Obras de Shangó

Addimú de Shangó para salud y desenvolvimiento: ofrezca a Shangó cuatro plátanos verdes untados con epó y horneados. Póngalos delante del fundamente de Shangó y si no lo tiene, ofrézcaselos en una posición que sea asequible para usted. Póngalos en soporte o recipiente apropiado por espacio de dieciséis días, durante los cuales le pedirá por su salud y su desenvolvimiento con dos velas rojas encendidas durante la petición.

Use diariamente ashé de Shangó para atraer las vibraciones de su poder y favorecer su suerte y su estado físico. Dele coco para saber si quiere algo más y para definir el lugar donde recibirá la ofrenda al concluir los dieciséis días.

Baño de despojo para los hijos de Shangó: macerar en agua hojas de álamo. Es un excelente despojo para los Oní Shangó.

Baño de suerte para los hijos de Shangó: macerar en agua suficientes hojas, brotes y flores de geranio. Es excelente baño para propiciar la buena suerte a los Oní Shangó. Se usa después de bañarse y no se seca.

Baño de Shangó contra brujerías y malos pensamientos dirigidos a uno: hojas y cogollos de jobo, rompesaragüey, piñón de botija y cedro, ashé de Osha -ero, obí, osun y kola- y ashé de Orunla. Se hierven las hojas y los cogollo en suficiente agua y aplicarse este baño al que se debe haber añadido el ashé de Osha. Enjuagar y bañar con jabón de coco, volver a enjuagar bien y untarse ashé de Orula en las articulaciones y el cuello. Esto es para contribuir a protecciones naturales y espirituales.

Addimú para Shangó para tener poder y atracción en los negocios y amor: ofrecer a Shangó cuatro manzanas rojas rociadas con miel de abejas y un vaso de vino tinto cuando es para los negocios y rojo o rosado cuando es por motivos de amor. Se le da coco para saber si quiere algo más y para definir el lugar donde recibirá la ofrenda.

Baño de Shangó para la salud y la suerte: cuatro tomates maduros, orégano de la tierra y caisimón, dos galones de agua, un frasco de agua de florida, canela en polvo y oñí. Triture las yerbas y los tomates en dos galones de agua como si estuviera haciendo un omiero de lavatorio. Agregue el frasco de agua de florida, la canela en polvo y una cucharada de oñí. Báñese normalmente y enjuáguese y luego aplíquese este baño; déjelo secar un rato y vuelva a enjuagarse con agua limpia. Séquese con un paño rojo y úntese el perfume en las articulaciones y el cuello. Luego continúe usando el perfume como esencia diaria. Este baño puede realizarse una vez cada semana. Dé coco y pregunte si le es conveniente los jueves o los domingos. Si no coge pregúntele por el día que usted presiente.