Ética para un políticodel siglo XXI

JULIO CÉSAR CASTAÑOS GUZMÁN

Ética para un políticodel siglo XXI

Publicaciones JCERepública Dominicana,

2007

© JCE

Publicaciones JCE, 2007Ensayos Electorales, Volumen IÉtica para un político del siglo XXI

Autor:Julio César Castaños Guzmán

Cuidado de la edición:Rafael Menoscal Reynoso

Diagramación:Eric Simó

Diseño de portada:Elizabeth Del Rosario

Impresión:Impresora Kelvis C. x A.

Impreso en República DominicanaPrinted in the Dominican Republic

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Presentación

O rgullosamente para mí, me toca hacer lapresentación de este ensayo, hijo de uno de los mássanos talentos con que cuenta la República Domi-nicana, como lo es el Dr. Julio César CastañosGuzmán.

Toda obra escrita con el deseo de contribuir aldesarrollo y perfeccionamiento del ámbito políticodentro de la ética, su autor merece admiración yrespeto, cual es el caso del ilustre jurista autor deeste ensayo, quien ha distraído tiempo dentro desus relevantes funciones de Presidente de la JuntaCentral Electoral, para obsequiar al amable lectorcon un manojo de ideas constructivas tangibilizadasen este escrito, que realimenta la estabilidad políti-ca nacional, que como dejamos dicho, aporta sa-nas ideas morales.

Es por lo que nos sentimos orgullosos de hacerla presentación de esta obra que el Dr. Julio CésarCastaños Guzmán ha titulado Etica para un políti-co del siglo XXI. En ésta nos dice cómo alcanzarun proceso ético dentro de la política, con miras a

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darle auge a los sistemas democráticos para quediscurra fundamentalmente del organismo quepreside.

La idea fecunda del Dr. Castaños Guzmán vadirigida, por demás, a la consolidación de la políti-ca en nuestro siglo, con insinuaciones felices derectitud moral y orden institucional. Todo tan par-ticularmente expuesto, que su lectura entusiasmasegún nos adentramos en su contenido, útil para lavida cotidiana en los momentos que nos toca vivir.

El autor nos deja ver que en una sociedad polí-tica del estilo siglo XXI, se requiere del cumpli-miento de normas éticas que hagan viable su desa-rrollo con dignidad y decoro. En este ensayo, elautor llama a las élites políticas a contribuir con suesfuerzo, al fortalecimiento de la democracia bienentendida.

Por la acumulación de conocimientos científi-cos del autor, la obra goza de gran profundidadliteraria, capaz de dejar complacido el gusto másexigente, gracias a su saber en la ética, que perso-nalmente practica.

En el fondo, es una reafirmación del criteriodel autor en el significado virtuoso de la política,dicho con un corte religioso, que bien sirve a lospolíticos del siglo que discurre, como un llamado ala verdad, la justicia, el honor, la transparencia y latemplanza.

Bueno es leer esta obra como un aliciente parauna buena actuación política.

DR. JOSE A. SILIÉ GATÓN

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É tica es la “Parte de la filosofía que tratade la moral y de las obligaciones del hombre”; poreso, cuando hablamos de ética nos referimos nece-sariamente a las acciones humanas en orden a subondad o a su malicia.

Uno de los peligros que tendrían estas líneas esque se escriban bajo la égida de un tono morali-zante y admonitorio, presentando los problemas dela ética como algo nuevo; o lo que es todavía peor,bajo la proclamación de una fórmula imposible,sin tener en cuenta las tremendas limitaciones quetenemos los seres humanos respecto de nuestrapropia conducta.

“Yo no sé que me pasa –diría el apóstol Pablo–que no hago el bien que quiero, sino el mal que noquiero. Para continuar diciendo, mas no soy yo, esel pecado que habita en mí”.

Todos los políticos vienen de la guerra; sus vi-das sociales están demarcadas en la lucha política,que es lucha por el poder. Casi podría decirse queson guerreros y, algunos, verdaderos gladiadores.

En cualquier Génesis del Derecho, como en laobra de Calamandrei, por ejemplo, el Derecho surgecomo una necesidad de ponerle fin a la guerra, y deconjurar la rapiña y la violencia producida por ésta,estableciendo bases justas y normas claras que per-

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mitan la convivencia social. Renunciando a la leydel más fuerte, a la venganza, y organizando institu-ciones jurisdiccionales donde dirimir los conflictos.

Las reglas de esta contienda deben estar claraspara todos; deberían estar claras en una Ley dePartidos, por ejemplo, que en el fondo es al mismotiempo una norma de participación política queconfiere seguridad jurídica a los derechos de ciu-dadanía contra el clientelismo que desaloja de lalucha política a muchos ciudadanos.

No estamos hablando tampoco, de forma inge-nua y simplista, de un partido de buenos, sino deuna participación responsable y transparente. Es-tamos precisados de establecer un consenso éticoque nos permita participar transversalmente en lapolítica.

Consenso ético y participación transversal, cadaquien en el partido de sus simpatías. Los partidosde buenos han fracasado en el curso de la historia(caso de Cicerón en Roma), o de los DemócrataCristianos de Italia. Estamos hablando de Estadode Derecho y fin del Derecho.

En razón a que no es posible en tan poco tiem-po proceder a una explicación detallada de cadaprincipio ético, nos parece conveniente hacer hin-capié en los valores éticos que señalo a continua-ción y que podrían servir de objeto para un con-senso ético tendente a unificar a todos los políti-cos en el propósito del bien común. Veamos.

A) VERDAD

Gandhi hablaba de la Fuerza de la Verdad. Laspersonas no tienen un conocimiento absoluto dela verdad, por eso era opuesto a la pena de muerte,ya que el ser humano, todos los seres humanos,somos capaces de equivocarnos. También decía,que la verdad nos libera del miedo, capacitándo-nos para una vida digna.

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Una cosa es decir dolosamente una mentira yotra cosa es estar en un error sobre la base de laignorancia o la falta de información. Un animal nopuede mentir. Un hombre podría mentir, de dondela veracidad es un imperativo de la humanidad.

La verdad es, en un momento determinado, aque-llo sobre lo que la comunidad científica ha determi-nado una certeza después de haberlo comprobado.

Las ciencias sociales, que no son ciencias posi-tivas, no han llegado a los niveles de la comproba-ción empírica absoluta de todas sus formulaciones

o hipótesis. El paradigma de la propia Justiciaha sido, una que otra vez, estremecido por la pré-dica neoliberal o por la Justicia socialdemócrata,con-forme a Rawls, de permitir determinadas des-igualdades, en tanto las mismas propicien un bienpara la mayoría.

Thomas S. Kuhn, en “La estructura de las re-voluciones científicas”, deja claro que la historiade la ciencia demuestra que los paradigmas se man-tienen vigentes durante un tiempo; pero que lo quese tenía por cierto en un momento determinado, loque ocupaba el puesto de una verdad absoluta, in-cluso lo que se tenía por un dogma, había caídocomo consecuencia de que la “verdad” que soste-nía ese postulado resultaba insostenible, fruto dela comprobación de una nueva verdad.

B) JUSTICIA

La Justicia es la primera de las virtudes públi-cas. (Platón). Ni siquiera el placer de la verdad su-pera el placer de la Justicia. El Estado de Derecho,que es consustancial a la Democracia, es el estadiodonde impera el Derecho y la Justicia; aún cuandopodría haber leyes injustas y antijurídicas.

Justicia es darle a cada uno lo suyo; darle a cadauno lo que se merece. (Justiniano). Tanto una re-tribución como un castigo o reprimenda.

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Justicia es equilibrio, igualdad ante la ley; recti-tud, objetividad. No hacer acepción de personas,no torcer el Derecho que es prevaricación, porcomplacencia, dinero, amiguismo o por el lazo quecrean las dádivas.

La mejor de las leyes podría ser desfigurada ensus propósitos. Y la venganza siempre es una cari-catura de la Justicia.

“Sed Justos primero, si queréis ser felices”, de-cía el prócer Juan Pablo Duarte. Es que hay unafelicidad en la justicia, una bienaventuranza en laJusticia. Existe una válida aspiración a la felicidad;pero la felicidad sin obras de Justicia no es posible.

Y qué decir de la Regla de Oro: No hagas alotro lo que no te gustaría que te hicieran a ti.

La necesidad de la Justicia va más allá de laamabilidad. A veces vamos donde un funcionario abuscar Justicia, y recibimos sonrisas de amabilidad;pero, no la justicia que demandamos y merecemos.

El anteriormente citado, Mahatma Gandhi,decía que los bienes con que Dios ha provisto elmundo alcanzan para todos; pero todos los bienesde este mundo no alcanzan para la codicia de unospocos.

C) HONOR

Cualidad moral que nos lleva al cumplimientode nuestros deberes respecto del prójimo y de no-sotros mismos.

¡Quién no quiere ser llamado honorable! Ho-norable es el que cumple con su deber, y porqueredime lo que debe y se beneficia de una buenareputación, de buen nombre y fama. La honorabi-lidad nos viene a consecuencia de cumplir todasnuestras obligaciones. Familiares, profesionales,políticas.

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D) TRANSPARENCIA

Transparencia es: “Sinceridad manifiesta en laacción visible”.

Es del mundo de la política y de la lucha por elpoder una doble moral, entroncada en el arte dedisimular y las hipocresías, cuando nuestra con-ducta aparece determinada por las ceremonias ygestos del poder. Verbigracia, aparentar clemencia;o recurrir a una extrema parsimonia, que como di-ría Maquiavelo: “Ayuda a reinar”.

Ilustrativo el caso de César, que después de suvictoria en la conquista de Las Galias, en la apo-teosis, hizo desfilar en la entrada triunfal a Roma,al líder galo Vercingetorix, para finalmente hacerloestrangular.

Juan XXIII decía que en su experiencia diplo-mática como Nuncio Apostólico en Turquía y enParís, su arma secreta diplomática siempre fue lasinceridad, que lo sacó de muchos apuros en am-bientes hostiles.

La transparencia nos protege de nosotros mis-mos, de nuestras debilidades, porque hace posibleque la comunidad política nos acompañe, y eso nosampara de nuestros propios excesos.

E) TEMPLANZA

He dejado de último a la templanza. La tem-planza es una de las cuatro virtudes cardinales, queconsiste en moderar los apetitos y el uso excesivode los sentidos, sujetándolos a la razón.

Hay una necesidad de que permanezcamos so-brios, austeros. Muchos podríamos desquiciarnosal alcanzar una función pública. La borrachera delpoder; la parranda del poder podría destruirnos yllevarse por delante la familia y estropear el ejerci-cio para el que hemos sido electos.

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Siempre se habla en términos abstractos acer-ca de la comida del boa; el boa debe comer paraque duerma, para que no haga daño; pero es difícilque en la función pública nosotros nos planteemosla situación de que el boa seamos nosotros mis-mos, y que al mantenernos ahítos, hartos, no reali-cemos la misión que nos fue encomendada. ¿Seréyo el boa?

En estos tiempos de tantas crisis de valores,los políticos y todos los que estamos en la funciónpública debemos llegar a un acuerdo ético funda-do en: verdad, justicia, honor, transparencia y tem-planza, para que siendo justos, seamos felices, yhagamos felices a nuestros hijos y a los hijos de sushijos.

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Datos biográficos delDr. Julio César Castaños Guzmán

Nació el 8 de abril de 1955 en la ciudad de SantoDomingo, Distrito Nacional. En el año de 1977 segradúa de Licenciado en Derecho en la PontificiaUniversidad Católica Madre y Maestra (PUCMM).

Hijo de los esposos doctor Julio César Casta-ños Espaillat y la señora Nervina Guzmán Pérez.Contrae matrimonio en la ciudad de los 30 Caba-lleros, Santiago, con la licenciada en EducaciónVelkys Zouain Hidalgo, el 16 de junio de 1978. Haprocreado cuatro hijos Claudia María, Julio César,Julio Simón y Julio Alfredo Castaños Zouain.

Desde 1983 comienza a impartir docencia endiferentes universidades de gran prestigio en el país,entre las que figuran la Pontificia Universidad Ca-tólica Madre y Maestra (PUCMM), UniversidadIberoamericana (UNIBE) y la Universidad Nacio-nal Pedro Henríquez Ureña (UNPHU) impartien-do las asignaturas Introducción al Estudio del De-recho Penal, Derecho Penal e Introducción a laMagistratura. También Teoría General de las Obli-

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gaciones del Derecho Comercial, Derecho Roma-no y Derecho Administrativo. Además, Profesordel Programa de Actualización para Magistradosdel Ministerio Público.

Ha desempeñado diferentes funciones pú-blicas. Sub-Consultor Jurídico del Poder Ejecutivodesde 1994 hasta 1996. Procurador Fiscal del Dis-trito Nacional y Secretario de Estado, (1996-1999).Miembro de la Junta Central Electoral durante elperíodo 1999-2002. Luego en el 2006 fue escogi-do Presidente del Tribunal de Elecciones.

Ha ocupado importantes cargos en diferentesinstituciones entre las que podemos mencionar:Sociedad Comercial Publicaciones Ahora C. porA., donde fungió como Presidente de la entidaddesde 1988 hasta 2004. Vocal, desde 1987, de laFundación Corripio Inc., Miembro-Fundador dela Fundación Derecho y Democracia Inc., Miem-bro de la Junta de Directores de la PUCMM. En elaño 2005 fue candidato a integrar el Tribunal In-ternacional de las Naciones Unidas para sancionarlos crímenes cometidos en Cambodia por el KhmerRouge.

Además, director del Buffete de Abogados Cas-taños & Castaños, desde 1987. Asesor Legal Ex-terno de la Secretaría de Estado de Cultura. En el2006 mediante decreto del Poder Ejecutivo es de-signado Miembro de la Comisión de Juristas parala elaboración del proyecto de Reforma Constitu-cional. Asesor Legal de la Conferencia del Episco-pado Dominicano y miembro de la comunidad ca-tólica Siervos de Cristo Vivo.

Ha realizado diversos post-grados y maestríasde especialización jurídica. En la Universidad Pe-dro Henríquez Ureña (UNPHU) hizo una Maestríaen Ciencias Jurídicas en 1987. Mientras que en 1991

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un Post-Grado en Derecho Penal en la Universi-dad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

El doctor Castaños Guzmán efectuó otros cur-sos entre los que podemos mencionar Estudios parala Maestría en Pensamiento Social en la PUCMM.Investigaciones Criminales, curso especializadorealizado por el Departamento de Justicia de losEstados Unidos de América en Tegucigalpa, Hon-duras en 1990. Diplomado en Resolución de Con-flictos, Universidades de Valparaíso, Chile y laPUCMM en el 2002.

Participó en el curso sobre Financiamiento dePartidos Políticos impartido por el Instituto Fede-ral Electoral de México, Distrito Federal, en el 2000.Para el año siguiente 2001, realizó los cursos deInformática en los Procesos Electorales en SantaCruz de la Sierra, Bolivia y sobre Derecho Consti-tucional Norteamericano organizado por la IFES,en Washington, D. C., Estados Unidos deNorteamérica. En el 2007, participó en el curso“Financiamiento de la Política” en Tegucigalpa,Honduras. Además, ha formado parte de variascomisiones que han representado al país en dife-rentes eventos internacionales.

Esta primera edición de Ética para un político del sigloXXI, de Julio César Castaños Guzmán, terminóde imprimirse en los talleres gráficos de ImpresoraKelvis C. x A., en el mes de abril de 2007, en SantoDomingo, República Dominicana.