1 de Diciembre, día Internacional de la lucha contra el SIDA

Es una infección por un virus que ataca nuestras defensas y nos hace más vulnerables a otras infecciones y a algunos tipos de cáncer

SIDA es el estadío final del VIH, en la que aparecen los síntomas (aparición de infecciones oportunistas y tumores), y no suele ocurrir hasta pasados 5 ó 10 años tras el contagio

El virus está presente en todos los fluidos o líquidos corporales, pero está demostrado que sólo se contagia por la sangre, el semen, los fluidos vaginales y la leche materna.

Es necesario el contacto con estos fluidos para que haya contagio. No se contagia por actividades comunes como hablar, besarse, acariciar, compartir cubiertos, toalla o piscina. Tampoco se contagia por animales ni por picaduras de insectos.

Así, el contagio ocurre por: 1: RELACIONES SEXUALES NO

PROTEGIDAS POR PRESERVATIVO CON UNA PERSONA INFECTADA

2:VIA SANGUÍNEA AL COMPARTIR MATERIALES CORTOPUNZANTES O POR TRANSFUSIONES DE SANGRE INFECTADA

3:VIA MATERNOFETAL, DURANTE EL EMBARAZO, EL PARTO O EN LA LACTANCIA

CUALQUIER PERSONA que se exponga a los modos de transmisión.

Independiente de otros factores como edad, sexo, raza o condición social.

AUNQUE: por vía sexual, es más fácil el contagio de hombre a mujer que de mujer a hombre, por:

-más virus en semen -mucosa vaginal y rectal más

vulnerables -exposición profesional (prostitución)

Teniendo relaciones sexuales con una sola pareja que no esté infectada y que a su vez sólo tenga relaciones contigo

Evitando el intercambio de fluidos corporales mediante prácticas de sexo sin penetración

Usando una barrera que impida ese intercambio, como el condón masculino de látex o el femenino de poliuretano, que empleados correctamente evitan el contagio

Practicando la abstinencia de las relaciones sexuales

Una relación ocasional, un sólo contacto, puede transmitir el VIH.

Debería tomarse tiempo para conocer a la pareja e intimar, preguntarse sobre comportamientos pasados y actuales.

Las relaciones sexuales, homo o heterosexuales, comportan un alto riesgo de transmisión del virus del SIDA.

La presencia de otras enfermedades de transmisión sexual, lesiones genitales, favorece la transmisión del virus.

La mayoría de las personas infectadas lo han sido en una relación sexual.

El contacto de la boca con el esperma o las secreciones vaginales suponen un riesgo de transmisión cuando existen lesiones en la boca.

La penetración anal es la que supone mayor riesgo.

La única forma es mediante análisis de sangre: para estar seguros de ser seronegativos, son necesarios dos análisis negativos separados entre ellos por al menos 3 meses

Para evitar el contagio del VIH por vía sanguínea en las transfusiones usa sangre que haya sido analizada y esté libre de virus.

Como el virus también puede transmitirse por compartir jeringas y agujas que hayan estado en contacto con la sangre de un portador del VIH o de alguien que esté enfermo de SIDA, se recomienda utilizar siempre jeringas y agujas desechables, o en su defecto, desinfectarlas, y NO COMPARTIRLAS

La mujer seropositiva debe recibir asesoría muy completa sobre los riesgos que corren ella y su futuro hijo, de manera que pueda tomar decisiones conscientes e informadas:

Evitar el embarazo Optar por el aborto Continuar con el embarazo con estricto

seguimiento y asesoramiento médico para reducir en forma importante la posibilidad de que el bebé nazca infectado. Parto por cesárea. Lactancia artificial.

Llevar una vida sexual responsable es la mejor manera de mantenerte sano.

El único medio de lucha para no contagiarte es la PREVENCIÓN, basada en la información correcta.

No existen los grupos de riesgo; existen las PRÁCTICAS DE RIESGO. También debemos prevenir la marginación, la exclusión y los prejuicios.