pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

8
~...~ CiJ)?~~ / , t>L(:6 ER J ( 2003) / / / Ed. ?QI'c{OS¡ ¡~.-4/ Capítulon Conducta 1. La conducta en psicología ..,l?J tennino conducta o comportamiento ha sido incorporaqo a la psi- ipa. desde otros campos del conocimiento; fue ya anteriormente ¡eado en la química -y lo sigue siendo aÚl1- para referir o dar cuenta i actividad de una sustancia, un cuerpo, un átomo, ercétera. Posterior- te, Hux1eyl0 introduce en biología para referirse también alas maní- lciones de la sustancia viva: célula, núcleo, etcétera; y Jennings, en .c()logíaanimal. En todos estos campos, el término se refiere al conjunto fenómenos que son observables () que son factibles de ser detectados, .~ualimplica la consigna metodológica de atenerse a los hechos tal cual . ¡ se dan, con exclusión de toda inferencia animista o vitalista. Se busca, 10 tanto, que su descripción y estudio sean una investigaciónlibre -c lás libre posible- de adiciones antropomórficas. Esta posición antime. ica y antivitalista tiende en todas las ciencias a un mayor rigor cientí- , describiendo y explicando todos los fenómenos en función de los ómenos mismos, sin tener necesidad de recurrir a potencias o fuerzas !~j~nasy distintas a los sucesos naturales. En el estudfo del ser humano H,l:mbiénse aplicó el término a todas las reacciones o manifestaciones ~~~el'iores,tratando así de que la investigación psicológica se convirtiera ~mbién sistemáticamente en una tarea objetiva, y --por 10 tanto-- la ~~ico¡ogiaen una ciencia dela naturalez;a. .. El término conducta, aplicado a las manifestaciones del individuo,- no siempf(~la connotación de estar dejando de lado lo más central o cipal dl,1ser humano: los fenómenos propiamente psíquicos o menta- Estosúltimosserían realmentelos fenómenosmásimportantes, dado :,que originanla conducta; y si estudiamosúnicarnenteesta última,nos .estamos ocupando sólo de productos y derivados, pero no de) fenómeno 'Central.Etimológicamente la palabra conducta es latina y significa condu- pida o guiada; es dr~cir,que todas las manifesta.cionescomprendidas en el . términode conduclason accionesconducidaso guiadaspor algoqueestá fuera delar¡ Iuismas:porlarmmte.D!~estamanera,elestudiodelaconduc;-

Upload: club-estudiantil-artediseno

Post on 30-Jun-2015

561 views

Category:

Education


0 download

DESCRIPTION

Apuntes y materiales de Prsicología Educativa I del 1er año P.A.A.V. de la E.P.A.V. | Profesora: Nora Stocco

TRANSCRIPT

Page 1: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

~...~

CiJ)?~~ /, t>L(:6 ER J ( 2003)/ / /

Ed. ?QI'c{OS¡ ¡~.-4/

Capítulon

Conducta

1. La conducta en psicología

..,l?Jtennino conducta o comportamiento ha sido incorporaqo a la psi-ipa. desde otros campos del conocimiento; fue ya anteriormente¡eado en la química -y lo sigue siendo aÚl1-para referir o dar cuentai actividad de una sustancia, un cuerpo, un átomo, ercétera. Posterior-te, Hux1eyl0 introduce en biología para referirse también alas maní-lciones de la sustancia viva: célula, núcleo, etcétera; y Jennings, en

.c()logíaanimal. En todos estos campos, el término se refiere al conjuntofenómenos que son observables () que son factibles de ser detectados,

.~ualimplica la consigna metodológica de atenerse a los hechos tal cual. ¡ se dan, con exclusión de toda inferencia animista o vitalista. Se busca,

10 tanto, que su descripción y estudio sean una investigaciónlibre -clás libre posible- de adiciones antropomórficas. Esta posición antime.ica y antivitalista tiende en todas las ciencias a un mayor rigor cientí-, describiendo y explicando todos los fenómenos en función de losómenos mismos, sin tener necesidad de recurrir a potencias o fuerzas

!~j~nasy distintas a los sucesos naturales. En el estudfo del ser humanoH,l:mbiénse aplicó el término a todas las reacciones o manifestaciones~~~el'iores,tratando así de que la investigación psicológica se convirtiera~mbién sistemáticamente en una tarea objetiva, y --por 10 tanto-- la~~ico¡ogiaen una ciencia dela naturalez;a.

.. El término conducta, aplicado a las manifestaciones del individuo,-no siempf(~la connotación de estar dejando de lado lo más central o

cipal dl,1ser humano: los fenómenos propiamente psíquicos o menta-Estosúltimosseríanrealmentelos fenómenosmásimportantes,dado

:,queoriginanla conducta; y si estudiamosúnicarnenteesta última,nos.estamos ocupando sólo de productos y derivados, pero no de) fenómeno'Central.Etimológicamente la palabra conducta es latina y significacondu-pida o guiada; es dr~cir,que todas las manifesta.cionescomprendidas en el

. términode conduclason accionesconducidaso guiadaspor algoqueestáfuera delar¡Iuismas:por la rmmte.D!~estamanera,elestudiode la conduc;-

Page 2: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

24 José Bleger

ta, consid¡!rada así, asie:ata sobre un dualismo o una dicotomía cuerpo-mente, sobre la tradición del más puro idealismo, en el que la mente tieneexil.tencia de suyo y es e)ipunto de origen de todas la."i.nlanifestaciones coroporales; según esta perspectiva, el cue~'poes ¡;olamente un instrumento .oun vehículo del que se vale la mente (alma} para manifestarse. La r~í~religiosadu este enquemaes fácil de deducir.

En la historia del concepto de conducta en psicología, tiene importat1..cia el artículo de Watsofl publicado en 1913, que inicia la corriente§escuela llamada Conductismo 11Beh.wiorismo, en el que sostiene que)~psicología científica de:be estudiar ¡¡ólo la) manifestaciones extern~'(motoras, glandu1aresy verbal¡~s);aql)ellas que pueden ser sometidas.#\observación y registro fJ:guroso.,tanto como a verif1caciÓn.Ya antes q¡:¡~'

Watson, PilIsbury habÚ, definido la psicolog.ía como la ciencia?~~¡conducta y Angell -int'~grante de la (~scuelafuncionalista.-. a!1Ucip~~a",$~.reemplazo de la mente por la c<mductacomo -objetode la psicol()gía.fo~i~blemente e~ntrela; más importantes, en lo que respecta a la condu9ta q6 .:X

ob-Í'~tode la psicolog.ía,haya qU(:contar los estudios de P. Janet y los

Piéron. Este Último formuló desde 1908, una psicología del con~p<./miento, y P. Jane! hizo importantes aportes si tema de la psicolo~Úrdel~conducta, en la que incluía la conciencia, considerada como una cbnduct~particular, como una complicadón del acto, que se agregaa las a'icielementales.El mismo¡¡utore¡¡tudióla evolüciónd¡~la conduct~,de ..

bien do una jerarquía de operaciones, compuesta de cu.atro grupos:. cotidUsFta animal, intelectual elemental, media y superior. . ',:

. .f!

Pero aun COI1estos anticipas, el behaviorismo de Watson fueu»~verdadera proclama, consecuente y abierta, de una posiciÓn materiali!;táen psicología; loes, aun considerando todas ¡:uslimitaciones mecanicistasy los reparos puestos por diferentes aÜtoresa la verdadera paternidadgeWa18onsobre el concepto de cC)fiductay--entre otr08- las ob.íeci(IUC$))d,eH. Piéron, para quien el behaviorisniQ,com<:1psicología específicamel1t~norteamericana, sólo tiene de e:;pecífico"sus 'exageraciones:frecuentemep-t~puerj}es" .

Sin entrar en esta polémica de Ja prioridad sobre el conc(:pto q~c;ottgucta!en psicología, interesa saber que fue Wa:Wonel que promovió4v,nde.Jas escuelnsque hicieron tamba]ear, aun más, el edifkio de la psicQ-!ogía clásií~ay que -de distintas maneras y con diferente,')vdores-- aportó,*~~mentosque conducen a nuevas poÚbilida(!esde la psicología..Tolmap.qi(N~.que, indiscutiblemente, se habló de la p:;icologfacomo ciencia de la.9Pt.I~uctaantesd.e Watson, pero este Último transformó 12,.conducCta.~n".iilitI1O",

'W~t~9njl'1"4J14Yóen la IHHlductatodos los fenómenos visibles,objeti-

~.__...

25

lte comprobable! o fa.etiblesde ser sometidos a registroy verificaciónson si.emprerespuestas o rj~accionesdel organismo a los estimulos

)bre él actúan. Intentó asentar la psicolo8ia sobre el modelo de lasnaturales, con una. sólida base experimental, y por ello presentó

:emática opmición 2ldas postulados fundamentales de la psicoJog(a: a la introspección como método científico, y a la conci~:nciaobjeto de la psicología. Sabre esta Último,sin embargo, tal cama la

é Tilquin, quedan dudas de ~¡ila exc:lusiónde la conciencia, por parte18on,e~de carácter o:!ltalógka a me:todalógico.offka incluye una división tripartita de la conducta, que pre~¡entamuy s,emejantea la de McDougall;denarnina procesos a la suma de

mentos obseJ:1lables,distinguiéndola del (;omportamienta y d,~ las;i3s. El comportamiento incluye las procesos que ,lenominaefectivoses y para las que se emplean conceptos funcionales, mientras queos fenÓmenosovívencias se utilizan conceptos de¡:criptívos.

~xp1icaestos conceptos can ejemplos s¡mcillos. Si se observa un.ar y s¡: determina que el nÚmero de leñas que parte por minuto va<nuyendo, se esta hadendo una observaciÓndel Gomportamiento, es, de procesos efectivos o males; si sobre esta base se determina la

.ga del leñador, se está describiendo su comportamiento con un can-'10funcional. En otro I~jemplüsimilar, una persona desconocida pierde

en la calle y yo lo recojo y se la entrego; si aldi'a sigui(mtevuelvoantrarla, esa ¡x;,rsonareacciona de otra modo; de¡.cribasu comporta-ta diciendo que me ha rel;onocido o que me ¡¡ecuerda, utilizando.oncepto descriptiva.Las vivlmciaso fenómenas están constituidos par los pensamientos uiones que cada sujeto puede expresar. Ell(:ñador puede decir que estálda, y el des(:onocido de ayer, que me reconoce. Pero puede haberadicdÓn o una falta de paralelismo entre la dlescripciónfuncional1 comportamiento y las vivencias que rea1ment(~tienen esos indivi-

!ó.La conducta externa y la ¡~onductainterna están "no sÓloacopladasfUerlJ.ly accidentalmente, sino emparentadas por esencia y unidas

etivamente" .Según Koffka, Thorndike tal'nbién emplea la palahra conductn de la

sUla manera o I;on la misma ,extensiÓn,es decir, incluyendo e] aspecto

Jaspen: es otrn de los autores que intentó unificar los fenómenos quela 'psicología, ordenándolos en cuat!'Ogrupo:!, según el grado de

de los mismos; el primero es el de los fenÓmenosviven-el segundo, el de las funciones ()rendimiento!:objetivos (memoria,

trabajo, et(;étera); el tI~rcl~ro,el. de las mal1ifestacion~sCOI-

Page 3: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

,.'

26

por.lIlescOllcomittlntes;y el cU:lrto, el de las objt>(exJ~resionels,aCCÍ(lneS,obras).'

Lagache ha d,~dicado'mucha: atel1CÍ,bna este tema ycon\;) la tcitaüdad de las reaCcifi>neSdd (>1'gatJ~smo"l1Rec:')noce 1m ella: 1) la conducta extc:rior, manifiesta;consciente, tal como ella es accesible erí el relato, incllfyell~ociones somáticas subjetivas; 3) rnodijlcacioness()n1~ítiou8como ellas son aCI~esiblesa la investigaÜión fisiológica;4).Jt)sp~~illa c~nduct!l;escritos, dibujos, traibajos,1lests,etcótera, .

El ténnino conductJl se ha convertido asi', en la !lct!J¡'Udti~d!mOlt!jo común de psicóll;)gos, sOCÍóloglJs,anttopól()gm¡, 114~solo empleo se esté filiado en lal escuela del b'ellllVj()rIsc:omertido en un términ() que tllene las ventaj!ilsde n(;1¡gun~ escuellaen ~!specialy de !Ier lo sufícien1lement(1 n(jut~'!~constituir () formalr parte del lenguaje <:omÚn:~inves1:jglI4p~<4fdisc:jplinas, campos o escuelas.

De esta maneira, e11:mpleo quc.vümos. U hllc\Ú"h()$bt~9$ ..estái fuera de los Hmites diela escuela conductistao dl"ijgtlfi~tes, aunqu(~por otra parte resurl1cy f¡J,cogdHl!iÓOn$(;J~ttbfi~tDcología, de la revuelta waltS()nial'ta,hmtl~ cmuola.s dé.la ...~c

náli~s. InCluimos así bajo el ténnitH) condÚct,~,lo~a;rl~$H.~del ser humano, cualesquiera sean SUScaral~teríst.imlsdO'am¡>uando de esta manera el concepto a!sectotl~stMijItQ(mtt~que caracÜ:rízan al conduictismo. Es 10 que hanhecho¡¡'brltreJanet, Lagache y-entn: noso1Iros~H. Pich¡DnRivb~te.:AI()manifestacilones d,el ser humano que llslnlambsccóndüct¡t¡6stápreH~nteestudio. .

Adoptamos, I~omopunto die partida, las definici.\~t1(js:quJCsobre conducta, '~omo "el cOI~junto de respuestas sigr1ifi¡,c~ticuaJM un ser vivo en situacióJf1 integra las .tensiol1i~sque a!unidad y e]1equilihl'ÍO del organÜlmo"; elcomo "el conjunto de ()(ftsil<:>lógicas,motJices, ve!rbales, mentales) por las cmiles unsituítCÍón rl~duce las tensiones q¡ttelo miotivan y realb~a sus PosibEn f¡l ser humano es.te cünjunto de op(!racionc~stiene una estruchcOfilpleja que iremos distinguiendo en el curso de nuestra expOsici'gi1.

2. La ,conducta com(~fenómeno central en la psic'ología

Trabajar en psicologJa con ,el concepto de!conduicta es una espécie derl}tcltno a "'los hechos I!1dsmos", en la medid;l en qtle esto es factilble en

'Condl~cta 27

it,iualq'ilier cie::ncia; este ateJ\erse a los heJzhos, t~il cual se dan y tal como~xísten, pen:llite coMrontaeión de observaciones~ verifij~ación de teorías ypomprensiólJi unitalÍa de wportadones u~icadas en distintos éontextos oencuaidres te ff>ricos.

Nuestro estudio de la conducta se hace en funciónvde la persontiádad

y del inseparable contextoi social, del cual el ser,humano es s:lémpreinte-grante; estudiamos la conducta en calidad de p¡foceso:i no cÓmo"cÓsa",~s decir, dinlÍmicaníente.Mowrery Kluckhohn enume:rancuatro proposi-4~ones"mínimas esenciale:¡"de una teoría dinámica M la personalidad, a$aber:

l.. La c~nducta es fU1Í1cionaLPor fÜncionat. se entiende que toda/con-tiehefana fimilidad: la de resolver tensiones. .

2. La conducta. impliüa siem]~re conflicto o ambivalencia..3. La c!onducta sólo puede 8fr comprendida én función del canlpo o

q"ritexto en. elque ella ocurre.

< 4. Todo orgariismo 'vivo tierlde a pJJeservat'\.mest~ído de ¡náxímft'inte."gración o c(tnsistencia interna.",,"

" Coinciden en estos cuatro puntosi el psicoanálisis, la antropología

~~9i~tlyla psicología del .!earning.El psicoana1isis ha demost¡~ado la conti-npi.élad entre los fdnómenos norrnales y patológicos d(jcondt::t:ta; la ;antro-pólogía social tuvei uoa g&aninfluencia en esta aceptación de'la conducta,como estructura unitaria, al romper la distinciÓn categórica .rl1tre socieda-des "civilizadas" )( "salv¡ijes"; l¡i psko1ogía dd learntng ha üontribuido 1:1:j,Í¡.teltrarnuestra c,)mprensión dedos atJibutos y capaddades i vistos comolínicarnente' "humÜnos", y las ca¡jacterísUcas de!conducta manifestadas porel rl1undo "'animal" .

Los a¡:'ortes con quel se cueínta en la psioología conten:iporánda soncopiosos y contradictorios. Aquí desarrollamos l1uestJiaperspectiva de que

~conduct:. es lapnidad de est~dio de toda la psicología y de todas lasiCf~9ui~las;no que JIbserá, sino qpe ya lo ha sido. Sean cuaJ'es fuen~n losf'~.filiamentos teóricos y los "ffiJlIdelos'" de pensamierlto emlileados,i. todasl~s corrientes y todos los (~arl1posp:lÍcológiws harl estado estudiandocomdente o inconscientemente la conducta.Bsa unidad de la cual todoshan partidl;) es mUltiforme y coritradictoria, en!COllstante dev~nir. Pdr ello,lo c(ue intentammí en nu$stro e¡itudio presentd es una dialéctica de la con.qucta, de ]a que las distil\tas escuelas hiln tom.1idosóló fragmentos diferen-tes y con ello haÍl disto!ísionad,~ las relacione~ rea¡¡~sentre lbs momentosdel proceso dialéctico úrtibo.

,-

Page 4: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

1111

I!l'1I

----......--28

Desde antigu:o se rE:conocenen (11$er hUlmfenómeno:~, a los que pu,eden mducirSE:todas SUsconcreto, aparece en ell;uerpo y en 8(:tuacione S$()b

.

Jf":'

..

.

aunque nUlnca puede exjstir uml acción sobre un I.lbj~.tantemente ocUtJra una modifilcación o movirnien:tlt'lsuceder que uno u otro sean, en momentos Cli$tíntoll,Así', consideramos una (;onducta concreta c(]rporalcuand(').i$lejemplo, del enrojecimiento o palidez de la Cllra, mien11'1's~uode conduda concreta en el mundo axtema H, por ~un sitio, conducir un automÓvil, aunque para eno $1,\ml(i4~de las modificaciones corporales. Otro tipo de conaqulellas manifesta.ciones que no se dan como nccionelltas sino df: maneta simbÚlica; e!:tas ultimas son loscomo :mentales.

Estos son los fenómenos de:conducta de los queen ,el estudio psicológico. .Las diferencias doct.riruij.la psicoloB:íamisma, sino de aplicar 8 la psic:c>log{ae ideologías que !toman :;electiv,ily preferentclmanti: 11,fenÓmenos y los relacionan de una manera da

gan los fet1!ómenos reales reempazándo:los por a. . ...

que hacen depender los ¡fenómenos me:110srcates (~~a.1en I~staúltima forma se procede no ya :1610en el camposicc" sino 1m el mismo campo científico. Por leje:tnpl()~que ~ama.mqs mentales; de ~llo~¡se deriva el co~cept,:¡ :te"" que pasa muy pronto a tener independencia. )' vida

manera que el fenómeno C()Ocn~toestá contenido o¡~esuf~.~tico funcionamiento de una abstracción, instit.uida en:~~i;e1~1

nOSQtros hay fenémenos mentall~s, pero no hay una "ment(lW{h~nos y valores espiritual!:s, pero ello no implica que haya q!i ..~~. . .' ,

En esta forma, los dos tipos de fenómenos (concretos 'YsilntH~-dieron IUglilf11un dualismo sustancial; dl~la phualid.ad fenottlénh::áil¡Cuna trdspo:¡iciór a un duali~mo sustancial. 1.\.'1como si se dcscribiel ..

ejemplo, el rayo y el trueno no como fen6menos ligados a un .

.SUCC~SQ,sino dependientecadalIDo de ellos o:e una especia.l y I¡-artic~~rcategoría sustancial, entn: las cuales se postulan correktciones muy cl)rtlple.jas y discu1lidas. Este tipo de tra¡:posición idealista procede de la reliE~ón (yde la orgm:l.Í:z.aciÓl1social que la i\Ustent!!);Heml una línea de J:volm::ÍI)nqueestá ligada a la m~tología, donde se hada depender el rayo y el1truenoea,dl! uno de un dios p¡trti.cula!" y la 8,parkión de los fenómenos i¡e des-

no como fenómenos, sino como una lucha entre el dios del rayo y eldel trueno.Para nosotros, la pluralidad fenoménica tiene sn unidad en el fenó-

~--'"

/~

(~) 2

1. Areas de la eonducta: 1) área de la mente; 2) área del cuerpo; 3) ilrea delmundo externo'

m.eno de la conducta misma, en el funcionamiento altamente perfeccio.,riado del sistema nervioso central, y en el ser humano considerado siemprecomo persona en cada una de sus manifestadones, vinculado en 1:Ucon,.,rociónhumana al medio Bocial.

Siguien.doa Pichon Riviere, representamos los tres tipo~ de conductaamo tres círtulos cOl1céntricosy los (~num€~ramoscomo uno, dos y tres,tu: corresponden respectivamente aJos fen.6menosmentale:;,corporales:ys de actuaciÓn cn el mundo externo. El mi.smoautor, csmdiando muyetalladamente e8te esquema y su dinámica en psic()logíay psicopatolo-

",igia,ha llamadoa ,~stoscÚculoslasAreasde la conducta.',' Mow]'l~r y Kluckhohn refieren que los psi,;Ólogosse hallan polarizados

" fundamentalmente en dos grupos: los mecamcistas y los finalistas (tdeo-lQgistas); para los primel'Os los estímulos producen movimientos y centranel estudio en esta relaciÓn, mientras que los finalistas est¡ín interesados porel (::¡tudio de la rela(;iÓn (~Jltre los müví.nlÍcnlos dd C1J(~rp()y los dectos

29

Page 5: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

".-""""'.

c:IBUOTEr}¡ LA ESCUELA

DE ARTES

VISUALES DE ROSARIO4. Coexístenciay preponderancia

de lasál'easde la cQnducta

PBO\!¡Nj, 31

La conducta siempre implica manifestaciones coexistentes en las tres; es una manifestación unitaria dd ser total y no puede, por lo tanto":cer ningún fenómtillOen ninguna de las tres áreas sin que implique:

damente a las otras do:>;por 10 tanto, las tres áreas son :siempre:tenlles.El pensar ()imaginar --por ejemplo- (conduct:;tsen el área dt:

. nte} no pueden darse sin la coexistencia. de manife¡;tacionesen el9W'JiPOy en el mundo ¡,xtemo y ., re!:pectivamente--tamb:léna la inversa.

~~

(O). '-/

Fig!2. ]'repondnrancia y coexistmcia de las área!: de la conducta

Esta permanente Goexiste:nciade las tre:sáreas nQexcluye el predomi-t!t9 de alguna de ellas en un momento dado, piredominio que permite

.'~tJAficara la conducta como perteneciente a cada una de las tres áreas.

5. Cienciasde la conducta

Conviene desde ya adehilltar que comitituye un error suponer que ada Mea de ,conducta corresponda una ciencia particular, a saber: la

.)icología para el ,tren de la mente, la biología para la conducta en el área. ~le:lcuerpo y la sociología para las rnanife:;tacionesen e) área del mundo

terno. Este '~riterio tan erróneo ya no puede St,ren la actualidad seria-_ant~sustentado por nadie. Estas tres ciencias se pueden y deben aplicar

¡itodas las manifestaciones del ser humano,.sea cual fuere el área de predo-l-ptniO()de manifestación, de la misma manera que un mÍ!mo objeto pU(~deil~restudiadohnto por la física como por la química; no hay, por lo tanto,

.t~xtel ser humano sucesosque deban ser estudiado¡,exclusivamentepor una,&ienciao qUI~sean del dominio exdusivo de un solo eampo derrtífico.

Todamanifestac:ión del ser hurnano se da siempre en el nivelpsic,oló..

Page 6: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

.. "11i\1f1¡",,~~~~~~~-----,,""'~-- ...J~ ~ ".!4'J'",i';;,¡;~'~~M~'i1,ii4Iii~~~--_IIIiIIiIIIIi/II_""""----------

l'

I

II

32 José Bleger

gico, y espor lo tanto factible de se:restudiada por la psi(;ología,tanto:¡i setrata de una manife!ítaci6nmental como corpond (movimiento, gesto, tic,etcétera) o en el mundo externo. De la misma manera, en cualquier áre:alaconducta implica siempre la participaciÓn indefectible del cuerpo y delmundo extel11o. Una conducta en el área de la mente, por ejemplo elpensa:r,debe ser estudiada tanto por la psicología como por la bio!ogíay lasociología: hay una psicología del pensamiento, una biología y unasociología dd pensamiento. Una conducta en el área del cuerpo tambiéndebe ser estudiada por las tres cie.ncias;así, hay una p:;icologi'adel gesto,una biología, del gesto y una sociología del gesto. Una conducta cm elmundo externo sil~ue las mismas exigencias; hay -por ejemplo-- unasociología de la movilidad.socia!, tanto como una psicologÚ¡y una bio-logía.

Por lo tanto, miteramDsque cadaáreade /a conducta no se corre:/pon-de con una distint'J entidad sustancial y que tG!mpocotada área es priva-tiva de una ciencia en particular. Todas las conductas son objeto de todaslas ciencias. Al respecto, el equívoco fundamental'pmviene en gran partede la biología de laboratorio, en la cual se estudia flsiológicamlmteel movi-miento de un músc;ulo,de:una gJándulao de un órgano, pero esta biologíano es la de la reali!lad, sino la de condiciones artillcialcs, muy reducidas ensu complejidad original.

Para el estudi.o de la psicología, queda con esto anotado un datofundamental que queremos ahora subrayar: la psicolog(a no es solalnentela ciencia de los fenómenos mentales, la psic'Jlogía abarca el estudio detodas las manifestaciones del ser humano y éstas se dan siempre, en reali-dad, en el nivel p'~icológicode integración. La psicología no excluye nin-guna otra denda, sino que las :implicanecesariameme. Sin psicología nohay un conocimiento total del ser humano. Tampoeo lo h:iy con la psi..cología sola.

6. Areas de la conducta y las "partes del alma"

Platón distinguió' tres partes del alma, y en esta forma designó, enrealidad, tres tipos de fenómc:nos psíquicos: la parte concupiscente, laira:;cibley la racional, cada una de las cuale!;tenía un lugar propio en elcuerpo: el vientr'~,el corazón y la cab(:za,respectivamente. Al respecto, yaDem6crito había creído que el pensamiento asienta en la cabeza, la ira enel corazóny los ~,petitosen el hígado.

AristÓtelesreconoce tamb:ién tres partes en el alma: v(Jgetativa,sensi.tiva e intelectiva; la primera es común a todos los sCJresvivos,la segunda a

<!,Conducta 33

'1;; todE¡la serie anim.aly sÓlola t'~rcera(:specU:liary privati\lJ del hombre.Esta,divisiÓnde Aristóteles eSla que se sigue 1mtoda la Edad Media,y suiri:f1uenciaI,erdura aún en nuestms días.

. Kant, basado en Tetl~ns y MendelsBohn, dividió las activ:ldades psíqui-cas en: conocimi(:nto, sentimiento y voluntad.,y esta division predominaaún ~n la alctualidad:intelecto, afecto y voluntad.

Si se examina con cierto detenimiento, vc:remosque cada una de esaspartes del alma, del psiquismo, no significan otra cosa quu las distintasáreas de la.conducta. Y no puede ser de otra manera, porque todas estasdivisioneshan partido sÜ:mprede la conducta real y concreta, de la expe-riencia del ser humano y de su quehacer so<¡ial.

Este volver a los fenómenos reales de donde se han originado :lasabs-trac:ciones,ha in~,umidosigJosdel progreso científico; ha necesitado deldesarrollo del m~lterialismoen forma cada vuz más consecuente y --paraen(l~ del desarrollo de las condiciones de vida de los sereshumano:;(orga-nización social), que permite la formación y emergenciade estructuras conlas que se puede tomar -concienciade la subv'~rsióncmque Heha incurridoal tomar las abstl'aécion.~scomo entes, de los cuales nehace depender, a su'Ve~;,los fenómenos reale:¡(ideaUsmo).

La afirmación de que se hallan pmsentes siempf(~las tres áreas en todamanifestadón de conducta, cOITespondeal hc~chode que no se pueden darfenómenos afectivos sin.los intelectuales y volitivo~, y viceversa.Aclara..mos, nuevamente, que no se trata de lQs mismos hechos con diferentf'

".1!:i

110\,

~,

.

/~~\

E,AfeC~1, ~Itad /

. "', ,

¡ '¡Iid

! 11'

!ir.

i!

Fjg.3

Page 7: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

.<' '------------34 José Bleger

lenguaje. El idealismo no se diferencia del materialismo por ell~mpleo deun lenguajedistinto, sinoque se trata en un casode conocer lo!;objetc,sylos serj~Shumanos tal cual se presentan en la realidad, mif:ntrasque en otrocaso Sl~trata en parte de conocer y en pecrtede seguir desconociendo loshecho!iy objetos reales.

7. Predominio sucesivo o alternan tede las áreas de la conducta

la conducta es una unidad que tiene una triple manifestaci6n fenOtpé.ruea, 1mcuanto se da al mismo tiempo elllas tres áreas,que son así siemprecoexi:¡tentes,aunque con u.nprednminio relatívo en algllllade dlas, 10quenos permite calific~lrla conducta como mental, corp<;,ralo et1el mundoexter:rlo.Pero este predominio es relativo, en el sentido de que puede alt~r-nar o sucede:rsecon el predominio en otra de las áreas. Se puede, por €~jem-plo, reaccionar con ansiedad frente a una situac:iót1dada(áreeide la men-te); posteriormente, en otro momento, puede ceder totalmente esta mam-festadón y aparecer en su lugar palpitaciones (Iireadel cuerpo), o bie:nserambas reemplazadas por una conducta ~í1estabJ.,on una actividad (án~adelmundo externo). ESÍ<'lalte:rnancizlpuedo hacerse en todas las direc¡;ionesytener siempre el mismo significado, es decir, ser unu misma reacción(ansie-dad) a una situaciÓndada. Pero 1mesa alternancia () sucesión de las áreaspuede haber una progresivamodificación del slmUdode la conducta: a lasman.ifestacionesen el área uno,pucde suceder una conducta en el área tres,que modifi.~ala sÍ1;uacióny a su vez modifica, ulteriorment.¡:.la conduptaen el área uno.

La alt€!manciadel predominio puc:designificar un proceso estl~reoti.pado, como en el c~so de que e] significado dj~la conducta Beasiempre elmismo, o bien puede ser un proceso dialéctico, como en el caso del pensary re:alizarf:n concordancia; a su vez la realizaciónmodifica el pensar, y asísuc.~sivamen te.

8. Predominio estable de un área de la conducta

Por otra pane, el predominio de una de las área:;puede ser permanen..te, en el sentido de que las otras dos están muy pOGOdesarrolladas o no se:emplean como álreasde expresión de la conducta. Sobre esta base se pued€!estructura.r o construir una verdadera tipología que, por otra parte, coinci.de con tipologías o clasificacionesde la persl)nalidad,ya dt:sarrolladaspor

Conducta 35

otros auto:res. En todo (;aso, lo que iJiteresa no es una nueva tipología,sin" seftalar nueve,mentecómo, con mayor o menor l~onsec\Jiencia,.m psi-cología se ha tomado siempre como un puntc, de partida la obserVII.ci6nyestudio de la conducta.

Las personas, clasiflcadas como '~squizoides tilmen un predominioestuble d~1área de la me:nte,en la que se matúfiesta toda SI1conducta enforma preponderante, con escasa o nuhl interv~nción de reacdones ()maní-fes'tacione:¡corpc.rales,tanto cClmode actividad o actuación en el mundo

. externo.Tal vez seríamejordedr que losquepresentanestamodalidaddeexpresión de la conducta han sido clas.ificados como esquizoides, introver-tidos. En contraposición a éstos se hallap.los "hombres de acci6n", enquienes todo transcurre en el área treH, con iotervención escasa o t1u1adelas marufe:staciones mentales y corporales. Un tercer tipo e:¡tá con:¡tituidc,pót aquellos en quieneH predonúna el área corporal: tienen palpi1.acione8si tienen miedo, apetito si están contentos, constipación si están frustra.de,s, acid€:z estomacal si se enc18n, eteétera. Constituyen el grupo recono.cido como el de :laspersonalidades inffl11tiles.

.,:¡¡¡;.

9. Coincidencia y contradicción delas áreasde la conduct'.l

'J!~, Hemos' visto que I:n el predominio suc(:sivoo alternante de las áreas

dl~la conducta, estas manifestacionespueden ser coincidentes, en cuanto asu siglútilcadoCisentido, en respuesta a una situación dad:a;es el ejemploque hemos dado de la ansiedad, percibida (~omotal (área l),reemplazadapor palpitacionf~s(área 2), ó por inestabilidaden una tarea (área 3). Este I~Sun tipo de coinddencias cuando el predominio altema.

Otro tipo de coinddencia se da cuando-las manifesta(:ionesde las tmsá:reascoexisten en forma relativamente equivalent.ey de tal manera quetodas ti(men el mismo sentido o constituyen una misma reacciÓna unasiituacióndada. Es el caso en que se dan ál mismo tiempo los treHtipos de

. r'~accióndel ejemplo antes anotado.Un fenóm~no de gran importaJlcia C!.el de la contl'adicc:i6nentre

las manifestaciones de las distintas áreas de la conducta. Esta contradicciÚnpuede s.~rsuceHivao coexistente y en ambos casos puede !:eren lalmisma oe:ndiferj~ntesáreas.

La contradicción sucesiva se refiere a que conductas polares, por(:jemplo acepiación-n:chazo, pueden aparecer sucesivamente como ma-nifestacionesen la mismao en dif,~rentesáreas(sentir el rechazoy d,es-pués actuar aCt:ptando).

,.,~¡11

~I'

~~~~,

~I

i~

Page 8: Pe 1ro-ap5 a-psicologia-de_la_conducta_cpii

-- -------------36 José Blegel' 37

La contradkción coexistente en la mismnunidad de la eonducimen unmismo momento, es un fenÓ¡neno<1í:enorme interés para la psicologÚfyla psicopatologÚl,que rompe necesariamente con los cuadros del formalis-mo lógico y en d cual una CQ!:apuede ser y no ser al mismo tiempo. Est()sóllose puede comprender con la introducciÓn del pensamiento dialéctico,que reconoce como real la contradicdón en la unidad. Como fenómenofu'~ descnpto y ¡:studiado por Freud, aunque derivando de ello consecuen-cias teórkas no del todo correctas por falta del instrumento nece:¡arioi(elpensamiento dialéctico}. Freud se esforzó por hacer entrar sus descubd-mientos en el cuadro del pen:;amiento fomlal, sin reparar en que 10q'\J'~descul:)fiarebasaba y hacía entrar en crisis, también en la psicología;alpensamiento formal.

Respecto dd fenómeno que reseñamos" la duda es un ejemplo de,;laexistenci~lde manifestaciones contradictorias en una misma área al misW:otiempo; esto puede darse en el área del cuerpo y del mundo externo enforma de vacilacióne inseguridad, respectivamente. .

La contradi~ción en distintas ánms ocurre, en un mi:;mo momento,también tanto en condicione:; normales como pa'tológicas, cuando porejemplo se desea concurrir a una entrevista y al mismo tiempo se llegadespués de la hora fijada (contradicción entre áreas uno y tres); cuando Sl~desea ser cordial y al mismo tiempo se está tenso (áreas uno y dos), cuandose actúa afectuosamente y al mismo tiempo se está con el cuerpo tenso(áreas tres y dos).

Esta!; contradicciones entre las manifes1taCÍQne:;en las distintas áreasde la conducta, que se presentan en forma simultánea, corresponden alfenómeno más general de disociación de la conducta o divisióllesqui-zC'ide,cuyo grado o magnitud puede sl~rmuy variable.

El carácter contradictorio o con1lictivo de la c'Dnductafue e:;tudiadomuy detalladamente pClrFreud y constituye un aporte fundamental de laescuela psicoanalítica, pero Freud, que no mantenía la teoría en el planode la conducta concreta, se vio llevado a la hipótesis de la existencia de tmasegunda mente () una parte especial dola mente, que ya no era de carácterconsciente, sino inconsciente, y que estaba con la parto consciente en un.íul::gorecíproco, de cuyos vaivenes dependía la conducta concreta. I~sta-mos, otra vez, ante el fenÓmeno del "mentalismo" que antes rcseÜa-mos como una de las variantes o modalidades dd ideaLismoen psico-logía.

Si la disociadón o la división esquízoidE'no se mantiene, ocurre otro. fenómeno ya eSICudiadotambién atentament,~por Freud; ej de la condUl.~t:t

como transacción entre ambos términos en conf1icto.Una disociaciÓnde laconducta (divisi6n esqlJdzoide)evita Ix apariGiÓnde) conl1kto aunque, por

sin resolverlo, mediantt) una divisióny separación de los témú.opuestos o antinónucoI;.

Bih liog¡rafía

Eergeron, M. (a, b, c); Foulquié, P., y Delédalle,G., Geach, P., J¡,net, P. (a, h,c};Ja5pers, R.; Koffka, K. (a, b); Lagache,D. (a, q d, f, g); M,)wrer,IUi., y Kluck-hohn, C.; MUlmzinger,K.F.; j'ichón Nlvicre, E. (a, b,c); Piéron, n., Postman, L.;

. T91tnan, E.; Schilder, ,~. (b,c); Schwartz, L.; THquin, A,; Watson, J. (a, b); Baliri1, M.