el concepto de territorio en el área funcional de miranda de ebro
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Índice.
El área funcional de Miranda de Ebro. ............................................................................ 3
La delimitación del territorio en Miranda de Ebro. ........................................................ 5
Los límites del territorio. ........................................................................................... 5
La noción de “efecto frontera” en Miranda de Ebro. ............................................. 6
El efecto de situación nodal. ..................................................................................... 8
Bibliografía ....................................................................................................................... 9
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EL ÁREA FUNCIONAL DE MIRANDA DE EBRO.
Para hablar de “Área funcional” debemos remitirnos a la ley de ordenación del
territorio en Castilla y León aprobada, en 1998, con dicho nombre. Entre las directrices
que se establecieron, se determinó la definición de un “ámbito geográfico funcional”.
El objetivo de esta determinación, era instaurar una serie de ámbitos que sirvieran de
base para la planificación de servicios públicos y para la ordenación del territorio a
nivel subregional; cada ámbito albergaría un conjunto de municipios, entre los cuales
se encontraría la cabecera o centro de planificación y organización. Esta cabecera se
correspondería, generalmente, con el municipio de mayor población e
infraestructuras.
Se implantaron un total de 47 en la comunidad, y se les conoce como “Áreas
funcionales”.
La ciudad de Miranda de Ebro, compone una de las 12 mayores ciudades de
Castilla y León con 37020 habitantes1, lo que constituye un nodo urbano en la
comunidad autónoma. Su población y densidad, por tanto, puede corresponderse con
la de una cabecera en un área funcional. A su vez, nace en la ciudad un propósito
territorial por crear condiciones que permitan mejorar y potenciar sus ventajas
locacionales y eliminar las insuficiencias o problemas que supongan el
empobrecimiento y pérdida de competitividad frente a los dinámicos espacios de la
Rioja o la provincia de Álava. Este hecho, se traduce en un intento por asignar
territorio a la misma, conformándose así, una nueva Área funcional que lleva su
nombre.
Parece evidente la importancia logística de este municipio para que se le atribuyese tal
territorio , es decir, se conforme este área funcional pues, por su posición periférica
dentro de la comunidad, las dificultades montañosas del ámbito y el trazado de las vías
de comunicación, la ciudad de Miranda de Ebro sería incapaz de organizar un territorio
a su alrededor. Las condiciones citadas entorpecen la centralización de los servicios
sanitarios, educativos, administrativos y comerciales de una cabecera propia, en dicha
ciudad.
Realmente, el área funcional de Miranda de Ebro constituye un enclave excéntrico al
espacio meseteño que se inserta en el corredor del Ebro, su funcionamiento territorial
está ligado a otras dos comunidades autónomas: La Rioja y el País Vasco. Alberga 17
municipios: Altable, Ameyugo, Bozoó, Bugedo, Condado de Treviño, Encío, Frías,
Jurisdicción de San Zadornil, Miranda de Ebro, Pancorbo, Puebla de Arganzón, Santa
Gadea del Cid, Santa Mª Rivarredonda, Valle de Tobalina, Partido de la Sierra en
Tobalina, Valluércanes y Villanueva de Teba, que se organizan en 3 unidades o sectores
1 Fuente: INE. Padrón municipal 2004.
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correspondientes a las zonas más fértiles del lugar, donde se concentran la población
existente y las principales actividades, exceptuando la Jurisdicción de San Zadornil que
se sitúa segregada al norte y el Condado de Treviño que se encuentra rodeado por la
provincia alavesa (Fig.1). Estos espacios se encuentran prácticamente aislados entre sí
y se comunican únicamente por delgadas líneas viarios. Los municipios de cada uno de
estos tres sectores se atribuyen a diferentes circunscripciones según funciones
(administración, sistema educativo,..). Y es que, Miranda de Ebro no ejerce su papel
organizativo o de centralización de servicios, más allá que en los municipios más
cercanos a ella.
En resumen, se producen dos realidades muy diferentes en esta área, por un lado, el
nodo urbano e industrial de la ciudad de Miranda de Ebro y por otro, una serie de
municipios, con población reducida y carácter rural cuyo vínculo poco tiene que ver
con la intencionalidad y la formación teórica de un área funcional.
Fig1. El área funcional de Miranda de Ebro. Elaboración propia.
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LA DELIMITACIÓN DEL TERRITORIO EN MIRANDA DE EBRO.
LOS LÍMITES DEL TERRITORIO.
El medio físico en el ámbito de Miranda de Ebro es una combinación de áreas
montañosas y unidades deprimidas. Las dos grandes barreras orográficas son la Sierra
de Arcena al norte y los Montes Obarenes al sur, que se unen en un punto formando
así una gran pared vertical. Los espacios que independiza se corresponden con 3
depresiones: el Valle de Tobalina, la depresión de Miranda de Ebro y la Bureba,
correspondientes estas, con los tres sectores de asentamiento que mencionábamos. La
Sierra de Arcena también delimita por el sur, a la Jurisdicción de San Zadornil,
municipio limitado al norte por el monte Santiago y que aparece independiente al
norte del ámbito; y por otro lado, el Condado de Treviño, condicionado por los Montes
de Vitoria y la Sierra de Portilla.
El relieve actúa, por tanto, como factor principal en la estructura del área funcional de
Miranda de Ebro, y nos permite matizar entre “límites o barreras interiores” y “límites
o bordes exteriores”. Pues los límites orográficos aíslan el área funcional de Castilla y
León y también de otras comunidades, País Vasco y La Rioja, es decir, son bordes
exteriores para el ámbito; pero también, estos límites establecen barreras interiores,
pudiendo entenderse el área de Miranda de Ebro como suma de 3 fragmentos
territoriales.
Sin embargo, las condiciones físicas no coaccionan en su totalidad la idea de territorio,
permiten diversas posibilidades para que el hombre actúe e intervenga sobre él, es
decir que, la topografía sirve de base al territorio pero no lo define, si no que le ofrece
una serie de posibilidades de actuación. Las barreras físicas de las que hablábamos
pueden ser superadas parcialmente por la intervención del hombre, lo que nos indica
que la delimitación del territorio atiende también a otras cuestiones. Es el caso de las
redes infraestructurales, las cuales suponen un elemento fundamental en la
vertebración de nuestro territorio y este, a su vez, le impone una serie de condiciones
o posibilidades de actuación que antes mencionábamos.
En el caso de Miranda de Ebro, se establece una estrecha relación entre el medio físico
y las infraestructuras de transporte. En este ámbito, se hacen muy importantes los
viarios de segundo y tercer orden para comunicar los municipios del área ya que las
barreras orográficas les aíslan y les desconectan de las grandes e importantes
infraestructuras viarias que pasan por el ámbito. Estas carreteras principales y
secundarias que conectan los núcleos han permitido establecer un sistema de
relaciones internas y externas al área. Las relaciones externas se producen a través de
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la N-1, que constituye el eje básico de comunicación del ámbito. Las relaciones
internas se establecen mediante las carreteras secundarias, entre las que destacan los
accesos a la ciudad de Miranda de Ebro, la carretera BU-530 que comunica Miranda de
Ebro con el Valle de Tobalina y el eje de carreteras que enlaza el Condado de Treviño
con la cabecera. Por su parte, la red ferroviaria cuenta con dos líneas fundamentales
que atraviesan el área funcional, como espacio de inevitable paso, generándose aquí
un punto de intersección entre ambas líneas, la que enlaza Madrid con Irún, y la que
une Bilbao con Zaragoza.
Fig2. Los límites físicos en Miranda de
Ebro.
LA NOCIÓN DE “EFECTO FRONTERA” EN MIRANDA DE EBRO.
El efecto frontera es asimilado comúnmente como una consecuencia negativa de la
delimitación de un territorio, y por tanto, de las causas que producen esta
delimitación. Hemos visto que la delimitación de Miranda de Ebro se debe a las
condiciones del terreno, a su situación entre comunidades y en último término a la red
infraestructural. Por ello, desglosaremos los efectos perjudiciales que estas
condiciones producen.
Al hablar de límites físicos veíamos como Miranda de Ebro se fragmentaba en 3
sectores a causa de las barreras orográficas, por tanto, ¿cómo puede establecerse un
buen funcionamiento centralizado? No es posible, los municipios del ámbito no
establecen apenas relación con su cabecera, que limita sus funciones a los
asentamientos más cercanos. Las montañas aíslan a algunos de los municipios, cuya
accesibilidad queda reducida a estrechas vías de comunicación. Por tanto, las
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relaciones y el funcionamiento interno del ámbito se ve muy perjudicado, podemos
decir incluso, que impedido por las condiciones orográficas.
A mayores, Miranda de Ebro se sitúa en la periferia de la provincia de Burgos, y a su
vez en la periferia de Castilla y león, por lo que establece relaciones fronterizas con
otras comunidades autónomas: el País Vasco y La Rioja. Es por tanto, susceptible de un
“efecto frontera”, aunque debemos aclarar, en este caso, que al referirnos a efecto
frontera nos referimos más bien a un efecto de límite, esto toma un matiz diferente
pues brevemente entendemos por frontera, la división de dos territorios con grandes
diferencias, como pueden ser las diferencias entre dos países, pero aquí, se trata de
fronteras autonómicas, es decir, se produce un hinterland reducido en la zona, por lo
que hablaremos mejor de un “efecto de borde”.
Esta situación periférica respecto de Castilla y León junto su carácter industrial en un
entorno rural, han condicionado su funcionamiento, que está más dirigido a las
comunidades adyacentes que a la provincia de Burgos, por tanto, las relaciones entre
este ámbito y el territorio burgalés son muy reducidas. Podemos definir a Miranda de
Ebro como un “enclave” sin apenas relación positiva con su territorio. Sin embargo,
está muy relacionado con la provincia alavesa y también, aunque en menor medida,
con la Rioja. La enredada relación con el País Vasco genera problemas de distinto
índole, la provincia alavesa constituye una comunidad foral, en la que el valor de los
impuestos es inferior a los de Miranda de Ebro, por lo que interesa invertir más en la
primera, sin embargo, y como ya veremos, Miranda de Ebro goza de una situación
estratégica a nivel mundial por lo que en este borde intercomunitario se produce un
fenómeno de localización tanto industrial como urbanístico. La industria alavesa que se
sitúa limitando con Miranda de Ebro nace y se mantiene gracias a las economías de
posición y escala de esta proximidad al ámbito, pero carece de una planificación
territorial que beneficie a toda la zona, y está generando un gran impacto ambiental
en Miranda de Ebro pues no existe apenas control sobre los factores contaminantes.
También, el desarrollo urbanístico que se produce en Álava, aprovechando su cercanía
al área funcional, genera desequilibrios en la relación entre costes y beneficios.
En cuanto a su posición en la península, el ámbito de Miranda de Ebro constituye un
territorio de tránsito, es decir, parte de sus infraestructuras responden a las
necesidades de comunicación exteriores. Este hecho puede provocar impactos
negativos de carácter urbanístico, de carácter ambiental e incluso de carácter social:
Problemas urbanísticos. Las infraestructuras de transporte han producido
barreras entre distintos núcleos de población, barreras en las que puede
producirse una degradación urbanística, o bien, una baja calidad edificatoria, es
el caso de la ciudad de Miranda de Ebro, cuyo desarrollo urbanístico ha sido
condicionado por la densidad de redes ferroviarias.
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Problemas ambientales. La creación de estas redes de comunicación es
perjudicial por la ocupación del suelo y porque se establecen flujos de
contaminación por agua, tierra o aire.
Problemas socioeconómicos. Los límites que se establecen debilitan el
desarrollo económico regional pues son ámbitos en los que no se suele invertir
económicamente y que alejan las posibilidades de establecer relaciones
sociales.
EL EFECTO DE SITUACIÓN NODAL.
La delimitación de Miranda de Ebro presenta, sí, aspectos negativos para su
funcionamiento. Sin embargo, su importante ubicación, que está acompañada de las
infraestructuras necesarias, define un enclave estratégico que se traduce en un aporte
de beneficios para el ámbito.
Por un lado sabemos que, el área de Miranda de Ebro goza de una situación
estratégica, es decir, se ubica en torno a una serie de corredores naturales de
importancia europea, sin ir más lejos, el eje-corredor continental en su paso por la
península ibérica alberga a la depresión de Miranda y al Condado de Treviño, ambos
pertenecientes a esta área funcional. Y es que esta supone, la intersección entre el
Valle del Ebro, que se abre hacia el mediterráneo y el sector meridional del eje
continental, que vertebra el norte de Portugal, la mitad norte de España y el frente
atlántico de Francia con la dinámica dorsal de la Unión Europea.
Por otro lado, sabemos que Miranda de Ebro posee las infraestructuras suficientes que
los sectores demandan lo que le dota de una postura privilegiada pues el ámbito tiene
una posición central respecto a los grandes sistemas de infraestructuras tanto
regionales, nacionales como europeos, sirviendo de unión entre ejes peninsulares de
dirección N-S y E-O, y de enlace con el resto de Europa a través de la N-1, que forma
parte del itinerario europeo de primer orden, además, es el único punto donde esta
intersección entre ejes coincide para la red viaria y para la red ferroviaria.
La ubicación estratégica, unida al carácter industrial y a los medios infraestructurales,
dota al área funcional de cualidades como es la accesibilidad, interesante desde el
punto de vista mercantil, pues puede ser atrayente para las actividades de transporte,
almacenamiento y distribución.
Todo ello tiene como consecuencia una oportunidad logística para el área funcional de
Miranda de Ebro que ha de adoptarla como base para la mayor integración de los
municipios y la mejoría general de sus prestaciones.
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BIBLIOGRAFÍA
Bibliografía específica para el ámbito territorial de Miranda de Ebro:
JUNTA DE CASTILLA Y LEÓN, 2005: “Ámbito de encuentro: La ordenación de Territorio en el
área funcional de Miranda de Ebro”.
OZCÁRIZ SALAZAR, Jorge: “Ciudad y territorio: reflexiones sobre el efecto frontera en la
planificación. El caso de Álava.” VII Congreso Nacional del Medio Ambiente.
IZQUIERDO RONCERO, José Javier: “La ordenación del territorio en Castilla y León”.
JUNTA DE CASTILLA Y LEÓN, 2000: “Directrices de ordenación del territorio”.
RAMÍREZ ESTÉVEZ, Guillermo y REGUERA DE CASTRO, José Mauro: “Modelo funcional de la
territorialización de servicios en Castilla y León”. Junta de Castilla y León, España 1994.
Bibliografía general para el concepto de territorio:
SORIA Y PUIG, Arturo: “El territorio como artificio y su lenguaje” pág.15-46 en MENÉNDEZ DE
LUARCA Y NAVIA OSORIO, José Ramón: “La construcción del territorio. Mapa histórico del
Noreste de la Península Ibérica” .Fundación Rei Afonso Henriques. Lunwerg editores.
Barcelona 2000.
GARCÍA, José Luis: “Antropología del territorio” .Taller de Ediciones Josefina Betancor, Madrid
1976.