norbert elías - los procesos de formación del estado y de construcción de la nación

5/8/2018 Norbert Elas - Los procesos de formacin del Estado y de construccin de la nacin

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Losprocesos de formaci6n del Estadoy de construcci6n de la naci6n (1)Norbert Elias

Traducci6n de A rm ando M artinez G arnica

Uno de los mas raros aspec-tos del desarrollo de la seclolo-gla, en el lapso de su primer 5 1 -glo y medio de trabajos comodisciplina relativamente autono-ma, es su movimiento desde unaperspectiva de larga duracl6nhacia una de corto plazo, unasuerte de estrechamiento del In-teres de los soclcloqos a 8610

1. Esta ponencia fue presentada porNorbert Elias ante el Septimo Con-greso Mundial de Sociologfa que se rea--Iiz6 en Varna, entre el 14 y el 19 deseptiembre de 1970. EI texto original, enidioma Ingles, fue publicado por la Aso-ciaci6n Sociol6gica lnternaclonal en lasMemorias de dicho evento (Sofia, 1972,vol, III, pp. 274-185). Esta primera tra-ducci6n espanola fue realizada por Ar-mando Martfnez Garnica, gracias a lasgestiones realizadas por Vera Weiler pa-ra la adquisici6n del texto original.

las sociedades contemporaneas-y sobre todo a sus propiassocledades-. tal como estas semuestran en eI presente y aqul,y un retraimiento del lnteres porel problema del como y por quelas sociedades, a traves de losslglos, han devenido 10que son.Esareducci6n del enfoque ha en-contrado su mas contundenteexpresl6n en el camblo acaecl-do en el tlpo dominante de lateoria soclol6glca. 'Durante la mayor parte delslglo XIX. las teorias soclol6gi-cas mas representativas estu-vleron centradas en el desarro-llo social de larga duraci6n; encamblo las de la segunda mitaddel siglo XX -con excepci6nde algunas, entre elias la mla-han abandonado por complete el


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102concepto de desarrollo social.Es asl como esta noci6n ha de-saparecido, al menos por untiempo, de los llbros de textode la sociofogia. En contraparti-da, ef concepto de "sistema so-cial" se ha sltuado en el centrode fas teorlas soclol6gicas, altiempo que otros conceptos re-lacionados COn aquel, tales co-mo los de "estructura social"y "funci6n social", son conce-bidos de un modo que s610pue-den servir como herramientaste6rlcas para el estudio de unasociedad en un estadio determi-nado y en un tiempo dado, demodo que sus movimientos sonrepresentados en forma' deses-tructurada 0, en otros terminos,como camblos hist6ricos.La mutaci6n del Interes par Iadlnarnlca social de largo plazo

hacla uno por la estatlca socialde corto plaza se debe a mu-chas razones, las cuales no se-ran dlscutldas explfcltamente enesta ponencia (Z). Dado que elSeptima Congreso Mundial deSoclologia ha programado unamesa redonda sabre el tema tl-tulado "Teorfas Importantes deldesarrollo", qulzes estemos enpresencia de una sefial de cam-bia. En efecto, hay una serle deslgnos que Indican que el pro-

2. Elias se habra ocupado de esteasunto en la introducci6n a la se -gunda edici6n de su opus magnum, E Iproceso de la civillzaci6n (Bema y Mu-nich, 1969).

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blema del desarrollo social enla larga duraci6n -equivoca-mente Ilamado evoluciOn, dadoque el desarrollo social es unorden secuencial sui generis,sin relaci6n alguna con la se-cuencla biologica Ilamada evolu-ci6n- comienza a situarse nue-vamente en el centro de la pers-pectiva.No obstante, la reestructura-cl6n de la lmaqlnaclon soclol6-glca que se requiere para res-

tablecer, a un nuevo nivel delconocimiento, el belance entrelas aproximaclones estattca ydlnamlca dela teorfa social, enfavor de la ultima, es una tareadescomunal. Dlsponemos ahorade muchos mas datos que nun-ca sabre el desarrollo de lassociedades en le larga duraci6npara avanzar. La construcclon demodelos teorlcos integradoresquelogren aproximarse a todosellos no es una tarea facll, ade-mas que muchos conceptos co-rrientes, tales como los de "es-tructura" y "funci6n", significa-rian alga muy diferente de 10que hoy en d ra designan entrelos estructural - funcionalistas yen otras escuelas de la soctolo-gfa estatlca st son usados en elcontexto de una teorla soclolo-gica del desarrollo.A nivel empfrlco, se han in-crementado durante algLin tiem-palos estudios sabre el desa-rrollo de las sociedades, poriamenos sobre aquellas que sedenomlnan hoy sociedades "en


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desarrollo" 0 "subdesarroJladas".Pero el Interes que se ha pues-to en el desarrollo de las socle-dades "en desarrollo". en tantoproblema empfrlco de la soclo-' Iogia, practlcamente no ha ob-tenido, hasta ahara" una respues-ta a nivel te6rico. La raz6n deello es facil de ver: expreslo-nes tales como "sociedad en de-sarrollo", "subdesarrollada" indi-can un particular giro de la pers-pectiva de los representantes delas socledades ricas, pues es enlas sociedades mas desarrolla-das donde estos terrnlnos sonhabltuales. Puesto que su usosupone que las mlsmas socleda-des altamente industrializadasno se encuentran ya en desarro-Ho 0, para este fin, no son ya"subdesarrolladas", se concluyeentonces que el estadlo presen-te de elias debe ser ampllamen-te representado como carente defuturo, como la etapa final.La corriente restrlcci6n del

uso del termlno "en desarrollo"a los parses mas pobres sugiereque los sectores representatl-vos de las naclones mas rlcas,qulenes registran el desarrollos610 en otras, estan satlsfechosconslgo mlsmos. Excepto en unsenti do muy llmltado, no Ie aslg-nan valor alguno al desarrolloposterior de su propia sociedady, por tanto, su lnteres por sudesarrollo hasta su propio tlem-po tamblen se ha reducldo. Mien-tras pueden qulzas ver que eldesarrollo es, en los parses muy

103pobres, la columna vertebral queestructura su hlstorla, en el ca-so de los pafses ricos,las na -clones lndustrlallzadas del rnun-do, parecen registrar s610 unahistoria pero no un desarrollo;mas exactamente, no un desa-rrolle en proceso, de tal suerteque la "historia" parece ser 801a-mente una preocupaci6n rnarql-nal del soclolcqo.Entre las muchas razones que

explican en la sociologfa el cam-bio de las teorias del desarrollosocial en la larga duracl6n porlas teorias estatlcas de cortoplazo, la siguiente es svldente-mente una: las circunstancias ac-tuales de las sociedades "avan-zadas" son examinadas, en lasteorias sociol6gicas, como sifuesen un estadio final inmuta-ble, La perspectiva de corto pia-zo de muchas de las teorias so-ciol6gicas mas prestigiosas denuestro tiempo se manlfiesta enlas abstracciones similares a Ie-yes provenientes de aspectosseleccionados de las socledadescontemporaneas IIavanzadas",presentadas can la pretensi6nde ser aplicables a las socleda-des de todos los tiempos y lu-gares. Las teorlas sociol6glcasconstruidas alrededor de con-ceptos tales como "sistema so-cial" son un ejemplo de ella.Elias reducen los procesos decambia estructurado y direccio-nado de larga duraci6n, a losque puede aplicarse el conceptode desarrollo y de los cuales son


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104.ejernploe los procesos de indus-trializaci6n, burocratizaci6n, tec-nificaci6n y urbanizaci6n, e in-cluso los procesos de construe-ci6n del estado y de la naci6n, aun estado inm6vil como su con-die ion permanente, aun cuandoestos cambios son apenas percl-bldos como un flujo desestruc-turado, como "historia".Unas cuantas observaciones

preliminares pueden ayudar aaclarar las cartas del juego. Conel proposlto de contribuir a lamesa redonda sobre las "Teo-rfas importantes del desarrollo",comienzo delimitando el tern a dela dlscuslon: 0 se trata de lasteorias htstortcas. tal como fue-ron construidas por Toynbee 0Spengler, 0 de las teorfas socio-16gicas del desarrollo de largaduraci6n. Como dificilmente po-demos hoy dar por hecho que ladlstlnclon entre la aproxlmaclona los cam bios sociales comohistoria y la aproxlrnaclon a losmismos como desarrollo este su-ficientemente comprendida, plan-so que serla utll declarar expli-citamente, de entrada, mi com-promlso con la ultima aproxlma-cion. Puedo entonces contribuira las deliberaciones exponien-do, en la perspectiva de mi teo-rta de los procesos delarga du-raclon en la forrnaclon del esta-do, algunos de los problemasque se encuentran en la investi-qaclon de los procesos de cons-trucclon de la naclon, la ultimafase de una larga sucesi6n de

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procesos de formaclon del es-tado, por 10 menos en el desa-rrollo de las sociedades euro-peas.En sf mismos, este tema no

es ajeno a la transformaci6n deIa percepci6n personal que ocu-rre cuando se cambia un para-digma sociol6gico estatlco porotro paradigma del desarrollo.pues uno gana acceso a probl e-mas anteriormente soslayados.Exceptuando a Reinhard Bendix,pocos soololoqos han estudiadoel problema de la construccidnde [a nacton y ninguno, hastadonde conozco, ha estudiado losprocesos de formaclon del esta-do enla larga duraclon y su lm-portancia, ernpfrlca y te6rica,para los soclolouos. La informa-ci6n sobre este tipo de proce-sos se encuentra alrededor nues-tro, pero para poder integrarlaal propio tejido conceptual serequiere un tipo de paradigmateorlco que no se abstraiga delflujo temporal y reduzca, en lareftexlon, a segmentos estatlcos10 que cada uno observa comoun continuo movimiento.Muchos constructores de teo-

rias sociol6gicas conternpora-neas parecen creer que un tipode abstracclon model ado a ejem-plo de la flslca claslca -abs-tracciones en la forma de gene-ralizaciones similares a leyes,las cuales dejan por tuera de laabstracci6n todo 10 que aconte-ce en la secuencia temporal-es el autentico distintivo de


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una empresa cientifica. Quizasno ha sido establecido suficlen-temente que las abstraceionesutilizadas en las distintas cien-eias pueden varlar ampliamente.Algunas de las abstraceiones quese encuentran en los conceptosy teorias biol6gicas son muy dis-tintas de las generalizacionesen forma de leyes de la fisieaclaslca. Otras tnvolucran figura-clones espaciales y secuenciastemporales de larga duraci6n.Podemos entonces ver eIaramen-te que, a su modo, la elabora-cion de la teoria socloloqlca ten-dra que moverse en una similardirecci6n. La dificultad estribaen que el tipo de teo ria que sur-gira en eada caso no se corres-ponde con la imagen ideal deuna teoria que el mas eminentede los soctcloqos teorlcos denuestros dias pareee dar porestablecida, pese a que ella esun tipo de resaca ftlosoftca deltiempo de la ffsica claslca,Tomemos uno de los ejemplosmejor conocidos de una teorfasocloloqlca, esencla'mente esta-tlca, de nuestro tiempo: la teo-ria que intenta abordar los pro-blemas de Ia sociedad presen-tandola como un "sistema so-cial". Me complacs registrar queel mayor exponente de las teo-rias conternporaneas del sistema

social, Talcott Parsons, se en-cuentra entre nosotros. Soy uncritico del sistema intelectualque al ha constituido. Una mesaredonda, en el seno del Congre-

so Mundial de Sociologfa, es elsitio apropiado para la exposl-cion de algunas de las razonesde mi actitud critica. 5610 algu-nas, ya que mi tiempo es llrnl-tado y que me gusta combinarmis observaciones crfticas conalgunas sugerencias relativas alos aspectos positivos de unateorla socloloqlca del desarro-llo que puede, por sl misma, jus-tificar la critica. Por 1 0 dernas ,mi actitud crltlca hacla el sis-tema lntelectual de Parsons es-ta respaldada en el respeto quesiento hacia su persona. Unopuede estar en desacuerdo conai, pero no puede poner en du-da su franqueza inteleetual y suintegridad, como tampoco la am-plla capacidad de su poder desintesis. una de las mayores cua-lidades de este eminente cons-tructor de teorfa. Sin embargo.no puedo convencerme que estedon 1 0 hava utilizado en una jus-ta causa. Aun para proposttosanalfticos, el supuesto de quelas "acetones" forman una espe-ole de atomos de las socieda-des humanas me parece una deaquellas generalizaclones for-males esterlles, demasiado dis-tantes de las tareas de la lnves-tigaci6n para que puedan serconflrmadas, 0 rechazadas. me-diante referenclas a la informa-ci6n observable. lPor qua hernosde situar las "acetones" en elcentro de una teorta de fa so-cledad, en lugar de las personasque actdan?


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106Engeneral, las sociedades sonredes de seres humanos, en vezde combinaciones de acciones

incorp6reas. No es facH apre-clar como el atomlsmo de talteoria de accl6n sociol6gica seacapaz de oorrer aparejada bajola misma yunta, como csballodel mismo establo, con una teo-ria de sistema ablertamente noatomfstlca, seglin la cual cadacosa en una sociedad es una par-te dependiente de un todo alta-mente Integrado y normalmenteen buen funcionamlento. Tam-bien el modelo de la sociedadcomo un "sistema social", unamaquinarla social normalmentebien aceltada donde todas laspartes engranan armonlosarnen-te, se encuentra alejado de ladura y desordenada vida socialde los hombres, tal como unorealmente la observa.Es indudablemente dificil apll-car dicha teorla alas grandessociedades del pasado, pese aque dlspusieron de una mayorintegraci6n entre sus regiones,sus estratos socia1es e lnclusode sus inmigrantes, que la rna-yorfa de nuestros contempora-neos estados naclonales de Eu-ropa. La teoria de Parsons repre-senta a la socIedad como un sis-tema altamente Integrado, de talsuerte que parece pretender parasf el estatus de una teorfa soclo-16glcageneral, aplicable a todaslas sociedades humanas. No pue-de uno evitar preguntarse sl aca-so no se trata de una generali-

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zaci6n, Ideallsta y superamplia-da, abstraida de los estados na-cionales modernos y proyecta-da a todo el mundo. I.Puede elmodelo parsoniano de "sistemasocial", con su unidad supuesta-mente integradora de valores yde cultura, efectivamente apll-carse a los estados esclavistasde la antlqliedad, donde las dis-tancias soclales, las desigualda-des entre los estratos sociatesy las diferencias en su culturay en sus valores eran con fre-cuencla mucho mayores, y la In-tegraci6n regional frecuentemen-te mucho menor, que en nues-tros contemporaneos estados na-clonales industrializados? I.Pue-de aplicarse, por elemplo, a losimperios asirlo 0 romano? 1.0 alos estados confederados de losslglos XVIII y XIX, con su mast-va poblaci6n esclava? 1.0 aliaRusia dlnastlca, con sus jerar-qufas terratenientes priviJegia-das, funcionarios estatales y rna-sas de slervos rurales?Si uno mira alrededor, en laIiteratura soclol6glca de nues-tro tlempo, facilmente puedecomprobar que los estados na-clonales, un tipo especiflco deformaci6n social, no tiene lugaren el campo de Investlgaci6n delos soclcloqos, Se requlere al-glin tlernpo para descubrlr quelos estados nacionales hacen suaparlci6n, como t6pico de la so-ciologfa contemporanea, bajo undisfraz caracterfstlco. Las refe-rencias a ellos se encuentran


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encubiertas por un tipo sspecf-fico de abstracclon. Se ocultanbajo conceptos tales como "eltodo social" 0 "sociedad total" ysobre todo, bajo "el sistema so-cial". Aunque estos conceptospueden ser aplicados a otras for-maciones sociales relativamentealtamente Integradas, tales co-mo las trlbus, la mayor parte de1 0 que se dice sobre la socledadcomo un "todo", 0 como un "sis-tema social", en las teorias so-clol6gicas, tal como la de Par-sons, ha sido seleccionado, abs-trafdo y destilado de las socie-dades mas altas y estrechamenteIntegradas de nuestro propiotiempo, los estados nacionales.Puesto que los problemas delos estados nacionales constitu-yen el toptco principal de micontribuci6n a esta discusi6n,

pienso que podrla ser utH Indi-car la relaci6n que existe entreestos problemas y las mas des-tacadas teorias contemporansasde sistema. Estas tienen un ca-racter meramente descrlptlvo,frecuentemente con matlces te-leol6gicos. En el modelo de Par-sons, la conservacl6n de unsistema social unificado, equili-brado y en buen funclonamlen-to, frecuentemente aparece co-mo el prop6sito y la meta haclala cual se dlrigen todos loseventos partfclpes. Por ejemplo,uno de tantos la descripcl6n delpoder como "una facilidad pa-ra la elecuclon de una funci6n,en el Interior de la sociedad y en

107beneficio de eIJa, como un sis-tema". Frases como esta mues-tran con claridad el modo comof a abstracci6n es puesta al ser-vlclo de un ideal especifico.Como en muchos otros casas.tlpos Ideales como el anterior,abstracclones meramente des-criptlvas, slmflares a leyes, slr-ven -sin duda no dellberada-mente en este caso- como dls-fraces para los valores subjeti-vos. La teleologia slrve como un

sustituto dela expllcaclon. SIuno se propone aterrizar el con-cepto de "sistema", si uno pre-gunta como y por que los proce-sos integradores de larga dura-ci6n, ejemplificados par los pro-cesos de formaclon del estadoy de construcci6n de la nacl6n,realmente ocurrieron y ocurren,puede uno preparar el terrenopara la aparicl6n de un modelesociol6gico explicatlvo. Uno dl-rige su atenclon al problema delpar que, durante el transcursodel tiempo, "sistemas" relativa-mente grandes lIegaron a S8r ylIegan a Ber en estos casos masaltamente Integrados, y sus "par-tes" funcionalmente mas interde-pendientes.Sin embargo, esta clase depreguntas apenas puede serplanteada, fortalecida y cobrarImportancia cuando uno tiene asu dlsposlcton un conocimientode largo plaza suficientementevivido y amplio, que nos perml-te mirar retrospectivamente a 1 0largo de los siglos y percibir


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1 08la continuidad del desarrollo delas sociedades que condujo, pon-gamos, desde la multitud de es-tados dtnasticos de los slglosXI y XII, relativamente pequefiosy escasamente integrados. porel camino de un gran nnmero deesfuerzos de integraci6n y desin-tegraci6n, gradual mente. haclaunidades sociales mas grandes.mas densamente pobladas ymas estrechamente Integradas.en forma de estados dtnastlcosmayores. y luego alas extensassocledades mas altamente inte-gradas e interdependientes, has-ta ahora, los estados nacionalesindustrializados. A menos queuno pueda percibir este procesode larqa duraclon, no es posi-ble lJegar a darse cuenta delproblema. lComo puede expll-carse que un desarrollo de lassociedades se prolongara, eneste caso, por siglos, a travesde tantas escisiones y fuslones.de tantos esfuerzos de integra-cion y desintegraci6n. en dlree-ci6n hacia la formaci6n de so-cledades mas grandes y masestrechamente unidas? lC6mopuede uno explicar el hecho deque, por siglos. este earnblo hu-biese tenido una direcci6n espe-clftca aunque no hubiese sldoplaneada? lAcaso hubo alguienall! para planearlo, y para ejecu-tar dicho plan? He dado unarespuesta parcial a este proble-ma en otro lugar (8). Asf que.3. Cfr. Norbert Elias: EI proceso de lacivilizaci6n, ob. cit.


como una contrlbucton a nues-tro problema de las teorlas so-ciol6gicas del desarrollo en lalarga duracton, me concentrateen el examen de unos cuantosproblemas de la ultima fase deeste proceso. en los procesosde Ia construcclon de la nacron.Ignorando los procesos de in-

teqraclon y deslnteqracidn delarga duraci6n como toplcos,teortcos y empfricos. de la in-vestigaci6n socloloqtca, los so-ci610gos han sumergldo su dis-clplina en un bien conocido dl-lema. La ornlslon ha cristaliza-do su division en dos escuelasdiametralmente opuestas: unade elias sltuala colaboraci6n. lalnteqraclon funcional y la inter-dependencia en el centro de sumodelo de sociedad; la otra, encamblo, la tension. la divisiony el conflicto. Cualesquiera quesean las razones principal men-te ideol6gicas para esta dlvl-si6n. una investigaci6n de largaduraci6n sobre los procesos deformaclon del estado y de cons-trucci6n de la naci6n puede rnos-trar que cada esfuerzo hacla unamayor interdependencia. haciauna inteqraci6n mas estrecha delos grupos humanos previamen-te independientes. 0 menos de-pendientes. 0 menos recfproca-mente dependientes, atraviesapor una serie de conflictos ytensiones de mteqraclon espe-cfficas. de equilibrio de luchasde poder que no SOn accidenta-les sino concomitantemente es-


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tructurales de estos esfuerzoshacia una mayor interdependen-cia funcional de las "partes" den-tro de un "todo",Si dos grupos se hacen mas,o mas reciprocamente, interde-pendientes de 10 que eran ante-riormente, cada uno de ellos ten-dra razones para temer ser do-rnlnado, e incluso aniquilado,por el otro. Despues de muchaspruebas de reslstencla, la luchapuede resultar en una fusion.

Puede resultar en una unldad so-cial dominada por un grupo, aun-que este compuesta por ambos.Puede tarnblen resultar en lacompleta desaparici6n de uno deellos en la nueva unidad queemerge de su lucha, Existenrnuchas otras posibilidades. Lacomplejidad de estas integracio-nes no nos interesa por ahora.Basta senalar que cada movl-miento hacia una mayor interde-pendencia funcional entre gru-pos humanos engendra tensio-nes estructurales, confllctos yluchas, que pueden 0 no perrna-necer inmanejables.Los procesos de construcclonde la naclon muestran esto conclaridad. Dos tipos principales

de procesos de integraci6n so-bresalen en su curso, cada unocon sus luchas de integraci6nespecificas: los procesos de in-tegraci6n territorial 0 regional,y los procesos de integraci6nde los estratos sociales. Aunquepodarnos distinguirlos, ambos seencuentran estructuralmente co-

109nectados. Por 1 0 tanto, en el ana-lisis de algunos de sus aspec-tos, hay que moverse de uno alotro, Una de las prlmeras y es-casas personas que han pregun-tado directamente y sin rodeos"lque es una naci6n?", fue elgran sabio frances Ernest Renan(1823-1892). Algunas de las ob-servaciones y reflexiones con-tenidas en su conferencia LQueas una nacion? (.) son aqul deimportancia. El vio con gran cla-rldad, por ejemplo, un hecho quehoy en d fa es frecuentementeencubierto u olvidado: que lasnaciones son alga bastante nue-vo en la historia (5).Las ideologias nacionalesusualmente representan a la na-cion como algo muy anti guo,casi eterno e inmortal. Realmen-te, tas sociedades estado s610

asumieron en Europa el caracterde estados nacionales, en ter-minos generales, despues de lasegunda mitad del siglo XVIII.Renan serialo que ninguna delas grandes potencias del mun-do anti guo tuvo el caracter denaci6n. Aun mas, constato quenunca existieron ciudadanos enla China mHenaria. Incluso pudohaber registrado que en los tiem-pos posteriores las personas fue-4. Ernest Renan: QU'est-ce qu'une na-

tionl Paris: Calrnann-Levy, 1882.Existe versi6n espanola: iQue es una na-ci6n? Madrid: Alianza, 1987.5. Cfr Ernest Renan, ob. cit., p. 2(p. 61 en la traducci6n espanola deAlianza Editorial).


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110ron tratadas, y generalmente sereconocieron a sf mlsmas, comosujetas a princlpes. -en vez deciudadanos de una naclon, EIpro-pia terrnlno "ciudadano", duran-te un tiempo, tuvo un sesgo deoposici6n, si no uno revolucio-nario. Los estados alcanzaronlas caracteristicas de estados na-cionales, en otras palabras, enrelaci6n can los cambios espe-cfficos acaecidos en la distrlbu-cion del poder dentro de unasociedad estado. Estos fueron,de una parte, un cambio en ladlstrlbuclon del poder entre losestratos sociales, asf como enla propla naturaleza de la estra-tlflcaclon social. De la otra, uncambio en la distribuci6n del po-der entre los gobiernos y losgobernados.EI cambio en la naturaleza de

la estratificaci6n usualmente esconceptualizado como un cambiodesde una estratificaci6n defini-da en termlnos de estados dife-rentes, cada uno de ellos canprivilegios e inhabilidades legal-mente establecidos, hacla unaestratlflcacton ba]o la forma declases sociales, cuyos miembroseran Iguales ante la legislaci6nestatal y desiguales s610 socialy economtcamente. Esta transl-cion, tal como los procesos deconstrucci6n de la naclon en sfmismos, fue mucho mas gradualde 10que corrientemente se ve.Los grupos privilegiados de no-bles terratenientes que conta-ban con un dominio fuertemente


monopollstlco sobre las poslclo-nes de mando de las fuerzas ml-Iitares de sus parses. la dlplo-macia, los departamentos delservicio civil y de asuntos exte-riores, retuvleron en la mayorparte de los parses europeos sucaracter distintivo de poderosoestrata social sui generis, comola clase alta europea, hasta laPrimera Guerra Mundial. peseal creciente poder de los dis-tintos sectores de las clasesmedias. La ecuaci6n del podercambi6 lentamente, durante elslglo XIX, en favor de estas ul-tlmas. Pero las anteriores, laaristocracia europea y sus gru-pas afines, se vincularon y dis-tinguieron de los otros grupospor una tradici6n espectftca, unacultura de clase propia, reteni-da hasta 1918 y en algunos par-ses, sobre todo Ing'aterra, du-rante mucho mas tlempo, no sola-mente su posici6n como el gru-po de mas alto estrato, sino ade-mas un especial acceso a unaposici6n privilegiada dentro delestablecimiento del pais que lesaseguraba al menos un minimode sU anterior exceso de poderen relaci6n con las clases me-dia y baja.Es uti I recordar el notable pa-pel que los sectores represen-tativos de las tradlcionales cla-ses altas europeas continuaronjugando en los asuntos de lassociedades europeas, al menoshasta la Primera Guerra Mun-dial, st se qulere entender la


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gradualidad con la cual los es-tados dlnastlcos se transforma-ron en estados nacionales. Sl-guiendo a Marx, y tal vez mal-interpretando un poco su mode-1 0 de desarrollo de las socie-dades europeas, muchas perso-nas tlenen hoy en dla una ima-gen demasiado simplificada delcambia ocurrido en la estratifi-caclon de las sociedades euro-peas, el cual desempefio un pa-pel im.portante en el trans ito delos estados dtnastlcos a esta-dos nacionales. Conforme a esaimagen, la revoluclon francesarepresenta una ruptura absolutaentre un orden en el cual 1 0 queMarx llarno "clases feudales"(prlncipes, terratenientes arlsto-cratas y grupos relaclonadoalformaba la "clase dominante" (8)de la sociedad, y un orden so-cial en el cual la burguesfa que-bro el poder de las "clases feu-dales" y torno su lugar como laclase dominante de la sociedad.En realidad, los principes y gru-pos rurales anstocratas de unaclase u otra contlnuaron desem-

6. Marx no diferenci6 claramente losprimeros tlpos de nobles medieva-les, aquellos que 5610 disponian de es-casos 0 nulos ingresos monetarios, deltipo dominante del siglo XVIII: la aris-tocracia cortesana que vivia en gran me-dida de un ingreso moneta rio. L1amaraambos tipos "feudales" es err6neo. EnLa soc ie dad c or te sana (1969) he mostra-doalgunas de esas diferencias y algu-nas de las razones por las cuales unanobleza feudal tardia se transform6 enuna aristocracia centrada en la Corte.

111pefiando un papel muy decisivo,como especifico polo de poder,en la mayor parte de las socie-dades europeas posteriores a laRevoluci6n Francesa.Durante la mayor parte delsiglo XIX, el eje principal de losconflictos y tensiones socialesde las sociedades europeas nofue el enfrentamiento entre lostrabajadores ylos capitalistas.EI siglo XIX fue, permanente-mente, un perfodo de luchas trl-partitas entre propietarios arls-tocratas y elites cortesanas, gru-pos de clase media industrialen ascenso y, detras de ellos,las clases trabajadoras Industria-les emergentes. La expresi6n"clases medias", como termlnoclasificatorlo aplicado a las cla-ses empresartales, poco apro-piado en nuestros dias, se refie-

re a su posicion en esta luchatripartita de clases. Mientrasque las clases trabajadoras in-dustriales se mantuvieron duran-te la primera parte del siglo XIXe incluso mas alia, organizadassin mucha efectividad, a duraspenas alfabetas y muy pobres,la lueha de las clases urbanasempresariales por una mayorparticipaci6n en los asuntos delestado y contra la dominaci6nde las tradicionales clases al-tas fue durante un tiempo masintensa, al nlvel del estado, quela que Iibraron algunos sectoresde trabajadores y empresarlos,la cual aun permanecfa normal-mente latente y, sl aeaso lIega-


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112ba a manifestarse ablertamente,1 0 hacla de una forma arnplla-mente esporadlca, difusa e in-termitente, a duras penas libra-da con algun grado de efectlvl-dad mas alia del nivel local an-tes de la segunda mitad del sl-glo XIX. EI poder, en lento ere-cimiento, de las clases trabaja-doras industriales orqanfzadas.contrlbuyo decisivamente alacercamiento entre los lntere-ses de Ios industriales y de losterratenientes. La reducci6n dela tensi6n entre estos, que fre-cuentemente Uev6 a su compro-mlso y allanza en una lucha co-rmin contra los representantesde la clase trabajadora, asumi6formas distintas en las diferen-tes sociedades, pero corriente-mente fue el preludlo del ascen-so de los hombres que repre-sentaban las tradiciones de lasclases medias industriales urba-nas a las posiciones de dlrec-cion del estado y, por otra par-te, del retroceso gradual en esasposiciones de los miembros delas antiguas clases altas, qule-nes apenas preservaron un rni-nimo de sus tradiciones e idea-les. ASI las anteriores estuvie-sen representadas por las figu-ras de Gladstone, Thiers 0 Stre-semann, su advenimiento fue unsintoma del ascenso de secto-res de las anteriores clases me-dias, de las clases industrialesurbanas, hacla la posici6n degrupo central del estado. Lasclases medias, podria decirse.hablan logrado integrarse al es-

HISTORIAY SOCIEDAD 5

tado, 0, como sefialo Parsons,hablan stdo "lncluldos". Pero es-ta conceptualtzaclon no es com-pletamente adecuada, pues dala impresi6n de que un nuevoestrato ha sido "lncluldo" en un"sistema social" que, como tal,se ha mantenido sin camblos ('1).

7. Parsons reconoce muy claramenteque un "sistema" puede se dlvldldcen clases superiores e inferiores. De estemodo, puede verse que "sistema" es unareducci6n sofisticada para un pais como

Francia, Inglaterra 0 los Estados Unidos.Explicitamente, menciona casas en loscuales una c1ase alta monopoliza el sta-tus de afiliaci6n efectiva, tratando a lac1ase baja como una ciudadanfa de se-gunda clase, Evidentemente, se horrorl-zaba a! contemplar la severidad de lasluchas y conflictos que constituyen unaparte integral del ascenso de los ciuda-danos de segunda clase, de los cuales esun buen ejemplo la lucha entre las dasesmedias industriales en ascenso contra lasclases altas aristocraticas. Asf es comoParsons formula su preocupaci6n (enPerspectivas evolutivas y compara ti vas delas sociededes, Prentice Ha'l, 1966, p. 22):"Por estas razones, los procesos de dife-renciaci6n y ascenso pueden requerir(subrayado rnlo) la inclusion de un sta-tus de afiliaci6n completa en el sistemacornunitarlo general, significativo para losgrupos anteriormente exclufdos que handesarrollado capacidades legftimas para'contribuir' al funcionamiento del siste-rna",Una vez mas la perspectiva teleol6gicade Parsons se impone. EI"funcionamlen-to del sistema" es el fin. Si grupos ante-

riormente exclufdos han desarrollado "ca-pacidades legftimas" que les permitencontribuir al funcionamiento del sistemaentonces no deberfan ser exclufdos mas.Como puede verse, el "sistema" no cam-bia. Los grupos recientemente admitidosunicamente encajan en el. Ninguna expli-


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Efectivamente, el ascenso delos representantes de ias clasesempresariales a una posici6n demayor poder, dentro de la so-ciedad estado, fue un sintomade una transformaci6n acaecldaen el "sistema" mismo. ,Este as-censo marca el punta de no re-torno en el que los vestigiosdel regimen arlstocratlco- dlnas-tico de la sociedad se desvane-cen lentamente en el anteceden-te, y en el que el estado ingre-s6 en su prlmera fase como es-tado nacional desarrollado: laprimera fase, porque ampliosestratos de 'Ia naci6n permane-cieron aun extensamente exclul-dos y marginados. AI hablar de"dos naciones". Disraeli encon-tr6 una forma expresiva paranombrar esa fase. Es posibleque no sea extraiia a la figura-ci6n de la tensi6n tripartita dela socledad, durante la segundaparte del siglo XIX, que en Ale-mania, al igual que en Inglate-rra, los dirigentes de los gruposconservadores comprometidoscan los intereses rurales, Bis-marck y Dlsraell, cada uno a sumodo, tratase de mejorar lascondiciones de las clases tra-bajadoras can la esperanza, por

caci6n es ofrecida en 1 0 que respecta alas personas que juzgan si un grupo ex-cluido ha desarrollado capacidades legfti-mas para poder encajar en el sistema exis-tente. Uno no sabe que admirar mas: sila sinceridad y buena voluntad manifesta-da, 0 la ingenuidad desarmante e incom-prensiva que aqui se encuentra.

113un lade, de ganarselas comoaliadas en sulucha contra lospartidos mas representativos delos grupos urbanos manufactu-reros y liberales y, del otro, canel fin de oponerse al crecimien-to de los partidos de la claseobrera.Puede entonces afirmarse quela industrializaci6n y la cons-trucci6n de la naclon son dosaspectos de la misma transfer-

maci6n de las sociedades. Pe-ro no es posible indicar con cla-ridad esta conexi6n si no se re-lacionan estos dos procesos conun cambio global en la distribu-ci6n de las oportunidades de po-der en la sociedad. Hay una ma-nera simple de mostrar este cam-bio, sl bien se requeriria una ma-yor elaboraci6n para hacerlo deforma convincente. Los estadosdlnastlcos son caracterlstlcosde una etapa del desarrollo delas sociedades en la que los re-cursos del poder son dlstrlbul-dos muy desigualmente entrelas elites gobernantes y 'Ia ma-sa de la poblaclon, En muchoscasos, el 90% a mas de la po-blaci6n de un pais carece de losmedias institucionales y de loscanales regulares de comunica-cion que Ie perrnltlrfa influir so-bre las decisiones que afectansu existencia, tomadas por losgrupos que tlenen acceso a .lasposiciones de mando del estado.Incluso el acceso a las asam-bleas del estado, con muy pocasexcepclones, en la practlca s610


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114se abre a pequenos grupos dela elite. En muchos casas prln-clpes y gobernantes son capa-ces de gobernar durante largosperfodos sin permitir a las asam-bleas de estado reunirse. Nadaes mas caracteristico del cam-bio en la distribuci6n del poder,indicada por la transformaci6nde los estados dlnastlcos en es-tados nacionales que la erner-gencia de partidos de masas co-mo instituci6n regular de los es-tados nacionales. EI ampllo des-contento con los partidos demasas que no aseguran una au-tenttca partlclpaclon de los gru-pas que ellos nominalmente re-presentan oculta el problema so-ciol6gico baslco al cual uno seenfrenta: la gran regularidad conque los partidos de masas seforman, como instituciones per-manentes, en todas las socie-dades avanzadas y aun en lasmenos avanzadas de nuestrotiempo.Regularmente. uno deja depreguntar: lcuales desarrollosy cuales estructuras sociales ex-plican la emergencia de los par-tidos politicos nacionales y losgobiernos de partido como ins-

tituciones regulares durante lossiglos XIX y XX? Ineficaces 0no. los partidos naclonales y losgobiernos de partido son expre-siones de una etapa del desarro-llo de las sociedades en la quela integraci6n de la poblacl6nestatal se ha hecho mas estre-chat en la que ya no es posible


tomar decisiones que afectenpar complete las vidas de la po-blaci6n de un pars sin canalesregulares de comunicaci6n en-tre quienes toman las decisio-nes y quienes se ven afectadospar elias. EI balance de poderentre los grupos con acceso auna posicion que les permite ta-mar decisiones sabre las vidasde otros y los grupos can esca-so 0 nu1 0 acceso a estas deci-siones ya no es tan desigual co-mo '1 0 fue en las etapas mas tern-pranas del desarrollo social. Lareciprocidad de la dependenciade los gobiernos respecto deaqueJlos a quienes gobiernan, yde los gobernados respecto desus gobiernos, aunque todaviaes muy desigual ha lIegado aser menos de 1 0 que solia serantes. La naturaleza de los par-tldos en los diferentes paiseses un indicador bastante exactode este balance de poder y desus fluctuaciones.La relacton entre la lnstltu-ci6n social de los partidos y lasparticularidades de los estadosnacionales es algo evidente. Lassociedades incorporan las ca-racteristicas de las naclones sl

la interdependencia funcional en-tre sus reglones y entre suses-tratos sociales, asl como sus nl-veles jerarqulcos de autoridad ysubordinaci6n devienen 1 0 sufl-clenternente grandes y 1 0 sufi-cientemente recfprocos comopara que ninguno de ellos seacapaz de subestimar por com-


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pleto 1 0 que lo s otros plensan,sienten 0 desean. EI gobiernollderado por un partido y la adop-cl6n eonjunta, de los gobiernosy de los partidos. de dlsenoeideol6gicos destlnados a con-veneer a la masa de la poblaci6nde que conslderan el melora-miento de sus condiciones y elavance del bienestar de la na-ci6n como su tarea central, sonexpresiones del pronunciadocambio efectuado en el balancede poder entre el gobierno ylos gobernados. del cual he ha-blado. No cabe duda que aun losmas avanzados de nuestros con-ternporaneos estados naclonalesindustrializados se encuentrantodavfa en las primeras etapasde estos procesos de construe-ci6n de la naci6n. No he podidoexplicar aqui las razones por lascuales han sido puestos en mar-chao ni tampoco tratare de pre-declr el futuro diciendo en cualdirecci6n tienen que marchar eir mas lejos. Pero qulzae he cla-rlficado algunas de las relacio-nes entre eventos que frecuen-temente son clasificados bajodistintos encabezamientos enlos medios academlcoa. Los par-tidos politicos, e incluso las na-clones. pueden dejar de ser ob-jetodel lnteres de los 80c1610-gos, las clases soclales, no sermas del de los polit6logos; mien-tras que la industrializacl6n pue-de ser vista como campo reser-vado a los economistas y, losestados dtnastlcos, al historia-doraSin embargo, las relaciones

115estan am dlsponibles para quetodos ellos puedan verlas, siem-pre que tengan una perspectivade larga duraci6n y centren suatenci6n en las cambiantes re-laclones de poder entre los dis-tlntos grupos soclales.Por ahora simpJemente he tra-tado de poner en perspectiva elproblema de la construcci6n de

la naci6n. Las autolmaqenes delas naclonea, por razones acer-ca de las cuales he de decir mas.regularmente dan a los miem-bros de cada una de elias laimpresi6n de que su naci6n haexlstido inalterable, en 10 esen-cial, por muchos slglos 0 acasodesde siempre. Lo que hoy endfa es enseriado como historiadel pars de cada uno de noso-tros, a despecho de los muchoscambios que hayan ocurrido en-tre los habitantes de tal pais atraves de los siglos, puede re-gularmente acomodarse a los re-querimlentos de una autoimagennacional que representa a Ia na-ci6n de cada uno de nosotroscomo inalterable, en sus carac-teristicas baslcas, a traves delos tlernpos. Las socledades es-tatales contemporaneas, que aunse encuentran en las primerasatapas de los procesos de cons-trucci6n de naci6n y de forma-ci6n de estado, ya estan en mu-chos casos comenzando a cons-trulr una Imagen similar de sfmismas: una imagen del pasadonacional can la cual las genera-clones presentes puedan ldentl-


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116ficarse, proporclonandcles unsentimiento de orgullo en su pro-pia identidad nacional, y la cualpuede servir como catalizadoren un proceso de construcclonde naclon que normalmente in-cluye la lnteqracton de gruposregionales dispares y de estra-tos sociales diferentes, alrede-dor de ciertos grupos domlnan-tes centrales.Hay mucho que decir sobre el

estudio objetivo de estos pro-cesos. Pero para hacerlo hay queser capaz de distinguir entre lasideologias nacionales que pre-sentan a la naci6n como un sis-tema social perfectamente inte-grado e inalterable, dotado dealto valor. y los procesos de in-teqraclon y deslnteqraclon ob-servables y de larga duraci6n,en el transcurso de los cualeslas tensiones y luchas entre lastendencias centrifugas y centrl-petas, y entre los grupos esta-blecidos y los marginados, aeon-tecen como un rasgo caracterls-tico regular de la estructura deestos desarrollos. Hay quesercapaz de representar las nacio-nes como un tipo especifico delnteqraclon que requiere ser ex-plicado, y que no puede ser ex~plicado a menos que sean reco-nocidos los procesos de forma-ci6n del estado y, como una desus etapas, los procesos de cons-trucclon de la naclon, como pro-cesos de larga duraci6n en lasecuencia temporal, y consIde-rar que el proceso de construe-


Cion de la naci6n, lejos de re-presentar el ultimo y definitivomomento de un proceso de for-maci6n del estado, puede sercontinuado por integraciones enun nivel postnacional superior,del cual uno puede ver los co-mienzos, por ejemplo, en Euro-pa Occidental y Oriental, entrelos grupos de estados arabes yen algunos de los estados afrl-canas.

Sociol6gicamente hablando, laexploraclon cientffica de estosesfuerzos contemporaneos delnteqraclon y desintegraci6npuede arrojarluz sobre los es-fuerzos anteriores de este tlpo.realizados sobre los procesostempranos de formaci6n dees-tados, y viceversa. EI supuestode que los problemas sociol6gi-cos de nuestro tiempo y los delas epocas pasadas tienen, 0pueden ser investigados, paradecirlo de alguna forma, en com-partimentos separados y por dis-ciplinas acadernlcas distintas.es muy equivocado. De hecho,el estudio de los procesos so-ciales de larga duraclon y, es-pecialmente, de los procesos delnteqraclcn y deslnteqraclcn,muestra claramente la necesi-dad de contar con un marco teo-rico unificado e integrador paralas ciencias sociales. Sus actua-les fronteras y sus incesantesluchas por status, junto con losefectos de estas luchas sobrelas teorfas y las convencionesde la investigaci6n, han impedi-


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do crecientemente su avancehacia una mayor certidumbre yadecuaci6n del conocimientoque elias producen en su cam-po especializado de la sociedadhumana. Estos Iimites y luchasrefuerzan la tendencia hacia las

117perspectIvas de corto plazo quepredominan en la mayorla deesas dtsclplinas. Tarde 0 tem-prano, sera necesarlo empren-der un reexamen de sus relaclo-nes tradicionales.

norbert elías - los procesos de formación del estado y de construcción de la nación

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