“La pobreza debe amarse como fuente muralla de la vida religiosa”.

“Trabaja como si el éxito dependiera de tu propio esfuerzo, pero confía como si todo dependiera de Dios”.

El líder determina adonde necesitamos ir, nos indica el camino acertado, nos convence de que es preciso ir allá y nos conduce a través de los obstáculos que nos separan de la tierra prometida.

Dotarlos de las destrezas para discernir por si mismos lo que había que hacer.

La mayor fortaleza del líder es su visión personal, que comunica por el ejemplo de su vida diaria: que es lo que yo busco?, que quiero?, cómo encajo en el mundo?

Todos son líderes y todos pueden dirigir constantemente.

Los líderes prosperan al entender quiénes son y que valoran, al observar y al cultivar el habito de continua reflexión y aprendizaje.

Los líderes se acomodan y hacen acomodar a los demás en un mundo cambiante.

“Gobernar con todo el amor y modestia y caridad posibles”.

Los héroes sacan oro de lo que tienen a mano en lugar de esperar a tener en la mano oportunidades de oro.

“Magis”; más, siempre algo más, algo más grande.

Aspirar a poner el esfuerzo total del equipo al servicio de algo.

Estar siempre enseñando y aprendiendo.

Formar hombres y mujeres “brillantes y eminentes”.

Permanecer abiertos a las ideas nuevas.

Influir en los demás con el ejemplo.

Identificar no solo el “que” sino también el “como”.

Señalar una dirección y establecer una visión; motivar equipos para realizar metas; sobreponerse a los obstáculos y producir cambio para mejorar.

Formar nuevos juicios y aprender por el camino.

Los EE.EE. son un resumen de la visión de La Compañía y sirven como la suprema experiencia de desarrollo personal de todo jesuita. Se diseñaron para ayudar a cada uno a elegir o confirmar una dirección en la vida. La experiencia enseña que el hombre acoge con más gusto y entusiasmo lo que el mismo descubre (bastara señalar como con el dedo la veta de la mina y dejar que cada uno excave por sí mismo). En si para percibir el desorden de mis actos a fin de enmendarse y poner orden en mi vida.

Se exhorta para prepararse y presentar batalla contra “el enemigo de nuestra naturaleza humana”.

“Hacer el inventario de quien soy yo, adonde quiero ir y que me detiene”.

Alcanzar la meta de servir a Dios mediante la ayuda a las almas.

A “elegir y desear”: la victoria total.

Ir más allá del servicio de todo corazón.

El amor debe manifestarse en hechos más que en palabras. Significa ayudar a los demás a hacer fructificar su potencial.

“Dar gracias a Dios Nuestro Señor por los beneficios recibidos”.

El conocimiento de sí mismo que se obtiene con los EE.EE. es un preludio para la acción. Es predicar, oír en confesión y usar todos los demás medios que pueda para ayudar a las almas; a mendigar por el camino el pan y la posada, reto simbólico e inconfundible.

“Encontrar a Dios en el mundo, no entre cuatro paredes”, encontrando maneras de permanecer en oración y recogimiento sin abandonar la acción.

Ser simul in active contemplativus (“aun en la acción contemplativos”). Aprender haciendo, reflexionar sobre la vida diaria y aprender del cambio.

Todo el mundo es nuestra casa.

“Pues ¡sus! Heme aquí…”

Ingenio es la voluntad de lanzarse a recorrer el mundo cuando se lo pidan, sin previo aviso, para aprovechar una buena oportunidad; es la voluntad de trabajar y soñar nuevas maneras imaginativas de resolver problemas.

“Si yo construyo, otros me seguirán”.

Las bases del Examen de Conciencia: dominarse y ordenar su propia vida.

La base del ingenio: hacernos indiferentes.

La base del heroísmo: el Magis.

La base del amor: movido a profunda gratitud.

Primero defino que quiero hacer y después como lo quiero hacer.

Deséame suerte cuando me digas adiós.

Si me necesitas aquí, me encontraras, este es mi hogar, este es mi paraíso, otro cantara mañana mi canción de la vida, mañana será otro día para divertirlos.

…y así termina una historia y comienza otra.

“Usted que está en el terreno ve mejor que es lo que se debe hacer”.

“La cuestión urgente de nuestro tiempo es si podemos hacer del cambio un amigo en vez de un enemigo”.

El ingenio se cultiva y se gana persona por persona. A la vez descansa en la convicción de que para la mayoría de los problemas hay solución y que la imaginación, la perseverancia y la apertura a nuevas ideas la encontraran.

Gobernar “más por amor que por temor”.

“Sociedad de Jesús”: una sociedad de amor y una comunidad de espíritus.

Primero mírate a ti mismo, después a los demás.

“Yo realmente acepto con amor lo que se dice con amor”.

El liderazgo movido por amor echa raíces sobre una amplia base, da energía a la acción y crea fuertes lazos de unión en los equipos.

“Amar lo que uno hace”.

“Amar a todos, servir a todos”.

“El poder del corazón es la fortaleza de una compañía”.

El lema de La Compañía, magis: el impulso infatigable de buscar algo más en toda oportunidad y la confianza de encontrarlo. El liderazgo heroico movido por el magis comprende imaginación audaz y deseo de asumir riesgos.

Los líderes perseveran, tienen la voluntad y el valor de seguir adelante.

“Los jesuitas aprenden mejor enseñando a los demás”.

Todos tienen potencial de liderazgo y los verdaderos líderes abren ese potencial en los demás.

El heroísmo está en la nobleza de comprometerse con una manera de vivir que se concentra en metas más grandes que uno mismo.

Librarse de aficiones desordenadas que podrían impedir exponerse al riesgo o la innovación, se apresta para lanzarse imaginativamente sobre las nuevas oportunidades.

“Acudir fervientemente a la salvación y perfeccionamiento de nuestros hermanos”.

Caer no es una tragedia; la tragedia es no aceptar y entender nuestros tropiezos y no aprender de ellos, volverse a levantar y seguir adelante más cauto, mejor líder.