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1 Gobernadores vs. Organizaciones: Política social y Federalismo durante los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández Borrador no citar sin permiso. En los países federales el presidente requiere de los gobernadores para ganar elecciones y aprobar leyes en el Congreso. Recientemente, los actores sociales también han sido incluidos como aliados de los presidentes en las provincias, a través de la derivación de recursos de programas sociales. A través de un estudio de caso en una provincia argentina analizo los cambios en la estrategia de coaliciones del gobierno federal. Así, evalúo cómo la convivencia de dos aliados federales afecta a los regímenes subnacionales. Los resultados muestran que las alianzas entre los presidentes y los actores sociales pueden convertirse en un factor de inestabilidad para los regímenes provinciales, pero que los gobernadores pueden encontrar equilibrios para seguir manteniendo el control. Palabras Clave Coaliciones Federales organizaciones sociales regímenes subnacionales políticas sociales Buenos Aires, Enero 2011 Lorena Moscovich Universidad de Buenos Aires CONICET / Universidad de San Martín [email protected]

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Gobernadores vs. Organizaciones: Política social y Federalismo durante los gobiernos

de Néstor Kirchner y Cristina Fernández

Borrador no citar sin permiso.

En los países federales el presidente requiere de los gobernadores para ganar elecciones

y aprobar leyes en el Congreso. Recientemente, los actores sociales también han sido

incluidos como aliados de los presidentes en las provincias, a través de la derivación de

recursos de programas sociales. A través de un estudio de caso en una provincia

argentina analizo los cambios en la estrategia de coaliciones del gobierno federal. Así,

evalúo cómo la convivencia de dos aliados federales afecta a los regímenes

subnacionales. Los resultados muestran que las alianzas entre los presidentes y los

actores sociales pueden convertirse en un factor de inestabilidad para los regímenes

provinciales, pero que los gobernadores pueden encontrar equilibrios para seguir

manteniendo el control.

Palabras Clave Coaliciones Federales – organizaciones sociales –regímenes

subnacionales – políticas sociales

Buenos Aires, Enero 2011

Lorena Moscovich

Universidad de Buenos Aires

CONICET / Universidad de San Martín

[email protected]

2

Gobernadores vs. Organizaciones: Política social y Federalismo durante los gobiernos

de Néstor Kirchner y Cristina Fernández 1

“Cuándo no hay voluntad, hay mil excusas,

cuándo hay voluntad hay mil recursos”

Organización Tupac Amaru

1. Dos alianzas, varios problemas

En los últimos años el gobierno federal argentino introdujo cambios en el armado de

coaliciones2 políticas en provincias y municipios.

3 Una de las principales innovaciones

ha sido la inclusión de actores sociales (organizaciones y sus líderes) en su proyecto

político y en la gestión de recursos públicos, aún cuando ya contara con otro aliado.

Esta práctica no reemplaza la fundamental política de acuerdos con gobernadores4 que

caracteriza al federalismo político argentino5. Sin embargo, los cambios en las alianzas

territoriales tienen consecuencias que pueden alterar las coordenadas en las cuales

presidentes y gobernadores gobiernan y negocian. Este trabajo analiza esas distintas

1 Versiones previas han sido presentadas en el las siguientes conferencias XXI IPSA, Santiago de Chile,

Julio de 2009 y XXIX LASA, Toronto, Octubre de 2010. Quisiera agradecer a todas las personas que

brindaron su testimonio en las entrevistas haciendo posible esta investigación. También a Ana Skiendziel

por su trabajo de asistencia en esta investigación. Versiones anteriores de este trabajo recibieron valiosos

comentarios de varios colegas, a Javier Auyero, Jacqui Behrend, Wendy Ana Jacoby, Guillermo

Jajamovich, Pedro Pirez, e Ivana Socoloff muchas gracias. El resultado final es mi entera responsabilidad.

Esta investigación contó con el financiamiento de una beca doctoral del CONICET y de los proyectos

UBACYT S027 y CONICET PIP 1810. 2 Hablaré alternativamente de alianzas o coaliciones políticas federales cuando me refiera a los acuerdos

(de duración variable) entre el gobierno federal y otros actores subnacionales para obtener apoyos para

aprobar leyes en el Congreso, ganar elecciones, implementar políticas o respaldar públicamente al

gobierno. En general las coaliciones se han establecido entre actores políticos partidarios (sindicatos y

cámaras empresarias también han tenido roles importantes en el respaldo de algunas políticas- Murillo,

2000; Beltrán, 2008-). 3 La Argentina es un país federal compuesto por tres niveles de gobierno: el federal (presidente, sus

ministros y un sistema legislativo bicameral), el provincial (23 provincias y la Ciudad Autónoma de

Buenos Aires) y el municipal (salvo por la ciudad que la Ciudad no posee otras unidades políticas en su

interior). 4 La última década fue rica en investigaciones sobre las relaciones entre ejecutivo y gobernadores en la

Argentina. Sólo algunos ejemplos son: Gibson y Calvo (2000), De Luca (2004); Gibson et al (2004),

Calvo y Escolar (2005), Spiller y Tommasi (2007), Gibson (2008 y 2009), Benton (2009), Behrend (2007

y 2010), Gervasoni (2010), Ardanaz et al (2010), y Bonvecchi y Lodola (en prensa). 5 Sobre el funcionamiento del federalismo político argentino y sus consecuencias puede verse la

contribución reciente de Ardanaz, et al. 2010 y las referencias allí citadas.

3

formas de alianzas federales en las provincias para conocer cómo conviven y cuales son

sus consecuencias en los regímenes subnacionales.

Sigo a Gibson (2009), quien entiende al federalismo político como uno de los

posibles arreglos de un sistema territorial compuesto por unidades autónomas pero que

interactúan afectándose la una a la otra.6. El territorio subnacional moldea un espacio

político con sus propios actores, recursos, y problemas, pero bajo ninguna circunstancia

las unidades subnacionales pueden considerarse como totalmente autónomas de aquella

unidad territorial más amplia que las contiene. Por ello se espera que los cambios en la

política federal de alianzas afecten a la política provincial. Mi objetivo en este trabajo es

analizar de qué manera la política de alianzas territoriales de los presidentes argentinos

Néstor Kirchner (2003-2006) y Cristina Fernández (2007-presente) ha influido en los

regímenes subnacionales, a través del estudio del caso de la provincia de Jujuy.

Desde 2003, el gobierno federal reconoce a los actores sociales como aliados, les

deriva políticas asistenciales e integra a algunos de sus líderes al gobierno (Garay,

2007). En la medida que el gobierno provincial posee otro tipo de rentas (como las de la

Coparticipación Federal de Impuestos7) y que, frente a ellas, el gasto de los programas

sociales federales es pequeño, no existiría competencia por los recursos. Más aún, el

gobierno provincial podría beneficiarse cuando las organizaciones sociales8 atraen y

6 La política también se cruza con relaciones sociales y políticas sedimentadas, y con una dimensión

dinámica del territorio y el espacio que los griegos entendían como sinecismo. El sinecismo son las

relaciones interdependientes, constructivas y destructivas, que surgen del hecho de que un número de

personas cohabiten voluntariamente en un espacio geográfico (Soja 2008:42). También véase Sack 1983. 7Sobre las relaciones entre los niveles de gobiernos con relación a la Coparticipación Federal de

Impuestos ver Bonifacio y del Cogliano (2010). Bonvecchi y Lodola (en prensa), enumeran distintas

rentas federales administradas por los gobernadores. 8 Las organizaciones de la sociedad civil son sumamente heterogéneas en composición, organización y

fines (Filmus, et. al. 1997, Cecconi y Luna 2002). Sólo me referiré a algunas de ellas que el gobierno

federal elige como aliadas políticas o de gestión en los territorios de las provincias y municipios. La mía

es una definición operacional (en el sentido que le da Sartori 2006: 66) que entiende a las organizaciones

sociales como un conjunto de actores que organizan los intereses de los pobres y desempleados en los

barrios (aunque luego su labor exceda estos territorios). El capital de estas organizaciones es su capacidad

para llegar a las personas para distribuirles políticas asistenciales y de movilizarlas en actos y en

protestas. A diferencia de los actores sociales colectivos que estudiaba la sociología política clásica, no

son grupos de intereses organizados, como cámaras empresarias o sindicatos de trabajadores. Su

4

distribuyen recursos federales en su territorio. Gracias a ellos, estas podrían canalizar y

contener parte de las demandas de los habitantes más pobres de la provincia, aliviando

la presión sobre el gobierno provincial. Pero una organización más fuerte gracias a la

legitimación del gobierno nacional afecta el monopolio que el gobernador posee sobre

la distribución de los fondos federales en su provincia e implica un aumento de la

movilización social. Por otra parte, organizaciones más autónomas pueden establecer

diversos tipos de relaciones con el gobierno federal (colaboración) y el provincial

(competencia).

Reconstruiré la historia de trabajo de la organización social Túpac Amaru en la

provincia de Jujuy. Identificaré diferentes coyunturas, problemas y desafíos que

emergen en el régimen9 provincial a causa de la relación que el gobierno federal

establece con esta organización. Podría pensarse que una organización social que por su

manejo de fondos federales se fortalece al punto de convertirse en un actor de veto en la

política provincial es realmente un caso excepcional. También podría considerarse

excepcional que el presidente integre al gobierno a un líder de una organización social

sospechado de usar discrecionalmente planes de empleo; y, más aún, que el presidente

mantenga en el cargo al mismo dirigente/funcionario cuando el último fue sentenciado

por otro delito.10

Y ciertamente no ocurre a diario, pero ocurrió en la Argentina, que el

gobierno federal recurra a organizaciones sociales, por ejemplo, para que se movilicen

topografía es muy variable de acuerdo al territorio. Aunque algunas tienen presencia en varias provincias

y/o un gran número de miembros, las relaciones entre el gobierno y organizaciones sociales se reproducen

en distintos niveles llegando a escalas muy pequeñas, donde la micro unidad de estos vínculos puede ser

el contacto de un trabajador social con vecinos organizados para dar de merendar a los niños del barrio. 9 Según O‟Donnell (2010) el régimen político se conforma por las los patrones, formales o informales y

explícitos o implícitos determinantes en el acceso a cargos gubernamentales jerárquicos. Estos patrones

también delinean que actores son admitidos en tal acceso, así como los recursos y estrategias aceptados

para conseguirlo. Siguiendo Mazzuca (2007), Behrend (2010) destaca la relevancia de diferenciar cómo

se accede a las posiciones de autoridad del tipo de ejercicio del poder que se hace una vez que se ocupan

las mismas. 10

Este fue el caso de Luis D‟ Elia. Cuando asumió como Subsecretario de Tierras para el Hábitat Social

en 2003, ya había sospechas sobre su manejo discrecional de planes sociales. En 2004, estuvo

involucrado en la toma de una comisaría en la Ciudad de Buenos Aires y fue hallado responsable y

condenado a prisión (aunque luego eximido de ir a la cárcel). Sin embargo, siguió en el gobierno hasta

2006 cuando tuvo que abandonarlo debido unas polémicas declaraciones a favor del gobierno de Irán.

5

en su apoyo para defender una medida de gobierno.11

En este artículo mostraré que

estos casos, aparentemente “únicos” y en alguna medida “extremos”, sólo son posibles

en el marco de cambios profundos en la estrategia de construcción de apoyos

territoriales del gobierno nacional.

Para comenzar desarrollo algunos de los antecedentes de la forma en la cual

gobierno y diversos tipos de actores sociales se han vinculado. En la sección 3

caracterizo en particular la manera en la cual los distintos niveles de gobierno y

organizaciones sociales se relacionan en torno al último proceso de descentralización y

al manejo de recursos federales. Luego explico el enfoque de análisis. En la sección 5

abordo tres relatos que hablan de las consecuencias provinciales de las alianzas

nacionales. En cada relato hay un tipo de recurso en juego: recursos económicos,

recursos para intervenir en el la política provincial y recursos de legitimidad.

Seguidamente caracterizo el presente de la toma de decisiones en Jujuy y muestro la

gravitación que todavía tiene la política federal en la provincial. Por último cierro el

artículo con algunas reflexiones que surgen del caso analizado

2. Cambios y continuidades en la articulación de intereses del gobierno federal y en

su relación con las organizaciones sociales

Desde 2003, en la Argentina, las alianzas entre el presidente y sus contrapartes

territoriales (gobernadores, intendentes, organizaciones, líderes partidarios) se crean y

sostienen gracias a acuerdos bilaterales en los que cada “socio” en la provincia se

11

Por ejemplo, en 2008 el gobierno nacional y los intereses de la industria agrícola ganadera (el “campo”)

tuvieron un serio conflicto por un aumento de las retenciones a las exportaciones de soja. Mientras el

“campo” convocaba a una multitudinaria marcha en la Ciudad de Buenos Aires en contra del gobierno y

su medida; la presidenta convocó a un acto simultáneo en la provincia de Salta para respaldar su gestión

para el cual no sólo contó con su partido (el peronismo o partido Justicialista –PJ-) sino, también, con

organizaciones sociales.

6

vincula directamente con el presidente. La estructura radial12

que dibuja esta forma de

vinculación no es nueva en el estudio de la manera en la cual el gobierno federal articula

el conflicto y las políticas públicas entre diferentes intereses en disputa. La

característica de origen de la relación entre gobierno y actores privados fue la

disociación de la distribución de recursos de los costos implicados en las mismas

(Cavarozzi, 1999). Desde la segunda posguerra y hasta la dictadura del 76, las alianzas

entre actores públicos y privados se caracterizaban por una puja distributiva que

culminaban con estado “fraccionado” o “colonizado” (O‟Donnell, 1997) en un complejo

patrón de acumulación y sedimentación de conflictos, que no dejaba espacio para la

negociación (Cavarozzi, 1991).

Esta matriz estado céntrica se desarticula por la profunda transformación en la

estructura social que implican los treinta años de políticas económicas neoliberales y la

última dictadura (1976-1983). Las políticas promercados repercutieron en el ostensible

aumento de la pobreza y la desigualdad. La violenta dictadura militar y su control

represivo de la población cambiaron radicalmente las formas de expresión de demandas,

los reclamos, los actores colectivos (Torre, 2003) y las relaciones de solidaridad de la

ciudadanía. La recuperación democrática dio lugar a la apertura de los canales de

participación y de las reivindicaciones redistributivas, en el marco de una efervescencia

de expectativas y de ganas de participar. Sin, embargo estos reclamos chocaron con una

profunda crisis económica, sólo controlada por la continuidad de las reformas

promercado.13

La década del noventa se caracterizó por distintos acuerdos federales con

gobernadores (Gibson y Calvo, 2000), empresarios (Beltrán, 2008) y sindicatos

(Murillo, 2000), para reducir el déficit fiscal, la intervención estatal, y liberalizar la

12

Agradezco a Marcelo Leiras quien me sugirió esta metáfora 13

Este párrafo también se basa en Cavarozzi (1999). Sobre este periodo ver Novaro (2010).

7

economía. También en estos años surgieron protestas de desocupados (Svampa y

Pereyra, 2003) y otros perjudicados por las políticas promercado (Roberts y Portes,

2006). Desde 2003, el crecimiento económico y un mayor gasto público sugerían la

disminución de la movilización social. Pero sindicatos (Etchmendy y Collier, 2007) y

actores sociales tuvieron un renovado protagonismo en la protesta que ahora no es

defensiva, ni pide cambios en la política económica14

. Esta se generaliza como un canal

aceptado del vínculo con el estado, en el marco de mayores expectativas en torno de la

distribución de recursos federales.15

Si bien poco o nada queda de la matriz de relación entre gobierno y sociedad civil

previa a la década del 70, se encuentra allí un antecedente de la estructura radial de

construcción de apoyos del gobierno federal y de la baja capacidad de negociación de

los actores que se vinculan con este. Aunque estas dimensiones han sido profundamente

estudiadas, las investigaciones se centraron en la política nacional e ignoraron el lugar

de diferentes niveles de gobierno en la política de acuerdos/conflictos. La política de

alianzas del gobierno nacional innova en la elección de más un aliado en el mismo

territorio, pero no en su forma radial de vinculación.

2.a Presidentes y organizaciones sociales

La relación con las organizaciones sociales es diferente de la que establecieron tanto

Menem como De la Rua. El primero apeló a ellas para cubrir las falencias de la

burocracia local en la implementación de políticas asistenciales y para evitar que los

gobiernos opositores sacaran rédito electoral con su implementación. De la Rua usó a

14

Como si lo hacía en la década del noventa, véase Roberts y Portes (2006). 15

Esto no significa que la protesta no sea causada por la pobreza, sino que hay otra matriz donde la

relación entre gobierno federal, protesta y distribución genera otro tipo de conflictos y otra dinámica de

movilización. No hay abundancia de recursos, pero si expectativa sobre su distribución. El deterioro de

las condiciones de vida todavía da lugar a ciertos reclamos, en todo caso esta distinción de tipos de

protestas deja abierta la necesidad de un estudio particular de cada caso.

8

las organizaciones por las mismas razones, pero en particular para evitar distribuir los

beneficios sociales a través de las redes territoriales del Peronismo. Durante su

administración de se permite que las organizaciones administren recursos sin una

contraparte estatal. Duhalde (2002-2003) incorporó a las mesas de decisión pública a

actores de la sociedad civil en el contexto de una profunda crisis (social, económica y

política) y sumó a algunos líderes sociales al gobierno. Néstor Kirchner (2003-2007) y

Cristina Fernández (2007-presente) se han caracterizado por una nueva práctica, ellos

distribuyen recursos a organizaciones sociales incluso en provincias con gobiernos

provinciales aliados. Lo hacen tanto por razones ideológicas, porque valoran la acción

de las organizaciones locales (Svampa, 2008), como estratégicas, para tener aliados en

diferentes territorios. Este uso de las organizaciones las fortalece y crea nuevos desafíos

para las administraciones locales y provinciales donde estas trabajan.

El presidente Carlos Menem (1989-1998) apeló a las organizaciones sociales para

cubrir las falencias de la burocracia local en la implementación de políticas asistenciales

y para evitar que los gobiernos locales y provinciales de la oposición sacaran rédito

electoral con su distribución.16

Fernando De la Rúa (1999-2001), presidente no

peronista, usó a las organizaciones por las mismas razones, pero en particular para

evitar distribuir los beneficios sociales a través de las redes territoriales del Peronismo.

Para esto permite que las organizaciones administren recursos sin una contraparte

estatal.17

El presidente Eduardo Duhalde (2002-2003) incorporó a las mesas de decisión

16

En la década del noventa se generalizaron las llamadas “parternships”, alianzas públicas y privadas, en

las que organizaciones sociales locales implementan políticas asistenciales de atención a la pobreza

(Cardarelli y Rosenfeld, 2005). 17

La gestión asociada durante los años noventa y la posibilidad de administrar recursos sin una

contraparte estatal se convirtieron en una ventana de oportunidad para la consolidación de algunas

organizaciones sociales y en general del llamado movimiento piquetero (Svampa y Pereyra, 2003). El

“movimiento piquetero” originalmente hacía referencia al conjunto de organizaciones de las personas que

quedaron desempleados por las reformas promercados (hoy incluye a todas las organizaciones de

desocupados) cuyo principal instrumento de protesta es el bloqueo de calles y rutas (piquetes).

9

pública a actores de la sociedad civil en el contexto de una profunda crisis (social,

económica y política) y comenzó a sumar sus líderes al gobierno.

Pero desde la llegada de Kirchner al poder, el vínculo entre el gobierno federal y las

organizaciones sociales experimentó una transformación sustancial. Kirchner y

Fernández se han caracterizado por una nueva práctica: derivan recursos a las

organizaciones incluso si los gobernadores son aliados y con independencia de la

capacidad de gestión de las burocracias locales. Lo hacen tanto por razones ideológicas,

valoran la acción de las organizaciones sociales18

(Svampa, 2008); como estratégicas,

para tener aliados en diferentes territorios. Kirchner llegó al poder luego de un periodo

de altísima conflictividad social, sin aliados políticos fuertes ni legitimidad electoral. Lo

primero debido a que el PJ estaba divido y sus principales referentes provinciales no lo

apoyaban con certeza.19

Lo último porque fue elegido sólo con el 22% de los votos. No

pudo lograr la mayoría absoluta porque el otro candidato, el ex presidente Menem,

abandonó el ballotage. Entonces, su principal estrategia fue crear un nuevo frente

electoral el Frente para la Victoria (FPV), cuyo objetivo fue incluir a políticos y lideres

de diversos orígenes y organizaciones.

Volviendo a las organizaciones sociales, La relación que estas establecen con

Kirchner y con Fernández las fortalece y crea nuevos desafíos para las administraciones

locales y provinciales donde trabajan. Muchas se han involucrado en la política

partidaria apoyando al gobierno o a la oposición. Como en 2002, algunos de sus líderes

han ocupado cargos públicos.20

Los recursos que las organizaciones pueden administrar

son aquellos de programas sociales asistenciales, como por ejemplo, transferencias

18

Prueba de ello es el reconocimiento público que le dan a su labor, ver “Tour Social en Olivos” Diario

Perfil 13 de febrero de 2009. Ver también “La Tupac Amaru es un ejemplo a nivel nacional” disponible

en: http://www.tupacamaru.org.ar/nota.asp?wVarID=351 (acceso 24 de febrero de 2009). 19

Además Kirchner renegaba de algunos líderes peronistas y sus dudosas formas de conseguir recursos y

apoyo territoriales. Sin embargo, en las elecciones de mitad de mandato de 2005 y en las generales de

2007 Kirchner ya se había aliado con los caudillos históricos de su partido. 20

Véase Noailles 2009. Algunos líderes de organizaciones sociales fueron también integrados a la

administración pública provincial en Buenos Aires (Hoy, 2006; Perfil, 2009).

10

condicionadas para desempleados, como el programa “Jefes y jefas de hogar, programas

de microcréditos, programas de viviendas, etc.

Los gobernadores pueden obtener ventajas o perjuicios de la participación de las

organizaciones sociales en la administración de fondos federales. Las organizaciones

canalizan demandas ciudadanas, implementan políticas y alivian la carga de la

burocracia sin costo para los gobernadores e intendentes (Smulovitz y Clemente, 2004).

En algunos casos los gobiernos locales y provinciales pueden sacar rédito electoral del

trabajo de las organizaciones sociales en su territorio (Boulding et al, 2009).

Sin embargo, la participación de las organizaciones sociales en la gestión y políticas

provinciales puede ser vivida como una amenaza para los gobernadores. La

multiplicación de fuentes de distribución de fondos federales en la provincia debilita el

monopolio de los gobernadores sobre su reasignación con fines clientelares. El

fortalecimiento de un actor local puede implicar que las organizaciones se subordinen al

gobierno nacional, pero reclamen con renovada fuerza al provincial. En ocasiones, los

regimenes políticos de las provincias se sostienen gracias a un “juego cerrado” en el que

grupos de la elite local aseguran su permanencia en el poder a través del control de

determinadas áreas de la política y economía provincial (Behrend, 2007). Bajo

circunstancias particulares, la movilización social podría resultar en su “ajuste”. Si el

conflicto social crece, el gobierno provincial tratará de mantener estos problemas dentro

de la provincia, mientras que la oposición buscará llevar el conflicto a la arena nacional

para debilitar al gobernador (Gibson, 2008).

3. Descentralización y políticas asistenciales: Más funciones, más recursos, más

actores

11

Durante la década del noventa el gobierno federal delegó varias tareas a los

niveles subnacionales de gobierno, sin los recursos necesarios para afrontarlas.21

Los

gobiernos provinciales dependían y dependen de las transferencias federales para

ocuparse de estas funciones22

y tenían que apelar a todo tipo de recursos locales

(materiales y humanos) para llevarlas adelante. En consecuencia, lo que unió a los

gobiernos locales y provinciales con las organizaciones sociales no fue el amor, sino el

espanto. El “espanto” era la constatación de que las burocracias no tenían la capacidad

ni el número de personas suficientes para asumir muchas de las nuevas funciones

delegadas. No sólo la descentralización empujó a las administraciones locales a sumar a

las organizaciones. El diseño de algunos programas sociales ponía como condición la

presencia de alguna organización de la sociedad civil para poder ser implementado en

su territorio.23

En otros casos, algunos programas asistenciales focalizados requirieron

un alto nivel de presencia territorial y conocimiento de los barrios que también excedían

capacidad de las burocracias.

Seele (2004) pone en perspectiva a los proceso de descentralización para afirmar

que son mayormente las aperturas electorales posteriores a la recuperación democrática,

más que la derivación de tareas a los niveles subnacionales, lo que influye en el

21

Leiras (2010) sugiere que la descentralización vinculada con las características del los partidos

subnacionales y el comportamiento de los votantes en las provincias puede alterar los patrones de

competencia política territorial. En Wibbels 2006 hay una buena síntesis del debate sobre

descentralización. Para el caso de America Latina y Argentina ver Pirez (1991), Montero (2001), Falleti

(2006 y 2004) y Wilson et al (2008), entre muchos otros. 22

Jones et al (2010) muestran datos del desbalance fiscal vertical (medido como el porcentaje promedio

de rentas propias de cada provincia sobre el total de rentas que maneja). De allí surge que sólo tres

distritos (sobre 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires) manejan más del 40% de sus

rentas y que son quince los que están por debajo del 22% de rentas propias en promedio (para el periodo

1983-2003) Las tendencias son similares en el trabajo previo de Gibson et al (2004), que muestra datos

del porcentaje de gasto nacional sobre el total del gasto de cada provincia. 23

Al respecto hay curiosas anécdotas, en las que los gobiernos locales apelan a cualquier grupo cuya

personería jurídica cuadre dentro de los requisitos de los organismos financiadores para poder acceder a

los recursos, sin considerar cuáles son las tareas u objetivos de dicha organización. En otro trabajo de este

autor se cita el ejemplo de un municipio que en los años noventa le pidió a los bomberos voluntarios de la

ciudad que sean contraparte del estado local (a modo de “fiscalizador” de la ciudadanía) para recibir los

recursos de un programa asistencial.

12

renovado protagonismo de la política local.24

. Es necesario considerar el vínculo de las

nuevas responsabilidades y recursos que asumen actores políticos y sociales en el nivel

provincial y local con las prácticas arraigadas en los regímenes subnacionales. Este

vínculo darán rasgos particulares a la redistribución de competencias entre niveles de

gobierno y a la implementación de cada política pública (Chiara y di Virgilio, 2005).

3.a Recursos y coaliciones

La distribución de recursos federales afecta de diversas maneras las relaciones

políticas subnacionales.25

Cuando los gobiernos provinciales son opositores al

presidente, muchas veces, no se les derivan tantos recursos como a las provincias

oficialistas.26

A veces, hay provincias opositoras que llegan a acuerdos con relación a

determinados programas, algunas que reclaman igualdad de recursos con las oficialistas

y otras que rechazan ciertos recursos de federales.27

Los intendentes buscan recursos de

cualquier fuente (federal y provincial). Cuando el gobierno federal deriva recursos a los

intendentes su pertenencia partidaria importa menos que la de los gobernadores porque

priman criterios de gestión pública, como la necesidad de llegar con los recursos a la

población objetivo de determinadas las políticas. Más allá de los matices, se mantiene la

24

En palabras de Seele: “While much of the literature on decentralization has focused on the

administrative and fiscal gains made by subnational governments, their significance in everyday political

discussion in Latin America largely derives from their status as competitive arenas of political

contestation.” (2004, p.12) 25

Y la relación con los ciudadanos. Gervasoni (2010) sostiene que un gobierno provincial mas rico que su

población le permite ser mas autónomo de las demandas ciudadanas y menos sensible a su respuesta. 26

Cuando gobierno provincial y accede a menos recursos federales cobra importancia su autonomía para

la formulación e implementación de políticas sociales subnacionales (Bonvecchi, 2008) y otras

retribuciones y cargos que pueden ser distribuidos localmente (Souza, 2009). 27

En la siguiente cita se ve un ejemplo “Con] Neuquén y San Luis, la verdad que no había espacios de

acuerdo con los gobiernos provinciales, pero ya te digo, producto de características de ambas partes,

porque ya te digo, San Luis funciona como una nación, yo veía que funcionaba como nación. Hoy, que yo

trabajo Patagonia, hay síntomas de acercamiento con el gobierno de Sapag y la idea es empezar a trabajar

en conjunto. Pero con los gobiernos locales había una cosa de [acordar] con todos. Y de hecho lo que vos

veías muchas veces hacer eran intendentes que te decían: „No porque …acá [en la provincia] no te dan

pelota [atención], pero bueno, si van ustedes como nación, vamos.‟ Este jueguito está siempre. Y después

te diste vuelta vos y acordaron con provincia” (Entrevista con María funcionaria del Ministerio de

Desarrollo Social de la Nación, Ciudad de Buenos Aires, 01 Agosto de 2008).

13

tendencia de usar dinero público federal como la moneda de cambio en las

construcciones de alianzas electorales y legislativas.

Los programas sociales28

tienen un peso marginal dentro del menú de rentas que

los gobernadores administran. Sin embargo, el alto grado de discrecionalidad en su

asignación los convirtió en un valioso instrumento para ser intercambiado por apoyos en

los territorios. Por otra parte, al ser derivados alternativamente a gobernadores,

intendentes, organizaciones sociales o directamente a beneficiarios, hacen posible las

alianzas con diversos tipos de actores. Los recursos derivados por el gobierno nacional

contribuyen a sostener las estructuras clientelares provinciales (Auyero, 2001;

Nazareno, et al, 2006; Weitz Shapiro, 2007) que le permiten conseguir votos en las

diferentes elecciones que se superponen en sus circunscripciones (Pirez, 1991). La

derivación de políticas asistenciales a las organizaciones implica la apertura de más

canales de acceso a recursos federales para los ciudadanos. Esto termina con el virtual

monopolio del estado provincial en la reasignación de dinero público de origen federal

con fines clientelares. Más aún, cuando los programas son administrados por

organizaciones, la posibilidad sumar beneficiarios a sus filas y de reasignar ciertos

recursos para sostener sus actividades las fortalecen y esto favorece su movilización.

(Garay, 2007) haciendo más compleja la gobernabilidad de los regimenes

subnacionales.

4.Enfoque

28

Varias investigaciones han sido llevadas adelante enfocándose en el impacto de determinados

programas sociales. Algunos de los mejores trabajos vinieron del análisis del PRONASOL en México.

Los capítulos en Cornelius et al (1994) son buenos ejemplos. Kaufman y Trejo (1996) estudian la rotación

entre las elites de los programas y la dirigencia política. Un conjunto de estudios enfocados en una

política pública también se aproxima al estudio del clientelismo (Díaz Cayeros, et al, 2007; Weitz

Shapiro, 2007) o de la construcción de ciudadanía (Hunter y Borges, 2010). Algunos trabajos indagan en

el impacto de cierta política pública en la auto organización y en la protesta (Garay, 2007) mientras otros

tratan de identificar los determinantes de los patrones de su distribución (Schady, 2000; Lodola, 2005).

14

El estudio de las consecuencias de las alianzas del gobierno federal en la política

provincial se realizará a través de un caso testigo.29

Estudiaré el caso de la provincia de

Jujuy donde el gobierno federal tiene dos importantes socios políticos el gobernador y

una organización social, la Organización Barrial Tupac Amaru con sede en Jujuy y

embrionaria presencia en otras provincias.30

La provincia de Jujuy es una de las que

menos votantes aportan para las elecciones nacionales31

. Su apoyo legislativo está

garantizado por la estrecha relación que la presidenta tiene con el ex gobernador

Eduardo Fellner (presidente de la Cámara de Diputados de la Nación). Lo que sucede en

Jujuy muy ocasionalmente tiene resonancia en el nivel nacional; no hay una sociedad

civil activa a la cual conquistar.32

Lo anterior sugiere que no hay razones que hayan

empujado al gobierno federal a aliarse con un actor social provincial, más que su propia

estrategia de búsqueda de apoyos en territorio subnacional.

Las siguientes preguntas guían el análisis de este caso:

P1 ¿Son las políticas federales determinantes en el desarrollo del régimen

subnacional?

29

Los estudios de casos son especialmente útiles para descripciones en profundidad, el estudio de nuevos

procesos e interacciones y la generación de nuevas hipótesis (King, et al, 1994, pp. 49-50). Se

entrevistaron a veintidós personas con roles importantes dentro de los siguientes espacios: administración

pública nacional, provincial (Jujuy) y local (ciudad de San Salvador), organización Tupac Amaru y otras

organizaciones sociales provinciales. Hice tres viajes a Jujuy, en 2007, 2008 y 2009. En el primero conocí

a la organización. En el segundo realicé varias observaciones participantes, en un masivo encuentro

nacional de organizaciones sociales (http://www.constituyentesocial.org.ar/mot23.html) y en el tercero

realicé el grueso de las entrevistas en la provincia. Sobre el uso de las entrevistas, ver el apéndice 1. 30

Para conocer más de esta organización puede visitarse: http://www.tupacamaru.org.ar/. 31

Jujuy es una provincia del norte argentino que limita con Bolivia, Chile y con la provincia de Salta. Se

estima que en la actualidad posee 698474 habitantes (INDEC, 2006), menos del 2% de la población del

país. Es una de las provincias más pobres y usualmente sus indicadores de pobreza, desempleo,

mortalidad infantil, entre otros, son superiores a la media nacional. Hacía fines de los noventa la tasa de

desempleo llegaba 16.2% (Golovanevsky, 2001) y el porcentaje de hogares bajo la línea de pobreza era

de un 26% en 2001 (INDEC 2009). Es de las cinco provincias con menor producto bruto geográfico de la

Argentina (Porto y Sanguinetti, 1995; iprofesional, 2008). Desde el punto de vista político, Jujuy lleva

Congreso Nacional 3 senadores (como todas las provincias) y 6 diputados sobre 257. 32

En octubre de 2009 la organización Tupac Amaru saltó a la escena pública nacional por ser sospechada

como responsable por la agresión que sufrió el senador nacional por la provincia (opositor al gobierno

federal) Gerardo Morales. Cuando el gobierno federal comenzó a contribuir con esta en 2003 era casi

totalmente desconocida (aún en su misma provincia).

15

Mi hipótesis es que existen profundas interrelaciones entre los regímenes nacionales

y provinciales. La frontera de la influencia entre ambas esferas se modifica de acuerdo a

diversos contextos (Benton, 2009). La democracia en el nivel nacional no

necesariamente implica la misma apertura de los regimenes subnacionales (Behrend,

2010) Más aún, la relación entre niveles de gobierno implica una frontera en disputa

(Gibson, 2008).

P2 ¿Sería posible que dos conjuntos bien diferenciados de políticas federales

(denominados genéricamente, “proyectos federales”) repercutieran de manera similar en

la política provincial?

La política promercado de los noventa dio lugar a una movilización social que

continuó en la primera década de este siglo. Mi hipótesis es que en el primer proceso las

protestas eran consecuencia del empobrecimiento de la población y que hoy se

entienden mejor cómo medios para reclamar recursos en un contexto de distribución El

cambio de los actores que motorizaban las movilizaciones en una y otra década hablan

de este giro

P3 ¿De qué manera la política en el plano federal incide en las características y

dinámicas del régimen subnacional? ¿La convivencia de diferentes aliados federales en

la provincia (actores sociales y gobernador) podrían implicar cambios en el régimen?

El reparto de recursos y el reconocimiento (entre una multiplicidad de interacciones

que sería imposible “inventariar”).son mecanismos a través de los cuales se podrían

alterar parámetros de la política provincial. La existencia de políticas asistenciales que

pueden ser administradas por estas sin una contraparte estatal hacen posible las alianzas

con actores sociales. Estas políticas moldean un tipo particular de la relación entre las

organizaciones, el estado y los ciudadanos en el nivel subnacional (Roberts y Portes,

2006). Bajo ciertas circunstancias la presencia de un actor, que se fortaleció por el

16

acceso a recursos de estas políticas y por su legitimación como interlocutor nacional,

puede incidir en las prácticas del régimen, en el proceso legislativo y en las prioridades

de política pública. Esta incidencia puede dar lugar a reajustes en el régimen pero no es

de esperar que impacte en una mayor democratización del mismo.

5. Las políticas federales y la consolidación de un actor de veto provincial

En esta sección relataré la primera de las tres historias que ejemplifican las

consecuencias de la relación que establecen el gobierno nacional, el provincial y la

organización Tupac Amaru. La primera es la historia del surgimiento de la organización

Tupac Amaru y su consolidación gracias a la administración de recursos federales para

la vivienda.

5.a Ejemplo 1: El surgimiento de nuevas actores locales como consecuencia de

políticas y recursos federales

El origen

La organización Túpac Amaru nace en los primeros años de este siglo. No está

vinculada orgánicamente con ningún partido político, pero es parte de la Central de

Trabajadores Argentinos (CTA); con el tiempo se convirtió en su miembro más

numeroso en Jujuy (y en uno de los más importantes del país).33

Su surgimiento debe

analizarse en perspectiva con el ciclo de luchas sociales que se dieron en varias

provincias argentinas durante los años noventa (Favaro et al, 2006) como consecuencia

de las reformas estructurales. Las empresas públicas cerraban (como sucedió con la

empresa siderúrgica “Altos Hornos Zapla” en Palpalá) dejando en la calle a miles de

33

La CTA es una central sindical creada en 1992, sin reconocimiento oficial, con una posición crítica a

los sindicatos tradicionales (Armelino, 2005) Milagro Sala, líder de la Tupac Amaru, es una ex empleada

pública provincial, con militancia en el PJ, que fue secretaria general de la Asociación de Trabajadores

del Estado (ATE), parte de la CTA. (Entrevista con Nando Acosta, Secretario General de ATE Jujuy, San

Salvador de Jujuy, 19 de febrero de 2009)

17

personas que la economía local no podía absorber. El empleo público tampoco era una

alternativa por las severas restricciones financieras de las provincias. La ineficacia del

estado provincial Jujeño y la dificultad del Partido Peronista en superar sus divisiones

internas dieron lugar a un intenso ciclo de protestas y al virtual colapso del sistema

político provincial. Ninguno de los ocho gobernadores que tuvo Jujuy durante los años

noventa completó los cuatro años que dura un mandato.34

Las protestas de los años noventa en Jujuy estuvieron lideradas por gremios

estatales, algunos vinculados con la CTA, otros con la Corriente Clasista y Combativa

(CCC).35

La clase media y otros sectores profesionales apoyaron durante un tiempo las

protestas y en ese periodo la Multisectorial fue clave en la sucesión de

acontecimientos.36

Gracias a la extensión de la red territorial de la CCC y con la Marcha

federal contra el hambre, las protestas de Jujuy fueron una referencia para futuras luchas

en todo el país. Milagro Sala era la responsable de la logística de aquellas

movilizaciones y todavía no había creado su organización, la Túpac Amaru.

La llegada de Fellner al poder en 1999 inaugura un periodo de estabilidad

política y de redistribución de fuerzas en el campo de las organizaciones sociales.37

Bajo

las dos administraciones del gobernador Fellner hay activismo, pero se expresa en

34

Cuatro gobernadores renunciaron anticipadamente y sus reemplazantes ocuparon sus cargos sólo

durante el tiempo restante de cada mandato, luego del cual asumía el nuevo gobernador electo (Lagos y

Gutiérrez, 2007). 35

La protesta en Jujuy tomó dimensión nacional durante los años noventa. Carlos “el Perro” Santillán se

convirtió en un referente de la oposición a las reformas promercado. Él armó y condujo la Corriente

Clasista y Combativa (CCC), organización asociada al Partido Comunista Revolucionario y con presencia

en todo el país (Entrevista con Carlos “el Perro” Santillán, San Salvador de Jujuy, 19 de febrero de 2009).

Otro de los hitos de su lucha fue la Marcha Federal Contra el Hambre de 1994 que lleva a la Ciudad de

Buenos Aires los reclamos que se hacían sentir en las provincias y las formas de organización de los

desocupados, que no llegarían a la zona metropolitana hasta fines de la década (Delamata, 2004). 36

La multisectorial fue una reunión coyuntural de organizaciones de diverso origen que agrupaba a

comerciantes, docentes, industriales, y empleados estatales (cuyos gremios lideraron acciones de

protesta). Cumplió un papel central en las movilizaciones (Gómez y Kindgard, 2007). Su amplia y

heterogénea composición reflejaba el consenso de la sociedad jujeña con las acciones de los grupos más

combativos (Entrevista con Ada Galfre Secretaria de desarrollo social de San Salvador de Jujuy, San

Salvador de Jujuy, 18 de febrero de 2009). 37

Al respecto es ilustrativo el análisis del siguiente artículo El Informante (2007) "Entre insultos y

piedras, la bienvenida a Barrionuevo y la despedida a Fellner " El informante

18

protestas por un lado y concesiones políticas por otro, en ese momento todavía a escala

provincial. Con el tiempo, la movilización se convirtió en la forma que adopta el

vínculo político entre los más pobres y el gobierno provincial y nacional.

Entre su fundación en 199938

y 2001 la organización Tupac Amaru se

transformó y pasó de ser una organización sindical, a una de desocupados, para más

adelante consolidar su carácter barrial.39

La Tupac es antes que nada una Rara Avis que

utiliza diferentes recursos y saberes, y que siendo miembro de una central sindical, no se

subordina a su liderazgo. Es una organización producto tanto de un fuerte liderazgo,

como de la relación que establece con el gobierno federal y provincial (y de los recursos

que accede gracias a esta).

A comienzos de la década del 2000, la organización Túpac Amaru se movilizaba

en la provincia para pedir recursos de diversas políticas asistenciales y bolsones de

comida para sus “copas de leche”.40

En todos los casos, el modo de conseguir los

beneficios era a través de la protesta, nunca participando en consejos consultivos, ni en

espacios formales de gestión asociada. En esos años era una organización importante,

pero una más del conjunto provincial. Con el tiempo el carácter barrial de la

organización se consolidó y se convirtió en una activa fuente de empleo gracias a la

38

En su sitio de la red social Facebook citan “En 1999 nació la Tupac: “Éramos cinco”, se acuerda

Milagro. Un par de años después empezó el despegue, el crecimiento territorial de la organización.”

http://www.facebook.com/pages/Organizacion-Barrial-Tupac-Amaru/108729005823511?v=info. (con

acceso diciembre de 2010). 39

Los crecientes índices de desempleo y pobreza a los que se llegó a fines del 2001 dejaban a un gran

número de personas sin amparo sindical para reclamar por sus derechos. Los líderes sindicales

provinciales reconocían que la situación estaba empeorando y consideraron que sus acciones debían

replantearse. Dice Milagro: “Víctor [de Genaro dirigente de la CTA a nivel nacional] nos dio la idea

desde ATE de ir a los barrios[…] porque aquí en Jujuy teníamos una lucha muy grande, donde habíamos

bajado cerca de cinco gobernadores por la ineficiencia[…] por los muchos robos que hubo en la

provincia[…] Pero había muchos compañeros que eran también estatales, con un contrato, o planta

permanente, habían quedado en la calle.” (Entrevista con Milagro Sala, líder de la organización Tupac

Amaru, San Salvador de Jujuy, 17 de febrero de 2009)

. Es importante notar el cambio en la forma de trabajo y de concebir a la relación con los ciudadanos, no

eran más trabajadores, eran desempleados cuyas condiciones de vida se deterioraban a pasos agigantados.

Milagro cambió su forma de trabajo y comenzó a vincularse con las personas en el territorio, atendiendo

las demandas de los desocupados en los barrios que residen. 40

Las copas de leche son meriendas que se dan a niños y niñas de los barrios de manera gratuita.

Usualmente son llevadas adelante por pequeños grupos de vecinos, principalmente mujeres, madres de

niños y niñas del barrio.

19

distribución de políticas asistenciales federales (y al monitoreo de los trabajos de

contraprestación laboral de sus beneficiarios). Cuando a fines de 2001 la coyuntura de

crisis política y social nacional confluyó con la fractura (y virtual desaparición) de la

CCC en la provincia, Milagro Sala profundiza su trabajo en los barrios41

y cubre el

vacío de liderazgo dentro de las organizaciones sociales provinciales42

.

El acceso a los recursos federales

En el año 2003 el Ministerio de Planificación Federal comenzó a implementar el

Programa de Emergencia Habitacional (PEH).43

La CCC consiguió 600 viviendas para

construir apenas iniciado el programa. Milagro se enteró de que la CCC tenía esas

viviendas y reclamó algunas para sí mediante una movilización. En octubre de 2003 se

realizaba un congreso de la Unión Industrial Argentina en el cerro Alto la Viña, en San

Salvador de Jujuy. Allí el presidente Kirchner y medio gabinete de gobierno se habían

sumado al encuentro. La protesta se realizó a las puertas de esa reunión y fue exitosa. La

organización Tupac Amaru consiguió viviendas para construir, pero con una condición:

deberían estar finalizadas en el lapso de cinco meses.

La organización Tupac Amaru no tenía experiencia en construcción44

, ni estaban

organizados en cooperativas. Aún así terminó las viviendas en tiempo record e inauguró

41

En 2003 tenían un número no determinado de “copas de leche” (se habla de algunas algunos

cientos).Estas se sostenían hasta 2002 casi siempre con los muy escasos recursos propios de la gente de

los barrios humildes. Según los relatos, la gente ponía dinero de su bolsillo, juntaba leña en el monte,

construían hornos de barro y, ocasionalmente, recibían bolsones de comida de la provincia (Entrevista

con Alejandro Pilo Mansilla, dirigente de la Organización Tupac Amaru, San Salvador de Jujuy, 17 de

febrero de 2009). 42

Este proceso no estuvo exento de disputas y de violentos choques entre las fracciones de la ex CCC y la

organización Tupac Amaru. (Entrevista con Carlos Bejarano, Líder de la Organización de Desocupados

Independientes, San Salvador de Jujuy, 19 de febrero de 2009). 43

El PEH opera dentro del espacio de las políticas asistenciales por su doble objetivo: realizar obras de

construcción de viviendas y de servicios sanitarios básicos para gente pobre y emplear con ese fin a

desocupados a través de cooperativas. 44

La organización tenía profundas limitaciones técnicas y operativas para llevar adelante los trabajos. En

un primer momento solicitó asistencia técnica para formar las cooperativas y capacitar a sus miembros,

pero la capacitación duraba unos seis meses y ellos no podían esperar. Descartaron la posibilidad de

asociarse con el Colegio de Arquitectos o el Colegio de Ingenieros para adquirir conocimientos básicos de

construcción, porque ambas instituciones cobraban honorarios profesionales. Entonces lo que hicieron es

20

dos de sus mitos fundacionales: su eficiencia para conseguir sus objetivos y la

prescindencia del saber experto. La organización consolida a la protesta como forma de

acceso a los recursos públicos. Su forma de trabajo que le permite optimizar el uso de

los recursos prescindiendo de los espacios de autoridad del saber profesional o

académico, pertenecientes a la clase media. Así ganan la autonomía necesaria para

seguir creciendo apelando a los saberes de sus miembros, gente muy pobre y sin

educación formal de los barrios de Jujuy. 45

Tiempo después el gobierno federal le pide a la organización construir un Centro

Integrador Comunitario.46

El plazo de construcción era de seis meses y la organización

termina la obra en la mitad del tiempo. La ministra de desarrollo social Alicia Kirchner,

hermana del entonces presidente, inaugura personalmente la obra. Desde entonces la

derivación de recursos hacia la Tupac Amaru ha sido incesante y creciente.47

Así lo

reconoce uno de sus miembros:

“a los 4 meses ya teníamos todo… tal es así que vino Kirchner e hizo un acto público y

agradeció a los compañeros que habían hecho las viviendas en tiempo record y la CCC

todavía no ha terminado de construir las 600 viviendas, y nosotros ya vamos por

2000[….] porque termina esa etapa, ellos verifican, ven que están bien construidas y

todo eso y te dan otras 200 y así sucesivamente. Con esa metodología nosotros fuimos

lo que desde entonces hacen: sencillamente, hacer. Formaron las cooperativas, presentaron los papeles

requeridos y adquirieron los conocimientos de construcción gracias a la incorporación de maestros

mayores de obra como miembros plenos de las cooperativas y en igualdad de condiciones laborales que

con los demás miembros sin experiencia y comenzaron las tareas. Otra innovación fue la incorporación de

un 50% de mujeres en las cooperativas de construcción, en un rubro monopolizado por los hombres. 45

Los cooperativistas que no terminaron la escuela primaria y/o secundaria deben asistir a clases en la

escuela que la organización posee, si no lo hacen esta les quita el empleo. 46

Los Centros integradores comunitarios son espacios construidos para coordinar la atención de

beneficiarios de políticas asistenciales, brindar atención primaria de la salud y actividades culturales

(Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, 2010) http://www.desarrollosocial.gov.ar/notas/cic.asp (

con acceso diciembre de 2010) 47

No es claro si algún nivel de gobierno interviene en la planificación urbana de la construcción de

viviendas (a la pregunta sobre si había planificación el ministro provincial de infraestructura respondió

que el PEH “andaba bien”). Pareciera que hay un crecimiento, un poco anárquico, de los barrios donde la

organización construye, pero sin el desarrollo paralelo de diversos servicios necesarios para la población

(Entrevista con Raúl Jorge, intendente de San Salvador de Jujuy, San Salvador de Jujuy, 17 de febrero de

2009).

21

cumpliendo, después avanzamos y ya nos empezaron a conocer desde la nación.”

(Entrevista a Raúl Noro, Dirigente de la Organización Tupac Amaru, San Salvador de

Jujuy, 17 y 18 de febrero de 2009)

.

La eficiencia de la organización se funda tanto en la habilidad de sus líderes para

administrar los recursos, como en el tipo de relación que establecen con sus miembros48

y con el gobierno federal. La capacidad de concretar los resultados y de hacerlo sacando

máximo provecho a los recursos es una de las herramientas con la que se diferencian

tanto de la burocracia federal y provincial, como de otras organizaciones. La capacidad

de gestión se ve reflejada en la siguiente cita:

“a nosotros nos dan para 20 casas y no sólo hacemos 20 casas sino que hacemos plazas,

hacemos más cosas… porque te queda plata… hoy la construcción te deja mucha plata.

Ahora, depende quién maneje la plata de la construcción para ver si se hace más obra o

no. Ahora por ejemplo donde vos estás sentada, este edificio, es vuelto de cooperativa,

plata que quedó de cooperativa. La sede de enfrente, el colegio secundario también es

plata de cooperativa. En el barrio también nos dieron para construir casas, nosotros

construimos polideportivos, construimos CIC, construimos pileta…” (Entrevista con

Milagro Sala, líder de la organización Tupac Amaru, San Salvador de Jujuy, 17 de

febrero de 2009)

48

La Tupac Amaru promueve el compromiso personal de sus miembros con el trabajo, con su desarrollo

personal, con las necesidades de sus compañeros y con la misma organización. Por otra parte, los

trabajadores reciben un salario por construir las viviendas, pero además tienen que participar en las

movilizaciones o asistir clases. La organización controla que esto sea cumplido. También opera como una

suerte de “policía” en los barrios. Los mismos miembros denuncian a sus pares cuando hay casos de

violencia familiar, adicciones o venta de drogas. Los “culpables” pueden ser castigados de diversas

maneras, perder la política asistencial federal o su vivienda (cuando son echados de los barrios). Esto

surge de las observaciones en los barrios y de varias entrevistas (entre otras de la que tuve con Teresa

Erazo trabajadora social del hospital de niños provincial y en varios programas federales implementados

en la provincia). Queda abierta conocer mejor cómo es la relación de la organización con sus miembros y

que componentes tiene de integración y de control social (Rose y Miller, 1992; MacLeavy, 2009), esta

pregunta excede a los fines de esta investigación.

22

No sólo cumplen con los objetivos sino que los superan en la medida que lo hacen

en menos tiempo del requerido y que logran ahorrar costos reinvirtiendo el excedente en

nuevas obras para la comunidad.

Como subiendo una escalera de dos en dos, la organización ocupa posiciones de

manera sostenida. Sala es una gran captadora de recursos y una gran motivadora.

Cuando su organización comienza a administrar cantidades de dinero mayores, con cada

proyecto concreta su objetivo y avanza un poco más. Desde el gobierno federal los

recursos no paran de llegar, los funcionarios desean que la Tupac esté implementando

sus programas. Todos quieren trabajar con la Tupac, Milagro le dice que si a todos los

recursos y luego selecciona.

“Milagros tira muchas cañas al mar, vos le decís „yo soy tal cosa y quiero hacer tal

cosa…‟ „dale, si‟, te dice. Después no te deja, o te deja y después a los dos días te dice

que no y así va probando. Ella no le dice que no a nada, porque ella es una gran

captadora de recursos, entonces primero mira en qué le podés servir y en qué no. […]

Hay todo un juego, muy de Tupac, muy estratégico también a veces, de que como sabe

que la gente se pelea por estar ahí, por intervenir, por estar, en los lugares que la gente

pide, los programas de distintos Ministerios tratan de ayudar a la Tupac.” . (Entrevista

con Inés, Miembro de la Central de Trabajadores Argentinos, Ciudad de. Buenos Aires,

9 Noviembre de 2008).

Milagro Sala es una persona con un gran carisma, respetada, criticada y temida,

todo a la vez, por muchos sectores de la dirigencia política. El carisma de Sala está

acompañado de una inagotable capacidad de trabajo.49

Ella estimula a sus colaboradores

cercanos y a los miembros de la organización a trabajar intensamente. El sentido de la

obligación justifica que nada de lo que consigan sea suficiente, que nunca se conformen

49

En todos los edificios de la Tupac se puede leer la frase del epígrafe “Cuándo no hay voluntad, hay mil

excusas, cuándo hay voluntad hay mil recursos”

23

porque, según dicen, hay que seguir pidiendo para el compañero que no tiene. Cuando

accede a los recursos nacionales, la organización (y su líder Milagro) no para. No para

de crecer. No para de pedir. No para de movilizarse.50

En este primer relato se analizó el surgimiento y consolidación de la actividad de la

organización Tupac Amaru. La dimensión que adquiere esta organización se debe a los

recursos de políticas sociales que administra, a las particularidades de la historia de

lucha en Jujuy y la capacidad de gestión de su líder. La organización Tupac Amaru ha

logrado destacarse del resto de las organizaciones de la provincia y del país, haciendo

un uso muy eficiente de los recursos públicos de origen federal, movilizándose de

manera permanente para seguir reclamando al gobierno provincial y disciplinando a sus

miembros. Pero la organización va por más. Ir por más es parte de sus ideas motor y

esta idea tiene consecuencias en la política provincial. Las reivindicaciones no tienen un

horizonte de satisfacción. Va por más en el sentido de que logra correr la línea de lo

“aceptable” en lo que respecta a la intervención política de un actor social provincial. A

continuación veremos un ejemplo de ello.

5.b Ejemplo 2: Aliados federales y régimen subnacional. La influencia de la

organización en la agenda legislativa provincial

En el año 2007 la organización Tupac Amaru puso en la agenda pública un tema

desatendido: el mal estado de los edificios de las escuelas públicas. Junto con la Red de

50

En la cita puede observarse como el sentido de la obligación es la consigna para convocar a la

movilización permanente. “…no es que uno viene y escucha clases de cómo formarse como dirigente,

sino que ya viene y se suma al laburo y te agarra para que te hagas responsable, te haces responsable de

los compañeros […] tenés que hacerte cargo de los compañeros.” (Entrevista con Alejandro Pilo

Mansilla, dirigente de la Organización Tupac Amaru, San Salvador de Jujuy, 17 de febrero de 2009)

24

Organizaciones Sociales51

, le pidieron al gobierno provincial que repare los edificios

escolares. Después de algún tiempo, al no encontrar la respuesta esperada, le

propusieron al gobernador Walter Barrionuevo que sus organizaciones hicieran las

reparaciones. El gobernador se negó debido a que la ley provincial de obras públicas

indicaba que los responsables debían ser empresas y que, para otorgar los trabajos, tenía

que llamarse a una licitación pública. Ante la negativa, la Red de Organizaciones

Sociales se movilizó para demandar la aprobación de una nueva ley que les permitiera

hacer los trabajos. Comenzaron así con una serie de protestas, entre las que se destaca

un “acampe” en el que cientos de personas con sus familias se instalaron en la plaza

principal de la provincia hasta que lograron su objetivo.52

Gracias a las protestas se

consiguió el tratamiento legislativo de la Ley de Emergencia Edilicia (ley 5574) que

contempla la posibilidad de que cooperativas de vecinos se ocupen de la reparación de

los edificios escolares.

“…pusimos en discusión la ley esta de emergencia de edificios escolares, para muchos

fue una locura […] armamos la ley en la cual pusimos en discusión en Legislatura, en la

cual los diputados después nos dieron la razón, de que era una realidad de Jujuy. Y salió

51

La reorganización del campo popular en Jujuy y el éxito de la experiencia de la Tupac hicieron que

muchas de las escisiones de otras agrupaciones intentaran sumarse a esta. En lugar de integrarlos, Milagro

ha invitado a los líderes a armar sus propias organizaciones. Esto condujo a la formación de la Red de

organizaciones sociales de Jujuy integrada por la Tupac y once grupos más (escisiones de la CCC y

grupos de otros orígenes). Con esta estrategia Milagro Sala evita la incorporación de dirigentes sociales

que puedan disputarle su rol de conductora -y/o intervenir en el rumbo de su organización- y suma capital

humano. A cambio, comparte los recursos a los que accede y se solidariza con las demandas de los demás

integrantes de la red . (Entrevista con Carlos Bejarano, Líder de la Organización de Desocupados

Independientes, San Salvador de Jujuy, 19 de febrero de 2009).

52 Esta cita es ilustrativa sobre la forma de presión de la organización “Pero ellos son tan certeros en eso,

cuando hay algo que les obstruye el camino, empiezan a hinchar los quinotos y pueden estar un mes y

medio en conflicto[…] Cuando movilizan, movilizan, movilizando les dan bola tienen todo un

mecanismo, levantan el teléfono, tienen todo un mecanismo que se han preparado, de colchones, carpas,

qué sé yo, van y se instalan en la plaza… la plaza está frente a la Casa de Gobierno… se instalan una

semana en la plaza, con la carpa, los nenes, los pibes, la mugre, todo… se quedan ahí… y la gente que

„por favor, que saquen esto‟, que „no, porque el aumento de 100 pesos para los docentes de no sé qué‟… y

ahí va toda la Tupac, a la Tupac no le afecta directamente eso, se organizan para no abandonar el laburo

en el barrio, pero para garantizar la toma, porque saben que cuando ganan esa, ganan todas”. (Entrevista

con Inés, Miembro de la Central de Trabajadores Argentinos, Ciudad de. Buenos Aires, 9 Noviembre de

2008).

25

aprobada esa ley de emergencia de edificios escolares, y hoy en día son las

organizaciones las encargadas de refaccionar los edificios escolares. Y lo cual, si

nosotros no hubiésemos instalado la discusión en ese sentido, hubiese un montón de

escuelas en mal estado, un montón de chicos en malas condiciones estudiando, y un

montón de compañeros sin tener la oportunidad de trabajar.” (Entrevista con Alejandro

Pilo Mansilla, dirigente de la Organización Tupac Amaru, San Salvador de Jujuy, 17 de

febrero de 2009)

Luego de sancionada la ley se la gobernación le dio a la Red de Organizaciones

Sociales la lista de los edificios con problemas de infraestructura y los subsidios para

realizar las reparaciones. Cada miembro de la Red se ocupó de reparar los edificios de

sus barrios. Las asociaciones profesionales pidieron que se declare la

inconstitucionalidad de la nueva norma por otorgar las obras a cooperativas y

municipios sin concurso de precios y sin la intervención directa, sino a través de

“representantes técnicos”, de profesionales competentes para garantizar la calidad del

trabajo realizado. Por otra parte, los que usualmente ganaban estas licitaciones eran

empresas constructoras pequeñas que no cumplían con los requisitos para competir por

obras más grandes. Las características de las empresas consignatarias, pequeñas

empresas con pocos empleados, invita a pensar en una puja distributiva dentro de un

campo con intereses cercanos.

“Acá no es que se estén generando nuevas fuentes de trabajo para los desocupados,

alguien seguramente se va a desocupar para que se ocupe a otro, lo malo sería que ahora

aparezcan fondos que antes se manifestaba que no había. Y esto sería una falla del poder

Ejecutivo, y si hay fondos hay muchas empresas pequeñas que tienen mano de obra

profesional, que lograron a través del tiempo conformar una empresa reuniendo las

condiciones como lo fija la Ley de Obras Públicas y como no tienen capacidad

26

económica para hacer grandes obras, son las que están siempre reparando escuelas.”

Entrevista al diputado provincial Agustín Perassi.53

En esta experiencia se identifican las diferentes formas de acción de la organización:

la reivindicación de los intereses de los más pobres, la presión al gobierno, la

movilización en el espacio público, la incidencia para la promulgación de una ley y la

amenaza del uso de la violencia con los actores que se oponen a sus demandas.

“se supo que la Cámara Argentina de la Construcción presentó una denuncia penal a

raíz de las amenazas que recibió uno de sus directivos de parte de una supuesta dirigente

de la organización barrial Tupac Amaru. Una persona que se identificó como Milagro

Sala llamó por teléfono al directivo y lo emplazó para que en el término de 48 horas se

retracte de declaraciones contrarias a la ley de la polémica y al entorno en el que se

sancionó, caso contrario „te voy a sacar tres mil personas a la calle‟, explicó a El

Libertario.com una fuente cercana al hecho.” (El libertario, 2007)54

En este breve relato se ve cómo la organización Tupac Amaru, con el apoyo de la

Red de Organizaciones Sociales, instaló un tema en la agenda de gobierno. El tema era

un reclamo legítimo de la gente más pobre, la que envía a sus hijos a los colegios

públicos de la provincia. Se apeló al gobernador para resolver el problema, pero los

plazos los puso la organización y marcó el terreno del juego. Presentaron una ley que

logró el objetivo de reparar los edificios, pero generando una nueva disputa con los

empresarios. Los empresarios cuestionaron la calidad de los trabajos y acusaron al

gobierno por desconocer a las asociaciones profesionales y a los pequeños empresarios

de la construcción. Algo cambió en el régimen provincial, la Tupac y la Red que lidera

53

Citado en el diario el Libertario (julio de 2007) “la Ley de emergencia es un

avance totalitario sobre las instituciones” Disponible en: http://www.ellibertario.com/2008/07/07/perassi-

la-ley-de-emergencia-es-un-avance-totalitario-sobre-las-instituciones/) (con acceso el 16 de abril de 2009)

54 El libertario (Julio de 2007) Ley de Emergencia de Edificios

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emergencia-de-edificios-publicos-levanta-mas-polvareda/. (con acceso 16 abril de 2009).

27

no sólo tienen la capacidad de protestar y conseguir una ley, también han adquirido un

saber que ponen en juego en sus demandas, ¡saben de construcción!

5.c Ejemplo 3: Disputas entre los aliados federales en la provincia.

Compartiendo un almuerzo con Milagro y sus colaboradores fui testigo de la

organización de una acción pública que es una muestra de la disputa entre el gobierno

provincial y la organización por el rol interlocutor político del gobierno federal en

Jujuy. Durante la comida en la casa de Milagro, ella pasa revista a diversos temas con la

gente de la mesa. Un muchacho le muestra un diseño de una bandera para una marcha

improvisado en un pequeño papel. Era el 17 de febrero de 2009, al día siguiente llegaba

Kirchner, el ahora ex presidente venía en su rol de máxima autoridad del PJ a nivel

nacional. La misión del viaje era una reunión del partido en la provincia. Milagro me

comentó que había hablado con el secretario de la presidenta Oscar Parrilli y que le

había asegurado un encuentro con Kirchner. Ya tenían asegurada una reunión el ex

presidente, pero, aunque nadie lo sabía, harían una demostración de fuerza con una

multitudinaria “bienvenida” en aeropuerto provincial. El muchacho del bosquejo de la

bandera le consulta a Milagro qué le parece el diseño. Ella lo aprobó, pero pidió agregar

la cara del Che Guevara y del Cacique Amaru.55

Los preparativos eran muchos, tenían que organizar una multitudinaria marcha

sin descuidar todas las tareas de la organización. Pilo (Alejandro Mansilla, estrecho

colaborador de Milagro) reunía un grupo de personas, presentados por los delegados de

las copas de leche, con el objetivo de formar una nueva cooperativa, mientras revisaba

la confección de la bandera. Tarde a la noche (cerca de las 23) encontré a otro militante

en la sede central de la organización esperando respuestas por la contratación de los

55

Ambos siempre presentes en todo el material audiovisual de la Túpac, desde las etiquetas de la ropa que

fabrican hasta los muros de los centros recreativos de los barrios populares. Ver

http://www.tupacamaru.org.ar/.

28

micros que llevarían a las personas hasta el aeropuerto donde la concentración esperaría

al ex presidente en la ruta. La logística era compleja pero la organización tiene

gimnasia:

“…la lucha ya la sabemos de memoria, porque estamos en la lucha cotidianamente, o

sea que no es problema para la Tupac organizar manifestación de 10.000 personas, te

reitero… vos me avisás a la mañana, a la tarde podés tener 10.000 personas en la calle,

ya hay práctica, ya hay gimnasia” (Entrevista a Raúl Noro, Dirigente de la Organización

Tupac Amaru, San Salvador de Jujuy, 17 y 18 de febrero de 2009) 56

Cuando Kirchner llegó a las 15 hrs. del 18 de febrero de 2009 había miles de

personas sobre la ruta al costado de la pista de aterrizaje, hubiera sido imposible no

verlas. La gente esperó unas cuatro horas, hasta que los líderes de la Red de

Organizaciones Sociales, fueron recibidos. En la reunión Kirchner le prometió a

Milagro que sería invitada a compartir, junto con la presidenta Fernández, el acto de re-

inauguración del hospital de niños provincial en abril de 2009. Pero la invitación no se

concretó.

¿Qué había sucedido en el medio, desde que el ex presidente invitara a Milagro

al acto? Las semanas previas al evento los miembros de la Tupac contactaron a

funcionarios de la provincia para asegurar su lugar en el acto (lo que implica también

negociar que espacio ocuparía en el palco oficial, junto a la presidenta y al gobernador).

En algún momento los funcionarios dejaron de atender las llamadas de la organización.

La provincia se negaba a invitarlos a un acto del gobierno.

56

En el mismo sentido se expresa un miembro de la CTA: “la Tupac tiene que organizarse para poder

sostener esa solidaridad y esa permanente necesidad de movilizar, de mostrarse, de hacerse visible,

porque esa es gran parte de su fuerza. El día que la Tupac deje de movilizar 25.000 tipos cada vez que hay

un problema chiquitito, o grande, va a dejar de ser lo que es.”. (Entrevista con Inés, Miembro de la

Central de Trabajadores Argentinos, Ciudad de. Buenos Aires, 9 Noviembre de 2008).

29

La reacción de la Tupac fue armar una estrategia en dos frentes. Primero, ante la

falta de atención del gobierno provincial, se comunicaron directamente con los

funcionarios del gobierno federal responsables de la agenda de la presidenta y

gestionaron una visita de la mandataria a la nueva sede de la organización en la ciudad

de San Salvador (una suerte de CIC propio que funciona en un edificio nuevo y brinda

muchos más servicios que los del gobierno federal). Pero, no conformes con ello,

armaron otro acto para recibirla.

La presidenta habló ante diez mil personas en el acto oficial y compartió una

hora y media con los funcionarios de la provincia. Según fuentes de la organización su

acto reunió a cuarenta mil concurrentes y la visita de la presidenta a la sede social duró

tres horas, exactamente el doble de tiempo que el encuentro con la provincia. En

política, donde hay signos que marcan espacios y relevancia, se puede evaluar la

competencia entre los actores y su balance de fuerzas a partir del resultado de sus

convocatorias. Desde este punto de vista, la estrategia de la Tupac fue de mayor peso

que la de la provincia, porque su acto convocó a más personas y porque la presidenta

compartió con la organización más tiempo que con el gobierno de la provincia.

Exultantes los dirigentes de la Tupac mostraban que su organización ya no puede ser

ignorada.

En este ejemplo, se vio que la relación entre el gobierno federal y el provincial

también es afectada por el reconocimiento que el primero le da a la organización. Por un

lado, esta es el brazo ejecutor de los recursos federales en los barrios pobres, como una

suerte de mediador entre el estado nacional y la gente de Jujuy; por el otro, posee

recursos simbólicos vinculados a su legitimación como interlocutor político provincial.

Cuando la presidenta y el ex presidente invitan a Milagro Sala a participar en un acto

oficial ponen al gobernador en una situación compleja: si el gobierno provincial acepta

30

que participe, reconoce una especie de cogobierno; pero si la rechaza se enfrenta al

poder de convocatoria de la organización que impugna su legitimidad (porque la

organización demostró que puede movilizar más gente y lograr mayor atención de la

presidenta que el propio gobernador).

6. La persistencia de la influencia del gobierno federal y sus aliados en el régimen

subnacional

En diciembre de 2001 hubo una crisis política a nivel nacional en la que la clase

dirigente fue intensamente cuestionada. Sin embargo, Jujuy ya había sufrido su propia

crisis y en esa ocasión los cuestionamientos no alcanzaron a la administración de

Fellner, que tenía buena imagen entre la población.57

En 2006 el gobernador Fellner y

pretendía reformar la Constitución provincial para ir por otra reelección. Kirchner lo

desalentó de su deseo de convocar a un referéndum que le diera el respaldo para

comenzar el proceso de reforma constitucional.58

En cambio, le sugirió que se presente

para ocupar una banca como legislador en el Congreso de la Nación y cuando ganó su

banca como diputado, fue elegido presidente de la cámara. Él y su esposa, la senadora

por Jujuy Liliana Fellner, se convirtieron en dos de los principales aliados políticos de la

presidenta Fernández en el Poder Legislativo. Una vez más vemos cómo la política

nacional afecta parámetros básicos de la política provincial (y cómo los referentes

provinciales contribuyen con los proyectos de gobierno de los presidentes).

Cuando el mandato de Fellner culminó, dejó a un hombre de su confianza como

candidato para sucederlo, Walter Basilio Barrionuevo, que gana las elecciones. Al llegar

57

Según Calvo y Escolar (2005) durante la crisis de 2001 hubo mayor cuestionamiento a las elites

nacionales y mucho menor a la de las provincias. 58

. El entonces presidente Kirchner había respaldado el intento del gobernador de Misiones para

permanecer en el cargo y fue cuestionado por su apoyo. Cuando el gobernador de Misiones perdió el

referéndum, fue un fracaso político para Kirchner por apoyar el intento de perpetuación en el poder de un

gobernador que no fue respaldado por la ciudadanía de su provincia.

31

al poder, Barrionuevo encontró a una sociedad polarizada, intereses económicos

enquistados dentro del gobierno en constante puja distributiva, un menú de

organizaciones sociales que cortaban la ruta y ocupaban la plaza de gobierno de manera

periódica con sus reclamos; hasta aquí nada muy distinto de lo que encontraron sus

predecesores.

Pero también encontró a la organización Tupac Amaru con su grado actual de

desarrollo. A principios de 2009, sus miembros alcanzan al 10% de la población de la

provincia. Sólo en esa provincia tenía 70.000 miembros y 10.000 eran los del resto del

país (durante 2010 su crecimiento seguía siendo exponencial). En Jujuy también

poseían más de cuatro mil cooperativistas asalariados, y casi mil más en otras

provincias. Es el tercer empleador de la provincia (el primero es el estado provincial y el

segundo es el Ingenio Ledesma) y el segundo empleador privado, y es un nuevo actor

de veto de la política local. Administraba un fondo común de unos seis millones de

pesos mensuales (aproximadamente 1millon de dólares al cambio de 2009) con dinero

de diversos programas de construcción y algunos programas que otorgan subsidios para

la compra de maquinaria. La eficiencia en la administración de los recursos le permite

cumplir con los fines de las políticas cuyos fondos administran y además, ahorrar un

excedente que re invierten en obras para la comunidad. Con este excedente han

construido una sede social para sus miembros con un CIC propio59

, tres fábricas (una

textil, una metalúrgica y otra de ladrillos que utilizan en sus obras de construcción),

varios centros de recreación en los barrios60

, un colegio -que posee un edificio en la

ciudad y opera descentralizadamente en los barrios donde trabajan las cooperativas-y

un almacén, entre varias otras cosas.

59

En la sede social poseen aulas, el tercer tomógrafo de Jujuy y la segunda piscina climatizada. 60

Todos los centros de recreación cuentan con piscinas. Estas son muy valoradas por la gente de los

barrios. Estas obras tienen una fuerte carga simbólica ya que en Argentina sólo las familias de clase

media pueden acceder a este servicio en clubes y una minoría en sus hogares. Milagro habla de esto en

sus discursos de manera reiterada.

32

La primera consecuencia de la lucha social de los años noventa y la consolidación

de la labor de la Tupac Amaru a partir de 2003 es la legitimación de los actores

sindicales y sociales como interlocutores políticos. Tanto Milagro como el secretario

general de la CTA, Nando Costa, son consultados por los medios de comunicación para

conocer su opinión sobre los temas de la agenda pública provincial.

“…de las obras, de si el gobernador hizo tal cosa, de las elecciones… en todo [los

consultan]… viste como acá [en la Ciudad de Buenos Aires], los medios tienen una

cuestión simbólica de discurso, bueno, ¿en qué se deja visualizar allá en Jujuy? [En]

[q]ué opinará el gobernador, el actor de turno, el dirigente de turno, o el funcionario que

tiene que ver con alguna cosa, y Milagro Nando, siempre […] [E]llos lograron

instalar… que difícilmente se logre algo que la CTA no esté de acuerdo. Eso no pasa en

otro lugar de la Argentina en cuanto CTA, pasa con otras cosas, o con otras

organizaciones. (Entrevista con Inés, Miembro de la Central de Trabajadores

Argentinos, Ciudad de. Buenos Aires, 9 Noviembre de 2008).

Segundo, lo que hace la organización es copiado por otros grupos de ciudadanos que

utilizan sus exitosos métodos. Sin duda esto sucede con los miembros de la Red de

Organizaciones Sociales, pero su existencia consolida también otros liderazgos sociales

que no están bajo su órbita. Incluso gobiernos locales se ven estimulados a formar

cooperativas ante la evidencia de que para ellos también es posible llevar adelante las

obras. La militancia sindical también se ve motivada por la experiencia de Jujuy y

pretenden replicar la experiencia.61

La Tupac se instaló una cultura política en la que las

61

En octubre de 2008 hubo un evento multitudinario que reunió a miles de personas de la CTA, la

“Constituyente Social”. En este evento la constante en todos los discursos de los participantes fue su

perplejidad frente a la capacidad de movilización de la organización anfitriona y, en particular,

compartían la buena impresión que les causó ver las obras construidas por la organización. Al respecto el

referente de la organización en Buenos Aires decía: “lo principal es que las distintas Tupac de cada

provincia se llevan de Jujuy siempre que vamos, es, primero que cada vez que vamos sea una semana

después de que fuimos antes o sea un mes después, siempre que vamos hay mil cosas más que las que

vimos hace una semana, o sea que siempre no para, es una revolución permanente, es un torbellino que en

33

organizaciones sociales son vehículos de demandas y, gracias a la protesta, consiguen

recursos y sostienen su capital humano.

En tercer lugar, el espacio político que las organizaciones ocupan gracias a su

relación con el gobierno nacional trae otras consecuencias en la política provincial. Su

poder de presión es una suerte de contrapeso relativo de los poderes económicos, no

sólo en la retórica de la organización, sino en la práctica política. Hay cierta fusión en la

provincia de los actores políticos, económicos y aquellos que controlan los medios. En

este sentido el gobernador encuentra complejo reunir los consensos necesarios para, por

ejemplo, lograr que los empresarios paguen impuestos. El gobernador apeló (sin éxito) a

los reclamos sociales como excusa para negociar mejor frente a los actores más

influyentes de la política local y así intentó reformar el régimen fiscal provincial y las

excepciones impositivas:

“si los mismos actores que ocupan lugares en el Estado son los mismos actores del

campo económico, a veces yo siento y lo veo con Walter [Barrionuevo el gobernador],

que es difícil tomar decisiones. Es difícil tomar decisiones que permitan esa superación

de asimetría. Ahora, cuando hay un sector multitudinario organizado, como es el caso

de la Tupac, que presiona para que se den esos equilibrios, entonces bueno, el otro

sector en algún momento cede…” Asesor del Gobernador Barrionuevo

El gobernador utiliza a las demandas sociales como contrapeso frente a los intereses

económicos. La respuesta de estos sectores fue la amenaza de despidos y

desestabilización. Como se ve el balance de poder no es fácil para la administración

provincial. Por un lado están las protestas sociales permanentes, por otro las empresas

amenazan con despidos en una economía con pocas fuentes de trabajo privadas y fusión

entre posiciones e intereses públicos y privados. Pueblos enteros han caído en la

vez de destruir construye. No un milagro, sino la organización.”. Manuel Alsina Organización Tupac

Amaru Ciudad de Buenos Aires. Buenos Aires diciembre de 2008.

34

pobreza cuando han cerrado empresas, Jujuy sabe de desempleo y empobrecimiento. El

resultado es un estado asediado por los intereses sectoriales, en el que ningún actor se

interesa en su transformación.

7. Reflexiones finales

El artículo muestra que el efecto de la política federal en la provincial es profundo.

En el presente, el gobernador se ve impotente frente a la derivación de recursos

federales a una organización social poderosa. A la vez el régimen provincial tiene una

tendencia a la estabilización en determinados equilibrios que le permiten reproducir sus

prácticas y sus elites aún en un clima de alta movilización.

Las políticas económicas adoptadas por el gobierno federal durante los años noventa

generaron una crisis para las elites locales. Las políticas fiscales nacionales y su impacto

en el nivel provincial, en un estado débil y con poderes económicos enquistados, dieron

lugar a una década de lucha que incorporó a la protesta social en la cultura política de

Jujuy. Esta situación también se dio en otras provincias. Desde 2003 el gobierno federal

cambia el rumbo, interviene más en la economía y aumenta el gasto público (ayudado

por el crecimiento económico y el aumento de la recaudación). Este deriva recursos a

varias organizaciones para construir capital político en el territorio subnacional. Así

contribuye a la existencia de una organización social que es una suerte de estado

paralelo en algunos barrios y cuyas formas de acción y gestión estimulan el activismo

de otros grupos. En síntesis, no es descabellado afirmar que la protesta en Jujuy lejos de

ser disruptiva, es una institución del régimen político. Pero esto no pasa sólo en Jujuy.

La protesta en la Argentina es una manera de pedir recursos y políticas. Es una

relación compleja porque algunos de los líderes de estas protestas o bien están

vinculados orgánicamente con el estado federal o bien apoyan su proyecto político, ya

no son opositores al gobierno como lo eran en la década pasada. No sólo organizaciones

35

sociales de desocupados y pobres se movilizan, hoy grupos de diversos orígenes lo

hacen. La protesta se convirtió en un a forma de concretar el vínculo de la ciudadanía y

sus demandas con el gobierno federal. Un tema que queda abierto es la relación entre la

práctica de construcción de poder territorial y las instituciones formales. Pareciera que

el gobierno federal socava la legitimidad de las instituciones públicas de canalización de

demandas cuando responde de modo sistemático a los reclamos realizados por canales

no formales y fomenta esa forma de vinculación.

La política de alianzas del gobierno federal esconde otra paradoja. Kirchner y

Fernández han querido revertir la tendencia antiestatista del neoliberalismo e incluir a

grupos y demandas no representadas. Sin embargo, al derivar recursos públicos y

reconocer a las organizaciones como interlocutores políticos, reproducen algunos

aspectos de aquella lógica en la que son las organizaciones, y no el estado, las que

brindan servicios sociales. Queda pendiente estudiar en qué medida esta práctica

contribuye o no a la integración de los ciudadanos a la vida pública y saber si garantiza

su igual acceso a los recursos federales, sin sesgos ni arbitrariedades en su distribución.

Hasta el momento, el régimen político de Jujuy pareciera haber “absorbido” la

aparición de la organización Tupac Amaru y de algún modo estabilizarse en un proceso

de toma decisiones altamente informal (característico del régimen provincial por las

negociaciones entre elites) y con un alto grado de conflicto en las calles. Retomando la

metáfora del “juego cerrado” se ve que la elite política provincial gobierna más allá de

las reglas del régimen controlando espacios de poder no vinculados con la política

institucional, usando así acuerdos y mecanismos informales para persistir en el poder.

Cuando la organización Tupac Amaru se moviliza y recibe recursos, sus demandas son

legítimas, la gente tiene muchas necesidades y estas no han sido resueltas ni escuchadas

por los gobernadores. Sin embargo, el gobierno provincial “ajusta” algunas prácticas del

36

régimen (tolerando la protesta y la violencia de la organización), pero no logra una

mayor democratización (por ejemplo, integrando a los ciudadanos, a sus demandas y

organizaciones mediante la creación de mecanismos formales de participación y

consulta). El gobernador tampoco responde a los desafíos de la Tupac Amaru con

políticas públicas de empleo o asistenciales que resuelvan aquellas necesidades que las

ciudadanas y ciudadanos mas pobres de Jujuy satisfacen gracias los recursos federales

que esta organización administra. Mientras tanto, miles y miles de personas que no han

sido integradas a la vida política y social de la provincia tienen en sus barrios una suerte

de espacio público y de experiencia de participación.

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p.7

44

Apéndice 1

Algunas consideraciones metodológicas

Mi principal interés es analizar cómo la política provincial se ve afectada por la

política federal. La variable dependiente será el régimen provincial. Lo que explica estas

posibles transformaciones en la política provincial (variable explicativa a considerar)

será la forma de construcción de alianzas del gobierno federal. La manera de

aproximarme a los cambios en este patrón de alianzas es a través de los interlocutores

que el gobierno federal posee en territorio. Los indicadores de las consecuencias

provinciales de las políticas federales de alianzas serán las situaciones donde surgieron

tensiones entre los diferentes aliados del gobierno federal. Estas tensiones serán

analizadas a través de tres casos. Los contactos y recursos que el gobierno federal deriva

a sus socios en las provincias serán entendidos como indicadores de estas alianzas.

El principal instrumento de recolección de información fue la entrevista

(Saltalamacchia 2005: 611-616). Formalmente las entrevistas no dan información

objetiva sino aquello que el entrevistado desea trasmitir, sus imágenes, experiencias,

representaciones del conjunto de hecho que se indagan. En ese sentido debe

considerarse a la entrevista como una herramienta para capturar indicios más que

indicadores La entrevista en investigación cualitativa requiere de un esquena conceptual

previo a los encuentros que ordene el dialogo en función de las variables consideradas y

así se hizo en este caso. La guía de pautas varió de entrevista en entrevista, en su orden

y en algunos temas no contemplados que se fueron agregando y otros que resultaron

fuera de lugar y tuvieron que omitirse. En general todas las entrevistas contemplaron

estos temas:

45

Cuadro 1. Entendiendo las consecuencias de la política federal en el régimen subnacional actores,

recursos y procesos de toma de decisiones

(Esquema conceptual de las entrevistas)

Organizaciones sociales Funcionarios de gobierno provincial y local

(Ciudad de San Salvador)

Organización (origen, objetivos, toma de

decisiones y actividades)

Relación con cada nivel de gobierno (federal,

provincial y municipal)

Recursos (origen de recursos y criterios de

asignación)

Discursos y valores en torno al régimen (idea

de lo político, actores legítimos para participar

en la toma de decisiones)

Identificación de acontecimientos políticos

significativos

Caracterización de la coyuntura política

reciente en el distrito (actores, desafíos y

éxitos)

Régimen subnacional :obstáculos y

facilitadores para la gestión, principales

actores de veto en la política provincial

caracterización del proceso de toma de

decisiones de las políticas públicas que

entendidas como más relevantes.

Acceso a recursos federales

Relación con otros niveles de gobierno

Relación con organizaciones sociales

Identificación de acontecimientos políticos

significativos

Fuente: Elaboración propia