Bol. Asoc. Méx. Gcol. Petr., Vol. X X I X , Númv 1 y 2, 1977

CRONOESTRATIGRAFIA Y PALEOBATIME-TRIA DE LAS CUENCAS SEBASTIAN-VIZ­CAINO Y PURISIMA-IRAY.

Sergio Cavazos Prado*

Horacio Guajardo Trev iño*

Petróleos Mexicanos, Superintendencia General de Exploración, DFNE. Trabajo presentado en el III Simposium de Geologia de subsuelo, Cd. Reynosa, Tarn. Original recibido el 11 de junio de 1976.

E S U M E N

La columna e stratigrafica identificada para las áreas estudiadas, comprende: Cretácico Inferior, Cretácico Superior, Paleoceno, Eoceno y Plioceno—Pleistoceno. En algunos pozos infrayaciendo a sedimentos marinos del Cretácico Inferior y en otros del Cretácico Superior, se presenta una potente secuencia de sedimentos sin microfauna, de los cuales se desconoce con exactitud su posición cronoestratigráfica.

En las 2 cuencas estudiadas, el Terciario es muy semejante, las varia­ciones son principalmente en el intervalo del Cretácico. En el área del Pozo Jordán—1, dentro del Cretácico Inferior, se presenta una caliza biògena que no fue identificada en el resto de los pozos incluidos en este estudio, posiblemente por falta de profundidad de dichos pozos.

Existen 3 hiatos principales que se localizan en los contactos: Cretá­cico Inferior—Cretácico Superior, Cretácico Superior—Paleoceno y Eoceno—Plioceno, Pleistoceno. Este último aparenta ser el más conside­rable.

Los paleoambientes identificados son de 4 tipos: continental (fluvial), litoral, marino de plataforma y marino de cuenca. En el Cretácico se presentan todos estos ambientes mencionados; en cambio, en el Terciario los ambientes básicos, son los de cuenca y plataforma.

Las rocas sedimentarias son principalmente terrtgenas. En el Cretá­cico se identificaron: arenisca, lutita, conglomerado, toba, roca ígnea y menor cantidad de caliza y en el Terciario, básicamente lutita y arenis­ca. Dichas rocas sedimentarias corresponden a las Formaciones:Alisitos (Cretácico Inferior), Valle (Cretácico Superior), Bateque (Paleoceno y Eoceno) y Almejas (en parte Plioceno) o alguno de sus equivalentes.

Las manifestaciones de hidrocarburos se produjeron en rocas sedi­mentarias del Cretácico Superior (Valle) y Paleoceno (Bateque).

I N T R O D U C C I Ó N

Con el objeto de llegar a conocer con mayor detalle la geología de las cuencas de Sebastián—Vizcaíno y Purísima—Iray, Baja Cal i fornia, se programó el presente estudio bioestratigráfico y paleobatimétrico que corresponde a rocas sedimentarias atravesadas por pozos perforados en dichas áreas.

Aunque ya se tenía noción de la edad y ambientes de depósito de las formaciones, este trabajo tuvo la finalidad de conocer con mayor detalle la palentología y buscar su aplicación económica en la búsqueda de hidrocarburos.

Gran parte de los resultados se consideran tentativos, en vista de que un alto porcentaje de las muestras corresponden a algunos de los pozos antiguos previamente analizadas y posiblemente fraccionadas varias ocasiones.

La información discutida corresponde solamente a parte de las provincias estudiadas, debiendo continuar el análisis de una mayor cantidad de pozos para obtener un mejor control de los conjuntos faunísticos que es básico para la identif icación correcta de los diferentes pisos y sus ambientes de depósito.

El trabajo se llevó a cabo sobre tanatocenosis, constituidas principal­mente por foraminíferos, moluscos y nanoplacton calcáreo, donde se obtuvieron las identificaciones cronoestratigráficas y paleobatimétricas que se ilustran en 2 secciones de correlación y 1 sección coiumnar.

Aunque hasta la fecha ninguno de los pozos ha resultado productor comercial de hidrocarburos, en este estudio se considera que algunos intervalos son atractivos como rocas almacenadoras.

LOCALIZACIÓN Y UBICACIÓN GEOLOGICA DE LAS CUENCAS ESTUDIADAS

La Cuenca de Sebastián—Vizcaíno, se encuentra localizada en los Estados de Baja California Norte y Baja California Sur y está delimitada por las provincias geológicas de: Sierra de Juárez, San Pedro Márt ir , Sierra de la Giganta, Purísima—Iray y Bahía Magdalena; la Cuenca de Purísima—Iray se localiza en el Estado de Baja California Sur y se encuentra delimitada por las provincias geológicas de: Sebastián—Viz­caíno, Sierra de la Giganta, La Paz, Sierra de la Victor ia y Bahía Magdalena.

Ambas provincias, forman una franja irregular sobre la costa occiden­tal de la parte inferior y media de la península. (Fig. 1 ).

Las cuencas estudiadas están constituidas por una columna de rocas sedimentarias de t ipo terr igeno, carbonatado, volcánico, metamòrf ico e ígneo, depositadas en ciclos transgresivos y regresivos acaecidos princi­palmente durante el Mesozoico y el Cenozoico. La actividad ígnea y el tectonismo se manifestaron prácticamente durante toda la formación de las cuencas.

A N T E C E D E N T E S

Sobre el área de Baja Cali fornia, se han llevado a cabo estudios de t ipo paleontológico, tanto en lo que se refiere a bioestratigrafía, como a interpretaciones ambientales, tomando en consideración micro y macrofósiles del Paleozoico, Mesozoico y Cenozoico. Aunado a lo anterior, han servido de orientación las numerosas publicaciones realiza­das sobre rocas sedimentarias del Estado de California, Estados Unidos, en donde se tienen identif icados los conjuntos faunísticos para el reconocimiento de los pisos y de los ciclos de depósito mencionados en la Bibl iografía.

MATERIAL Y METODO

Sobre las áreas en consideración, se escogieron pozos, tomando en cuenta hasta donde fue posible la orientación en el sentido del depósito, con el objeto de llegar a conocer las variaciones laterales de las rocas

K I L O M E T R O S

О 100 гоо

Fig No. I-PLANO DE LOCALIZACIONES DE L.^S AREAS ESTUDIADAS.

sedimentarias. Se analizaron un total de 8 pozos, 4 en cada una de las cuencas respectivamente, util izándose en la elaboración de 2 secciones de correlación y de una sección coiumnar. Los pozos correspondientes a Sebastián—Vizcaíno, son: Jordán—1, Lagunitas—1, San Francisquito—1 y San Ángel—1; los ubicados en Purísima—Iray, son: Purísima—1 l r a y - 1 y 2. (Fig. 1).

Las muestras de canal fueron analizadas en intervalos con un prome­dio de 15 m, suficiente para controlar los diferentes cambios ambienta­les.

En el comienzo del estudio, se consideró solamente la presencia de foraminí feros, pero en etapas posteriores se incorporó la información proporcionada por nanoplacton calcáreo y por moluscos.

La mayor parte de las rocas son de t ipo terr igeno, lo cual faci l i tó la obtención de ejemplares libres, después de procesar dichas rocas con los métodos convencionales; un pequeño porcentaje fue de caliza, de la cual se obtuvieron secciones pulidas y láminas delgadas. El nanoplanc-ton se obtuvo solamente de las muestras arcillosas, elaborándose láminas con rocas precipitadas y uti l izando el microscopio de polariza­ción, con objet ivo de lOOX para su observación. Los moluscos se presentaron, tanto en rocas deleznables, como carbonatadas.

De los conjuntos observados, se tomaron en consideración las especies de t ipo planctónico para determinaciones de edad y también en menor proporción algunos macroforaminíferos. La secuencia de pisos terciarios para las cuencas geológicas del Estado de California (Phillips, 1974) fue considerada en la identif icación de los conjuntos de fósiles y biozonas (Fig. 2) . Las asociaciones de bentónicos sirvieron para deter­minaciones paleobatimétricas, estudiándose y recopilándose varias zonificaciones ecológicas de.diversos autores.

Las especies identificadas se incorporaron a los registros eléctricos y se construyeron secciones de correlación-de los conjuntos faunísticos, con el objeto de llegar a conocer las asociaciones que correspondían a la cronofauna de cada uno de los niveles identificados y por otro lado, los conjuntos de fósiles de facies.

Después de lo anterior, se procedió a elaborar secciones de correla­ción cronoestratigráfica y paleobatimétrica, las cuales ilustran el

17 H A L 1 A N 0 PLEISTOCENO 16 W H E E L E R 1 ANO

P L I O C E N O 15 V E N T U R I A N O P L I O C E N O 14 R E P E T 1 A N 0

P L I O C E N O

13 DEL MONT 1 A N 0

M I O C E N O 12 M 0 N 1 A N 0

M I O C E N O I I L U I S I A N O M I O C E N O IO R E L I Z 1 A N O

M I O C E N O

9 S O C E S 1 A N O

M I O C E N O

8 S E M O R R I A N O OLIG OCENO 7 R E F U G I A N O

OLIG OCENO 7 R E F U G I A N O

E O C E NO 6 N A R I Z 1 A NO

E O C E NO 5 U L A T 1 S I A N O E O C E NO 4 P E N U S l A N O

E O C E NO

3 B U L I S I A N O PALEOCENO 2 Y N E Z I A N O PALEOCENO

1 DAN 1 A N 0 PALEOCENO

P h i l l i p s - 1974 Fig. No.2.-DIAGRAMA ILUSTRANDO LA SECUENCIA DE PISOS DEL TERCIARIO Y DEL PLEISTOCENO DE CALIFORNIA.

comportamiento vertical y lateral de los niveles estratigráficos y sus ambientes de depósito.

El patrón bat imétr ico, uti l izado como gui'a para la identif icación de los paleoambientes, es el siguiente:

Continental Subaéreo. Transición Limitados por la alta y baja marea. Nerít ico Interno 20 a 50 m Nerítico Medio 50 a lOOm Nerít ico Externo 100 a 200 m Batial 200 a 2000 m Marino Somero Escaso tirante de agua. Cuenca Tirante de agua considerable. Turbidita Sedimentos de origen somero des­

plazados a ambientes más pro­fundos.

ERA MESOZOICA

SISTEMA CRETACICO

Fue identif icado en las 2 provincias estudiadas y está consti tuido por el Cretácico Infer ior y el Cretácico Superior. Se presenta discordante con el Paleoceno y está formando la parte inferior de la columna atrave­sada por varios pozos y en algunos casos se encuentra descansando sobre una sección de roca ígnea de t ipo intrusivo.

Sus condiciones de depósito varían mucho, pues se identif icaron ambientes de cuenca, plataforma, marginales y fluviales y sus rocas, son: terrígenas, carbonatadas, volcánicas, metamórficas e ígneas intrusi­vas. (Fig. 3) .

Su contenido de fósiles está const i tuido por foraminí feros planctó­nicos y bentónicos, nanoplacton y moluscos principalmente, lo cual faci l i tó su identi f icación en algunos casos, no así en otros, pues algunos de sus intervalos son casi estériles de fósiles.

Algunas de las arenas del Cretácico, han presentado manifestación de hidrocarburos.

9

E D A CUENCA PLEISTOCENO

PLIOCENO

EOCENO INFERIOR

SUPERIOR

R¿\LEOCENO INFERIOR

SUPERIOR

CRETACICO INFERIOR

M A S A N T I G U O P Fig. No. 3.-DIAGRAMA ILUSTRAHDO lA SECUENCIA ESTRATIGRAFICA Y PALEOBATIMÉTRICA DE LAS CUENCAS ESTUDIADAS

SERIE CRETACICO INFERIOR

Es el intervalo más antiguo desde el punto de vista de contenido de microfósiles y fue' identif icado en los pozos Guerrero Negro—1 y Jordán—1. En el área de las 2 secciones de correlación de este estudio, posiblemente se encuentra representado por rocas sedimentarias sin microfauna en la parte baja de los pozos San Ángel—1 y Purísima—1. De no ser así, posiblemente se encuentra a una profundidad mayor que la atravesada por éstos (Figs. 4 y 5) . En el pozo Lagunitas—1, la parte más baja de la columna está consti tuida por roca ígnea intrusiva, cuya edad fue calculada en 127 millones de años, lo cual corresponde al Cretácico Inferior.

A grandes rasgos el Cretácico Inferior en el Pozo Jordán—1, está formado por 3 secciones litológicas, que son: una inferior constituida por roca ígnea de t ipo lávico, una intermedia formada por roca volcáni­ca y volcánica—sedimentaria y una superior de rocas terrígenas, como lutita y arenisca principalmente y por caliza. (Fig. 6).

La unidad superior fue depositada en ambientes marinos, posible­mente en condiciones de plataforma somera para el intervalo de la caliza biògena y en batimetrías más profundas para las rocas terrígenas que circundan a dicha caliza y que contienen microfauna y microf lora de t ipo pelágico, indicativos de condiciones marinas francas.

El Cretácico Inferior, se presenta discordante con el Cretácico Superior y una de las evidencias es el cambio en la naturaleza de las rocas sedimentarias, al pasar de un intervalo a o t ro .

El intervalo de caliza, pudiera considerarse como de cierto atractivo como aimacenadora de hidrocarburos, debido a la porosidad originada por las conchas de moluscos, aunque aparentemente, este intervalo ha sufrido efectos de diagénesis y de otros factores que han alterado sus propiedades originales.

El contenido de micro y macrofósiles que fueron observados, es el siguiente:

11

L A G U N I T A S - 1 S . F R A N C I S O U I T O - 1 S A N A N G E U - 1

•

P L I O C E N O P L E I S T

N E R Í T I C O E X T E R N O

B A T I A L

C R E T A C I C O S U P E R I O R

M A A S T . B A J O

F O R A M I N Í F E R O S

Hedbergella äff. Hoeglundina sp. H. infracretacea Hedbergella äff. Orbitolina sp. H. planispira Trocholina sp. Lenticullna sp.

N A N O P L A N C T O N

Watznaueria barnesae Parhabdolithus embergi Watznaueria cynthae Ceratolithus crenulatus Watznaueria bayacki Radiolithus planus Watznaueria diaphanae Cretharhabdus coronadventis Parhabdolithus elongatus Zygodiscus sp. Braarudosphaera sp.

POSIBLES CALCISFERULIDOS

MOLUSCOS

SERIE CRETACICO SUPERIOR

Intervalo identif icado en todas las áreas estudiadas que se encuentran encajonadas discordantemente por el Cretácico Inferior y el Paleoceno. Está const i tuido principalmente por rocas terrígenas que fueron deposi­tadas en condiciones marinas y no marinas. Está representado en gran parte por el intervalo del Maestrichtiano en lo que se refiere a su sección marina y los pisos comprendidos entre el Cenomaniano y el Campania-no, se presentan menos definidos, siendo en el Pozo Iray—2, en donde aparentemente el Cretácico Superior marino, se presenta más completo. En el Pozo Lagunitas—1, no fue posible llegar a conocer si este intervalo está presente. (Figs. 4, 5 y 6).

Los ambientes de depósito de t ipo marino, varían de batimetrías de cuenca y de plataforma, lo cual indica que para este lapso, la línea de costa oscilaba de posición lejana a cercana con respecto al área de las 2 secciones de correlación.

En el área de los pozos Jordán—1 y Guerrero Negro—1, el Cretácico

13

H A T It . l M l l S l l t U.Ì •

CElllHUJIIAMl L I N E A CRC^JOeSTRATCRAFKIÄ L I N E A DE F A C I E S ^ D I S C O R D A N C I A * * * * S I N M U E S T R A S " S A L O B R E ™ N E R Í T I C O I N T E R N O S Z 3 N E R Í T I C O M E D K 3 ~ N E R Í T I C O E X T E R N O -M A R I N O S O M E R O C U E N C A

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E S C A L A E N M E T R O S

Fig. No. 5.-SECCIÓN DE CORRELACIÓN CRONOESTRATIGRÁFICA Y PALEOBATI^dETRICÄ PURÍSIMA _ IRAY

Superior (tentativo) está representado principalmente por rocas terríge­nas de grano grueso como conglomerado y arenisca que debieron haberse depositado bajo condiciones marginales y fluviales. Es posible que rocas sedimentarias marinas se presenten sobre esta área, en interva­los sumamente delgados. Con lo anterior, se reconstruye que esta porción durante el Cretácico Superior estuvo ligada a condiciones de alta energía, de ahí que el contenido de microfauna observada es pobre en ejemplares de ambientes marinos e in situ.

Existe la posibil idad de que sobre esta misma área, rocas sedimenta­rias marinas del Cretácico Superior se encuentren erosionadas y que el conglomerado identi f icado pudiera ser más joven o más antiguo.

En el Pozo Iray—2, el Cretácico (que contiene rocas sedimentarias marinas profundas), se encuentra más alto estructural mente que en el Pozo Iray—1 (de ambientes ligeramente menos profundos). Lo anterior, fue originado por causas de t ipo tectónico que sucedieron a finales del Cretácico y principios del Paleoceno, lo cual originó que gran parte de dichos intervalos y sobre todo del Terciario, se encuentren erosionados. (Fig. 5) .

En el Cretácico Superior, se han tenido manifestaciones de hidrocar­buros en algunas de las areniscas intercaladas con secciones arcillosas.

Los conjuntos fauníst icos de este intervalo, requieren un mayor estudio y se necesita la información proporcionada por otros pozos para interpretar correctamente el intervalo del Cretácico.

A continuación se mencionan algunos fósiles identificados:

Globotruncana arca Hedbergella sp. Globotruncana linneiana Siphogenerinoides clarki Praeglobotruncana deirioensis Gavelinella sp. Globotruncana sp.

MOLUSCOS

TERCIARIO

Este intervalo se presenta en todas las áreas estudiadas y es más

15

P O Z O J O R D A N L I T O L O G I A F Ó S I L E S B A T I M E T R Í A

C . S M S . C U . F O R M A C I Ó N E D A D

C? 4 es* & & A A & &

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o o o o a o o o o O O o o o

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X X X X X X X

X X X X X X

X X X X X X X

X X X X X X

A L M E J A S

B A T E Q U E

V A L L E ?

A L I S I T O S

P L I O . - P L E I S . EOCENO MEDIO

E O C E N O I N F E R I O R

P A L E O C . SUP.

P A L E O C . M E D I O

C R E T A C I C O S U P E R I O R

CRETACICO I N F E R I O R

Fig. No. 6.-SECCIÓN COLUMNAR DEL POZO JORDAN No. 1

16

uniforme estratigráfica y paleoecológicamente. Está const i tuido casi en su total idad por el Paleoceno y el Eoceno, los cuales se encuentran discordantes, tanto con el Cretácico, como con el Plioceno—Pleisto­ceno. Este ú l t imo intervalo es sumamente restringido en su espesor. (Figs. 4, 5 y 6).

Sus rocas son principalmente lutitas y areniscas que se depositaron en una alternancia de ambientes de cuenca y de plataforma y que corres­ponden a la Formación Bateque.

En el Pozo Iray—2, el Terciario no se encuentra bien def in ido, presentando un espesor sumamente delgado. Lo anterior, se debe al levantamiento del área que produjo erosión o no depósito de la mayor parte de este intervalo.

Algunas de las arenas del Paleoceno han sido consistentes en tener manifestaciones de gas. Las arenas del Terciario, pueden corresponder, tanto a ambientes de línea de costa, como a depósitos de turbiditas, lo cual aumenta la importancia de este intervalo como posible almacena-dor de hidrocarburos.

ERA CENOZOICA

SISTEMA TERCIARIO

P a l e o c e n o

El Paleoceno está const i tuido principalmente por el Paleoceno Medio y el Paleoceno Superior, estando menos def inido el intervalo del Paleo­ceno Inferior, que aunque puede estar presente en algunos pozos, se considera incompleto.

Después del intervalo erosivo o de no depósito de finales del Cretá­cico e inicios del Paleoceno, los mares paleocénicos cubrieron el área avanzando y depositando sedimentos primeramente en batimetrías moderadas y posteriomente en condiciones marinas más profundas (especialmente durante el Paleoceno Tard ío ) . (Figs. 4 y 5) .

En el área de los pozos San Ángel—1 e Iray—1, es donde se registra­r o n las bat imetrías más profundas, observándose los ambientes más

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someros en el área de los pozos Purísima—1, San Francisquito—1 y Lagunitas—1, sobre todo en este úl t imo pozo, en donde las condiciones fueron favorables para el depósito de potentes desarrollos arenosos, lo cual pudo ser originado por el efecto de levantamiento de la intrusión ya mencionada. En estas áreas de batimetrías más someras, se origina­ron acuñamientos y erosión, por lo cual el Paleoceno en dichos pozos es discordante con el Eoceno. (Figs. 4 y 5) .

Las tanatocenosis observadas para este piso, están constituidas por el siguiente conjunto:

FORAMINÍFEROS

Globorotalia velascoensis Globorotalia pseudomenardii Globorotalia angulata Globorotalia occlusa Globorotalia perclara Globorotalia uncinata

Globorotalia compressa Globorotalia acuta Globorotalia abundocamerata Globorotalia elongata Globorotalia spiralis Bentónicos

MACROFORAMINÍFEROS

NANOPLACTON

MOLUSCOS

E o c e n o

Descansando sobre el Paleoceno, se encuentra el intervalo del Eoceno, el cual está constituido por el Eoceno Inferior y el Eoceno Medio. El Eoceno Inferior es el intervalo más potente para el área de Sebastián—Vizcaíno, no así en Purísima—Iray, donde se encuentra afectado en sus espesores originales. (Figs. 4 y 5) .

Durante el inicio del Eoceno, continuaron en forma menos acentuada las condiciones transgresivas, pero a medida que transcurría esta edad, se fueron originando condiciones ambientales más someras. De esta manera, los sedimentos que constituyen a este piso y que son básica­mente lutitas y areniscas, se depositaron en ambientes de cuenca y plataforma.

18

Hacia las áreas de los pozos Lagunitas—1 y Purísima—1, el Eoceno al igual que el Paleoceno se adelgaza, presentándose batimetrías más someras y discordancias.

Hacia fines del Eoceno Medio o posteriormente, se presentaron condiciones que favorecieron la erosión o el no depósito de los sedimen­tos del Eoceno Superior, Oligoceno y muy probablemente también del Mioceno y parte del Plioceno. Esto originó que la columna terciaria se encuentre interrumpida.

Los conjuntos de fósiles observados, están constituidos en gran parte por:

FORAMINÍFEROS

Truncorotaloides rohri Globorotalia crassata Globorotalia bolivariana Globorotalia cerroazulensis pomeroli Porticulasphaera mexicana Globorotalia convexa Globorotalia caucásica Globorotalia quetra Globorotalia pseudotopilensis Globorotaloides suteri Globigerina soldadoensis Globorotalia salisburgensis

Globorotalia mattseensis Globorotalia spinulosa Globorotalia cerroazulensis Globigerina primitiva Pseudohastigerina wilcoxensis Globigerina turgida Globigerina linaperta Globigerina gravelli Globigerina senni Globigerina aquiensis Bentónicos

MACROFORAMINÍFEROS

NANOPLANCTON

MOLUSCOS

Pl iocene—Ple is toceno

Sobreyace el Eoceno Medio presentando espesores restringidos y está consti tuido por rocas sedimentarias en gran parte biógenas que fueron depositadas bajo condiciones cercanas a la costa (laguna costera? ), al menos en gran parte de su sección. (Figs. 4 y 5).

1 9

Este intervalo está cubierto por rocas sedimentarias que pudieran corresponder al Reciente y que son estériles de fósiles marinos. Los conjuntos de fósiles observados están constituidos por:

FORAMINÍFEROS

Elphidium Haplophragmoides Rotalia Miliólidos

MOLUSCOS

EQUINODERMOS

C O N C L U S I O N E S

La columna estratigráfica identificada está constituida por: Cretácico Inferior, Cretácico Superior, Paleoceno, Eoceno y Plioceno—Pleisto­ceno. En algunos pozos existen intervalos de rocas sedimentarias estéri­les de fósiles, cuya posición cronoestratigráfica exacta se desconoce. Esta columna identificada está formada por rocas que fueron deposita­das bajo 4 principales ambientes: continental, l i toral, marino de plata­forma y marino de cuenca.

Prácticamente toda la columna se encuentra afectada por interrup­ciones, estando localizadas las principales discordancias en los contac­tos: Cretácico Inferior—Cretácico Superior, Cretácico Superior—Paleo­ceno y Eoceno Medio—Plioceno—Pleistoceno. Es posible que estos factores se encuentren relacionados con niveles que pueden ser econó­micamente atractivos.

En las dos cuencas, el intervalo del Cretácico es el más potente. El Cretácico Inferior, se identif icó principalmente en el área de los pozo."; Guerrero Negro—1 y Jordán—1, estando posiblemente a profundidad más considerable en los pozos de Purísima—Iray. El Cretácico Superior en los pozos Iray—1 y 2, así como en el Pozo Purísima—1, presenta potentes intervalos de rocas sedimentarias marinas; en Sebastián Vizcaíno, aparentemente este intervalo es más complejo en su batime­t r ía y rocas sedimentarias no marinas o litorales se presentan bien desarrolladas.

20

El Terciario es más uni forme estratigráfica y paleobatimétricamente en las 2 cuencas estudiadas y está consti tuido casi en su total idad por el Paleoceno y el Eoceno, habiéndose depositado sus sedimentos básica­mente en ambientes de cuenca y de plataforma.

Las manifestaciones de gas, hasta la fecha, se han originado en rocas sedimentarias del Paleoceno y del Cretácico Superior. Estos intervalos, así como el del Cretácico Inferior, pueden resultar buenos prospectos desde el punto de vista económico—petrolero. Algunas de las rocas, especialmente del Terciario pueden corresponder a depósitos de turb id i ­tas, lo cual aumenta su importancia como almacenadores de hidrocar­buros.

La información aquí discutida se considera solamente como parte de las características bioestratigráficas y paleobatimétricas de las cuencas de Sebastián Vizcaíno y Purísima—Iray. Los resultados obtenidos de futuros pozos y de otras fuentes, complementarán este estudio.

B I B L I O G R A F I A

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