 de Frigia y de Panfilia, de Egipto y de las regiones de Libia cercanas a Cirene; visitantes llegados de Roma; 11 judíos y prosélitos; cretenses y árabes: ¡todos por igual los oímos proclamar en nuestra propia lengua las maravillas de Dios!»12 Desconcertados y perplejos, se preguntaban: « ¿Qué quiere decir esto?» 13 Otros se burlaban y decían: «Lo que pasa es que están borrachos».
Pedro se dirige a la multitud14 Entonces Pedro, con los once, se puso de pie y dijo a voz en cuello: «Compatriotas judíos y todos ustedes que están en Jerusalén, déjenme explicarles lo que sucede; presten atención a lo que les voy a decir. 15 Estos no están borrachos, como suponen ustedes. ¡Apenas son las nueve de la mañana!
¿Qué ocurrió cuando el Espíritu Santo descendió sobre los discípulos?
¿Cómo reaccionó la multitud?
La llegada del Espíritu Santo es un momento clave en el libro de Hechos. Ahora ellos tienen el poder que Jesús les prometió. Sus seguidores están listos para llevar a cabo la misión.
Oración de la SemanaPadre Dios, gracias por tu amor y gracia. Tú enviaste a tu Hijo a rescatarnos del pecado y de la muerte y salvarás a cualquiera que confía El. Tú me has dado el poder de tu Espíritu Santo equipándome para tu misión. Dame la pasión de alcanzar a aquellos que no te conocen. Dame tu compasión y amor. Vence mis dudas y temores para que pueda proclamar tu mensaje con gracia, sabiduría y valentía. Amén.
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Día 2 | Lenguas de Fuego El libro de Ezequiel del Antiguo Testamento nos narra la historia de huesos secos y sin vida que vuelven a la vida. El Señor lleva a Ezequiel al valle de los huesos y le dice que profetice sobre ellos “Así dice el Señor omnipotente a estos huesos: ‘Yo les daré aliento de vida, y ustedes volverán a vivir” (Ezequiel 37:5).
Ezequiel hace lo ordenado. El escucha el sonido de los huesos al juntarse nuevamente, y mira aparecer tendones carne sobre ellos, pero no hay vida. Así que una vez más el Señor le ordena a hablar al profeta: “Esto ordena el Señor omnipotente: “Ven de los cuatro vientos, y dales vida a estos huesos muertos para que revivan ”. (Ezequiel 37:9) Después de que el profeta habló las palabras dadas por Dios, se encontró un ejército parado delante de él, vivo y lleno de aliento.
Al igual que con Adán cuando fue formado, el aliento de Dios le dio vida. Jesús explica a Nicodemo, el Espíritu de Dios da nueva vida. “No te sorprendas de que te haya dicho: “Tienen que nacer de nuevo”. 8 El viento sopla por donde quiere, y lo oyes silbar, aunque ignoras de dónde viene y a dónde va. Lo mismo pasa con todo el que nace del Espíritu.” (Juan 3:7–8) En el griego y en el hebreo, la palabra “viento” y “aliento” también significan Espíritu. .2
Después de la ascensión de Jesús, los discípulos esperaban la llegada del Espíritu Santo. Pueden imaginarse tratando de descifrar las expectativas recordando las Escrituras conocidas desde la niñez. Historias como la de Ezequiel en el valle de los huesos secos pudieron venir a la mente. Ustedes también pueden imaginarse recordando las escrituras que Jesús les había enseñado y recordando las palabras que dijo cuando tuvo el encuentro con Nicodemo. ¿Crees que ellos anticipaban que el Espíritu Santo vendría como un viento recio?
Hechos 2:1–41 El Espíritu Santo desciende en Pentecostés2 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar. 2 De repente, vino del cielo un ruido como el de una violenta ráfaga de viento y llenó toda la casa donde estaban reunidos. 3 Se les aparecieron entonces unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos. 4 Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.
¿Qué dos símbolos asocia Lucas con la llegada del Espíritu Santo?
¿Qué sucede cuando los discípulos son llenados?
2 Fernando, Acts, 87
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La llegada del Espíritu Santo sucedió durante las festividades judías de Pentecostés. Era una celebración de la cosecha, el Pentecostés sucedía 50 días después de la Pascua. Era una las tres festividades de peregrinación durante el año, la gente venía a Jerusalén de todas las regiones.
De acuerdo con Hechos 2, los seguidores de Cristo estaban todos juntos en el mismo lugar. 2 De repente, vino del cielo un ruido como el de una violenta ráfaga de viento y llenó toda la casa donde estaban reunidos” y ellos vieron “unas lenguas como de fuego” (Hechos 2:2). Como vemos en Ezequiel, el viento es a menudo asociado con el Espíritu Santo. El fuego también es un símbolo prominente del Antiguo Testamento. A menudo significa una presencia poderosa de Dios. Fue con un pilar de fuego que Dios dirigió a los Israelitas por el desierto después de rescatarlos de la cautividad de Egipto.
Esta vez el fuego aparece y luego se separa. Es significativo que las lenguas de fuego “se posaron sobre cada uno de ellos”. El Espíritu Santo toca a cada uno de los seguidores de Cristo individualmente.
Basados en la referencia del Antiguo Testamento arriba mencionada, ¿Qué significado encuentras en que el Espíritu Santo viniera como viento y como fuego?
Inmediatamente ellos son “llenados con el Espíritu Santo” y empezaron a hablar en lenguas. Muchos estudiosos piensan que las lenguas habladas en este pasaje, es de lo que está hablando Pablo en 1 Corintios 12-14. En el Pentecostés, cada miembro de la muchedumbre escucha hablar su propio idioma. Las lenguas de las cuales habla Pablo son sonidos proféticos usados para adorar a Dios y edificar al cuerpo.3
El Espíritu Santo y el creyente El Espíritu Santo entra en la vida del creyente en el momento de la salvación y le da nueva vida. Como vimos la semana pasada, el Espíritu Santo es el Paracletos. El sirve como nuestro abogado, consolador y ayuda en nuestra vida y ministerio. El trabajo del Espíritu Santo en Hechos 2 nos muestra que también da a los creyentes el poder para llevar a cabo la voluntad de Dios. Como veremos a continuación en el pasaje de mañana, el Espíritu Santo capacita a los discípulos a comunicar el evangelio a la multitud y así comienza su misión.
Piensa en un área donde batallas para obedecer la voluntad de Dios. Toma tiempo ahora mismo para orar y pedir específicamente que El Espíritu Santo te de poder en esta área.
Como Pablo recuerda a los Efesios, “ Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica” (Efesios 2:10). El Espíritu Santo nos dará poder para hacer ese trabajo.
3 Fernando, Acts, 88.
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Día 3 | Maravillas de DiosEn Génesis (justo después del diluvio, pero antes de conocer a Abraham) está el desconcertante intento de la humanidad de construir una torre que llegue hasta el cielo. Sus números decrecieron con el diluvio, los habitantes de la tierra tienen miedo de ser dispersados por toda la tierra. Ellos también quieren hacerse famosos con su ciudad y con esta torre. (Génesis 11:4). Pero Dios vuelve a dar el mandato dado a la creación “multiplíquense y llenen la tierra,” razón por la cual esta torre es un pecado de la misma índole que el de Adán y Eva cuando decidieron comer del fruto prohibido. (Génesis 3). Una vez más la humanidad escoge desafiar, confiar y obedecer a si misma. En respuesta Dios confunde los idiomas. Ellos no se pueden entender los unos a los otros, así que la gente se dispersó por toda la tierra.
Aunque El fuerza a la humanidad a dispersarse, Dios no ha dejado su plan de tener un pueblo escogido para El. En los siguientes capítulos de Génesis vemos a Dios haciendo promesas a Abraham para convertirlo en una gran nación, de engrandecer su nombre y a través de él, bendecir a todas las familias de la tierra. (Génesis 12:2–3).
En Hechos vemos a Dios listo para cumplir esa promesa al equipar los seguidores de Jesús para llevar las buenas nuevas a todos los confines de la tierra, empezando con aquellos que vinieron a Jerusalén para el Pentecostés. En esos momentos el Espíritu Santo se asegura que el lenguaje no sea un obstáculo para comprender el plan de Dios. El Pentecostés abre un nuevo capítulo en la historia de la Torre de Babel – un evangelio en muchas lenguas para gente de toda tribu, cultura y nación.4
Cuando dejamos el escenario ayer, los discípulos habían experimentado una dramática llegada del Espíritu Santo y estabam hablando en lenguas. Hoy veremos cómo responde la multitud.
Hechos 2:5–12 5 Estaban de visita en Jerusalén judíos piadosos, procedentes de todas las naciones de la tierra. 6 Al oír aquel bullicio, se agolparon y quedaron todos pasmados porque cada uno los escuchaba hablar en su propio idioma. 7 Desconcertados y maravillados, decían: « ¿No son galileos todos estos que están hablando? 8 ¿Cómo es que cada uno de nosotros los oye hablar en su lengua materna? 9 Partos, medos y elamitas; habitantes de Mesopotamia, de Judea y de Capadocia, del Ponto y de Asia, 10 de Frigia y de Panfilia, de Egipto y de las regiones de Libia cercanas a Cirene; visitantes llegados de Roma; 11 judíos y prosélitos; cretenses y árabes: ¡todos por igual los oímos proclamar en nuestra propia lengua las maravillas de Dios!»12 Desconcertados y perplejos, se preguntaban: « ¿Qué quiere decir esto?»13 Otros se burlaban y decían: «Lo que pasa es que están borrachos».
¿Cuáles son las dos reacciones primordiales de la multitud?
El sonido como de una “violenta ráfaga de viento” atrajo a una gran multitud. Debido a que era el tiempo
4 Derek Kidner, Genesis: An Introduction and Commentary, vol. 1, Tyndale Old Testament Commentaries
(Downers Grove, IL: InterVarsity Press, 1967), 119.
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del festival de la cosecha, se encontraban en Jerusalén judíos de toda la región y vinieron a ver lo que sucedía. La gente estaba asombrada de escuchar a los discípulos hablar en sus propios idiomas. Lucas nombra todas las ciudades representadas en este evento milagroso. Ellos provenían de un área geográfica muy grande desde Asia Menor, el norte de África hasta Roma. Estos visitantes se diferenciaban en nacionalidad, cultura, y lenguaje, pero aún así cada persona podía comprender los que los seguidores de Cristo –ese grupo desgreñado del área rural de Judea- estaban diciendo. “¡todos por igual los oímos proclamar en nuestra propia lengua las maravillas de Dios!” Ellos estaban sorprendidos de que gente de Galilea estuviera hablando sus idiomas. Una vez más Dios demostró como él usa a la gente ordinaria para hacer cosas extraordinarias.
Los peregrinos llevaron lo que aprendieron sobre el poder Salvador de Jesucristo de regreso a sus tierras natales. Ellos les contarían a sus amigos y familiares, y el evangelio empezó a ser esparcido. En vez de esparcirse para multiplicarse y llenar la tierra con más gente, estos testigos del poder del Espíritu Santo se dispersarían y ayudarían a llenar la tierra de creyentes del Señor Jesucristo. Dios estaba uniendo a la gente de diferentes naciones y culturas que hablaran diferentes idiomas en un solo Reino – con Cristo a la cabeza. El Cuerpo de Cristo sería multiétnico, multinacional, multicultural y multilingüe. Gente de todos los rincones del globo – unidos como ¡la familia de Dios!
No toda la multitud reconoció el milagro del Espíritu Santo. Algunos se burlaron de lo que vieron y escogieron rechazar la verdad que estaba delante de ellos. Esto sería una ocurrencia común en Hechos a medida que los discípulos proclaman el evangelio a todas las naciones. De la misma manera que rechazaron a Jesús, ellos rechazarían a sus seguidores.
¿Por qué crees que la gente rechazó lo que estaban viendo y oyendo?
Algunas veces deseamos que Dios hiciera un milagro espectacular en nuestra ciudad. Nos gustaría que hiciera algo tan obvio y maravilloso que nadie pudiera negar su presencia. Deberíamos recordar que incluso entonces habría algunos que escogeran creer que hay alguna otra explicación.
El Espíritu Santo puede hacer Milagros asombrosos para traer la gente a Cristo, pero a menudo trabaja a través de la vida callada de una persona fiel que vive para Jesús. Deberíamos orar que Dios nos use como vea conveniente. No deberíamos desalentarnos cuando alguien rechaza nuestro testimonio sobre Jesús, porque habrá muchos que lo harán.
Sea que podamos mostrar a Cristo a la gente con un milagro espectacular o a través de nuestras vidas fieles, aún estamos declarando las maravillas de Dios. Por Su gracia y con su Espíritu algunos reconocerán eso y querrán saber “¿Qué significa esto?”
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Día 4 | Proclamando el Evangelio Como vimos ayer en Hechos 2, la multitud que rodeaba a los discípulos en Pentecostés, experimento un milagro maravilloso, pero no sabían lo que significaba. Los discípulos tuvieron que explicar lo que ellos habían aprendido de Jesús sobre lo que Dios está haciendo en el mundo.
Como veremos en los versículos de hoy, el milagro del Espíritu Santo permite que Pedro comunique claramente a la muchedumbre de judíos temerosos de Dios. El explica el por qué él y los otros discípulos abrazan a un carpintero Galileo ejecutado como el tan esperado Mesías.
Vamos a enfocarnos en los versos que usa Pedro para comunicar su mensaje, pero yo recomiendo que lea el discurso completo (Hechos 2:22-26) en su Biblia. Hoy vamos a considerar lo que aprendimos del ejemplo de Pedro.
Hechos 2:14–17 14 Entonces Pedro, con los once, se puso de pie y dijo a voz en cuello: «Compatriotas judíos y todos ustedes que están en Jerusalén, déjenme explicarles lo que sucede; presten atención a lo que les voy a decir. 15 Estos no están borrachos, como suponen ustedes. ¡Apenas son las nueve de la mañana! [A] 16 En realidad lo que pasa es lo que anunció el profeta Joel:17 »“Sucederá que en los últimos días —dice Dios—, derramaré mi Espíritu sobre todo el género humano. Los hijos y las hijas de ustedes profetizarán, tendrán visiones los jóvenes y sueños los ancianos
Pedro comienza encarando la acusación de que los discípulos están borrachos. No es borrachera, Pedro insiste que es el Espíritu Santo. Luego recuerda a los oyentes judíos lo que Dios prometió a través del profeta Joel –que durante los “últimos días” El derramará de Su Espíritu. El continúa citando a Joel quien describe señales y eventos milagrosos y prodigiosos antes “del glorioso día del Señor” y afirma que “todo aquel que invoque el nombre del Señor será salvo.”
Wright resume la enseñanza de Pedro de la siguiente manera:
Los primeros cristianos creían, en otras palabras, que estaban viviendo un periodo entre el momento en que “los últimos días” había sido lanzado y el momento en que esos “últimos días” llegarían a su fin en “el día del Señor”, el momento en que Jesús finalmente reaparece (ya prometido en Hechos 1:11) cielo y tierra se juntaran en la gran renovación de todas las cosas.5
Luego Pedro conecta estas profecías con Jesús de Nazaret, quien a pesar de haber realizado, milagros, prodigios y señales fue ejecutado. Pedro no se preocupa de los sentimientos e implica a aquellos reunidos en la detención y crucifixión de Jesús. Pero el arresto de Jesús no cambió los planes de Dios, sino que los cumplió, les asegura Pedro:
Hechos 2:23–24
5 Tom Wright,Acts for Everyone, Part 1: Chapters 1-12 (London: Society for Promoting Christian Knowledge, 2008),
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23 Este fue entregado según el determinado propósito y el previo conocimiento de Dios; y, por medio de gente malvada, [a] ustedes lo mataron, clavándolo en la cruz. 24 Sin embargo, Dios lo resucitó, librándolo de las angustias de la muerte, porque era imposible que la muerte lo mantuviera bajo su dominio.
Pedro continua para demostrar como Jesús es el Mesías esperado del cual habla David en Salmos. El también proclama que él y los discípulos vieron al Cristo resucitado.
Hechos 2:32–33 32 A este Jesús, Dios lo resucitó, y de ello todos nosotros somos testigos. 33 Exaltado por el poder[a] de Dios, y habiendo recibido del Padre el Espíritu Santo prometido, ha derramado esto que ustedes ahora ven y oyen.
Muchos recibieron el mensaje de Pedro como verdadero les “llega al corazón” y preguntan qué deben hacer. “Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados —les contestó Pedro—, y recibirán el don del Espíritu Santo”, responde Pedro (verso 38). De acuerdo con Lucas cerca de 3.000 personas aceptaron el mensaje de Pedro y fueron bautizados.
¿Qué podemos aprender? Pedro da su primer sermón evangelístico de la nueva era. Enseñado por Jesús, con poder del Espíritu Santo, Pedro está listo para ayudar a sus hermanos y hermanas judíos a conectar los puntos entre lo que escrituras judías profetizaban y lo que Jesús cumplió con su vida, muerte, resurrección y ascensión. ¿Qué podemos aprender de Pedro a medida que llevamos el mensaje de Cristo a nuestra comunidad? Primeramente, Pedro comienza contestando las preguntas que su audiencia está preguntando. (“¿Qué significa esto?”) Y respondiendo a su inmediata objeción (“Ellos han tomado demasiado vino”). Muy a menudo les decimos a la gente lo que creemos ellos necesitan escuchar en vez de tratar de descubrir cuáles son sus preguntas.
Entonces Pedro conecta el mensaje a algo que los oyentes comprenden y en lo que creen, en este caso las escrituras hebreas. Él les muestra que Jesús es aquel por el cual han esperado. En nuestro mundo, la gente tiene diferentes anhelos y otras fuentes de sus creencias. Como fuente de toda verdad, Dios se revela a sí mismo de diferentes maneras. Cuando mostramos a la gente como el evangelio se conecta (o cumple) con lo que ellos ya saben es verdad, les podemos ayudar a conectar los puntos entre lo que ellos creen y la verdad que estamos compartiendo. Por ejemplo, con aquellos preocupados por el medio ambiente, podemos mostrar que, como creador, Dios desea que administremos su creación ahora; y un día renovará y restaurará todas las cosas en Cristo. Para aquellos que creen en la importancia de la familia, podemos mostrarles como él está formando la familia en Cristo.
Por supuesto, el centro de la verdad que estamos compartiendo es Cristo mismo. Al igual que Pedro, nosotros vamos a querer describir la vida de Cristo, la razón de su muerte y lo significante de su resurrección y ascensión. Necesitamos estar claros de las implicaciones del evangelio para poder compartirlas. Pedro también incluye su propio testimonio como evidencia. Nosotros queremos que la gente conozca nuestra fe que no es aburrida o estática, sino vibrante y que afecta profundamente. Creemos en Jesús porque lo conocemos – y ellos pueden conocerlo también.
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Finalmente, Pedro invita a la gente al arrepentimiento, aceptar el perdón y ser bautizados, todo en el nombre del Señor Jesucristo. Su mensaje no solamente habla la verdad, sino que llega al corazón. Un reconocimiento tácito de que el evangelio es verdad, pero no trae salvación. Incluso el diablo sabe que Jesús es Señor. Ultimadamente, queremos invitar a la gente a ver su necesidad de un Salvador, volverse de su pecado y someterse al señorío de Jesucristo.
¿Crees que puedes usar el sermón de Pedro como un ejemplo cuando hablas con alguien a cerca de Jesús? ¿Cómo?
Al igual que lo hizo en el día de Pedro, El Espíritu Santo dará testimonio sobre la verdad de la cual estamos hablando. Aquellos que crean estarán respondiendo al llamado del Espíritu Santo, no a nuestras palabras persuasivas. Nosotros decimos lo que sabemos y dejamos que el Espíritu Santo haga el resto. Pero en el sermón de Pedro encontramos un ejemplo digno de seguir.
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Día 5 | Reflexiona, conecta, responde¡El sonido de un fuerte viento y lenguas de fuego! El Espíritu Santo está aquí y vive en cada creyente. ¿Permitiremos que nos guie y llene de poder? Esta semana hemos visto como el Espíritu Santo les llenó de poder a los discípulos individualmente pasando sobre tribus y lenguajes, para dar nacimiento a la iglesia. Hemos mirado el primer sermón de Pedro en una nueva era y considerado como podemos seguir su ejemplo a medida que vivimos como testigos de Cristo.
Reflexiona
¿Qué aprendiste sobre el Espíritu Santo esta semana?
¿Cuál es tu mayor lección aprendida de las escrituras que hemos estudiado?
Conéctate Antes de ascender al cielo, Jesús prometió a sus seguidores el don del Espíritu Santo y les dio una misión vital. En el día de Pentecostés, el Espíritu Santo vino con poder y miles de personas recibieron vida eterna. El mismo poder está a nuestra disposición hoy en día.
El Espíritu Santo reside en cada creyente y nos dará poder para llevar a cabo la misión de Dios. No todos nos pararemos en una plataforma para hablar a las multitudes. No todos seremos parte de un trabajo grande y sobrenatural del Espíritu Santo, pero por el poder del Espíritu Santo todos estamos capacitados para realizar el trabajo que Dios ha preparado de antemano para que hagamos nosotros. Pablo nos dice que “A cada uno se le da una manifestación especial del Espíritu para el bien de los demás” (1 Corintios 12:7). Cada uno de nosotros puede ayudar a la gente a encontrar y seguir a Cristo.
¿Cómo se esto? Porque Dios promete que Él siempre estará con nosotros.
En el Salmo 139 David se pregunta, “7 ¿A dónde podría alejarme de tu Espíritu? ¿A dónde podría huir de tu presencia?” (Salmo 139:7). En Romanos Pablo proclama “ Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios,[a] ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes, 39 ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor.”
El Espíritu Santo está con nosotros. El dirigirá nuestros corazones hacia el amor de Jesús, para seguirlo y llevar a cabo nuestra misión. Todo lo que tenemos que hacer es pedir su poder y dar un paso de fe.
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Responde Este corto estudio de Hechos nos anima para dar mayor atención a la presencia del Espíritu Santo en mi vida. ¡Espero haya hecho lo mismo para ti!
Pasa un tiempo en oración. Piensa en quien tú eres espiritualmente. ¿Cuál de las siguientes peticiones quisieras hacerle al Espíritu Santo? (Si te ayuda, escribe tus peticiones. Ora diariamente durante los próximos días).
Pídele al Espíritu Santo que te recuerde de su presencia durante todo el día y que te muestre como Dios se está moviendo en tu vida y en la vida de los que te rodean.
Pídele al Espíritu Santo que dirija tu atención a maneras en las cuales tú puedes ayudar a otros a encontrar a Cristo.
Si te sientes distante de Dios debido a pecado o estar enredado en hábitos pecaminosos, pídele al Espíritu Santo que te contriste para que puedas rápidamente arrepentirte y recibir perdón.
A medida que cultives una relación más profunda con el Espíritu Santo, comparte tus experiencias con un hermano o hermana en Cristo de confianza, o con tu grupo de vida o grupo de estudio bíblico. ¿Que pueden aprender juntos sobre desarrollar una relación con el Espíritu y depender en su fuerza y su poder?
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Semana 4|Revolución en la iglesiaHechos 2:42–47Author, Lisa Scheffler
En la iglesia, Dios no escoge a los audaces, brillantes y hermosos para que su movimiento se empiece a llevar a cabo, sino toma a los niños que van a ser elegidos a lo último y lanza su revolución a través de ellos. - Joshua Ryan Butler
Las revoluciones son siempre esfuerzos de grupo. Conocemos los nombres de Martin Luther King Jr., Steve Jobs y Madame Curie, pero cada uno de ellos tubo personas mucho menos conocidas trabajando a su lado. Para que las ideas innovadoras se difundieran, la gente tenía que aceptarlas y defenderlas. Un revolucionario solitario tendría un impacto mínimo.
Por supuesto que Jesucristo es la excepción. El podría haber difundido el mensaje de su reino de la manera que el hubiere querido. Podría haberlo escrito en el cielo o haberlo metido en el cerebro de la gente. Pero en cambio, Dios escogió a los discípulos de Cristo - un grupo de mensajeros no muy creíbles para una proclamación real - para llevar su evangelio al mundo.
Estos hombres y mujeres no tenían poder, posición jerárquica, educación ni autoridad para ser recomendados. Pero a menudo Dios escoge los que el mundo ve como insensatos, débiles o indignos de hacer su trabajo en el mundo. De esa manera no hay forma de negar que es la revolución de Dios, no la nuestra. A medida que el Espíritu da poder a personas comunes y los une en Cristo, pueden suceder cosas extraordinarias.
La semana pasada observamos como los discípulos recibieron al Espíritu Santo en una demostración espectacular del poder de Dios. Según Lucas, más de 3.000 personas aceptaron la verdad de que Jesucristo es Salvador y Señor. Se arrepintieron, buscaron el perdón de Dios y fueron bautizados. Puedes imaginarte su emoción y tal vez anticiparte a su pregunta: “¿Y ahora qué?”
En los versículos finales de Hechos 2, Lucas explica los orígenes gloriosos de una nueva entidad - la iglesia. Esta semana veremos cómo Dios convierte a diversos extraños en familia y los usa para atraer más gente a sí mismo.
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Día 1 | Lee y Reacciona El internet ha facilitado la formación de una comunidad que no está obstaculizada por la geografía. Personas de todo el mundo pueden vincularse por medio de interés compartidos por un hobby, su creencia en una causa particular, o el amor por una cierta pieza de la cultura pop. En lugar de reunirse literalmente alrededor de una mesa, estas personas se reúnen en salas de chat o en la sección de comentarios de su sitio favorito para intercambiar ideas y compartir su pasión. Ellos encontrarán nombres para sus comunidades y se defenderán los unos a los otros en contra los “provocadores” en línea.
La lealtad y dedicación que la gente tiene a estas comunidades puede ser intensa, y muchos sienten una conexión más profunda con aquellos que pertenecen a su causa o “fandom” (son fanáticos) que a aquellos en sus comunidades de vida real. Seguramente este fenómeno nace de la profunda necesidad que todos tenemos de pertenecer, ser aceptados, y creer que hay un grupo ahí que “has our backs”. (nos defiende y apoya)
Jesús nos da una conexión más rica y profunda de unión. En Cristo, tenemos hermanos y hermanas espirituales con quienes pasaremos la eternidad. Estas son personas con quienes compartimos una misión y una visión del reino. Pasaremos esta semana explorando cómo es una comunidad bíblica profunda. También consideraremos cómo el cuerpo de Cristo está destinado a satisfacer la profunda necesidad de comunidad que todos tenemos.
Como veremos a partir de la descripción de la iglesia temprana en Hechos, los creyentes se convirtieron en una comunidad en el mejor sentido de la palabra. Al contemplar estos versículos esta semana, vamos a reexaminar nuestra comprensión de lo que significa ser la familia de Dios y evaluar nuestro compromiso con nuestra iglesia local.
Hechos 2:42–47 42 Se mantenían firmes en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en el partimiento del pan y en la oración. 43 Todos estaban asombrados por los muchos prodigios y señales que realizaban los apóstoles. 44 Todos los creyentes estaban juntos y tenían todo en común: 45 vendían sus propiedades y posesiones, y compartían sus bienes entre sí según la necesidad de cada uno. 46 No dejaban de reunirse en el templo ni un solo día. De casa en casa partían el pan y compartían la comida con alegría y generosidad, 47 alabando a Dios y disfrutando de la estimación general del pueblo. Y cada día el Señor añadía al grupo los que iban siendo salvos.
¿Cómo crees que sería ser un creyente en la comunidad que Lucas describe? ¿Qué es lo que te atrae? ¿Hay algo que no te atraiga? A medida que avanzas la semana, ve si alguna de tus respuestas cambia.
La descripción que Lucas comparte con nosotros en Hechos nos da una fotografía instantánea de la iglesia en su infancia. La palabra “iglesia” ni siquiera se utilizaba todavía. A medida que el evangelio se difundió y los apóstoles plantaron más y más iglesias, cada comunidad tomó su propia personalidad y experimentó su propia porción de problemas. Conocemos muchos de estos problemas en las cartas que Pablo, Pedro y
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Juan escribieron para tratarlos. Sin embargo, la devoción, la camaradería, la alegría, la generosidad y el amor experimentados por este grupo incipiente de creyentes son fundamentales para describir a la iglesia.
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Día 2 | Comunidad DevotaVivimos en una cultura que se deleita positivamente en “ser sí mismo”. La capacidad de definir todo acerca de ti mismo sin censura es considerada por muchos como la definición de libertad. El “individualismo expresivo” es lo que los sociólogos llaman a esta idea y tiene algunos beneficios. Pero llevado al extremo, resultará en aislamiento y fragmentación. Si estamos demasiado preocupados con ser únicamente nosotros mismos y ser aceptados como tales, podemos descuidar las bellas características comunes que compartimos con los demás y las oportunidades que pueden traer el ser miembro vital de un grupo.
El pueblo de Jerusalén que escuchó y respondió al mensaje de Pedro compartió algo asombroso en común. Ellos eran creyentes en Cristo y llenos del Espíritu Santo. Ellos permitieron que su identidad fuera formada por esos atributos y encontraron gloriosa comunión con otros.
Hechos 2:42 42 Se mantenían firmes en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en el partimiento del pan y en la oración.
Enumera las 4 cosas a las que la gente se dedicó.
En Hechos, Lucas describe una comunidad nacida como resultado de Pentecostés. Estos creyentes “se dedicaron” a prácticas que solidificaron e hicieron crecer su comunidad. Según el comentarista Darrell Bock, la expresión “dedicarse” significa la idea de persistencia o perseverancia en algo. Ellos hicieron de estas cosas una prioridad. Wright nos anima a ver que estos cuatro van juntos, y que, si alguno de esos se deja afuera, se corre el riesgo de dañar a la comunidad y a la fe de aquellos que son parte de ella.
Primero que nada, están bajo la enseñanza de los Apóstoles. Aunque estos nuevos conversos eran probablemente creyentes judíos que tenían su base en las Escrituras Hebreas, ellos necesitaban la misma educación que los Apóstoles habían recibido de Jesús. Ellos necesitaban saber cómo Jesús cumplió las Escrituras Hebreas a través de su vida, muerte y resurrección, y también cuáles eran los valores y la ética de su reino. Los hijos e hijas del rey, imitan la conducta de su Padre. La gente debe entender el contenido de su fe y cómo vivirla.
Wright advierte: “Cuando no se presta atención a la enseñanza y al constante aprendizaje cristiano durante toda la vida, la gente rápidamente regresa a la visión del mundo o a la mentalidad de la cultura circundante y termina decidiendo de acuerdo a las presiones sociales más persuasivas, con Jesús en alguna parte de su memoria como una influencia pálida.”
Luego viene la mención de compañerismo. La palabra griega koinonia (es traducida como “comunión”) significa “compartir en común”, y como veremos en los versículos que siguen, eso es precisamente lo que estas personas hicieron. Eran familia. Aprendieron, oraron, cuidaron unos de otros y pasaron tiempo juntos. No es una sorpresa el que se hayan formado fuertes vínculos entre ellos.
Hermandad (Fellowship) no es una palabra que se utiliza frecuentemente fuera de los círculos de la iglesia, pero es algo que la gente anhela. La forma en que las personas viven y trabajan en el mundo moderno puede dificultar que se formen el tipo de vínculos profundos de parentesco y comunidad que Lucas está
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describiendo aquí. Es difícil sostener una fe viva si estás desconectado del cuerpo de Cristo. Compartir en la vida común de nuestra familia de la iglesia nos recuerda quiénes somos y de quien somos.
La tercera es cuando se parte el pan. Según Bock, “No está claro aquí si la frase se refiere a la Cena del Señor o es una referencia a tomar algunas comidas juntos, en las cuales la Cena del Señor era una parte”. Independientemente, como familia, estos creyentes tomaron tiempo para recordar el Sacrificio del Señor como parte de sus reuniones. Donde la gente ya no comparte regularmente la cena del Señor, “ellos no están levantando la bandera que dice que” la muerte y la resurrección de Jesús son el centro de todo “
Finalmente, la oración. Una comunidad en oración busca la dirección de Dios y depende de él. Ora por la sabiduría y provisión de Dios. “La familia de Dios no trabaja por sentimientos o intuición, sino por sumisión activa a la dirección del Señor”. Una relación vibrante con el Padre es esencial para nuestro crecimiento como individuos y como comunidad de fe. Tenemos que buscarlo juntos.
En tus propias palabras describe la necesidad de cada una de estas prácticas
Dios nos creó como individuos únicos que se necesitan mutuamente. Vivir en el tipo de comunidad que Pablo describe no sólo satisface nuestras necesidades, sino que también forma nuestro carácter. Si priorizamos las enseñanzas de Cristo, la comunión con otros creyentes, el recuerdo del sacrificio del Señor y la oración, haremos comunidades fuertes, sanas y crecientes de personas que aman a Jesús y son apasionados por su misión.
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Día 3 | Comunidad GenerosaDios existe en una santa trinidad - tres personas en una. Es una relación incomprensible de amor y comunión la cual nunca podremos comprender completamente. De su gran amor, Dios creó a la humanidad para tener una relación con él y con los demás. La única cosa en el Jardín del Edén que Dios dijo que no era buena fue después de que Dios creó a Adán, pero antes de que creara a Eva. “El Señor Dios dijo: No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada”(Génesis 2:18). A menudo asociamos este versículo con el matrimonio, pero también se refiere a una necesidad más general que la gente tiene para con la familia y la comunidad.
Una familia de creyentes muy unida ayudará a llenar nuestra necesidad de amor, aceptación y apoyo. También nos recuerda que no somos el centro del universo. Con el toque de un botón podemos controlar la temperatura de una habitación, la suavidad de nuestro colchón, y las canciones de nuestra lista de reproducción. Ese nivel de control y conveniencia nos puede convencer de que somos las estrellas de nuestro propio drama. Vivir con y para otros nos empuja fuera del centro hacia la periferia, donde nos vemos como parte de una historia más grande y más convincente con Cristo en el centro del escenario.
Cuando Cristo está en el centro de una comunidad de fe, tomará su personalidad. El poder, el amor y la generosidad caracterizaron la vida de la congregación de Jerusalén.
Hechos 2:43–4543 Todos estaban asombrados por los muchos prodigios y señales que realizaban los apóstoles. 44 Todos los creyentes estaban juntos y tenían todo en común: 45 vendían sus propiedades y posesiones, y compartían sus bienes entre sí según la necesidad de cada uno.
Basado estos versículos, ¿qué adjetivos usarías para describir esta comunidad?
El Espíritu se movía visiblemente entre estos creyentes con signos y prodigios inspirados por los Apóstoles. “Todos” aquí podría referirse tanto a los creyentes y a los forasteros que vieron y escucharon lo que estaba sucediendo en la iglesia. La gente podía ver a Dios trabajando. Estas no eran reuniones de culto donde tu necesitabas un codazo en el lado para mantenerse despierto. Dios estaba presente y la comunidad más grande estaba tomando nota.
Lucas describe a este grupo como una comunidad muy unida donde la gente estaba feliz de compartir lo que tenían entre sí. La obligación no está implícita aquí. Este versículo no está recetando algún tipo de vida comunal tampoco. No parece que hayan vendido las casas en las que vivían (Se reunieron en una casa individual como explica el versículo 46). Pero eso no disminuye su generosidad. “Vendieron bienes adicionales que poseían, algo muy significativo para un pueblo para quien la tierra no era sólo un recurso económico sino parte de su herencia ancestral, parte de la herencia prometida de Dios”.
Imagínate vivir en una comunidad donde, si surgiera una necesidad, tu podrías confiar en otros creyentes. Como miembro de ese grupo, tu sentirías un profundo sentido de seguridad. Tu podrías descansar fácil
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viniera lo que viniera, tu no serías dejado solo para resistir las tormentas de la vida.
Se honesto. ¿Te gustaría ser parte de este tipo de comunidad? ¿Por qué si o por qué no? ¿Ha cambiado tu respuesta desde el primer día? Si es así, ¿por qué?
El amor fluyó dentro y a través de esta comunidad. Amor de un Padre celestial que sacrificó a su Hijo para salvar a la gente que se rebeló en contra él. Amor de un Hijo que vino a servir a otros y a traer a los perdidos a casa. Amor del Espíritu que fue enviado para enseñar, guiar y empoderar. Como receptores de un amor tan abundante y desbordante, deberíamos estar más que dispuestos a derramar lo que hemos recibimos en la vida de otros. El amor, la gracia y la generosidad pueden suavizar los puños cerrados hasta que se convierten en manos abiertas. Dios cuidará de nosotros, así que cuidémonos unos a otros.
Christ Fellowship es una iglesia grande, por lo que podemos empezar asistiendo a las necesidades de las personas en nuestros grupos pequeños, o los de las personas con quienes servimos. Pero también hay una manera de ayudar a aquellos en nuestra organización que no conozcamos. Podemos conectar a personas de nuestra iglesia que tienen necesidades a aquellos que están dispuestos a ayudar. Vaya a cfhome.org/meetaneed y vea las necesidades de nuestra gente ahora mismo.
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Día 4 | Comunidad en CrecimientoUn estudio realizado en 2014 por la Fundación Nacional de Ciencias encontró que un gran número de estadounidenses se sienten aislados y solos. La mitad de los encuestados dijo que no tienen a nadie fuera de su familia inmediata con quien puedan compartir confidencias. Este estudio, junto con otros han llevado a algunos investigadores a concluir que América esta en medio de una “epidemia de soledad”.
Cuando las personas están aisladas pueden sentirse deprimidas, temerosas y desconfiadas de los forasteros. La soledad está ligada a tasas más altas de suicidio y abuso de sustancias. Algunos estudios postulan que puede tener serias implicaciones para la salud, particularmente para los ancianos.
Cuando las personas están aisladas pueden sentirse deprimidas, temerosas y desconfiadas de los forasteros. La soledad está ligada a tasas más altas de suicidio y abuso de sustancias. Algunos estudios postulan que puede tener serias implicaciones para la salud, particularmente para los ancianos. Aunque que los científicos sociales han identificado el problema y sus repercusiones, ellos reconocen muchas otras causas. Dado que las personas tienden a construir relaciones en el trabajo, las tasas más altas de desempleo o subempleo, especialmente entre las clases media y baja podría ser un factor. Otra causa es, los días largos de trabajo y los largos trayectos que impiden que la gente se involucre en sus comunidades. Para los padres con niños en edad escolar que tienen horarios de actividades excesivas los fines de semana y todas las tardes, esto pueden significar menos tiempo con amistades de adultos. Además, muchos estadounidenses se mueven con tanta frecuencia que nunca se integran plenamente en sus vecindarios. Más allá de los factores demográficos hay otros culturales. La tecnología de entretenimiento como los videojuegos y los servicios sin interrupción como Netflix que mantienen a las personas cerradas y solas. El aumento del tiempo en los medios sociales puede disminuir las interacciones de cara a cara.
Los científicos sociales no están seguros de qué hacer con el problema, pero la iglesia de Cristo podría ofrecer esperanza para una solución. Las comunidades caritativas, llenas de gracia y centradas en Jesús, como la que Lucas describe en Hechos, podrían dar a las personas el sentido de pertenencia y conexión que necesitan.
Hechos 2:46–47 46 No dejaban de reunirse en el templo ni un solo día. De casa en casa partían el pan y compartían la comida con alegría y generosidad, 47 alabando a Dios y disfrutando de la estimación general del pueblo. Y cada día el Señor añadía al grupo los que iban siendo salvos.
Si estuvieras sentado en una de las reuniones que Lucas describe en estos versos, ¿cómo te imaginas que serían?
El grupo que Lucas describe no era un grupo de semi desconocidos jugando a la iglesia. Ellos pasaban tiempo juntos, comían juntos y probablemente reían mucho cuando compartían sus vidas el uno con el otro. Podemos imaginarlos tomando el sol en el evangelio de Cristo y el amor del Espíritu mientras esperaban lo que Dios haría en los próximos meses y años. Sus acciones los favorecen con la comunidad más grande, y muchos llegaron a aceptar a Cristo y formar parte de él.
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¿Qué crees que atrajo a otros a esta comunidad?
No es de extrañar que “Dios añadiera diariamente al grupo a aquellos que estaban siendo salvos” (versículo 47). Este grupo habría atraído a la gente. Eran alegres, sinceros y agradecidos con Dios por lo que les habían dado. No me imagino un montón de quejas o chismes maliciosos en este grupo. Es difícil imaginar a personas tan generosas que tienen agendas ocultas o motivos ocultos. Me imagino que sería acogedor y fácil de estar ahí. No es que hubiesen sido perfectos, pero me imagino que las disputas se resolvían con gracia y perdón. ¿Por qué? Porque estas personas estaban llenas del Espíritu Santo y estaban dispuestas a ceder a su influencia. Pusieron la agenda de Cristo por encima de la suya, y estaban celebrando el amor y el perdón que habían recibido de él.
Una comunidad centrada en Cristo tiene el potencial de ser un poderoso testigo de la belleza del evangelio. Personas de todas las razas, orígenes, géneros y generaciones se unen para compartir la gracia del amor de Cristo. En nuestra cultura fragmentada y altamente móvil hay personas cuyos corazones responderían con anhelo a la descripción de la iglesia primitiva. Tu corazón también podría estar deseando eso.
¿Eres parte de un grupo de vida o de otro grupo pequeño de creyentes donde la gente es bien recibida, apoyada y amada? Si no, ¿Por qué no?
Sabes, todo empieza con cada uno de nosotros. Si no estamos experimentando relaciones genuinas y amorosas con otros cristianos, entonces tenemos que construirlas. Debemos orar y salir de nuestra zona de confort. Como muchas de nuestras madres nos dijeron, “para hacer un amigo tienes que ser un amigo”. Debemos abrirnos, ser reales, y luego animar a otros a hacer lo mismo. A medida que nuestros vínculos se profundicen, debemos invitar a nuevas personas a unirse a nuestra comunidad - cristianos y no cristianos. Debemos aceptar a las personas dondequiera que estén, caminar junto a ellas, y juntos nos movemos hacia Jesús.
No es fácil. La gente nunca lo es. Pero tenemos algo que todas las investigaciones científicas sociales en el mundo nunca pueden cuantificar o reproducir: el poder que mora en el Espíritu Santo. Si seguimos su ejemplo y amamos a los demás como nos gustaría ser amados, podemos crear comunidades vibrantes y llenas de gracia.
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Día 5 | Reflexiona, Conéctate, Responde Hechos 2 pinta un retrato de una comunidad de la que me gustaría ser parte de. ¿Qué hay de ti? Hoy, piensa en cómo puedes contribuir al tipo de comunidad que Lucas describe. Pasa algún tiempo en la oración pidiendo al Espíritu que te guíe al considerar la parte que debes jugar en una comunidad de creyentes.
Además, ya que esta es la última semana de nuestra serie, “Revoluciones” vuelve a revisar Hechos 1-2.
Reflexiona
¿Cómo resumirías Hechos 2: 42-47?
Reflexiona sobre cómo ha crecido tu comprensión de la misión de Jesús y del Espíritu Santo al estudiar los dos primeros capítulos de Hechos.
ConéctateLa reunión dominical es una “iglesia para las personas que no creen en Dios”. Con 30 capítulos desde Londres a Sydney a Los Ángeles, estas reuniones semanales atraen a personas que no quieren identificarse con la religión tradicional, pero quieren sentirse parte de la comunidad que viene de la iglesia. Según uno de sus fundadores, muchos de sus miembros tuvieron malas experiencias en la iglesia tradicional, pero “extrañan la comunidad, la música, la reunión multigeneracional y compartir tiempo con personas con las que quizás no lo harían de otra manera”. La asamblea dominical es una alternativa para las personas seculares que esperan volver a crear lo que consideraban bueno en la religión.
Como el cuerpo de Cristo tenemos la responsabilidad de representarlo bien. Nuestro mensaje de un Dios bondadoso, amoroso y generoso no resonará si nuestras iglesias no son amables, cariñosas y generosas. Individualmente se nos ha mandado ser un testigo de Jesús. También debemos considerar el poder de nuestro testimonio corporativo. La iglesia que Lucas describe en Hechos 2 es ciertamente una para imitar. El liderazgo de una iglesia puede fomentar ese tipo de ambiente, pero no puede crearlo. Cada uno de nosotros debe hacer nuestra parte. ¿Estás dispuesto a hacer la tuya?
El hecho de que la reunión del domingo existe habla al deseo profundo que la gente tiene de una comunidad genuina. Como cristianos debemos preocuparnos de que la gente quiera crear una iglesia sin Dios porque las iglesias a las que han asistido han sido lugares sin el amor de Dios. Nuestras iglesias deben ser de familias acogedoras, llenas de gracia donde la gente se conecte y crezca juntos en Cristo. Después de todo, somos el cuerpo de Cristo, lleno de su Espíritu y haciendo su obra aquí y ahora.
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RespondeEl tipo de comunidad que Lucas describe no se puede lograr en una reunión de adoración una vez a la semana con cientos de personas. Por eso en Christ Fellowship ofrecemos muchas oportunidades para pertenecer a grupos pequeños. LifeGroups(grupos de vida) son nuestros grupos comunitarios primarios, pero algunas personas forman parte de grupos de hombres, mujeres y / o grupos de cuidado (Divorcio, Cuidado, Comparte tus Penas, Celebra tu Recuperación).
¿Es parte de un grupo de vida u otro grupo pequeño? Si no, nos gustaría ayudarte a conectarte. En CFhome.org, ve al área “Pasos siguientes” y selecciona “Buscador de grupos”.
¡Hay un grupo que te necesita y te ayudará a satisfacer tus necesidades! ¿Qué te impide encontrar uno hoy?
Si estás en un grupo de vida u otro grupo pequeño, ¿cómo puede tu grupo crecer para convertirse en un grupo de “Hechos 2”? ¿Qué puedes hacer para ayudar a crear un ambiente de gracia, amor, alegría, sinceridad, generosidad y bienvenida?
El Espíritu Santo ha sido nuestro enfoque durante las últimas semanas. Vemos como nos ayuda a no pecar, nos guía y da poder a nuestro testimonio.
¿Qué pasos estás tomando para acoger y confiar la presencia del Espíritu en tu vida?
¡Tú eres parte de una revolución que literalmente está cambiando el mundo! Como testigos de Cristo, vamos a unirnos con nuestros hermanos y hermanas para hacer una diferencia en las vidas de las personas aquí en el norte de Texas y en todo el mundo.
