moonrise kingdom - monografia
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Trabajo Práctico de Visión I Prof. Oscar Carballo
Análisis del Film
Un Reino Bajo la Luna (Moonrise Kingdom, 2012)
de Wes Anderson
Francisco Iurcovich (fotografía)
ENERC 2012
Un Reino Bajo la Luna (Moonrise Kingdom, 2012) de Wes Anderson.
Un Reino Bajo la Luna, la última obra cinematográfica del director norteamericano Wes Anderson, cuenta la historia de una pareja de niños (una joven depresiva y un inadaptado boyscout) que se escapan de sus respectivos hogares para emprender una aventura juntos en la través de isla en la que habitan. La película propone una reflexión sobre los valores de la infancia y preadolescencia, regida por la ingenuidad y el deseo de aventura y descubrimiento, en contraste con un mundo adulto desencantado y aburrido. La película plantea un uso meticuloso de paleta de colores, texturas, encuadres y movimientos de cámara, que nos sumerge en un universo casi de fantasía, la nostalgia de la infancia en un pasado donde cada elemento parece estar allí por una razón. Rodada en super 16mm, remite en su estética a las películas de los sesenta, época en la que está situada la historia. Ya desde la tipografía de los créditos, una cuidadosa cursiva en colores pasteles (amarillos, rosas, celestes, rojos, lilas) nos remite a una estética vintage de los sesenta. Durante el comienzo de la película, se escucha el sonido de un disco de vinilo, que uno de los niños reproduce en un reproductor portátil color celeste, en el cual se nos introducen uno a uno de forma pedagógica, los distintas familias de instrumentos de una orquestación de Benjamin Britten sobre una composición de Purcell. Mientras se escucha la música (que pasa varias veces de ser diegética a extradiegética), conocemos a través de un gran travelling lateral y
certeros paneos, el espacio de la casa de Suzy, grandes espacios simétricos, siempre encuadrados de forma central con un lente gran angular. Con el comienzo de la música, en tono dramático, nos acercamos en un primer plano a Suzy, que mira a por de unos largavistas a través de la ventana, y en
un gran zoom out, nos alejamos desde la ventana hasta un plano general de la casa en la isla. Otro traveling lateral nos presentarán a los padres de Suzy (Bill Murray y Frances McDormand), cada uno sumido en su actividad cotidiana (pintarse las uñas, leer el diario), separados por una pared que nos
adelanta su enfriamiento, mientras la cámara transita prolijamente en travellings laterales y verticales y hacia atrás. por distintos espacios de la casa, llena de objetos de la época cuidadosamente dispuestos, y en una tonalidad de colores pasteles amarronados, terminando siempre en Suzy que con un vestido a cuadritos rojo mira a través de sus largavistas, buscando en la pradera de la isla. Mientras vemos la vida de los integrantes de la casa (los tres hermanos de Suzy, sus padres), el vinilo nos sigue explicando la composición de los distintos elementos de la orquesta. En el exterior de la casa, a donde Suzy sale a recoger del buzón una carta desprolijamente escrita con letra infantil, los colores son más saturados, predominando el verde de la naturaleza en contraste con su vestido rojo. En los duros encuadres centrales, llama la atención una mirada a cámara bien fija de Suzy, acentuada por el dramatismo de la orquesta. La joven protagonista parece cuestionar al espectador con la mirada, poniéndolo en una situación incómoda por estar observando una acción que realiza en aparente secreto.
Terminada la introducción del espacio de la casa de Suzy, un curioso personaje de barba blanca vestido con sobretodo rojo y gorro verde que remite la obra anterior de Anderson, “Vida Acuática”, desde el centro inferior del encuadre, presenta ante el espectador mirando fijamente a la cámara, con un tono documental, las características de la isla de New Pensance, en la que se encuentran y el año en el que transcurre la historia. Además, predice una “violenta y bien documentada tormenta” que sucederá en tres días. Este peculiar narrador que parece encontrarse por fuera del relato, casi como “el coro” griego, nos adelanta con mirada dramática un suceso que se desencadenará al final de la película.
La historia pasa ahora al segundo espacio / punto de partida: el campamento de los Boy Scouts, introducido por el sonido de un clarín tocado por uno de los niños. Al igual que la casa de Suzy, se presenta el campamento con un largo travelling lateral y paneos, en donde siguiendo al
jefe Boy Scout, iremos conociendo cada uno de los integrantes del campamento acompañado por el sonido de redoblantes. Aquí los colores que predominan son el verde para el fondo, y el marrón y amarillo para las vestimentas de los scouts. Casi en tono de parodia, todo tiene un exceso de artificiosidad y exageración, con algunos planos breves en tono de humor, como el detalle de un nudo mal hecho (exageradamente mal hecho), o la casa del árbol demasiado alta (altísima).
El recorrido termina con una gran mesa alargada con el jefe Scout sentado en el centro y los niños a los costados, y a través de un travelling out, descubrimos la ausencia del que será el protagonista de la historia: Sam Shakusky. Un modo peculiar de presentar un personaje: a través de su
ausencia. Sam se escapó del campamento, dejando una breve nota de despedida en una carpa cuyo ordenado interior parece demasiado grande para lo que es desde afuera. Estos dos primeros espacios, la casa de Suzy y el campamento Scout, son los puntos de partida de los dos protagonistas de la historia, a partir de los cuales emprenderán su aventura romántica. Suzy espera ansiosa mirando por los largavistas. Sam ya salió a su encuentro. En el campamento rige la autoridad, el orden y las reglas absurdas. En la casa de clase media, dos adultos en decadencia y una niña depresiva que odia a sus padres. La historia transcurrirá por otros espacios y personajes, cada uno de los cuales tiene marcadas peculiaridades y una paleta de colores: El puesto de policía, del solitario Captain Sharp (Bruce Willies), en tonalidades blanco y negro. El puesto de telégrafos (junto al faro), blanco y rojo desde afuera, y un deprimente beige apagado en el interior, la casa de los padres adoptivos de Sam, en un exceso de amarillo y marrón (no hay ningún objeto de la casa que se salga de la paleta), La oficina de los Servicios sociales en un apagado gris, y su secretaria (Tilda Swinton) en traje azul.
A Sam se lo presenta por su ausencia, se conoce que se escapó del campamento, que es adoptado, que sus padres no lo quieren y el resto de los niños scouts tampoco. La primera vez que se lo muestra, es en la pequeña foto del registro, que da inicio a una exhaustiva búsqueda a través de la isla: los boy scouts entran en acción, armados con extravagantes armas blancas, y un pequeño perrito: un paneo circular a través de la ronda nos da a conocer su odio hacia Sam. El policía Captain Sharp recorre la isla buscando información sobre el paradero de Sam, sin éxito; y Suzi descubre a través de sus largavistas una historia entre él y su depresiva madre. Los encuadres son siempre simples, centrales, con exceso de simetría y pocos elementos exageradamente dispuestos en el plano.
La presentación real del personaje de Sam se da a través de planos detalle del vestuario, música sureña de fondo; la bandera del pelotón 55, el mapuche insignia de los kakhi scouts, su nombre bordado en el saco, un prendedor de perlas (que luego sabremos que era de su abuela) y finalmente él, vestido de Boy Scout, con un gracioso gorro de ruso, anteojos, pañuelo y salvavidas amarillo, remando en una canoa pintada, a través de la isla; un rifle, un mapuche de madera, una cantimplora, un mapa, una brújula, una mochila de camping, una pipa en la boca.
Lo vemos a Sam caminar a por la pradera a través de los largavistas y ya sabemos que es Suzy la que lo está esperando. En un hermoso Gran Plano General, vemos por primera vez juntos a Sam y Suzy, separados por una gran pradera verde amarillenta. Un travelling vertical nos describe a Suzy: viste colores pasteles, zapatos negros, vestido rosa, valija amarilla, tocadiscos celeste y una canasta de mimbre donde trae a su gato. Sam la mira mientras fuma de su pipa.
Un primerísimo primer plano de cada uno de ellos mirándose (mirando a cámara) nos lleva al flashback del día en que se conocieron: un año antes, en una barroca y sobrecargada obra teatral llena de niños disfrazados de animales, Sam, aburrido, se escapa de su asiento y recorre la trastienda del teatro, donde desfilan inverosímiles disfraces de animales (algunos en tono de humor, como un gallo lavándose los dientes), y llega finalmente al cuarto donde está Suzy, disfrazada de cuervo, a la que apunta con el dedo y le pregunta su nombre. Susy autodefine su personaje depresivo, que sorprende a Sam. Esos pocos segundos de contacto, serán el inicio de una larga relación por correspondencia en la que planean su huída y futuro encuentro.
Se vuelve del flashback a la pradera, el encuentro de Sam y Suzy. Sam le entrega un ramo de flores, pero sin el más mínimo sentido del romanticismo o simpatía, y le da claras instrucciones de lo que van a hacer. Los vemos alejarse por el campo y recorrer la isla: comienza la aventura.
Sam presume de sus inútiles conocimientos de scouts, que lo hacen sentirse superior y responsable. Suzy, se muestra arrogante y distante, pero acepta la aventura. El comienzo del viaje, es también el comienzo de la historia romántica entre los jóvenes aventureros. Sam, quien nunca había estado en contacto con una mujer, se va sorprendiendo de los distintos elementos femeninos de Suzy; el perfume, el gato, sus libros, el tocadiscos. Intenta impresionarla con pequeños trucos, le prepara un cuidadoso almuerzo, le propone hacer un stock de sus objetos. A través de los largavistas de Suzy, vemos, con lente teleobjetivo, la mirada subjetiva de ella escudriñando la isla. Esta descripción del comienzo de la historia, sirve de ejemplo para explicar el universo formal, y narrativo que continúa a lo largo de la película. El contraste entre la niñez y la adultez, el uso de una paleta de colores cuidada, generalmente en tonos pasteles y pequeños toques saturados, que caracteriza cada lugar y momento de la historia, movimientos de cámara certeros, travellings, paneos, y cada tanto largos zooms. El uso de humor infantil, mezclado con el drama, la exageración, un cuidadoso arte, en donde cada personaje tiene un vestuario y un mundo de objetos simbólico que le pertenece y le caracteriza, y donde todo está cuidadosamente dispuesto, con muchos planos simétricos y encuadrados al centro. Todos estos elementos, que hacen que tal vez se confunda la película con una de animación y con permanentes reminiscencias a simbolismos del pasado, los boy scouts, la familia disfuncional, el puesto de policías, entre otros innumerable ejemplos, hacen de esta una hermosa historia de aventuras de niños, en un estilo particular que caracteriza a Wes Anderson desde sus primeras cintas, y que rápidamente cautivan al espectador en un universo que bordea permanentemente la línea de lo irreal.
Análisis de la escena. Esta escena es tal vez, una de las escenas más románticas que se han filmado, transmite toda la ternura e ingenuidad del primer beso de dos niños de doce años. Comienza con un plano general de la playa en una bahía, de fondo se ve un hermoso paisaje del mar con montañas verdes que irrumpen por los costados, tapados por una densa niebla. Ligeras olas del mar bañan la arena. La luz es suave, probablemente en la hora mágica (después de la puesta del sol), ligeramente azulada. Los colores están apagados, casi lavados, sobre todo fondo de niebla azulado, con algunos puntos de color en ciertos objetos. En la playa hay objetos cuidadosamente dispuestos, en el centro, los mocasines de Suzy, sus largavistas, y el tocadiscos portátil, con su tapa celeste al costado, que reproduce “Le Temps De L’Amour”, de Françoise Hardy, canción que sonará durante toda la escena (de manera diegética, dado que el sonido sale del tocadiscos, pero tratado como si fuera música extradiegética), mezclándose con el sonido de las pequeñas olas que rompen en la playa. A los costados, sobre la orilla, una valija amarilla a la derecha y un farol verde a la izquierda compensan el encuadre. Suzy está agachada junto al tocadiscos, y la canción empieza a sonar. Se ve preciosa, pequeñas flores blancas adornan su pelo despeinado y desprolijo, y está en ropa interior, con un corpiño blanco y una bombacha rosa. Sale contenta hacia la derecha, a buscar a Sam, y entran los dos caminando por la orilla, agarrados de la mano, con los pies en el agua. La introducción de la canción suena, inundando toda la escena de ternura y amor. Los dos jóvenes comienzan a bailar, cada uno a su ritmo. Suzy de un modo más contenido y romántico, femenino. Sam, que está con la camisa verde de Boy Scout desabrochada, y en calzoncillos blancos, baila de forma espástica y extravagante, moviendo sus brazos y todo su cuerpo, de forma cada vez más exagerada, ajeno al ritmo tranquilo de la canción. La cámara, con un lente angular, se queda en su sitio, pero un ligero movimiento denota cámara en mano, que rompe con la prolijidad y firmeza del resto de la película. Tanto como los niños, primero lleno de vergueza y ahora desinhibidos, la cámara se ha soltado. Sam agarra a Suzy de sus manos y por corte vamos a un plano un poco más cerrado, donde solo vemos a ellos dos con el mar y algunas montañas de fondo. Se toman élla de los hombros de él y él de la cadera de ella y siguen bailando, ahora a un ritmo más intimo y cercano. La cámara se acerca desprolija, junto con la intimidad que se crea entre ellos. Sam la besa tímidamente a Suzy, pero rápidamente lleva su cabeza hacia atrás y escupe, de forma torpe, rompiendo con el momento de amor que se había creado. Suzy lo mira sorprendido y Sam le dice que tenía arena en la boca. Este acto desagradable de Sam, está sin embargo lleno de inocencia e inexperiencia sobre lo que debería ser romántico, de modo que se convierte en un acto tierno y sincero, incluso para Suzy, que le pregunta si sabe besar con lengua (french kiss). Sam, desde su inexperiencia, dice que cree que sí, y pregunta si tiene algún truco, a lo que Suzy, con más conocimientos sobre el amor que él, le dice que las lenguas se tocan. “Ok, probémoslo”, dice Sam, como si se tratara de una aventura de las que a él tanto le gustan. Se besan, todavía con un poco de timidez. En este momento la cámara salta de eje a un plano cerrado de Sam, con la espalda de Suzy en referencia. Sam la abraza y podemos ver su rostro aún un poco inseguro. Otra vez se vuelve al eje anterior, a un plano frontal cerrado del abrazo, y Suzy le dice, con pura inocencia que “se siente dura”. Sam se avergüenza (otra vez se rompe el
eje a un plano de él) y le pregunta si le molesta, a lo que ella dice que le gusta. Se separan levemente y se pasa a un primer plano cerrado de Sam solo, filmado con un lente angular, donde se ve su pelo aún húmero y los anteojos grandes que se le caen, plano subjetivo de Suzy, porque Sam, desde el centro del encuadre mira directamente a cámara y le propone a Suzy que gire su cabeza. Ahora pasados al primer plano de Suzy, subjetiva de Sam, y mirando a cámara gira tímidamente su cabeza. En un hermoso plano bajo, y saltando otra vez el eje, vemos acercarse sus piernas e intuimos que se abrazan. De fondo se ve el tocadiscos celeste. Luego se pasa a una cámara ligeramente picada, siempre encuadrando al centro, de ellos dos besándose apasionadamente. Ya han entrado en confianza, han perdido la timidez y la vergüenza, y Suzy le permite tocarle el pecho. Sam parece no saber muy bien qué hacer que eso, y simplemente se limita a poner una mano sobre el corpiño de Suzy, silueta de unos pechos púberes que apenas empiezan a sobresalir del cuerpo. Suzy le confiesa que cree que le crecerán más. Sam los mira, sin entender bien de qué se trata, y toma el otro con la otra mano. El exceso de sinceridad e ingenuidad del amor que surge en niños de doce años, que intentan copiar modelos de amor que han visto en adultos, crea una mezcla de comicidad y ternura, creando un clima de erotismo que pareciera que no fuese posible mostrar con niños de esa edad, pero que sin embargo está tan bien tratado, que resulta hermoso de ver. La escena concluye con un plano cenital de los objetos en la arena, que como en toda la película contienen una gran carga simbólica. En este caso se ven los mocasines de Suzy (zapatos de iglesia, le dice Sam cuando la ve por primera vez), sus largavistas y el tocadiscos color crema y celeste, con el single de Hardy girando, que aumenta la emotividad de la escena. Objetos que quizás nadie pensaría llevar en una aventura por una isla, pero que Suzy ha llevado y por eso es así y Sam la ama.
Desglose por planos: Escena Beso en la Playa. exterior día / playa. Plano 1. Plano general de la playa. Cámara en mano (quieta, con ligeros movimientos) en el centro, sobre la arena un par de mocasines, un largavista y un tocadiscos portátil, y su tapa celeste. En el borde de la orilla, sobre la derecha, una valija amarilla. Sobre la izquierda, un farol verde. De fondo el mar, y detrás, montañas. Suzy, en corpiño blanco y bombacha rosa, con florcitas adornándole el pelo, pone el tocadiscos y sale corriendo por derecha de cuadro. Entran Suzy y Sam, vestido con camisa verde de Boy Scout abierta y calzoncillos blancos, caminando por derecha de cuadro, de la mano por la orilla hasta llegar a la mitad del plano y comienzan a bailar al ritmo de “Le Temps de L’Amour” de Françoise Hardy, que sonará hasta el final de la escena. Sam con movimientos más espásticos, ella más contenida. Se toman de las manos Plano 2. Plano Americano Conjunto de Sam y Suzy. Cámara en mano. Suzy toma a Sam de los hombros, y éste de la cintura. Travelling IN hacia Plano Medio Corto. Siguen Bailando. Sam besa a Suzy, y escupe hacia atrás.
SAM Tengo arena en la boca.
SUZY Ah…
SUZY ¿Sabés besar con lengua?
SAM
Eso creo ¿tiene algún truco?
SUZY Las lenguas se tocan.
SAM
Ok, probemos.
Se besan con lengua Plano 3. Primer Plano Largo de Sam, con Suzy en referencia (salto de eje). Sam abraza a Suzy Plano 4. Primer Plano Largo de Sam y Suzy abrazados (salto de eje)
SUZY Se siente dura.
Plano 5. Primer Plano Largo de Sam, con Suzy en referencia (salto de eje)
SAM ¿te molesta?
Plano 6. Primer Plano Largo de Suzy, con Sam en referencia (salto de eje)
SUZY Me gusta.
Siguen abrazados, se separan ligeramente Plano 7. Primerísimo primer plano de Sam
SAM Gira la cabeza a un lado.
Plano 8. Primerísimo primer plano de Suzy. Gira levemente la cabeza hacia la izquierda del cuadro. Plano 9. Plano medio conjuno de los pies y las piernas. Cámara baja, Salto de Eje. Los pies de Sam se acercan a los de Suzy Plano 10. Plano Medio Largo Conjunto de Sam y Suzy. Cámara levemente picada. Sam y Suzy se besan.
SUZY Puedes tocar mi pecho
Sam toca el pecho de Suzy con una mano.
SUZY Creo que me crecerán más
Sam mira de reojo los pechos de Suzy, y toca el otro con la otra mano
Plano 11. Plano contrapicado de los mocasines, el tocadiscos, su tapa y los largavistas sobre la arena. El disco gira en el tocadiscos