jesuitas chile · 3 ayuda ante los incendios de enero: hermano, yo estoy contigo, ... una prueba de...
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OTOÑO 2017 / Nº 38
jesuitaschile
Vivir de a Do2: Un regalo para la vida en pareja
Silencio, de Scorsese: Apuntes para contemplarla
Misión mapuche en Tirúa: Lugar de Revelación
En camino hacia el Sínodo 2018 sobre Jóvenes
¿QUÉ SIGNIFICA CELEBRAR LA PASCUA HOY?
JESUITASCHILE
2 Presentación: Místicos “de ojos abiertos”, por Jesuitas Chile
3 Ayuda ante los incendios de enero: hermano, yo estoy contigo, por Equipo Jesuitas Chile
5 Sínodo 2018. Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional: la
promesa de un Evangelio liberador, por Nemo Castelli sj
6 Carlos Bresciani, jesuita en Tirúa: “No son solo semillas las que uno encuentra en la religión mapuche; es Revelación de Dios, verdadera Palabra de Dios manifestándose en su espiritualidad”, por Equipo Jesuitas Chile
8 Noticias nacionales
9 ¿Qué trae el regalo de la Pascua?, por Emmanuel Sicre sj
11 Noticias internacionales
12 Voluntariado en Tirúa: en búsqueda del “buen vivir”, por Carla Mora y Natalia Carrasco
14 Araceli Gorichon y Valentina Papic, de la Oficina de Planificación y Seguimiento Apostólico: Cumplir la misión de Dios, “buscando y hallando” en un contexto de cambio, por Equipo Jesuitas Chile
16 Vivir de a do2: un regalo para la vida en pareja, por María Leonor de la Paz y Rogelio Orozco
18 Silencio de Scorsese y Endo: apuntes para contemplarla (sin spoiler), por Francisco Jiménez sj
19 Publicaciones. Cristianismo en tempestad: fe, coraje y esperanza, libro de Jorge Costadoat sj, y Küme Mongen. Música para una ecología integral, disco de Cristóbal Fones sj
20 Los incendios de enero y la resiliencia
Director: Cristóbal Emilfork sjConsejo Directivo: Jorge Blake, Francisca Donoso, Araceli Gorichon, Francisco Jiménez sj, Roberto Saldías sjEditor: Andrés MardonesDiseño: Mercedes Lincoñir H.
otoño 2017 / Nº 38
Vivimos el acontecimiento más importante de nuestra fe: Semana San-ta, el memorial de la Pasión, Muerte y Resurrección de nuestro Señor
Jesucristo. Año a año, corremos el riesgo de que la participación en estos misterios sea solo un simple recuerdo, un hábito asentado en prácticas repetidas por años, que poco o nada nuevo tengan que decirnos hoy.
¡Qué riesgo afrontamos! Porque adoptar esa actitud sería mantener al Crucificado clavado en esa cruz del escándalo, ciegos a reconocer el triunfo de la Vida que porta Aquél que nos amó hasta el extremo...
Es cierto. Jesús muere. Y el memorial de su muerte no puede sino ayu-darnos a contemplar cómo hoy Él sigue muriendo en realidades cercanas y lejanas, comunitarias y personales; realidades que actualizan y llenan de sentido la misión que se constituye con la entrega radical del Hijo de Dios.
Contemplarlas no para lamentarse. Contemplarlas para despercudirse, para llenarse del vigor de Aquél que con su Resurrección nos ha dicho que la muerte no tiene la última palabra y que la Vida se actualiza, y debe seguir haciéndolo, día a día: en mí, en mi familia, en mi comunidad, en mi ciudad, en mi país, en mi mundo.
Como cristianos del siglo XXI tenemos el desafío de vivir nuestra fe como una profunda experiencia mística: anclados firmemente en Cristo, vincu-lados a su corazón de carne que redime, con su muerte y resurrección, en nuestra historia. Sin embargo, y al decir del teólogo alemán J. B. Metz, esa mística no debe enclaustrarnos en intimismos aislacionistas, sino que, por el contrario, hacernos místicos “de ojos abiertos”: atentos a la realidad so-cial de hoy, convencidos de que aquí se construye el Reino, y que nuestro trabajo en la instauración de la justicia de Jesucristo será la mejor forma de actualizar su Pascua, la mejor forma de dar el paso a la Vida definitiva.
Jesuitas Chile
Místicos “de ojos abiertos”
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Corría enero, y mientras muchos chilenos disfrutaban del verano
y las vacaciones, y otros se prepa-raban para ello, se desató una de las emergencias más grandes del último tiempo en el país: la zona centro-sur se vio afectada por vo-races incendios forestales que arrasaron con todo a su paso. ¿Pro-vocados o no? ¿Reacción tardía de las autoridades? ¿Que determi-nada ayuda era más efectiva que otra? Fueron esas algunas discu-siones que comenzaron a darse en distintos sectores de la sociedad, al tiempo que los incendios no se detenían e incluso aumentaban. Miles de personas damnificadas, perdiéndolo todo.
La Provincia chilena de la Com-
pañía de Jesús, a través de sus distintas obras, reaccionó ante el sufrimiento de las personas. El Hogar de Cristo, Techo, Fundación Vivienda, la Fundación Padre Hur-tado se encargaron de recolectar y distribuir las distintas donaciones hechas por la gente, así como de enviar voluntarios, construir vi-viendas momentáneas y planificar labores de reconstrucción e inicia-tivas pastorales.
La Fundación Padre Hurtado compartió con Jesuitas Chile al-gunos testimonios que hablan de una de esas iniciativas de fe orga-nizada por la institución y que se desplegó en las localidades afec-tadas. Una prueba de cómo Dios, en distintas acciones y formas, se
hace presente para aquellos que más lo necesitan.
EUGENIA LEIVA, SERVIDORA DEL SANTUARIO DEL PADRE HURTADO HACE MÁS DE VEINTE AÑOS
Somos un grupo de servido- ras(es) del Santuario del Padre Hurtado que acudimos a ayudar. Junto a nosotros iban personas de apoyo espiritual, de Techo, jóvenes universitarios, la camioneta ver-de... recorrimos las zonas consu-midas por el incendio: San Ramón, Empedrado, Nirivilo, Chacarilla, Santa Olga y otros lugares.
Me tocó ir a San Ramón. Las per-sonas nos contaban cómo pasaron esos días con el fuego rodeando
Ayuda ante los incendios de enero en el país:
Hermano, yo estoy contigo
La Provincia chilena de la Compañía, a través de sus distintas obras, reaccionó ante el sufrimiento de las personas debido a los incendios que devastaron gran parte de la zona centro-sur del país en enero. Compartimos testimonios y acciones que se desarrollaron en torno a la tragedia.Equipo Jesuitas Chile
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sus casas. Las autoridades evacua-ron de sus hogares a adultos ma-yores, niños y mujeres embaraza-das, quedando solo quienes podían ayudar a combatir el fuego. Nuestra misión fue conversar con la gente y darle una palabra de aliento, apo-yando espiritualmente a quienes en algunas partes lo perdieron todo.
Nos dividimos en grupos para visitar distintas poblaciones. Re-partimos oraciones, libritos, cua-dros, Biblias, reliquias y muchas cosas del Padre Hurtado. Las per-sonas se acercaban a nosotros, nos contaban sus experiencias, lloraban y nos abrazaban, y nos daban las gracias por haber ido a escucharlas y ofrecerles una pala-bra de aliento.
Lo que más nos emocionó fue Santa Olga, donde no quedó nada. Allí Techo construyó en tiempo ré-cord una capilla. El domingo se hizo una misa de inauguración. Además, el sábado habíamos asistido a una misa en Chacarilla, donde la gen-te estaba muy emocionada con la camioneta del Padre Hurtado y su imagen. Se tomaron fotos, se acer-caron a ella, la tocaron y se persig-naron, muy emocionados. A varios se les cayeron las lágrimas.
Me gustó mucho la experiencia. Me emocioné, y agradezco con ca-riño y amor la invitación.
CECILIA CATALÁN, COORDINADORA DE LA CAPILLA JESÚS NAZARENO, SANTA OLGA
Cómo expresar en algunas líneas lo vivido... Quedé solo con las llaves de nuestra capilla. Fue muy triste ver que no quedó nada. Y aunque mi fe me mantenía en pie, ¿cómo transmitir ese positivismo a mis hermanos?
Estábamos dispersos. Era com-plejo juntarnos. Hacíamos las misas al aire libre, donde antes teníamos la capilla. ¡La alegría que sentí al ver que, en tres días, se levantó la capilla provisoria! Ver a esos jóve-nes con los dedos en la tierra, co-locando los pilares; sus caritas de cansancio, con un sol que no daba tregua, con la única motivación de ayudar.
Llegó el domingo. Se realizó una hermosa eucaristía presidida por nuestro párroco Gonzalo Aravena, junto al padre Nemo Castelli. Es-tuvimos acompañados por muchas personas, hermanos que se encon-traron con la sorpresa de ver la ca-mioneta verde del Padre Hurtado y la capilla; no lo podían creer.
Dios se manifiesta de muchas maneras, y ese día lo hizo a través de esa ayuda. Estoy muy agradecida por el signo que representa nues-tra casa de oración. No tenemos nuestros hogares, y falta mucho
para eso, pero lo que hicieron por nosotros tiene un valor incalcula-ble. Contamos con un lugar donde reunirnos cada domingo y poder, desde ahí, fortalecernos más.
GLEN REYES, VOLUNTARIO DE TECHO Y JEFE DE LA CUADRILLA QUE CONSTRUYÓ LA CAPILLA
Fue mi primera vez constru-yendo una capilla. Había armado mediaguas, casas progresivas, al-gunas sedes, pero nunca una ca-pilla... una experiencia distinta. No podría decir si fue más emocio-nal que construir una casa que se transformará en hogar, o una sede que será el centro neurálgico de la vida comunal.
¿Qué significa construir una ca-pilla? “Yo soy ateo”, decía, y lo sigo siendo. Reflexioné si efectivamen-te el lugar físico tenía importancia, ya que la gente puede reunirse en cualquier parte, porque la religión y Dios están en todos lados. Pero era otra cosa lo que importaba, más que el lugar físico. Entonces, no fue el hecho de construir la capilla lo que me motivó, fue su significado, que trasciende el simple espacio de re-unión cotidiano donde se organizan como comunidad. Más que el sitio en el cual poder escuchar la misa, una capilla entrega otra cosa. Entrega la sensación de hogar que nos compla-ce, que da tranquilidad, paz y calor al que lo necesita. Además tiene la particularidad de reunir a las perso-nas no con promesas de una vivien-da mejor o un barrio más tranquilo; reúne con amor, fe y esperanza.
Espero que cada habitante de Santa Olga o que cualquier damni-ficado de los alrededores la utilice, que vean su majestuosa cruz y no olviden jamás que nunca estamos solos, que siempre hay alguien que nos ama y que está dispuesto a es-tirar la mano y decirnos “vamos hermano, yo estoy contigo”. JCh
“Nuestra misión fue conversar con la gente y
darle una palabra de aliento, apoyando espiritualmente a quienes en algunas partes lo
perdieron todo”.
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La invitación del Papa al Sínodo de jóvenes de oc-tubre de 2018 nos viene ‘como anillo al dedo’. El ca-mino que propone es doble: por un lado, dice que “la Iglesia ha decidido interrogarse sobre cómo acompañar a los jóvenes para que reconozcan y acojan la llamada al amor y a la vida en plenitud”; y, por otro, quiere “pedir a los mismos jóvenes que la ayuden a identificar las modalidades más efica-ces de hoy para anunciar la Buena Noticia”.
Nemo Castelli sj
Chile está cambiando rápidamente. Nuestro país avanza hacia una nueva sociedad secular de mejor
futuro, meritocrática y diversa, disminuye la pobreza, exige transparencia y probidad, reconoce sus raíces ori-ginarias y de a poco se abre a la diversidad latinoameri-cana. Sin embargo, bajo este proyecto persiste el recla-mo de “algo más”, pues la otra cara de este nuevo Chile —el consumo excesivo, la codicia, el individualismo y el exitismo— produce un vacío profundo y una falta de sentido, especialmente en los jóvenes, que hoy, tal vez más que nunca, están sedientos de que se les anuncie con hechos y con palabras un Evangelio liberador.
Por eso, la invitación del Papa Francisco a un nuevo Sínodo para octubre de 2018 nos viene ‘como anillo al dedo’1. ¿El tema? Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional. El camino que nos propone es doble: por un lado, nos dice que “la Iglesia ha decidido interrogar-se sobre cómo acompañar a los jóvenes para que reco-nozcan y acojan la llamada al amor y a la vida en pleni-tud”; y, por otro, quiere “pedir a los mismos jóvenes que la ayuden a identificar las modalidades más eficaces de hoy para anunciar la Buena Noticia”2 del Reino de amor y justicia anunciado y vivido por Jesús.
Como jesuitas, queremos acoger esta invitación mo-viendo las aguas para suscitar un proceso que permita a los jóvenes mirar con profundidad su experiencia de fe, y adentrarse en las claves de un buen discernimien-to, que los haga libres de todo lo que los esclaviza e ilu-mine sus opciones vocacionales más fundamentales.
¿Cómo lo vamos a hacer? Invitamos a todos los jóvenes
que, independiente de su grado de participación, se sien-tan de alguna manera parte de una comunidad mayor, a hacer juntos un camino en tres etapas. En la primera, fieles a un Dios encarnado en la historia, vamos a partir por escuchar la realidad de la que formamos parte, para preguntarnos, en este año de elecciones, por el país que soñamos. Será un tiempo de encuentro para implicarnos en tantas encrucijadas sociales, culturales y políticas.
En la segunda etapa, buscamos sintonizar con nues-tra experiencia comunitaria de fe en el Dios de Jesús. Un Dios que se identifica con los excluidos, que se hace presente en la fraternidad humana y que se expresa en el amor incondicional a todos, sufriendo con el do-lor humano, padeciendo con la naturaleza y suscitando caminos de paz y justicia.
Dios trabaja en la realidad y desafía... a los jóvenes que sueñan una Iglesia más atenta a los problemas so-ciales, inclusiva y participativa, al servicio del mundo. A esos que están dispuestos a preguntarse: Señor, ¿cuál es la propuesta de amor y entrega apasionada y alegre que tienes para mi vida? Esta será el tercer momento. Espe-ramos ayudarles a sacudirse de todo lo que les frena, especialmente de los miedos, para reconocer los deseos más auténticos que Dios ha puesto en ellos.
El Señor interpela a la juventud chilena a arriesgar con generosidad, a jugársela en servicio de un ideal, renunciando a ser el centro en sus vidas y abriéndose a las necesidades de los demás, para servir la justicia que la fe en el Dios de Jesús exige. Es ahí donde des-cubrirán una forma concreta de vocación que “articula estado de vida (matrimonio, ministerio ordenado, vida consagrada, etc.), profesión, modalidad de compromiso social y político, estilo de vida, gestión del tiempo y del dinero, etc.”3. Y esa vocación la descubrimos y vivimos en comunidad, en medio de tantos hermanos y herma-nas de fe y humanidad. Solo con otros podremos ser protagonistas de los cambios, y proponer y practicar alternativas de cómo el mundo y la Iglesia podrían ser.
La invitación está hecha. JCh
SÍNODO 2018:
Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional:La promesa de un Evangelio liberador
1 http://www.vatican.va/roman_curia/synod/documents/rc_synod_doc_20170113_documento-preparatorio-xv_sp.html
2 Introducción, documento preparatorio Sínodo 2018.3 Ibid.
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Carlos Bresciani, jesuita en Tirúa:
“No son solo semillas las que uno encuentra en la religión
mapuche; es Revelación de Dios, verdadera Palabra de Dios manifestándose en su
espiritualidad”de la depredación que hacemos al medioambiente como sociedad. El obispo Vargas hace eco de esos diá-logos. La Iglesia del continente está muy comprometida con estos pro-cesos. Desde la jerarquía, en Chile nos ha faltado en los últimos años una mayor capacidad de decisión y articulación con ese compromiso. Espero que esas palabras reflejen más disposición en ese sentido. Para concretarlas, nos hace falta mayor articulación y diálogo hori-zontal y fraterno entre los que cola-boramos en el mundo indígena. Un ejemplo sería poder rearticular la Comisión de Pastoral Indígena, que a mi modo de ver ha estado aban-donada los últimos años.
— ¿Cuál puede ser el aporte distinti-vo de la Compañía de Jesús en esta materia?
Como Compañía queremos cola-borar en la Iglesia para acompañar de la mejor forma situaciones de exclusión y marginación que sufren estos pueblos. Nuestro aporte a la Iglesia es la posibilidad de abrir compresiones más aterrizadas de lo que se vive en los territorios. Po-demos ayudar a articularnos mejor.
Desde hace doce años el P. Carlos Bresciani comparte su vida con el pueblo mapuche en la comunidad jesuita de Tirúa. Allí ha madurado un actuar y un pensar religioso, social, político y pastoral que plantea importantes desafíos para la Iglesia. El reciente encuentro de la Pastoral de los Pueblos Originarios del Cono Sur es una oportunidad para potenciar el trabajo que la Iglesia chilena puede hacer en su diálogo con las culturas indígenas del país.
Equipo Jesuitas Chile
mos que adentrarnos, desde una humildad enorme, y valorar que nuestros pueblos originarios son una reserva moral, ética y espiritual muy grande que puede enriquecer-nos para recuperar lo que es esen-cial para la vida humana...”. ¿Esas palabras reflejan una disposición más clara de la Iglesia a acoger el tema? ¿De qué forma crees que se puede dar?
En el Encuentro de los Obispos de la Pastoral Indígena del Cono Sur fue central caer en la cuenta de que los pueblos originarios están en re-sistencia a mucha violencia ejerci-da por el modelo consumista y neo-liberal. Resistencia que se expresa en sus proyectos históricos de vida, que de distintas maneras expresan como “Buen Vivir”. Un modo de vivir la vida que puede salvarnos a todos
¿Cómo evalúas que el CELAM1 haya declarado que para la
Iglesia es fundamental “retomar la importancia” que estos pueblos marginados tienen para la Iglesia y la sociedad? ¿Representa eso un reconocimiento de que desde la Iglesia últimamente se había aban-donado esa consideración?
Es un nuevo impulso de los obis-pos, importante de considerar, y movido por las palabras y hechos del Papa, quien nos ha impulsado a salir de nosotros mismos. Eso no quiere decir que no hay hombres y mujeres de Iglesia que han estado siempre comprometidos con los ex-cluidos y los pueblos indígenas.
— ¿Qué valoración haces de la de-claración del obispo Héctor Vargas, tras el CELAM?: “Como Iglesia tene- 1 Consejo Episcopal Latinoamericano.
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— ¿Qué conclusiones has extraído de las jornadas del CELAM que po-drían influir en tu personal acerca-miento a tus tareas en la comuni-dad jesuita de Tirúa?
Me impresionó saber del traba-jo de otras iglesias en países como Paraguay, Brasil y Argentina. Tienen equipos multidisciplinarios de Pas-toral Indígena increíbles, donde el diálogo y compromiso con estos pueblos va desde la defensa de sus dirigentes perseguidos, pasando por denuncias claras por parte de la Iglesia a proyectos extractivistas, hasta una presencia respetuosa de los procesos propios de estos. Re-conozco que me dio envidia, pues cuánto desearía que tuviéramos, como Iglesia de Chile, un equipo así. Como jesuitas hemos ido, des-de la inserción y presencia en Tirúa, tratando de armar equipos y redes con otros en los diferentes temas en los que están las comunidades. El desafío es una mayor y más pro-funda reflexión e incidencia en te-mas que involucran a todos.
UNA NUEVA MIRADA
— ¿Cómo dialoga hoy la Iglesia ca-tólica con el pueblo mapuche en términos de su religiosidad propia? ¿Hacia dónde debiese caminar? ¿Qué camino hay que recorrer en términos del diálogo interreligioso?
Hay un desafío enorme. Primero, debemos reconocer o seguir reco-nociendo una y otra vez que, como Iglesia, hemos tenido actitudes y hechos que han avasallado la reli-gión mapuche durante la historia. Es una herida abierta que debemos seguir tratando de sanar con pala-bras y acciones. Luego, es clave que cambiemos los conceptos y modos de mirar la cultura y espiritualidad mapuche. Dejar de hablar de reli-giosidad o religiosidad popular y hablar de Religión. Así como dejar de hablar de dialecto y hablar de
Primero, caer en la cuenta de que estamos con el agua hasta el cuello. Incendios, aluviones, lluvias intensas, calor, sequía; son mues-tras de que algo le pasa a nuestra “Casa Común”. Y no hacemos nada, o muy poco. Todos sabemos, pero miramos desde el palco lo que le hacemos a nuestra Madre Tierra, a través de un modelo económico que la depreda y genera problemas sociales gravísimos. Ya lo dijo el Papa Francisco, no se trata solo de un problema ecológico, es también un problema social. En esto el pue-blo mapuche se levanta y resiste, y nos recuerda una y otra vez esta realidad. Segundo, movilizarnos todos y todas por un modelo dife-rente, y en eso el pueblo mapuche y todos los pueblos indígenas de Latinoamérica nos ofrecen su pro-puesta a través del Buen Vivir. Se trata de convencernos que sí pode-mos tener otra economía y relacio-nes sociales basadas no en el lucro, codicia o acaparamiento, sino en la reciprocidad y el bien común.
Pasos concretos: dar el espacio para que las comunidades decidan su futuro. Esto es autonomía. Y eso pasa por reconocimiento constitu-cional con derechos políticos aso-ciados. No es el único paso, pero puede ayudar a encaminar un mon-tón de otros más. JCh
“Debemos reconocer o seguir reconociendo una y otra vez que, como Iglesia, hemos tenido actitudes y hechos que han avasallado
la religión mapuche durante la historia”.
idioma; o de etnia y hablar de pue-blo y/o nación. Son términos que expresan aún resabios de racismo y una mirada peyorativa del otro. Como si fuera un hermano menor. Nuestra mirada debe ir más allá de lo que el Vaticano II expresó como “semillas del Verbo”. No son solo semillas las que uno encuentra en la religión mapuche, es Revelación de Dios, verdadera Palabra de Dios manifestándose en su espirituali-dad. Me atrevo a decir que el desafío hoy para la Iglesia no es la incultu-ración, sino que la interculturalidad o diálogo intercultural e interreli-gioso. Inculturación es aún un tér-mino que manifiesta un sujeto y un objeto del Mensaje de Salvación. Y creo que no son objeto del Mensaje sino sujetos portadores del Mensa-je de Salvación. Esto implicaría para la Iglesia otra “parada” y otro ejer-cicio de nuestra evangelización. No se trataría de “hacer más católicos”, sino de acompañar la Palabra viva y eficaz que se abre paso en las vidas de las personas y pueblos.
— ¿Cómo encontrar una solución efectiva para que el modelo políti-co-económico instalado en el país pueda permitir el desarrollo del pueblo mapuche? ¿Cuáles son los pasos que debiesen darse en este ámbito?
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NACIONAL
NUEVO SITIO WEB DE LA PROVINCIAEn diciembre de 2016, la Provincia chilena de la Com-pañía de Jesús estrenó su nuevo sitio web (www.je-suitas.cl), después de intensos meses de trabajo. El nuevo portal cuenta con información relacionada con las áreas apostólicas en las que los jesuitas se des-empeñan en el país, y también con la actualidad de otras provincias; todo con un nuevo diseño y una mejor funcionalidad.
VISITA DEL SOCIÓLOGO ESPAÑOL FERNANDO VIDAL
Hace más de un año, un equipo de CVX Santiago está trabajando el proyecto Crear+Familia, que acoge el lla-mado del Papa a desarrollar nuevos caminos pastorales para acompañar a las familias. Como parte de esa labor, el sociólogo español Fernando Vidal, director del Ins-tituto Universitario de la Familia de la Universidad de Comillas, miembro de CVX España y de la Comisión para las Familias de CVX Mundial, aportará su experiencia profesional en dos actividades en el Colegio San Igna-cio El Bosque: la charla “Acompañar procesos familia-res desde la pedagogía ignaciana” (jueves 11 de mayo, 19:30 horas); y el encuentro “La única familia perfecta es la tuya” (sábado 13 de mayo, entre 9:30 y 13:00 hrs.). La charla está dirigida a coordinadores de pastorales, equi-pos de orientación y psicología de colegios, organismos, universidades y profesionales vinculados al ámbito de la familia, agentes pastorales en general, como equipos de preparación de novios y otros similares. El encuen-tro, en tanto, es abierto a todo público.
ENCUENTRO DE PROVINCIA 2017Como cada año, en febrero los jesuitas del país se reunieron en la Casa de Ejercicios de Padre Hurtado para celebrar el Encuentro de Provincia. En la oca-sión, reflexionaron en torno a los desafíos planteados por la reciente Congregación General 36 de la Compa-ñía, que se celebró entre octubre y noviembre de 2016
en Roma. Asimismo, discutieron los resultados de la Evaluación de Medio Término del Plan Apostólico Pro-vincial 2011-2020.
ORDENACIONESEl viernes 2 de junio, a las 19:30 horas, se llevarán a cabo en la Iglesia de San Ignacio las ordenaciones sa-cerdotales de Víctor Gacitúa y Raimundo Salas. La Euca-ristía será presidida por Mons. Ricardo Ezzati, Cardenal Arzobispo de Santiago. En tanto que el sábado 21 de octubre, en la Catedral de Oakland, California, EE.UU., Juan Pablo Valenzuela recibirá el orden del diaconado.
NOVICIO EN LA PROVINCIAEl domingo 9 de abril ingresó al Noviciado de la Com-pañía de Jesús en Valparaíso, Max Echeverría Burgos. Nacido en Los Ángeles, Max ha vivido casi toda su vida en Nacimiento, Región del Biobío. Estudió en el Co-legio Teresiano Padre Enrique, de las religiosas de la Compañía de Santa Teresa de Jesús, participó activa-mente en la Parroquia del Divino Salvador de Naci-miento, y en 2016 estudió Medicina en la Universidad Austral en Valdivia.
ARTÍCULO DEL P. ROBLERO SOBRE LAS CÁRCELES DESTACA EN PROMOTIO IUSTITIAE
En el N° 123 de Promotio Iustitiae, revista del Secreta-riado para la Justicia Social y la Ecología de la Compa-ñía de Jesús que en su última edición tuvo como tema central “Estuve en la cárcel y vinisteis a verme...”, fue publicado el artículo del padre Luis Roblero sj, “Cár-cel y Violencias”. “La cárcel es violencia, son violen-cias heredadas desde cientos de años, de generación en generación. ¿Es posible la vida en este espacio de muerte?”, se cuestiona el P. Roblero en el texto. Se pue-de ver la revista en http://www.sjweb.info/documents/sjs/pj/docs_pdf/PJ_123_ESP.pdf, y el artículo en www.jesuitas.cl/carcel-y-violencias
LANZAMIENTO DE CUADERNOS DIGITALESPara facilitar la formación espiritual desde el material escrito, el Centro de Espiritualidad Ignaciana renovó el formato de los Cuadernos de Espiritualidad, adaptán-dolo a la plataforma digital. El cambio afecta a la revis-ta, la que podrá obtenerse desde mayo de manera on-line en www.ignaciano.cl. Para celebrar el lanzamiento, se invita a la comunidad ignaciana a reflexionar junto al P. Román Guridi el miércoles 10 mayo, a las 19:30 hrs., en el Edificio Padre Arrupe, Lord Cochrane 110, Santia-go. Inscripciones hasta el 8 mayo en [email protected] o llamando al 28387540.
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¿Presenta algún desafío este tiempo de Pascua que estamos viviendo? Puede suceder que más de uno se pregunte: ¿qué cambia el hecho de que cada año celebremos la Pascua después de la Cuaresma? Siendo la Pascua el hecho central del cristianismo, ¿no debería aportar algo a los creyentes en Jesús de hoy?
Emmanuel Sicre sj
LA PASCUA PRIMERA
Pascua viene del hebreo pésaj (paso). En la tradi-ción judía es todo un acontecimiento, porque nues-tros hermanos mayores en la fe conmemoran el paso de la esclavitud que estaban viviendo en Egipto a la liberación que Dios los invitaba a vivir en la Tie-rra Prometida de la mano de Moisés. Este minúsculo pueblo fundado por Abraham, pobre y explotado, en-cuentra en su miseria que Dios quiere rescatarlo. La comunidad de los israelitas siente que su relación con Dios se intensifica en la debilidad y claman tan alto a
Yahvé que él escucha su llanto y les envía a un líder para liberarlos.
Moisés, aun con temor, decide aceptar la propuesta de Dios y se enfrenta al Faraón para sacar a los suyos de esa tierra extranjera. Cuenta la tradición que caminaron en medio del desierto padeciendo carencia, desolación y tentación. Pero iban juntos. Esto es lo propio de la men-talidad del pueblo al que perteneció Jesús: caminar jun-tos como pueblo de Dios aun en las dificultades, con la confianza de que fue el mismo Yahvé quien los sacó de la esclavitud y les prometió una Tierra de prosperidad.
Fue entonces que, para poder mantener el mismo espíritu que los liberó, los judíos encuentran en la Ley lo que les ofrecía la posibilidad de protegerse entre ellos de los pueblos vecinos. Fue tal la profundidad con la que habían vivido la relación con Dios en ese suceso de liberación, que sintieron que Dios los había elegido de una manera especial. De ahí que el máximo peligro que vivió Israel siempre fue el de la idolatría a otros dioses, es decir, poner en el centro de su vida a quien no tenía la fuerza para sacarlos de las esclavitudes.
Así, cada año se transmitían lo bueno que había sido Yahvé con ellos al liberarlos.
¿Qué trae el regalo de la Pascua?
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JESÚS CELEBRABA LA PASCUA
...Hasta llegar a la generación de Jesús, que oyó du-rante toda su vida el relato de la liberación de su pue-blo en la celebración de la Pascua.
Pero Jesús se fue dando cuenta de que la religión judía había caído en un esquematismo normativo asfi-xiante, porque cumplían la Ley sin hallar-le sentido, y que sus líderes espirituales estaban preocupados más por el poder que por la religiosidad del pueblo, que los más débiles que buscaban a Dios es-taban siendo apartados de su lado por sus propios ministros, autoproclamados los defensores de una Ley esterilizante.
LA MISIÓN DE JESÚS
Entonces Jesús se pone en acción, cumpliendo la voluntad del Padre de ha-cer realidad el Reinado de Dios entre los hombres. Se pone en acción para despejar los obstá-culos que impedían a los ciegos ver la verdad de Dios; para sanar a los enfermos de cerrazón y parálisis ante la vida; para reorientar las decisiones erradas hacia el Dios de la misericordia; para despistar a los sabios y prudentes y agradecer por los humildes; para darles a todos el lugar en la mesa de los hijos; para liberar la libertad del hombre y decirle que Dios lo ha pensado desde siempre pleno, vivo y feliz con sus hermanos.
Pero este mensaje y estas acciones de Jesús no fue-ron bien vistas por los ‘faraones’ de su momento, ni por los ‘líderes religiosos’, ni por los que estaban cómodos con las cosas así. Entonces decidieron desaparecerlo. Y así fue que lo condenaron a muerte junto a otros tan-tos ajusticiados del imperio romano.
Jesús murió en Jerusalén después de haber padecido un sufrimiento que ni él ni su Padre querían. Este fraca-so de Jesús en un principio le dio la victoria a sus de-tractores, que habían logrado su objetivo. Jesús ya no estaba allí para poner a prueba la fe de nadie, ni para desafiar a ninguna autoridad religiosa ni política. Jesús ya no estaba y sus discípulos se dispersaron cargando sus penas dentro del alma. Todo parecía muerto.
LA PASCUA INCESANTE DE LOS DISCÍPULOS
Pero resulta que una vez pasada la tristeza de la cruenta pasión, algunos de los discípulos comenzaron a juntarse para hablar de lo que les había sucedido. Y mientras compartían empezaron a sentir la alegría de saber que Jesús estaba más vivo que nunca. Que sus me-
morias eran un hervidero de recuerdos que los hacían llenarse de un gozo indescriptible. Sentían de nuevo sus palabras y lloraban de emoción porque aquello de que iba a resucitar era cierto y lo experimentaban cada vez que se juntaban a rezar, o que compartían la mesa de la comunidad, o que hacían una colecta para los más pobres, o que asistían a los enfermos de la comunidad,
o que consolaban a los abatidos por la muerte de algún ser querido.
Y con el tiempo comenzaron a darse cuenta de que Jesús Resucitado les había transformado la vida de tal manera que se sentían repletos de gracia para salir a contarle a todo el mundo cómo es en verdad el Dios de Jesús. Estaban enamo-rados de la obra de Dios al darles amor, esperanza y fe en sus corazones.
CONTAR LA BUENA NOTICIA
Los creyentes en Jesús, cada vez que iban a escuchar las Escrituras, descubrían que aquella Alianza que Dios había hecho con el pueblo judío en el Sinaí, donde Moisés recibió las tablas de la Ley, había encontrado en Jesús su significado pleno porque sa-bían que ahora Dios estaría para siempre con ellos; que la nueva Ley era Cristo mismo que les había enseñado cómo vivir según el amor.
Y entonces comenzaron a narrar la vida de su Sal-vador. Escribieron en rollos un relato que, al leerlo, les hacía presente al Señor y se sentían invitados a com-partir la mesa tal como les había enseñado Jesús.
...HASTA NUESTRA PASCUA DE HOY
Para que nuestra Pascua se llene de sentido, nece-sitamos sabernos también discípulos del Señor y ras-trear con la memoria las situaciones en que Dios nos liberó, nos desató, nos invitó a la vida. Se hace evidente que no habrá Pascua si no nos abrimos al paso de Dios.
¿Y qué hace el Dios de Jesús cuando pasa? Hace Reino. Es decir, nos empascua, nos sana, nos levanta, nos desconcierta, nos corrige, nos alegra, nos resuci-ta de nuestras muertes y nos promete que nunca nos dejará solos.
Y más, nos dice que resucitaremos con Él y con todos los que ya gozan de su presencia definitiva. Para que, de una vez por todas, compartamos el banquete de la alegría sin fin, donde nos reencontraremos después de las tristezas que la separación de la muerte nos provo-có. Solo siendo ‘sabuesos’ de la Pascua es que podremos dejar que Dios nos empascue la vida cotidiana. JCh
“Para que nuestra Pascua se llene de
sentido, necesitamos sabernos también
discípulos del Señor y rastrear
con la memoria las situaciones en que Dios nos liberó, nos desató, nos invitó a
la vida”.
NUEVO PRESIDENTE DE LA CONFERENCIA DE PROVINCIALES EN AMÉRICA LATINA
El Padre General de la Compañía de Jesús, Arturo Sosa, nombró como nuevo Presidente de la Conferencia de Provinciales en América Latina (CPAL) al padre Rober-to Jaramillo, de la Provincia de Colombia, en reempla-zo del P. Jorge Cela, quien regresa a su natal Cuba. El P. Jaramillo nació en Manizales, Caldas, el 22 de octubre de 1963. Ingresó a la Compañía en 1981 y fue ordenado sacerdote en 1993. Estudió filosofía y teología, y rea-lizó estudios especiales de antropología en EE.UU. y Francia, donde obtuvo un doctorado en esa disciplina. Fue Superior de la región de la Amazonía brasileña entre 2005 y 2011, y hasta antes de asumir este cargo se desempeñaba como delegado para el Sector Social de la CPAL.
CAMPUS ECO-AMIGABLE EN UNIVERSIDAD JESUITA DE FILIPINAS
La Universidad Ateneo de Davao, de Filipinas, está construyendo un campus que es considerado el pri-mero eco-amigable en ese país. Ha sido diseñado para crear un ambiente contemporáneo sostenible que per-mita una enseñanza transformadora. El proyecto finali-zaría en mayo de 2019. El padre Joel Tabora, presidente de esa casa de estudios, dice que la nueva facultad ayudará a los estudiantes a tener mayor conciencia sobre la importancia de la ecología y su cuidado. El proyecto consta de cuatro edificios. El principal, ten-drá espacios comerciales y un patio de comidas. Los edificios adyacentes están destinados al trabajo aca-démico, y contarán con noventa aulas que albergarán a cerca de 1.500 estudiantes. El diseño de los salones considera la orientación del sol para aprovechar la luz natural y el viento para utilizar su fuerza. También ha-brá jardines verticales, proporcionando un mecanismo de enfriamiento adicional. Se espera, además, lograr un 100% de aumento de energía a partir de paneles solares instalados en los techos. Adicionalmente, se aplicarán reglas y directrices estrictas sobre la conser-vación y protección ambiental por parte de Ecoteneo, un grupo de la universidad dedicado al cuidado del medioambiente.
IMPACTANDO: JESUITAS EVALÚAN LA MISIÓNEntre el 20 y 24 de marzo se llevó a cabo en Lima, Perú, el encuentro organizado por la Conferencia de Provinciales Jesuitas de América Latina (CPAL), ImPAC-tando, con el propósito de revisar el impacto que el Proyecto Apostólico Común (PAC 2011-2020) tiene en la acción de la Compañía de Jesús en el continente,
e incorporar para los años venideros elementos que fueron definidos en la última Congregación General 36, realizada entre octubre y noviembre de 2016 en Roma. La cita contó con la participación del Padre Ge-neral, Arturo Sosa. El PAC tiene seis prioridades como columna vertebral. En ellas, la misión encomendada a la Compañía en América Latina y El Caribe encuentra unidad y coherencia: 1) Cercanía y compromiso con quienes viven en las fronteras de la exclusión. 2) Pro-fundización y articulación del trabajo con jóvenes. 3) Diálogo fe y culturas. 4) Conciencia y solidaridad lati-noamericanas. 5) Espiritualidad encarnada y apostó-lica. 6) Fortalecimiento del cuerpo apostólico y cola-boración en la misión.
PUBLICACIÓN DEL ANUARIO JESUITAS 2017El Anuario mundial de la Compañía de Jesús fue pu-blicado y se encuentra disponible para descargar on-line. Este año, el tema central son las comunidades indígenas y el trabajo jesuita para defender la inte-gridad y los derechos de es-tas. La publicación comienza con una cita del padre Jerome Nadal, “El mundo es nuestra casa”, para presentar la labor de la Orden con las comu-nidades indígenas y los seis artículos sobre misiones en distintas partes del mundo. La publicación también contiene escritos sobre las Congrega-ciones Generales 31 a 35, y dos textos que anticipaban la CG36. El resto del contenido trata sobre los apos-tolados jesuitas alrededor del mundo: la peregrina-ción ignaciana; el trabajo pastoral en la frontera de EE.UU.-México; las campañas de prevención del VIH en escuelas de África; la experiencia de la comunidad radial en Argentina, entre otras. El Anuario está dis-ponible en inglés, español, francés, alemán e italiano. Se puede descargar en: http://www.sjweb.info/resou-rces/annuario/pdf/Annuario2017_en.pdf
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interNACIONAL
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Cuando uno es joven y enfrenta la gran decisión de elegir qué va
a estudiar, piensa en muchas cosas. Al principio, analizamos nuestros defectos y habilidades, lo que nos gusta y apasiona. En el camino, esa búsqueda se va complementando con nuestros sueños y aspiracio-nes para el futuro: tanto de noso-tros como de nuestra sociedad... y cómo este proyecto de vida puede comenzar a tomar forma. Sentimos
Experiencia de voluntariado en la comunidad mapuche de Tirúa:
En búsqueda del “buen vivir”
Desde hace cinco años, la comunidad jesuita de Tirúa ha propiciado la llegada al territorio de voluntarios jóvenes que quieran construir su proyecto de vida desde un punto de vista diferente. Insertarse en la dinámica comunitaria, sirviendo en distintas obras de la Compañía de Jesús y en otras instituciones de la comuna, es parte de lo que realizaron las recién egresadas de enfermería Carla Mora y Natalia Carrasco, por cerca de un año. ¿Qué significó para ellas? Nada menos que un cambio total de vida. Aquí, su relato.
Carla Mora y Natalia Carrasco
Carla Mora, Lorena Sáez, Natalia Carrasco y Valeria Jiménez en la celebración de We Tripantu (año nuevo mapuche) en el sector Casa Piedra.
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que hoy en el mundo se ha impuesto un modelo que difiere de lo que realmente anhelamos en el corazón, propo-niéndonos un ritmo de vida que se nos hace muy difícil de seguir. Ha-ciendo un diagnóstico de la socie-dad, nos aventuramos a decir que está enferma, y que va enfermando de a poco a todos quienes giran en su rueda, sin cuestionarse el cami-no que llevan. Los ojos están pues-tos en el éxito de las personas, en lo material, en la competencia y en lo que producimos. Vivimos en una pista de carrera, donde reina el in-dividualismo; llegar lo más rápido posible y primero que todos, impi-diéndonos mirar al “otro” con ama-bilidad y ternura, como lo haríamos con un compañero o hermano. Así, nos alejamos paulatinamente del modo de mirar que tiene Dios para el mundo. Estas constataciones fue-ron nuestro gran punto de inflexión.
Como recién egresadas vimos en la opción de hacernos volun-tarias una forma de llevar a cabo nuestros sueños y anhelos más profundos, cargados con un poco de rebeldía. Decimos una pequeña “rebeldía” por atrevernos a salir de lo socialmente impuesto, y porque tomar la decisión de optar por un voluntariado es, en sí, un pequeño acto de protesta, de manifestación y lucha contra esta sociedad que nos impone el individualismo como camino para ser felices y tener éxi-to. Sin embargo, la gran pregunta era: ¿en qué se basa nuestra felici-dad? Vimos en el voluntariado una forma para responder a esta gran interrogante: fuimos a hacer co-
munidad en el territorio, a un lugar que habíamos conocido años atrás a través de diversas experiencias y que nos había regalado muchos aprendizajes y tanto amor; fuimos a hacernos disponibles para vi-vir y experimentar el dolor de una comunidad, en un territorio donde las injusticias se observan a diario. Pero también vivimos el amor, ese amor de Dios que se revela en el encuentro íntimo con el otro, cuan-do no hay ninguna pretensión más que compartir y mostrarnos tal cual somos. Sentimos que Dios disponía este desafío para nosotras, y noso-tras aceptamos esta misión con un corazón profundamente agradeci-do por toda la gracia que Él nos ha regalado en la vida. El voluntariado de Tirúa fue una demostración más del amor de Dios para nosotras.
Ahora, ¿qué aprendimos todo este tiempo en nuestra convivencia con el pueblo mapuche?
El pueblo mapuche tiene una for-ma y filosofía de vida muy distinta a la nuestra, en la que el ser humano está unido con la naturaleza y las fuerzas espirituales de los ances-tros que les acompañan siempre. Nos demostraron que el ser huma-no tiene la necesidad de vivir en equilibrio, con ellos mismos, con la creación, con los demás y con Dios. Nos enseñaron que las relaciones y la reciprocidad con los hermanos y la tierra son esenciales, y que hay que vivir agradecidos por lo que Dios y la mapu nos dan. El respeto por el otro es primordial, y la fuerza
de un pueblo depen-de de la unidad de este, es decir, no po-demos pasar a llevar
a otro para conseguir lo que quere-mos, porque no podemos velar solo por nuestros intereses, sino que primero está la comunidad.
Nos enseñaron el valor de com-partir lo que uno tiene y es, inclu-so lo más sencillo, ya que es desde ahí donde nace lo más puro, lo más honesto. Pero lo más importante es que nos enseñaron que la clave de todas las relaciones —con Dios, con los nuestros y con la naturaleza— radica y se funda en la confianza, en el compromiso y en el valor de la palabra. En la confianza de que podemos caminar juntos, sabiendo que luchamos por un bien común para todos, porque queremos el bienestar de todos.
Fueron meses de profundo aprendizaje: desde lo protocolar de los saludos hasta la manera de vivir. Esta experiencia nos permitió descubrir otras formas del amor de Dios, encarnadas en las personas, en cómo vivir la fe, en la natura-leza, en la belleza de la creación. Descubrimos un “buen vivir” equi-librado, distinto, despojado de ba-nalidades y lleno de amor, pero, a la vez, consciente y preocupa-do por los demás y por el entor-no. Un “buen vivir” que lucha por permanecer en los más jóvenes, y que se llena de la sabiduría de los más ancianos, quienes transmiten su conocimiento sin esperar más que aquello que les marcó la vida entera, para que permanezca en la mente y corazón de quienes cons-truyen el futuro. JCh
“Tomar la decisión de optar por un voluntariado es, en sí, un pequeño acto de protesta, de manifestación y lucha contra esta sociedad que nos impone el individualismo
como camino para ser felices y tener éxito”.
La Oficina de Planificación y Seguimiento Apostóli-co, conocida por sus siglas como OPSA, es la oficina
permanente de la Curia Provincial chilena de la Com-pañía de Jesús. Sus orígenes están en la Comisión de Ministerios descrita por la Congregación General 31, cuyos objetivos se plantean en términos de “promover una más apta selección de ministerios y previsión del futuro”. Nació en 2011 una vez elaborado el Plan Apos-tólico 2011-2020, Darlo Todo, colaborando en la misión de Cristo. En general, apoya procesos de organización apostólica de la Provincia a través de la planificación anual, hace un seguimiento al funcionamiento de los sectores y obras, coordina esfuerzos de colaboración entre redes y acompaña a algunas obras que solicitan algún apoyo en particular.
— ¿Qué es un Plan Apostólico, qué son las prioridades, objetivos y líneas de acción?
El Proyecto Apostólico Provincial (PAP) fue aproba-
do por el Padre General de la Orden, entonces Adolfo Nicolás, en diciembre de 2011. Es un documento a diez años plazo que propone ser una “hoja de ruta sujeta a permanente evaluación y eventuales actualizacio-nes, según el espíritu ignaciano de estar atentos a las circunstancias de personas, tiempos y lugares”. Es la expresión de nuestro deseo de enfrentar juntos el de-safío de asociarnos como un solo cuerpo en misión. En ese sentido, es una propuesta de rumbo para comuni-dades jesuitas y grupos de laicos y laicas ignacianos de distintos lugares del país que compartimos la misión de la Compañía de Jesús, articulando nuestros empe-ños personales e institucionales en la tarea del cuer-po entero. Es un medio para ordenar nuestras fuerzas, sabiendo que todo es bueno, en dirección hacia lo que hoy estimamos “más conduce al fin para el que somos criados” (EE.EE. 23).
A partir de la reflexión del contexto, de un proceso consultivo y de discernimiento con comunidades jesui-tas, con laicos y laicas, se definieron tres Prioridades que se traducen en Objetivos y en Acciones Comunes.
OFICINA DE PLANIFICACIÓN Y SEGUIMIENTO APOSTÓLICO:
Cumplir la misión de Dios, “buscando y hallando” en un contexto de cambio
Las encargadas de la oficina permanente de la Curia Provincial chilena de la Compañía de Jesús, Araceli Gorichon y Valentina Papic, conversaron con Jesuitas Chile acerca de la Evaluación de Medio Término del Plan Apostólico 2011-2020 de la Provincia: cómo se han trabajado las prioridades de este, las novedades de la labor realizada y lo que viene para la segunda mitad del Plan.
Equipo Jesuitas Chile
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Araceli Gorichon y Valentina Papic
Las prioridades son Inclusión, Juventud y Colaboración, es decir, las personas en situación de exclusión social, la juventud que es el futuro de la Iglesia y de la socie-dad, y la colaboración como nuestro modo de proceder.
— ¿Qué es la Evaluación de Medio Término y cómo se efectuó?
El Plan Apostólico pretende aunar intenciones y es-fuerzos para tener un trabajo más coordinado a obje-to de una mayor incidencia. Es decir, traza un camino, pero de ninguna manera pretende ahogar la creativi-dad, como tampoco ignorar los desafíos sociales que puedan surgir y han surgido. En ese sentido, el mismo documento plateaba que el año 2016 se revisara la vi-gencia del PAP, con la posibilidad de ajustar o iniciar una nueva planificación, si fuese pertinente.
La Evaluación de Medio Término (EMT) fue un proce-so de examen que pretendió revisar las prioridades, la pertinencia de los objetivos, sus líneas de acción y ac-ciones correspondientes, pudiendo eliminar o modifi-car algunos, o plantear la formulación de otros nuevos. Esa evaluación fue realizada por el equipo de gobierno de la Provincia, conducido por la OPSA. Se realizó a tra-vés de un proceso intenso consultivo a comunidades jesuitas, a laicos y laicas de obras desde fines de 2015 y durante 2016, con metodologías cuantitativas y cuali-tativas. Sin embargo, recoge también las evaluaciones que se habían realizado en 2013 y 2014, cuando se esta-blecieron las líneas bases de medición y seguimiento.
— ¿Cuáles fueron las principales novedades de la eva-luación? ¿Qué estrategias se tomarán a partir de ella? ¿Cuáles fueron las principales decisiones?
Las tres prioridades están plenamente vigentes, y por tanto hay que seguir implementando y haciendo seguimiento a los objetivos contenidos en ellas, para alcanzar una mayor eficacia en su cumplimiento, dan-do algunos énfasis y priorización a algunos de estos en los próximos años. Sin embargo, hay nuevas invita-ciones y mociones surgidas en el último tiempo y que se reflejan en la EMT. Aparece un enorme desafío que significa hoy la transmisión de la fe. Como comentó el Padre Provincial en el Encuentro de Provincia, “en casi todos nuestros esfuerzos apostólicos, nos encontra-mos con la dificultad de un lenguaje religioso que, tal como lo hemos aprendido y comunicado, conecta muy débilmente hoy con la realidad de las personas, espe-cialmente con los más jóvenes. Además las familias, como núcleos privilegiados de transmisión de valores y creencias, son cada vez menos un espacio donde la experiencia religiosa se comparte y se nutre”.
El Papa Francisco nos ha invitado también a llevar la
alegría del evangelio a nuevas fronteras, más allá de lo conocido, no quedándonos en lo más cómodo ni con-formándonos con repetir lo de siempre, sino apostan-do por una actitud espiritual y apostólica de “salida”. Finalmente, inspirados por la encíclica Laudato Si’, se ha comenzado a conversar y sentirnos invitados a mo-vilizarnos por el cuidado de nuestra casa común y por un estilo de vida más sencillo.
Hoy estamos en el proceso de incorporar los resulta-dos de la EMT a la planificación de la Provincia. Eso sig-nifica integrar y dialogar con los delegados sectoriales, superiores de comunidad y jefes de obra estas nuevas mociones y los énfasis de las prioridades que le recaen a cada uno en particular.
— A algunos les puede sonar “raro” tanta evaluación, análisis y estudio cuando hablamos de mociones del Espíritu y el camino por el que Dios nos va guiando... ¿esto se puede conciliar? ¿Cómo lo viven ustedes?
Desde los comienzos de su conversión, Ignacio per-manentemente revisa el horizonte de su vida y, luego, el de la Compañía. Este horizonte va cambiando en su forma. De hecho, cuando Ignacio al final de su vida decide contar su historia, escoge referirse a sí mismo como El Peregrino. La comprensión de sí mismo, su vi-sión del mundo y su relación con Dios van mudando en la medida que “toca” las nuevas experiencias, las nuevas personas y las nuevas fronteras.
El contexto requiere que vayamos dando nuevas res-puestas, pero no solo eso, sino también nuevas pro-puestas que expresen el deseo de Dios. El llamado es a continuamente realizar el ejercicio de poner atención y discernir el camino recorrido, para confirmar o reorientar los distintos esfuerzos apostólicos y encaminarnos a la toma de decisiones que impulsen y dinamicen nuestra misión apostólica. Es una invitación que hoy con mayor énfasis nos realiza la Congregación General 36, a ser “una comunidad de discernimiento con horizontes abiertos”.
Para generar aprendizajes, necesariamente tene-mos que examinar y evaluar. Las evaluaciones bus-can que las personas, los equipos y las instituciones aprendamos a partir de la revisión de lo que hacemos y el análisis de las causas de lo ocurrido. Es una ma-nera de ir creciendo en habilidad y capacidad para examinar y discernir lo que más nos conduce a cum-plir la misión de Dios, “buscando y hallando” en un contexto de cambio. JCh
“El contexto requiere que vayamos dando nuevas respuestas, pero no solo eso, sino también nuevas
propuestas que expresen el deseo de Dios”.
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una mañana, una tarde en la que me encuentro con el otro... en la etapa en que estemos: sintiéndonos muy amados, un tanto distanciados, con temas no resueltos o ni siquiera conversados, o solo por las ganas de estar juntos, o porque el otro “me lleva”. Es un espacio de pareja y para cada pareja.
En los talleres o jornadas se construyen multies-pacios de intimidad, de cuidado y respeto por este y por cada uno de los espacios de la pareja. No importa si el trabajo se lleva a cabo en un patio estrecho, en una cancha grande, en un bosque, en una sala o en un templo.
La pareja escoge su lugar, lo constituye como tal y lo cuida. Es increíble cómo se generan espacios don-de el silencio sobrecoge. En la dinámica del momento, pareciera que cada pareja está sola. Es algo mágico. Estamos tú y yo, nosotros; entregados a la propuesta
de la invitación.Es una experiencia tremendamen-
te ignaciana, abierta a toda realidad de pareja, para no creyentes y cre-yentes, de cualquier religión. Solo re-quiere la disposición a conversar con el otro. Desde el primer taller, realiza-do en 2009 con más de 700 personas, aprendimos que las parejas necesi-tan conversar. Y con los siguientes, ratificamos eso. Siempre falta tiempo
vivir de a do2: Un regalo para la vida en pareja
La espiritualidad ignaciana tiene que ver con la vida y con nuestra forma de vivirla. Es un camino para mirar la vida de una manera nueva, agradecida. La experiencia del amor transforma el corazón. Si nos sentimos amados sale lo mejor de nosotros, podemos ser fermento del mundo y transformarlo. Cada taller de Vivir de a do2 da la posibilidad a la pareja de revisar su relación y redescubrir a qué está llamada. Una invitación abierta e inclusiva, para todo tipo y realidad de pareja.
María Leonor de la Paz y Rogelio OrozcoVivir de a do2*
* El sitio web de Vivir de a do2 está en reconstrucción en estos momentos. Información sobre los talleres puede obtenerse en CVX (https://cvxadultosstgo.wordpress.com).
La experiencia del Vivir de a do2 (Vd2) nace en 2008 de la necesidad de acompañar y recrear la vida en
pareja, de generar un espacio para el nosotros.Si nos preguntan qué es el Vd2,
nuestra respuesta es instantánea: un regalo.
Una instancia para mirarnos y re-descubrirnos. Revisar nuestra rela-ción en un espacio de intimidad y con un tiempo para nosotros. Es una experiencia de donación y de re-crea-ción. Todo en un ambiente preparado con mucho cariño, profesionalismo, respeto y cuidado. Es un momento,
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para la conversación. Eso es lo central de la invitación. Lo que hablan queda para ellos; no hay trabajos colec-tivos ni tampoco la necesidad de exponer a los asisten-tes lo conversado. Sí evaluamos y recogemos la experiencia. Básicamente, cómo llegamos y con qué nos vamos.
Para ayudar a crear ambien-te, los esperamos con un café, té, bebidas, jugos, dulces y sa-lados. Este servicio permanece abierto las cuatro horas de du-ración del taller. Luego, damos la bienvenida y motivamos el trabajo a realizar con profesionales seleccionados y preparados para cada tema. Esto expresa lo que queremos generar en ellos, para luego pasar a lo central, su trabajo, su espacio de conversación. Preparamos, primero, a cada uno indivi-dualmente, y, después, lo que conversará con el otro.
Muchos que lo han vivenciado dicen que este am-biente se logra de muy buena manera. Básicamente, porque los dispone a conversar, porque preparan su corazón para recibir al otro. Lo que no siempre ocurre cuando uno de ellos lo(a) invita a tomar un café, o a comer algo fuera de casa para hablar un tema en par-ticular.
Tenemos diversos formatos: grandes, medianos y pequeños. Hemos realizado talleres con sobre 600 per-sonas, otros entre 200 y 400 asistentes, y también para 20 o 30 parejas. Los temas son tan diversos como: “ser pareja en los nuevos tiempos”; “del conflicto al acuer-
do, lo que nos une, nos distancia (referido a los hijos)”; hoy por ti... mañana también”; “juntos por siempre... una aventura posible”; “10 años... ¿por arte de magia?”, etc. Y hemos desarrollado talleres en colegios y en la casa de CVX. Actualmente, estamos preparando un Vd2 masivo en el Colegio San Ignacio El Bosque, que se lle-vará a cabo el 14 de octubre y se extenderá más allá de la frontera del colegio; será abierto a la comunidad externa y a todos quienes quieran participar.
Después del tercer taller del Vd2, discernimos que debíamos llegar a otros sectores, a aquellos de meno-res ingresos económicos o, incluso, en vulnerabilidad social; que fueran totalmente gratuitos y con la misma calidad, dedicación y preocupación. Así, nació la acti-vidad 2x1: dos talleres en zonas de ingresos medianos o altos, donde parte de la cuota que se cobra por par-ticipar es para financiar un taller en sectores vulnera-bles. Eso lo explicitamos en los talleres y los partici-pantes valoran el aspecto solidario y de justicia que la iniciativa conlleva, transformándola en una actividad inclusiva, profundamente ignaciana. Hoy, estamos pre-parando nuestro tercer encuentro 2x1 en la comuna de Estación Central.
Al terminar cada taller, lo evaluamos y preguntamos a las parejas por los temas que les interesaría tratar en futuros Vd2. Los más solicitados son: sexualidad, comunicación, vida cotidiana y revisión del proyec-to.
A partir de esas necesidades, creamos el Duopoly: un juego con esos cuatro pilares de la vida en pareja. Es muy entre-
tenido y se recorren, al azar, los temas en cuestión. Y además tenemos una actividad de Vd2 que es solo Duopoly... una breve motivación previa, y a jugar. Es una herramienta poderosa y de fácil implementación, que ayuda a la conversación de los distintos tópicos de la vida en común.
El equipo de Vd2 está conformado por un grupo de matrimonios que también participamos en el equipo de preparación de novios de CVX, con organización y vida propia, que trabajamos por fortalecer la vida en pareja. Nuestro quehacer está fundado en el amor de Dios por nosotros. Es una invitación abierta e inclusiva a toda la comunidad. Queremos mostrar una Iglesia acogedora, entregando herramientas que fortalezcan la relación y la convivencia. Nuestro sueño es ser reconocidos como una comunidad de CVX que aporta significativamente al robustecimiento de cada familia a través del acom-pañamiento a la pareja, como pilar de esta. JCh
“Nuestro quehacer está fundado en el amor de Dios por nosotros. Es una invitación abierta e inclusiva a toda
la comunidad. Queremos mostrar una Iglesia acogedora, entregando
herramientas que fortalezcan la relación y la convivencia”.
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Silencio es una película densa. Lo es el libro del japo-nés Sushako Endo que Martin Scorsese sigue muy
de cerca. Por eso quisiera proponer cuatro pistas para verla y dejar que su profundidad nos mueva a una re-flexión en torno a nuestra fe.
No es cine de consumo. La película nos ayuda a ver la diferencia entre el “cine de acción”, al que estamos acostumbrados, y el cine como obra de arte. El primero es un producto de consumo, estereotipado y que bus-ca ser un estímulo eficaz para nuestra entretención y descanso. Silencio, en cambio, está en una clave muy distinta; necesita ser vista más bien como un poema, o una pintura, o cualquier obra en la que el artista quiere ser develado en su intención creativa y simbólica. Se trata de imágenes que tienen un significado más allá del relato mismo o la acción que involucran. Como obra de arte, la película nos invita a desentrañarla, a dejar que nuestra emoción se active y nos conduzca a lu-gares inesperados de nuestra alma. Por eso hay que verla con todos los sentidos, dejarse invadir por lo que el autor nos va abriendo; contemplar los silencios, las voces, los gestos teatrales de los actores, los paisajes, el mar, la violencia, el dolor, lo no dicho, etc. Al dejarse tocar por los elementos de la película, calculadamente puestos, ella nos llevará a sugerentes cuestionamien-tos sobre la fe y el sufrimiento.
Elementos para una apreciación contemplativa. Como toda obra de arte, cada uno de nosotros puede ser tocado por ella de manera distinta. Les propongo estar atentos a los siguientes elementos para “reflectir en mí mismo y sacar provecho”, como dice san Ignacio:
1. Los misioneros jesuitas y los japoneses cristianos: la película gira en torno a la fe y los misioneros repre-sentan la creencia en un Dios providente y bueno, la
creencia en la vida eterna y el paraíso; los japoneses convertidos han aprendido de ellos. Esta fe es cues-tionada por el silencio de Dios ante la injusticia y el dolor. La película/libro, a mi juicio, cuestiona los fundamentos falsos de la fe, sus motivaciones es-purias: ¿Por qué creo? ¿Para qué creo? ¿Qué le exijo a Dios para creer en Él? ¿Milagros, eventos sobrena-turales? ¿Es la recompensa del paraíso fundamento válido, suficiente, para la fe?
2. La tortura: la narración no es sutil en torno a la trage-dia del dolor y el sufrimiento, especialmente al cau-sado de humano a humano. Las autoridades japone-sas empujan más hondo la espina más dura para la religión: el escándalo del sufrimiento del inocente. Ese sufrimiento sigue cuestionando a Dios. ¿Qué me provoca el sufrimiento expuesto en la película? ¿Qué habría hecho yo? ¿Qué me dice, en este sentido, la persona de Cristo, su pasión y muerte?
3. Kichijiro: personaje ambiguo y recurrente en la obra. Representa la fragilidad, la inconsistencia, y el vai-vén de la fe y de las propias intenciones. ¿Qué me provoca este personaje? ¿Cómo lo juzgo durante la película? ¿Qué sensación me deja al terminarla? ¿Qué reflexión sobre la fragilidad puedo hacer después de verla?
4. La apostasía: en este punto la película refleja una comprensión religiosa y de la evangelización propia del siglo XVII, más formal y reivindicatoria, alejada de la comprensión actual de la fe. Sin embargo, a mi juicio, instala un elemento muy actual y debatido: el valor de la conciencia. Nadie por el uso de la fuerza (o cualquier modo presión) puede penetrar al reduc-to inviolable y sagrado de la conciencia y el discer-nimiento maduro. ¿Qué me produjo el desenlace de la película? ¿Qué creo que el autor quiso expresar?
Sabemos por el propio Scorsese que, cuando terminó de grabar La Última Tentación de Cristo en 1989, recibió de regalo el libro de Endo. Lo leyó y quedó sin palabras. Desde ese tiempo quiso hacer la película. Literatura y cine son artes distintos. Sin embargo, se encuentran en un punto: la emoción. Ambos buscan remover nuestro interior y quizá reorganizarlo con nuevas claves de sen-tido. Al leer el libro de Endo o ver la película de Scorsese nos sucede algo similar: interiormente revueltos. JCh
Silencio de Scorsese y Endo: apuntes para contemplarla (sin spoiler)Literatura y cine son artes distintos. Sin embargo, se encuentran en un punto: la emoción. Ambos buscan remover nuestro interior y quizá reorganizarlo con nuevas claves de sentido. Al leer el libro de Endo o ver la película de Scorsese nos sucede algo similar: interiormente revueltos.
Francisco Jiménez Buendía sj
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¿Qué busca este libro? Rápidamente ponemos las cartas sobre la mesa. El interés central es convencer a los lec-
tores acerca de la grandeza del cristianismo. Comunicar al Cris-to que ha inspirado cada una de las columnas de que consta esta publicación.
Cristo y el cristianismo no son lo mismo. En el cristianismo hay de todo. En su larga historia se cuentan muchas equivoca-ciones. Se han llamado cristianos personajes que mejor olvidar. El propio Cristo es el criterio que nos permite juzgar la historia, y la historia de la Iglesia, y decir “aquí sí”, “aquí no”, ha actuado Dios. Pero el cristianismo, gracias a Cristo, ha dotado al mundo de humanidad. No sabemos qué sería de la historia humana si se extirpara de ella lo que los cristianos han hecho en su favor. Al menos habría que decir que han procurado hermanar a hom-bres y mujeres por su fe en el Dios que Jesús llamó Padre.
Este libro está escrito por si a alguien fuera a interesarle, en esta época de desconcierto cultural creciente, una tradición extraordinaria de humanidad que le sirva precisamente para interpretar lo que nos está pasando y trabajar por una globali-zación de la fraternidad.
Jorge Costadoat sjAutor
Jorge Costadoat sj: Cristianismo en tempestad: fe, coraje y esperanza. Ebooks del sur, Santiago, 2017, 162 pp.
* Se puede descargar gratis en Amazon, en una versión que se lee en computadores, e-readers y tablets, y es utilizado en textos generalmente planos como una novela o un ensayo. Además se puede solicitar una copia impresa, también en Amazon, por US $6,99.-
El padre Cristóbal Fones presentó su última producción ins-trumental Küme Mongen (“buen vivir” en mapudungun).
Acerca de este nuevo trabajo, Cristóbal dice: “Es un disco ins-trumental, distinto a lo que la gente está acostumbrada a es-perar de mis producciones. Basado en melodías de canciones antiguas, hemos recreado con Luciano Valdebenito los temas para ofrecer a un público más amplio la posibilidad de ejercitar un modo contemplativo de vivir, respetuoso del medio ambien-te, de los ritmos humanos, afectuoso y atento; más silencioso y dispuesto a la escucha. Es el resultado de mi oración tras haber leído hace ya dos años la encíclica Laudato Si’. También, cómo no, lo que ha significado estos últimos años la misión itinerante en el sur y mi experiencia junto al pueblo mapuche”.
* El disco está a la venta en formato digital a través de PortalDisc, y próximamente estará disponible en Spotify y otras plataformas de música streaming.
Cristóbal Fones sj: Küme Mongen. Música para una ecología integral, 2017.
lib
ro
dis
co
Los incendios de enero y la resiliencia
Todo el país se conmovió ante el sufrimiento de miles de chilenos a raíz de los incendios que devastaron la
zona centro-sur en enero.
Pero también todos quedamos asombrados ante la capacidad de levantarse de aquellos que, en muchos
casos, lo perdieron todo.
Muchas obras de la Compañía se movilizaron, convencidas de que, al decir de Ignacio, "el amor se debe poner más en las obras que en las palabras".
Pensara dónde voyy a qué
[EE239]
PUNTA ARENASOctubre 6 al [email protected]
ARICA Abril 21 al 23 [email protected]
LA SERENAJunio 2 al [email protected]
ANTOFAGASTA Mayo 12 al 14 - Octubre 13 al [email protected]
VALPARAÍSO Abril 14 al 15 Agosto 11 al 14Octubre 6 al 9 Diciembre 7 al [email protected]
SANTIAGOEnero 2 al 10 Abril 28 al 1 MayoJunio 23 al 26 Julio 14 al 22 Agosto 11 al 14 Octubre 6 al 9Octubre 26 al 29 Diciembre 7 al [email protected]
TALCA Abril 28 al 1 [email protected]
CONCEPCIÓN Abril 28 al 1 Mayo Junio 23 al 26 Agosto 11 al 14 Octubre 6 al 9 Noviembre 24 al [email protected]
8 DÍAS ZONA SURJulio 14 al [email protected]
TEMUCOAbril 28 al 1 [email protected]
VALDIVIAOctubre 26 al [email protected]
PUERTO MONTT Diciembre 7 al [email protected]
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EJERCICIOSJÓVENESPARA
Red Juvenil Ignaciana
Foto: Cruz de la capilla construida en Santa Olga.
Pensara dónde voyy a qué
[EE239]
PUNTA ARENASOctubre 6 al [email protected]
ARICA Abril 21 al 23 [email protected]
LA SERENAJunio 2 al [email protected]
ANTOFAGASTA Mayo 12 al 14 - Octubre 13 al [email protected]
VALPARAÍSO Abril 14 al 15 Agosto 11 al 14Octubre 6 al 9 Diciembre 7 al [email protected]
SANTIAGOEnero 2 al 10 Abril 28 al 1 MayoJunio 23 al 26 Julio 14 al 22 Agosto 11 al 14 Octubre 6 al 9Octubre 26 al 29 Diciembre 7 al [email protected]
TALCA Abril 28 al 1 [email protected]
CONCEPCIÓN Abril 28 al 1 Mayo Junio 23 al 26 Agosto 11 al 14 Octubre 6 al 9 Noviembre 24 al [email protected]
8 DÍAS ZONA SURJulio 14 al [email protected]
TEMUCOAbril 28 al 1 [email protected]
VALDIVIAOctubre 26 al [email protected]
PUERTO MONTT Diciembre 7 al [email protected]
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