LA NACION * Domingo, 3 de Mayo de 1959• 9

MERCENARIOS DE LA HISTORI A

Nos llega una colaboración del joven universi-tario Manuel Bayard, dinámico y estudioso amig odarienita, a quien catalogamcr, entre la muchacha -da nueva que se yergüe en la verticalidad de la lu -cha nacional, sólo inspirado en dos principios : enla depuración de la Patria y en la orientación po-sitiva del Darién. Sus líneas se leen así :

MERCENARIOS EN LA HISTORI AEl hombre traza la historia y, en el presente ,

prepara la base y los ladrillos que han de forma rel edificio de la posteridad. Cuál ha sido la tra-yectoria de nuestra República? . . . Cuál ha sidoel saldo de su marcha hacia el futuro ?

Desde la era de los próceres al momento aetal, el País lleva sobre sus espaldas el peso del des-quiciamiento administrativo a consecuencia del . sa-crificio de la masa popular que ha sido fuente deconstante explotación .

"El hombre es una raíz de la libertad que des-morona el terrón de la injusticia, donde la oligar-quía succiona la savia de sus ambiciones" . En es-te estado de corrupción en la cual los representan -tes de la cosa pública han querido llevar a la »a-ción, el pueblo tiene que decidir y desplegar susvelas para la consecución de sus nobles aspiracio-nes . Mayo del 58, dio su primer saldo y con ell oel actual régimen dio la puñah da al pueblo pana-meño.

El levantamiento de Tute produjo la nuevalluvia que ha hecho germinar semillas en la con -ciencia del pueblo panameño, y ha provocado el re-pudio del Estudiantado Latinoamericano, quie nlevanta su índice acusador y se hace partícipe d enuestra angustia .

Dónde están los mercenarios en estos momen-tos en que la espiga libertaria va abonando todosentimiento humano? Loe mercenarios los entrega la Historia disfrazados, naciendo a consecuen-cia de un mercado canalero. Los mercenarios fue-ron engendrados por esa caterva de vampiros qu edejó Bunau Varilla y Próceres, S . A., quienes me-diante pseudo-tratados han ido vendiendo el terri-torio nacional para satisfacer su eterno coqueteocon los gobernantes del Imperio Yanqui . Losmercenarios nacieron en la Historia Patria y ha nido enlodando las paredes del tiempo y la faz dela República . Los mercenarios los tenemos aquícuando a paga miserable vendiendo su concienci ae inescrupulosamente se armaron para inmola rvidas humildes que sólo querían el resurgimient odel País .

América Latina es un sólo pulmón donde s erespira el aire del principio de solidaridad y li-bertad ; un sólo frente cuando sus hombres sonsacrificados por el áspero machete de los semidio -ses del despotismo. Nuestros hermanos liberta-rios - de Cuba son ramificaciones de nuestras arte-rias .

La revolución iniciada en el Tute ya abri ócotiledones en nuestro pueblo e Indoamérica . Aquíestá la semilla de los inmolados en Mayo y de lasverticalidades que marcaron el heroísmo y la glo-ria en la contienda de la Sierra Veraguense . Elpueblo empieza a elaborar los ladrillos para el edi -ficio de la posteridad .

A los representantes de los poderes constituí -dos de la Nación : los compañét-os cubanos son par

Pasa a la Pee . 14 letra Y)

''t,.11101PI 15141,e

~F~.MY.+rll a:Al`.s O 406 :

1

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,e .nenoi n ,

•~4n ter-

Z

A

r2 VeraguasQuince hombres forzaron anoche las puertas d n

la tienda de la familia Arrocha, en San Francisco d eVeraguas, apoderándose de todas las armas, mun iciones y explosivos que allí se mantenían, y se interasaron en las montañas, según se informó hoy a "L aNación" en fuentes absolútamente dignas de crédit o

Anoche mismo fué enviado un fuerte destacamento de la Guardia Nacional a las montañas de Sal eFrancisco con instrucciones de debelar la sublevación ,Se desconocían hoy los motivos de ésta .

En toda la Provincia de Veraguas prevalecía ho ytras excitación, según se informó a nuestro diario.

Levantamiento Armado

A copla fotostát.ica de la carta de Miró, fechada el día miércoles de la presen te semana, 'Mea-vas en panamá el Gobierno ya creía que avanzaba al frente de la "Invasión" . . .

aiiónNo. 5940, Panamá R . de 1' . Sábado, 4 de Abril de 1959 . 5c.

LA GUARDIA NALESPERA OTROS ~a Xación

Domingo, 5 de Abril de 1959. No. 5941, Panana, R. de P. 5c.

Leva n am entos•

INTENSIFICASE LA VIGILANCI AA LO LARGO DE LA REPUBLICA

No h a- Hecho Contacto Co n

Los Rebeldes De VeraguasAunque la Comandancia de la Guardia Nacional en comunicado expedido en el día

de ayer dejó establecido que el levantamiento armado ocurrido en San Francisco de Ve -raguas no es "trascendental", se han tomado precauciones en todas las Provincias de lInterior de la República, ante la posibilidad de que se produzcan nuevos levantamien-tos, según se dijo en fuente allegada a los Cuarteles .

Anoche en la capital pe rsonas no identificadas se atuvieron un intenso tirote ocon miembros de la Guar-dia Nacional por los alre-dedores de Paitilia, elu-diendo finalmente el tendi-do para su captura .

Por otra parte, la Guar-dia según se informó, h areforzado con fuertes des -tacamentos todos loa cuar-teles a lo largo de las Pro-vincias y en la mañana dehoy, despachos llegados deSantiago de Veraguas in-formaban que, "prepara-ban una incursión de des -alojo contra los rebeldes e narmas".

Anoche la capital fueinundada con hojas volan-tes suscritas por "el Direc-torio Revolucionario de l

(Pava le Pie. 14, /.otra T)

EDITEIIUA LEl Levantamiento de Veragua sNo existen, hasta el momento de escribir estas

líneas, informaciones concretas que permitan enjui-ciar los acontecimientos de la Provincia de Veraguas ,donde un pequeño grupo de ciudadanos se encuentralevantado en armas. Pero sería imposible afirma rque no se trata de un brote político, porque la h eróica hazaña de los rebeldes cubanos inflamó la ima-ginación del Continente y deben ser muchos los m iles de jóvenes que, en los países sometidos a Gobie rnos dictatoriales o en los Estados policías, sueña .con emular a Fidel Castro, al "Che" Guevara, a Camito Cienfuegos y tantos otros, hoy cubiertos de gte.

,(Pasa a la Página 8 Columna Editorial)

o

Domingo, 5 de Abril de 1959- LA NACION 1'

No se puede negar que en Panamá no caen mal lo s

anuncios de movimientos revolucionarios. El pueblo, que

parece cansado de una situación política precaria e inde c i sa ,aspira una actitud viril y firme por parte de las genera-

ciones rebeldes y que son capaces de lanzarse a un renace r

nacional . No es que querremos ahora echar carbón a una

hoguesique parece haberse encendido en Santiago de Ve -

raguas, porque ello sería hundirse en un fanatismo impro-pio de la prensa escrita. Lo que sí cabe dentro de nuestr o

campo periodístico es el comentar un hecho que reluce die _riamente en la conciencia de todos los ciudadanos, que alg o

ha de andar mal en Panamá, cuando ni siquiera ha pasad oun mes, y ya vuelve a relucir otro anuncio de levartantiento

Cuando en nuest ., , s cuerpos se pro,:uce un hematomas ,

bien un "necio " o una "postema ", así decimos por esa s

tierras interioranas, hay que esperar que reviente . Igual

sucede cuando en los pueblos un mal se entroniza en l os

hechos soc i a les "atómicos y políticos ; se espera que sur-ja un brote de transformación en uno de los puntos de es e

pueblo, sea con una revolución pacífica, sea con una revo-lución pacífica, sea con una revolución armada . En los doscasos, se trata de una realidad imposible de cambiar.

En los paises donde reina la democracia amplia, com o

como en el Suiza o el Uruguay, todo reina en armonía, y

nadie piensa en transformar el orden público, pero, cuand o

se vive en la grosería de la opresión, persecución y atrope-llo, los gobernantes tienen que vivir en una zozobra cons-tante y esperar, incluso, un levantamiento a lo Fidel Cas-tro , o un golpe inesperado de un pueblo resuelto a los pre-cios más caros que las circunstancias requieren .

Lo de Santiago de Veraguas, lo de los cuarenta hom-bres que hoy van camino adentro y, según dicen, con ar-mas no debe causarnos extrañeza. En Panamá se ha ve -

nido anunciando en las plazas públ i cas y en la prensa ha_hieda y escrita que no es pos ible continuar una situación

como la nuestra, donde el f ra ude electoral y el e ngaño pú-blico se convierten en la especialización suprema de nues-tros element os gobernantes. Esto es solamente una apre-ciación objetiva de los hechos.

"Quien no la debe, no la teme", dicen corrientementepor las calles los hombres de una experiencia amplia y po-pular. Si en Panamá no hubiera temor ante un ataque pú-blico, no se explicaran los ad iestramentos a que se somet ela Guardia Nacional ni las murallas de alambre y de pie-dra que se vienen construyendo en nuestros cuarteles. ¿Esque en este País se tiene una guardia para el orden pú-blico o un ejército armado para sustentar gobiernos? Estasería una pregunta para contestar allá en la Comandanciade la Guardia Nacional.

Ojalá en Panamá la situación de Santiago de Veraguasno crezca y no ae produzcan lamentables derramamiento sde sangre, porque, de suceder, habría un sólo cuinable :" un gobierno que ha herido en lo más hondo la susceptibi-l idad de un pueblo amante a la libertad".

8

Domingo, 5 de Abril de 1959 . LA NACION *

. .

Diario Editado porPUBLICACIONES CONTINENTALES, S . A.

MANUEL M. VALDÉS,

GUILLERMO VEGA

Director

Jefe de Redacció nA►ealca "A" y Calle 22 Olste

Te1610núa 2 25!1 6

Apartado Postal 1941

2-8601

EDITORIA LEl Levantamiento de Veraguas

(Viene de fa Privacra Página )

ria, aclamados delirantemente por las multitudes cu

banas y en el apogeo del Poder.Aunque el actual Gobierno de Panamá carga con

su asido de —sangre como trágico recuerdo de aque-llos acontecimientos de Mayo-- sería injusto compa

rarlo a satrapías corno la de Stroesner, en el Para-guay los Somoza, en Nicaragua y Trujillo en la Rep .

Dominicana . En aquellas Repúblicas prevalecen sis -

temas repugnantes, de dictadura integral, donde elciudadano ha perdido absolútamente todos sus dere-chos y constantemente peligra hasta el supremo dela vida. En taita condiciones, todo ser humano consentido de decencia, en cualquier lugar del Continen-te donde resida, tiene necesariamente que alegrarsecuando surgen posibilidades de que los regímenes vi-gentes en los mencionados Estados sean derrocados yse impongan sanciones a los responsables de tanta stropelías .

Loa críticos del actual Gobierno concuerdan enque su principal pecado es la ineptitud y la incapaci-dad para enfrentarse a los graves y angustiosos pro-blemas q' afectan a la masa popular y esa opinión, su-mamente generalizada, junto a la certeza de que seprepara para un fraude electoral que permita a su selt mentos mantenerse en el Poder por otro cuatrenio ,le ha restado casi totalmente el respaldo de la opiniónpública . Hasta los mas allegados a las altas esferasdel Gobierno aceptan, aunque naturalmente en pri .vado, que se sostienen exclusivamente por el respald ode la Guardia Nacional .

Los esfuerzos hechos últimamente para acalla rlas críticas —como aquel del Decreto Mordaza— ha ncontribuído, naturalmente, a la impopularidad de lactual Gobierno, ya que han sido interpretados co.rrectamente como sonado de dictadura, de parte deun Gobierno que se sabe extraordinariamente débi ly que teme a la opinión pública .

En esta situación, cualquier brote de rebeldía,por insignificante que sean sus comienzos, involucr aun serio peligro para la estabilidad del Gobierno ypor eso no se le debe restar importancia a los hechosde Veraguas, que podrían ser liquidados mañana pe.ro que están indicando que, ya sea la influencia ro-mántica de la Sierra Maestra, o ya sea la desespera .ción que produce la difícil situación económica d enitstras masas, junto al desprestigio del Gobierno ,hay elementos capaces de llegar a los extremos d einternarse en las montañas y pasar penalidades com ogrito de protesta .

Un Gobierno sin respaldo ni opinión —que des-cansa exclusivamente en las armas de la GuardiaNacional— corre constantes peligros y se compren-de así que esté alarmado con los hechos de Veraguas,porque según se ha dicho, cualquier chispa involucr ael germen que podría alterar el estado de cosas .

Esa convicción del Gobierno fué la que lo llevóprobáblemente anoche, cuando la mas absoluta cal-ma y tranquilidad prevalecía en la Capital, al violen-to arresto del Director del prestigioso diario " Crítica%don Tito del Moral y otros ciudadanos, con abiert aviolación de la Constitución y las leyes .

Pero la República no tiene por qué sufrir la sconsecut recias de ese pánico y ese terror del Gobier•no, por lo que nuestro diario deja constancia de s umía enérgica protesta por los hechos anotados, qu edeben ser inmediatamente repudiados, no solo por e lSindicato de Periodistas y otras agrupaciones gremia-les sino también por toda la ciudadanía seria y res-ponsable.

y. .+

Muertos'Aunque, al llegar hoy a las 12.10 del día al Aeropuerto de Pajilla, en una avioneta piloteada por el Capitá n

Mas. el jefe de las fuerzas expedicionarias de la Guardia Nacional en Veraguas, Capitán Ornar Torrijos, fué rápi-damente conducido a un Radio-Patrulla, tuvo oportunidad de informar a la prensa que carece totalmente de funda -mento la versión de que hubo muertos ayer en el encuentro entre sus tropas y los rebeldes de Santa Fé .

Según el Capitán Torrijos, fué él, el único herido, ypresenta lesiones de proyectil de fuego en una mano y elrostro. A los representantes de "La Nación ", destacados en Paitilla les resultó imposible lograr mayores detalles ,porque el Capitán Torrijos fué rápidamente conducido de la avioneta al Radio-Patrulla, que Inmediatamente s edirigió a la ciudad.

UNA COMISION PACIFICADORA : .

STIONARA PAZEN SIERRA TVTE*

Una Comisión, integrada por repre-sentantes del Cuerpo Diplomático ex-tranjero, los Arzobispos de Panamá yChiriquí, el Presidente de la Corte Su-prema y el de la Asamblea Nacional, po-dría quedar integrada en el curso de ldía de hoy, con el propósito de actuar

en plan pacificador entre el Gobiern oy las fuerzas sublevadas en Veraguas ,según se informó en fuente digna d ecrédito a "La Nación" .

El Unico objetivo o finalidad de di-cha intervención sería el de evitar de-rramamiento de sangre e impedir que

el incidente de Veraguas degenere enuna guerra civil .

En el caso de integrarse la citadaComisión, viajaría hasta la sierra baj oprotección de la Guardia Nacional ytrataría de establecer contacto con lo srebeldes para gestionar la paz.

Eii.Mal - - - - as, . — i / aas r - -

Persigsun A Niie vos RebeldesOtro Frente En keragua s

ULTIMA NORASANTIAGO. Abril 7 . — Doce jóvenes han desapareci-

do y ea los círculos de la Guardia Nacional se sospe c h a que

partieron a unirse a los rebeldes en el Macizo del Banqui-

llo, región de Santa Fé . Por oto, parte, en la mañana de

hoy salieron refuerzos de la Guardia, llevando morteros y

ametralladoras de trípode . Se hace súmamonte difíci l

conseguir guías y loa guardias que retornan de Santa Féinforman que vendava les muy fuertes obstaculizan las ac-eionea.

La Guardia Nacional ha destacado grupos hacia Gua-

camal, la sierra de San José y el Río Calovébo r a .

Los rebeldes —según los informes— se han atrinche -

*ado en el Banquillo, a 22 millas del pueblo de Santa F &

Y se trata de una región desolada e inhóspita, donde so n

contados los habitantes.

rr sssn sssss~ ~,~~ ~~ r san. ss.

. ~sas~si

Ti a aüiNo. 5942, Panamá R. de P.

Martes, 7 de Abril de 1959 .5e .

Los Estudiantes JustificanEl Levantamiento de El Tute* *ES EL RESULTADO DEL CUMULO D ETROPELIAS DEL GOBIERNO, DICEN

Liberación Nal ese Reúne Hoy alas 8 y 30 p.m.

Por este medio se cita aloa dirigentes del Movimie nto de Liberación Nacional yorganizadores del Terce rPartido, a una reunión quese ce l ebrará esta noche alas 8 :30 en la residencia delPrimer VicePresidente de l aRepública, don TemístOclesDíaz Q .

La Federación de Estudiante sde Panamá advierte a la ciuda-danía en estos momentos de suma gravedad política que man-tiene su línea, no partidista e ndefensa de los intereses popul ares y con referencia a los ac-tuales acontecimientos puntua-liza lo siguiente :

1 —La FEP se mantiene a laexpectativa en espera de ma-yores informes y vigilando e lde s a rrollo de los hechos .

2—La FEP reafirma su sim.patia a cualquier movimient overdaderamente organizada qu econ el apoyo del pueblo tengacomo meta loe intereses de la sclases pobres de la ciudad y

del campo,3—La FEP manifiesta su op o

alción a cualquier pos i ble inlc tvención directa o indirecta delas autoridades zoneftas en a-suntos que atasen times y ex-c lusivamente a los panameños .En mayo y octubre es del dominio público que los soneitas s uministraron pertrechos de gue-rr a a la policía nacional . Actual

mente los pol icías cuentan conlanzallamas y cañones que son

de indudable factura norteame

ricana .4—La FEP considera que est e

alzamiento revolucionario en l a

Provincia de Pertiguee, que s e

(Pasa a la Pág . 14 letra U)

'SANTIAGO B i forme, lleea-dos de Santa Fé indican qu elos jóvenes revolucionarios des.pu's de haber sostenido dos e ntuentros con las fuerzas de l aGuardia Nacional, en uno delos cuales resultara herido e lCapitán Otnar Torrijos, qu 7 enLuneta de Jefe de la operae óacontra loe rebeldes, se han di .vldido en varios grupos, coa e lpropósito, algún algunos obser_vadores de los aconfeclmlentoe ,

(Pasa la Pie . 14, Letra T)

0

Martes, 7 de Abril de 1959 .

NALit K

POR PEDRO BRIN MARTINE .ZLETRAS DE MOLD E

La suspensión de las garantías individua les en las ac-tuales circunstancias de zozobra e inquietud, motivo de lalzamiento de unos jóvenes revolucionarios en la poblaciónde San Francisco de Veraguás y que ahora mismo está nacantonados en el Cerro Tute, no es medida para aliviaruna situación nacional, que, por querer apagar una hogueraencendida, daría motivos a una reacción que n a die podríacalcular Los males no se curan produciendo malestarespeores, Incluso, al aparecido en una parte de ese cuerpollamado Panamá .

La suspensión de las garantías individuales sign i ficahacer desaparecer la acción particular de los ciudadanos ,que no es otra cosa qpe coartar el libre ejercicio del pen -samiento . . .La suspensión de las garantías individuales sig-nifica censura de prensa, derecho a no reuniones públicas y ,en muchos casos, ni privadas . La suspensión de las garan-tías individuales significa que los panameños no podremo scaminar libremente por las calles ní podremos opinar atravéz de la palabra escrita y hablada ;

que su volun t ad ,así ésta destruya la tranqu i lidad del País .

Ante una situación como la actual, donde se fabricanlas bolas como cepelines de papel, lo aconsejable, lo quelleva la paey la tranquilidad a los hogares panameños, e sel ejercicio de una prensa libre, que pueda exponer sincortapizas los verdaderos hechos acontecidos en cuales-quier lugar de ]a República. Lo contrario, la eliminació nde una información objetiva y sin tendencias a favorece rninguno de los bandos que hoy se encuentran allá en ra sserranías de Santa Fé —Guardias y rebeldes_ podría darmotivo a las hojas volantes y clandestinas, a las mentira sde c afés, a la psicosis de guerrillas, en conclusión, a un adesorientación que solamente lleva al pánico general y afines que nadie sabe adónde pueden conducir el mañana deeste País.

Uno de los hechos más negros para la historia d ePanamá son aquellos donde el panameño se ha v i sto sanlos derechos de ciudadanos y que la Carta Magna confie-re en un País democrático . Allí tenemos los días de Mayo ,donde, al suspenderse la libertad de la prensa escrita, unode Ios primeros ángulos a que recurren los g o bi e r nos dé-biles y acobardados, se produjeron las horas más crudaspor las cuales hemos atravesado años acá . Con una prensalibre, el público, el pueblo, toda la República, puede for-marse una id ea clara y concisa de los hechos que hoy relu-cen en el Cerro Tute ; el pueblo, debidamente informado ,podrá orientarse, y tomar la determinación que sus propia sconciencias le dicten, que serán siempre las justas. Sola-mente el pueblo podrá actuar de juez en una contienda deesta naturaleza, solamente él podrá decir quién es el cul-pable y quién el de la razón.

A la prensa independiente no le queda más caminoque mirar lo que pueda suceder ante las horas que se ave-cinan; la prensa independiente actúa con objetividad es-cueta, siempre dispuesta a la limitación que la justicia so-cial establece, por ello, ho y, cuando la suerte del País co-rre oscuros amaneceres, si no se saben timonear Tos hecho scon calma y serenidad, se apresta a dar un anuncio : NOSUSPENSIQN DE GARANTIAS INDIVIDUALES . Hace-rnos esto, a fin de escribir en letras de molde cuál es nues-tra posición, siempre ecuánime, consciente y objetiva.

I

LAS ARMAS ESTAN HABLANDO . . . 1En las boscosas montañas de Veraguas las at,

mas están hablando. Están hablando con su len ma

je de sangre y muerte, que aunque trágico y dolorolo,

parece ser el único camino que queda al pueblo.Y mientras en la conciencia de las maca loop

dentas un nuevo renacer de esperanza e ilusionaaflora con regocijo, u pánico terrible propio de iqespíritus culpables, a n apodera da los que, durantemucho tiempo, sojuzga n

n

al pueblo con la repreaióaviolenta de la cárce l , con la persecución canallalas fuerzas de las armas.

Y tienen miedo y terror porque esta vez, estárecibiendo de su propia medicina . Saben quc los jó .yenes que se encuentran en las montañas de Venteasestán dispuestos al sacrificio, a la muerte mistas ,porque su consigna es triunfar o morir . Por eso la;armas están hablando .

No hay que llamarse a engaño porque los jóve

.

nes revolucionarios lo sabían, que en esta ;or nad,,alguno puede quedar muerto . Pero ellos, que vivis,ron los aciagos días de mayo, donde perdieran la v ida varios de sus compañeros estudiantes, supieron eaesos desgraciados días templar sus espíritus dentr odel crisol de la revolución, para lograr la justicia po .pular por la que hoy claman aquellas vidas jóven uque por la soberbia y torpeza, fueron cobareenientecegadas, tiñendo de sangre nuestras calles.

Y como en aquella ocasión, los jóvenes revelacionarios que a sangre y fuego están dispuestos a de.fender sus ideales, saben que en esta lucha si no ietriunfa se muere. Por ello, no le temen a la muerte.Hay la plena convicción de que esta vez, las arma:están hablando ; hay la esperanza de que el filo:)machete del campesino explotado se una a Is caus arebelde ; como existe la ilusión de que quienes hasestado pregonando a voz en cuello contra los maleetares que vive la República, se lancen definitivte a la conquista de mejores días para la Patria,que las armas están hablando . , . 1 Y con lashay que hablar . . . 1

8

Martes, 7 de Abril de 1939 . iA NACION *

LT NatiánDiario Editado por

PUBLICACIONES CONTINENTALES, S. A.

MANUEL M. VALDÉS.

GUILLEPMO VEGADirector

Jefe de Redacció nKtenioa "A" y calle 22 Oeste

Te1éfonea 2 25 :l 5

Apartado Postal 1903

2-2603

Que se Ponga Fin a los Rumore sNada hace mas daño a la tranquilidad social,

con inevitables repercusiones en la situación econó-mica, que la ignorancia general sobre acontecimien-tos extraordinarios, como los que vienen ocurriendoen las montañas de Veraguas . Es en instantes comoéstos cuando los Gobiernos tienen obligación de ma ntener un servicio excepcionalmente efi .iente de información, porque únicamente con el conocimient ode la verdad puede cerrarse el camino a la ola derumores y especulaciones, capaces de inflamar laimaginación popular, de tergiversar los hechos, detorcer el verdadero sentido de los acontecimientos .

En momentos como los que se atraviesan, el pue-blo depende de la prensa y de la radio para conoce rdetalles del desarrollo de la aventura de loa jóvene sque se sublevaron en Veraguas y, por razones obvia s—ya que los rebeldes están totalmente incomunica -dos— las noticias deben emanar de fuentes oficiales ,sobre toda cuando éstas controlan las líneas telefó-nicas y telegráficas .

Es cierto que existe una especie de Departamen-to de Relaciones Públicas, adscrito directamente a laPresidencia de la República, pero quienes laboran e nla radio y la prensa saben que se trata de un orga-nismo inoperante, que ha perdido toda vigencia, has -ta el punto de que se hace difícil recordar su existen-cia y en la práctica a nigún profesional de los siste-mas de divulgación escrita o hablada se le ocurre y aponerse en comunicación , .on sus funcionarios, porque la experiencia ha demostrado que de allí no ema-nan informaciones ni noticias .

El vacío así existente debe ser llenado por l afuente directa a donde llegan loa acontecimientos yse trata de la Guardia Nacional, por lo que ésta haría bien en estos momentos en ampliar sus serviciosde relaciones públicas, para conceder diarias con-ferencias de prensa, presididas por el propio Coman-dante del cuerpo o cualquier otro alto funcionari oen posesión de las informaciones . En un incidentecomo el que viene desarroliándose en Veraguas mu yescasos deben ser loa elementos de valor estratégico ,que requieran reserva absoluta, y en último análisisal pueblo le interesa sobre todo el hecho concreto ycumplido.

Altamente conveniente sería, así, que en la Guar •dia Nacional se organizara el servicio a que hemo saludido, porque si la ola de rumores perjudica en ge-neral a toda la ciudadanía, a quien mas daño hace e sal Gobierno .

Aunque el señor Comandante de la Guardia ,don Bolívar Vallarino, ha facultado a todos loa pe-riódicos para que, en cualquier hora del día o de l anoche, se le llame en solicitud de informes, de ma-yor efectividad vendría a resultar la conferencia dia-ria de prensa.

• -1- eFué el mismo Corresponsal quien —;mientras n i

el Ministerio de Gobierno ni la Guardia Nacional conocían detalles del encuentro de Cerro Tute— infor-maba que "hubo dos muertos de los rebeldes" ; queéstos "usan dos camisas" ; que el Capitán Torrijos fuéherido "cuando agarraba el rifle del rebelde" y tod auna serie de fantasías similares . . .

- s -

• •1- •

Fué el ex-Dictador Fulgencio Batista quien de-claró que, en una guerra de montaña, se requiere ncien soldados para cada rebelde . . . De acuerdo condicha proporción la Guardia Nacional ha debido en-viar 1,700 unidades . . . .

Si Padilla Veliz es el líder de los rebeldes d eVeraguas se le debe dar crédito por la discre-sión . . , Hasta el viernes en la mañana, diaria-mente, escribió en la redacción de "La Nación "su columna, sin dejar traslucir absolútamenteel menor indicio de que andaba en tales andan -zas . . .

. 4. -

El informe sobre la escaramuza donde resul-tó herido el Capitán Torrijos fué conocido en l aredacción de "La Nación" ayer a las 11 .55 de lamañana, o sea dos horas ANTES que en las ofi-cinas del periódico oficialista "El País" . . . AI -guien ,sin identificarse, pero indicando que "s etrataba de un alto funcionario que acababa desalir de la Presidencia," suministró telefónica -mente la información . . .

_ s

LA NACION * Miércoles, II de Abril de 1959

5

1

La Guardia .Sostiene Un Estado DeCosas Que La Ciudadanía Repudia

UNA GUERRA CIVIL AMENAZA A LA REPÚBLIC A

El Movimiento de Liberación)Nacional, jefaturado por el Y1 .eepresidente de la República ,don Tenjistocles Díaz, juntocon los Diputados AqulilnoBoyd y Alfredo Alemán Jr . .lanzó anoche el s iguiente ma .nifiesto :

Los trascendentales acontecl _mientos que se vienen desairo-liando en las faldas del CerroTute Invitan a la ciudadanía aun profundo acto de ronden .cta . La explicable rebeldía d ela juventud, hoy en armas,constitu ye un hecho que exig ede todos lo s panameños el má ssereno análisis de nuestra rea _tidad y la obligación de mayal .ciar esos sucesos dentro de to spe r manentes proyecciones .

Abocada como se encuentrala República a graves moman _tos, no tiene valor alguno el

empeño inútil de reducir la tre_menda significación de la hor aque vivimos, ni mucho menos,el esfuerzo de esconder la severa advertencia que• estos a-contecimientos pregonan .

El Movimiento de LiberaciónNacional y el Tercer Partido .auténtica oposición al actualestado de cosas, han venid osolicitando reiteradamente de lgobierno una actitud naciona lque permitiera la solución d enuestros problemas en el t ra-dicional clima de cordialidadque ha caracterizado la convi-

vencia panameña . Sin embar-go, el gobierno, Prisionero In-deciso y vacilante de un m : .núsculo pero ambicioso grupopolítico, con irresponsabilida dque merece la más severa con .dona, no sólo se ha situado deespaldas a un viejo y )nsio

clamor nacional por urgente sreivindicaciones sino que, per_sistlendo en una actitud sulcl.da, ba cerrado todas las p uer-tas a una solución electoral quereflejara la libre y autdntr . avoluntad de nuestnp puebl eperpetuando esa peligrosa di etadura política que. ha conde.sido al pele al nerviosismo y l ainestabilidad reinantes .

Esta mentalidad de intolera ncia e incomprensión en quia.neo tienen la obligación de go-bernar respetando los interese *de todos los panameños es laque ha forzado el altivo levan-tamiento de nuestra juventud .

Y fijando responsabilidad es pe rlos acontecimientos que hez

han llevado a la República alas fronteras de la violencia 7

la anarquía irreparables, coael más firme convencim i ento ,acusamos a la actual adminie-tración de subvertir slstemn i t-

caaíente el orden público, de vi olar Irreflexivamen te la Conatt-tución y las leyes del país, deprivar al ciudadano de sus mássagrados derechos, como lo so nel de elegir y ser elegido. Pe .ro hay más . Una política en-caminada exclusivamente a pe rseguir y a silenciar Ios patinó .ticos afanes de nuestra juren.tud ; que se ha ensañado con.tra la Federación de Esto.diantes y toda organización es.tudiantil ; que ha corrompid ohasta desnaturalizar la Ley O .

gánica de Educación, sólo .v+.día conducir a la desprendid ay desesperada respuesta quedesde las faldas del Cerro Tu.te viene dando nuestra juven-tud a la intolerancia oficial .

Es asl como el país ha vistouna Guardia Nacional obligadaa sostener un estado de cosa ,'que ha merecido el categóric ore pudio de las miyorfas n adormites ; y es así igualmente ,como el Guardia Nacional, hl_Jo del pueblo también, tiene alprecio de su vida, que defen-der un orden social que es ras.ponsable de su propia pobre-za .

Nosotros, dirigentes del Ter _cer Partido y de Liberació nNacional, no podemos meneaque mirar con dolor el cuadr ode una República amenazadapor la guerra civil y ensotnbre

cida ya por la . sangre de nace .tro pueblo . Más, como panameñus, nos sentimos emocionadosante una juventud que ha da .do pruebas suficientes de sudecisión irrevocable de llegar

al máximo sacrificio por defender sus derechos .

Presenciar la República abo-cada a la contienda fratricid anos obliga a una Justa preocu.poción . Y, conscientes de lagravedad de lti hora presente,hemo s querido fijar, francanftidamente. "nuestra posició nante Ios istúricos aoonteci .mientos q todos lamentamos .Pero, al lamo tiempo, debe.mos adve tir te r minantementeque la causa de los trastornosque viene Padeciendo la nac i ó nisiueeña radica excluafvam,ateen la intolerancia, la soberbi ay la ligereza de un régime nque en función de un pequ<'ñogrupo de intereses creados seha situado de espaldas a lavoluntad popular . Y, astmismo,ratificamos que sólo mediant euna suprema decisión de ad .ml , lr indispensables Y patriótl .ces rectificaciones podrá el G oblernn evitar los peligros demales mayores y remun erar latranquilidad y la concordia perdidas .

UNA GUERRA CIVIL AMENAZA A L A"'"alirm

(Dice liberación Nacional .—Manifiesto en Página 5 )REPÚBLICA

E 0 R ESREFUERZOSSE ENVIAN VERAGUAS

Mientras les diarios oficialistas están haciendo uso de la radie de la Guardia Nacional, a la prensa Independiente se t ecerraron hoy del lodo las fuentes directas de información ea Veraguas . Los Corresponsales de estos diarios están práctica •mente detenidos en Santa Fé y ne se les permite internarse ea la montaña ni la libertad de movimiento necesaria para cumplircon sus obligaciones . Em tales condiciones, come el pueblo so concede fé a las Informaciones del sector oficialista de la pr osa, suponiendo que se trata de metidas tendenciosas e interesadas, existía bey gran malestar general, frente a la censura vI -

pule de hecho.Lo único amere que hoy ha podido constatar nuestro perla dice es que se kan estado enviando grandes refuerzos a las ~ -

lajas de Veraguas y (ocié, especialmente per lanchas que sa len de la costa atlántica y per la carretera central .Los conocedores de estas cuestiones consideran que es la tarde de bey debías ya encontrarse en Veraguas e es camine pe r

le memos seiscientas unidades de la Guardia Nacional, cae esa me aprevisioiamieete de víveres, armamento y medicinas .

SANTIAGO. — La fal-ta de información y el ais-lamiento que se s' :fre enesta población con rela-ción a los hechos que seestán desarrollando e nSanta Fé, han hecho cir-cular toda clase de rumo-res .

En esta población la si-tuación para varios desta-camentos de la Guardi aNacional se ha tornado d ifícil al no poderse trasl adar a los campos donde s eencuentran posiblementelos revolucionarios por l afalta de guía .

(Pasa a la Pop. 14 letra G)

~a Katiónrw r _m_ wvr%%w

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No. 59.13, Panamá R . ae P . 5c . Miércoles 5 de Abril de 1959.

La Guardia .Sostiene Un Estado DeCosas (fue .Ida Ciudadanía Repudia

Det111I1elall aUii `Rebelde'

El señor Ramón Vega, fue

detenido por miembros d ♦la Guardia Nacional en e l

día de ayer, mientras se de _

dicaba a recoger fondos pa-ra los rebeldes del Cerr oTute , El Sr . Vega fue cap-turado frente al Almacén"NARARI", y según const aea los PARTES POLICIVO 8DE LA GUARDIA NAC1 0NAL, las gest i ones dál de -tenido Ramón Vega fuero ndadas a conocer medítat eI nformación telefónica a l aGuardia, por el PROPIETA .RIO DEL ALMACEN "HA _RARI"

MEMORIAS DE UN FEDERADO

La República en PeligroSe me ha explicado que los émulos de Fi -

del en los Cerros veragüenaea, decidie ron po ral mism os correrse la aventura, sin la ayud ade carcamales politices. Los dinero& nece*a-riors lo levantaron —peso a peso— entre ami-go y simpatizadores, cuidándose de dejar tras-lucir lo que proyectaba» . Si ello es aai, tienemayor mérito su descabellada acción, dignade mejor causa . Sin embargo, ésto no im-plica que deje de ser cierto l o que afirmabaayer, en el sentido de que los más eran len-

timas de ecpejismu háb,lmr•nte montad . po rquienes no cesan —por mezq u inas 5P t teacial _de incitar a la rebe l ión y de fomentar 1, ,histe r ia golpista, ipsinuando c riminalment eque el único recurso que nos. queda es el leaguaje de las armas. Y también lo son de a .quellos allegados a las altas esferas ofícial aque no han vacilado en crear toda cia8e ajeproblemas, con tal de favorecer determinadasIntereses dentro del Gobierno-

Tengo por norma hacerrazonamientos antes de era .tir juicios o formular con _deciente . Ayer la abaneo -

Expresé que consider ocontraria a los intereses d ela revotuci6n que reclama 6 1

pueblo panameño y fuerade lugar la rebelión de nuestres "barbudos", producto—entre otras cosas — de un ape li grosa actitud antisocial ,No me he explicado y pa-recer* injusto que tampoc olo haga hoy, a pesar de ha .borlo prometido. Sin embar-go, el lector convendrá con „migo en la conveniencia a shurgar las raíces y el tren _co, antes que perderse e nlas ramas del problema . L~"rebelión" es parte de u ntodo y, por eso , inicio un aserle de planteamientos querepresentan mi preocupaclS nciudadana por el mismo . Através de ellos esclarecerémis puntos de vista sobre e lparticular .

De nada vale que eontl .memos recriminándonos, losuno* a los otros, por io qu eviene sucediendo, Todo s so.moa responsables, en una uotra forma, por acción u om isien . Los liberales , por suburda operación aritméticade prestarse a cerrar laspUertas a ot ros núcleos de

opinión en el debate, a t ra-vés de las urnas, de las cuc atienes 'nacionales . Los pa.sameñistas, por insistir enun mito que no resiste se -rio análisis y por continua rfalseando la verdad histó-rica, haciéndose pasar po rvíctimas, cuando son los V . G.

timarlos de la confianza Chi c

en ellos depositaran, en s edías, importantes recto-esciudadanos, Los otros gru-pos de oposición — incapa-ces de movilizar y organiza runa cívica acción popular —por coincidir en la política ,estéril y contraproducentede fabrioar o explotar si .tuaciones difíciles, no im.porta cómo, con tal de au-mentar loa quebraderos d ecabeza del Gobierno, Lo scoalicionistas, por despiifa.rrar su caudal político —lbgicamente desgastado en e lejercicio del poder — tirán-dose al degüello los unos alos otros, ppira imponer s uhegemonía o satisfacer de _terminados propósitos, Ite.Bando al extremo de arreagar peligrosamente la est abllidad del régimen, cosaque hemo s visto hacer a ele -mentos allegados a don Er.»esto — casi siempre de ese _trancci6n renovadora o "am ipos personales" .

Como si fuera poco, esmedio de un maremagnumde pasiones y ambiciones ce.líticas, frente a la desilasien y pesimismo que deyo .ra el alma nacional ; frentea la angustiosa d esorieb•o ,cien de nuestros j6v en,si .frente a los grupos de pe,sido, en cuyos métodos fío .roten las prácticas totalil arisa — como el meneito de l18 de febrero, el MAR y elConsejo Ejecutivo de laFEP— ; frente a la subirtesien de valores y el desgo .ciamíento de la República,las fuerzas vivas del pat arehuyen su re sponsabilidadhistórica y hacen Be i s d,un suicida conformismo , iuna acomodaticia "atinan.dad" . Dónde están nuestr aingenieros, médicos, latera;clonalistas, arquitectos, economistas dentistas, luristi ihistoriadores, filósofos, etc ?Dónde están batearestres catedráticos, profesore sy maestros? No culpes a lpueblo sI se deja arrastrar,a los peores excesos, por av-magogos y oportunistas_ lbculpen al pueblo si cae bad ala férula de una remadaultramontana o de us fasetiento totalitario,

e .a .k•b .(CONTINUA )

LA NACION * Miércoles, a de Abril de 1959

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Más Cordura con VeraguasPOR MIGUEL AMADO

El miedo no es sólo un malconsejero ; es, a veces, un con-sejero cruel. Ante el episodiode Veraguas las autoridade shan adoptado una actitud dúpl ice . Puede convertirse en trági-ca . Exageran la importanciamaterial y el carácter anbvers ive de los hechos para sofocar-los por la fuerza y en 1n san-gre . Les desconocán la trascendencia espiritual y la repercu-sión civil, para evadir el rea-lismo que se impone; para disimular que son una expresióngenuinamente nacional de eno-jo y de fastidio por el gobiern oy por la clase que gobierna.Con escasas excepciones, loshombres que se oleaza, pardesignación exclusiva del seño rPresidente de la República, ala mesa de las deliberacione sen el Consejo de Gabinete, ca -recen de emoción social . El heCho, grave en cualquier mome nto y en cualquier gobierno, re.viste consecuencias luctuosa sen loa momentos que vive Panamg. Sin embargo, el Presiden -te tiene amigos y aun parien-tes de confianza que puedenaconsejarlo mejor .

En un país donde la Conetitu

ción ampara la libertad de mo-vimiento y de circulación, unaexcursión por nuestras selvasde quince o de veinte jóvene sen su mayoría menores de e-dad, no debiera provocar el despliegue de guardias nacionale sequipados con lanza-llamas, conametralladoras y coa otras m áquinas de destrucción, Que tre so 4 de ellos irrumpiesen enun almacén rural, para pro-veerse de proyectiles llamado sDE SALON" y de una eseope

ta de caza de calibre 16, sól oconfirma la penuria de su ar-mamento y la falta de seguri-dad por la cual zozobran losestablecimientos comercialesdel interior y de la capital . pe -de aun este episodio, calificadode delincuencia juvenil, no pa-rece justificar la movilizaciónmilitar que se ha ordenado ymenos la creación artificiosa d ealarma mundial, con visitas intempestivas a Flgueres, conconsultas a Washington y conla reunión del Presidente de laCorte Suprema, del President ede la Asamblea y del Procura-dor General de la nación ,

Que los jóvenes al ser pers eguidos y agredidos por la sal

(Pasa a la Plg. 14 Letra O)

M i ércoles, 8 de Abril de 1359 LA NACIO N

POR QUE LOS GUARDIAS Y NO LO SRARIBLANCOS . . . ?

Mientras que los rabiblancos y aristócratas del('lub unión se encuentran descansando muellement een sus lujosas residencias, libando licor y sin impor-ta .le la sueste de los que ae encuentran en acto he-réico en las montañas de Veraguas, los humildesirila .dias, hijos del pueblo. también explotados misera-bl .meni.e por esta casta, son enviados a reprimir un asituación que es propia de los pueblos que buscan s uredención .

Lo justo sería que esos rabiblancos y aristócrata sy sus h cayos, que devengan altos sueldos en el go-bierno, algunos como botellas, y otros como protegi-dos de los maná fines de turno, fueran los que esta -vieran en Veraguas, peleando con los revoluciona-rios. Porque es inhumano que a los hijos humilde sde la Guardia Nacional, a los cuales ellos nunca l ehan ten :do consideración ni respeto, por no considrarlos de su clase social ni económica, sean los qu edefiendan sus infames intereses .

Los elementos de la Guardia Nacional deben de -tenerse a pensar, por qué tienen que ser ellos a quie-nes les pagan miserables ochenta balboas, trabajan -do día y noche, los que tienen que ír ahora a las mon-tañas de Veraguas . Sus jefes inmediatos deben ex-plicarle por qué no van 'os que están ganando dos -cientos y cuatrocientos balboas ; por qué no van losque tienen control de rutas ; por qué no van los qu etienen sus queridas, hijos y parientes ganando alte rsueldos como' botellas en el gobierno . . . ?

Ah . . . ! Esos no van sencillamente, porque s econsideran muy superiores y aman tanto la vida qu ellevan, que no se les ocurre, porque además son c obardes, perderla . Solo están pensando, actualmen-te, si ven que la cosa se pone más caldeada, en cóm osacan a sus parientes del país y cómo se refugia nellos en una Embajada o en la Zona del Canal, has-la que pase la tormenta .

Cuando los humildes miembros de la Guardi aNacional comprendan esta situación —y nosotroscreemos que muchos ya la han captado— no tirará ncintra sus hermanos de condiciones similares a la ssuyas, sino que por el contrario, se unirán a los que ,en buena hora, se han decidido a conquistar mejore sdías para la Patria, un bienestar más digno para e lpueblo .