historia de una guerra - huehuetenango

7/28/2019 Historia de Una Guerra - Huehuetenango

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Huehuetenango:

historia de una guerra


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Huehuetenango:

historia de una guerra

Paul Kobrak


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isbn: 99922-69-53-7

Autor: Paul Korak Cetro de Etudo y Documetac de la Frotera

Occdetal de Guatemala cedfog

Prmera edc: arl de 2003seguda edc: eero de 2010

cedfog

1a. calle 0-127, zoa 1Huehueteago, GuatemalaTelefax: (502) 7769-1108 y (502) 7769-0474Correo electrco: [email protected] / [email protected] we: www.cedfog.org

Edc a cargo de: Eddy Roma y Gerardo Gueacon colaboracin de Ana Coo K.Diseo de portada: Oswaldo Morales

Foto de portada: Yalambojoch, Nentn, Huehuetenango, 1992Autor: Hery sach/ikace

Foto de portadilla:Comatete del egpy habitantes del lugar sobre la pirmide en la nca SanFrancisco, Nentn, meses antes de que el Ejrcito Nacional aniquilara a todala comudad (colecccirma).

La primera edicin fue posible gracias al apoyo de Fundacin Ford.

La presente publicacin fue posible gracias al apoyo deFudac soro Guatemala

Magna Terra editores5a. Avenida 4-75 zona 2, ciudad de GuatemalaTelfonos: 2238-0175, 2250-1031 y 2251-4298 / Fax: 251-4048Corre electrnico: [email protected] web: www.magnaterraeditores.com


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Huehuetenango: historia de una guerra

Prlogo a segunda edicin 9

Luis pedro Taracena arrioLa

1. Introduccin 33

1.1. Por qu este libro 35

1.2. Cmo uar ete lro 37

1.3. Lo atecedete de la guerra 39

2. La guerrilla en Huehuetenango 49

2.1. El Ejrcito Guerrillero de los Pobres 49

2.2. Guerrilla y pueblo 61

2.3. Huehueteago, terrtoro lerado 77

3. El ejrcito y las masacres 89

3.1. El ejrcito de Lucas Garca 91

3.2. El golpe de Ros Montt 101

3.3. Julo egro, 1982 105

4. Campesino contra campesino 123

4.1. La pac 123

4.2. Lo refugado 138

4.3. La guerra sin n 150

ndice

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1. Introduccin 33

1.1. Por qu ete lro 35

1.2. Cmo uar ete lro 37

1.3. Lo atecedete de la guerra 39

2. La guerrilla en Huehuetenango 49

2.1. El Ejrcto Guerrllero de lo Pore 49

2.2. Guerrilla y pueblo 61

2.3. Huehueteago, terrtoro lerado 77

3. El ejrcito y las masacres 89

3.1. El ejrcto de Luca Garca 91

3.2. El golpe de Ros Montt 101

3.3. Julo egro, 1982 105

4. Camesino contra camesino 123

4.1. La pac 123

4.2. Lo refugado 1384.3. La guerra sin n 150

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5. La az en Guatemala 157

5.1. Lo Acuerdo de Paz 157

5.2. La hereca de la guerra 162

5.3. La paz incumplida 168

Anotaciones 173

Bibliografa 187

ndice de maas, cuadros, imgenes y fotografas

Mapas

Municipios del departamento de Huehuetenango 34

Huehueteago y regoe etolgtca 40

Guatemala con el rea de operaciones de

los diferentes grupos guerrilleros 57El camino del capitn Castillo 108

Rutas de desplazamiento en Huehuetenangoy zonas de refugio en Mxico y Quich 142

Campamentos de refugiados en Mxico 145

Cuadro

se mee de aotaje guerrlleroe Huehueteago, 1982 79

Ataque del egp contra municipalidades enHuehueteago 83


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Matanzas y desapariciones cometidaspor el ejrcito de Lucas Garca 96

Matanzas y desapariciones cometidaspor el ejrcito de Ros Montt 112

Hechos de violencia en tiempo de las pac 132

Imgenes

El logotipo del egp co La mage eteradel guerrllero heroco Ereto Che Guevara 55

Ficha estudiantil Claymorazo, Q1 86

Volate guerrllero drgdoa los patrulleros civiles 132

Fotografa

Todoatero e arma 62

Comatete guerrllera 67

Nios con armas de madera 68

Las Fuezas Irregulares Locales en San Miguel Acatn 70

Auto quemado e la carretera 82

Regtro del ejrcto e la carretera 95

Hombres masacrados por el ejrcito 118

Patrulleros civiles de Xixviac, Aguacatn 128

Patrullero civil limpiando su arma 137Mujer desplazada con sus hijos 140

Servicio catlico clandestino en Ixcn 144

Nios de la nca San Francisco, Nentn 171


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Progo a segunda edcnProgo a segunda edcn

Somos no slo aquello que nos contamos nosotros mismos,

sino tambin, aquello que nos atrevemos a recordar

(Manuel Cruz)

Una ucha doorosa

Este libro fue escrito para que los y las huehuetecas quevvero la guerra1 y quienes nacieron despus entien-dan mejor lo que pas. El autor nos cuenta la parte de laguerra que se desarroll en el departamento de Huehuetenango,aunque sta se vivi en la mayora de departamentos del pas, enunos con ms fuerza que en otros. Fue este un enfrentamientomilitar surgido por las exclusiones polticas y dur ms de tres

dcadas, entre 1960 y 1996. Adems afect a varias genera-ciones, desde bisabuelos y bisabuelas hasta nuestros padres, ytam a mucho de lo que hoy ha comezado a er adul-tos. La guerra no est lejana. Hace unos aos se rm la pazy se termin el enfrentamiento con las armas, pero la mayorala recordamos o siempre hay alguien que nos la recuerda. Laguerra es parte de nuestra experiencia y de nuestra poca. Esa

1 Es conocida ocialmente como conicto armado interno para denir que fue un enfren-tamiento armado entre el gobierno y las fuerzas opositoras, que no alcanz militarmentegrandes proporciones entre los combatientes. Se diferencia de la idea de guerra quegeneralmente se reere al enfrentamiento de dos fuerzas militares en similares condi-ciones. Mucha gente la nombr como la violencia pues su recuerdo fundamental delperodo es de las grandes matanzas. Nosotros seguiremos usando la palabra guerra,que fue la que el autor ecog.


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guerra se ve como algo histrico, como algo que ya pas, peronos sigue impactando el drama humano que la acompaa y lo

escandaloso de algunos de sus hechos. Tambin, por la deudaque teemo co lo que o murero. Como djo u ore-viviente de los campos de concentracin alemanes: Olvidar alos muertos es matarlos de nuevo; es negar la vida que ellosvivieron.2

En esa guerra murieron alrededor de 200,000 personas3y muchsimos ms vivieron los castigos y los abusos en carnepropia.4 El mayor nmero de vctimas se produjo entre 1981 y

1983, durate lo goero de Romeo Luca Garca y EfraRos Montt. La mayor parte de la responsabilidad de esas muer-te y auo fue de lo memro del Ejrcto del goero y delas patrullas civiles. Muchos de los que sobrevivieron han tenidoque vvr e codcoe muy dfcle y co coderale ufr-miento. Por eso, la primera pregunta que siempre acompaaa los que relatan algo sobre la guerra es cmo y por qu ha derecordare algo ta doloroo.

Lo hecho de la guerra dejaro mucho dolor y muchaveces sus imgenes regresan a nuestra mente y nos atormentan.Eso se llama trauma. Al tener prdidas tan duras como sucedie Guatemala o ale etmeto que mucha vece osabemos cmo dominarlos: negamos que la persona queridahaya desparecido, queremos entender por qu pas la tragedia

2 Weel, Ele. Prefaco e Academa Uveral de la Cultura Por qu recordar?

Buenos Aires, Argentina: Granica, p. 12, 2006.3 Com de Eclarecmeto Htrco. Guatemala. Memoria del silencio. Guatemala:CEH, Tomo I. pp. 71-73. 1999.

4 Para mejor formac vae el iforme de la CEH. Guatemala. Memoria del silencio,Guatemala: CEH, 11 tomos, 1999. Ocina de Derechos Humanos del Arzobispadode Guatemala. Informe del Proyecto Interdiocesano de Recuperacin de la MemoriaHtrca. Guatemala Nunca Ms. Guatemala: REMHI. 4 tomos, 1998.


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y no sabemos cmo explicarlo; tenemos mucha rabia contra losque hicieron eso o contra las personas que no sufrieron, como

nosotros; nos culpamos por su muerte o buscamos quien es elculpable; nos desesperamos y lloramos constantemente; nosvienen los recuerdos a cada rato y eso nos pone ms tristesy couelo, y algua vece etmo que queremo morrpara ya no seguir sufriendo. El resultado es que desconamosde los que nos rodean, preferimos estar solos y creemos queno hay nada que pueda ayudarnos.

Uno puede pasarse mucho tiempo con esos sentimientos y

o ecotrar alda que la ayude a etre mejor. Por eo enecesita superar el duelo. Es decir, esa necesidad que tenemostodos de entender la prdida de alguno de nuestros seres que-rdo o que etaa cercao a ootro, y que u aueca, apesar de recordarse con sufrimiento, ya no nos angustia y nosimpide ver lo que falta por hacer en adelante. Es necesario su-perar el dolor que se tiene en el corazn cuando una o muchaspersonas, o comunidades enteras recuerdan lo que vivieron,

oyeron o vieron. Por eso lo primero es recordar. Al hacerlo setiene que aceptar lo que pas y dar una explicacin que nossirva para el futuro. Para lograr eso es importante hablar, porah se comienza. Segundo, es necesario encontrar una interpre-tacin seria de lo que pas. Es decir, recoger los datos que nospermitan reconstruir lo ocurrido y poder darle una explicacinque vaya ms all de nuestros odios o lealtades. Tercero, hayque comucar lo que aemo.

Cuando se ha hecho todo eso, entonces, es posible comen-zar a olvidar y encontrar la paz interna que se necesita paraseguir viviendo. Algunas veces se tiene ayuda para enfrentarlos dolores y las dudas que tenemos, pero normalmente esaayuda es muy poca o muy difcil de que llegue a mucha gente,


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especialmente en aquellos lugares muy lejanos. Adems, unaherida como sta necesita bastante tiempo para sanar. Los go-

biernos tampoco la apoyan de manera masiva. En Guatemala,la mayora de la vctma ha tedo que aar co la ayuda depersonas que tienen autoridad entre la comunidad, sacerdotes,guas espirituales, comadronas o amigos y parientes. Slo unospocos han recibido atencin de gente especializada.

Mrando a pasado

Hay dos formas muy importantes de recordar colectivamenteeste tipo de situacin, aunque no son las nicas. Una es la historiay la otra la memoria. Se parecen pero son diferentes manerasde ver el pasado. Con la historia buscamos saber qu pas,con la memoria recordamos lo que nos pas. Este es un librode historia y no de memoria, pero su lectura puede inspirar ala memoria. Su reedicin seala el inters de muchas perso-nas por saber lo que pas en Huehuetenango. Los lectores seenterarn de muchos hechos sucedidos y a otros les ayudar arecordar lo que les pas. Si hay inters, posiblemente unos yotros comentarn sobre todo esos hechos que han ledo.

HsoraLa forma de recordar el pasado que nos ensean en la escuela esel de la htora. ta cueta todo aquello que aemo orelos hechos que ya pasaron y sobre las personas que vivieron

ate que ootro. La htora o dce que quee vvmo hoyen Guatemala tenemos un pasado comn. Ese pasado comnnos lo cuentan a travs de los principales acontecimientos queformaron a Guatemala como un pas. Esa historia est llena


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en la historia ocial se preere mencionar slo los hechos queestn muy lejanos en el tiempo. Segundo, no se quiere hablar

de esos hechos ms cercanos a la vida de abuelos y padres,porque generalmente tendran que incluirse cosas muy tristes overgonzosas, as como demostrara las grandes dicultades questos han vivido. Tercero, porque a las historias de las gente yde los pueblos no se les da importancia.

Uo de eo acotecmeto que toc a todo lo guate-maltecos pero del que no se cuenta mucho es la historia de laguerra o conicto armado como los conocen algunos. Bas-

tantes libros se han escrito, durante el largo perodo de la guerra,ore todo e el extrajero. Pero, e lo lro de texto de laescuela se dice muy poco al respecto y los maestros preerenno tocar el tema, aunque est incluido en el currculo. Adems,lo maetro o tee materale que le ayude a eteder ytramtr ee tema a lo alumo.

Esta historia se calla porque ha dejado muchas heridas.Muchos la miran con vergenza y otros con dolor o rabia. Se

calla porque los gobiernos fueron responsables y preeren quenos se hable de ello. Se calla porque los victimarios se sientenganadores e imponen su miedo. Se calla porque aunque muchagete ae atate de lo que le ocurr, lo que cooce loes una parte pequea y trata slo de algunos momentos de laguerra, ya sea porque ocurrieron cerca de donde vivan o alguienles cont. El resto de la historia o lo que pas en otros lados noe cooce. A, e dfcl ur u htora co la htora de la

dems personas que vivieron cosas parecidas.El autor cetra u atec e lo que ocurr e Huehuete-

ago y va recatado lo que exte e documeto y e etre-vistas con gente que tuvo participacin en este departamento.En ocasiones ubica la informacin en el plano nacional e ter-


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nacional para que se vea cmo se produce la guerra en otroslado y cmo ea guerra tam tuvo que ver co lo hecho

que pasaban fuera de Guatemala. Busca explicar la guerra alo largo del tiempo, desde sus antecedentes polticos y socialeshasta la rma de la paz. Es importante ver cmo cuenta el iniciode la guerrilla, en lo nacional como en el departamento y enla zona del Ixcn, que fueron dos procesos muy relacionados.La informacin se concentra entre los aos de 1979 y 1983,cuando la guerra fue tuvo su momento ms intenso.

Evidentemente, la lectura nos deja muchas preguntas y

queremos saber ms. Guatemala tiene una larga historia del usode la violencia como recurso poltico y de los grupos de podermandando y exigiendo obediencia. Y, tambin de los gruposde oposicin conspirando. En el fondo existe en Guatemalauna larga historia de exclusin poltica y social. Pero siempreteemo la duda ore cmo e llega a ua tuac dode laarmas se convierten en la nica voz? Otras preguntas servirnpara responder por qu se llega a una violencia tan extrema?

La represin en Amrica Latina ha sido una constante en suhistoria, pero el grado de crueldad alcanzado en la guerra enGuatemala tiene pocas comparaciones con otros pases. Elejrcito justic las grandes matanzas diciendo que eso se de-bi a que mucha gente apoyaba a la guerrilla y tema que eseapoyo llegara a ser imparable.5 Entonces, hay que preguntarsepor qu se uni la gente? La mayora de combatientes habansalido de los pueblos y muchas familias, personas y gruposse unieron a la guerrilla porque vieron en ella una esperanza.

Alguo autore te e que e caa ua reel cam-5 Vae Jefer schrmer. Intimidades del proyecto poltico de los militares. Guatemala:

FLACsO, 1999.6 Vase por ejemplo Manolo Vela. Masas, armas y elites. Guatemala 1820-1982,

Guatemala: FLACsO, 2008.


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pesina.6 De ea maera, ua larga htora de reteca y ladea de la revoluc e uero. La guerrlla vo el trufo e

ese apoyo y cometi muchos errores. A pesar de no ser pocoslos colaboradores de la guerrilla que habla el ejrcito, podanser controlados sin recurrir a las grandes masacres, pero elejrcito preri como estrategia atacar a la poblacin antesque la guerrlla.7 Mucho lo explica el miedo a perder el poder,pero tambin al hecho de que muchos de los insurrectos erandgea. E Guatemala exte ua larga htora de racmoque o da lugar a lo dgea.

Al nal pelearon campesinos contra campesinos y lasconsecuencias fueron gran desconanza, miedo y silencio. Losefectos de la guerra no explican todo lo que hoy estamos vivien-do, pero sus efectos perduran en la gente, a veces sin que tengaconciencia de eso, pero es evidente que mucha gente sac unaprendizaje de violencia. Y hoy recurrimos a la violencia comopan de cada da.

Memora8

Otra forma de ver el pasado es la memoria. Esto es cuando re-cordamos las experiencias que hemos tenido y tambin las quenos han contado. La guerra nos dej experiencia de luchas ytam de mucho ufrmeto. Cada uo de ootro recuerda

7 Gramajo, Hctor. De la guerra a la guerra: la difcil transicin poltica en Guate-

mala. Guatemala: Fodo de Cultura edtoral, 1995.8 Para eta ecc o hemo aado e Elzaeth Jel. Los trabajos de la memoria.Madrid: Siglo XXI, 2002; Academia Universal de las Culturas Por qu recordar?Buenos Aires, Argentina: Granica, p. 12, 2006; Raquel Olea y Olga Grau. Volver a lamemora. satago de Chle: Lom edcoe y Laorada, 2001. sadra Lorezao yRalph Buchenhorst. Polticas de la memoria: tensiones en la palabra y la imagen.Mxico: Universidad del Claustro de Sor Juana, 2007.


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algo. En ocasiones compartimos parte de esos recuerdos conotras personas que vivieron cosas parecidas. Algunas veces pue-

de er recuerdo muy trte y o afecta mucho halar oreello. Pero, otra vece, al halar y ver que como lo otrotam lo hace, ayuda a etr meo dolor y a darle u g-nicado a lo que pas.

La memoria es importante porque tiene que ver con nuestradetdad. La memora o da cotudad co lo que hemohecho y lo que somos. Por ejemplo, los pueblos mayas hanmantenido una memoria que les ha permitido saber quines

o y de dde vee. Co orgullo quere motrare comotales ante el resto. La memoria se apoya en el recuerdo. Todosrecordamos cosas que nos han pasado, que hemos ledo o lashemos sabido por otras personas. Muchas veces traemos esosrecuerdos al presente. A veces, estos recuerdos nos vienen depronto, incluso cuando pensamos de cosas que no tienen mu-cho que ver, pero en nuestra mente algo las asocia y brincane uetra caeza. Lo recuerdo tee que ver atate co

lo que nos ha sorprendido e impactado en otros tiempos. Es-to e relacoa co uetra emocoe y al recordarlo oprovoca alegra, tristeza, extraeza, rabia y otras impresionesms. Los recuerdos estn muy vinculados a los sentimientos, noson slo productos del pensamiento ni imgenes que tenemosjas en nuestra mente. Lo que recordamos es aquello que nosimpact. No recordamos las cosas tal como fueron en realidado en los tiempos exactos que sucedieron, sino lo hacemos conpedazos de recuerdos que unimos, aunque se hayan producidoen distintos momentos. Los recordamos porque son signicati-vos para nosotros, pero no son una reconstruccin minuciosade lo que pas, tal como lo quiere hacer la historia.


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Cada uno de nosotros recuerda lo que le pas, pero comoo etamo olo o rodeado de otra gete, u ayuda e

muy importante para que recordemos. Esto resulta ms fcilporque esas personas tienen costumbres como las nuestras yuna cultura que compartimos con ellos. La cultura nos ayuda aeteder el mudo y ore todo a aer vvr e l. La guerrafue un hecho que conoci mucha gente. A cada quien le pasalgo. Uo huy de u caa, otro etuvo e medo de comateo ajo omardeo, alguo vo como aearo a u famlarey a otras personas. Hay quien fue perseguido y otro se fue muy

lejos de su lugar de origen. Y, as se pueden contar muchasexperiencias ms. Pero esas cosas que le pasaron tambin lessucedieron a muchas otras personas. Las personas recordamosco la ayuda de lo recuerdo de otro, geeralmete, co lade nuestra familia o con la de los grupos donde participamos,ya sean sociales, polticos o religiosos. Esos recuerdos comu-nes tratamos de interpretarlos con las ideas que tenemos perotambin con las que otros nos dicen que deben explicarse lascosas. Adems, muchas veces recordamos pblicamente a laspersonas que murieron o las situaciones que nos impactaron,de esa manera, no slo compartimos recuerdos sino tambinlos interpretamos colectivamente cuando hablamos sobre ellos.Cuando mucha gente acepta esas interpretaciones, es entoncesque creamos memoria. Y esa memoria es la que usamos cuandopensamos sobre la guerra u otros acontecimientos.

Pero la memoria no es algo jo que est ah para siempre.Puede cambiar conforme pasa el tiempo. En primer lugar, enla vida tenemos otras experiencias y esas nos sirven para verlas cosas de un modo o de otro. Segundo, con el tiempo sesaben ms cosas. Por ejemplo, la historia puede darnos muchaformac, y eo o ayuda a ver de otra forma la coa que


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pasaron y as las explicamos de otra manera. Tambin podemosestar en grupos que tienen sus interpretaciones y nosotros las

aceptamos. Entonces, cambiamos nuestra forma de ver las co-sas. Tambin puede suceder que en algn momento de nuestrasvidas podemos adoptar algunas creencias que cambian muchonuestro punto de vista. Todos esos cambios de ver las cosasse vuelven memoria si son compartidos por muchas personas.Entonces, los recuerdos se traen al presente y son importan-tes porque estn unidos a los deseos o a los sufrimientos quehoy tenemos. Adems, esos recuerdos los comunicamos y los

compartimos con otras personas y entre todos construimos unaexplicacin. As, le damos sentido a lo que pas.

Ahora bien, esas explicaciones pueden decir slo una partede lo hecho y o decr ada de otro hecho que reulta -cmodos para ciertas personas. Estas explicaciones tienen queser aceptadas por la comunidad o por el grupo donde uno seencuentra. Pero muchas veces entre la comunidad o el grupohay cosas que pueden decirse y otras que mejor no se dicen.

Es decir, no hay conanza para hablar. La guerra dej muchascomudade dode covve lo eemgo de ate. Por ejem-plo, puede haber muchos expatrulleros y a ellos no les interesanque se digan ciertas cosas que hicieron pues sienten que lospueden acusar ante la justicia, entonces amenazan a aquel quequiera decirlas. Adems, est la situacin en que las personastienen miedo y slo dicen aquellas cosas que estn permitidasy que no daan a nadie. Los otros temas ni se tocan. Tambin,puede ser que alguien haya vivido cosas horribles y no consigalas palabras para poder describirlas. Las masacres o la torturadejan muchas heridas en nuestros cuerpos y cabezas, y es difcilhalar ore todo eo.


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Con el tiempo muchas cosas se olvidan porque uno nopuede recordar todo o porque uno preere olvidar ciertas cosas.

Adems, podemos callar por miedo a que lo que digamos nosdae o daemos a otras personas o porque nos obligan a nodecirlas. Como vimos arriba, el dejar pasar el tiempo para queel dolor se borre puede ser necesario para que podamos viviren paz. Pero, cuando se trata de obligar a que las personasolviden algo, en realidad slo nos callamos pero no olvidamos.Los recuerdos pueden saltar ms tarde. Por eso es importantecuado querramo halar ore uetro ufrmeto que haya

personas que quieran escuchar.La memoria es parte de la experiencia colectiva. Esta cir-

cula cuando se habla y se dicen las cosas que nos han pasado.Hay muchas personas que no vivieron lo mismo. Por ejemplo,no vieron masacres ni tuvieron familiares asesinados, pero lamemora de la maacre e tramte y ta a haervvdo eo hecho llega a coderarla como u memora.Tambin pasa eso con los hijos o los nietos. No vivieron la

experiencia de sus abuelos o padres pero conocen su memoriay la convierten en suya. Esto es as, porque ven en sus padreso abuelos personas con mucha autoridad, aceptan lo que ellosdicen y les creen. Cuando la memoria es compartida, todostratan de que haya otras personas que la escuchen y quieren questas se identiquen con su memoria. Para eso hace falta quetengan las palabras adecuadas para transmitirla entre la gente,palabras que la gente comprenda y que estn de acuerdo con susformas culturales. Tambin hace falta que haya una conanzasuciente para no tener miedo a hablar. Cuando se comparteuna cultura y existe quienes la transmiten con las palabras oe lro, moumeto y otra coa que ayuda a recordar,entonces se arma la memoria.


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La memoria sirve para dar un sentido a lo que ya pas.Ese sentido es importante en el presente para pensar el futuro.

Hoy en muchas luchas sociales se usa la memoria para exponerlas demandas o expectativas de lo que se quiere en el futuro.Adems, se usa para contar los testimonios de lo que pas conel inters de que la gente lo sepa o para testimoniar en juiciocontra los que hicieron cosas horribles. Y, por ltimo, tambinse usa cuando los que no vivieron la guerra hacen nuevas pre-guntas a los que s la vivieron para que les expliquen por quy cmo pas la guerra. As, la memoria es motivo de discusio-

nes polticas donde los grupos buscan que la gente acepte suverdad. Por ejemplo, los pueblos mayas apoyan muchas de susdemandas sealando que tienen una continuidad en su historia.Su memoria antes era compartida slo entre sus comunidades,pero hoy muchos quieren que la sepan y la compartan todoslos pueblos indgenas. Esta era una memoria silenciosa, hoy esuna memoria pblica. Con ella reclaman justicia para el pueblomaya actual. La memora de la guerra gue edo muy le-ciosa porque todava hay mucho miedo de hablar. Aunque hayalgua gete que hala aertamete, otro o quere aernada o tienen temor de contar, porque alrededor de ellos exis-ten personas que reprimieron y asesinaron durante la guerra yamenazan con hacer dao a todo aquel que quiera transmitirlo recuerdo.

E peo de a memora

El comentar la guerra es motivo de muchos pleitos y de variospuntos de vista que pueden estar opuestos entre s. Los des-acuerdos salen cuando se cuenta qu pas en la guerra. Unosdicen que fue es as y otros lo niegan. Por ejemplo, hay quienesdce que o huo maacre que todo e ua metra de la


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orgazacoe de derecho humao o de lo atguo guerr-lleros. Pero la gente sabe que s pasaron porque las vivieron o

las vieron. Adems, hoy conocemos bastante sobre ellas y cadavez ms se descubren los cuerpos de los asesinados para sereterrado dgamete. Otro deacuerdo urge cuado eplantea qu se quiere lograr con hacer la memoria de la guerra.Para algunos es muy importante recordar para otros no. Otradiferencia tiene que ver segn haya sido la participacin de laspersonas en ese tiempo, en qu bando estuvo o qu posicinasumi ante lo que pasaba. Otros pleitos surgen cuando se dan

las opiniones que hoy se tienen sobre este proceso. Como vimosla memoria cambia y las opiniones tambin pueden hacerlo.Hablar sobre la guerra trae muchos recuerdos de experienciasdistintas que casi siempre provocan pasin, indignacin o te-mor. La guerra no puede verse con indiferencia. Adems, noexiste una sola memoria o slo una interpretacin, sino muchasmemorias y varias interpretaciones. Y, los que promueven estasmemorias e interpretaciones buscan que sean aceptadas por elreto de la gete.

Ovdar o recordar?Existen varias posiciones sobre cul debe ser la meta para re-cordar la guerra. Algunos dicen que lo importante es conocertodos los hechos de la guerra para sacar ejemplos que ayudena que no vuelva repetirse. Esta es la actitud preventiva. Paraellos es importante conocer las causas y el desarrollo de cmo

los problemas llevan a la violencia. Por eso, conocer lo queha ocurrido ayudar a entender cunto del pasado est anpresente entre nosotros. Y ese pasado nos ayuda a entendermejor el presente que vivimos. Tiene mucho que ver con lo quehacemo hoy.


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Sus seguidores sealan que se debe estar atento en qumomento y cmo se usa la represin y el miedo para acallar

los problemas que existen hoy. Estos ponen mucha atencinen comprender cmo funcionan las fuerzas polticas, los gober-ate y la ttucoe de goero. Recuerda que exte eel pas una experiencia institucional, que viene desde pocasdictatoriales, en la que los gobiernos fcilmente recurren a laviolencia para reprimir cualquier problema. Agregan que, alconocer ese funcionamiento, se puede identicar cmo esasconductas siguen actuando en el presente. Y, sealan que creer

en las instituciones de gobierno depende mucho de lo que co-nozcamos acerca de ese pasado. Lo que pas en la guerra nopuede seguir siendo el modelo. En ese sentido, proponen quedebe llevarse a cabo un importante papel educativo entre lapoblacin, para enfrentar la tentacin de usar la violencia pararesolver los problemas o verla como algo natural, que siempreest ah. Por ltimo, nos recuerdan que los hechos son produ-cidos por hombres y mujeres de carne y hueso, y, por lo tanto,las personas pueden cambiar.

Otro aume ua acttud judcal. Eto quere coocercmo ucedero y que efectuaro la volacoe a lo de-rechos humanos, para que los culpables de tantos males seancastigados. De esa manera, buscan recuperar la dignidad de losmuertos y que los vivos obtengan justicia. Estos ponen muchaatec e coocer la verdad de lo uceddo e la guerra.Para estos exigir la verdad es importante, primero, porque losresponsables directos e indirectos hacen todo lo posible paranegar lo sucedido o hacer olvidar sus efectos. Segundo, porqueconocer al detalle cmo se produjeron las violaciones ayudara saber quines fueron los responsables y as enfrentarlos tantopenalmente como pblicamente ante la sociedad.


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Agregan que la guerra se produjo en distintos lados y afec-t a muchma gete. Etoce codera que e ecearo

conocer esos relatos y reunir informacin de lo que pas paraentender quines fueron los responsables, cmo lo hicieron, aquines afectaron, etctera. Agregan que esa verdad ayudar arecuperar la memoria, haciendo que la poblacin conozca yeteda lo uceddo y lo recuerde colectvamete. idca queal no olvidar lo que pas ayudar a honrar a los muertos y hacerjutca a la vctma de la guerra. De ea maera trata decorresponder algo que es importante para la gente: aquellos

que hicieron tanto dao deben ser obligados a enfrentar lascoecueca de u acto. La gete afectada o ve juto quea ellos se les pida perdonar y reconciliarse con los que abusaronde ello y a lo auadore o e le olgue ada. Ete e uetmeto de jutca y o de catgo o vegaza como lovioladores dicen para defenderse.

Y, hay quienes simplemente dicen que lo importante escomenzar de nuevo y no ver para atrs. Es la actitud del olvido.

Aquellos que plantean el olvido hablan de que la guerra dejmuchas heridas que deben cerrarse y para eso hay que esperarque el tiempo las borre. Si plantean que es necesario olvidar esporque saben algo de lo que pas. Tambin tienen memoriade los hechos pero preeren ocultarla. Entre los que pidenel olvdo hay do voe muy dferete etre y alguaposiciones intermedias. Primero, estn quienes lo planteancomo ua ecedad de lecar la verdad. Geeralmete, oaquellos con responsabilidad en los hechos. Los victimarios, losque ejecutaron las violaciones y aquellos que las aplaudieron,ninguno interesado en recordar sus propios actos. Estos siem-pre hablan que lo importante debe ser poner la atencin enel futuro y les molesta que la gente recuerde. Adems, buscan


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que las personas pierdan la memoria imponiendo el silencio yla censura, en espera de que el tiempo lleve al olvido. Algunos

de estos estn muy interesados en el olvido jurdico y no dejande recordar la existencia de amnistas o interpretan la ley a suacomodo, pues temen ser juzgados. De esa manera, se siguenriendo de las vctimas ausentes y presentes, pues la ltima es-peranza de toda vctima es siempre que haya quien reconozcala fama que ufrero.

En segundo lugar estn las personas en una situacin msintermedia. Estn aquellas que escogen callarse. Muchas veces

teme que memro de la comudad dode vve lo catguepor estar recordando y hablando y preeren el silencio comuni-tario. Tambin estn en esa situacin los que desean hablar perodudan de hacerlo para no incriminar a conocidos o a parientes.En tercer lugar, estn aquellos que sin ser victimarios ocultaronlo que pas, an cuando reconozcan el horror y considerenque fue malo lo sucedido. Por eso, preeren olvidar. Tienenuna memoria vergonzosa. Por ltimo estn quienes sealan

la necesidad de que olvidar es una parte necesaria para sanarlas heridas y ayude a superar los grandes sufrimientos que laspersonas viven internamente (traumas). Agregan que el estarrecordado ua y otra vez lo hecho terrle, que a u vezno logran comprender, las personas slo seguirn enfermandosus almas y no encontrarn el camino para superarlos. Por esopara ellos es necesario olvidar y no ver hacia atrs.

Pero obligar al olvido no tiene muchos resultados pues las

personas recuerdan siempre, aunque sea en voz baja, en suscaa o co u famla. Exte ua memora cladeta quecircula por debajo. Como ha pasado en otros pases que hanvivido acontecimientos parecidos, los hijos o los nietos luegopreguntan y el reclamo vuelve a surgir. Poco a poco se vuelve


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a hablar de lo sucedido. En todo este tiempo muchos se hanatrevido hacerlo, a pesar de que en sus comunidades hay miedo

y, covvr co lo que fuero u eemgo e muy dfcl, oretodo cuando estos ltimos tienen poder para amenazar.

En realidad las tres posiciones pueden no excluirse entres. La justicia es necesaria porque si no cualquiera puede hacerlo que quiere y ya que sabe no va a tener castigo. No puedenexistir gobiernos que violen las propias leyes, ni pueden existirpersonas que mandaron framente a matar a miles de personassin que sean juzgados. Es necesario que saquemos ejemplos de

todo lo que ha pasado, pero, no slo diciendo que es para queno se repita, porque nunca estaremos seguros de que no hayaotros conictos que lleguen otra vez a la violencia. Primero,debemos pensar en cmo hoy ya estamos repitiendo muchode esos hechos. No es difcil ver que ante cualquier problemausamos la violencia suponiendo que as vamos a arreglarlo,an cuando parezca justo lo que hacemos. Por ejemplo, frentea la delincuencia. Las leyes son hechas para que se cumplan

y exte eo que e llama Etado de derecho, que e dodetodos podemos recurrir para recibir justicia. Esto es algo quedeberamos exigir y no slo quejarnos que la aplicacin de lajusticia no existe. Por ltimo, hay olvidos que son tiles pero elproceso de olvidar tiene que venir de la propia gente, cuandota eta que ha aado mucha de u herda halado delo sucedido y encontrando sentido a lo que pas. Y no por lasimposiciones de los que quieren ocultar la verdad.

A estas posiciones diferentes tambin se les unen las dis-tintas formas en las personas vivieron y actuaron durante laguerra. Esta ltima incluy principalmente a la gente organi-zada o colaboradora de la guerrilla y de la oposicin poltica,as como a la que perteneci a los gobiernos, al ejrcito y a las


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fuerzas polticas que los apoyaron. Pero, tambin involucr amucha poblacin que vio con simpata a uno u otro bando y

que e alg mometo colaor co alguo de ello. no loen los actos militares o clandestinos, sino tambin por tenerabiertamente una posicin frente a lo que pasaba o porqueparticipaba en la lucha social junto con otras personas que seorganizaban para lograr objetivos comunes. No se nos debeolvdar que el efretameto armado fue lo ua de la formaen que la lucha poltica y social se produjo, aunque lleg a serla principal forma entre 1980 y 1983. Adems, hubo otras

personas que se vieron involucradas slo por vivir en el extensoterritorio donde haba organizacin armada y oposicin poltica.Una buena parte de ellos fueron reprimidos por las polticas decatgo geeral que el ejrcto llev a cao. Tam hay quetomar en cuenta como hoy las personas valoran lo que pas,pues ya han pasado muchas cosas entre el nal de la guerra yel presente. Las preocupaciones o los motivos que se tengan enel presente ayudan ms de lo que nos imaginamos a la formaen que se ven aquellos tiempos.

Se aprend a eccn?El autor aade que conocer lo que pas en la guerra es impor-tante para aquellos que se enfrentaron en ese tiempo, aprendana no atacarse uno al otro. Y seala que conociendo lo que pases posible evitar que se repita una violencia parecida. As, elconocer y entender lo ocurrido, el aprender a convivir en el

presente, y el prevenir nuevas violencias, son mensajes impor-tantes para superar la experiencia la guerra vivida en Guatemalahace pocos aos.


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Hace ms de diez aos el gobierno y la guerrilla rmaronla paz y, de esa manera, se callaron las armas. Sin embargo, la

rma de la paz termin la guerra pero no la resolvi. En seguidase pens que los problemas que motivaron la guerra deban serresueltos a travs de la participacin poltica y con medidas degoero que tomara e cueta la ecedade de todo la ylos guatemaltecos. Algunos conaban que eso fortalecera lasinstituciones democrticas. Pero antes era necesario saber sirealmente se iba a aceptar a los guerrilleros en la vida poltica, la jutca a catgar la grade volacoe de lo derecho

humanos habidos durante la guerra, y si el gobierno iba a poneratencin a las necesidades de los sectores que siempre habando excludo.

Enfrentar esos problemas era parte del reto que el gobiernoy la sociedad guatemalteca tenan por delante. En relacin conel primer reto, la guerrilla fue aceptada en la vida poltica perosu participacin ha mostrado poco liderazgo y los acuerdos r-mados fueron tomados en cuenta slo parcialmente. El segundo

reto ha caminado con muchas dicultades. Algunos juicios sehan realizado pero las pocas sentencias habidas no han satis-fecho a las vctimas. Otros juicios se han perdido en el camino;demotrado que uo de lo vecedore de la guerra fue laimpunidad es decir, el dejar pasar las injusticias y no juzgarpara no afectar intereses de grupos particulares. Y, el tercerreto, e motvo de mucha dcu. Alguo exge meddapara enfrentar la pobreza, repartir tierras y crditos a los cam-pesinos, mejorar las condiciones de trabajo y otras demandassociales. Otros se oponen diciendo que esas demandas podrnser satisfechas si primero se fortalecen a las empresas.


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En todo ese tiempo la autoridad del gobierno se ha vistodebilitada y nuevos problemas han surgido. El principal de

ellos es la violencia. Esta vez ya no como parte de una exclu-sin poltica sino como una violencia comn; es decir, la quese produce diariamente. Las violencias ms conocidas en elpresente son aquellas que van unidas a los grandes grupos dedelcueca orgazada que roa, ecuetra y aea, alcomercio de drogas o narcotrco, al contrabando de produc-tos o al transporte de personas que quieren entrar ilegalmentea Estados Unidos, coyoterismo. Este tipo de violencia no es

extrao hoy en Huehuetenango, cuya posicin fronteriza laha convertido en corredor de todo tipo de trasiego y refugio.Adems, est la violencia que se relaciona con el aumento degrupos de delincuentes; sobre todo de jvenes conocidos comolas maras. Asimismo, la que se ejecuta por el abuso de poderde funcionarios de gobierno, policas o militares, expatrullerosciviles y autoridades locales. Tambin est la violencia de laspersonas que tiene mucho poder econmico y no quieren quee lo toque. nuevamete, Huehueteago o ha etado lrede las acciones represivas de las fuerzas gubernativas frente alas protestas populares, retornando a las imgenes de tiemposatras. Asimismo, ha resurgido de la vieja prctica de las fuerzasparamilitares con la llamada limpieza social destinada a eli-mar a lo eemgo, hoy lo delcuete. Tam extela voleca de lo llamado lchameto que e ocaoacon la aplicacin de castigos en el interior de las comunidadescontra aquellas personas acusadas de robo o asesinato o como

reaccin a las la incapacidad de la polica y del sistema de justiciapara enfrentarse a robos, asesinatos, extorsiones y otros delitos.Y, por ltimo, aquella violencia cada vez ms visible cometidacotra la mujere detro y fuera de u hogare.


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La deldad del goero y el uo de la voleca dcr-mada ha creado ua eac e mucha gete de que e

vive peor o igual que cuando exista la guerra. En realidad noes posible decir que todo eso que est pasando hoy sea con-secuencia de la guerra. Pero lo que s est presente es que enel presente hay muchos conictos y stos pueden ser vistoscomo las nuevas y pequeas guerras. Algunos insisten en queea voleca tee mucho que ver co la coecueca de laguerra. Otros sealan que al no haberse mejorado las condicio-nes de vida de la poblacin hay mucha delincuencia. Tambin

hay quienes comentan que es porque ya nadie hace caso a laautoridad o al gobierno y piden una mano dura y un lder quelos dirija. Otros mencionan que es porque se han perdido losvalores y es mejor buscar un refugio divino. Otros ms indicanque vivimos una cultura de la violencia, pues, cuando algunaspersonas tienen un problema fcilmente recurren a ella parasolucionarlo. As, la violencia se vive en el presente como algomuy malo que hay que superar.

La consigna ms importante que sali al terminar la guerrafue que nunca ms deberan pasar acontecimientos como elconicto. Hoy es muy comn or que se tiene que conocer losucedido para que la guerra no se repita. Pero, para que esosea posible, no puede quedarse slo en palabras que se diceny nadie hace caso. Lo que ocurri no siempre ensea, puessu sentido est ligado a las preocupaciones que tenemos en elpresente. Vimos cmo la violencia es hoy una de las grandespreocupaciones de los y las guatemaltecas. Y, tambin hemosvisto cmo el gobierno, los grupos sociales y las comunidadesusan la violencia para combatir la violencia. An no se ha per-dido la costumbre de perseguir a los grupos sociales que pro-


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testan o realizan determinadas demandas, en especial, aquellosligados al mundo campesino, al ambiental y al del poder local.

Cmo se deben tratar esos conictos hoy? Es evidente quecriminalizar a las personas que exigen demandas no conducea nada. Hacer que la violencia no nos gane tampoco signicaque desconozcamos el derecho a exigir y a luchar por lo que lagete codera juto.

La guerra dej mucha leccoe. Ua de ella e que,enfrentar la violencia con ms violencia lleva a aumentar laviolencia. Todos sabemos cmo comienza, pero no cmo ter-

mina. Otras de las lecciones de la guerra es que fcilmente seusa la violencia porque se sabe que no se va a ser castigado.Aceptar esto debilita cada vez ms las instituciones de gobier-no, de legislacin y de justicia del pas. Por eso es importanteque decdamo co qu dea queremo vvr. Coocer ore laguerra, hablar sin pretextos, intercambiar experiencias, reclamarla demada que e codere juta, exgr jutca cotra lovoladore de lo derecho humao, y fortalecer la ttu-

ciones que sean necesarias. En denitiva, sacar lecciones paracrear nuevas formas de relacionarnos y respetar las diferentesmemora e todo u reto.

Este libro slo es una pequea contribucin para que puedaser posible eso. Cinco ideas hay de fondo: Primero, la necesidadde transmitir a las presentes y a las nuevas generaciones sobrelo que ha pasado y pasa an hoy, no slo en el departamentosino en todo el pas. Segundo, reconocer las memorias que

hay sobre lo sucedido y valorar la vida de los que ya no estn.Tercero, recoocer la memora de la lucha ocale como algoa respetar. Cuarto, no dejar de exigir justicia para los hechosdel pasado. Quinto, estar alertas a cmo enfrentar los conictos


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que tenemos hoy. Ojal haya quienes investiguen ms que lodicho en este libro, pues existen muchas preguntas sobre lo

que el autor nos dice o que no dice. Y seguro habr muchasrespuestas. Ojal que la lectura de este libro ayude a buscarnuevas formas para hacer conocer las memorias y los hechosde la guerra. Memorias e historias que contribuyan a sanar lasheridas y ayuden a que no se repita, ni hoy ni maana.

Luis pedro Taracena arrioLa

2009


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1. Inroduccn

Hace ms de 25 aos, el Ejrcito Guerrillero de los Pobres(egp) lleg a Huehuetenango. Busc las aldeas ms retira-da de la serra de lo Cuchumatae y de la terra aja. Porlas injusticias y el abandono que los campesinos sufran, no lecost a la guerrilla organizar a muchos huehuetecos para parti-

cipar en una lucha armada contra el gobierno.La respuesta del Ejrcito de Guatemala fue el cometer

grandes masacres, casi siempre en comunidades indgenas.Para los presidentes militares Romeo Lucas Garca y EfranRos Montt, matar a indgenas no armados era una respuestafcil ante la amenaza de la guerrilla, que no tom en cuenta lascoecueca humaa lo derecho de la vctma. El re-sultado: slo en Huehuetenango ms de 10 mil personas fueron

asesinadas y muchas ms huyeron de sus comunidades.En la disputa entre la guerrilla y el gobierno los huehuetecos

pusieron las vctimas. Tambin participaron como guerrilleros,soldados, colaboradores, "orejas" y patrulleros civiles. Hubo genteque ufr el auo y gete que au. Para lo huehueteco,fue una guerra muy complicada.

1. Inroduccn


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Mapa 1Muncpos de deparameno de Huehueenango

saJuaAtitn

Ixtahuacn

Culco

La Lertad

La Democraca

saPedro

necta

JacalteagoSanMiguelAcatn

sa RafaelLa Independencia

soloma

Huehueteago

net

Malacatancito

Chatla

Santa Brbara

Todo satoCuchumatae

San Mateo Ixtatn barlla

sata AaHuta

Tectitn

San Gaspar Ixchil

sa Rafael Petzal

Aguacatn

sa Jua ixcoy

sata Eulala

San Sebastin

Coatn

saAtoo

Huta

saSebastin

Huehue-teago

Concepcin Huista

satagoChmalteago

Colote-ago


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1.1 Por qu ese bro

El motivo de este libro es contribuir a presentar la historia de laguerra en Huehuetenango. Es un texto dirigido principalmentea lo huehueteco, tato lo que vvero la voleca como laueva geeracoe que deee etederla.

Muchos habitantes recuerdan cmo pas la guerra en su co-munidad, aunque no tienen claro cmo se desarroll el conictoarmado. Otro o cooce lo orgee de la voleca, o lo

cotexto acoale e teracoale e que e dearroll.El lector tendr la oportunidad de recordar experienciasvividas, adems de conocer experiencias ajenas. Ex soldadospueden leer la historia de los rebeldes que los queran matar yviceversa. Ex patrulleros civiles pueden apreciar el sufrimiento dela gete que tuvo que aadoar u caa, e tato que lo re-fugiados pueden conocer la difcil situacin de los patrulleros.

Asimismo, esta edicin pretende promover la reconciliacin

en Huehuetenango, particularmente en comunidades dondepersisten problemas provocados por la guerra y la militarizacin.Trata de explicar por qu tantos huehuetecos murieron en elconicto y por qu murieron de una manera tan cruel. En laspalabras de un vecino de El Limonar, Jacaltenango, escenariode una masacre del ejrcito en enero de 1982, ojal que quedeescrito todo esto para que estos nios pequeos de ahora losepan algn da y traten de evitar que vuelva a ocurrir esto.1


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1.2 Cmo usar ese bro

ste no es el primer intento de contar la historia de la guerraen Guatemala. Tras la rma de la paz, en 1996, se presentaronvarios estudios. Los ms grandes son Guatemala, nunca ms,trabajo de la Iglesia Catlica y su Proyecto Interdiocesano parala Recuperacin de la Memoria Histrica (remhi), y Guatemala:Memoria del silencio, de la Com de EclarecmetoHtrco (ceh).

El traajo del remhi fue presentado en abril de 1998 porel obispo Juan Jos Gerardi. Dos das despus, Gerardi fueasesinado y todas las sospechas apuntan hacia la hiptesis deun crimen poltico, ejecutado por militares. Un ao despus, sepublic el trabajo de la ceh bajo la responsabilidad de la Orga-nizacin de Naciones Unidas y en cumplimiento parcial de losAcuerdo de Paz.

ivetgadore del remhi y la ceh vtaro Huehueteago yllegaron hasta las comunidades ms castigadas por el conicto.Miles de huehuetecos participaron en los estudios, contando loque vero y vvero durate la guerra. Por er u etudo a-coal, remhi public slo una parte de los testimonios recogidos.La ceh present miles de casos y aqu se citan muchos comofuete de formac.

As, este libro pretende ser ms accesible que los informesde remhi y ceh, que o grade ora de refereca y cotarla historia de la guerra en Huehuetenango. Y por otra parte, lahistoria de Huehuetenango no es generalizable para el resto deGuatemala. Aqu la actuac de la guerrlla, el ejrcto y lapatrullas de autodefensa civil fue distinta de lo que pas enotras partes.


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Para la vetgac, el autor, Paul Korak, oclogo or-teamericano, habl con personas de diferentes municipios de

Huehueteago la cuale cotaro la htora de u comudad.Por razoe ova o e mecoa lo omre de lo etre-vistados, quienes no queran ser identicados.

Ex drgete de la guerrlla e Huehueteago derovaliosas entrevistas en la capital de Guatemala. De la mismaforma se intent entrevistar a ociales del ejrcito, pero pocosaceptaron, porque an no quieren hablar de las masacres.

En el libro aparece un pequeo nmero al nal de muchosprrafos. ste remite a las anotaciones que se encuentran al naldel lro dode e da detalle ore la fuete de formac(entrevistas, libros o peridicos).


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1.3 Los anecedenes de a guerra

Ate de etrar e la htora de la guerra, hay que coderarpor qu tantos guatemaltecos estaban dispuestos a arriesgar susvda al volucrare e la lucha armada.

La guerra urg e varo cotexto: local, acoal e -ternacional. Antes de la guerra la poblacin de Huehuetenango,en particular los indgenas, tena muchas quejas histricas ypocas razones para conar en el gobierno. A nivel nacional

la poltica estaba dominada por militares que no permitan uncambio por la va democrtica. En el plano internacional losdos grandes poderes, Estados Unidos y la Unin Sovitica, sedisputaban el dominio mundial y fomentaban luchas violentasentre sus aliados en diferentes pases.

La pobreza y e abandono en HuehueenangoEn Huehuetenango conviven nueve grupos del pueblo maya: mam,

tektiteko, popti, chuj, qanjobal, akateko, awakateko, chalchitekoy kiche, adems de la poblacin no indgena, los ladinos. En suscomunidades los mayas toman sus propias decisiones, frecuen-temente sin consultar a las autoridades del gobierno, adems tienensus lderes y hablan sus propios idiomas. Esta independencia culturalse mantiene hoy, pero era an ms fuerte antes de la guerra.2

Ate de la etrada de la guerrlla, Huehueteago vvaalado del reto de Guatemala. E 1980, haa lo do carre-

teras de acceso al interior del departamento. Muchos muni cipiostenan ms comunicacin con Mxico que con el resto de de-partamentos del pas.


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El punto de mayor contacto entre los huehuetecos y la

sociedad nacional han sido las ncas de la costa sur. Durantela Colonia y hasta 1944, el Estado oblig a los campesinos atrabajar para los nqueros, quienes fomentaron en los pueblosque ciertos ladinos se enriquecieran engaando a los indgenascon trucos y prstamos.

Mapa 2Huehueenango y regones enongscas

Fuente: Academia de Lenguas Mayas.

Chuj

Qanjobal

Akateko

Popti

Awakateko

Kiche

Mam

Tektiteko Castellano


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Cuado el traajo forzoo term e 1944, mucho hue-huetecos siguieron migrando a la costa obligados por la pobreza.

Durante los aos 60 y 70 la falta de tierra en Huehuetenangose agravaba con el paso del tiempo y no haba acceso a nuevasoportunidades (la nica lo constituy la migracin a EstadosUnidos). En algunos municipios las familias pasaban dos o tresmee traajado e el corte de caf y otro do o tre mee eel corte de algodn. Abandonaban sus propias tierras. De igualmanera que sus antepasados, sufran de muchas enfermedades.Era ua vda de mera.3

Muchos huehuetecos pobres evitaban contacto con el Esta-do por considerarlo un represor en vez de una institucin que lespoda ayudar. Teman a las autoridades porque les mandaban atrabajar en las carreteras o las ncas, les castigaban sin razn yle olgaa a madar a u hjo a la ecuela, algo que muchoindgenas rechazaban por ser ajeno a su cultura.

En la capital y en la cabecera de Huehuetenango haba hos-pitales, calles pavimentadas y sistemas de agua y luz, pero en las

aldeas no haba servicios bsicos. El Estado tampoco garantizabala seguridad de los huehuetecos; ni la Polica Nacional ni el ejrcitotenan mucha presencia en los municipios antes de 1980.

La fuerza de seguridad ms conocida era la Guardia deHacienda, que persegua la elaboracin de licor clandestino oel contrabando desde Mxico. En vez de prohibir estas prc-ticas, los agentes preferan cobrar mordidas a los detenidoso robarles la mercanca. Entrevistados en San Mateo Ixtatn

recuerda que la Guarda de Haceda etraa e la caasin orden de allanamiento y buscaba cmo aprovecharse de lagente. Por estos abusos, en las aldeas de San Mateo hubo varios


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levantamientos contra stos poco antes de la llegada de laguerrlla.4

Lo levatameto dgea tee ua larga htoraen el altiplano de Guatemala. En Huehuetenango hubo variasreeloe cotra el Etado e el glo xix y otra durate ladictaduras de la primera parte del siglo xx. Al fracaar lointentos, los rebeldes solan refugiarse en la montaa. Cuandolos primeros guerrilleros bajaron de la montaa en tiempos msrecete, lo aldeao recordaa a lo atguo reelde. nollamaban los que vienen del monte, dice Jorge Macas, un ex

comadate guerrllero e Huehueteago. Para la gete oestbamos empezando, estbamos regresando.5

La dcada de lo 60 fue de mucho camo ocal e Hue-hueteago. A trav de rado de trator, lo aldeao ecu-charon por primera vez noticias nacionales e internacionales.Ms gente sala de sus comunidades por razones de comercio opara servir en el ejrcito. Al mismo tiempo la costumbre estabaperdiendo control sobre la cultura local.6

Mientras el Estado ignoraba el bienestar de las comunida-des, la Iglesia Catlica trabajaba para el desarrollo social. En1966 prrocos norteamericanos de la orden Maryknoll fundaronel Centro de Desarrollo Integral en Huehuetenango. Sus pro-motores, unos huehuetecos y otros estudiantes de la capital,impartieron cursos de alfabetizacin, agricultura, cocina y for-macin religiosa. Adems, la dicesis fund el Centro Apostlicodonde se formaron agentes pastorales y lderes comunitarios.

Los religiosos promovan una versin del evangelio que sepreocupaba por este mundo y no slo por el otro mundo.Algunos curas animaron a los indgenas a oponerse al dominiode los ladinos en sus pueblos. Entre la poblacin indgena de


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Huehueteago ete meaje de dgdad humaa do lugar amucha actividad poltica.7

En los aos 70 el gobierno militar expuls a muchos curasMaryknoll del pas por creer que estaban agitando a la poblacin.Sin embargo, el trabajo de la Iglesia haba despertado entre loscampesinos un inters por organizarse para mejorar sus condi-ciones de vida. Muchos huehuetecos que haban recibido unaconcientizacin social en los programas de la Iglesia buscabanun nuevo proyecto, y a nales de esa dcada la nueva opcinera la lucha armada.

La ucha urbanaLa ciudad de Guatemala fue otro campo frtil para la guerrilla.En los 70 el sistema poltico estaba muy cerrado. Aunque erasupuestamente democrtico, la poltica del Estado favoreca ala gente ms rica y los gobiernos militares se mantenan en elpoder a travs de la violencia. En esos aos grupos paramilitares,

coocdo como ecuadroe de la muerte, aearo a AdolfoMijangos Lpez y a Manuel Colom Argueta, quienes eran delos pocos polticos que ofrecan un proyecto distinto al de losmltare y lo terrateete.

A pesar de la represin, un movimiento de masas crecien la ciudad, compuesto por estudiantes, obreros y residentesde los barrios pobres. Cuando las fuerzas estatales asesinaban odesaparecan a miembros de la oposicin poltica, las organiza-

ciones no se rendan. Cuando la represin se endureci, muchosactivistas se vincularon a los grupos clandestinos que preparabanuna lucha armada para quitarle el poder a los militares.8

La fuerza del movimiento urbano se debi a la inuencia dela Revoluc de Octure de 1944, hecho que o lo cam


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el goero o que tam cam la forma de goerar. Lodo goero de la Revoluc (1944 a 1954) o actuaro a

favor de lo terrateete u otro rco. su dea cota eelevar el nivel de vida y la economa de la gente pobre para asdearrollar Guatemala. Para lo revolucoaro que urgerodespus, el ejemplo de 1944 los mantena rmes en la lucha.

La Guerra FraLa poltica en Guatemala no depende solamente de los guate-maltecos. Otros pases, especialmente Estados Unidos, tienenenorme peso, como lo demuestra el derrocamiento de Jacoborbenz Guzmn.

En 1952 Estados Unidos se preocup cuando el gobiernode rbenz Guzmn inici una reforma agraria en Guatemala.Para aumentar la produccin agrcola del pas, el gobiernotom terra acoale, terra alda de la comudaderurales y propiedades de los terratenientes que no se trabajaban.

Dtrua eta terra etre la gete que la olctaa. Etareforma agraria toc los intereses de empresas norteamericanascomo la bananera United Fruit Company.

Cuando rbenz no hizo caso a sus protestas, el gobiernonorteamericano organiz un grupo de mercenarios para derro-carlo. Estados Unidos no slo nanci esta contrarrevolucin,tambin organiz una campaa negra para desprestigiar arez. E juo de 1954 lo mercearo etraro dede

Honduras, mientras aviones manejados por pilotos norte-americanos sobrevolaban la ciudad para evitar que hubierareteca.

Durate eta va el Ejrcto nacoal o al a defe-der la patria. Pero cuando gan la contrarrevolucin los militares


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reultaro favorecdo. Etado Udo tal al coroel CarloCastillo Armas en la jefatura del Estado. Durante los prximos

30 aos el ejrcito se mantendra en el poder.Guatemala no fue el primer pas de Amrica Latina que sufri

ua tervec orteamercaa. E el glo xx Etado Udointervino en Nicaragua (1912), la Repblica Dominicana (1916),Guatemala (1954); la Repblica Dominicana (1965), Chile (1973),Nicaragua (1981), Grenada (1983) y Panam (1989).

Estados Unidos ha considerado a Amrica Latina parte desu dominio y no ha aceptado gobiernos independientes comoel de rbenz. En los aos 50 lo que ms alarm a los norte-americanos fue la presencia de comunistas en la regin, yhuo comuta e el goero de rez.

El comunismo es un tipo de sistema poltico y econmico.Sus fundadores, entre ellos el alemn Karl Marx, criticaron elcapitalismo, un sistema en que todo se compra y se vende enun mercado, y donde el individuo es dueo de su propiedad ypuede pagar o cobrar lo que quiere. Los comunistas preferanu tema e el que el Etado ea fuerte, garatce el acceo ala vivienda o el trabajo, y limite los derechos de los propietarios.Los comunistas vieron que el capitalismo produce desigualdad,como e Guatemala dode ua cuata famla tee muchariqueza mientras la mayora vive en la pobreza.

Guatemala, durate la Revoluc de Octure, como otraocedade, tea u tema mxto. Predomaa la relacoede mercado, pero la reforma agraria limitaba los derechos a lapropiedad privada ya que el gobierno poda conscar la tierrasi su dueo no la usaba por varios aos.

En 1954 Estados Unidos, el pas ms fuerte del mundocapitalista, estaba en Guerra Fra contra la Unin Sovitica,


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el gran imperio comunista. Estados Unidos se sinti amenazadopor la presencia de movimientos comunistas en Amrica Latina

y tema que la Unin Sovitica quisiera promover gobiernoscomuta e la reg. El goero orteamercao am aCastillo Armas a proscribir el Partido Guatemalteco del Trabajo(pgT) y deteer o matar a u colaoradore. Comuta y otrosimpatizantes del gobierno de rbenz salieron del pas o en-traron en la clandestinidad, donde planicaron otra revolucinpara retomar el poder.9

En 1959 un pequeo grupo de guerrilleros derroc al

goero de batta e Cua. Cuado Etado Udo termsus relaciones con la isla, Fidel Castro acept el apoyo de laUnin Sovitica y empez a identicar a su gobierno comocomunista. En los prximos aos, Cuba construy los mejorestema de alud y educac e Amrca Lata, a la vez quetoda propiedad casas y empresas se convirti en bienes delEstado. Adems, Cuba nanci y foment movimientos guerri-lleros en toda Amrica Latina. El plan era tomar las armas y

derribar a los gobiernos impopulares controlados por EstadosUnidos. En estos aos muchos guatemaltecos, entre ellos estu-diantes universitarios, viajaron a Cuba para estudiar comunismoy etreare como guerrllero.10

Mientras la idea de la lucha armada ganaba adeptos en Gua-temala, la emajada de Etado Udo, juto co lo mltare,los ricos y los lderes de la Iglesia Catlica, promovan la doctrinadel anticomunismo. Cualquiera que se opona al gobierno poda

er tachado de comuta auque o lo fuera. Lo cura y lopartidos polticos llevaron esta doctrina hasta los lugares msretrado de Huehueteago. Acuaro a lo comuta deestar contra Dios y la familia y no tener respeto para los vecinoso sus pertenencias. En San Sebastin Coatn, un anciano


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recuerda que tema la llegada de ua guerrlla comuta deotro pas: Si uno tiene dos casas, la guerrilla va a tomar una.

En Aguacatn, un campesino entendi a los comunistas as: Siyo soy comunista, yo puedo tomar la mujer de otro y l puedetomar m mujer. no e a?11

La prmera guerraEl conicto armado en Guatemala empez el 13 de noviembrede 1960. Ese da ociales descontentos del ejrcito intentaronllevar a cabo un golpe de Estado militar contra el rgimen corruptodel general Miguel Ydgoras Fuentes. El intento fracas peroposteriormente algunos de los alzados, junto con miembros delPartdo Guatemalteco del Traajo fudaro u movmetoguerrllero.

En 1962 grandes protestas estallaron en las calles de lacapital. Pequeos grupos de rebeldes armados aprovecharonel momento y viajaron al interior del pas para iniciar la lucha

armada. Un grupo de rebeldes compuesto por universitarios yex soldados lleg a San Mateo Ixtatn, pero la poblacin noles tena conanza. Su aventura termin cuando unos niosmateao ecotraro ua graada que lo guerrllero haadescuidado. La granada explot, con resultado trgico. Losmateanos capturaron a los rebeldes y los entregaron al ejrcitoque lo cog a lo truale. no fuero maacrado comoen aos posteriores.12

Durante el resto de los aos 60 la guerrilla concentr su luchaen la Sierra de las Minas, en el oriente de Guatemala. Buscabaapoyo entre los campesinos ladinos del lugar. Cuando vino elejrcito a reprimir, la poblacin dej de colaborar. Para 1970el ejrcto haa vecdo a lo reelde, e ea reg.


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Las razones para tomar las armas desigualdad, corrupciny falta de democracia an estaban presentes en Guatemala.

Algunos veteranos de la primera guerrilla decidieron organizarua ueva reel. Llevaro la adera de la lucha armada aloccdete, a la serra de lo Cuchumatae.


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2. La guerra en Huehueenango

E 1972 e fud el Ejrcto Guerrllero de lo Pore (egp). sufundadores haban sobrevivido a la guerrilla de los aos60. Otros eran jvenes de la capital, entre ellos estudiantes queconocieron Huehuetenango cuando trabajaron en proyectossociales de la Iglesia Catlica. Les una la idea de que, para

lograr lo camo que Guatemala ecetaa, la ca olucera la lucha armada. A dfereca de la guerrlla de lo 60, elegp pensaba que los campesinos indgenas del altiplano, losms pobres de los pobres, tenan que ser la fuerza motriz deea revoluc.13

2.1 E Ejrco Guerrero de os Pobres

Huehuetenango siempre estaba entre los planes del egp. E laserra de lo Cuchumatae a exta grade oque dodelos insurgentes podan esconderse. Era una regin sin muchocontrol del gobierno, con una gran poblacin de campesinosindgenas pobres que poda apoyar a la guerrilla.

Desde una nca en el lado mexicano los fundadores delegp buscaron dnde hacer su primera incursin a Guatemala.Al principio pensaron entrar a territorio guatemalteco por el ro

Patar, en el extremo norte de San Mateo Ixtatn. Optaron poruna regin ms aislada, la selva de Ixcn, donde el egp c ulucha el 19 de eero de 1972.14

2. La guerra en Huehueenango


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Ixcn, a prmera enradaAl mismo tiempo que la guerrilla entr a Ixcn, grupos de

campesinos pobres colonizaban la misma selva. Entre los rosIxcn y Xalbal, la Dicesis de Huehuetenango organiz laformacin de las cooperativas de Ixcn Grande, donde llegaronfamilias de Santa Eulalia, San Pedro Soloma, San Mateo Ixtatn,San Miguel Acatn, San Ildefonso Ixtahuacn, Chiantla y TodosSantos Cuchumatn, entre otros municipios. Eran casi todosdgea e uca de terra y ua ueva vda. El oclogofrancs Yvon Le Bot dice: Trataban de construir en las tierras

deshabitadas del bosque una sociedad que conjugara el impulsoreligioso y el dinamismo pionero, el espritu comunitario, el idealgualtaro y el dearrollo ocoecomco.15

La guerrlla tam quera cotrur ua ueva ocedad,pero a travs de un proyecto ms amplio y peligroso: tomar lasarma y rehacer el Etado.

El primer contingente del egp se conformaba por slo 15guerrllero: cuatro lado de la cudad, do del orete, cco de

la costa y cuatro indgenas achs de Baja Verapaz, pero ningu-no de Huehuetenango o Quich. Cuando se encontraban conlos campesinos, la guerrilla les explicaba por qu estaba all yreclutaba jvenes para ser combatientes y colaboradores quepodan ayudar a su lucha con darles comida. En los primerosaos haba mucha desconanza entre los armados y los pobla-dore.16

La tuac cam e 1975 cuado el egp hzo u

primeras acciones militares. En mayo, la guerrilla ejecut alcomisionado militar de Xalbal, Ixcn, Guillermo Monzn,orgaro de Chatla. E juo, lo reelde mataro a troa Luis Arenas Barrera, dueo de la nca La Perla en Chajul,


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Quich, quien por sus malos tratos a los mozos era conocidocomo El Tigre de Ixcn.17

Co eta ejecucoe, la guerrlla auc u exteca.Luego, el Ejrcito de Guatemala vino a reprimirla. No atac alo guerrllero que adaa armado e la elva o a lo cam-pesinos que tenan contacto con ellos. Das despus de la muer-te de El Tigre, los soldados secuestraron a 15 cooperativistasde Xalbal que supuestamente haban apoyado a la guerrilla. Lamayora de las vctimas eran originarias de Ixtahuacn y SanMateo Ixtatn. La violencia en Huehuetenango y Quich haba

cado.18Por temor al ejrcto, lo huehueteco e el orte y lo xle

ms al sur buscaron la proteccin de la guerrilla. Algunos sealzaron como combatientes para vengar la muerte de sus fami-liares o vecinos. La represin del ejrcito ayud al egp a rompersu aislamiento y acercarse a la poblacin indgena. En su libroLos das de la selva, el guerrillero Mario Payeras recuerda queen menos de una semana la guerrilla triplic su nmero... De

un da para otro, en nuestros campamentos se hablaban cuatroo cco dalecto dtto.19

Otra muerte en ese tiempo fue la del sacerdote GuillermoWoods, un norteamericano de la orden Maryknoll, quien ayuda organizar las cooperativas de Ixcn Grande. El Padre Willychocaba con los militares, primero porque se opuso a los ocialesdel goero que quera agarrar la terra de la frotera orte, ysegundo, cuando averigu el paradero de los 15 cooperativistas

desaparecidos. El 20 de noviembre de 1976 se estrell laavoeta que Wood maejaa. Huo evdeca que hacecreer que no fue un accidente: antes del percance los militaresadvirtieron a varias personas que no volaran con Woods, y


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despus de la tragedia no permitieron una inspeccin del readonde cay la avioneta. Quiz el delito del Padre fue defender

a los cooperativistas de Ixcn, una poblacin que formaba laprimera base de apoyo del egp.20

La guerra ega a HuehueenangoEn Ixcn el egp tena contacto con campesinos originarios de di-ferentes municipios de Huehuetenango. A travs de ellos, la guerrillallev la otca a terra fra de que a a haer ua revoluc delos pobres. El primer guerrillero que lleg a Hue huetenango fueJulin (seudnimo), un indgena ach de Baja Verapaz.

En 1976 Julin visit el rea de Ocant y Patalcal, en SanMateo Ixtatn, acompaado por dos hermanos mateanos quevivan en Ixcn.21 Habl con los pobladores de la necesidad decambiar la poltica y el sistema de produccin en Guatemala.Su idea despert inters y en varias aldeas se formaron gruposclandestinos para apoyar al egp.

No solamente los indgenas ms pobres se organizaron. En1977 se alz un grupo de ladinos del pueblo de San AntonioHuta. Etre ello huo maetro, atre y etudate, muchode familias que apoyaron la Revolucin de 1944. Pasaron susvacaciones ese ao en Ixcn, en el campamento de combatientesdel egp. Cuado regrearo a Huehueteago, lo maetrohacan trabajo poltico para la guerrilla en las aldeas donde da-ban clases, varios de ellos en San Miguel Acatn.22

San Miguel se convirti en el primer lugar de apoyo masivoal egp. Antes de la guerrilla, el Movimiento de Liberacin Nacio-al (mLn), un partido anticomunista, dominaba la poltica en SanMiguel. Sin embargo, muchos migueleos tenan inters en uncambio. En los aos 60 San Miguel era uno de los municipios


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dode el traajo ocal de la iglea Catlca era mejor recdo.En los 70, catequistas migueleos tuvieron contacto con organi-

zadores de un movimiento campesino en la costa sur. Cuando losmaestros tonecos hablaron de una lucha armada de los pobres,muchos migueleos estuvieron dispuestos a participar.23

La guerra creceE 1978 el egp mand a Huehuetenango un equipo formal detres organizadores: Julin, el ach; Luca, una estudiante de laUniversidad de San Carlos de la capital; y Calixto, un jovenchuj de San Sebastin Coatn que viva en Ixcn. Cuando losguerrilleros regresaron a Ixcn, hablaron del intenso fro deHuehuetenango. A su nueva rea de trabajo la llamaban Tibetpor su parecido con el altiplano helado del sur de China.24

En San Miguel los tres guerrilleros se sorprendieron por loque encontraron: miles de familias organizadas para apoyar lalucha armada, ms que en cualquier parte del pas. Pero la orga-

nizacin no tena forma, ni respet los principios de clandestinidadnecesarios para protegerse de la represin.

Para 1980 la situacin poltica en Guatemala se haba agu diza-do. Cada da en la capital las fuerzas del gobierno asesinaban estu-diantes, sindicalistas, profesionales y otras personas involucradasen la oposicin poltica. Algunas vctimas fueron guerrilleros, otrosesperaban hacer un cambio por medios democrticos. La repre- hzo que mucha gete vera la ecedad de derrocar a Luca

Garca, aun por medios violentos.La guerrilla en Guatemala estaba animada por la situacinen otros pases. En el 1975 una revolucin campesina tom elpoder en Vietnam, derrotando a las fuerzas militares de EstadoUnidos. Ms cerca de Guatemala, en 1979, la revolucin Sandi-


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ta truf e ncaragua, metra e El salvador la guerrllapareca a punto de vencer al ejrcito. Muchos guerrilleros

estaban seguros de que el gobierno de Guatemala sera el pr-xmo e caer.25

E Frene Che GuevaraE Huehueteago el egp dej de slo organizar la poblaciny estableci campamentos en San Mateo y San Miguel,dode etreaa a u egudore e tcca mltare y deautodefea. Lo egudore era mucho, lo que haca falta eraarmamento. Para crear un nuevo frente que pudiera sostenersee Huehueteago, el egp decd qutarle arma a lo agetedel orden pblico.

El primer asalto del egp e Huehueteago ocurr el 24de agoto de 1980. Ua emaa ate, la guerrllera Luca, detez clara, haba recorrido la cabecera de San Miguel Acatnhacindose pasar por turista extranjera. El domingo 24 losguerrllero camaro toda la madrugada dede la aldea Chm-bn. Entraron al pueblo y, en medio del mercado semanal, loscomatete acaro u arma atgua y atacaro el deta-camento de la Guardia de Hacienda. La Guardia fue comple-tamente sorprendida y en pocos minutos la guerrilla tom elcontrol y se apoder de todas las armas y municiones en eldestacamento. Eufricos, los rebeldes hicieron su primer acto depropaganda armada en la plaza de San Miguel, donde la genteles recibi con nimo y se anunci la existencia del nuevo Frente

Guerrllero Comadate Ereto Guevara del egp.26

Ereto Che Guevara era u argeto a que le terea-ban ms las luchas polticas que su profesin de mdico. En1954 lleg a Guatemala atrado por la Revolucin de Octubre.


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Cuando cay el gobierno de Jacobo rbenz se fue a Mxicodonde conoci a Fidel Castro, quien para ese entonces plani-caa ua revoluc e Cua. El Che e detac como co ma-

date de lo urgete. Co la vctora reelde, Catro loomr mtro e el uevo goero. Pero el Che o e hallcon el trabajo de ocina y sali de Cuba para fomentar revolu-ciones en otros pases. En 1967 muri en Bolivia cuando supequeo grupo de rebeldes fue aniquilado por el ejrcito boli -

El logotipo del egp co La mage etera del guerrllero herocoEreto Che Guevara


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viano. El Che Guevara se convirti en smbolo del sacriciopersonal en nombre de la revolucin. En Cuba los nios de

escuela an repiten cada maana: Pioneros por el comunismo,eremo como el Che.27

El Frente Che Guevara tena su rea de operaciones enIxcn y casi todo Huehuetenango. En Aguacatn y Chiantlaoperaba el Frente Guerrillero Ho Chi Minh, nombrado asie hoor al lder guerrllero de Vetam. El egp predominabaen el rea, aunque otros grupos armados tambin operaban enHuehueteago. El Partdo Guatemalteco de Traajo (pgT) e

organizaba en los municipios de Chiantla y Huehuetenango enlo 70. E lo 80, la Orgazac del Puelo e Arma (orpa)operaba en el sur. Tambin surgieron grupos armados locales,como el grupo Nuevo Venceremos de Ixtahuacn. En Nentn,un grupo conocido como la antiguerrilla aprovech la situacinde violencia para robar ganado de las ncas abandonadas.28

Despus de la toma de San Miguel, la imagen del Cheapareci en las mantas y banderas que el egp colgaa e la

aldea y lo camo. La etratega de la guerrlla ya o erapasar desapercibida sino anunciarse como una opcin frenteal gobierno. A nales de 1980 el egp do u alto y extedsu presencia al sur del departamento, al rea mam. En variaspartes la guerrilla pas de ser rumor a presencia real.29

El egp no mantena en secreto su apoyo entre los campe-o. Pulcaa e u comucado teracoale lta dela comudade dode haa hecho mte y orgazado a

la poblacin. En sus acciones militares us a campesinos movi-lizados, adems de sus combatientes armados. En el ataque alcuartel de Camojato, La Democraca, e mayo de 1981, cam-


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Mapa 3Guaemaa con e rea de operacones de os

derenes grupos guerreros

Fuente: Sichar Moreno 1998


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pesinos bloquearon la carretera interamericana para dicultarla movlzac del ejrcto.30

En 1981 los huehuetecos podan imaginar una victoria delegp. El gobierno no puso mayor atencin a lo que pasaba enlos Cuchumatanes. El Alto Mando se preocupaba ms por elcrecmeto del egp en Chimaltenango y el sur de Quich, mscerca de la capital. En Huehuetenango las fuerzas de seguridadejrcito, polica y Guardia de Hacienda se retiraron o se que-daron en sus cuarteles por temor a un ataque de la guerrilla.Fueron humillados ante la poblacin, recuerda la ex guerrillera

Luca. Huehueteago fue ua terra de ade y era uetrametra o etaa el ejrcto31

Chacu, os ncos de a represnLa guerrilla presentaba el conicto poltico como una luchaentre ricos y pobres. Les hablaba a los campesinos de cmo elEjrcto de lo Pore a a derrocar al Ejrcto de lo Rco, que

defendan los nqueros que explotaban a los pobres. Pero lamayor parte de los ricos se encontraba en la ciudad capital o enla cota ur. El Frete Che Guevara ecetaa u eemgo local.Lo encontr en Walter Widman, dueo de la nca Chacul,Nentn, uno de los nqueros ms represivos del pas.

Widman, de origen alemn, era un empresario azucarero queayud a fundar la Mano Blanca, un escuadrn de la muerte queasesin a varias personas que queran organizar a los pobres.

En Chacul, una nca ganadera, Widman no quera cederen una disputa de tierras que tena con las comunidades vecinas.Habitantes de las aldeas de Campamento Samalay y El Agua-cate, Nentn, insistan en que el ttulo de Chacul inclua tierras


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que realmente pertenecan al municipio de San Mateo Ixtatnde dode ello era orgaro.32

En 1978 el administrador de Chacul, Gregorio BarriosReyes un hombre muy gordo que andaba con una pistola enla cintura, captur y luego desapareci a un campesino deCampamento Samalay acusado de tumbar rboles en lo queWdma coderaa u oque.33

E eo lleg la guerrlla. Por lo auo de Wdma y ba-rrios, y por las condiciones de miseria absoluta en la regin, elegp tuvo mucho xito en organizar a los mozos de Chacul y alo hatate de la aldea cercaa. Co la guerrlla, Wdmaya tena un contrincante ms fuerte.

En 1980 Widman mand a El Aguacate un equipo de poli-ca especial, conocido como el Pjaro Azul, para desalojar a loscampesinos de aguacate de un terreno en disputa. La policaatac con gases lacrimgenos, pero los campesinos esta ban pre-parados con pauelos mojados y lograron rodear a la polica yolgarlo a alr. Parece que haa recdo u etreametode la guerrilla sobre cmo resistir a la polica.34

Luego le toc a la guerrlla atacar. El 14 de dcemre de1980, comatete del egp entraron a la casa patronal deChacul y mataron a Gregorio Barrios antes de saquear la casa.A pesar de la muerte de su capataz, Widman no busc una treguacon la guerrilla. Mand a Chacul un contingente de la PolicaMilitar Ambulante (pma). El 17 de ferero de 1981 la pma etra Campamento Samalay y ejecut a cinco hombres y viol aseis mujeres, aparentemente porque la gente no dio informacinsobre un campamento del egp que etaa cerca. Fue ua de laprimeras masacres del ejrcito en Huehuetenango.35


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Otra vez lo guerrllero vegaro la acc del ejrcto. El3 de marzo de 1981, emocaro al uevo admtrador de

Chacul, Armando Galicia, y a su familia, cuando transitaban aNentn escoltados por agentes de la pma. Despus de una batallade 15 muto, la guerrlla aqul a toda la famla y a epolicas militares. El ejrcito respondi como siempre: cuandono pudo encontrar a los guerrilleros, mat a cuatro campesinosde la nca San Francisco y dej sus cadveres en el caminocomo ua adverteca.36

Despus de este ciclo de violencia, Walter Widman aban-

don Chacul mientras los guerrilleros se alimentaron con elgaado.37

En los prximos meses el egp advirti a muchos nqueroshuehueteco que tea que camar el trato a lo mozo o ufrrlas consecuencias. Adems, les cobraba un impuesto de guerrapara permitirles sacar su producto. La mayora de nqueroshizo caso, aunque en Nentn la guerrilla quem otras ncas yasesin a otros dueos que consideraba abusivos.38

Ladnos e ndgenasLa guerra entre el gobierno y la guerrilla no slo representabauna lucha de poder entre ricos y pobres. En Huehuetenango aveces pareca una lucha entre ladinos e indgenas.

En algunos municipios la guerrilla controlaba las aldeasdonde predominaba la gente indgena, mientras el apoyo al

gobierno se concentraba en las cabeceras dominadas porladinos. En Nentn, algunos ladinos abandonaron sus ncasy e refugaro e la caecera, dode el ejrcto tea deta-cameto. E mayo de 1981 ua fuerza de 200 guerrlleroocup Nentn. En su mayora eran indgenas de las aldeas que


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llevaban slo palos tallados como ries, sin embargo, lograroncapturar 20 fusiles de la Guardia de Hacienda. La experiencia

aut a mucho lado quee aadoaro la caecera eeero de 1982, ajo rdee del ejrcto.39

En otras partes, como Concepcin Huista, la guerrilla logrorgazar a lado e dgea, juto e ua caua com. Lamayora de los alzados huehuetecos eran indgenas, pero tam- huo lado, como aquello de la caecera de sa AtooHuta, quee hcero uya la lucha cotra la margac delos pueblos indgenas.40

En sus publicaciones para la audiencia internacional el egpidenticaba su lucha con los indgenas del altiplano, los guate-maltecos ms explotados y discriminados, los ms pobres de lospobres. La guerrilla public fotografas de indgenas portandoarma de fuego, vetdo e u traje tradcoal, tato mujeremayas como hombres de Todos Santos Cuchumatn. A veceslos combatientes les prestaban las armas slo para tomarsela fotografa. La guerrilla ni siquiera pens en cubrirles sus

rotro.41

2.2 Guerra y pueboEn Huehuetenango las comunidades indgenas han tenido pocasrelaciones positivas con el Estado de Guatemala o la sociedadnacional, ambos dominados por la poblacin no indgena. Poresta historia, los mayas frecuentemente desconfan de personas

que vienen de fuera. Pero, por lo difcil de su situacin, tambin lesha gustado probar nuevos proyectos que prometen una mejorvida, como los partidos polticos o la Accin Catlica. En 1980el nuevo proyecto era el Ejrcito Guerrillero de los Pobres.


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Muchos huehuetecos queran ver si los rebeldes podan cumplircon lo prometido.

La chara

El primer contacto con la poblacin rural fue la charla guerrillera.En los caminos o en las casas los rebeldes, o sus representanteslocales, presentaban su mensaje de revolucin armada e invi-taban a los campesinos a unirse a la lucha.

La guerrilla empez con la idea de organizar pequeosgrupos clandestinos, pero las comunidades indgenas se carac-terizan por las actividades comunitarias. En Huehue tenango,especialmente en el norte, el egp empez a dar charlas frente a

Todosanteros en armas, fotografa publicada por el egp (colecc cirma)


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aldeas enteras. Eso ayud a la guerrilla a crecer rpidamente,pero conllevaba un peligro: en muchos lugares todo mundo

aa que colaoraa co la guerrlla.E la charla lo orgazadore de la guerrlla halaa de

la situacin poltica en Guatemala: la injusticia, la explotacin, ladcrmac y la cocetrac de terra. no haa ecedadde exagerar. Por siglos los gobiernos trataron a los campesinos,ore todo a lo dgea, como fuera mao de ora aratay o cudadao co derecho.

Todo lo que dijo la guerrilla era la verdad, recuerda MateoAlonso, un guerrillero y lder comunitario de Bulej, San MateoIxtatn, conocido como Otoniel. Habl de cmo la gente viva:el aadoo, la falta de alud y educac, la dura mgracoeen las costas. Por eso, la poblacin automticamente particip, mucho traajo de orgazac. Toda la aldea de la regse identicaron con la guerrilla. Fue muy rpido, como unomazo.42

La guerrlla halaa de ufrmeto que lo huehuetecoconocan bien, como el reclutamiento forzoso realizado porel ejrcito o la vida en las ncas de la costa sur. La guerrillaseal cmo trataban los nqueros a los mozos, no como sereshumanos sino como animales: les pegaban, obligaban a dormiren galeras, tomar agua de charcas sucias y los transportabanen camiones aptos slo para bestias. La guerrilla les ofreciconstruir una sociedad donde se les respetara su dignidad. Paralograr esta sociedad, los campesinos tenan que organizarse y

hacer un sacricio.43

En Petanac, San Mateo Ixtatn, el tema de la guerrilla domi-naba las plticas cuando los seores se reunan por la tarde,despus de su trabajo. Muchos opinaron que los guerrilleros


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tea raz. Algua vece lo comatete llegaro e lanoche y llamaron a los habitantes para reunirse en una casa

de la comunidad. Adems de presentar un discurso poltico uorgazar ua tarea, lo etreaa e tcca de autodefeapor ejemplo, cmo hacer vueltas de gato para poder escaparde u ataque del ejrcto.44

E orecmenoLa nueva sociedad imaginada por el egp era de gualdad yjusticia, donde el poder poltico y la riqueza econmica noquedara

historia de una guerra - huehuetenango

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