discurso jorge giordani sobre proyecto presupuesto 20121
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DERECHO DE PALABRA DEL CIUDADANO
JORGE GIORDANI MINISTRO DEL PODER POPULAR DE PLANIFICACIÓN Y FINANZAS,
PARA EXPONER EL CONTENIDO DE LOS PROYECTOS DE “LEY ESPECIAL DE ENDEUDAMIENTO ANUAL PARA EL EJERCICIO FISCAL 2012”,
“LEY DE PRESUPUESTO PARA EL EJERCICIO FISCAL 2012”, ASÍ COMO EL MARCO PLURIANUAL 2012-2013”, “INFORME GLOBAL 2011”
Y “PLAN OPERATIVO ANUAL 2012”
PALACIO FEDERAL LEGISLATIVO JUEVES, 20 DE OCTUBRE DE 2011
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Buenos días Fernando Soto Rojas, camarada Presidente de la Asamblea
Nacional; buenos días Aristóbulo Isturiz, compañero, camarada Vicepresidente de la
Asamblea Nacional; muy buenos días, señores Diputados y Diputadas:
Venezuela continúa viviendo momentos estelares de su historia contemporánea a
200 años de su independencia nacional, ahora luchando a favor de su soberanía y de
los intereses más genuinos del pueblo, en el contexto de una crisis que aparenta ser de
tipo financiero coyuntural, pero que presenta signos de ser otra más esencial de tipo
estructural, más allá de los sistemas políticos que predominan en el mundo, que se
encuentra profundamente ligada a sus mecanismos de acumulación. Se trata de una
crisis del metabolismo del capital que se contrapone a la lógica del trabajo, donde
predomina la búsqueda de una sociedad más justa, libre, autónoma y radicalmente
democrática.
La oportunidad y obligación de elaborar el Presupuesto de la Nación para el año
2012 es propicia para conformar la voluntad de cambio y sentido profundamente
humanitario que ha caracterizado el proceso bolivariano desde sus inicios en febrero de
1999.
Las condiciones particulares que se desarrollarán en el país de cara a un nuevo
proceso electoral para elegir al Presidente de la República y a las autoridades de otros
órganos del Poder Ejecutivo Nacional, no se distancian de lo que ha sido habitual en
esta última década: una alta participación de nuestro pueblo, apoyado por la
institucionalidad que nos brinda la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela, aprobada el 15 de diciembre de 1999; la solidez institucional y el firme
liderazgo del Presidente Hugo Chávez, que en pocas horas estará llegando de nuevo al
país, orientado todo ello al desarrollo del Proyecto Nacional Simón Bolívar y del Primer
Plan Socialista de la Nación, 2007-2013.
La actual crisis financiera internacional que golpea duramente a los pueblos de los
países capitalistas llamados desarrollados, tanto en norteamérica como en Europa, son
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señales de lo que ocurre bajo la superficie del magma productivo del sistema de
acumulación basado en la lógica del capital.
La dependencia de Venezuela de lo que le ocurre a los hidrocarburos, sigue
siendo evidente, a pesar de los inmensos esfuerzos realizados en esta última década
del Gobierno Bolivariano por consolidar la soberanía sobre nuestros recursos naturales,
lo que a su vez ha permitido pagar, óigase bien, una deuda social acumulada de casi
cuatrocientos mil millones de dólares. (Aplausos).
Tamaña realización, comprobada en los avances alcanzados, verificables a través
del Índice de Desarrollo Humano, el cumplimiento de las Metas del Milenio, la
disminución de la pobreza absoluta y relativa y el mejoramiento del Índice de Gini, son
todos elementos de gran importancia para resistir los embates de una crisis que afecta
al entero globo terráqueo.
En estos últimos años, desde que apareció primero la crisis inmobiliaria en los
Estados Unidos de Norteamérica y posteriormente lo que ahora observamos como una
crisis financiera, se devela el grado de endeudamiento de los países llamados
avanzados, extendiendo e intensificando sus efectos perturbadores sobre la economía
global, contra los cuales ningún país puede considerarse inmune.
La economía venezolana fue afectada a partir de la brusca disminución de los
precios petroleros que bajaron de casi 140 dólares el barril, a mitad del 2008, a 30 a
finales de dicho año. Venezuela decreció en su Producto Interno Bruto por cinco
trimestres consecutivos, hasta que en el último trimestre del año 2010 dio muestras de
una recuperación que hemos visto a lo largo de todo este año 2011.
En ese mismo sentido se orienta la creación de tres grandes misiones:
AgroVenezuela, Vivienda Venezuela y Saber y Trabajo Venezuela, esta última en plena
gestación, las cuales impulsarán la actividad económica para retomar la senda de
crecimiento transitado durante 22 trimestres sucesivos, después de superado el nefasto
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golpe de Estado de abril de 2002 y el posterior sabotaje petrolero de finales de ese año
y principios del 2003.
En este contexto, la elaboración del Presupuesto de la Nación y la Ley Especial de
Endeudamiento para el año 2012, debe ser un instrumento para seguir consolidando la
política social incluyente, iniciado en febrero de 1999 y poder entrar de lleno en otro
ciclo positivo encuadrado en el próximo Plan de Desarrollo Económico y Social para el
período 2013-2019.
Presupuesto, entorno y coyuntura actual. Impacto de la crisis en Venezuela y
recuperación económica. A lo largo del año 2011 la economía global ha venido
experimentando con renovada intensidad los efectos de la mencionada crisis financiera
que estalló en los Estados Unidos de América en el 2008, sin que pueda visualizarse
aún una clara ruta hacia su verdadera superación.
La volatilidad de los mercados da cuenta del predominio de un clima de
incertidumbre, mientras se corrigen a la baja las estimaciones de crecimiento de
algunas de las mayores economías del mundo cuyas perspectivas de riesgo empeoran
a causa de los altos niveles de endeudamiento, con lo cual arrastran a otras economías
de menor escala que funcionan en sus periferias y potencian el riesgo de contagio.
La respuesta de la mayoría de estos países para contrarrestar la crisis ha sido
aplicar fuertes ajustes fiscales y reducir los estímulos adoptados inicialmente, los cuales
posibilitaron la incipiente reactivación lograda en estas economías en el año 2009, que
ahora abandonan la política anticíclica afectando negativamente las expectativas.
Las condiciones de vida de la población siguen empeorando, especialmente a
causa del desempleo y de la supresión de beneficios derivados de los programas de
previsión social, conformando escenarios de conflictividad con sus consecuentes
riesgos políticos.
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Para citar algunos datos, tenemos que en los Estados Unidos la tasa de
desempleo se mantiene por encima del 9%, pero al incluir a las personas que han
desistido en su búsqueda de empleo se eleva a un 16,1, lo que significa alrededor de
24,6 millones de personas desocupadas, esto sin considerar los casi 50 millones de
personas que no tienen asistencia de seguros, ningún seguro, y otras tantas que
perdieron sus viviendas luego de la crisis inmobiliaria.
En España, por ejemplo, el desempleo pasó de 20,3 –óigase bien– en julio de
2010 a 21,12 en julio de 2011; y en Grecia está por encima del 15%.
Las llamadas economías emergentes como China, Rusia, India y Brasil, que hasta
ahora han mantenido un riguroso desempeño, ya se están viendo afectadas por las
dificultades económicas de Europa y los Estados Unidos de Norteamérica,
especialmente por los elevados riesgos que comparten en los mercados financieros y
por la contracción de la demanda global.
Las economías de América Latina y el Caribe, en general, han podido resistir la
ola recesiva, sin embargo enfrentan riesgos de desequilibrios financieros ante las
posibles limitaciones para absorber los flujos de capitales que llegan en busca de mayor
seguridad o mejores rendimientos y que además pueden ser fugaces, capitales
golondrinas.
Por otra parte, de persistir la desaceleración de las grandes economías, es de
esperarse que se reduzca la demanda de las exportaciones de la región y caigan
nuevamente los precios de las materias primas impactando los ingresos de nuestros
países por ambas vías.
En lo que va de este año el índice de precios promedio de las materias primas no
energéticas se ha contraído en 1,5% y en 6,5-7% las materias primas energéticas.
En el mes de septiembre la Cepal ajustó la estimación de crecimiento para
América Latina y el Caribe para el año 2011 de 4,7 a 4,4; en el caso de Venezuela, a
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finales del año 2010 se logró detener la desaceleración de la economía ocasionada por
la dramática caída de los precios petroleros en el año 2008.
Durante el primer semestre de 2011 se inició la fase de crecimiento proyectándose
a cerrar el año con una tasa superior, muy superior a la estimada que fue de un 2%.
Vamos a esperar las cifras oficiales del Banco Central con relación al tercer trimestre.
Un factor determinante en la recuperación de la actividad económica ha sido y
sigue siendo la política de inversión social, por cuanto contrarresta el ciclo recesivo a
través del estímulo de la demanda agregada. Igualmente, dicha política permite
proteger a la gran mayoría de la población de los efectos de la desaceleración
económica, como suelen ser el incremento del desempleo y la desmejora en los
beneficios sociales.
Por otra parte, desde inicios del Gobierno Bolivariano se han adelantado diversas
iniciativas con el propósito de reducir la exposición de Venezuela a los riesgos de los
mercados financieros internacionales, destacándose la disminución progresiva de la
proporción de deuda externa sobre deuda total, el establecimiento del régimen de
control de cambio en el año 2003, la recomposición de las reservas internacionales de
la nación en el año 2005, y la decisión adoptada en este año 2011 de repatriar las
reservas constituidas por oro, como lo declaró en el día de ayer el Presidente del Banco
Central, el doctor Nelson Merentes, que prontamente vendrán a Venezuela y no como
ocurrió en los gobiernos anteriores que dichas reservas las sacaron del país (Aplausos).
Adicionalmente, Venezuela continúa apoyando las políticas de defensa de precios
justos del petróleo desde la OPEP. Asimismo, con el avance de los proyectos de
integración Sur-Sur y el establecimiento de nuevas relaciones internacionales
concebidas bajo una visión multipolar, se diversifican las opciones de mercado para
nuestro principal producto de exportación y se aplican novedosos esquemas de
cooperación comercial, financiera, tecnológica, cultural, política y social, todo lo cual
fortalece al país para enfrentar los riesgos de choques externos.
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Seguir desarrollando estas capacidades es de vital importancia, tanto para el país
como para la región, especialmente bajo el presente escenario económico que rebasa
los demás límites de una circunstancia adversa. Ciertamente la persistencia de los
factores que determinaron esta situación, el surgimiento de nuevos elementos que la
hacen más compleja, así como el alcance y la intensidad de sus efectos, permiten
evidenciar que se trata de una crisis de carácter estructural, como mencionábamos
antes, demostrándose además que su abordaje mediante medidas coyunturales sólo
permite acumular presiones económicas, sociales y políticas difíciles de contener por
mucho más tiempo.
De allí el auténtico compromiso del Gobierno Bolivariano de seguir impulsando las
iniciativas nacionales y supranacionales para proteger a nuestras economías y sobre
todo a nuestra gente de los embates de la crisis desencadenada por la lógica
capitalista.
Consolidación de la política social incluyente. El Gobierno Bolivariano a partir de
1999, conforme a los derechos y deberes humanos consagrados en la Constitución
venezolana, dedica grandes esfuerzos al establecimiento de una sociedad democrática,
participativa, protagónica y corresponsable para proceder a la redistribución del poder,
garantizar la justicia social y establecer un régimen económico centrado en la función
social de la economía y en el papel del Estado como regulador de las relaciones
económicas.
En el curso de este proceso, llegado el año 2003, en medio de la crisis político-
económica producida por el golpe de Estado y el sabotaje petrolero, se inicia una fase
de profundización y aceleración de la transformación de las estructuras políticas y
sociales mediante las misiones, fase que es reforzada por los lineamientos de los
Planes de Desarrollo Económico y Social 2001-2007 y 2007-2013.
Las misiones han transformado la realidad social del país. ¿Quién lo puede negar?
Entre sus alcances destacan: La asistencia en salud integral a la población de bajos
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recursos; la ejecución de programas de seguridad alimentaria; la alfabetización de más
de un millón cuatrocientos mil venezolanos; el acceso a la educación formal de más de
10 millones de personas; la dignificación de los pueblos indígenas; la generalización de
los servicios asociados a los derechos sociales; la disminución significativa de los
niveles de pobreza absoluta y relativa; el rescate de la autodeterminación y soberanía
cultural de los venezolanos; el impulso al deporte –ahí están nuestras figuras
compitiendo en los Juegos Panamericanos–; el fomento del trabajo protagónico y
corresponsable para superar el déficit de vivienda; la incorporación de las comunidades
excluidas de la vida social productiva y la atención de los niños, niñas, adolescentes,
adultos y adultas en situación de calle.
Inversión social de los últimos 10 años. En la última década, la inversión social en
Venezuela alcanzó una magnitud sin precedentes.
Entre 1987 y 1998 se ubicó en 71 mil 551 millones de dólares, en tanto que en
1999 y 2010 la cifra asciende –óigase bien– a 394 mil 604 millones de dólares, lo que
demuestra un monto 5 veces mayor que el ejecutado por el gobierno puntofijista en sus
últimos 13 años. (Aplausos).
La inversión social con respecto a los ingresos durante el período 1987 a 1998 se
ubicó en 36,9, mientras que en el lapso 1999 a 2010 se ubicó en un 62%, demostrando
el firme compromiso del Gobierno Bolivariano con la política de inclusión social.
Distribución de la inversión por sectores. La inversión de 394 mil 604 millones de
dólares, se ha distribuido en las áreas de salud, educación, seguridad social, desarrollo
social y participación, vivienda, cultura, comunicación social y ciencia y tecnología,
manteniendo –óigase bien los que no quieren escuchar– una inversión anual de 60 mil
millones de dólares durante los últimos 3 años. (Aplausos).
(Se muestra gráfico)
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Esta distribución sectorial se muestra en el gráfico que ustedes pueden ver.
Retorno de la inversión social. El esfuerzo sostenido, dirigido a la consolidación de
una estrategia de Estado para el pago de la deuda social acumulada, se ha traducido
en grandes logros. Al respecto tenemos lo siguiente:
Índice de Desarrollo Humano. Expresa la mejoría de la situación social del país al
registrar un valor de 0,8263 para el año 2008 que lo ubica en la categoría de desarrollo
humano alto. (Aplausos).
Objetivos de desarrollo del milenio. Tal como conocen, el origen de estos objetivos
radica en la Declaración del Milenio de las Naciones Unidas, firmada por 189 Estados
miembros en Copenhague en el año 2000, para “liberar” a todos los hombres, mujeres y
niños de las lamentables e inhumanas condiciones de extrema pobreza.
Antes del 2015, enfatizando el hecho de ser este compromiso “no sólo un
imperativo de orden ético y moral, sino también político, porque el sistema mundial no
puede sustentarse sobre la base de enormes desigualdades”, Venezuela sobresale en
el cumplimiento de dichos objetivos y así lo confirman los informes de la ONU, al lograr
todas las metas antes de la fecha prevista, entre las que se tienen: La reducción de la
pobreza extrema y del hambre; la erradicación del analfabetismo y la universalización
del derecho a la educación básica; el aumento del porcentaje de la población con
acceso sostenible al agua potable; la reducción de la mortalidad infantil en menores de
5 años y un año; la promoción eficaz de la equidad de género y mayor participación de
la mujer en la vida política, económica y social del país; el incremento sostenido del
acceso de la población a las nuevas tecnologías de la información y comunicación; el
fomento de la cooperación internacional para el desarrollo, y la reducción de la pérdida
de los recursos ambientales.
Con relación al tema de la salud, se resaltan los resultados positivos en la
atención a personas contagiadas por el sida, el control de los brotes de fiebre amarilla,
los programas de salud colectiva como Barrio Adentro I, II y III.
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Disminución progresiva de la pobreza. A partir de 1999, el Gobierno Bolivariano
inicia su avance hacia la disminución de la pobreza extrema, la cual una vez superada
la interrupción producida por los eventos políticos de los años 2001 y 2002, continúa su
descenso en el 2004 hasta el día de hoy. Destacan aquí, como fundamento de este
proceso, las políticas para mejorar la distribución del ingreso y de la riqueza, traducida
éstas en los aumentos sucesivos del salario mínimo, los incrementos del bono de
alimentación para trabajadores y trabajadoras, los aumentos de la pensión por vejez y
la reducción progresiva de la tasa de desocupación.
En la década de 1999-2010, se logra la disminución en 52,7% del porcentaje de
personas provenientes de hogares en situación de extrema pobreza, pasando de 20,1 a
8,6, y la pobreza de estos hogares fue reducida en 59,2% durante el mismo período.
Coeficiente de Gini. Este indicador que permite medir el grado de desigualdad en
la distribución del ingreso, evolucionó de 0,491 en el año 94 a 0,389 para el año 2010,
siendo Venezuela el país con la distribución menos desigual de toda la América Latina.
(Aplausos).
Fortaleza y estabilidad del Modelo Bolivariano. El Gobierno Bolivariano inicia en
febrero del año 1999 la consolidación de un camino histórico que ya venía
transitándose, en un primer momento con la convocatoria a un proceso constituyente
que culminó con la aprobación masiva de una Carta Magna mediante el voto popular, la
cual rescata el pensamiento bolivariano. A partir de este hecho, comienzan cambios
profundos en la estructura político-institucional del país.
Por una parte se fortalece el vínculo cívico-militar en el que la Fuerza Armada
Nacional, además de defender y garantizar la soberanía nacional, se aboca a satisfacer
las necesidades de la población, participando activamente en procesos de apoyo social.
Por la otra, se destaca el reconocimiento del Poder Popular como elemento que le da
sustancia y estructura institucional al creciente número de organizaciones sociales y
comunitarias, tales como, por ejemplo, las mesas técnicas de agua, los comités de
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tierras urbanas, los comités de usuarios y usuarias, los espacios organizativos que
dieron origen a los consejos comunales, insertándose luego en la gestión política y
administrativa, materializando así unos de los cambios más transcendentes en materia
sociopolítica. Este elemento es cuerpo y alma de la democracia participativa y
protagónica. (Aplausos).
La inclusión del Poder Popular adquiere mayor relevancia al incorporarse los
consejos comunales en el Consejo Federal de Gobierno, evidenciando así la
inquebrantable voluntad política del Estado venezolano.
Es importante mencionar que un factor que ha permitido la viabilidad y
construcción de este modelo, es la política del manejo soberano de los recursos
energéticos de la nación, a través de diversas iniciativas con las cuales se materializa la
recuperación de nuestro principal recurso natural como lo es el petróleo, las actividades
de exploración, explotación y comercialización, así como la implementación de un
régimen fiscal cónsono con el interés nacional.
En este sentido, la política de alianzas estratégicas que comienza a establecer la
República, adquiere suma importancia no sólo en el desarrollo de las actividades de
producción, sino también en el de la refinación y la petroquímica, siendo de particular
significación la diversa procedencia de las empresas internacionales, entre ellas la
República Popular China, de la Federación Rusa y de la República Federativa del
Brasil, que vienen realizando importantes inversiones en la Faja Petrolífera del Orinoco.
Esta estrategia está orientada por la premisa fundamental del ejercicio de la plena
soberanía petrolera.
De igual forma, el establecimiento diversificado de alianzas estratégicas en
materia petrolera se circunscribe a su vez en el impulso de una política exterior que
apunta a la construcción de un mundo multipolar, el cual se distingue por la diversidad
de las relaciones políticas, económicas y culturales en el escenario mundial. La
creación de espacios de integración tales como la Alianza Bolivariana para los pueblos
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de América (ALBA), la Unión de Naciones de Suramérica (Unasur), teniendo a
Venezuela como actor de vanguardia, refleja una vez más el liderazgo del Gobierno del
Presidente Hugo Chávez en la región, evidenciando en la creciente acogida de los
pueblos a tales propuestas alternativas.
Este proceso político ha sido impulsado por el liderazgo del Presidente Chávez,
cuya legitimidad nace y se afianza en su identificación con el sentir y el quehacer
popular y en la comprensión de las necesidades más sentidas del pueblo como base
para la acción gubernamental. El proceso bolivariano aún en las coyunturas más
difíciles, provocadas tanto por efecto de la crisis mundial como factores internos
desestabilizadores y antipatrióticos, ha mantenido como brújula la inversión social y la
democracia participativa y protagónica, que no es más que poner al ser humano como
centro de las decisiones sustantivas y de la acción de Gobierno. Estas premisas se
mantienen vigentes en el Presupuesto del año 2012.
Ejecución presupuestaria 2009-2011
Gestión financiera, Base Caja 2009-2010. Durante el año 2009 el Gobierno
Central percibió por ingresos fiscales 151.525,49 billones de bolívares, equivalentes al
21,6% del PIB, derivados principalmente del comportamiento de los ingresos no
petroleros al alcanzar 98.294,66 millones de bolívares, donde los ingresos tributarios
tuvieron la mayor contribución. Por su parte, los ingresos petroleros ascendieron a un
monto de 53.230,82 millones de bolívares al reducirse un 35,4% respecto al año
anterior.
Por otro lado, los gastos del Gobierno Central representaron una proporción del
26,7% del Producto Interno Bruto al ubicarse en 187.134,06 millones de bolívares,
caracterizados por una mayor participación de los gastos corrientes, los cuales
ascendieron a la cantidad de 143.752,68 millones de bolívares, incidiendo en un déficit
financiero del 5,1% del Producto Interno Bruto.
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Para el año 2010 la gestión financiera del Gobierno Central reflejó ingresos por la
cantidad de 198.571,59 millones de bolívares, 19,6% del PIB, motivado principalmente
por el incremento de los precios de la cesta de Venezuela de 57,01 dólares/barril en el
2009 a 71,97 dólares/barril en el 2010, permitiendo que los ingresos petroleros y no
petroleros cerraran en 66.106.132 millones de bolívares, 24,2% por encima de lo
reflejado en el 2009 y 132.465,46 millones de bolívares, 34,28% superior a lo calculado
en el año 2009, respectivamente.
Por su parte, el gasto Baja Caja del Gobierno Central para el 2010 ascendió a un
monto de 233.453,35 millones de bolívares, 23,1% del PIB. Dicho gasto estuvo
determinado principalmente por las transferencias corrientes que se ubicaron en
122.529,31 millones de bolívares, 34,4% por encima de las transferencias registradas
durante el año 2009.
De esta manera el Gobierno Central mejoró su gestión al disminuir en 1,7% del
PIB el déficit financiero obtenido en el año 2009, para así cerrar en el año 2010 con un
déficit financiero de 3,4% del Producto Interno Bruto.
Gasto Acordado del 2011. Al 20 de septiembre del 2011 el Gasto Acordado
asciende a 294.031,41 millones de bolívares, implicando un incremento del 23,1% con
respecto al Gasto Acordado del cierre del 2010, lo que se traduce en una expansión en
términos reales de los compromisos de gastos asumidos por la Administración Central a
dicha fecha. Este impulso del Gasto Acordado está en línea con la favorable evolución
registrada por las variables macroeconómicas determinantes de los ingresos fiscales.
En comparación a lo presupuestado para el año 2011, 204.208,19 billones de
bolívares hasta el 20 de septiembre del presente año, el Gasto Acordado representa la
aprobación de 44,1% de recursos adicionales, vía créditos adicionales netos, por un
monto de 90.023,03 millones de bolívares, siendo los principales receptores de dichos
recursos adicionales los Ministerios: del Poder Popular para el Trabajo y Seguridad
Social, 14.200,08 millones de bolívares; Transporte y Comunicaciones, 5.422,48
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millones de bolívares; Comunas y Protección Social, 4.641,13 millones de bolívares, y
Agricultura y Tierras, 2.731,75 millones de bolívares.
Al cierre se estima que el Gasto Acordado se ubique alrededor de 327 mil millones
de bolívares al incluir los recursos provenientes de la Ley Complementaria de
Endeudamiento, destinados para el pago de servicios de la deuda de Gran Misión
Vivienda, Gran Misión Trabajo, Gran Misión AgroVenezuela, y para la atención de
emergencias y desastres naturales a ser ejecutados por los organismos pertenecientes
a la Administración Central, por lo cual sería 36,1% superior al gasto acordado del
cierre del 2010. (Aplausos).
Cumplimiento cabal de las obligaciones legales con las alcaldías y gobernaciones.
Durante el año 2010 se otorgaron a los gobiernos regionales y locales la cantidad de
43.991,05 millones de bolívares, honrando así las obligaciones legales establecidas con
los estados y municipios; esta cantidad incluye además del presupuesto acordado, la
asignación de recursos por vía de diez créditos adicionales.
Con respecto al Ejercicio Fiscal del 2011 a la fecha, se han asignado a las
regiones recursos por 49.991,01 millones de bolívares.
Ejecución especial de la Ley de Endeudamiento Anual para el Ejercicio Fiscal
2011. La implementación de una estrategia de endeudamiento que privilegie el mercado
en moneda local, la oferta continua y sistemática de títulos valores del Estado con
atributos favorables para el inversionista, junto a las condiciones del mercado interno en
cuanto a liquidez, permitió la colocación exitosa de 44.999,85 millones de bolívares, lo
que representa el 100% de la meta establecida.
Con el objeto de financiar el aporte local de proyectos de inversión, se recaudó un
monto de 629,33 millones de bolívares para cubrir con el servicio de la Deuda Pública,
la cantidad de 10.729,69 millones de bolívares para apoyar la gestión fiscal de un total
de 220 mil millones de bolívares.
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Por otra parte, los recursos captados por concepto de refinanciamiento sumaron
un total de 13.640,08 millones de bolívares.
Gestión de pasivos del Gobierno Central al primer semestre año 2011. Al cierre
del primer semestre del año 2011, la Deuda Pública del Gobierno Central se ubicó en
68.652,01 millones de dólares, representando una disminución del 4,34% del total
respecto a diciembre de 2010; durante este mismo período las amortizaciones
realizadas sumaron un total de 4.627,91 millones de dólares, de los cuales el 69%
correspondió a deuda interna.
Es necesario destacar que se pagaron instrumentos importantes de deuda externa
entre los cuales tenemos la última fracción del Bono JPYFRN2011 por un total de 56,50
millones de dólares y el bono flota Ranbows 2011 por un monto de mil millones de
dólares, lo cual nos demuestra una vez más la seriedad, voluntad y capacidad del
Gobierno Bolivariano para cumplir cabal y absolutamente con sus compromisos y
obligaciones tanto con acreedores externos como internos.
Los desembolsos de deudas registrados durante el período provienen
mayormente del mercado local y los mismos se obtuvieron mediante las subastas
ordinarias especiales de bonos TIF y Letras del Tesoro por un monto de 52.445,85
millones de bolívares, equivalentes a 12.196,71 millones de dólares. En este sentido,
los cronogramas y mecanismos de subastas implementados por el Ministerio del Poder
Popular de Planificación y Finanzas han sido herramientas fundamentales en el
desarrollo del mercado de valores y han permitido el acceso a todos los inversionistas a
las subastas.
Los desembolsos externos sumaron un monto de 733,57 millones de dólares, los
cuales se destinaron a la ejecución de proyectos de gran envergadura y de alto impacto
social y económico como la Central Hidroeléctrica Tocoma, el Programa de Desarrollo
Eléctrico Nacional, la Línea 5 y la Línea 2 del Metro y la segunda fase del Programa de
Apoyo al Centro de Acción Social para la Música.
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Deuda Pública Externa. Al cierre del primer semestre del año 2011 el saldo de la
deuda externa se ubicó en 36.437,00 millones de dólares, representando una
disminución de 596,93 millones de dólares en comparación con diciembre del 2010. En
este mismo período los pagos por servicio de la Deuda Pública Externa del Gobierno
Central, realizado a sus acreedores, sumaron un total de 2.959,67 millones de dólares,
desglosados de la siguiente manera: 49% correspondiente a pagos de capital y 48%
destinado a pagos por concepto de intereses.
Deuda Pública Interna. La Deuda Pública Interna del Gobierno Central para el
primer semestre se ubicó en 138.522,88 millones de bolívares, producto de las
colocaciones efectuadas por los TIF de bonos y Letras del Tesoro; los pagos por
servicios de deuda interna sumaron un total de 19.688,2 millones de bolívares, de los
cuales 13.688,78 millones de bolívares se cancelaron por concepto de capitales y
5.999,42 millones de bolívares por concepto de intereses.
En términos de la composición de los pagos de capital, se observa que el 70,03%
de estas cancelaciones pertenecen a los vencimientos de Letras del Tesoro por la suma
de 9.586,45 millones de bolívares y el 29,97 restantes corresponde al pago de los
bonos de la Deuda Pública Nacional por un bono total de 4.102,33 millones de
bolívares.
En lo que respecta a las emisiones de las Letras del Tesoro durante el primer
trimestre de 2011, se efectuaron colocaciones a 91, 105, 182 y 364 días de acuerdo al
cronograma de subastas publicado por el Ministerio del Poder Popular de Planificación
y Finanzas.
Al cierre del primer semestre la composición entre deuda interna y deuda externa
se ubica entre 47 y 53%, respectivamente, lo cual refleja el gran esfuerzo realizado en
materia de gestión de deuda para disminuir el riesgo del tipo de cambio y contribuir con
la sostenibilidad de las cuentas fiscales.
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Lecciones de la experiencia. Es sabido que el Proyecto Bolivariano que lidera el
Presidente Chávez encarna las complejidades propias de un proceso de transformación
social. Demanda, por tanto, la labor incesante del compromiso frente al acontecer diario
y la sabiduría suficiente para no dejar de perseguir la visión de una sociedad más justa,
capaz de dar al pueblo la mayor suma de felicidad posible.
Esto ha implicado cuestionar permanentemente las estructuras y hasta las formas
con las que ellas se retroalimentan para ir generando los cambios. Realizar tal ejercicio
en el área de las Finanzas Públicas nos ha permitido ratificar que los métodos y las
técnicas que se usan en la gestión financiera imprimen direccionalidad a los recursos de
forma tal que ayudan a favorecer o a obstaculizar el logro de los objetivos planteados.
Con esta certeza y apoyándose en el análisis concienzudo de los problemas,
hemos ido ajustando algunas metodologías como la aplicada para la formulación y
control del presupuesto a fin de que los procesos técnico-financieros estén
subordinados a los objetivos mediante la aplicación de criterios claros, lo cual nos ha
legado valiosos aprendizajes.
Prudencia y racionalidad. Teniendo en cuenta los objetivos de mantener la
inversión social, elevar la eficiencia del Estado y cambiar el carácter rentista de nuestra
economía y basándonos en el principio de prudencia, nos hemos establecido como
criterio fundamental la racionalización en el uso de los recursos financieros públicos.
El principal ajuste metodológico consistió en la estimación de los ingresos
considerando un precio de petróleo prudente en sustitución de métodos que conducían
a la expansión progresiva del gasto burocrático. Luego de 3 años de aplicarlo se verifica
que esta práctica ha contribuido a mantener el nivel de inversión social, a reducir el
limbo de la expansión de la burocracia y a perseguir una mayor eficiencia en el uso de
los recursos. (Aplausos).
Consistencia. Para apoyar la propuesta de abonar la siembra del petróleo se ha
procurado desvincular progresivamente la formulación presupuestaria de la estimación
Asamblea Nacional / 17
de los precios petroleros, a fin de que el ingreso petrolero se destine cada vez más en
mayor proporción al financiamiento del desarrollo social y económico del país.
En línea con ello, debemos resaltar que la aprobación de la Ley de Ganancias
Extraordinarias y Exorbitantes, al establecer un tope al gasto corriente, permite
direccionar recursos al financiamiento de los planes de inversión. (Aplausos).
Efectivamente, en el presupuesto que hoy se presenta, los gastos se cubren con
55,4% de los ingresos no petroleros.
Eficiencia. La permanente acción gubernamental en pro de la jerarquización social
y una mayor eficiencia y control del gasto a nivel del Ejecutivo Nacional, es una de las
lecciones fundamentales que nos ha legado la ejecución del presupuesto en estos
últimos años.
Esta orientación ha permitido reducir progresivamente el gasto innecesario, la
discrecionalidad irresponsable de algunos funcionarios en el manejo de los recursos
públicos, así como mejorar la programación financiera basándose en la evaluación
continua del proceso de ejecución de los recursos.
Legalidad. Se ha ratificado la voluntad del Gobierno de cumplir cabalmente las
obligaciones legales, lo que se demuestra en la correcta asignación de recursos a los
poderes nacionales, gobiernos regionales y locales, y al Consejo Federal de Gobierno,
a los cuales se les ha transferido la totalidad de los recursos que les corresponden tanto
por la Ley de Presupuesto como por los conceptos legales derivados de los precios
petroleros de realización por encima de lo presupuestado. (Aplausos).
Transparencia. El fortalecimiento continuo de los sistemas de control,
especialmente con ejercicio de la Contraloría Social, es fundamental para garantizar la
correcta ejecución de los recursos públicos.
Asamblea Nacional / 18
Por su parte, el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela como
administrador de la Hacienda Pública Nacional, de acuerdo al artículo 236, numeral 11,
de nuestra Constitución, promueve de manera permanente la transferencia en la
asignación y el uso de los recursos al anunciar públicamente fuentes y destinos de los
fondos. (Aplausos).
Gestión de riesgo financiero. Se ha demostrado que la sistematización del proceso
de emisión y colocación de deuda con particular énfasis en el mercado interno, permite
mover a riesgos de mercado y riesgos cambiarios al tiempo que estimula el ahorro
interno.
Importancia de los fondos como fuentes de inversión para el desarrollo. Los
fondos de financiamiento tales como el Fondén y los fondos provenientes del Convenio
China-Venezuela, fueron creados para mejorar el flujo de recursos y financiar proyectos
estratégicos para el desarrollo del país.
La práctica ha demostrado que gracias a la aplicación de estas modalidades de
financiamiento se ha logrado una mayor eficiencia y eficacia en la gestión fiscal.
Por otra parte, los fondos constituidos en el marco del Convenio China-Venezuela
son pilares fundamentales de la asociación estratégica bilateral con la segunda
potencia económica del mundo en ámbitos tales como el comercio, el intercambio
tecnológico y la capacitación.
Coordinación de la gestión fiscal con las variables macroeconómicas. Se ha
evidenciado el efecto anticíclico de la política de inversión social por cuanto ha
contribuido de manera determinante a moderar las presiones externas sobre nuestra
economía, permitiéndose retomar la ruta del crecimiento. Asimismo, ha sido factor
fundamental para proteger a la población de los efectos adversos del ciclo de
decrecimiento.
Asamblea Nacional / 19
Se mantiene el gran reto de luchar contra la inflación al tiempo que se valida la
necesidad de sostener los esfuerzos para aminorar su impacto, sobre todo en los
grupos sociales de menores recursos.
Autonomía financiera. La diversificación de las relaciones económicas junto al
fortalecimiento de la estructura financiera interna y el manejo autónomo de los recursos
fiscales que posibilita la realización de las inversiones estratégicas, son el fruto de los
esfuerzos dirigidos a proteger al país de las amenazas que imponen los escenarios de
aislamiento o cerco financiero internacional.
De la misma manera, el manejo autónomo de las reservas internacionales con la
promulgación del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley Orgánica que Reserva al
Estado las Actividades de Exploración y Explotación del Oro, así como las conexas y
auxiliares a éstas, contribuye al reforzamiento de la soberanía nacional.
Ejes y lineamientos presupuestarios. Las grandes misiones. En respuesta a la
problemática social que se ha venido incrementando por la crisis financiera mundial, el
Gobierno Bolivariano da impulso en el año 2011 a grandes misiones, enfocándose
principalmente en tres áreas: vivienda, agro, y saber y trabajo.
La Gran Misión Vivienda Venezuela tiene como objetivo facilitar el acceso de la
población venezolana a una vivienda digna; en tal sentido, se ha previsto atender en el
corto plazo a las familias que viven en condición de refugiados o bajo situación de alto
riesgo. Posteriormente, en un plazo no mayor de cinco años se persigue minimizar el
déficit acumulado en las últimas décadas teniendo como meta la construcción de 2
millones de unidades para el año 2017, con una inversión estimada de 393.565 millones
de bolívares.
El éxito de esta Misión se sustenta en cinco grandes vértices: La realización del
censo para identificar la demanda. El registro de los terrenos para garantizar los nuevos
desarrollos. El registro de las empresas constructoras junto con sus trabajadores. Los
Asamblea Nacional / 20
nuevos programas de financiamiento. Y la industrialización de materiales para la
construcción.
La Gran Misión AgroVenezuela tiene como objetivo continuar fortaleciendo la
seguridad y la soberanía alimentaria en el país. Comprende un conjunto de elementos
que confluyen para favorecer la labor del agricultor como son la asistencia técnica, la
convocatoria al pueblo, la política pública, la dotación de insumos y el financiamiento al
agricultor.
Igualmente, contempla inversión en sectores estratégicos para el desarrollo de la
agroindustria, el incremento de la superficie sembrada y de la producción nacional, todo
lo cual permitirá la reducción de las importaciones en los rubros atendidos. La inversión
estimada para los años 2011 y 2012 destinada al desarrollo de la Gran Misión
AgroVenezuela es de 20.483,99 millones de bolívares.
La Gran Misión Saber y Trabajo Venezuela fue creada con el objetivo de impulsar
el conocimiento y el ejercicio de la labor productiva en el pueblo venezolano con la
participación protagónica de las universidades, la juventud, los trabajadores y
campesinos.
Esta iniciativa responde a la convicción de que la base material del socialismo
debe estar precedida por la base espiritual, los valores y la ideología socialista,
ratificándose que el desarrollo intelectual de los venezolanos es el soporte para mejorar
la calidad del trabajo y para la construcción del socialismo.
Con el objeto de poner a disposición del Ejecutivo Nacional el flujo de recursos
para la ejecución de las grandes misiones, el 13 de junio de 2011, mediante Gaceta
Oficial Nº 39.694, el Ejecutivo Nacional decretó la Ley de Endeudamiento
Complementaria para el Ejercicio Fiscal 2011 por un monto de 45 mil millones de
bolívares o su equivalente en divisas al cambio oficial en donde se prevén 10 mil
millones de bolívares a ser destinados a cada una de estas grandes misiones.
Asamblea Nacional / 21
El 26 de julio del presente año, la República Bolivariana de Venezuela ofertó el
Bono Soberano Internacional Amortizable 2031, denominado en moneda extranjera, por
un monto de 4 mil 200 millones de dólares, el cual fue colocado al 100%.
Esta cantidad representa el 40.13 del total de los recursos previstos en la Ley, los
cuales fueron destinados a financiar la Gran Misión Vivienda Venezuela, la Gran Misión
AgroVenezuela, así como el servicio de la deuda pública. El uso de estos recursos en
las grandes misiones, impulsará el crecimiento económico ya observado en el primer
semestre del año 2011.
Proyecto Magna Reserva, e inversión en hidrocarburo: Una de las mayores
oportunidades que tiene nuestra nación para mantenerse como una potencia energética
durante todo el siglo XXI, proviene de la posibilidad cierta de convertir a la Faja
Petrolífera del Orinoco en un eje impulsor del desarrollo económico, social, industrial,
tecnológico y sustentable del país, mediante la valorización y desarrollo óptimo de los
hidrocarburos.
Para ello se estableció el Proyecto Orinoco Magna Reserva, que consiste en
cuantificar y certificar el volumen de recursos de la Faja Petrolífera del Orinoco,
convirtiendo a Venezuela en el país con las mayores reservas de crudo en el mundo.
(Aplausos).
El total de inversiones para la explotación de la Faja Petrolífera del Orinoco
supone un gran impacto en la región, que se traducirá en una expansión de la actividad
productiva de bienes y servicios, acompañada del aumento de la población en
proporciones superiores al crecimiento vegetativo, por cuanto se ha estimado que ésta
pasará de 657.071 habitantes, a un 1.062.903 para el año 2019.
Ley de Ganancias Extraordinarias y Exorbitantes: Con el fin de prever el efecto de
las fluctuaciones de los ingresos petroleros sobre el equilibrio fiscal cambiario y
monetario de la economía venezolana, se creó la Ley de Contribución Especial por
Asamblea Nacional / 22
Precios Extraordinarios y Precios Exorbitantes en el Mercado Internacional de
Hidrocarburo, tal como reposa en la Gaceta Oficial Extraordinaria número 6.022, de
fecha del 18 de abril del 2011, que ha servido como vía de contribución especial al
Fondén.
Tal contribución se calcula de acuerdo con los programas fijados en la Ley, según
los cuales, los precios extraordinarios se definen como aquellos cuyo promedio mensual
de las cotizaciones internacionales de la cesta de hidrocarburos líquidos venezolanos
sean mayores al precio establecido en la Ley Anual del Presupuesto respectivo del
Ejercicio Fiscal; pero igual o inferior a 70 dólares el barril. Se consideran precios
exorbitantes a aquellos cuyo promedio mensual de las cotizaciones internacionales de
la cesta de hidrocarburos líquidos venezolanos sean mayores a 70 dólares el barril.
Fondos de desarrollo y fuentes de créditos: El Gobierno Bolivariano ha venido
impulsando diferentes iniciativas orientadas a mejorar los mecanismos de asignación de
los recursos públicos, posibilitando elevar progresivamente la proporción de los
ingresos petroleros que se destinan a la inversión. Como parte de esta estrategia, en el
año 2005 se comenzó a aplicar la metodología de Presupuesto por Proyecto, lo cual, ha
permitido simplificar la estructura presupuestaria y contemplar de manera integral el
ciclo de planificación que conlleva el presupuesto, la contabilidad y la auditoria.
Igualmente, se han diseñado y aplicado novedosos mecanismos de financiamiento
para acelerar el proceso de inversión como lo son el Fondén y los fondos constituidos
en el marco de los acuerdos de la República Popular China.
Fondo de Desarrollo Fondén: En el año 2005 se creó el Fondo de Desarrollo
Nacional Fondén, con el objeto de aprovechar de manera eficiente los recursos en
divisas provenientes de los ingresos petroleros, canalizados directamente a través de
Pdvsa, e indirectamente a través del Banco Central de Venezuela. Al 30 de septiembre
de 2011 el Fondén había recibido un total de 81.096,32 millones de dólares que se han
destinado al financiamiento de 405 proyectos (Aplausos). A esa fecha se habían
Asamblea Nacional / 23
ejecutado ya, totalmente ejecutados, 268 proyectos, con una inversión de 47.320,75
millones de dólares, mientras que los 137 proyectos restantes, con una asignación de
31.913,30 millones de dólares se encuentran en ejecución.
Fondo Conjunto Chino-Venezolano: En noviembre del año 2007 se firmó el
Convenio Fondo de Financiamiento Conjunto Chino-Venezolano, con el objetivo de
consolidar los planes de carácter binacional, mediante la consecución de mecanismos
financieros que permitirían promover el intercambio comercial y de inversiones; así
como, ampliar la cooperación. En el marco de dicho Convenio se acordó la creación de
un primer fondo para la inversión de proyectos de desarrollo en Venezuela, mediante un
mecanismo que contempla el aporte de ambos países; así como, la posibilidad de
reutilizar el mecanismo para conformar nuevos fondos y de renovar cada uno de ellos.
En el año 2008, se materializó el primero, por la cantidad de 6 mil millones de
dólares; 4 mil millones aportados por la República Popular China a través del Banco de
Desarrollo de China, y 2 mil millones aportados por la República Bolivariana de
Venezuela a través del Fondén.
En septiembre del 2008, se concretó el segundo fondo, con las mismas
características del anterior, y este año, en el 2011, fue posible renovar el primero, por
cuanto Venezuela –óigase bien– había cumplido las obligaciones derivadas del aporte
inicial de China.
De tal manera, que por esta vía se dispuso de 18 mil millones de dólares para la
inversión, habiéndose asignado 14.025 millones de dólares al financiamiento de 132
proyectos en las áreas de infraestructura, industria, agricultura, minería, tecnología y
asistencia técnica. (Aplausos).
Por otra parte, durante la celebración de la séptima reunión de la Comisión Mixta
de Alto Nivel Venezuela-China en diciembre de 2009, se acordó elevar la proporción de
los proyectos de cooperación bilateral sujetos al financiamiento del Fondo, así, como
Asamblea Nacional / 24
promover la utilización del renminbi como moneda de préstamo y de operaciones de
pago, lo que derivó en la conformación del Fondo de Financiamiento de Gran Volumen
y Largo Plazo con 20 mil millones de dólares, de los cuales un 50% se reciben en
dólares y el restante (50%) en la moneda China, el renminbi.
A la fecha, se han comprometido recursos de este Fondo para el financiamiento
de 40 proyectos de envergadura en las áreas de construcción de infraestructura,
desarrollo social, energía, desarrollo minero y desarrollo agrícola.(Aplausos).
Proyectos Relevantes: Algunos de los proyectos más importantes ejecutados con
recursos provenientes de los fondos son: Las plantas eléctricas Termozulia I y
Termozulia II; la Línea 1 del Metro de Los Teques; el Metrocable de San Agustín; la
Planta de Fabricación de Perfiles PVC, en Biruaca, estado Apure; Acueducto
Bolivariano del estado Falcón; el segundo puente sobre el Río Orinoco; y la primera
etapa de las reservas estratégicas de alimentos del Estado, lo cual significan en
toneladas: 19 mil de aceite, 142.205 de arroz, 3.033 de atún, 76.250 de azúcar cruda,
10.100 de carne, 10.000 de leche; 187. 438 de maíz amarillo; 140.000 de maíz blanco y
1.965 de sardina.
Respecto a los proyectos en ejecución, se pueden destacar: La construcción de
5.232 viviendas en Palma Sola, estado Barinas; la modernización del Sistema
Teleférico de Mérida en su fase 2; la planta termoeléctrica, Termozulia III y Termozulia
IV; la Línea 2 del Metro de Los Teques; el tercer puente sobre el Río Orinoco y la
Central Hidroeléctrica Manuel Piar, Tocoma.
Decreto con rango, valor y fuerza de Ley Orgánica que Reserva al Estado las
Actividades de Exploración y Explotación del Oro, así como las Conexas y Auxiliares a
ésta: Con el objeto de regular el régimen de las minas y yacimientos de oro, las
actividades de exploración, explotación, almacenamiento, tenencia, transporte,
circulación y comercialización interna y externa de oro, el Gobierno Nacional promulgó
la Ley Orgánica que Reserva al Estado las Actividades de Exploración y Explotación del
Oro, el 23 de agosto del presente año.
Asamblea Nacional / 25
Esta Ley reserva al Estado las actividades primarias de exploración y explotación
conexas y accesorias al aprovechamiento de dicho material y la creación de empresas
para su ejercicio. Además, establece las infracciones, los delitos y las sanciones al
ejercicio ilegal de las actividades vinculadas al aprovechamiento del oro.
Esta Ley permitirá seguir avanzando hacia la consolidación de la independencia
nacional y la fortaleza de la economía del país, buscando de esta manera revertir los
graves efectos del modelo minero capitalista, donde el control ambiental no existe y lo
único relevante es extraer el mineral.
Con la nacionalización del oro, se fortalecerá el desarrollo nacional y el buen vivir
del pueblo, respaldando la defensa y consolidación de la soberanía nacional del país.
Política presupuestaria prudente: El compromiso que encara el Gobierno
Bolivariano de seguir avanzando en la conformación de un orden económico de justicia
y equidad, requiere inexorablemente de la intensificación de esfuerzos por parte de la
Administración Pública Nacional, en la aplicación de una verdadera racionalidad
económica, conducente a erradicar los vicios incrustados en la estructura estatal a lo
largo del período puntofijista, lo que posibilita el reforzamiento de los inmensos logros
sociales alcanzados en la última década.
A tales efectos, en materia de hacienda es necesario reafirmar la vigencia de dos
grandes objetivos: Primero, mantener el control de la renta petrolera; y, segundo, seguir
perfeccionando los mecanismos distributivos de dicha renta para proporcionar al pueblo
venezolano la mayor suma de felicidad posible.
El Presupuesto. Como instrumento cable de la política fiscal es el hilo conductor
de la gestión financiera del Estado con la estrategia de desarrollo, cuyo énfasis está en
la inclusión social. La aplicación del criterio de prudencia en la formulación de los
presupuestos nacionales para los ejercicios 2009, 2010 y 2011, constituyó un factor
fundamental en la asignación del gasto para privilegiar el interés colectivo y contribuir a
la eficiencia de la economía nacional en términos de los objetivos planteados.
Asamblea Nacional / 26
Bajo esa lógica presupuestaria, la gestión financiera del Estado ha apoyado la
transición al socialismo, promoviendo la participación protagónica del pueblo en el
proceso de transformación nacional, mediante la orientación de cuantiosos recursos
provenientes de la renta petrolera al beneficio de las grandes mayorías en el marco de
la política social basada en la visión de derecho.
Al realizar la utilización de estos recursos para financiar los programas de
inversión social, construcción de infraestructura, fortalecimiento de sectores productivos
y el ordenamiento de la actividad económica interna, todo ello bajo la premisa de la
soberanía económica, la política fiscal ha apoyado eficazmente el proceso de
transformación social y económica.
Asimismo, esta política ha permitido enfrentar con éxito las coyunturas
económicas adversas como las generadas por la detonación de la crisis del capitalismo
en el año 2008 y la ocasionada por los cambios climáticos en el año 2010.
Todo ello habría sido imposible bajo la concepción presupuestaria de la Cuarta
República, cuyo principal signo fue la distribución clientelar del ingreso en detrimento de
la gran mayoría de los venezolanos. (Aplausos).
Para adecuar la política presupuestaria a los fines propuestos por el Gobierno
Nacional, más allá del análisis técnico-financiero, fue necesario cuestionar los métodos
tradicionales de hacer finanzas públicas en Venezuela, observándose que en ello se
privilegian las formas bajo las cuales subyacen, por una parte, los más regresivos
esquemas de distribución; y por la otra, la repetición de dichos esquemas en cada
ejercicio fiscal de manera casi automática.
Para sustituir estos métodos se han venido adoptando criterios de auténtica
racionalidad económica como es la prudencia en la política presupuestaria.
Con la adopción de este criterio se ratifica la visión de aunar la siembra del
petróleo teniendo como campo fundamental de las capacidades humanas en tanto
Asamblea Nacional / 27
liberadoras del ser y forjadoras del potencial productivo con miras a cosechar riqueza
espiritual, moral y material en manos del pueblo, está en contraste con la lógica
puntofijista que al sembrar burocracia clientelar, además de concentrar el beneficio en
las élites, generó cada vez más injusticia, ineficiencia, dependencia y miseria.
Por ende, para profundizar el proceso de transformación económica y social de
Venezuela hay que romper definitivamente con la concepción administrativa basada en
el formalismo y adoptar una disciplina político-administrativa de verdadera eficiencia en
la captación y el uso de los recursos del Estado, bien por parte de los funcionarios
gubernamentales o el de los beneficiados.
En tal sentido, es necesario complementar eficazmente una de las principales
conquistas de este proceso político como es la conciencia colectiva respecto a los
derechos soberanos sobre las inmensas riquezas naturales de nuestro país, con la
adopción del principio de racionalidad económica como herramienta clave para
maximizar la utilidad social de la misma. (Aplausos).
La idea es promover en el pueblo la plena comprensión de los procesos que
permitan explotar nuestras riquezas naturales que están sujetas a limitaciones del
entorno que condicionan la disposición espacial y temporal del producto, es decir, la
relatividad de la abundancia.
Asimismo, el reforzamiento de la conciencia popular acerca de la naturaleza no
renovable de los hidrocarburos contribuirá a afianzar el compromiso colectivo con las
generaciones futuras, tanto la dirigencia política como los administradores de fondos
públicos tenemos la responsabilidad de contribuir con la formación de esta conciencia a
nivel popular e institucional, a fin de que el pueblo y los funcionarios como parte de él,
participen de manera activa y protagónica en la aplicación de una auténtica racionalidad
económica, lo cual sin duda alguna encarga la necesidad de impulsar cambios
estructurales en el aparato del Estado.
Asamblea Nacional / 28
Más aún, con la intensificación de la crisis del capitalismo mundial y los efectos
que en consecuencia se ciernen sobre nuestra economía, popularizar el principio de
racionalidad económica y prudencia presupuestaria a partir de la gestión fundamental
se convierte ello en un imperativo.
En términos más concreto, esto supone:
Primero: El desarrollo de procesos de análisis en las diferentes instancias políticas
gubernamentales, sociales y comunitarias que permitan valorar la situación de la
economía, las amenazas y oportunidades, los problemas planteados y su generalización, la disponibilidad real de los recursos, así como el examen detallado de
las alternativas de solución, lo que permitirá fundamental racionalmente las decisiones.
Segundo: El poder fomentar permanentemente la conciencia social en torno al
trabajo como un derecho y un deber, medio fundamental para el desarrollo del país, la
satisfacción de las necesidades familiares y la realización personal.
Tercero: Que los líderes políticos, institucionales y comunitarios promuevan día a
día la responsabilidad colectiva individual sobre el uso eficiente de los recursos y
motiven el alto desempeño humano, lo cual ha de traducirse en economía que servirán
a su vez como referentes positivos.
Cuarto: El comunicar claramente los compromisos institucionales y las tareas que
corresponden a cada funcionario y apoyar el proceso de educación continuo en las
organizaciones, identificando las brechas técnicas para focalizar las iniciativas de
capacitación.
Quinto: El fortalecimiento de las organizaciones gubernamentales, con énfasis en
la calidad del servicio, teniendo como base la evaluación de los procesos y resultados
ayudará a identificar y a resolver oportunamente los cuellos de botella. Esto, junto a la
implementación de un adecuado sistema de control interno, con énfasis en los
Asamblea Nacional / 29
elementos de fondo más que en las formas, coadyuvará a minimizar el burocratismo
responsable, en buena medida, de la sobrepoblación institucional.
Sexto: Conjurar esfuerzos para impulsar iniciativas orientadas a la producción de
bienes y servicios en los diferentes ámbitos de lo publico, lo social y lo privado. Lo cual
contribuirá a moderar tanto las presiones inflacionarias como las presupuestarias.
Séptimo: Alcanzar una sana programación financiera para que los recursos
presupuestarios disponibles cumplan los objetivos para los cuales han sido formulados,
contando particularmente con la contraloría social de las comunidades y profundizando
la participación protagónica del pueblo.
El Presupuesto para consolidar el desarrollo. El Presupuesto como palanca del
desarrollo. La elaboración del Presupuesto y sus lineamientos son indicadores de
referencia para los hacedores de políticas, inclusive para los agentes económicos y
sociales en cuanto a la toma de decisión de cómo destinar sus recursos disponibles
para consumir, ahorrar e invertir.
Para la elaboración del Presupuesto se definen premisas macroeconómicas que
moldean los niveles de ingreso y gastos presupuestarios previstos en aras de atender
las necesidades del aparato gubernamental. Estas premisas generan expectativas
sobre la previsión del desempeño de dichas variables en la economía y en la sociedad
venezolana, por lo que transfieren la capacidad que posee la política económica de
influir y señalizar el logro de un escenario deseado para la sostenibilidad de las finanzas
públicas en el corto, mediano y largo plazo.
El Presupuesto contribuye con el cumplimiento de ciertas metas macroeconómicas
como la Meta del Crecimiento. Dentro de la fase de la recuperación económica que vive
el aparato productivo venezolano el rol de la política fiscal, prudente y distributiva,
permite impulsar la demanda agregada, acelerar el multiplicador del crecimiento y
satisfacer las necesidades sociales de la población.
Asamblea Nacional / 30
Cuando se observa el desempeño del gasto primario en términos del PIB y la tasa
del crecimiento del PIB real, se demuestra que existe entre dichas variables una
importante correlación indicativa de que en Venezuela el gasto fiscal es una
herramienta de promoción del crecimiento económico en tanto posibilita, por una parte,
destinar recursos a la inversión productiva y social; y por la otra, expandir el consumo
otorgando un mayor poder adquisitivo a los individuos, con lo cual se crea un efecto
multiplicador sobre la oferta que tiende éste a fomentar la ampliación de la capacidad
instalada, tanto en infraestructura como en bienes, materias primas, bienes intermedios
y de consumo finales y los servicios.
En este contexto, la elaboración del Presupuesto apunta a tres objetivos
fundamentales: sostenibilidad y sustentabilidad de las cuentas fiscales, apalancamiento
del crecimiento económico y la distribución de la riqueza para la inclusión social y el
mejoramiento del nivel de vida de la mayoría de la población venezolana.
Propuesta del Proyecto de la Ley de Presupuesto Nacional 2012.
Premisas macroeconómicas: La política presupuestaria para el año 2012 desde la
acción del Gobierno central estará orientada, en primer lugar, a la atención de los
riesgos económicos externos; a tales efectos es indispensable mantener un escenario
de prudencia fiscal que tenga como piloto central el establecimiento de premisas
conservadoras de precios petroleros para contrarrestar los impactos externos que sobre
la economía pudiese causar la caída del ingreso petrolero.
Así mismo, la austeridad y transparencia, como medios para un manejo eficiente
de los recursos del Estado, permitirán mantener la estructura financiera del sector
público en un escenario de sostenibilidad fiscal.
Para el año 2012 la economía nacional mantendrá su fase de crecimiento, la meta
de inflación se ha fijado entre un 20% y un 22%, se mantiene el tipo de cambio, el
Presupuesto se sustenta en principios de austeridad, eficiencia, responsabilidad y
estabilidad, manteniendo la inversión y el pago de la deuda social acumulada.
Asamblea Nacional / 31
Estructura y distribución del Presupuesto Nacional: En la formulación de la Ley el
Presupuesto para el año 2012 se recoge un conjunto de medidas orientadas a
minimizar y neutralizar los posibles impactos negativos que la crisis financiera global
pudiese traer sobre los avances que en materia de desarrollo económico y social exhibe
la Revolución Bolivariana.
Para la prohibición de la contribución fiscal petrolera durante el ejercicio 2012, el
Ejecutivo Nacional estimó un precio promedio de realización de la cesta venezolana de
50 dólares el barril, el cual recoge de manera prudente las expectativas del mercado
internacional de crudo.
Para continuar en la senda del crecimiento económico poniéndolo directamente al
servicio de la evolución del desarrollo humano, se mantiene el financiamiento de las
políticas sociales en nivel que estimulen e impulsen el desarrollo productivo socialista.
En el proyecto de Ley de Presupuesto para el año 2012 asciende a 297 mil 836
millones 717 mil 988 bolívares, lo que implica un incremento respecto del presupuesto
inicialmente aprobado en el año 2011 de un 45,6%.
A continuación se presenta la distribución de los ingresos y gastos de la Ley del
Presupuesto para el Ejercicio Fiscal 2012.
En el Presupuesto de Ingresos, 233 mil 064,9 millones de bolívares corresponden
a ingresos ordinarios y 64 mil 771,8 millones de bolívares a ingresos extraordinarios.
Los ingresos ordinarios están constituidos principalmente por los recursos de
origen petrolero, que ascienden a 67 mil 813,1 millones de bolívares y representan el
22,8% del presupuesto.
El resto los recursos ordinarios corresponde a los ingresos no petroleros que
alcanzan a 165 mil 251,8 millones de bolívares, los cuales representan el 55,4% del
presupuesto.
Asamblea Nacional / 32
La recaudación del Servicio Nacional Integrado de la Administración Aduanera y
Tributaria, Seniat, aporta 151 mil 322,5 millones de bolívares; mientras que el resto lo
definen las telecomunicaciones, la actividad minera, la contribución por impuestos a la
gasolina, derivados y otros.
Esta proporción consolida lo ingresos fiscales no petroleros como la principal
fuente de financiamiento del Presupuesto Nacional.
Por su parte, el Presupuesto de Gastos alcanza la cantidad de 297 mil 836,7
millones de bolívares distribuidos en los rubros siguientes: 154 mil 910,2 millones de
bolívares en gastos administrables; 69 mil 505,5 millones de bolívares en gastos
legales; 54 mil 715 millones de bolívares en servicios de la deuda y 18 mil 707 millones
de bolívares en proyectos por endeudamiento.
Ley Especial de Endeudamiento para el Ejercicio Fiscal 2012.
En el Proyecto de Ley Especial de Endeudamiento para el Ejercicio Fiscal 2012 se
han estimado desembolsos por la cantidad de 81 mil 718 millones 866 mil 395
bolívares, lo cual representa aproximadamente un 27,43% de los recursos totales.
En el siguiente cuadro se muestra la estructura de dicha Ley con la composición
del presupuesto de recursos que se tendrán por vía de endeudamiento.
Los pasivos están discriminados de la manera siguiente: 25 mil 820 millones de
bolívares destinados a cancelar el servicio de la deuda pública, los cuales representan
un 31,59% del monto total de la Ley Especial de Endeudamiento para el Ejercicio Fiscal
2012. Desembolsos por 18 mil 707 millones de bolívares destinados a proyectos,
operaciones, refinanciamiento y reestructuración de la deuda pública por 17 mil 191
millones de bolívares y por último 20 mil millones de bolívares para la gestión fiscal.
A modo de síntesis, el proyecto de Ley que se somete a consideración de esta
Asamblea orientará la gestión presupuestaria del Gobierno central durante el año 2012
Asamblea Nacional / 33
hacia la profundización de la política social incluyente, como eje de la estrategia
gubernamental humanista, que crea las condiciones para la construcción de una
sociedad más justa, consciente de su identidad, capaz de generar su propio desarrollo y
de afianzar su soberanía.
La vigencia del pensamiento bolivariano que nos guía y la pertinencia del
propósito que nos ocupa han quedado ratificadas con la intensificación de la crisis
global durante este año 2011, luego, de 3 años de su estallido en el mero centro del
capitalismo mundial.
El incuestionable fracaso de las fórmulas neoliberales, aplicados bajo diversos
métodos en los Estados Unidos de Norteamérica y en los países de la eurozona,
teniendo como factor común el sacrificio de los pueblos, dan cuenta del agotamiento de
un modelo que subordina el papel del Estado a los intereses de los grupos dominantes,
quienes, en su lucha por imponerse, afectan al resto del mundo.
El Proyecto Bolivariano que adelantamos rescata el supremo compromiso del
Estado con el pueblo, a través del proceso de inclusión social masiva como factor clave
del desarrollo; gracias a esta orientación hemos podido enfrentar los efectos adversos
generados por la crisis mundial, reduciendo su impacto sobre la mayoría de la población
y retomando la senda del crecimiento en este año 2011.
El Presupuesto Nacional para el ejercicio fiscal 2012 seguirá impulsando la
actividad económica para consolidar un patrón de crecimiento sostenible del producto,
mas no como un fin en sí mismo sino como un medio para ampliar la base material que
posibilita la construcción de la nueva sociedad venezolana en la que estamos
empeñados.
En tal sentido, intensificaremos esfuerzos para fortalecer las capacidades
productivas del pueblo y para elevar su participación protagónica en la creación de
riquezas, a fin de que el proceso productivo derive en una distribución más justa del
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producto, apuntando a debilitar los factores estructurales de la pobreza, principales
responsables en su transmisión intergeneracional.
En función de este objetivo en el año 2012 imprimiremos mayor fuerza en las
grandes misiones: Vivienda Venezuela, AgroVenezuela y Saber y Trabajo Venezuela.
Asimismo, seguimos valorando la importancia de compatibilizar los objetivos de
desarrollo con el de la sostenibilidad fiscal, a cuyos efectos mantenemos una política
presupuestaria prudente, la cual, junto al manejo responsable de la deuda, ayuda a
reducir el nivel de exposición de nuestra economía a los riesgos del entorno
internacional y estimula la eficiencia en el uso de los recursos públicos, compromiso
ineludible de todos los funcionarios gubernamentales.
Esta política ha sido reforzada por la novísima Ley de Ganancia Extraordinaria y
Exorbitante, que, hasta establecer un tope al gasto corriente, permite direccionar
recursos hacia los planes de inversión, también apoyados por otras fuentes de
financiamiento como las provenientes de los fondos nacionales y los conformados en el
marco de acuerdos entre países.
Por otra parte, se debe destacar que, al igual que en los presupuestos anteriores,
para el año 2012 se establecieron las correspondientes asignaciones legales a los
poderes distintos al Ejecutivo, así como lo gobiernos regionales y locales, ratificando
nuestra voluntad de cumplir a cabalidad con la Constitución y las leyes de la República.
La política presupuestaria sostenida por el Gobierno Bolivariano a partir de la
superación del golpe de Estado en abril de 2002 y el sabotaje petrolero a finales de ese
año e inicio del 2003, posibilita con una política presupuestaria prudente, junto a una
política social incluyente, el tener un aparato burocrático que sea más eficiente con una
mejor calidad del gasto.
La política presupuestaria con precios petroleros estimados a 40 dólares barril en
los últimos 3 años ha logrado que los excedentes petroleros se destinen a financiar la
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inversión social y productiva, impulsando el crecimiento económico, la reducción del
desempleo, el cumplimiento de las metas del milenio, la reducción de los niveles
absoluto y relativo de la pobreza, el aumento del índice del desarrollo humano y la
mejor distribución de América del ingreso de América latina. (Aplausos).
Con estos logros –óigase bien– alcanzados sin traumas sociales se legitima la
acción del Gobierno Bolivariano, presidido por el Comandante Hugo Rafael Chávez
Frías, a diferencia de los conflictos originados por la Cuarta República, el Fondo
Monetario Internacional y el Banco Mundial en la década de los ‘80 y los ‘90, así como
los causados por los ajustes neoliberales que actualmente viven dramáticamente la
sociedad norteamericana y la sociedad europea.
En este orden de ideas y en atención al compromiso que tenemos con el pueblo
venezolano, se somete a la consideración de esta Asamblea Nacional los Proyectos de
Ley Especial de Endeudamiento Anual para el Ejercicio Fiscal 2012 y Ley de
Presupuesto para el Ejercicio Fiscal 2012.
Finalmente, recordando la enseñanza que sobre el sentido de la oportunidad nos
legó el maestro Simón Rodríguez al señalar que “el tiempo es el lugar de la acción”, se
convoca a la voluntad popular para contribuir con los grandes objetivos planteados a
través de la dedicación al trabajo productivo, el manejo responsable de los recursos, la
contraloría social y la defensa de los derechos colectivos como fórmula para profundizar
la inclusión social en estos tiempos de crisis capitalista.
Muchas gracias. (Aplausos).