pregón semana santa 2012 por juan miguel gascón, santisteban del puerto

A mis padres Francisco y Purificación, que siempre vivirán en mi corazón y ya gozan eternamente de la luz de Cristo Resucitado, porque creyeron en

Él y murieron en Él.

A Carmen, mi esposa, que una Semana Santa en Santisteban, hace muchos años, en ella descubrí el amor de mi vida, madre de nuestros hijos, Juan Miguel y David Francisco, abuela de nuestros nietos Juan Miguel (tercero) Nazaré María y Gabriel, ellos han llenado y llenan de sentido mi vida.

A mis hermanos, Francisca y Ángel que me ayudaron a crecer con su

cariño y ejemplo.

A Nazaré y Cati, madres de nuestros nietos.

PREGÓN DE SEMANA SANTA 2012

SANTISTEBAN DEL PUERTO-Villa de Semana Santa

____________________________________________________________________ Pregonero: Juan Miguel Gascón Álamo

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Rafael Higueras Álamo

Semana Santa

Presentación pregonero: Juan Miguel Gascón Álamo

Santisteban del Puerto 31 marzo 2012.

1.- El nombre de “Amigo” tiene los apellidos de “fe” y de “esperanza”.

Me parecía, al empezar a escribir esta presentación de Juan Miguel Gascón Álamo, que

era necesario poner por delante una definición de ‘amigo’.

Alguna vez me he visto en el compromiso de tener que presentar a algún

conferenciante a quien yo había conocido ‘subiendo’ ya las escalerillas del estrado donde iba a

dictarse la conferencia. ¡Y mira que tener que decir entonces cosas de un desconocido…! Es

difícil pasar de un modo mínimamente elegante en una ocasión como ésa.

Ahora, cuando me he puesto a escribir estos renglones, me viene una dificultad

también, pero por el motivo contrario. Juan Miguel es santistebeño; y además, es santistebeño

muy conocido por vosotros. Y Juan Miguel también es amigo, pero amigo de verdad.

Por eso he comenzado con esa definición o descripción: El nombre de ‘amigo’ tiene

apellidos de ‘fe’ y de ‘esperanza’. Es una definición de la amistad -así lo escribía- otro amigo

que tuve y añadiría que lo sigo teniendo, porque está en el cielo. Es el Beato Manuel Lozano

Garrido, LOLO, en su libro ‘Bien venido, amor’. (nº 415)

Entonces, la consecuencia es que la amistad se mezcla con la fe y con la esperanza en

aquel que te brinda o te responde con su ser de amigo. Yo puedo decir que cuando se habla

con Juan Miguel, ya ‘a la primera de cambio’, te confías y crees en él. Y a la vez se puede

pensar: Con Juan Miguel cerca, con su amistad firme, puedo esperar con certeza; y ¡seguro,

seguro, que el asunto –sea el que sea- sale bordado, perfecto y a tiempo! Es que él cuando da

una palabra, da palabra de amigo.

Querido Juan Miguel: ¿A que es así? ¿Cuántas veces te he llamado por teléfono: es que

estoy en un apuro…, es que necesito…? Y a punto y en punto el apuro se había convertido en

confianza y espera gozosa. Desde esa experiencia mía (pero que la he comentado con muchos

que también coinciden) os digo que os presento a un amigo, a un hombre que sabe dar y

recibir amistad.

2.- Juan Miguel Gascón Álamo nació aquí, en Santisteban del Puerto.

He tenido curiosidad por ver qué día de la semana era aquel de 10 de abril de 1949.

¡Era Domingo de Ramos! Cuando descubrí el dato en los Calendarios y Misales oficiales de la

Liturgia, me alegré mucho. ¡Mañana es Domingo de Ramos! Y ahora mismo ya son las vísperas

de ese día de palmas. Juan Miguel nos va a hablar de Semana Santa en este pueblo que le vio




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nacer y donde, los siete primeros días de su vida, eran estos mismos siete días de la Semana

Mayor, que ya esta tarde estamos comenzando. No es casualidad. Es que Dios hace las cosas

pensando en cada detalle por pequeño que sea. El día 10 de abril de 1949, aquí en Santisteban

empezaba una vida; empezaba el camino e itinerario de la vida de un hombre. Un hombre que

respiró su primer aire desde la brisa y el viento que corre entre los cerros y montes de este

collado. Aquellas brisas y aquel viento propiciaron la siembra en su corazón y la sabrosa

cosecha de frutos en su vida que son el amor a la Virgen del Collado: Muchas de sus

abundantes obras escritas o producidas por su mano -me referiré a ello, en seguida- están

dedicadas a Santisteban, a la Mayordomía y a la Virgen del Collado. Y cómo no recordar

aquellos años y sobre todo meses o días inmediatos que precedieron a la fecha de la

Coronación de la Virgen del Collado. En ellos Juan Miguel tuvo un papel de cimiento y de

organizador, que yo muy bien me lo sé y vosotros también. Os presento -aunque de sobra lo

sabéis- a un santistebeño que aquí nació, que aquí caminó sus primeros pasos y que aquí

vuelve cada minuto que en su agenda tiene oportunidad.

3.-En la trayectoria de la vida de Juan Miguel hay otro detalle que se repite. Estudia en

Úbeda, en las escuelas Profesionales de la Sagrada Familia; obtiene el título de Maestro

industrial; y, sin solución de continuidad allí mismo comienza su docencia. Pero a la vez, sigue

estudiando mientras ya es profesor. En Linares, en la Escuela Superior, consigue el título de

Ingeniero técnico Industrial. Y otra vez se sucede el hecho: ayer…, alumno; hoy…, profesor. Es

otro matiz de la vida de este hombre: la enseñanza. De principio a fin de su vida laboral.

Hasta su reciente jubilación Juan Miguel ha regentado la Cátedra de Física y Química

en Linares. En un centro de estudios, si además ese centro es de abundante matrícula y con

numerosos claustro de profesores, el hecho de que un profesor sea año tras año cargo

directivo en el centro no tiene otra lectura más que la siguiente: ese profesor no sólo es

valorado por los compañeros profesores, sino también -¡y eso sí que es difícil!- también es

valorado por los alumnos. Y doy fe de ello. Cuando he estado con él en su despacho de Jefe de

estudios, observaba yo con toda atención su modo de hablar, de escuchar y de tratar y

orientar a sus alumnos uno tras otro y de modo cercano, como amigo.

Quisiera dejar anotado aquí un apunte: En Santisteban, en 1513 (por tanto el año que

viene se cumplen 500 años) nació el Bachiller Juan Pérez de Moya. Fue un científico, un

matemático. Su nombre se dio a una calle y a un colegio en este lugar donde él nació. Y resulta

que aquí entre nosotros tenemos a otro hombre que ha dedicado su vida a las ciencias, a la

Física y a la Química, y que además ha tenido el fervor continuo de esculpir el nombre de

Santisteban en todos los lugares por donde ha trascurrido su vida y en todas las obras que han

salido de sus manos. Títulos de sus publicaciones en este apartado de “patria chica”, de

Santisteban de sus entrañas: Santisteban, un pueblo entre cerros. La encantada del Puerto;

Juan Francisco Ortiz, seis cuerdas para Santisteban. El condado de Santisteban y su comarca.

Aparte de muchos documentales a los que me refiero ahora en seguida. Aunque sería muy

largo enumerar sus publicaciones. Muchas de ellas con el denominador común de Santisteban

o Linares; o leer la lista entera de los títulos de sus conferencias. Pero como muestra de su




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clase y su estilo como docente cito éstas: “Convivir: Una ruptura con la violencia escolar”; o

esta otra: “La Convivencia escolar: un reto que nos compromete”. Por esa profesión suya de

físico y químico, y con toda garantía de conocimiento profundo, es un especialista en los

estudios de la Sabana Santa de Turín (es miembro de número del Centro español de

Sindonología). En esa Sábana, la ciencia -la Química en concreto- con sus avances e

investigaciones, se une con la fe cristiana en un aspecto tan central como es la Pasión y Muerte

de N.S.J.C.

Juan Miguel Gascón Álamo es un amigo; un pedagogo y gran profesor. Un escritor y

publicista.

3.- Y entro, muy brevemente -contra lo que yo desearía; pero lo que importa es oírlo a

él y no a mí- entro en otro matiz de la personalidad de Juan Miguel.

A través de los ojos y de los oídos crecemos y nos desarrollamos y maduramos. Pensad

en una criatura que naciera sin ojos y sin oído… Pero también el desarrollo de un ser humano,

desde esos dos sentidos de la vista y el oído, será muy distinto según lo que desde su infancia y

durante toda su vida vea y oiga. Si se nace en un ambiente de violencia, si lo que se ve y se oye

es violencia, está madurando y formándose un violento; si se ve y se oye desde la infancia, la

educación y la elegancia, la vida compartida y la ayuda mutua, está naciendo un corazón

generoso. Se educa a través de la vista y del oído. Y en esto Juan Miguel es un artista.

No he mencionado aún que Juan Miguel se casó con Mary Carmen Gallego Gómez. Fue

en Albacete en 1974. Pero no sé quién de los dos es más santistebeño: ¡que las raíces de Mary

Carmen también están aquí! Y de este tronco salieron dos ramas (Juan Miguel y David, sus dos

hijos); y…baste con decir ¡Bendita sea la rama que al árbol sale!

Iba diciendo que otra virtud de Juan Miguel es el arte con que trasmite por la vista y el

oído. Pero resulta que ese perfeccionamiento, lo hicieron los dos esposos en Somosaguas

(Madrid) especializándose ambos en técnicas audiovisuales y metodología didáctica (y quede

esto como un apéndice a lo dicho sobre su docencia: que ellos dos aplicaron en sus clases e

impartieron cursos y conferencias numerosas sobre estos métodos didácticos).

Quisiera leer toda la larga lista de producciones de Juan Miguel. Cuántas de ellas con el

nombre de Santisteban y sus gentes; cuántas otras sobre temas de Linares: Mayordomía,

Andrés Segovia, San Juan de la Cruz y Úbeda; la discapacidad; Museo sobre el Beato Manuel

Lozano; Exposición de las Obras Misionales Pontificias en la JMJ de agosto 2011 en Madrid. Y

también, en el mismo acontecimiento de la JMJ, la exposición sobre Lolo, gestionada por CECO

(Ciegos Católicos españoles)

Yo sé que cuando esta noche oigamos a Juan Miguel él nos va a trasmitir todo lo que él

ha acopiado durante uno y otro año observando y grabando en cada rincón de cada ‘paso’ de

la Pasión de Jesús, vivida y representada por las calles de Santisteban.




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4. Acabo. Sé que no he dicho todo lo que es y vale Juan Miguel. Pero aquí hay alguien

que le conoce mejor y mucho más que yo. Y se me ocurrió que ésa sería la mejor presentación

que se pudiera hacer. Le dije a Mary Carmen, su esposa, ‘Dime cómo es Juan Miguel’; y ella me

respondió:

"Hola Rafael, en primer lugar he de decirte que me satisface

compartir de nuevo momentos de nuestras vidas.

Por supuesto que conozco a Juan Miguel, pues casi todos mis

años los he vivido a su lado, pero me consta que nunca se conoce

a una persona en su totalidad por muchos años que convivan...

siempre hay algo por descubrir y espero seguir sorprendiéndome

día a día con Juan Miguel, porque cuanto más le conozco más le

quiero.

Hoy por hoy destaco, que ante todo es una persona buena y

además: vocacional profesionalmente, estudioso infatigable,

sencillo, honesto, cercano, muy generoso (pues todas sus

actividades tienen un claro objetivo: hacer felices a los demás).

Otra cualidad que le caracteriza es el de saber compaginar su

trabajo con su familia, entregando en ambos campos el cien por

cien de su persona sin escatimar tiempo y esfuerzo, siendo

ejemplo a seguir para nuestros hijos.

Creo que todo esto es posible por su capacidad de trabajo y

organización; y por supuesto al corazón que pone en todo aquello

que realiza". Ese corazón ha puesto en lo que él nos va a decir.

Gracias




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SANTISTEBAN DEL PUERTO 31 DE MARZO DE 2012.SÁBADO.

Introducción: Como cada primavera los lirios y las lilas del patio ya han florecido y las primeras golondrinas con sus trinos y acrobáticos vuelos, alegran nuestro paisaje, señales inequívocas de que la Semana Santa se acerca, y muy pronto, nuestras imágenes a su paso por nuestras calles y plazas las convertirán en la Vía Dolorosa santistebeña. El pueblo llano acompañará a sus Cristos y Vírgenes, sin más protagonismo que el de DAR TESTIMONIO DE SU FE, desde el anonimato del caperuz o las trabajaderas de un trono, apiñados en las bocacalles y aceras o descalzos tras los palios cumpliendo promesas, en un ambiente de respeto y silencio que invita al recogimiento y la meditación al contemplar el realismo evocador de los pasos que representan la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo. Este año de gracia de 2012 y en esta noche, la apasionada voz del pregonero está llamando a la puerta de vuestros corazones para compartir con todos vosotros, vivencias, recuerdos y el profundo amor por nuestra Semana Mayor.




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MONS. D. RAFAEL HIGUERAS ÁLAMO. RVDO. P. D. JOSÉ MARÍA SAETA FERNÁNDEZ, CURA PÁRROCO. REPRESENTANTES DEL AYUNTAMIENTO. HERMANOS Y HERMANAS MAYORES, JUNTAS DE GOBIERNO DE LAS COFRADIAS DE NUESTRA SEMANA SANTA. HERMANO MAYOR Y JUNTA DE GOBIERNO DE LA MUY ANTIGUA, ILUSTRE Y REAL COFRADÍA DE LA VIRGEN DEL COLLADO. MAYORDOMÍA DE LA VIRGEN DEL COLLADO. COFRADES, AMIGOS Y PAISANOS. Sed bienvenidos al Pregón de Semana Santa y gracias por vuestra presencia. Permitidme agradecer, muy sinceramente, a Dª Luisa Mercado Martínez, Hermana Mayor de la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad y a su Junta de Gobierno, el haberme propuesto a la Unión de Cofradías para pregonar nuestra entrañable Semana Santa. Gracias por darme esta oportunidad única, que sin duda marcará un hito importante en mi vida, gracias por permitirme dictar mi pregón desde este atril, testigo de tantos pregoneros y pregoneras, que me han precedido, haciéndonos vibrar porque sus sentimientos se hicieron palabra con la que honraron este acto, engrandeciendo nuestra Semana de Pasión. Gracias Monseñor por tu presentación, tus palabras me abruman, porque con ellas, utilizando el argot profesional, has puntuado en exceso mis cualidades, no dejando ni entrever mis defectos para no rebajar la nota final, confirmando mi convicción de que la amistad sigue obrando milagros.




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Además de tu intervención en este acto, tu pueblo y tus paisanos tenemos mucho que agradecerte, entre otras cosas es justo reconocer, que nuestro ilustre paisano Rafael, fue uno de los principales artífices para que la Coronación Canónica y Pontificia de Nuestra Madre y Patrona la Santísima Virgen del Collado, se hiciera realidad. ¡Cuanto entusiasmo nos transmitías y cuántas puertas se abrieron por tu valía y buen hacer¡ Gracias a la confianza que siempre has depositado en nosotros, fuimos conociendo con tu ayuda, la vida y obra de "Lolo" atreviéndonos con tu reto de montar de la "NADA" los dos salones de la Exposición Monográfica sobre LOLO para la Beatificación. ¡Mereció la pena propagar el mensaje de Lolo y trabajar contigo! Luego vinieron las exposiciones de Madrid "Lolo: Enfermo y misionero" "Vida y Beatificación de Lolo" con motivo de la última visita del Papa para las Jornadas Mundiales de la Juventud. Hemos compartido tantos momentos... Tantas vivencias... Nos has dado tanto... por tan poco... GRACIAS RAFAEL.




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En estos momentos me siento muy feliz, por haber aceptado el gran honor de pregonar nuestra Semana Santa, porque me habéis dado la oportunidad de demostrar, una vez más, el amor que siento por mi pueblo, mis paisanos y nuestras seculares tradiciones. Quizá, este amor por lo nuestro, fue creciendo debido a la distancia, pues a la temprana edad de los doce años inicié mis estudios en la SAFA de Úbeda, gracias al apoyo de mi familia y la generosa ayuda de mis maestros, y aunque por entonces aquello de la disciplina en régimen de internado, era casi de rigor monacal, acentuándose los primeros años, en los que las salidas estaban restringidas a los periodos vacacionales, haciendo que aquel niño soñara y contara los días para tomar los caminos de regreso y volver a sentir el calor de los míos, respirar los aromas que embalsaman nuestro aire y saturar mi retina de los rojos colores de nuestros cerros, deseoso de vestir mi primera túnica de "los Hortelanos", blanca con botones, caperuz, fajín y bocamangas de color verde, con el cáliz de papel dorado en el centro del antifaz, que mi hermana con delicadeza y cariño me tenia planchada, limpia e inmaculada el martes santo para acompañar el paso de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto, portando el precioso estandarte o la cruz de guía. Quisiera tener un recuerdo especial para el que fuera, por aquellos años, Hermano Mayor de la Cofradía Sebastián Álamo Montes, hombre bueno que tanto trabajó por nuestra Semana Santa. El pregonero en estos momentos en los que, abre su corazón ante vosotros, quiere tener un recuerdo especial para todos nuestros seres queridos, mis padres y todos nuestros familiares y amigos que nos precedieron en las celestiales moradas y ahora




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gozan eternamente de la luz de Cristo Resucitado PORQUE CREYERON EN ÉL Y MURIERON EN ÉL. Una Semana Santa en Santisteban, hace muchos años, el que os habla, descubrió el amor de su vida, conocí a Carmen, la madre de nuestros hijos, Juan Miguel y David Francisco y la abuela de nuestros nietos Juan Miguel (tercero) Nazaré María y Gabriel, ellos han llenado y llenan de sentido mi vida. Carmen venía con cierta frecuencia a casa de su tía Máxima, hermana de su padre, a la que siempre recordaremos por su trato cercano y lleno de cariño, maestra ejemplar que de alguna manera influyó en todos los familiares, alumnos y alumnas que nos hemos dedicado a la enseñanza por su talante ejemplar y claridad pedagógica. LA CUARESMA LLEGA. Cuando los fríos vientos del invierno dejan paso a las cálidas brisas de la primavera, la naturaleza resurge, aunque el cielo le niegue la necesaria lluvia, transformado, nuestro paisaje y las blancas flores de los almendros ya nos anunciaron el comienzo de la Cuaresma, tiempo de reflexión, penitencia y de preparación cristiana para la Pascua. Las cofradías intensifican su actividad a medida que el calendario se aproxima a la Semana de Pasión, sucediéndose cursillos cofrades, fiestas de los titulares de las cofradías, triduos, quinarios, ensayos y certámenes de bandas. La vida de Santisteban late a ritmo de tambores y cornetas de muestras bandas; nuestros costaleros y costaleras a golpe de




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llamador o campana, se entrenan al relente de la noche siguiendo las indicaciones de sus capataces, guías y contraguías, para que cuando llegue su estación de penitencia todo se desarrolle con la precisión y brillantez que requiere el desfile procesional. Las camareras, trabajan en el silencio de las capillas de sus titulares, preparando con especial cariño y delicadeza las vestimentas, mantos y todos los accesorios de nuestros Cristos y Vírgenes, para que dignamente procesionen por nuestras calles. Los cofrades encargados de la cera, ponen a punto la candelería, otros se afanan en limpiar canastillas, varales, bambalinas y alamares... Realizar todos estos preparativos, sin lugar a dudas, es importante y necesario , pero también es fundamental, que estos trabajos se desarrollen en un ambiente de entrega asumida y compartida, ejemplo a seguir para los que nos contemplan, ya que las cofradías, en su conjunto (según el teólogo Andrés Molina), tienen la función, evangelizadora viviente y aleccionadora para las multitudes. La importancia catequética y educativa de las cofradías hemos de asumirla y vivirla con entrega para ser testigos de Cristo y su Stma. Madre. "




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DOMINGO DE RAMOS Amanece el Domingo de Ramos y avanza la mañana bajo un cielo rabiosamente azul, las alegres campanas de Santa María tañen a fiesta. ¡Que buen comienzo de la Semana de Pasión a los pies de Nuestra Madre y Patrona, la Santísima Virgen del Collado! Una vez bendecidas las palmas, se organiza la procesión hasta San Esteban, donde se celebrará la Eucaristía. La calzada de Santa María resplandece con reflejos amarillentos, que el tibio sol arranca de las cimbreantes palmas, al tiempo que las alegres melodías de la banda de música unidas a las campanadas de los templos, son el preludio a la salida de la primera procesión de La Entrada de Jesús en Jerusalén. En tiempos de Jesús, durante la fiesta de la Pascua, nos dice Jeremías, se juntaban más de 100.000 judíos que subían a Jerusalén a santificarse y era costumbre de los habitantes de Jerusalén ir por delante de los peregrinos amigos y acompañarles formando procesión alegre, esta costumbre adquiere con Jesús, personaje muy esperado, una dimensión triunfal. "Los sumos sacerdotes y los fariseos habían dado órdenes, de que si alguno sabía donde estaba Jesús, lo notificara para detenerle.(Jn 11,55-57), esta hostilidad con Cristo, se había acrecentado con la Resurrección de Lázaro, el testimonio del resucitado y el triunfo popular.




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Jesús ponía en juego la religión judía y no sólo sus intereses materiales. El trayecto de la entrada en Jerusalén seguido por Jesús sería de Betania a Jerusalén, recorriendo una distancia aproximada de 2.800 metros, de ascensión el primer kilómetro, por la vertiente oriental del Monte de los Olivos y, de allí, un rápido descenso hacia la Puerta Dorada y el Templo. La tarde del Domingo de Ramos, La "Borriquilla" efectuará su salida de la Ermita, la Betania santistebeña, los niños y niñas de Santisteban, vestidos de personajes bíblicos estrenarán, además de la prenda que demanda la tradición, la ilusión acompañar y aclamar a Jesús, inundando de alegría, luz y colorido el desfile procesional. "Si no os hacéis como niños no entrareis en el Reino de los Cielos" (Mt 18,3) ..."Dejad a los niños y no les impidáis que se acerquen a mi... " (Mt 19,14). Ante la triunfal acogida y las aclamaciones de la entrada en Jerusalén... Jesús, una vez llegado al templo, responde a la indignación de los sumos sacerdotes y los escribas... "Si éstos callan gritarán las piedras"... (Lc 19,40), pues la piedras conocen mejor a su Creador que los hombres, refractarios al amor de Dios, al que excluyen... Después de expulsar a los mercaderes del templo, Jesús y sus discípulos regresan a Betania, a casa de Lázaro, Marta y María,




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donde ya no volvería más para no comprometer a sus amigos, debido a las amenazas de los escribas... Señor de la entrada en Jerusalén: Tu pregonero te pide que le concedas la sencillez de los niños, para que cogiendo el ramo de olivo de la palabra te aclame sin descanso proclamando que Tú eres el Hijo de Dios vivo, el Mesías, el Enviado y nuestro Rey.




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LUNES: El lunes, no habrá procesión, la Banda de Música de la Sociedad Musical "Santa Cecilia", ofrece un concierto de marchas procesionales dirigida por D. Enrique Moya, al que todos estamos convocados en la Casa de la Cultura para deleitarnos con sus interpretaciones y premiar con nuestro aplauso su buen hacer y he querido hacer esta referencia en mi pregón, además de reconocer y felicitarles por su trabajo, pedirles, si es posible, rescaten del olvido las obras,(aunque ya algunas han sido interpretadas por la banda) de compositores paisanos nuestros de la talla del Maestro Berzosa (Admirador y seguidor de don Hilarión Eslava) del que según D. Manuel Páez Salas, en una publicación del Boletín del Instituto de Estudios Giennenses, titulado "Breve reseña de la Música y el Folklore santistebeño", publicado en 1973, afirma que se conservan partituras de sus misas solemnes, "Stabat mater" y un Miserere. D. Esteban Moreno Ochoa y su hijo D. Miguel Moreno Pérez, con varias marchas procesionales, entre otras composiciones y D. Guillermo Álamo Berzosa, organista por oposición de la S.I.C. de Jaén, con una copiosa producción de carácter religioso. Vaya para todos ellos, nuestro recuerdo emocionado y el merecido reconocimiento como preclaros hijos de Santisteban.




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MARTES SANTO: EL martes santo, realiza su estación de penitencia la cofradía de Jesús Orando en el Huerto de los Olivos y Jesús Preso "Cristo de Medinaceli". Recuerdo con cariño aquellos los momentos pasados en la carpintería de Jacinto y Agustín Galdón, seguramente en el tramo final de la década de los cincuenta, yo era un crío muy inquieto al que le gustaba estar en aquel taller artesano, fijándome y aprendiendo cómo mi cuñado Agustín y su padre manejaban las herramientas y con oficio realizaban todo tipo de trabajos; por esta época, recuerdo que la cofradía de Los Hortelanos, les encargó realizar la cruz de guía, una verdadera obra de arte que aun hoy acompaña al paso, y también los báculos de los penitentes, cuantos ratos pasamos lijando aquellos báculos y la ilusión que poníamos en aquel trabajo-juego, animados por los maestros carpinteros... Entre otros trabajos relacionados con nuestra Semana Santa, tallaron la Cruz del Nazareno y su trono, obras de excelente e impecable ejecución que les hacen merecedores de nuestro reconocimiento y especial consideración. Unas casas más abajo de la carpintería, vivía Sebastián Álamo, hermano mayor de los hortelanos, recuerdo que horas antes de la estación de penitencia, los cofrades nos reuníamos allí y una vez organizados, partíamos hacia el templo de San Esteban, las filas de penitentes eran interminables, al menos a mi me lo parecían, bajando por el Barrio de Baeza y al llegar a las Cuatro




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Esquinas girábamos a la izquierda camino de la parroquia y aun había penitentes esperando su turno en la puerta del hermano mayor, para continuar las filas...es un dato significativo de la cantidad de penitentes que formaban en todas y cada una de las cofradías santistebeñas. Por aquellos años, abrían los desfiles procesionales, tres tambores y alguna que otra corneta, los tamboristas vestían uniformes de falange, después se crearía la banda de la Cruz Roja, a la que casi siempre acompañaba el recordado D. Enrique Higueras (D. Enrique el practicante) ¡cuanto bien hizo por Santisteban!. En 1987 se creó la Banda de CC. y TT. de la Oración en el Huerto y Cristo de Medinaceli, celebrando el próximo año la III Bienal del Certamen de Música Cofrade "Villa de Santisteban del Puerto". Este pregonero os felicita de corazón y os anima para que sigáis orando con vuestra música a ese Cristo sufriente de Getsemaní y al Jesús preso y maniatado de Medinaceli. LA PROCESIÓN: Cae la noche sobre Santisteban, la luz amarillenta de las farolas de la fachada de San Esteban se va perdiendo entre los numerosos fieles que esperan la salida de los pasos, un ligero murmullo cercano al silencio, invita al recogimiento y la oración interrumpido por el toque de corneta ordenando la salida del paso, al que se recibe con un apretado aplauso.




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Contemplamos a Jesús orando en el huerto de los olivos, sus ojos miran el cáliz que le muestra el ángel enviado por Padre para que le reconforte en su angustia y el abandono de los suyos. Apenas el primer paso a doblado la esquina de la parroquia con la calle Tercia, en la puerta del templo suena el himno nacional rindiendo honores a Jesús Preso de Medinaceli. ¡Señor! ¿Quién te ha atado las manos? Tu rostro sereno y tu mirada baja se fija en cada uno de nosotros respondiendo a nuestra pregunta... Mis manos las atáis cada vez que abandonáis a su suerte al hermano que sufre, negáis el consuelo al que llora y no perdonáis a los que os ofenden.... La procesión se va perdiendo camino de la Plaza Mayor donde se agolpa la multitud y los aficionados a la fotografía disparan sus flashes inmortalizando momentos entrañables de nuestros pasos tomando como fondo la silueta emergente del cerro la Guaría, fortaleza y abrupta defensa, inspiradora de legendarias leyendas... ¡No! , no me he olvidado de vosotros costaleros, porque tenéis la fuerza y galanura para llevar al Cristo que sudó sangre en Getsemaní, prendido y humillado. Vuestra generosidad os ennoblece y dignifica, porque si importante es el anonimato de las trabajaderas y el costal debajo de la canastilla de un trono, también es importante vuestra labor arrimando el hombro a los varales de vuestros pasos, impecablemente uniformados, vuestras miradas están como ausentes a lo que os rodea, porque sintiendo el peso de tanto amor sobre vuestros hombros entráis en comunicación directa con el Cristo que sufre por todos nosotros.




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La voz de mando del capataz y el metálico sonido de la campana golpeada por el martillo, os devuelve a la realidad, la procesión continua a los sones de la marcha "La Oración del Huerto" del recordado maestro Miguel Moreno. ¡QUE BIEN LOS HACÉIS COSTALEROS! Señor que tu coraje, más fuerte que tu desaliento en la soledad de Getsemaní, sea ejemplo a seguir en un mundo en que " el estado de bienestar" mal entendido, se ha instalado en nuestras vidas, haciéndonos débiles y vulnerables ante las adversidades. Señor Preso: Los encargados de prenderte, ataron tus benditas manos que habían devuelto la vista a los ciegos, el oído a los sordos , acariciado a los niños y CONSAGRADO EL PAN Y EL VINO, instituyendo la Eucaristía, unas horas antes de prenderte, para quedarte siempre con nosotros... pero los tuyos te abandonaron ...y nosotros... ¿Cuántas veces te abandonamos? ¡Ahora si que estás verdaderamente solo!, Señor.




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MIÉRCOLES SANTO: En el reloj del Ayuntamiento, que casi siempre se anticipa, para dar las horas a la campana de San Esteban, suenan once campanadas, que en la noche del miércoles santo, nos convocan a las puertas de la Ermita para acompañar al Santísimo Cristo del Perdón y Misericordia en el Viacrucis Penitencial de "SILENCIO". En la mayoría de los programas de nuestra Semana Santa, la palabra silencio, figura entre comillas; es una forma gráfica de captar nuestra atención para que nuestra actitud silenciosa facilite la meditación sobre los misterios de la Pasión de Cristo. El Papa Juan Pablo II, en su carta apostólica del 4 de diciembre de 2003, nos dice:"...El silencio resulta necesario para lograr la plena resonancia con la voz del Espíritu Santo en nuestros corazones y para unir más estrechamente la oración personal con la palabra de Dios. En una sociedad que vive de manera cada vez más frenética, a menudo aturdida por los ruidos y dispersa en lo efímero, es vital redescubrir el valor del silencio..." Nuestra Semana Santa, aun conserva el precioso encanto del respetuoso silencio y especialmente en el Viacrucis del Santísimo Cristo del Perdón y Misericordia, que es llevado por un trono de manos que se aferran con fervor a la Cruz de Cristo en la que siempre hallaremos respuesta a nuestros desasosiegos y preocupaciones.




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La imagen de nuestro Cristo del Perdón, representa un Cristo crucificado vivo, aun no tiene la herida de la lanza en su costado. Su mirada serena y acogedora nos invita a la meditación sincera y reflexiva. La imagen es obra del gran imaginero, paisano nuestro D. Jacinto Higueras Fuentes, al que se le conoció con el sobrenombre "El místico del Sur" por la espiritualidad, fe y unción que sus imágenes inspiran, porque supo sacar de la madera el sereno dolor de Cristo. Aún podemos contemplar en algunas paredes de nuestras calles, aunque muy deteriorados por el paso del tiempo, algunos de los dibujos alusivos al viacrucis protegidos por hornacinas, así como numerosos estandartes realizados con un exquisito gusto y sensibilidad por Juan Manuel Soriano, pintor santistebeño y amigo que también dejó la huella de su arte en nuestra Semana Santa. El viacrucis organizado por los grupos parroquiales, discurre, habitualmente por las sinuosas y estrechas calles del casco antiguo con rincones llenos de encanto y evocadoras piedras que guardan entre sus grietas, la derretida cera de los hachones, mezclada con la sangre de los hermanos disciplinantes producida por el flagelo en sus desnudas espaldas, que hace más de cuatro siglos acompañaban las primeras procesiones del Cristo de la Vera-Cruz, titular de la Cofradía , fundada en el convento de San Francisco, por expreso deseo del conde Don Francisco de Benavides, cuyos estatutos fueron aprobados por el Obispo de la Diócesis Don Francisco Sarmiento de Mendoza, el




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26 de noviembre de 1580, de las que se tiene constancia documental, recogida por nuestro querido y recordado amigo D. José Juliá Gómez de Peñafiel y publicada en el Boletín del Instituto de Estudios Giennenses, bajo el título de "El convento de San Francisco de Santisteban del Puerto". Señor del Perdón y Misericordia: Al final del "Camino de la Cruz", te espera la muerte y sepultura, el cáliz de tu Pasión lo vas a beber hasta la última gota, de Getsemaní al sepulcro...pero Señor...Tu tienes palabras de vida eterna"... «Subimos a Jerusalén y el Hijo del hombre será entregado a los príncipes de los sacerdotes y a los escribas que le condenarán a muerte y le entregarán a los gentiles, y se burlaran de él y le escupirán, y le azotarán y le darán muerte, PERO A LOS TRES DÍAS RESUCITARÁ. (Mc 10, 33-34). Creo en ti Señor del Perdón y la Misericordia, creo en tu palabra porque tu palabra es vida, esperanza y luz de Resurrección.




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JUEVES SANTO Después de la guerra civil, y precisamente en el verano de 1946, en la Rebotica de D. Luís Higueras, centro del que partían iniciativas culturales en todos los ámbitos y especialmente aquellos relacionados con nuestras costumbres y tradiciones, D. Marcial Medina, uno de los impulsores de este círculo cultural santistebeño, convoca a un grupo de personas, la mayoría bastante jóvenes, con el fin de fundar una cofradía y hacer resurgir los desfiles procesionales de la Semana Santa. Al año siguiente se funda la Cofradía de los "Esclavos Servitas de María Santísima de los Dolores y San Juan Apóstol". La imagen de la Virgen, es obra de nuestro paisano D. Jacinto Higueras Fuentes, adquirida y donada por Doña Dolores Sanjuán, viuda de Urra. Parece ser que el primer año, sólo la imagen de la Virgen de los Dolores realizó su estación de penitencia y partir del año 1948, se completaría el paso, al que le faltaba la imagen del Apóstol San Juan, sufragada por suscripción de los cofrades y realizada en madera por el escultor toledano D. Víctor González Gil. El Cristo de la Caída y la Cruz de Guía, obra de D. Jacinto Higueras Cátedra, completarían con posterioridad los pasos de la Cofradía, tomando el nombre por el que hoy es conocida "Cofradía de los Esclavos Servitas de Nuestra Señora de los Dolores, San Juan Apóstol y Jesús de la Caída".




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Al final de la calle Lazarico, esquina con la plaza del Pilarillo del Convento, es uno de mis lugares preferidos para contemplar esta procesión en todo su esplendor, además del singular encanto de esta calle larga y amplia, será también porque me recuerda mis primeros años llenos de aromas a vida recién estrenada y el corazón a medio escribir, al cobijo de mi abuelo Vicente al que siempre recordaré por su bondadosa ternura y la sabiduría de un hombre de bien. Mi hermano Ángel, fue cofrade servita y uno de los primeros recuerdos que guardo con profunda ilusión fue del primer Viernes Santo que los dos salimos de casa vistiendo nuestras respectivas túnicas para acompañar al Santo Entierro. Este día yo empecé a sentirme importante porque iba acompañando a mi hermano vistiendo mi primera túnica.

La noche del Jueves Santo va poblando de estrellas el cielo de Santisteban y por la cuesta del barrio de San Francisco, los penitentes de caperuz negro y capa blanca van dejando por las aceras caminos de cera derretida por el luminoso pábilo de sus cirios alfombrando el áspero suelo. Las filas de luces parpadeantes, preceden al Cristo de la Caída seguido de su Madre transida de Dolor y el Apóstol Juan que parece indicarle el camino seguido por Hijo. Los esclavos y esclavas servitas desfilan lentamente y la tenue luz de su cirio, hace brillar las miradas que se adivinan tras los redondos oteros del antifaz.... como cada Jueves Santo, con emoción sincera buscarán la mirada de la Madre Dolorosa para contarle sus desalientos y alegrías que a lo largo del año les fueron marcando y hoy, precisamente durante el recorrido de la




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procesión irán hojeando en las páginas del libro de la memoria donde la vida fue escribiendo su historia más íntima, sobre las que volverán por los senderos del retorno buscando los registros de los felices días de la infancia cuando por primera vez vistieron la túnica de los esclavos servitas de la mano sus progenitores, descubriendo nuestra Semana Santa y estrenando sensaciones con aromas de incienso, cera y primavera. Camino del Gólgota, tus fuerzas Señor, están al límite, caes varias veces, te levantas, y de nuevo tomas tu cruz..."Si alguno quiere venir en pos de mi, niéguese a si mismo, tome su cruz y sígame." (Marcos 8, 34-9,1) Seguirte, Señor, significa dolor, sufrimiento y abnegación... Danos Señor el valor de seguirte a través de los pequeños o grandes sacrificios de la vida diaria, del dolor de la enfermedad, el paro, la marginación social y el abandono de los que sufren por cualquier circunstancia. La Stma. Virgen de los Dolores y San Juan Apóstol siguen tras los pasos de Jesús, aunque los evangelios guarden sobre esta circunstancia un inexplicable silencio, siendo la piedad y tradición cristiana las que evocan el encuentro de Jesús con su Madre en la cuarta Estación del Viacrucis. (Algunos autores ubican este encuentro después de la primera caída de Cristo con la cruz camino del Calvario). María lleva preparándose más de treinta años para estos momentos, no por ello menos dolorosos, en la mirada de su Madre, Jesús descubre INTENSO AMOR... PIEDAD INFINITA... Y EL DESEO DE REEMPLAZARLO.




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Juan, el más joven de los apóstoles, aproximadamente tenía 20 años, sigue los pasos de Cristo acompañando a María, con actitud valiente, auténtica y generosa sin importarle nada, ni nadie. Señor que difícil es mantener la actitud de Juan el Apóstol, para cambiar las injustas desigualdades sociales en un mundo dominado por la crisis de la especulación, fundamentalmente económica, que no es más que la consecuencia de la pérdida de los verdaderos valores humanos y cristianos recogidos en tus enseñanzas con valor de eternidad.




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VIERNES SANTO EL NAZARENO Son las cuatro de la madrugada del Viernes Santo, las puertas de la Ermita aun permanecen cerradas, de vez en cuando la luz interior del templo ilumina la puerta de los soportales que se abre por la salida de algún cofrade, que vuelve a su domicilio para revestirse la túnica morada, pues toda la noche han estado preparando con esmero hasta el más mínimo detalle, para que su Nazareno y la Santísima Virgen de la Amargura, un año más evoquen los misterios de la Pasión por las empinadas calles de Santisteban, que a su paso se transformarán en Vía Dolorosa, y en la Plaza Mayor, cuando el cielo empiece a clarear por el Sol del Viernes Santo, seremos testigos de excepción de la cuarta estación del vía crucis en la que la Virgen de la Amargura se encuentra con su Hijo bajo el peso de la Cruz, maltrecho, herido, solo y abandonado a su suerte, con sus fuerzas al límite camino del Gólgota. Aproximadamente a las siete de la mañana se producirá el encuentro en la Plaza Mayor, uno de los momentos más emotivos de la Semana Santa El paso de Nuestro Padre Jesús Nazareno, lentamente desciende por la calle Padre Moya y antes de llegar a la esquina de la vieja Botica, el capataz ordena detener el paso a golpe de llamador y a la voz de ¡Ahí quedó!, la banda deja de tocar, y las volutas de incienso ascienden arremolinadas distribuyendo la aromática fragancia por la Plaza Mayor impulsadas por la fresca brisa.




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La Virgen de la Amargura ya está en la Glorieta de Quevedo y avanza con cierta dificultad por el estrecho pasillo dejado por los fieles, que se agolpan a su alrededor acompañando a la Madre. Los tambores redoblan con un son, ronco, continuo y sobrecogedor, que va ganando intensidad hasta que las cornetas inician el toque de oración... en unos instantes un apretado aplauso es la manera sencilla y espontánea de manifestar nuestro amor a la Madre y a su Hijo que se encuentran en la Plaza Mayor de nuestro pueblo. La cofradía del Nazareno, en su encomiable empeño por recuperar costumbres que el tiempo fue olvidando, ha recobrado el uso de "La Tableta", instrumento cargado de simbolismo, de sonido seco y lúgubre, que se utilizó hace muchos años para suplir el sonido de las campanas, que callaban durante los días centrales de la Semana Santa para así favorecer el ambiente de silencio reflexivo que acercaba los fieles al drama de la Cruz, expresando el pesar por la muerte de Cristo. La función de esta "Tableta" en los desfiles procesionales de la cofradía, es sustituir a la campanilla que ordena a los penitentes la parada o la marcha del desfile. La Banda de Cornetas y Tambores de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Stma. Virgen de la Amargura se crea en 1993. Organiza el Certamen de Bandas de Cornetas y Tambores de Semana Santa "El Condado", celebrando este año su décimo segunda edición. Os queremos felicitar por todo lo alcanzado, que no es poco ni fácil y animaros a seguir trabajando en esta línea de perfeccionamiento y entrega desinteresada, porque con vuestra música invitáis al alma santistebeña para que se encuentre con nuestro Nazareno y consoláis la Amargura de nuestra Madre.




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Señor, el centurión teme que no llegues vivo al Gólgota, y ordena a Simón de Cirene que te ayude a llevar la pesada cruz... ¡Que necesitada está nuestra sociedad de auténticos cireneos que ayuden a llevar la pesada cruz de la incomprensión, el maltrato, la violencia en todas sus formas, la intolerancia y la ausencia de compromiso de una sociedad sobrada de hedonismo y falta de valores. María en su Amargura, camino del Calvario se encuentra con Jesús, los soldados no le permiten acercarse, ella extiende sus manos en un intento vano de alcanzar el rostro ensangrentado de su Hijo, quiere mitigar tanto sufrimiento, quiere evitar lo inevitable... de sus enrojecidos ojos ya no fluyen lagrimas sólo su mirada se pierde tras lo pasos de Jesús. A considerable distancia del lugar de la crucifixión percibe los sórdidos golpes sobre los clavos, atravesando la carne de su carne, Juan quiere evitar, en lo humanamente posible, la desolada Amargura de María cobijándola entre sus brazos, suplica al centurión que los deje acercarse al pié de la Cruz, aunque no está permitido por las leyes romanas, este lo autoriza y María se abraza a la Cruz de su hijo..




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EL SANTO ENTIERRO Durante la preparación de la Exposición sobre la vida de LOLO, meses antes de su Beatificación, aunque más o menos conocíamos a Lolo, tuvimos que estudiar a fondo su vida a través de sus libros y objetos personales, y entre estos objetos nos llamó poderosamente la atención una figura pequeña, no mayor de 15 cm, de un precioso Cristo yacente que el escultor Víctor de los Ríos le regaló a Lolo. Cuando el Beato linarense, quedó ciego los últimos años de su vida, además de paralítico en su sillón de ruedas, siempre tenía cerca esta figurita a la constantemente acariciaba con sus manos ; al escribir este pregón y buscando por los rincones de las vivencias que me dejaron huella, Lolo de nuevo ha salido al encuentro para darnos un ejemplo de amor a Cristo. Él tenía necesidad vital de tocar la figura de Cristo, no para creer como Tomás, sino para palpar y sentir en lo más profundo de su alma que ese Cristo, derramaba sobre él su amor y consuelo, que Lolo transmitía a los que le rodeaban con aquella ALEGRÍA que le ofreció a la Virgen de Lourdes en su peregrinación al santuario mariano con estas sencillas palabras: " ... te ofrezco también la alegría, la bendita alegría, la fecunda alegría.".. ¿Cómo pueden salir estas promesas de un hombre "crucificado a un sillón de ruedas"?.




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La respuesta la tenía Lolo ya que ".. todo lo veía natural porque Dios lo compartía con él sentado al borde de la cama..". La tarde del Viernes Santo nuestro Cristo yacente, realizará su estación de penitencia, pienso que sería el momento ideal para que meditemos en la necesidad que tenemos de palpar y sentir la presencia del amor y el consuelo de Dios, que Lolo experimentó, asimiló y transmitió a los que le rodeaban porque su alma noble estaba preparada para aceptar con sublime naturalidad lo que Dios compartía con él y a Nuestra Señora de las Lágrimas, ofrezcámosle la bendita y fecunda alegría de la aceptación sin condiciones, de las contrariedades y fracasos de nuestras vidas en la seguridad que Ella nunca nos abandonará. LA SEPULTURA Muy cerca del Calvario, aproximadamente a 40 m de distancia, con un desnivel de 4 metros hacia el oeste, se hallaba el sepulcro nuevo propiedad de José de Arimatea donde depositaron el cuerpo sin vida de Jesús, colocándolo con sumo cuidado sobre una sábana de lino, extendida y preparada sobre el banco sepulcral al que previamente se había echado una capa de natrón (carbonato cálcico), mirra y áloe. José de Arimatea, Nicodemo y Juan el Apóstol, una vez concluidos sus trabajos en la cámara sepulcral salieron de la misma, para que pudieran entrar las mujeres. María fue la primera en entrar, pues quería ver por última vez el rostro de su Hijo, para lo cual tuvo que levantar el sudario que




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lo cubría, le acarició tiernamente cubriendo de besos el demacrado rostro, el Apóstol Juan, con delicadeza infinita, invitaría a María a salir de la cámara del sepulcro, una vez fuera, se ordenó rodar la piedra redonda por el carril en plano inclinado, sellando luego los bordes de las misma con cal, quedando herméticamente clausurado el monumento. María, acompañada por las santas mujeres, se quedaron durante algún tiempo frente al sepulcro con una sensación de impotencia y María sumida en su Soledad infinita. En el camino de regreso a Jerusalén, la luna llena del 14 de Nisán, se elevaba sobre el cielo marcando la Pascua.




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LA SOLEDAD La noche del Viernes Santo, se va cerrando cargada de soledad y desconsuelo; en la parroquia de San Esteban, efectúa su salida la procesión de Nuestra Señora de la Soledad. La imagen es una talla del Siglo XVII atribuida a Pedro de Mena, donada por Doña Guillermina Berzosa Moya. Su rostro, marcado por la pena y la desolación es infinitamente bello y sigue transmitiendo la ternura de la Madre, su mirada implorante trata de encontrar sentido a tanto sufrimiento, pidiendo al buen Dios, ante el cual halló gracia el día de la Anunciación, que le ayude a comprender las cosas que a lo largo de su vida fue guardando y meditando en su corazón herido y destrozado por la profética espada de Simeón en la noche oscura del Viernes Santo. El lienzo doblado sobre el patibulum de la Cruz vacía, ondea mecido por la fresca brisa saturada de aromas primaverales que desciende desde el cercano Cerro de San Marcos, cuando la procesión alcaza el Pozo de la Pila, para después continuar por las estrechas calles del casco antiguo, Altozano, Águila, Estrella, Nueva... rincones de mis años infantiles llenos de gratos recuerdos y amigos de los primeros juegos, en los que la escasez de recursos despertaba en nosotros la creatividad, organizando nuestra particular semana santa, con tambores de latas de conserva y por trono una vieja silla, con una cruz hecha de palos o una estampa, que adornábamos con flores de nuestros




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campos cercanos y cabos de vela de nuestras casas, que luego se echarían en falta las noches de tormenta cuando la luz se iba... teniendo que recurrir al socorrido candil, siempre colgado del humero de la chimenea... Los recuerdos forman parte de nuestra intima y particular historia, que el paso del tiempo fija en nuestra memoria cuando a ellos nos aferramos con cariño. Lentamente la procesión va pasando por estas calles de paredes recién encaladas, donde se dibuja la oscilante sombra de la Soledad proyectada por la velas de la candelería. Por techo de palio, las estrellas, que embelesadas por la belleza y hermosura de la Madre, a su corona quedaron prendidas. A medio recorrido de la calle Nueva, desde un balcón surge la desgarrada voz, que se arranca por martinetes, como lo mandan los cánones del flamenco para cantar la saeta, HASTA EL TIEMPO SE DETIENE PARA ESCUCHARLA; la preciosa y sentida voz se va quebrando entre quejido y lamento, el cantaor cierra sus ojos y aprieta sus puños, volcando en ello su corazón para que a la Madre de la Soledad, su canto, le consuele y le sirva de compaña. Al finalizar el canto de la saeta el pueblo sencillo lo premia, con un apretado aplauso. Al toque de la campana la procesión se marcha a los sones de la banda por el Barrio de Baeza camino de la Plaza. Como es tradicional, la mantilla negra española es la túnica oficial de las cofrades de Nuestra Señora de la Soledad, sus orígenes pueden remontarse a la cultura ibérica, en la que las mujeres usaban velos y mantos para cubrirse y adornarse la cabeza. Las mujeres de Madrid, durante el reinado de Amadeo




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de Saboya, para demostrar su disconformidad con el rey y las costumbres foráneas que se querían imponer, se manifestaron por las calles de Madrid vistiendo la clásica mantilla española, conocido este hecho como "La conspiración de las Mantillas". Evidentemente el uso de la mantilla, ha ido adquiriendo un gran auge en los desfiles procesionales de la Semana Santa, como un símbolo de consideración, respeto y recogimiento. La banda de tambores de la Soledad, suena diferente al resto de las bandas, será por ese toque especialmente vivo y rotundo, no exento de profundidad y arte, que nos evoca la tristeza y soledad sonora en su estación de penitencia. Con vuestra armonía musical de técnica depurada, hacéis mas llevadera la Soledad de Nuestra Madre y vuestros redobles se asemejan al repique de las campanas de la Pascua cuando acompañáis al Resucitado. Las costaleras de Nuestra Señora de la Soledad no podéis faltar en mi pregón, entre otras razones por haber compartido con vosotras un ensayo, en que sentimos muy cercano vuestro afecto, siendo testigos de vuestra casta, coraje y disciplina, y sobre todo, de lo que es capaz el corazón femenino motivado por la entrega y el amor a la Madre, a la que lleváis cada año con elegancia y respeto sobre vuestros delicados hombros, con ese paso lento, suave y majestuoso que nos invita a contemplar emocionados el paso de Nuestra Señora en el misterio de su Soledad. Algunas de vosotras ¡...vais descalzas...! ¡Cuanta fidelidad a la promesa hecha! ¡Qué grande es vuestro agradecimiento a la Soledad por escucharos y que nobleza de corazón tenéis!




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Anónimas tras vuestro caperuz doblado, a solas con vuestras preocupaciones hechas oración, abrazadas al varal vais sintiendo la profunda alegría de ser los pies de la Madre de Dios. ¡Enhorabuena costaleras! Con permiso de María Jesús, vuestra capataz, que os alienta y mima con oficio y perfección, permitid a este pregonero, al que en estos momentos le embarga la emoción, que os dirija está primera levantá: Costaleras ¿Estáis preparadas? ¡A este es! ¡Al cielo con Ella, costaleras valientes!




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DOMINGO DE RESURRECCIÓN Desde el amanecer, la muralla del castillo iluminada por los rayos solares, va adquiriendo doradas tonalidades y el repique de campanas inquieta a las primeras golondrinas de la primavera, que se balancean suavemente sobre el cielo azul, batiendo el aire con sus alas y acompañando con sus delicados trinos al Resucitado. La Pascua es un canto a la vida, al triunfo definitivo de Cristo sobre la muerte. La Ermita, lugar de la Aparición de Nuestra Patrona, cada Domingo de Resurrección abre sus puertas al paso de la imagen de Cristo glorioso, adorado por un ángel de grandes alas y un soldado romano que incrédulo y acobardado por lo que ven sus ojos, está caído por el suelo, protegiéndose con su escudo, desconcertado por la magnitud del prodigio, al que no encuentra explicación. La cofradía de Nuestra Señora de la Soledad es la encargada de realizar la estación de penitencia, cambiando las negras mantillas por el blanco radiante, símbolo de la gloriosa alegría del Cristo Resucitado y las costaleras que con corazón y arte siguen llamando a las puertas del cielo, dejaron su tristeza con el negro antifaz, llevando con alegría al Cristo triunfante, Hijo bendito de Nuestra Señora de la Soledad. Jesús resucitado aparece como alguien que ha traspasado el tiempo y el espacio. Es difícil de reconocer porque viene de otra realidad, su existencia es otra y especialmente sagrada, parece




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querer mostrar su naturaleza de hombre-Dios, conocedor de todo sobre el futuro y el pasado, atraviesa real o espiritualmente puertas y paredes. Pertenecía a la historia y la superaba, porque posee una vida soberana y superior y que, cuando entra en nuestra historia, lo hace de manera discontinua, sin someterse al tiempo de esa misma historia. La Resurrección no es volver a la vida de antes, saltando sobre su muerte, es la confirmación, el desenlace de esa muerte aceptada y prueba de que el mensaje de Jesús es verdadero .Si Cristo no resucitó vana es nuestra fe. (San Pablo). LA RESURRECCIÓN DE CRISTO ES EL CENTRO VIVO DE NUESTRA FE. El Apóstol Juan al entrar al sepulcro vacío... VIÓ Y CREYÓ. La Sábana, con la envolvieron el cuerpo sin vida de Cristo estaba lacia, allanada, yacente sobre si misma, envolviendo, ahora el aire, al desaparecer el cadáver que contenía, el hecho es que la posición en que se encontraron la Sábana llamó poderosamente la atención de Pedro y del discípulo amado, hasta el punto de vincular esta visión con la creencia en Jesús Resucitado. No es posible sacar el cadáver del interior de la Sábana sin desorganizar la posición de la misma y dos mil años después a pesar del enorme desarrollo experimentado por las Ciencias Físicas y otras ramas del saber, somos incapaces de entender y mucho menos reproducir el proceso por el cual pudo formarse la imagen que vemos plasmada en la Sábana de Turín.




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Juan Pablo II declara en Turín (13 de abril de 1980) que: " La Sábana Santa es espejo del Evangelio y un reto a la inteligencia" y en la audiencia general del 20 de abril de 1980, en Roma, definió la Santa Síndone como «la reliquia más espléndida de la pasión y de la resurrección»

Benedicto XVI dice de la Sábana Santa (Barcelona, 2002). : "En ese rostro podemos reconocer la pasión de forma estremecedora. Y vemos, además, una gran dignidad interna. Ese rostro desprende sosiego y resignación, paz y bondad. En este sentido nos ayuda de verdad a imaginarnos a Cristo".

La Sábana Santa es uno de los objetos más estudiados y analizados a lo largo de la historia de la humanidad. Los estudios médicos, arqueológicos, químicos y físicos apuntan claramente a la conexión directa entre el Sábana Santa de Turín y la pasión, muerte y resurrección de Cristo y testigo de la misma guardando una gran información que aun está por descifrar.

María Magdalena, que había acompañado a Juan y a Pedro, se quedó llorando cerca del sepulcro; Jesús le dice: Mujer ¿Por qué lloras?¿A quién buscas?, ella, pensando que era el encargado del huerto, le dice: Señor; si tú te lo has llevado, dime dónde lo has puesto, y yo me lo llevaré (Jn 20, 11-15), en ese instante, Jesús pronuncia su nombre ... ¡MARÍA!, ella se vuelve y le dice en hebreo RABBONI , que quiere decir MAESTRO... Los ojos de María Magdalena no habían sido capaces de reconocerle; pero la voz del maestro al pronunciar su nombre, ha llegado a su corazón y DESAPARECEN DE ÉL LAS TINIEBLAS.




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En su alma, iluminada por la luz de Cristo resucitado, nacerá una fe esplendorosa. María Magdalena es la mensajera que transmite a los apóstoles fielmente y sin exaltaciones que ha visto al Señor. Esta esplendorosa fe sigue actuando en cada uno nosotros porque creemos en Cristo porque sólo Él tiene palabras que resisten al paso del tiempo y permanecen para la eternidad...

”YO SOY LA RESURRECCIÓN Y LA VIDA, EL QUE CREE EN MI AUNQUE MUERA VIVIRÁ, Y TODO EL QUE VIVE Y CREE EN MI NO MORIRÁ PARA SIEMPRE…” (Jn 11, 25).




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EPÍLOGO

Gracias Señor por ser tu pregonero, gracias por permitirme estar ante mis paisanos y amigos, con este ramillete de sentimientos y vivencias hechos pregón de Semana Santa. Seamos testigos de Cristo Resucitado, perdamos el miedo que a veces nos atenaza y trasmitamos con valentía el amor a Cristo viviendo cristianamente la Semana Santa de nuestro pueblo, abandonemos la comodidad y tomemos nuestras calles, esquinas y plazas , sigamos tras los pasos de nuestras estaciones de penitencia, llevemos de la mano a nuestros pequeños, valoremos la sincera autenticidad de nuestros jóvenes, pues el futuro cercano les pertenece y seamos cireneos siempre dispuestos a dar incondicionalmente nuestra ayuda al que nos necesite. Al concluir mi pregón quisiera dejar patente nuestro reconocimiento al esfuerzo y entrega de los anónimos santistebeños y santistebeñas que a partir de mañana, un año más harán posible nuestra Semana Santa y a todos vosotros agradeceros profundamente el afecto con el que me habéis hecho sentir, una vez más, el orgullo de haber nacido en esta noble y bendita tierra de Santisteban del Puerto. Gracias. Santisteban del Puerto 31 de marzo de 2012.

pregón semana santa 2012 por juan miguel gascón, santisteban del puerto

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