“¿QUÉ SIGNFICA DOMESTICAR?”:EL AMOR

(UNA APROXIMACIÓN A SUS CARACTERÍSTICAS)

"¿Qué significa domesticar?: El Amor. (Una aproximación a sus características). by José Javier Ruiz Serradilla is licensed

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1. EL AMOR ES UNA RESPUESTA AL VALOR (I)

●El amor se nos da como una respuesta de alguien frente a  otro.

●El otro, no se nos presenta como anónimo, indiferenciado con respecto a tantos otros, se nos da como “único en el mundo”.

●Es decir, es único porque es valioso, importante.

“Serás para mí único en el mundo”

1. EL AMOR ES UNA RESPUESTA AL VALOR (II)

TRES FORMAS DE IMPORTANCIA:

1.Lo subjetivamente importante.

2.Lo importante en sí. (Lo objetivamente importante).

3.Lo importante para la persona. (El bien objetivo para la persona).

1. EL AMOR ES UNA RESPUESTA AL VALOR (III)

●El amor es la respuesta a lo objetivamente importante pero, fundamentalmente, a lo importante en sí y para la persona.

●Así, el amor se nos muestra como una respuesta de nuestro ser personal a lo importante, a lo más importante, a lo más valioso: a la unicidad del rostro personal del otro al que amo.

2. EL AMOR ES UNA RESPUESTA “SOBREACTUAL” (I)

●El amor tiñe nuestra vida de sol.  Todo cobra sentido desde su luz.

●Aquí se nos muestra una nueva característica del amor: es una respuesta “sobreactual”.

“SI ME DOMESTICAS, MI VIDA SE LLENARÁ DE SOL”.

2. EL AMOR ES UNA RESPUESTA “SOBREACTUAL” (II)

a) Saber actual: Llamamos así a la actualización de la posesión espiritual de un objeto conocido que se presenta plena y conscientemente a nuestra mente. Es decir, nuestro conocimiento más habitual y cotidiano. 

TRES TIPOS SE SABERES (VIVENCIAS):

2. EL AMOR ES UNA RESPUESTA “SOBREACTUAL” (III)

b) Saber potencial (memoria):Es un conocimiento que está “a mano” y que puede ser actualizado cuando sea tema de nuestra consideración.

TRES TIPOS SE SABERES (VIVENCIAS):

2. EL AMOR ES UNA RESPUESTA “SOBREACTUAL” (IV)

c) Saber sobreactual: Con esta denominación nos referimos al conocimiento de ciertos hechos y objetos que constituyen un trasfondo (conciencia implícita) que afecta radicalmente a nuestra vida y nos sitúa ante el resto de las realidades y situaciones que se nos manifiestan.

TRES TIPOS SE SABERES (VIVENCIAS):

2. EL AMOR ES UNA RESPUESTA “SOBREACTUAL” (V)

●La vivencia del amor es una vivencia sobreactual.

●Se nos da como un trasfondo que impregna al resto de nuestra vida consciente de un sentido expreso.

●No necesito acordarme de que amo a cierta persona para saber que la amo y percibir ese eco de mi amor en el fondo mi vida consciente y captar el resto de lo que aparece en mi vida consciente desde esa luz.

●El amor “ilumina” no sólo nuestra vida, si no la propia realidad y nos permite captarla con una mayor objetividad aún.

●“Amar a un ser (...) es decir: tú no morirás nunca”

3. PERCIBE LA “BELLEZA INTEGRAL DE LA PERSONA”

●El amor percibe en el amado no sólo lo que es si no lo que debe ser. Percibe la “Belleza Integral de la Persona”.

●Descubre, presiente, la realidad de la otra Persona como una potencialidad maravillosa que busca realizarse. Y se empeña en ello.

●El amor no es ciego. Nunca es “consentido”, si no “exigente”. Es “actividad comprometida” en la búsqueda de la encarnación de lo auténticamente importante en esa Persona.

“Conoceré un ruido de pasos que será diferente de todos los otros. Los otros pasos me hacen esconder bajo la tierra. El tuyo me llamará fuera de la madriguera, como una música. Y además, ¡mira! ¿Ves allá los campos de trigo? Yo no como pan. Para mí el trigo es inútil. Los campos de trigo no me recuerdan nada. ¡Es bien triste! Pero tú tienes cabellos color de oro. Cuando me hayas domesticado, ¡será maravilloso! El trigo dorado será un recuerdo de ti. Y amaré el ruido del viento en el trigo”

4. MANIFIESTA UNA “INTENCIÓN UNITIVA” (I)

●El amor no busca la fusión, la anulación, la disolución del propio yo en el amado.

●El amor pide la unión y para esa unión son necesarias al menos dos personas.

●El amor construye, unifica, crea pero no anula, empequeñece, destruye.

“Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, comenzaré a ser feliz desde las tres. Cuanto

más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto; ¡descubriré

el precio de la felicidad! Pero si vienes a cualquier hora, nunca sabré a qué hora preparar

mi corazón...”

4. MANIFIESTA UNA “INTENCIÓN UNITIVA” (II)

●El amor es constructor de la persona de los amantes y, al mismo tiempo, de la realidad que les rodea. Por eso, el amor crea una auténtica comunidad de personas, la más alta, y a esa realidad se le llama “comunión”.

●La comunidad amorosa es comunión. Lo contrario

no es amor.

5. MUESTRA “INTENCIÓN BENEVOLENTE” (I)

●Si el amor es constructor, el amante quiere siempre el bien de la persona amada: es bene-volente. 

●Esta benevolencia supone distinguir ya claramente entre lo que son bienes objetivos para la otra persona y lo que son bienes objetivos para mí.

5. MUESTRA “INTENCIÓN BENEVOLENTE” (II)

● En el amor tiene que haber en primer lugar un reconocimiento de los bienes objetivos para la otra persona aun cuando no sean bienes objetivos para mí.

●Pero no basta con ello, sólo si el que algo sea para el otro un bien o un mal objetivo me conmueve de tal modo que el bien objetivo se convierte en fuente de felicidad para mí y el mal objetivo en fuente de infelicidad para mí, podemos decir que ahí se da intención benevolente y, por tanto, amor.

5. MUESTRA “INTENCIÓN BENEVOLENTE” (III)

●El que ama se compromete con la persona amada.

●Por ello el amor acepta lo que la persona es pero lucha junto con ella para que alcance la promesa que tiene inscrita en su naturaleza. 

●Y esa tarea es fuente de felicidad para él.

5. MUESTRA “INTENCIÓN BENEVOLENTE” (IV)

“(... ) es ella la rosa a quien he regado. (...) es ella la rosa a quien puse bajo un globo. (...) es ella la rosa a la que abrigué con el biombo. (...) es ella la rosa cuyas orugas maté. (...) es ella la rosa a quien escuché quejarse, o alabarse, o aun, algunas veces callarse”.

“Soy responsable de mi rosa...”

6. EXIGE “AUTODONACIÓN” (I)

Tengo que ser mejor para darle todo lo que soy y lo que debo ser -lo que prometo ser- a la persona que quiero.

6. EXIGE “AUTODONACIÓN” (II)El amor no supone una disolución sino que exige una construcción de mí mismo para donarme totalmente ante el otro. Ese otro que ya no aparece ante mí como extraño, como lo otro, sino como un tú. Un tú al que poder comunicarme y entregarme porque él mismo aparece como digno de ello.  Un tú ante el que, si es preciso, sería capaz de hacer el acto máximo de donación: entregar mi vida.

6. EXIGE “AUTODONACIÓN” (III)

“Sois bellas, pero estáis vacías... No se puede morir por vosotras”

7. ES UN “DON” QUE PIDE SER ACEPTADO LIBREMENTE (I)

●El amor no se escoge, llega. Yo no elijo ni cuándo ni dónde ni a quién amar. Simplemente “llega”. Pero ese “llegar” se percibe como un “don”.

●Pero para recibir algo hay que aceptarlo. Hay que tender la mano al mismo tiempo y ponerla en actitud de recepción. Hay que aceptar su abrazo. Por tanto, no puede haber amor si mi libertad no lo acepta y no se empeña en su crecimiento.

7. ES UN “DON” QUE PIDE SER ACEPTADO LIBREMENTE (II)

No basta con decir “sí quiero” en un momento. Ese “sí quiero” que aparece permanentemente presente en mi conciencia sobreactual pide actualizarse día a día, momento a momento, a través  de mi compromiso voluntario y constante con el otro. Por lo tanto, el amor es un “don” que exige libertad.

7. ES UN “DON” QUE PIDE SER ACEPTADO LIBREMENTE (III)

●“Domesticar” es un don que se recibe: “Empiezo a comprender... Hay una flor... Creo que me ha domesticado”.

●Pero ese don exige libertad, pide ser paciente y cumplir con los compromisos adquiridos: cumplir los ritos que “es lo que hace que un día sea diferente de los otros días; una hora de las otras horas”.

8. LA FELICIDAD Y EL CRECIMIENTO DE LA PERSONA SON CONSECUENCIAS

DEL AMOR●El amor es paradójico y que lo primario en el amor no es el propio crecimiento,  ni la propia felicidad. Sólo siendo arrebatado por el otro y entregando a él la propia vida es como se obtiene la auténtica vida: el crecimiento y la felicidad.

●El amante que intenta -desde su mendicidad- darlo todo,  vivir totalmente para el otro, descubre que en esa donación está su constitución. Sólo en la donación amorosa llega a crecer como Persona. Sólo así llega a su plenitud, a su plenificación.

“GANO POR EL COLOR DEL TRIGO”

9. EL AMOR PIDE RECIPROCIDAD

●Domesticar “significa ‘crear lazos’”.

●Pero los lazos no se crean sólo por una de las partes o, al menos, no debería ser así. Parece que es exigencia del amor la unidad de personas que llamamos –como ya vimos antes- comunión. Y no puede haber comunión sin reciprocidad.

●Es necesario comprender que el amor exige una relación yo-tú, donde el yo descubre un tú y el tú un yo. Sólo así podemos decir que hay amor en sentido pleno.