Carlos Alberto Jiménez Cuenca

Yeimmy Carolina Angulo

El libro intenta demostrar la estrecha relación entre el tráfico de drogas, el terrorismo internacional y los servicios secretos de las principales potencias mundiales, con el eje del petróleo y el sustento de la droga como bases de la economía mundial.

“El mundo está dirigido desde la sombra por un mundo paralelo liderado por los grandes traficantes de armas, de drogas y por los terroristas, que mantienen un poder importante en los principales servicios secretos, en los gobiernos y en las organizaciones internacionales”.

“Existe relación entre organizaciones republicanas y grupos islamistas”.

Los Gobiernos y grandes organismos que apelan a la paz o luchan contra las drogas, son aquellos que venden armas y trafican con drogas a mayor escala.

En esta relación entre republicanos e islamistas, se planeó el 11S por el Gobierno Washington, que en mayo del 2001 recibió un informe que se refería al posible fin del petróleo en cerca de 20 años.

Estulin también se refirió a las causas del 11S, la clave está en

Iraq, pero motivado por la posibilidad de que la coalición

liderada por EEUU y Gran Bretaña pudiese hacerse con el

mercado petrolífero y energético que hasta ese momento tenían Francia y

Rusia.

Muchas relaciones internacionales y el fruto de

los principales conflictos mundiales es el petróleo, base éste a su vez de la

economía mundial.

El otro eje del comercio mundial es la droga, que

genera 700.000 millones de dólares de impuestos, por lo que "sin el dinero de la droga se desplomaría la economía

mundial".

El poder financiero es el que mueve el mundo, impulsado por el petróleo y dirigido desde la sombra, con sede principal en Londres y no en Nueva York.

Entre este grupo de líderes en la sombra destaca el mafioso Victor Bout, uno de los traficantes de armas y de drogas más importantes del mundo, que ha mantenido relaciones con los principales servicios secretos del mundo. Además este hombre trabajó como subcontratista en Iraq para EEUU, pese a conocerse su relación con el mundo de la droga y el terror.

El tráfico de armas, íntimamente ligado al terrorismo y a la droga, constituye además otro de los

puntos importantes de negocio. Actualmente, la gran mayoría de los

53 países de África han sufrido alguna guerra en los últimos treinta años. La mitad de estos conflictos

han sido impulsados por organizaciones secretas, vinculadas a estas mafias, y para potenciar la

inestabilidad que permita acceder a las fuentes de energía existentes en

el continente.

Daniel Estulin explica que para, algún día, poder ayudar

y cambiar en algo el modo actual por el que se rige el mundo, primero hay que

entender cómo se mueve el dinero.