díaz mirón - poesías

7/30/2019 Díaz Mirón - Poesías

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POESIAS .

, , - CO.,bevr . .. :JO-A!VIE; ',4.

241-248 GREENW~CI:T

NEW YORK.

1806.



VICTOR HUGO

bQu6 palabra mejor que la que cantat

kQu6 imbres de mits prez que 10s que encierraese rey tiunfador a cuya plant.

ea un mexquino pedestal la tierra?

bQu6 fuerza mirs divinn

que la de ese Titlin que esoala el cielo,

desafiando a1 rayo,-que fulmina

todo lo que se empina

sobre este bajo y miserable suelo:espiritu y volcan, torre y encina?

El dnd or gigantesco de 10s Andes,

el buitre colosal de orlado cuello,

no ha batido ja& alas tan grand-,

ni ha visto de tan oerca un sol tan be110 l



El poeta ea el antro en que la oscura

sibila del progreso se revuelve ;

el vam en que la vida se depura,

y, libre de la eacoria, se resuelve

en verdad, en virtud y en hermcaura!

1no hay gloria de m L laros arrebolea

que la de ser, en la penumbra inmenaa,

uno de esoe crisoles

en que la luz del alma se condenaa,

como el fuego del Bter en lca soles!

** *

El vidente est& aU, noble y sereno:

si 10s hombres lo afligen porque ea bueno

y en su yerma heredad siembran la ortiga,

el lm consuela, y del terrufio ageno

recoge el cardo, como Ruth la espiga!

iArb01 que el viento del otofio hiere

en la hoja, en la flor, en el retofio!

iArbol que al viento del otofIo muere

y que perfuma el viento del otoflo!

Todo el vapor que del pantano sube,

mia ed ti co y sombrfo,

se cuaja arriba en tormentoea nube,

ipero desciende en bienhechor m i o !

lQuB importa que el sublime Prometeo,

tmjo el chispam que su frente a h ,

muerda el polvo en la lid, si, como Anteo,



se endereza mayor siempre que cae?

La rtifaga que zumba

no ha de apagar la estrella.

iDejad que al fin el trovador sucumba

;la uz de su estro, como nunca bella,

Brotarh por las grietas de su tumba!

tocar el cielo en el batido estuario,

anr de tu ideal I-TC, como Cristo,

completaste el Tabor con el Calvario !

Misionero de luz propicio a1 ciego,

tu genio, semejante a un meteoro,

110~i6 esde el cenit lenguas de fuego

y abri6 en la inmensidad surcca de oro !

-No 0s cierto que tu espiritu est6 falto

de esa unidad esplhndida y brufIida

que constituye el mbrito miLs alto

de un kbro, de un diamante y de una vida;

pero pagaate el natural tributo 1Primero, el huevo, y en seguida el aveEs fuerza que la flor preceda a1 fi-uto

y el hombre empiece donde el niflo acabe

Roja y azul, la sangre que te anima

him da ti la aurora que refleja

la phpura dele01 que se aproxima



y el zafh de la noche que se aleja.Tu frente audaz, que el pensamiento arruga,

puede dzarse sin mancha! Dios te impele.

Nadie reprocha B la rastrera oruga

que se convierta en maripoaa y vuele!-

Envueltos en su W c a nconsiltil,

tus veinte a0os de destieno girnen.. .

El crimen te absolvi6. .. I Pero fu6 inhtil '

jtA no absolviste a1 crimen !Y alli, de pie mbre tu peiia mla,

nueva Pcithmos cefiida por la ola ;

df i, vuelto a 10s rbprobos distantes,

y en tu lengua de hip(?rbolesy elipsis,

lanzaste, nuevo Juan, 10s fulgurantesrelhmpagos de un nuevo Apocalipsis!

Y tu no fuiste el h i c o en el duelo,

en la pena, en el Mlgota, en la injuria. .cuanto era cumbre 6 remontaba ruelo .sufri6 el embate de la misma furia.

Maa, p6mo pudo ser? ~ q u buerza extrafla,

quti ingente cataclislno

decapit6 de u n golpe la montafla,

aventando sus crestas a1 abismo?

iQu6 tempestad de tenebrosos rastros,

qu6 eetallido de homo



rompi6 el volc&n, bajo eu nimbo de as-,

arrojando s m Bgui laa en torno?

I P r o f d o el augusto tabemkcdo

y erguidos y triunfantes l a protsrvoa!

iApagada la zarza en el phticulo

y alli agrupados en festln 10s cuervoa !iEl pueblo mbyugado por la tropa;

el pueblo audaz que con ardor fecundo,dando su w g r e en holocansto B Europa.

reivindic6 la libertad del mundo !iRadiantey vencedor el cult0 f a h

La virtud perseguida con encono!iEl deber espirando en el cadalso

y la infamia senandose en el trono

I Oscurecido el sol iLa Francia esclava!-&En d6nde estaba Dios, que no vela,

puesto que ad dejaba

prevalecer la noche sobre el dh9-

* *

I Oh poeta Tu espiritu enamora:

es cual la '&tatuaque el egipcio estulto

honraba por sonora:

tiene el supremo pedestal: el oulto,

y la suprema inspiraci6n: la aurora!

8i ival cuando canta y cuando y gime,

tu voz reina en el duelo y en la 5ea ta

Tusv e m eon la mimica enblime,



6 SALVADOR ~ f a z I R ~ N

no de una lira, sino de una orquesta!

No hay nota por tu acento no emitida:

tan grande en la inquietud como en la calms,

tocaa todo el registro de la vida.

r e c o m todo el diapasbn del alma !Siempre con igual bxito, tu numen

brota en odas, idilios y elegias;

y es que en ti se completan y resumen

Plndaro, Anacreonte y Jeremias1

Tu genio no es el %lido infecundo

que en vano estalla en el celaje incierto:

es la columna que dirige a1 mundo,

camino del EdBn, por el desierto

El ideal que el porvenir reserva

y que hace ahora su primer ensayo,

mldria de tu frente, cual Minerva

surgi6 de la cerviz del dios del rayo !h g e l e s que combaten con v d g l o s

y que alcanzan victoria traa victoria,-

tus himnos brillan como el sol!-La l~istoria

no ha producido en 10s mayores siglos

gloria que pueda superar tu gloria!

** *.............................................iContemplad al coloeo!

iVed c6mo lucha lucha y no desmsya;



d m o p h adiant0y magestuoso,

el mirs alto crest6n del Himalaya:

d m o a]&-puesto en Dim el peneamiento,-

revela un nuevo mundo en cada grito.. ..Atha en que BE apoya el firmamento!

I Atalaya que explora el infinito



S U R S U M

I Cuirn grata es la ilusion 8 cuyos lampos

tienen perenne vida 10s amores,

inmarcqible juventud 10s camp-

y embriagadora eternidad las flow !C u h vivido ea el iris que colora,

magia oriental, la suspirada orilla,

y iL cuyo hermoso resplandor de aurora

radia hasta el fango que despues mancilla !La verdad, si engrandece la conciencia.

devora el corkzen, nunca sumiso:ea el fruto del kb o l de la ciencia,

y siempre hace &rder el paraiso.

Mas aunque el bardo mate la quimera,



y desvfe g. aparte de sus ojos

el prisma encantador y por doquiera

mire sombras y vbrtices y abrojos,

ha de cantar la redentora utopia,

como otra estatua de Memn6n que suena,

y ser perditla la e sp ra nza propia

el paladibn de la esperanea ajena

Cuando el mundo. ese Tantalo que aspiraen van0 a1 ideal, se dobla a1 peso

de la roca de Sisifo. y espira

quemado por Ia timica de Neso ;

cuando al par tenebroso y centelleante

imita 4 Barrabhs y d o r a a1 Justo,

y pigmeo con ansias de gigante

se retuerce en el lecho de Procusto;cuando gime entre horribles convulsiones.

para expiar sus criminales yerros,

mordido por sus avidas pasiones,

como Acte6n por sus voraces perros.

cuando sujeto 6 su fatal cadena

arrastra sus desdichas por 10s lodos,

y cada cual, en su egoista pena,vuelve la espalda ti la dicci6n dde todos ;

el cate, con palabras de consuelo,

debe elevar su acento soberano,

y coneagrar, con la canci6n del cielo,

no su dolor, sino el dolor liumanol



Sacro blandbn que en la capilla austera

arde sin tregua, como ofrenda clam.

y consume su pitbilo y su cera

por disipar la lobreguez del am ;

vaso glorioso en donde Dios resume

cuanto es amor, y que para alto ejemplo

gash y pierde su llama y su perfume

por incensar en derredor el templo ;

sublime Don Qujiote que ambicione

caer a1 fin entre el fragor del rayo,

torcida y despuntada la tizona

y abierto y rojo por delante el sayo;

ave f h i x quo en fhlgidas empresaa

aviva el fuego de su hoguera dura,

y muere convirtiitndose en pavesaa

de que renace victoriosa y pura. ..i Eso es el bardo en su fatal destierro

Cantar & Filis por su dulc@nombre,

cuando grita el clarin : 1despierta, hierro I1 Eso no es eer poeta, ni ser hombre

Mientras la musa de oropel y armiflo

excecra el polvo por amar. la nube,y Ince sus plumm con la fe de un niflo

y hacia un azul imaginario sube;

mientras Ofelia, con el pecho herido

por Hamlet y sus tragicos empeflos.

marcha 6 la3 on+! 401 eterno olvido,



cogiendo flores y cantando sueflos;

el numen varonil entra en la arena,

prefiriendo a1 delirio y a1 celaje

la ciudad con sus ruidos de colmena

y el pueblo con sus furiaa de oleaje;

y contempla la tierra purpurads.

y toma y a h , on piedad sencilla,

un mon th de eaa arcilla en-grentada. ..yese

montbli de ensangrentaharcilla

adquiere vida entre eu mano estoica,

vida inmbrtal y fulgurantee alas.

y en 61 respira una belleza heroica,

como en la estatua de la antigua Palas!

Guardar silencio y power la trompa,

la recia trompa a cuya voz no exigua

vendria & tierra, con su estkril pompa,

el muro hostil de la ciudad antigua ;

eer un Aquiles qu& la lid prefiera

recordar B Briseida en el retiro,

sunque Patroclo batallando muera. . .1Eso es mentir 4Dios! Pero qui3 miro !

Cual la crin del raudal que de alto arranca,

tus cabellos se agitan.. . I Oh maestro!

~ P o ru8 sacudes la cabeza blawa,

cud si quisieras arrojar el estro?

~ P o ru6 no te a h la faz de Ehrmodio,

y no repel- cuando Atenas grita,



esa montaila de calumnia y odio

que ~ o b mu hombro de titjtn gravita?

Tu Etna serP para tu'fuerza flojo;

confia en t i y & tu misi6n no faltes,

que al hado cruel que lapid6 tum j o

irh el volchn cuando debajo saltes!

I Rompe en un himno que parexca un trueno 1El ma1 impera de la choza a1 solio;

todo es dolor 6 iniquidad 6 cieno;pueblo, tropa ,senaao y capitolio.

iCanta la historia a1 porvenir que asoma,

como Suetonio y Tlrcito la escriben!

1Cantala a&, mientras en eata Roma

Tiberiosreinen y Seyauos priven!

iAbre la puerta a1 entusiasmo ausente ;

mueve de un grito el desusado gonce;

y como B chorros de fusidn nrdiente,

vierte en 10s mimbres el vigor del bronce

i Derrama el verb? cuyos soplos crean

la fe que anima y el valor que salva,

y que & tu acento nuestras alrnas sean

como tinieblas que atraviesa el alba 1Para el poeta de divina lengua

nada es estkril, ni la misma escoria.

si cuanto bull; en derredor es mengun,

sobre esa mengua esparcirl la gloria

1m



No intentea convencerme de to-

con 10s delirios de tu mente loca 1mi raz6n es a1par lux y ilrmeza,

firmeza y lux oomo el cristal de roca I

Semejante a1 noctunio peregrine,mi esperanza inmortal no rnira el suelo:

no viendo m L que sombra en el camino,

d l 0 contempla el esplendor del cielo

Vanas son lae imagenes que entmfia

tu esphitu infantil, santuario oscuro

tu numen, como el oro en la montatJa.

es virginal, y por lo mismo impuro 1

A trnvbs de este v6rtice que crispa,

y Bvido de brillar, vuelo 6 me arrastro

oruga enamorada de una chispa,

6 Bguila seducida por un astro '



16 SALVADOR ~ f a z Rd~

InCtil es que con ten= murmullo

exageres el lance en que me enredo :yo soy altivo, y el quo alienta ory llo

lleva un broquel impenetrable al miedo!

Fiado en el instinto que me empuja,

desprecio 10s peligros que s e W s .

"El ave 0811tn aunque la rama cmja :

como que sabe lo que son sus alas "

Erguido bajo el golpe en la porfia,

me siento superior a la victoria.

tengo fe en mi: la adversidad podria

quitarme el triunfo, p r o no la gloria I

Deja que me persigan 10s abyectos!

I Quiero atraer la envidia aunque me abrumel

la flor en que se posan 10s insectos

ea rica de matiz y de perfume !

El ma1 es el teatro en cuyo foro

la virtud, esa tragica, descuella;

ee la sibila de palabra de oro;

la sombra que ham r e d t a r la estrella 1

I Alumbrar es arder ! iEstro encendido

sera el fuego voraz que me consuma!

la perla brota del molusco herido

y Venus nace de la amarga espuma!



Los claros timbres de que estoy ufano

h n de salir de la calumnia ilesos.

Hay plumajes que cruzan el pantano

y no ea manchan. . Mi plumaje es de esce !

1Fuerza ea que suf ra mi pasion!-la palma

rrece en la orilla que el oleaje azo ta

El mbrito ee el nhufrago del aha :

vivo ee hunde ; pero muerto flota !

Dep6n el ce0o y que tu voz me arrulle

Com ela el coraz6n del que te ama!

Dios dijo al a y a del torrente : bulle !y al lirio de la margen: exnbalsama'

Conformate, mu er I-Hemos venido

a eate valle de lkgrimas que abate,

t5, omo la paloma, para el nido,

y yo, como a1 le6n, para el combat.!



A BERTA

Ys ue erea grata como el d o ,

ya que ere8 bella oomo el querub,

ye que erea blanca como el armiflo,

BB siempre in&nua, sB siempre I 5

El t o p engaflo que el vioio f r a y a

nunca ee aviene con la virtud.

S6 tnqarente como ea el agua,

como ea el aire, como es la luz !Que tu +bra--dulce armonia

que tu alma exhah como un laiId,

como una alondra que anuncia el diLI.

press en la sombra que flota ah , - -

sea un arroyo sereno y puro

do,a1 inclinarme como un ah.

mire guijas del fondo oecuro

y leeeatrelh del cielo aeul



ASONANCIAS

Sabedlo, eoberanos y w d o s ,

pr6ceres y mbndigos.nadie tendrh derecho & lo superfluo,

mientras alguien carezca de lo estricto.

Lo que llamamos "Caridad, " y ahora

es &lo un m6vil htimo,

sera en un porvenir lejano 6 pdxirno

el re8ultado del deber escrito.

Y la Equidad se sentara en el trono

de que huya el Egoismo,

y 4 la ley del embudo que hoy impera,

aucederB la ley del equilibria.



R I T M O S-Cuando vienen Q. nli esos recuerdoe,

candentea efluvios de abril y de aurora ;

a1sentir ese freaco rkcio

de gotas de cielo, yo sufro en mi sombra

lo quescam

padece en la suyael tktrico sauce, guirnalda mortuoria,

cuando un grupo de vividos phjaroe

f d v o y cantante se esparce en su copel

(C* *

Como la ola a1 romper en la orilla,

corona de espuma la pe0a en que chocs;

como el sol abrillanta la nube

con un arco iris de tintas radiosas;

como el kbol fragante perfuma

el viento de otofIo que a m 0 8 us hojae,

el poeta, eae m hti r del genio,

conssgra su angustia con himnoe de gloria



*+

Inmortal pewmien to de pens

que llevo en l a frente como una aureola,

sal del labio en corrientes de m bica

y alienta y caut ira las ansias que lloran. ..1hi el hielo que cifIe la cumbre,

do nunca se mecen matices ni aromas,.

baja en crespos raudales de p l ~ t ay cubrc de florcs 10s campos que borda!

.............................................

............................................Pen, n6 Permanece en tu cima IOh escarcha I oh tristeza I no brotes no es hora !

No desciendas No quiero que seas,-en vez de la linfa que esmalta y abona,-

la bola de nieve que crece en su cureo

y es luego avalancha que aplasta y arrolla



EN UN ALBUM

Dicen que el nauta qne fmuenta d hielo

del yermo boreal,venciendo el fr10,

recibe B vece~ e ignorado cielo'

una olorosa rhfaga de estio.

IQu6 beao el de talMto de paeo

iQu6 fruici6n I Qu6 delicia I Qu6 embeleso

iMlo un beao de amor produce ac-

mayor placer que semejante beso l

Puea bien;

yo experiment0& tue

miradaelo que en el polo el peregrine siente,

cuando una de esas brieas perfurnadas

va de otro clima B acruiciar su frenta.

En mi noche invernal, Dim ha querido

que el reaplandor de tue pupilas fuera

un efluvio de raeas difundido

en un rayo'de sol de primavera



COP0 DE NIEVE

-Para endulzar un poco tus desvios,

5jm en mi tu angelical mirada,

y hundes tus dedos phlidos y friosen mi m r a melena alborotada.

Pero en vano, mujecl No me consueha!

Eettlmos separados por un mundo !gPor qu6, si eres la nieve, no me hielas?

~ P o rub, si soy el fuego, no te fundo?

Tu mano espiritual y trasparente,

cuando &cia mi cabeza esclava,

es el copo glacial sobre el ardiente

vol& cubierto de cenizs y lava



J U S T I C I A

M z nsconwnir en

ello:twlo hombre e!, unpecador:

no hug die que en LW interior

no estd con la s o p a1 cuello.

An6nimo.

Cefludo y calenturiento,

s u d o a frenta fiera,

como si ad consiguiera

arrojar el pensamientoPero altivo en mi tormento,

'

miro el tiernpo que pas& .que laa faltasen que yo-

-1 como hornb-in&,

podrh afligirme, rd ;

per0 acergonzarme. 6 1



96 SALVADOR D& ACIR6X?

Dicen que todo mortal,

haste el que lleva una,palma,

ea,por el f d o de su aha,

un condenadoa1dogal

Mas no tienen me& igual

la pivpura y el andrajo:

cuando el culpable no eaWo,

es menos vil su sentencia. .Por eso yo en mi conciencia

.) reclamo el hacha y el tajo!



VOCES INTERIORES

Bruto partiendo el coraz6n de CBaar;Esparbo aaolando la Campania;

Tell rechazando con el pie el esquife;

Cromwell ante el suplicio de un monarca;

Mirabeau en el Tabor de laa naciones ;

Bolivar con tres pueblos BL la espalda;

Hidalgo predicando el exterminio

y Grant blandiendo su invencible espada,fueron volcanes que estallaron; f ueron

llagas contra ailicios sublevadas;

fueron ray- forjados en laenubes

formarlae lentamente por larc lagrimaa

que, convertidas en vapor, habian

subido a1cielo BL demandar venganza

De tiem- que han sufrido convulaionee

de cr&tereay v6mitos de lavas,

surgieron siempre& deleitar los ojoa

lae florea de hermoeuram h ga3larda

Sobreodim y deaaatrea y congojas,

wbre estragoe y c6leraay aneias,



a8 SALVADOR D ~AZWNsobre anse y temblores y tinieblaa,

Dios puso el ideal y la esperanza

El Nilo desbordzdo y tormentoso

inunda con violencia la comarca,

J- es invasi6n de.fangos por doquiera;

pero en e m arenas calcinadas

ears invasi6n de fangos es la vida,

y ese, invaai6n de fangos es sagrada!

I Oh rayos que os forjais entre las nubes

formadas lentamente por laa lagrimaa

~C'uitndoulminareisB 10s sayones

que oprimen y envilecen el Anahuac?

IOh Nilo desbordado y tormentoso

que inundas con violencia la comarca!

~ Q u 6rimavera endorm6 el desierto,cuando retires tus impuras aguas?

bQu6 incubaci6n de pr6ceres palpita

entre tanta abyeccibn y tanta infamia?

bQu6 paladines pu rga rh l a tierra

en donde d l o en 10s escudos de armaa

hay hguilaa que triunfen de serpientes

y no serpientes que extrangulen aguilas?

I)

1Silencio ~Quiitnesponde & mis acentoe?

bEs la voz de 10s muertos por la patria?

N6: a voz de 10s muertos fuera triste

y no c a w a enmi6n tan grata.



Oigo un ooro celeste cuyos tonos

' ensordece y oonfunde la di shc ia ,

y me parece cual canci6n de alondra

que anuncia el claro amanecer del alba

Ese dulce murmullo que me alegra,

ese vago rumor que me entuaiasma,

brota quizti de 10s fecundos aenos

de laamujeres que & lo lejos pasan...I Cada una lleva un nimbo en la cakza

y acaso un redentor en laa entrailas!

I Oh hermano de adopcihn, que ems mi orgullo

1m, cuya vida sin doblez ni tacha

puede ostentar la cohaihn supreme

de los diamantes de esplendorsin mancha!

I'I%,ue firme y erguido en la tribuna,como el @6n en donde el Earo radia,

sabea cumplir con tu deber de antorcha

sobre &te mar en que el honor naufraga!

Im, que has ungido tu conciencia indhctil

con la lustral 15 imperceptible grasa

que revelan laa plumaa de 10s cisnes,

cuando del cieno de la inmunda charca,cuando de la on@ corrompida y turbia

emergen secas y resultan blancae

I 'NI que sin a r h ni dolor prefierea

a1vil favor la inmerecidasatla,



a1 oro egpurio la miaeria altiva'

y a1vicio enhieato la virtud hollada

Si no ee una lusi6n de mia deseca

esta concierto que & mi oido canta;

si entre loa c laushs maternales bulle

el porvenir que nuestro afhn aguarda,

idichosos si vivimos para entonces!

Amboe iremoe d la lucha santa,

y unidos moriremos combatiendo,

cual 10s aaldunae de la antigua Galia

iDe la honda de David saldremoajuntos

yo que soy guija y t% que eres montcfla



LOS PAR IA S

AllA en el c k o , cerortdel monte

bajo una higuera como un d d ihubo una choza donde habitaba

uua familia que ya no ea.

El padre, muerto ;Gmadre , muerta;

10s cuatro niilos, muertos tambib :

id,de fatiga; ella, de angustia;/

Ha mucho tiempo queN 1 bohior.-

y me par- que ha ado ayer.

1Desventuradoe Alll aufrfan

ansia sin tregua, tortura cruel.

I Y en vano, alzando 10s turbios ojoe, i@ preguntaban, Seflor, por qub;

'

b



83 SALVADOR ~ f a z&N

y recurdan B. tu alta gracia,

dispena?dora de todo bieh l

1Oh Dios1 la8 gentes sencillaa rinden

culto B tu nombre y 4 tu poder :

a ti demandan favor 10s pobrea;

a ti 10s tristes piden merced,

mas CONQ el reugo resulta infitil,

pienso que un dia-pronto tal vez.-

no habrh miserias que se arrodillen,

no habrh dolores que tengan fb !

Rota la brida, tenaz la fusta,

libre el espacio, aque harh el corcel?

La inopia rive sin un halago,

sin un consuelo, sin un placer :

Sobre 10s fangos y 10s abrojoa

en que revuelca su desnudez,

cris querubes para el presidio -y serafines para el burdel t

'%

El proletario levanta el muro,

practicp el tunel, muevo el taller;

cultiva el campo, calienta el homo,

paga el tributo, carga el broquel;

y en la batalla sangrienta y grandc,

blanaq.de el 11iersopor patria 6 rey,

a



enseh a1pr6cer con noble orgullo

como se cumple con el deber

Mas 1ay ~ q u 6ogra con su heroismo?

~ c d ls el premio, cuhl su laurel ?El desdichado recoge ortigas

y apura el c& hash la hez.

Leproso, mustio, deforme, airado,

~0port.apenas tan dura ley,y cuando pasa sin ver a1cielo,

la t i e m tiembla bajo sus pi&!



A LOS HEROES SIN NOMBRE

Milicias que en las Bpi= fatigaa

caisteis, indistintae B ignoradaa,

c u d por la hoz del h t i c o aegadas,

en tiempo de cosecha., las espies ;

Que morieteis & manos enemi-gas,

fulgentes de entusiasmo la s mirdaa,

t i n h hash 10s pufios laa espadas

y rotas por delante laa lorigaa

Oscum Alejandros y Espartacos.

la ingratitud de ruestro sino atrrra

la musa de 10s hi~nnos legiacoa

En las cruentas laborea de la guerra,

sembradora de lauroa, fuisteis sacoa

de estibm l 1ay para abolurr la tierra



GENIOS

Sew-faros que a1 lucir

teneis por fuerza que arder,

cumplid con vueatro deber,

alumbradhaata morir;

luchad por el porvenir;

alzaos sobre la insidia,

que no triunfa quien no lidia

ni ea grande el que se levanta

sin sentir bajo la plank

el pedestal de la envidia!



REDEMPTIO.

Llegub a desesperar.. . gA d6nde iba

yor el mdo pefi6n wreado a tajo ?

Mir6 al cielo, y estaba muy arriba!

La a h a w n su vkrtigo me atrajo;

torn6 a faz & la traspuesta hondura,

vi la tierra, y estaba ~ n u ybajo

Y a la mitad de la pendiente durado el fragoroso alud bota 6 resbala,

dud6 entre la vergiienza y la locura

Y un granbuitre a1 pasar me hiri6 con nu ala;

y 0r6, sabiendo que el incienso sube

a exceleitudes que el wndor no es&



88 SALVADOR D ~ A ZM I R ~ N

Implor6 con fervor... y me detuve

obeervando oon pasmo quemi ruego

re condeneaba alrededor en nube.

Y d g o como una I h g r h s de fuego '

brill6 en em vapor, germen de eatragos,

y dijo B midolor convulso y oiego :

"YO my el numen de tus suefioa rag-;

go my lallamade lazarza ardiente;

gomy la eetrella de loa reyesmagw;

Yo my la Redencibn." Y eco rugiente

8e levant6 del vdle, y parecia

oomo rumor de mar... . Y alc6 la frente

y pum el pie en la nube que parth



EL DESERTOR

~ l l i... junto a1 viejo lnuro

cntre la hierba escondido

I Y el camp, ale ge y florid01

i el cielo, impasible' y puro!

1 Cuadro que tuve delante

y quo hoy como entonces veo

Ante un80th el reo ;

en un Aanm el cornandante.

-1 &n tue ruegos prolijos

~ P o r u6 huiste B la montafia?

Sexlor, porque en mi abafla

estaban sin pan mis hijoa.

-bPor quB trocasteel arado

por el fusil? Fu6 impmdencia.



BALVADOB~aN

-4kBor ha mdo violencia:k eva me hizo soldildo.

-1 Bastal 1Armdillate lu&ol

Iardieciplina em un yugo...Yo no soy mBe que el verdugo....

iPrepzuen l iApunten l 1Fuego

1AU.. . juntoa1 viejo muro

entre lahierba escondido

I Y el campo alegre y florid0

IY el cielo, impasible y puro l



A BYRON

Eras it un tiempo el Bngel y ei vestiglo;

el astro y el cspectro en el cometa;

todo un eiglo hecho hombre; todo un siglo

de befa y de pasi6n hecho poeta.

Te calumniabas con insigne dolo;

y bello y tentador y altivo y fiero,

f uiste un Don Juan que se cantaba d o ,

un Luzbel trovador y aventurero.

n a t a s b a1 mundo como el monstruo it Edipo ;

pasmasta con enigmas la fe ciega;

to pwiste la mhscara de un t i p ,como el actor de la tr ag ed i griega.

Del fango impuro ti tu soberbia frente

aubii, un vapor que oscurcci6 tu juicio:

te dejaste arrastrar por la corriente,

y dish pompa y .splendor a1vicio.



Y tu numen fu6 entonces un ma1 hado,

nutrido y lleno de impiedad sangrienta ;

para csda fanal tuvo un nublado,

y para cada vela una orrnenta l

Llegasta & las supremas ironias,

como cediendo 4 mpulsos espontitneca:

profatmbm la tumba en tus orgias,

bebiendo el vino del placer en craneos.

Tuslfigubres acentos repitieroG

el p i t o atermdor, el gri? mismo

que 10s bajeles de Tiberio oyeron

bajo una tempestad, sobre el abisrno.

Sombra y desolaci6n eran la suerte:vino tu genio, codiciaba palmas,

y fu6 el corcel en qui? mont6 la Muerte

en ese apocalipsisde la8 almas.

Tragico, taciturno, sobrehumano,

entre tanta ceniza y tanto escornbro,

pasaste con tu citara en la mano,

como un verdugo con su hierro al honibro

Cual de una nuhe de borrasca y guerra.

y cn niedio de unit conrulsi6n caiste:

pisaste ortigas a1 tocar la tierra,

y la cruzasta claudifi%ndoy trircte.



Afan de em ipci6n , jamns extinto,

te arroj6 sin cesrrr sobre las naves:

errar de clima en clima es un instinto

en cieltm genios como en ciertas aves.

LBB o h s ta atraian; y niostrabas

vivo placer las riberas solas,

cuando-soberbio nadador-rasgabas

desnudo y Agil y tenaz las olas.

Igual a1 xubr por tu doblez extrafla,

r e f l e j a k el cielo a que kndias;

y audaz y atronador y hecho ~qbntafla,

te alzabas hasta 61 y lo escupias

No envidiabas a1 piblago sus dona :

tG tenhs tambikn impetus, brumas,

trombas, brillos, honduras, explosiones,

monstruos, perlas, voragines y espumas!

~ F u i ~ t en oco?-Tal vez; p r o esplendenk !

El eentido co m h , raz6n menguada,

nunca ha sido ni artista, ni vidente,

ni paladin, ni redentor. . ..ni nada

I M n randes fueron tus postreros dias

1C& excelsos tus irltimos anhelos

$hs Mahfredo en el Jung-Frau: queriir.i

w; eio caer deade los cielos!



~ P o ru6 llevarte 4 la natal ribera?

~ P o ru6 robarb 4 Missol6nghiT ~Acaso

fu6 nuxica tierra panr ti extrsnjera

la tierra del Olimpo y del Pamaso? .LB brit4nica orilla en vano oprime

tu iluetre polyo con su arena recia:

guard& tu aparici6n sublime;

tu verdadero monumento es Grecia

Duerme. Tu gloria crecerh entretanto

mientras palpite el c o d n de un hombre.

Descansa en paz. Las ondas de Lepanto

eternarnente cantarhn tu nombre I

Y cuando la mz&n fria y adusta

dispere un dardo ir tu avuosa vida,

la her6ica sombra de tu muerte augusta

interpondrir su redentors egida



.REQUIESCAT IN PACE

Ante el despojo inerte

del hombre de virtud, yo no maldigo

sino aplaudo la muerte

1Celbbrela corimigo

quien4

ensible coraz6n dB abrigo!

Sf, en asta cruel guerra

el justo anhelarh de polo it polo

dormir bajo la tierra,

ya que sobre ella d l o

reina la fuerza y predomina el dolo

~CuiLndo abrk mar en calma

para el esquife en que, mirando a1 cielo.

boga y suspira el aloln7

La fB se enccge 1oh duelo 1h i 1 0 ave 4 punto de emprender el v&.



La prestigioaa oriUa

esplende all&como fulgor que brota;

mas la fritgil barquilla

que la tormenta azota,

nd Ilegarh sino desierta y rota :

No v e d i s j oh pe rv e m !de irriaorio dolor est4ril k g o ; -

&No y er fufsteis adversoa

a1 vivo mmo oe plugo?

~Plaflecaso & la victima el verdugo?

No para tal asiento

compre el cincel fastuosa can@ria,

tardo remordimiento.

Esa corona fria

no fuera gloria, no, sino iroda!

i A qu6 seran honores

las que en Gnice y d r m o l sbbre hueaas

fija el arte labores?

LAqu6 a vanas pav-

en triste soledad ricas emprtw?

i Oh timido y profundo

eapiritu, que siempre huIsta el ruido

y la pompa de1 mundo

l o p o que has querido ;

no eterna fama, aino eterno olvido !



BEQUIESCAT IN PACE. 47

A ti fueta desdoro

lo que es presk en nuestros circos flems:

lo que obtienen del wro,

triunfantea y altaneros,

10s mirs audaces y 10smirsartem

" Piedad " fue tu diviaa,

"Amor sin esperanza" fub tu emblema;

pasaate cual la brisa

que sobre el mar que trema

viene a la costa cuando el sol m L uema:

I Sabio quien bueca y halle

B la sombra del iubol, pax cumplida

en apartado valle,

cabe limpia y dormida

corriente, imagen de su nueva vida

No cultivek :s oh buenos

m&s ,ierra que la tierra. El barro humano

vale a vosotros menos

que el que nutre el gusano

y da una planta ti quien le arroja un grano



ESTANCIAS

&Oh 10s infortunado8 de 1s vida

eon fe l im a h El sufrimientoea la palpitaci6n del ala herida,

el ansia de la fuerza comprimida,

la mhs alta expresi6n del sentimiento

El fuego del dolor ea cual la llanur

del vaeo en que la mirra se conaunle :

purifica y eleva y embalmma;trueca el acibar hpero que inflama

en delicado y celestial perfume

El pesar es poeta y ea creyente:

las IBgrimas son gotas de m i o ;

la tristeza es el nimbo de la frente,



es el vuelo del Bngel esplendente

por encima de fbretro sombrio

La pena es el Calvario ~nilagroso:

la prueba y la virtud de la grandeza:

el buihe inseparable del coloso ,

el pielago rialobre y espurnoso

de donde surge la inmortal belleza I

Padecer es gozar de una ventura:

seguir la inabordable lontanltnza;

la fe perdida 6 la ilusi6n futura. .la dicha, que se ignora mientras dlira,

no es mirs que la memoria 6 la esperanzal

Ladesgracia

es la

madre macilentade 10s hombres sublimes de la historia;

el genio es una nube de tormenta:

destroza el corrrzbn en que revienta,

mas deja un rio p6stumo: la gloria!

~ P o ru6 insultas 10s fhnebres despojos

de tus extintas horas apacibles,

y con un ray0 ir6nico en 10s ojos

dices que 10s recuerdos son abrojos

y las aspimiones imposibles?

1Venera tu afliccibn, alma sencilla

i Consagra el ataud de tus amores



Loe muertoa radian cuando el cirio brilla,

cuando el duelo enlutado ee arrodilla

ante la hue- para echarlea fiorea!

I Bendice la inquietud de tu destilio

I Reverencia e r p m omo el sudario!Tu afan es el augusto peregrine

y a1 finde las fatigas del m i n o ,

resplandecen las puertas del aantuario

No te arredres, oruga, por la fosa

en que hoy como un cadirver te despeflas;

no te ateme maflana, mariposn,

porque toques la espina de la rosa,

porque te quemea en la luz que suefias



. \

DESEOS

Yo quisiera salvar eta distancia,

ene abismo fatal que nos divide,

y embriagarme de amor con la fragancia

mistica y pura que tu sBr despide.

Yo quisiera ser uno de loe lams

con que decoras tus radiantes sienes

Yo quisiera en el cielo de tus brazos

beber la gloria que en tus lhbios tienes 1

Yo quisiera ser agua y que en mis olas,

que en mis olas vinieras baflarte,

pars poder, como lo suefio a solas,

a1mismo tiempo por doquier beearte I

Yo quisiera ser lirio, y en tu lecho

81115en las eombras, con ardor cubrirte,

temblar con 10s temblorea de tu pecho

y morir del placer de comprimirte 1



Oh l yo @era mucho m b l Quisiera

Ilevarte en mlcomo la nube al f u e p ;

mas no mmo la nube en an camera

para eetellar y aepsrante luegol

Yo quisiera en mi mismo wnfnndirta.

mnfundirta en ml miamo y entm fk te ;

yo quisiera en perfume convertirta,

convertirte en perfume y sepirarte

Aapinute en un soplo como esencia,

y unir 4 mis latidos tus atidos,

y unir B mi existencia tu existencia,

y unir4 mi8 sentidm tue sentidoel

Asphub en un soplo del ambiente,

y ad verter sobre mi vida en dma ,

tods la llama de tu cuerpo ardiente

y todo el Bter del tleul de tu almal



OJOS VERDES

Ojm que nunca me v b

por r e d o 6 por decoro,

ojos de esmeralda y om,

fuervt es que me contempl6is:

quiero quema consolbis,

hermms ojos que adorn:estoy h.iste y os imploro

puesta en tierra la rodilla.

IPiedad para el que se humilla.

Ojm de esmeralcla y oro.

Ojos en que reverbera

la estrelh crepuscular,

ojos verdes como el mar,

como el mar por la ribera;



ojae. de umbre hechicera

qne gn- lo que es Ilorar, ,iglori5cadmi pesarl

I No me deaolbbad

1Tened compeei69 demi 1I Ojoe verdea como el mar!

Ojoa cuyo amor anhelo

porque alegran cuanto alcanza,ojos color de %peran?&

con lejanlaa de oielo.

Ojos que al travBe del velo

radianbienaventuranza,

mi alma 4 vosotros se la ma

en alas de la embriaguez.

miradme una sola rezojoe color de espmmza.

Ckm ya vuestro desvio,

ojos que me d ab congojas,

ojoe con aspecto de hojas

empapadas de rocio.

Hhmedo esplendor del rio

que por esquivo me enojas,

luz que la del sol sonrojaa

y cuyos toques son besos,

d e r r h t e en mi por esos

ojoe con aspecto de hojea



A

E V A

LB pen8 que te consume

revela una dicha; puce

una espma d l 0 ea

el indicio de un perfume1

Un ma1 fulgura y orea,

hay en tu p e ~ u vntern

algo que trasoiende B incienmo

Y r e e p l a n h Y gorjea1

El a h del Angel brilla

mbre la faz traatomadade la oracibn enlutada

y mustia que ee armdilla

La efusibn de loe dolor-

os el m i o que hiende



t i SALVADOR ~fA.2MIR6N.

la noche azul, y 4esciende

de laaluces8lasflomI

Lac 18grimae, eeos rastros,

vienen del cielo, y han s:Zo

ooeas purae que ee han ido

de lae almaa8 los astroa 1

Esna gotas son radiantespavesas y f ueron glorias,

hay p e r k que son escorias,

carbonea que son diamantea1

Vierta la escanha bendita

de tu izfort-cnio sagrado,

si el hielo refresca el prado,

la verdura remcita ICaiga la nube deshecha,

y lmotarh la mies rubla,

donde no hubo nun- lluvin

ja m b pudo haber cosecha !

Tu juventmd, que atesora

la glacial nlelanoolie,

y ofrece una frente frfa

ir loti besos de la aurora.

Ea cvmo el volcan que apiils

el alj6farque se cuaja



d EVA

J luego se funde y baja

B fecundar la campifla

Que tu m 6 n deeoonfie

del destello que alboroza IDim sabe si (pien solloza

ee mha feliz que el que fie

Hayristevls que lerantao

y jhbilos que desdoran,

hay re,gocijos que lloran

y sufrimientoe qua csntan



DATE, LILIA

1Clam en mi tu pupila centellante

en donde el toque de la luz impresa

brilla como una chiipa de diamante

engastada en una hhmeda turquesa!

~ B j aue ~ 0 d eibre tu cabello

como la linfa que desborda el caum,

para que caiga en torno de tu cudlo

oomo el follaje a1,rededor del sauce1

1Para que flote resplandor de aurora

mbre su rostro que el sonrojo empafls,

como esas tintas con que el sol colora

la nieve que circunda la montda

IPara que el soplo de mi aliento ~uele,

y tu i g~eoabio, cuya esencia adoro,



rls B tr avb, cual la arnapola suele

roja y v iv a en el trigal de oro 1Hablal I Mas s6l0 de placer l 1Exhala

el arrullo nupcial de la paloma !1Fuera el temor l I La rosa de Bengala

no tiene eapinas,mas tampoco aroma

I Tu acento de sirena me embelesa.. .tu palabra ea miel hiblea derramada,

tu boca, que cerrada es una resa,

ne abre wmo se park una granada1

Pen, guard- silencio y te estremecea,

bpor qu6 te afiige la mundasa insidis9

Consublate pensando que los jueces

que nos condenen, nos tendrim envidia.&Nome oyes? ~ C d la aido nueatm falta?

&Es ulpable la scd que apura el vaso?

~Comete n crimen el raudal que salta

cuando halla wi dique que le corta el pcrw,?

~ P o ru6 triste y glacial como la muda

estatua del dolor bajas la vista,

mientras tu mano anuda y deaanuda

laa puntasdel pafluelo de batistar

~ P o ru6 ma g o b en que expir6 un rep-he

cixro por t u rnejilla ruborosa



DATE, LILM

como un hilo de aljofar de la noclle

por un timido pbtalo de rosal

iPor qu6 tu pecho en que el candor anida

tiembla con ansia.. . cual batiendo el vuelo

palpita el ala de la garza herida,

que pugna en vano por dzarse al cielo?

Vamos, ya esth que cese tu quebranto. .i Alza tu bella cabecita rubia,

quiero r er t u sonrisa entro tu llanto

como un ray0 de sol entre la Iluvial

La palma vuelve su cogollo espeso

9 spirar ai re con gentil donaire,

y ebria de amor en el festin del beso

estallii en f res, perfumando el aire.

iIxnitil a1 hbol ' del desierto 1 Sircia

tu a f h de dicha, y que tu canto vibre:

~ V P ,aria, en plenitud de gracia,

;:oven, herniosa, idolatrada y librel



VERSOS DE U N CLERIGO

Religiosa peregrina

que rezando vas y vienes,

y que por traje tiones

aspecto de golondrina 1Mientras mi cuerpo se inclina,

mi pensamiento t~ abarca:

Dios para 81 d l o to marca,

y mi amor, en su heroismo.

se cierne sobre el abismo,

cual la paloma del arca l

Harto s8 que te importuna

mi sacrilego cariflo:tu candor como el armiflo,

no soporta mancha alguna.

Infeliz desde la cuna,

haces que el triste te adore.. .1Es fuerza que el d o lore



SALVADOR n f ~ ~1 R d h '

para que el iris fulgure

y el ambiente w c l e p ~ a

y la pradera se rnflore !

Blanca, limpia, incorruptible,

diamantina y sublimada,

como la niere inllollada

sobre el monte iilaccesiblt.,

vestiste el rtayal horrible

que doma laY tentaciones. ..j Del orco dc las pasionea

saliste inc6lume y fiel,

como el prof eta Daniel

del antro de 10s leones !

Nadie m k w ta que tu:

ni la virgen que te hospeda

y de cuya alba de seda

Lwma la orla de tisu.

El miedo de Belcebu

te inspira piedad tan rara,

que nunca vuelves la cara,

aunque J e s b es t u escudo,

a1 Cristo casi d m u d o

que veneras ante el ara

De noche sueles s o h ,

cautiva de un e s h ardiente,



3' despertar de repente

y acongojarte y llornr . . .Y si entonces, por azar,

r o m p una nube cargatla,

piensas, convulsa y turbada,

que el relimpago bermejo

es el sangriento reflejo

de una flamigera espada !

Todo en ti parece muelto,

menos la fe: ni un instante

muestras a1 sol el semblante

que lleras medio encubierto.

Jam& visit= el hucrto

en tus momentos perdidos.

Recelas de 10s sentidos

y el huerto ta causa s:lstos.

porque en el huerto hay arbustoe

y en 10s arbustos hay nitlos!

Sufro tormentas extrafias ;

y a ratos, fuera de mi,

dejo escapar ante tie l p i t o de mis entrafias.. .Y digo que son p a M a a

laa leyes que te condenan ;

y mis pakbras atruenan

celda, nave, coro, altar .. .



SALVADOR D ~ A ZM I R ~ N

iy no nlcanzo a quebrantar

10s TO^ que te encadenan!

El mar ondea en trope1

en so cbcel de granito:

conternplando el inlhito,

pugna por aubir a 81;

p ro - !desengaAo cruel!-

se siente a la postre faltode aliento para ir tan alto,

y a pesar de su ansia sunla,

cae, deshecho en espuma,

c a d vez que emprende un salto I

El alma tiene en verdad,

como el mundo que la asom bra.

un hemisferio en la sombrn

y el otro en la claridad.

En mi amarga soledad,

mi propia ciencia me dafh

dudas henchidas de safia

hostigan mi pensamiento.. ..Lrts nuhee que a ~ a s t r al ~ i e n t o

se agrupan en la n~ontafla.

La naturaleza vela

y clama dentro de mi,



y en este Getsemanila, p idad no me consuela. ..La carne se me rebela;

la razbn mina el sosten

de cuanto en Eras del bien

he venido consagrando.. .iEl Cedr6n bate bramando

el pi&de Jerusalirn!

Leo, y las letras se estiran.

se agitan y se desbandan,

y son hormigm que andan

y escarabajos que giran.. .Oro, y las preces me inspiran

una repugnancia atroz. . .Duermo, y ardiente y reloz,

mi fantasia se enciende.. ..1y Ruth desnuda se extiendo

en el lecho de Booz!

Hay en cada creacibn,

en cada forma que alienta,

un uturo que fermentn,

queriendo hacer explosi6n;

un trabajo de expansi6n

ordenado 6 inconexo

un afan simple 6 complexo

que con sus sordas porfias



SALVADOR D ~ Z I R ~ N

engendra Iaa simpatias

que elnpujan el sexo a1 sexo.

Esta avidcz, que resume

el deleite y el dolor,

y dh & la planta el color

que desparrama el perfume:

este impulso, que consume '

y glorifica en secreto ;

este Mesias inquieto

es en la noche en que eat&,

un eomimbnlo que va

firme y seguro B su objeto!

El feto siente llegar

la hora del parto, y se mueve,

y a su ciego esfuerzo debe,

mhs que a1 matrmo, el hrotar.

Arrojada 4 germinar,

la simiente del sauz

revienta bajo el capuz ,

en que el vegetal se fragua,

iy la raiz halla el agua

y el tall0 encuentra la luz!

La oruga, exenta de galas,

forja el Tabor de su anhelo,

y al cab0 levanta el vuelo

con dm p6talos por alas.



Afii. por val-ias rscalas.

y entre horizontes en fugn

qne un mismo arcano sul)yugn,

cumplen 10s fines di st in to ~

de sus diversos instintos

feto, simiente y oruga !

i Virtualidades de rid*

qne tenipestuosas y oscuras

llrnnis rle fiebres impurns

nli existencia infanticida!

iSangre de Isaac, vertida

en el fondo de mi s6r

iPropensiones a1 placer !1 f mpetus de un porvenir

que, condenado a morir,

anhela siempre nacer !

iOh potencias! Ias bisrnos

guardan vuestros liondos rastros.

Sois atranci6n ell 10s astros

y amor en 10s organisrnos.

Estallais en cataclismos,

remoreis el duro suelo,

fundis montafias de hielo.

sacnis del hoy el rnnhn a . . . .; os oprime nna sotann

g oa estrellais en un relo !



A S ONANC I A S

Si: e un reptil que pe~vigue

la sombra rauda y aerea

que un ave del paraiso

proyecta sobre la tierra,

desde el azul en que flotit-irk vivo de orlas negras !

Conozco un voraz gusano

que, perdido en una cibnega,

acecha una mariposa

que, flor matizada y suelta,

ostenta en un aire de oro

dos petalos que aletean

~Odio ue la oscura eacall~a

profesa & la plums esplendida!

gInmundo rencor de oruga 1IEterna y mezquina y e r r a

de todo lo que se arrastra

contra todo lo que ruela!



A M.. . .

~Deknerme?cejar? iVana congoj;i '1,a cohzri no manda a1 coraz6n.

I'rotlibe nl aqn36n que alce la hojn.

no a lo, lloja que ceda a1 aquil6n !

C:nando el torrente por 10s ca~nposlallir

cle pronto un dique que le dice: atriis,

p d r a mltar 6 desquiciar la valla,

p r o pararse 6 desandar ... j a m b

iPor que te adoro y a tus pies me a r ~ ~ s t r o ?

~ P o ruB se obstinan en rolvers. asi

la nguja a1 norte, el heliotrope a1 astro,

la lla~ ila 1 cielo y ilii esperanza ti ti?



El dm con su luauto

de vix-idos colores,

inspira cosns dulces:

la rim y la ilusibn.

Entonces 1:~miradase inclina hacia las flores. . .

iLas flores son 10s versos

que el p r i o canta al sol1*Y Y

La noche con su sornbra

que deja ardientes rarrtms,

inspira oo~as raves:Is angustiay la oraci6n.. ..

Entoncesla mirada

se eleva hacia 10s astros. .iLos astroa son 10s versos

que el cielo cmta a Dim



i* *

1Qu6 pliegue eu ara de oro

la tarde en el v8d0

1Qu6 pamn p r mi mente

lasondaa del Cedr(m1

1Que caiga de la nu6e

la gota de rocio

iQu6 d e n asestrellaaj Qu6 trine el ruiseflor!



FRAGMENTOS

Como un rey oriental, el sol espira

envuelto en una p6rpura que arde;

se hunde en la sierra tramformado en pira

en medio de la gloria de la tarde ILa luna surge de la aelva oscura

derrarnmdo un albor como de duelo.

y, blanca y libre, como el alms pura

dc un mundo muerto se remonta a1 cielo.

Ronco clamor quo por el aire corre,

atribulando a1justo y a1 precito,

el toque de oraci6n suena en la t o m ,

Indice que sefiala el infinito

El mar salmoclin sus perennes quejaa

batiendo sus r ibers rudorosw.. .



78 SALVADOR ~ f a z I I R ~ S

y el hombre piema en afeccionrs x-iejas,

en seree idos y en pasadas cosas !

Como el velo de un hgel , como espuma

lanzads haste, el a n i t por una ola,

una nube, una rafaga de bruma,

cruza el eapacio, nacarada y sola.

Y en eu veloz y caprichom viajea1 trarBs de la pompa respertina,..iknte une uga de nstros. .El ptrissje

se estremece en la pi~lida eblina.

La eaperanza y la fe se niagnifican,

la inme- cbscala de J x o b se extientle,

el lucero y In flor se cornunican,

el rapo hs.j.2y el perfurne asciende!

Resuenan en 10s halitos que &an

murmullos como de h i m a s que imp lor at^.

voces conlo de sombras que suspiran. . . .

ayes como de espIritus que lloran

T d o es quietud : el constelado pielago

el oampo triatay la d l ada estancia;



Satanha con sus alas de murcihlago,

ee cierne sobre el suefio de la infancia I

La virgen vierte en su apacible lecho

un aliento de miigicos olores,

cual si tuviera en lo interior del p h o

un r&illete de celestes flores.

Yharnbriento y fatigado y aterido,

el mendigo dormita sobre el atrio,

y se imagina gue se er~cuentraienchido

de un nefable sentimiento patrio!

Es la hora en que elparpado se cierra

y en que-fragancia que abaudona el broths-

la fantasia desligada yerra

sobre el turn do negro de la tierra,

en la capillaardiente do la noche 1



TOQUE

&Do a la enredadera, que no tiende

oomo un pnacho su verdor oscuro

mbre la tapia grIe? La yedra prende

BU triate harapo a1ulcerado muro.

&Do stB el c4aped gentil, que no tapiza

la tierra en torno del deaierto albergue?

Cual ralo vello que el fiver eriza,

d v a j e esparto en derredor se iergue.

&Do stit el Brbol simb6licoy rieueflo

que un tiempo fu6 para el lacerto jira,

para el ave palacio, para el s u d o

canci6n de arrullo y para el viento lira?

Tronoo desnudo, bajo el doble twte

de la lluvia y del Abrego,& eleva:

aguardaaim que de su oostra brote

a r r o l U y derecha la hoja nueva.



82 SALVADOR DLIUB~N

Y abierto en cruz como en sefial de duelo,

semeja en mcdio de la hierba lacia

un esqueleto que levanta a1 cielo

sus secoe brazos, implorando gracia

iOh infas grataa a1 sauz doliente

1C u b entas, cuan mermadas, c d n distintas,

cuiLn languidas os miro a1 sol poniente

Cuhl se ru-rastra en el fondo del barranco

vuestra corriente por las piedrm rota.

h j o el vapor que, como el hum0 blanco

del perfumer0 en el santuario'flotal

1Oh nfausta soledad, que e r a ejemplo

de mudanza y dolor iCon quC. sombrio,

con quit punzante jfibilo contemplo

iay ! que tu cambio corresponde a1 inio!



BOEDROMION

-&mist-No hallaron entre rojaa pirse

y iitravb

de las bhrbaraa saetasclams laureles vuestras juetas bas?

Coronadoe de adelfas, 10s poetas

cantan fausto loor, digno de liras

hechas & celebrar triunfos de atletas

La griega sangre que purpma el suelo

por la lucha convuleo y escarbado

ea propicia & la patria y grata a1 cielo.

iQ10rie eterna al que ardiente 3 arrojado

se adelanta en la lid con noble anhelo

y en la primers fils es inmolado



Para el que torna invicto y eatisfecho

d d u b hogar, la admhc i6n curios8

eale B la puerte y se encarsma a1 tach0

1Cejar, descolorida la mejilla,

turbia la vista y erizado el vello.

en la pugna viril ee gnrn mancillal

1Indeleble bald6n pone vil sello

al que, cualmanso buey, tiende y humills

a1 tirirnico yugo el d&il cuello !

El que al abrigo de m m d o mum

ee quede atrb cuando la hueste 5em

pauta en belico alarde al trance duro;

El que sensual 6 timido prefiem

a1 riesgo hesiico, el bienestar aegnro,

I viva de oprobio y de vergtienza muem l

No oe lamenteisl-La combatida nave

"echaal airado mar todo un eeoro"

pars d v a r s e en la tonnenta grave !1Corred al templo en jubiloso con,

y dejad wbre el d6rico kquitrabe

en h o r n a1 dioe laa 6gidee de oro



A LAS PUERTAS-Al f ulgor ensangrentado

de una hornaza nunca extinta,junto al yunque en que el ardiemte

hierro herido arroja chispas,

levantando p abatiendo

el martillo que fatiga,

sudorom y atezado

un vulcano eat& ittu vista

Esta a tm Mera de infierno.

roja t5 fuerza de encendida,

en que el ciclope trabaja

como en una pompa olimpica,

bien pudiera sofocarte

con su fuego y sus cenizaa. ..



iQu4 de ti no entre aqui m b

que la luz de tua pupilas

No penetres en el antro,

no busques idolatrias

en este taller-panoplia

de tantas sagradm iras

Yo am0 a belleza, es cierto,

mas no a la manera antigua;

vBetago de eata centuria

voy B donde ella me guia

Y no para honrar los templm

la moderna gracia artlstica,

sobre lw pechw de Helena

modela c o p divinas,

ni el nuevo genio ateniensemira con an& lascivaa,

en la cadera de Aspasia

el contorno de su lira.

Ni la eslktica en su arena

premia como r t n h solia

el mirs mel6dico beso

aplicado it la mejilla,

ni en los litigios famosocl

que dirige la justicia

la deanudez de Frhea

ea hoy d n eoisiva



Tu lugar no esth en mi fragua :

(4116e imports la ;bra mla?

Yo no labro joyas de esas

que B las mujerea cautivan.

I Forjo mmaduras, escudos,

cascoe, espadas y picas,

para todoe10s derechos

que combaten por la vida



C o w sin alma, que os moatrhisB

ellay la servis en muchedumbre tanta,

temblad La mbvil hora no adelanta

ein imprimiroe deatructora hue&

De la materia reaistente y bella

tomad lo que miia dura y m h encanta;

si soia piedra, sed d m 0 1 si sois p l a t ,

sed laurel ; si sob llama, sed estrella

Mae no esperein la eternidad. El lodo

se disuelve en la onda que lo crea;

&Dim la idea, por diverso modo,

IPueden &lo flotar en la mare8

del objeto y del ser; Dioa sobre todo,

y sobre todo lo de&, la idea!



DE U N LIBRO

Que como el perro que lame

la mano de su sefior,el miedo ablande el rigor

con el llanto que derranie ;

que la ignoranoia reclame

al cielo el bien que le falta. . ..I Yo, eon la frenta nluy aka,

cual retando el rayo 6 horirme,

soportal4 sin rendirmela tempestad que me aaalta 1

t *

No esperes en tu piedad,

que lo inflexible se tuerza:

1yo sere eaclavo p r uerza,

pero no por voluntad lMi indomable vanidad

no se aviene & un ruin papeL

1Humillarme 1 I N i ante a q d l

que enciende y apaga el dial

iSi yo fuera Bngel %ria

el aoberbio h g e l Luzbel



SALVADOR D ~ A Zm 6 a

if f *

El honll re de coraz611

nunca cede a la malicia.

iNo hay m b Dios que la justicia,

ni r n h ley que la d n !

i Resignarme B la pmi6n

(It 1 levita 6 del escriba!

iDoblar la cerviz altira

ante torpea mberarioa

iYo no acepto a 10s tiranoe,

ni aqui abajo, ni allir arribsl



Victor Hugo . . .sursum. . . . .A Gloria. . . . .A Berta . . . .Asollctncim. . . . .Ritrno. . . . .En un Nbunl. . . .. . . .opo de Nieve

Justicia . . . .Voca Interiorecr ' . .Los Parim. . . . .A lo8 Heroes sin Nombre .Glenios . . , . .Redemptio. . . . .El Desertor . . .



A Byron . . . . 1

. . . . . .eyuiesc:tt in

Pnrr 45. . . . . . . .sta~lcins 49

Detieos. . 53

Ojos Verdes . . . 5

. . . . . . . .Eva 57

Date. Lilia. . . . 1

e m 1 I . . . 5. . . . . . .sor~imcias 78..A N . . . . . . : . . 74

ltirr~an . . . . . . . . 6

E't.agi~w~~tos. . . . . 7

'rrque. . . . 1

Bordroniior~ . . 3. . .Ian Puertns . . 8 5

;\ las C o wsir] AIIIIH

. . 9

De o n Libro . . . 1

díaz mirón - poesías

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