endas de aza - armada expediciones | caza mayor en … · algo sobre estos cotos y las...

Nº72

8,50€

ValmayorEdiciones S.L.

AZAY CONSERVACIONISMO

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72

ENDAS DE

portada 72:36.qxd 20/06/2011 9:54 Página 3

quellos lectores que sean fie-les a esta revista tal vezrecordarán el artículo que

hace ya un par de años escribí sobre cazaen Bulgaria. En aquella ocasión un grupode buenos amigos de ArmadaExpediciones guiados por mí, nos encami-namos a una cacería de corzos y rebecosen las montañas Ródopes, en el coto de

Izvora. He de decir que la caza del corzoen los Ródopes es deportiva pues se hacetotalmente recechando a pie, caminandopor unas veredas bien marcadas y fácilesentre preciosas montañas cuajadas dehayedos y robledales; en ningún momentose tira desde el coche, práctica que se hahecho demasiado frecuente en otros paísesdel Este de Europa y que no a todo el

Caza mayor

Roque Armada, Director de Armada Expediciones

Caza combinada en los Ródopes

Caza mayor con alasen Bulgaria

A

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Alas en Bulgaria:Africa addio copia.qxd 13/09/2011 9:55 Página 2

mundo le satisface. Además, son ejempla-res muy bonitos pero nada pesadosmoviéndonos entre los 250 y 350 gramospagables, con lo cual el precio por corzo escasi ridículo si lo comparamos con la locu-ra que se esta pagando en España o lo quepuede costar uno grande húngaro. Es ver-dad, que tampoco hay gran densidad porlo que lo normal es volver con dos o tresejemplares por cazador.

Una vez allí, los permisos de rebecos senos pusieron complicados, por esas mara-ñas burocráticas que aún existen en lospaíses que vivieron bajo la órbita comunis-ta, no llegaron a tiempo. No hubo modo deque los dos ministerios que participabanen su autorización se pusieran de acuerdo.El amabilísimo director de la reserva deIzvora, avergonzado ante la burocraciaque imposibilitaba la caza de rebecos, nosofreció en compensación dos permisos deurogallo que tenían disponibles, a un pre-cio muy ventajoso.

Así, sin haberlo planeado me vi rece-chando en plena época de celo mi primerurogallo. Recordaba de niño haber oído amis primos asturianos, que solían cobrar-lo en aquel coto familiar que fue un paraí-so, el coto Poloño, en las montañas delConsejo de Ponga. Por desgracia, como esacaza se cerró en 1977 en España cuando

yo sólo contaba 16 años, por muy poco, nollegué. En esa ocasión, en Izvora tuve laoportunidad, aunque desgraciadamenteno conseguí cobrarlo pues como un novatofallé el tiro. Querido lector, como directorde una agencia de caza internacional hetenido la suerte de ser actor o espectadordurante la caza de varios de los trofeosmás importantes del mundo: Marco Polos,argalis del Altai, grandes osos, búfalos,elefantes y todo tipo de gatos. Pues bien, leaseguro que pocas muy pocas veces anteestos importantes trofeos, he experimen-tado la emoción que sentí con la entrada ami primer urogallo. La descarga de adre-nalina que puede usted tener en el proce-so de aproximación a un gallo cantando, leaseguro que será una de las más fuertes.

En aquella ocasión, como novatos y porno llevar armas adecuadas sino las esco-petas prehistóricas que nos prestaron, noconseguimos cobrar los dos ejemplaresque tan amablemente nos ofrecieron.Pero al año siguiente ya envié a varioscazadores, entre ellos un grupo de simpá-ticos notarios andaluces, que culminaronsus lances con éxito y volvieron encanta-dos. Esta última primavera ya han sido12 los que hemos enviado a diversoscotos de Bulgaria, pero antes de contaroslas peripecias vamos a intentar explicar

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El salón de cazadores de Kormishov. Este coto de 40.000 hectáreas tiene la mejor calidad de cochinosen abierto del mundo. Además tiene magníficos rebecos, buen corzo, bonito venado de montaña,muflones y muchas posibilidades de oso pardo europeo. También es el mejor de Bulgaria para lobosen aguardo y, por supuesto, también para urogallo. ¡Casi un Paraíso!


algo sobre estos cotos y las posibilidadesde caza combinada que ofrecen.

En esta ocasión y dado el número departicipantes no tuvimos más remedio quedividirnos en varios grupos que guiamospersonalmente Federico García–Rosado yyo. Lo divertido es que además de uroga-llos permite unas fantásticas posibilidadesde combinación, no sólo tiene opciones decorzo, sino que, además este año tambiéntuvimos los prometidos rebecos. Pero esque además tiene abierto el jabalí,Bulgaria tiene una de las mejores calida-des de suidos del mundo y durante añosostentó el récord mundial. Pero la gransorpresa fue que según llegábamos tenía-mos dos osos disponibles en aguardo endos de los cotos que utilizamos.

Recapacite querido lector, ¿en cuántossitios del mundo ha estado que puedacazar un urogallo por el amanecer, luegoseguir con un corzo hasta media mañana,después de una siesta reparadora (que leaseguro que le va a hacer falta) por latarde elegir entre salir a recechar un rebe-co o ponerse de espera a un descomunalcochino o, si le apetece y se atreve conellos, un bonito oso pardo europeo. Todoello en un radio de 20 minutos en coche desu alojamiento y en alguno de los cotos queestivamos que ahora describiré inclusoandando desde la misma casa en que sealoja. No parece mal plan ¿verdad? Le ase-guro que no lo es.

Los cotos en que nos dividimos estabana unas tres horas en coche del aeropuertode Sofía, situados en el sur del país y no

lejos de la frontera griega. Tres cazadoresy yo nos dirigimos al coto de Izvora que yaconocía de otros años, 12.000 hectáreascubierta de espesos pinares y hayedos conespectaculares paisajes de montaña. Esprobablemente el más variado aunque noel mejor para ninguna de las especies quehemos mencionado. Tiene bonitos corzosde 250-350 gramos, aunque no demasiadofáciles pero sí muy deportivos, pues loscazará totalmente recechando a pie; algu-nos rebecos difíciles de cazar por lo cerra-do del bosque y entre 85 y 95 puntos demedia. Buen jabalí de entre 20 a 24 centí-metros de navajas. Para urogallos yo localifico de mediano en garantía de resulta-dos y nada fácil, la dificultad es que loscantaderos están alejados y aunque uncazador puede salir andando de la casa,los otros dos tendrán unos paseos matuti-nos en coche de a veces casi una hora, locual se hace pesado. Además, una o doslicencias de oso, cuyo comedero estabaescasamente a 300 metros de la casa enque nos alojábamos.

Lo bonito, en mi opinión de Izvora es elrefugio de cazadores que tienen en lo másalto de las montañas. Sólo se llega en todo-terreno en un viaje de 30 minutos pormalísimas pistas. ¡Pero amigo, dónde va aestar usted alojado! Es una preciosa casatipo refugio suizo de esquí con cinco dormi-torios cada uno con su baño. Tienen uncuarto de estar con chimenea y un come-dor del cual destaca la vajilla decorada conbonitos dibujos de animales según unmodelo checo de 1907. Es tan bonita que

La vajilla con laque comíamos

en Izvora. Es un diseño con dibujos

checos de 1907.Me gustó tanto

que compré una.

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ahora tengo una de ellas en mi casa queme compró y mandó a España la encanta-dora intérprete Assya que nos asistió. Ladecoración, por desgracia, tiene ese toquecomunista y se alternan algunos buenosmuebles con otros de contrachapado demalísimo gusto, pero lo compensa unaencantadora cocinera de nombre Rossi quele preparará magníficas comidas, hasta elpunto que si no tiene cuidado ganará unoscuantos kilos.

Izvora tiene una segunda casa abajo enla que está la administración y oficinas delcoto, es grande y confortable a las afuerasdel pueblo Devin. Tiene cinco dormitoriospara cazadores con un saloncito y uncomedor, pero carece totalmente delencanto y la belleza de las montañas, aun-que está divinamente situada para acce-der en poco tiempo a cualquier lugar delcoto. Y como el canto del urogallo puedevariar por la climatología, incluso dentrode un mismo valle ofrece más posibilida-des de reacción. Pero le aseguro que com-parado con la belleza, el encanto y la sole-dad de la casa de arriba no tiene color. Laelección es suya.

Otro coto en el que cazamos fue Rodopi.Allí se dirigió Federico con otro grupo decuatro cazadores. Éste es el que mejoresresultados nos ha dado en urogallo esteúltimo año. Se encuentra a 20 km. del pue-blo de Batak. Su superficie abarca 7.720hectáreas en los Ródopes centrales, conaltitudes entre los 1.200-2.000 m. aunquebastante llano, formado por frondosos bos-ques de coníferas, que conforman un hábi-tat ideal para el urogallo. También nosencontramos amplios prados de montañaideales para la práctica del rececho y enalguno de ellos se han implantado torretasy comederos para realizar esperas.Aunque nos muestra un estado semisalva-je, cuenta con varios caminos que facilitanmucho nuestros desplazamientos, creadospara la explotación maderera. Junto a lacaza son los únicos aprovechamientos deeste coto. Aparte del urogallo debemosdestacar sus corzos, son característicos demontaña, con cráneos poco pesados perocon bonitos trofeos, lo que agradeceránuestro bolsillo a la hora de valorarlo. Lonormal es cobrar 1-2 por cazador entre200-300 gramos. Los jabalíes tienen una

Roque Armada,organizador dela cacería, nos muestra un cebadero de ososen el coto deIzvora. Está a300 metros de lacasa donde sealojaban y ofrecela posibilidadhacer esperaspor la tarde, después de recechar urogallos por la mañana.

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buena densidad, aunque no dan la calidadtan elevada como en los otros cotos con losque trabajamos. Su media se encuentraentre los 20-22 cm., obteniéndose trofeosdesde los 18 cm. hasta un máximo de 25cm. Lamentablemente no tienen posibili-dades de precintos de rebeco ni de oso,aunque están presentes.

El alojamiento es más espartano, unalbergue típico de montaña, situado a1.600 m. Cuenta con 8 habitacionesdobles. La sobriedad de las habitaciones seve compensada por el entorno, la comida yel agradable trato que nos van a dispensarlos guardas y el personal de la casa.

El tercer coto que visitamos fueKormisosh, situado en el Sur de Bulgaria,en la región de Prepanski, la parte occi-dental de los Rodopes. Con 41.930 ha.alberga los mejores cochinos en abierto,teniendo el récord del mundo con 158.20puntos CIC. La media de los trofeos es de22 cm., pudiéndose abatir ejemplares de26-28 cm. La otra especie estrella de estecoto son los rebecos. Muy abundantes gra-cias a su orografía típicamente montañosa

con amplios bosques de coníferas, hayas,praderas y profundos valles, con grandesdiferencias de altitud: su punto más bajoes el río Chepelarska a 380m. y su cotamás alta si sitúa a los 2.001 m. en el picoPrespa. Para aquellos que hayan cazadoen los pirineos, les resultará muy pareci-do, pero mucho más salvaje. Los trofeosde rebeco nos ofrecen medidas que vandesde los 90 a los 110 puntos de media. Sehan cobrado varios medallas, llegando enocasiones a los 115 puntos.

Durante la cacería se ven con facilidadcorzos, su peso medio oscila entre los 200-300 gramos, que se cazan a la espera, obien ayudados por el coche nos desplazare-mos por los caminos haciendo paradaspara gemelear y después realizar la entra-da; no tiraremos nunca desde el vehículo.También tiene buenas posibilidades deoso, para ello los encargados del coto hanpreparado torretas muy bien acondiciona-das frente a estupendos comederos, dondeademás de esparcir maíz para los jabalíes,nos sitúan un cebo para el plantígrado.Esto nos permitirá que entren también

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Federico ynuestra

organizadorabúlgara nos

muestran doscorzos de

Rodopi y uncochinete que

se cobró mientras se

recechan losprimeros.


jabalíes e incluso algún lobo. Es el mejorcoto de Europa para conseguir un loboen aguardo. El urogallo es mediano encalidad digamos tipo Izvora. Sin embar-go, al ser muy alto este año el clima nosjugó una mala pasada y nevó muy tarde,por ello pararon el canto y los dos caza-dores que allí fueron no pudieron conse-guir su objetivo. Como eran dos pedazosde señores lo entendieron y el año queviene ya están convocados por ArmadaExpediciones a un coste simbólico paraconseguir su preciado pájaro.

El alojamiento de Kormisosh es, sinduda, el mejor de Bulgaria en calidady atenciones. Hay tres antiguas y lujo-sa casas forestales dentro con un totalde 15 habitaciones; son muy amplias ycon todas las comodidades que en sudía sólo disfrutaban los presidentes ylos más altos mandatarios búlgaros ensus jornadas cinegéticas. En la quenosotros nos alojamos está situada enel fondo de un valle, en un bello para-je junto a la ribera del río, a unos 600metros de altitud. Cuenta con un aco-gedor salón repleto de trofeos conse-guidos en el coto. Las comidas son decalidad, pueden ser servidas, de formamuy correcta y agradable, en el salónprincipal o si se prefiere en salonesprivados con los que cuenta.

Las armas El urogallo en celo se caza principal-

mente con escopeta, pero esto tienemuchos matices y excepciones, y vamos arevisarlas. Como he dicho la primera vezque tiré un urogallo lo fallé, en parte pormis nervios y en parte por el absolutodesconocimiento que tenía de la prehistó-rica escopeta que me dejó un amable guíabúlgaro, pues aunque tirar un pájaroposado a 20 metros con una escopetaparece fácil, de eso no tiene nada y voy aintentar explicar por qué. Casi ningunode nosotros está acostumbrado a tirar conescopeta a parado. Si usted lo piensa, losúnicos tiradores con escopeta a paradoson los cazadores de reclamo de perdiz yyo nunca me he visto atraído por estamodalidad. No es nada fácil coger elpunto de mira a una escopeta paralela yalza ni tiene. En las malísimas condicio-nes de luz que tirará es aún más difícil.

En general se tiende a ver demasiadoel pájaro y por ello los tiros suelen irbajos, por ello es mejor opción una repeti-dora que tienen mejor punto y más solis-ta; de hecho, una que usted conozca conmucho choke, puede ser una de las mejo-res opciones. Otra magnifica posibilidades el “billing” o arma combinada con uncañón arriba de escopeta y debajo otro de

FedericoGarcía-Rosado

nos muestrauno de los urogallos

cobrados en elcoto de Rodopi.

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rifle, es la que usan en Centroeuropa ymuchos de los guardas búlgaros la tieneny, además, se la prestarán. Normalmentese le tira con el cañón de arriba con un car-tucho de doble “00”. Suelen estar dotadasde mira telescópica y esto facilita mucho elapuntar en malas condiciones de luz.Además, para un cazador de rifle serámucho más natural poner un gallo en lacruz del anteojo, que tirarle con una esco-peta con la que lo tiene que tapar y portanto no lo verá en el momento el tiro. Siel cañón de escopeta lo tenemos reguladocon el anteojo, es casi imposible fallar.

He de decir que también se cazan conrifle, especialmente en Austria en celo y enSuecia a rececho. Es buena opción y paraalguien más acostumbrado a la cazamayor es más natural. Recomiendo un.222 con bala blindada para no destrozarel pájaro. Sin embargo, si el gallo estámetido en el centro del árbol y la balaroza con una rama se puede desintegrary lo perderemos. Con un cartucho dedoble 00 los plomos romperán las ramasy algunos llegarán al animal y esto esuna gran ventaja.

Precisamente en Suecia como ya contéen esta revista (Sendas de Caza Nº 55)cobré mi urogallo con un .222 a rececho enlos bosques de Laponia, pero se caza sincelo y recechado a pleno día en invierno y

con esquís, lo cual es una experienciaincreíble. Pero el problema es que ademásde urogallo en este viaje usted cazará cor-zos, rebecos, cochinos de aguardo y hastaun oso, por ello, si lleva su escopeta tam-bién tendrá que llevar un rifle de su con-fianza y esto es mucho peso y bulto. Sinembargo es la decisión óptima.

Como dato curioso en una reciente cace-ría en Canadá pregunté a los americanosque por allí había cómo tiraban los pavosde ese país, que llegan a 10 y 12 kilos depeso. Me dijeron que con escopetas “mag-num” para cartuchos de 76 milímetros ycon cartuchos que llevan una mezcla deplomo de segunda a cuarta. ¡Pero les tirana la cabeza! Parece ser que con ese densoy fuerte plumaje en el cuerpo, no les harí-as nada más que herirlos levemente ynunca los cobrarías.

La caza del urogallo en celoCreo que ya va llegando el momento de

que intente explicar cómo se desarrolla lacaza de esta impresionante ave. Temo quecon mis palabras no pueda ni remotamen-te explicarle la belleza y emoción que per-cibirá en esta apasionante modalidad,pero no tengo más remedio que intentarlo.Vamos allá. Lo primero es que tiene quehaber celo. Esto, que parece de Perogrullo,

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Roque Armadamuestra doscorzos de Izvoradelante de lacasa de arriba.Después delrececho de urogallos alamanecer simplementecambia su escopeta por elrifle y siguerecechando corzos.


es uno de los factores más complicadospues es imposible de preveer con certeza.Lo normal es que empiece a mediados deabril y dure hasta mediados de mayo, peropuede variar según como venga el año yadelantarlo o retrasarlo, lo cual haceimposible la caza pues sin canto es imposi-ble acercarse. Por ello suelo mandar a misgrupos a principios de mayo que es unafecha casi segura y, además, por coincidircon un puente, es más fácil para muchosabandonar sus obligaciones para dejarunos días. La cacería suele empezar enplena noche, levantándose en torno a las

tres de la mañana. Desde los alojamientosse hace un trayecto en coche hasta la pro-ximidad del cantadero donde se aparca. Apie se suele andar un rato corto, digamos15 ó 30 minutos, hasta donde los guardassaben que los gallos tienen sus cantaderos.Una vez alcanzada esa zona se pararáncazador y guarda, y apagando la internaen plena noche se empieza a escucharpues éstos suelen iniciar su canto un parde horas antes de que amanezca. Si no seoyen, se anda despacio un par de cientosde metros y se hace otra parada. Si haysonido pronto el guarda lo escuchará y

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Un precioso osopardo europeo.


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Jesús Medranocon dos

urogallos cobrados la

misma mañanaen el coto de

Rodopi.

entonces, querido lector, empezará una delas cacerías más apasionantes y emocio-nantes que habrá hecho en su vida.

El canto del urogallo suele ser el másalto de la zona, tiene por objeto marcar unterritorio del cual se considera amo yseñor, no permitiendo entrar a ningúnmacho en celo. Además, atrae a las hem-bras hasta que las tiene debajo del árbol.En ese momento, que se suele producir alamanecer, baja del árbol y empieza unaespecie de danza alrededor de la gallinaelegida alternando cantos y saltos. Elcanto nupcial se descompone en tresfases: la primera, se conoce por “goteo”que recuerda al sonido de las gotas de

agua cayendo en un bosque. La segundase llama “taponazo” pues suena exacta-mente como el ruido de descorchar unabotella de champán. La última fase, losalemanes y austriacos, auténticos maes-tros de la caza en celo, la denominan“schleifen”, ya que es un sonido querecuerda a un “afilado o chirrido”.Durante esta última fase que no duramás de tres o cuatro segundos después del“taponazo”, el urogallo por inflamación desu laringe, sufre una especie de sorderaque le hace no percibir ningún ruido porfuerte que sea a su alrededor. En esa faseel cazador, de la mano del guarda avanza-rá uno, dos o tres pasos, debiendo parar


absolutamente inmóvil en cuanto el “afi-lado” cese. En esa postura que a veces esincómoda y rarísima tendrá que perma-necer a veces durante algunos minutosmientras se suceden las estrofas delcanto, hasta el siguiente “afilado” que lepermitirá avanzar otros dos o tres metros.En una aproximación que a veces durauna hora, irá acercándose en plena nocheal pájaro encelado. Al principio lo normales que no oiga el canto y sólo lo perciba elacostumbrado oído del guarda, pero cuan-do empiece a oír las estrofas encadenadasestará realizando una de las cacerías másapasionante que hay en el mundo.Después de una hora de segregar cubos deadrenalina probablemente el guarda veaal pájaro cantando en la rama y se loseñale, esos últimos metros son aun másemocionantes, pues estaremos a la vistadel pájaro y cualquier error lo hará volary perderse para siempre en esos inmensosbosques en que vive.

Incluso cuando usted se sitúe debajo delgallo, la cosa no estará hecha, pues no esnada fácil de ver. Buscará un pájaro negrodentro de un árbol negro y de noche. Y sino, que se lo pregunten a mi querido cuña-do el marqués de Espinardo, que aún lle-gando tres noches justo debajo del uroga-

llo, no consiguió tirar. Los astutos guardasbúlgaros han aprendido estos problemas ysuelen entrar a los gallos por la parte bajade las laderas, para que su silueta serecorte contra las primeras luces del ama-necer y la poca luz que den las estrellas.Ha habido cazadores que han estado aveces 15 minutos debajo de un pájaro can-tando, sin poder verlo, a veces en posturasinverosímiles. Pero cuando temblando deemoción usted lo consiga distinguir contrala luz de la primera aurora, rodeado por lainmensidad de un bosque de hayas yrobles, en plena explosión primaveralentenderá por qué digo que es una de lascacerías de increíble belleza. Si controlalos nervios, lleva un arma que conozca ydomine y tiene sangre fría, lo derribará.Entonces tendrá entre sus manos una delas aves más bellas, salvajes y misteriosasde la tierra que ha sobrevivido desde lasépocas glaciares.

Un abrazo y buena caza.

Agradecemos a Armada Expediciones,en Luchana 27, Madrid. 91-298 19 03 y616987583,[email protected] www.armadaexpedicioens.com, la cola-boración y el material gráfico para estearticulo.

Roque Armadajunto con elmagnífico guarda Ilia, deIzvora, nosmuestra uno delos corzoscobrados enesta cacería.

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