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Microscopías (El Cosmos en un bolsillo) Número 16 – Abril 2018

Una fanzine es, según el decir popular anglosajón, una “fan magazine”, es decir una revista para fanáticos. Su problema endémico, asegura el diario El País, de España; es “su dependencia de las ganas desinteresadas de sus colaboradores, en un trabajo no remunerado que debe obtenerse del tiempo libre, y sus problemas para distribuirse llegando a su público potencial”. Pero es ese “desinterés”, el que da completa libertad a la hora de posicionarse en alguna de las márgenes que permite una perspectiva más desarrollada. “La profesionalización (o el crecimiento económico) de la publicación, pueden convertirla en una prozine”. Ahora bien, el lento y profundo proceso que desarrolla una publicación hasta conformarse en un producto sólido y estable tiene que ver, casi exclusivamente, con la profundidad buscada, tanto en sus artículos como en su postura social. Microscopías agradece profundamente la oportunidad brindada por la Municipalidad de Tres de Febrero y el Fondo Nacional de las Artes por acompañar este lento desarrollo, con una beca a la Creación y a la Formación. Es grato saber que en este otoño, en lugar de perder las pocas hojas obtenidas, podemos aspirar a más. M.L.

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Poiesis

Invierno: la vida se reduce…

Invierno: la vida se reduce a unas ramas delgadas a punto de quebrarse, unas presencias dispersas que sólo anhelan llegar a casa y encender, con algunas maderas, un fuego duradero. Algo, sin embargo, permanece igual, no importa la estación, si las hojas brillan en los árboles o son arrastradas por el viento a lo más lejos y en desorden: en el papel, luego de cuidados y correcciones, la errata, obstinada y todopoderosa, ocupa el lugar del poema.

Carlos Barbarito

Radiación de fondo, de Carlos Barbarito Abrace Cultura, Montevideo, 2018

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X La inquietud del rosal (Alfonsina Storni)

Como la inquietud

de encontrar

los jazmines florecidos

en el patio.

Como un mundo de estreno

cada vez que se abre

esa ventana.

Como la lenta agonía

de las tres de la tarde.

Así como despertar

sin abrir los ojos

el verano llega cuando te pienso.

Siempre sos vos,

siempre es verano

y estas vos

cuando florecen los jazmines.

Sandra Wasilewski,

de su poemario “Oracular”.

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Chivos, Canjes y Recomendaciones

Poiesis

Para comunicarse con el editor, publicitar o arrimar textos: microscopias@gmail.com

Propietarios y Directores Responsables:

María Fernanda Macimiani / Sandra Wasilewski / Martín Leonardo Linares

Domicilio Legal: Av. Márquez 2521 – Pablo Podestá – Buenos Aires

Registro DNDA en trámite

Impreso en Morón Gráfica – Nahuel Huapi 5804 - CABA

Agradecimientos:

Zulma Prina, Carlos Barbarito,

Osvaldo Hueso, Ariel Lowenstein.

A los lectores incondicionales que

comentan, distribuyen y vivifican

esta lucha contra el silencio.

Edición, selección y compilación de

textos: María Fernanda Macimiani,

Sandra Wasilewski, Martín Linares.

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SI PUDIERA...

El Pancho y la Coca (difusión de textos inéditos)

LA MIRABA MIENTRAS… … se movía ágil, dulce, graciosa, insinuante, hermosa, decididamente hermosa; pelo negro, sonrisa blanca. Todo su cuerpo moviéndose gracioso, siguiendo esa música, con su contoneo, su girar sin pausa, su risa, sus pies, apenas tocando el suelo. Mis cuarenta y pico, que no tenían nada que hacer en ese lugar, estaban pegados, pegados a ese ondular gracioso y movedizo, cual sirena en el ponto, deseando que me ataran al palo mayor como al héroe griego, para no sumergirme en sus aguas y ondularme con ella. Y tomarla, tomarla para mí, para siempre, sin temor, sin dolor, sin dudas, de mis cuarenta y pico, de sus quizás apenas veinte. Sus quizás apenas veinte, y un incesante revolotear de alegría, entre ellos, entre sus congéneres, los de su edad, los de su estilo, de su círculo, de sus códigos. ¿Y yo qué? ¿Yo estaba ahí? ¿Estaba en ese lugar? ¿¡Qué hacía yo, en ese lugar!? En esa playa junto a ese mar bravío que descargaba con furia sus voluptuosas olas. Miraba y la admiraba. ¡Todo! Su pelo negro, su remera, su pollerita corta,

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escasa, escasa, apenas cubriendo; zapatillas blancas, con apenas medias; piernas armoniosas, blancas, girando en esa pista, en ese lugar, donde yo, no tenía nada que hacer. Se acercó. ¿Quizás se acercó? Quizás se dio cuenta que la miraba, quizás me sonrió, sonrió a mis cuarenta, a mis cuarenta y pico y se sentó a mi lado, a mi lado. ¿O no? Quizás no. Quizás bailó hasta desfallecer, ella de cansancio, yo de locura. Vino a mi lado. ¿Vino? Se acercó sonriente, sonrisa perlada; mientras esas luces extrañas giraban incesantes. Se acercó serena, ondulante, graciosa, etérea, como la soñé, como siempre la soñé. Senos turgentes, blancos, asomando casi libres de su remera. Se acercaba flotando, y su sonrisa nívea, eterna. Me tomó de la mano. ¿Lo hizo? Tiró suavemente; la seguí, llevándome de su mano, tibia, suave, para mí, para mis cuarenta, mis cuarenta y pico, ya gastados, ya doblados. Giraba apenas su cabeza y me miraba, mientras yo seguía, tomado de su mano, tibia, suave, única. Sentía sus dedos, sus cinco dedos entre los míos, los cinco míos. Caminamos. ¿Caminamos? Hasta ese lugar; arena, playa, mar, rumor de olas. Infinito rumor de olas envolviéndolo todo, como un extraño éxtasis, como un extraño rito. Me miró profundo, desde su profundo azul… y sonrió…

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¡Y me amó! ¡A mí, a mis cuarenta y pico, con sus quizás apenas veinte! Con su piel blanca, sus senos blancos. Todo su ondulante ser blanco, suave, dulce, tierno; sublime en el fragor de su celo, de su calor, de su pelo negro, de sus quizás apenas veinte, para mí, para mis cuarenta, para mis cuarenta y pico. ¿O no? Quizás no. Quizás bailó hasta desfallecer, ella de cansancio, yo de locura…

Osvaldo Hueso

El anillo de Draupnir

Las manos de Borges supieron anhelar el oro de los Tigres. Sus ojos ciegos no pudieron distinguir si ese oro era el fuego de los infiernos de William Blake o del metal de Zeus o del eterno ciclo de las noches y los días. Somos tan ciegos como él para anhelar el oro que puede ser las lagunas estigias del Dante o la espada de Excalibur o las mil y una noches. Como el anillo de Draupnir, como el poniente y como Borges, hallaremos ese oro en los cabellos de la mujer que más amamos. La que un día pronunció nuestro nombre.

Ariel Lowenstein

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FAA!!! El primer Festival Autónomo

de Autores, fue un éxito.

El pasado sábado, 7 de abril, se desarrolló la primera edición del festival, en la Biblioteca Popular Ciudad Jardín, Palomar. Con la presencia de más de 30 autores que trajeron sus producciones, cinco editoriales, y varias entidades culturales que desafiaron las inclemencias del tiempo; se dio un puntapié inicial a la actividad de los autores por los autores. Durante el festival se sucedieron presentaciones de libros de Zulma Prina, Carlos Barbarito, Graciela Quinteros, Sandra Wasilewski y María Fernanda Macimiani (ver Microscopías número 15), charlas de SADE 3F, CFP Castemonte y EMAC, la charla sobre Talleres Literarios a cargo de María Laura Castro y la de Microscopías, como ejemplo de proyecto autogestionado. Hubo stands de las editoriales independientes que acompañaron, la presencia de colectivos culturales que se reunieron, mate en mano, a charlar e intercambiar, sorteos de libros y gigantografía de poesías, etc. El evento contó con la presencia del Subsecretario de Cultura, Ricardo Tejerina, quien destacó la organización del espacio e instó a “levantar aún más la vara”, ya que la creación de estos espacios

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autogestivos hacen más inclusiva aún la cultura del partido. Además hizo mención a la Beca a la Creación y Formación que el municipio y el FNA otorgaron a Microscopías como proyecto de Letras. Durante algo más de siete horas, se sucedieron actividades infantiles, audiovisuales, un mini recital folklórico de Fernando Yeri, profesor de canto de la Biblioteca, y hasta la proyección de un video de Raquel Soto, poeta del Perú, quien quiso ser partícipe de la fiesta.

Desde la Organización del Festival, queremos agradecer a las casi 200 personas que se acercaron en distintos momentos del día a hacerse eco de una invitación fraternal. Pensamos que reuniones de este tipo fortalecen el vínculo entre pares y acercan las búsquedas de aquellos que entendemos la literatura como una relación que se construye pie a pie con el lector. En breve habrá noticias de nuevos encuentros.

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Concierto en gris bemol Mayor, Poemas, Zulma E. Prina.

Madre mujer vientre reseco de ausencias tierra robada por los que se fueron por los que vinieron y sembraron hijos con la arrogancia de ser OTRO esos hijos que te venden porque desconocen a los tuyos los de milenaria historia sin certificado de propiedad. Cómo repartirte Cómo desmembrarte Si vos madre sos de todos porque ellos nacen de tu vientre y a tu vientre siempre tendrán que volver.

El libro está dividido en dos: Pacha/Tierra mujer y Niña/mujer. Cada una con poemas de una armonía especial que sin dudas son homenajes, cadencia y silencios. El prólogo escrito por la escritora Irma Droz, dice ciertamente: ‘…La música de sus palabras, nos llega en un semitono gris, con el llanto de la “Tierra Mujer”, que ahoga su grito frente

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a la mentira y espera en silencio, porque “ellos volverán”’. Con más de veinte libros publicados sigue desafiando con la metáfora y la belleza de la poesía. Además es Presidente de la Academia Argentina de LIJ, cargo desde el cual encabeza una verdadera lucha pacífica por “la lectura por placer”, tan necesaria desde los primeros años para transitar luego, otras lecturas. Este poemario fue presentado en FAA el 7/4 en la Biblioteca Ciudad Jardín. Fue un placer para mí acompañar a la autora, una artesana de la palabra, una escritora con una vasta trayectoria como poeta y narradora, como investigadora, creadora y docente. Ella sigue participando activamente en diversas organizaciones artísticas, ver más en zulmaprina.com.

M.F.M. Corresponsal de la AALIJ 3F

Se viene la presentación en

sociedad de: OJITOS DE CRAYÓN y otras rimas disparatadas

de María Fernanda Macimiani

1/5 - 16:30 Stand Tucumán 8/5 - 19:30 Stand 425, M3F

leemeuncuento.com.ar

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http://www.alejandra-romero.com.ar/

Alejandra Romero Ilustraciones www.alejandra-romero.com.ar

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Wikipedia dice (y si ella dice…)

El Canon occidental es el corpus de obras de arte y literarias que han formado la denominada alta cultura en la civilización occidental. Ya sea por su calidad, su originalidad, o por ciertos rasgos formales y temáticos, dichas obras han trascendido en la historia, arte y cultura occidentales, sin perder vigencia ni quedar obsoletos. Usualmente se identifica con las obras clásicas, consideradas como seminales.

El corpus de obras que forma el canon occidental incluye tanto obras literarias como artísticas de cualquiera de las denominadas bellas artes, con exclusión de las llamadas artes menores). En las obras literarias no sólo incluye la literatura artística o de ficción en todos sus géneros (poesía, teatro, novela o épica, dramática y lírica), sino los ensayos o tratados de cualquier disciplina (religión, filosofía, ciencias sociales, naturales o formales) que se consideren de importancia trascendental.

Los dos pilares del canon literario occidental, que han suministrado la mayoría de sus tópicos culturales, son fundamentalmente los poemas homéricos y la Biblia, sobre los que se apoyan los demás autores: un abundante número de clásicos grecolatinos (Safo, Platón, Aristóteles), algunos de

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entre los principales teólogos y místicos cristianos (Agustín, Aquino, Kempis) una selecta tríada de italianos bajomedievales (Dante, Petrarca y Boccaccio) y un grupo más heterogéneo y discutible de autores del Renacimiento, el Barroco y la Ilustración (italianos, franceses, españoles) escribiendo unos en latín, otros en lenguas vernáculas, muchos en ambas: (Maquiavelo, Castiglione, Paracelso) mientras que para los siglos XIX y XX el consenso es mucho más difícil, dada la extraordinaria abundancia de producción literaria que se incorpora a la tradición occidental, ya no limitada a Europa occidental, sino extendida a la oriental (especialmente a los autores rusos)

y a los

demás continentes, coincidiendo con los procesos históricos expansivos de la Edad Contemporánea, como la revolución industrial, el imperialismo y la globalización.

El hecho de que no se incluyan dentro del canon occidental las obras de otras civilizaciones, por mucha importancia que hayan podido tener (africanas, americanas precolombinas), no deja de ser problemático; especialmente para los casos de aquellas que han influido de forma determinante en la civilización occidental, como la árabe (el Corán, Las mil y una noches) y los autores de la Edad de Oro islámica.

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analysis poetica (por SAWA)

Hoy: Rojo, de Graciela Quinteros.

Rojo, intenso. Como lo que nace de lo más profundo. Rojo como la sangre. Rojo vital. El libro de Graciela Quinteros nos transporta a lugares de la infancia, a esos lugares donde la mesa familiar y la cocina casera son parte imprescindible de la existencia. De pronto Rojo nos lleva a esos espacios habitados por los fantasmas del miedo y del dolor, a esos lugares donde la violencia es así, en rojo. Al rojo vivo. El depredador que acecha y golpea y lastima y del que tal vez creímos nunca poder escapar. Y luego, después de unas páginas nos presenta mujeres fuertes que supieron y saben seguir adelante a pesar del dolor y se reinventan día a día. Mujeres que a los cincuenta y tantos levantan la frente y deciden enfrentar la vida, porque más vale tarde que nunca. Nos muestra inexorable el vacío de una página en blanco que va poblándose de palabras, palabras que dicen lo que muchas mujeres no pudieron decir. Graciela Quinteros nos ofrece la ternura de los abrazos a los nietos y la lucha constante de las

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mujeres solas que son el pilar fundamental de la casa que habitan. Nacida a mediados de los ’60 en un pueblito cordobés, inquieta, ávida lectora y docente empedernida continúa buscando y buscándose en cada sendero, en cada baldosa y en cada pequeña cosa que surge en la vida. Rojo, su primer libro nos invita a la ternura y a la lectura con los brazos y el corazón abiertos de par en par. ¿Amor? ¿Viste cuando se te pone la piel de gallina al contacto de la yema de sus dedos? Bueno, así. Se despidieron. La miró. Se fue, regresó inmediatamente. La besó. Se sorprendió, no lo esperaba. La cita se transformó en ritual apasionado. Sin palabras. Bastó solo la piel. Al tiempo todo se acabó. ¿Se habrán amado? ROJO fue presentado en FAA el primer Festival Autónomo de Autores el sábado 7 de abril de 2018 en la Biblioteca Popular de Ciudad Jardín.