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Libro de Lecturas Cuarto grado

Enero 2011

LIBRO DE LECTURAS Cuarto grado

ENERO 2011

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Libro de Lecturas Cuarto grado

Enero 2011

PRESENTACIN La Secretara de Educacin Pblica, en el marco de la Reforma Integral de la Educacin Bsica, considera fundamental presentar nuevos libros de lecturas que contribuyan a fomentar el gusto por leer.

En esta serie se presentan textos que responden con sencillez y claridad literaria e informativa, a una amplia variedad de temas atractivos para los educandos, que les permita incrementar no slo sus capacidades como lectores, sino tambin, para ir complementando su visin del mundo, de la cultura y de la sociedad.

Cada texto responde a planteamientos que se ubican en cuatro mbitos: Refuerzo curricular, El mundo de hoy, Pensamiento lgico y Para vivir mejor. En estas propuestas se incluyen las recomendaciones planteadas por los docentes en diferentes espacios como foros y reuniones.

Con el propsito de que alumnos, docentes y pblico en general puedan participar en el proceso de mejora continua de este material, los invitamos a enviar sus

aportaciones y comentarios a travs del cuestionario que en este mismo espacio se incluye.

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Libro de Lecturas Cuarto grado

Enero 2011

NDICE

TTULO Adivinanza Calaverita. Diego Rivera El alfabeto Mi escuela El hmster del presidente Las estaciones La vocal perdida Tierra a la vista!... Ren Hernndez Rivera y su pasin por los dinosaurios Sonatina Dos deseos Cuntas palabras! La mascota perfecta Nubecita Mi amigo el rbol La reunin de las frutas Congreso anual de personajes desadaptados El zagal y las ovejas Maana Refranes populares Gregueras Absurdos lgicos Viajemos en el tiempo Trabalenguas Grandes mujeres medallistas Diego y la paloma El jaguar Cricket contra el monstruo sin dientes La vainilla (Leyenda Prehispnica) Una buena decisin Desde chiquito picoso Fusiles y muecas (Fragmento) Uno o varios Ppilas?

AUTOR Oscar Osorio Beristain Francisco Hernndez Eduardo Huchn Estela Maldonado Chvez Juan Villoro Elizabeth Rojas Samperio Carlos Ramos Barboa Ma. Anglica Guilln y del Castillo Mnica Genis Chimal Rubn Daro Vivian Mansour Antonio Domnguez Hidalgo Meztli Reyes Snchez Jos Agustn Escamilla Viveros Martha Judith Oros Luengo Estela Maldonado Chvez Monique Zepeda F. M. Samaniego Amaranta Leyva lvaro Sols Estela Maldonado Chvez Cristina Martnez Martha Liliana Huerta Ortega Procuradura Federal del Consumidor Oscar Osorio Beristain Hugo Alfredo Hinojosa

PG. 5 6 7 10 11 13 14 16 17 20 22 25 26 29 31 33 35 40 41 46 47 48 50 51 53 55 56 59

Luis Guillermo Silva Rojas Julia Gonzlez Quroz Juan de Dios Peza Carlos Alberto Reyes Tosqui

60 63 64 663

Libro de Lecturas Cuarto grado Ptzcuaro entrada al cielo El Sol (Teatro Guiol) Qu es la sustentabilidad? Sacarina y Sacarosa Para ser grande Un kilo de sorpresas dentro de la cabeza La creacin del hombre segn los Mayas Fuga espacial Juanito y el diluvio Una gran leccin Los juegos paralmpicos Mariana Tenorio Pita Israel Huesca Guilln Ximena Sifuentes Mar Carlos Ramos Barboa Israel Huesca Gulln Ana Frida Monterrey Heimsatz Mara Emilia Beyer

Enero 2011 68 70 74 77 79 81 84 87 89 93 96

Adaptacin. Antonio Domnguez Hidalgo Sergio M. Tenorio Sil Alberto Blanco Aurora Consuelo Hernndez Hernndez Karolina Grissel Lara Ramrez

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Libro de Lecturas Cuarto grado Adivinanza

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Oscar Osorio Beristain

Teocintli soy de origen Mexicano, numerosas razas, he formado.

Producto del manejo y domesticacin del ser humano.

Mil formas, texturas y sabores, como ingrediente principal en la gastronoma internacional.

En pozoles, totopos, tortillas y moles, acompao tu comida tradicional. (El maz)

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Libro de Lecturas Cuarto grado Calaverita

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Francisco Hernndez

Diego Rivera

La Calavera Catrina le dijo a Diego Rivera: -Pntame con diamantina y vestida de rumbera. Quiero que la gente fina me recuerde aventurera.

Mas el travieso panzn no le hizo caso a la Muerte. Hoy descansa en el panten o en alguna caja fuerte, escuchando algn danzn o el nmero de la suerte.

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Libro de Lecturas Cuarto grado El alfabeto

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Eduardo Huchn

Si abres un libro gordo puede marearte ver tantas letras juntas. Qu flojera!, dirs, pero ojo! en realidad se trata de un alivio. Las letras facilitan la vida. Sin ellas, la cosa sera un poco ms complicada. Las letras no siempre fueron las mismas. Ni siquiera te puedes imaginar lo distintas que eran hace mucho tiempo. Bueno, resulta difcil pensar cmo era el mundo hace mucho tiempo. No haban nacido ni tus paps ni tus abuelos. Ni los abuelos de tus abuelos. No haba automviles ni aparatos elctricos. Ni pupitres ni mochilas ni celulares o videojuegos. Las personas solan tener barbas largas o llevar las sbanas de su casa como ropa. Algn hombre antiguo tuvo la ocurrencia hace miles de aos de que si dibujaba un rbol eso podra significar un rbol. Brillante idea, verdad? Claro que algn tiempo despus, la gente se aburri de escribirse utilizando slo rboles. Se daban los buenos das con dibujos de rboles y tambin las

buenas noches. Hacan la lista del mercado con rboles. Los recados eran muy difciles de entender! Algunos viejos sabios pensaron que los dibujos poda expresar sentimientos. Se les ocurri que si dibujaban el sol eso podra significar que estaban contentos. El sol nos pone alegres casi a todos, decan. Otros creyeron que la lluvia podra significar que estaban tristes. Has hecho algo parecido?, has dibujado soles y nubes negras para decir cmo te sientes? La idea parece estupenda. El problema es que la gente no slo est feliz o deprimida. Supongamos que te enojas con un amigo. Cmo describes eso? En esos tiempos, las palabras eran muy diferentes a como las conocemos ahora. No haba papel. Algunos pueblos pareca que haban agarrado a un montn de gatos. Que los haban remojado en una tina con agua, y los haban puesto frente a una tablilla de arcilla. No s si tengas gatos. Pero a veces estn enojados y si los quieres abrazar te rasguan. Fjate en las marcas de tu brazo. As eran las letras hace miles de aos.

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Libro de Lecturas Cuarto grado

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Con el paso del tiempo surgieron letras ms parecidas a las actuales. Las letras son signos que tienen un sonido. Por eso son pocas. Si vas al dentista y te pide que abras la boca eso podra ser una A. Igual cuando no entiendes qu te dice tu mam, dices Eh?, que suena a lo que sonara la E. Me pregunto cuntos nios con caries fueron necesarios para inventar el sonido de la A. Las letras han sido muy tiles desde entonces. Supn que quieres decir Ayer jugu futbol. Sin letras haba que dibujar dos equipos, un baln, una cancha y una mascota. Con las letras pierdes menos tiempo y no necesitas tantas crayolas, no crees? Al conjunto de todas las letras se le llama Alfabeto. O Abecedario. Es el orden de las letras de un idioma. Porque no todos los idiomas tienen las mismas letras. Por eso a veces salen palabras raras en las caricaturas de la tele. Porque fueron dibujadas en otros pases. El Abecedario es algo muy til cuando quieres aprender a escribir. Ves el pizarrn y ah estn TODAS las letras que necesitas aprender. Ninguna ms. Con ellas podrs decir todo lo que tienes en la cabeza. Gracias a que hay pocas letras, las computadoras pueden ser tan pequeas. Imagina que tuviramos 90 letras en lugar de 29. Los teclados de las computadoras seran tres veces ms grandes. Gracias a los abecedarios, tus paps y hermanos se mandan mensajes por celular. Pueden leer peridicos y letreros. El optometrista puede ver si necesitas o no lentes. Pero sobre todo, gracias a las letras puedes entender libros como ste. Las letras son muy tiles. Y que sean pocas es maravilloso. Tambin es genial que las letras puedan ordenarse. El Abecedario establece el orden de las letras. Gracias a ese orden puedes encontrar un libro en la biblioteca. Si las letras no se pudieran ordenar, podras pasar das buscando un slo libro! Cualquier palabra escrita puede ordenarse alfabticamente. Los nombres de las personas, por ejemplo. O las palabras en el diccionario. Qu difcil sera encontrar el significado de una palabra si no supieras dnde est! Las letras han simplificado la vida, son divertidas, tienen formas peculiares. Las hay gordas y flacas y algunas parece que tienen cejas, como la8

Libro de Lecturas Cuarto grado

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. Los Abecedarios son como las fotos familiares de las letras. Qu letra te gusta ms?

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Libro de Lecturas Cuarto grado Mi escuela

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Estela Maldonado Chvez

La parcela de mis sueos es mi escuela tan querida donde forjo mi futuro en su seno, da con da.

Con mis libros y cuadernos estudio el arte, la ciencia y en el vivir cotidiano voy formando mi conciencia.

Mis maestros, mis amigos cada da labran mi ser alguna vez, no s cuando pronto llegar a crecer.

Y en mis recuerdos gratos la escuela siempre estar mis amigos, mis maestros, mi mente no olvidar...

Escuela de mis amores fuente de luz y alegra, cada rincn de tus patios trae recuerdos a mi vida!

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Libro de Lecturas Cuarto gradoEL HMSTER DEL PRESIDENTE

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Juan Villoro El presidente usaba un abrigo lleno de bolsillos. Ah guardaba todas las cosas que necesita quien gobierna un pas. Tena un silbato para llamar la atencin, las llaves de la crcel por si deba liberar a un prisionero, caramelos para endulzar las malas noticias, una cmara para retratar ciudadanos favoritos y un sndwich de jamn de pavo por si le daba hambre en las largas ceremonias a las que tena que asistir. Nadie lo haba visto sin esa ropa esencial. El presidente gobernaba con el abrigo puesto. Un da reparti premios a los alumnos ms inteligentes de todas las escuelas y uno de ellos not algo raro: el abrigo tena un bolsillo que brincaba. Sin pensarlo dos veces, el nio meti la mano en el abrigo. Qu encontr ah? Un hmster, ni ms ni menos. El presidente era tan activo porque el hmster lo despertaba cuando estaba a punto de dormirse en medio de un discurso. El roedor le daba energa, pero tambin consejos. Cuando el presidente no saba qu hacer, se pona la mascota en la cabeza para que le revolviera las ideas. Ya se estaba quedando calvo de tanto que el hmster corra por ah. Por desgracia, el presidente haba elegido un animalito de muy mal carcter, que le provocaba enojos y lo haca tomar locas decisiones. Los dems polticos dijeron que ellos tenan un mejor hmster, amable y dispuesto a ayudar a la gente. Entonces el pueblo decidi que no slo elegira al presidente, sino al hmster que lo acompaaba. Cuando lleg el momento de hacer elecciones, los candidatos se tuvieron que presentar en compaa del hmster que los ayudara a gobernar. No slo es importante saber quin gobierna a un pas, sino quines son sus colaboradores. La gente se inform de cules eran los hmsters ms astutos, los ms entregados, los ms serviciales y fue preparando su voto. Algunos hmsters confiaban demasiado en su apariencia, pero no trabajaban mucho. Fue el caso de un espectacular hmster-dlmata. A todo mundo le fascin 11

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su pelo blanco con motas negras, pero despus de posar para las fotografas no haca otra cosa que dormir largas siestas. Otro hmster entusiasm con sus cabellos dorados, pero al primer remojo, sus pelos se despintaron y perdi el apoyo del pueblo, que no quera un animal disfrazado. El que finge que su pelo es de otro color, puede fingir algo peor, pens la gente. Hubo un hmster demasiado travieso que se comi los botones de su dueo y otro indisciplinado que se puso a nadar en la jarra de agua que descubri en un banquete. No falt el hmster que haca espectaculares acrobacias, pero se negaba a participar en asuntos sencillos, como hacerle cosquillas a su amo para que no se durmiera en pblico. De qu sirve saltar por los aires cuando el presidente ronca? Un candidato a presidente lleg con un hmster que saba chiflar y otro con un hmster que se paraba de cabeza. Se trataba de habilidades fantsticas, pero poco necesarias para gobernar. El presidente necesitaba a alguien que lo ayudara a estar concentrado, no que lo distrajera. Poco a poco, la gente entendi que los hmsters se asemejaban a los humanos. Podan ser presumidos, leales, flojos, tramposos, inteligentes, distrados, bobos, glotones, simpticos, generosos, egostas, en fin, podan ser como nosotros. Esto ayud mucho a valorarlos y a entender mejor a las personas que queran ser presidentes. Como las mascotas se parecen a su dueo, fue fcil descubrir las virtudes y los defectos de los polticos por la forma en que se comportaban sus animales. La democracia se perfeccion con este trabajo de equipo. Las elecciones fueron ganadas por un hombre que tena un hmster sencillo, un poco gordito, color caf cartn. Lo que ms impresion de ese candidato fue la forma en que cuidaba a su mascota. La trataba con respeto y cario. Le haca piojito y la peinaba con un peine diminuto. Si as trata a su hmster, tambin a nosotros nos tratar de maravilla, pens la gente. Y as sucedi. Las mejores mascotas nos ayudan a ser mejores personas. 12

Libro de Lecturas Cuarto grado Las estaciones

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Elizabeth Rojas Samperio Hoy es primavera la primera vera, el primer vergel. El campo lleno de flores pincipio de vida princpio de amor. Primero los cantos de un ruiseor. Verano de verde esto, estival el calor inmenso cobija los campos el sol replandece se encantan los amos. Y llega el otoo, anticipa el fro revientan las lluvias se ha ido el esto inicia el retoo se coloca un moo. Empieza el invierno parece que acaba ms viene el renuevo que dar al comienzo la prima de vera despus de estos fros, de nieves hibernas se duerme confiado el invierno mo.

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Libro de Lecturas Cuarto grado La vocal perdida

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Carlos Ramos Barboa

Daniel despert ese da como todos los das. El sol brillaba esplndido a travs de la ventana y se oa el alegre canto de los pjaros en el jardn. Mam y pap estaban en la cocina. l lea el peridico del da y ella preparaba la torta para el colegio. Pero Daniel perciba algo mal dentro de la aparente normalidad. El canto de los pjaros sonaba distinto, como si no entonaran la misma meloda de siempre. Se acerc a la ventana y, mientras apreciaba el trino de las aves, dej la mente en blanco, as pensaba mejor. Entonces oy esa voz: "Halla la vocal perdida!" Daniel comprendi. Por eso los pjaros sonaban distinto. Deba encontrar la vocal extraviada! Como no deseaba contrariar a los padres, decidi darse prisa para vestirse y encontrar por s mismo la vocal perdida; no poda andar lejos. Y, dicho y hecho, se visti como de rayo, se pein frente al espejo, y empez a rastrear a la traviesa vocal. Rastre por toda la casa y NADA! Rastre todo bien y !TEN! Rastre por todo el jardn y SIN! Rastre sobre el silln y NON! Dnde podra estar la traviesa vocal? Se acord de la maestra del colegio. Ella siempre deca: "En los libros est todo el conocimiento." Entonces tom el libro ms a la mano del librero de la sala y lo abri por la mitad. El libro, lleno de historias para nios, tena este encabezado: "LA VOCAL PERDIDA". Comenz a leerlo. El nio de la historia despertaba y echaba de menos a la traviesa vocal desaparecida. Y no poda encontrarla. Al terminar de leer, Daniel estaba como al principio. El nio del libro era como l, pero la historia pareca sin final, como si al escritor se le acabara la tinta antes de escribir la frase definitiva.

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Libro de Lecturas Cuarto grado

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Daniel permaneci otra vez con la mente en blanco; como ya sabemos, as pensaba mejor. El libro tena grabados. El nio representado en esta pgina era parecido a Daniel, y tena en las manos el mismo libro, con el encabezado: "LA VOCAL PERDIDA". La vocal perdida... la vocal perdida... repiti Daniel varias veces. De pronto, la idea salvadora apareci en el blanco tapiz del pensamiento. Entonces volvi a leer la historia del libro desde el principio, pero esta vez lentamente, tratando de identificar todas las vocales, con lo que, pensaba, aparecera la extraviada. Y al final lo tena todo claro. La vocal perdida no apareca en toda la historia! Entonces tom el lpiz del escritorio y anot en el libro la frase final, la necesaria para completar la historia: Rastre en el viejo bal y LA TENAS T!

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Libro de Lecturas Cuarto grado Tierra a la vista!...

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Ma. Anglica Guilln y del Castillo

Las carabelas cruzando mares, a nuevas tierras queran llegar.

Llegar a oriente, era su anhelo da tras das de navegar.

De pronto, alguien Tierra a la vista! con toda fuerza pudo gritar.

La nueva tierra se descubri y otra cultura tambin lleg.

Aos ms tarde ambas culturas de dos que eran una form.

Y as Amrica ya la llamaron por quien un mapa de ella traz.

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Libro de Lecturas Cuarto grado

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Ren Hernndez Rivera y su pasin por los dinosaurios

Mnica Genis Chimal Cul ser el dinosaurio ms grande o cul el ms pequeo, te imaginas haber conocido al Tiranosaurio Rex? l sabe todo de los dinosaurios, cunto medan, qu coman, dnde vivan, pero lo ms interesante es que l ha encontrado restos de dinosaurios que vivieron aqu, s, aqu en Mxico. Hasta ahora no he conocido a nadie que no le fascinen los dinosaurios, esos increbles animales que se originaron hace unos 235 millones de aos, pero qu los hace tan interesantes para l? Ren Hernndez Rivera es un experto en dinosaurios, cuando platicas con l te cautiva y te transporta millones de aos atrs y, los describe de tal manera que ya los ests viendo en tu imaginacin. Una de las razones por las que se dedic a estudiarlos es que le pareci muy interesante que este grupo hayan vivido tantos aos y hayan existido de tantas formas, por ejemplo, con alas o sin ellas; tambin los hubo pequeos y enormes, unos coman carne, otros plantas, otros tenan filosos dientes y colores llamativos. De las cosas que llaman su atencin es que fue un grupo de animales que vivi aproximadamente 170 millones de aos, ellos tuvieron las caractersticas necesarias para enfrentar cualquier problema: como el fro, el calor, la falta de alimento, fuertes tormentas y otros problemas, por eso, lleg un momento en que ya no pudieron vivir ms en nuestro planeta y se extinguieron. Para que Ren Hernndez llegara a ser un experto en dinosaurios tuvo que estudiar paleontologa es decir, se ha dedicado a estudiar a los seres vivos que existieron hace millones aos. Su vida como cientfico es muy emocionante porque ha encontrado restos de estos fascinantes animales en nuestro pas, aunque t no lo creas en Mxico vivieron muchos dinosaurios, sobre todo en17

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Sonora, Coahuila, Chihuahua, Baja California, aunque tambin se han encontrado restos en Michoacn, Oaxaca, Puebla y algunas pistas en Chiapas. Uno de los momentos ms importantes de su vida es haber encontrado y armado el primer dinosaurio hecho por un grupo de cientficos cien por ciento mexicanos. Este proyecto empez en 1988, al gran dinosaurio lo bautizaron con el nombre de Isauria. Las rplicas de Isauria las puedes encontrar en el Museo de Geologa de la UNAM y en el Universum, Museo de las Ciencias, tambin de la UNAM. Otro de los proyectos favoritos fue haber encontrado el Sabinosaurio, otro dinosaurio que vivi aqu en Mxico, se llama as porque los restos se encontraron en un lugar llamado Sabinas que est en el estado de Coahuila. Este dinosaurio tena un pico muy parecido al de un pato y meda desde la punta de la cola hasta la punta de la nariz 14 metros! Pero uno de los dinosaurios endmicos es decir que naci, creci y muri en Mxico fue el Velafronts coahuilensis que tambin tena un pico como el del pato, pero la diferencia es que tena una cresta en su cabeza y coma de todas las plantas que tena a su alrededor. Pero cmo saben los paleontlogos qu coman, cunto medan, cmo vivan los dinosaurios? Ante todo los paleontlogos son como detectives, se especializan en ser grandes observadores, por eso buscan pistas que les ayuden a reconstruir la historia de la vida, en este caso, la vida de los dinosaurios. Las pistas que necesita Ren Hernndez son los fsiles, que son los restos de plantas, frutas, huesos e insectos que se quedaron pegados en las rocas, no importa que pasen miles incluso millones de aos ah se quedan estas pistas bien cuidadas. Cuando encuentran estas rocas las observan y se las llevan a los laboratorios para estudiarlas con mucho cuidado, a travs de los fsiles de dientes, por ejemplo, pueden saber si coman carne o plantas. Las pisadas son otras pistas importantsimas, nos explica el Ren, a travs de ellas se puede conocer el tamao, peso y el comportamiento, por ejemplo si grupo o solos.18

viajaban en

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La oficina en donde trabaja Ren Hernndez no es nada comn, est al aire libre, su herramienta principal no es una computadora, sino su libreta de notas en la que apunta cada detalle, fecha, hora y las caractersticas de cada pista que encuentra; en su mochila tambin puedes encontrar una cmara digital de video y fotogrfica; su martillo, y un GPS, que es un aparato que te indica en dnde ests y a dnde debes ir, tambin necesita una sustancia que sirve para endurecer cada resto que encuentra. En un da comn de trabajo, Ren se levanta, desayuna y se prepara para una larga caminata, cuando encuentra algn fsil tiene que identificar si est bien cuidado, luego se prepara para sacarlo, ya que lo tiene fuera lo envuelve en papel de bao y lo guarda en una bolsa de colecta, para seguir buscando debe marcar el lugar, luego de varios das de excavacin regresa al laboratorio para estudiar todos los restos que encontr. Ren Hernndez Rivera sigue disfrutando su trabajo, pero a parte de buscar restos de dinosaurios en Mxico, ha ido a muchas partes del mundo, una de sus mejores experiencias ha sido en China, porque lo invitaron a buscar pistas y confirmar la idea de que los dinosaurios son los antecesores de las aves. Una de las mejores recomendaciones que tiene Ren Hernndez para todos los apasionados de los dinosaurios es leer mucho, sobre todo para que no se queden con informacin equivocada, por ejemplo, es un mito que los dinosaurios vivieron con los humanos como lo presentan algunas pelculas; as es que ya saben, no hay mejor manera de conocer que leyendo.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Sonatina1

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Rubn Daro La princesa est triste qu tendr la princesa? Los suspiros escapan de tu boca fresa, que ha perdido la risa, que ha perdido el color. La princesa est plida en su silla de oro, est mudo el teclado de su calve sonoro, y en un vaso olvidada, olvidada, se desmaya una flor.

El jardn puebla el triunfo de los pavos reales. Parlanchina, la duea dice cosas banales, y vestido de rojo piruetea el bufn. La princesa no re, la princesa no siente; la princesa persigue por el cielo del Oriente la liblula vaga de una vaga ilusin.

Piensa acaso en el prncipe de Gioconda o de China, o en el que ha detenido su carroza argentina para ver de sus ojos la dulzura de luz o en el rey de las islas de las rosas fragantes, o en el que es soberano de los claros diamantes, o en el dueo orgulloso de la perla de Ormuz?

Ay!, la pobre princesa de la boca de rosa Quiere ser golondrina, quiere ser mariposa, tener alas ligeras, bajo el cielo volar; ir al sol por la escala luminosa de un rayo, saludar a los lirios con los versos de mayo, 1 Rubn Daro (Nicaragua, 1867-1916). Poeta y nnarador representante del ModernismoLatinoamericano. Montes de Oca, Francisco. Ocho siglos de poesa en lengua castellana. Mxio, Ed. Porra, 2001. (Sepan cuantos, 8).

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Libro de Lecturas Cuarto grado o perderse en viento sobre el trueno del mar.

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Ya no quiere el palacio, ni la rueca de plata, ni el halcn encantado, ni el bufn escarlata, ni los cisnes unnimes en el lago de azur. Y estn tristes las flores por la flor de la corte, los jazmines de Oriente, los nelumbos del Norte, de Occidente las dalias y las rosas del Sur.

Pobrecita princesa de los ajos azules! Est presa con sus oros, est presa con sus tules, en la jaula de mrmol del palacio real; el palacio soberbio que vigilan los guardas, que custodian cien negros con sus cien alabardas, un lebrel que no duerme y un dragn colosal.

Oh, quien fuera hipsipila que dej la crislida! (La princesa est triste. La princesa est plida) Oh visin adorada de oros rosa y marfil! Quien volara en la tierra donde un prncipe existe (La princesa est plida, la princesa est triste) ms brillante que el alba, ms hermoso que abril!

Calla, calla princesa --Dice el hada madrina-en caballo con alas, hacia ac se encamina, en el cinto la espada y en la mano el azor, el feliz caballero que te adora sin verte, y que llega de lejos vencedor de la Muerte, a encenderte los labios con su beso de amor.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Dos deseos

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Vivian Mansour

No me gustaba nada cumplir con mis obligaciones: recoger el maz, transportar el agua, asistir a las ceremonias de fin de ciclo. En el nico

momento en que me senta libre y feliz como papalotl, era una vez cada treinta soles. Esperaba con ansia ese da porque me tocaba cargar en mis espaldas un petlacalli lleno a rebosar de nieve del Popocatpetl. Yo era un tameme: llevaba y traa mercancas corriendo a gran velocidad. Me apodaban el venadito porque mis piernas eran correosas y duras como los venados. Yo las examinaba con atencin: no eran muy musculosas, pero cuando empezaban a moverse algo se apoderaba de m y parecan adquirir vida propia. Yo ya no poda dominarlas, ni frenarlas ni siquiera ordenarles que aceleraran. El corazn bailaba, la boca se me abra y yo dejaba atrs mi vida que siempre era igual excepto por ese da. Cuando terminaba mi recorrido ya me esperaba otro tameme para recoger mi paquete y continuar l mismo la carrera contra el viento. Yo lo miraba con pesar: nunca me cansaba de correr y siempre me quedaban ganas de

continuar la carrera. Pero yo tena un secreto: y ese secreto no se lo quera contar a nadie, ms que al volcn. Iztacihutl. No al Popocatpetl, sino a la volcana, a su compaera, al

Ella poda escuchar mi deseo, sin escandalizarse. Como yo viva

cerca de sus faldas, la escal una maana y le susurr en voz baja mi anhelo. Ella abri los ojos, se levant y se rio. Bueno, eso me hubiera gustado que sucediera. La verdad es que una rfaga de viento helado me rode y sent que me haba dado su consentimiento. As que antes de que se cumplieran los 30 das, le cont a mi pap lo que quera hacer. No le hizo nada de gracia. --Pero los dioses me apoyan. Y es para complacer a nuestro emperador. le dije. --Ningn hombre puede lograr tal hazaa. --Claro que s, padre. Yo s puedo. --Pero t eres un nio.22

Libro de Lecturas Cuarto grado

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--T conoces la fuerza de mis piernas. Adems, ya le ped permiso a la volcana. Ese argument lo hizo dudar. Le cont lo de la rfaga del aire fro. No era nada bueno dejar de cumplirle al volcn un deseo, por ms descabellado que ste fuera. --Bueno suspir resignadamente - cundo piensas hacerlo? --En mi siguiente cargada. --Eso s que no. Tienes que prepararte poco a poco. As fue. El primer da recorr tres vueltas alrededor del pueblo. La semana siguiente, cuatro. Primero me dolan las piernas, protestando por el esfuerzo. Por primera vez estaba consciente del poder de los msculos de las piernas, sostenidas, como dos hroes, por largos huesos que nunca conocera pero que fieles y heroicos, sostenan mi carne. --Ya estoy listo padre. En la prxima entrega al gran seor Moctezuma, lo har. El gran da com ligero: atole de maizotl y dos tortillas con huitlacoche. Fui al borde del Popocatpetl, llen a rebosar mi petlacalli de esa nieve pura y algodonosa como nubes fras. A partir de ese momento no dej de correr. Mis piernas se tensaron y hora tras hora, pisaron la ruta que separaba el volcn hasta Tenochtitlan, donde viva el gran Moctezuma. Recorrieron caminos, lagos y puentes. Pisaron hojarascas, piedras y uno que otro chapuln. Senta

bambolearse mi carga en la espalda y las cuerdas que la sostenan, apoyadas en mi frente, empezaron a lastimarme. Mis labios resecos me obligaron a detenerme unos minutos para beber de la rivera de un ro. Por fin llegu al Palacio Real. Ya senta las piernas rgidas y la cara caliente por el esfuerzo. Llegu al prtico, me hinqu y le entregu el petlacalli a uno de los sirvientes. Me sent unos minutos, jadeante, todava incrdulo de lo que haba logrado: haba recorrido 70 kilmetros en poco menos de ocho horas! Mi sorpresa fue mayscula cuando nuevamente el sirviente buscar. --El gran tlatoani quiere saber si es cierto que t solo y sin ayuda completaste la ruta. --Es cierto.23

me vino a

Libro de Lecturas Cuarto grado --No hubo ningn otro relevo? --No, mi seor.

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Nuevamente, se retir. Volvi a aparecer con un cucurucho de hoja de pltano, que sostena con una mezcla de fervor y temor. --Te lo manda nuestro gran seor Moctezuma. Parece que tu hazaa lo ha impresionado. No lo poda creer! Contena la misma nieve que haba transportado, pero esta vez embebida en un color rojizo y verde. El mismsimo tlatoani me estaba compartiendo de su nieve mezclada con jugo de pia y pera. Lo derret con la lengua, no sin antes sonreirle a mis guardianes de hielo, al gran Popocatptl y su compaera dormida, por haberme concedido dos deseos: completar yo solo, sin relevos, mi carrera de tameme y probar, por primera vez, la nieve de las montaas.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Cuntas palabras!

Enero 2011

Antonio Domnguez Hidalgo

Tengo muchas palabras con las que juego. Las hago nudos y nudos y las desato de nuevo. Luego las pongo a bailar con la msica del eco. Las palabras son soldados que las hago combatir y al final de la batalla se mueren por escribir. Las palabras son carruajes que nos llevan a las ferias donde un carrusel de cuentos en vueltas se deletrean. Palabras no estn dormidas. Ya las quiero despertar. No sean flojas palabrillas, vamos, vamos a cantar. Slganse del diccionario para poderlas juntar. Si no fuera por ustedes, con quin voy a platicar. Qu grande amigo eres t, mi diccionario de escuela porque siempre encuentro en ti las palabras que me esperan.

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Libro de Lecturas Cuarto grado La mascota perfecta

Enero 2011

Meztli Reyes Snchez

Alicia es una nia de 10 aos. A pesar de que tiene un cuarto para ella sola y muchos juguetes, hay dos cosas que no puede tener: un hermano y una mascota, pues desde que ella recuerda padece una alergia al acaro y al pelo que tiran los animales. Un da, su pap le regal un libro que contaba la historia de una chica adolescente que tena como mascota a un hurn, bueno en realidad era una hurona. Ella no saba qu cosa era un hurn, por lo que empez a investigar todo sobre esos curiosos animales. Ley libros, busc en internet, pregunt a sus maestras y maestros y, sobre todo, fue a muchas tiendas de mascotas para preguntar a los veterinarios y vendedores como se comportaban los hurones. Aprendi muchas cosas sobre ellos, pero lo que ms contenta la puso fue que descubri que los hurones no tiraban pelo. Feliz les dijo a sus paps que quera tener uno y les cont todo lo que saba. Una vez que termin, le pusieron muchos peros. Que si no la iba a morder con esos colmillos, que si le poda dar rabia, que no porque parecan ratas, que no porque eran primos cercanos de los zorrillos y que iba a apestar toda la casa, que no porque eran ladrones y que se iba a robar todas las cosas. Pero Alicia, una a una, fue aclarando las dudas de sus paps. Les explic que los hurones no eran roedores, por lo que no podan transmitir rabia, que slo mordan cuando alguien intentaba amenazarlos, que no poda apestar porque no eran salvajes y los que vendan en las tiendas de mascotas les haban quitado unas cosas llamadas glndulas que eran las que hacan que arrojaran el olor parecido al de los zorrillos. Ante lo bien informada que estaba, a sus paps no les qued ms remedio que prometerle que lo iban a consultar con su doctor para ver qu opinaba l. Cuando lleg el da de su consulta Hugo, como se llamaba el doctor que la atenda de su alergia, le pregunt que cmo se haba sentido pero antes de responderle, Alicia le platic su idea sobre su nueva mascota. Tambin le cont todo lo que haba aprendido sobre los hurones. l la escuch atentamente y qued sorprendido de que una nia tan pequea pudiera saber tanto de unos26

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animales tan poco conocidos. Al final no le dijo ni s, ni no. Pero le explic que para poder tener cualquier mascota primero tenan que controlar su alergia. Alicia regres desconsolada. Su pap platic con ella y le dijo que si bien el doctor no haba autorizado que tuviera su mascota, tampoco le haba dado un no contundente. Con esta idea se acost a dormir y tuvo un sueo muy raro. So con la mascota perfecta! Y..a la maana siguiente, cuando despert, encontr al lado de su cama un enorme animal que plcidamente se baaba con su lengua como lo hacen algunos animales. No se pareca a nada conocido; era como del tamao de un oso, pero con las orejas y los bigotes de un gato, las patas y la nariz de un perro y con una panza ms grande que la de su to el que era maestro; su color era blanco con algunas manchas negras y grises. Cuando se acerc para verlo de cerca, descubri un pequeo letrero debajo de su cuello que deca nunca me baes con agua, solo dame baos imaginarios. Me alimento de cualquier cosa, menos de carne humana. Era enorme! Ms grande que su cama, era tan grande que poda acostarse a dormir encima de su panza toda cubierta de pelo. Al descubrir esto, se le pusieron los pelos de punta, pues aun resonaba dentro de su cabeza las palabras de su doctor, eres alrgica al pelo de los animales. Y vaya que su nuevo amigo tena todo su cuerpo lleno de pelo. En ese momento pens que tena que darle un nombre pero, cmo lo llamara? Raquel fue lo primero que se le ocurri y as decidi llamarla, aunque aun tena dudas si su peludo amigo era macho o hembra. Sin querer, Alicia descubri que poda rebotar en la panza de su nueva mascota sin que esta se molestara... de pronto, escuch el inconfundible grito de su mam que la llamaba a desayunar. Lo primero que pens fue en esconder a su nueva amiga. Intent en el closet, pero no caba. Prob debajo de la cama, pero como habamos dicho antes era ms grande que su cama! Quiso meterla al bao, pero tampoco cupo. En su desesperacin por esconder a su amiga le dio un enorme jaln de pelo y, con sorpresa, y sobre todo con enorme alegra, descubri que en su mano no haba un solo pelo y eso que el jaln que le haba dado haba sido peor que los que le daba su mam cuando la peinaba antes de ir a la escuela.27

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Alicia baj a desayunar. Mientras lo haca imaginaba cmo la miraran sus compaeros al verla llegar montada en el lomo de Raquel. De ahora en adelante seria la nia ms popular del saln... y no slo eso, tambin sera la ms puntual en llegar a la escuela pues una vez que se montaba en Raquel, en tres segundos ya estaba en la escuela. Qu maravilla! Por fin haba descubierto una forma rpida y divertida de llegar a clases. Y pens: -seria extraordinario que a la hora de la salida Raquel me recogiera para traerme de regreso a casa en un abrir y cerrar de ojosDesde ese da Alicia nunca ms se sinti sola. Pero para ser totalmente feliz, tena que hacer algo para que sus padres le permitieran tener a Raquel, cmo demostrar que su nueva mascota no tiraba pelo, que no ola mal, que podan ahorrarse en comprarle una cama nueva pues poda dormirse encima de ella. En fin, que si se quedaban con ella podan ahorrarse mucho dinero; pero lo principal es que si decidan que no, a dnde la devolveran, pues ni ellos mismos saban que cosa era. Genial!... S! por fin Alicia haba logrado encontrar la mascota perfecta.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Nubecita

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Jos Agustn Escamilla Viveros

Todas las tardes una pequea nube me esperaba escondida tras un rbol. Su risa de nia traviesa la delataba. Entonces yo atravesaba corriendo la calle y no me detena hasta llegar a la estacin del metro. Las primeras veces funcion el truco, pero el da que se dio cuenta me persigui; aunque corro rpido, o sus zancadas hmedas cada vez ms cerca de m. Baj en pocos brincos los escalones y me refugi en la entrada de la estacin. Mientras yo recuperaba el aliento, observ cmo su llanto rodaba por las escaleras y las cubra por completo. Es mala perdedora, pens. Hubo das en que la nubecita llegaba temprano, regaba las calles, los arbustos, los rboles y dejaba tras de s su perfume que ola a tierra mojada y a jacarandas hmedas, pero adems le daba una mano de pintura a las flores, se vean ms brillantes, y adems las coronaba con diminutos diamantes de agua. Pasaron los das y despus, al asomarme por la ventana de mi oficina, la vi esconderse detrs de un edificio. Sal por la puerta de atrs y este truco tambin funcion un par de semanas, pero un da no s cmo se enter de la existencia de mi salida secreta. Esa tarde, muy confiado sal a la calle y de repente me empap su alegra. Jur que no me volvera a tomar desprevenido. Al da siguiente sal orgulloso con mi nuevo paraguas negro que me cost mucho dinero. Cuando me vio, se acerc despacio. Yo lo abr con slo apretar un botn, en ese instante ella sopl y las varillas del paraguas se doblaron hacia atrs; algunas se rompieron, varias se quedaron torcidas; la tela se rasg con un aullido y se elev por los aires como un murcilago con las alas deshilachadas, vol como una mosca borracha y cay en medio de la calle. Los autos se apresuraron a pisotearlo. Pero qu creen?, mi mala suerte dio para ms: un microbs pis un enorme charco, levant una ola de dos metros de alto y un sinfn de agua sucia cay sobre m. Empapado y furioso me agach, tom una piedra y se la arroj a la nube con todas mis fuerzas mientras le gritaba: Te detesto! Siempre me persigues para mojarme, me has echado a perder varios pares de zapatos y ahora arruinaste mi paraguas nuevo. Nunca vuelvas a molestarme!. La29

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nubecita se fue llorando mientras se sobaba donde haba recibido la pedrada; pero s que lo que realmente la hiri fueron mis palabras espinosas y rasposas, que se clavaron como flechas en su corazn. Pasaron muchos das algunas semanas y un par de meses. Ante la ausencia de la nubecita, el calor irrumpi en la ciudad y se adue de ella. Los rboles, las flores y el pasto se desmayaban de sed y tristeza en los parques, en los camellones y en las banquetas. Los ojos de la gente se resbalaban en la inmensidad del cielo azul en busca de la pequea nube, pero sta haba desaparecido. Muchos nios deseaban que lloviera y que se formaran riachuelos en las calles para que echaran barquitos de papel en ellos. Otros chicos ansiaban brincar y correr entre los charcos. Me di cuenta de mi error y me arrepent de haberla herido. Loco de dolor recorr la ciudad buscndola. La llam a gritos. No me respondi. Muy cansado me sent en la banqueta y me sent el ms malo de los hombres. El sentimiento de culpa, el dolor y el arrepentimiento estrujaron mi corazn durante varias horas. Un pajarito se me acerc, quizs en busca de una migaja de pan. Ojal la encontrara para pedirle que me perdone, dije en voz baja. El avecita vol. El sol se puso una capa rosada y en ese momento sent un abrazo hmedo. Levant la vista y me di cuenta que la nubecita me sonrea. Perdname, nubecita, ahora s que la lluvia que nos regalas es una bendicin!, le dije: ella acarici mi rostro con miles de gotitas y... sonri.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Mi amigo el rbol

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Martha Judith Oros Luengo Cuando Jos Luis naci, sus padres sembraron un rbol a la orilla del ro cerca de su comunidad. Ambos fueron creciendo a la par. El pap del nio le ense a cuidarlo; cada da lo llevaba hasta el lugar donde se encontraba sembrado para regarlo y removerle la tierra. Jos Luis saba que era su rbol y con dedicacin aprendi a cuidarlo y a quererlo. Un da, al salir de la escuela, Jos Luis lloraba mientras trataba de explicarle a su mam que estaba triste y muy preocupado porque iban a cortar su rbol para elaborar papel. La maestra les haba explicado el proceso de fabricacin de papel, para lo cual era necesario talar muchos rboles. Les dijo tambin que, con la madera que se obtiene de los rboles, se fabrican diferentes tipos de muebles, puertas, lpices de grafito y de colores, y diversos artculos que hay en los hogares, escuelas y oficinas. Para fabricar el papel, se requiere de la celulosa que se extrae de los rboles; es una pulpa preparada con la madera triturada y mezclada con agua. Con ella, se forma una pasta a la que se aade color o blanqueador, se pasa por rodillos para obtener un lienzo largo y liso que es extendido sobre rejillas para escurrir el agua sobrante; despus de secarse, quedar convertido en lminas de papel. Al nio le pareci muy interesante la clase, sin embargo, la idea de cortar los rboles para fabricar papel y muebles no le agrad en lo absoluto. No poda aceptar que se cortaran tantos rboles, y menos el suyo. Ese rbol con el que creci y aprendi a cuidar, lo consideraba su amigo, por lo tanto, no permitira que lo cortaran. Entonces, le pregunt a su mam si haba forma de salvarlo. Mira, hijo, respondi la mam yo s que muchos rboles se utilizan para esa industria, pero existen diferentes maneras para ayudar a salvarlos de terminar en el aserradero. Es cierto, mam? Qu bien!, dime entonces, qu puedo hacer para ayudar a conservar muchos rboles con vida? pregunt el nio.31

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Bueno, lo primero que debes hacer es cuidar tus cuadernos, libros y todos tus tiles, tambin es conveniente no desperdiciar el papel en el que escribes, debes utilizar ambas caras de las hojas y, desde luego, no arrancarlas del cuaderno. Aadi la mam otra medida es reutilizar los cuadernos ya usados, cuando an tienen hojas limpias para utilizarlos en otro ciclo escolar. Por otra parte, tambin puedes aprender a reciclar el papel, quieres que te lo explique? El nio asinti gustoso y puso mucha atencin a las indicaciones que le deca su mam. Ella le explic un sencillo procedimiento para obtener papel reciclado, utilizando como base de recursos, el papel usado. Con el papel ya reciclado se pueden fabricar cuadernos de notas, tarjetas de felicitacin y otras manualidades, diversos artculos para el hogar como lmparas, marcos para fotografas y pinturas u otros objetos decorativos. Al da siguiente, Jos Luis les platic a sus compaeros y a su maestra todo lo que ahora saba para salvar muchos rboles como el suyo y ayudar a proteger el ambiente. l pens que todos podran colaborar en su lucha, haciendo una campaa para reforestar su localidad. Si cada uno de ellos plantara al menos un rbol y lo cuidara sera una gran labor, mejor an, si en cada escuela o en cada familia hicieran lo mismo, sera un esfuerzo conjunto por una gran causa.

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Libro de Lecturas Cuarto grado La reunin de las frutas

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Estela Maldonado Chvez

Al fondo del comedor una porra se escuch, en el frutero amarillo el limn as grit: Las frutas se han enojado, porque este nio comi charritos y papas fritas y a nosotros ni nos vio.

Que viva! Dicen las frutas, viva el limn que grit, porque los nios de ahora no quieren comer mejor. La naranja habl primero: gran alimento yo soy, prima de la mandarina, la toronja y el limn.

Despus habl la manzana: roja o verde soy mejor, es mi parienta la pera y suculenta yo soy. Se levant la cereza y tambin alz la voz: Yo soy prima de la fresa, de las frutas la mejor.

En un rincn se quedaron el meln y la papaya, las uvas y las bananas, los mangos y la pitaya.33

Libro de Lecturas Cuarto grado De repente as gritaron: Viva, viva esta reunin! Que venga el nio y entonces le diremos la razn. Frituras y chicharrones no te van a alimentar, las golosinas te daan y muy obeso estars. Ven corriendo ac al frutero, que te haremos disfrutar, somos las frutas, que sano, siempre te han de conservar.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Congreso anual de personajes desadaptados

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Monique Zepeda

Eres un hada y te parece que la magia est gastada y de mala calidad? Perteneces a la realeza y el casillo te est costando una fortuna? Eres un personaje famoso y sientes que ya nadie te reconoce? Te sientes de otro planeta y no entiendes lo que ocurre a tu alrededor? Actualzate! Asiste a cursos de renovacin y aprende a ser un personaje de ficcin adaptado a las necesidades del siglo XXI. Transforma tu manera de expresarte y de comunicarte; aprende a defender tus derechos y a reescribir tu historia. Cenicienta le daba vueltas a la propaganda que le haban entregado. Le pareca interesante el curso; no era tan caro. Estaba harta de vivir en una historia donde poda usar un vestido hermoso pero prestado, y donde la felicidad pareca llegar de la mano de un prncipe. Ya haba aprendido que la felicidad no la da otra persona, que en todo caso se comparte. Y la verdad, es que hay tan pocos prncipes, que casi nunca se vean, porque l tena que acudir de prestado a muchos cuentos y casi nunca se vean. Y tambin haba aprendido desafortunadamente, que algunas personas confundan el amor con abandonar sus propios sueos. Y Cenicienta tena sus propios sueos. Haca tiempo que deseaba abrir una lnea de ropa, vestidos de princesa modernos, cmodos, de buena calidad, que te hicieran lucir radiante y te permitieran salir corriendo si fuera necesario. Se haba topado con distintas opiniones: -Para qu te molestas? Deja que el prncipe se haga cargo de tus gastos. -Las princesas no trabajan -Entrar al negocio de la moda es muy complicado. A pesar de todos los comentarios, Cenicienta ya haba empezado un cuaderno con distintos diseos, y una pequea alcanca para empezar a comprar telas, botones, cierres y listones.

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Decidi inscribirse. Total, qu otra manera hay de acercarse a los sueos que no sea ir dando pasitos hacia lo que ms se les acerca? A pesar de lo que diga la gente. El da de las inscripciones, se sorprendi al ver la enorme asistencia. En el exterior del Palacio de Congresos ( as se llamaba el lugar, y no tena torres, ni puertas doradas) se enfilaban toda clase de carruajes, caballos, elefantes, camellos, carrozasCenicienta lleg a pie porque haba aprendido que los vehculos fantsticos te dejan tirada cuando menos te lo esperas. Ingres al saln principal donde haba un letrero enorme que deca: Registro. Ah haba prncipes persas, princesas moras, reinas japonesas, jeques con el turbante mal anudado; todas y cada una de las mil esposas del sultn de las mil y una noches; Blanca Nieves que luca francamente anticuada. Encontr tambin hadas con ojeras y con la varita medio torcida. Vislumbr a unos duendes descoloridos. Salud al Gato sin botas, a quien se le haban gastado las suelas, y que estaba de mal humor. Esquiv uno que otro sapo tristn y desilusionado. Finalmente, se registr y avanz hacia el saln donde se iba a impartir el curso. Les haban repartido a cada uno de los asistentes una carpetas con hojas para poder tomar anotaciones: Las carpetas llevaban el lema: Renovarse o morir, una alternativa que te ayudaremos a resolver. Ya estaba muy acomodada Cenicienta, que haba optado por un vestido discreto pero muy bien cortado, lo cual haca que casi nadie la reconociera: Estaban acostumbrados a verla o en harapos, o en un vestido de terciopelo azul corte imperio con manguitas abombadas, de un gusto muy particular. Estaba segura que a los chicos, prncipes o simples ciudadanos, ese vestido simplemente no les parecera lindo. Cenicienta llegaba a pensar que si ella hubiera escrito el cuento hubiera contratado a un mejor diseador de modas. Y en ese pensamiento estaba cuando inicia la famosa conferencia inicial: Ah estaba un hroe, de esos valientes de antao, un aldeano, un hombre pobre pero honrado que siempre haca el bien, y que, en varios cuentos, lograba casarse con la hija del rey porque haba resuelto algn

problema del reino. Solamente que hoy, el aldeano, estaba vestido de manera

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muy moderna y no quisiramos presumir de que sabemos de qu marca era su traje.

-Estn cansados y cansadas de ser explotados y explotadas como hroes y heronas a quienes nunca les preguntan su opinin? -Estn hartas y hartos de ser protagonistas y protagonistos (oh, perdn) de historias con un final simpln? -Aqu presentamos opciones para convertir su vida en una historia que valga la pena. Y arranc un largo discursoCenicienta se acaba de dar cuenta que junto a ella estaba sentado el Principito. Por si no lo saben el Principito no tienen nada que ver con los prncipes apuestos, varoniles, un poco huecos, y a veces, hasta zonzos, de varias historias que conocemos. Este Principito es todo lo contrario: Es menudo, frgil, pregunta mucho y casi no entiende nada, aunque sabe mucho ms que cualquiera de nosotros que estemos leyendo este relato. Cenicienta estaba encantada. Lo conoca por su historia que estaba llena de estrellas, planetas, boas, faroles y rosas con espinas. Se present en voz baja: -Hola soy Cenicienta. -Porqu te llamas as? pregunt el Principito con un hilo de voz. -Hubo un tiempo en qu era muy pobre y tena el vestido lleno de cenizas del fogn -Pero, eso ya pas no es as?- observ el Principito- Porqu sigues usando el mismo nombre? Cenicienta qued pensativa; realmente le molestaba mucho ese nombre, siempre senta que era el nombre de una vctima, de alguien que quera dar lstima, y como deca el Principito, ese tiempo ya haba sido superado. -Me buscar un nuevo nombre- declar Cenicienta. Y observ de reojo al Principito que miraba al vaco. Su perfil era delicado, sus bucles precisos, su traje era perfecto casi como el El Principito de Antoine de Saint-Exupry.

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traje que usara un cantante que se llamara el Rey del Pop. Hombreras, cuello alto, galones y botones brillantes. -Por qu vienes a este curso?- pregunt Cenicienta Tu no necesitas nada de esta historia de renovacin. -Bueno- dud l algunos dicen que mi historia es anticuada y confusa. Pero yo no le cambiara nada, ni una letra. -Entonces?- insisti ella Puesyo slo quisiera un poco ms de tiempo para crecer- es decir, un pequeo cambio, muy pequeo para que parezca que puedo seguir explorando el universo y quizs pueda aprender a leer, porque en mi historia no parece que yo pueda buscar informacin en un libro, mucho menos en Internet. Un aplauso estruendoso los interrumpi junto con la frase final del conferencista, aldeano de marca: un nuevo principio, un nuevo nombre y arrancamos en una hoja en blanco una nueva vida Salieron al receso. Caf y galletas. Como si los organizadores no

supieran que los personajes de cuento prefieren pan con mantequilla, chocolate, o manzanas (no envenenadas) o un pedazo de queso Cenicienta sac de su bolsa un pedazo de pastel de pltano, exquisito, que comparti con el Principito. -Ah! se extasi l- no haba nada de comer en mi cuento - Te interesa la prxima conferencia? O nos salimos? -Sabes dnde venden patines? -pregunt el Principito con los ojos brillantes- Eso es algo que podra llevar a mi historia sin que se estropeara demasiado. -Claro!- exclam Cecicienta, que se haba vuelto experta en tiendas y en ofertas. Y no s si te habrs dado cuenta, pero los dedos que escribieron estn pginas, se equivocaron y escribieron Cecicienta, en vez de Cenicienta, lo cual le agrado mucho a la susodicha, porque Ceci es mucho ms bonito que Ceni. -Te gusta Ceci o Cecilia como nombre?- le pregunt ilusionada al Principito, mientras se alejaban del Palacio de Congresos. - Mmm Quizs haya alguno que te quede mejor.. Djame pensardud el Principito. -En mi universo hay Rosa Margarita38

Libro de Lecturas Cuarto grado -No. Quisiera algo ms original-suspir ella. -Estrella - Mmm, no. Demasiado distante

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-Ramona, Pancha, Roberta, FacundaRicarda- prob el Principito -NO. No nooo! -Mira que son nombres para valientes -Una buena historia empieza con un buen nombre reflexion ella. - Antonia? Ella movi la cabeza como dudando. -Luz, Mar, Sol, Luna, Cielo, Va Lctea recit risueo el Principito Cenicienta levant la manos pidiendo silencio. -Lo tengo! exclam entusiasmada- Me llamar -Serafina! -Te queda como pintado asegur el Principito, entrecerrando los ojos. Buscamos un nombre para m? Y se alejaron del Palacio de Congresos.

Cuentan que un tiempo ms tarde abri una tienda fantstica, un lugar donde te hacan los trajes que tu imaginacin deseara, y adems, a una velocidad asombrosa, porque Serafina haba conservado un poquito de la magia del cuento de donde ella era originaria. Tambin haba trajes que te hacan soar con planetas, desiertos, estrellas con rboles fantsticos. Trajes con poderes, chaquetas con mapas, vestidos con flotadores, pantalones con alas, zapatillas que ruedan, botas que bailan, sandalias que te permiten caminar sobre el aguaSombreros que anuncian tus ideas si son buenas y que permanecen opacos si tus ideas son oscuras. Diademas que hipnotizan a los que quieren hacer dao, antifaces que muestran las verdaderas intenciones, lentes que te permiten ver hacia adentro Abre bien los ojos, por si acaso en un golpe de suerte, ves esta tienda que se llama Serafina y Desiderio.

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El zagal y las ovejas

F. M. Samaniego

Apacentando un joven su ganado, grit desde la cima de un collado: - Favor, que viene el lobo, labradores! stos, abandonando sus labores, acuden prontamente y hallan que es un engao solamente.

Vuelve a llamar y temen la desgracia; segunda vez los burla: linda gracia! Pero qu sucedi la vez tercera? que vino en realidad la hambrienta fiera. Entonces el zagal, se desgaita, y por ms que patea, llora, grita, no se mueve la gente, desconfiada. Y el lobo se devora la manada.

Cuntas veces resulta de un engao contra el engaador, un mayor dao.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Maana

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Amaranta Leyva

Pedro: --El delantero coloca la pelota, revisa el rea, toma vuelo, prepara el golpe, corre, tira y gooool! Federico: --No! No tan fuerte. Pedro: --Se vol? Federico: --Pues s. Pedro: --Otra vez. Federico: --Pues si le das tan fuerte... Pedro: --No tienes ms? Federico: --Balones? Pedro: --Aunque sea una pelota. Federico: --Creo que tengo una. Pero no s bien dnde est. Pedro: --Te ayudo a buscarla? Federico: --Pero tenemos que ir a mi casa. Pedro: --Vamos. Federico: --Vamos. Est del otro lado del parque. Mejor vamos a la tuya por uno. Pedro: --No, yo no tengo baln. Federico: --A poco no tienes baln... o pelota? Pedro: --Todava no. Maana puedo tener unos. Federico: --Unos qu? Pedro: --Balones. Me gustan ms los balones que las pelotas. Federico: --Y por qu maana y no ahorita? Pedro: --Porque s. Federico: --Esta es mi casa. Pedro: --Es grande. Federico: --Mediana. La casa de mi prima es ms grande que la ma. Pedro: --Tienes llave? Federico: --Pues s, para abrir. Si no, cmo entro? T no tienes llaves? Pedro: --S. Tengo cinco llaves. Federico: --Para qu tantas?41

Libro de Lecturas Cuarto grado Pedro: --Porque me gustan.

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Federico: --Bueno, as si pierdes una, tienes ms. Pasa. Slo est mi hermano. Mis paps estn trabajando. Pedro: --Dnde est tu hermano? Federico: --En nuestro cuarto... Pedro: --Tienen un cuarto? Federico: --Para los dos. A m me gustara tener mi cuarto pero slo tenemos dos, el de mis paps y el nuestro. En cambio, la casa de mi prima parece castillo: tiene cuatro cuartos. Cuntos cuartos hay en tu casa? Pedro: --Uno. Federico: --Uno? Uno para ti dirs. Pedro: --Qu tienes en tu cuarto? Federico: --Pues lo que hay en un cuarto: mi cama, la cama de mi hermano, mi ropa, su ropa, algunos juguetes, una mesa donde mi hermano dibuja. Siempre est dibujando, es su tarea para la universidad. A veces yo tambin la uso, cuando no est. Entonces puedo usar sus plumas, sus lpices... Pedro: --Tiene muchos? Federico: --Plumas? Ms o menos. Tiene muchos lpices de colores. Pedro: --A m tambin me gusta dibujar. Pero yo dibujo en el piso. Federico: --Yo juego con mis coches de carreras en el piso. Pedro: --Tienes coches de carreras? Federico: --Slo dos. T? Pedro: --Diez, de todos los colores. Federico: --Y por qu no me los has enseado? Pedro: --Otro da. Federico: --A ver, aydame a buscarla. Atrs de la puerta no est. Busca en el comedor. Pedro: --Dnde est? Federico: --Cruzas la sala y llegas al comedor. Abajo de las escaleras tampoco. Fjate si est debajo de la mesa! Pedro: --No la veo! Slo veo sillas, mantel... y tus calcetines! Federico: --Mis calcetines de la buena suerte! Ah estaban. Con razn no los encontraba. Por eso hoy no meta gol. A ver, busca en la cocina. Es que ayer42

Libro de Lecturas Cuarto grado

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estaba jugando con ella mientras mi mam haca de comer. Prende la luz para que veas mejor. Pedro: --De dnde la prendo? Federico: --Del lado izquierdo de la puerta, al lado del refrigerador. Pedro: --Tienes refrigerador?! Federico: --Pues claro. Qu t no? Pedro: Dos. Federico: --Dos? Por qu dos? Pedro: --Porque uno es rojo y otro azul. Aqu no est. Federico: --A ver, a lo mejor est en el bao. Pedro: --Tienes bao! Federico: --Pues claro. Pedro: --Con regadera y excusado. Federico: --Pues es lo que tiene un bao. Qu tiene el tuyo? Pedro: --Lo mismo. Todo de color verde. Federico: --Qu raros colores hay en tu casa. Me la vas a ensear? Pedro: --Un da. Me enseas arriba? Federico: --S pero primero busquemos en la sala. Pedro: --Adems tienes una sala? Federico: --Pues es lo que tiene una casa normal: sala, comedor, cocina, bao y cuartos para dormir. T qu tienes en tu casa? Pedro: --Muchas cosas. Federico: --Qu cosas? Pedro: --Cosas. Federico: --Como qu? Pedro: --Tengo ochenta colores diferentes para dibujar y un cuaderno. Tengo una casa donde mi mam nos hace de cenar tamales, frijoles, caf, salsa y un pastel de chocolates de ocho pisos para m. Mientras mi mam cocina, mi abuela teje en su mecedora y mi abuelo piensa. Tengo una mesa donde mi pap arregla los zapatos que la gente le encarga. Tengo diez sillas de colores y quince ventanas. Unas ventanas dan al patio donde hay sembradas flores y rboles de diferentes tamaos: rosas, margaritas, ciruelos, pinos, hasta un rbol de manzanas. Hay tanto pasto en el jardn que a veces crece dentro. Yo43

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dejo que crezca porque ah viven unos caracoles, pero sobre todo, porque si te fijas con atencin, hay un tnel que lleva al zoolgico. Yo no he ido, slo me lo imagino lo que mi hermana me cont, que hay elefantes, camellos y leones. Ella fue un da con su escuela. Dice que hay un mar donde viven la foca, la ballena y los peces. En mi bao tengo peces amarillo, verdes, azules. El azul es mi color favorito. Desde la ventana de mi cuarto, porque yo tengo un cuarto, estoy ah dibujando. En la ventana est el sol, la luna y las estrellas y las nubes. Yo las miro. Y a lo lejos, si te fijas bien, hay un avin, chiquito. Un da yo voy a manejar un avin y voy a conocer el mar. Federico: --Tienes todo eso en tu casa y no tienes un baln? No te creo. Ensame tu casa. Pedro: --Ahorita? Mejor vamos a seguir buscando la pelota. Federico: --Si no me enseas tu casa, ya no vuelvo a jugar contigo. Pedro: --Es que est lejos de aqu. Federico: --Qu tan lejos? Pedro: --Muy lejos. Federico: --Pasando el parque? Pedro: --Detrs del parque. Federico: --No est tan lejos. Vamos. Pedro: --Y maana podemos volver a jugar? Federico: --Si me llevas a tu casa s. Pedro: --No hace falta ir hasta all. Federico: --Qu no me la quieres ensear? Se me hace que son mentiras. Pedro: --No. Federico: --Entonces? Pedro: --Mi casa la tengo aqu. Federico: --Aqu? Cmo vas a tener tu casa aqu? La gente va a las casas porque las casas no se mueven, no se pueden transportar. Pedro: --La ma s. Federico: --A ver, ensamela. Pedro: --Aqu est. Federico: --Este es tu cuaderno, no tu casa.44

Libro de Lecturas Cuarto grado Pedro: --Pues aqu tengo mi casa, la casa de la que te habl. Federico: --Dibujada! Todo son dibujos! Pedro: --S Federico: --T dibujaste todo esto? Pedro: --S. Federico: --Dibujas muy bien.

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Pedro: --Gracias. Si quieres te dibujo los balones que vol. Lo malo es que con estos no se puede jugar futbol. Federico: --Pero podemos dibujar y as me enseas. Pedro: --Si quieres. Federico: --S, s quiero. Pedro: --Y otro da seguimos jugando fut? Federico: --S, slo deja encuentro mi pelota de verdad.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Refranes populares2

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En la casa del herrero, azadn de palo. En la casa del jabonero, el que no cae resbala. Con enojos no busques, lo que logras con cario. Si el jarrito se vaca, no tendrs para otro da. Bien sabes, te dice Juan, que si no trabajas, no habr pan. Al mal tiempo, buena cara. Quien mucho abarca, poco aprieta. A palabras necias, odos sordos. Ojos que no ven, corazn que no siente Quien tiene tienda, que la atienda y si no, que la venda. Al ojo del amo, engorda el caballo. Al perro flaco no le faltan pulgas. A caballo regalado no se le ven colmillos. Haz bien sin mirar a quin. Hombre precavido vale por dos. En boca cerrada no entran moscas. Mal de muchos consuelo de tontos. No dejes para maana lo que puedes hacer hoy. Un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar.

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http//:www.proverbia.net/refranes.asp46

Libro de Lecturas Cuarto grado Gregueras Absurdos lgicos

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lvaro Sols

Flor de fuego el girasol, se levanta y sale el sol.

Es una flor que vuela la mariposa, cuando la noche llega se vuelve rosa.

El clavo es una especia que no se oxida.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Viajemos en el tiempo

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Estela Maldonado Chvez

Ir de viaje? Claro que me encanta, grit Mara a su mam cuando le dijo: levntate tempranito que iremos a pasear. Pero antes dime, a dnde vamos?, a qu hora saldremos?... an falta tiempo --le dijo su mam-- pero mientras, ya vers lo que platicaremos. Mara, desde que el hombre apareci en la tierra le dio por viajar para buscar su alimento, y sin duda que lo haca caminando, siempre caminando, porque su vida era nmada, es decir, siempre andar buscando comida para el sustento. Cuando se qued en un lugar, sembr la tierra y empez a criar

animales, pero entonces tambin tena que recorrer grandes caminos y seguramente lo haca montado en bestias que l mismo criaba. Tambin cruz los lagos y los ros para lo cual fabricaba balsas o canoas rudas y as empez a crear un comercio a travs de intercambios con otros grupos humanos. Pasaron tantos y tantos aos, hasta que la inteligencia del hombre invent otros modos de viajar ms lejos y ms rpido, entonces invent la mquina de vapor para mover grandes trenes que arrastraban sobre durmientes y vas, diez, veinte, treinta carros con increbles cargas y numerosos viajeros a travs de una notable rapidez Peridicamente, la tcnica fue avanzando y se invent el automvil, que ya no necesitaba ni rieles, ni durmientes para moverse y as, los viajes se han podido hacer por carreteras y a una velocidad extraordinaria. Ay, Mara, sabes bien que a travs de la historia de todo esto, afirmamos que el hombre sigue avanzando en sus anhelos y as, se propuso desafiar al aire y volar!, entonces invent el avin para cruzar el cielo con una vertiginosa velocidad. Increblemente, algunos hombres de ciertos pases, han llegado hasta la Luna, Marte y ms all, por medio de maravillosas naves espaciales.

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Libro de Lecturas Cuarto grado

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Mam, ya lleg la familia, pap viene manejando una camioneta ya vmonos, pero despus, me platicars cundo se inventaron las camionetas?

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Libro de Lecturas Cuarto grado Trabalenguas

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Cristina Martnez

Tengo una tablita muy entambaralinguladita, el que me la desentambalaringulare ser un gran desentambaralingulador.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Grandes mujeres medallistas

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Martha Liliana Huerta Ortega

Alguna vez has imaginado ser parte de la celebracin de los Juegos Olmpicos? Representar a tu pas en algn deporte? Cules seran tus

sentimientos al recibir la presea y escuchar las notas del Himno Nacional?, seguramente estos sueos los tuvieron alguna vez las deportistas de nuestro pas que ahora son campeonas y medallistas. Paola, particip de manera individual en los Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe en El Salvador 2002, donde gan dos medallas de oro: la primera, en la prueba de trampoln de un metro y la segunda, en trampoln de tres metros. En el 2003, participa en esta misma especialidad al lado de Laura

Snchez en el Campeonato Mundial de Barcelona, competencia en la que conquistan la medalla de bronce. En los Juegos Panamericanos de Santo Domingo, celebrados en agosto de ese mismo ao, Paola Espinosa Snchez vuelve a hacer pareja con Laura Snchez y logran dos medallas de plata en clavados sincronizados; una en trampoln de tres metros y la otra en plataforma de 10 metros. Paola ha demostrado su compaerismo y entrega en diferentes momentos; as como lo hizo con Laura Snchez, tambin con Tatiana Ortiz Galicia quien fue su compaera en otras competencias. Otra medallista destacada, fue Tatiana Ortiz Galicia, la primera clavadista mexicana en debutar y subir al podium en unos Juegos Olmpicos; fue abanderada en la ceremonia de inauguracin mostrando al mundo entero la belleza de nuestra bandera. Es ganadora de una presea de plata en la Plataforma 10 m sincronizado en los XV Juegos Panamericanos en Ro de Janeiro, Brasil 2007. El 12 de agosto de 2008, las clavadistas compitieron en los juegos olmpicos de Beijn en la prueba de sincronizados en plataforma de 10 metros obtuvieron un puntaje de 330,06 lo cual fue un resultado satisfactorio, que trajo como resultado la medalla de bronce.51

Libro de Lecturas Cuarto grado

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Por eso, estas dos mujeres mexicanas son representativas para nuestro pas. Siguieron su sueo de la infancia con entrega, dedicacin, entereza y valenta; y as, como algn da ellas lo hicieron, alguna vez t podras hacerlo? Imaginado ser parte de la celebracin de los juegos olmpicos, representando a tu pas en algn deporte. T tambin puedes lograrlo si lo deseas con toda tu fuerza. Si te aplicas, le dedicas tiempo y esfuerzo y no desmayas ante los obstculos, algn da, estars en el podium con una medalla de oro para Mxico.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Diego y la paloma

Enero 2011

Procuradura Federal del Consumidor

Diego no tena hermanos. Su mam ya le haba explicado que por el momento no estaba en los planes de la familia que sta fuera a crecer. Por eso mismo, tena muchas ganas de tener un amiguito para poder jugar desde muy temprano en la maana; alguien a quien abrazar y querer mucho. Su amiga Valeria le haba platicado que el mejor amigo del hombre es el perro, as que pens que la mejor opcin era comprar un hermoso cachorrito para hacerse compaa. Diego, emocionado, fue con su mam para pedirle que lo acompaara a comprar un perrito con el ahorro de sus domingos, pero sinti una gran tristeza cuando su idea fue rechazada. Entonces le pidi un gatito, dicindole que era ms chiquito y no dara molestias en la casa, pero ella insisti en que no era el momento de tener un animal. l, desconsolado, le pregunt por qu no. Su mam le hizo un cario en la mejilla y lo sent en sus piernas para explicarle: Mira, hijo, no siempre podemos tener todo lo que deseamos. A veces no nos alcanza el dinero, no tenemos suficiente edad o necesitamos informarnos ms sobre lo que queremos Y yo creo que no has pensado en todo lo que tendras qu hacer si tuvieras un perrito u otro animal. S mami: jugar con l, darle de comer y quererlo mucho contest Diego. Eso est muy bien le respondi su mam, sonriendo, pero si vas a ser el responsable de cuidarlo hay ms cosas que debes saber, como qu come, cada cundo y en qu cantidad; cules son las vacunas que necesita, qu debes hacer para que no se enferme y pueda vivir mucho tiempo con nosotros Y aparte de todo eso, tambin tienes que ir a la escuela, hacer la tarea y salir a jugar con tus amigos, as que no te quedara tiempo libre para nada ms! Todo eso debo saber para poder tener una mascota conmigo? pregunt Diego a su mam, a lo que ella contest:53

Libro de Lecturas Cuarto grado

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Y no slo eso, te has puesto a pensar en lo que cuesta, en dnde vas a comprarlo, en qu raza te conviene? Crees que te alcance con tus domingos? Y si se enferma, con quin lo llevars para que lo cure? o crees que la tienda te debe cambiar la mascota o devolverte tu dinero? Diego se qued callado. Realmente, jams se le hubiera ocurrido que tener una mascota era un asunto tan complicado. Casi le dola la cabeza de tanto pensar. Y otra cosa, Diego le dijo su mam ponindose seria No se vale traer a casa una mascota y arrepentirse despus. Los animales tienen sentimientos, y tambin de eso somos responsables. No son juguetes que puedas abandonar si te aburren, sino seres sensibles Ves cmo comprar una mascota no es tan sencillo? Mejor, qu te parece si piensas bien en otra cosa que te gustara comprar con tus ahorros?, hay muchas opciones para elegir! Por ejemplo, podras usar tu dinero para comprar unos patines, una bicicleta o una pelota O la mochila que vimos el otro da en el mercado! interrumpi Diego, ms animado. Ella asinti, sonriendo. Exactamente, hijo. Y veo que te emociona pensar en la mochila que tanto te gust. Me parece que esa es una buena decisin de compra, creo que ests eligiendo muy bien cmo gastar tus ahorros, porque adems te ser de mucha utilidad. Y as fue que, con sus ahorros, Diego compr su mochila. Y para no quedarse con las ganas de una mascota, decidi adoptar una paloma que diario se paraba en el borde de su ventana: le pona arroz, le platicaba sus secretos y ella lo escuchaba siempre con mucha atencin ladeando la cabeza de forma muy chistosa.

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Libro de Lecturas Cuarto grado El jaguar

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Oscar Osorio Beristain Cauto siempre debes ser, las Sierras del Norte y las selvas Chiapanecas tendrs que recorrer.

Pasos precavidos tienes que dar, y en alerta debers estar por los senderos del magnfico jaguar.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Cricket contra el monstruo sin dientes

Enero 2011

Hugo Alfredo Hinojosa

El pequeo Cricket nunca habra imaginado que necesitara la ayuda de sus compaeros, para vencer al monstruo que lo atemorizaba desde haca varias semanas. Cada noche, mientras Cricket soaba con sus muecos, senta cmo le jalaban los dientes intentando arrancrselos. Tan desafortunada era la suerte de este nio que, en una ocasin, despert y logr ver la sombra del culpable que rpido sala por la ventana de su cuarto hasta perderse entre los rboles del patio de la casa. Una maana, despus de semanas de terror, Cricket se par en medio del patio de la escuela, justo afuera de su saln y grit: todos los nios de mi grupo reportarse de inmediato en el patio, en marcha!. Desde haca varios meses Cricket estaba molesto la mayor parte del tiempo, porque sus compaeros de la escuela eran distintos a l. Deca sentirse extrao al estar en el mismo lugar que los gemelos cclopes, por ejemplo, quienes lograban ver hasta el ms mnimo detalle ya fuera de da o de noche; o cmo el pequeo Peck, dueo de unas orejas tan grandes, que alcanzaba a escuchar cuando alguien, del otro lado del mundo, gritaba gol! Cricket, por su parte, adems de ser muy inteligente, arrastraba unos inmensos dientes que le fueron heredados por su padre. La mam de Cricket, preocupada por el enojo del chiquillo, le explic que nadie se pareca a nadie: ni tu pap ni yo somos iguales, dijo, ni t eres del todo igual a nosotros, ni a tus abuelos, pero no es nada malo, todos tenemos algo que ofrecer Slo necesitas conocer mejor a tus compaeros. Cricket no qued muy convencido con la explicacin, guard silencio y continu sin comprender por qu los dems no estaban tan dientones como l. Cuando los nios al fin se formaron en el patio de la escuela, Cricket sin perder el tiempo les cont lo ocurrido con el monstruo y les pidi ayuda para capturarlo... Todos pensaron por un momento que el dientn no era tan amable con ellos como para ayudarle con su desagradable robadientes. Cricket guard silencio y segundos despus los nios decidieron aceptar la aventura slo porque eran compaeros de clases.56

Libro de Lecturas Cuarto grado

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Ese mismo da por la noche el diminuto Peck adems de los gemelos cclopes, el Cicciolino con su gran lengua y un excelente sentido del gusto, y junto con Diego el brbaro y sus puos enormes, acamparon en la habitacin de Cricket en espera del monstruo. Un par de horas despus el sueo logr vencer a los diminutos guerreros; los nios roncaban, hablaban dormidos, se chupaban el dedo y, justo cuando nadie ms lo imagin, el robadientes apareci entre la oscuridad intentando arrancar las muelas de cada uno de los nios hasta que, por error, le jal la lengua a Cicciolino quien dio grito tan largo y fuerte que despert a todos Cricket y los dems pronto se incorporaron y salieron en busca del monstruo que ya corra atravesando el patio de la casa. Sin esperar a nada Diego rompi una de las paredes del cuarto y todos marcharon entre los rboles guiados por los gemelos cclopes que indicaban la ruta a seguir; Cicciolino por su parte probaba las hojas de los rboles para no perder el rastro del monstruo. Despus de varios minutos de persecucin dejaron de ver la sombra del robadientes, se quedaron quietos entre la oscuridad hasta que Peck escuch el rechinido de una puerta y corrieron hacia donde el nio orejn les seal. El ruido los llev hasta una vieja casa de ladrillos y entraron sigilosamente intentando no espantar al monstruo. Veinte pasos despus llegaron a una habitacin en penumbra donde apenas se vean sobre las paredes algunas fotografas extraas de personas dientonas Cricket al darse cuenta de esto guard silencio y, dando un gran suspiro, dijo: son fotos de mi familia. Buenas noches! Cuando se escucharon estas palabras los nios pegaron un grito y se encendieron las luces del cuarto. Era el abuelo de Cricket, el monstruo. Los nios voltearon a verlo y Cricket sin perder el tiempo le pidi una explicacin. Tranquilo y sin dejar de rerse el abuelo comenz a narrar su historia: desde hace tiempo, dijo, me comenc a quedar chimuelo, cosa que me da mucha vergenza, as que todas las noches voy de casa en casa tratando de juntar los mejores dientes para hacerme una dentadura tan fuerte como la de mi nieto... Pero s que son listos, nios, dijo el abuelo sonriendo, mi nieto aunque es muy inteligente no me podra haber atrapado solo, necesitaba de ms ayuda. El abuelo de Cricket remat el momento al57

Libro de Lecturas Cuarto grado

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decir: pero no le digan a nadie de mi travesura. Al escuchar estas palabras todos soltaron las carcajadas. Al da siguiente en el patio de la escuela los nios contaban cmo haban logrado atrapar a un monstruo galctico que ahora estaba de regreso en el espacio. Cricket se rea y recordaba las palabras del abuelo: mi nieto aunque es muy inteligente no me podra haber atrapado solo, necesitaba de ms ayuda. Tena razn mi mam, pens Cricket, necesitaba conocer ms a mis compaeros. Tiempo despus el abuelo al fin se mand a hacer sus dientes. Se los hicieron de acero y cuando mastica parece que estn tocando las campanas de la iglesia. Cricket no para de rerse.

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Libro de Lecturas Cuarto grado La vainilla

Enero 2011

Leyenda Prehispnica

Cuentan que Xanath, hija de nobles totonacas, clebre por su belleza, viva en un palacio cercano al centro ceremonial de Tajn. Cierto da en que la joven acudi a depositar una ofrenda al Chac-Mool "Mensajero Divino", encontr a Tzarahun jilguero y surgi entre ambos amor a primera vista. Tzarahun era pobre y viva en una choza humilde, rodeada de tierra frtil en donde abundaban las anonas, las pias y las calabazas. A pesar de la diferencia de clases, los enamorados se reunan casi a diario, de manera fugaz, cuando el mancebo llevaba al mercado la cosecha de sus siembras. Una tarde en que Xanath pas junto al templo sagrado de los nichos, la sorprendi la mirada penetrante del Seor de la Felicidad, caracterizado por su vientre abultado, la frente rapada y su triple penacho. A partir de ese momento, el dios gordo se dedic a cortejar a la doncella, quien logr esquivarlo en un principio; sin embargo, el astuto dios encontr la forma de revelarle sus sentimientos pero al ser rechazado, su alegra habitual se torn en clera. Entonces amenaz a la joven con desatar la furia en el Tajn si no acceda a sus reclamos amorosos. Aunque la advertencia hizo temblar de miedo a Xanath no traicion a Tzarahun y continu sus encuentros amorosos con l. El astuto dios gordo resolvi entonces, ganarse la confianza del padre de la joven para que influyera en el nimo de Xanath. Para ello, lo invit a su palacio donde le revel secretos divinos. Durante el encuentro, ste esper el momento adecuado para manifestarle al hombre el inters por su linda hija. El Seor de la Felicidad recibi su total apoyo para casarse con ella. Xanath obligada por su padre, acept una cita con el testarudo dios, la cual result fatal, porque despus de haber dado otra negativa al Seor de la Felicidad, ste, irritado, lanz un conjuro sobre la doncella transformndola en una dbil planta, de flores blancas y exquisito aroma, que desde entonces se conoce como la vainilla.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Una buena decisin

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Luis Guillermo Silva Rojas

Susana, Carlos y Jaime, eran muy buenos amigos desde hace varios aos, todos iban a la misma escuela y vivan, ms o menos por el mismo rumbo. Una tarde estaban en el parque platicando y dicindose todas las cosas que queran hacer en el futuro. Jaime pensaba en ser un arquitecto reconocido, ella una exitosa abogada, Carlos deseaba ser bilogo, bilogo marino para participar en los grupos que protegen a las tortugas y otros animales en peligro de extincin. Esa tarde el cielo comenz a tronar como pocas veces lo haba hecho en los ltimos aos, de repente, una torrencial lluvia comenz a caer sin dar ningn aviso previo. Jaime tom a Susana de la mano y corrieron para refugiarse en una casa abandonada en lo alto del cerro. El le dio su suter para que se tapara la cabeza; ella, tap su cabello y agradeci a Jaime, Carlos, el ms pequeo, corra tras ellos. Tenan algo de miedo, pues la casa estaba muy obscura, se estaba haciendo tarde y sus padres los regaaran, pero la lluvia era tremenda, haba mucho viento y tenan ms miedo de tratar de salir para caminar hacia sus casas. Decidieron, entonces, terminan la pltica que haban iniciado en el parque. Platicaron por horas, sus sueos y anhelos aprovechando que la lluvia no dejaba de caer. La lluvia empez a ceder, todo estaba enlodado; sin embargo, aprovecharon para irse. Al llegar a casa de Susana, su mam la esperaba en la puerta, con un gesto de molestia. Al entrar, en vez de saludarla, Susana

recibi un grito --Dnde estabas? --Pregunt su mam --Seguro nada ms jugando en el parque, en lugar de ponerte a estudiar. Pues, ahora te vas a tu cuarto y no vas a volver a ver a esos muchachitos. Ella que haba pasado una tarde maravillosa, platicando sus planes futuros, soando con ser una gran abogada que ayudara a las personas, defendera a los justos y castigara a los delincuentes, fue castigada sin una razn aparente.60

Libro de Lecturas Cuarto grado

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Jaime y Carlos, al or los gritos de la mam de Susana salieron corriendo hacia sus casas. Cuando llegaron a la casa de Carlos, ah estaba la mam de Jaime. Por soar ser un gran arquitecto, construir grandes edificios, plazas y calles, y salvar a todos los animales, al llegar a sus casas, fueron recibidos de igual forma por sus mams, a gritos y castigados. Cmo era posible que las tuvieran en esa zozobra? Qu pasando? Se suspendieron las clases, muchas personas estaban en alberges, otras estaban desaparecidas. Las madres preocupadas se miraban una a la otra sin saber qu ms decirles a los chicos. Ellos no lo saban, pero en las noticias de la tarde, haban dado una alerta de huracn. En el lugar donde se encontraban, Alejandro haba llegado sin previo aviso arrancando rboles y desbordando el ro que est cerca de la casa de ambos, existan ms de 10 mil damnificados, cientos de desaparecidos, pues la inundacin haba arrasado con las casas. Por fortuna ellos estaban en las partes altas, no se enteraron de eso en el momento, el regao de las madres, fue de preocupacin no de desaprobacin, y las dos coincidieron en que era importante hablar a la casa de la nia, despus de todo era una buen amiga de sus hijos. Hablaron con ella y le dijeron lo que estaba pasando, coincidieron en verse para saber qu podan hacer; era mejor estar juntos. Encendieron el radio y escucharon las noticias. Estaba una entrevista con algn funcionario, estaba hablando de la importancia de contar con un Plan Familiar de Proteccin Civil, el que funcionara, siempre y cuando los nios estuvieran en sus casas. Los llamaron a la cocina y les dijeron que no queran gritarles: --ustedes son los ms importante pasra nosotras, es que sentimos mucho miedo de perderlos, todo est tan horribledijo la mam de Susana y todos se abrazaron. Armida, mam de Carlos, les dijo que haban escuchado en el radio que se deban seguir cuatro pasos para determinar el Plan Familiar: Detectar y reducir los riesgos, fue bueno que se metieran a la casa abandona por la lluvia, pero haba otros riesgos, estaba sucia, se podan rasgar con algn clavo61

no saban lo que estaba

Libro de Lecturas Cuarto grado

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oxidado y eso era tan peligroso como la lluvia. Otra vez, la tristeza los invada. Paso dos: Disea rutas de evacuacin o sea, por donde salir y hacia dnde dirigirse. Era cierto que la casa abandonada tiene muchos peligros, pero hoy haba sido un buen refugio. Porque el tercer paso es tomar una buena decisin y, dadas las circunstancias, los nios haban tomado una buena decisin.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Desde chiquito picoso

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Julia Gonzlez Quiroz

Todo empez como una aficin, desde los siete aos a Ricardo le gustaban las peleas con reglas, rferi y jueces. Organizaba a sus compaeros por estatura y comenzaba la funcin y tambin la diversin. Seguramente aprendi muchas tcnicas de su padre, don Pedro en su juventud practic con gran entusiasmo el boxeo. Ricardo naci en 1947 y a los 18 aos pele su primer combate en un ring. En ese momento sus amigos ya le llamaban El Picoso y tenan gran confianza en su habilidad para boxear. La pelea comenz y decidido acept un difcil reto y triunf. Otras personas advirtieron su capacidad para boxear y lo entrenaron para participar en torneos cada vez ms importantes hasta conseguir 125 peleas ganadas y solamente 4 derrotas. Tres aos de entrenamiento y una completa dedicacin llevaron a Ricardo a representar a Mxico en las Olimpiadas de 1968 en la categora de peso mosca. Con el apoyo de las personas reunidas para observar el magnfico evento de la final, todos daban muestras de cario y admiracin a Ricardo El Picoso Delgado. Ricardo cumpli un gran sueo y gan la mxima presea: la medalla de oro. Sinti una gran emocin al recibir este reconocimiento, escuchar el himno mexicano y saber que se converta en un orgullo nacional. Ricardo ha recibido muchos premios pero el mayor de todos es ser ejemplo para muchos nios y jvenes de constancia y dedicacin.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Fusiles y muecas (Fragmento)

Enero 2011

Juan de Dios Peza3

Juan y Margot, dos ngeles hermanos que embellecen mi hogar con sus carios, se entretienen en juegos tan humanos que parecen personas desde nios.

Mientras Juan, de tres aos, es soldado y monta en una caa endeble y hueca, besa Margot con labios de granado, los labios de cartn de su mueca.

Lucen los dos sus inocentes galas y alegres suean en tan dulces lazos; l, que cruza sereno entre las balas; ella, que arrulla a un nio entre sus brazos.

Puesto al hombro el fusil de hoja de lata, el kepis de papel sobre la frente, alienta el nio en su inocencia grata el orgullo viril de ser valiente.

Quiz piensa, en sus juegos infantiles, que en este mundo que su afn recrea, son como el suyo todos los fusiles con que la torpe humanidad pelea.

Que pesan poco, que sin odios lucen, que es igual el ms dbil al ms fuerte,3 Juan de Dios Peza (Mxico, 1852-1910). Llamado el cantor del hogar por sus textos campiranos y hogareos. Este texto se tom de http/lospoetas.com

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Libro de Lecturas Cuarto grado y que, si se disparan, no producen humo, fragor, consternacin y muerte.

Enero 2011

Oh, misteriosa condicin humana! Siempre lo opuesto buscas en la tierra; ya delira Margot por ser anciana, y Juan, que vive en paz, ama la guerra.

Mirndoles jugar, me aflijo y callo; cul ser en el mundo su fortuna? Suea el nio con armas y caballo, la nia con velar junto a la cuna.

El uno corre de entusiasmo ciego, la nia arrulla a su mueca inerme, y mientras grita el uno: Fuego, Fuego, la otra murmura triste: Duerme, Duerme.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Uno o varios Ppilas?

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Carlos Alberto Reyes Tosqui Durante la guerra de independencia la ciudad de Guanajuato fue ocupada por las tropas insurgentes, y entre los soldados de Hidalgo se contaba la hazaa de un hombre del pueblo, de origen mestizo que trabajaba en alguna de las muchas minas que haba en los alrededores y a quin todos llamaban el Ppila. El cual, haba amarrado sobre su espalda una enorme piedra para protegerse de las balas enemigas, mientras que en una de sus manos, llevaba una antorcha con la que logr encender las puertas de la Alhndiga de Granaditas, lugar donde se guardaban las cosechas y en donde se encontraban escondidos los espaoles que vivan en la ciudad. Esta valerosa accin que realiz, poniendo en riesgo su vida, permiti a Miguel Hidalgo apoderarse de la ciudad. Sin embargo, algunos historiadores han puesto en duda la existencia de este singular personaje. Existen diferentes versiones acerca de su existencia. En 1901 un peridico de Guanajuato, public una carta firmada por un norteamericano, en la que aseguraba que el autntico Ppila se llamaba Jos Mara Barajas. En dicha carta, proporcionaba ms datos sobre l. Afirmaba que haba vivido en el pueblo de Dolores y que haba participado en la independencia desde el Grito: tambin deca que en 1867, Benito Jurez lo haba invitado a la ciudad de Mxico y que el propio Maximiliano le haba rendido honores y le haba asignado una pensin. Finalmente, aseguraba que ese Ppila haba quedado ciego y que acababa de morir recientemente. Ante esta versin, algunos historiadores se dieron a la tarea de investigar ms sobre la vida del Ppila y descubrieron que su verdadero nombre era Juan Jos Martnez. Lograron dar con su viuda, la cual, cont que aun vivan dos amigos de su esposo, y estos, a su vez, proporcionaron testimonios de la heroica participacin de Juan Jos en la accin de la Alhndiga de Granaditas, pero sin lograr aportar otro tipo de prueba que sus propias palabras. Los historiadores Carlos Mara de Bustamante--partidario de los insurgentes-- y Lucas Alamn --partidario de los realistas--, quienes vivieron66

Libro de Lecturas Cuarto grado

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durante los aos que dur la guerra de independencia, cuentan que fueron varios los que, protegidos por losas, prendieron fuego a las puertas del edificio de Granaditas. Las fuentes histricas ms recientes concluyen que el verdadero Ppila fue Juan Jos Martnez y que, probablemente, despus de su acto heroico, otros valientes siguieron su ejemplo. Quizs si hubo ms de un Ppila, pero el mrito y el reconocimiento debe atribuirse a quien decidi incendiar las puertas de la Alhndiga, y lograr con ello, uno de los principales triunfos del ejrcito insurgente comandado por Miguel Hidalgo.

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Libro de Lecturas Cuarto grado Ptzcuaro entrada al cielo

Enero 2011

Mariana Tenorio Pita

De norte a sur, y de este a oeste, Mxico es un pas de gran diversidad geogrfica, cultural y lingstica; con selvas tropicales, zonas desrticas, sierras nevadas, mesetas, llanuras costeras y playas interminables. Por todo el mundo existen lugares que por su historia, cultura, arte y paisajes, en algn momento de nuestra vida, deseamos conocer, sin embargo, al pensar en ellos podemos no darnos cuenta de que aqu mismo, en Mxico, gozamos de bellos y apasionantes lugares que tal vez, personas de otros pases, desean conocer. Un lugar, del cual me siento orgullosa es Ptzcuaro, es decir, la ms antigua ciudad de los purpechas, y de la cual es originaria mi familia. Esta ciudad fue fundada alrededor del ao 1300 por Curatame, y tiempo despus, convertida por el rey Taricuri en uno de los centros ceremoniales ms importantes. As es como; las primeras ciudades que se fundaron en

Michoacn se ubicaron en la