l1909 obregón triple alianza

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Imperio Azteca

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  • r-

    L170-la zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza

    -------------------------------------------------------------1

    Ma. Concepcin Obregn Rodrguez*

    Introduccin El tema del Altiplano central durante la etapa de ia Triple Alianza es tal vez el ms ampliamente. estudiado de toda la historia mesoamericana. Se debe a que este poder hegemnico tena conquistada la mayor parte del rea cultural a la llegada de los espaoles en 1519 dC, y a consecuencia de ello , es el mejor descrito por las fuentes histricas del momento del contacto.

    Adems, resulta incuestionable que ningn otro estado prehispnico de los desarrollados en el centro-sur de Mxico y en Centroamrica, alcanz dimensiones y grados de complejidad sociopoltica semejantes a lo::; que caracterizaron a este imperio. Por tanto, ha sido visto como la culminacin del proceso cultural mesoamericano, y como tal , lo que sabemos de l ha servido de base para explicar algunos aspectos de otras culturas, de las que contamos hasta hoy con poca informacin.

    La riqueza de datos histricos sobre el Posclsico tardo en el Altiplano central de Mxico y, sobre todo , de la sociedad mexica ha generado gran cantidad de estudios sobre las formas de circulacin de bienes, organizacin social y poltica, sistemas de control social, ideologa, entre otros muchos. Sin embargo, la profundidad y especializacin que han alcanzado estos anlisis en ciertas ramas, hace cada vez ms difcil establecer una perspectiva de interpretacin que implique la gran complejidad de ese momento de una manera realmente integrada.

    El presente artculo intenta sintetizar la informacin bsica que sobre cada uno de los distintos aspectos han generado los estudios especializados , al

    Mi

    csn1Cuadro de texto

    csn1Cuadro de textoObregn Rodrguez, Mara Concepcin 1995 La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza, en Historia Antigua de Mxico, vol. III: El horizonte Posclsico y algunos aspectos intelectuales de las culturas mesoamericanas, Linda Manzanilla y Leonardo Lpez Lujn, coords., pp. 265-306. Mxico D.F.: INAH, UNAM y Porra.

  • 266 El horizonte Posclsico

    mismo tiempo que seala r las relaciones entre todos ellos y sobre roda su desarrollo a travs del tiemj1o.

    La expansin mil ita r sin precedentes de ciertos centros de la Cuenca de Mxico sobre lejanas regiones empezaba a generar grandes cambios en la~ instituciones sociales y polticas mesoamericanas. Por ello , los ltimos siglos antes de la Conquisla deben enlenderse como un mo mento importantsimo de transicin entre antiguas fonnas tradicionales de organizacin y otras ms adecuadas a las nuevas condiciones histricas. Su cabal comprensin permitir un acercarruenro ms integral a una sociedad cuyo fu ncionamiento tanto sorprendera a los euro peos.

    l enorme riqueza de materiales documentales con que contamos para el anlisis de la historia del Altiplano central du rante el PoscLsico tardo (1250 a 1521 dC), resulta a primera vista un gran atractivo para abocarse al lema. No obstante, hay que tener pre..

  • 268 El horizonte Poscl sico

    goras y formas de vida de guien hace la narracin. que el objeto que estn describiendo. Es decir, que pouran ser utilizadas en mucho mayor medida para reconstruir el mundo espaol de ese momento, que las sociedades que encontraron en Amrica.

    Al anali zar el imperio de la Triple Al ianza muchos autores modernos llegan a la conclusin de que ste haba alcanzado sus mximos lmites y por e llo empezaba a colapsarse. Esta interpretacin se basa en el argumento de que las antiqusimas instituciones sociales y polticas mesoamericanas, que se haban venido adaptando a las nuevas condiciones histricas no pouian dar ms de s, por lo que haban empezado a generarse contradicciones muy serias ql1

  • 270 El horizonte Posclsico

    autores cuyas obras se han vuelto fu ndamenta les para el estudio de 10 mexica son : Roben Barlow, Frances Berdan. Edward Calnek, Nigel Davies. Ross fIassig y Friedrich Katz.

    En los ltimos aos ha resurgido tambin el in ters por el anlisis de aspectos ideolgicos lales como la cosmovisin, las fo rmas de legitimacin de la autoridad poltica , la mitologa, etctera. Al respecto no puede dejarse de mencionar la riqusima labor de Alfredo Lpez Auslin, as como de autores como Michel Graulich, Johanna Broda y Xavier Noguez.

    De manera paralela al avance de los estudios hislricos y etnohistricos, se dieron tambin importantes proyectos arqueolgicos en el Altiplano cenlIal. stos aportaron grandes ava nces en el conocimiento de algunos aspectos imposibles de reconstruir a travs de documentos y crnicas, como son el de los patrones de asentamiento y la densidad de poblacin, por poner algunos ejemplos. Uno ele los proyectos arqueolgicos ms notables fue el estudio de la Cuenca de Mxico por \Villiam T. Sanders. jeffrey Parsons y su equipo. A"los despus el Proyecto Templo Mayor, dirigido por Eduardo Matos, dara lambin gran cantidad de nuevos materiales sobre la cultura mexica a los especialistas.

    En cuanto al estudio de las manifestaciones artsticas de la ltima poca del mundo prehispnlco en el cemro de Mxico, se ha publicado gran cantidad de investigaciones sobre piezas en particular. Sin embargo, un notable intento de smesis y presentacin de lOdo lo escrito al respecto hasta los aos ochenta, lo constituye el libro de Esther Pasztory sobre el arte mexica .

    Migracin mexica El lrimo de los grupos ch.ichimecas que, despus de aos de migrar por los territorios del norte de Mesoamrica, se estableci definitivamente en la Cuenca de Mxico, fue el de los mexicas, grupo cuya participacin en la historia inmediatamente anterior a la llegada de los espai'ioles sera importantsima. llega ndo a constitu irse en la principal fuerza poltica de toda el rea cu ltural.

    Segn las fuentes histricas, los mexicas haban realizado un largo recorrido buscando un sitio apropiado para asentarse, lo que debi haber ocurrido entre los siglos :\11 YXIV de nuestra era._Los nombres de los primer~

  • 272 El horizonte Posclsico

    con las reliquias de los dioses e interpretaban sus mandatos. Esto implica que ya exista un grupo sacerdotal, aunque todava incipiente, sobrepuesto al sistema simple de control tribal.

    Despus de su estancia en Tula, la ruta que siguieron los mexicas hacia la Cuenca de Mx ico es fcilmente reconocible. Pasaron por varios lugares de los estados actuales de Hidalgo y Mxico (Atlitalaquia, Tlemaco, Atotonilco, Apazeo y Tequxquiac), para llegar al norte de la cuenca lacustre detenindose e n Zumpanco, Xaltocan y Acolhuacan. De ah cruzaron hacia el margen occidental del Lago de Texcoco. haciendo paradas sucesivas en Ecatpec, Tulptlaco Coatirlan, Huexachtitlan , Tecpayocan (Cerro del Chiquihuite), Pantitlan , Amalinalpan, Acolnhuac, Popotlan (Popotla) y Atlacuihuayan (Tacubaya).

    Luego pasaron a ocupar Chapultpec donde pennanecieron por un periodo ms largo (70 aos) que en los anteriores sitios, al parecer intentando establecerse definitivamente . Construyeron importantes obras de carcter defensivo y sufrieron un importante cambio en su sistema poltico al centralizarse el poder en un solo lder llamado Hu itzilhuitl , en quien se unificaba el liderazgo militar y religioso.

    Sin embargo, su crecimiento empez a ser considerado como una amenaza por varias de las ciudades-estado poderosas de la cuenca como Xaltoca~AzcaRotzalco , Culhuac;:an y Xochimilco, por lo que a finales de la segunda dcada del siglo XIV, stas se aliaron militarmente para obligarlos a dejar el sitio. Segn el Cdice Mexieanus y los Anales de 'flateloleo, Cuauhnhuac, principal seoro de Morelos, tambin particip entre las fuerzas que expulsaron a los mexicas.

    Con la derrota y la muerte de su lder, el grupo mexica tuvo que fragmentarse , dirigindose algunos hacia Chaleo, Xaltocan y Azcapotzalco segn los Anales de 'flateloleo, mientras que la mayora lleg hasta Culhuacan para ofrecerse como tributarios a cambio de un sitio donde asentarse .

    Dicho seoro de larga tradicin en la cuenca les dio Tizapan. un lugar descrito por la versin mexica de los hechos como inhspito y lleno de animales ponzoosos. A cambio de l tuvieron que participar como fuerzas mercenarias de los colhuas en varias guerras , entre las que destaca la de Xochimilco . Esta colaboracin les fue ganando mejor trato por parte de l seoro que los dominaba, e incluso el matrimonio de muchos mexicas con culhuas .

    La estancia en Tizapan te rmin en un violento enfrentamiento, tal vez provocado intencionalmente por los mismos mexicas. Sin embargo, stos

    Ma e ObregnRodrguez La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza 273

    resultaron vencidos y muy maltrechos tuvieron que cruzar los lagos del sur para avanzar e ntre pantanos y tulares hacia el noroeste del de Texcoco CMexicaltzingo, Iztacaleo y Temazcaltitlan). Entonces escogie ron el islote en donde levantaran su capital definitiva, creyendo ver las seales con que su dios les sealaba la tierra que les haba prometido: un guila parada sobre un nopal (vase figura 1). La fecha de fundacin de Mexico-Tenochtitlan segn la mayora de las fu entes fue el ao 2 Calli o 1325 de. Algunos autores creen que una correspondencia ms precisa para sta sera 1345 de. 2

    A pesar de que las fuentes mexicas subrayan el f1'eCi1O de que se trata.!2!! de un islote despoblado , la evidencia ar ueol i a ace ensar ue al i ual CWe Tlatelo co, esto no fue a&, Existan en ellos asentamientos posiblemente tepanecas, desde muchos aos antes de la fundacin oficial de las dos ciudades mexicas.

    La eleccin del sitio tuvo razones de tipo econmico (riqueza en productos lacustres) y militares (facilidad de defensa); pero tambin de tipo ideolgico: la recreacin de su lugar de origen y de la forma en que conceban el plano terrestre, as como un entorno que reproduca la imagen mtl '~a de Tallan - "ti lugar de los tules"- , lugar del cual posteriormente intentaran presentarse como sucesores.

    La ocupacin del islote que perteneca al seoro de Azcapotzalco oblig a los mexicas a acep tar la condicin de vasallos de ste y por tanto a pagarle peridicamente tributo. La relacin del grupo con los tepanecas se vera reafirmada por los acontecimientos de los aos sucesivos.

    Situacinpoltica de la Cuenca en el siglo XI V

    Al llegar los mexicas, la Cuenca de Mxico se encontraba densamente poblada y fragme ntada polticamente en numerosas ciudades-estado que controlaban los territorios circundantes. Las relaciones entre ellas se caracterizaron durante la primera mitad de l siglo XIV por una notable inestabilidad, producto de la constante competencia por ampliar sus reas de influencia .

    Cuando un estado o capital lograba asumir un papel de liderazgo en cierta regin , terminaba generalmente imponiendo totalmente su dominio. Tal es el caso de los seoros tolteca de Culhuacan, chichimeca de Tenayuq, oton de Xa ltocan y acolhua de Coatlinchan.

    - Dav", l'he Aztl!c FlllpilY!. p. 25.

  • 274 El horizonte Posclsico

    Figura 1. "ista posterior del " leocaili de la guerra sagradA ,. con el guila posndose en el nop,[ Credihujado de Tow~end : ~/(,/Ie al/ti Cosmus ilJ Ibe AI1 oITel/ocblilkm rp. 'i0 y 51)

    stos, a travs de alianzas con otras ciudades-estado, controlaban amplias zonas dentro eJe la cuenca e incluso fuera de ella . As por ejemplo, la capital otomi controlaba la mayor parte del norte y noreste de la Cuenca ele Mxjco, extendindose casi hasta la sierra de Pueb la , as como la zona mazahua al norte del Va lle de Toluca. Al mismo tiempo mantenJ alianzas polticas de buena voluntad con seoros del sur como CUillllllac y Xochimilco. Chim~l J pahin habla de que formaba una Tripl e Alianza con este lrimo y con Culhuacan .

    Ma. C. Obregn Rodrguez La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza 275

    El relativo equilibriQ que manlenia la competencia constante entre todas estas fuerzas , ued roto a partir de 1371 dC, al consolidarse el estado tepaneca de Azcapotzalco bajo el lidera zgo e ezozmoc. Constantes campaas militares victoriosas llevaron a Jos tepanecas a imponer tributacin y a controlar gran parte de la regin norte de la Cue nca. todo el occidente de ' sta , el Valle de Toluca (incluyendo Mazahuacan), la provincia de Xillotpec, la de Teotlalpan y parte del Va lle del Mezquital,3 as como la parte occidental de l VaUe eJe Morelos .

    El expansionismo tepaneca Jfecr de manera ms inmediata al Seoro de Xal tocan, anebatndole amp lias zonas v terminando por imponerle su tota l dominio . Esto p rovocara un xodo masivo de los otomes hacia otras zonas ms al este y hacia Tlaxcala .

    La posicin hegemnica de Azcapotzalco le permili establecer importantes alianzas con otros gru pos importantes del rea. Algunas se llevaron a cabo a travs de matrimonios entre miemhros de su linaje gobernante y los de otros centros de me nor jerarqua. ste sera el caso de los tlateloJcas, qu ienes solicitaron un seor tepaneca: Cuacuapitzhuac, para que fuera su primer ttatoan i .

    Azcapotzalco otorg, por convenir a sus inlereses, calidad de aliados o senoros semindependiemes a algunos que haba incofP-orado por ~~

    n ejemplo es el de Cbaleo. que se atribua haber conquistado a los matlatzincas , pero el tributo que pagaba Toluca iba directamente a AzcapoLzalco. Una situacin semejalllc al parecer es la de la conq.uis.L1 eJe Cuauhnhuas que las fuentes mexicas atribuyen a Acamapichtli. p rimer seor de Tenoch tiQanL siendo que en realidad la llev a cabo actuando como mercena rio del seoro lepaneca.

    Las formas de dominio que ejerci Azcapotza \co sobre los pueblos a los que sojuzg no son descritas con precisin por las fuentes documentales. Pero los Alfa/es de Tlate/oleo afirman qu~Tezozmoc lleg a imponer a varios de sus hijos como gobernantes en pueblos conquistados.

    Varias fuentes mencionan que dicha capital e jerci su supremaca a travs de alianzas roo Coatlinchan. Amaquemecan., Huexolzinco y. Cuauh nhuac. ::n el Cdice Vaticano-Ros y la Relacin de AeoTn1an-se - precisa sobre stas. diciendo qLle tom la f01111a tripartita , y que los otros miembros eran Coatlinchan r AcoJman. Por otra parte, los Anales de CUClllhtitlan no mencionan a este ltimo seoro, sino a Culhuacan como el tercer aliado . Esta forma resul- Carr3!)CO: Ir,,' off/mies. p. 269.

  • 276 E I horizonte Posclsico

    Lara el antecedente ms directo a la alianza encabezada por los mexicas a)os ms larde.

    En las alianzas estahlecidas por Azcapotza!co los participanles no ten an al jera rqua y no resul ra ron muy durader~ Aos desp us de ser aliados,

    os tepanecas ico: la etapa de la TripleA/ianza 277

    comprobarse , resulta evidente que los tlatelolcas con la fundacin de su linaje gobe rnante haban establecido estrechos vnculos con Azcapotzalco y deban gozar en consecuencia de una mejor posic in que sus vecinos.

    Para enronce& ]a sociedad rnexica se enconrrabJ ya claramente estra tificada tanto al interior de cada calpu /li como a nivel global , ya que algunas de estas unidades monopolizaban las funciones directi\ as '! controlaban al resto. Sin emba rgo . su organ izacin poltica segua siendo bsicamente tribal. Deseando poder ingresar al juego de fuerzas polticas que desarrollaha n sus vecinos, decidieron adoptar una forma de gobierno semejante.

    Para ello los lenochcas entronizaron l Acamapichtli como su primer Iatouni - "el que habla" . Se trat aba del hijo de un mexica con una noble culhua . La eleccin de Culhuacan para fu ndar su linaje gobernante pa rece responder ms a intereses de legitimacin ideolgica que a cuestiones prcticas. Gracias a ella , su grupo dirige nte se considerara descendiente de los toltecas, los ms anl iguos gobernantes de los que se tena memoria en el centro de Mxico.

    El poder de los primeros tres Ilaloque mexica (Acamapichtli , Huitz ilhuitl y Chimalpopoca) fu e realmente limitado tanto interna ment~las autoridades de los ca/pH/tin. como exrernal!!..enle por el monarca (epaneca del que eran su bordinados . ACm as, esta etara fue muy importante para la consolidacin de la nobleza tenochca por ~ u brillante participacin en guerras de conquista encabezadas por AzC'apotzalco. Algunas de estas campaas son las de Tenayuca. Cu lhuacan , Mzquic, Xochimilco, Cuitlhuac, Cuauhn huac, Cl1 alco, XaJtoca n, Cuauhtitlan y Texcoco, realizadas dura nte los 30 l timos aos del siglo XI \ ' y las dos primeras dcadas del siguiente .

    La aguerrida actuacin mexica les repon mejores condiciones de trato por parte de la capilal tepaneca, e incluso en pago a sus Servicios recibieron como indemnizacin parte del tributo obtenido. As nos dice Lxtlilxchitl que despus de conquistado Texcoco (1418 dC) por Tezozmoc de Azcapotzalco , se inici e l reparto de l reino dividindolo en ocho parles. De stas tom dos para s , dejando que "de las cinco partes que quedaban, la una tomase Tlacateotzin, seor de Tlatelulco , dndole por cabecera a Huexutla y sus sujetos; y a Chimalpopoca, la cuarta parte, y por cabecera la ciudad de TezcLlco '.'

    Esto favoreci directamente l la nobleza mexica, que empez a beneficiar:-;e de los excedentes rroductivos, provocando una profundizacin en la diferenciacin interna de la sociedad. Todo ell o, tendra tambin como resul

    lxtlil xchirt : Ohms iJlsll1caS. 1. 1. p . .)

  • 278 El horizonte Posc lsico

    tado el surgimiento de grupos ocupacionales intem1edios como comerciantes, burcratas y artesanos especializados

    Las relaciones entre Tenochtitlan y AzcapOlzalco se vieron adems reforzadas con la introduccin de la sangre real L~I2a neca en~ linaje reinante de Mexico-Tenocbtitlao a travs del matrimonio de Hu itzilhu iLI con la hija del VJej

  • 280 El horizonte Pbsclsico

    blos que iban conquistando. Estas ltimas fu eron e ntregadas en prop iedad privada a los dirigentes de los ejrcitos, como pago a sus servicios.

    La sociedad mexica sufri entonces una reestructuracin profunda basada en la desigual distribucin de esas ganancias. Las nuevas tierras no fu eron divididas entre Ludos los calpuItin. tradicionales unidades poseedoras de la tierra, sino adscritas a los miembros del grupo dominante (nobleza o lite guerrera), fenmeno que hizo profundizarse con rapidez la d ivisin social ya existente.

    Sin embargo, los macehuales mexicas, aunque no de manera inmediata ni equitativa, vieron tambin elevar su nivel de vida gracias a la expansin militar. El control sobre otros pueblos y la progresiva centralizacin de bienes. permitira su especializacin en actividades productivas que les ofrecan mayores ingresos y reduccin de sus obligaciones en prestacin de servicios al Estado.

    La desigual distribu~in d~_.L~ficiQ.s. obteIdos C.U....IA . {".WSOU.:I. lUSO /u;,tificada ideolgicamente en la historia ms;xica como produ cto de un "pacte

    --Y social ". Segn s ta, el pueblo temeroso se haba negado a participar en el comba te contra Azcapotza1co. An as, el grupo noble se haba lanzado a la lucha, y el resto de la sociedad voluntariamente haba prometido futura obediencia si salan victoriosos de su intento.

    El aumento de poder por parte de la nobleza mexica tuvo repercusiones inmediatas en la forma de gobierno, dndose una marcada tendencia a la centralizacin de poder en la figura del tlatoani y del consejo de cuatro principales, que funcionaba como su principal asesor en asuntos de Estado.

    Itzcatl cambi las leyes de sucesin estableciendo que la cieccin del mximo cargo poltico caera en manos de dicho grupo colegiado. es decir, de la ms alta oligarqua poltica. Con esto se excluy a los lderes de los calpultin por completo de la nueva estructura poltica,\'i: ~ndo reduciJ0 su mbito de influencia y autoridad a la organizacin interna de sus comunidades.

    En lo ideolgico, los lderes de l incipiente estado mexica (Itzcatl . Tlacaelel y Moctezuma) ordenaron la destruccin de toda la historia a nterior, para reescribirla de acuerdo con sus necesidades. As fue elaborada y d ifund ida la visin imperialista del funcionamiento de l cosmos. En esta reelaboracin, la imagen de Huitzilopochti , su dios patrono, fue adquiriendo elementos de antiguos cultos y convirtindose en la fuerza hegemnica que aseguraba la continuidad de la vida humana.

    Ma. C. Obregn Rodrguez La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza 281

    En cuanto a las relaciones con los sei1oros vecinos , los mexjcas decidieron fo rmalizar la alianza con aquellos q ue haban participado junto con ellos en la guerra. Siguiendo una larga tradicin mesoamericana esta alianza tom una forma tripartita.' Cada uno de los participantes se deca heredero de uno de los grandes seoros q ue haban controlado la cuenca durante los aos inmediatamente anteriores: Mexk o-Tenochtitlan de Culhuacan, Te.."l(cOCO de Coatlinchan y 'I1acopan como sucesor ele! vencido AzcapolzalcO.

    Este pacto aseguraba su fue rza militar y permitira una continua exp ansin en el futu ro, a camhio de respetar los tradicionales dominios de cada uno. Segn la historia mexica , Itzcatl ayud a su aliado Nezahua1cyotl a te rminar de recobrar todo el Acolhuacan, sujetando a ciertos seoros rebeldes (Huexotla y Coatlinchan) frente a su autoridad.

    Sin embargo, Ixtl ilxchitl, qu ien proporciona la visin texcocana de los hechos, asegura que la rivaUdad entre los dos aliados lleg a estallar cuando se enfrentaron por el ttulo de Seor de los Chichimecas y porque despus de repartirse el imperio tepaneca , el seor tenochca haba tomado ms territorios. Segn el noble texcocano, la pelea fu e real y termin con el triunfo de Nezahualcyotl, quien empez a recibir tributo de ciertas zonas localizadas en territorios antes controlados por los mexicas e incluso del propio Tenochtitlan. La versin mexica (Durn) dice que se propuso una batalla simblica y en ella, el seor acolhua tUYO que aceptar ser vasallo de Itzcatl.

    En los arreglos formales , la Triple ALan za (J:.xcan 77af%yan) a parece como una confederacin de tres seoros aliados en igualdad de condiciones. Sin embargo, de hecho esto no fue as ya que Tlacopan recibira tan slo una quinta parte del tributo. Se trataba originalmente de una alianza militar para llevar a cabo campaas de expansin conjuntame nte y repartirse las ganancias que el dominio sobre otros grupos proporcionara. Segn Torquemada cada uno de los miembros poda realizar adems campaas independienres de las organizadas por la alianza .

    En cuanTO a sus asuntos internos, cada uno tendra total independencia, pero por ejemplo la sucesin al cargo de tlatoani en uno de ellos tena que ser ratificada por los otros dos gobernantes , e incluso algunas me nciones hacen parecer que muchas veces intervinieron apoyando a algu nos postulantes sobre otros.

    , Clclro., ejemplos :lJ1teriores son aqulla:; formaelas dentro del imperio toh"C;1 por TuJa Qromp;!" l ' Cul huaclrI ("egllrl inf orm.1cil1 de Chimalpahin), IJ l onsl ilu icb por Culhuamn. Tena}'uca 10CUlroa!,!l.[Jas In L~li c.l.l

    cr.r'i'iJT:l (Cdice 'aticollo-R",il. y la dominante en la cu.,nca dllranTe gran parte de Siglo \1V (Cdhlln

  • 282 El horizonte Poscls ico

    Cada uno de los miembros ira adoptando con el paso del Li empo fUll ciones especializadas denlro de la liga: el primero, como el gran organizador de la guerra y expansin; el segundo. destacado por la legislacin y direccin de obras de ingeniera, y el tercero, por la produccin agrcola . Dentro de la ideologa legitimadora, cada uno se relacionaba, como sugiere Lpez Austin , con uno de los n iveles constitutivos del cosmos: un Acolh uacan celeste, ordenador, con capi tal en Texcoco; un Colbuacan blico, solar, domi nador de los cielos inferiores representado por Tenochtitlan; y un Tepanecapan terrestre , productivo encabezado por Tlacopan ('

    Estructura poltica original

    La l lnidad poltica bsica dentro del imperio que fue conquistando la Trip le Alianza, sigui siendo el altPetlo pueblo . ste puede definirse como un territorio con un gobierno soberano u originalmente independiente , a quien tribulahan vari as cDmuniuaues o calpuJtin. Imem amente se caracterizaban por una gran estabilidad. producto del respeto por foonas organizativas tra di cionales, cultma y costumbres comunes, etctera. Esto les daba una n0table tendencia a la cohesin y solidaridad interna .

    Este nivel poltico no incluye a grupos amplios aunque, por ejemplo, fuesen hablantes de un mismo id ioma, pues stos no llegaban a constituir unidades polticas integradas . La nica excepcin es la de los ocuil recas, quienes siendo un gru po tnico muy pequeo llegaron a conCenrr3JSe en un solo pueblo unificado polticamente

    Dichos pueblos o unidades polticas se haban mantenido en permanente lucha desde siglos atrs con sus vecinos, por imponerles su dominio o bien para defender su soberana. Cuando uno de estos pueblos que lograba suje ta r milita rmente a otros e imponerles tributacin, alcanzaba el sigu iente nivel en la organizacin poltica , que era el de seoro, algunas fu entes erno hisrIicas lo llaman tambin altpetl, lo que favorece la confusin de qu ien intenta esrudiarlos. Sin embargo, otras lo diferencian llamndolo Ilatocy otl, ya que se trata de un reino o conjunto de pueblos que, aunque conservan a sus gobern antes locales, reconocen corno autoridad poltica superior al ,latoani del seoro dominante.

    Lpez ALbtin: .0111(,: M!Jsked God of Pin,, ". p. 283

    (;Hn'I,(;() : /.OS ()(//fres. p. J

    Ma. C. Obregn Rodrguez La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alia flZa 283

    Estas ciudades-estado formadas por la cap ital () cJbecera (pueblo conquistador) y pueblos subordinados , \'ariaban enormemente en extensin y podero, sin que ambos fa ctores tuviesen una relacin directa; por ejemplo , el caso de Xochimilco, que con un territorio relativamente pequerio, lleg a tener una capital densamente poblada y grandes concentraciones de excedente produ ctivo.

    La cabecera de cada uno de estos seoros concentraba funciones polticas y administrat ivas, serva como punto de intercambio comercial o mercado. y fu ncionaba como corazn o foco cultural de las reas dependientes. La poblacin de stas tena que rihurar a ambos niveles: a las autoridades tradicionales del pueblo del que formaban parte y a las del seoro que los ha ba incorporado.

    En algunos casos la relacin entre el seoro dominante y los gru pos incorporados como vasallos, inclua cierta filiacin tnica o lingstica , como Texcoco centralizando el poder en el Acolhuacan.

    Estas unidades polticas de segundo nivel eran mucho menos permanentes que las bsicas, y dependan del xito militar. Al ser vencida mili tar mente alguna de ellas , quedaban incorporados al conquistador todos los pueblos sujetos a ella con anterioridad.

    Debido a la constan te lucha por el poder que se estableci entre los seoros importantes de la Cuenca de \1xico, los tlatocy otl tendieron a establecer confederaciones para ayudarse mutuamente en la guerra. General mente eran formadas por grupos que compal1an intereses , o bien fi liacin lnica o lingstica . Para finales del Pos clsico existan ocho de estas grandes ligas, que eran, segn Hodge como se muestran en el cuadro l . ~

    Tres de dichas ligas estableceran un pacto de ayuda militar, constituyendo la Triple Alianza con el fin de asegurar su exp:.lnsin progresiva sobre el resto. Inmediatamente despus de haberse repartido los dominios t.epanecas y con ello tener bajo su control la mayor parte de l nOl1e de la cuenca, 1 alianza inici su ac111acin con el ataque a los pueblos agricultores del sur regin chinampaneca: Xochimilco. Mixquic, Cu itlhuac y Chaleo.

    sws presentaron gran resistencia Ll oposicin a la incorporacin, pero fueron vencidos militarmente por los ejrcitos de lrzcatl , con excepcin de los chaleas. La conquista de dicha rea signific, al menos para Tenochlia n, un momento clave para su desarrollo posterior ya que constitua la po:.ibilidad de asegurar su abastecirniemo regular de comida. Las ciudades-eswdo de

    Hooge: Azec Ci.tyoS::ues', p. '8

  • 284 El horizonte Posclsico Ma. C. Obregn Rodrguez' La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza 285,

    l. Grandes

    Mexica Tenochtitlan TIatelolco

    Xocrnmi!ci Xoehimilco

    Dlae Tecpan

    al final del Posclsico

    Culhua tC,I,,",,"HuitzHopocbco Mexicalttlnco Ixtapalapa

    Chalca c:\ ~hillco -

  • 286 287 El horizonte Posclsico

    considerar prioritario el control de Chaleo para consolidar su autoridad sobre la cuenca en forma definitiva. La guerra termin en dC con la incorpo

    la Triple Alianza, y con la emi

    hacia zonas cada vez ms Teotlalpan, Huasteca conquistando Tuxpan, Cuetlaxtlan), Coixtlahuaca en la NllXU':;Ld. luUldXlld como la virtual reconquista del Valle tuidas algunas de las provincias centro, hasta la llegada de los espaoles.

    En estas grandes rutas de expansin puede verse con clanoao 9..':!.e. en un principio, las guerras de conqUlsta de la Triple Alianza' tenTJa relaci()~ ciirecta con la apropiacin de fuentes de materias pnmas y_I.:.~:i~~31Cl~S...J.?l~: ciosas,~ue hubiese sido imposible obtener por comercio ya que sus capitales ~ducan ningn bien que hubiese podido financiar dicha importacin. Al observar las listas de tributacin de todos estos pueblos, salta a la vista que se trata prioritariamente de materias primas y objetos de lujo para uso exclusivo del grupo social privilegiado.

    Tambin en razn de esto fue creciendo el inters por dominar a los seoros poderosos de Puebla-Tlaxcala, que controlaban una muy importante va de comercio con la Costa del Golfo y el sur de Mesoamrica. La economa de stos se haba visto directamente afectada por las conquistas de la Triple Alianza encabezadas por Moctezuma I1huicamina. Como reaccin a ellas los

    lpvnt71nr'lc "ntguos aliados de no tomaron accin directa, sino a intrigar en su contra. Mientras tanto, Tlaxcala iba toman

    en la regin conformando una fuerte alianza o confederacin de reinos.

    La

    abastecimiento. Al subir Axaycatl como seor

    de extender los dominios el oeste de la Cuenca As realiz dos campaas para incorporar a grupos matlatzincas, otomes del Valle de Toluca. Ah encontraron gran resistencia

    Ma. C. Obregn Rodrguez La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la

    por parte del seoro de Xiquipilco. Una vez controlado ste, en 1478 decidi avanzar an ms lejos llegando hasta Tajimaroa en la frontera del imperio tarasco. Sin embargo, enfrentamiento result por primera vez una derrota definitiva para las tropas la Triple Alianza.

    Despus de tan desafortunada actuacin, Axaycatl tan slo participara en guerras rituales contra Tliliuhquitpec (parcialidad independiente del valle poblano-tlaxcalteca), y aplacando rebeliones de pueblos ya antes dominados como Ocuilan, Huexotla y Xiquipilco.

    Uno de los acontecimientos ms notables de su reinado fue la guerra conTlatelolco. Hasta entonces los dos centros mexicas

    relaciones, e incluso en algunas fuentes se menlIdLC:IUlcas como responsables de conquistas que despus

    como orooias: oor ejemplo, las de Tepeaca y

    ir creciendo gradualmente de Moctezuma Ilhuicamina, los

    autonoma poltica, aunque estrictamente vigilados por sus vecinos. Hacia 1470 dC, bajo el pretexto de la usurpacin Moquhuix al trono de liz con una sus de la ms declar la guerra.

    El lder tlatelolca busc el apoyo de los tradicionales enemigos cas (chaleas, tlaxcaltecas, huexotzincas, etctera) para defenderse oe lOS eJercitas tripartitas. Pero slo recibi respuesta de Culhuacan y Huitzilopochco, en lo que sera el ltimo intento de los culhuas por liberarse del control que sobre ellos haban impuesto. Por tanto, Tlatelolco tuvo que enfrentarse prcticamente solo a tan poderoso enemigo.

    La derrota no se hizo esperar y su lder muri. El riguroso trato sobre los tlateloleas vencidos (saqueo, reparto de tierras, tributos especiales, humillacin a sus nobles, prohibicin de continuar el culto en su templo, imposi

    de una dinasta real, etctera) deja ver el gran inters por establecer un control esta ciudad, mucho ms estrecho que sobre los otros grupos

    haban conquistado. Tal vez se debi a que Tlatelolco s representaba un a sus intereses y que controlaba el magnfico negocio que re-

    comercio a larga distancia. el reinado de Axaycatl hay clara evidencia de la partici

    como rbitro en problemas entre otros seoros; por ejemplo,

  • 288 El horizonte Posclsico

    la disputa de fronteras entre Tepeaca y Cuauhtinchan (Puebla). Esto deja ver que en esas fechas la capital mexica no slo encabezaba la alianza militarmente, sino que ya centralizaba su direccin en muy distintos aspectos.

    Para asegurar la estabilidad del imperio que iba formando la Triple Alianza, desde mediados del siglo A'V result indispensable afianzar sus fronteras, especialmente las septentrionales. Dos de los principales intentos por lograrlo resultaron completas derrotas para los ejrcitos tripartitas: la campaa contra los tarascos, ya mencionada, y el ataque a Metztitlan unos aos despus, encabezado por Tzoc. Mientras tanto corran con mejor suerte en la consolidacin de sus dominios hacia ambas costas (Veracruz y Guerrero).

    Al no poder extender sus dominios hacia el norte, los ejrcitos de la Triple Alianza aplicaron sobre los seoros que se encontraban justo en los lmites entre sus territorios y los de sus enemigos, una poltica muy distinta a la usada con los otros grupos incorporados. Tal es el caso de Oztoma y Alahuiztlan que, despus de ser arrasados, fueron repoblados con agricultores de la cuenca (de las capitales de la alianza, Xochimilco, Cuitlhuac, seoros otomes) de los que se poda esperar total lealtad.

    Fue en las dos ltimas dcadas del siglo xv cuando el imperio alcanz su mxima extensin. Las grandes campaas militares promovidas por Ahutzotl, seor de Tenochtitlan, se dirigieron principalmente hacia regiones lejanas del sur (hasta Guatemala), ricas en materias primas y productos de lujo muy codiciados (pieles, plumas preciosas, mbar, cacao, oro, etctera). Su conquista se tradujo en enormes cantidades de nuevos tributos para los aliados, as como nuevas y ms seguras rutas de comercio de las que obtenan otros bienes de zonas no incorporadas; por ejemplo, a travs de Xicalanco, los productos de la pennsula yucateca y de importantes mercados en Centroamrica (vase figura 2).

    Durante esos aos fueron los seoros del valle poblano-tlaxcalteca los que mayor resistencia y oposicin seguan representando para la consolidacin de la Triple Alianza. Tanto Tenochtitlan como Texcoco tuvieron continuos enfrentamientos contra IIuexotzingo y su aliado Atlixco. Tal vez sta fue la causa que dicho seoro fuera perdiendo fuerza en el valle y terminara por ser suplantado por su rival Tlaxcala, como centro rector de la zona.

    La aceleradsima extensin de los territorios bajo el control de la Triple Alianza tuvo como consecuencia inmediata notables cambios internos en su organizacin, en las relaciones con los grupos sujetos y en el reparto de ganancias. Casos notables son la participacin de macehuales tenochcas en

    Ma. C. Obregn Rodrguez La zona del Altiplano central en el Posc/sico: la etapa de la Triple Alianza 289

    :- San Luis Potos, ) \.'\~. ,,' 1

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    1. Acamapich,li C1376'(13%

    GuanaJuato ,j " ,~ 9 ),zl~'?,;;.r~J.,lf12, 66 \ C13%.(1417,";,,, 2. Hutz,lhuitl

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    " 1/ H,dalgo I~'~/ ~, -). 5. Monteluma C1440.(1469

    . Axay~catl), - \, /, , 'tz(Uif)(""'i::L~~,nRO " '9 ~ ~

    \ ~ / , '- / "4.n,I~,"II,u 9 T.l-lqu'''.''I / - / "5Hu",,,,,""" , e , 8. Ahltzotl C148b.(1502 ' ~ ~ X"0("1; X1\f:0rumba' "',' idlullzl"" 9. Montezuma 11 C1502.(1520

    "",HU>!,-"o "'-,MXltoJmI\'UCa:~~) l~~.~ ,.C~,,"x>alan I 6 llacop,)~ ..XX.zakO .T'..."'.... 8 ,8,5 _~""" , " ~"8 ~

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  • 290 El horizonte Posclsico

    ferencia a una verdadera incorporacin y control de todos los grupos antes conquistados, y los enclaves independientes que an quedaban aislados dentro del territorio bajo su control.

    A la mayora de estos ltimos no se les declar la guerra directamente, sino que se prefiri bloquearlos extrayendo de sus alrededores los productos ms importantes para su economa, Un ejemplo claro de esta poltica es el de Tototpec, reino mixteco que ocupaba la costa oriental de Guerrero.

    La nica excepcin a esta estrategia fue el caso de los seoros independientes de Tlaxcala y Huexotzingo, quienes se haban convertido en sus ms acrrimos enemigos y a los que se determin dominar por completo, Las fuentes documentales mencionan varios enfrentamientos entre ejrcitos de la Triple Alianza o de grupos bajo su control como Chalco-Amecameca, Cuauh

    y Cuitlhuac, contra Huexotzingo y Atlixco, Sin embargo, segn Muoz Camargo pocos aos despus, en 1504 dC los

    huexotzincas atacaron Tlaxcala y al ser derrotados por sta pidieron ayuda a Tenochtitlan, Moctezuma Xocoyotzin envi inmediatamente un gran ejrcito pero no pudo vencerla, perdiendo gran cantidad de soldados y valientes guerreros,

    En 1515 dC el problema se reaviv ya que los tlaxcaltecas invadieron Huexotzingo, vencindolo y arrebatndole sus cosechas. Muchos de sus pobladores fueron recibidos como refugiados en Tenochtitlan, y ste encabez dos campaas imperiales ms tratando de recuperar dicho territorio. Sin embargo, estos intentos tambin fracasaron.

    Tres aos despus, los huexotzincas regresaron a su ciudad, pero no porque hubiesen logrado derrotar a Tlaxcala, sino porque haban buscado la reconciliacin con Todo ello demuestra que la Triple Alianza, a pesar de haberlo intentado varias veces, nunca pudo tener una victoria militar definitiva sobre el seoro tlaxcalteca y sus aliados, aunque la historia oficial mexica se empee en asegurar que los tlaxcaltecas no fueron incorporados a su imperio porque se prefera mantenerlos independientes para poder realizar guerras rituales, y con ello intercambio de vctimas para el sacrificio.

    El tributo y el comercio

    La expansin de la Triple Alianza no tuvo como finalidad principal el crecimiento en territorios o el control directo sobre los pueblos que conquist,

    Ma. C. Obregn Rodrguez' La zona del Altiplano central en el Posc/sico: la etapa de la Triple Alianza 291

    sino la imposicin de obligaciones tributarias, como lo haba sido entre casi todos los dems grupos mesoamericanos.

    El tributo fue la forma bsica de apropiacin del excedente productivo de las comunidades y seoros dominados, por los vencedores. Esta contribucin econmica inclua a todos los miembros del imperio, exceptuando a la nobleza. Sin embargo, algunas fuentes documentales hablan de que tambin sta lo entreg en forma de trabajo prestado al Estado. Hubo casos de seoros dbiles que aceptaron voluntariamente contribuir econmicamente con los fuertes para evitar ser agredidos; pero la mayora present resistencia armada.

    terminar un enfrentamiento, el ganador proceda inmediatamente a tasar la cantidad y la frecuencia con que los conquistados entregaran sus tributos. En ella se tena muy en cuenta la resistencia mostrada en la guerra y los recursos naturales lugar conquistado, El conocimiento y la necesidad de algunos de ellos fue lo que llev a la Triple Alianza a realizar campaas contra zonas especficas, dejando a veces otras intermedias sin tocar pues no posean nada codiciable para sus miembros.

    La extraccin tributaria tom dos formas bsicas: el tributo en trabajo, ya fuese prestado en propiedades estatales o en obras comunales, y el tributo en especie o productos.

    El primero era prestado en forma rotativa por las distintas comunidades o calpultn incorporados, y generalmente constaba de trabajo no especializado. Gracias a esta enorme fuerza de trabajo disponible se realizaron en la Cuenca de Mxico obras pblicas de gran magnitud (acueductos, caminos, canales de irrigacin, ereccin de pirmides, etctera), que permitieron a su vez mejorar el sistema productivo. En zonas lejanas este trabajo excedente se utiliz para acarrear mercancas ayudando a las caravanas comerciales, o bien, para cargar armas o bastimentos para los ejrcitos aliados en campaas militares. En otros casos los trabajadores fueron asignados para cultivar tierras de propiedad estatal (de templos, del palacio, asignadas al tecubtli local, etctera).l1

    segundo tipo el tributo era entregado al Estado directamente en bienes o mercancas. En su mayor parte se trataba de materias primas preciosas o muy codiciadas por capitales de la alianza tales como algodn, maderas, plumas de ave, oro, grana cochinilla, etctera. Mientras en otros casos inclua productos semielaborados y mercancas acabadas; por ejemplo, madera cor-

    Sobre propedad de la tier.'!, vase Castillo F.: l-.Structura econmica de la sociedad mexica, pp. 69-86.

    http:etctera).l1

  • 293 El horizonte Posclsico292

    tada en formas especficas, mosaico de turquesa, lmina oro, mantas de diferentes fibras, trajes guerreros, entre otros.

    La poltica ms generalizada era la de pedir a cada zona conqUIstada productos propios del sitio. Sin embargo, hay algunas excepciones en las que se les solicita con algn producto que les es ajeno, y el cual tenan obtener por intercambio con otros grupos. Un caso notable es el del

    a Xoconosco que lo compraba en las tierras bajas mayas, o el de mantas tejidas de algodn por muchas provincias que no lo

    La asignacin del tributo sigui tambin una lgica estricta determinada por la distancia y accesibilidad para transportar dichos productos. El anlisis de registros tributarios, tales como la Matrcula de Tributos y el Cdice Men

    12 dejan ver que a las provincias cercanas a la cuenca se les exiga principalmente productos agrcolas para abastecer a Tenochttlan, mientras a otras cada vez ms alejadas se le solicitaban productos raros o no existentes en la zona que por tanto tenan alto valor, al mismo tiempo que eran de transporte (cacao, plumas, pieles de animales, polvo de oro, etctera).

    tributo como ganancia de conquistas militares beneficiaba a las tres capitales de la Triple Alianza, mas no de manera igualitaria. Segn las fuentes, Tenochtitlan y Texcoco reciban dos quintas partes, mientras su aliado secundario, Tlacopan, tan slo una quinta parte, Poco se acerca mo se repartan estas ganancias; pudieron haberlo hecho a travs de la asignacin proporcional de distintas comunidades a cada uno o bien en la distribucin del producto recolectado.

    Los textos no explican con claridad si tendieron a formar provincias imperiales o ms bien cada una era patrimonio privado de alguno de los tres dos, Aunque no se pueda afirmar que se trata de una regla, ciertos datos del momento de contacto con los espaoles, dejan ver que Tenochtitlan reciba tributo de pueblos localizados en el rea acolhua, mientras Texcoco lo haca de pueblos que caan al parecer en territorios de su socio mexica, como Coyoacan y Xochimi1co, y de Tlacopan, como Azcapotza1co, ca, Ecatpec, Tepotzotlan y Cuauhtitlan. ll

    La asignacin como tributo todo el excedente productivo producido en un amplsimo territorio por millones de personas hacia tres centros cos, evit que se lograra integrar una estructura totalmente centralizada;

    " Al respecto se recomienda consultar Mohar: liI/rihmo en el siglo XVI: anlisis de dos fuentes pictogrcificas.

    u Hodge: Aztec .. , p. 29.

    Ma. C. Obregn La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la

    al parecer hacia ella iba avanzando Tenochtitlan en los ltimos aos antes de la Conquista. Por esto tenan que seguir funcionando, entre los miembros del imperio, otras relaciones econmicas adicionales, como los intercambios de presentes y el comercio. H

    Para la recoleccin tributaria se establecieron cabeceras o pueblos que como obligacin centralizar el producto de comunidades incorpo

    de sus alrededores, y fungir como responsables de ellas ante los funcionarios estatales. Estas unidades administrativas variaron mucho en cuanto a extensin, productos entregados, etctera; segn Ramrez de Fuenleal reciban el nombre de calpizcazgos,

    Dichas provincias fueron creadas por el centro para facilitar el control del excedente y no correspondan a unidades tradicionalmente constituidas. Es decir, a los pueblos que las integraban no los una ninguna otra relacin poltica, tnica o econmica, que el estar bajo el control de un mismo centro en el aspecto tributario. Los gobernadores de esas cabeceras reciban el ttu

    tecuhtl o seor, y se encargaban de recibir el tributo que se enviara a capitales imperiales. Otra parte de ste era asignado directamente a su

    manutencin y pago de servicios, lo que evitaba la centralizacin de ciertos bienes y el gasto innecesario de su transporte,

    La organizacin de la produccin del tributo asignado a cada (calpull), unidad tributaria bsica, se haca internamente entre sus miembros. La cabecera tan slo se encargaba de reunirlo con el de otras muchas tambin a su cargo, y entregarlo a un recaudador (calpixqui) mandado por la administracin imperial, de manera tal que sta, a travs de unos cuantos funcionarios, poda controlar el excedente productivo de un amplsimo territorio, sin tener que resolver ningn problema local.

    Los productos recolectados eran llevados hacia las capitales imperiales para guardarse en los almacenes del Estado, en donde llegaba adems lo producido en tierras asignadas al tlatoani en distintas zonas conquistadas, y cierta produccin artesanal especializada directamente controlada por el Estado (sobre todo bienes o mercancas de lujo).

    Como verse, el sistema tributario aparece como un mecanismo absorbente que benefici principalmente al grupo privilegiado (nobleza), que adems de estar exento de contribuciones, viva de stas a travs

    Carrasco: "La economia del Mxico prehispnico". p. -i9. " Debe tenerse presente que casi toda esta informacin se retJcre especficamentt' al sistema de tributos

    tal como funcionaba en Tenochtitlan. por lo que pudo tener ciertas variaciones en los centros aliados.

    http:Cuauhtitlan.ll

  • 294 El horizonte Posclsico

    pago a sus servicios como funcionarios del aparato estatal. Sin embargo, hay que reconocer que dicho Estado utiliz ciertos mecanismos de redistribucin, tales como regalos a funcionarios y guerreros destacados, intercambio de presentes con otros lderes, financiamiento del ritual, reparto de comida y objetos al pueblo en algunas grandes fiestas pblicas, etctera.

    Aunque esta redistribucin no fue equitativa, sino determinada por derechos adscritos al estatus del individuo, de alguna parte del excedente centralizado regres a los productores directos: habitantes de zonas cercanas que podan asistir a esas fiestas o que se vean beneficiados por obras de infraestructura financiadas por el Estado. Algo semejante ocurra a nivel de cada provincia en la casa seorial o tecalli, donde en fiestas de investidura, convites y otras ceremonias volvan a circular algunos de los bienes acumulados.

    Entre las formas adicionales o complementarias de circulacin de bienes que mencionamos antes, destaca el comercio. iba adquiriendo una importancia cada vez mayor, conforme las capitales del imperio se iban convirtiendo en productoras de bienes elaborados, y por tanto resultaba indispensable para que los artesanos especializados, burocracia, etctera, pudiesen adquirir bienes necesarios para su vida diaria.

    El intercambio comercial tuvo dos modalidades, que funcionaban de manera totalmente independiente la una la otra: el mercado o tianguis y el comercio a larga distancia. En el primero, a travs del trueque entre ductores directos, se podan adquirir satisfactores. Las transacciones se realizaban en lugares o plazas especficamente designadas para ello y con una periodicidad fija.

    La amplitud de los mercados variaba mucho, siendo los ms simples los de tipo local, en donde se obtenan bienes de uso general y de poco valor. A otro nivel existan los mercados interregionales, en que podan conseguirse productos o materias primas no existentes en ciertas zonas pero necesarias para su vida (como la sal). y por ltimo los grandes mercados especializados en los que se comerciaban bienes de muy distantes zonas y se llevaban a cabo transacciones de mayor tamao. Algunos de los ms famosos son el de TIatelolco, el de Acolman y el de Cholula.'- A todos niveles el Estado actuaba como vigilante del orden en los tratos y estableca precios fijos.

    ", Berdan: "Replicacin de principios de intercambio en la sociedad meXIG1: de la economa a la religin", p. lH8.

    ,- Se recomienda sobre el tema consultar Carrasco el al.: Ecol/oma poltica e ideologa eH el ;\4.yico prehispnico.

    Ma. C. Obregn Rodrguez La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza 295

    De manera completamente independiente se daba el comercio a larga distancia. Este intercambio generaba enormes ganancias, a pesar de que los bienes conseguidos nunca llegaban a circular en los mercados, sino que se entregaban directamente al estado central quien haba financiado las caravanas, y era el nico consumidor de mercancas obtenidas por este medio.

    Estas transacciones rebasaban las fronteras imperiales y permitan a grupos dirigentes del altiplano gozar de raros productos, procedentes tierras muy lejanas principalmente de Centroamrica. Este tipo de comercio era realizado por un grupo especializado de mercaderes conocidos como los pochtecas. stos adems servan como embajadores y espas para los reyes de la Triple Alianza.

    Relaciones polticas dentro de la Triple Alianza Las capitales de los tres estados aliados adquirieron, con la sujecin y el

    vasallaje de todos los reinos y seoros conquistados, una jerarqua superior:

    \ la de)Zl1eitlatocyotl,lY a las que se les reconoca un poder religioso superior.

    ')\ En susorgeneS; el imperio estableci su hegemona poltica de una

    manera indirecta, segn dejan ver la mayor parte de los casos conocidos y registrados. Su autoridad fue impuesta por medio de las armas sobre autoridades locales legtimamente reconocidas por las poblaciones, a quienes dejaron seguir gobernndolas, As Zorita nos dice que "los reyes mexicanos y sus aliados, los de Texcoco y Tacuba, en todas las provincias que conquistaban y ganaban de nuevo dejaban los seores naturales de ellas en sus seoros, as a los supremos como a los inferiores".

    La poltica f!!s generalizada f'l!~la de utilizar -..1os tlatoque de los pueblos ~~.?ordiaas-c~2..2i~~yleL~m'p',S;:!.ial_~~1> actuando cada uno como mximo recrectofCIeTiibutos en los territorios bajo su cargo. Esto evit, por consecuencia, que surgiese la necesidad de crear toda una jerarqua poltica centralizada, como pas en el aspecto tributario.

    Las unidades polticas integradas al imperio no fueron de manera alguna homogneas, ni en lo referente al nmero de sbditos ni a sus formas organzativas. Su incorporacin nunca intent unificar en ningn sentido a los

    Dochtecas v el comercio a sobre t(;do el artculo de \..l1aplll'"l.

    Austin: "Organizacin poltica en el Altiplano el Posclsico", pp. 539-540. Los seriores de la Nuem t:spala, p. 37.

    csn1Cuadro de texto

  • 296 El horizonte Posclsico

    grupos dominados, por lo que mientras algunos constituan verdaderas confederaciones de varios seoros, como fue el caso de Chaleo, otros eran pequeos territorios gobierno muy simple.

    El nico ejemplo en que puede notarse un verdadero inters del centro por integrar realmente a otros grupos en las actividades imperiales, fue el

    seoros vecinos de la Cuenca de Mxico, en especial los de su extremo sur. Esto evidentemente responda a la necesidad de las capitales de la Triple Alianza por crear un rea realmente pacfica y estable a su alrededor, para poder dedicarse sin preocupacin a expander su dominio sobre pobladores de zonas ms alejadas.

    Esto explica que los gobernantes de Xochimileo, Chaleo, Culhuacan, Coyoacan, Cuitlhuac, etctera, a pesar de haber sido vencidos totalmente en guerra, aparezcan continuamente acompaando a los hueitlatoque en ceremonias importantes, as como participando como fuerzas de apoyo en sus campaas militares. Aun en esos casos, la Triple Alianza dej a estos tlatocyotl conservar su organizacin poltica tradicional.

    Por lo que respecta al Valle de Morelos, inmediatamente contiguo a la cuenca y productor de ricos bienes codiciados por sta, a parHr de su conquista por Moctezuma Ilhuicamina, vivi un proceso semejante con una participacin en las actividades imperiales slo menor a la de los grupos antes mencionados. 21 Aunque en menor medida tambin los matlatzincas y los mazahuas empezaban a vivir este proceso paulatino de centralizacin.

    Como un medio importante para lograr la total lealtad de estos grupos, las noblezas o grupos dirigentes de Tenochtitlan, Tlacopan y Texcoco establecieron con los linajes locales alianzas de tipo matrimoniaL Esta institucin no era novedosa en el valle, sino parte de una larga tradicin mesoamericana, e incluso vena practicndose en dichas capitales desde mucho antes

    que se iniciara su expansin territorial. Como ejemplo, podra mencionarse el ya citado matrimonio de Huitzilhuitl -segundo seor tenochcacon una hija del tlatoani de Cuauhnhuac, del que nacera Moctezuma 1 y que abrira para los mexicas la posibilidad del comercio con tan rico centro.

    Las relaciones interdinsticas fortalecidas as, promovieron la formacin de bloques territoriales unidos por pactos de ayuda y respeto mutuo, que contribuyeron a crear un contexto de estabilidad. Pero en mucho mayor medida sirvieron para reforzar la sujecin de los grupos incorporados, que para unir a seoros de igual nivel.

    Smith: "Postdassic culture ... ", p. 112.

    Ma. C. Obregn Rodrguez La zona del Altiplano central en el Posclsico: la etapa de la Triple Alianza 297

    Entre los numerosos casos mencionados en las fuentes documentales tenemos los matrimonios de la lite de Amecameca tras su derrota militar, con la rama del cihuacatl mexica; la unin de la familia gobernante de Cuauh

    con las de Chapultpec y Culhuacan. O bien Teotihuacan que acostumbraba casar a sus nobles con miembros de la nobleza acolhua de Texcoco.}2

    La alta jerarqua e importancia que tena todava a principios de la poca imperial el seoro de Cuauhnhuac, se puede ver en el hecho que por segunda vez una princesa proveniente de ste fuese madre de un tlatoani mexica: Axaycatl. Tlateloleo a su vez realiz importantes alianzas matrimoniales con el Valle de Morelos, casando a dos hermanas de su rey Acolmiztli (1470-1476 dC) con nobles de Cuauhnhuac y una tercera con uno de Huaxtpec.

    ~ pesar del aparente "respe~()~'(llsJi.(:kI.e.sJo.cales, SlLderecho . .a..g::iliern.a.!. el'l.r~~~desTu~~davei j1SQ!ldic;.iQ.D-clJ~rla;U:.apitaleli.!;kJ---Triple Alianz, Continuamente dicen los textos que los tres estados imperiales tenan que ratificar l ,t:.Qlr:QDi?:cin de los seores locales, por lo que parece-haber empezado a intervenir directamente sobre las autoridades de todos los grupos sujetos. En pocas ocasiones las ciudades-estado incorporadas lograron conservar ordenadamente la sucesin del poder de padres a hijos.

    Algunos seoros ocasionaban continuamente problemas para su control presentando resistencia a ser manipulados en favor de los intereses tripartitas, por lo que fueron castigados a travs de nuevas campaas militares y con la deposicin de sus legtimos gobernantes. En algunos casos se tuvieron que crear nuevas dinastas reinantes con nobles locales pro-imperiales, como ocurr6-eC5yoacaii--y-viToiiseorE;-de-Mo~eros.tn:tre los matIatzincas, Axaycatl perdon la vida y dej en el poder al principal seor de Toluca por ser obediente a sus deseos, mientras que mat a otros principales rebeldes que se oponan a obedecerlo.

    reino chalea, al ser vencido definitivamente por Moctezuma na, sufri la deposicin de los veinticinco seores de linaje reconocido, siendo sustituidos en sus cargos por cuatro jefes militares de los vencedores. Pocos aos despus, Tzoc y Ahutzotl restituyeron en sus tronos a diez de aquellos llatoque originales del lugar.

    Coyoacan, como castigo a su rebelda, tuvo que aceptar el establecimiento de un linaje tenochca para gobernarlo. Por lo que respecta al Valle de

    " Hodge: Aztec ... , p. 138.

  • -- --

    298 El horizonte Posclsico

    Morelos, sabemos que vivi una clara tendencia a que los centros principales absorbieran a otros menores, lo que indirectamente facilitara su incorporacin al imperio. Axaycatl realiz una nueva incursin militar hacia 1476 dC, bajo el pretexto de una guerra local entre Cuauhnhuac y los ocuilteca, terminando por imponer a Cuauhnhuac nuevos gobernantes. Lo mismo ocurri con Tepoztlan, Huaxtpec y Xlloxochitpec.

    En los casos ms extremos de resistencia y rebelda~l imperio lleg a elirl1inafJ2Q[,r-IllP-kto a la dillit~ta local): a ma~ a fun~~~xi2.~L~sa act~~;c~f!10 g~~~!!.lanteLstos -;;an~~e'rifrrletecrest~,cad~s guerreros y

    -redt5laei ttulo de cuauhtlatoani, siendo el ejemplo ms famoso y duradero el gobierno militar de Tlatelolco pr los mexicas,

    ~.~L--~JOS,.&tp~~~pguis!.!ld9~.que sufrieron la destitucin de sus autoridades pasar~Q[.&2.bernados por los calpixque o recaudadores fiscales del imperi~ados a esaszoaS-:-E"ta-'medidi'Tue-asi siempre de carcter temporal o de corta duracin. Numerosos ejemplos encontramos en los documentos del },.'VI sobre esto: Tlacotpec en Guerrero, Tetela del Ro, Tula, Tequxquiac, Zozollan, Icpatpec, Cotaxtla, etctera.

    Algunos de los pueblos que ms severamente fueron tratados terminaron por convertirse en aliados e importantes colaboradores de la Triple Alianza. As pas con Coixtlahuaca en la Mixteca, o los seoros otomes de Ixmiquilpan, Actopan y Atotonilco.

    jln control poltico directo tambin se aplic sobre centros estratgicos para la estabilidad y vigilancia de todo el territorio ya-dominaClo. Es~ tos claves se constituyeron en fortificaciones directamente asociadas con la proteccin de las fronteras y fueron Ozt~~oaxaca, TuxtpCZ:-y-p'()siblemente Xiuhcaoc (en el P"ifm.ICo). Por tal motivo, la poblacin autct~lJe jesaloi~rrasa~spus repo!la?o!? p~~dit?~5;1~.

  • 300 301 El horizonte Posclsico

    Taraxcos

    T T T Frontpras del Imperio

    D Territorios Independientes Tetel,l Principalps conquistas de Ahuzotl

    Tot.:;ntop

  • 302 303 El horizonte Posclsico

    Mapa del Valle de Mxico 1519

    ... Sitio" con 1110nUlnento5 prehlsprllco::

    A5entdllllentos IJrehisplllCOS y l11tx1ern(:~

    1" - ':- }, (~""J... Tula'delaM;lln(be~:/ l(~"'~i' / \ '-- ~~:2,,"-ce:~) -~j 'r'i::.--/'!/-,--,~ ~" ~-~~','L

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