habermas cuatro tesis fundamentales

7/24/2019 Habermas Cuatro Tesis Fundamentales

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CUATRO TESIS FUNDAMENTALES EN HABERMAS DESDE EL PUNTO DE VISTA DE

LA INTERSUBJETIVIDAD

Andrs Covarrubias Correa

I. Introduccin

Si bien es cierto que el ncleo de nuestro trabajo est delimitado por las tesis que Habermas

desarrolla introductoria y provisionalmente en el apartado tercero de su introduccin a la Teora de

la Accin Comunicativa !"elaciones con el mundo y aspectos de la racionalidad de la accin en

cuatro conceptos sociol#icos de accin! sin embar#o no entendemos este trabajo como un

resumen de estas p#inas sino ms bien como un intento por rastrear el desarrollo de tales tesis a lolar#o de este libro puesto que la capacidad e$plicativa de ellas depende de la pro%undidad con que

vayan pleni%icndose de contenido. A&ora bien estoy consciente de que esto si#ni%ica optar por

ciertos &ilos conductores y dejar momentneamente de lado elementos que por su importancia

podr'an tambin alimentar una su#erente secuencia de lectura.

(uestro itinerario se articula en torno a cuatro tesis capitales que a lo lar#o del discurso de

Habermas van adquiriendo una creciente si#ni%icacin. )a primera aborda la pretensin de

Habermas de concebir la accin comunicativa como entendimiento lin#*'stico. )a se#unda &ace

re%erencia a la sociolo#'a en cuanto pretende ser teor'a de la sociedad y la necesidad de reali+ar un

anlisis del concepto de racionalidad. )a tercera aborda los diversos conceptos sociol#icos de

accin y su compromiso con determinados presupuestos ontol#icos. ,or ltimo como cuarta tesis

nos en%rentamos al concepto de accin comunicativa en cuanto visuali+a al len#uaje como medio de

entendimiento.

Convencidos de que este recorrido apela al sentido total de la obra de Habermas nuestro

punto de vista ser ms restrin#ido- consideraremos esta trayectoria desde la perspectiva que atae

al sujeto de la comunicacin en cuanto se pone en relacin con otros sujetos. ,ues podr'a ocurrir

que nos encontrsemos en presencia de un cierto racionalismo camu%lado /para%raseando a ,opper

/ de una teor'a de la comunicacin sin sujetos verdaderamente interactuantes. 0e la posibilidad de

que Habermas e%ectivamente supere el positivismo l#ico y el individualismo de la %iloso%'a de la


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conciencia depende que la comunidad ideal de &abla sea muc&o ms que una iron'a. 2n este

conte$to es %undamental la motivacin de los sujetos involucrados.

2n relacin directa con las problemticas propuestas dejaremos planteada la pre#unta de

&asta qu punto el anlisis de Habermas puede e$tenderse &asta los vastos espacios de la cultura no

europea ya que aunque en muc&os lu#ares del #lobo &ay intentos de proponer una bsqueda

basada en consensos y acuerdos sin embar#o parecen evolucionar con un pie %or+ado a partir de

modelos europeos 3instituciones %ormas pol'ticas ideolo#'as estructuras del sistema econmico

etc.4 &aciendo de su desarrollo una secuencia no tan claramente identi%icable con un

desenvolvimiento %ilo#entico sobre todo en +onas del planeta en las que la amena+a de la

intervencin de la %uer+a est siempre latente y vinculada a poderes pol'ticos dispuestos a

justi%icarla desde la distancia cada ve+ ms patente que se percibe entre quienes detentan el poder yaquellos que ocupan un sitial desmedrado en la sociedad.

II. ,lanteo del problema- las dos primeras tesis

5a la problemtica del sujeto se &i+o patente en el conte$to de la toma de posicin planteada

por el pro%esor 2strada 0'a+ en la clase inau#ural. Como consecuencia de su cr'tica a la escuela de

6ranc%ort Habermas debe replantearse al sujeto y la Ilustracin tomando como &ilo conductor el

concepto de racionalidad. 7,or qu el sujeto8 ,recisamente por la %orma de darse la pra$is co#nitiva

&umana tanto en la dimensin de la relacin del &ombre con la naturale+a como en la de la relacin

del &ombre con el &ombre ya que se trata de una interaccin que apela a la intersubjetividad. 2sta

problemtica &a acompaado tanto al positivismo l#ico como a la %iloso%'a de la conciencia.

9ientras en estas interpretaciones el sujeto es visto como mnada cerrada Habermas tiene la virtud

de intentar abrir el campo &acia el encuentro con el otro como un momento ori#inario1. 2l len#uaje

como medio de interaccin posibilita esta nueva perspectiva siendo la &ermenutica la que aportar

el modelo %undamental de comunicacin lin#*'stica.

:ista la comunicacin desde este punto de mira el entendimiento entre sujetos 3que en lo

que respecta a la consolidacin de la democracia no es un producto sino ms bien una condicin de

1 2s su#erente lo a%irmado por ;&omas 9c Cart&y en La teora crtica de Jrgen Habermas 2d. ;ecnos 1 p.

??= en cuanto a que Habermas responde a la decadencia del paradi#ma de la conciencia con !un #iro e$pl'cito &acia

el paradi#ma del len#uaje! y no visuali+ado como sistema sintctico@semntico sino como len#uaje en uso- el &abla.,or esta ra+n adems desarrolla !el marco cate#orial y las bases normativas de su teor'a social en %orma de una

teor'a #eneral de la accin comunicativa!.


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posibilidad4 permite la bsqueda de una comunicacin sin dominio. 2s en la alteridad del otro

donde buscamos la clave de la constitucin del yo.

A&ora bien para poder pensar el consenso de aquellos que entran en comunicacin se

requiere de una cr'tica de la sociedad tanto en el mbito co#nitivo@instrumental como en el prctico

y en el del sujeto como subjetividad. 2n un mundo coloni+ado por lo econmico@administrativo se

e$i#e una pro%unda re%le$in en lo que respecta a su #nesis desarrollo y proyecciones. Habermas

con ra+n entiende que una tal cr'tica &a de evolucionar en dilo#o 'ntimo con aquellos que bajo

distintos puntos de vista y privile#iando diversos aspectos &an incursionado en el anlisis del

complejo y cambiante %enmeno social- 9ar$ Beber 0ur&eim 9ead )ucs ,arsons

Hor&eimer y Adorno %orman parte de la urdiembre de esta compleja obra que buscando un nuevo

en%oque retoma y critica posiciones de stos y otros autores.Consideramos que este mtodo reco#e las ventajas que aporta la dialctica para la bsqueda

de una respuesta co&erente en aquellas cosas que no pueden deducirse solamente de principios

abstractos y desarrai#ados del devenir. 2s como si a cada paso Habermas nos invitara a entrar en

una discusin que en modo al#uno est clausurada sino que se plantea como un desa%'o para todo

aquel que se ve impulsado a re%le$ionar en torno al avance desmedido de la tecnolo#'a en todos los

camposD sobre la anomia que atraviesa nuestras %ormas de convivencia o sobre las patolo#'as que se

apoderan de los sujetos en sociedades cada ve+ ms a&o#adas por los sistemas burocrati+adas al

m$imo y que as%i$ian 3como lo e$presan diversas %ormas de protesta4 al mundo de la vida en

aquellos espacios que le son propios.

Habermas con el %in de situar adecuadamente su cr'tica de la sociedad se vuelca en primer

lu#ar al sentido y los alcances de la di%erenciacin entre la comprensin m'tica y la comprensin

moderna del mundo teniendo siempre en perspectiva el problema de la racionalidad como

cuestionamiento capital consciente de que sta no puede ser reducida a lo co#nitivo@instrumental.

Habermas plantea una evolucin en el paso que va desde una racionalidad m'tica a una ilustrada.

,ero esto no bastaD se &ace necesario re%le$ionar en torno a los alcances de la Ilustracin a sus

posibilidades de desarrollo en un mundo saturado por respuestas que parecen no tocar las

verdaderas inquietudes de los &ombres.


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Asumiendo lo esbo+ado anteriormente como prembulo reali+aremos un anlisis de las tesis

centrales que nos ocupan teniendo en perspectiva el concepto de racionalidad comunicativa y el

puesto que ocupa la comprensin moderna del mundo.

TESIS 1- Habermas da por sentado que el concepto de accin comunicativa se &a de

anali+ar si#uiendo el &ilo conductor del entendimiento lin#*'stico.

2sta a%irmacin pareciera remitirnos a un dato evidente. A&ora bien podemos pre#untarnos

si el entendimiento lin#*'stico a#ota o al menos ilumina adecuadamente la accin comunicativa.

2n su anlisis 9c Cart&y nos aporta una pista para un intento de solucin- bajo el aspecto %uncional

de entendimiento la accin comunicativa sirve a la tradicin y a la renovacin del saber cultural

3Ep. cit. p. ?FF4. Habermas concibe tal entendimiento 3verstGndi#un#4 como aquello que !remite a

un acuerdo racionalmente motivado alcan+ado entre los participantes que se mide por pretensionesde valide+ susceptibles de cr'tica!.

As' entre la accin comunicativa y el entendimiento lin#*'stico re%erido a la

intersubjetividad de los participantes media precisamente todo el conte$to de la teor'a

&abermasiana. ,or tanto #ran parte de la obra de Habermas intenta ser una justi%icacin de esta

tesis donde los componentes estructurales del mundo de la vida son reproducidos en base a los

di%erentes aspectos de la accin comunicatica 3entendimiento coordinacin sociali+acin4 que en

de%initiva tienen su ra'+ rn los componentes estructurales de los actos de &abla 3proposicional

ilocucionario e$presivo4. ;odo ello si no median #raves inter%erencias permite un trnsito e$pedito

entre accin comunicativa y reproduccin simblica del mundo de la vida?.

9e parece e$tremadamente su#erente el es%uer+o de Habermas por recuperar la vida en el

len#uaje como %orma que pleni%ica la vida &umana en cuanto a que el encuentro con los otros no

puede prescindir de nuestra capacidad simblica. 0e este modo el len#uaje ya no opera como un

medio entre muc&os otros posibles 3la %uer+a el ejercicio de la autoridad la coaccin4 sino que se

le#itima como medio espec'%icamente &umano.

Habermas en este sentido intenta una revalori+acin del dilo#o como %orma privile#iada

de encuentro donde el len#uaje es teln de %ondo al i#ual que la cultura y no puede ser concebido

2 C%r. . Habermas Teora de la Accin Comunicativa I 3en adelante ;.A.C4 ;aurus 1 p. 11.

3 Ibid. p. 11.

4 C%r. 9c Cart&y op. cit. p. ?FF.


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reduccion'sticamente como &a sido la &istrica tendencia del positivismo l#ico. 6rente a la

decepcin de Adorno y Hor&eimer en lo re%erente a la %uer+a a#lutinante del len#uaje Habermas

ve en l mirado como medio propio de la intersubjetividad la salida del ni&ilismo y creciente

pesimismo de nuestra cultura cada ve+ ms as%i$iada por una concepcin sistmica que coloni+a

espacios que ser'an propios del entendimiento lin#*'stico. ,ienso que la creciente descon%ian+a en

el len#uaje pol'tico en #ran medida &unde sus ra'ces en estas visin estrec&a del len#uaje en

#eneral que lo aleja de su posibilidad cierta y concreta de promover consensos y acuerdos. 0onde

la democracia es ms inestable se &ace notar en mayor medida esta necesidad de entrar

verdaderamente en comunicacin puesto que sur#e el peor de los escepticismos- el desencuentro

sistemtico con los otros. Habermas intenta salvar la proposicin del otro valorando los aspectos

positivos y evidenciando los ne#ativos. 6rente a una comunidad que &a perdido la esperan+a deentrar en comunicacin los diversos aspectos que con%i#uran el mundo de la vida son absorbidos

por consideraciones sistmicas y burocrticas que aumentan en de%initiva esa descon%ian+a capital.

2n ri#or lo que Habermas da !por sentado! en esta tesis permanece en espera de lo que

pueda aportar en vistas a la posibilidad real de que dos sujetos racionalmente motivados entren en

una autntica comunicacin y dependiendo del modo como esta vinculacin se d estaremos en

presencia una ve+ ms de una concepcin !co#nitivista! o por el contrario de una que lo#re

romper con tan estrec&os parmetros interpretativos. ;enemos pues que de aquello que se da como

inicio de la discusin dependen las posibilidades de lo#rar un acuerdo vinculado estrec&amente

con el #rado de aceptacin del principio propuestoJ.

Con todo pensamos que Habermas en su caracteri+acin del entendimiento acierta al

promover la inclusin de los participantes vinculados por pretensiones de valide+ y por la

posibilidad de cr'tica. 2stos tres aspectos se van potenciando en la medida en que e%ectivamente se

produce una interaccin entre acciones sociales actor y mundo y en relacin con el #rado en que

podamos realmente dar cuenta de la valide+ proposicional la rectitud normativa y la veracidad

e$presiva.

5 Si visuali+amos esta tesis inicial de Habermas como una presuncin y no como una verdad o un &ec&o &emos de

esperar que en al#n momento la mediacin que la %undamenta 3en este caso una teor'a consistente de la

intersubjetividad4 se lleve a cabo. Asimismo pensamos que no &ay ra+ones para rec&a+ar una presuncin ya que son

susceptibles 3como los &ec&os y las verdades4 de alcan+ar un acuerdo. 2n todo caso !la ad&esin a las presuncionesno es e$trema se espera que otros elementos la re%uercen en un momento dado! 3C%r. C&. ,erelman Tratado de laargumentacin Kredos 9adrid 1


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Asumiendo lo anterior las teor'as reduccionistas que &acen re%erencia a la comunicacin

deben ser criticadas considerando tambin sus aspectos positivos. 2n este sentido un ries#o

permanente para una adecuada apro$imacin al entendimiento lin#*'stico est constituido por

aquellas interpretaciones que privile#ian absolutamente un elemento co#nitivista y es por ello que

Habermas muestra las complicaciones que se presentan en el modelo de arvie que toma su base de

la teor'a del tercer mundo de ,opper. Aunque esta es una discusin que muestra un tono menor

%rente a las que se desarrollan en el corpus de la obra sin embar#o no creemos casual su tratamiento

en la introduccin puesto que tra+a el primer l'mite que permite la reconstruccin &abermasiana.

;ras esta %u#a+ aparicin est la discusin capital de nuestro tiempo- 7cmo podemos entender la

idea de racionalidad8 0ependiendo de la respuesta que intentemos y de los elementos que vayan

apareciendo podremos reali+ar un adecuado dia#nstico y proponer v'as de solucin en una pocamarcada pro%undamente por la conciencia de crisis.

TESIS 2- Si la sociolo#'a pretende ser teor'a de la sociedad el problema de la racionalidad

se le plantea en el plano metaterico 3secc. 4 y a la ve+ en el metodol#ico 3secc. ?4.

2n primer trmino Habermas se propone considerar el problema de la racionalidad en el

plano metaterico. 2sto si#ni%ica revisar los presupuestos ontol#icos de cuatro conceptos de accin

relevantes en teor'a sociol#ica. ,ero lo que ms nos interesa en lo que concierne a nuestro &ilo

conductor es el punto de vista que Habermas privile#ia- las relaciones que cada uno de ellos

presuponen entre actor y mundo 3;AC I p. 1114. Acciones sociales actor y mundo son las

coordenadas cruciales para apro$imarnos al concepto de racionalidad. 2sto implica asimismo dar

cuenta de los conceptos de mundo objetivo mundo social y mundo subjetivo.

Habermas se &ace car#o de la teor'a de ,opper del tercer mundo y de la aplicacin que de

ella &ace arvie en el mbito de la sociolo#'a. 7Lu es lo que motiva a nuestro autor para comen+ar

por esta problemtica8 ,ensamos que al considerar una teor'a que &a tenido su ori#en en problemas

epistemol#icos y de teor'a de la ciencia y su vinculacin con un es%uer+o por aplicarla a la

sociolo#'a Habermas intenta &acernos evidente el &ec&o de que- tras los conceptos sociol#icos de

accin e$isten e$plicitados con mayor o menor claridad ciertos presupuestos ontol#icos muc&as

veces derivados de teor'as cuyo alcance no es su%iciente para e$plicar el %enmeno de la

comunicacinF.

6 Creo que este es un momento apropiado para indicar que en Habermas lo ontol#ico &a de ser anali+ado


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1. )a teor'a del tercer mundo de ,opper

Habermas desarrolla los aspectos positivos y ne#ativos que subyacen a la teor'a popperiana

de los tres mundos. ,ensamos que los elementos problemticos de esta teor'a pueden ser

sinteti+ados en dos proposiciones- A4 ,opper no puede precisar la interaccin entre los tres mundos

con claridad su%iciente. 3M4 Su visin del tercer mundo viene aparejada con un estrec&amiento

co#nitivista. Ambos problemas son cruciales al momento de considerar las presuposiciones

ontol#icas pues vistas as' las cosas todo lo que dice relacin con los productos del esp'ritu

&umano !est primariamente al servicio del crecimiento del saber terico y de la ampliacin del

saber tericamente utili+able! 3;AC I 11J4. As' el tercer mundo es concebido con supremac'a

ontol#ica y unilateralmente restrin#ido en cuanto a su importancia para interpretar lo real.Cuando los elementos puramente co#nitivos adquieren este peso en una lectura de la

realidad imposibilitan una e$plicacin co&erente en lo que respecta a la interaccin entre los sujetos

en otros planos i#ualmente importantes &asta postular %inalmente la mar#inacin del sujeto dentro

de una teor'a del conocimiento>. ,ara Habermas es claro que &ablantes y oyentes manejan un

sistema de mundos co@ori#inarios donde todas las %unciones del len#uaje 3e$posicin apelacin y

e$presin4 estn a un mismo nivel evolutivo 3C%r. ;AC I 14.

A pesar de lo anteriormente observado ,opper aporta aspectos valiosos al a%irmar que

primer y tercer mundo actan a travs del se#undo objetando las tesis empiristas que se es%uer+an

cuidadosamente. 6rente al %racaso de la meta%'sica tradicional en su intento por aportar una e$plicacin

omnicomprensiva del mundo se patenti+a con mayor vi#or la necesidad de aplicar una cierta dosis de sospec&a %rentea los modelos de ra'+ meta%'sica que continan operando en nuestros es%uer+os por e$plicar la realidad. Nn

presupuesto ontol#ico &a de ser puesto en evidencia discutido y para esto es necesario reconstruir su proceso de

%oremacin y sedimentacin. 2n este sentido la posicin de Habermas es teor'a cr'tica que no slo alcan+a a los

tradicionales modelos meta%'sicos 3como sistemas4 sino que se vuelca adems &acia el %uncionamiento concreto delos sujetos que interactan en una sociedad real. 2sto &ace necesaria pues una pra#mtica %ormal.

7 9c Cart&y en op. cit. p. >? e$pone con un %uerte sentido cr'tico este estrec&amiento co#nitivista en ,opper que

se distancia del es%uer+o &abermasiano por constituir una !%iloso%'a trascendental trans%ormada!. Critica sobre todo en

,opper la inconsistencia patente de su recurso a la independencia de los &ec&os y su abstracta oposicin entre el!acercamiento objetivo! a un tercer mundo autnomo y el !acercamiento subjetivo! al sujeto co#noscente.

,ienso que la observacin de 9c Cart&y es acertada. Sin embar#o deseamos valorar en ,opper su es%uer+opor superar la oposicin e$trema entre teor'a y pra$is entre conte$to de justi%icacin y conte$to de descubrimientoD

elementos que son determinantes al en%rentarnos al avance incuestionable del positivismo l#ico con su invasin en

todos los mbitos del saber. A&ora bien es cierto que mientras ,opper potencia la di%erenciacin entre !verdad en s'!

y !verdad para m'! Habermas insiste con justa ra+n en la bsqueda de la verdad en cuanto es un !para nosotros!sujeta a consenso y cr'tica poniendo en el centro del debate no un intento por des&acerse del sujeto sino la

importancia indesmentible de la intersubjetividad en cuanto paradi#ma capital para entender las acciones sociales.


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por reducir las entidades del tercer mundo a estados mentales y por llevar el modelo causal propio

de los estados %'sicos al mbito del sujeto. Sin embar#o para Habermas es necesario avan+ar muc&o

ms en cuanto a las objeciones al empirismo por una parte y por otra a los postulados do#mticos

de la meta%'sica tradicional. 2s indudable que para esto requiere de una visin ms amplia de las

%unciones del len#uaje=.

2n conclusin el intento popperiano aporta su#erentes perspectivas en cuanto a la

superacin del encuadre positivista de la ciencia que inunda el mundo de la vida pero tal ventaja no

la convierte en modo al#uno en una teor'a que pueda ser vertida sin ms a la sociolo#'a sin mediar

al menos una pro%unda cr'tica y discusin.

1.1. Aplicacin del modelo de ,opper a la sociolo#'a de arviearvie evidencia los problemas subyacentes a la teor'a popperiana al trans%erir la teor'a de

los tres mundos desde el plano epistemol#ico al plano de la accin 3C%r. ;AC. I 11F4. Com arvie

pues asistimos a un despla+amiento del campo de inters en el que se mantienen ciertos

presupuestos impl'citos en la visin popperiana.

)a consecuencia de esto es clara- arvie descuida la coordinacin de las acciones en aras de

la cr'tica y el acrecentamiento del saber. 2s decir deja de lado los componentes del saber cultural

que no se re%ieren a la !verdad! y con esto reduce los ne$os objetivos de sentido entre los

involucrados en la comunicacin- se cumple en de%initiva el distanciamiento de la intersubjetividad

y sus condiciones de posibilidad. 2sto constituye el antecedente para la di%icultad crucial del modelo

de arvie- la con%usin entre valores y su encarnacin cultural por medio de normas 3C%r. ;AC. I

11>@11=4.

Sin embar#o y como es &abitual en la ar#umentacin de Habermas se valora el &ec&o de

que arvie &ace patentes los presupuestos ontol#icos que con%luyen en los conceptos sociol#icos

de accin abriendo as' una %ecunda pista para la investi#acin.

Lueremos recalcar eso s' que es precisamente en el plano del encuentro intersubjetivo

donde la comunicacin se lleva a e%ecto y cualquier teor'a que de al#n modo minimice el papel de

8 2sta ampliacin de las %unciones del len#uaje tiene una importancia capital para el desarrollo del potencial de

accin orientada al entendimiento ya que posibilita el !desatarse! de ella &asta convertirse en racionali+acin delmundo de la vida y para esto es necesario que el len#uaje se vuelva un medio a travs del cual se pueda e%ectuar la

reproduccin cultural la accin social y la sociali+acin 3C%r. ;AC II p. 1?4.


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@?==.


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mundos de la vida y de las %ormas de vida particulares! se presentan como invariables> donde el

medio de entendimiento permanece en una peculiar semitrascendencia=. Con todos los problemas

que esto acarrea en el plano terico 3%undamentalmente la precisin del sentido de e$presiones

como !semitrascendencia! !cuasi@trascendental! etc.4 pensamos que sin embar#o Habermas

puede le#itimar un punto de vista que no redu+ca su interpretacin a una casu'stica visuali+ando

una %orma comn tras la multiplicidad de los %enmenos &istricos.

2n lo que respecta a nuestro &ilo conductor consideramos crucial lo a%irmado por Habermas

en el sentido de que las estructuras del mundo de la vida !%ijan las %ormas de la intersubjetividad del

entendimiento posible!


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mundo de la vida potenciando solamente la v'a co#nitivo instrumental y la estrat#ica y

produciendo por ello mismo la as%i$ia del individuo dentro de un mundo que no comprende pero

que lo impulsa a la accin en todo momento.

2ste intento de reconstruir una teor'a de las acciones sociales basndose en la accin

comunicativa y la preponderancia que en ella tienen las relaciones intersubjetivas debido a su

amplio alcance no est e$enta de aspectos discutibles y de apor'as.

. Aspectos problemticos

,ienso que el problema planteado a partir de las posibilidades de comunicacin desde el

punto de vista de los sujetos que interactan entre s' toca neurl#icamente la pre#unta por el

aspecto motivacional. 2sto muestra una #ran complejidad puesto que muc&as veces 3como elmismo Habermas reconoce4 la comunicacin es a%ectada por inter%erencias 3conscientes o

inconsciente4 que conducen ms bien a una cie#a aceptacin de las invasiones que an#ostan el

mundo de la vida. 2stimamos que el que se conciba la comunicacin como telos del len#uaje no

#aranti+a el &ec&o de que los sujetos se involucren motivadamente y no slo nos re%erimos a

motivaciones de 'ndole intelectual o moral sino que sobre todo pensamos en aquellos elementos

que mueven a la accin desde un punto de vista a%ectivo.

2ste aspecto motivacional no slo dice relacin con la situacin del individuo dentro de la

sociedad sino que tambin o%rece aspectos problemticos cuando consideramos la diversidad

cultural. 2sta di%icultad es vista por 9c Cart&y en op. cit. pp. @


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Habermas incluso aplica esa evolucin a toda la sociedad e$tendiendo la aplicacin del paradi#ma

sin dar claros indicios de su posible aplicacin en un c$onte$to aun mayor. 7Se trata pues

e%ectivamente de una l#ica evolutiva8 72n otros continentes 3pensemos en Amrica )atina por

ejemplo4 podemos reconocer una tal evolucin de modo co&erente8 7Se puede &ablar de

!adquisicin de competencia universal! en los sujetos de un pa's donde puede convivir un modelo

capitalista 3%uertemente re#ido por las leyes del mercado4 con las determinaciones sociales que

re#ulan tal visin junto a una tradicin que &a sido estructurada como por escor+os y sobresaltos a

partir de modelos e$tranjeros8

2n mi opinin Habermas piensa pro%undamente la realidad de ciertos sectores de 2uropa e

incluso da indicios su#erentes que son susceptibles de ser aplicados en otras latitudes pero sin

embar#o su teor'a parece debilitarse en lo que dice relacin con la interaccin entre diversas %ormasculturales que empero estn en una relacin permanente de in%luencias 3consideremos las

transnacionales por ejemplo4. 2n este sentido una l#ica evolutiva encuentra su punto de quiebre

ya que los llamados a establecer consensos y acuerdos muc&as veces no son los ciudadanos ni

siquiera los que comparten una misma len#ua o un mismo continente.

2sta e$periencia de dominacin 3muc&as veces sin perspectivas de liberacin o de

emancipacin4 no slo a%ecta a #obiernos o #randes #rupos sino que tambin in%luye en minor'as

3ind'#enas etc.4 y en de%initiva a los individuos estableciendo incluso pseudo mundos de la vida

&acia los cuales !parecen! orientarse motivadamente los individuos 3inclusive creyendo establecer

acuerdos racionales susceptibles de cr'tica mani%estando pretensiones de valide+ etc.4 pero que en

muc&as ocasiones estn entramados bajo motivaciones estrat#icas que salen a la lu+ en los

momentos de crisis 3discusin de la deuda e$terna tratados de libre comercio pro#ramas de ayuda

etc.4. Si bien es cierto que Habermas de al#una manera acusa la e$istencia de esta problemtica

pensamos que deber'a ampliar ms sus alcances alejndose de los modelos puros de accin es

decir ir de la consideracin %ormal &acia el aspecto material.

2s posible por lo tanto pre#untarnos- 7el paradi#ma reli#ioso@meta%'sico 3si es posible unir

as' estas dos realidades4 la representacin m'tica del mundo etc. pueden concebirse como a#otados

en tales conte$tos8 Habermas podr'a responder- se trata de pa'ses pre@ilustrados. ,ero 7en tales

pa'ses no se &a encajado el modelo de la Ilustracin 3en la educacin la reli#in la polPtica la

econom'a el derec&o etc.4 sin una tradicin que pueda constituirse en el otro polo de esta


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dialctica8 Incluso ms la accin estrat#ica y la dramatr#ica cobran en )atinoamrica una %uer+a

arrolladora que cada ve+ &ace ms di%'cil que esos pa'ses se piensen a s' mismos su tradicin sus

ra'ces su &istoria 3en cuanto bases que posibilitan un mundo de la vida4.

Si dejamos de lado los pa'ses subdesarrollados o los que estn en v'as de desarrollo 7es

posible visuali+ar una salida para las relaciones estrat#icas que se dan entre los pa'ses

desarrollados8 9e parece que parte del camino de emancipacin est ci%rado en una reconstruccin

cr'tica de aquello que Habermas da por a#otado por superado- la visin meta%'sica del mundo y su

visin reli#iosa pues el testimonio mismo de la &istoria de la ciencia pone en encrucijada el

concepto de desarrollo de in%luencia compteana y que se &a impuesto 3con mayores o menores

modi%icaciones4 como cate#or'a para considerar la cultura.

2n de%initiva lo crucial para dilucidar este tipo de situaciones estriba en que los v'nculosrec'procos posean una base racional. ,ero cuando es la misma base racional la que es puesta en

cuestin nos despla+amos inmediatamente &acia otro estadio interpretativo a saber si

e%ectivamente con la disolucin de los #randes paradi#mas no &emos socavado tambin las mismas

bases y que lejos de ser nuestra comunicacin racionalmente motivada nos movemos a la deriva

en una me+cla de acciones aparentemente comunicativas que se ocultan unas tras otras como

mscaras que no terminamos de e$traer proponiendo justi%icaciones que en de%initiva describen un

camino circular.

Habermas pues ve en el len#uaje 3en cuanto a su uso interactivo4 la inmanente obli#acin

de aducir justi%icaciones. 2s posible que esto en principio sea as' pero siempre es podemos

pre#untarnos por el l'mite en que esas justi%icaciones ya no son aducidas y que se trans%orman

contrario sensu en mecanismos de coaccin y violencia. Habermas en este sentido mani%iesta una

con%ian+a e$trema al concebir al entendimiento como el telos inmanente del len#uaje. ,ero a partir

del &ec&o de que en muc&os casos e%ectivos el &abla no se orienta a alcan+ar un entendimiento el

32

C%. 9c Cart&y op. cit. pp. J ss. donde problemati+a el criterio que permite di%erenciar un acuerdo racional deuna mera apariencia de racionalidad. (osotros llevamos esto mismo a la prctica comunicativa- Habermas sostiene la

idea de que un cosnsenso est racionalmente motivado si slo se apoya en la %uer+a de los ar#umentos y no en lascoacciones internas o e$ternas del discurso. 2sto se relaciona con una !e$i#encia #eneral de simetr'a! 3op. cit. p. JJ4

o al menos de una reciprocidad incompleta 3Ibid. p. ?J4. ,ero este criterio insistimos &a de ser mostrado con

mayor claridad con el %in de que veamos que no se trata de una mera %orma sin contenido toda ve+ que el contenido

muc&as veces incluso puede modi%icar la estructura de esa %orma &asta en ciertas ocasiones convertirla meramenteen un prejuicio. )a e$istencia de tal reciprocidad por incompleta que sea &a de ser mostrada como un elemento

presente en el desarrollo &istrico.


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J

problema de la !inmanencia! de ese telos queda al menos en suspenso y por tanto la con%ian+a de

que en el uso no comunicativo del &abla 3estrat#ico4 se supone el uso comunicativo del len#uaje.

,ensamos que el momento crucial de esta discusin lo encontramos al re%le$ionar en torno a

lo que Habermas denomina !situacin ideal de &abla! en el sentido de ser una suposicin necesaria

para que la ar#umentacin no cai#a en el sinsentido. Consideramos que no es su%iciente el &ec&o de

ser contra%ctica como un motivo para su abandono 3y en esto aceptamos lo planteado por

Habermas4 pues muc&os aspectos de la cultura se desarrollan a partir de un &ori+onte ideal. Sin

embar#o s' consideramos la posibilidad de que Habermas en de%initiva se est moviendo en un

c'rculo de &ablantes y de oyentes cortados a la medida de una sociedad de cient'%icos 3aspecto que l

mismo critica4 en la cual los ar#umentos realmente justi%icados poseen una dimensin decisiva.

6rente a un problema propuesto a la ciencia es tal ve+ posible concebir una secuencia de ra+onesque en ltimo trmino puedan apelar a la ar#umentacin ms %uerte. ,ero cuando se en%rentan

mundos de la vida la secuencia parece in%inita y por tanto inabordable en el campo del discurso.

,odemos pre#untarnos entonces 7no es posible vislumbrar aqu' una cierta e$tensin co#nitivista en

un modo ms sutil que lo objetado a ,opper8 7(o ser ms un s'mtoma de la teor'a que un olvido

el &ec&o de ir dejando en un se#undo plano los elementos motivacionales a%ectivos y en

de%initiva el &ec&o de pasar de una concepcin m'tica a una moderna del mundo e$ceptuando

aquellas en las que parecen superponerse elementos de ambas sin solucin de continuidad8

2stos cuestionamientos pensamos no slo a%ectan al discurso terico sino tambin al

prctico@moral en la medida en que en este ltimo &ay aspectos que pueden ser decididos mediante

ra+ones y en de%initiva arrai#an en las pretensiones de veracidad de los sujetos. 7Hay pues un

posible consenso universal que est a la base de las pretensiones de ciertos individuos y #rupos8

,ara la visuali+acin de tal consenso universal 7no se requiere 3abierta o encubiertamente4 de una

meta%'sica8?. 7)a aceptacin de planteamientos l#ico@evolutivos en teor'a del len#uaje y de la

33 ,ara &acer justicia a Habermas en este punto creemos importante re%erir su preocupacin por el desarrollo del yoy la %ormacin de a%ectos y motivos. 9c Cart&y en op. cit. p.


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accin en Habermas superan realmente lo que pueden ser !perspectivas trascendentales y l#ico@

evolutivas de la %iloso%'a clsica alemana!8J.

,ara %inali+ar creo importante re%erirme a una cita de ,erelman en su Tratado de la

argumentacin )La nueva retrica* donde previamente &a considerado un pasaje de Alicia en el

pa's de las maravillas en el que no &ay ra+n para que las discusiones comiencen pues no se sabe

por qu uno se diri#e a otro y la nica condicin que se cumple es el deseo de Alicia de entrar en

comunicacin con los seres de este nuevo universo- !,ara ar#umentar es preciso en e%ecto atribuir

un valor a la ad&esin del interlocutor a su consentimiento a su concurso mental 3...4 2l

racionalismo y el &umanismo de los ltimos si#los &acen que pare+ca e$traa la idea de que sea una

cualidad el ser al#uien cuya opinin cuenta y en muc&as sociedades no se diri#e la palabra a

cualquiera i#ual que no se bat'an en duelo con cualquiera! 32d. cit. pp. [email protected] conclusin es la visin de la intersubjetividad y sus posibilidades 3motivacionales etc.4

una ra'+ central donde encuentra sus respuestas una teor'a de la accin comunicativa. Habermas se

da cuenta de esto y su#iere a cada paso el lu#ar donde se sita el sujeto en relacin con otros

sujetos. Sin embar#o es posible cuestionar ciertos elementos de su teor'a a partir precisamente de

la aceptacin sin su%iciente justi%icacin por parte de Habermas de un paradi#ma l#ico@evolutivo

que describe una serie aparentemente irreversible que mati+a tal ve+ e$a#eradamente los saltos

tanto en el mbito social como en el individual y potencialmente la %orma de darse la relacin

entre las naciones que a veces a%ectan imperceptiblemente el &ori+onte 'ntimo del mundo de la

vida. ,ensamos asimismo que es importante dar cuenta cabal de la situacin de la meta%'sica y de

la reli#in ya que al menos en ciertas latitudes del planeta no constituyen en modo al#uno un

universo de si#ni%icacin ya de%initivamente a#otado aunque s' es necesario aceptar que el modelo

tradicional en ambas es%eras de la vida mani%iesta un cr'tico estrec&amiento.

35 9c Cart&y al su#erir esta posible lectura a#re#a- !5 en la %ase pro#ramtica del desarrollo de su obra es qui+

comprensible que los es%uer+os tericos de Habermas se basen en buena parte en los paradi#mas e$istentes. 9as por

otro lado esos planteamientos se en%rentan a importantes problemas metodol#icos y substantivos que Habermas

parece en buena parte pasar por alto! 3op. cit. p. ?=4. )o que preocupa a 9c Cart&y es la e$cesiva con%ian+a de

Habermas en los planteamientos l#ico@evolutivos %rente a la pro%unda &istoricidad del pensamiento y de la accindel &ombre. !7Son estos planteamientos al#o ms que una reciente %orma de !ilusin objetivista! una ilusin que

podr'a desenmascararse mostrando cmo sus cate#or'as y supuestos bsicos estn li#ados al conte$to8! 3Ibid.4.

habermas cuatro tesis fundamentales

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