La pulga viajero

Repaso de los verbos –er/-ir

Un día todos los animales y algunos insectos DISCUTEN entre ellos para determinar cuál visita más países en el mundo.

El elefante DICE: ¡Me llevan en un barco a los Estados Unidos!

Entonces el león argumenta y DICE que él viaja de África a Europa como parte de un circo.

El mono también CONTRADICE: ¡Me cargan a la fuerza para entretener a las personas que visitan un parque en una ciudad lejana!

En ese momento llega la pulga y PIDE por el derecho de hablar les DICE a todos: ¡Bien señores, yo los escucho con interés pero si me prestan atención, les voy a contar mí historia!

SUCEDE que un día DUERMO dentro de un capullo de una hermosa flor silvestre que todos ustedes CONOCEN, se llama Ave del Paraíso.

Una niña que RECORRE cerca del río le gusta la flor y la lleva hasta su casa, su mamá coloca la flor en un florero y la lleva a la ventana de su cuarto.

Por la noche HACE mucho frio, yo EMERJO del florero y me voy hasta el guardarropa en donde me ESCONDO dentro de un abrigo de piel. La mañana siguiente una amiga llega a la casa visitar a la familia, está lloviendo entonces la dueña de la casa, le regala el abrigo de piel a su visita, la señora se PARTE de la casa y yo también me lleva dentro del abrigo cómodo.

La semana siguiente la señora viaja a Italia y yo también viajo en avión en primera clase sin que nadie nota. Paso varios meses en Italia y allí tengo muchos hijos. De Roma viajo junto a la señora en su abrigo hasta nueva york, siempre en avión y en primera clase, como la señora TIENE varios hijos en los Estados Unidos, visita ciudades como Cincinnati, San Francisco, y Las Vegas.

Desfruto mucho del mundo y dejo varios hijos en cada una de esas ciudades. La señora TIENE mucho dinero y DECIDE viajar a México y yo por supuesto siempre dentro del abrigo CONOZCO el mundo.

VEO a lujosos hoteles, pero un día la rica señora DECIDE almorzar en un lujoso restaurant mexicano y como justamente ese día lleva puesto el abrigo de piel. Una de las bebidas se le CAE encima, inmediatamente los meseros llevan el abrigo a la lavandería y allí comienza mi martirio.

Me METEN en un enorme aparato de esos que se llaman lavadoras, en donde PONEN a la ropa a dar vueltas y más vueltas, empapada en agua, jabón y otros detergentes que casi me ahogan, de allí me voy por unas tuberías de desagüe y después de un largo recorrido caigo en un gran río y por último al mar.

¡Me salvo de puro milagro cuando caigo en las redes de un barco pesquero, me SUBO sin darse cuenta a bordo y cuando descargan la mercancía en el puerto, me atrapo en un saco de verduras, de donde un comerciante me lleva hasta su camión.

Luego salgo de la ciudad hacia el campo y aquí me encuentro con todos vosotros, que muy amablemente me OÍS con paciencia mí larga historia!

La avispa que escucha todo el relato, SUBE la voz para decir:

¡Amigos CREO que de todos nosotros, la pulga es la que más viaja por el mundo, por lo que propongo la declaremos como la pulga viajera! Por unanimidad los animales del bosque y otros insectos aceptan la decisión.

Verbos de –er/-irYo Nosotros

Tú Vosotros

Él, ella, usted Ellos, ellas, ustedes

duermoemerjo

escondoconozco

veo

subo

creo

dice

contradice

pidesucede

recorre hace

parte tiene

decide

cae sube

oís

discuten

conocen

meten

ponen

Los verbos regularesYo argumento mucho con mi madre.

También sucedo mucho a mi abuela.

Pero no discuto con mi padre nunca.

Nosotros desfrutamos mucho de la clase.

Tenemos mucha practica y ejercicios.

Nunca dormimos en la clase de español.

¡Tú viajas mucho!

Haces un viaje cada (every) tres meses.

¿Dónde decides ir este verano?

Vosotros notáis una diferencia del clima.

¿Veis las noticias mucho?

Subís al segundo piso si hace frio.

La profesora conoce bien hablar español.

Pero ella no esconde su acento todo el tiempo.

Ella nos dice que es sexi tener un acento.

Mis padres siempre llegan tarde.

No se ponen guapos a tiempo.

También salen de la casa sin los abrigos.

Los verbos correr & abrir

corr-oabr-o

corr-emosabr-imos

corr-esabr-es

corr-éisabr-ís

corr-eabr-e

corr-enabr-en