lo bueno, lo malo, lo lindo ylo feo del cine argentino · antecesores, que era lo que ... mancha...

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ORDEN Y CAOS ICARTA DEL EXTERIOR Lo bueno, lo malo, lo lindo y lo feo del cine argentino Nora Franco* En 1950 había dos mil 190 salas cine- matográficas en Argentina; 40 años después la cifra se redujo a 280. En 1975, un solo film, Nazareno Cruz y el lobo, vendió tres millones 400 mil entradas. "Yo no vaya ver pelleulas ar- gentinas", sostenía con cara de asco la mayoría del público del país sudame- ricano hace menos de diez años. Durante el 2002, el cine argentino independiente ha recaudado fuera del país más de 20 millones de dólares. En el último Festival de Cine de San Sebastián (España) compitieron siete films, y dos obtuvieron importantes premios. En España la exhibición de El mismo amor, la misma lluvia ha re- caudado más dinero que todo el recau- dado en Argentina. Apuntes de los vaivenes de la cinematografía gaucha. que comenzó su carrera en 1930. Los detalles de estos largos metros de celuloide con Alejo Alvarez Herrera, crítico cinematográfico. -Tenía ocho años cuando mi padre, amante del cine, me llevaba a las salas cinematográficas de Buenos Aires casi todas las semanas. En aquellos tiem- pos negociaba con mi viejo: por cada film de Kurosawa, Bergman, Fellini o algún Otro clásico de la época, podría- mos ir a ver uno de Fantamas, de Dany Kaye o de AbOtr & Costello. Esre rito se mantuvo en la adolescencia. En 1992 me recibí de arquitecto y trabajé seis años como tal hasta que cambié de rumbo: intentaría crecer en la crítica cinematográfica. Me estrené como crí- * Periodista argentina radicada en El Salvador. Es una de las dos responsables del proyecto" Año 2000: Memoria Histórica de las Mujeres en América latina y el Caribe" tico de cine en octubre de 1998. En el 2001 viajé a El Salvador. A los cuatro meses le propuse al embajador de Ar- gentina realizar un ciclo de cine argen- tino. Accedió y del 8 al 13 de diciembre de ese año, en la Universidad Centro- americana José Simeón Cañas, presen- tarnos el ciclo. Meses después regresé a Buenos Aires y en julio del año pasado el mismo diplomático me invitó a or- ganizar un nuevo ciclo en El Salvador, que se desarrolló entre el 17 Yel 30 de octubre; además di un taller sobre crí- tica de cine y una conferencia acerca del nuevo cine argentino. -¿Es posible citar a directores y títu- los para tener en cuenta en la historia de la cinematografía argentina sin caer en pecado? -Hacer un listado de títulos desta- cados sobre cien años de historia cine- matográfica argentina seguramente terminará pecando de injusto por de- masiado corto, demasiado largo o poco objetivo. De todas formas, según mi criterio, me atrevo con estos nombres: Los martes orquídeas (1941, Francisco Mugica), Safo, historia de una pasión (1943, Carlos Hugo Christensen), Rosaura a las diez (1958, Mario Soffici), La casa del dngel (1957, Leopoldo To- rre Nilson), 3 veces Ana (1961, David Kohon), Los inundados (1962, Fernan- do Birri), Crónica de un niño solo (1964, Leonardo Favio), Invasión (1969, Hugo Santiago, con guión de Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares), La hora de los hornos (1968, Fernando Pino Solanas), Los traidores (1973, Ray- mundo Gleyzer), La historia oficial (1985, Luis Puenzo), Garage Olimpo (1999, Marco Bechis), El acto en cues- tión (1993, Alejandro Agresti), Pizza, birra, foso (1997, Bruno Stagnaro y Adrián Caetano), Nueve reinas (2000, Fabián Bielinsky) y El hijo de la novia (2001, Juan José CampaneUa). -¿Esos directores y películas respon- den a determinados periodos del que- hacer cinematográfico? -Es difícil determinar periodos con precisión, ya que todo se fue dando de modo espontáneo y unos directores se entremezclan con quienes los preceden, pero intentaré armar un esbozo. En la llamada edad de oro del cine argentino los grandes estudios manejaban roda la producción nacional copiando pelí- UNIVERSIDAD DE MÉXICO· Marzo 2003 71

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Page 1: Lo bueno, lo malo, lo lindo ylo feo del cine argentino · antecesores, que era lo que ... mancha negta del cine nacional del año pasado.-¿Razones?-Porun lado, los antecedentes que

ORDEN YCAOS ICARTA DEL EXTERIOR

Lo bueno, lo malo, lo lindoy lo feo del cine argentino

Nora Franco*

En 1950 había dos mil 190 salas cine­matográficas en Argentina; 40 añosdespués la cifra se redujo a 280. En1975, un solo film, Nazareno Cruzy ellobo, vendió tres millones 400 milentradas. "Yo no vaya ver pelleulas ar­gentinas", sostenía con cara de asco lamayoría del público del país sudame­ricano hace menos de diez años.Durante el 2002, el cine argentinoindependiente ha recaudado fuera delpaís más de 20 millones de dólares. Enel último Festival de Cine de SanSebastián (España) compitieron sietefilms, y dos obtuvieron importantespremios. En España la exhibición deEl mismo amor, la misma lluvia ha re­caudado más dinero que todo el recau­dado en Argentina. Apuntes de losvaivenes de la cinematografía gaucha.que comenzó su carrera en 1930. Losdetalles de estos largos metros deceluloide con Alejo Alvarez Herrera,crítico cinematográfico.

-Tenía ocho años cuando mi padre,amante del cine, me llevaba a las salascinematográficas de Buenos Aires casitodas las semanas. En aquellos tiem­pos negociaba con mi viejo: por cadafilm de Kurosawa, Bergman, Fellini oalgún Otro clásico de la época, podría­mos ir aver uno de Fantamas, de DanyKaye o de AbOtr & Costello. Esre ritose mantuvo en la adolescencia. En 1992me recibí de arquitecto y trabajé seisaños como tal hasta que cambié derumbo: intentaría crecer en la críticacinematográfica. Me estrené como crí-

* Periodista argentina radicada enEl Salvador. Es una de las dosresponsables del proyecto"Año 2000:Memoria Histórica de las Mujeres enAmérica latina y el Caribe"

tico de cine en octubre de 1998. En el2001 viajé a El Salvador. A los cuatromeses le propuse al embajador de Ar­gentina realizar un ciclo de cine argen­tino. Accedió y del 8 al 13 de diciembrede ese año, en la Universidad Centro­americana José Simeón Cañas, presen­tarnos el ciclo. Meses después regresé aBuenos Aires y en julio del año pasadoel mismo diplomático me invitó a or­ganizar un nuevo ciclo en El Salvador,que se desarrolló entre el 17 Yel 30 deoctubre; además di un taller sobre crí­tica de cine y una conferencia acercadel nuevo cine argentino.

-¿Es posible citar a directores y títu­los para tener en cuenta en la historiade la cinematografía argentina sin caeren pecado?

-Hacer un listado de títulos desta­cados sobre cien años de historia cine­matográfica argentina seguramenteterminará pecando de injusto por de­masiado corto, demasiado largo o pocoobjetivo. De todas formas, según micriterio, me atrevo con estos nombres:Los martes orquídeas (1941, FranciscoMugica), Safo, historia de una pasión(1943, Carlos Hugo Christensen),

Rosaura alas diez (1958, Mario Soffici),La casa del dngel (1957, Leopoldo To­rre Nilson), 3 veces Ana (1961, DavidKohon), Los inundados (1962, Fernan­do Birri), Crónica de un niño solo (1964,Leonardo Favio), Invasión (1969, HugoSantiago, con guión de Jorge LuisBorges yAdolfo Bioy Casares), La horade los hornos (1968, Fernando PinoSolanas), Los traidores (1973, Ray­mundo Gleyzer), La historia oficial(1985, Luis Puenzo), Garage Olimpo(1999, Marco Bechis), El acto en cues­tión (1993, Alejandro Agresti), Pizza,birra, foso (1997, Bruno Stagnaro yAdrián Caetano), Nueve reinas (2000,Fabián Bielinsky) y El hijo de la novia(2001, Juan José CampaneUa).

-¿Esos directores y películas respon­den a determinados periodos del que­hacer cinematográfico?

-Es difícil determinar periodos conprecisión, ya que todo se fue dando demodo espontáneo y unos directores seentremezclan con quienes los preceden,pero intentaré armar un esbozo. En lallamada edad de oro del cine argentinolos grandes estudios manejaban roda laproducción nacional copiando pelí-

UNIVERSIDAD DE MÉXICO· Marzo 2003 71

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OlOENYCAOS

culas de género de acuerdoon e! modelo provenien« de

Hollywood. on ejemplos Losmartts orr¡uídellS, Safo, bistoria de,mapllSidn y ROSl/llm o los diez. Pos­teriormenre, en la década de los cin­cuen.., Leopoldo Torre Nilson -quetmbajó con su padre, Leopoldo TorreRJo - es e! primer direcror que buscaapararse de! modelo hoUywoodenseiniciando un estilo propio con temasna ionales. De él desraco la ya cicadaCata del Jngrl. Los aires nuevos en e!trabajo de Torre Nilson ruvieron im­pacro en otrOS cineastas de su épocaque, integrados en la generación del 60,erran c:I primer cine independienteargentino. De esta época son las pe­lfeulas 3 V"tI Ano, Los inundados,cro"icl1 dt un niño solo e Invasión. Estemovimiento se mamuvo hasta el golpemilitar de 1968, ya que, ame la censutaimpuesta por los militares, los direcro­res prefirieron dejar de filmar.

-Sin embargo, poco tiempo despuésvasios cineastas rodaron pelfculas dehondo compromiso social y polftico.

-Sí, a parrir de los setenta se iniciae! periodo del cine de militancia polí­tica. Pe!feulas como Lo hora de los hor­nos y Los traidorn son exhibidasclandestinamente en iglesias. centrosbarriales, bibliotecas o casas particula­res. En esta época Raymundo Gleyserse conviene en el primer cineasta argen­tino desaparecido. A partir de 1983,con e! retorno de la democracia, y hastahoy, se han realizado muchos films quehan tratado, con mayor O menor éxiroy calidad, de reflejar las circunstanciassociales durante los últimos gobiernosdi ..toriales. Es a partir de la décadade los noventa, Con pe!fculas comoEl tltlo ~n cunti611, Pizu. bin-a. faso,Mundo grúa y Rapado, entre otras,cuando se inicia un movimientoindependiente: que actualmente seencuentra en su apogeo y es el que hizoque todo ~ rival de cine internacionalCUc-"lc: con uno o V21rios t(rulos argen~

unos en compc.tencia. Pa.rale.lamenre,

n - 2003· UNlVElSIDAD DE MtXICO

se desarrolla e! llamado nuevo cinecomercial de los noventa con buenosejemplos de películas de género yentretenimiento que, al mismo tiempo,mantenían una impronta nacionalmuy fuerte. Nueve reinos, EL hijo de/o novia y El mismo amor, /o mismaI/uvia, son algunas películas de estaetapa. En 1996 se estrenaron 39 filmsnacionales que vendieron cinco mi­llones 200 mil entradas.

-Tiempo antes el público argentinose negaba a ver películas nacionales.

-Sí, en los últimos diez años, yhasta hace cinco también, la frase másusual en personas de rodas las edadesera: "Yo no veo cine argentino". Eraaburrido, era ver siempre más de lomismo, temas similares con los mis­mos actores siempre. Realmente huboun cambio renovador entre 1995 y1997, con el surgimiento de! movi­miento independiente al que me refe~

ría, y entonces la historia cambia.-¿Qué facrores se conjugaron para

e! arranque de ese movimiento?-Podemos establecer como punro

de partida la presentación de Pizza,birra, fllSo en el recuperado Festival deCine de Mar del Plata -un festival alque se le dio la categoría "A", es decir,lo máximo del nivel de los festivales deCan.n.es., ':'enecia o Berlín, categoría quea mI JUICIO no se merece- y de Mundogrúa en e! Festival de Cine ¡ndepen­diente de Buenos Aires -un festivalrealmente muy serio en e! que se veCanmás de 200 títulos, muchos de los cua-

les no se exhibían comercialmente.Ambas películas fueron aclamadas en

los respectivos festivales que se estr<­naron, tuvieron éxito de público yademás concursaron y ganaronmuchos premios en distintos fes-tivales de cine. Ya la historia ini.cial de este movimiento le agrego

otros fiLms influyentes, comoBUCflosAires vicevmo (1996,A1ejan­

droAgresti), Felicidodes (1999, LuchoBender), Rapado (1992, MartínRejtrnan) y 76.89,03 (1999, NardiniBernard). Algunos de los muchos mo­tivos que hicieron posible este movi­miento fueron la recuperación de losfestivales internacionales de cine queAr­gentina había petdido hace años, yquesirvieron para que nuestros jifms se ro­nocieran enrre los extranjeros, ypara quenuestros cineastas tuvieran alcance apelículas de diferemes latitudes; la esta·

bilidad económica y la accesibilidad deprecios de cámaras y demás ins(rumen~

tos; la gran proliferación de escuelasde cine que permitieron a camadas dejóvenes filmar sin las influencias de susantecesores, que era lo que venía sute-­diendo en los últimos 50 años.

-Supongo que esro último impri­mió una nueva estética a los cineastas.

-Sí, ya que prefirieron establecerotro tipo de vínculo con Argentina:contaron hiswrias pequeñas, con len­guaje simple y lleno de modismospropios; eligieron tipos físicos adecua­dos a los roles en lugat de gtandesactores que pudieran no dar con elpapel; filmaron mucho en la calle, loque le da gran identidad a las películas;limitaron los temas políticos y se dedI­caron más a la problemática dela gen~e

común, y se animaron a dejar masdudas en el espectador, en lugar derespuestas de libro, que era lo quecaracterizaba a nuestro cine anteflor.

-Pasemos de lo bueno a lo malo:¿cuáles son los peores títulos que se fil­maron en Argentina? Recuerdo esoSengendsos protagonizados por Olmedoy Porce!.

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-Para mi esosftLms, si bien son com­pletamente olvidables, tenían la gtanventaja de ser honestos; nunca preten­dieron ser nada más que un mero en­tretenimiento banal y chabacano; pOteso no los pondría en un listado tanpoco quetible como el de los peoresfilms. A mi manera de vet, y para nom­brar algunas teptesentativas de lo peotde los últimos años, cito las películas deJotge Polaco - Viajepor elcuerpo, del año2000, podtía ser un buen ejemplo-,a las que nunca les encuentro otro sen­rido que el de set pretenciosas. Peperina(1995, Raúl de la Torre) fue un en­gendro indignante que protagonizóAndrea del Boca y que recteaba la histo­tia de uno de los grupos más gtandesdel rock nacional de las últimas déca­das, como lo fue Seru Giran. Un ar­grotino en New York (1998) YMi papá"un ídolo (2000), ambas de Juan JoséJusid, podtían set buenos ejemplos so­bte cómo se puede hacet cine comet­cial sin ninguna idea pero apelando ala sensiblería popular y poniendo ac­totes y actrices taquilletas para logtatun pobrísimo producto, pero con mu­cho éxito en boleterías. Por su parte,Vidas privadas (2002, Firo Paéz) es lamancha negta del cine nacional delaño pasado.

-¿Razones?-Por un lado, los antecedentes que

generaron una gran expectativa y, porel Otro, el tesultado final del jilm. En­tre los antecedentes nombro el que unafigura tan emblemática como Firo Páezes quien se haya tomado tres años para es­ctibit y desatrollar el proyecto casicomo si hubieta sido su hijo más an­helado. Toda esa expectativa se frustrócuando, al ver el fiLm, uno se encon­traba con que, en algo más de una horay media, Con temas como los desapa­recidos, el exilio. la tortura física y men­tal, el incesto, la violencia intrafamiliar,y algunos Otros subtemas, todos erantocados de un modo más similar queel que se usa en las telenovelas y menosque al que uno espera encontrar en un

largometraje que se ctee serio. La frus­trada dirección de actores hizo que unelenco difícil de armar, con estrellascomo Hécror Altetio, Cecilia Rorh,Lito Cruz y Gael García Bernal, hayatenido, sin duda alguna, la peor pre­sentación de su carrera profesional.Realmente se transformó en un jilmmuy difícil de ver produciendo, al mis­mo tiempo, sopor e indignación, sobretodo luego de aguantar tanto malestarpara llegar a un final tan inverosímilcomo forzado. Fue un fracaso estrepi­toso de crítica y público.

-¿Cómo repercute en la industriacinematográfica la crisis económica delpaís?-A finales de los noventa, y espe­

cialmente a mediados del 200 1, la cri­sis comenzaba asentirse muy fuerte enArgentina y todos los que estamos li­gados al cine creímos que eso tendríauna fuerte repercusión, negativa claroestá, en la producción nacional, quecada vez era mayor en cantidad y cali­dad. Al ver que se seguían estrenandojilms uno podía pensar que tal vez eranptoyecros que se habían iniciado conmucha anterioridad y que, por eso,podían seguir saliendo a la luz. Desdefines del 2001 Ycomienzosdel 2002, cuando la crisisnos llevó a profundidadesque los argentinos nuncacreímos que llegaríamos aver, todos asegurarnos queera el momento de la des­pedida, al menos momen­tánea, del cine nacional.Nos volvimos aequivocar.El año pasado se hanestrenado comercialmentealgo más de 30 largome­trajes y muchos de ellos deun nivel superlativo. Sibien nadie en su sano jui­cio puede celebrar unacrisis de esta magnitud, es como si lamisma hubiera aguzado el ingenio delos cineastas llevándolos aencontrar so­luciones diversas para cada uno de los

ORDEN YCAOS

problemas que había que enfrenrar.Muchos de estos jilms se realizaron sólopor la obsesión y voluntad de sus crea­dores ysus ansias de llevar adelante unaidea.

No importa si para ello hay que fil­mar en blanco y negro (Bolivia, 2000,Adrián Caetano), en 16 milímetros(Pizza, birra, faso y Mundo grúa), vi­deo digital, con acrotes no profesiona­les (Historias mínimas, 2002, ManuelAntín), en escenarios naturales o comosea. Es como si hubiera habido unaaproximación al dogma pero, en estecaso, por necesidad. Incluso hubodecenas de películas que se filmaronsólo en uno o varios fines de semana.

-¿En un fin de semana?-Veamos dos representarivas. El

asadito (1999, Gustavo Posriglione) sefUmó íntegramente durante un fin desemana en jornadas que duraron másde 14 horas. Todas las líneas se habíanescrito yensayado hasta donde se pudo,previamenre y por separado. Cuandollegó el momento de filmar se hizo casisin retomas y lo que se corregía eraimprovisado sobre la marcha. SilviaPritto (1998, Martín Rejtman) se rodódurante todos los fines de semana de

un año. De este modo losactores podían hacer sustrabajos remunerados du­rante la semana, ya que casino había dinero para ellosdebido al escaso presu­puesto de producción.

Cabe mencionar que laadmiración despertada entodo el mundo a través delos festivales internaciona­les de cine en los últimosaños por títulos indepen­dientes y otrOS no ranto,pero exitosos, como Nutvt"inas o El hijo tÚ la novia,hace que actualmente sean

muchas las producroras de países ex­tranjeros que se involucran económi­camente en la producción de cineargentino. -e::>

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