goya y su obra

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AUTORRETRATO 1771-75 Goya hizo múltiples autorretratos, pero este es el primero, en el que podemos ver a un Goya joven, a punto de casarse o recién casado ya. En cualquier caso, aún no era famoso y probablemente no había llegado aún a Madrid o acababa de hacerlo (1774)

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Breve presentación de las principales obras más características de sus distintas etapas.

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Page 1: Goya y su obra

AUTORRETRATO 1771-75

Goya hizo múltiples autorretratos, pero este es el primero, en el que podemos ver a un Goya joven, a punto de casarse o recién casado ya. En cualquier caso, aún no era famoso y probablemente no había llegado aún a Madrid o acababa de hacerlo (1774)

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EL QUITASOL 1777Quizá sea este uno de los más famosos cartones para tapices de Goya, en el que asistimos a una escena de galantería, cuyo motivo principal es una elegante joven, a la que un majo protege del sol con una sombrilla o quitasol. Llaman la atención los colores vivos y brillantes que utiliza, así como la jovialidad de los gestos. Es, sin duda, un cuadro de juventud.

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EL COLUMPIO 1779Es uno de los cartones para tapices que pintó en su primera etapa. En ella Goya aún seguía los temas y la técnica del momento. En este caso nos recuerda a uno de los más representativos del Rococó, el de Fragonard.

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LA VENDIMIA O EL OTOÑO 1786

Goya realizó también una serie de 4 lienzos dedicados a las 4 estaciones. La que tenemos aquí es, quizá, la más famosa. En ella se representa una de las actividades más típicas del comienzo del otoño, la vendimia o recogida de la uva. Apreciamos igualmente los colores brillantes y la composición piramidal típica de los cuadros neoclásicos.

Page 5: Goya y su obra

LA GALLINA CIEGA 1788

En la misma línea de escenas de la vida cotidiana, llenas de sencillez y colorido, encontramos a este grupo de jóvenes jugando a la gallinita ciega. Por su vestimenta reconocemos a tres parejas de majos, así como a otra pareja vestida a la moda francesa. Al fondo, la sierra madrileña y en primer plano la ribera del río Manzanares.

Page 6: Goya y su obra

EL ALBAÑIL HERIDO 1786-87

Cuadro bastante famoso pues, a pesar de ser de la primera etapa, ya va dejándose ver la conciencia social y el espíritu crítico que va a caracterizar la obra de Goya. En este caso, se trata de dignificar el trabajo manual y de concienciar a la sociedad con las nuevas leyes que para ello se acababan de aprobar en ese momento. No confundir con El albañil borracho.

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FAMILIA DE OSUNA 1778

Se trata de los Duques de Osuna, una familia dedicada al mecenazgo de artistas, incluido al propio Goya. Mantuvieron una gran amistad toda su vida y Goya pintó muchos cuadros para su palacio de El Capricho, en Madrid. Lo más destacable son las miradas de los niños, que reflejan la inocencia y dulzura propia de esa edad.

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JOVELLANOS 1797-98

Gran ilustrado, ministro de Justicia en el momento en que se realizó el retrato, fue también amigo y admirador del pintor. Como él, también será perseguido por la Inquisición, e incluso encarcelado por sus ideas liberales en pro de reformas contra la ignorancia y la superstición.

Page 9: Goya y su obra

LEANDRO FERNÁNDEZ DE MORATÍN 1799

De los múltiples retratos que pintó solo vamos a ver aquellos en los que reconozcamos personajes famosos de la época. En este caso, es el de un escritor e ilustrado amigo suyo, de quien hemos leído en clase El sí de las niñas. Este es de 1799, pero le dedicó otro años después.

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LA FAMILIA DE CARLOS IV 1800

Uno de los retratos más famosos de la historia, junto con las Meninas de Velázquez, pintor al que admiraba y al que homenajea en este lienzo, al imitar algunos rasgos, como el de incluirse en un lateral de la pintura, mirando al espectador. La familia real ha sido retratada sin idealizar sus figuras y sin subrayar lo ilustre de la familia.

Page 11: Goya y su obra

¿QUIÉN ES QUIÉN?Se han hecho muchas interpretaciones de este cuadro: la reina en el centro, en lugar del rey, indicaría que la que tomaba las decisiones era ella, en connivencia con Godoy, ausente del cuadro pero al que Goya le deja “hueco” al lado de la reina, de quien se presume que era amante y con quien podría haber tenido un hijo, precisamente el que está entre los reyes, el infante Don Francisco de Paula. El resto vienen etiquetados en la imagen

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MANUEL GODOY 1801

Y, hablando del Príncipe de la Paz, aquí lo tenemos retratado por Goya en uno de sus momentos de esplendor, tras su triunfo en la brevísima Guerra de las Naranjas con Portugal, instigada por Napoleón. Aquí el pintor sí que se aparta de su realismo habitual para ensalzar los méritos militares del valido: en el campo de batalla, vestido con toda pompa y observando las banderas conquistadas.

Page 13: Goya y su obra

DUQUESA DE ALBA 1785

Este es el primero de una larga serie de retratos que Goya le hizo a su amiga, musa, mecenas y, quién sabe si amante, la Duquesa Cayetana de Alba, antepasada de la actual Duquesa. Parece claro que Goya se enamoró de ella, aunque no está demostrado que llegara a haber una relación entre ellos.

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LA DUQUESA DE ALBA DE NEGRO 1797

En esta ocasión la duquesa posa de negro puesto que acababa de morirse su esposo. Lo más llamativo de esta pintura es lo que ella señala en el suelo: “solo Goya 1797”. Además, parece ser que en los anillos que lleva aparecen los apellidos de Alba y Goya. Estas ambigüedades dieron pie a que se hablara de amoríos y a atribuir a la duquesa el protagonismo de las majas.

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DETALLES

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LA MAJA DESNUDA 1795-1800

Es fácil de imaginar que ambas pinturas le ocasionaran problemas a su autor, quien fue investigado por la Inquisición y sólo se salvó por la intervención de algún amigo influyente. A pesar de que esta es más famosa, parece más sensual la anterior, pues es más erótico insinuar que mostrar. Pero para gustos están los colores.

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LA MAJA VESTIDA 1800-1807

Como ya hemos dicho, las habladurías llevaron a pensar que la modelo era la Duquesa de Alba, aunque no parece que sea cierto. Pero aun así es un cuadro provocador, tanto por la postura claramente sensual de la modelo, como por su mirada directa y atrevida, por no hablar de lo ajustado e insinuante de sus vestidos que denotan, además, que era una mujer de la aristocracia.

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LA CARGA DE LOS MAMELUCOS 1814Goya refleja en esta pintura lo que pudo ser el inicio de la Guerra de la Independencia, cuando el pueblo de Madrid se levantó contra las tropas francesas acuarteladas en España. Como en otras ocasiones el pintor va a mostrar el horror de la guerra en toda su crudeza, irracionalidad y violencia.

Page 19: Goya y su obra

LOS FUSILAMIENTOS DEL TRES DE MAYO

1814Los españoles que no murieron en la refriega o que no escaparon, fueron detenidos por los franceses y fusilados a las pocas horas, momento que nos ofrece el artista con una sensibilidad excepcional. La despersonalización de los soldados de espaldas, todos iguales como máquinas de matar, frente a un pueblo humilde, que encara su destino con la frente alta y a pecho descubierto. Las víctimas de esos fusilamientos están enterradas en un pequeño cementerio próximo a la ermita de San Antonio.

Page 20: Goya y su obra

SATURNO DEVORANDO A SUS

HIJOS 1820-23La sordera, la enfermedad, la desgracia de ver morir a todos sus hijos, salvo el último, la decepción y sufrimiento ocasionados por la guerra y por el abyecto régimen de Fernando VII, provocaron la introversión y el aislamiento del pintor, quien veía el mundo cada vez con más pesimismo. Comienza la etapa de sus pinturas negras, con las que decoró las paredes de su “Quinta del sordo”.

Page 21: Goya y su obra

VIEJOS COMIENDO SOPA 1823

Otra de sus pinturas negras, donde se aprecian los estragos de la enfermedad, los vicios y la presencia de la muerte. No queda nada de los coloridos cuadros de juventud, cuando Goya, sano, joven y con un gran porvenir por delante, aún creía en la felicidad.