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El peligro de una guerra imperialista es real y puede ser inminente Julio Escalona - www.aporrea.org

17/03/15 - www.aporrea.org/tiburon/a204599.html

Sin embargo, podemos evitarlo. Es la hora

de la poltica y la diplomacia para aislarlos

regional e internacionalmente y evitar un

ataque militar por parte de la fuerza

militar de EEUU o de ejrcitos de

mercenarios terroristas manejados por

EEUU

Responsablemente el proceso bolivariano

ha tratado de afectar la seguridad del

capital para acumular ganancias a costa de

los pueblos y de la naturaleza.

Jams contra la seguridad de EEUU como

pueblo o como nacin. Por el contrario,

siempre les hemos tenido profundo

respeto.

Por esa razn hemos sido solidarios y somos

responsables de que miles de

estadounidenses pobres no hayan muerto

durante los fros invierno pues les hemos

suministrado combustible para la

calefaccin.

Es la hora de la unidad en torno al

presidente Maduro

Es la hora de la unidad pues las fuerzas imperiales

han pasado de la desestabilizacin al derrocamiento

inmediato del presidente Maduro

Creer que las crticas y acusaciones pblicas van a

contribuir a reforzar el espritu de resistencia y la

organizacin de ella es un camino equivocado. Por el

contrario, lo que pueden es crear confusin.

Soy solidario con los que han hecho o puedan hacer

alertas y sealamientos para reforzar la resistencia

antiimperialista, pero con el firme espritu de reforzar

el liderazgo del presidente Maduro.

Es un grave error creer que las negociaciones que ha

intentado Unasur han fracasado porque se dirige a

dos cpulas burocrticas, la gubernamental y la de la

oposicin, ambas desligadas del pueblo.

Es tambin un grave error creer que Unasur debe

incorporar a otros actores pues el pueblo ha

madurado y ha decidido realizar cambios profundos.

Por fortuna, creo que Unasur le va prestar ninguna

atencin a esas afirmaciones. Unasur tiene una

percepcin seria de lo que est ocurriendo en

Venezuela y sabe lo que debe hacer.

Pero es muy grave a estas alturas del

desenvolvimiento de la situacin, poner a la oposicin

y al presidente Maduro en la misma balanza en

cuanto a la responsabilidad de que el dilogo se haya

roto una y otra vez, particularmente el ao pasado,

despus de las guarimbas y los crmenes cometidos.

Los dilogos no han prosperado porque nunca el

ncleo dirigente de la oposicin, particularmente el

sector radical, ha tenido inters en l y por eso cuando

el dilogo va tomando fuerza buscan

desesperadamente una excusa para romper las

negociaciones, lo que es muy fcil demostrar. Los

motivos de la oposicin han sido motivos

desestabilizadores, golpistas. Por qu entonces se

buscan razones para acusar de burocrtico el

liderazgo del Presidente Maduro?

Desde que est crisis comenz el Presidente maduro

ha andado en la calle valientemente enfrentando a las

fuerzas imperiales. En los ltimos das lo sigue

haciendo sabiendo que hay un plan para asesinarlo,

pero sabiendo tambin que si alguien no se puede

"enconchar" es l. Si no se quiere ver esto, qu lentes

tenemos puestos?

Hay para m un asunto muy claro, Las fuerzas

imperiales nos han declarado la guerra y han dado

pasos firmes en esa direccin y el pueblo venezolano

est al borde de enfrentar el peligro de una matanza

generalizada. Yo espero y trabajo para que no sea as,

pero puede ocurrir y la Celac, Unasur y otras fuerzas

continentales y mundiales estn percibiendo el

peligro. El presidente Nicols Maduro es el lder de la

resistencia y lo est haciendo bien con el firme y

competente respaldo de la Canciller Delcy Rodrguez.

No hay otra opcin que unirse al liderazgo del

presidente Maduro. Rodearlo firmemente de

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solidaridad y trabajar por la unidad del pueblo,

chavista y no chavista, para enfrentar la agresin

imperial.

Venezuela nunca ha atentado contra la seguridad de

EEUU como nacin o como pueblo

No puedo pensar que el presidente Obama crea

sinceramente que Venezuela amenaza la seguridad de

EEUU. Eso es tan absurdo que cualquier ciudadano

del mundo medianamente informado sabe que eso es

una mentira, que ese es un plan diablico que puede

terminar, como ya ha ocurrido en otras regiones, en

graves violaciones de los derechos humanos y en

violencia criminal.

La orden ejecutiva del presidente Obama es una

maniobra, es una manera de profundizar la guerra

psicolgica y meditica, de someternos a presin

permanente para desgastarnos y atemorizar a la

poblacin. Bien sabemos que militarmente no los

vamos a derrotar. Pero el Presidente Chvez los

derrot polticamente una y otra vez. Es en ese campo

donde hemos planteado la lucha pues polticamente

no tienen razn. La poltica estadounidense siempre

ha estado basada en mentiras y violencia. Tenemos

que trabajar para evitar una ofensiva militar

estadounidense.

Bien se sabe que nunca hemos atentado contra EEUU

como pueblo o como nacin. En muchas

oportunidades hemos sido solidarios con las

desgracias del pueblo estadounidense. Francisco de

Miranda, uno de los fundadores de nuestra patria

venezolana y americana, pele por la independencia

de EEUU con respecto a Inglaterra. El Presidente

Chvez es responsable de que miles de

estadounidenses pobres no hayan muerto por el fro

invernal al suministrarles combustibles para

calefaccin. Esa es una manipulacin para sembrar

odio y justificar de antemano cualquier violencia

contra el gobierno y el pueblo de Venezuela.

El Presidente Chvez y el pueblo venezolano se

levantaron contra el proceso para instaurar el Alca y

destruirnos como pueblos soberanos

Contra la seguridad y los autoproclamados derechos

del capital a sojuzgarnos mientras se enriqueca con la

sangre sudor y lagrimas de los trabajadores

El Presidente Chvez se levant contra el derecho que

el capital se atribuye, de convertirnos a todos

(naturaleza y humanidad), en simples insumos para

la acumulacin de capital, en chatarra, en basura,

despus que el capital, como vampiro nocturno nos

haya chupado la vida y el alma.

No es contra la seguridad de EEUU como pueblo o

como nacin. En ese plano Venezuela no slo ha sido

respetuosa sino solidaria como ya lo seal, al

suministrar combustible para calefaccin a familias

pobres durante el fro invierno.

Es contra la libertad del capital para explotar las

riquezas naturales y a la poblacin latinocaribea, que

Venezuela ha insurgido. Esa es la "amenaza" que

nuestro pas representa: haber obstaculizado el

proceso que se vena adelantando a travs de las

cumbres de las Amricas para destruir la soberana de

los Estados latinocaribeos, imponer nuevas fronteras

mediante el poder de grandes empresas

internacionales, utilizando entre otros instrumentos

los acuerdos de libre comercio.

Nos venan destruyendo como sociedades, como

pueblos soberanos para convertirnos en simples

mercados, es decir, en piezas de los procesos de

acumulacin de capital a escala mundial de los

procesos internacionales de divisin del trabajo

organizados por el capital.

De Estados y pueblos soberanos con una determinada

identidad cultural, histrica, lingstica, religiosa,

territorial, tnica, del ms soberbio mestizaje de todos

los mestizajes que haya conocido la humanidad, en

departamentos integrados a la estructura organizativa

y funcional de grandes corporaciones internacionales,

que carecen de nacionalidad, pues en ltima instancia

el capital no tiene patria.

Tampoco tiene un nexo espiritual, ecolgico, histrico

con el planeta tierra. Para el capital el planeta no es

ms que un gran reservorio de "recursos" naturales y

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de fuerza de trabajo. Por eso tiene planes para

colonizar la luna y otros planetas y en algn

momento, desechar al hermoso planeta tierra, nico

en el sistema planetario solar. Desecharlo cuando

probablemente lo hayan convertido en chatarra, con

los ecosistemas destruidos y probablemente cubierto

de radiacin atmica o no s de qu otras sustancias,

esencias de muerte y holocausto.

El atrevimiento de Venezuela, liderada por el

Presidente Chvez, fue atravesarse al avance de este

proceso que nos conduca inevitablemente a la muerte

y levantar un proyecto de vida, que culmin con el

grito de "Viviremos y venceremos!"

Desde la Cumbre de las Amricas convocada por el

presidente Clinton, realizado en Miami, en 1994,

pasando por la Segunda Cumbre, realizada en

Santiago de Chile en 1997, se vena trabajando

intensamente por la conformacin del rea de Libre

Comercio de las Amricas(Alca). Simultneamente se

iban elaborando los planes de inversin para

apropiarse de nuestras riquezas naturales,

reconfigurando y recolonizando el continente.

Milmillonarias ganancias estaban a la vuelta de la

esquina simultneamente con la prdida de nuestra

soberana, la destruccin de la naturaleza, el

empobrecimiento de nuestra poblacin y la

subordinacin a empresas internacionales y a la

poltica exterior de EEUU. Finalmente, alboreando el

siglo XXI, el patio trasero se conformara en

correspondencia con el sueo americano y los

mandatos del Destino Manifiesto.

Ese proceso deba culminar en la Cumbre de Quebec,

Canad, en 2001. Para esa fecha ya el Presidente de

Venezuela era Hugo Chvez y l comenz a delinear

una nueva geopoltica, la geopoltica de la liberacin.

Esta historia ya es conocida. Yo mismo la he referido

varias veces. Para el 2001, la cena estaba servida

desde haca varios aos. Sin embargo, a partir de

1999, cuando se iba despidiendo el siglo XX y

despuntaba el siglo XXI, apareci un indeseado

comensal, que rompiendo con los modales de la

diplomacia tradicional, haba comenzado a utilizar un

lenguaje no convencional. Era una interrogacin, una

amenaza, un reto y en principio, un recin llegado, un

nefito en el mundo diplomtico. Los carcamanes de

la diplomacia comenzaron a prepararse para darle

lecciones al nuevo.

Pero el nuevo fue el que dio una leccin. Hizo slidos

reparos y el Alca qued con plomo en el ala. Como

hacen los diplomticos que se respetan, no se

conforman con hacer reparos, sino que salen a

convertir esos reparos en accin subversiva.

Sali hacia La Habana a reunirse con Fidel Castro y

fundar la Alba. El captulo siguiente fue la derrota del

Alca en la Cumbre de las Amricas de Mar del Plata,

Argentina 2005.

Una lluvia de integracin y solidaridad fue cayendo

sobre nuestra regin. Fueron naciendo Unasur,

Petrocaribe, la Aspa, el asa. Fue levantando un nuevo

vuelo la Cooperacin Sur-Sur, renovando y

reforzando sus principios y como una llamarada las

luces de la integracin y la unin fueron iluminando

el mundo y de nuevo una vibracin de esperanza

recorri campos y ciudades removiendo el polvo que

ocultaba las viejas palabras de redencin y de futuro.

Los pobres del mundo volvieron a gritar con las voces

seculares de la rebelin. En Nueva York, en Pars, en

Madrid En Trpoli, el Cairo por toda frica, Asia

y por supuesto en Amrica Latina y el Caribe. La

bandera de Venezuela y fotos con el rostro del

Presidente Chvez se levantaron en las plazas del

mundo que se declararon en rebelin.

Por eso cuando el Presidente Chvez muri, la ONU

coloc a media asta las banderas de los 193 Estados

miembros y la Asamblea General realiz una reunin

especial para conmemorarlo, presidida por el

Presidente de la Asamblea General y el Secretario

General de la ONU y la participacin de todos los

grupos regionales (Asia, frica, Amrica Latina y el

Caribe (Grulac), Caricom, Europa Occidental, Europa

del Este), G77 y China, Movimiento de Pases no

Alineados

El patio trasero se rebel y millones y millones de

dlares se quedaron con las ganas, la democracia

representativa comenz a experimentar mareos, la

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democracia participativa y protagnica fue

adquiriendo carta de identidad y el grito de un

mundo mejor es posible volvi a resonar con fuerza.

El Presidente Chvez le puso nombre, socialismo del

siglo XXI y en eso andamos

Inevitablemente, el imperio plane inmediatamente la

revancha y la ha ido tejiendo y tejiendo y considera

que ha llegado el momento de ajustar cuentas con la

memoria del Presidente Chvez y con la Repblica

Bolivariana de Venezuela. Si, hemos amenazado y

somos una amenaza para la seguridad del capital, no

para EEUU y su pueblo. Por eso el capital desea

hacernos pedazos. Ciertamente, un grave peligro se

cierne sobre Venezuela y el continente latinocaribeo,

pues si Venezuela cae, dir parafraseando a Csar

Vallejo, si Venezuela cae, "digo es un decir, nios del

mundo como vais a dejar de nacer"

Pero Venezuela no caer. El presidente Obama ha

hablado y en nombre de la cpula militar financiera

que gobierna al mundo, y violando la Carta de

Naciones Unidas y toda la legislacin internacional

que regula las relaciones entre los Estados soberanos,

nos ha amenazado con la guerra, con la destruccin.

Pero con la solidaridad de los pueblos del mundo y

de los gobiernos democrticos, los derrotaremos

polticamente e impediremos que puedan apretar el

gatillo.

El Presidente Chvez revirti la relacin de fuerzas

en el control de la renta petrolera

Antes del Presidente Chvez la renta petrolera era, de

hecho, controlada por el capital internacional.

Especialmente durante el proceso de

internacionalizacin del petrleo cuando la directiva

de PDVSA forz la disminucin del impuesto sobre

las ganancias de las transnacionales petroleras y

disminuy a casi nada el cobro de la regala y de esa

manera se intensific la "siembra del petrleo" en el

mercado internacional.

El plan era multiplicar ilimitadamente la produccin

de petrleo, bajar los precios, convertir a PDVSA en

una filial de las corporaciones petroleras

internacionales y romper con la OPEP traicionando la

memoria de Prez Alfonzo.

El Presidente Chvez con poco ms de un ao en el

gobierno fue revirtiendo este proceso pues subi los

impuestos, subi la regala, detuvo el desplome de los

precios y convoc en Caracas, en el ao 2000, la

Segunda Cumbre de la OPEP, que march en

direccin contraria a los planes de la directiva

transnacionalizada de PDVSA. El capital internacional

puso el grito en el cielo y profundiz la conspiracin

para derrocar al Presidente Chvez.

As se dio el golpe de Estado de 2002, el paro

petrolero de 2002-2003 y as hasta hoy, hasta la orden

ejecutiva del presidente Obama y el peligro de una

agresin militar inmediata contra Venezuela.

Tenan la ilusin de que iban a cayapear al presidente

Maduro, pero este se crece cada da ms y ha sabido

derrotar polticamente las conspiraciones de la

oposicin interna financiadas y asesoradas por EEUU.

EEUU desesperado por la incompetencia, las

divisiones y fragmentaciones de sus representantes

internos, ha decidido tomar la direccin y la

implementacin de las iniciativas para derrocar al

presidente Maduro. Por eso el decreto imperial

dictado por Obama.

Al fracaso experimentado en relacin al Alca, a las

prdidas milmillonarias que esto les ocasion, la

imposibilidad de controlar totalmente a PDVSA y las

dificultades por tanto para apropiarse de la Faja del

Orinoco, la reserva de petrleo ms grande del

mundo, los ha llevado a precipitar una operacin de

punto final contra Venezuela. Pero no es seguro que

lo logren.

Como expliqu en mi trabajo anterior, Golpe, colas y

guerras imperiales, no quieren esperar hasta las

prximas elecciones parlamentarias pues siempre hay

la posibilidad de que el chavismo las pueda ganar.

Venezuela ha sido clave para la presencia de China

y Rusia en la regin

Como se sabe la geopoltica de Chvez est fundada

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entre otros principios en la pluripolaridad y el

multicentrismo, necesarios para enfrentar la

hegemona estadounidense en la regin.

Los resultados han sido evidentes y ello afecta los

intereses de EEUU precisamente en lo que ha

considerado su patio trasero. Sobre todo, EEUU ve

seriamente comprometida su ambicin de apoderarse

de la Faja del Orinoco pues China y Rusia han

firmado importantes convenios con Venezuela donde

han ido adquiriendo importantes posibilidades para

hacer negocios en la Faja y en general en Venezuela.

Tambin Rusia ha llegado a la regin apoyndose en

la alianza con Venezuela. Esto obviamente ha

exacerbado la frustracin de EEUU. El Presidente

Chvez se fue atravesando en sus planes estratgicos

de dominacin imperial y de obtencin de ganancias

en la regin latinocaribea. Parece mucho para EEUU

y las posibilidades de sacar al proceso bolivariano del

poder se van alejando mediante mtodos

conspirativos ordinarios.

El decreto de guerra lanzado por Obama

Entonces, el decreto de Obama, sino ocultara tantos

proyectos de muerte, se podra decir que es una

fanfarronera. Pero no, es un decreto de

guerra, coherente con los decretos y leyes que el

gobierno de EEUU en nombre del capital

internacional, aprob en la poca del presidente

George W. Bush.

Como lo he sostenido en otros escritos, despus del

episodio de las torres gemelas el 11 de septiembre de

2001, culmina el golpe de Estado contra los derechos

humanos, la democracia y la paz, que la cpula

militar-financiera vena desarrollando.

Es un decreto de guerra contra los Estados soberanos

para convertirlos en neocolonias absolutamente

subordinados; contra los procesos de integracin

fundados en la soberana solidaria (que consiste en

que la soberana se legitima tambin mediante el

reconocimiento del otro); contra el empoderamiento

de los pueblos como sujetos de la transformacin

revolucionaria de la sociedad, tratando de

convertirlos en simples sujetos econmicos capaces

tomar decisiones racionales. Basados en el egosmo

tomarn opciones convenientes para ellos como

individuos y para toda la sociedad cuando la

sociedad no es ms que un mercado al servicio de la

generacin de ganancias, enfrentndose a los

proyectos societarios que persiguen la conservacin

de la naturaleza y la fuerza de trabajo, para construir

una sociedad nueva gobernada por el inters comn,

que se va liberando de la explotacin y la esclavitud

generadas por el capital; enfrentados a la democracia

participativa y protagnica basada en el poder del

pueblo, en la soberana popular que es indelegable,

como lo establece la constitucin bolivariana; en la

independencia del espritu, la mente y el cuerpo como

visin integral del ser humano, que se reconoce

tambin como ser natural, parte del conjunto de los

ecosistemas, por tanto, obligado a sostener los

principios que rigen a la naturaleza y la existencia

misma del planeta tierra.

Por ese proceso y porque en medio del ensayo y error,

no hemos dejado de perseverar en el impulso de ese

proyecto, somos, sin duda, una amenaza para el

capital, para la cpula militar-financiera que

gobierna, precisamente, en nombre del capital. Esa

cpula nos acusa y le ha ordenado al presidente

Obama que nos destruya.

Con honor y orgullo aceptamos nuestra

responsabilidad, pues ella ha implicado que miles y

miles de seres humanos, sobre todo los ms

vulnerables (nias, nios, mujeres, ancianas y

ancianos), han salido de la pobreza, se han

alfabetizado, tienen acceso a la salud, a la educacin,

tienen vivienda, pero muy particularmente han

adquirido conciencia nacional y espiritual. Es decir,

van dejando de ser simples individuos sujetos del

mercado y se van convirtiendo en seres humanos

como integracin de espritu, mente, cuerpo y

naturaleza, hermanados con todas las especies, el

planeta y los dems seres humanos, de todos los

colores y nacionalidades, de todas las religiones, de

todas las etnias que habitan el planeta.

En ese orden de ideas, el decreto de guerra califica a

Venezuela como "Amenaza a la seguridad nacional de

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los Estados Unidos" y declara "una emergencia

nacional con respecto a la amenaza inusual y

extraordinaria a la seguridad nacional y la poltica

exterior de Estados Unidos que supone la situacin en

Venezuela".

Ahora bien, nadie en su sano juicio puede dreer que

un pas de 30 millones de habitantes, que carece de

cohetes intercontinentales, de una flota capaz de

atacar a EEUU, de un PIB muy pequeo en relacin al

de EEUU, con medios de comunicacin limitados, que

no produce armas de destruccin masaiva, etc. pueda

ser una amenaza con respecto a una superpotencia

como EEUU. Que pueda provocar que esta

superpotencia se declare en emergencia. Esta es una

manera de manipular al pueblo de EEUU, de generar

odio hacia nosotros, de preparar ciertos sectores de

opinin para agredir militarmente a la Repblica

Bolivariana de Venezuela. De satisfacer a los sectores

fascistas de EEUU y del mundo, que cada vez son

ms numerosos y con gran poder militar, econmico y

meditico.

En qu fase de la guerra estamos

Como se sabe estamos enfrentados a una guerra no

convencional en tiempos en los que el campo de

batalla ha experimentado modificaciones sustanciales.

El campo de batalla va mucho ms all del espacio

geogrfico en el que los soldados se enfrentan.

Estamos enfrentados a un campo de batalla complejo

que el imperio en la batalla concreta con Venezuela,

est priorizando los siguientes aspectos:

1) Le est dando la mayor relevancia a la batalla

poltica. Como he sostenido en otros escritos el

principio formulado por Clausewitz de que la guerra

es la continuacin de la poltica por otros medios, se

ha transformado en la poltica es la continuacin de la

guerra por otros medios.

La decisin de ir a la guerra est tomada, pero el

imperio impulsa la guerra en el terreno

especficamente militar cuando ha ganado la batalla

poltica. Por tanto, si nos derrota polticamente, habr

guerra. Si nosotros ganamos la batalla poltica

triunfar la paz. En consecuencia si quieres la paz el

camino no es prepararse para la guerra. Como dijo

Gandhi la paz es el camino, es decir, la paz es la

poltica, es ganar la batalla poltica para quitarle toda

justificacin a la guerra.

En eso estn el Presidente Nicols Maduro y la

Canciller Delcy Rodrguez. Lo menos que podemos

decir es que la batalla poltica est empatada, pero

Venezuela pacientemente la est ganando. Ha habido

manifestaciones de solidaridad desde movimientos

sociales y organizaciones polticas desde los ms

diversos lugares del mundo, pero tambin de

organismos multilaterales muy importantes.Estamos

en condiciones para ganar la batalla poltica y evitar

la guerra.

Un elemento clave es que el imperio no tiene

razn. Desde todos los puntos de vista, jurdico,

poltico, diplomtico, el imperio est procediendo de

manera arbitraria. Es evidente que dada la

desproporcin de la medida tomada por el presidente

Obama, declarndonos enemigos de la seguridad de

EEUU y llamando a una emergencia nacional,

Venezuela es realmente una vctima. Venezuela es el

dbil. Es David contra Goliat.Las vctimas tienen todo

el derecho a defenderse y ser defendidas por la

humanidad que cree y respeta la paz

2) La demolicin psicolgica y moral de la poblacin

orientada a:

matar el espritu de resistencia sembrando

dudas y confusin

Sembrar miedo y terror lo que sugiere que

asesinatos como el de Robert Serra se

pueden multiplicar, pero no slo contra

dirigentes chavistas sino tambin opositores;

lo mismo puede ocurrir contra grupos y

movimientos sociales, el objetivo es crear

desesperacin, caos, prdida de la esperanza

y la fe.

3) Agudizacin de la guerra econmica mediante la

intensificacin de escasez inducida, la especulacin, el

contrabando, la inflacin y por ende, fortalecimiento

de las colas y todos los malestares y descontentos que

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ellas generan.

Como lo he reiterado, la derrota de las colas que

pasa por la solucin de los factores que las generan,

es una de las claves de la victoria. Ellas son escuelas

de capitalismo, de promocin del individualismo y de

los ms bajos instintos humanos.

Adems, simbolizan que los saboteadores

capitalistas que estn controlando canales de

distribucin de bienes esenciales, la buhonera, el

contrabando y la especulacin con el dlar estn

ganando.Esto nos afecta desde el punto de vista

poltico, pero sobre todo desde el punto de visto

psicolgico.

4) Sobre la base de la demolicin psicolgica y

moral, y la intensificacin de la guerra econmica, ir

sembrando la "conviccin" de que para garantizar la

paz es necesario salir del gobierno de Maduro, bien

mediante la renuncia, el derrocamiento, el asesinato o

secuestro del presidente y otros miembros del alto

gobierno. Incluso, el asesinato (y tambin el secuestro)

puede ser ejecutado por grupos de "falsa bandera").

5) Ese proceso de "convencimiento" estara

acompaado de razzias dirigidas al asesinar a

dirigentes comunales, lderes locales chavistas de tal

manera de debilitar la organizacin de la resistencia y

pasar a fases de intervencin ms intensa con el uso,

si fuere estrictamente necesario, de fuerzas militares

estadounidenses, en principio, no terrestres.

5) Si el gobierno y el pueblo bolivariano logran

resistir una embestida tan peligrosa, las fuerzas

imperiales pueden decidir actuar de manera directa,

probablemente con fuerzas militares no terrestres y

no slo a travs de ejrcitos privados integrados por

narcoparamilitares.

6) El bloqueo naval puede ser la opcin de

intervencin militar ms inmediata. Este ofrece

varias ventajas:

Se puede hacer desde aguas internacionales,

es decir, sin tocar el territorio venezolano.

Puede impedir las exportaciones y las

importaciones de Venezuela, lo que tendra

graves efectos tales como:

1. Cortar las exportaciones de petrleo

venezolano puede ser un severo golpe a la

economa de Venezuela, pues esa es la

principal fuente de ingresos y de divisas de

que el pas dispone.

2. El corte de las importaciones puede crear un

desabastecimiento extremo, que puede

llevar hasta una crisis humanitaria por la

escasez de medicinas e instrumental mdico

y quirrgico.

3. Las fuerzas imperiales estaran confiando en

que esa doble tenaza de impedir

importaciones y exportaciones y sus efectos

polticos, econmicos y sociales, ms los

desrdenes y desestabilizacin generadas por

las fuerzas narcoparamilitares, puedan

provocar un derrumbe del gobierno del

Presidente maduro en medio de un profundo

caos nacional.

Voceros del gobierno de EEUU han declarado que no

dejarn de comprar petrleo venezolano. Entonces

estas declaraciones pueden ser de tipo distraccionista

o tambin pueden expresar que EEUU est sopesando

las serias complicaciones que una medida como esta

implica. Ver: http://www.eluniversal.com/nacional-y-

politica/150313/eeuu-descarta-suspender-la-compra-

de-crudo-venezolano

Las exportaciones de petrleo de Venezuela hacia

EEUU pueden ser suplidos por petrleo Iraqu y de

Siria que est controlado por el Ejrcito Islmico o por

Arabia Saudita.

7) Pero el bloqueo naval tiene algunas dificultades

para EEUU. Veamos:

Es sin duda un acto de guerra sin que haya

mediado justificacin alguna, por tanto, es

definidamente ilegal, en circunstancias en

las que en la confrontacin con Venezuela

EEUU no ha ganado la batalla poltica y no es

fcil que la gane. Ello puede provocar una

vasta condena continental y mundial, lo que

facilitara que Venezuela gane la batalla

poltica y que EEUU pueda verse fuertemente

aislado internacionalmente.

EEUU estara realizando un ilegal acto de

http://www.eluniversal.com/nacional-y-politica/150313/eeuu-descarta-suspender-la-compra-de-crudo-venezolanohttp://www.eluniversal.com/nacional-y-politica/150313/eeuu-descarta-suspender-la-compra-de-crudo-venezolanohttp://www.eluniversal.com/nacional-y-politica/150313/eeuu-descarta-suspender-la-compra-de-crudo-venezolano

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guerra afectando a terceros pases,

especialmente a todos los que Venezuela le

vende petrleo y a los que le compra un

amplio nmero de bienes y servicios.

Todos ellos pueden actuar legalmente

contra EEUU en instancias internacionales

especficas. Pero adems, estn autorizados

por las leyes internacionales, a emprender

acciones recprocas contra EEUU y otras que

son meramente hipotticas.

Entre esos pases estn importantes actores

internacionales como China, Rusia, Brasil y

organizaciones multilaterales como la Alba,

Unasur, Celac, Petrocaribe, Caricom...

Esta EEUU dispuesto a iniciar una guerra

comercial?

O EEUU est dispuesto a dar un golpe

fulminante contra Venezuela y su gobierno

que en pocos das haya liquidado al

gobierno y a la resistencia? En esa caso,

mientras se despliega la solidaridad

internacional, Venezuela puede estar

reducida a cenizas. Sin duda, este es el

mtodo favorito de la cpula militar-

financiera que gobierna al mundo, que es la

que est detrs de la decisin tomada por

Obama.

Sin embargo, como lo confirman los casos

de Yugoslavia, Afganistn, Iraq, Libia, Siria,

esa cpula militar-financiera ha buscado

una justificacin poltica previa y la

formacin de una alianza donde han sido

factores importantes pases de la regin a la

que pertenecen los pases a ser atacados

militarmente. Es el caso de la Liga rabe,

factor clave en las acciones militares

emprendidas por el pentgono-Otan en frica

y el Medio Oriente.

La justificacin poltica viene siendo construida con

las acusaciones de violaciones a los derechos

humanos y de corrupcin generalizada. Hay que

observar que curso toman, Libia fue atacada

precisamente con la excusa de violaciones a los

derechos humanos.

No tengo las respuestas a las interrogantes que

acabo de plantear. Lo que creo saber es que los

peligros existen y obligan a que la movilizacin

poltica debe incrementarse muy rpidamente, tal

como lo estn haciendo el presidente Nicols Maduro

y la canciller Delcy Rodrguez.

8) Las complicaciones que acabo de sealar quizs

expliquen por qu EEUU no ha puesto ms cartas

sobre la mesa distintas al decreto inicial que lanz

contra Venezuela. Sobre todo porque la movilizacin

poltica y diplomtica de Venezuela ha sido rpida y

efectiva. Pueden vivir pensando. Entre las opciones

que tienen est la profundizacin de la

destabilizacin, el caos y acciones terroristas para

precipitar el derrocamiento del Presidente Maduro o

un determinado tipo de accin militar que an no est

claramente definida.

Sea cual sea el camino, EEUU va a actuar, va a

profundizar la ofensiva contra Venezuela para

derrocar al Presidente Maduro.

9) Vale la pena as como ejercicio reflexionar un poco

acerca del Por qu en un primer momento han

optado, hasta ahora, por no utilizar fuerzas militares

estadounidenses en el terreno donde se luche y se

mate?

9) Por razones eminentemente polticas pues

Venezuela ha consolidado importantes alianzas

continentales y mundiales, que las fuerzas imperiales

no han logrado romper. Entonces, las eventuales

agresiosiones en el terreno estaran a cargo de

ejrcitos privados integrados por narcoparamilitares,

asesinos profesionales expertos en el trabajo sucio:

asesinatos, torturas, violaciones, incendios de

viviendas... Hasta ahora las acciones de los

mercenarios han estado limitadas Cundo recibirn

la orden de lanzarse a fondo contra el gobierno y el

pueblo de Venezuela? Qu es lo que esperan?

10) Difcilmente EEUU podra en la regin

latinocaribea realizar el trabajo sucio con sus propias

fuerzas militares sin que un fuerte movimiento de

protesta se levante. Particularmente, Unasur podra

poner en prctica, incluso, acciones de defensa

colectiva.

11) Los ejrcitos privados han acumulado una larga

experiencia en frica, en Medio Oriente, en

Colombia... y coaligados con los medios de

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comunicacin al servicio de estas masacres y expertos

en cubrir la realidad con realidades virtuales, avanzan

de manera siniestra usando guiones que convierten

masacres horrendas, en lamentables resultados de

enfrentamientos entre grupos opuestos de una

comunidad, una tribu, o de bandas rivales

disputndose negocios ilcitos, en fin, la CIA y los

laboratorios de guerra sucia, tienen ya guiones,

videos y todas las imgenes necesarias, para ocultar

las masacres convirtindolas en tragedias provocadas

por enfrentamientos entre grupos rivales

disputndose un determinado botn. O acciones de

grupos "fundamentalistas" de la orientacin religiosa

que a la CIA le parezca segn las circunstancias

concretas. Estas maniobras se desbarataran si los

agresores portan uniforme que los identifique con

EEUU.

Los ejrcitos privados tambin pueden emprender

operaciones denominadas de "falsa bandera", pues

pueden ponerse cualquier uniforme o cualquier

bandera de la coleccin que tienen o la CIA les

suministre.

Los comandos de mercenarios, que aparecen,

desaparecen, mutan reaparecen en lugares

imprevistos, son los actores perfectos para ejecutar las

ms diversas fechoras y permanecer en el anonimato.

12) No sera tan fcil para destacamentos regulares

del ejrcito de EEUU debidamente identificados,

desplegar acciones criminales en el continente

latinocaribeo, diferente a las lejanas zonas de frica

o Medio Oriente donde organizaciones regionales

como la Liga rabe se han convertido en aliados de

las fuerzas imperiales y ya han sido cmplices de las

matanzas en Iraq, Libia, Siria, para citar slo algunos

casos.

13) En Venezuela han infiltrado comandos de

mercenarios que estn distribuidos por el pas en

barrios y pueblos y han ido creando bases de apoyo y

estimulan secuestros, sicariato, enfrentamientos de

pandillas, microtrfico de drogas que les facilita la

formacin de redes criminales.

14) Cundo incrementarn la escala de sus

operaciones, cuando desplegarn una ofensiva

generalizada? Lo difcil es pensar que despus del

decreto de Obama puedan mantenerse pasivos. Sin

embargo, hay un camino para detener una ofensiva

general de mercenarios o peor an, de fuerzas

regulares estadounidense. Ese camino puede implicar

las siguientes acciones:

Intensificar la ofensiva poltica y

diplomtica para aislarlos

internacionalmente e impedir a como d

lugar, que puedan emprender una ofensiva

generalizada con bombardeos y otros

operaciones de gran escala orientadas a

aniquilar al gobierno, a las organizaciones y

en general a la poblacin, a los servicios de

salud, agua, electricidad, etc. Igualmente,

hay que garantizar que no se apoderen de los

pozos petroleros. En el plano poltico y

diplomtico el Presidente Maduro y la

Canciller Delcy Rodrguez lo estn haciendo

muy bien.

Mediante la inteligencia del Estado

asociada con la inteligencia social, quitarles

la iniciativa operativa a los comandos

terroristas y estar siempre delante de ellos

para frustrar las acciones orientadas a

fomentar desrdenes y en particular, las

acciones terroristas.

Garantizar la preservacin de la seguridad

de las organizaciones y sus lderes. El caso

de Robert Serra no se puede repetir.

Igualmente vale para el presidente Maduro,

los dirigentes fundamentales y todos los

cuadros y militantes. Tenemos que evitar las

bajas hasta donde sea posible.

Mantener movilizada a la poblacin, a las

organizaciones populares. Los puntos

crticos de las ciudades y pueblos deben estar

ocupados por las organizaciones populares.

Estas movilizaciones deben estar

acompaadas de iniciativas

socioproductivas vinculadas a la propiedad y

produccin social. Una de las maneras de

derrotar la agresin, incluso de sacarle

provecho, es desarrollando la organizacin

del pueblo, la formacin y fortalecimiento de

las comunas y las empresas de produccin y

propiedad social.

He hecho un esfuerzo para ver el proceso global de

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esta lucha y de diversas variantes, pero hace falta

mucha informacin para consolidar alternativas de

paz, que son las opciones que tenemos para evitar una

hecatombe.

http://www.aporrea.org/imprime/a204599.html

recopilado por: elcarrion1@gmail.com