manejo sitio específico vazquez

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MANEJO SITIO ESPECIFICO Ing. Agr. MSc. Juan Manuel Vázquez Para definir de qué se trata el manejo Sitio Especifico es conveniente revisar ciertas definiciones, ya que existe cierta superposición entre este concepto y el de Agricultura de Precisión. “Hasta los años 80 el manejo era a nivel de establecimiento y la unidad de manejo el lote. El suelo de un lote era muestreado para determinar el valor medio de nutrientes y el pH, fertilizando todo de manera uniforme (Oliver, 2010).” “El manejo sitio especifico consiste en el manejo de cultivos agrícolas a una escala especial menor a la del campo entero (Plant, 2001).” “El manejo sitio especifico tiende a manejar el suelo, las plagas y los cultivos basado en la variación espacial al interior del campo, mientras que la agricultura convencional maneja el campo uniformemente, ignorando la variabilidad natural inherente del suelo y las condiciones de los cultivos entre y dentro de los lotes. Puntualmente, el manejo sitio especifico se refiere al manejo de los cultivos a una escala inferior que la del campo entero, tomando en cuenta la variabilidad local para compatibilizar productividad y calidad, impactos ambientales desfavorables y el uso de los recursos (agua, fertilizantes, pesticidas, etc.) mediante la aplicación de estos cuando, donde y en la cantidad necesaria(Corwin & Lesch, 2010).” “La agricultura de precisión es una estrategia de manejo que usa las tecnologías de información para recoger datos de diferentes fuentes con el fin de tomar decisiones asociadas con la producción de cultivos(Oliver, 2010).” “Es quizás desafortunado que el termino ambiguo de “Agricultura de Precisión” está siendo usado cada vez más frecuentemente como sinónimo de manejo sitio especifico, porque refiere más a agricultura que a manejo de cultivos… en todo caso el termino agricultura de precisión debería ser aplicado al uso de las tecnologías de la información en toda la agricultura y el manejo sitio especifico sería un componente de de la misma. (Plant, 2001).”

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Actualización en español de los elementos y criterios para el manejo sitio especifico de los sistemas agropecuarios.

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  • MANEJO SITIO ESPECIFICO Ing. Agr. MSc. Juan Manuel Vzquez

    Para definir de qu se trata el manejo Sitio Especifico es conveniente revisar ciertas

    definiciones, ya que existe cierta superposicin entre este concepto y el de Agricultura de

    Precisin.

    Hasta los aos 80 el manejo era a nivel de establecimiento y la unidad de

    manejo el lote. El suelo de un lote era muestreado para determinar el valor

    medio de nutrientes y el pH, fertilizando todo de manera uniforme (Oliver, 2010).

    El manejo sitio especifico consiste en el manejo de cultivos agrcolas a una

    escala especial menor a la del campo entero (Plant, 2001).

    El manejo sitio especifico tiende a manejar el suelo, las plagas y los cultivos

    basado en la variacin espacial al interior del campo, mientras que la agricultura

    convencional maneja el campo uniformemente, ignorando la variabilidad natural

    inherente del suelo y las condiciones de los cultivos entre y dentro de los lotes.

    Puntualmente, el manejo sitio especifico se refiere al manejo de los cultivos a

    una escala inferior que la del campo entero, tomando en cuenta la variabilidad

    local para compatibilizar productividad y calidad, impactos ambientales

    desfavorables y el uso de los recursos (agua, fertilizantes, pesticidas, etc.)

    mediante la aplicacin de estos cuando, donde y en la cantidad

    necesaria(Corwin & Lesch, 2010).

    La agricultura de precisin es una estrategia de manejo que usa las tecnologas

    de informacin para recoger datos de diferentes fuentes con el fin de tomar

    decisiones asociadas con la produccin de cultivos(Oliver, 2010).

    Es quizs desafortunado que el termino ambiguo de Agricultura de Precisin

    est siendo usado cada vez ms frecuentemente como sinnimo de manejo sitio

    especifico, porque refiere ms a agricultura que a manejo de cultivos en todo

    caso el termino agricultura de precisin debera ser aplicado al uso de las

    tecnologas de la informacin en toda la agricultura y el manejo sitio especifico

    sera un componente de de la misma. (Plant, 2001).

  • I. Diferencias entre prcticas generales de manejo y prcticas de manejo por ambientes o sitio especifico Se debe diferenciar que mientras las practicas generales de manejo se aplican a parcelas

    completas (rotaciones, labranzas, manejo de los residuos, barbechos), las practicas de

    manejo sitio especifico consisten en el tratamiento diferenciado de los ambientes dentro de

    cada parcela (variacin de la densidad de siembra, la dosis de fertilizante, la lamina de

    riego, localizacin del control de malezas). Las practicas generales de manejo suelen ser

    tecnologas de procesos mientras que las practicas de manejos por ambientes se han

    limitado a realizar aplicaciones variables de insumos (semilla, fertilizantes, pesticidas,

    agua, etc.), pero tambin podra relevarse areas dentro de un lote, que requieren una

    labranza de descompactacin profunda o bien identificar dos reas con diferente balance

    de carbono que requieran un manejo diferenciado de los residuos de cosecha (por ej. el

    picado o no de los residuos).

    II. Condiciones que justifican su implementacin Se han establecido tres criterios para justificar el uso del manejo sitio especifico: 1)

    existencia al interior de las parcelas, de variabilidad espacial en factores que condicionan

    el rendimiento del cultivo, 2) que las causas de la variabilidad puedan ser identificadas y

    medidas 3) que la informacin pueda ser usada para modificar las practicas de manejo de

    forma de aumentar la rentabilidad o reducir el impacto ambiental(Miller, et al., 1999).

    III. Estabilidad de los parmetros limitantes Dentro de los parmetros que pueden llegar a limitar el rendimiento de un cultivo existen

    algunos que son ms estables en el tiempo (textura, capas compactadas, disponibilidad de

    fosforo), mientras que otros son tan variables que de una campaa a la siguiente se puede

    modificar su distribucin (disponibilidad de nitrgeno, plagas, salinidad). Para los ms

    estables se van a plantear a continuacin los pasos para relevar su variabilidad espacial,

    analizarla y plantear un manejo sitio especifico. Para los parmetros ms variables, al final

    del captulo se analizaran alternativas de manejo en tiempo real.

    IV. Etapas para la implementacin del manejo sitio especifico Figura 1: Oliver (2010), propone tres etapas para la implementacin de un manejo sitio

    especfico:

    1) Obtencin de datos con una escala apropiada, (relevar la variabilidad ambiental).

    2) Anlisis e interpretacin de los datos.

    3) Implementacin de respuestas de manejo a una escala y oportunidad apropiadas.

  • Figura 2: Pierce & Nowak (1999), contemplaban la evaluacin como una cuarta etapa, para

    contrastar la implementacin de un manejo sitio especifico con la respuesta de los

    cultivos.

    1) RELEVAMIENTO DE LA VARIABILIDAD AMBIENTAL

    Al momento de proceder a relevar la variabilidad ambiental se suele disponer como punto

    de partida de mapas de rendimiento, fotos areas o imgenes satelitales. Todas ellas son

    fuentes que permiten diferenciar diferentes ambientes a partir de la expresin del cultivo.

    Sin embargo, tambin se debe evaluar que otros parmetros es necesario relevar, que

    puedan ser los causantes de generar variaciones en el rendimiento de los cultivos. En la

    figura se observan los principales factores que determinan la variabilidad ambiental en

    distintas zonas de la Regin Pampeana.

    Figura 1: factores que determinan la variabilidad ambiental en la Regin

    Pampeana(Menndez, 2007).

    Para diferenciar las fuentes de informacin utizadas para relevar la variabilidad espacial, se

    distinguen tres vas de medirla (Senay, et al., 1998):

    a. Continua: monitores de rendimiento, topografa, rastras de conductividad elctrica.

    b. Discreta: muestreos de suelos o cultivos.

    c. Remota: mediante fotografas areas o imgenes satelitales.

  • a. Fuentes de informacin continua Rendimiento:

    Con la difusin del uso de receptores GPS para fines civiles, a inicios de los aos

    noventa, junto con la disposicin de sensores de flujo de grano en las cosechadoras, se

    posibilit la obtencin de datos de rendimiento georeferenciados. En la actualidad

    existen sensores de rendimiento para cosecha de granos, pasturas, biomasa, frutas y

    vegetales (Griffin, 2010). Ya en el ao 2008 en Argentina ms del 90% de las

    cosechadoras de granos, estaban equipadas con monitores de rendimiento (INTA,

    2008).

    La difusin de los monitores de rendimiento ha sido uno de los factores fundamentales

    que han impulsado la difusin de la agricultura de precisin, debido a que permiten la

    elaboracin de mapas con una densidad de datos superior a la mayora de los mtodos

    de muestreo y con un costo sustancialmente menor.

    A pesar de que los mapas de rendimiento brindan informacin significativa sobre la

    variabilidad espacial de un terreno, generalmente el uso aislado de los mismos, no

    alcanza para explicar las causas ni la magnitud de sus patrones de variacin. Suele ser

    necesario contar con relevamientos de factores que condicionan el rendimiento

    (topogrficos, edficos, climticos, biticos), para explicar las causas de la variabilidad

    espacial de los cultivos.

    Los monitores de rendimiento deben registrar informacin complementaria para poder

    mapear adecuadamente los datos: la humedad del grano cosechado, el ancho

    cosechado en cada pasada, la velocidad de avance, el desfasaje entre el momento en

    que el flujo de grano se recolecta, hasta que es medido por el sensor y las demoras al

    inicio y al final de cada pasada.

    Figura 2: Mapa de rendimiento.

  • Paisaje

    El paisaje condiciona el contenido y flujo del agua en el suelo y por lo tanto del

    nitrgeno disuelto en la misma. A s mismo la disponibilidad de agua y nutrientes para

    el cultivo condicionan el rendimiento del mismo(Franzen, et al., 1998). El paisaje

    tambin condiciona el rendimiento por medio de su influencia en el microclima.

    La caracterizacin del paisaje se ve facilitada por el uso del GPS diferencial, para la

    obtencin de alturas georreferenciados de diferentes puntos del terreno, que permite la

    obtencin por interpolacin de modelos digitales de elevacin y la consiguiente

    extraccin de parmetros topogrficos como pendiente, curvatura(Pilesj, et al., 2005;

    Kweon, 2012). Los valores de elevacin tambin son tiles como informacin auxiliar

    debido a que el drenaje, la humedad del suelo y la materia orgnica, varan de acuerdo

    a la topografa (Frogbrook & Oliver, 2007).

    Figura 3: Mapas de pendiente y curvatura del terreno (Kweon, 2012).

    Conductividad elctrica del suelo.

    La conductividad elctrica del suelo como medida de la capacidad del mismo de

    conducir la corriente elctrica, no es un parmetro que condicione el rendimiento del

    cultivo. Sin embargo es una propiedad que puede correlacionar muy bien con otras

    propiedades fisicoqumicas como: contenido de humedad, sales disueltas, textura,

    capacidad de intercambio catinico (y por lo tanto porcentaje de materia orgnica,

    cantidad y tipo arcillas).

    Las rastras de conductividad aplican al suelo una corriente elctrica mediante

    electrodos y miden la diferencia de potencial o voltaje. A partir de estos datos se puede

    calcular la conductividad elctrica del suelo de los diferentes puntos por donde se

    desplace la rastra (puntos que son georeferenciados mediante un receptor GPS).

  • Existen otros dispositivos que miden la conductividad elctrica del suelo por induccin

    electromagntica, que estn menos difundidos.

    Por lo tanto, aunque la Conductividad Elctrica del Suelo no sea en s mismo un

    parmetro relevante, el hecho de que permita obtener una gran densidad de datos a

    bajo costo y que la misma este asociada a otros parmetros que si influyen

    directamente sobre el rendimiento, ha llevado a que los mapas de Conductividad

    Elctrica sean el medio ms habitual para caracterizar la variabilidad edfica. Estos

    permiten diferenciar ambientes en los que luego se toman muestras para analizar

    cuales parmetros edficos son los que determinan los patrones de variacin de la

    Conductividad. Aunque no se prescinde del muestreo, se reduce notablemente la

    cantidad de muestras necesarias respecto a un muestreo en grilla.

    Figura 4: Mapa de conductividad elctrica (Corwin & Lesch, 2010).

    pH del suelo relevado con sonda

    Existe un sensor mvil con electrodos para la medicin del pH del suelo a una

    profundidad de unos 10 cm. El mismo genera mediciones a intervalos de 5 a 15

    segundos, que al ser georeferenciadas permiten la elaboracin de mapas(Adamchuk, et

    al., 2004).

    Materia Orgnica relevada con sensores pticos

    Mediante un sensor ptico dispuesto en un abresurco de doble disco similar a los de las

    sembradoras, se registran las variaciones en el color del suelo a una profundidad de

    aproximadamente 4 cm. Basndose en la relacin entre el color del suelo y el contenido

    de materia orgnica se generan mapas con la variabilidad espacial de este ltimo

  • parmetro. El modulo ptico contiene una fuente de luz y registra la radiacin roja e

    infrarroja reflejadas por el suelo.

    Profundidad a capas de tosca relevada con Georradar.

    Ante la existencia de planchas de tosca en un campo, la profundidad a la que se halla

    la misma relevada con georadar, se ha determinado que condiciona el rendimiento

    (Mndez, et al., 2010).

    Un georradar dispone de una antena transmisora que emite pulsos electromagnticos

    al suelo, donde son parcialmente reflejados y registrados desde la superficie por una

    antena receptora. La propagacin de las ondas electromagnticas a travs del suelo

    est influenciada fundamentalmente por la constante dielctrica y la conductividad

    elctrica del mismo. Este permite la deteccin de las interfaces de las capas del suelo y

    objetos simples como piedras y cavidades.

    La profundidad a la que penetran las seales depende tanto de la conductividad

    elctrica del subsuelo como de la frecuencia de la seal aplicada. Con el aumento de la

    conductividad del medio, tambin lo hace la atenuacin de la energa de las ondas

    electromagnticas y se reduce la profundidad de penetracin. Con el incremento de la

    frecuencia, disminuye la profundidad de penetracin en el suelo, pero al mismo tiempo

    aumenta la resolucin espacial debido a la menor longitud de onda.

    Figura 5: Se observa como al variar la frecuencia para un mismo perfil, se distingue ms claramente una capa compactada entre 40 y 50 cm de profundidad.

  • Resistencia mecnica del suelo

    Se han desarrollado unos sensores de resistencia mecnica del suelo que miden la

    resistencia a la penetracin en sentido horizontal y a diferentes profundidades, con

    celdas de carga dispuestas sobre un brazo metlico vertical. Al desplazarlo a travs del

    campo, registra los valores de resistencia mecnica, los que son georeferenciados con

    un receptor GPS. El uso de esta herramienta no est difundido hasta la actualidad y

    para caracterizar la variabilidad espacial de la resistencia mecnica se suele recurrir a

    mediciones puntuales, habitualmente con penetrmetro de cono.

    Figura 6: Sensor de la resistencia mecnica del perfil del suelo (Chung, et al., 2006)

    Figura 7: Mapa de resistencia mecnica del suelo(Adamchuk, et al., 2008)

  • b. Fuentes de informacin discreta Muestreos en grilla

    Los muestreos de puntos aislados han sido el medio tradicional de obtener informacin

    del suelo y el cultivo. Tradicionalmente se enviaban muestras de suelo o tejidos a

    laboratorios para su analisis, aunque van apareciendo sensores que brindan

    informacin instantnea de las muestras, particularmente sensores pticos.

    Los muestreos tradicionalmente han estado dirigidos a determinar valores medios de

    las propiedades del terreno, por lo que los puntos de donde se toman los datos deben

    seleccionarse al azar, de modo de evitar errores en la estimacin de la media del

    campo.

    Cuando se pretende construir un mapa de la variacin de una propiedad en el terreno,

    la distribucin de la misma no es al azar y el valor de cada punto va a estar ms

    correlacionado con los puntos cercanos que con los ms distantes. Ante la ausencia de

    un conocimiento previo, lo ms adecuado es muestrear en base una grilla e interpolar

    los valores entre los puntos de muestreo. La eficiencia y simplicidad son caractersticas

    positivas de los muestreos en grillas pero presentan aspectos negativos como el riesgo

    de interactuar con fenmenos peridicos, su elevado costo, demandan tiempo e

    intensidad de trabajo, sumado a posibles errores de interpolacin.

    En la actualidad se asume que la escala requerida para que las grillas de muestreo

    documenten adecuadamente la variabilidad especial, es probablemente prohibitiva. A

    falta de otro medio para documentar la variabilidad espacial se llega a tomar una

    muestra por hectrea, sin embargo en muchos casos se observa que los mapas

    generados a partir de las grillas, no se ajustan a los patrones observados en los mapas

    de rendimiento, fotos areas o imgenes satelitales. Esto est llevando a la adopcin

    de muestreos basados en zonas de manejo definidas a partir de fuentes de informacin

    disponibles previamente.

    Figura 8: Grilla de muestreo en un lote con dos muestras por celda de la grilla.

  • Figura 9: Ejemplo de diferentes propiedades relevadas a partir de un muestreo en puntos

    discretos (Duffera, et al., 2007)

  • c. Sensores remotos

    Los sensores remotos permiten caracterizar la reflectancia o emitancia del canopeo y de

    este modo relevar la condicin del suelo y el estado de crecimiento y desarrollo del cultivo,

    a bajo costo. Las mediciones se pueden hacer con sensores digitales (imgenes

    satelitales) o film fotogrfico (fotos areas). Los datos de reflectancia generalmente son

    expresados en la forma de ndices de vegetacin que son relaciones entre diferentes

    longitudes de onda, de los cuales el ndice normalizado de diferencias de vegetacin NDVI

    es el ms comn. Este (NDVI) se cre para evaluar el ndice de rea foliar y se representa

    con NDVI = (NIR - rojo)/(NIR + rojo), por lo que permite evaluar la biomasa y el rendimiento

    de los cultivos. Otro ndice denominado Verde NDVI = (NIR verde)/(NIR + verde) es til

    cuando el ndice de rea foliar (IAF) es superior a ~2.5 (Schepers, 2002). Esencialmente, la

    reflexin verde es ms indicativa del status de N en cultivo cuando hay suficiente material

    vegetativo para absorber (va fotosntesis) una mayor parte de la luz roja.

    2) ANALISIS E INTERPRETACIN DE LOS DATOS

    El objeto del anlisis e interpretacin de los datos relevados es determinar cules son las

    limitantes al rendimiento de los cultivos en cada sitio del campo y si estas se modifican

    para diferentes aos. En cualquier ao, el rendimiento en diferentes partes del campo,

    puede potencialmente estar limitado por cualquiera de los diferentes factores que lo

    condicionan: edficos, antropognicos, biolgicos y meteorolgicos. La variabilidad

    espacial en estos factores puede estar influenciada por diferencias en la topografa, la

    estructura y el agua del suelo, microclima, etc. La importancia del los factores limitantes

    puede variar dentro y entre estaciones de cultivo.

    El primer paso para el anlisis de los datos es proceder a la limpieza de los mismos, que

    consiste en la remocin de errores, fundamentalmente en los mapas de rendimiento. Con

    estos ltimos se debe analizar el ancho y posicin del cabezal, retardo de flujo de grano en

    la cosechadora, cambios de velocidad abruptos, retardo inicial y final de cada pasada,

    valores extremos de rendimiento, errores de posicin y otros (Simbahan, et al., 2004;

    Sudduth & Drummond, 2007). Para completar esta paso, existe un software especfico

    Yield Editor ( http://www.ars.usda.gov/Services/Services.htm?modecode=36-22-15-00).

    En segundo lugar, para mapas de rendimiento de diferentes cultivos en un mismo lote, se

    deben normalizar los rendimientos de diferentes especies, expresando los mismos en

    forma relativa al mximo rendimiento de cada cultivo(Flowers, et al., 2005).

  • Figura 10: Etapas en el anlisis de datos A) datos de rendimientos sin analizar, B) luego de eliminar errores, C) normalizados D) ajustados a una grilla comn.

    En una tercera etapa del anlisis se deben ajustar los datos de diferentes parmetros y de

    diferentes aos, a una grilla comn, de forma que estn referidas a puntos con las mismas

    coordenadas(Kleinjan, et al., 2007; Plant, 2001). Esto generalmente se logra con diferentes

    mtodos de interpolacin geoestadistica, por ejemplo el inverso de la distancia o kriging.

    Figura 11: Ajuste de los datos a una grilla comn.

  • Figura 12: Ejemplo de datos del GPS combinados con los de rendimiento, generando una superficie continua por kriging.

    El siguiente paso del anlisis de los datos consiste en identificar las propiedades que mejor

    correlacionan con el rendimiento de los cultivos (figura 13), aunque debe tenerse en claro

    que correlacin no siempre indica causalidad.

    Finalmente se puede armar un modelo de respuesta del rendimiento del cultivo, basado en

    la o las propiedades que mejor correlacionan con el rendimiento.

    Figura 13: Correlaciones de diferentes parmetros con el rendimiento del cultivo (Corwin & Lesch, 2005).

  • 3) IMPLEMENTACIN DE RESPUESTAS

    Cuando se han determinado las causas de la variabilidad del rendimiento, se deben

    determinar las prcticas de manejo ms apropiadas. Puede ocurrir que la variabilidad

    espacial no se desve lo suficiente de la media del campo como para justificar aplicar un

    manejo diferenciado de distintas areas del mismo. De todos modos en ese caso se podr

    plantear un manejo uniforme ms ajustado (Pierce & Nowak, 1999; Plant, 2001). Para los

    otros casos en los que la variabilidad espacial de los factores limitantes del rendimiento, se

    desve considerablemente de la media, se debe plantear un manejo diferenciado de los

    insumos (fertilizantes, enmiendas, laminas de riego, etc.) o practicas (descompactacin,

    drenaje, etc.).

    El manejo diferenciado puede tener por objeto eliminar las limitaciones o ajustar el manejo

    a las mismas. Por ejemplo, la respuesta del cultivo a la fertilizacin nitrogenada es mayor

    en suelos profundos por lo que se podra aumentar la dosis en estos ambientes. Sin

    embargo en el caso que la limitacin a la profundidad de races estuviera originada por

    capas compactadas, podra plantearse una descompactacin profunda para eliminarlas.

    El campo se debe dividir en zonas de manejo donde cada una es una subregin que

    expresa una combinacin homognea de factores limitantes del rendimiento, para el cual

    una misma dosis de un insumo del cultivo es apropiado para alcanzar la mxima eficiencia

    productiva (Doerge, 1999). La delineacin de las zonas de manejo se puede realizar a

    partir de la variabilidad del del cultivo (mapas de rendimiento, imgenes satelitales, fotos

    aereas) o bien partiendo de la variabilidad de las propiedades del suelo que lo influencian

    (relevada mediante grillas de muestreo). En este ltimo la intensidad de muestreo

    necesaria para lograr la densidad de informacin adecuada, desalienta su utilizacin por lo

    elevado de los costos (Cox & Gerard, 2012). No se descartan los muestreos ya que son

    imprescindibles para relevar determinadas propiedades, pero se realizan con menos

    muestras para caracterizar los ambientes que ya fueron diferenciados por otros medios.

    Existe la posibilidad de diferenciar zonas de manejo en funcin de mapas de suelos,

    topografa, sensores remotos o la experiencia de los productores. Sin embargo la

    delineacin de zonas de manejo a partir de mapas de rendimiento, se ve facilitada por la

    disponibilidad de los mismos para varios aos, en muchos establecimientos

    agropecuarios(Flowers, et al., 2005).

  • En el caso de que ms de un factor influencie el rendimiento, se agrupan los ms

    importantes que limitan el rendimiento en areas determinadas, cuantos ms factores se

    incluyan en la delineacin de una zona de manejo, ms preciso ser el mapa de aplicacin

    variable (Doerge, 1999; McCann, et al., 1996).

    Para la delineacin de zonas de manejo, generalmente se ha estado usando tcnicas de

    anlisis de conglomerados (cluster analysis), para agrupar caractersticas similares

    basadas en propiedades del suelo o atributos geogrficos, aunque no hay una tcnica de

    delineacin de zonas de manejo aceptada universalmente

    En el caso de hallarse tan solo un factor que condicione el rendimiento, la diferenciacin de

    ambientes se limita a delinear reas con diferente grado de expresin del mismo. Cuando

    las limitaciones son varias, se debe valorar la importancia de cada una en los diferentes

    ambientes, pudiendo ser necesario diferentes prcticas de manejo en las distintas zonas.

    Figura 14: A partir de la informacin der rendimiento se definen tres zonas de diferente potencial productivo.

    En la figura 14 a, b, c y d, se observan mapas de los factores limitantes del rendimiento,

    generados por interpolacin a partir del muestreo de estos parmetros. De los mismos

    surgen cuatro recomendaciones para mejorar el rendimiento, 1) reducir la fraccin de

    lavado en reas con mucho drenaje, 2) reducir la salinidad aumentando el lavado donde la

    salinidad en la zona de races supere los 7,17 dS/m, 3) incrementar la disponibilidad de

    agua para los cultivos en las reas de textura gruesa, aumentando la frecuencia del riego,

    y 4) reducir el pH donde sea superior a 7,9(Corwin & Lesch, 2010).

  • Figura 15: Zonas de manejo con diferentes practicas en funcin de distintas limitantes.

  • Las zonas de manejo deben ajustarse a los siguientes criterios: 1) las diferencias de

    rendimiento entre zonas deben ser mayores que las diferencias dentro de cada zona, 2) los

    principales factores que influencian el rendimiento en cada zona, deben ser los mismos

    (Plant, et al., 1999),, 3) las areas de diferente potencial productivo pueden o no ser

    contiguas y 4) el nmero de zonas diferenciadas es subjetivo y depende de la tcnica

    utilizada para delinearlas y la escala de variacin observada en el campo. (Khosla et al.

    2002; Koch et al. 2004).

    Extensin de las zonas de manejo

    Al definir las areas que van a recibir un manejo diferenciado, existen condicionantes

    prcticos a la superficie dedicada a cada tratamiento. Es conveniente dividir los lotes en no

    mucho ms de dos o tres areas diferenciadas por potencial de rendimiento, debido a las

    dificultades que se presentan para manejar areas muy pequeas con la tecnologa

    disponible, por ej. an con mapas muy precisos, las deficiencias de nutrientes o las plagas

    pueden presentar dificultades para su tratamiento, si su expresin areal es

    considerablemente menor que la mnima rea tratable por los equipos de aplicacin

    disponibles(Pierce & Nowak, 1999), adems para aplicar determinados insumos existe un

    tiempo de retardo para variar la dosis.

    Variabilidad temporal

    El uso de zonas de manejo ha producido resultados encontrados, con zonas que presentan

    una produccin homognea en algunos aos y en otros presentan diferencias marcadas al

    interior de las mismas. Particularmente se ha encontrado que los patrones espaciales de

    rendimiento cambian en los aos ms secos o hmedos, apartndose de las zonas de

    manejo definidas. Por lo tanto el uso de zonas de manejo basadas en propiedades del

    suelo, tendra sus limitaciones a lo largo de los aos y debera ser complementada con el

    uso de sensores remotos que releven la variabilidad del cultivo, por ejemplo para las

    aplicaciones variables de nitrgeno(Roberts, et al., 2010). Blackmore (2003), ha planteado

    que en el caso del rendimiento la mayor parte de la variabilidad espacial se cancela en el

    tiempo (va tendiendo a valores medios), en la medida que se van sumando datos de

    diferentes aos. Las condiciones climticas en conjunto con el tipo de suelo, podran

    explicar esto: si un campo tuviera una rea baja donde escurriera el agua, podra tener un

    rendimiento alto en un ao seco y un rendimiento bajo en un ao hmedo, por lo que

    tenderan a valores medios en el tiempo.

  • Sin embargo, aunque las zonas de manejo en un ao sean un poco diferentes de las que

    pudieran definirse en un ao diferente, aun cuando el cultivo sea el mismo, estas proveen

    un medio para caracterizar la distribucin espacial de los factores limitantes del

    rendimiento para cada campaa. La acumulacin de mapas de zonas de manejo de

    diferentes campaas en el mismo campo puede proveer de un medio para comprender la

    respuesta espacial del cultivo(Plant, 2001).

    Manejo sitio especfico en tiempo real El manejo de la fertilizacin nitrogenada se debe realizar en funcin de las condiciones del

    ao en curso, ms que por el uso de mapas de rendimiento de los aos previos. Es

    necesario combinar informacin en tiempo real, sobre la estructura del cultivo,

    generalmente obtenida mediante sensores remotos y comprobacin con los modelos

    existentes de respuesta al nitrgeno, para ajustar exitosamente las dosis que optimicen el

    rendimiento. Este manejo basado en el cultivo, cuando se realiza a partir de imgenes

    satelitales presenta algunas limitaciones como la presencia de nubes que provocan la

    perdida de informacin, pero fundamentalmente la resolucin (unos 20 metros). Existen

    sensores terrestres que miden la reflexin del cultivo montados sobre la maquinaria de

    aplicacin (tractores o pulverizadoras autopropulsadas), para realizar la aplicacin en

    tiempo real(Bianchini, 2007).

    Los estudios comparativos entre el manejo de la fertilizacin nitrogenada basada en el

    cultivo y otras alternativas, han indicado un aumento en la eficiencia en el uso del

    nitrgeno, pero con nulos a pequeos aumentos del rendimiento, poniendo en cuestin la

    rentabilidad de la estrategia, particularmente por el costo que actualmente tienen los

    sensores (Dobermann, et al., 2004). A nivel local se ha observado los mismos resultados

    de aumento de la eficiencia en el uso del N, sin diferencias en el rendimiento respecto de

    aplicacin de dosis uniformes, aunque se estima que con la reduccin de los precios de los

    sensores, la tcnica ser una opcin viable para ajustar la eficiencia de la fertilizacin

    (Melchiori, 2010).

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