I. CIENCIA Y SOCIOLOGÍA

LA SOCIOLOGÍA COMO CIENCIA

La sociología como tal, es decir, el concepto, lo debemos directamente a Augusto

Comte, a quien se le ha reconocido como el padre de esta ciencia, aunque no fue

el único que hizo grandes aportaciones. 

La sociología, en si, no solo trata de la observación del individuo y su

comportamiento, si no que pretende aplicar conocimientos científicos a estas

observaciones, para comprender mejor su tema de estudio.

No es nuevo el término de la observación de la sociedad o de los individuos

interactuando entre ellos, ya que existen escritos y obras de hace siglos que aún

pueden reconocerse como explicaciones acerca de estos temas. Sin embargo, y

para desdicha del sociólogo, son precisamente las creencias de conocimiento de

los individuos acerca de estos temas, lo que le crea problemas, por el hecho de

que las personas tenemos tendencia a crearnos ideas preconcebidas en cuanto a

las reacciones de los demás integrantes de nuestro grupo social, lo cual, es

hipotéticamente real, ya que a lo largo de nuestra vida en sociedad, los individuos

observamos y se puede decir que aprendemos, mas o menos, como reacciona la

mayoría de la gente a nuestro alrededor, sin que esto sea específicamente

correcto, es decir, el que las personas de nuestro entorno se comporten de tal o

cual manera, no

quiere decir, que alguien que vive del otro lado del mundo reaccione igual, por lo

que no debe generalizarse el comportamiento humano, ya que éste depende de

muchos factores externos y/o internos, culturales, educacionales, etc., y ese es

precisamente el campo de estudio de esta ciencia, el observar, pero al mismo

tiempo analizar, ordenar y crear conceptos reales del comportamiento humano

dentro del medio en que se desenvuelve.

LA OBJETIVIDAD DE LA CIENCIA

El mayor problema en cuanto a ciencia e investigaciones se refiere, es querer

analizar objetivamente los hechos u observaciones. Es decir, cuando un

investigador (no importa de que materia), trata de analizar algo para lo cual él

tiene ya una hipótesis, probablemente vea exactamente lo que quiere ver, no

pondrá demasiada atención a los hechos reales, o por lo menos no a los que

demuestren algo contrario a lo que el cree o está pensando. Por esta causa, en

cuanto a sociología es aún más complicado, ya que desde el momento en que

nacemos, comenzamos a interactuar con la sociedad, familia, etc., y por lo tanto,

aunque no nos dediquemos a estudiarlo, tenemos, seguramente, ideas generales

acerca de los demás.

Todo lo anterior, deriva hacia la mayor crítica que enfrenta la sociología: El ser

catalogada como la ciencia de lo obvio. Esto por supuesto, proviene del hecho,

que, como anteriormente dije, las personas llegamos a creer tener un

entendimiento total de nuestro entorno y los individuos que viven en el,

por lo tanto, la gente piensa que no es ciencia el que alguien se dedique a   tratar

de explicar lo que salta a la vista, aunque en realidad, los que solo somos

observadores, no lo explicamos, solo lo vemos y de alguna primitiva manera,

tratamos de entender.

A pesar de que para el sociólogo el realizar su trabajo sea complicado por todas

las situaciones antes mencionadas, y otras tantas que poco a poco se irán

reconociendo, también él comete errores, y el más frecuente de estos, es utilizar

lenguajes abstractos, y de esa manera querer ganar importancia para sus

investigaciones, ya que, precisamente porque la ciencia que estudia es tomada

como algo “familiar” o común, las personas tienen más tendencia a considerar que

lo hace exactamente para dar más importancia a su investigación, de la que

podría tener en realidad. Además, aunado a esto, esta el problema de que para

toda persona, es complicado aceptar el hecho de que alguien más pueda

analizarnos ya sea individual o colectivamente, y pueda sacar una conclusión en

cuanto a ello.

Tal vez la manera menos difícil, (no más sencilla) de lograr la objetividad en

sociología, podría ser el aceptar que ni nosotros como personas, ni nuestro grupo,

país, territorio o cual sea la división, somos únicos, y así mismo, las costumbres o

el modo de vida que tenemos puede variar dependiendo del lugar, y será entonces

cuando comprendamos, aunque sea un poco, nuestra manera de comportarnos, y

posteriormente tratar de entender

la de los demás. 

CIENCIA Y CONCEPTOS: EL PROBLEMA DEL LENGUAJE

Dentro de todas y cada una de las ciencias, sean sociales o naturales, existe una

terminología propia de ellas, ahora bien, si alguien se ha tomado el tiempo de leer

un artículo de biología o química, seguramente se ha topado con el gran problema

de desentrañar los significados de algunos términos, sin embargo, en las ciencias

sociales no son tan desconocidos los conceptos, lo cual termina siendo para los

estudiosos de esto, una carga mas. 

Analicemos esto: si en una revista científica encuentras un artículo acerca del

electromagnetismo, seguramente enfrentaras el problema de entendimiento de

algún término, y por ende, buscarás alguna orientación. Sin embargo, un libro de

sociología o alguna ciencia social, contiene términos usados en la vida cotidiana

(tal vez erróneamente) y por lo tanto, formulamos ideas equivocadas acerca del

tema.

Las ciencias sociales en general, enfrentan este tipo de situaciones en mayor o

menor medida, y aún no se ha podido lograr que la terminología de éstas sea

aceptada totalmente. 

LA NATURALEZA DE LOS CONCEPTOS

Un Concepto en si, es una idea, una palabra que sirve para generalizar una

agrupación de cosas, personas, etc., es decir, un término general.

Durante el habla de la vida cotidiana, utilizamos conceptos, sin embargo, no de la

misma manera en que son utilizados dentro de la ciencia, ya que éstos últimos

están mejor definidos, es decir, su significado

es de mayor precisión, ya que de no ser así, tal vez habría confusiones en cuanto

a lo que se quiere dar a entender del tema.

En cuanto a la sociología, en ella se utilizan precisamente conceptos del habla

cotidiana, generales, aunque no por eso se ignoran las características

individuales. En sí el estudio de ésta se basa en los patrones repetitivos de las

personas, para después analizarlos grupalmente.

CIENCIA Y TEORÍA

La finalidad de cualquier ciencia, es elaborar, en base a observaciones y otros

métodos, teorías firmes acerca de lo que se está investigando.

La sociología parte en sí, del hecho de que los individuos presentan conductas

repetitivas y patrones en ellas. Es decir, dependiendo de la situación, el lugar en

que se encuentren, así como de las personas que los rodeen, estas conductas

variarán, y se adaptarán, en la mayoría de los casos, al entorno. Esto puede

explicarse con la idea, de que el ser humano, es un ser social, y se adapta a las

normas y costumbres que la misma sociedad en que se desenvuelve maneja.

LAS APLICACIONES DE LA SOCIOLOGÍA

La sociología, aparte de ser una ciencia que estudia al hombre, proporciona las

herramientas para que las personas se comprendan a sí mismos y al medio que

los rodea. 

Sin embargo, el decir que los sociólogos sólo realizan sus investigaciones para

comprender, me parece que es erróneo, ya que no solo es comprensión lo que

necesita la sociedad, sino aplicar éstos conocimientos para la resolución

de los problemas que se presentan en la sociedad misma.   Es decir, en base a las

observaciones y teorías que los sociólogos han registrado, se puede conocer la

mejor manera de atacar y/o solucionar las situaciones desfavorables que se

presenten, así, es más fácil determinar una respuesta a un problema, cuando se

tiene un estudio de la causa, la propensión, la recurrencia y el medio que lo

favorece. Y esta información, es precisamente de la que se encarga esta ciencia.

II. CULTURA Y SOCIEDAD

CONDUCTA REGULADA Y VIDA COLECTIVA

Como ya se ha mencionado antes, los seres humanos tienden a repetir

comportamientos, y también, debe entenderse, que somos seres sociales, de

alguna u otra manera, interactuamos con personas y pertenecemos a un grupo

social.

Dentro la sociología, se utilizan los términos de cultura y sociedad, para tratar de

explicar estas conductas repetitivas, y para evaluar los patrones en las que se

presentan. Y el punto de estos conceptos, es que no hay sociedad que exista sin

una cultura propia, así como la cultura, solo existe dentro de una sociedad.

CULTURA

En términos generales, la cultura es en sí, los hábitos, las creencias y demás

comportamientos que la sociedad va adquiriendo por costumbre o repetición.

Esto deriva a que la cultura, es la conducta “aprendida”, la transmiten los padres a

los hijos, o el simple hecho de verla repetida desde el momento en que llegamos

al mundo, nos hace aceptarla como cierta. Por lo tanto,

la forma en que cada individuo se comporta, proviene, en gran medida, del

aprendizaje y la experiencia adquiridos dentro de la sociedad.

Para entenderlo mejor, es importante mencionar tres grandes clasificaciones

dentro de lo que denominamos cultura:

Las instituciones. Que son más que nada, los comportamientos que son

considerados adecuados o correctos, es decir, son aquellos que nos dicen como

actuar y la mejor manera de hacerlo, dentro de los cuales, por supuesto, está

implícita la moral y las costumbres, algunas veces regidas por el medio y las

personas que nos rodean y otras, siendo conductas aceptadas universalmente.

Las ideas. Que abarcan todas las creencias que tenemos, ya sean en cuanto a

religión, el mundo o el medio que les rodea. Estas ideas nacen generalmente del

aprendizaje y la repetición, y están nuevamente, ligadas al medio en que nos

desenvolvemos.

Los productos materiales o artefactos. Esto es solamente el conjunto de valores

materiales que como individuos generamos y utilizamos, y que dan la pauta a un

comportamiento.

LA SOCIEDAD

Éste es un término muy amplio que no es capaz de definirse exactamente, pero en

esencia, trata de la agrupación de individuos que comparten una cultura. Esto,

aunque es meramente una definición, no engloba exactamente lo que la sociedad

representa. Es decir, por naturaleza, los seres humanos tenemos tendencia a

relacionarnos entre nosotros mismos, no solo para adquirir hábitos, sino también

para solucionar

problemas, ayudarnos unos a otros y crear una vida en común,   de ésta manera

interactuamos en un medio que termina por denominarse sociedad, la cual,

desarrolla una cultura propia, y por medio de esto, es posible estudiarla y

encontrar factores propios de ella que permitirán distinguirla de las demás.

PAPEL Y STATUS

Estos conceptos, son la conexión entre los de cultura y sociedad, y proporcionan

un enfoque para la observación y determinación de los rasgos de la sociedad

misma.

El status y los papeles provienen de la observación, de que en toda sociedad,

existen distintos roles que poseen limitaciones debido a rasgos característicos.

Si se considera el status como una posición que ocupa todo individuo en la

sociedad y en relación con las demás personas que lo integran, nos daremos

cuenta que dicha posición, conlleva un rol que se debe desarrollar para mantener

ese status. Este comportamiento deberá seguir la pauta que la sociedad decreta

para la posición específica.

Todo individuo, desde el momento de su nacimiento cuenta con un status, ya sea

ser niño, hijo, padre, hermano, etc., y todas estas posiciones, poseen normas de

conducta que deberán regir el comportamiento.

Como es de suponerse, hay hechos determinantes dentro de la adquisición de los

roles, ya que existen status adquiridos, es decir los que por decisión se toman,

como elegir la profesión, o ser esposo; y el status atribuido, que es el que nos

imponen por el hecho de las condiciones

que nos rodean o poseemos, en éste último, puede mencionarse lo que se nos

atribuye en base a las características biológicas, por ejemplo el ser mujer o varón,

y de esto   se deriva la conducta que los demás esperan de nosotros al pertenecer

a dicho status. 

III. DIVERSIDAD Y UNIFORMIDAD EN LA SOCIEDAD HUMANA

LA VARIEDAD DE LAS FORMAS SOCIALES

Existe una extensa variedad en cuanto a estructuras sociales y culturas se refiere,

y todas tienen una amplia gama de costumbres, que van adquiriendo,

nuevamente, por repetición y enseñanza de la gente que las integra.

Las normas de conducta que fácilmente pueden aplicarse a cierta cultura, no

serán aceptadas por otra, es decir, estas normas solo serán aplicables a ese

grupo en particular, por lo tanto, lo que en nuestra sociedad puede catalogarse

como inmoral, en alguna otra, será un comportamiento totalmente aceptable y sin

consecuencias trágicas. 

UNIFORMIDADES SOCIALES

Dentro de toda la variedad de culturas que existen, hay, sin embargo, patrones de

conducta repetitivos dentro de ellas, tal vez no exactamente iguales, pero si con la

misma finalidad, es decir, por ejemplo, en todas las culturas existen creencias, ya

sea en Dioses, objetos u otras cosas, aunque no sean exactamente iguales, todas

tienen la finalidad de ofrecer al hombre algo en que creer.

La sociología tiene, como uno de sus fines principales, el estudiar y analizar tanto

los patrones repetitivos, como la diversidad, para poder

crear una idea clara de las sociedades.

BIOLOGÍA Y SOCIEDAD

Aunque ya hemos hablado de la conducta aprendida, es necesario tomar en

cuenta que el factor biológico, ya que de manera directa o indirecta, parece influir

en el comportamiento humano.

Así pues, como dije antes, por ejemplo,   la necesitad del ser humano de creer en

una deidad superior está presente en todas los grupos, y por lo tanto habría que

formularse la pregunta de si tenemos la necesidad innata de creer. Y tal vez en

cuanto a necesidad, como tal, si exista, sin embargo, en lo que creemos,   esta

absolutamente ligado a nuestro entorno, y a lo que nos enseñan, por lo tanto,

aunque algunas conductas parezcan dar las bases para creer que se tienen desde

el momento del nacimiento, no hay hechos comprobables de que sea así y todas

girarán en torno al aprendizaje. 

LA RAZA

La raza es un factor que se piensa que sí influye en el comportamiento humano, y

crea diferencias entre unos y otros, es decir, al parecer, existen diferencias

culturales directamente ligadas a las diferencias biológicas, sin embargo, no creo

que sea en sí la raza, sino como actuamos ante ella, sobre todo cuando es distinta

a la nuestra.

Entendamos primero el concepto, cuando hablamos de razas, nos referimos a un

grupo de personas que poseen características biológicas similares, las cuales

provienen directamente de la herencia.

Ahora, si hablamos de diferencias físicas en su mayoría, no habría que mezclarlas

con las

características culturales, y sin embargo,   a través del tiempo, si se ha

generalizado el comportamiento dependiendo de las razas.

Este enfoque no puede ser validado, ya que los rasgos biológicos no determinan

de ninguna manera las conductas, así pues, si esto tuviera algo de cierto, al

momento de la mezcla de razas, habría también una mezcla de culturas, que tal

como se refiere, dejaría a muchas personas fuera de cualquier clasificación   y

como ya dijimos antes, éstas dependen directamente del   entorno social.

DIFERENCIAS DEBIDO AL SEXO 

Así como no hay un factor biológico determinante en el comportamiento, tampoco

debería haberlo en determinación al sexo, y sin embargo, las personas

generalizamos, es decir, cuando se habla de niñas, se piensa en vestidos y

muñecas, y si hablamos de niños, en balones y coches. El error está, en que esto

no aplica siempre, y por lo tanto, no deberíamos atribuirlo al sexo, si no al carácter

de cada individuo. 

Sin embargo, la educación que damos a los niños y niñas, siempre es en función a

estas ideas preconcebidas, y aquí, entra nuevamente el término papel, ya que es

precisamente el rol que tenemos en la sociedad, lo que hace que las personas

esperen ciertos comportamientos de nosotros.

A pesar de esto, sí hay diferencias en cuanto a los medios en que se

desenvuelven hombres y mujeres, aunque como en todo, algunas veces hay

excepciones.

EL CLIMA Y LA GEOGRAFÍA

Este es otro factor que se ha analizado para

poder entender la conducta humana, sin embargo, yo creo que no es muy

determinante.

La idea de esto, es pensar que cuando las personas viven en un clima tropical, por

ejemplo, se comportan de manera muy diferente a las que viven en Alaska, porque

la vestimenta, las horas de comida y la conducta en general es distinta. 

Lo que pienso, es que mas bien las personas nos adaptamos al medio en que

vivimos, y esto es mas física que moralmente, por lo tanto, adoptamos costumbres

para sobrellevar el entorno, lo que no significa que este influya directamente en

ellas.

IV. CULTURA, SOCIEDAD E INDIVIDUO

SOCIOLOGÍA E INDIVIDUO: EL PROBLEMA

Como ya mencionamos antes, el humano es un ser social, y busca a sus

semejantes para lograr la supervivencia.

Al hablar de esto, es importante mencionar que en parte, es cierto que se ignora la

individualidad de los integrantes de una sociedad, pero el motivo, es que esta no

depende de ninguna persona en específico, sino de todo el grupo al que

pertenecen.

EL INDIVIDUO COMO PRODUCTO SOCIAL

Ya hablamos de las características biológicas y de las conductas adquiridas, ahora

entendamos porqué el individuo, tal como lo conocemos es como es. 

El llamar producto social a una persona, viene del hecho que precisamente somos

eso, el producto que ha creado la sociedad y el entorno en que nos

desenvolvemos, así pues, nuestro comportamiento está regulado directamente por

las normas y enseñanzas que nos son inculcados desde

el momento en que nacemos,   y varía en proporción a las distintas pautas de

conducta y costumbres que nos rodean.

PERSONALIDAD Y EXPERIENCIA SOCIAL

Ahora bien, ya hablamos de lo que determina el entorno, sin embargo, las

personas, como seres individuales, podemos manejar de diferente manera estas

enseñanzas, y eso es precisamente, lo que determina la personalidad de cada

uno.

Ciertamente, cada persona es diferente, y tiene una cultura diferente, pero ésta es

determinante en la formación de la personalidad en cada uno de nosotros; aunque

cada quien lo maneje de distinta manera, las personas que nos rodean, y las

enseñanzas que éstas nos ofrecen, así como la interacción entre los demás

miembros que componen la sociedad, modifica directamente el comportamiento

de cada unos de nosotros y por lo tanto, nos ofrecen las bases para la creación de

nuestra personalidad.   

LA EXPLICACIÓN SOCIOLÓGICA

En base a lo que hemos explicado en cuanto en que la conducta de las personas

depende del medio social, es posible encontrar explicaciones a ciertos hechos en

el comportamiento sin recurrir directamente a la psicología, precisamente porque

los actos no siempre provienen del interior, sino del aprendizaje.

Así pues, todo esto nos da las herramientas de predicción en los grupos, ya que

es de esperarse que aunque las personas sean por si mismas distintas, al haberse

desenvuelto en un medio similar, ya sea de clase social, educación o costumbres,

reaccionaran, casi

seguramente, de una manera muy similar ante situaciones específicas.

PERSONALIDAD Y CULTURA

Este subtema está directamente relacionado con lo que explicábamos antes:

Aunque la cultura y la sociedad establecen normas y procedimientos, no todas las

personas lo tomarás de la misma manera, y esto dependerá, precisamente, de la

personalidad de cada uno.

Es obvio que a pesar de que un tipo de educación cree un modelo más o menos

parecido de personas, y de una pauta para predecir ciertas reacciones, cada uno,

como seres individuales que somos, tendrá distintas maneras de afrontar las

situaciones.

La personalidad y la cultura se relacionan muy estrechamente e indudablemente la

primera es en mayor o menor medida, producto de la segunda.

LAS PERSPECTIVAS PSICOLÓGICAS Y SOCIOLÓGICAS

Es evidente que como hablamos tanto de las personas individualmente como de

su papel dentro de la sociedad, tengamos que emplear estas dos ciencias de una

u otra manera, ya que el individuo es parte y producto de la sociedad, y no puede

vivir fuera de ella, y por otro lado, la sociedad depende directamente de las partes

que la conforman, es decir, de las personas que viven dentro de ella.

Lo que cambia dentro de estas dos ciencias es el enfoque, es decir, la misma

situación, será estudiada por la psicología de manera muy distinta a la sociología,

ya que las dos persiguen fines que aunque complementarios, son distintos, y

tratan de explicar aspectos por demás diferentes.