informe de gobierno del estado de sinaloa 1986
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Informe de Gobierno del Estado de Sinaloa de Antonio Toledo Corro en 1986TRANSCRIPT
S I N A L O A
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SEXTO
INFORME
DE GOBIERNO
1986
C. ANTONIO TOLEDO CORRO,
Gobernador Constitucional del Estado de Sinaloa,
Culiacán, Sinaloa
15 DE NOVIEMBRE DE 1986
I N D I C E
PAG.
POLÍTICA GENERAL...............................................................................1
POLÍTICA HACENDARIA.......................................................................18
POLÍTICA DE INVERSIÓN PÚBLICA...................................................20
POLÍTICA ECONÓMICA.........................................................................25
POLÍTICA EDUCATIVA..........................................................................44
POLÍTICA AGRARIA...............................................................................58
POLÍTICA DE BIENESTAR SOCIAL.....................................................60
MENSAJE..................................................................................................69
HONORABLE CONGRESO DEL ESTADO
En cumplimiento al mandato de nuestra Constitución Política Local, vengo a rendir
al pueblo sinaloense, por conducto de vuestra representación, el Sexto y último Informe de
las tareas realizadas por el ejecutivo a mi cargo.
En el anexo estadístico que por separado hago llegar para que en su oportunidad sea
sujeto a minucioso análisis, aparece en detalle lo que aquí en forma generalizada se reseña.
Deseo hacer un paréntesis para expresar a todos los presentes, las más cumplidas
gracias por acompañarme en esta sesión solemne, principalmente a los ciudadanos
Diputados Federales y Senadores de la República que se encuentran con nosotros.
Reconocemos la asistencia a este recinto de quienes en su tiempo y bajo sus
circunstancias, cubrieron con honor esta misma responsabilidad, los señores ex-
gobernadores de Sinaloa.
De la misma forma, mucho nos estimula que se hayan servido estar con nosotros los
señores gobernadores de diversas entidades federativas, cuya presencia acredita la
colaboración y aprecio que en todo tiempo, cordialmente, nos dispensaron.
Resalto la presencia del abanderado de nuestro Instituto Político, el Partido
Revolucionario Institucional, electo para el cargo de Gobernador del Estado, y por tanto
legítimo representante del interés de las mayorías, como quedó claramente definido en las
pasadas elecciones, el ciudadano licenciado Francisco Labastida Ochoa.
Mucho nos honra tener entre nosotros, como digno representante del señor
Presidente de la República, al distinguido universitario, Guillermo Soberón Acevedo.
A su alta calidad profesional aúna su relevante desempeño en un área tan destacada
para el México de nuestro tiempo como es la Secretaría de Salud, en cuyo ejercicio ha
demostrado su invariable apoyo y simpatía por Sinaloa y los sinaloenses.
Solicitamos a usted, señor Secretario, exprese al Jefe de las Instituciones Nacionales
que los sinaloenses lo apoyamos, respetamos y estimamos y que, junto con él, hasta el
último día de nuestro mandato habremos de perseverar con los principios de la revolución y
con el imperativo de la ley en el elevado propósito de engrandecer a México.
Insoslayable resulta que el impulso de las transformaciones sociales acceda a los
ordenamientos jurídicos.
De ahí que, en el afán de perfeccionar el Estado de Derecho, por ser la legalidad
norma rectora de toda convivencia. Nos hicimos participes de una intensa promoción
legislativa para que al actualizar y renovar los ordenamientos, estos no se vieran rebasados
por los hechos, sino que, en todo caso, recogieran el interés que los nuevos tiempos y las
cambiantes circunstancias imponen.
Independientemente de las reformas sustanciales a nuestra Constitución Política del
Estado, en la vigencia de esta administración, remitimos como iniciativas y fueron
aprobadas por esa soberanía, entre otras, las siguientes leyes:
De educación; sobre operación y funcionamiento de establecimientos destinados a
la producción, distribución, venta y consumo de bebidas alcohólicas; del fondo impulsor de
Sinaloa, orgánicas de la administración pública del Estado y de la Procuraduría General de
Justicia.
De la Defensoría de Oficio; de sociedades mutualistas; del Fondo Auxiliar para la
Administración de Justicia; de Agua Potable y Alcantarillado; de los Trabajadores al
Servicio de los Municipios; del
Instituto de Vivienda y del Hospital Pediátrico y Orgánica Municipal.
Dentro de ese mismo renglón quedan comprendidas las Leyes de Obras Públicas; de
Organizaciones Agrícolas; Orgánica de la Universidad de Occidente; del Sistema para el
Desarrollo Integral de la Familia.
De la academia estatal de policía; de responsabilidades de los servidores públicos
estatales y municipales; de los Trabajadores al Servicio del Estado; de Seguridad Pública, y
los Códigos Penal y de procedimientos penales, vigentes a partir de hoy.
En 1981 se recogieron en tres tomos las leyes del Estado, vigentes hasta ese
entonces, con el fin de que tuvieran amplia publicidad y circulación.
A la fecha se han publicado en otros cinco tomos las leyes, reglamentos, acuerdos, y
reformas a los mismos, que se han expedido por las dos legislaturas que formaron parte de
este Honorable Congreso del Estado.
Esta legislatura, a iniciativa del ejecutivo, aprobó las reformas a la Constitución
Política del Estado y a las leyes procedentes, para fijar, por primera vez en una entidad
federativa, la obligación para el ejecutivo del estado y los ayuntamientos, de rendir
mensualmente las cuentas relativas al gasto público, medida que conlleva a asegurar una
revisión oportuna, minuciosa y confiable en el manejo de los fondos públicos.
Deseo dejar constancia de las magnificas relaciones, dentro del más absoluto
respeto y atención institucionales que siempre sostuvimos con este poder legislativo y con
el judicial, así como con todos los ayuntamientos de la entidad.
Reconozco también la coordinación y comprensión que hemos mantenido con las
diversas delegaciones y agencias de la administración pública federal, central o
descentralizada, que ejercen competencia en nuestro estado.
Con ello fortalecimos el proceso de descentralización de la vida nacional y dimos
vigencia plena al convenio único de desarrollo como instrumento de coordinación entre los
estados y la federación para ejecutar con eficiencia y oportunidad el plan nacional de
desarrollo.
Ante la patriótica labor que cubren, al preservar soberanía y seguridad nacionales,
así como el mantenimiento de la paz y orden sociales en lo interno, obliga el formal
reconocimiento y personal admiración por el desempeño que guardan los miembros de la
Novena Zona Militar y de la Octava Zona Naval Militar, con jurisdicción en el Estado.
Sus acreditadas acciones en actividades de orden social, se suman a la frontal lucha
contra la nociva actividad del narcotráfico, teniéndose en alta estima, que aún a riesgo de la
vida, se busque erradicar ese cáncer social.
Queda constancia que respaldamos todas las acciones tendientes a atacar tan ilícita
actividad. La moral social así lo requiere; nuestra conciencia ciudadana así lo plantea;
nuestra responsabilidad oficial así lo impone.
Mantuvimos cordial y permanente relación con los medios de comunicación de la
entidad, a quienes hago público reconocimiento por su activo concurso y la atención que
siempre nos otorgaron.
Los premios “Sinaloa de Periodismo”, que en nuestra gestión no sólo sostuvimos
sino acrecentamos, así como el trato respetuoso que otorgamos para quienes cumplen con la
responsabilidad de informar, son muestra absoluta de la consideración que los
comunicadores nos merecen, ya que en última instancia preferimos tolerar los excesos
propios de esa actividad, antes que siquiera pensar en vulnerar, en lo más mínimo, la
libertad de expresión.
El pueblo de Sinaloa cubrió el pasado 26 de octubre una jornada plena de civismo
que habrá de registrarse como clara muestra de una participación responsable y madura en
el hacer político de la entidad.
Bajo un marco pluripartidista al concurrir a ese proceso ocho organizaciones
políticas con registro nacional, los ciudadanos de la entidad, hombres y mujeres,
comparecieron a las urnas en un clima de absoluta paz pública y tranquilidad social.
No se registró ningún incidente que evitará a los electores de una sola sección
electoral emitir su sufragio, no obstante la elevada cantidad de casillas, 3 mil 653 que se
instalaron, suma que únicamente supera en la República el Distrito Federal.
Producto de una reforma política que ha enriquecido y que seguramente seguirá
nutriendo el comportamiento democrático del país y del Estado, se ofreció a los electores
sinaloenses diversas expectativas políticas, los que abrumadoramente definieron su sufragio
a favor de los candidatos y formular que aseguren el avance certero de una auténtica
transformación, no acabada pero tampoco detenida, que ha sido signo distintivo de los
gobiernos de la revolución.
Para el más amplio y cumplido desarrollo de esa contienda electoral, fueron puestos
a disposición de los organismos electorales los medios necesarios para que los comicios
tuviesen lugar, como así fue, con claridad, expeditez y pulcra honestidad que arrojarán no
otra cosa que la abierta, expresa y libre voluntad de los sinaloenses.
No podemos menos que congratularnos ante la evidente demostración de civismo de
miles de ciudadanos que con toda diligencia y entusiasmo cubrieron voluntariamente el
llamado para integrar los organismos de elección, para quienes así lo hicieron, en el
sentimiento del deber cumplido habrán de encontrar su más amplia satisfacción; a ello se
suma el abierto reconocimiento del Gobierno del Estado.
Los sinaloenses hemos mostrado al resto de los mexicanos que en la concordia y
madurez pueden alcanzarse plenamente los objetivos de una contienda electoral, deseando
por no tener razón política, justificación social, ni sustento legal, los irresponsables
llamados al desorden y a la violencia que inútilmente hacen los que perdieron.
JUSTICIA Y SEGURIDAD PÚBLICA
Mejorar el servicio de justicia fue preocupación permanente de mi gobierno, y hacia
esa relevante labor de la definición jurídica fue que no escatimamos recursos, ante los
respetuosos y atendibles planteamientos hechos por el Poder Judicial del Estado.
De esa suerte se amplió estructura y cobertura en algunos distritos judiciales y en
los ramos que más acentuadas necesidades presentaban.
Ahora contamos, además de los existentes en 1980, con juzgados de primera
instancia de lo familiar en Culiacán, Mazatlán y Ahome. Juzgado de primera instancia del
ramo penal en Salvador Alvarado; juzgado segundo del ramo penal en Ahome y juzgado
cuarto del ramo penal en Culiacán.
Al crearse el municipio de Navolato, fue necesario reformar la Ley Orgánica del
Poder Judicial del Estado para dar paso a la creación de ese distrito judicial, con el
consiguiente funcionamiento de un juzgado mixto de primera instancia.
Para otorgar a la impartición de justicia el sentido de expeditez que fija la norma
constitucional, se ha ampliado la planta de personal en diez juzgados de primera instancia
del ramo penal, destacándose la acción coordinada de la Procuraduría de Justicia y la
Defensoría de Oficio con el Poder Judicial del Estado, a efecto de alcanzar la conclusión de
los procesos en el menor tiempo posible.
Por considerar que una de las alternativas para mejorar el servicio de
administración de justicia es la especialización de la función, en la iniciativa de reformas a
la constitución local y aprobada por esta legislatura en el mes de febrero del pasado año,
quedó establecido que los magistrados suplentes del Supremo Tribunal de Justicia serán
electos de entre los jueces de primera instancia.
Con ello quedan sentadas las bases para promover el servicio judicial de carrera.
El fondo auxiliar para la administración de justicia instituido a través de su Ley
Orgánica de marzo de 1983 ha contribuido a mejorar, en cantidad y calidad, la
administración de justicia, y con recursos generados por dicho fondo, se ha dotado a las
oficinas del poder judicial de mobiliario, literatura jurídica y elementos de trabajo
necesarios para el cabal desempeño de la función.
A partir del mes de octubre del año inmediato transcurrido, viene funcionando el
instituto de capacitación judicial.
Al principio de mi mandato emprendí acciones tendientes a satisfacer las demandas
de la colectividad, llevando a la práctica una alianza para la justicia, que a la vez de
constituir un postulado de constante seguimiento de mi parte, estableciera un compromiso
solidario de pueblo y gobierno para prevenir la delincuencia y reprimir el delito de manera
más justa y eficiente.
Fiel a mis convicciones y dando validez a la palabra empeñada, a lo largo de esta
administración se han instrumentado y ejecutado programas tendientes a desahogar los
elevados requerimientos en la procuración de la justicia.
De la academia estatal de policía, creada a finales del año anterior, han egresado dos
generaciones de agentes en sus modalidades de preventivo, judicial y de tránsito, y con
fecha 2 de septiembre se inició el tercer curso básico de formación policial, con una
captación de 289 alumnos.
La institución del ministerio público depositaría del interés de la sociedad, ha
merecido atención preferente en este sexenio, habiéndose ampliado su cobertura a efecto de
vigilar el principio de legalidad en los juicios de orden civil y especialmente tutelar los
derechos de menores, incapacitados y los del Estado.
Han sido impartidos cursos para agentes del ministerio público sobre temas
relativos a su actividad, que buscan enriquecer conocimientos y uniformar criterios, para un
mejor desempeño de su delicada tarea.
Reconocemos la incidencia de hechos delictuosos, principalmente los cometidos
contra la vida e integridad corporal de las personas y detrimento de su patrimonio; sin
pretender que sea justificación, cabe apuntar como causa generadora del incremento al
índice criminal, otra figura delictiva, el narcotráfico, empresa criminal que hace emerger
otra secuela de delitos.
De ahí que por indicaciones del ejecutivo a mi cargo, la Procuraduría General de
Justicia haya adoptado diversas medidas de política criminal, a corto, mediano y largo
plazo que buscan hacer decrecer la curva de la criminalidad en su aspecto genérico, y en
particular de los delitos de homicidio, lesiones y robo.
Consignó a ese propósito la campaña de despistolización, la campaña contra el vicio
y la cooperación y auxilio que se brinda a las autoridades federales competentes en su
combate contra el narcotráfico.
En el presente año, las policías municipales de Culiacán, Navolato, Mazatlán,
Guasave, Ahome y Salvador Alvarado, incorporaron 105 patrullas con costo de 406
millones 500 mil pesos y mediante una inversión de 56 millones de pesos la Policía Judicial
del Estado fue dotada de 13 unidades automotrices, que sumadas a las ya existentes,
permiten una mejor movilización y mayor penetración de esas corporaciones.
Se impusieron en forma obligatoria para la Policía Judicial del Estado, colores
oficiales para su plena identificación, tanto a los uniformes que portan los agentes como a
las unidades motrices de patrullaje.
A través de una erogación superior a los 120 millones de pesos, se adquirió
armamento moderno y adecuado, que permitiera a la Policía Judicial cumplir sus
atribuciones con mayor eficacia.
Entendido el delito como fenómeno social, que sea la acción conjunta y coordinada
de pueblo y gobierno, la que marque derroteros para disminuir sus incidencias y en su caso,
hacer más efectivo su castigo.
El cuerpo de defensores de oficio encuentra su justificación social brindando de
manera gratuita asesoría jurídica en materia penal, con personal adscrito a la policía judicial,
agencias del ministerio público, Juzgados de Primera Instancia y Supremo Tribunal de
Justicia.
El estado ofrece una defensa adecuada y oportuna a los que habiendo delinquido
carecen de recursos para contratar abogados particulares, confianza ciudadana en esta noble
institución que ha ido en incremento bajo el acreditado hecho de que en esta administración
fueron atendidos aproximadamente 14 mil casos.
Por otra, destaca la reforma a que se vio sujeta la Ley de Administración de Justicia
fiscal a efecto de que ésta tenga acceso hasta la base misma de la división territorial,
política y administrativa del Estado, que representa el municipio.
Por indicaciones del Ejecutivo del Estado, el archivo general de notarías ha
practicado una minuciosa revisión a las notarías públicas, para verificar que su actuación se
ajuste a las disposiciones legales. Como inmediato resultado de esa tarea se logró la entrega
de 125 protocolos y 500 apéndices, para su guarda definitiva.
En los casos en que se detectaron faltas leves, se impusieron correctivos a los
notarios públicos, pero en tratándose de irregularidades graves se llegó a la clausura de las
notarías, considerando que es deber del estado garantizar a la población el correcto
funcionamiento de este servicio que el ejecutivo delega en profesionales del derecho, cuya
actuación jamas debe apartarse de sus cauces.
REGISTRO CIVIL
A partir de 1981 se procedió a la modernización del Registro Civil en la entidad,
para lo cual se celebró convenio con la Secretaría de Gobernación que permitió asentar con
una nueva técnica todos sus actos, con el consiguiente desplazamiento del sistema
manuscrito utilizado desde siempre.
Con la entrada en vigor del reglamento del Registro Civil expedido en 1982, se
abrevió el proceso de deriva en la corrección de errores ortográficos y mecanográficos que
no afecten las partes esenciales del acto registrado, dando paso con ello, con amplios
beneficios para nuestra comunidad, a la simplificación administrativa.
Los derechos que se generan por la prestación de este servicio público, no fueron
alterados durante el sexenio, y son los más bajos en toda la república. Así lo mantuvimos
considerando el valor social de esta actividad.
Idéntica política de costo mínimo se observó en lo que concierne al Periódico
Oficial “El Estado de Sinaloa”, para propiciar que la información a que este se refiere,
llegue sin graves cargas, a todas las capas sociales.
POBLACIÓN
Conocer la realidad demográfica que impone el actual Desarrollo Socio-Económico
de Sinaloa fue el propósito que nos guió al concertar acuerdo de coordinación con la
federación para instalar en marzo de 1984 el Consejo Estatal de Población.
Los avances en el campo de la Educación y la Salud propiciaron en la década 1960-
1970 un crecimiento poblacional que alcanzó una tasa del 4.21 por ciento anual.
Merced a la instrumentación de esfuerzos de las instancias federal y estatal para
controlar la anterior tendencia, se puede afirmar que en el período que comprende esta
administración la tasa anual descendió al 2.64 por ciento.
La distribución de la población en el territorio del estado presentaba una tendencia
concentradora hacia la capital, propiciando un crecimiento demográfico superior a su
capacidad, para atender la demanda de servicios y empleos.
Ello hizo necesario que las opciones de trabajo se ampliarán hacia otros polos,
destino de las corrientes migratorias internas y atenuar así el fenómeno a que se veía sujeto
el municipio de Culiacán.
Dentro del programa demográfico señalado, se establecieron cuatro sistemas de
ciudades, que por su categoría de atracción representan una infraestructura existente y
capacidad productiva apropiadas para ofertar posibilidades de trabajo y condiciones de vida,
como son Los Mochis, Guasave, Culiacán y Mazatlán.
TRÁNSITO Y TRANSPORTES
En la presente administración fueron autorizados 2 mil 700 vehículos de servicio
público, lo que representa un incremento de un 28 por ciento en relación a la oferta
existente en el año de 1981.
Por otra parte, a efecto de evitar la acumulación y monopolio de permisos, fue
reformada la Ley de Tránsito y Transportes de tal manera que una persona física solo puede
ser tenedora de un permiso.
De los 10 mil vehículos autorizados de servicio público para satisfacer las demandas
de pasaje y carga, el 28 por ciento fueron otorgados durante la presente administración.
Esto permitió mantener no solo un equilibrio entre la oferta y la demanda, sino
también entre los sectores transportistas que lo prestan, ya que de los 7 mil 300 permisos
que existían en enero de 1981, un 65 por ciento correspondían al sector obrero, un 25 por
ciento al cenopista y el restante a permisionarios libres.
Con el otorgamiento de 800 permisos tanto para la CTM como para la CNOP y mil
100 para la CNC, se establece una mayor equidad y especialmente se da oportunidad para
que los ejidatarios poseedores de unidades, puedan transportar tanto a los trabajadores del
campo como a sus propios productos, con el consiguiente ahorro familiar y un ingreso
mayor para mejorar sus condiciones de vida.
Se elaboraron 66 estudios y 45 proyectos geométricos de vialidad para diferentes
localidades, complementándose con la instalación de 11 mil señales y 360 kilómetros de
marcas en el pavimento.
A esta dirección se le dotó de más locales y se le otorgaron los elementos necesarios
para desahogar rezagos que venía padeciendo, implementando a la vez, diversas medidas
acordes a la simplificación administrativa para el registro y control de los automotores,
mediante programas de computación, padrón de vehículos y expedición de licencias de
conducir, todo en beneficio de los automovilistas.
JUSTICIA LABORAL
Ha sido propósito de este régimen encauzar la aportación de la fuerza de trabajo y el
riesgo de capital, que los sectores de la producción hacen concurrir hacia los centros
laborales, para generar al trabajador una justa remuneración por su esfuerzo y al patrón una
razonable ganancia por su inversión.
La acción tutelar y vigilante del Estado, se ha ejercido eficazmente mediante la
práctica durante el sexenio, de más de 60 mil inspecciones
laborales.
En coordinación con los Institutos Mexicanos del Seguro Social y del Fondo
Nacional de la Vivienda, se han tramitado las quejas que formulan los trabajadores en
relación a violaciones a los derechos de seguridad social y vivienda, habiéndose
incorporado a dichos beneficios, a través de este procedimientos, a más de 6 mil
trabajadores, durante esta administración.
La Procuraduría de la Defensa del Trabajo no se ha apartado de la función social
que se le fijó, al brindar asesoría gratuita a Sindicatos Obreros y Trabajadores. Por otra
parte, con el apoyo de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social fueron ejercidos
programas de becas de capacitación en beneficio de mil 500 trabajadores.
Se puso en práctica la descentralización en la administración de la justicia laboral,
para que los trabajadores en su misma jurisdicción vieran resueltos sus conflictos
individuales, medida que a la vez que propicia el ahorro de recursos, propende al
cumplimiento del principio constitucional de la expeditez en la justicia.
En este marco entraron en operación en enero de 1984 las juntas especiales de
conciliación y arbitraje en Mazatlán, Guasave y Los Mochis.
En mayo de 1983 instituimos el premio estatal al merito laboral para estimular a la
clase obrera en aquellos trabajadores que se distingan por su antigüedad, asistencia y
productividad en el trabajo.
La conciliación sigue siendo la premisa de actuación en los órganos jurisdiccionales
del trabajo, lo que arrojó como resultado, que de 8 mil 500 demandas presentadas durante
los últimos seis años, el 60 por ciento hayan sido finiquitadas a través de esta vía.
Con el mayor escrúpulo se han respetado los principios de autonomía, asociación
sindical y el derecho de huelga, en cuyo contexto, todos, absolutamente todos los conflictos
han sido resueltos dentro de los cauces legales; nunca bajo consigna o aviesa parcialidad,
sea cual fuere la naturaleza de las partes en conflicto.
Durante los últimos seis años, la Junta Local de Conciliación y Arbitraje otorgo
registro a 20 nuevos sindicatos adheridos a la federación de trabajadores de Sinaloa, con lo
que otros mil 280 trabajadores se incorporaron a las filas sindicalistas.
En algunos casos, la autoridad laboral se ha concretado a recibir el depósito de
contratos colectivos por estar celebrados conforme a la Ley Federal del Trabajo, en virtud
de que los sindicatos que los suscribieron, son de carácter nacional y cuentan con registro
legalmente otorgado por la instancia federal.
Prueba esta recta administración de justicia, y la colaboración de los sectores para
dirimir los conflictos, que de los 3 mil 341 emplazamientos a huelga que se tramitaron
durante mi gestión, sólo estallaron 23, lo que representa menos del uno por ciento de ese
total.
Por esta muestra de solidaria responsabilidad, reconozco y agradezco la calificada y
madura actitud asumida por los factores de la producción.
Durante este sexenio se han otorgado a los trabajadores burócratas, diversos
incrementos salariales, de tal manera que la categoría menos remunerada en diciembre de
1980 de 6 mil 130 pesos mensuales, alcance hoy 74 mil 330 pesos; lo anterior refleja un
incremento del 854 por ciento en el período que cubre esta administración.
En este último año, los Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado fueron
objeto de tres diversos incrementos salariales, y en el convenio suscrito en septiembre
pasado, fue factible atender una de las más sentidas demandas de las mujeres burócratas: su
jubilación a los 25 años de prestación de servicios.
Al Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado, con cuyos directivos mi
administración no encontró ningún punto de divergencia u obstáculo que no pudiera
salvarse por las vías del entendimiento y la buena fe, le expreso mi reconocimiento y afecto
por su esfuerzo y empeño aportados al mejor cumplimiento de los fines de la
administración estatal.
CONTRALORÍA GENERAL DEL PODER EJECUTIVO
Como producto del proceso de modernización de la administración pública estatal,
es creada mediante decreto del 19 de julio de 1984 la contraloría general del poder
ejecutivo, entidad responsable de planear, organizar y coordinar el sistema estatal de
control en todas las instancias de operación y decisión administrativa.
Su funcionamiento permitió realizar frecuentes visitas a oficinas encargadas de la
recaudación de ingresos; fiscalizar mil 147 obras; revisar la cuenta pública, practicar 35
auditorías; recibir mil 203 declaraciones de situación patrimonial e intervenir en 423
concursos para verificar la legalidad en el proceso de adjudicación.
Como titular del Poder Ejecutivo del Estado, demande de mis colaboradores
honestidad en el desempeño de sus funciones, un escrupuloso manejo de los recursos y una
objetiva y vertical aplicación de los mismos; a través de la contraloría nos exigimos
alcanzar esos propósitos y a su acción revisora soy el primero en someterme.
POLÍTICA HACENDARIA
Nuestra política hacendaria estuvo orientada a la solución de los más urgentes
problemas sociales, buscando el equilibrio entre el ingreso proveniente de una creciente
equidad fiscal, y una aplicación racional de los recursos financieros disponibles.
Bajo el impulso del pacto federal, en el sexenio establecimos el marco normativo
para una política fiscal orientada a cumplir con los compromisos concertados según
convenio de adhesión al sistema nacional de coordinación fiscal.
En esta gestión de gobierno los ingresos públicos totales crecieron de 5 mil 300
millones de pesos en 1981, a 64 mil millones en el presente año.
Con el propósito de alcanzar una mejor redistribución del ingreso, fueron derogados
y suspendidos algunos gravámenes en beneficio de la población sinaloense, dentro de los
cuales destacan por su impacto social, el impuesto sobre productos de capital, el impuesto
estatal a la remuneración del trabajo personal y los derechos relacionados con el registro de
vehículos para el transporte de ganado.
Del mismo modo promovimos las adecuaciones legislativas necesarias para realizar,
en tiempo y forma, el traspaso de los impuesto relacionados con la propiedad raíz y de la
adquisición de bienes inmuebles a los municipios de la entidad, con el claro propósito de
fortalecer las haciendas municipales y cumplir con una disposición constitucional que
encuentra inspiración en la vocación municipalista del Presidente Miguel de la Madrid.
El nivel de justicia recaudatoria alcanzado, hizo factible que en Sinaloa las
participaciones federales hayan registrado un crecimiento dentro del total de sus ingresos,
ya que de representar el 62.5 por ciento en 1981, este índice equivale al 83 por ciento para
este año.
En materia de gasto público, modificamos la política económica persiguiendo una
racional aplicación de los recursos financieros en la redistribución del ingreso, la
normatividad se centró en el realismo financiero, la austeridad y transparencia en su manejo,
la flexibilidad presupuestal programada, y su orientación en apoyo al fortalecimiento
municipal y al desarrollo Socio-Económico Regional.
Los adeudos contraídos por el régimen anterior, cuyo monto a enero de 1981
alcanzó la suma de 5 mil 200 millones de pesos, fueron totalmente liquidados en estos seis
años.
Con imaginación, creatividad, esfuerzo y una concertación planeada y ejecutada en
el corto plazo, en el primer año logramos restituir la capacidad financiera, para el desarrollo
de la administración pública.
Cualquier acción en contrario hubiese sido de graves consecuencias, ya que los
ingresos obtenidos en 1981 equivalían al total de los compromisos de término inmediato
posterior contraídos por la anterior administración.
De esa experiencia aprendimos, y se tomaron determinaciones, para que durante
este sexenio la deuda pública contraída no rebasará los límites de nuestra capacidad de pago,
no haberlo hecho así, hubiese significado maniatar las posibilidades, alternativas y
propósitos del nuevo gobierno.
Dejamos una hacienda pública totalmente saneada, una administración hacendaria
eficiente, un sólido patrimonio y la posibilidad real de un nivel de ingresos superior a los
100 mil millones de pesos para 1987.
POLÍTICA DE INVERSIÓN PÚBLICA
La inversión pública constituye, sin lugar a dudas, uno de los mecanismos más
efectivos para dar orientación al desarrollo.
Durante mi mandato se invirtieron 305 mil 104 millones de pesos, que fueron
canalizados principalmente a las actividades productivas y a los programas de apoyo a la
producción sin descuidar la atención de las necesidades de carácter social.
Del total de la inversión, un 74 por ciento corresponde al programa normal, es decir,
al que realiza el Gobierno Federal en el Estado a través de sus dependencias; el 15 por
ciento es la inversión estatal directa y el 11 por ciento restante procede del convenio único
de desarrollo.
Además, con el apoyo crediticio de banobras, se aplicaron 11 mil 968 millones de
pesos para obras de amplio beneficio social como agua potable, alcantarillado y
pavimentación.
De la inversión del programa normal, la Secretaría de Agricultura y Recursos
Hidráulicos, canalizó 85 mil millones de pesos al desarrollo de la infraestructura hidráulica
en la entidad, para diversas obras de riego que benefician a 69 mil 900 hectáreas.
Así se explica el incremento de la superficie de riego de 602 mil 800 hectáreas que
había en 1980, a 672 mil 700 hectáreas a la fecha, las que aunadas a las 622 mil hectáreas
de temporal con que contamos en 1986, nos permitieron alcanzar niveles sin precedente en
la producción agrícola.
A fin de contar con la infraestructura física necesaria para la eficiente prestación de
los servicios en los diversos niveles educativos, se construyeron durante los últimos 6 años,
4 mil 152 aulas, 187 laboratorios, 373 talleres y 4 mil 360 anexos para usos diversos.
Lo anterior significó una erogación que ascendió a 16 mil millones de pesos y en la
que concurrieron recursos federales ejercidos a través de CAPFCE y del convenio único de
desarrollo e inversión estatal directa.
Solo a través de una red de vías de comunicación adecuadas se puede aprovechar
racionalmente el potencial de las distintas regiones que conforman el Estado.
En 1980, Sinaloa contaba con 8 mil 942 kilómetros de carreteras; en la actualidad,
suman 10 mil 283 kilómetros que representan el 4.6 por ciento del total existente en el país.
Lo anterior es significativo, si consideramos que tenemos apenas el 3 por ciento de
la superficie del territorio nacional y el 2.8 por ciento de su población.
Otro indicador que refleja la mejoría relativa del estado en ese renglón, se funda en
la circunstancia de que Sinaloa cuenta con 177 metros de carretera por kilómetro cuadrado,
mientras que el promedio para el país es de 123.
Estos indudables avances, si bien no significan que el estado tenga resueltos sus
requerimientos en la infraestructura de caminos, cuyo mantenimiento es preciso fortalecer,
si expresan un sensible adelanto en el propósito de integrar a los sinaloenses entre sí, y a la
entidad a las exigencias futuras de la región y del país.
Las demandas relativas a la introducción, ampliación y rehabilitación de los
sistemas de agua potable constituyeron parte fundamental del reclamo de la población, en
respuesta construimos y habilitamos 251 sistemas, es decir, casi un 50 por ciento más de los
existentes en 1980.
De manera análoga, sólo el 26 por ciento de la población disponía del servicio de
alcantarillado. En el presente año, la población servida será de 48 de cada 100 habitantes.
Contar con el servicio de electrificación, vino a configurar otra de las más
insistentes peticiones de la población; de tal modo que actualmente 865 de cada mil
sinaloenses, gozan de este servicio en mil 329 comunidades.
Además, en coordinación con la Comisión Federal de Electricidad, se procedió a
electrificar 74 colonias populares en los principales centros urbanos de la entidad.
Ante las gestiones que en nombre de las clases menos protegidas de la entidad
hiciera el licenciado Francisco Labastida Ochoa el pasado mes de octubre, el Gobierno del
Estado acordó aportar el 25 por ciento del costo del consumo doméstico por los primeros
mil kilowats mensuales, rubro en el que queda comprendido el 70 por ciento del padrón de
uso doméstico.
Esta medida tiene efecto para los meses de agosto, septiembre y octubre, tiende a
proteger el gasto familiar, el poder adquisitivo del salario y es expresión de solidaridad y
respuesta al compromiso de un gobierno que hace suyas las más apremiantes necesidades
de los grupos populares.
La calidad de la infraestructura vial en las ciudades, es requisito esencial para un
sano proceso de urbanización.
Atendiendo a la población de escasos recursos, principalmente en colonias
populares de Ahome, Guasave, Guamúchil, Culiacán, Navolato, Mazatlán y Escuinapa,
hemos construido 5 millones 881 mil metros cuadrados de revestimiento de calles; 472 mil
de empedrado; 271 mil de pavimento; 110 mil de banquetas y 163 mil metros lineales de
guarniciones de concreto.
Otras obras que pueden subrayarse por su proyección son la construcción del ramal
ferroviario estación Naranjo-Guasave y la construcción de 3 aeropistas en Guamúchil,
Teacapan y Bacubirito.
También son de mencionarse la realización de proyectos pesqueros y agropecuarios;
la construcción del edificio DIF en Concordia, el edificio de la Policía Judicial del Estado,
la ampliación de las carreteras Mochis-Ahome-Cohuibampo y Sinaloa de Leyva-Ocoroni y
Puente de Cohuibampo.
En Culiacán se construyeron los puentes Zapata, Villa Morelos, Buelna, Peatonal en
la Calzada Heroico Colegio Militar, el centro denominado Pirámide de la Cultura y se
encuentra en construcción el Jardín Botánico con la urbanización de 42 hectáreas aledañas.
En Mazatlán el paso superior sobre la Avenida Gabriel Leyva, en la salida sur, y en
colaboración con el ayuntamiento el puente del infiernillo, dos edificios del sistema DIF y
se realiza la ampliación de la avenida Rafael Buelna a 5 carriles que conecta la Avenida del
Mar con la carretera Internacional a la salida norte del puerto.
Se terminaron el puente de Baroten sobre el Río Fuerte y el Bordo de Contención
con obra regulada en Agua Verde, Rosario.
Resaltó por su trascendencia la edificación en Los Mochis, de 36 aulas, 6
laboratorios de usos múltiples, 21 anexos y obra exterior para la Universidad de Occidente;
se encuentra en construcción el centro Difocur y la tienda del ISSSTE.
En suma, vale decir que la política de inversión pública de esta administración, se
orientó a sentar las bases para armonizar el crecimiento económico con el progreso social
de las distintas zonas de la entidad.
CARRETERA COSTERA “PLAN MAR DE CORTES”
La carretera federal número 15 fue proyectada a partir de la década de los 40, con
dos carriles de circulación, para tránsito de 5 mil vehículos por día y con peso máximo por
unidad de 8 toneladas.
En la actualidad circulan por ella hasta 17 mil vehículos por día, algunos de más de
60 toneladas, excediendo en mucho las especificaciones iniciales y provocando su
constante deterioro.
Imperativos de esa naturaleza alentaron al Gobierno del Estado para que, como un
tangible respaldo a la iniciativa del Presidente de México, en relación al programa de la
zona de Mar de Cortes, se construyeran la carretera costera, en busca del transporte seguro
de las personas, de la creciente producción agrícola, industrial y pesquera y de la
integración económica regional.
La primera etapa del proyecto de la carretera costera “Plan Mar de Cortes”, con una
longitud de 125 kilómetros entre el poblado “Las Brisas” y esta ciudad capital, ha sido
concluida.
Con la ampliación a 4 carriles del tramo Las Brisas-Guasave por el Gobierno
Federal quedó establecida una arteria directa, de cuatro carriles, con una extensión de 212
kilómetros de Los Mochis a Culiacán.
Con la finalidad de que la carretera costera cumpliera mejor con su cometido y se
obtuviera su máximo aprovechamiento, sumamos esfuerzos el Gobierno Federal y del
Estado, y se realizó el libramiento vial al sur de la ciudad de Culiacán con una longitud de 9
kilómetros.
Este libramiento permite desahogar el tránsito de largo itinerario al unir la carretera
costera con la carretera internacional, librándose a Culiacán, principal centro urbano de la
entidad, de los graves trastornos que le ocasionaba el intenso tránsito que recorría de
extremo a extremo de la ciudad.
Para ligar el tránsito de la carretera costera con la ciudad de Culiacán, Eldorado y la
carretera internacional sin intersecciones, se construyó un Trébol distribuidor de tránsito y
se amplió a 6 carriles el tramo entre este y la carretera a Navolato y a 4 carriles entre el
Trébol y el Piggy Back.
De esa suerte, la carretera costera sirve a medio Sinaloa, tanto en territorio como en
población, pues además de atravesar los productivos valles agrícolas de El Fuerte, Guasave,
Evora y Culiacán, intercomunica a 6 cabeceras municipales como son Los Mochis,
Guasave, Guamúchil, Angostura, Navolato y Culiacán.
Lo realizado hasta ahora es claro testimonio de la voluntad participativa, firme
decisión y capacidad de trabajo y organización de los sinaloenses, sin cuyo indeclinable
afán por el progreso, esta obra no hubiera sido posible.
Para su construcción fue preciso instalar 5 plantas de concreto hidráulico, dos
plantas para producir concreto asfáltico, 5 plantas de producción de agregados pétreos y
una planta de fabricación de vigas preesforzadas, la que por su dimensión es en la
actualidad la más grande del país.
La capacidad productiva de las mencionadas plantas, así como la maquinaria
utilizada en la obra, constituyen un enorme recurso para apoyar la infraestructura vial de
Sinaloa y el desarrollo urbano de los municipios de la entidad.
POLÍTICA ECONÓMICA
El rumbo y la estructura de la economía sinaloense descansan en la fortaleza de
nuestras actividades primarias. Sin embargo, no obstante tener un menor peso relativo en
cuanto a generación del producto, debe reconocerse que el desenvolvimiento del sector
agropecuario influye decisivamente en el resto de la economía.
Esta vocación primaria, vinculada con la producción de alimentos, es precisamente
lo que ha contribuido a que resintamos en menor medida la crisis que padece el país, por lo
que, como lo hemos demostrado históricamente, nuestra capacidad para crecer sigue siendo
mayor que la de la economía nacional.
PROGRAMA NACIONAL ALIMENTARIO
De 1975 a 1980 la producción conjunta de la agricultura, la ganadería y la pesca fue
de 39 millones 103 mil toneladas; durante estos últimos seis años la hemos ascendido a 46
millones 546 mil toneladas.
En lo que se refiere a producción de alimentos básicos industrializados, en 1980 fue
de un millón 200 mil toneladas; para 1986, estimamos un volumen equivalente a un millón
580 mil toneladas, lo que significa un incremento del 31 por ciento.
Esto es resultado de la concertación y coordinación de acciones de los sectores
público, privado y social, en la consecución de las metas del programa nacional alimentario.
Es también origen del trabajo responsable que han aplicado oportunamente nuestros
hombres del campo, pescadores e industriales, que con imaginación y voluntad, han
optimizado el aprovechamiento de la infraestructura hidráulica, caminera, eléctrica,
educativa, crediticia y de
servicios, que los gobiernos de la revolución han puesto en sus manos.
Una vez más, reafirmo que la producción de alimentos constituye una tarea superior
de los sinaloenses y de su gobierno.
De ahí que siga de manifiesta nuestra solidaridad con el objetivo nacional de la
autosuficiencia alimentaria en el que habremos de perseverar, para fortalecer, como lo
plantea el presidente de los mexicanos, soberanía e independencia.
AGRICULTURA
Durante el sexenio, la producción agrícola alcanzó un volumen de 44 millones de
toneladas, con un promedio anual de 7 millones 300 mil, en tanto que antes de 1981 el
promedio anual de producción fue de 6 millones 100 mil toneladas.
En arroz, la producción se ajustó a la disponibilidad del agua. El promedio anual de
superficie sembrada alcanzó en los últimos seis años 63 mil hectáreas, lo que permitió una
producción promedio anual de 248 mil toneladas, que son más altas con respecto al período
75-80, cuyos promedios fueron de 54 mil hectáreas y 211 mil toneladas.
La producción de frijol, por ser producto básico, se ha estimulado constantemente,
durante los últimos seis años se sembró un promedio anual de 108 mil hectáreas, lo que
permitió una producción promedio anual de 125 mil toneladas, que significa un incremento
del 45 por ciento con respecto al período 75-80.
Para el ciclo 86-87 se programó la siembra de 150 mil hectáreas, de las que se
obtendrán casi 200 mil toneladas, lo que significará un 220 por ciento de incremento, en
relación a la producción de 1980.
En soya y trigo, el año pasado logramos las producciones más altas de la historia,
con 470 mil y un millón 205 mil toneladas, respectivamente. La producción promedio anual
obtenida durante mi mandato para estos productos, es de 373 mil toneladas de soya y 813
mil de trigo, que resultan significativamente más altas que los promedios de 75-80 en que
obtuvieron 220 mil en soya y 340 mil en trigo.
En caña de azúcar, por los efectos del ciclón “Waldo” de 1985, la producción se
redujo en el presente ciclo, a 3 millones 131 mil toneladas.
Con los proyectos hidráulicos en construcción, a mediano y corto plazo
dispondremos de 856 mil hectáreas de riego, ya que la Secretaría de Agricultura y Recursos
Hidráulicos ejerció inversiones del orden de 117 mil millones de pesos en este sexenio.
Dentro de las inversiones en infraestructura hidráulica realizadas en nuestro
mandato por el Gobierno de la República, destacan los siguientes proyectos: Fuerte-Mayo,
Río Sinaloa, Río San Lorenzo y Ocoroni, y se iniciaron los proyectos Presidio-Baluarte y
Piaxtla-Elota.
Tomando en cuenta las obras anteriores, la Secretaría de Agricultura y Recursos
Hidráulicos ejecutó obras de riego en esta administración, para incorporar 69 mil 900
hectáreas, y a través de los programas de conservación y rehabilitación, se rescataron 16
mil 400.
Se ha programado iniciar a fines de este año, la presa “Huites”, de la que me permití
informar el año inmediato anterior, con financiamiento conjunto de los gobiernos federal y
estatales de Sonora y Sinaloa, proyectándose irrigar 70 mil hectáreas de ambas entidades y
consolidar el riego de segundos cultivos en los valles de el Fuerte y el Carrizo, además de
generar energía eléctrica en un equivalente a 350 megawats.
El crédito canalizado a través del Banco Nacional de Crédito Rural, de las
sociedades nacionales de crédito y de los Fondos de Fomento del Gobierno Federal, ha sido
también fundamental para nuestro desarrollo agrícola.
Solo en 1986 se otorgaron 113 mil 857 millones de pesos en créditos de avío y 10
mil 740 millones en créditos refaccionarios a la agricultura. Durante la presente
administración, 3 millones 350 mil hectáreas contaron con crédito.
Por lo que se refiere al sistema Banrural, es digna de mención la ampliación de su
cobertura crediticia en el término de esta administración. Mientras que en 1980 habilitó 416
mil 916 hectáreas, las perspectivas indican que en 1986 cubrirá 678 mil 240; casi el 50 por
ciento del área sembrada, tanto de riego como de temporal, para beneficio de 107 mil
campesinos.
Es así como esta institución, congruente con su objetivo social, fortaleció el apoyo
al sector rural más marginado, para dar mayor sentido y proyección a la política de
desarrollo rural integral que implementa el gobierno de la república.
A ello obedece que el sistema Banrural, en el período 81-86 haya duplicado la
superficie habilitada y el número de campesinos beneficiados con los créditos.
Por su parte, el Gobierno del Estado realizó esfuerzos para allegar recursos
financieros a aquellos grupos de agricultores temporaleros, productores de maíz, que no
eran atendidos con créditos institucionales.
Durante los últimos cinco ciclos se les habilitó 109 mil hectáreas de maíz,
habiéndoles otorgado en forma directa créditos por mil 186 millones de pesos,
redescontados por fira a través de la banca de primer piso.
En la zona temporalera, el organismo descentralizado “Desarrollo productivo de los
distritos de temporal”, deprodit, atendió 64 unidades hortícolas con una superficie de 7 mil
hectáreas que dieron ocupación a 5 mil jefes de familia, mediante la generación de un
millón 50 mil jornales de trabajo.
De 81 a 86, la aseguradora nacional agrícola y ganadera protegió a 4 millones 800
mil hectáreas.
Ante la necesidad de abatir el déficit de semilla certificada en la entidad, creamos la
descentralizada “Productora de Semillas de Sinaloa”, para complementar la demanda y
eliminar prácticas de especulación, que lamentablemente aún se presentan.
Prosesin inició sus operaciones en 1983 distribuyendo 4 mil toneladas de semillas
certificadas y para 1986 alcanzará 10 mil toneladas aproximadamente.
Para regular el abasto oportuno y suficiente de fertilizantes, mi gobierno creó la
empresa “Fertilizantes e Insumos Agrícolas de Sinaloa”, misma que ha conquistado un bien
ganado reconocimiento de ejidatarios y pequeños propietarios, por el oportuno suministro y
distribución de éste insumo.
Cabe destacar que gracias al apoyo de FERTIMEX, logramos impulsar el uso de
fertilizantes en este año a 346 mil toneladas; 2.5 veces más en relación a 1981.
La mecanización agrícola ha alcanzado un crecimiento del 51 por ciento en el
presente sexenio. En 1981 existían 10 mil 100 tractores, contra 15 mil 250 en la actualidad.
Las cosechadoras han elevado su número en 114 por ciento, pasando de 970 en 1980 a 2
mil 63 en este año.
Con los anteriores elementos dinamizadores del desarrollo rural de la entidad,
principalmente la apertura de nuevas áreas de riego por gravedad y diversas acciones
promovidas por los interesados y los gobiernos federal y estatal, hemos logrado éxitos
satisfactorios en la producción agrícola, tanto por su monto como por tratarse de productos
básicos, esenciales para el consumo de las mayorías.
En resumen, afirmamos que nuestra política de fomento agrícola ha tenido a los
objetivos prioritarios de llevar más alimento a los mexicanos, generar divisas para nuestro
desarrollo y brindar ocupación a los sinaloenses y a más de cien mil mexicanos que año con
año vienen de otras entidades del país a encontrar temporal sustento en nuestra tierra.
GANADERÍA
Durante mi campaña política manifesté que en materia de producción ganadera
ibamos a cuantificar lo que teníamos, lo que debíamos hacer y hasta donde podíamos llegar.
Convoqué a los ganaderos del Estado con el fin de lograr una ganadería tecnificada,
y anuncie que pondríamos en práctica medidas para impactar directamente en la calidad de
nuestro ganado, mejorando su productividad y su progenie.
Hoy podemos informar que la ganadería ha tenido sustancial avance en sus aspectos
relevantes.
Mientras que en 1980 el valor de la producción pecuaria escasamente llegaba a los 5
mil millones de pesos, para este año sobrepasará la cifra de 150 mil millones.
En bovinos, de un millón de cabezas en 1980, se llegó a un millón 400 mil en 1986,
lo que representa un incremento total del 40 por ciento y del 7 por ciento anual en el
período; de 22 mil 732 toneladas de producción de carne de res en 1980, logramos 38 mil
654 para este año, lo que significa un 70 por ciento de aumento.
Los programas puestos en marcha originaron que de un déficit del 15 por ciento en
los requerimientos de carne de bovino en 1980, para este año tendremos un superávit del 14
por ciento.
Para alcanzar estas metas, evitamos el sacrificio de hembras aptas para la
reproducción y de animales de poco peso, obteniendo mayor aprovechamiento de carne por
animal y mejorando genéticamente la ganadería bovina al distribuirse, dentro del programa
de canje, más de 7 mil sementales de registro.
Las engordas de ganado se incrementaron de 5 mil cabezas en 1981, a 60 mil en la
actualidad; en producción de leche, el déficit del 50 por ciento en 1980, se disminuyó al 20
por ciento en este año.
En praderas de riego, de 5 mil 236 hectáreas que teníamos en 1980, para este año
suman 15 mil 100, es decir, un incremento del 188 por ciento; y de 21 mil hectáreas de
pradera de temporal existentes en 1980, aumentamos la superficie a 47 mil 617.
Sinaloa es de los pocos estados de la república que contará con el servicio de
clasificación de carnes, cuyo propósito es beneficiar al consumidor y crear incentivos para
proseguir con el mejoramiento genético y las engordas de ganado.
En el transcurso de la presente administración, coordinadamente con la Secretaría
de Agricultura y Recursos Hidráulicos y la Unión Ganadera Regional de Sinaloa, se
organizaron 6 exposiciones regionales, y en este año, por primera ocasión, Sinaloa es sede
de la exposición nacional de ganado suizo.
Se constituyó la asociación civil de criadores de razas puras, que lleva a cabo
trabajos tendientes a mejorar la calidad genética del ganado bovino.
En carne de porcino se registró un incremento del 12 por ciento en el período de
1981 a 1986, contando en la actualidad con un excedente de 11 mil 360 toneladas.
En producción de huevo para plato seguimos manteniendo niveles de
autosuficiencia, con excedentes importantes que se destinan a otras plazas del país. En 1986
alcanzamos una producción de 63 mil 150 toneladas, con un superávit de 45 mil 312.
Por lo que se refiere a carne de aves, el déficit que existía en 1980 con una
producción de 9 mil 600 toneladas, de 1981 en adelante lo abatimos
considerablemente y en este año el volumen ascenderá a 24 mil 460 toneladas, casi 3 veces
lo producido en 1980.
PESCA
La pesca adquiere características relevantes por aportar alimentos de alto contenido
proteínico, contribuir al incremento del empleo productivo, generar divisas y por su
influencia en la mejoría del nivel de vida de la población ribereña.
Por sexto año consecutivo, la producción pesquera ha crecido en un 4.6 por ciento
en promedio anual, y para el presente año será de 142 mil toneladas. Las exportaciones por
tal concepto, generaran 165 millones de dolares.
En estos resultados se conjugan las diferentes inversiones en la actividad pesquera
por los sectores público con mil 877 millones de pesos; privado con 3 mil y el social con 11
mil 620 millones durante 1986. Este mismo año, banpesca otorgó crédito por 14 mil 647
millones.
Como consecuencia de una producción creciente, del apoyo financiero y de
inversión, la ocupación en este sector se fortaleció generándose 8 mil 839 empleos
adicionales durante la presente administración, con lo cual se alcanza este año a 33 mil 300
empleos.
El programa de dragados ha continuado y se suman en este año 22 kilómetros de
canales, por lo que al término de mi mandato se habrán dragado 76 kilómetros de tierra, lo
que implicó remover 18 millones de metros cúbicos, con una inversión de mil 400 millones
de pesos.
El propósito fundamental del dragado fue el mejoramiento ecológico de 49 mil
hectáreas de esteros y marismas de los sistemas de huizache, caimanero, las cabras y
Escuinapa-La concha, beneficiando a 24 cooperativas que operan en esta área y agrupan a 3
mil 381 socios.
Gracias a esta obra, la producción de camarón el año anterior, rebasó las 5 mil
toneladas, en tanto que el promedio de las 5 temporadas camaroneras anteriores fue de mil
635.
Para incrementar la producción de escama de aguas continentales, se programó la
siembra de crías; esta se aumentó hasta llegar a una siembra de 10 millones en 1986. Por lo
tanto, la producción creció de 2 mil 460 toneladas en 1980 a 7 mil 760 en el presente año.
Para apoyar la captura, la flota pesquera pasó de 4 mil 970 embarcaciones en 1981,
a 7 mil 530 en 1986. Así mismo, en 6 años duplicamos la capacidad de muelles, por lo que
ahora se disponen de 2 mil 493 metros lineales.
Destacó el traspaso de la planta de “Productos Pesqueros de Escuinapa”, a las
sociedades cooperativas de producción pesquera de los municipios de Escuinapa y Rosario,
operación que ascendió a 250 millones de pesos y de los cuales el Gobierno de Sinaloa
apoyó a los pescadores con un préstamo de 150 millones.
Están prácticamente finiquitados los detalles para que las plantas de El Castillo y de
Topolobampo, propiedad de “Productos Pesqueros Mexicanos”, sean adquiridas por los
pescadores, que de esta forma pasarán al manejo y procesamiento de su producción, que
seguramente habrán de reportarles notable mejoramiento en sus condiciones y niveles de
vida.
Ante estas evidentes muestras de laboriosidad, expreso mi reconocimiento al
trabajador del mar, que con responsable dedicación se suma a la plausible encomienda de
alcanzar los altos objetivos nacionales en este renglón.
INDUSTRIA
La preocupación de mi gobierno por la promoción de la industria no ha sido
decisión casual. La evolución histórica de la economía estatal así lo determina.
Por ello, nos fijamos como fundamental propósito propiciar, desde el arranque, un
clima de aliento a la inversión, en base a nuestro potencial en recursos humanos,
producción primaria y sólida infraestructura.
Entre las acciones de estímulo y fomento que se llevaron a cabo en el sexenio, se
incluyen la concesión de avales a empresas por parte del Gobierno del Estado.
Se instalaron 2 unidades CONACYT, con terminales conectadas a más de 400
bancos internacionales de información científica y tecnológica. Se concertaron importantes
convenios de investigación aplicada y riesgo compartido vinculando el aparato productivo
con los centros de enseñanza superior de la entidad.
Se han creado, entre otras, 137 empresas de transformación, en tanto que algunas de
las ya existentes se han ampliado o modernizado, mediante una inversión conjunta de 300
mil millones de pesos, lo que ha permitido generar alrededor de 45 mil empleos directos.
Destacan por su importancia, plantas extractoras de aceite vegetal, de cerámicas y
mosaicos, envasadoras y deshidratadoras de frutas y hortalizas, de fibropaneles,
empacadoras de productos pesqueros, de alimentos balanceados, embotelladoras, molinos
harineros y una panificadora, entre otras.
A fin de coordinar los esfuerzos de inversión del gobierno federal en nuestra entidad,
así como para aprovechar la infraestructura, los recursos y las ventajas naturales, logramos
de la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial, la reconsideración de los municipios de
Ahome, Culiacán, Mazatlán y Guasave como zonas de máxima prioridad nacional.
A los municipios del Fuerte, Salvador Alvarado, Navolato y Escuinapa, la
mencionada dependencia federal los calificó como de prioridad estatal.
Durante el presente sexenio, también la industria paraestatal recibió un impulso
importante. Fueron creadas las empresas fibrasin, prosesin, fertisin y se reestructuró
nutripac, empresa esta que una vez acreditada su rentabilidad, mediante el fortalecimiento
de sus finanzas y la restitución de su bien funcionamiento, fue recientemente transferida a
los ganaderos, representando uno más de los apoyos brindados por mi administración a los
sectores productivos.
Un programa que mereció especial atención del gobierno estatal fue el de la
industrialización de oleaginosas, cuya producción en Sinaloa es abundante.
Dicho programa se inició con la creación de “Pastas y Aceites Corerepe”, en Los
Mochis y continuó con la formación de “Aceitera de Libertad”, en la que participan los
sectores social y privado; y “Aceitera la angostura”, propiedad de la unión de ejidos de
producción agropecuaria de ese municipio, encontrándose actualmente en construcción
“Aceitera Culiacancito”, de la unión de ejidos margen derecha Río Culiacán.
Sinaloa está ya en etapa de transición hacia una economía industrial; lo evidencia el
crecimiento del empleo en la industria de transformación y el incremento de la
participación relativa de este sector en el producto estatal bruto.
El producto de la industria manufacturera, creció durante el sexenio a un ritmo del
4.2 por ciento anual.
La exhortación del Presidente de la Madrid a ser más eficientes y productivos en la
industria y el comercio, es cabalmente cumplida por el gobierno en sus tres niveles, y por
empresarios, pues con entusiasmo y vocación nos hemos dado al empeño de construir una
planta industrial más fuerte e idónea, que sea el catalizador del cambio en las estructuras
económicas del Estado.
ABASTO Y COMERCIO
En el período que corresponde a esta administración, el sector comercial ha
registrado un marcado crecimiento y modernización, lo que ha permitido una mayor
capacidad en su función económica y social.
La actividad comercial está representada por 46 mil 700 establecimientos que
aportan el 20 por ciento del producto estatal bruto y absorben el 9.5 por ciento de la
población económicamente activa de la entidad, generando empleo directo para 73 mil
habitantes.
Durante el período 81-86 el sector comercio registró un crecimiento del 27.8 por
ciento en cuanto al número de establecimientos, al crearse 12 mil 976 nuevos comercios.
Así mismo, su participación en la generación de empleos creció en un 24.8 por ciento al
ocupar 18 mil 77 personas más.
Con satisfacción observamos la operatividad del comité estatal de abasto, en la
solución de los problemas de abastecimiento de productos básicos e insumos para la
producción, reconociendo la valiosa participación de los organismos representativos de los
comerciantes y el apoyo y respuesta de los agricultores, ganaderos, pescadores e
industriales para cubrir suficientemente las necesidades de consumo interno.
En el marco de este comité estatal, el grupo de acopio y movilización de cosechas,
ha coordinado acciones para mejorar el uso de la infraestructura y equipo en trilla,
transporte, recepción, almacenamiento y comercialización de los productos agrícolas, lo
cual permitió evitar que se presentarán problemas de mayor trascendencia.
Hacemos patente el reconocimiento del Gobierno del Estado a Ferrocarriles
Nacionales de México, por el auxilio prestado en la movilización de cosechas, lo que nos
permitió subsanar deficiencias de infraestructura almacenaria.
Mención especial merece el sistema Conasupo por su contribución a las actividades
productivas de la entidad, mediante la compra de cosechas agrícolas y productos
industriales.
En este año Conasupo captará 715 mil toneladas de productos agrícolas, con un
valor de 50 mil millones de pesos, durante los últimos seis años adquirió 4 millones 200 mil
toneladas de los mismos productos.
Preocupación permanente ha sido que el comercio social en el estado cumpla con su
trascendente papel, en beneficio de la población de bajos ingresos.
Lo anterior impone una constante coordinación con el sistema Conasupo, tanto para
lograr un ininterrumpido funcionamiento de las tiendas, como para crear y ampliar la
infraestructura de acopio, distribución y comercialización.
Sus filiales Diconsa e Impecsa para 1986 contribuyeron con ventas de 30 mil 900
millones de pesos. Las tiendas del sector social operadas por Diconsa se incrementaron de
282 en 1980, 1 982 en el presente año.
Para la cosecha de frijol 85-86 implementamos el control en las movilizaciones
fuera del Estado, como sostén a Conasupo para el cumplimiento de su programa de
compras, habiendo captado 29 mil 120 toneladas, que hicieron factible regular la oferta y
minimizar la especulación en los mercados populares.
Las acciones anteriores y la coordinación de esfuerzos con los sectores involucrados,
contribuyeron a que en nuestra entidad se hayan registrado índices de inflación menores
que los observados a nivel nacional.
Por otra parte, el Gobierno del Estado intervino con especial interés en el pago
oportuno de las cosechas de arroz, trigo, maíz, cártamo, sorgo y soya.
Apoyo así mismo las gestiones del sector industrial de la entidad en la venta de sus
productos para el logro de la revolvencia financiera
necesaria.
Todas las acciones dirigidas al sector comercial, se enmarcaron en la política del
gobierno federal que contempla el programa alimentario y el sistema nacional para el
abasto, orientadas preferentemente en beneficio de la población consumidora de bajos
ingresos.
SIVICULTURA Y MINERÍA
Desde mi campaña política a la gubernatura del estado, expresé que la marginación
y carencias que sufrían los moradores de la sierra sinaloense constituían una triste paradoja
para quienes, viviendo a la sombra de sus bosques o sobre la riqueza del subsuelo, no
habían encontrado el apoyo que les permitiera, mediante el trabajo lícito y permanente,
alcanzar los mínimos de bienestar que los incorporará al progreso general de Sinaloa.
Ante esa realidad de recursos sin aprovechamiento, población sin beneficio y
demanda de fuentes de trabajo sin respuesta, mi administración creó la coordinación
forestal y minera, cuya fundamental responsabilidad sería fomentar el aprovechamiento
racional de los recursos forestales, en beneficio de quienes los poseían: los ejidatarios.
En enero de 1981 solo existían dos industrias forestales de aserrio y propiedad ejidal;
una en Surutato, Badiraguato y la otra en el Batel, Concordia, ambas fuera de operación.
A la fecha y con el apoyo del Gobierno de la República, se establecieron
aserraderos, fábricas de caja clavada y cuadrado para palo de escoba en los ejidos de los
letreros en Rosario; la Petaca y el Palmito en Concordia; San José de las Bocas en Cosalá;
Bagrecitos en Culiacán; San José de los Hornos, Ocoroni y Jesús María de Tosibuena en
Sinaloa.
Además se pusieron en operación los de Surutato y el Batel, dotándolos, al igual
que a los anteriores, de equipo de extracción y de transporte, incrementando su capacidad
instalada de aserrio.
También se instalaron las fábricas de parrillas y caja para empaque en la Rastra,
Rosario; el Platanar del Tesguino en Concordia; Monteverde en Culiacán; el Cajón de
Cansio y la Culebra, en Choix.
La inversión privada fue estimulada con el propósito firme de aprovechar los
bosques, estableciéndose dos fábricas de jaba alambrada y cuatro aserraderos con una
inversión total de 410 millones de pesos.
Actualmente el Estado cuenta con una capacidad instalada total de asierre por 217
mil pies/día, esto es, un 580 por ciento más que en 1980; de 9 millones de jaba alambrada
logramos un incremento del 100 por ciento y 5.4 millones de cajas clavadas para empaque,
el crecimiento fue del 450 por ciento.
Hoy podemos afirmar que prácticamente todos los bosques con posibilidades de
aprovechamiento comercial se encuentran bajo explotación, en beneficio de los ejidos que
los detentan.
Somos en lo forestal, un estado en donde los ejidos propietarios del bosque son
quienes cortan, arrastran, cargan, transportan y comercializan sus productos. Esto, satisface
decirlo, es la primera vez que se ha logrado en Sinaloa.
Por otra parte, durante muchas décadas la minería estuvo desprovista del apoyo
oficial que requería para su desarrollo integral.
Mientras que en 1980 la entidad contaba con 6 plantas y 690 toneladas-día de
molienda, para 1986 se tiene una capacidad total instalada de 5 mil 850 toneladas-día.
Además se construyen otras dos plantas, una de “Mineros Unidos de Copala” con
100 toneladas-día de capacidad y otra de “Mina San Luis” en San Antonio, Municipio de
San Ignacio, con 300 toneladas-día para llegar a 6 mil 250 toneladas, producción superior a
las 6 mil programadas, como
meta del sexenio.
Durante la presente administración, se pusieron en operación las unidades
metalúrgicas de Choix y Badiraguato y se ampliaron las de la minita, en San Ignacio, y El
Coco, en Concordia contando ya Sinaloa con 4 plantas de servicio público, prácticamente el
20 por ciento del total de estas plantas que la Comisión de Fomento Minero tiene en el país.
Se establecieron las unidades de “Industrial Minera Sinaloa” e “Industrial Minera
México”, ambas en Rosario; se construyeron la de “Santa Rosa”, “Minas del Oro y el
Refugio” y “Esperanza de Copala” en Concordia, y ampliaron su capacidad las de la
“Cooperativa Minera de Panuco” y la “Compañía Minera Metalúrgica Rosarito”, esta
última en San José de Gracia.
Destaca dentro de estas plantas la “Unidad Metalúrgica de Rosario” de Industrial
Minera México, localizada en plomosa, cuenta con 800 toneladas de capacidad de molienda
ya en operación, 200 puentes de trabajo generadas, 4 mil 500 millones de pesos de
inversión, incluyendo las labores de mina y es ya sin duda un polo de desarrollo social y
económico que ha despertado la bonanza que en un tiempo caracterizó a la sierra rosarense.
En San Ignacio se puso en marcha la unidad de la compañía minera “El
Gambusino” para beneficio diario de 2 mil toneladas de arena de placer con contenido de
oro, en los arroyos del tambos y el saucito y finalmente cuatro pequeñas plantas más con
beneficio por lixiviación, cianuración y amalgamación en el tambor, cacalotan, santa
herlinda y el zapote.
Prueba del repunte minero sinaloense, lo constituyen los apoyos institucionales que
nuestra entidad ha recibido. La Comisión de Fomento Minero aumentó sustancialmente el
monto de los créditos. En 1980 ejerció en Sinaloa 83 millones de pesos y para 1986 la cifra
es de mil 800 millones.
Debe señalarse que mientras en 1980 existían 202 mil 700 hectáreas en 698
concesiones, para 1986 el área es de 536 mil 800 hectáreas, en mil 178 concesiones.
En esta administración se construyó el laboratorio escuela de ensayes mineros, que
ha realizado 16 mil 958 ensayes y capacitado dos generaciones de jóvenes en esta materia.
En personal de la coordinación forestal y minera realizó 655 visitas técnicas a 393
diferentes yacimientos permitiendo al minero, conocer el verdadero potencial de su
denuncio y ofreció asesoría legal y de trabajo pericial para regularizar 829 fundos.
El fondo estatal de apoyo a la pequeña y mediana minería, ejerció créditos por 125
millones de pesos en beneficio de 72 pequeños y medianos mineros.
La inversión total en el ramo minero, en esta administración, fue de 14 mil 786
millones de pesos, y el valor de producción actual, de 11 mil 446 millones. Esta es la mejor
prueba del repunte de la minería sinaloense, cuyo subsuelo guarda considerables riquezas
que aún no son cabalmente cuantificadas.
La ocupación en la minería asciende ya a 3 mil 594 personas, seis veces más que en
1980 y nuestra producción para 1986 se estima en 324 kilogramos de oro, 42 mil 718
kilogramos de plata, mil 608 toneladas de plomo, 3 mil 300 toneladas de zinc y 184
toneladas de cobre.
Por estas cifras y con estos avances, podemos afirmar que el sinaloense de la sierra
puede mejorar sustancialmente su calidad y nivel de vida y que lo puede hacer con una
actividad que no degrada al hombre sino lo dignifica, que no lo hace huir, sino lo arraiga y
que no lo avasalla, sino lo redime.
TURISMO
El Estado de Sinaloa y particularmente el puerto de Mazatlán, se conserva como
centro de destino turístico importante, con un porcentaje de ocupación promedio acumulado
de casi 60 por ciento a octubre de este año, habiéndose registrado en el primer semestre de
1986 más de 2 mil vuelos, tanto nacionales como internacionales.
Durante los últimos diez meses arribaron al puerto de Mazatlán 110 cruceros
turísticos, movilizando más de 100 mil pasajeros, de los cuales el 85 por ciento bajaron al
puerto dejando una considerable derrama económica.
A través del Fondo Nacional de Fomento al Turismo se continua estimulando la
inversión en instalaciones y actividades turísticas.
Se estableció la representación regional de crédito FONATUR con sede en
Mazatlán, donde se canalizan y atiende todas las demandas de crédito para los estados de
Baja California, Baja California Sur, Sonora, Nayarit y Sinaloa.
Gracias a dicho fondo, la inversión en el último año ascendió a 7 mil 466 millones
de pesos, para construir 329 cuartos nuevos y remodelar 246, en 11 operaciones que
generaron empleos directos para mil 60 jefes de familia.
La compañía hotelera Petatlan construye en Guasave, con un costo de mil 100
millones de pesos, un hotel de cinco estrellas, con el respaldo del Gobierno del Estado,
según suscripción de acciones por 50 millones de pesos; esta obra será puesta en servicio el
próximo mes.
POLÍTICA EDUCATIVA
Diseñar nuestro proyecto histórico como nación, implica un proceso de cambio para
eliminar persistentes desigualdades, robustecer la democracia política y consolidar la
justicia social. Este proceso de transformación debe sustentarse, fundamentalmente, en la
educación.
Con ese firme convencimiento, desde el inicio de nuestro mandato anunciamos un
vigoroso programa de extensión y mejoramiento de los servicios de enseñanza.
Este proyecto educativo de interés público y de aplicación prioritaria, exigió diseñar
una nueva estructura administrativa, así como el más adecuado marco jurídico que
propiciará su realización y desarrollo.
Por ello, inicialmente creamos la Secretaría de Educación Pública y Cultura y
promulgamos la Ley de Educación para el Estado de Sinaloa.
Con esta base normativa, nos dimos a la tarea de hacer de la educación el primer
derecho social de los sinaloenses, para dar acceso a la enseñanza al mayor número de
educandos.
Hoy, al término de nuestra gestión, nos satisface informar que hemos dejado
integrada la más amplia pirámide educativa, que cimentada en los jardines de niños y
apoyada en la consolidación de la enseñanza primaria, tiene su más sólida estructura en la
oficialización de las escuelas secundarias y en la creación del Colegio de Bachilleres del
Estado de Sinaloa, hasta culminar en la educación profesional.
El apoyo que mi gobierno otorgó al ramo educativo en todos los niveles, ha sido la
mejor respuesta a los planteamientos de los padres de familia, pues sus hijos disfrutan ahora
de los beneficios de una educación democrática, popular y gratuita, extendida a los 18
municipios de la entidad.
Los avances en esta materia, son el más fiel reflejo de nuestra voluntad política de
servir a las mayorías en sus afanes de mejoramiento cultural y bienestar colectivo.
La evidencia de los números, junto a los efectos reorientadores de la educación,
justifican las acciones emprendidas, los recursos invertidos, los objetivos perseguidos, y,
sobre todo, las metas alcanzadas.
En efecto, sin considerar a la educación autónoma ni a la particular, en el ciclo
escolar 80-81 funcionaban en el Estado 2 mil 138 escuelas oficiales, en su mayoría de los
niveles elementales, mientras que en el presente ciclo lectivo se cuenta con tres mil 538, es
decir, mil 400 más, con un incremento del 66 por ciento.
Por otra parte, al inicio de nuestro mandato el binomio maestro-alumno estaba
compuesto por 14 mil 57 plazas de docentes que atendían a 501 mil 228 alumnos.
En la actualidad contamos con 24 mil 900 plazas de maestros que atienden a 679
mil 266 alumnos, lo que significa que durante nuestra administración se crearon 10 mil 843
nuevas plazas de maestros y se aumentó la población escolar en 196 mil alumnos, lo que
representan incrementos del 77 y 39 por ciento, respectivamente.
Por cuanto a los espacios educativos, en el año escolar 80-81 se contaban con 9 mil
144 aulas, en tanto que en el presente ciclo se tienen 14 mil 921, lo que significa un
aumento de 5 mil 777 espacios educativos, o sea un 63 por ciento más, que representa un
incremento de más de dos y media aulas por día.
En base a estos indicadores de escuelas, maestros, alumnos y aulas, el promedio de
avance que tuvo el sector educativo en Sinaloa, comprendiendo los sistemas federal y
estatal, nos arroja un contundente resultado del 61.2 por ciento.
Para lograr el desarrollo de toda la estructura educativa que conforma los dos
sistemas y los cinco niveles de enseñanza, fue necesario destinar 112 mil millones en gastos
de operación y 16 mil millones en construcción y equipamiento, lo que representó una
inversión de 128 mil millones, o sea, el equivalente a seis veces los recursos invertidos en
la carretera costera “Plan Mar de Cortés”.
SISTEMA EDUCATIVO DEL GOBIERNO DEL ESTADO
Importa destacar que con un presupuesto propio del Estado, de 12 mil 934 millones
para este año, se sostiene todo el sistema educativo estatal integrado por 54 jardines de
niños, 580 escuelas primarias, 65 planteles de nivel medio superior y 3 instituciones de
educación superior.
Cabe señalar que con esta misma cantidad, se cubren los sueldos de 9 mil 38
maestros; 2 mil 76 trabajadores administrativos y se da atención a 263 mil 654 alumnos.
EDUCACIÓN PREESCOLAR
Los jardines de niños del sistema estatal ofrecían sus servicios en 80-81 a 9 mil 336
alumnos atendidos por 225 maestros, en 41 escuelas y 223 espacios educativos.
En el presente año lectivo, asisten 14 mil 200 niños, que son atendidos por 314
maestros en 54 escuelas y 296 espacios educativos para un avance promedio del 36.7 por
ciento.
EDUCACIÓN PRIMARIA
La enseñanza elemental mantuvo su ritmo de atención del cien por ciento de la
demanda, asegurándose la consolidación y mejoramiento de este nivel.
En 80-81 se atendían a 163 mil 775 niños, con 3 mil 804 maestros que impartían sus
clases en 544 escuelas y 3 mil 106 aulas.
En el presente año, el crecimiento de alumnos fue de sólo el 0.8 por ciento al
registrarse 165 mil; es decir, mil 225 más, sin embargo, el incremento de plazas de
maestros fue del 8 por ciento al generar 296 nuevas plazas para un total de 4 mil 100
maestros de primaria, aumentándose los planteles a 580, o sea 36 más, y en 3 mil 274 los
espacios educativos, es decir, 168 más.
EDUCACIÓN COMUNITARIA
Al convencernos de las bondades y la profundidad social del tipo de estudios
comunitarios que además de propiciar el arraigo y el trabajo colectivo, brinda
oportunidades de educación, capacitación y desarrollo personal a los habitantes de las
comunidades rurales, mi gobierno incorporó oficialmente el centro de estudios “Justo
Sierra” localizado en la sierra de Badiraguato y creó cuatro más en puntos estratégicos de la
entidad.
Con estas acciones de beneficio comunitario hemos favorecido a 700 alumnos que
son atendidos por 42 promotores y trabajadores de apoyo en 23 espacios educativos.
La mayor satisfacción del respaldo brindado a la educación comunitaria, es saber
que estamos ofreciendo oportunidades de preparación a los habitantes que no habían
podido recibir la atención del servicio educativo, tales son los casos de la tasajera, en Choix,
Ocurahui, en Sinaloa, Surutato, en Badiraguato, la Campana, en Escuinapa y el Palmito en
Concordia.
EDUCACIÓN SECUNDARIA
Al inicio de nuestro mandato advertimos que el sistema educativo estatal sólo
sostenía cinco escuelas secundarias ubicadas en las zonas urbanas de Culiacán y Mazatlán,
permitiendo que la mayor parte de la atención de este nivel quedara en manos de
particulares.
Debido a ello, en el ciclo escolar 80-81, únicamente acudían a recibir educación
secundaria en planteles oficiales, 4 mil alumnos que eran atendidos por 272 maestros.
Con nuestro programa de oficialización de escuelas secundarias, en la actualidad los
jóvenes de los 18 municipios de la entidad, tanto del medio urbano como del medio rural,
disfrutan de amplias oportunidades de estudio que han favorecido la continuidad de su
preparación.
Me satisface informar que en estos seis años, hemos creado 138 nuevas escuelas
secundarias oficiales, que sumadas a las 5 ya existentes, hacen un total de 143 planteles, lo
que representa un aumento de 2 mil 700 por ciento.
En estas escuelas reciben su enseñanza 41 mil 280 alumnos; es decir, 37 mil 268
más que en 1980, para un crecimiento del 929 por ciento.
Para atender a esta población escolar contamos con 2 mil 562 maestros, esto es, 2
mil 290 más que en 1980, lo que significa un incremento de plazas del 842 por ciento.
En cuanto a los espacios educativos necesarios para el desarrollo de la enseñanza en
este nivel, de 34 que existían en 1980 hemos llegado a 840, o sea 806 más, lo que significa
un aumento de 2 mil 371 por ciento.
Para lograr este crecimiento, sin precedente en los anales de la educación sinaloense,
mi gobierno destina 3 mil 800 millones de pesos anuales al sostenimiento de los gastos de
operación de las 143 escuelas oficiales.
EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR
Uno de los aspectos que demandó y recibió nuestra mayor atención,
fue la apertura de nuevas opciones para la juventud sinaloense en el estudio de nivel medio
superior, más conocido como bachillerato.
Así lo acredita el que mientras en 1980 sólo el 30 por ciento de los egresados de
secundaria continuaban sus estudios, en el presente ciclo 86-87, 80 de cada cien alumnos se
inscribieron en preparatoria.
Este avance fue posible gracias a la reordenación educativa y al mejoramiento
académico logrado con la creación de una de las obras de mayor importancia en nuestra
gestión gubernamental: el Colegio de Bachilleres de Sinaloa.
La creación de Cobaes robustece nuestra satisfacción por el hecho de que el
Presidente de México, licenciado Miguel de la Madrid Hurtado, haya inaugurado y
abanderado los planteles de Navolato y de Culiacán, en un claro gesto de reconocimiento y
franco apoyo del Gobierno de la República al esfuerzo educativo de los sinaloenses.
En la actualidad, el sistema Cobaes está integrado por 64 planteles, habiéndose
invertido en sus construcciones y equipamiento, la cantidad de mil 737 millones de pesos.
Por sus aulas han transitado por la ruta del saber, alrededor de 50 mil jóvenes entre
egresados y el alumnado actual.
Laboran mil 311 maestros y 699 empleados administrativos y su presupuesto de
operación para el presente año fiscal es de 2 mil 100 millones de pesos, cubiertos en partes
iguales por la federación y el Estado.
Al terminar mi mandato constitucional, dejo a los sinaloenses, todo un sistema de
educación media superior, de sólido prestigio académico.
EDUCACIÓN NORMAL
En respuesta a los planes nacionales de profesionalización del magisterio, y como
consecuencia del apoyo que mi gobierno ha brindado al programa formador de docentes,
Sinaloa se ha convertido en una de las primeras entidades federativas del país, en establecer
el grado de licenciatura en la Escuela Normal.
El centro de Bachillerato Pedagógico, a dos ciclos escolares de su fundación, cuenta
con 406 alumnos y 24 maestros. Su curso es el antecedente obligado para aspirar a la
licenciatura.
Paralelamente, y como una necesidad de regular la matricula en este nivel, evitando
la saturación y el desempleo, se dictaron medidas tendientes a controlar el ingreso a las
escuelas normales oficiales y se suprimió el funcionamiento de nueve escuelas normales
particulares.
Por estas razones, actualmente funcionan en esta ciudad de Culiacán solo dos
escuelas normales oficiales, una de ellas con las licenciaturas en educación preescolar y
primaria y otra especializada, de reciente creación, que ofrece las licenciaturas en
problemas de aprendizaje y deficiencia mental, audición y lenguaje.
En total, contamos con cinco licenciaturas en educación normal en las que se
encuentran estudiando mil 114 jóvenes, de los cuales 269 estudian áreas de especialidad y
845 cursan la carrera profesional de licenciados en educación elemental.
Para atender a esta población escolar, se cuenta con los servicios de 110 maestros,
de los cuales 51 prestan servicios en la educación especial y 59 en la Escuela Normal de
Sinaloa.
Los efectos de mayor importancia en la profesionalización de la carrera de docentes,
son sin duda el haber reorientado y revalorado a la educación normal, así como delinear la
verdadera definición vocacional de quienes aspiran a convertirse en factores básicos de la
nueva enseñanza nacional.
En este rubro sobre la educación normal, hago un paréntesis para rendir mi más
emocionado reconocimiento a los viejos y nuevos maestros de mi tierra, de quienes siempre
recibí aliento, apoyo y comprensión; y quienes desde las aulas, siguen cumpliendo la alta
encomienda de servir patrióticamente a México.
En respuesta a la amplia colaboración de la Sección 53 del Sindicato Nacional de
Trabajadores de la Educación, y a la esforzada labor social de magisterio sinaloense, en un
acto de entera justicia mi gobierno acordó, el pasado 15 de mayo de 1985, conceder la
jubilación con el pago íntegro de sus salarios.
PLANTELES CONALEP
Con el objeto de ampliar y diversificar la enseñanza profesional en todas sus
modalidades, mi gobierno auspició la expansión del Colegio Nacional de Educación
Profesional Técnica, cuya función es preparar a los técnicos de mandos medios que
requiere el desarrollo de la entidad.
Fue por ello que de 3 planteles que funcionaban al inicio de nuestro mandato en 2
de los 18 municipios, logramos extender este servicio educativo, con inversión participativa
del estado, a 10 municipios de la entidad, incrementando a 13 el número de planteles que
ofrecen actualmente 24 diversas especialidades a más de 3 mil jóvenes.
En esta modalidad de enseñanza profesional técnica, nuestra administración
construyó y dotó de equipo a los 10 nuevos planteles, compuestos de 64 aulas, 23
laboratorios, 59 talleres y 74 anexos, lo que significó una inversión de 800 millones de
pesos.
Además de estos recursos, desde 1981 a la fecha, el Gobierno del Estado otorga un
subsidio al sistema Conalep a título de becas para sus estudiantes.
La presencia de Conalep en Sinaloa, ha fortalecido la estructura educativa, al
brindar mayor acceso y mejores oportunidades de preparación a los jóvenes que aspiran a
ser profesionistas técnicos.
EDUCACIÓN SUPERIOR
Para complementar los cinco niveles de enseñanza que culminan con la educación
superior, en sus grados de licenciatura, maestría y doctorado, Sinaloa cuenta con 18
instituciones de estudios profesionales, de las cuales 6 son universidades, 3 tecnológicos
del sistema federal, 2 normales oficiales y las 7 restantes, escuelas particulares.
En lo que se refiere a universidades, la más importante de ellas es descentralizada,
una más es universidad pública desconcentrada del Estado, otra es particular incorporada a
la Universidad Autónoma de Sinaloa, 2 cuentan con reconocimiento de estudios federales y
una última está incorporada al sistema educativo estatal.
De estas seis instituciones universitarias, la Universidad Autónoma de Sinaloa, con
113 años de existencia, continúa reafirmándose en el concierto de las casas de estudios
superiores como la de mayor tradición en el Noroeste de México.
Sus propósitos de reencauzamiento en la vida institucional, así como la aspiración
de sus autoridades hacia la excelencia académica, permiten asegurar que por este camino,
seguirá siendo el alma mater que desea el pueblo de Sinaloa.
Tenemos la certeza de que en la medida que la comunidad universitaria contribuya
al cumplimiento de sus fines esenciales, de docencia, investigación y difusión de la cultura,
en esa misma medida cimentará su grandeza, elevará su prestigio y alcanzará sus altos
objetivos de superación.
Por otra parte, resulta de singular importancia la creación de la Universidad de
Occidente como institución pública desconcentrada del Estado, que ha alcanzado un alto
prestigio académico, una amplia aceptación de la juventud sinaloense y el más abierto
reconocimiento de todos los sectores de la entidad.
Esto ha sido posible gracias al desarrollo normal de su función educativa, cuyo
objetivo de calidad académica es prácticamente cotidiana en su quehacer cultural.
Su desarrollo institucional surge desde que el ejecutivo a mi cargo expidió el
decreto que la incorpora al Estado, el cual se publicó el 15 de mayo de 1981, ratificado por
su reglamento general del 5 de febrero de 1982, y consolidado con la aprobación, por este
Honorable Congreso, de su Ley Orgánica publicada el 5 de mayo de 1985.
A distancia de 5 años de formar parte del sistema educativo estatal, la Universidad
de Occidente cuenta con 5 unidades distribuidas en las ciudades de Mazatlán, Culiacán,
Guasave, Los Mochis y Mochicahui, con una oferta académica de 22 carreras profesionales
y 3 maestrías, en las que se forman 6 mil 500 alumnos atendidos por 306 maestros.
Su presupuesto de operación ejercido en el presente año fiscal, es de 600 millones
de pesos aportado por el gobierno estatal, lo que representa un costo anual por alumno de
92 mil pesos.
Nos complace informar que con inversión directa del estado de 680 millones de
pesos, hemos logrado construir la primera etapa de la Ciudad Universitaria de Occidente,
en la ciudad de Los Mochis.
Con esa misma suma pudimos apoyar la readaptación de edificios que fueron
donados por los ayuntamientos de El Fuerte, Guasave y Mazatlán, restando por iniciar las
instalaciones que se requieren en esta ciudad capital.
Expresamos nuestro puntual reconocimiento a sus alumnos, maestros, autoridades
universitarias y padres de familia, quienes con el apoyo de los diversos sectores de la
población, han producido positivos efectos en el interior de su alma mater e influido en el
reencauzamiento de la enseñanza Universitaria de Sinaloa.
En resumen, los rubros de mayor significación que revelan el alcance de nuestra
política educativa, han quedado de manifiesto en la pirámide escolar del sistema estatal,
integrada ahora por 261 nuevos planteles que van desde el jardín de niños hasta la
enseñanza superior.
Para crear esta estructura fue necesario abrir 13 nuevas escuelas de educación
preescolar 36 escuelas primarias más, 5 centros de autodesarrollo comunitario, 138
secundarias oficializadas, 64 planteles del Colegio de Bachilleres, un Centro de
Bachillerato Pedagógico, una Escuela Normal Profesional, una Escuela Normal de
Especialización y la Universidad de Occidente.
Lo más importante de nuestra política educativa es que ha permitido una mayor
integración familiar debido a la permanencia de los jóvenes en sus lugares de origen,
evitándose su desarraigo por la búsqueda distante de oportunidades de estudio.
Además, la obra de expansión educativa, ha generado miles de empleos para
grandes núcleos de maestros, técnicos y profesionistas, incluyendo al personal de apoyo y
de servicio.
Todo lo anterior nos autoriza a concluir que la educación que hemos impulsado, ha
contribuido a transformar la educación selectiva en popular, la elitista en democrática, la
privada en pública y la de paga en gratuita.
Así hemos cumplido con el pueblo de Sinaloa y con la revolución educativa.
CULTURA
Acercar al mayor número de sinaloenses a la producción y disfrute de la cultura, ha
sido permanente anhelo de mi administración.
La sociedad es testigo de los logros alcanzados por la dirección de
investigación y fomento de la cultura regional, que si bien no son todos los que hubiéramos
deseado, han conquistado presencia en el ámbito cultural de la entidad.
La Escuela de Arte “José Limón”, mero proyecto en 1980, alcanza su consolidación
en el sexenio, recibiendo 6 mil 912 alumnos de danza, artes plásticas, música, teatro y en la
unidad de iniciación artística.
Siendo la biblioteca un centro de motivación cultural, de aprendizaje y de consulta,
nos dimos a la tarea de abatir en lo posible el rezago que en ese renglón existía. 25
bibliotecas públicas en la entidad cubren ahora este importante servicio, es decir, que
cuando menos hay una en cada municipio y en breve será inaugurada otra más en la
pirámide cultural de la colonia rosales de esta capital.
A propósito de esta denominada pirámide cultural que en las próximas semanas será
concluida, se trata de un ambicioso centro cultural que contará con diversas instituciones
educativas y asistenciales, construidas por los gobiernos federal y del estado y diversas
dependencias e instituciones; con un costo de 168 millones de pesos se están realizando las
obras de urbanización en un terreno de 14 hectáreas.
Otorgando sentido al llamamiento que hiciera para redoblar esfuerzos en esta última
etapa de la jornada, nos satisface informar que de ese total de 25 bibliotecas, 10 fueron
instaladas en el presente año.
2 millones 720 mil asistencias han registrado las bibliotecas públicas en lo que va
de este sexenio, con libre acceso a 156 mil volúmenes.
Los importantes avances en este renglón fueron posibles gracias al irrestricto apoyo
de la Secretaría de Educación Pública, a la que reconocemos, al igual que a sus autoridades,
su invaluable aportación.
Sostuvimos el ritmo en cuanto a la realización de conferencias sobre diversas áreas
del conocimiento, tanto científicas como culturales; así, de 1981 a 1986 se han llevado a
cabo 159 conferencias con una asistencia de 18 mil 923 personas.
En el mismo lapso se cuentan 134 exposiciones, con 208 mil 500 asistentes,
destacando en este rubro la coordinación y participación de diversas entidades culturales
del país, como el Instituto Nacional de Bellas Artes, el Instituto Nacional de Antropología e
Historia, el festival internacional cervantino y los departamentos de cultura del IMSS e
ISSSTE, todos merecedores de nuestra permanente gratitud.
Los grupos “DIFOCUR”, banda de instrumentos de aliento y metales, banda del
taller de instrumentos, aliento y percusión, danza regional y teatro, entre otros, han
realizado 574 representaciones disfrutadas por casi medio millón de coterráneos.
Así mismo, refiero 449 espectáculos artísticos, entre obras de teatro, conciertos,
recitales y grupos de danza, para un publico integrado por 439 mil personas.
Los “Viernes Literarios” significan 45 eventos, además de los espectáculos
decembrinos como pastorelas, villancicos y exposiciones que propenden a crear al ambiente
propicio a esas festividades.
Sin distingo alguno, la difusión de los valores sinaloenses en el campo de las artes
plásticas y de la literatura han tenido cabida en el “Centro Cultural Difocur”, convertido en
firme tribuna de exposición para artistas nativos y para las lecturas de poetas, narradores y
ensayistas.
Fundamental medio de desparcimiento y de difusión cultural lo constituye el cine, a
través de la sala lumiere y de cine móvil; en el término de este mandato se logró la
asistencia de más de un millón de espectadores que gozaron de 5 mil 538 proyecciones,
incluidos ciclos de cine en colonias populares, consejo tutelar para menores, asilos de
ancianos, hospitales civiles y ciudad de los niños.
En la ciudad de Los Mochis se construye con una inversión de 250 millones de
pesos, de los cuales 50 han sido aportados por el patronato de cultura de dicha ciudad, la
escuela vocacional de las artes que contará con talleres de danza, teatro, música y artes
plásticas.
Y con una aportación de 20 millones de pesos por parte del ayuntamiento de
Culiacán y 80 del Gobierno del Estado, se ha rehabilitado el Museo Regional de Sinaloa en
el Parque Revolución con la colaboración del Instituto Nacional de Antropología.
Ambas instituciones entrarán en servicio próximamente.
En materia editorial, DIFOCUR, con la colaboración de diversas instituciones dio a
conocer el libro “Juan Soriano y su Obra”, donde se publican los trabajos pictóricos del
autor; también el libro “Diego Rivera, dibujante” y por último, el libro “Sinaloa”, que es un
esfuerzo editorial sin precedentes y que a base de fotografías muestra los aspectos más
diversos e interesantes de los sinaloenses.
Han sido seis años de trabajo. El empeño fue grande, decidido y abierto. Abrir
nuevos espacios en el acervo cultural de los sinaloenses.
Porque legitima una tarea realizada con afán encomiable, uno mi especial
consideración y reconocimiento a la señora Lourdes Toledo de Rosenlenher y
colaboradores, copartícipes todos de la emoción por servir.
POLÍTICA AGRARIA
La Reforma Agraria se mantiene como uno de los propósitos fundamentales de la
Revolución Mexicana, ya que los campesinos han alcanzado excelentes beneficios con
motivo del reparto de la tierra.
Durante nuestro ejercicio, 152, núcleos fueron dotados y regularizados al ejecutar
mandamientos del Gobierno del Estado y resoluciones presidenciales, en una superficie de
578 mil 703 hectáreas, resultando favorecidos 19 mil 20 ejidatarios.
A través del convenio suscrito en junio de 1984 entre la Secretaría de la Reforma
Agraria y el Gobierno del Estado, se fijaron las bases para agilizar los procedimientos de
321 acciones agrarias.
De 1981 a la fecha, fueron realizados mil 203 investigaciones generales de
usufructo parcelario, expidiéndose 40 mil 218 certificados de derechos agrarios, para igual
número de campesinos dotados.
En Sinaloa existen mil 123 ejidos definitivos y en este sexenio el 72 por ciento de
los núcleos dotados en el estado quedaron regularizados en cuanto a su integración
territorial.
Esto significa que 2 millones 185 mil 581 hectáreas dejaron de tener inseguridad
jurídica, tanto en dotaciones y ampliaciones ejidales, como en la creación de nuevos centros
de población y titulación de bienes comunales, viéndose beneficiados 73 mil 802
campesinos.
Aún cuando la ejecución del programa de Catastro Rural y Regularización de la
Tenencia de la Tierra reviste caracteres de complejidad, puede decirse que los avances que
registra, responden al esfuerzo que se hace para alcanzar sus fundamentales objetivos.
El estado cuenta con 5 millones 800 mil hectáreas y los trabajos de este programa
en cuanto a foto identificación han cubierto 3 millones 875 hectáreas; es decir, el 66 por
ciento de la superficie total de la entidad.
A la fecha se han integrado 3 mil 435 expedientes sobre inafectabilidad agrícola, de
los cuales han emanado acuerdos favorables para mil 26 propietarios.
La Comisión Agraria Mixta, en el curso de esta administración, instauró 117
expedientes sobre diversas acciones agrarias, practicó 130 diligencias censales, realizó 188
trabajos técnicos e informativos y dio cumplimiento a 65 mandamientos, habiéndose
beneficiado 3 mil 935
campesinos.
Se integraron mil 108 expedientes sobre privación de derechos agrarios, de cuyo
resultado 36 mil 93 ejidatarios fueron privados y una cantidad similar son los nuevos
adjudicatarios; 44 mil 824 ejidatarios fueron confirmados y 40 mil 245 se vieron sujetos a
reconocimientos, con lo que el total de ejidatarios regularizados asciende en el sexenio a
121 mil 162.
Como una acción consecuente al reparto de la tierra se ha promovido la
organización de los productores para encauzarlos en el logro de mejores beneficios en las
áreas dotadas.
Fue nuestra indeclinable aspiración alentar hacia el campo las condiciones sociales,
económicas y jurídicas para que del sistema de tenencia y explotación de la tierra,
emergieran como beneficiarios principales las grandes masas de campesinos sinaloenses, a
quienes por su capacidad de entrega les reconozco su acreditada, cuanto consciente y
responsable participación.
Cuando hubo intereses encontrados, nuestras únicas guías fueron la ley y la justicia,
valores que hicimos preservar antes que mostrar debilidad a las presiones o las distorsiones.
Porque responde a mi formación social, porque obedece a una conciencia forjada en
la lucha por la tierra y porque surge de mi deber de gobernante, así nos propusimos que la
reforma agraria tuviera presencia y espacio en Sinaloa.
POLÍTICA DE BIENESTAR SOCIAL
Con la creación de los DIF municipales como organismos públicos descentralizados,
se logra el propósito de establecer las bases para consolidar un sistema de asistencia social
de avanzada, destinado a combatir las causas que impidan al individuo su incorporación a
una vida plena y productiva.
Queda actualizado el marco jurídico del sistema DIF, con los decretos que
transforman a los comités en sistemas municipales y con la nueva ley del sistema para el
desarrollo integral de la familia, acorde a los programas institucionales.
En el programa de desarrollo comunitarios no se ha dejado de atender a la población
en preescolar, educación básica, en planificación y orientación familiar, módulos frutícolas,
agrícolas y apícolas; mejoramiento de vivienda, saneamiento ambiental y cartilla de
vacunación, independientemente del apoyo que brinda la red móvil de promotoras rurales,
que en el período de esta administración sirvió a 471 personas de 652 comunidades.
Para la protección de la familia se brindaron mil 438 consultas jurídicas, se
realizaron 834 tramites judiciales y se registraron 4 mil 573 menores, según actuación de
las 18 procuradurías de la defensa del menor y la familia, 17 de las cuales fueron instaladas
en este sexenio.
Buscando el resguardo e integración del anciano, se afiliaron al Instituto Nacional
de la Senectud, 3 mil 592 miembros.
Hasta 1985, la grave problemática en materia de rehabilitación planteaba la
necesidad de atender más intensamente este rubro, pues de 150 mil minusválidos, la
infraestructura del sector salud y escuelas de educación especial, escasamente
representaban un 9 por ciento.
Este año se terminó de equipar el Centro de Rehabilitación y Educación Especial de
esta capital, el cual tiene un costo aproximado de 500 millones de pesos.
También se construyeron centros regionales de rehabilitación integral en Los
Mochis y Mazatlán, con una inversión de 150 unidades básicas de rehabilitación, ubicadas
en las cabeceras del resto de los municipios, con un costo de 60 millones de pesos.
De esta manera, con una inversión global de 860 millones de pesos, se integra una
verdadera red de rehabilitación, la cual alcanza una cobertura potencial del 75 por ciento de
la población del estado.
En áreas urbanas marginadas se desarrollaron 880 platicas para prevención de
problemas sociales, de planificación y orientación familiar, así como atención en albergues
a 150 ancianos.
Se formaron 358 jardines de niños; se imparte alfabetización, primaria y secundaria
abierta a mil 468 personas; se llevaron cursos de primeros auxilios, plomería, herrería,
electricidad y otros, a 34 mil 784 beneficiarios en el sexenio.
En asistencia social alimentaria, a través de un programa especial, con el apoyo del
sistema DIF Nacional, se incrementaron de 516 familias beneficiadas al inicio del período,
a 44 mil 336 en el presente año.
Para apoyar la autosuficiencia alimentaria se crearon 30 mil huertos hortícolas, 786
módulos pecuarios, 3 mil 210 de especies menores, 930 cámaras de crías de apiarios, 92 mil
módulos hortícolas y 401 mil arboles frutales.
Las instalaciones del sistema DIF recibieron debida atención pues se suman a los ya
construidos, 16 centros de desarrollo que se instalaron en sindicaturas en este año.
También se reacondicionaron 5 centros de desarrollo y oficinas generales y se
remodelo totalmente la Casa del Anciano.
En apoyo a la tarea educativa, los voluntarios de Sinaloa participaron en el
programa de alfabetización en 389 comunidades.
23 mil familias de 328 poblaciones fueron beneficiadas a través del Programa de
Orientación Nutricional, encaminado a la capacitación en técnicas básicas de higiene y
nutrición.
El programa de protección al medio ambiente, que tiende a mejorar las condiciones
ambientales y de higiene en las zonas menos desarrolladas del Estado, llegó a 406
comunidades donde se aplicaron jornadas de limpieza y plantación de 223 mil 500 arboles
de ornato.
Por lo que hace al programa de apoyo a damnificados, con la concurrencia de
nuestra comunidad, el voluntariado acudió en ayuda de las familias afectadas por los
ciclones “Lidia”, “Norma”, “Paúl” y “Waldo”, brindando atención a 48 mil 424 familias,
con despensas y servicios médicos.
Mención especial merece el programa de la Cruz Roja Mexicana, en el que quedó
una vez más de manifiesto la disposición de los sinaloenses por ayudar a sus semejantes.
Su altruismo, amplió sentido de solidaridad y desprendimiento, lograron que por
seis años consecutivos Sinaloa obtuviera el primer lugar a nivel nacional en las colectas
anuales a favor de la benemérita institución.
Los 789 millones 380 mil pesos, recaudados en este sexenio, que son clara muestra
de la generosidad de nuestro pueblo, fueron sustento para aumentar de 7 a 33 los puestos de
socorro y de 15 a 69 las ambulancias.
Así mismo, fue factible con tal aportación, mejorar los servicios que este organismo
presta en la entidad, al contarse con instalaciones adecuadas en cada puesto de socorros, sin
omitir la ampliación en los servicios tradicionales con el funcionamiento de una farmacia
en Guasave y de un velatorio próximo a inaugurar en Culiacán.
Todas estas acciones, plenas de humanitarismo, han sido cubiertas con ejemplar
entusiasmo y dedicación por la presidenta integral de la familia y del promotoriado
voluntario, merecedora por ello del afecto y reconocimiento de los sinaloenses, señora
Paloma C. de la Madrid.
Comparte este merito, quien con apasionada vocación, recorrió intensamente la
geografía del Estado en un llamado constante a la solidaridad, e hizo suyo el empeño de
dejar un Sinaloa más consolidado y con una mejor conciencia social. Por tantas horas de
entrega a tan noble causa, reitero mi gratitud a mi esposa Esthela.
El patronato estatal de promotores voluntarios consolido en este sexenio sus
objetivos institucionales de participación ciudadana, en la promoción y coordinación de
acciones solidarias del pueblo sinaloense, mediante la ejecución de programas plenos de
beneficio social. Por tal motivo, merece nuestro más profundo agradecimiento.
SALUD PÚBLICA
La salud es causa y efecto del desarrollo social. En Sinaloa la evolución de los
niveles actuales de salud son el resultado de una serie de conquistas sociales que han
permitido elevar el nivel de vida y aumentar las perspectivas del goce cada vez más amplio
de mínimos de bienestar social, entre los cuales los servicios de salud representan papel
fundamental.
El adelanto de estos servicios ha permitido en nuestro país, el establecimiento de
una garantía constitucional para el derecho a la protección de la salud de todos los
mexicanos: este derecho lleva implícito el compromiso gubernamental de apoyar el
desarrollo de un sistema capaz de proveer atención completa y homogénea a toda la
población.
Los indicadores de salud en Sinaloa, han mostrado un curso claramente favorable en
las últimas décadas, que se ha visto acelerado durante el período de la actual administración
estatal.
Así, los registros más sensibles para la prolongación de vida han aumentado de 65.2
años en 1980 a 66.4 en 1985, cifra mayor al promedio nacional que en este período fue de
65.8 años.
La mortalidad general ha descendido de 4.3 por mil habitantes en 1980 a 3.6 en
1985 y la mortalidad infantil registra también un sensible descenso durante este período que
ha variado de 14.5 a 6.9 por mil nacidos vivos, respectivamente.
En relación a la morbilidad, la información disponible indica que ha ocurrido un
notable descenso en la incidencia de enfermedades prevenibles por vacunación en estos
últimos seis años.
Los programas de vacunación en Sinaloa se han significado por una ejemplar
coordinación de todos los niveles de gobierno en apoyo al sector, que se ha traducido en
740 mil 699 niños menores de 5 años, protegidos contra el sarampión y 662 mil 68 menores
de 15 años, protegidos contra la tuberculosis.
Debo señalar especialmente, el programa “Días Nacionales de Vacunación contra la
Poliomielitis” que se instrumentó durante el presente año, con aplicación de un millón 125
mil 820 dosis durante tres jornadas.
Estas fueron realizadas gracias a una movilización social sin precedentes en nuestro
Estado, lo que hace posible pensar en términos de erradicación, para un futuro mediato de
enfermedades tradicionalmente endémicas en Sinaloa, como la poliomielitis y el sarampión.
Dado nuestro panorama epidemiológico en transcisión, se ha puesto cuidado
especial al incremento de programas preventivos de enfermedades crónico-degenerativas;
durante la presente administración se realizaron 501 mil estudios para detección de diabetes,
542 mil para hipertensión arterial y 283 mil para cáncer cérvico-uterino.
Logro importante durante este período, ha sido la ampliación de la cobertura de
servicios de primer nivel y la introducción de algunos programas de salud pública.
Merece mención particular, el señalamiento de problemas regionales de salud que
no han sido abatidos y que reclaman una atención integral inmediata, como lo son el
paludismo, la lepra y el dengue, para los cuales se han reestructurado programas especiales
que deberán reforzarse hasta lograr que en un corto plazo la incidencia de estos
padecimientos se sitúe en un nivel de control epidemiológico.
Durante este año, el sector salud en Sinaloa proporcionó tres millones 407 mil
consultas médicas, 98 mil egresos hospitalarios, 35 mil partos y 48 mil intervenciones
quirúrgicas, proporcionadas en 264 unidades de salud en las que laboran 7 mil 680
profesionales.
Esta infraestructura de servicios de salud se apoyó durante mi gestión con una
inversión destinada a la construcción, remodelación, rehabilitación y equipamiento, a través
del convenio único de desarrollo, en 28 unidades de salud.
La descentralización de los servicios de salud se enmarca en el propósito de facilitar
la descentralización de la vida nacional.
Se han elaborado en Sinaloa instrumentos programáticos como el modelo de
servicios, el proyecto de regionalización y el programa estatal de salud, con lo cual se
sientan las bases para la consecución de los descentralización de estos servicios.
Estas importantes aportaciones de los sinaloenses al Sistema Nacional de Salud,
significan por sus propósitos una reordenación del pacto federal para que las entidades
estatales armonicen sus responsabilidades en el ámbito de la salubridad.
Reconozco la eficiencia del Hospital Pediátrico “Dr. Rigoberto Aguilar Pico”,
organismo descentralizado del Gobierno del Estado, incorporado al sector salud que presta
una amplía cobertura social, ya que el 71 por ciento de sus pacientes lo constituyen hijos de
jornaleros, ejidatarios, vendedores ambulantes y sub-empleados, el 25 por ciento hijos de
obreros y solo el 4 por ciento de profesionistas.
A las nobles instituciones como la Cruz Roja Mexicana, el Instituto Mexicano del
Seguro Social, el ISSSTE, a los Hospitales Civiles de Culiacán, Mazatlán y Los Mochis, a
los grupos comunitarios del DIF e IMSS-COPLAMAR, a los servicios coordinados de
salud pública en el Estado, a la Secretaría de Salud y a todas las instituciones y
establecimientos médicos, hospitalarios y sanitarios de Sinaloa, a su personal directivo,
médico, de enfermería y administrativo, agradezco el esfuerzo que han hecho en estos seis
años por llevar vida y salud a los sinaloenses.
DESARROLLO URBANO
Desde el inicio de esta administración se fijaron como directrices de la política de
desarrollo urbano cuatro objetivos genéricos: crear reservas territoriales para preveer el
futuro crecimiento de los centros poblados, promover y construir fraccionamientos y
viviendas destinadas preferentemente a la población de ingresos bajos; regularización de la
tenencia de la tierra y la introducción de servicios básicos.
Actualmente disponemos del plan estatal de desarrollo urbano, de 18 planes
municipales y 21 planes directores de centros poblados y muy importantes reservas
territoriales en Ahome, Culiacán y Mazatlán.
Para atacar la problemática del desarrollo urbano, en mayo de 1983 se creó como
organismo público descentralizado del Instituto de Vivienda del Estado de Sinaloa.
En junio de ese mismo año, el Gobierno del Estado suscribió con la federación,
representada por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología y la Secretaría de la
Reforma Agraria, un convenio que da vida al “Comité Estatal para la Creación de la
Reserva Territorial para el Desarrollo Urbano e Industrial y Regularización de la Tenencia
de la Tierra”.
Con estos organismos, Sinaloa pasó a ser uno de los primeros estados del país que
cuenta con las bases normativas y operativas, que permiten la participación plural y
coordinada de organismos públicos y privados para la atención de los requerimientos que
marca el desarrollo urbano de la entidad.
VIVIENDA POPULAR
La construcción de Vivienda Popular forma parte de una estrategia general de
desarrollo, orientada a satisfacer una apremiante necesidad social, a más de multiplicar las
fuentes de empleo.
Las acciones de organismos como INFONAVIT, SEDUE Y FOVISSSTE, tienen
como destino a los asalariados del sector obrero y empleados públicos que cuentan con
empleo fijo; en cambio, el Instituto de Vivienda orienta sus actividades a los grupos de no
asalariados o sub-empleados, llevando a cabo una permanente oferta de vivienda y lotes
con servicios para la edificación.
Así, en los últimos tres años, el Instituto de la Vivienda habrá implementado 7 mil
981 acciones de vivienda con beneficios para 39 mil 905 habitantes, distribuidos en las
ciudades de Culiacán, Mazatlán y Los Mochis, con una inversión de 2 mil millones 364 mil
pesos.
El Infonavit ejerce en este año una inversión de 7 mil 435 millones de pesos, en mil
580 acciones de vivienda, distribuidas en las ciudades de Los Mochis, Guamúchil, Culiacán,
Navolato y Mazatlán.
Por su parte el Fovissste edifica en el presente año 698 viviendas en las unidades
habitacionales del módulo “Esperanza” de la ciudad de Mazatlán, mediante una inversión
de 2 mil 817 millones de pesos.
Los programas emprendidos en materia habitacional durante este sexenio no se han
interrumpido, pese a la situación económica desfavorable que aqueja al país, toda vez que
se estima que la satisfacción a tan ingente demanda es viable alternativa para un más
ordenado y armónico desarrollo social.
ISSSTESIN
A fin de cumplir con los objetivos para los que fue creado, este organismo en el
período 81-86 ha otorgado prestamos a corto plazo, hipotecarios y para la adquisición de
bienes de consumo duradero, con una erogación de 2 mil 464 millones de pesos.
La institución, en el lapso de referencia, brindó servicios a 10 mil 550 maestros en
activo y mil 333 maestros jubilados y pensionados, así como a 463 empleados.
Al iniciarse esta administración, el activo total de ISSSTESIN fue de 751 millones
de pesos y para julio de este año alcanzó 8 mil 378 millones; las ventas de las tiendas que
fueron de 93 millones, se incrementaron a 5 mil 881 millones, en tanto que las reservas de
532 millones pasaron a 5 mil 295 millones.
CIUDADANOS DIPUTADOS
El informe que acabo de rendir pone de manifiesto la realidad de los servicios, las
acciones y las obras ejecutadas y pretende medir el avance de los programas que me trace
desde el inicio de mi gestión, convencido de que dichos programas eran la expresión de la
cabal voluntad popular.
A mes y medio de concluir el período para el que tuve la honra de ser electo
Gobernador Constitucional del Estado, me llevo la más grande satisfacción porque en el
desempeño de nuestra responsabilidad, conté con la confianza y el respaldo que el pueblo
de Sinaloa, invariablemente nos otorgara.
Así alcancé la inestimable oportunidad de servir con empeño y convicción a más de
dos millones de sinaloenses, a fin de encauzar ese gran esfuerzo colectivo para colocar y
mantener a esta entidad en los primeros niveles de productividad y bienestar general.
Abrazamos con pasión las tesis revolucionarias, porque al buscar la transformación
social, creímos dar cumplimiento a la protesta que formulamos ante los sinaloenses el
último día de 1980, de cumplir y hacer cumplir la ley. Esta responsabilidad la pudimos
ejercer sin escatimar esfuerzos y voluntad.
No estamos del todo satisfechos, porque frente a lo obtenido, subsisten grandes
necesidades y rezagos que no pudimos colmar o remediar, no obstante el esfuerzo realizado,
ya que a la solución de diversos problemas sobrevienen nuevos requerimientos que el
incesante desarrollo social trae consigo.
Y no estamos conformes, pues solo las sociedades inertes son ajenas a carencias y a
conflictos que la dinámica del tiempo y del desarrollo generan.
De ahí que la voluntad política tenga que optar con lucidez, entre lo necesario y lo
urgente y entre lo posible y lo deseable, pero también visualizar con responsabilidad las
exigencias de lo por venir, a efecto de ir reduciendo esos rezagos y carencias.
Nuestros actos fueron guiados invariablemente con nobles propósitos y firme
decisión y nunca la indiferencia o la apatía fueron respuesta a las más sentidas demandas
surgidas del interés de la comunidad.
No hicimos por hacer, sino por ser. A toda solución se antepuso la razón; todo
programa u obra se sujetó a estudio y a nuestras posibilidades presupuestarias y cualquier
falla jamás obedeció al cansancio o a la indolencia.
No seriamos sinceros y faltaríamos a la verdad, si omitiéremos decir que a lo largo
de nuestro ejercicio hubimos de afrontar problemas, situaciones difíciles y contingencias
que sin duda nos preocuparon; pero por delicados que hayan sido los factores desfavorables,
ya de la naturaleza o de la malicia, mayor fue la tenacidad puesta en superarlos.
Activamente dedicados durante seis años a liquidar infecundas parcialidades que
afectan la unidad imprescindible del ejercicio político, ahora cumpliremos también con el
deber ciudadano de entregar el poder sin reservas y sin resentimientos.
Esta actitud será invariable dentro de la cordialidad con que habremos de recibir al
nuevo titular del poder ejecutivo, quien siempre contará con nuestra adhesión y respeto.
A todos y cada uno de los ciudadanos, hombres y mujeres que integraron mi equipo
de gobierno, les expreso las gracias más cumplidas por la invaluable colaboración que me
brindaron.
Las vastas promociones requeridas por Sinaloa, no pueden medirse por períodos
sexenales ni por individuos que somos transitorios: lo trascendente es la marcha
institucional de la vida pública, lo importante, la continuidad creadora, lo permanente, el
bienestar y el progreso de los sinaloenses.
El más sincero reconocimiento a todos quienes han hecho posible esta tarea, los
habitantes de Sinaloa, cuyas virtudes de trabajo y esfuerzo han inspirado, sostenido y
alentado la obra colectiva que a todos pertenece.
La autoridad del estado es la indispensable fuerza que coordina las voluntades de
los ciudadanos, y solo pide de ellos la comprensión de que sus finalidades, en obras y
servicios, son idénticas a las que realiza el individuo para obtener su bienestar: un trabajo y
un propósito que debe renovarse, como si cada día fuese el primero y el último de todos.
El crecimiento equitativo y la transformación con justicia social son, en Sinaloa y en
México, condiciones insustituibles de supervivencia.
Un auténtico consenso popular para el desarrollo, debe vencer, por igual, la
trastornada extravagancia de propósitos reaccionarios, la intransigencia ideológica y el
inmaduro aventurerismo político, que atentan contra la democrácia porque se teme al poder
de las mayorías.
Conscientes de que el federalismo es forma irremplazable de nuestra organización
política, todo cuanto hagamos para fortalecerlo, contribuirá a garantizar el progreso de
nuestro pueblo.
Me es muy satisfactorio reconocer toda la colaboración y el apoyo que Sinaloa ha
recibido en estos últimos seis años del Gobierno de la República, cuando cada una de sus
dependencias y cada uno de sus hombres, han tenido algo que ver en el logro de esfuerzos y
consecución de fines.
En los primeros dos años de nuestro gobierno, el entonces Presidente de México,
José López Portillo contribuyó con su apoyo y afecto a delinear diversas obras para el
progreso de Sinaloa.
Después, por el voto de los mexicanos, asumió el mando de la República, un
ciudadano ejemplar que en estos últimos cuatro años nos ha prodigado su comprensión y
respaldo para que los sinaloenses sigamos avanzando: el señor Presidente Miguel de la
Madrid.
Por eso deseo dejar constancia de mi respeto, reconocimiento personal y solidaridad
ciudadana al hombre que en momentos críticos de México, ha gobernado con serenidad y
con firmeza, demostrando patriotismo en su incansable entrega a las mejores causas
nacionales y cuyo propósito más constante es el de propiciar el mejoramiento y la unidad
de todos los mexicanos.
También deseo expresar mi distinguida consideración a los integrantes de la anterior
y de esta Honorable Legislatura; a los señores magistrados y demás miembros del Poder
Judicial y a las autoridades municipales de los dos últimos trienios, con los que me
correspondió compartir responsabilidades y tareas.
Para quien habrá de relevarnos en el mando, el candidato electo al cargo del
Gobernador Constitucional del Estado, formulamos nuestros mejores votos porque su
gestión al frente de los destinos de Sinaloa sea fructifera.
Que se cumpla llena de realizaciones, benéficas en todos sentidos para el pueblo que,
bajo las siglas de nuestro partido, el revolucionario institucional, lo hizo su abanderado y lo
llevó al triunfo en unas elecciones pacíficas, civilizadas y democráticas: el señor licenciaco
Francisco Labastida Ochoa.
Finalmente, seame permitido, a través de vuestra representación, señores diputados,
dirigirme al pueblo sinaloense para reiterarle en mi nombre y en el de mi familia, nuestro
agradecimiento por habernos concedido el privilegio de servirlo.
Desde el primero de enero de 1981, nos planteamos consolidarle un mejor destino a
Sinaloa. Con los compromisos cumplidos y las metas alcanzadas, sólo desempeñamos
nuestro deber, dando logro a una aspiración, de no ser así, quedamos sujetos al posterior e
inapelable juicio de los sinaloenses.